Está en la página 1de 4

La Mandrágora

Mandragora autumnalis, la mandrágora es una especie de fanerógama perteneciente a


la familia de las Solanáceas. Sus raíces han sido usadas durante la historia en rituales
mágicos, ya que sus bifurcaciones tienen cierto parecido a una figura humana; incluso

Nombre común
 Mandrágora: portugués, castellano
 Autumn mandrake, mandrake, Mediterranean mandrake: inglés
 Mandragore: francés
 Alraunwurzel, Gemeine Alraune: alemán
 Alruuna: finlandés
 Alruna: sueco
 Alruin: holandés

Descripción

Frutos de la Mandragora officinale.

Las raíces son gruesas y habitualmente se ofuscan. El tallo es de color verde oscuro;
hojas anchas y con una superficie rugosa, y tienen el mismo color del tallo. Las flores
salen del centro, y son de color blanco violáceo. La planta alcanza una altura de unos 30
cm, y suele encontrarse en zonas sombrías y húmedas, donde no da mucho el sol. El
fruto sale en otoño, tiene color amarillo o naranja, y aspecto similar a una manzana. Su
ingesta puede producir alucinaciones.

Esta planta crece en bosques sombríos, a la vereda de ríos y arroyos donde la luz del sol
no penetra. Su raíz es gruesa, larga, generalmente dividida en dos o tres ramificaciones
de color blancuzco que se extienden por el suelo; sus hojas son de un tono verde oscuro;
sus flores son blancas, ligeramente teñidas de púrpura; el fruto es parecido a una
manzana pequeña y exhala un olor fétido.

Leyendas

Animismo en la Mandragora, Tacuinum Sanitatis, 1474

Mandrágoras

Ha sido protagonista de muchas leyendas y rituales. Los magos hacían con ella algo
similar a una figura humana, tallaban una figura en sus raíces presionando la raíz a
cierta altura para formar un supuesto cuello, y cortando todas las bifurcaciones excepto
cuatro, que serían las extremidades, y las adoraban como a dioses. Durante la Edad
Media era utilizada por las brujas para sus diferentes rituales y ungüentos.

Se creía que la planta tenía características humanas porque sus raíces parecían dos
piernas. Hay historias que cuentan que esta gritaba lamentándose cuando la arrancaban
de la tierra, pudiendo enloquecer a las personas; y por eso amarraban a un perro a la
planta para arrancarla. Según creencias populares crecía bajo los patíbulos donde caía el
semen a veces eyaculado por los ahorcados (durante las últimas convulsiones antes de la
muerte o por erección y eyaculación postmorten). Era usada tanto en magia negra como
en magia blanca, ya que es venenosa y curativa al mismo tiempo, según el uso;1 y
cuando juzgaron a Juana de Arco la acusaron de usar la planta porque pensaban que ese
era el pecado de que oyera voces. Se dice que favorece la libido. Los antiguos alemanes
la llamaban Alraune.

Cultura

Nicolás Maquiavelo, autor de "El Príncipe", escribió una comedia titulada "La
Mandrágora" en la que un ungüento sacado de la raíz podía sanar la esterilidad.
También es citada en la novela de J. K. Rowling, Harry Potter, en la de Laura Gallego
García, Mandrágora y en la película de Guillermo del Toro titulada El Laberinto del
Fauno también aparece en la obra teatral de Samuel Becket "esperando a Godot". Fue el
nombre que adoptó el movimiento surrealista que formara el poeta Vicente Huidobro.

En la Biblia, Raquel la mujer de Jacob, pidió a Lea la otra esposa de éste las
Mandrágoras que el hijo de ésta recogió en el campo. A cambio de ellas cedió a Lea el
derecho a pasar la noche con su esposo Jacob.

Puesto que la Biblia dice que Raquel era estéril quizás pensase que esta planta la
ayudaría a concebir.

Composición química
Contiene alcaloides, tales como atropina y escopolamina. Se usaba como anestésico, ya
que estas sustancias merman los impulsos nerviosos. En grandes dosis se entraría en
coma.

Farmacología
Mecanismo de acción y formas de empleo

Se sabe que la mandrágora se administra en forma oral. Como contiene principalmente


atropina, se comporta de manera similar a la belladona: en dosis bajas bloquea los
receptores de la acetilcolina deprimiendo los impulsos de las terminales nerviosas;
mientras que en dosis elevadas, provoca una estimulación antes de la depresión.

Usos terapéuticos

En la medicina antigua las hojas de mandrágora hervidas en leche se aplicaban a las


úlceras; la raíz fresca se usaba como purgante; y macerada y mezclada con alcohol se
administraba oralmente para producir sueño o analgesia en dolores reumáticos, ataques
convulsivos e incluso de melancolía. En tiempos de Plinio se empleaba como anestésico
dándole al paciente un pedazo de raíz para que la comiera antes de realizar una
operación. Se usa para quitarse las lagañas y almorranas mejor conocidas como
hemorroides.

Dosificación
No existen registros de dosificaciones exactas. Únicamente hay menciones en el sentido
de que su uso en pequeñas cantidades era seguro, mientras que en dosis mayores
provocaba delirios y locura o muerte por intoxicación.

Cultivo

El cultivo de la mandrágora de otoño no es complicado en climas mediterráneos, donde


se puede mantener al aire libre. Las semillas recolectadas en invierno o primavera
germinan en un porcentaje bastante elevado al otoño siguiente, tras las primeras lluvias.
Las plantas recién nacidas son sorprendentemente parecidas a las de tomate, pimiento u
otras solanáceas. La planta parece adaptarse a cierta variedad de sustratos, aunque lo
mejor son suelos arenosos que drenen bien, y con pH ácido o neutro. El crecimiento de
las raíces es bastante rápido, y a los seis-ocho meses la raíz tiene ya el famoso aspecto
antropomorfo y llega a los tres cm de ancho por seis o siete de largo. Por eso, si las
semillas se germinan en semilleros o alveolos poco profundos, es importante repicar las
plántulas cuando tienen tres o cuatro hojas a macetas de al menos 20 cm de
profundidad, con un buen drenaje al fondo (piedras, arena o grava). Si se pasan a
macetas menos profundas, es muy probable que las plantas se vayan literalmente al
fondo y acaben intentando sacar las raíces por los agujeros de drenaje, lo que después
complica el trasplante y aumenta el riesgo de rotura de las raíces. El repicado o
trasplante puede hacerse en cualquier momento del ciclo vegetativo, pero lo mejor es
hacerlo cuando las plantas pierden las hojas a principio de verano y entran en reposo
hasta septiembre u octubre. Durante este reposo estival no es necesario regar las plantas,
pero durante la época de crecimiento son relativamente sensibles a la falta de agua, y el
sustrato no debe secarse completamente. La primera floración puede tener lugar al año
(otoño-invierno siguiente al de la germinación).

Plagas y enfermedades

La principal plaga son los caracoles, que parecen inmunes a los alcaloides de las hojas y
pueden defoliar las plantas casi completamente. La mosca blanca puede producir
ataques no muy intensos, aunque es posible que pueda transmitir virus que afecten
negativamente al desarrollo de las plantas, como el del mosaico del tabaco y otros
propios de solanáceas.

En semillero es conveniente usar algún fungicida para hongos de semillero, como el


propamocarb, benomilo, tiram, etc. y tener cuidado con el exceso de humedad.

También podría gustarte