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Jonhatan Alain García Cruz

11/03/2019
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Enfoque del Marco Lógico


El Enfoque del Marco Lógico (EML) es una herramienta de gestión que facilita la planificación, ejecución y evaluación
de proyectos. Surge en los sesenta en EEUU para los sectores de la ingeniería y gestión de negocios. A partir de 1993,
la Dirección General VIII de la Comisión Europea elaboró un Manual titulado: Gestión del ciclo de un Proyecto. Enfoque
Integrado y Marco Lógico, lo que contribuyó a expandir el EML en diferentes agencias públicas europeas. El EML surgió
como respuesta a la falta de estructuración en la planificación, gestión y evaluación de proyectos. La estructura no era el
único problema, también la identificación y la definición de objetivos no estaban bien aterrizados.

El EML hacía posible la sistematización de los proyectos proporcionando una herramienta para que los elaboradores
pudieran diseñar con más facilidad objetivos claros y realistas. A lo largo del tiempo ha sufrido diversas transformaciones
y se ha ido adaptando a las diferentes realidades y contextos. En décadas posteriores, se amplió su uso para convertirse
en una herramienta integral contribuyendo a mejorar el diseño, la implementación y la gestión.

Hay diferentes significados del EML, pero todos llegan a un mismo punto el cual es una herramienta que permite mejorar
la calidad de los procesos de gestión, planificación y evaluación de proyectos. Es un método que en la actualidad
constituye un conjunto de herramientas coordinadas que se utilizan para gestionar proyectos y todos los interesados en
participar en los mismos deben conocer sus principales características.

Características del EML

Algunas características del EML son: fomentar la participación a través de un riguroso proceso de análisis en todos sus
pasos, orientada principalmente a la toma de decisiones en equipo. También permite un análisis de interrelaciones entre
problemas, metas, objetivos, resultados, actividades, que se expresan en una matriz que se conoce como Matriz del Marco
Lógico. El método constituye un conjunto de técnicas coordinadas que se utilizan para gestionar los proyectos y que
todos los interesados deben conocer en sus líneas generales.

Etapas del EML

El EML se compone de dos etapas el cual son: la identificación del proyecto y la etapa de diseño y planificación del
mismo. Los pasos de la primera etapa son: análisis de participación, análisis de problemas, análisis de objetivos y los
análisis de alternativas o estrategias. En la etapa de planificación se encuentra la Matriz del Marco Lógico, esta ayuda a
identificar los posibles defectos y mejoras a tener en cuenta en la planificación.

Etapa de Identificación del proyecto

Este momento inicial es en el que se delimita el área de actuación, se precisa conocer los beneficiarios del proyecto.
Como ya se ha mencionado esta consta de cuatro pasos. El primer paso es, análisis de participación, en este paso se
identifican y analizan las posiciones que puedan adoptar ante el proyecto los distintos grupos de actores del contexto en
que se promueve el proyecto. Algunos puntos que conviene tomar en cuenta son: Categorizar grupos de interés,
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individuos, organizaciones, etc. Discutir qué intereses y puntos de vista hay que priorizar cuando se analizan los
problemas, establecer prioridades: decidir qué intereses y puntos de vista hay que priorizar para iniciar el análisis de
problemas. Finalizando este paso se debe elaborar un cuadro en que aparezcan identificados todos los agentes
involucrados entre los que se seleccionará el grupo de beneficiarios del proyecto.

El segundo paso es el de análisis de problemas, en este paso se identificarán los principales problemas y se visualizarán
las principales relaciones causales que existen entre éstos. Los pasos a seguir son: identificar los problemas existentes,
los ficticios o imaginados, elegir sólo un problema, el que se considere central, identificar las causas substanciales y
directas del problema principal, identificar los efectos sustanciales y directos de dicho problema, construir un árbol de
problemas, revisar el árbol de problemas y averiguar si es válido y completo. La clave es preguntarse ¿Por qué ocurre el
problema?

El tercer paso abarca el análisis de los objetivos, este implica la transformación del árbol de problemas en árbol de
objetivos, los problemas se transforman en afirmaciones positivas. En el árbol de objetivos se describen las soluciones
de los problemas detectados en el paso anterior y se construye un diagrama que viene a ser una copia en positivo del
esquema del problema. La relación causa-efecto expuesta en el árbol de problemas se convierte en una relación de
medios-fines.

El cuarto y último paso de esta primera etapa nos lleva a un análisis de alternativas, tiene como finalidad identificar
posibles alternativas, valorar las posibilidades de ser llevadas a la práctica y acordar una estrategia de proyecto. Para
llevarlo a cabo se identifican en el árbol de objetivos los medios-fines como posibles alternativas, se seleccionarán las
más idóneas, se eliminan los objetivos no deseables o imposibles de conseguir. Una vez seleccionadas las alternativas se
hacer una valoración de las mismas y se elige la más idónea. Después se tendrán que considerar los siguientes criterios
para su valoración: coste total; beneficios para los grupos prioritarios; probabilidad de lograr los objetivos, riesgos
sociales, etc.

Etapa de diseño y planificación

Esta segunda etapa presenta una herramienta fundamental la cual se conoce como Matriz del Marco Lógico, ésta matriz
articula toda la propuesta del diseño del proyecto que es en realidad un resumen del proyecto. La matriz está basada en
dos principios básicos. El primero establece las relaciones lógicas, verticales, de causa-efecto y el segundo expresa la
lógica horizontal, se refiera a la correspondencia existente entre los cuatro ítems señalados en la matriz. El primer ítem
de la lógica vertical(columnas) es llamado resumen narrativo trata de identificar lo que pretende hacer el proyecto en su
fase de ejecución, define el objetivo general, el específico, los resultados y las actividades. El segundo ítem denominado
Indicadores objetivamente verificables precisa el éxito esperado a través de la intervención mediante indicadores
verificables. El tercero que es el de los medios de verificación recoge el procedimiento a poner en práctica para
comprobar el cumplimiento de los indicadores y el cuarto que son las hipótesis, recoge supuestos del entorno que guardan
relación con el proyecto.
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Ahora describiré los ítems de la lógica horizontal(filas). El primero es denominado objetivo general, se refiere el fin al
que el proyecto quiere contribuir. El objetivo específico hace referencia a aquél propósito que la intervención desea
alcanzar. Los resultados hacen referencia a los productos y evidencias que el proyecto debe conseguir al término del
mismo. Las actividades son tareas o acciones emprendidas para alcanzar los resultados. Todo esto es lo que conlleva el
Enfoque del Marco Lógico.

Referencias

Pérez Serrano, G. (2016). Diseño de proyectos sociales: Aplicaciones prácticas para su planificación, gestión y
evaluación. Madrid, España: Narcea.

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