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Los trastornos mentales son enfermedades prevalentes en la población, aunque en la mayoría de los casos se observan cuadros leves o moderados; en cambio, los cuadros graves representan una proporción pequeña de casos, generalmente comórbidos con otras enfermedades
Los trastornos mentales son enfermedades prevalentes en la población, aunque en la mayoría de los casos se observan cuadros leves o moderados; en cambio, los cuadros graves representan una proporción pequeña de casos, generalmente comórbidos con otras enfermedades
Los trastornos mentales son enfermedades prevalentes en la población, aunque en la mayoría de los casos se observan cuadros leves o moderados; en cambio, los cuadros graves representan una proporción pequeña de casos, generalmente comórbidos con otras enfermedades
en los Trastornos Mentales Resumen objetivo elaborado por el Comité de Redacción Científica de SIIC en base al artículo Prevalence, Severity, and Comorbidity of 12-Month DSM-IV Disorders in the National Comorbidity Survey Replication de los autores Kessler RC, Chiu WT, Walters EE y colaboradores integrantes de la Harvard Medical School, Boston, EE.UU. El artículo original, compuesto por 11 páginas, fue editado por Archives of General Psychiatry 62(6):617-627, Jun 2005
Los trastornos mentales son enfermedades prevalentes en la población,
aunque en la mayoría de los casos se observan cuadros leves o moderados; en cambio, los cuadros graves representan una proporción pequeña de casos, generalmente comórbidos con otras enfermedades.
Introducción y objetivos disfunción al menos moderada en 2 dominios o más de la Shee-
Se estima que cerca del 30% de los adultos estadounidenses han Disability Scale. El resto de los casos se consideraron leves. reúne los criterios para el diagnóstico de alguna enfermedad El significado de la gravedad de los cuadros se evaluó según incluida en la cuarta edición del Manual Diagnóstico y Estadís- la cantidad de días de incapacidad para realizar actos cotidia- tico de los Trastornos Mentales (DSM-IV) al considerar un pe- nos durante los últimos 12 meses debido a la presencia de tras- ríodo de 12 meses. Menos de la mitad de ellos recibe trata- tornos mentales o consumo de sustancias. Dicha variable re- miento, aunque la falta de éste tendría lugar en numerosos sultó significativamente elevada entre los individuos con cua- casos leves o autolimitados. De todos modos, no se cuenta con dros graves en comparación con el resto de los participantes. información epidemiológica fidedigna al respecto. Esto suscitó Los correlatos sociodemográficos analizados fueron la edad, el la modificación de la Composite International Diagnostic Inter- sexo, el origen étnico, el nivel educativo, el estado civil, los view (CIDI) por parte de la Organización Mundial de la Salud ingresos y el lugar de residencia. con el fin de incluir preguntas más detalladas sobre la grave- dad de las enfermedades. La nueva versión de la CIDI fue apli- Resultados cada en diferentes estudios epidemiológicos incluidos en la De acuerdo con la evaluación llevada a cabo, las enfermeda- World Mental Health (WMH) Survey Initiative. des más prevalentes fueron, en orden decreciente de frecuen- El presente estudio se llevó a cabo con el objetivo de evaluar cias, la fobia específica, la fobia social y el trastorno depresivo la prevalencia, la comorbilidad y la gravedad de los trastornos mayor. La clase de trastornos más prevalentes fueron los de incluidos en el DSM-IV durante un período de 12 meses según ansiedad, seguidos por los trastornos del estado de ánimo, del la información obtenida ante la aplicación de la WMH-CIDI en control de los impulsos y por consumo de sustancias. La preva- la US National Comorbidity Survey Replication (NCS-R). lencia a 12 meses de cualquier trastorno fue del 26.2%. La mayoría de dichos casos se correspondió con la presencia de Pacientes y métodos un solo trastorno. La NCS-R se llevó a cabo en los EE.UU. con individuos anglo- Los trastornos fueron graves, moderados o leves en el 22.3%, parlantes. Las entrevistas fueron realizadas en forma personal 37.3% y 40.4% de los casos, respectivamente. Además, se ha- por profesionales formados en el Institute for Social Research lló una asociación significativa entre la gravedad y las comorbi- de la Universidad de Michigan. En una primera instancia se lle- lidades. La proporción de casos graves fue mayor entre los pa- vó a cabo una evaluación diagnóstica con 9 282 individuos. En cientes con trastornos del estado de ánimo, en tanto que la segundo lugar, se recabó información sobre la presencia de frecuencia de casos graves entre los pacientes con trastornos factores de riesgo y trastornos adicionales y sobre las conse- de ansiedad fue la más baja. La mayor frecuencia de casos gra- cuencias y otros correlatos de los trastornos. Los diagnósticos ves entre los pacientes con trastornos de ansiedad, del estado se llevaron a cabo mediante la WMH-CIDI, de acuerdo con los de ánimo, del control de los impulsos y por consumo de sus- criterios incluidos en el DSM-IV y la Clasificación Internacional tancias tuvo lugar en presencia de trastornos obsesivo com- de las Enfermedades (CIE-10). Las enfermedades consideradas pulsivo, bipolar, oposicionista desafiante y dependencia de incluyeron los trastornos de ansiedad, del estado de ánimo, del sustancias, respectivamente. control de impulsos y por consumo de sustancias. Durante la El análisis de correlación tetracórica llevado a cabo con el fin segunda parte del estudio se evaluaron los trastornos de la in- de evaluar las comorbilidades generó resultados mayormente fancia, el trastorno por estrés postraumático, el trastorno ob- positivos y significativos. Las correlaciones más significativas se sesivo compulsivo y el consumo de sustancias. correspondieron con síndromes conocidos como el trastorno Los casos se consideraron graves en presencia de intentos de bipolar, la depresión doble, la depresión ansiosa y la comorbili- suicidio, discapacidad o limitación laboral, psicosis, bipolaridad, dad entre el déficit de atención e hiperactividad y la manía/ dependencia de sustancias con trastornos graves del funciona- hipomanía. Asimismo, se verificó un resultado significativo al miento, trastornos del control de los impulsos acompañados analizar las comorbilidades entre en trastorno de pánico o la de violencia o cualquier cuadro que haya generado incapaci- fobia social y la agorafobia y entre el abuso y la dependencia de dad durante un mínimo de 30 días. Los casos moderados fue- alcohol y el abuso y la dependencia de drogas. El análisis de ron aquellos asociados con tendencia suicida, dependencia de clases latentes, realizado con el fin de valorar las comorbilida- sustancias sin disfunción grave, limitación laboral moderada o des multivariables, resultó, en la mayoría de los casos, en la identificación de 3 comorbilidades o más. Dicho análisis arrojó consumo de sustancias. En coincidencia con la falta de informa- 7 clases que difirieron significativamente en términos de pre- ción acerca del trastorno explosivo intermitente, la prevalencia valencia, la cual se relacionó en forma inversa con la cantidad y obtenida en la NCS-R fue del 2.6%. No se cuenta con informa- la gravedad de los trastornos. Las clases con nivel elevado de ción sobre otros trastornos del control de los impulsos en adultos, comorbilidades incluyeron el 7% de la muestra y el 43.6% de en tanto que la información obtenida en niños es más abundante. los casos graves. Los resultados sobre la gravedad de los trastornos menta- Los correlatos sociodemográficos de los trastornos se anali- les evaluados indicaron que en muchos casos los cuadros son zaron según las categorías obtenidas mediante el análisis de leves. Concretamente, la proporción de casos leves y graves clases latentes. La ausencia de trastornos (clase 1) se correla- evaluados en la NCS-R fue del 40.4% y 22.3%. En coinciden- cionó con el sexo masculino, el origen hispánico o afroameri- cia con lo informado en estudios anteriores, los casos graves cano, el matrimonio, la educación universitaria, el nivel eleva- fueron más frecuentes en presencia de trastornos del estado do de ingresos y la residencia en regiones rurales. Los correla- de ánimo en comparación con lo observado en caso de tras- tos sociodemográficos de los trastornos puros de internalización tornos de ansiedad. (clase 2) fueron el sexo femenino, el matrimonio, el nivel edu- Los patrones de comorbilidad y la magnitud relativa de las cativo elevado y la residencia en los suburbios de áreas metro- asociaciones hallados en el presente análisis coinciden con lo politanas pequeñas. Los trastornos puros de externalización informado en el estudio ECA y en la NCS. El análisis de clases (clase 3) se correlacionaron con el sexo masculino, la juventud, latentes permitió apreciar una progresión y una superposición el origen hispánico, la residencia en regiones rurales y la ausen- entre los trastornos de internalización y de externalización. Ade- cia de ingresos bajos. Los trastornos comórbidos de internali- más, se observó una divergencia que indicó que el trastorno de zación (clase 4) se correlacionaron con el sexo femenino, la ansiedad y las fobias fueron más prevalentes en la clase de residencia en suburbios o áreas no rurales periféricas y el ante- pacientes con trastornos comórbidos de internalización y ex- cedente de matrimonio. La clase 5 incluyó los pacientes con ternalización. Es posible que los trastornos de ansiedad y las trastornos comórbidos de internalización, externalización o fobias tengan un efecto protector ante la aparición de trastor- ambos. En este caso, los correlatos sociodemográficos fueron nos de externalización debido a la evitación del riesgo que pre- la juventud, el sexo masculino, el matrimonio y la residencia en sentan los pacientes. áreas no rurales. La depresión mayor con nivel elevado de co- Los resultados obtenidos acerca de los correlatos sociodemo- morbilidades (clase 6) se correlacionó con el sexo femenino, el gráficos coinciden con lo informado en estudios anteriores. Al origen hispánico o no hispánico no afroamericano, la soltería, respecto se halló una asociación entre los trastornos mentales y el nivel educativo bajo, la residencia en áreas no rurales y el las desventajas sociales. La asociación entre la clase social y la nivel de ingresos inferior al máximo. Finalmente, la clase 7 in- prevalencia de trastornos mentales podría deberse a efectos re- cluyó los pacientes con trastorno bipolar comórbido y se corre- lacionados con experiencias del entorno y factores biológicos. lacionó con el nivel educativo secundario y la residencia en ciu- dades o suburbios. Los autores concluyeron que las clases 1 y 6 Conclusión fueron las que se asociaron con un nivel mayor de variación y La evaluación de la población estadounidense arrojó una diversidad sociodemográfica. Dicha variación no resultó ade- prevalencia elevada de trastornos mentales incluidos en el cuada para predecir los casos incluidos en las clases 2 y 7. DSM-IV. El 14% de la población presentó cuadros modera- dos o graves, en tanto que más de un tercio de los casos Discusión fueron leves. Los trastornos más frecuentes fueron los de an- A la hora de interpretar los resultados obtenidos deben consi- siedad, aunque este grupo de enfermedades no incluyó una derarse algunas limitaciones de la NCS-R. La muestra de partici- proporción elevada de casos graves. En segundo lugar de fre- pantes no fue representativa de determinadas poblaciones, como cuencia se ubicaron los trastornos del estado de ánimo. En los pacientes institucionalizados. Además, es posible que los par- este caso, la proporción de casos graves fue la más elevada. ticipantes hayan referido una prevalencia inferior frente a la real Más de un tercio de los casos se correspondió con los trastor- de determinadas conductas que pueden resultar embarazosas. nos del control de los impulsos, grupo que incluyó una pro- Finalmente, en la NCS-R no se incluyeron todos los diagnósticos porción mayor de casos graves en comparación con los tras- del DSM-IV. A pesar de dichas limitaciones, los resultados de la tornos de ansiedad o vinculados con el consumo de sustan- NCS-R coinciden con los del estudio Epidemiologic Catchment cias. Las comorbilidades tuvieron lugar en más del 40% de Area (ECA) y de la National Comorbidity Survey (NCS). En cam- los casos y se relacionaron en forma notoria con la gravedad bio, las prevalencias estimadas en la NCS-R fueron superiores en de la patología psiquiátrica. Finalmente, los correlatos socio- comparación con las obtenidas en otros estudios incluidos en la demográficos de los trastornos se observaron principalmente World Health Organization WMH Survey Initiative. entre los pacientes con depresión mayor comórbida. El estudio de los trastornos de internalización incluidos en la Es necesario contar con estudios adicionales que permitan NCS-R fue menos frecuente en comparación con el estudio de los valorar las consecuencias de los resultados obtenidos sobre la trastornos de ansiedad, del estado de ánimo y relacionados con el salud pública.