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Los Camelidos Sudamericanos PDF
Los Camelidos Sudamericanos PDF
Introducción:
HABITAT
Producción.
Guanaco
El Guanaco es el camélido más grande de los camélidos silvestres;
vive en un amplio rango de ambientes, desde el desierto caluroso hasta las
zonas frías y húmedas y desde el nivel del mar hasta los 4.000 mts. de alti-
tud.
Tiene un delgado y lanudo pelaje relativamente corto, de color café claro
con tonos negros en la cabeza. El área de alrededor de los labios es blan-
cuzca, como así también las orejas, la parte inferior del cuerpo y la parte
interna de las piernas.
Se han descrito cuatro subespecies geofráficas:
Vicuña
Es el mayor de los camélidos domésticos sudamericanos, asemejándose en casi todos los aspectos
morfológicos al guanaco cacsilensis.
Es el animal más dócil de todos los camélidos, también se caracteriza por ser rústica, mansa, ver-
sátil, tímida y por reconocer fácilmente al dueño; su uso es preferentemente como animal de carga
y tiene excelentes perpesctivas como animal carnicero por su alto rendimiento y peso.
Su distribución geográfica se localiza desde la zona de Pasto en Colombia hasta el centro de Chile
y norte de Argentina.
1. Raza de pelambre corto o poco vellón llamada __"Ccara", "Q'ara" o "Pelada": caracteri-
zada por el __poco desarrollo de fibra en el cuerpo, además de __ausencia de fibra en la cara, cue-
llo y piernas.
2. Raza Lanuda también llamada "Ch'aku": es la menos __común de las dos Variedades, con
vellón algo __semejante al de la alpaca, con fibras largas y finura __media.
El color de su fibra es marrón (claro y oscuro) y mezclas, correspondiendo éstos a los llamados
colores naturales.
El vellón presenta hasta un 20% de cerdas largas y protuberantes fáciles de descerdar y el resto
son fibras cortas y finas de 20 a 26 micras.
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Se ha fijado como límite tentativo entre las dos subespecies de vicuñas el paralelo 18º S. Aunque
no se dispone de información acabada sobre distribución y abundancias a nivel subespecífico, se
considera que todas las vicuñas del Perú, las del altiplano norte, centro y parte del altiplano sur de
Bolivia, y las de la región de Tarapacá en Chile pertenecen a la subespecie norteña. Por otro lado,
todas las vicuñas de Argentina y las de las regiones de Antofagasta y Atacama en Chile son de la
subespecie austral.
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Es considerablemente más pequeña que la Llama, raramente es utilizada como animal de carga,
siendo más bien criada para producción de fibra y carne, el uso de su fibra es el principal ingreso
de la cría de alpaca y es un producto bien valorizado, no se utiliza como animal de carga.
Su actual distribución geográfica se extiende desde Ecuador (reciente introducción) hasta el Lago
Poopo en Bolivia, con un menor número de animales en el norte de Chile y Argentina.
1. La Huacaya: que se caracteriza por tener un vellón __parecido al del ovino Corredale, com-
puesto por fibras __finas de unas 24 micras perpendiculares al cuerpo de __buena longitud y pre-
sencia de ondulaciones;
2. La Suri: que se caracteriza por tener el vellón como el __del ovino de Lincoln con fibras mas
finas que la __huacaya, agrupadas en mechas espiriladas o rizadas, __que crecen paralelas al cuer-
po.
Se alimenta, al igual que la vicuña, de plantas suculentas, pero a diferencia de ésta es mas afecto
hacia las plantas herbáceas que a las gramíneas, sólo ramonean cuando hay extrema necesidad.
El color de la fibra es variado, aunque más uniforme que el de la Llama, vá del blanco al negro,
presentando tonalidades del marrón claro, oscuro, as¡ como el gris plata, todos ellos como colores
naturales. La fibra de la alpaca presenta poca calidad afieltrante con un diámetro promedio de 22 a
24 micras, cuyo color blanco es la mejor cotizada en el mercado.
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La vicuña (Vicugna vicugna) es el camélido silvestre más pequeño que habita las
zonas altoandinas y puneña de la Argentina, Bolivia, Chile y Perú, y cuyo pelaje
está compuesto por la fibra de origen animal más fina del mundo: 12 micrones de
diámetro en promedio. La coloración de las vicuñas es variable: existe una subes-
pecie (Vicugna vicugna mensalis) que habita principalmente el Perú, en la cual el
pelaje canela oscuro – clasificado en el comercio internacional de fibra como co-
lor vicuña– se distribuye en el lomo y los flancos del animal, mientras que la vi-
cuña que habita en la Argentina pertenece a la subespecie Vicugna vicugna y es
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mucho más clara, por lo que su fibra tiene menor valor comercial. Son animales
territoriales, y su organización social se basa en grupos ‘ familiares’ y grupos
de animales ‘ solteros’ , cuya distribución es muy variable (véase ‘ Paisaje con
vicuña’ , Ciencia
Hoy, 4; 46-55,
1989).
La vicuña, endé-
mica de la región
andina, formó
parte de la cultura
y economía local.
El ‘ manejo’
anterior a la con-
quista hispánica Vicuñas con cría. Jujuy
estaba basado en
la técnica del chaku, o sea esquila y suelta posterior de los animales. Desgracia-
damente, en este siglo la población de vicuñas disminuyó drásticamente debido a
la caza indiscriminada. A partir de la década del 60 se implementó una legislación
estricta y la creación de áreas para su protección. Estas medidas permitieron la
recuperación de las poblaciones; tuvieron éxito, entre otras razones, porque fue-
ron aceptadas y acatadas por las comunidades rurales locales.
Un dato im-
portante fue
que el por-
centaje de pa-
rición dentro
de los grupos
familiares era
muy elevado Grupo familiar de vicuñas de un tolar mixto.
– 68%– por
lo que se pudo inferir que estas poblaciones de vicuñas no habían llegado a la
capacidad de carga ambiental y que estaban aumentando, ya que no habían lle-
gado a su máxima densidad. Se calculó una densidad de 0,06 vicuñas por hectá-
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En Cusi-cusi, Vilama, se censaron 616 animales que formaban grupos más nume-
rosos que en la zona de Cieneguillas. Su comportamiento también era diferente.
En algunos casos las vicuñas se mimetizaban con el entorno altoandino y mostra-
ban mayor frecuencia de comportamiento de alerta; también reaccionaban rápi-
damente, con distancias de fuga – o sea la distancia mínima a la cual se puede
acercar un observador antes de que el animal emprenda la huida– mucho mayo-
res, hábito común en aquellos animales sometidos a disturbios y/o furtivismo
(véase ‘ La brava reserva de laguna Brava’ , Ciencia Hoy, 28:25-32, 1995).
La primera conclusión a la que se llegó después de las dos reuniones con los po-
bladores es que se habían distorsionado algunos de los inconvenientes provoca-
dos por las vicuñas, especialmente en lo concerniente al contagio de sarna, ya
que en ninguno de los 1069 animales registrados se observaron signos de esta
enfermedad.
De todas maneras, es cierto que las vicuñas compiten con las llamas en el pasto-
reo, por lo que es necesario generar estrategias que permitan a las vicuñas seguir
recuperando sus poblaciones al mismo tiempo que deben contemplarse las nece-
sidades de los habitantes. Es importante destacar que creemos haber logrado que
los pobladores entendieran la importancia de tener en cuenta los conocimientos
científicos existentes como base para encarar un proyecto de manejo de fauna sil-
vestre.
Posibles soluciones
En Cie-
neguillas – a
3500m sobre
el nivel del
mar– , la
existencia de
campos
alambrados
haría posible
la esquila de
los animales,
aunque sería
necesario
realizar pri-
mero un plan
de trabajo,
un estudio
detallado de
la población
Formación volcánica llegando a Cusi-cusi
a manejar,
un análisis de las condiciones topográficas y de recursos que permitan eva-
luar una ruta de fuga – los lugares por donde los animales escaparían frus-
trando la posibilidad de capturarlos– , y un pequeño ensayo de esquila con
seguimiento posterior para determinar sus consecuencias; no hay que olvi-
dar, por supuesto, los trámites administrativos pertinentes. En Vilama, a
4600m sobre el nivel del mar, las condiciones ambientales más severas
agregan un factor de riesgo importante a la mortalidad postesquila. Por otro
lado, los animales censados estaban muy dispersos, lo cual implica un es-
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2. Criaderos privados
3. Subsidio al productor
En el caso que
estamos presen-
tando el pastoreo
de vicuñas limita
la pastura para
las llamas, lo cual
ocasiona un cier-
to lucro cesante.
Los pobladores
Grupo de solteros de vicuñas en Vilama locales determi-
23
4. Eco-
turis-
mo
5. E
l
atra
ctivo
tu-
rísti-
co
de
la
Nicolás y Susana Maidana, poseedores de campos con vicuñas en Ciene-
fau-
guillas, miembros de la cooperativa "Los pioneros", con la autora y el
na Ing. Lamas.
sil-
vestre y de los paisajes prístinos aumenta en forma sostenida desde hace
años, así como los destinos exóticos y aislados. El viaje desde Cieneguillas
hasta Cusi-cusi es de una belleza escénica tal que muchos ecoturistas de-
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de la Cuenca del Río Grande de San Juan, así como la colaboración de Yanina Arzamendia en el
trabajo de campo. Una mención especial merece el ingeniero Hugo Lamas, capaz de tender
‘ puentes’ entre la ciencia y la gente, y que sabe transformar el trabajo de campo en una tarea
siempre agradable
.
Bibiana Vilá: Doctora en Ciencias Biológicas de la Facultad
de Ciencias Exactas y Naturales (UBA), y realizó estudios
posdoctorales en la Wildlife Conservation Research Unit,
Zoology, Oxford. Profesora Asociada en la Universidad Na-
cional de Luján e investigadora del CONICET.
1. Problemática: Perú posee el 85% de la población mundial de vicuñas, con 140 mil cabezas.
Este camélido sudamericano vive hasta 20 años y está adaptado al clima de la puna, entre los
3,500 y 5,000 m. La vicuña posee una fibra tan fina y suave como la seda, cuyo valor llega a los $
385 por kg, equivalentes a 2,000 kg de lana de ovino andino. En nuestra sierra hay casi 18 millo-
nes de ha de pastos naturales aptos para el forraje, donde se podrían manejar hasta 1 millón de
vicuñas para la producción de su cotizada fibra, así como su cuero y piel.
¡ Criar vicuñas es una magnífica opción para el desarrollo de los Andes !
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3. Manejo: Existe el peligro que salga subrepticiamente material reproductivo de vicuña y tal
parece que algún país vecino ya lo ha obtenido, a través de vicuñas vivas y también de pacovicu-
ñas. El pacovicuña es el cruce entre alpacas y vicuñas, es un híbrido que posee 50% de material
genético de las dos especies antes mencionadas. Al cruzar pacovicuñas entre sí, en la primera ge-
neración (F1) el 25% salen vicuñas puras, el 25% alpacas y el 50% pacovicuñas... al volver a cru-
zar los híbridos, se repite la proporción. No es conveniente exportar pacovicuñas ya que otros paí-
ses podrían obtener material genético de vicuña y convertirse en competidores, haciéndonos per-
der el potencial económico que representa la fibra de vicuña para la economía altoandina. Los
decisores políticos deben tomar acciones y no permitir de ninguna manera la exportación de
material genético.
7. Áreas Prioritarias: Huancavelica, Ayacucho, Apurímac, Arequipa, Puno, Cusco, Junín y Li-
ma.
8. Garantías: El marco legal vigente que garantiza contratos entre el estado y las comunidades
altoandinas dueñas de las tierras aptas.
9. Beneficios: Económico: US$ 14 millones anuales por producción de fibra, carne, piel y cuero.
Ecológico: Recuperación de tierras degradadas y control del sobrepastoreo. Social: 5 mil empleos.
10. Oportunidades: Acuerdo de Preferencias Arancelarias Andinas - ATPA, que permite el in-
greso de fibras finas de camélidos a los mercados de USA, libres de aranceles.
11. Requisitos: Pertenecer a una comunidad organizada o poseer tierras arriba de los 3,800 msnm.
Antonio Brack
Alpaca Suri
1. Problemática: Perú posee la mayor población mundial de alpacas, con cerca de 3 millones de
ejemplares, y dos variedades domesticadas: Suri y Huacaya. La raza huacaya tiene fibra corta y
rizada, y son la mayoría. La raza suri vive casi exclusivamente en Puno y su población está decli-
nando, por lo que corremos el riesgo de perder su fina y sedosa fibra de hasta 40 cm de largo. Hoy
en día, debido a la falta de manejo, predominan las alpacas blancas y muchas alpacas manchadas.
La pérdida de la finura de la fibra de alpaca debe resolverse con un manejo adecuado, en vista que
el precio está en estrecha relación con su calidad.
2. Manejo: Resulta urgente seleccionar alpacas en diferentes hatos, de acuerdo a sus colores, evi-
tando el cruce con las manchadas o "moromoros", con el fin de mejorar la calidad de su fibra. Otra
opción interesante para el manejo de la alpaca, es la cruza entre hembras de alpaca de fibra grue-
sa con machos de vicuña, con el fin de obtener pacovicuñas de fibra muy fina. Pero para ello hay
que tener en cuenta que estos híbridos, a pesar de ser fértiles, no son permanentes, y si se cruzan
entre ellos retornan a alpaca y vicuña.
6. Áreas Prioritarias: Huancavelica, Ayacucho, Apurímac, Arequipa, Puno, Cusco, Junín, Lima
y otros departamentos.
7. Garantías: El marco legal vigente que garantiza contratos entre el estado y las comunidades
altoandinas dueñas de las tierras aptas.
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10. Requisitos: Pertenecer a una comunidad organizada o poseer tierras arriba de los 3,800 msnm.
2. Población: La población peruana de llamas llega a cerca de 900,000 cabezas y a nivel mundial
viven aprox 2.5 millones. En forma tradicional y natural sólo existen llamas en Perú, Bolivia, Chi-
le y Argentina. En la época prehispánica fue introducida a Ecuador y Colombia, y a partir del siglo
XIX a otros países. Actualmente, hay poblaciones de llama en USA, Canadá, Nueva Zelandia,
Australia, Francia, Italia y otros países que han sabido valorarla.
3. Historia: La llama fue criada intensamente durante la época prehispánica como único animal de
carga, ya que tiene la capacidad de transportar hasta 75 kg. Existían enormes piaras de llamas car-
gueras para trasladar los productos y hasta hubo una raza especial, mucho más grande y fuerte,
para esos fines... hoy, esa raza es muy rara. La carne de llama era consumida fresca y secada al
sol, con fines de almacenamiento, en forma de charqui. Cuentan los cronistas que acompañaron a
los conquistadores, que en los almacenes o colcas existían enormes reservas de charqui. La fibra
de llama era utilizada para hacer telas, ponchos, tapices y otras indumentarias. Del cuero de llama
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se hacían sogas y lazos de gran resistencia. Sin embargo, su uso como animal de carga ha perdido
vigencia con la introducción de los equinos y la amplia red de carreteras en la Sierra. Hoy en día,
países de Europa y USA consideran a la llama como un animal muy ecológico, muy eficiente en
cuanto a su consumo de agua y alimentos, resistente al clima y a las enfermedades, y lo han adop-
tado como medio de transporte dentro de sus áreas protegidas.
4. Manejo: Se le puede cruzar con la alpaca y al híbrido se le conoce como huarizo o llapaca, que
tiene la ventaja de producir fibras más finas que la llama y en mayor cantidad que la alpaca. Al
cruce con la vicuña se le conoce como llamovicuña. De otro lado, Perú posee 18 millones de hec-
táreas de pastos naturales altoandinos, que pueden servir como forraje para la llama y el resto de
camélidos, quienes digieren los pastos con un 22 % más de eficiencia que los ovinos, eso significa
que hay una mejor oportunidad de negocio criando camélidos.
8. Garantías: El marco legal vigente que garantiza contratos entre el estado y las comunidades
altoandinas dueñas de las tierras aptas.
9. Beneficios: Fibra: para la confección de telas, que reciben el nombre de bayeta, y que se usan
para hacer costales, alforjas y otros utensilios de gran durabilidad, así como arneses para los caba-
llos. También podría dar origen a una agroindustria moderna para la confección de alfombras y
otros artículos. Cuero: tiene un excelente potencial para talabartería fina, y este aspecto debe ser
estudiado y desarrollado. Carne: por vivir de pasturas naturales, podría tener un excelente poten-
cial como carne "orgánica" de características especiales, por su bajo contenido de colesterol.
10. Oportunidades: Acuerdo de Preferencias Arancelarias Andinas - ATPA, que permite el in-
greso de fibras finas de camélidos a los mercados de USA, libres de aranceles.
11. Requisitos: Pertenecer a una comunidad organizada o poseer tierras arriba de los 3,800 msnm.
Antonio Brack
1. Problemática: El guanaco es una especie silvestre y se le encuentra desde el norte del Perú (dpto. de La
Libertad) hasta el Sur de Chile y Argentina, con una pequeña población en el Chaco de Bolivia. La población
total a nivel mundial llega a más de 500,000 cabezas, con la mayor de ellas en Argentina.
2. Población: En el Perú, el guanaco es una ESPECIE EN PELIGRO DE EXTINCIÓN, con una pobla-
ción que no supera los 5,000 ejemplares, por lo que urge crear estrategias para su protección y el aumento de su
población. Posteriormente, podrá pensarse en su aprovechamiento.
3. Historia y Hábitat: En la época prehispánica la población de guanacos era mucho mayor, y aún hoy en
día se encuentran ciudades que le hacen honor a su nombre, como Huánuco. El guanaco vive desde el nivel del
mar hasta los 3,800 m, es un típico migrante que visita las vertientes occidentales andinas, durante el verano,
cuando éstas, gracias a las lluvias, abundan en pastos; y también llega a las lomas costeras, entre junio y setiem-
bre, cuando estas formaciones vegetales reverdecen debido a la acción de las neblinas. En la actualidad, las rutas
de migración del guanaco se han cortado por las carreteras y los poblados, y ahora sólo acude a contados luga-
res, como las lomas de Atiquipa y las de Cháparra.
4. Propuesta: Impulsar la protección del guanaco a través de reservas privadas o áreas protegidas.
5. Sectores: Agricultura, Sector Privado y Comunidades.
6. Áreas Prioritarias: En toda la sierra peruana y sería deseable reintroducirlo en la costa.
7. Garantías: El marco legal vigente que garantiza contratos entre el estado y las comunidades altoandinas
dueñas de las tierras aptas.
8. Potencial: Fibra: tiene entre 18 a 24 micrones de diámetro, pero con abundantes cerdas, lo que implica un
proceso de descerdado. Con la fibra fina es posible hacer telas finas. Cuero: ofrece un interesante potencial para
el curtido y la elaboración de artículos de cuero, y tiene una alta resistencia a la tracción. Carne: es de tipo sil-
vestre, con bajo contenido de grasas, lo que favorece la salud humana. Además, por ser silvestre, no recibe va-
cunas, medicamentos u otros insumos veterinarios, y por ello su carne tiene excelentes posibilidades como "car-
ne natural u orgánica", de buena aceptación en los mercados mundiales. Material Genético: es de interés para
cruces con llama y obtener ciertas características especiales para la finura de su fibra.
9. Oportunidades: Acuerdo de Preferencias Arancelarias Andinas - ATPA, que permite el ingreso de fibras
finas de camélidos a los mercados de USA, libres de aranceles.
10. Requisitos: Pertenecer a una comunidad organizada o poseer tierras arriba de los 3,800 msnm.
Técnicas de Inoculación
de Microchip en:
Guanacos (Lama guanicoe)
y Vicuñas (Vicugna vicugna) Por Méd. Vet. Alhelí Gonzales Chaves
y Lic. Marcelo Silva Croome (*)
agchaves@medioambiente.gov.ar
Resumen:
Introducción
Materiales y métodos
Luego de varios meses de manejo en corrales de cría, los ejemplares son trasladados
a potreros de grandes dimensiones (promedio 5.000 has). Esto no sucede en vicuñas,
donde se utilizan potreros más chicos, tratando de mantener la estructura familiar. El
período inicial de manejo permite un grado superlativo de amansamiento de los anima-
les, con el posterior beneficio que esto implica cuando al procederse al traslado a los po-
treros definitivos, se logra el arreo de los mismos
con gran facilidad, minimizando los riesgos antes
descriptos.
Todos los guanacos y vicuñas, sin importar la edad, fueron inoculados en la misma
zona. El lado escogido para realizar el implante, se debió exclusivamente a la practicidad
para el operador, pero respetando en lo sucesivo dicha ubicación, con lo cual se facilita la
lectura posterior. Luego de realizado el implante se procedió a topicar nuevamente con
antiséptico y a utilizar el lector para comprobar el éxito de la operación, liberándose des-
pués a los animales. La inoculación se registró en planillas donde constan lugar de inocu-
lación, Nº de microchip, edad y sexo del animal.
Resultados y Discusión:
En la provincia de Río Negro, fueron inoculados un total de 570 animales: 121 adultos
y 449 juveniles. En la provincia de Chubut, se inocularon un total de 128 animales: 23
adultos y 105 juveniles; y en la provincia de Santa Cruz, se inocularon un total de 46
animales, todos ellos juveniles. Cuatro meses después en Río Negro, se verificaron el 50
% de los establecimientos. En ninguno se registraron muertes ni alteraciones (bicheras,
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Cabe destacar la facilidad de lectura así como la conveniencia de la zona elegida para
la inoculación dada la baja incidencia de golpes o fracturas que pudieran afectar la inte-
gridad del microchip e interferir en su futura lectura. @
Referencias:
• ID SYSTEMS: The magazine of automated data collection- One leap ahead of ex-
tinction-An RF/ID system tracks an endangered species at the site of Sidney's new
Olympic Stadium by Mark Nichoson-June 1996 -Vol. 16, N° 6
• OLD ENGLISH SHEEPDOG Club Argentino - Comunicado a sus Socios - Arq. Ga-
briel Molinari
La Vicuña
La vicuña es un camélido que puede medir de 80 a 90 cm., con un largo de 1.60 a 1.75 metros
siendo de color marrón en la parte superior del lomo y los laterales; su pecho es blanco, su fibra o
lana extraída esta considerada la más fina del mundo. Este camélido esta
perfectamente adaptada a la puna, ecorregión de los Andes entre los 3.800 y 5.200 metros sobre el
nivel del mar, el Perú es el país que posee el mayor número de estos animales (142.000 según
censo del 2001), las vicuñas también habitan en Chile, Argentina y Bolivia.
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El kilo de su fibra se cotiza en 308 dólares en el mercado internacional por sus características de
abrigo y finura, la cual puede resistir bajas temperaturas. De cada ejemplar se obtiene entre 200 y
300 gramos de lana.
Su nombre científico es vicugna vicugna, pertenece a la clase de los mamíferos, orden artiodactyla
y familia camelidae, es exclusivamente herbívora, y su dieta esta compuesta por la hierbas que
pueden encontrar en pastizales y pajonales.
Las hembras tienen una sola cría, que nace tras 11 meses de gestación, entre diciembre y abril, en
especial en febrero, luego del nacimiento de la vicuña se desarrolla un periódo de lactancia que
dura cerca de 6 meses. En este lapso las hembras pastan junto a sus crías, mientras el macho vigi-
la.
La Puna también existe. Y tras un largo tiempo de soledad, viento y polvareda, su desarrollo
integral ha dejado de ser la quimera de unos pocos. El eje del crecimiento es el agro, junto a las
artesanías y el turismo. En la actividad pecuaria el mayor potencial está en el aprovechamiento de
la fibra de vicuñas. Se viene trabajando desde hace tiempo en varios frentes: mejoramiento en la
conducción de las tropas, sanidad y en la propia esquila. De esta manera, y a través de la asistencia
técnica permanente de los criadores se ha ido logrando mejorar, y mucho, la calidad de la fibra.
Tanto interés en la vicuña tiene sus motivos: el pelo de vicuña es uno de los más cotizados por su
calidad textil. Es fino, suave al tacto y sedoso, las tres razones de su alto valor comercial. En la
actualidad, el vellón se está pagando a 363 dólares el kilo, mientras que la fibra proveniente de
garras y barrigas cotiza a 100 dólares. Cada animal produce un total de 350 gramos de fibra (200
de lana vellón y 150 de barriga y garras) y es esquilado bianualmente.
En total, repartidos entre Jujuy, Salta, Catamarca, San Juan y La Rioja existe una población silves-
tre de casi 70.000 vicuñas, 1.850 ejemplares viven en semicautividad, y hay alrededor de 25 cria-
deros. En la Puna de Salta-Jujuy la mayoría de las vicuñas está en un sistema INTA-Cambio Ru-
ral, de trabajos cooperativos, con el criadero de INTA como proveedor de tecnología, de genética
y de animales. En general, la cría está en manos de minifundistas.
La Argentina no quiere quedarse atrás en este negocio. Más a partir de los indicios de reactiva-
ción que está teniendo en países que están naturalmente dotados para su cría y son competidores
de la Argentina (como Chile y Perú), y por el crecimiento que se observa en la demanda mundial
de lana fina. Si tomamos sólo el caso de Chile, allí está aumentando rápidamente el número de
animales en cría: 250 el año pasado y 1000 en éste. En el país trasandino hay fuertes capitales de-
trás de la cría, 4 criaderos tienen 1000 animales, concentrados en la Primera Región, al norte del
país.
Abran cancha
En 1964 el INTA de Abra Pampa se inició en la cría de la vicuña con 16 animales. Hoy ya son
1800 los ejemplares en producción. Con métodos de agarre, captura y esquila y un programa sani-
tario, estos camélidos sudamericanos de 35 kilos, producen 350 gramos de una fibra con una finu-
ra de 10 a 15 micrones -la lana más fina de oveja es de 19 micrones-, medulación de menos del
1%, rindes al lavado superiores al 85% y una formidable resistencia a la tracción -de 35 Newton
por kilotex-.
El sistema de producción organizado por el INTA está integrado por el Campo Experimental de
Altura de Abra Pampa y 23 criaderos de Jujuy y Salta, pertenecientes a pequeños productores de
origen coya. Cada minifundista que desee asociarse al sistema, por contrato, recibe de la firma
Pelama Chubut los materiales de alambrado y corrales y del INTA 36 animales. Los productores
devuelven a la firma el valor de los materiales en dos años, abonándolos con fibra, y reintegran al
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INTA 3 crías por año, durante 12 años, de forma de realimentar el sistema y permitir que otros
"crianceros" se integren a la producción.
Así, aseguran en el INTA, los productores, como mínimo, duplican su ingreso bruto. También se
logra conservar la especie, dado que hasta la implementación de este sistema de semicautividad,
las vicuñas eran cazadas para usar su fibra.
Ultimo momento
En tanto, en el marco de la XII Conferencia de las Partes CITES (Convención sobre el Comercio
Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres ) que finalizó ayer en Santiago
de Chile, donde participan más de 160 países, se aprobó por unanimidad la propuesta presentada
por la Argentina, sobre ¨Transferencia del Apéndice I al Apéndice II de la población de vicuña
(Vicugna vicugna) de la Provincia de Catamarca". La idea es permitir el comercio internacional de
fibra esquilada de vicuñas vivas, de telas y productos manufacturados derivados y de artesanías
bajo la marca Vicuña Argentina.
La propuesta argentina contempla tanto el uso sostenible de animales del medio silvestre en los
departamentos de Belén, Tinogasta, Antofagasta de la Sierra y Santa María, como la captura de
vicuñas para iniciar criaderos en semicautividad, con la tecnología existente ya desarrollada por
el INTA. La propuesta en CITES fue apoyada inicialmente por los países vicuñeros (Chile y Pe-
rú), luego por la Comunidad Económica Europea y después por el resto de las naciones. No hubo
objeciones.
Noviembre del 2002
Desarrollo socioeconómico de las comunidades rurales de los valles andinos del Departamen-
to de Molinos (Salta, Argentina), a través de la recuperación, conservación y uso sostenible
de los camélidos que habitan en ese ecosistema
Duración:
Tres (3) años (Septiembre 2002 - Agosto 2005)
Entidades Participantes:
Asociación de Artesanos y Productores de San Pedro Nolasco de los Molinos (ASAPRO-
SPN) - Departamento de Molinos, Provincia de Salta, Argentina; Consejo de Investigación,
Proyecto N º 945: "Molinos, en la conquista del desarrollo social sustentable" - Universidad
Nacional de Salta - Provincia de Salta, Argentina; Convenio de Cooperación y Asistencia
Científico-Técnica entre el Grupo Ecología y Manejo de Vertebrados Silvestres (IADIZA,
CONICET) y Universidad Nacional de Salta a través de Proyecto Nº 495; y Fundación Bio-
diversidad - Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Argentina.
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Antecedentes
Los camélidos sudamericanos
La cría de camélidos representa un caso ejemplar de relación armónica entre las comunidades ru-
rales y un recurso endémico de alto valor, generando beneficios que contribuyen a mejorar la si-
tuación socioeconómica de las comunidades rurales de la Puna, preservando sus tradiciones y co-
nocimientos, y contribuyendo a la conservación del ecosistema.
Entre las características más relevantes relativas al alto valor del manejo sustentable de camélidos
en su hábitat natural, podemos destacar que:
• Son especies que habitan un ecosistema de particular fragilidad;
• Es un recurso de alto valor desde el punto de vista económico y de mercado;
• La sabiduría instalada, base fundamental para el manejo de estas especies, se encuentra en
manos de una de las comunidades rurales de menores recursos económicos del país; y
• Existen posibilidades de manejo sustentable y aprovechamiento de fibra de las poblaciones
de camélidos silvestres, cumpliendo los requisitos establecidos por los organismos interna-
cionales.
En 1997, durante la décima reunión de la Conferencia de las Partes en la Convención sobre el
Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES PNUMA),
que se llevó a cabo en Harare, Zimbabwe, se adopta en forma unánime la transferencia al Apéndi-
ce II de la CITES de la población de vicuñas de la Provincia de Jujuy en Argentina, así como de
las poblaciones en semi-cautividad que se encontraban en diferentes provincias del área de distri-
bución de la especie, lo que incluía la experiencia salteña de Molinos. De esta manera, la Asocia-
ción Artesanos y Productores de San Pedro Nolasco de los Molinos contribuye directamente a la
recuperación, conservación y manejo de una especie vulnerable, y se beneficia con la fibra de vi-
cuña esquilada en vivo para producir una artesanía de alta calidad, acorde con el nivel artístico de
los artesanos que la conforman.
Hasta épocas recientes el mercado de fibras de camélidos se basó fundamentalmente en los costos
y cantidades de producción, sin importar la sustentabilidad del manejo de la especie, ni la situa-
ción socioeconómica de los productores y artesanos. Actualmente, el mercado se pregunta además
¿quién produce y cómo lo realiza? En el país, las respuestas a estas preguntas se dan con superfi-
cialidad, siendo algunos operadores políticos o comerciales utilizadores de camélidos y sus pro-
ductos los que responden con un discurso teórico de alternativa ecológica, de respeto al hábitat, al
bienestar humano y de preservación de la cultura de las comunidades rurales que manejan ese re-
curso. Pero en la práctica, poco o nada se hace por mejorar la situación de los camélidos, de las
comunidades andinas y de la biodiversidad.
Existen cuatro especies de camélidos sudamericanos: la llama (Lama glama) y la alpaca (Lama
pacos), ambas domésticas; y las silvestres guanaco (Lama guanicoe) y vicuña (Vicugna vicugna).
La población total de camélidos americanos se estima en unos 7,5 millones de cabezas, de las cua-
les 51 % se encuentra en el Perú, 37 % en Bolivia, 10 % en Argentina y 2 % en Chile.
Los camélidos son originarios de América del Sur (Argentina, Bolivia, Chile, Ecuador y Perú).
Aproximadamente unas 65.000 familias criollas e indígenas (aymarás, quechuas, chipayas y uruit-
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hus) dependen para sus ingresos y seguridad alimentaria, de la cría y pastoreo de camélidos tales
como las alpacas y las llamas. Esas comunidades rurales están política, social y económicamente
marginadas y, en consecuencia, carecen de capacidad para atraer inversiones. Una de las pocas
opciones que poseen para superar esa marginación es la de agruparse en asociaciones que las vin-
culen con otros eslabones de la cadena de elaboración, transformación y comercialización de sus
productos.
Contexto
Las condiciones de vida de esas comunidades rurales dedicadas a la cría de camélidos en el Alti-
plano y Valles Andinos, donde se concentran las actividades de cría de alpacas y llamas, se carac-
terizan por sus críticos niveles de pobreza y falta de suministro de servicios básicos.
El índice compuesto de Necesidades Básicas Insatisfechas (NBI), aplicado por la República Ar-
gentina, enfatiza cuatro elementos esenciales de la vida humana con los cuales se identifica como
pobre a aquella parte de la población: que reside en hogares que no satisfacen niveles mínimos
referidos a condiciones de habitabilidad de las viviendas, a las condiciones sanitarias y a la asis-
tencia escolar. En "Pobreza Rural - Diversidad de Situaciones Operacionales"- trabajo realizado
por Miguel Murmis de la Dirección de Desarrollo Agropecuario de la Secretaría de Agricultura,
Ganadería, Pesca y Alimentación 2001 (Argentina) - se discrimina este índice en Rural y Urbano
aunque debe tenerse en cuenta que la vida rural andina posee una serie de particularidades que no
se consideran dentro de los índices.
Para el Departamento de Molinos, Provincia de Salta - Argentina, esté índice no escapa al encon-
trado en el resto de la región Andina. Si tomamos en cuenta que la población total de Molinos es
de 5.025 habitantes, 3.624 de ellos se encuentran dentro de la población rural que posee Necesida-
des Básicas Insatisfechas, o sea el 71,40% de la población. En la clasificación por orden de pobre-
za del país, se ubican en 8º lugar sobre un total de 522 posiciones, en el nivel que agrupa a las po-
blaciones de condiciones más críticas de satisfacción de cada una de las necesidades contempladas
por este índice. La esperanza de vida es baja.
En la Puna, como no existe la alternativa de obtener un ingreso extra predial en la zona se debe
recurrir a la migración, o a la minería. En la región puneña se presentan serios problemas de mi-
gración de la población económicamente activa, especialmente los jóvenes mayores de 18 años.
La tasa de migración supera el 50 %. Se caracteriza por ser temporal y ocurre en función de las
características estacionales y económicas de determinados productos. La parcela queda entonces
en mano de la mujer, los hijos u otro familiar. A diferencia de lo anterior, en Molinos, el 80 % de
los que migran lo hacen de manera definitiva siendo sus destinos más comunes los sectores gas-
tronómicos y de la construcción de la ciudad de Buenos Aires.
Debido a esto, en el sector agropecuario alto-andino, es fundamental el papel de la mujer tanto en
las actividades hogareñas como en las actividades productivas. Además, resultan importantes las
tareas que ejecutan niños, quienes desde muy pequeños aprenden el oficio de pastores, y ancianos
quienes participan en el proceso a través de la transmisión de sus conocimientos ancestrales. La
mayor parte de la población lleva a cabo actividades pecuarias ante la imposibilidad de desarrollar
actividades agrícolas que generen recursos económicos significativos, y esto se debe a las extre-
mas condiciones climáticas que caracterizan la región.
Desde la época colonial, los únicos límites para la expansión de la cría de ganado foráneo o exóti-
co fueron la calidad de las tierras de pastoreo y los problemas asociados a la altitud. Hoy esa acti-
vidad ha producido una alta degradación del hábitat, en consecuencia de la biodiversidad. Debido
a esto, los rebaños de llamas son relegados a las tierras localizadas por encima de los límites de la
producción agrícola, las cuales son de valor marginal para la cría de ganado foráneo (bovino, ovi-
no y caprino).
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Guanacos, vicuñas y llamas han sobrevivido dentro del marco de organización socioeconómica
actual porque son elementos esenciales de la cultura andina. Desde épocas pre-hispánicas se con-
sideraba que los rebaños silvestres eran de propiedad divina, y los seres humanos podían aprove-
char sus beneficios dadas ciertas condiciones de manejo otorgadas por los dioses, mientras que los
rebaños de llamas eran de propiedad comunitaria y considerados una fuente básica de riqueza de
los Andes. Aún en la actualidad se practican ritos para asegurar el incremento y bienestar de los
rebaños.
Por lo mencionado en párrafos anteriores es preciso promover la recuperación de los sistemas tra-
dicionales de producción, basada en la cría de camélidos, para asegurar una mejor distribución de
los beneficios. Es necesario disminuir la pobreza rural descubriendo horizontalmente, con la parti-
cipación activa de los pobres, vías de desarrollo ocultas en el propio mundo, que constituyen una
fuente dinámica preñada de potencialidades productivas, que se deben posibilitar, respetar y guiar,
para que éstas cumplan su sentido esencial: la vida. La vida es como una sinfonía existencial, por-
que las partes (partitura, instrumentos y ejecutores), actúan en función del todo. Así, vivir es reali-
zarse con sentido y dar sentido, es armonizar el desarrollo sustentable, con el desarrollo humano
sustentable.
Esta armonización se logra estimulando la integración vertical y horizontal de los procesos agro-
industriales a través de la implementación de tecnologías apropiadas que atiendan a las peculiari-
dades de la diversidad biológica regional y de las formas heterogéneas de constitución de las uni-
dades productivas localizadas en la Puna y en los Valles Alto Andinos. Otras acciones a largo pla-
zo (relevamiento a través de censos, diseño y puesta a punto de un programa de manejo regional,
establecimiento de una estructura eficiente de ejecución y monitoreo del programa) servirán para
la incorporación de las poblaciones de camélidos silvestres en el sistema de aprovechamiento sus-
tentable propuesto aquí.
El desafío es encontrar el equilibrio entre la producción, la conservación del ambiente y la reduc-
ción la pobreza rural.
"En la actualidad se acepta en forma generalizada no sólo que el medio ambiente afecta a la po-
breza, sino también que la pobreza afecta al medio ambiente. La presión que la población ejerce
sobre unos recursos de tierra limitados (en ausencia de otro posible modo de desarrollo) podría dar
lugar a una explotación excesiva de los recursos existentes y, por tanto, a su degradación."
(FAO,1989)
Hábitat
El hábitat de los camélidos es escarpado y se caracteriza por poseer estratos alto andinos semi-
húmedos y semi-áridos, afectados por un clima de tundra fría, húmedo en las partes altas y seco en
las praderas más bajas.
La altura promedio de la región es de 4.000 m.s.n.m., en un rango de 3.000 a 5.000 m. El hábitat
presenta "bofedales" o "ciénegos", que son áreas de alta concentración de vegetación hidrófita
permanentemente anegadas y en las cuales la cría de camélidos presenta los más altos índices de
productividad, como así también lo que se denominan "pastizales de altura" lugares en que pastan
generalmente las llamas.
Clima: El altiplano presenta 4 sub-tipos climáticos que van desde las orillas del Lago Titicaca
(sub-tipo A) hacia las zonas cordilleranas (sub-tipo D) con variaciones de temperatura de 0ºC has-
ta 13ºC; con precipitaciones de 400 a 700 mm, lo que determina un desarrollo variable de la agri-
cultura y la ganadería. Ecológicamente presenta cuatro formaciones: a) Pradera o Bosque Húmedo
Montano; b) Monte Húmedo y Muy Húmedo Sub-Alpino; c) Tundra Pluvial Alpino; y d) Nival
(L.R. Holdridge); y, según P.Vidal: a) Región Suni; b) Región Puna; y c) Región Janca. La tempe-
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ratura media anual es de 4ºC, con aproximadamente 210 días de heladas por año, precipitación
media de 600 mm y humedad relativa de 63% en las zonas más elevadas.
Suelo: Los procesos de deforestación y de erosión, agotamiento y pérdida del suelo, la desertifica-
ción, degradación de los ecosistemas, sedimentación de los ríos y pérdida de flora y fauna; se han
acentuado. La ocupación del medio, asociada a una variabilidad de relieve de fuertes pendientes,
presión por las tierras y un sobre pastoreo basado en la introducción de especies exóticas, han pro-
vocado una degradación de las tierras cultivadas y de las pasturas disminuyendo la productividad
y acentuando el empobrecimiento.
Flora y fauna: La vegetación está formada por una pradera de bajo porte, predominando las gra-
míneas duras y silificadas como Stipa ichu y Festuca dolichophylla y plantas arrosetadas, rastreras
y en cojines compactos. Existen zonas que permanecen anegadas todo el año. También existen
matorrales de thola (Paratrephia spp y Baccharis spp) y relictos de bosquecillos de queñua (Poly-
lepis spp). Existen grandes áreas de desierto frío, con extensas superficies de suelos arenosos y
denudados. La fauna silvestre alto-andina se caracteriza por ser pobre en especies. Pocas especies,
altamente especializadas, se han aclimatado a este ambiente rudo y hostil. Entre las especies carac-
terísticas podemos citar el cóndor (Vultur gryphus), el suri (Pterocnemia pennata garleppi), puma
(Felis concolor), gato andino (Oreallurus jacobita). Existen abundantes lagunas alto-andinas de
aguas dulces al norte y saladas en el sur, con abundante avifauna. Se destacan los flamencos o
parihuanas con tres especies (Phoenicoparrus jamesi, Phoenicoparrus andinus y Phoenicopterus
chilensis) y la choca de copete (Fulica cornuta). La explotación de los recursos naturales y la so-
bre explotación de algunos de ellos, ha provocado una fuerte modificación en la composición de la
fauna y la flora. Algunas especies, como la chinchilla, han desaparecido y otras se encuentran
amenazadas de extinción como la taruca, el guanaco, la vicuña y el suri, situación que aún es posi-
ble revertir.
Recursos forestales: La población arbórea es escasa en número y densidad. Entre las recolectadas
para leña podemos destacar las siguientes especies: "Tola" (Parastrephia lepidophylla), "Churqui"
(Prosopys feroz), "Queñoa" (Polypepis tomentella), "Añagua" (Ademisa horridiuscula), "Copa
copa" (Artemisa copa), "Yareta" (Azorella yareta) y "Tolilla" (Fabiana densa). Por su uso medi-
cinal: "Muña Muña" (Saturesa parviflora), "Pupusa" (Werneria papposa), "Rica Rica" (Acant-
holippia hastulata) y "San Pedro" (Chuquiraga atacamentsis).
Sistemas de producción: Las sequías e inundaciones influencian el uso de los recursos naturales
en diferente intensidad. Las sequías, generan una fuerte disminución de la población ganadera,
pérdida de variedades dentro de las especies de cultivos practicados en esta zona, deterioro de los
pastizales naturales e introducidos así como una fuerte deforestación para su uso como combusti-
ble, por parte de las comunidades locales. Las excesivas precipitaciones causan en las regiones
fuertemente cultivadas una alta pérdida de variedades, disminución de los volúmenes de produc-
ción e incremento de los niveles de erosión hídrica. Estas condiciones ecológicas hacen que la
producción agropecuaria comporte grandes riesgos. Durante los últimos 20 años las tendencias
presentan un estancamiento siendo más agudo en la agricultura que en la ganadería. Los términos
de intercambio sectoriales tienen un crecimiento lento. El poder adquisitivo de la producción
agropecuaria muestra un incremento relativo, que implicaría que la capacidad adquisitiva de los
productores tiende a empeorar. Los sistemas productivos son en general del tipo de agricultura
tradicional y en tierras marginales (solo existen suelos de clase III y IV) y, por lo tanto, el objetivo
no debe ser de aumentar la productividad a niveles superiores sino estabilizar la producción con el
objeto de lograr la sostenibilidad de los sistemas productivos. Esto es posible si se adecua el me-
dio físico con andenes, terrazas, camellones, q'ochas, irrigaciones, etc., o a través de la utilización
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sostenible de especies locales como los camélidos, que poseen una alta estabilidad productiva y
responden a condiciones climáticas extremas.
Los camélidos muestran mayor resistencia a la sequía que el ganado introducido, y su excepcional
movilidad asegura el mantenimiento del rebaño a pesar de la inestabilidad climática que a menudo
afecta a los cultivos de la región y permiten extender las áreas de producción a regiones donde no
se puede cultivar ni criar de manera rentable ganado introducido. Los camélidos han evolucionado
para adaptarse a los ecosistemas alto-andinos, la forma del labio superior le permite escoger lo que
come y cortar las hojas sin desprender las plantas de raíz, como ocurre con el ganado introducido
(ovinos). Además, las patas presentan cojines en los dedos que no dañan el suelo como ocurre con
las pezuñas de los demás ungulados. Su utilización sustentable permitirá remplazar gradualmente
el ganado introducido constituyendo una alternativa para la recuperación de los suelos, y en con-
secuencia, del hábitat. Esta situación favorecerá a otras especies muy amenazadas que comparten
el mismo hábitat como la chinchilla, el gato andino, la taruca, el suri y el cóndor.
Justificación
La conservación de los recursos naturales vivos es fundamental para el bienestar de las comunida-
des rurales directamente ligadas a ellos. La reducción de los efectos adversos para la diversidad
biológica provocados por las actividades productivas y la distribución equitativa de los beneficios
derivados de la utilización adecuada de los recursos genéticos, requieren necesariamente del esta-
blecimiento de condiciones esenciales tendientes a armonizar los usos actuales de los recursos
biológicos, con el desarrollo económico y social y con las actividades tendientes a la generación
de empleo y a la erradicación de la pobreza.
Revertir el proceso de deterioro y ordenar el uso de los recursos naturales con fines productivos
para la conservación de la biodiversidad dentro del agro-ecosistema, tendrá pocas posibilidades de
éxito si no está asociado a un tipo de retribución directa o indirecta que cubra los costos de con-
servación que se imponen a las comunidades involucradas. Revalorizar la diversidad cultural de
las comunidades alto-andinas siempre que, como lo pregona el Convenio sobre la Diversidad Bio-
lógica: a) entrañe estilos tradicionales de vida que hacen a la conservación y a la utilización soste-
nible de la diversidad biológica; b) promueva el respeto de esa diversidad cultural, sus conoci-
mientos y prácticas; y c) permita que los beneficios derivados de la utilización de esos conoci-
mientos y prácticas se compartan equitativamente.
Para ello se prevé la adquisición de superficie de tierra para ser destinadas a Unidades de Manejo
(UM) con el objeto de lograr su recuperación y preservarla del mal uso a las que fueron sometidas
durante décadas. Por medio del relevamiento y recuperación de los camélidos sudamericanos y su
utilización sustentable en las mencionadas unidades se pretende acreditar la factibilidad de la cría
de estas especies con el consiguiente desarrollo social de sus comunidades y fundamentando,
además, la posibilidad de replicar esta experiencia en otras superficies que al presente se encuen-
tran abandonadas o semi-abandonadas por falta de productividad.
En el caso particular del manejo sostenible de vicuñas, se logrará el aprovechamiento de la fibra a
través de la esquila proveyendo materia prima de alta calidad a asociaciones de artesanos tejedo-
res, que confeccionarán tejidos artesanales de excelencia. Al mismo tiempo, se favorecerá la com-
prensión sobre la conservación de los camélidos silvestres con el objeto de erradicar la caza furtiva
de los mismos (vicuñas y guanacos) en el Depto de Molinos y los Valles Calchaquíes en general.
1) El manejo de camélidos como herramienta de conservación y recurso económico
Los camélidos domésticos sudamericanos son la alternativa más viable para mantener los ecosis-
temas alto-andinos y mejorar las condiciones de vida de las comunidades rurales del Altiplano.
Existen evidencias que demuestran que los rebaños de camélidos domésticos representan la fuente
alimentaria más confiable de la puna. Su aprovechamiento incluye la fibra, el cuero y el estiércol
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(indispensable como fertilizante y combustible). Además, las llamas han sido utilizadas como
animales de carga. Estos usos, que han garantizado la subsistencia de las comunidades que habitan
las tierras altas, constituyen el vínculo exitoso a la actual economía de mercado. Esos productos
pueden transformarse mediante procesos artesanales y/o industriales, obteniendo otros de alta ca-
lidad destinados a los más exigentes mercados.
En lo que hace a camélidos silvestres, en Molinos, será necesario repetir el censo realizado y am-
pliar su área e investigaciones, a fin de tener clara conciencia de su estado de conservación reali-
zando las acciones necesarias (relevamiento a través de censos, diseño y puesta a punto del pro-
grama de manejo, establecimiento de una estructura eficiente de ejecución y monitoreo del pro-
grama) de esas poblaciones silvestres, a fin de alcanzar en el mediano plazo su aprovechamiento
sustentable: cumpliendo con los requisitos internacionales a los que ha adherido la Nación Argen-
tina, y cimentando el esfuerzo realizado anteriormente por la ASAPRO-SPN con asistencia cientí-
fico técnica del Convenio de Cooperación GEMAVER (IADIZA, CONICET) con la Universidad
Nacional de Salta.
Entre los productos que han logrado un mejor posicionamiento en los mercados se pueden men-
cionar:
a) Fibra de vicuña y de llama para la industria textil.
La fibra de vicuña es, sin duda alguna, la de más alta calidad que existe en el mercado. Con res-
pecto a la fibra de llama, tradicionalmente se la consideraba de calidad inferior a la de alpaca. Sin
embargo, el resultado de investigaciones recientes y gracias a los avances tecnológicos de descer-
dado la fibra de llama es hoy considerada de similar calidad a la de alpaca. La aceptación y de-
manda del sector industrial textil se ha incrementado rápidamente en los últimos años y se consi-
dera que la fibra de llama podría ser un substituto de la fibra de alpaca.
b) Artesanías y confecciones con fibra.
Estos productos se encuentran bien posicionados en los mercados nacionales e internacionales
debido al esfuerzo privado y a algunos proyectos de apoyo al sector. Por ejemplo, en el caso de la
llama / alpaca y de acuerdo con los registros pertinentes de Bolivia, las exportaciones de productos
de fibra aumentaron de 147.600 kilos exportados por un valor USD 5,1 millones en 1998, a
201.400 kilos por un valor de USD 5,6 millones 1999. Con estas cifras de exportación el sector se
ubicó en el puesto 31 del total nacional y en el puesto 23 del total nacional de productos no tradi-
cionales.
c) Charque de llama.
El charque de llama es un producto que se comercializo en mercados tradicionales en ciudades y
poblados rurales, principalmente de Bolivia y Perú, además se lo consume localmente en las re-
giones donde se cría este camélido. La venta de charque ha alcanzado nuevos mercados en dife-
rentes ciudades (supermercados), y también cuenta con una creciente demanda en restaurantes
especializados en gastronomía étnica de Europa. Además, se ha constatado que existe una crecien-
te venta y exportación de charque de llama / alpaca a mercados del oriente boliviano, la costa pe-
ruana y el Brasil.
d) Carne de llama / alpaca.
El volumen de carne de llama / alpaca comercializada formalmente en puestos de venta al consu-
midor final se ha incrementado significativamente en Bolivia, Chile y Perú e informalmente en el
norte Argentino. La introducción de cortes especiales y la mejora en las condiciones higiénicas de
venta han sido factores determinantes para la difusión de este producto que se convierte en un
substituto a la carne de res. Los mercados en los que se ofrece carne de llama / alpaca han trascen-
dido los mercados tradicionales y siguen en proceso de expansión. De manera muy particular, el
producto está siendo aceptado por el sector de consumidores de alimentos sanos, debido a que esta
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carne no contiene colesterol y los médicos recomiendan su consumo. Varios restaurantes que ofre-
cen platos típicos en Bolivia y Perú, han comenzado a ofrecer en su menú platos basados en carne
y charque de llama / alpaca. Estos platos son solicitados por turistas y por consumidores locales
que han emigrado de la región alto andina a las ciudades, lo que origina un mercado cada vez más
interesante.
e) Cuero de llama.
Durante muchos años el cuero de llama fue desestimado y no se lo aprovechaba en el mercado
tradicional del cuero. Hoy se lo utiliza en pequeña escala y poco a poco va obteniendo mayor
aceptación. No obstante, los curtidores de cuero recién comienzan a perfeccionar su procesamien-
to con el objeto de mejorar su calidad.
Con el fin de desarrollar la agregación de valor de la materia prima textil se implementará un cen-
tro de acopio, clasificación y lavado de fibra como así también una planta de procesamiento, tec-
nología canadiense, para la obtención final de hilados y fieltro. Con ello se busca homogeneizar la
calidad de los productos y la eficiencia en los procesos para finalizar así en la confección de dife-
rentes tipos de prendas por parte de los artesanos teleros.
Con relación a la materia prima carne, camélidos domésticos, el fin es lograr "charqui" como pro-
ducto final. Este producto es un alimento básico ancestral de estas comunidades como así también
de la población tradicional de la ciudad de Salta. Para llevar a cabo este objetivo se implementara
un centro de faenado que cumpla las mínimas condiciones de bromatología exigidas por las auto-
ridades sanitarias. Como continuación del proceso se implementarán secaderos, cuya fuente es la
energía solar, ya desarrollados por el Instituto de Investigaciones en Energía No Convencionales
(INENCO) de la Universidad Nacional de Salta y la Asociación de Artesanos y Productores de
San Pedro Nolasco de los Molinos (ASAPRO-SPN) con el apoyo del Programa Regional de Ca-
mélidos Sudamericanos (Programa IICA-FIDA-Camélidos).
Por último se prevé la promoción y prospección de nuevos mercados. Con relación a los productos
textiles estas actividades se centraran en localizar nichos de mercados que valoren la calidad y el
origen de las prendas artesanales producidas. Estos nichos se localizan en su mayoría en el conti-
nente europeo.
Con respecto a los productos cárneos estas actividades se centrarán específicamente en reconquis-
tar y mercado olvidado en la ciudad de Salta como así también en la provisión de "charqui" a las
poblaciones de emigrantes que se han asentado en los suburbios de la ciudad mencionada y que
acostumbran al consumo de este producto y al presente no cuentan con el mismo que posea una
calidad bromatológica aceptable.
Con el fin de acceder a nuevos mercados para la fibra natural, las carnes magras y los cueros, se
deben realizar esfuerzos con el objeto de introducir cambios básicos para que las comunidades
rurales dispongan de mejores técnicas de cría y de elaboración de productos. De esta manera, sus
productos serán más competitivos. Por estos motivos, la estrategia del presente Proyecto se basa
en las tres etapas básicas de la cadena de valor agregado, a saber, producción, transformación
(primaria y secundaria), y comercialización.
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En mercado mundial, la fibra de vicuña, que en Argentina sólo es exportada legalmente por
criaderos, tiene un valor de 360 dólares por kg de lana vellón y constituye un importante recurso
para el desarrollo de comunidades de altura de nuestro país. En este sentido, ya en 1997, la CITES
había acordado el pasaje de las poblaciones de vicuñas silvestres y de los criaderos de INTA en
Jujuy al Apéndice II, lo que permitió la comercialización legal de fibra esquilada de animales
vivos.
La aprobación de la CITES constituye un momento histórico para Catamarca, ya que por primera
vez permitirá la cría de este camélido, con tecnología desarrollada por el INTA. Esta organiza-
ción ya instaló en la provincia dos criaderos experimentales y está propiciando la creación de la
Comisión Provincial de la Vicuña, donde se definirán las políticas para el uso sustentable de la
especie con la participación de todos los sectores involucrados.
Las llamas y alpacas son las dos especies domésticas; hace más de
4000 años que han dejado de ser silvestres pués sobre ellas se
ejerció uno de los procesos de domesticación más eficientes que el
hombre haya realizado sobre animal alguno. De ellas se obtiene fibra
para hilados, cueros, carne, leña con la bosta seca y además como
animal de carga.
Vellón de alpaca
Se esquilan anualmente ó cada dos años dependiendo del largo
de fibra que se pretenda obtener. El método es parecido al usa-
do en ovinos. Los muy buenos ejemplares rinden 2,5-3 kilos de fibra
por año, con un rendimiento al lavado de más del 90 %.
Las llamas y alpacas conviven en armonía con otras especies domésticas como aquí
en La Evelina
La existencia de variados fenotipos, en llamas fundamentalmente,
permite la cría de distintos animales, así es dable observar las deno-
minadas "cargueras" que son llamas grandes y de gran rusticidad ,
buenas para carne pero de pobre vellón. Las más lanudas denomi-
nadas Calana con un muy buen vellón, similar al compacto de ovejas y
las Ulpan con excelente vellón con sedosas mechas rizadas y
caídas, son las que procuranos criar en nuestra cabaña. Además
hay tipos intermedios entre los nombrados.
Cuando una persona compra una llama , una madeja de nuestra lana
ó un sweater tejido por nosotros, sabe donde nació y fué criado el
animal que los produjo, más aún, ustedes pueden ver en nuestra pá-
gina de INTERNET las fotos de las llamas y donde ellas viven. Si
lo desea lo invitamos a conocerlas personalmente para que usted
les muestre las hemosas prendas que compró.