Prologo

Y lo único que podía pensar era - ¡qué diablos hago aquí!

Era demasiado el estrés me sentía con mucha presión el vestido era bonito blanco como el de
cualquier novia, pero pesaba horrores sentía que me asfixiaba. Y en ese momento en el mejor
momento como siempre llego mi madre.

-Querida es la hora debes salir-

Y que fue lo que hice cuando la escuché me quedé ahí parada frente al espejo sin moverme un
centímetro.

-Ola es la hora debes de salir muévete por favor me preocupas- ¿Estas bien? -

Y ahí fue cuando explote

-Para que preguntas si ni siquiera te importa la respuesta

-Eso es algo cruel soy tu madre

-No, no lo eres Ma

-Pero aun así es cruel

-Sabes que es cruel estar aquí a punto de hacer algo que odio ya no puedo más- Y empezó a
correr y luego lo recordé, él tuvo la grandiosa idea de casarnos en un barco porque a mí se me
escapo decirle que amaba el mar así que me detuve y volví a la habitación y vi a mi Ma sentada
sonriendo

-No crees que eres un poco dramática-dijo con esa sonrisa socarrona que me hace desear
darle un golpe- No creo que vayas a saltar del barco o lo harás y así pensarían que estas
muertas y arruinaras todo por lo que hemos estado trabajando
Odiaba cuando tenía razón no podía simplemente escapar seria arruinar todo por lo que
hemos trabajado, pero aun así me veía tentada simplemente no podía hacerlo era demasiado
para mi sabía que debía hacerlo, pero una parte de mí solo quería saltar de ese barco

-Bueno ya déjate de niñerías tienes 22 años debes de hacerlo así que dame una sonrisa y sal-

Y con toda mi fuerza de voluntad le sonreí y camine afuera del camarote hacia la
cubierta donde se suponía que sería llevada a cabo la boda, y antes de iniciar a caminar lo vi
ahí parado con su elegante traje azul , cabello castaño ojos verdes esos ojos verdes que en ese
momento me voltearon a ver y mi primera reacción fue desviar la mirada simplemente no lo
podía ver aumentaba mi ansiedad así que vi a la gente que estaba ahí afuera por supuesto solo
había una persona que pudiera reconocer mi hermano no le podía ver bien la cara pero ese
cabello pelirrojo era sumamente fácil de reconocer aparte el hecho de que es sumamente alto,
yo siempre había envidiado su cabello rojo el mío era de un castaño claro pero siempre me
había gustado mucho el suyo.

-Bueno es la hora empieza a caminar ya esperaron lo suficiente con tu escena de hace rato- y
así como siempre Ma interrumpió mi pensamiento trayendo me devuelta a la realidad

-Bueno si ya voy a hacer esto por lo menos me puedo tomar cinco minutos no?

-Si, si puedes y ya los usaste así que comienza a caminar- Antes de empezar a caminar y hacer
por consecuente lo que ella quería le dediqué una de mis mejores miradas de odio y empezó a
voltearme y di un paso

- ¿Qué haces? - me agarro del brazo

-Lo que me dijiste que hiciera-

-No seas tonta yo voy primero soy la dama de honor-

A pesar de mi odio hacia ella sabía que estaba para cuidarme y la mayoría del odio que dirigía
hacia ella solo era por mi frustración por la situación bueno parcialmente a veces solo me
sacaba de mis casillas, pero normalmente simplemente soportaba mi enojo y no decía nada
más que sus insoportables comentarios sarcásticos así que me calmé y dije:
-Lo siento-

-Está bien, vamos a hacer historia- Y empezó a caminar y la vi cómo iba y se ponía junto al que
debía de ser mu lugar en el altar y sabía que era mi turno de caminar así que empezó con
pasos lentos tambaleadme sintiendo que me iba caer viendo como alrededor de mi se destruía
y luego volví a entrar en pánico ahí mientras caminaba y me detuve cinco segundo pero
parecieron horas y todos me veían especialmente esos ojos verdes pensando que está
pensando y tenía ganas de gritarles – No, no sé lo que pienso ayuda por favor- de gritarte a el -
Por favor No, No quiero hacerlo- Pero sabía que no haría nada y suspire y pensé en todos los
que ayudaría cuando lo hiciera así que di un paso firme hacia adelante y lo vi superar a esos
ojos verdes aliviados de que volviera a caminar y me llene de enojo y tome una decisión.

Camine con determinación hacia adelante con el sonido de es música tan abrumadora que
siempre ponían en las bodas, llegue al altar me arme de valor voltee a verlo y le di una mirada
de enojo resignación y disculpa el debió notarlo porque me agarro la mano y susurro un no
que solo fue perceptible para mí pero yo ya había tomado una decisión solté mi brazo de su
agarre y seguí caminando hasta dar con la proa del barco y lo vi, vi el mar.

Y salte

Salte hacia el mar

Hacia mi hogar

Y lo único que podía pensar era en las palabras de Ma - vamos a hacer historia- y reí mientras
caí pensando o si pero que historia.

Capítulo 1

Muy bien empecemos mi nombre es Ola y les voy a contar mi historia... pero antes de empezar
creo que deberían de saber algunas cosas esenciales tengo 15 años, un hermano al que no
conozco, - una mascota llamada Kota ahhhh y soy una sirena creo que hemos abarcado todo lo
esencial así que empecemos.

Todo inicio hace casi 300 años o eso es lo que mi abuela cuenta, eso era cuando los humanos,
sirenas y tritones convivían pacíficamente hasta que sucedió lo inevitable alguien importante se
enamoró de quien no debía especificando ese alguien era mi tatarabuela Mare ella era la heredera
al trono de Altea de las pocos reinos en los que no había una división notable entre sirenas y
tritones, y lo hacían mediante lazos matrimoniales entre la heredera de una larga sucesión de
poderosas sirenas y el tritón con mayor fuerza igual del linaje más fuerte , en esa época con quien
se suponía que se debía de casar era Calec pero mi tatarabuela se enamoró de un humano lo que
era un gran insulto para Calec ya que si bien en esa época vivíamos en paz con los humanos y ellos
sabían de nuestra existencia siempre se vieron como inferiores para la sociedad de Aquila aquella
que es como se llama a las formas de vida que pueden respirar bajo el mar, en fin debido al
enamoramiento de mi abuela se estuvo a punto de romper el reino de Altea entre dos facciones
los tritones y las sirenas pero mi tresabuela Izal la madre de Mare tomó una decisión que a mi
parecer no sé si fue cruel, sabia o solo pensaba que no había otra opción pero para calamar la furia
de Calec desterró a Mare al exilio y dando su mano en matrimonio a su siguiente hija Karoll en
matrimonio.

Lo que resulto de ese exilio fue que Mare se terminó casando con el humano del que se había
enamorado como toda una película romántica y terminaron teniendo una hija humana que
también tuvo una hija, que a su vez también tuvo una hija llamada Emil que a su vez se caso con
humano llamado Will y tuvieron dos hijos yo soy una de esos hijos la menor Ola y mi hermano
Renee yo no tengo muchos recuerdos del mis padres solo me hablaron de el una vez por que vi
una foto pero no me han dicho razón de porque el se fue a los 15 años de edad cuando yo tan solo
tenía 5 y a pesar de que tengo mucho curiosidad por saber lo que le paso no presionó para que
me hablen de el ya que cada vez que menciono algo relacionado con el veo como mi madre
quiere empezar a llorar, tampoco le gusta hablar sobre todo lo que tiene que ver con nuestra
ascendencia todo lo que he llegado a saber es por mi abuela Leticia.

Capitulo 1
I wonder what you came to be

I was new in town, the boy with the eager eyes

I never was a quitter

Oblivious to schoolgirls' lies

And when I look back on those neon nights

The leather seats, the passage rite

I feel the heat, I see the light

Of Miss Atomic Bomb

Creo que fue mala idea poner una canción que me gustará para despertarme ahora ya no la puedo
escuchar el hacerlo me causa ansiedad y por eso supongo que acabo de arrojar el teléfono al
despertar para apagar la alarma, estaba decidido programaría más tarde el teléfono para que la
alarma sonara de otra manera tal vez el sonido de pájaros, pero no podía seguir arruinando
canciones.

-Estas lista- grito mi mamá y lo recordé debía de ayudarla en la tienda ya me había empezado a
cambiar para usar el uniforme de la escuela siempre que salía de vacaciones la primera semana
ocurrían cosas como esta olvidar quitar el despertador y empezar a ponerme el uniforme, aunque
esta vez el despertador no fue tan contraproducente ya que debido a este me levante.

-Ya voy mamá-

-Ya es tarde- Replicó

-Ya voy- Grité y me apresura a cambiarme y bajé las escaleras para encontrarme con mi mamá en
la cocina desayunando tranquilamente

-No era tarde-

-No, pero sabía que tú no te despertarías a tiempo o de alguna manera se te haría tarde- Amaba
que mi mamá me conociera tan bien, aunque a veces pudiera resultar irritante
-Eso es indignante si hasta puse la alarma-

-No, lo que hiciste fue olvidarte de quitar la de la escuela- Tenía razón, pero no lo admitiría

-Eso no es cier..-Me interrumpió- Claro que sí, pero mejor desayuna aun tienes tiempo-dijo
mirando su reloj- tardaste menos de lo que esperaba y recuerda que Alicia te cambiará a las dos
para que lleves a tu abuela al centro comercial.

-Sabes no conseguí la licencia de conducir para ser el chofer de Leticia-

-No, pero fue la razón por la que yo te pagué las clases de manejo y ya te dije que no me gusta que
te refieras de esa manera a tu abuela-

-Pero si es su nombre y a ella le gusta dice que la hace sentir joven-

-Pero es algo irrespetuoso-

-Está bien, Emil- dije su nombre acentuando la vocal para que se enfadara conmigo lo cual surtió
efecto.

-Me vuelves a llamar de esa manera y serás el chofer de tu abuela todas tus vacaciones-

-Me rindo, me rindo mamá- Exclame acentuando de igual manera las vocales de mamá para
enfatizar mi derrota, amaba a mi abuela pero después de un tiempo se la pasaba hablando de las
historias que le había contado su abuela acerca de Altea y si bien eran muy interesantes ya las
había escuchado todas cientos de veces a pesar de que Leticia me dijo que eran reales y mi madre
lo confirmo simplemente no lo concebía así que siempre las vi como historias o cuentos y a
medida que crecía me iban importando menos ya que, que impacto podría tener el hecho de que
mi tatarabuela haya sido una sirena que al final fue exiliada, solo pensaba en ello como una
historia interesante que contara a mis hijo no como algo de relevancia para mi vida actual lo que
molestaba a Leticia y por el contrario alegraba a mi mamá constantemente me decía que era
bueno que no pensara mucho en esas cosas que solo me sacaban de la realidad.
Termine de desayunar y saque el teléfono para ver si tenía algún mensaje mientras esperaba a
mamá, no había ni siquiera revisado y mi madre me quito el teléfono de las manos.

-Qué haces-pregunté.

-Tu qué haces-rebatió.

-Esperándote- y me vio con cara de incredulidad mientras lo decía.

-Esperándome- dijo con tono divertido- Si recuerdas que hoy yo llego a la tienda hasta más tardé.

Siempre me pasaba, siempre olvidaba las cosas y lo odiaba.

-Lo siento-le dije agarré las llaves del coche y salí corriendo.

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Abrir la tienda era algo que siempre me ha gustado hacer, a pesar de que el hecho de trabajar ahí
para otros podría parecer que las arruinan, para mí es liberador ya que me mantiene ocupada
estoy casi segura de que si no tuviera que ayudar a mi mamá moriría de aburrimiento excepto
talvez por Melisa y Spencer mis mejores amigos pero el hecho de que Spencer también trabaje
conmigo hace que Melisa se la pase aquí todo el tiempo intentando comerse los postres de mi
madre, ella tiene un talento para la repostería, sus pasteles son los mejores en todo Grafton un
pequeño pueblo Australiano que nadie conoce y que si me preguntaras donde esta la única
manera en que probablemente lo sabrías sería diciéndote que al sur de Sídney pero eso no
importa realmente ya que yo amo Grafton por el simple hecho de que ahí están toda mi familia y
amigos.

De repente escuche como la campana que avisa que alguien entraba por la puerta sonó, así que
salí al mostrador y antes de llegar lo escuche.
-Buenos días- dijo Spencer

-Llegas tardé- Claro omití el hecho de que yo también, debido a mi olvido de esta mañana y el
tráfico.

-20 minutos de retraso eres una exagerada.

-20 minutos en los que casi morí de aburrimiento y no creo que mi mamá vea 20 minutos como
poco-y vi como su expresión pasaba de tranquila a en alerta.

-Viniste con tu mamá- Preguntó de manera rápida-no se supone que ella llegaría hasta tarde hoy-
Hasta él se acordó y yo no.

-Te digo que casi muero y tu preguntas por mi madre, eres un mal amigo-

-Primero no creo que se pueda morir de aburrimiento y segundo tu madre es la que me paga y no
quiero que sepa que llegue tardé después de lo que paso- Ahhh el día que tuvo que llevar al perro
de su hermana menor al trabajo y este término destrozando dos pasteles para mí fue muy
divertido ver como corría intentando atrapara a la pequeña bola de pelos color dorado a pesar de
que me divertí mucho viéndolo correr, mi madre lo regaño severamente y le prohibió volver a
traer animales al trabajo, lo que a mi parecer ni siquiera fue un castigo ya que no es por lógica que
no puedes dejar a un perro rodeado de comida sin supervisión por más que este haya estado
amarrado pero aun así nadie quiere ver nunca enojada a mamá pareciera que se convierte en otra
y mucho menos que esta este dirigida a alguien que quiero como Spencer.

-No me has contestado viniste con tu mamá-insistió

-Para tu suerte no y como soy una buena amiga a diferencia de ti no le diré nada de que has
llegado tarde-

-Muchas gracias, te debo una.

-Uy no debiste decir eso- y vi como su cara cambio a preocupación otra vez- Tranquilo no te
preocupes no lo cobrare - vi cómo se relajaba y agregue- ahora .

-Solo te pido que no sea como la última vez tu abuela es agradable pero no me gusta siquiera
cortarle los pies a la mía- Empecé a reír recordando como de la misma manera él dijo que me
debía una sin querer y él sabe que cuando dice eso yo lo cobró y esa vez le di una tarea que me
había encomendado mi mamá de cortarle las uñas a la abuela.

-No te preocupes ya aprendió a cortárselas ella sola.

-Gracias a dios-resoplo

-Yo no diría eso- y lo mire de manera divertida.

-No se porque eres así no se supone que soy tu amigo-

-Si pero una deuda es una deuda y yo pensaba hacerte un favor pero al decir que me debes algo
yo simplemente tengo que cobrarlo, es tu culpa por decir que me debes una.

-Lo se pero solo se me sale la expresión- rezongo

-Pues que no se te salga y mejor pongámonos a trabajar.

La mañana paso lenta sin muchos clientes y antes de que me diera cuenta mi abuela ya había
llegado.

-Hola Leticia.

-Buenos días, cariño estas lista para irnos.

-Claro, vámonos-Tome las llaves y me encamine hacia afuera con mi abuela.

-No vamos a ir al centro comercial-dijo Leticia al llegar donde había estacionado el auto.

-Ahh no- pregunte- mama dijo que ahí era donde te tenía que llevar.

-Pues no tenemos que hablar de cosas muy serias, llévame a mi casa, ahí lo discutiremos.
Leticia de vez en cuando hacia peticiones o cosas extrañas pero pocas veces la había visto hablar
en ese tono tan serio, la ultima vez que me dijo al gua si fue a los 11 cuando hable con ella y mamá
acerca de nuestra ascendencia de sirenas, pero no podía tratarse de algo sobre eso, o sí, no
importa de todos modos al llegar me dirá de que se trata talvez es alguna de sus ridiculeces de
siempre como de que necesita que la ayude a redecorar su cuarto, si probablemente se algo así.
Estaba ahí sentada en mi habitación, no era muy grande a comparación de las de mis otras 4
hermanas pero ahí había todo lo que yo quería y necesitaba, una cama, un armario, un baño y un
pequeño escritorio que estaba lleno de dibujos no eran los más hermosos pero me encantaba
pasar mi tiempo ahí dibujando paisajes nunca se me dieron bien dibujar personas y nunca me
gusto sentía que nada podía hacer justicia a la expresión de una persona al estar sorprendida o
asustada nunca me creí capaz de poder retratar con tanta fidelidad las líneas de expresión de una
persona y por eso tenía ese otro pasatiempo la fotografía hay encima de mi cama había un corcho
con todas las fotografías que había tomado desde la foto de un pequeño caballito de mar hasta la
de una hermosa ballena blanca la única excepción de todas esas fotos era la de una gran foto
familiar en la que aparecíamos mi madre, mis cinco hermanas y yo, es la excepción debido a que
yo no la tome me encantaba esa foto a pesar de que cada vez que la veía me recordaba lo que me
hacía falta mi padre y mi hermano odiaba las reglas pero sabía que solo así habría paz.

Me sentía muy inquieta en lo único que podía pensar era en mañana, eran las 10 de la mañana del
domingo y solo quería salir para distraerme y dejar de pensar en que mañana será el primer día
del último año de preparatoria y de esa manera podre ir a la universidad en la tierra solo pensaba
un año más , uno más y haré lo que siempre soñé estar rodeada de ellos, humanos, aprender de
ellos y de esa manera estudiar artes plásticas, no es que no los haya visto o conocido a los
humanos antes recuerdo la primera vez que nos llevó mi madre a mí y a mis tres hermanas
mayores Hula, Tamila y Cynthia a observarlos estábamos en la costa nadando ocultas y nos
hablaba de las atrocidades que cometían en contra de la vida en el mar sobra la contaminación y
su crueldad pero mientras ella veían eso yo solo no podía dejar de contemplar la magnificencia de
ese edificio era blanco pero no eran como esas torres grises que intentaban llegar en vano al cielo
sino como una coraza o conchas de un blanco resplandeciente me quede fascinada y aún más
descubriendo posteriormente que era un recinto artístico llamado la ópera de Sídney y en ese
momento sucedió simplemente me enamore de cómo podían expresarse y crear cosas tan
hermosas quede fascinada y algo consternada al ver que ellas no podían ver lo mismo que yo
como no podían ver esos maravillosos monumentos esculturas y obras de arte que se encontraban
ahí pero mi mama seguía insistiendo en que no, nos dejáramos engañar por las luces brillantes y
las cosas resplandecientes que había allá en tierra firme y recuerdo decirle a mi madre

-Pero no todo puede ser malo son demasiado hermosos y parecidos a nosotros los humanos, no
pueden ser malos- y de un momento a otro vi como su cara paso por varias facetas en cuestión de
segundos primero una de enojo por interrumpirla claro esta luego una de frustración y al final una
de compasión la que me hacía enfadar porque me hacía sentir una idiota que todo lo que digiera
era una equivocación y me respondió

-Pobre hija tu no entiendes pero es la única manera en la que ellos pueden vivir consigo mismos tu
todavía no lo entiendes eres muy pequeña apenas tienes 12 años pero todo ese esplendor que
dices ver son la mascaras que se ponen para poder soportar el horror y la oscuridad de sus almas –
A pesar de lo que me dijo yo no podía entender pero al parecer ellas mis hermanas si lo entendían
porque asentían la cabeza a cada palabra que mi madre y yo solo pensaba que sus palabras eran
incongruentes porque anteriormente nos había enseñado

pero en nuestra pequeña isla que solo unos cuantos conocían me sentía privada del mundo y no es
que no lo entendiera sabía que era por nuestra propia seguridad sabía que no podía de

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