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Parcial Integrador

Historia de la Edad Moderna y TP


Cátedra 3D
Docente: GONZÁLEZ, Martín
Estudiante: BIANCA LOGROÑO, Lucas Martin -Dni: 39.211.620-
16/11/2018
En el presente trabajo nos proponemos desarrollar en breves páginas, cómo resultó posible
que en tan solo cuatro siglos sucediera una transformación casi total, partiendo de una sociedad
feudal hasta la consolidación de una sociedad industrial, intentaremos señalar las transformaciones
económicas, y su correlato en la esfera de lo jurídico/político, y a su vez miraremos cuanto tuvieron
que ver, en esos procesos, las crisis del siglo XIV y XVII. Caracterizamos tal transformación como
un proceso económico-social propio de la Europa moderna occidental.
Entendemos que la crisis del XIV dejó establecidas las condiciones materiales para que se
suscitarán los cambios económicos políticos que permitirían la transformación de los señoríos en
pequeñas unidades productivas de un incipiente capitalismo agrario en formación. El siglo XIV
había dejado a su paso devastadoras situaciones: ​“Las condiciones climáticas desfavorables, que
propiciaron las crisis de subsistencia; la Peste Negra, como una de las más significativas
epidemias, de las varias, que flagelaron la época; las cargas feudales, que recaían sobre la
población campesina;[...] y las guerras, ocasionando pérdida no solo de fuerza productiva
campesina, sino también, generando una constante destrucción de los campos”1.
Las consecuencias de tal crisis eran inevitables: En una lógica de producción en la cual el
entramado vital era el trabajo campesino, las tierras cultivadas sufrieron un fuerte retroceso y los
2
salarios un aumento elevado debido a la reducción de mano de obra campesina ; la incapacidad de
explotar las reservas señoriales mediante la explotación directa, supuso un gran problema. Una
situación que hasta ese entonces no presuponía tal conflicto, debido a que ​“mientras que el
poseedor del dominio útil (tuviera) a eternidad el usufructo de la tierra, el señor (seguía)
poseyendo el dominio directo, el cual (constituía) a la propiedad como una tenencia a censo; es
decir que mientras el dominador útil cumpliera con los censos, las rentas en especie y las tasas de
mutación para con el señor, el uso de esa tierra sería a eternidad.”3. ​Puesto en otras palabras y
clarificando: hasta que no se desarrolló la crisis, el señor podía generar sus ingresos producto del
beneficio del dominio directo de la tierra que se hallaba bajo régimen enfitéutico, sin tener la más

1
​BIANCA LOGROÑO, Lucas Martín. ​Primer parcial 2018,​ Cátedra 3D GONZÁLEZ Historia de la edad Moderna y
T.P. ISP. Joaquín V. González, Martín. 2018 Págs. 1 y 2.
2
DUBY, Georges, ​Economía rural y vida campesina en el occidente medieval​. Barcelona: Península, 1968. Libro
cuarto “La mutación del siglo XIV”, parte 1, página 392
3
BIANCA LOGROÑO, Lucas Martín. Op cit… 3
mínima necesidad (o en el peor de los casos, poca necesidad) de hacer producir la tierra de su
4
reserva .
Pero una vez que se hicieron presentes y patentes las consecuencias negativas que había
acarreado el S. XIV, en términos de los ingresos que eran provistos a los señoríos por parte de las
tenencias bajo regímenes enfitéuticos, la política productiva y recaudatoria señorial tuvo un giro de
180 grados, consolidando a la propiedad indivisa de la tierra como el valor fundamental para la
recaudación del señorío. Dicho en otras palabras, fueron tanto los problemas inflacionarios como
los demográficos los que hicieron que se redujeran drásticamente los ingresos que el señorío
percibía de los censos y las tasas de mutación, lo cual tuvo una clara reorientación de la política
hacia la ampliación del volumen de la reserva señorial, con el objetivo de ser puestas en práctica la
implementación del arrendamiento. No solo se agrandaba la reserva señorial a costo de las tierras
campesinas, sino que esa reserva tampoco sería explotada directamente, de esta forma cobraba cada
vez más importancia en el sistema recaudatorio la renta propietaria, consagrando así a la propiedad
indivisa de la tierra como el valor fundamental para la recaudación del señorío5.
De esta forma comienza a hacerse evidente el devenir de los señoríos occidentales como
unidades económicas y su paulatina transformación hacia primitivas unidades de producción
campesina capitalista, pero ¿bastan estas transformaciones para designar el fin de una transición al
capitalismo agrario? Creemos que no. Resulta pertinente entonces concentrarnos en la elaboración
de dos ejes analiticos: el primero, la transformación que se da sobre los ingresos del agente
productivo (campesino, proletario, etc), para tal fin nos enfocaremos en el fenómeno de la industria
rural a domicilio (IRD); y en segunda instancia, haremos particular ahínco en las vías francesas e
inglesas de dicha transformación.
La IRD (conocida también como “Putting-out system”) fue un producto claro de la crisis del
siglo XVII, en líneas con lo que sostiene Hobsbawm las IRD fueron el sistema con mayor
capacidad para desmontar las estructuras agrarias previas y las respectivas relaciones sociales y de
producción que las mismas conllevaban, a su vez que favorecieron las potencialidades del
desarrollo industrial, entablando condiciones materiales y pautas socioculturales concretas, en miras

4
La reserva señorial es el espacio productivo en el cual el señor conserva el dominio absoluto de la tierra.
CAMPAGNE, Fabián, ​Feudalismo tardío y revolución: campesinado y transformaciones agrarias en Francia e
Inglaterra (siglos XVI-XVIII)​. Buenos Aires: Prometeo libros, 2005. Capítulo 2, página 49
5
​El autor realiza un desarrollo comparativo entre la recaudación de la Baronía de Pont Saint Pierre entre el S. XV y el
XVIII. Se puede ver como hay un giro drástico en los ingresos, siendo en sus orígenes de prominente carácter
enfitéutico, mientras que hacia sus fines provenían casi exclusivamente de la reserva. Ídem. Capítulo 4, página 99
a la Revolución Industrial.6 Este fenómeno constituyo dos cambios fundamentales los cuales
consideramos pertinentes destacar: en primera instancia, el cambio sobre las lógicas de los ingresos
del trabajador; y el segundo, en relación con la vinculación de las áreas productivas y las áreas
comerciales. En cuanto al primer punto, resulta completamente destacable el hecho de que este
nuevo trabajo ya no constaba en la realización de tareas específicas de producción para garantizar la
subsistencia, sino más bien que era el pago remunerado mínimo por la extracción de la plusvalía “si
los ingresos en un principio se corresponden a la subsistencia del individuo o de la unidad
productiva (la familia), ahora en esta transición iban a tener, más precisamente, correlación
directa con la extracción de su fuerza de trabajo”7. ​En cuanto al segundo, es necesario recalcar la
escala de este fenómeno, en tanto que si bien es un fenómeno rural, provocó que varios trabajadores
se deslindaran del trabajo de carácter artesanal en la industria urbana, a la vez que provocó la
conexión con los mercados internacionales o cuanto menos a priori con las redes regionales. De
esta forma se consolidó como una fuerza industrial con un fuerte carácter expansivo, hacia
mediados y finales del S. XVII las IRD ya habían favorecido el desarrollo de vastos mercados
internos en europa (particularmente en inglaterra)8.
En cuanto a las vías inglesas y francesas de esta transformación, haremos hincapié en la
línea explicativa de Campagne, quien diferencia dos variables relevantes: la primera, los avances en
las técnicas de producción agrícola; y la segunda, en relación con los cambios susceptibles al
régimen de propiedad de la tierra9.
En cuanto a la primer variable es ostensible los cambios en las técnicas de cultivo como por
ejemplo: la utilización de plantas que pudieran fijar el hidrógeno en la tierra cultivada y la
introducción de cambios en la rotación de cultivos. Este avance técnico conllevaría también la
incorporación de un nuevo saber por parte de los trabajadores, aquellos campesinos que no
incorporaran el nuevo conocimiento técnico quedarían desplazados del proceso productivo. A su
vez, el proceso de cercamiento que surgiría en inglaterra (los “Enclousers”) tendría una
consecuencia similar, ya que muchos campesinos contraerían una deuda, para realizar el proceso de
cercamiento, por fuera de sus posibilidades de pago, esto los llevaría indefectiblemente a

6
​HOBSBAWM, Eric. ​La crisis del siglo XVII. ​En​ Crisis en Europa 1560-1660,​ de Trevor Aston, 15-71.Madrid:
Alianza, 1983

7
​BIANCA LOGROÑO, Lucas Martín. ​De la reforma religiosa global, a la modernidad temprana; y los cambios
socio-económicos entre el siglo XVI y XVIII, en miras a la Sociedad Industrial. ​Segundo parcial, Cátedra 3D
GONZÁLEZ Historia de la edad Moderna y T.P. ISP. Joaquín V. González, Martín. 2018 Págs.7 y 8.
8
​DE VRIES, ​La economía de Europa en un período de crisis (1600-1750). ​Madrid: Cátedra, 1979. Pág. 96.
9
CAMPAGNE, Fabián. Op. Cit. Pág. 191.
constituirse como mano de obra de reserva debido ya sea por el endeudamiento como por una mala
distribución de la tierra, en términos de Marx: ​“Si una sobrepoblación obrera es el producto
necesario de la acumulación o del desarrollo de la riqueza sobre una base capitalista, esta
superpoblación se convierte, a su vez, en palanca de la acumulación capitalista, e incluso en
condición de existencia del modo capitalista de producción​. Constituye un e​ jército industrial de
reserva a disposición del capital,​ que le pertenece a éste tan absolutamente como si lo hubiera
criado a sus expensas. Esa sobrepoblación crea, para las variables necesidades de valorización del
capital, el material humano explotable y siempre disponible, independientemente de los límites del
aumento real experimentado por la población”10
Campagne sostiene, que a pesar que en un comienzo los legisladores rechazaban de lleno la
política de los enclousers, en el siglo XVII comenzarían a aceptarla y para el XVIII directamente
fomentarían su promoción11. Es notorio entonces como la superestructura (pese a su momentánea
reticencia) se encuentra determinada por la estructura, de esta forma en miras a la conformación de
una nueva sociedad industrial podemos afirmar que tanto el aumento de la productividad como los
enclosures se volvieron piezas claves.
En cuanto al caso francés, se presentaba el dilema de cómo poder seguir garantizando los
ingresos de la clase dirigente (los antiguos señores) a la vez que poder liberar a las fuerzas
productivas de las tenencias enfiteúticas, para poder configurarlas en tanto de lo que la nueva
sociedad demandaba como mano de obra.
La solución para las tierras propias de la reserva, fue la conversión directa en latifundios, de
esta forma quedaba consolidado el derecho a la propiedad privada. En cuanto a los campesinos, se
los reconoció como poseedores absolutos de aquella tierra en la que solo poseían el dominio útil, a
cambio del pago de una deuda con el antiguo propietario, de esta forma se los constituía como
privados, pero un privado atado a una onerosa hipoteca.12
De esta forma se consolidaba una nueva ficción jurídica, que daba respuesta
superestructurales a las demandas que la estructura establecía (al igual que en el caso inglés). ​“El
capitalismo podía entonces desarrollarse y los campesinos quedaban libres, para ser
proletarizados”13.

10
​KARL, Marx. ​El Capital Tomo I; "El Proceso de Producción del Capital"​, Capitulo XXIII, Siglo XXI Editores.
(Subrayado no presente en la obra original)
11
​CAMPAGNE, Fabián. Op. Cit. Pág. 178.
12
I​ bid. Págs. 241 a 259
13
​BIANCA LOGROÑO, Lucas Martín. Op. Cit. Pág. 11
Bibliografía:

❖ BIANCA LOGROÑO, Lucas Martín. ​De la reforma religiosa global, a la modernidad temprana; y
los cambios socio-económicos entre el siglo XVI y XVIII, en miras a la Sociedad Industrial. ​Segundo
parcial, Cátedra 3D GONZÁLEZ Historia de la edad Moderna y T.P. ISP. Joaquín V. González,
Martín. 2018

❖ BIANCA LOGROÑO, Lucas Martín. ​Primer parcial 2018,​ Cátedra 3D GONZÁLEZ Historia de la
edad Moderna y T.P. ISP. Joaquín V. González, Martín. 2018

❖ CAMPAGNE, Fabián, ​Feudalismo tardío y revolución: campesinado y transformaciones agrarias en


Francia e Inglaterra (siglos XVI-XVIII).​ Buenos Aires: Prometeo libros, 2005

​ adrid: Cátedra, 1979.


❖ DE VRIES, ​La economía de Europa en un período de crisis (1600-1750). M

❖ DUBY, Georges, ​Economía rural y vida campesina en el occidente medieval.​ Barcelona: Península,
1968. Libro cuarto “La mutación del siglo XIV”, parte 1

❖ ​ n​ Crisis en Europa 1560-1660,​ de Trevor Aston,


​HOBSBAWM, Eric. ​La crisis del siglo XVII. E
15-71.Madrid: Alianza, 1983

❖ KARL, Marx. ​El Capital Tomo I; "El Proceso de Producción del Capital",​ Capitulo XXIII, Siglo
XXI Editores.

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