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BLOOM, H. (2000). Cómo leer y por qué. Barcelona: Editorial Norma, pp.
21-33.
Presentado por:
Isabel Báez Zayas
Licenciatura en Artes visuales, Séptimo semestre, año 2019
CITA DESTACADA
“Leer bien es uno de los mayores placeres que puede proporcionar la soledad, porque, al menos en mi
experiencia, es el placer más curativo” (Bloom Harold, 2000, p. 21).
SUMARIO
Harold Bloom considera a la lectura como una labor individual y solitaria que incrementa la realización
del individuo a nivel personal. El arte de la lectura es algo que no posee ética ni se puede enseñar, es un
placer egoísta donde el individuo es capaz de encontrar refugio y éxtasis si se entrega de la manera
adecuada.
Para leer bien existen algunos principios que deben tenerse en cuenta, ya que cada uno posicionará al
individuo a la proximidad de su propio autorreconocimiento, para leer bien se debe estar libre de
condicionamientos. Para acercarse a la verdad, el autor de este escrito propone prestar atención a aquello
que tengamos próximo a nosotros y podamos utilizar a modo de reflexión, ya que la finalidad consiste
en que el lector se encuentre para sí y tenga la capacidad crítica y reflexiva necesaria para cuestionar su
propia realidad.
PRESUPUESTOS PRINCIPALES
2. El modo actual en que el individuo encara a la lectura corresponde a la manera en que esta se
presenta en las universidades, donde no se enseña el gozo, el placer y el propio encuentro con
uno mismo.
3. No existe una ética de la lectura, el modo en que cada individuo se entregue a ella y el valor
que para cada quien signifique corresponderá a la idiosincracia de cada uno.
4. Para leer bien hay que ser inventor. La escritura tiene la capacidad de critica y la misma
corresponde al uso de la imaginación y la invención que se haga del bagaje intelectual que se
adquiera.
JUICIO VALORATIVO
Cabe destacar que en Cómo leer y por qué se observa una intencionalidad didáctica personal del libro
con el autor, donde se pretende concientizar al individuo de la importancia en el modo en que este se
relaciona con la literatura, proporcionando así ciertas modalidades a tener en cuenta para la buena
ejecución de la lectura. Considero de gran importancia el propio reconocimiento del individuo en la
obra, teniendo en cuenta que en algún momento no solo somos sujetos, también objetos y por ello es
fundamental que el individuo no solo observe, sino que también tenga la capacidad crítica necesaria
para observarse a sí mismo fuera de los parámetros de la subjetividad que nos marca como humanos.
PREGUNTA
¿Es posible pretender leer bien sin conocernos a nosotros mismos? ¿Podemos encontrarnos en la otredad
cuando ni siquiera somos capaces de encontrarnos a nosotros mismos?