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Mercado Laboral
Mercado Laboral
El mercado laboral es el entorno en el que se interrelacionan las ofertas de trabajo y las demandas
de empleo. Por tanto, constituye el ámbito en el que se define y desarrolla todo lo relacionado con
las ocupaciones: empresas, personas que buscan empleo, contratos instituciones, etc.”
El mercado laboral se define como aquel mercado específico que se compone de dos variables
fundamentales: la oferta del mercado laboral y la demanda del mercado laboral.
El mercado de trabajo es aquel en donde los individuos intercambian servicios de trabajo, los que
compran servicios de trabajo son las empresas o empleadores de la economía. Estos configuran la
demanda de trabajo. Los que venden servicios de trabajo son los trabajadores y ellos conforman la
oferta de trabajo. La interacción de demanda y oferta de trabajo determina los salarios que se pagan
en la economía.
La dinámica del mercado de trabajo se relaciona mucho con los precios. Las mayores presiones de
demanda existentes en el mercado de trabajo, provocan la subida de los salarios y esto eleva los
costos de producción, obligando a las empresas a su vez a subir los precios o ajustar de algún modo
sus costos.
Asimismo, se tratará de dar un alcance específico de lo que representa la oferta y demanda del
mercado laboral; Es decir, se apreciara los problemas que se presentan en estas variables en relación
el desempleo.
Por otro lado, se hará referencia a la situación actual y las opciones para los próximos años del
mercado de trabajo y su implicancia en nuestra economía.
Finalmente, se estará en condiciones de extraer algunas conclusiones del presente tema elaborado.
MERCADO DE TRABAJO
El mercado de trabajo es aquel en donde los individuos intercambian servicios de trabajo, los que
compran servicios de trabajo son las empresas o empleadores de la economía. Estos configuran la
demanda de trabajo. Los que venden servicios de trabajo son los trabajadores y ellos conforman la
oferta de trabajo. La interacción de demanda y oferta de trabajo determina los salarios que se pagan
en la economía.
GENERALIDADES
Una conformación colectiva, en la que uno o más sindicatos negocia con una empresa, un grupo de
empresas, o una organización de empleadores, las condiciones de contratación laboral,
estableciendo los acuerdos en un convenio colectivo de trabajo.
Para que exista mercado de trabajo es requisito indispensable que el trabajador sea libre, de lo
contrario lo que se presenta es en realidad una relación de esclavitud cuyo intercambio se produce
en un mercado de personas. A tal efecto, la libertad sindical ha sido considerada un componente
indispensable de la libertad de trabajo.
Se llama mercado laboral o mercado de trabajo al total de las relaciones en una sociedad
determinada entre quienes buscan empleo remunerado (solicitantes) y quienes ofrecen empleo o
demandan empleados (empleadores). En otros términos, se llama así al total de la oferta y la
demanda de empleo en un país, una ciudad o una región específica.
El mercado laboral posee particularidades respecto al de los bienes de consumo o los servicios,
sobre todo porque contempla un área clave de la economía y de la sociedad. Está fuertemente
regulado por las leyes laborales, emitidas por el Estado para garantizar a los trabajadores el respeto
de sus derechos y beneficios, llamados lógicamente derechos laborales.
Oferta y demanda
Depende del total de las empresas, instituciones y empleadores que tengan puestos de trabajo
disponibles.
Cuando la relación entre estos dos elementos favorece ampliamente la demanda, existen más
solicitantes que empleos y por lo tanto se produce desempleo. Además, suelen empobrecerse las
condiciones de empleo.
En cambio, cuando hay más empleos que solicitantes, encarecen las condiciones de empleo, pues
los empleadores deben competir entre sí por el empleado. También suele haber inmigraciones para
llenar el agujero en la demanda.
¿Cómo funciona?
El mercado laboral se rige, como hemos dicho, por los lineamientos del derecho laboral, es decir, de
las leyes del trabajo de cada país. Esto significa que, a la hora de establecer contratos de trabajo,
debe tenerse en cuenta una serie de acuerdos jurídicos, de beneficios y derechos individuales y
colectivos, e incluso de prohibiciones.
Elementos como las vacaciones pagas, la seguridad social, la responsabilidad social y la cotización
para el fondo jubilatorio son apenas algunas de las medidas que interceden a favor del trabajador.
De esta forma se le garantiza una existencia digna.
Por otro lado, también incide en la estabilidad de la paz social. Una sociedad desempleada es
proclive al malestar, a las protestas, a la pérdida del poder adquisitivo. A la larga, esto tiene
repercusiones políticas, económicas y de todo tipo.
Indicadores
A la hora de estudiar y comprender el mercado laboral y sus dinámicas, se presta atención a los
siguientes indicadores:
Condicionantes
Automatización y tecnificación del trabajo. A medida que las máquinas son perfeccionadas y son
capaces de más y más trabajo automatizado casi sin participación humana, muchos antiguos
empleos desaparecen y se requieren trabajadores con mayores niveles de conocimiento o
preparación técnica. En cambio, en sectores productivos aún muy subdesarrollados, la mano de
obra no calificada sigue siendo necesaria.
Políticas laborales. A menudo los Estados varían las reglas de juego con que los empresarios pueden
contratar a sus trabajadores, para darles a estos últimos más derechos y beneficios (idealmente), lo
cual cambia el costo por empleado para las empresas. A veces esto puede desencadenar medidas
radicales de protección al capital empresarial, como olas de despidos masivos, o por el contrario
puede avivar la llama de la contratación.
El consumo. La gente desempleada tiende a consumir mucho menos y por ende a contribuir
mucho menos con la rueda económica. Si la población desempleada es masiva, su
disminución en el consumo puede impactar en las ganancias empresariales y gestar
recesiones económicas. Los empleados, en cambio, consumen y se endeudan para obtener
bienes y servicios.
El ahorro. Los desempleados tienden a vivir de sus ahorros hasta conseguir otro empleo, de
modo que retiran su dinero de los bancos, afectando la solvencia de éstos también. En
cambio, los empleados suelen ahorrar o endeudarse, lo cual inyecta energía al aparato
financiero del país.
La producción. Unos niveles de producción óptimos requieren de una cantidad de empleos
operando con armonía. La falta de trabajadores incide directamente en la capacidad de
producción de las empresas.
El gasto público. Esto tiene que ver, más que nada, con los trabajadores en el Estado
(Ministerios, secretarías, etc.) o con los que reciben el paro forzoso, es decir, la ayuda del
gobierno a los desempleados (de haberla).
El salario mínimo. Cuando hay muy pocos trabajadores para la cantidad de empleos, el
salario mínimo tiende a aumentar. Cuando es al revés, en cambio, se mantiene estable (en
general, el Estado no permite que disminuya).
Derecho laboral
Se llama derecho laboral o derecho del trabajo a la rama de la jurisprudencia que se ocupa de las
normas que rigen el trabajo y las relaciones entre patronos y trabajadores. Entre ellas están los
acuerdos gremiales, salariales, contractuales y otros que deben darse siempre conforme a las leyes
laborales del país.
El Estado pone las reglas de juego con las que trabajadores y empleadores deben entenderse.
Cualquier violación a dichas normas se resuelve a través de mediación judicial o litigio.
La fuerza de trabajo
Por fuerza de trabajo se entiende al conjunto de capacidades físicas y mentales de trabajo de las
que disponen las personas de un país. El conjunto total de sus trabajadores en potencia, empleados
o no, son la fuerza de trabajo de una nación, que puede estar bien o mal aprovechada por sus
empleadores.
Para analizar el estado y características del mercado de trabajo se utilizan una serie de indicadores.
Los más importantes son:
Debido a la gran desigualdad que suele existir entre el trabajador individual y el empleador, se
considera que no puede hablarse de relación laboral libre aquella que no se encuentra regulada por
una negociación colectiva entre el empleador o los empleadores de un mercado, y un conjunto de
trabajadores asociados en un sindicato. Esa posibilidad se denomina libertad sindical, libertad que
integra el conjunto de derechos humanos básicos.
Las normas del convenio colectivo de trabajo se aplican en las relaciones laborales en tanto y en
cuanto resulten más beneficiosas para el trabajador (principio pro operario).
Antecedentes generales
La dinámica del mercado de trabajo se relaciona mucho con los precios, por ejemplo, supongamos
que las empresas responden a un aumento de la demanda de bienes, elevando la producción, para
esto es necesario aumentar el empleo, este aumento provoca una reducción en el desempleo. Las
mayores presiones de demanda existentes en el mercado de trabajo, provocan la subida de los
salarios y esto eleva los costos de producción, obligando a las empresas a su vez a subir los precios
o ajustar de algún modo sus costos.
Un cambio lento del nivel agregado de empleo puede reflejar un mercado de trabajo con muchos
desempleados (trabajadores que dejan o pierden el trabajo), de modo que las contrataciones no
vayan a la par del nivel de desempleo existente. Puede también reflejar un mercado de trabajo
estancado en el que hay poco desempleo y muy pocas contrataciones.
El mercado de trabajo puede tener dualidades, es decir puede estar formado por un mercado de
trabajo primario en el que los puestos son buenos, los salarios altos y la rotación es baja y un
mercado de trabajo secundario, en el que los puestos son malos, los salarios son bajos y la rotación
es alta.
Esto implica que los niveles salariales deben ser altos para garantizar el funcionamiento del mercado
primario, en este caso hablamos de un enfoque conocido como salarios de eficiencia, debido a que
la buena paga garantiza la calificación, eficiencia y motivación constante de los trabajadores,
condición necesaria para la competencia en mercados exigentes. En el segundo caso, se puede
tratar de mercados locales poco competitivos, de altos niveles de desmotivación y de sectores
económicos deprimidos y poco innovadores, también puede tratarse de una sobreoferta laboral.
Las consecuencias del desempleo son graves: inciden en el balance económico de la sociedad y la
cargan con necesidades, al tiempo que disminuyen su producción.
Una sociedad con altos índices de desempleo es una sociedad de gente ociosa, necesitada de
producir, que por esas mismas razones es más susceptible al empleo “en negro” o informal. En casos
desesperados, también pueden recurrir a actividades delictivas.
El desempleo además exige acciones del Estado, con planes de fomento del trabajo o medidas de
paro que, aunque necesarias, aumentan el gasto público. Eso por no hablar del malestar social que
todo este fenómeno ocasiona.
Mercado de trabajo
El mercado de trabajo tiene gran importancia para la sociedad. Su mal funcionamiento puede
afectar negativamente al crecimiento económico y al empleo de un país. Además, el paro tiene
importantes costes económicos y sociales:
El salario es el precio del factor trabajo. Cuantos más bajos sean los salarios reales más trabajo
demandarán las empresas. Cuanto más elevados sean los sueldos, más gente querrá trabajar.
La demanda de empleo está directamente vinculada a la actividad económica, de modo que sólo un
crecimiento sostenido de la renta puede garantizar el crecimiento del empleo en cantidad suficiente
para absorber la población dispuesta a trabajar. En otras palabras, la demanda de trabajo es
derivada de la demanda de bienes y servicios, porque cuando una empresa vende quiere producir
más, para ello querrá contratar trabajadores. Por tanto, si no hay producción no habrá más
trabajadores que puedan ofertar su empleo.
Por lo que es necesario explicar a más detalle la oferta y la demanda de trabajo, y por supuesto el
equilibrio entre ambos conceptos, los cuales son muy importantes como características dentro del
mercado de trabajo.
Oferta de trabajo
A este se le conoce como población activa, en donde está integrada por la gran cantidad de personas
que se encuentran capacitadas para trabajar en diversos trabajos y están en busca de empleo.
En donde estas personas cuentan con una edad legal para trabajar, además tengan la disposición y
la independencia para poder cumplir los horarios de trabajo establecidos.
Además la oferta de trabajo se encuentra condicionada por algunos factores demográficos, como la
natalidad y los movimientos migratorios, además de los factores institucionales, como la edad legal
y la legislación laboral.
La población activa se divide en dos grandes grupos, logrando ser parados u ocupados, y estos
podemos definirlos de la siguiente manera.
Ocupados: aquellos que están trabajando y reciben una remuneración por ello.
Parados: personas capacitadas para trabajar pero que no cuentan con un trabajo estable
para hacerlo, por lo que se encuentran en busca de un trabajo.
Demanda de trabajo
Se logra entender como la demanda de trabajo a toda la cantidad de trabajadores que se encuentran
disponibles para que las empresas logren contratarlos de acuerdos a cada tabla y nivel salarial.
En donde la demanda se encuentra derivada del mercado de los bines y los servicios, en donde toda
su producción logra intervenir en la fuerza del trabajo.
En donde la demanda del trabajo presenta unas curvas, las cuales representan cada uno de los
niveles salariales, además del número de perronas que se encuentran disponibles para su pronta
contratación por las empresas.
En la demanda del trabajo se encuentra muy unido el salario de los trabajadores, ya que mientras
el salario aumenta la cantidad de demanda de trabajadores es mayor y supone un mayor
crecimiento de producción.
Equilibrio
Pero existen diversas tasas salariales, en donde todos deben regirse por uh salario mínimo, pero el
mercado de trabajo logra discriminar por sexo, edad y raza a cada trabajador.
Por lo que existen diversos salarios, los cuales también se ajustan al tipo de trabajo que realizan los
trabajadores, ya que cada uno de ellos desempeña trabajo diferente y por ende el salario no es el
mismo.
Además de que el trabajo nocturno y las horas extras indican un aumento del salario mínimo, en
donde es una especie de pago extra por cada hora extra trabajada dentro de la empresa.
Siendo esta la razón de que no todos los trabajadores tienen el mismo salario, pero si cada empresa
debe regirse por un salario mínimo el cual es establecido por el gobierno de cada país.
El desempleo
El desempleo también forma parte del mercado de trabajo, ya que hay personas que a pesar de
estar capacitadas para un trabajo no logran obtener un empleo, y por ende es una sociedad activa
pero parada.
En donde existen cuatro clases diferentes de desempleo, logrando explicar de manera sencilla cada
uno de ellos de la siguiente manera.
Desempleo estructural
Se debe a una inadecuada estructura económica, en donde los parados de este renglón se
encuentran capacitados para el trabajo pero no laboran por razones ajenas a la situación económica.
En donde este tipo de paro es uno de los más perniciosos, ya que su solución es muy difícil de
controlar.
Desempleo friccional
En este grupo se logran encontrar los desempleados que no comprenden la demanda del trabajo de
las empresas, es decir la información que existe en el mercado de trabajo no es perfecta.
Por lo que genera que los desempleados se encuentren en una constante búsqueda de empleo, pero
no logran encontrar uno que alcance un acuerdo.
Desempleo estacional
Desempleo cíclico
Para que se dé un desempleo cíclico o coyuntural debe de existir una demanda derivada de la
demanda actual, es decir que las empresas no contratan ningún tipo de empleado, a pesar de existir
una demanda laboral.
Características
Las principales características de un mercado laboral son normalmente el sueldo o salario que
ofrecen los contratantes y la productividad o capacidades que tiene los empleados, siendo fuerzas
que interactúan para encontrar un equilibrio. Sin embargo a nivel empírico las variables pueden
tener resultados distintos, por ejemplo por falta de información, dado que pocas veces se evidencia
la productividad laboral real de las personas antes de un contrato y no siempre se recompensa con
mayores salarios a capacidades laborales sobresalientes.
La información laboral también tiene que ver con las capacidades de los trabajadores, dado que
tenemos diferentes destrezas y no somos buenos en todo, es así que se puede hablar de una sobre
oferta de trabajadores, pero con distintas destrezas y capacidades, y una sobredemanda de
trabajadores que requieren solo ciertas capacidades para un trabajo específico más productivo y
competitivo.
Por lo tanto mientras existan asimetrías o problemas de información, entre quien ofrece un trabajo
específico y quien demanda un trabajo también específico, es probable que se presenten
desequilibrios en el mercado laboral, sin tomar en cuenta que otro problema fundamental son los
sueldos que se tienen en el mercado regional.
Este último elemento identificado, los sueltos y salarios, además de la estabilidad laboral apreciada
por cualquier persona que busca un trabajo, es otro elemento del contexto económico que provoca
que aquellas capacidades laborales demandadas por un contratante (por ejemplo las empresas
constructoras), deban ser compensadas eficientemente, para encontrar un equilibrio que beneficie
a ambas partes, evitando que los obreros se vayan a otros lugares, y creando a la vez confianza en
el mercado laboral regional, con mayor información y formación laboral por competencias.
TIPOS DE DESEMPLEO
Siguiendo la clasificación tradicional del Comité Económico Conjunto del Congreso norteamericano,
se distinguen las siguientes clases de desempleo:
1. Desempleo estructural
Es el que subsiste en el tiempo, en ciertas regiones y ramas de actividad, como consecuencia de una
inadecuada estructura económica. Constituye el tipo de paro más pernicioso por su difícil solución.
Las características que presentan los desempleados no coinciden con las necesidades de la
demanda, lo que hace difícil que los parados de este tipo logren incorporarse en el mercado de
trabajo.
Este paro está estrechamente relacionado con los cambios tecnológicos que generan obsolescencia
en la formación de ciertos grupos de trabajadores y la consecuente incapacidad de los mismos para
desempeñar puestos de trabajo para los que se necesita una formación específica.
2. Desempleo friccional
La rotación en el empleo hace que siempre haya un colectivo de trabajadores que se encuentren en
proceso de búsqueda de empleo. La información existente en el mercado de trabajo no es perfecta
y, por ello, se tarda un tiempo para que la oferta y la demanda de trabajo se encuentren y alcancen
un acuerdo. Durante ese tiempo el trabajador está en situación de paro, que en concreto es el
denominado paro friccional.
Cuanto mayor sea el grado de rotación en el empleo y peores los mecanismos de información
existentes, más alta será la tasa de paro friccional.
3. Desempleo estacional
4. Desempleo cíclico
Es el desempleo que se produce en las fases recesivas del ciclo económico. También denominado
paro coyuntural, tiene su origen en el descenso de la demanda agregada que se produce en esos
momentos del ciclo. Al ser la demanda de trabajo una demanda derivada de la existente en el
mercado de bienes y servicios, la demanda de trabajo disminuye y ello genera paro cíclico.