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Las variedades de maíz

Comportamientos e indicadores para su correcta elección


E^sten muchos obtentores y marcas de variedades de maíz. 2.° Número total de flures fértilcs por
planta y por metro cuadrado'k.
Conviene que el agricultor disponga de los suficientes criterios y 3.° Número de hileras dc la marorca
datos para una correcta elección. (siempre par)***.
4.° Altura final de la planta y diámetro
• AGUSTIN MARINE. Presidente de la Asociación General de Productores de de la caña**.
Maíz de España (AGPME) 5.° Disposición morfológica dc las
hojas (erectas, dobladas, etc.)***.
6.° Color de las hojas (ligado a la
n la moderna producción de numerosas interacciones se dan en el nitrato-reductasa)***.
maíz una de las preocupaciones mundo de la producción vegetal, de ma- 7.° Longitud del ciclo (suma dc tcm-
de1 agricultor es la variedad que nera que a veces una variedad queda muy peraturas)***.
decide cultivar. Existen hoy en bien bajo ciertas condiciones pero muy K.° Resistencia a las principalcs enfcr-
díaz multitud de obtentores y mal si alguna de ellas cambia. Así, si medades y accidentes***.
marcas que comercializan toda nuestro problema fuese, por ejemplo, el 9.° Tamaño y peso de los granos pro-
clase de material. Si contempla- virus del enanismo, siempre quedaría ducidos.
mos los antepasados del actual maíz que- mejor una variedad resistente que otra 10.° Color, composición y vitrosidad dcl
daremos impresionados por la gran poli- sensible. Pero si este virus no fuese pro- grano producido***.
morfía que demuestran (fig. 1). Mazorcas blema en nuestra zona, entonces proba- EI número de asteriscos (*) colocado
finas y gruesas; granos de todos los colo- blemente se invertiría el resultado. Este detrás de cada predictor o especificación
res y tamaños; aspecto diverso de mate- pequeño ejemplo demuestra cómo resulta indica el grado dc dctcrminismo gcnético
rial aparentemente poco relacionado. Poco dificil a un científico recomendar varieda- que tiene, es decir, a más asterisu ^s co^-res-
parece tener que ver el actual maíz con des a un agricultor. Dependerá el a^nsejo ponde mayor independencia de las condi-
estas antiguas mazorcas semejantes a plu- de tantos antecedentes, que si no se co- ciones del medio (buenas o malas).
meros. Pero el trabajo humano ha logrado nocen bien, conducirá a error. Cuando comparamos las varicdadcs
«sacar» de un origen tan variopinto las Antes de intentar un juicio aproximado científicamente nos basamos en todos es-
actuales variedades, que bien podrían a las variedades, vamos a listar un peque- tos predictores: La mejor va ^icdad no scrá
compararse a las de Fórmula Uno que ño catálogo de «predictores» de la cose- forzosamente la primera en determinada
compiten en los circuitos. cha que dependen más o menos del códi- espeeificación; bastará que sea la campeo-
En las antiguas excavaciones del Perú go genético: na del «ranking» generaL Como en el Dc-
se ha encontrado maíz incluso en las ca- 1.° Fabricación total de materia seca a cathlon. EI atleta más cquilibrado y com-
pas más profundas (más de seis mil años la floración. pleto es el venccdor, aunyue no sca cl
de antigiiedad) y luego sucesivamente en
las más superficiales (tiempos de Colón).
Pues bien, a medida que se exploraban
capas más recientes se encontraba zuro de
mayor tamaño. Era el trabajo de selección
humano el que poco a poco aumentaba
el número de granos por hilera y el nú-
mero de hileras de la mazorca.
Hay que tener en cuenta además la
gran variedad de usos y destinos del
maíz. Igual se obtiene de él el consabido
pienso para los animales como los maí-
ces dulces de la ensalada, el «pop corn» ,
los «corn flakes» para el desayuno, o la
pasta de la tortilla de maíz. También se
obtiene gritz para cerveza, almidón indus-
trial y un sinnúmero de productos quími-
cos útiles en la moderna civilización.
Según sea el destino que nuestro cultivo
vaya a tener, elegiremos una u otra clase
de variedad.
Lo primero que necesitamos para juz-
gar una variedad es conocer su compor-
tamiento bajo condiciones cambiantes: Cada vez el agricuRor trabaja más con excelentes variedades de ma¢.

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campeón de pértiga, por planta, y a igualdad de mate-
ejemplo. ria seca producida, también
En cualquier c^aso hay que del grosor de las cañas. La
recordar al agricultor qua no
sólo la variedad sino también
las condiciones del año y
INDIAN COR N hipótesis de trabajo sería:
«Plantas altas de caña fina»
frente a «Plantas bajas de
sobre todo su buen hacer O^f tlZ c? ^i1'11 (? 1" 1 C CI S caña gruesa». Evidentemente
contribuyen a lograr un alto preferiremos las segundas.
rendimiento. El valor intrín- Conviene recordar que la
seco de la variedad escogida altura y el grosor están influi-
no es capaz por sí solo de das por la fecha de siembra:
dar un alto rendimiento cuanto más precoz menos
^omo a veces parecen pen- altura y mayor diámetro.
sar algunos-. 6. En cuanto a la lon^-
Digamos algo de cada tud del ciclo calculado por
predictor, empezando por los suma de temperaturas (o sim-
que poseen mayor determi- plificando, por días de vege-
nismo genético; es decir, por tación) sabemos que depende
los que están más asegurados en gran medida del patrimo-
al escoger determinada va^ie- nio genético de cada varie-
dad: dad. Está ligado al níimero
l. La morfología de la de hojas diferenciadas y e ❑
planta es un carácter muy buena correlación con la ma-
estable para cada variedad: teria seca total elaborada a la
es preferible la disposición floración. Un ciclo largo fa-
«erecta» de las hojas ^ue se brica más materia seca a la
sombrean menos entre sí y floración, alcanza más altura
aprovechan mejor la fotosín- y posee caña más gruesa, lle-
tesis potencial-. va más hojas y produce ma-
2. La tasa de actividad yores mazorcas. No obstante
de la nitrato-reductasa relleja el ciclo teórico puede alte-
la eficacia de la planta en la rarse por graves adversidades.
elaboración de proteínas, que Un grave stress hídrico 0
son la base sobre la que se sanitario puede causar « muer-
acumulan luego los azúcares. te precoz» a la planta, recorte
Interesa una alta actividad de de su ciclo y pérdida de peso
esta encima, que está en de numerosos granos. Por el
correlación al color verde contrario, el alargamiento de
intenso que presentan ciertas la fase vegetativa a menudo
Fig. L Nuestras arrtepasados trabal^ con vatiedades de todos bs colores, (om^as
variedades. y tamaños. es debido a malas condicio-
3. La resistencia a las nes físicas del suelo: Las plan-
principales adversidades se ha logrado por llo existe poca competencia entre plantas tas vegetan dificilmente, presentan aspecto
vía genética y por lo tanto viene junto vecinas y el patrimonio genético en cuanto poco saludable y tardan demasiado en
con la variedad que decidimos sembrar. a número de hileras se exprime sin pro- alcanzar la floración.
Algunas variedades son ya resistentes a blemas. Hemos observado pérdidas en 7. La composición del grano también
uno de los gusanos barrenadores, al que años muy fríos, de vegetación lenta duran- es un carácter varictal, aunque se altera a
intoxican cuando intenta penetrar en la te el primer mes. Esta componente del la baja cuando la granazón no es satisfac-
planta. Antiguamente se habían retirado rendimiento, no obstante, está en correla- toria. Durante la fase de Ilenado, nume-
variedades por culpa del virus del ena- ción negativa con el número de granos rosas raíces mueren y no es posible rege-
nismo -hoy en día superado por la por hilera, de manera que no podemos nerarlas ya. Si la planta tuvo problemas
moderna selección. La misma sensibilidad ser totalmente optimistas cuando encon- de enraizamiento durante la fase vegeta-
al vuelco ha sido corregida- aunque con- tramos una variedad de muchas hileras. tiva ahora van a notarse los efectos. Teó-
viene recordar que sigue ligada a la altura 5. La altura de la planta y el grosor ricamente la variedad asegura la calidad
de la planta y al grosor de las cañas, de la caña. Podríamos hablar mucho de del grano, pero no se alcanzará si el enrai-
como lucgo veremos. ambos predictores. Los cereales se han zamiento inicial no fue correcto.
Los predictores que seguirán dependen seleccionado durante años para baja esta- 8. EI tamaño de la mazorca, que es
todavía mucho del código genético, pero tura, mientras se aumentaba la resistencia el producto de hileras por granos presen-
so❑ afectados ya en buena parte por las de al caña y también su diámetro. No pa- tes por hilera, es una característica varietal
condiciones del medio: rece deseable una altura excesiva, que fa- bastante fija (fig. 2). A diferentes densi-
4. EI níunero de hileras por mvorca cilita el vuelco. La distancia entre nudos dades de campo cambia el tamaño de las
está muy ligado a la variedad y al ciclo. (que depende de la giberelina sintetizada mazorcas, pero las variedades mantienen
Se fija muy prunto (estadio 7-8 hojas vai- por la planta en fase vegetativa) es la ver- diferencias. Generalmente, como acabamos
nas visibles). AI principio de su desarro- dadera responsable de la altura final de la de decir, los ciclos largos tienden a dar

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Fg. 2. EI tamaño de la mazorca es una caracteristlca varietal bastarrte flja. Fg. 3. La floracfón es responsable del número de flon:s fértlles.

mayores mazorcas. Esto ocurre poryuc hacer del agricultor y el factor ticmpo l'n CUCntll n0 firhl-IC211- C11n^IS hc'm'<ttilildl)

fabrican m^ís materia seca a la floración, la atmosférico. finas. Así ohtendren^us un númcro
cual, seg^ín Tanaka, es la responsable del 10. La granazón o el tamaño y pcso máximo dc granos por metro cu,rdr,rdo.
número de flores fér-tiles (fig. 3). final dcl grano. Aquí sí que nos aU-eve- d) Procuraremos yue nucstra v,rricdad
Por último, nos ocuparemos de los pre- mos a darle toda la culpa al agricultor (y lenga hojas verdc oscuro v a I^udcr ser
dictores yuc dependen más de las condi- un poco a la Providencia que gobierna el pol-le el-('ClO para ophmVlrl- la fllllltilntCtilti

ciones del medio y menos del código clima). La variedad y el genetista tiencn cn la fasc dc Ilen^ldu dc grano.
genético: poco que decir en este asunto. ^i^das las c) Si cultiv^lmos ciclos corlos pur I^r
c). La fabricación total de materia seca variedades se confunden en una misma razbn yuc sca. prucur^rr^mos yue se,rn dr
a la tlor•ación. Aunyue acabamos de decir Icy de formación del grano. Puestos a pre- dcsarrollo mudcrado c intcnt.rremos
que dependc del ciclo, y por lo tanto tam- Icrir, interesará una variedad de muchos aumentar Ic nínnero de pics para rom-
bién dc la variedad, es evidente yue en ^^ranos por metro cuadrado y menor pcso pensar la inevitahle p^rdida de t^,ranos por
estc predic[or juega muy fuerte el clima y yue otra inversa. La rona de altos rendi- mazorca yue deheremos suhortar.
el estado dcl suelo durante los dos prime- mientos se sitúa evidentemente en la p^u-te En cualyuier caso es ncces,u-iu U-ah.rjar
ros meses. Por eso preferimos dar ayuí la derecha de la línea dc regresie^n. cuidadosamcntc. olvidándosc de la gen^-
palahra al agricultor y a la Providencia an- Estamos ahora en condicioncs de escri- tica avanzada yue nuestrn semill^r pucdr
tes yuc a los genetistas. Además, lo im- bir un «retrato robot» de nucstra varic- aportar. Existen unos «ticmpos oportunos»
portante cs la materia seca claborada por dad: y unas «ocasiones favor.rhles» clue ya el
metro cuadrado, y esta cifra todavía de- a) Exigiremos resistencia a las princi- Evangclio anunciaba, y clue no u presen-
pcnde menos de la variedad, porquc po- pales enfermcdades, sobre todo virosis y tan otra vez cuando se dejan pasar. ('omo
demos compensar con la población sem- fusariosis. Así evitamos la mucrtc precor dccía un profesor ingles dc a^rononúa.
brada. Es lo mismo sembrar más plantas dc las plantas. «cntrc un huen y un mal ,rgricultor ^zistr
de ciclo corlo por metro cuadrado yue b) Prcxuraremos sembrar una varicdad una difcrcncia dc l5 días».
menos dc ciclo largo a efectos de la mate- de ciclo largo y lo antes posible. Atií lo- Trahajemos, pues. con huen.rs varicda-
ria seca total elaborado. Más que la varie- grarcmos mazorcas grandes. des y cuid^mosl^ts con todo el esm^ro yur
dad, pues, que podemos «ajustar» en c) Sembraremos la máxima densidad mcrcccn. Scguro yue no nos van ^I clcfrau-
cuanto a densidad, será importante el bien posiblc para esta variedad, tcniendo s<ílo dar. ■

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