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ISEGORIA 52 N-4_Maquetación 1 29/5/15 13:40 Página 267

IseGoRíA. Revista de Filosofía moral y Política


n.º 52, enero-junio, 2015, 267-293, Issn: 1130-2097
doi: 10.3989/isegoria.2015.052.12

La parábola del rey filósofo y el pragmatista.


Dos relatos sobre el fin de la filosofía,
la democracia y la universidad1
The Parable of the Philosopher-King and the pragmatist.
Two narratives of the end of Philosophy, and its relation to
democracy, and the university
JoRGe bRIoso
Carleton College

Jesús m. DíAz ÁLVARez


uneD

Resumen. La democracia, entendida como el Palabras clave: Final de la filosofía; demo-


horizonte moral de la sociedad occidental, cracia; totalitarismo; universidad; pensamiento
¿necesita la terminación de la filosofía como débil; pragmatismo; pacto social; Dios mortal;
saber fundante último? ¿Conllevan todos los contingencia.
relatos del fin de la filosofía una derrota de la
verdad en favor de la opinión, una transfor- AbsTRACT. Does democracy, understood as
mación y subordinación del propio discurso fi- the moral horizon of western culture, require
losófico a la forma de convivencia que se con- the end of philosophy as the ultimate founda-
sidera más justa, más abierta, más inclusiva? tional knowledge? Do all the narratives of the
Dicho de otra manera, ¿la pregunta sobre qué end of philosophy include the defeat of truth
tipo de vocabulario y de acercamiento filosó- in favor of opinion, a transformation and sub-
fico puede servir mejor a la libertad humana ordination of the philosophical discourse itself
tiene que ser la pregunta filosófica funda- to the form of coexistence that is considered
mental? ¿Habría que hacerle entonces a la fi- most just, most open, most inclusive? In other
losofía las mismas terroríficas preguntas que words, must the question about what type of
Lenin le hizo a la libertad: filosofía sí, pero, philosophical vocabulary and approach best
¿para quién, para hacer qué? A lo largo de serves human freedom be the most funda-
este ensayo, se abordan estas cuestiones de la mental philosophical question? We then
mano de dos relatos que teorizan el final de la should have to ask philosophy the same te-
filosofía con más de cuatrocientos años de di- rrifying questions Lenin put to freedom: phi-
ferencia. el primer relato es obra de Thomas losophy yes, but for whom? To do what? In
Hobbes. el segundo, lo protagonizan Gianni this essay all these questions are investigated
Vattimo y Richard Rorty. el juego de espejos through two narratives that theorize the end of
que se estable en el texto entre ambas narrati- philosophy with more that four hundred years
vas quiere ser una reflexión sobre la identidad of difference: Thomas Hobbes in The Levia-
del discurso filosófico y su implementación en than and Gianni Vattimo and Richard Rorty.
la institución universitaria en el marco de las The game of mirrors that is established in this
democracias del siglo XXI. text tries to be a reflection about the nature of

[Recibido: diciembre 2014 / Aceptado: febrero 2015) 267


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Jorge Brioso y Jesús M. Díaz Álvarez

the philosophical discourse and its imple- Key words: end of Philosophy; Democracy;
mentation in the university system inside the Totalitarianism; university; Week Thought;
context of democracy in the twenty-first cen- Pragmatism; Covenant; mortal God; Contin-
tury. gency.

Introducción. Las ambigüedades del cómo se distribuye esta por el orden civil.
final de la filosofía. Dos relatos “Auctoritas, non veritas, facit legem”, di-
ría Carl schmitt, que tenía muy buen oído
el fin de la filosofía, al menos en alguna para estas cosas, rescatando una frase del
de sus modalidades, empezó hace mucho Leviatán que aparece en su versión latina
tiempo, se podría decir que en el siglo pero no en el texto inglés.
XVII, cuando Hobbes estableció el si- nuestra concepción del orden civil ha
guiente axioma: “Pues una doctrina que cambiado, pero la relación que muchos
sea contraria a la paz no puede ser más filósofos contemporáneos establecen entre
verdadera que una paz y una concordia la verdad y este, no. La renuncia a cual-
que fuesen contra la ley de la naturaleza” quier forma de autoridad que no provenga
(Hobbes, 2011, 163). se debe recordar, del consenso y, por ende, a cualquier no-
para entender todas las consecuencias de ción de verdad que no se derive de un ar-
este axioma hobbesiano, que para el autor bitraje democrático parece hoy un princi-
del Leviatan la ley natural se reduce prác- pio incuestionable para casi todas las
ticamente al instinto de autoconservación, escuelas filosóficas. en la actualidad, son
lo que permite reescribir el axioma ante- escasos los pensadores que como Alain
rior de la forma siguiente: solo es legítimo badiou osan hacer preguntas del siguiente
un orden civil que preserve el derecho in- tenor: “¿hay otra cosa que la opinión, es
alienable que tenemos a la autoconserva- decir... hay otra cosa que nuestras demo-
ción y solo son verdad aquellas doctrinas cracias?” (badiou, 2009, 60)
que no perturben la paz del orden civil. Teniendo presente esta constelación
Las prioridades lógico-ontológicas de de problemas, enseguida nos asaltan un
este sistema están claras: el principio de puñado de cuestiones más que rezan del
autoconservación fundamenta y autoriza siguiente modo: ¿La democracia, enten-
la paz, y toda verdad tiene que adecuarse dida como el horizonte moral de la socie-
al principio de convivencia y concordia dad occidental, necesita la terminación de
que un orden civil considera legítimo. la filosofía como saber fundante último?
Como consecuencia, la pregunta sobre ¿Conllevan todos los relatos del fin de la
qué es y qué no es verdad deja de ser re- filosofía una derrota de la verdad en favor
levante en sentido estricto y lo que em- de la opinión, una transformación y sub-
pieza a cobrar importancia es quién y en ordinación del propio discurso filosófico a
función de qué se administra la verdad y la forma de convivencia que se considera

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más justa, más abierta, más inclusiva? Di- losófico-políticos, les diremos que el
cho de otra manera, ¿la pregunta sobre juego de espejos que vamos a establecer
qué tipo de vocabulario y de acercamiento entre ellos nos parece que tiene interés
filosófico puede servir mejor a la libertad por dos motivos. el primero es que nues-
humana tiene que ser la pregunta filosó- tra lectura de Hobbes lo va a perfilar como
fica fundamental? ¿Habría que hacerle en- quizá el más potente cuestionador de la
tonces a la filosofía las mismas terroríficas tradición metafísica en la época moderna.
preguntas que Lenin le hizo a la libertad: en nuestra opinión, habrá que esperar a los
filosofía sí, pero, ¿para quién, para hacer siglos XIX y XX para encontrar intentos
qué? de un calado semejante. Teniendo esto
el hecho de que el revolucionario ruso, presente, no parece una exageración de-
el ejemplo quizá más cercano que tenemos fender que de entre esa pléyade de pensa-
de rey-filósofo, se hiciera preguntas esen- dores, Vattimo y Rorty, y el estilo de pen-
cialmente pragmáticas que podían haber samiento que encarnan, representan en el
firmado Rorty o Dewey, defensores em- tránsito del siglo XX al XXI uno de los
blemáticos de un pensar antimetafísico, más sobresalientes y acabados intentos de
contingente, finito y democrático, será la teorizar de nuevo el final de la filosofía
paradoja de fondo que guíe soterrada- como metafísica. Además, tanto Hobbes
mente este ensayo. en él exploraremos como Rorty y Vattimo reflexionan sobre
dos relatos sobre el final de la filosofía en este hecho teniendo muy en cuenta el
su version metafísica. Veremos las trans- nuevo papel que le cabe al discurso filo-
formaciones que eso supone en la propia sófico después de su obsolescencia meta-
identidad de la vieja disciplina nacida en física y cómo afecta ello a la universidad
Grecia y en la autoimagen y función de y al propio lugar de la filosofía en el con-
quienes la practican. Desarrollaremos, junto de los saberes y la cultura.
igualmente, cómo ese cambio en la iden- el segundo motivo tiene que ver con
tidad, imagen y función del filósofo y la fi- la clave de bóveda en la que se asienta la
losofía se plasma o debería plasmarse en crítica a la tradición metafísica en los tres
los estudios universitarios y en la relación autores: la exaltación de la contingencia y
de aquella con los demás saberes en ge- la finitud, y, con el pie en ambas, la so-
neral y las humanidades en particular. bordinación de toda propuesta normativa
Los dos relatos elegidos son el de Tho- al acuerdo que se establece dentro del or-
mas Hobbes y el del así llamado, en su den civil. el que esto nos lleve en un caso
modalidad más genérica y antifundacio- a un una teorización de lo social suma-
nalista, pensamiento débil, en concreto, mente ambigua desde el punto de vista de
el de dos de sus figuras más representati- la democracia ––Hobbes–– 3, y en el otro
vas: Gianni Vattimo y Richard Rorty2. A a una defensa y exaltación sin fisuras de
quienes pueda parece extraña la elección la misma ––Rorty y Vattimo––, con ideas
de estos filósofos, dada la diferencia tem- igualmente muy distintas sobre la propia
poral de más de tres siglos que los separa función de la filosofía, su relación con los
y la divergencia de sus planteamiento fi- otros saberes y su institucionalización

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universitaria, nos conduce a la paradoja múltiples sentidos que adquiere este con-
de la contingencia que antes vestimos cepto en su obra:
como la paradoja del rey filósofo y el “La expresión “dios mortal” ha gene-
pragmatista. De estas tensiones nos ocu- rado muchos malos entendidos e in-
paremos, entre otras cosas, en la coda del terpretaciones erradas. La confusión
texto. Los dos relatos del final de la filo- que produce es tan grande debido a
sofía serán tratados en la primera (Hob- que Hobbes hizo tres representacio-
bes) y segunda sección (Vattimo y Rorty) nes radicalmente diferentes entre sí de
del artículo4. su “dios”. en la posición más promi-
nente se sitúa, acaparando la atención,
1. Primer Relato. La creación del el legendario leviatan que ha asimilado
Dios mortal en Hobbes5: el fin de a Dios, al hombre, al animal y a la
la filosofía como metafísica máquina. Le sigue en importancia, el
y de la universidad como uno de constructo jurídico del pacto que sirve
los pilares del poder espiritual para explicar la aparición de la persona
soberana creada por la representación.
el Leviatán de Hobbes no nos cuenta la Además, Hobbes transfiere —y esto
muerte de un Dios, sino la historia de un en mi opinión es la esencia de su filo-
Dios que es mortal. el relato sobre cómo sofía del estado— la concepción car-
mueren los dioses ha sido entonado mu- tesiana del hombre como un meca-
chas veces: Plutarco, baudelaire, nietzs- nismo con un alma a un gigante, el
che, etc. nunca, hasta donde sabemos, estado, que se convierte gracias a él en
ningún Dios había asumido, de modo irre- un mecanismo animado por el sobe-
versible, el más civilizado6 de los desti- rano-persona representante.” (schmitt,
nos: la mortalidad7. La figura de Cristo, la 2008, 32)8
que más se acerca a este ideal, no lo en-
carna a plenitud debido al carácter irre- La supervivencia de ese Dios sin na-
vocable que tiene la mortalidad divina turaleza, que es puro artificio, hecho solo
para Hobbes. A través de la figura de de cuerpos, de tiempo humano, hecho
Cristo se imagina tanto un destino mortal voz y persona soberana necesita como
para Dios como la resurrección y la sal- condición sine qua non el fin de la filo-
vación eterna para el género humano. sofía, al menos en su variante metafí-
Pero en el caso de Hobbes la resurrección sica. Pero antes de que empecemos a in-
es solo de cuerpos y no de almas; el reino dagar en los diferentes sentidos que
de Dios, al fin de los tiempos, es terrenal, adquiere el fin de la metafísica en Hob-
entiéndase mortal, y no celeste. Dios, des- bes, hay que entender cómo surge esta
pués de la creación del Leviatán, cesa de forma de pensamiento y en función de
intervenir directamente en los asuntos hu- qué lo hace y qué relación tiene con las
manos: la civilización de su figura es to- escuelas filosóficas antiguas y la institu-
tal. Carl schmitt, quizás el mejor lector ción universitaria9. Procedamos enton-
de Hobbes, explica magistralmente los ces a explicarlo.

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1.1. Escuelas antiguas, universidad, saber ellas.” (Hobbes, 2011, 543). Las escuelas
geométrico: origen y fin de la metafísica organizan y configuran el intercambio de
opiniones en debates y lecciones. Por
“el ocio es la madre de la filosofía; y el tanto, el saber, a través de las escuelas, ad-
Estado es la madre de la paz y el quiere un carácter doctrinal.
ocio”(Hobbes, 2011, 542). según Hob- Lo que hace que la geometría no sea
bes, la filosofía nace con el ocio, con la un producto de las escuelas antiguas es el
protección que los estados le otorgan a sus carácter antidoctrinal de este saber. La ge-
ciudadanos, con la fundación de grandes y ometría no es un saber escolar ni sectario,
prósperas ciudades. el saber prudencial dos categorías que para Hobbes parecieran
es un saber instintivo propio tanto de bru- ser sinónimos: “[no] hubo ninguna secta
tos como de hombres. A partir del re- de geómetras, ni se les daba en aquellos
cuerdo de ciertas experiencias, se trata de tiempos el nombre de filósofos” (Hobbes,
predecir, con un alto margen de error, lo 2011, 544). Platón no permitía que nadie
que sucederá en circunstancias similares entrara en su academia sin que supiera
para intentar procurarlo o evitarlo. el sa- geometría, pero la geometría era un saber
ber prudencial está en función del instinto extramuros, un saber que se producía fuera
de conservación más inmediato. el saber de las escuelas filosóficas antiguas.
filosófico, que empieza por construirse un La doctrina minimalista que articula
método (axiomas correctos, orden co- tanto el saber geométrico de Hobbes como
rrecto de los argumentos), asume cierta su filosofía política11 se sostiene a partir
distancia respecto a esa inmediatez que del siguiente axioma lógico-retórico que el
se le exige al saber prudencial y crece gra- filósofo inglés enuncia en el capítulo
cias a la protección que otorgan los esta- XLIII del Leviatán: “más de lo suficiente
dos, que se traduce en un tiempo liberado no es necesario” ( Hobbes, 2011, 488).
de las necesidades más inmediatas para la Hay que encontrar entonces el principio
supervivencia. mínimo, axioma, que resulte suficiente
La escuelas filosóficas antiguas, se- para explicar todas las instancias de lo
gún indica su etimología10, no son más real cuyo carácter es corpóreo y dinámico.
que formas de organizar el ocio. sus dia- en el caso de la ley natural, Hobbes solo
tribas, formas de pasar el rato. el nombre se queda con el conatus, el instinto de au-
de las diferentes escuelas filosóficas, ade- toconservación que más que ser una ley es
más, surge del lugar donde estos hombres una fuerza, una pulsión. Todas las leyes ci-
se reunían para discutir: “Platón escogió viles tienen que subordinarse a la paz ––
unos paseos públicos llamados Academia entendida esta categoría como el inter-
[...]Aristóteles enseñaba en el paseo del cambio de protección por obediencia––,
templo de Pan, llamado Lyceum, otros en que es una de las formas que el principio
la Stoa o pórtico donde se descarga la de autoconservación asume dentro del
mercancia; otros, en otros lugares. Y allí Commonwealth. La otra, convierte al co-
gastaban su tiempo de ocio, enseñando natus en el único derecho inalienable que
sus opiniones y disputando acerca de mantiene el individuo dentro del orden ci-

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vil. en este último caso, la autopreserva- postular la definición de los nombres uni-
ción ha pasado de ser una fuerza a con- versales (cuerpo, tiempo, lugar, materia,
vertirse en un derecho. sólo respecto a forma, esencia, sujeto, sustancia, acci-
los cuerpos, ya que tienen la capacidad de dente, potencia, acto, infinito, finito, etc)
movimiento y este movimiento puede ser que designan la naturaleza y la generación
impedido por un obstáculo externo, tiene de los cuerpos. el problema es que estos
sentido hablar de libertad. ese sentido es- supuestos nombres universales tienen un
trictamente corporal y dinámico de la li- carácter capcioso y equívoco y terminan
bertad y el carácter externo de los obstá- siendo más un impedimento que una
culos que la impiden arranca a este ayuda para poder descubrir la lógica del
concepto de la esfera de la conciencia. La movimiento. Hobbes desconfía de la ca-
doctrina cristiana tiene que regirse por esa pacidad que tienen los “universales” o
economía que busca encontrar el máximo cualquier principio de inteligibilidad ab-
efecto posible, la salvación, con el mí- soluta para erigirse como fundamento del
nimo esfuerzo, creer lo estrictamente ne- movimiento de los cuerpos, que es lo
cesario para alcanzar la resurrección. único que realmente hay en este mundo.
La filosofía es producto del ocio, del La palabra metafísica tiene una se-
lujo vital de aquellos que no tienen que de- gunda acepción: la de libros escritos o co-
fender su vida constantemente, pero este locados después de la física o filosofía
lujo vital termina produciendo otro lujo o natural12. este último sentido es extrapo-
exceso doctrinal, que es lo que Hobbes de- lado de su dimensión literal y empieza a
nomina metafísica. el saber no puede de- ser entendido en las universidades medie-
pender y subordinarse totalmente al ins- vales como ciencia y filosofía sobrenatu-
tinto de autopreservación, como le sucedía ral. La ciencia o filosofía sobrenatural al
al saber prudencial, pero tampoco puede mezclarse con las escrituras genera la fi-
desprenderse totalmente de él, como acon- losofía escolástica. esta filosofía habla de
tece con el metafísico. La filosofía que de- esencias separadas de los cuerpos, de
fenderá Hobbes no se puede reducir a un esencias abstractas, lo cual es un sin sen-
saber instintivo-práctico, como lo es el pru- tido. La metafísica al postular un principio
dencial, ni a uno contemplativo-teórico, abstracto que no participa del carácter cor-
como el que proponen las escuelas filosó- poral de todo lo que hay, un principio in-
ficas antiguas. La filosofía que defenderá teligible que se mantiene idéntico e in-
Hobbes rescatará la vocación pragmática mutable ante todos los cambios,
del saber prudencial y la vocación política movimientos, que sufre todo cuerpo y que
de las escuelas filosóficas antiguas. supuestamente define lo idéntico que so-
el principal pecado de las escuelas an- brevive a todos esos accidentes, genera
tiguas es su exceso de doctrina, de teoría. una falsa noción del saber, una hiperbólica
La metafísica es el emblema de la infla- doctrina, contaminadora y corruptora de
ción doctrinal que producen estas escue- todas las otras. Y esa falsa noción del sa-
las. La metafísica en las escuelas antiguas ber es un producto universitario.
surge como una ciencia que se encarga de según Hobbes, la universidad tiene su

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origen en la unión e incorporación bajo un Respecto al lenguaje, nociones como


solo gobierno de varias escuelas públicas esencias abstractas o formas sustanciales
dentro de una ciudad. Los saberes, en la carecen de sentido ya que no encajan en
institución universitaria, se organizaron ninguna de las funciones que Hobbes da al
en tres grandes ramas: la de la religión ro- lenguaje: referencial (nombres de las cosas
mana, derecho romano y la del arte de la que actúan sobre nuestros sentidos), auto-
medicina. esto tiene como resultado que la rreferencial (nombre de nombres o de di-
filosofía, debido a su tendencia a tratar de ferentes tipos de lenguaje), lógica o predi-
definir la realidad a partir de nombres “es- cativa (donde se define las relaciones de
pirituales” o abstractos, se subordine a la causa y consecuencia entre los nombres).
rama de la religión romana. Y en esta rama Concebir una esencia separada de un
no se reconocía otra autoridad que la de cuerpo supone darle un estatus a la cópula
Aristóteles, así que la filosofía terminó que el filósofo inglés refuta de modo ro-
por ser aristotelismo. el principal pro- tundo. Hobbes convierte al verbo ser en
ducto de las universidades es el escolati- una particula lingüística más que tiene, por
cismo, que deriva sus conceptos teológi- añadidura, un carácter estrictamente con-
cos de las vagas definiciones que vencional porque no es necesaria en todas
Aristóteles propone para entender la na- las lenguas13. La simple yuxtaposición de
turaleza y la generación de los cuerpos. dos nombres podría servir para expresar la
La escolástica es un error institucional, función predicativa del verbo ser ya que se
un error imputable a la forma en que el sa- limita a designar la consecuencia de un
ber es distribuido, organizado y jerarqui- nombre o atributo respecto a otro. el verbo
zado en estas escuelas. ser solo cumple una función predicativa
Para curar al conocimiento de ese (establecer relaciones lógicas entre el nom-
error, que como ya dijimos es producto de bre y sus atributos) y carece de cualquier
la forma en que se organiza y genera el co- importancia para definir la esencia o la
nocimiento en las universidades, Hobbes existencia de cualquier entidad. La metafí-
someterá la metafísica a la prueba que le sica es una fantasmagoría que no tiene re-
impone el mundo y el lenguaje. el mundo ferente en la experiencia y en el lenguaje y
es corpóreo y todo cuerpo tiene las di- cuya subsistencia solo se explica por el
mensiones inherentes a la magnitud: lon- tipo de conocimiento que produce una ins-
gitud, anchura y profundidad. Todo lo que titución como la universitaria.
es parte del universo tiene que estar sujeto esta falsa doctrina, la metafísica, “la
a esa dimensión corporal. Incluso los es- doctrina de las esencias separadas”, cons-
píritus tienen dimensiones, lo que los con- tituye una amenaza para el orden civil
vierte en cuerpos reales, de lo que carecen porque le da realidad y poder al mundo es-
es de opacidad. se podría decir que son piritual y a las entidades que lo represen-
cuerpos transparentes. el atributo de in- tan: “¿quién se afanará en obedecer las le-
corpóreos que le otorgan los escolásticos yes, si está esperando que la obediencia
a los espíritus los condena al absurdo y a sea derramada en él, o le sea insunflada?
la nada. [...] ¿o qué persona que tendrá miedo de

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los espíritus no tendrá un gran respeto por axiomas más que ser un nuevo funda-
quienes pueden fabricar el agua bendita mento tienen un carácter contingente, ar-
que ahuyenta a dichos espíritus” (Hob- bitrario y pactado. el axioma produce un
bes, 2011, 549). estos errores doctrina- principio convencional cuya principal vir-
les, representativos y políticos llegan a la tud es su claridad, su no ambigϋedad, y
iglesia vía la doctrina de Aristóteles y la cuya legitimidad es retrospectiva ya que a
doctrina del estagirita fue convertida en el pesar del caracter artificial y contingente
centro del saber por la institución univer- de su origen, los argumentos que lo siguen
sitaria. Las universidades, según Hobbes, no pueden contradecirlo. el axioma im-
fueron creadas por la autoridad papal, pero plementa, por lo tanto, un origen creado,
el credo que disemina Roma hubiera sido artificial. el conatus, que es el principio
imposible sin la institución universitaria. axiomático que rige todo el mundo polí-
La razón estriva en que esta fue el puente tico de Hobbes, más que ser una estructura
entre el mundo antiguo y el moderno, en- estable de sentido, un fundamento de in-
tre la metafísica de Aristóteles y las es- teligibilidad permanente que organiza toda
crituras, lo que permitió que falsas doctri- la realidad consecuente, es una fuerza,
nas del mundo antiguo, como la de la una tensión dinámica, un principio motor.
inmortalidad de las almas, llegaran a con- Ambos principios, el geométrico y el po-
vertirse en dogma de la fe cristiana. La litico, reducen el aspecto doctrinario15 a su
universidad es reponsable, por lo tanto, mínima expresión. esto permite que el
de propagar un falso saber, un saber de lo pensamiento político de Hobbes se dis-
espiritual, que tiene el potencial de deses- tancie de la tradición metafísica en varios
tabilizar el orden civil14. Para Hobbes, el puntos relevantes que serán descritos a
hecho de postular una escisión entre el continuación.
poder espiritual y el civil termina gene-
rando una figura mostruosa, una especie 1.2. Carácter ficcional de la teoría
de siamés: dos personas dentro de un del estado y de la representación
mismo cuerpo, dos voluntades separadas
dentro de un mismo organismo. Para Hobbes la soberanía no puede residir
A pesar de las distancias que Hobbes en el cuerpo político del pueblo ya que pre-
establece con la doctrina metafísica y con vio a la aparición de la persona artificial del
la institución universitaria que la propaga, soberano y a la fundación de la sociedad ci-
no resulta apropiado, sin embargo, hablar vil no existe ninguna comunidad o cuerpo
en su caso de un pensamiento postmetafí- político16. La comunidad política, al igual
sico; quizás sea más adecuado definirlo que la persona del soberano, tienen un ca-
como un pensamiento parametafísico al rácter ficcional y son posteriores al pacto o
moverse en los límites del viejo edificio contrato17. en el estado de naturaleza se
que la metafísica había construido. es vive en una gregaria soledad porque todo
cierto que para Hobbes la geometría pos- hombre es enemigo de su semejante y to-
tula una serie de axiomas indubitables que davía no se puede distinguir entre lo propio
se consideran verdades eternas. Pero estos y lo ajeno. Por otro parte, el sentido de la

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propiedad no ha sido establecido18, condi- propios los actos y los juicios de ese uno
ción indispensable para que se pueda pos- que nos representa.
tular una distancia significativa con la grey,
para poder ser considerados individuos. Los 1.3. Total subordinación de la verdad al
humanos en este estado no son ni propia- orden civil. La autoridad, no la verdad,
mente individuos ni pertenecen realmente a es la que crea la ley
ninguna comunidad real. es la pulsión, el
esfuerzo inherente a la autoconservación el instinto de autopreservación lleva pri-
(conatus, le llama el texto latino, endea- mero a la guerra de todos contra todos ––la
vour, el texto en inglés), lo que los singula- única forma posible de defenderse de la ab-
riza, ya que cada uno es responsable de pre- soluta vulnerabilidad a la que se está con-
servar su vida y esta necesidad, y la denado en el estado de naturaleza–– y
imposibilidad de lograrlo en el estado de na- luego a la paz y a la obedencia, pues solo
turaleza, lo que los lleva a pactar y a crear dentro de un orden civil y bajo la protec-
la persona19 soberana. La pulsión, el deseo, ción de un soberano es posible preservar
será, por tanto, el primer rasgo protoindivi- de modo eficiente la propia vida. Que este
dual que tienen los humanos en Hobbes, y instinto-fuerza-pulsión se coloque en el
el pacto donde engendran a la figura sobe- origen de la creación de la persona del
rana será su primer acto plenamente racio- soberano y del Commonwealth no lo con-
nal20. es esa mezcla de razón y conatus que vierte en el fundamento del mismo. De he-
confluye en el pacto lo que les dará su pleno cho, vendría a ser más bien el excedente,
estatus individual. su primer rol como in- la excepcionalidad que permite la funda-
dividuos será el de autores-creadores de la ción de la norma, ya que dentro del Com-
persona o representante soberano. monwealth este instinto-pulsión-fuerza se
el soberano para Hobbes es una per- transforma en el único derecho inaliena-
sona, un ente ficcional, que se convierte en ble, el único derecho que el súbdito-ciu-
el representante autorizado de los que, a dadano esta autorizado a preservar ante la
partir del momento de su creación, em- autoridad soberana. Hay que pensar ese
piezan a ser sus súbditos y los ciudadanos salto cuantitativo (en el mundo de Hobbes
del Commonwealth. el soberano es el por- no hay saltos cualitativos) del conatus al
tador ficcional de la acción, el represen- derecho para entender el estatus de la ley
tante de sus subditos tanto en su sentido te- tanto natural como positiva21. el cove-
atral como legal, y los subditos, los autores nant o pacto transforma un reclamo irres-
de sus acciones, son los que legitiman y tricto de bienes, el deseo de tomar todo lo
autorizan lo hecho por la persona sobe- que nos plazca22 ––que es pura pulsión o
rana. La constitución de la soberanía su- fuerza–– en derecho positivo. no hay
pone que se le otorgue a un hombre o una concepto de injusticia o daño previo al
asamblea, por medio de un convenio o pacto. el orden civil funda lo justo. no
pacto hecho entre todos los hombres, el hay lugar en el estado de naturaleza para
derecho de representar a la persona de to- el concepto de pecado ni para la violación
dos. el pacto nos obliga a considerar como de los derechos naturales de un individuo.

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Jorge Brioso y Jesús M. Díaz Álvarez

Todo el marco de lo justo se define dentro Carl schmitt, es quien decide sobre el
de lo que fue acordado o pactado. La jus- estado de excepción.
ticia es definida más como un hacer que
como un deber. un hacer de acuerdo a lo I.4. Suplantacion de la noción de
pactado. inmortalidad por la de invulnerabilidad
La ley, por tanto, va a adquirir vigen- absoluta, la de las almas eternas por la
cia a partir del acto de la decisión sobe- de los cuerpos invulnerables
rana y no de ningún principio sustantivo,
verdad moral, que la valide. si no hay Para poder convertir al Leviatán, ese dios
concepto del bien que preceda a lo pres- mortal, en la máxima creación de los
crito por la ley, ni concepto de verdad que hombres hay que negarle a la inmortali-
preceda a la autoridad, lo que hay que in- dad su carácter sustantivo respecto a la
dagar es esa decisión que funda la norma, humanidad. La inmortalidad es gracia,
lo que hay que indagar es la soberanía. si don divino, y no un atributo esencial de
se vacían de contenido a la ley y a la ver- lo humano. La inmortalidad es don polí-
dad, se desplaza la pregunta del plano tico porque se le otorgó al hombre espe-
semántico al pragmático, entendido este rando obediencia y sujeción y se les arre-
último como aquel que indaga sobre la bató ante la primera transgresión. se
naturaleza de la decisión, de la acción, podría decir entonces que con Hobbes
como aquel que funda la ley. Así, la pre- nace la bio y la tanatopolítica. el Levia-
gunta por el sentido se resuelve de un tán es el Dios mortal porque es el Dios
modo pragmático y político. Preguntarse que está encargado de legislar sobre la
por el sentido de la ley para Hobbes su- muerte, de fundar un mundo civil par-
pone siempre preguntarse por la figura tiendo del dato irreversible de esa pri-
del soberano que sustenta, funda y da mera transgresión. el soberano, dentro
sentido a la ley23: “el conocimiento de del orden civil, legisla sobre la vida y la
toda ley depende del conocimiento del muerte de los suyos. La restitución del
poder soberano” (Hobbes, 2011, 301). don de la inmortalidad, la resurrección,
La decisión no puede ser, por tanto, re- conlleva la aceptación de Cristo-rey al fin
ducida a ninguna norma pues ella es la de los tiempos como único soberano le-
fundadora de las normas en cuanto tales gítimo. La inmortalidad no es más que in-
y de la propia ley. Por eso, el poder so- vulnerabilidad en grado superlativo. si
berano no puede someterse a las leyes ci- los soberanos civiles otorgan protección
viles. situar al soberano bajo la ley con- a precio de obediencia, el soberano su-
lleva que se le subordine a una decisión premo otorga invulnerabilidad absoluta a
que es anterior a la suya, colocarlo bajo cambio de una obedencia eterna. La in-
otro principio de soberanía, lo cual su- mortalidad, entendida como absoluta in-
pondría la disolución del orden existente vulnerabilidad, nada tiene que ver con
porque no es posible dos principios de so- las almas. no hay almas eternas sino
beranía dentro de un mismo estado. so- cuerpos resucitados24 como premio a su
berano, como dirá muchos años después obediencia.

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La parábola del rey filósofo y el pragmatista. Dos relatos sobre el fin de la filosofía, la democracia...

1.5. El doble legado del fin de la excepción o la autoridad y la decisión so-


metafísica hobbesiano: las democracias beranas concebidas como el fundamento
liberales y el totalitarismo real de la ley. Lo contingente, lo artificial,
la ausencia de un fundamento último, la
Los rasgos de la teología política de Hob- muerte de los dioses y la creación de un
bes son los siguientes: teoría ficcional de la Dios mortal no siempre traen la libertad25.
representación y del estado; carácter arbi-
trario, contingente y artifical del origen; 2. Segundo relato. Fin de la filosofía,
vaciamiento semántico e inflación prag- democracia y educación. Un paseo
mático-política de la ley (el momento nor- por el estatuto de la filosofía y su
mativo queda absorbido totalmente por la articulación universitaria en
decisión soberana); total secularización y el pensamiento débil
civilización de la figura de Dios; la filoso-
fía escolástico-metafísica, un engendro uni- en la sección anterior, hemos realizado
versitario, entendida como el más pertinaz una lectura de Hobbes desde la vincula-
de los ídolos de la tribu. Habrá que esperar ción que establece entre contingencia, fin
muchos años, hasta los siglos XIX y XX, de la filosofía ––entendida como metafí-
para que los cimientos del edificio metafí- sica––, orden civil y crítica de la univer-
sico vuelvan a ser removidos de modo tan sidad. Y aunque como terminamos de se-
radical por pensadores como Darwin, ñalar el pensador inglés representa, por lo
marx, nietzsche, Freud, Heidegger y filó- menos en algunos de sus extremos, algo
sofos contemporáneos como Vattimo y que bien podría calificarse, al menos en
Rorty. el legado que crea esta destrucción parte, como la cara menos amable u os-
de la metafísica en Hobbes es problemático cura de la exaltación de la contingencia, lo
y ambiguo y no siempre es fácilmente tra- cierto es que a lo largo del siglo XX parece
ducible en un progreso emancipador. en haberse producido una creciente asunción
Hobbes, por un lado, nacen algunos de los de las posturas finitistas que, sin embargo,
principios que cierta tradición filosófico- reparan poco o nada en las ambigüedades
política considera centrales para definir las y oscuridades hobbesianas, ligando en tér-
democracias liberales: el estado como de- minos muy diferentes las relaciones que
tentador del monopolio de la violencia le- pueden establecerse entre la mencionada
gítima debido al consenso de los ciudada- contingencia, el final de la metafísica, la
nos, la escisión entre el carácter público de política y la educación universitaria. se-
la ley y el carácter privado de la conciencia guidamente, continuando nuestro plan ini-
––con la noción del bien que le es inhe- cial, exploramos una de esas teorizaciones
rente––, o la concepción negativa de la li- de la finitud, quizá la más radical y cohe-
bertad. Por otro lado, no parece menos rente, a saber, la que tiene como protago-
cierto que otras zonas de su teoría política nista al pensamiento débil. Y si la aproxi-
también sirvieron de inspiración a un pen- mación hobbesiana podía tildarse en parte,
samiento de carácter autoritario o totalita- según lo ya dicho, como la cara más os-
rio: la soberanía entendida como estado de cura o menos amable de la exaltación de

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la contingencia, la propuesta deflacionista el volumen que pretendía honrar el sep-


representa, al menos en la intención de tuagésimo cumpleaños de Vattimo (Rorty,
sus defensores, justo lo contrario, es decir, 2009b, 177-187), el filósofo estadouni-
algo así como su lado luminoso, amable y dense sostiene que la cofradía a la que
liberador. el patrón de lectura será el pertenece comparte como punto determi-
mismo que en la sección anterior: relacio- nante la tesis nietzscheana de que no es ya
nar final de la filosofía, democracia y uni- posible creer por más tiempo que hay un
versidad. suelo estable, una realidad fija y rocosa
que permanece siempre igual en medio
2.1 El final de la filosofía entendida de los cambios. simultáneamente, resulta
como metafísica, el pensamiento débil y también imposible que exista un vocabu-
la democracia lario privilegiado que de acceso a una ver-
dad más allá del tiempo. expresado de
Toda simplificación conduce al error y, otra manera, la realidad es plural, tan plu-
en efecto, no son pocas las diferencias ral como las comunidades de humanos
que cabría señalar entre el pensamiento de que la conforman, y se derrama en infini-
un peculiar “catocomunista”, como se au- tas perspectivas que nos conducen tam-
todefine últimamente Vattimo, y un “libe- bién a una verdad plural, contextual e in-
ral”, en el sentido anglosajón del término, tersubjetiva que siempre tiene fecha de
anticomunista y defensor incluso de las caducidad. no existe, o al menos no tene-
bondades de la Guerra Fría, además de mos acceso, a la perspectiva de las pers-
ateo con escaso oído religioso; tal es el pectivas, al ojo de Dios, al fundamento úl-
caso de Richard Rorty26. Creemos, sin em- timo al que toda persona de buena
bargo, que no nos equivocamos dema- voluntad y que ejerza serenamente la fa-
siado si afirmamos que, más allá de su cultad de la razón debería llegar de “modo
discrepancias, la aguja de marear que guía natural” con vistas a alcanzar una orienta-
a ambos filósofos es la crítica a la metafí- ción en la vida y resolver las disputas te-
sica, la forma de pensamiento que ha mar- óricas y, sobre todo, prácticas. esto es lo
cado la tradición occidental desde sus ini- que en el fondo quiere decir el famoso
cios. Y por metafísica ha de entenderse, lema de que no hay hechos, sino tan sólo
según Rorty, la historia del sueño plató- interpretaciones. Y no puede ser de otro
nico que propone “escapar del Devenir al modo, pues no somos dioses. nuestra con-
ser” (Rorty, 2009b, 177), o en palabras de dición está atravesada por la mortalidad, la
Vattimo, la “identificación del ser verda- finitud, la contingencia, la historicidad, y
dero como una estructura estable, objeti- la metafísica no es otra cosa, dice Rorty,
vamente reconocible y fuente de normas” que un intento soberbio de querer ir más
(Vattimo, 2013, 196). allá de ellas, colocando a la humanidad en
en efecto, en un penetrante escrito que un imposible contexto ahistórico y aper-
hizo de prólogo a la edición norteameri- sonal.
cana de Nihilismo y emancipación y que Ahora bien, para un buen número de
posterirmente se reeditó como artículo en filósofos contemporáneos todas estas tesis

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La parábola del rey filósofo y el pragmatista. Dos relatos sobre el fin de la filosofía, la democracia...

sobre la metafísica, sobre una realidad, moral. Vattimo piensa que producirá
una verdad o una moral sin fundamento una deseable humildad sobre nuestras
último, no conducen a otra cosa que al re- propias intuiciones morales y sobre las
lativismo que, en última instancia, no es instituciones a las que nos hemos lle-
sino una forma de escepticismo. Y si eso gado a acostumbrar. esta humildad
es peligroso desde el punto de vista teó- alentará la tolerancia con las institu-
rico, leído desde el lado ético-político re- ciones ajenas y una buena voluntad que
sulta letal, pues nos deja, se supone, en el nos sirva para experimentar proyectos
proceloso terreno del todo vale, que no es más integradores. Vattimo ve esta hu-
otra cosa que la antesala de la violencia. mildad como un antídoto contra la so-
sin embargo, para Vattimo, Rorty y los de berbia característica de aquellos que
su estirpe, carece de sentido identificar afirman que están obedeciendo impe-
antifundacionalismo con escepticismo y rativos incondicionales, ahistóricos,
relativismo. Decir que no existe un fun- transculturales y categóricos” (Rorty,
damento último no significa renunciar a la 2009b, 186).
idea de que se tienen buenas razones, eso
sí contingentes, para argumentar a favor en efecto, puesto que todos nos mo-
de una u otra opción ético-política y que vemos en el juego de interpretaciones fa-
todo da igual. es más, su manera de ver la libles conscientes de serlo, no corremos el
filosofía como “hermenéutica” o “política riesgo de querer imponer nuestro criterio
cultural” apunta, como veremos más ade- a los demás. Pero si entiendo que la mía
lante, a todo lo contrario. el antifundacio- no es una perspectiva más, sino que en-
nalismo es una “apuesta razonable” por el carna la Verdad, el bien o la Justicia, con
sentido, no un relativismo escéptico, pero mayúsculas, es muy probable, como ha
en lo que tiene de apuesta no puede legi- acreditado tantas veces la historia, que
timar su opción de modo indubitable y tarde o temprano esté dispuesto a impo-
completamente racional. Por otro lado, el nerla, además con buena conciencia, por la
peligro de la violencia no viene, según es- fuerza a los demás. en este sentido, Rorty
tos pensadores, de lo que sus rivales en- y Vattimo consideran que el pensamiento
tienden como relativismo o escepticismo. débil provee razones filosóficas, que no
Al contrario, lo que genera violencia es la fundamentos últimos, para preferir una
afirmación monista de la metafísica: la sociedad liberal, democrática y tolerante
idea de Una verdad única, de Una realidad frente a una autoritaria o totalitaria. “ser
única, de Una moral única, válida para racional para estos filósofos no es poseer
todo tiempo y lugar. Citamos nuevamente una facultad rastreadora de la verdad o el
a Rorty, interpretando y asumiendo la po- bien con mayúsculas, sino simplemente
sición de Vattimo: ser capaz de conversar, de intercambiar ra-
“mientras que aquellos que se empeñan zonablemente nuestras opiniones” (Rorty,
en preservar el legado de Platón 2009b, 184).
…creen que adoptar esta concepción en resumen, para Rorty y Vattimo, a
nos llevaría al “relativismo” y la laxitud diferencia de Hobbes, la quiebra del fun-

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damento y la emergencia de la contingen- día ser de otra manera, tanto a la autoper-


cia van de la mano de la sociedad abierta cepción del filósofo como a la identidad
y la democracia, con su continuo e inter- de la propia filosofía y su relación con el
minable intercambio de opiniones siempre conjunto de los saberes29.
sujeto a revisión. bajo estas premisas, y en efecto, terminamos de sostener que
reparar en esto es de suma importancia, no hay disolución de la filosofía en estos
cuando ambos correlacionan final de la pensadores, sino un planteamiento defla-
filosofía y democracia no lo hacen pen- cionista que en su opinión la aggiorna a
sando que el discurso filosófico en sí los tiempos presentes. Pero siendo esto
mismo se ha quedado obsoleto o carece de así, la enorme pregunta que ahora surge
sentido en el ámbito ético-político o en podría rezar del siguiente modo: ¿cuál es
cualquier otro dominio reflexivo. Lo que el nuevo papel del filósofo y de una filo-
a su juico ha perdido vigencia es un tipo sofía antifudacionalista en la economía de
de filosofía, una manera de hacerla y en- los discursos culturales, en el entramado
tenderla: la fundacionalista, científica de la conversación que mantiene la hu-
(wissensschaftlich) o metafísica27. Frente manidad sobre su propio destino? Y por
a ella se situaría su propuesta de filosofía extensión, ¿cuál es el lugar que les co-
débil, conversacional o antifundaciona- rresponde en la sociedad contemporánea?
lista que sí podría jugar un papel rele- Destronados hace tiempo de su pedestal y
vante, tal y como hemos esbozado líneas del prestigio que ello les otorgaba, ¿dónde
atrás, en el espacio de juego argumenta- se sitúa su espacio de juego moral e insti-
tivo que provee de razones a favor de la tucional? Quizá una de las mejores estra-
democracia28. tegias para responder a estas cuestiones
en este sentido, Rorty, Vattimo y otros sea indagar en la idea que uno de estos dos
como ellos no proclaman ni ejecutan un pensadores postmetafísicos tiene sobre la
abandono del pensamiento filosófico en tríada educación, universidad, filosofía.
cuanto tal, una sustitución de éste por la li- Por eso, abordamos a continuación algu-
teratura, la historia, la antropología o cual- nas de las reflexiones que Richard Rorty
quier otra de las humanidades. Tampoco ha espigado al respecto en un abanico am-
incitan a una disolución de la misma en el plio de trabajos30.
conjunto de las llamadas ciencias morales.
La filosofía conversacional es filosofía; 2. 2 Educación y universidad 31
Rorty y Vattimo hacen filosofía y se con-
sideran a sí mismos filósofos, pero han en un inteligente y provocativo artículo ti-
abandonado la idea del árbol cartesiano y tulado Education as Socialization and as
son completamente alérgicos a proclamar Individualization32, el filósofo pragmatista
ningún tipo de reinado de la vieja ma- expone algunas de sus ideas sobre la edu-
triarca sobre las ciencias, el mundo y su cación al hilo de su comprensión de la fi-
sentido. La filosofía débil es, según sus losofía como conversación. Considerán-
promotores, una cura de humildad frente dose un fiel seguidor de las teorías de
a la hybris metafísica. Y eso afecta, no po- Dewey, Rorty entiende que la educación,

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La parábola del rey filósofo y el pragmatista. Dos relatos sobre el fin de la filosofía, la democracia...

en general, debe ser una combinación sa- mostrar los caminos diversos y plurales
bia, un equilibrio entre socialización e in- hacia la autenticidad personal; la varie-
dividualización. La socialización debería dad posible de identidades y la importan-
habilitar a los estudiantes para situarse y cia de construir una a nuestra medida.
manejarse en el conjunto de creencias que Todo ese ejercicio es muy probable que
la sociedad ha consensuado hasta la fecha también choque en innumerables ocasio-
como un bien común. se trata de que los nes con bastantes de las creencias oficia-
alumnos se familiaricen con lo mejor de la les o asumidas como comunes. Pero es
tradición propia a través, entre otras cosas, precisamente en esos procesos de choque
de la lectura y trabajo con libros y obras y desajuste con las creencias colectivas
que se consideran imprescindibles, clási- como éstas pueden llegar a cambiar pro-
cos, en la forja del propio país. en el caso duciéndose un proceso de maduración so-
de los estados unidos, Rorty sostendrá cial que nos lleve a una sociedad mejor.
que tal narrativa socializadora debería gi- expresado de otra forma, la educación
rar alrededor de la libertad y su expansión. universitaria es para Rorty no tanto el ám-
La socialización en estas creencias, cua- bito de la instrucción como el de la liber-
jadas en unos curricula relativamente rí- tad. un espacio peculiar e inusualmente
gidos, tendría que ser la labor prioritaria de abierto que se torna imprescindible, pues
la escuela primaria y el instituto. es, o debería ser, el caldo de cultivo pro-
una vez realizada esta tarea, la educa- picio para el florecimiento de la imagina-
ción en colleges y universidades debería ción, la creatividad y la crítica. sin esos
suponer para los estudiantes, no sólo el preciados bienes inmateriales, las comu-
aprendizaje de una profesión, sino, y fun- nidades democráticas y los humanos que
damentalmente, la exploración y búsqueda las habitan se estancan y entran en crisis al
de la propia identidad personal y comuni- ser incapaces de hacer frente a los retos
taria, una identidad que necesariamente siempre renovados que se presentan. Y de
pasa por la revisión del sistema de creen- nada vale hacer pasar por natural, verdad
cias aprendido en el proceso de socializa- inamovible o estructura última de lo “re-
ción. Desde la perspectiva estadounidense almente real” aquello que se corresponde
y su narrativa socializadora centrada en la sólo con los consensos del momento. es
libertad, algunas indagaciones necesarias decir, frente a los continuos desafíos so-
tendrían que abordar de forma prioritaria ciales y personales nada nos va a aportar
las “grietas” de esa historia, las esperanzas la búsqueda de una inexistente verdad alo-
incumplidas; deberían examinar si tal na- jada ahí afuera y a la que deberíamos aco-
rrativa lo ha sido en la misma medida para modarnos. no existen para los deflacio-
pobres que para ricos, para hombre y mu- nistas verdades redentoras de ese tipo y
jeres, para blancos y para las diferentes todo se fía, como ya hemos indicado, a la
“minorías” raciales y sexuales, para los imaginación y a una creatividad bien tem-
nacionales y los extranjeros. Desde un peradas. sólo ellas pueden alumbrar nue-
punto de vista estrictamente personal, esa vas metáforas, redefinir nuevos vocabula-
misma educación universitaria tendría que rios en los que, siempre con fecha de

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caducidad, podamos ponernos de acuerdo tervención su principal encomienda”


a nivel colectivo y buscar nuestro propio (Rorty, 210, 11 cursivas nuestras).
encaje en el mundo a nivel individual33.
estimular en los alumnos esa chispa crí- Y desarrollando esta idea como propia,
tico creativa, encarar la vida propia y la de continúa en uno de los ensayos del libro:
la comunidad desde la imaginación y la li- “Como quiera que no pienso que la fi-
bertad es para Rorty la principal misión de losofía vaya a transitar nunca por el se-
la educación universitaria y sus profeso- guro sendero de la ciencia, y que tam-
res. La buena salud democrática de una poco considero que sea una buena idea
sociedad que aspira a ser cada vez mejor tratar de que camine por él, me contento
estaría, a su juicio, muy estrechamente li- con juzgar que los profesores de filo-
gada a esa labor. sofía son individuos que practican una
una vez establecida la tesis general política cultural. una de las formas en
sobre la educación y la universidad, nos que lo hacen consiste en sugerir un con-
falta ver ahora cómo contempla Rorty el junto de cambios en el uso de las pala-
lugar y función de la filosofía y los filó- bras, y otra pasa por contribuir a poner
sofos en el marco de la enseñanza y los sa- nuevas palabras en circulación (con la
beres universitarios y, por extensión, en el esperanza de salir de este modo de los
conjunto de lo que llamamos cultura. atolladeros que les salen al paso y de
lograr que la conversación resulte más
2.3 La filosofía como política cultural fructífera). estoy plenamente dispuesto
a abandonar el objetivo de comprender
en el prefacio del cuarto volumen de sus las cosas correctamente de una vez por
Escritos filosóficos, publicados el mismo todas, y también lo estoy a sustituir esa
año de su muerte, podemos leer: meta por la de ampliar nuestro reper-
“Dewey coincide con Hegel en que los torio de autodescripciones, tanto indi-
filósofos nunca van a conseguir con- viduales como culturales. Desde este
templar las cosas desde el punto de vista punto de vista, el objeto de la filosofía
de la eternidad; deben por el contrario no consiste en descubrir lo que algo es
tratar de contribuir a la vigente con- “realmente”, sino en ayudarnos a cre-
versación que sostiene la humanidad y cer; esto es, a aumentar nuestra felici-
que versa sobre lo que ésta ha de hacer dad, nuestra libertad y nuestra flexibi-
consigo misma. el avance de esta con- lidad. La maduración de nuestros
versación ha dado lugar a nuevas prác- conceptos y la creciente riqueza de
ticas sociales y a la introducción de cam- nuestro repertorio conceptual son los
bios en los vocabularios desplegados en elementos que permiten el progreso
la deliberación moral y política. Sugerir cultural” (Rorty, 2010, 220 cursivas
cualquier novedad añadida equivale a nuestras).
intervenir en la política cultural. De-
wey tenía la esperanza de que los pro- La lectura de estos textos, entre mu-
fesores de filosofía vieran en dicha in- chos otros, muestra con gran claridad la

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La parábola del rey filósofo y el pragmatista. Dos relatos sobre el fin de la filosofía, la democracia...

forma en que se inserta la filosofía anti- que componen la citada institución y, por
fundacionalista rortyana en los estudios extensión, en el conjunto del sistema cul-
universitarios. en efecto, líneas atrás he- tural. Y una pregunta legítima que se le
mos insistido en que el eje de tales estu- puede formular al pensador pragmatista a
dios era la libertad, es decir, el cultivo de este respecto es si la función que le enco-
la crítica sobre las creencias establecidas mienda a la filosofía en tanto que política
(socialización) y el desarrollo libre e ima- cultural no resulta tan vaga que corre el
ginativo de otras nuevas (individualiza- peligro de desdibujarla o incluso diluirla
ción). el objetivo es avanzar hacia socie- en el resto de las disciplinas, particular-
dades cada vez mejores, más libres, mente en las llamadas humanidades, ha-
democráticas e inclusivas en esa dialéctica ciéndola verdaderamente inútil y conde-
nunca cerrada entre creencias consolida- nándola, en última instancia, a su
das y creencias nuevas. si ahora repara- decadencia y posterior desaparición.
mos en la definición que hace el pensador Rorty no tiene ningún problema en re-
estadounidense de la filosofía como polí- conocer que la nueva visión de la filoso-
tica cultural, vemos que, según su pos- fía como conjunto de narraciones imagi-
tura, universidad y filosofía encajan como nativas con poder transformador sirve
un guante en una mano porque ésta es uno también para caracterizar a lo que tradi-
de esos saberes que puede hacer prender cionalmente se han denominado humani-
en los estudiantes la chispa de la crítica, la dades e, incluso, a las mejores y señeras
libertad, la imaginación y el crecimiento. teorías científicas. Pero desde su punto de
Y es que incluso los grandes pensadores vista carece de interés distinguir “nítida-
de la tradición metafísica pueden leerse mente entre los imaginativos hallazgos
conversacionalmente como gigantes cuyas que sugieren los filósofos y los que pue-
obras no son sino potentísimos ejercicios dan ofrecer quienes no lo son. Por esta ra-
de la imaginación, intentos de intervenir, zón, no nos preocupa [se refiere a los fi-
por medio de la ya mencionada invención lósofos conversacionales como él] a qué
de un nuevo vocabulario o del reajuste departamento académico pudiera corres-
amplio del ya existente, en la edificación ponder la responsabilidad del estudio de
de lo que se entiende como el mejor sis- Hegel, de Freud, de Heidegger de nietzs-
tema de creencias que debería o podría te- che o de Derrida” (Rorty, 2010, 229). en
ner la humanidad, aunque, desde luego, la época de la filosofía como política cul-
muchos de estos filósofos no incluyan tural, la estricta vigilancia de fronteras en-
dentro de tales creencias y de la idea de tre los saberes se ha vuelto cada vez más
crecimiento o maduración humanos a la irrelevante. no tiene ningún sentido que la
democracia o la flexibilidad. filosofía se proclame reina de la ciencias
el dibujo precedente nos ha mostrado o, incluso, reina de las humanidades, es
el encaje de la filosofía en la universidad. decir, suelo y fundamento de todas ellas
nos queda ahora por ver, para completar porque pretende ser algo así como un sa-
nuestro recorrido, el lugar que le atribuye ber privilegiado que ha dado con el núcleo
Rorty en la economía del resto de saberes de lo real y es el encargado de estudiarlo

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Jorge Brioso y Jesús M. Díaz Álvarez

y repartir tareas. A juicio de Rorty, esa manas ––no sólo con la ciencia natural,
función de mando y su correspondiente ta- sino también con el arte, con la litera-
rea policiaca resulta hoy, en el mejor de tura, con la religión y con la política––,
los casos, risible. Forma parte de la vieja tanto más relevancia adquirirá la filoso-
filosofía que se ha tornado caduca, entre fía para la política cultural, y tanto más
otras cosas, porque ha sido incapaz de útil resultará en consecuencia. Por el
cumplir tal sueño34. contrario, cuanto más luche por alcanzar
Los nuevos relatos filosóficos necesi- su autonomía, menos atención merecerá
tan de las ciencias en general y de las hu- en el presente” (Rorty, 2010, 13).
manidades en particular; precisan conocer
sus propuestas de sentido, sus historias de Porque autonomía no significa aquí
salvación, conversar con lo más granado especificidad, sino cientificidad y autosu-
de sus productos imaginativos en ese co- ficiencia situada al margen de la conver-
mún objetivo de crear una sociedad mejor. sación que sobre la humanidad mantie-
en este sentido, el pensador conversacio- nen el resto de los saberes. significa
nal aprende, se aprovecha y dialoga, desde aislamiento empobrecedor.
una posición de igualdad, con los grandes en conclusión, desde la óptica del pen-
relatos científicos, pero sobre todo con la samiento débil, encarnada aquí mayorita-
literatura, la antropología, el derecho, la riamente bajo el perfil de Richard Rorty, la
sociología o la historia, entre otros. siente, filosofía seguirá existiendo mientras si-
es verdad, que forma parte de una tribu gan produciéndose cambios culturales y
más amplia a la que Rorty denomina fre- necesitemos dar un sentido individual y
cuentemente con los apelativos de “inte- colectivo al mundo que habitamos. Tal
lectual literario” o “intelectual humanista”. sentido será siempre provisional y en la
Pero en ningún caso esto significa que ha conquista del mismo los filósofos no es-
perdido su identidad como filósofo. sabe tarán solos. siempre podrán y tendrán que
que una parte importante de su trabajo contar con las artes, las ciencias y la polí-
tiene que ver con una tradición definida a tica a la hora de construir narrativas nece-
la que repiensa una y otra vez y que se ne- sariamente difusas en pos de un mundo
cesitan, como señaló líneas arriba, cursos mejor, más democrático y libre y menos
y departamentos universitarios que se en- cruel. el final de la filosofía es para este
carguen de hacer un “trabajo experto” en colectivo de pensadores, pues, el final del
esa área. Pero igualmente reconoce que “la un tipo de filosofía, la metafísica, pero
profesionalización de la filosofía, su trans- no, como suele decirse con demasiada ra-
formación en una disciplina académica, ha pidez, el final de toda filosofía y todo fi-
sido un mal necesario” que “ha dado alas losofar. Y la universidad es el lugar privi-
a los intentos de hacer de la filosofía una legiado para su cultivo. un espacio que
ciencia semiautónoma” y que: debería ser lo más libre y plural posible y,
“es preciso oponerse a esos esfuerzos. hasta donde fuera operativo y razonable,
Cuanto mayor sea la esfera filosófica con el menor número de rigideces curri-
que interactúe con otras actividades hu- culares.

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La parábola del rey filósofo y el pragmatista. Dos relatos sobre el fin de la filosofía, la democracia...

Con las reflexiones precedentes cerra- Coda. La parábola del rey-filósofo y el


mos nuestras consideraciones generales pragmatista. Algunas reflexiones finales
sobre fin de la filosofía ––entendida como sobre la contingencia en la época del final
metafísica––, democracia y educación uni- de la metafísica.
versitaria en el pensamiento débil. Las di- “Todo humanismo se basa en una me-
ferencias con Hobbes parecen abismales tafísica...”
en todos los órdenes que hemos tratado y, martin Heidegger
sin embargo, algo inquietante aparece
cuando reparamos en la clave de bóveda un tema esencial que nos había quedado
que sustenta de alguna forma ambas pro- pendiente cuando desarrollamos nuestra lec-
puestas: la proclamación de la contingen- tura de Hobbes concernía al estatuto y fun-
cia y la subordinación de toda propuesta ciones de lo que entendía como filosofía
normativa al acuerdo que se establece den- purgada de toda metafísica. Y para entender
tro del orden civil. Hobbes, como ya he- esas nuevas funciones pragmático-políticas
mos visto, lo expresa diciendo que toda que ha de cumplir en Hobbes la filosofía
verdad ha de someterse al tal orden: “auc- moderna resulta imprescindible enumerar
toritas, no veritas, facit legem”. Y Rorty, las diferentes formas en las que este nuevo
como también terminamos de exponer, saber filosófico se separa de la tradición:
sosteniendo que la filosofía es política cul-
tural, es decir, que la filosofía igualmente 1. La filosofía se distingue de la experien-
ha de “subordinarse” de alguna manera a cia, de un saber basado en el recuerdo y que
un relato político, en este caso, el relato pertenece a la esfera de lo prudencial. Tal sa-
político democrático35. es verdad que el ber lo comparten tanto los animales más
resultado que hobbesianos y partidarios evolucionados como los seres racionales. La
del pensamiento débil sacan de este común filosofía, para Hobbes, es hija del método
punto de partida es bien diferente. el hob- (establecimiento de premisas y axiomas vá-
besianismo, como ya hemos indicado, es lidos, orden lógico de los razonamientos).
ambiguo con respecto a la tradición de-
mocrática: por un lado, puede estar a la 2. La filosofía equipara el misterio con el
base de ciertos principios imprescindibles error. si se trabaja con conceptos concre-
en aquella ––caso, por ejemplo, de la li- tos, no abstractos o espirituales, conceptos
bertad negativa––, por otro, es inspirador que definan fuerzas y movimientos y no
de ciertas teorizaciones de los regímenes esencias o identidades fijas y si se man-
autoritarios y totalitarios. Por contra, los tiene el orden correcto del razonamiento,
partidarios del pensamiento débil son, tam- no se puede cometer ningún tipo de error
bién lo sabemos, auténticos campeones y se despejan los enigmas.
sin fisuras de la democracia. Pero eso es
precisamente lo inquietante, que la raíz de 3. el saber filosófico no puede sustentarse
ambas cosas parezca ser común. A tales en la autoridad de la tradición. el conoci-
perplejidades dedicamos, entre otras cosas, miento no puede fundarse en un saber ba-
la coda final de este trabajo. sado en la tradición y en los libros,

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4. La revelación sobrenatural no tiene nin- cosas con las palabras. este nuevo rol de
guna relevancia ni filosófica ni epistémica. la filosofía que propone Hobbes establece
ningún tipo de información que se obtenga una estrecha relación entre el uso prag-
por esa vía puede ser concebida como un mático del lenguaje y la dimensión civil de
conocimiento razonado (aquellos que van la verdad. La verdad solo interesa en fun-
del efecto a la causa o de la causa al efecto). ción de su utilidad o prejuicio para el or-
den civil, el lenguaje, en función del con-
5. el conocimiento filosófico se separa de las texto de enunciación de cada palabra. si
escuelas, incluídas las universidades, y de los la verdad no interesa per se sino que nos
saberes que estas generan, debido al fracaso limitamos a preguntarnos por la utilidad o
que han tenido este tipo de instituciones para daño que puede causar a cierto orden po-
almacenar y distribuir el conocimiento y por lítico, la dimensión semántica del lenguaje
los errores imputables a las doctrinas que na- deja de ser relevante, ya sea entendida en
cen en su seno. emblemático, en este sen- su dimensión referencial (relación del
tido, es el caso de la escolástica, a la que se enunciado con la realidad) o intralingüís-
define como la quintaesencia de la forma en tica (relación entre significante y signifi-
que la universidad almacena, concibe, orga- cado, relación diferencial de los diferen-
niza y distribuye los saberes. tes significantes y significados entre sí).
Lo que tiene que producir esta nueva filo-
no hay demasiadas indicaciones en el sofía es una total “civilización” del cono-
Leviatán del nuevo marco institucional36 cimiento, es decir, la subordinación del
que acogería a este nuevo tipo de saber fi- orden ontológico-cognitivo a lo político.
losófico; abundan, por contraste, las que La verdad, el lenguaje, el propio infinito
especifican las diferentes funciones o ta- (Dios) definidos en función de la polis.
reas que debe cumplir este saber. una de esta sustitución de las preguntas me-
ellas, de gran relevancia, es discenir la di- tafísicas ––preguntas sobre el qué (la iden-
mensión imperativa del lenguaje37: de qué tidad) y el por qué (el origen y la causali-
forma se puede distinguir, por ejemplo, un dad de algo)–– por preguntas pragmáticas
mandato, una orden y cómo se diferencia ––las que indagan sobre las circunstan-
de un consejo o de una exhortación. Las cias políticas, económicas y simbólicas
preguntas que permiten dilucidar la natu- de un fenómeno (cómo), sobre su utilidad
raleza de estos enunciados son: quién ha- y función (para qué) y sobre las condicio-
bla, a quíen se dirige y bajo qué circuns- nes de enunciación y sus agentes (quién,
tancias se produce este acto de habla; de qué manera, en nombre de quién),
todas destacan el lado pragmático del len- etc.—, resulta sólo parcialmente traducible
guaje en detrimento de su lado semántico. a los planteamientos pragmático-conver-
estas interrogaciones indagan sobre el ca- sacionales de Rorty o Vattimo. sobre todo,
rácter performativo del lenguaje; esa di- porque en las preguntas hobbesianas la
mensión que convierte al lenguaje en ac- reflexión sobre el lenguaje se abre a la
ción, que permite, como diría Austin en su potencia y a la sujeción de los cuerpos. el
bello libro muchos años después, hacer poder, la representación, la coerción, el

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La parábola del rey filósofo y el pragmatista. Dos relatos sobre el fin de la filosofía, la democracia...

estatus simbólico y económico de los que tran al soberano las reglas de comporta-
participan en el diálogo adquieren, desde miento” (Vattimo, 2013, 196). Hay en este
esta perspectiva, mayor protagonismo que relato, pues, una identificación del final de
la invención de nuevos vocabularios. esta la filosofía como metafísica con el asen-
tensión constituye el primer ángulo desde tamiento práctico y político de los regí-
el que cabe contemplar la paradoja que menes democráticos. Pero como hemos
guía soterradamente este ensayo. Desde aprendido con Hobbes, esto no tiene que
esta mirada, la propuesta del filósofo prag- ser necesariamente así. el fin de la meta-
mático contemporáneo y la del filósofo física puede terminar en un estado totali-
del siglo XVII no sólo van a tener, como tario donde sea la autoridad y la espada so-
ya sabemos e insistiremos a continuación, berana la que interrumpa el nudo
lecturas políticas muy distintas de la con- Gordiano del conflicto de las interpreta-
tingencia, sino que la propia radicalidad de ciones, de la lucha entre las opiniones di-
las preguntas pragmáticas que lanza Hob- vergentes, del diálogo interminable sin
bes parece desbordar de alguna manera el que nadie pueda decidir el sentido o la in-
planteamiento de Rorty o Vattimo. esto se terpretacion correcta de una ley, una
debe, quizá, a que éstos todavía manejan norma, una tradición38. Pareciera que al fi-
una noción demasido espiritual y huma- nal el que tiene razón es el rey–revolucio-
nista del filósofo y la filosofía no metafi- nario-filósofo y lo que habría que pregun-
sicos. en este sentido, la total subordina- tarse es lo siguiente: fin de la metafísica sí,
ción de la verdad al orden civil, el fin de pero, ¿para quién, para hacer qué? solo de
la metafísica, parecería requerir, si cree- ese modo se lograría entender de una
mos a Hobbes, algún tipo de postura anti- forma pragmática el fin del relato metafí-
humanista. sico y se podría evitar la propia carga me-
el segundo lado de la paradoja tiene tafísica de preguntas como las siguientes:
que ver, como terminamos de señalar, con ¿qué se debe entender por el fin de la me-
las diferentes consecuencias políticas que tafísica? ¿Por qué la metafísica llegó a su
puede tener el fin de la metafísica. Rorty fin? Pero como ya se ha visto la pregunta
y Vattimo avecindan la clausura de la me- pragmática le sirve tanto al más autorita-
tafísica con la celebración de la diversidad rio de los filósofos, el filósofo-rey, como
y la democracia. Para estos autores, y a los más convencidos demócratas, Dewey
otros como ellos, la democracia no tiene o Rorty. La parábola del rey filósofo y del
un fundamento riguroso en la deflación de pragmatista termina en una aporía.
la idea de verdad, pero esta sí proporciona
buenas razones para la defensa de una co-
munidad democrática. Como sostiene Vat-
timo inteligentemente: “Donde hay de-
mocracia no puede haber una clase de
detentadores de la “verdadera” verdad que
o bien ejercen directamente el poder (los
reyes-filósofos de Platón) o bien suminis-

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noTAs
1
Queremos manifestar nuestro reconocimiento a teresa poner el foco en ese conjunto de ideas comparti-
José Cerna bazán por su atenta lectura del artículo y sus das. una narración biográfica de Vattimo sobre su pri-
pertinentes sugerencias. José Luis moreno Pestaña es- mer encuentro y la constatación de que “decíamos cosas
cuchó algunas de las ideas aquí presentes en una ver- parecidas”, en Rorty, 2009a, 8. La misma tesis más am-
sión previa del texto, hizó críticas y comentarios agudos pliada se encuentra en Vattimo, 2008, 143-144, 158,
a algunas de ellas y nos invitó a desarrollarlas en un tra- 223. Para un tratamiento conjunto de ambos filosofos,
bajo más amplio. es, por tanto, el “instigador” último cf., por ejemplo, Grondin, 2006, 109-117; zabala, 2009,
de este ensayo y los autores no queremos dejar pasar la 31, 35-38; zabala, 2006, 15-45.
ocasión de agradecerle su inteligencia y amabilidad. 3
Como especificaremos más adelante, en Hobbes
Con Yansi, Gema y Antón la deuda es, una vez más, in- parecen tomar pie, por un lado, algunos de los princi-
finita. Podemos trabajar gracias al “crédito” que nos pios que se consideran esenciales a la democracia, por
dan. ejemplo, la defensa de la libertada negativa. Por otra
2
Para aquellos que sorprenda la inclusion de Rorty parte, también parecen emanar de su filosofía política
bajo un rótulo que suele ser reservado a Vattimo, sirva algunos de los postulados que han sostenido a ciertos
como boton de muestra lo dicho por el propio Rorty en regímenes autoritarios y totalitarios.
la introducción al volumen segundo de sus Philosophi- 4
Para aquellos todavía perplejos ante el juego de
cal Papers II: “mis ensayos deben entenderse como una espejos que queremos establecer en el presente ensayo
muestra de lo que un grupo de filósofos italianos actua- entre la tesis de la contingencia y sus ramificaciones po-
les han denominado ‘pensamiento débil’” (Rorty, 1991, líticas y educativas tanto en Hobbes como en el pensa-
6). La colaboración e intercambio de pareceres entre miento débil de Vattimo y Rorty, quizá el siguiente texto
ambos filósofos, siempre desde un trasfondo común y del primero contribuya a comenzar a ver su posible
un mutuo y ferviente aprecio, está ahí para cualquiera plausibilidad y rendimiento: “un principio moderno
que coteje sus libros y algunos de los proyectos realiza- como el de “auctoritas, non veritas, facit legem” ha es-
dos conjuntamente, lo cual no significa que no haya tado siempre expuesto a la crítica racionalista de inspi-
también diferencias apreciables. en este ensayo nos in- ración metafísica, incluso cuando estaba impulsada por

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Jorge Brioso y Jesús M. Díaz Álvarez

las mejores intenciones revolucionarias. Cuando en po- nombre de diatribae, es decir, formas de pasar el rato”
lítica entra en escena la verdad, comienza también el (Hobbes, 2011, 543)
peligro del autoritarismo, el autoritarismo precisamente 11
Leo strauss en su libro The Political Philosophy
del ‘cierre’ [de la sociedad] que Popper estigmatiza en of Hobbes afirma: “That means the introduction of this
su obra” (Vattimo, 2013, 194). method [el método geométrico] into political philo-
5
uno de los dos autores de este texto ha mantenido sophy presupposes the previous narrowing-down of the
durante el último año un seminario con Higinio marín political problem, i.e., the elimination of the funda-
Pedreño sobre el Leviatán de Hobbes. La lectura que mental question as to the aim of the state. The intro-
proponemos aquí está llena de los rumores de esas con- duction of Galileo’s method into political science is thus
versaciones, lo cual complica aún más la noción de au- brought at the price that new political science form the
toría en este texto. outset renounces all the discussion of the fundamental,
6
uno de los filósofos que con más claridad ha pen- the most urgent question[...]The ‘resolutive-compositve
sado la relación entre lo civil y la mortalidad es Javier method’ thus presuposses nothing less that a systematic
Gomá Lanzón. en Aquiles en el Gineceo afirma que renunciation of the question of what is good and fitting”
toda experiencia efectiva de mortalidad es política. en (strauss, 1936, 151-152). en esta sustitución de las pre-
Necesario pero imposible se atreve a proponer la idea de guntas sustantivas por preguntas pragmáticas, preguntas
una “civilización del infinito” que conlleva la sustitu- que no se interesan por el sentido y definición del es-
ción de la noción de inmortalidad por la de una morta- tado sino por su funcionamiento, ve strauss la mayor
lidad postergada. La experiencia de la mortalidad, de la originalidad y el mayor error de la teoría política de
finitud, llega a convertirse, para Gomá Lanzón, en uno Hobbes. esto tiene además otra consecuencia de ex-
de los fundamentos de la sociedad democrática, el otro traordinaria importancia para pensar la filosofía política
es la igualdad. Como se tratará mostrar en este ensayo moderna en contraposición a la antigua, en el principio
ni el proceso de civilización del infinito ni el del fin de no se coloca una ley sino un derecho cuyo sustrato es un
la filosofía, cuyo estrecho vínculo en el pensamiento de apetito, un deseo, una pulsión. La importancia de esto se
Hobbes se verá enseguida, necesariamente terminan con verá más tarde en el desarrollo del texto.
la fundamentación y la defensa de la sociedad demo- 12
Imputarle este error, entender la metafísica tam-
crática. bién como teología, a los escolásticos y la institución
7
morir es un hecho biológico del que participa todo universitaria es una exageración de Hobbes. Ya en el
lo vivo incluido, en casos excepcionales, los propios dio- texto aristotélico ambas acepciones coexistían y en
ses. mortal es solo aquel que es un individuo y tiene con- cierto sentido se confundían: ciencia del ser en cuanto
ciencia de serlo. La mortalidad, además, es más una ser y filosofía primera o teología. La historia de la me-
experiencia de la muerte ajena que de la propia. Para tafísica, se podría decir, es la del contrapunto, lucha, fu-
Hobbes, la experiencia de la mortalidad, la propia y la sión de estas dos acepciones. Para el estudio de estos
ajena, contiene, como uno de sus mínimos denominado- problemas en el texto aristotélico ver Pierre Aubenque:
res, el miedo a la desaparición total. el otro común de- El problema del ser en Aristóteles. Para la historia de la
nominador lo constituye la experanza en algún tipo de metafísica uno de los mejores libros sigue siendo El ser
perdurabilidad, de invulnerabilidad ante la inminente des- y los filósofos de Étienne Gilson.
trucción. Con miedo, con mucho miedo, y de algunas 13
“si hubiera un lenguaje en el que no hay verbo
gotas de esperanza se construye ese hombre gigante- que sea equivalente a est, o ser, los hombres que habla-
monstruo-máquina-dios mortal que es el Leviatán. ran ese lenguaje no serían por ello menos capaces de in-
8
Para una monografía que hace de esta expresión ferir, concluir y llevar a cabo todo tipo de
la clave del estudio de la filosofía política de Hobbes, cf. razonamiento” (Hobbes, 2011, 548).
Hernández Losada (2002). 14
en este texto destacamos el lado antihumanista
9
no nos interesa en este artículo evaluar la veraci- de la filosofía de Hobbes que se convierte en protagó-
dad que pueda tener la teoría del surgimiento de la filo- nico en el Leviatán. sin embargo, esta lectura no le hace
sofía que propone Hobbes. Lo que importa más bien es justicia a la totalidad de su obra. Para estudiar la im-
ofrecerla como muestra de uno de los primeros intentos portancia que tiene el legado humanista en la obra de
de hacer una teoría social del conocimiento filosófico Hobbes ver Reason and Rhetoric in the Philosophy of
vinculada, además, a la función que cumplieron las es- Hobbes.
cuelas filosóficas en el mundo antiguo y la universad 15
Para Hobbes doctrinario es cualquier saber que
en el mundo medieval y renacentista. se separa de los cuerpos y sus movimientos, que pro-
10
“De aquí vino el que el lugar donde alguno de pone un orbe espiritual, que trata de concebir un mundo
esos enseñaba y disputaba fuese llamado schola, que en hecho de sustancias incorpóreas como las almas.
su lengua significa ocio y sus disputaciones recibían el 16
Quentin skinner es quien ha señalado con mayor

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La parábola del rey filósofo y el pragmatista. Dos relatos sobre el fin de la filosofía, la democracia...

lucidez este carácter ficcional de la figura del soberano una máscara ritual, es fundamentalmente un hecho de
y del propio Commonwealth en Hobbes: “The act of co- derecho. Para el derecho, dicen los juristas, sólo existen:
venating may thus be said to engender two persons that las personas, las res y las actiones, principio que toda-
have no previous existence in the state of nature. one is vía hoy rige la división de nuestros códigos. este prin-
the artificial person to whom we grant authority to cipio es resultado de una evolución especial del derecho
speak and act in our name. The name of that person... is romano.”( mauss, 1979, 323)
the sovereign. The other is the person we bring into 20
no se debe olvidar, como ya se señaló, que el
being when acquire a single will and voice by way to saber prudencial, que es el que domina en el estado de
authorize a man or assembly to serve as our representa- naturaleza, es compartido tanto por los animales como
tive. The name of this further person... is the Common- por los hombres y por lo tanto no puede ser definido
wealth or state”( skinner, 2008, 345) nosotros como un saber plenamente racional ni los que lo ejecu-
añadiríamos que el pacto también genera una tercera tan merecen en propiedad el nombre de individuos.
persona, la del sujeto-súbdito autor de los actos que eje- 21
norberto bobbio en su estudio Thomas Hobbes
cuta la persona ficticia del soberano. esto supone que and The Natural Law Tradition trata de resolver la pa-
en el pensamiento político de Hobbes tanto el soberano, radoja de que el filósofo inglés sea considerado, a la
como la comunidad política y el sujeto-ciudadano ten- vez, tanto uno de los principales teóricos del iusnatura-
gan un carácter ficcional. La radicalidad de esta postura lismo del siglo XVII junto con Grocio, spinoza y Pu-
separa a Hobbes de las tres más influyentes teorías del fendorf y como uno de los fundadores del positivismo
contrato: Locke, Rousseau y Kant. el otro rasgo de su jurídico. La solución que propone para este dilema es
separación es el uso del termino covenant en lugar de la siguiente: “Hobbes invents, elaborates, and refines
contract. Aloysius martinich en su libro The Two Gods the most sophisticated ingredients of natural law theory
of Leviathan es el único estudioso de Hobbes, que co- –the state of nature, the laws of nature, individual rights,
nocemos, que ha investigado este último problema a the social contract. but he ingeniously employs them to
fondo enfatizando los ecos bíblicos que el término co- build a gigantic obedience machine” (bobbio, 1993,
venant tiene en la tradición inglesa y el carácter de re- 171). La más importante ley natural es la búsqueda de
lato de futuro, de promesa, que todo “covenant” o pacto la paz y su preservación porque esta es la única forma
le impone a todo acuerdo. Los pactos o covenants no se de garantizar la propia supervivencia. solo se alcanza
hacen con un individuo sino con un representante o per- la paz a través de la obediencia de las leyes civiles o po-
sona pública. un pacto supone la unión bajo una misma sitivas implementadas por el soberano.
persona pública de todo el cuerpo social y compromete 22
“To do all the list” dice el texto original. “List”
a la descendencia y no solo a las entidades que partici- es un término del inglés antiguo que connota deseo. el
pan en el mismo. La disolución del pacto supone la di- Oxford English Dictionary define esta acepción en los
solución del orden civil. siguientes términos: “Appetite, craving; desire, longing;
17
Lo que hace de la multitud una comunidad es la inclination...now only arch.”
unidad del representante, la figura del soberano o ma- 23
“A problem of sovereignty arises only when the
gistrado, y no la de lo representado, la multitud. La uni- right to rule on the part of reason and reasonable people
dad, por tanto, es una entidad representativa y ficcional are called into question (strauss, 1936, 159).
como la propia persona representante lo es. 24
“Que el alma humana es eterna por naturaleza y
18
el soberano funda el derecho de propiedad ya es, en sí misma, una criatura, independiente del cuerpo,
que previo a la soberanía todos los hombres pueden re- o que cualquier hombre es inmortal de otro modo que
clamar para sí todas las cosas que existen. esta univer- no sea por virtud de la resurrección del último día es,
salidad del reclamo, poder desearlo todo sin la excepto en los casos de enoch y elías, una doctrina que
limitación de lo que se considera ajeno, que poseen los no aparece en la escritura.” (Hobbes, 2011, 379).
humanos por igual es tambien lo que impide que nin- 25
Importa enfatizar la distancia que tiene nuestra
guna cosa pueda ser considerada como propia en el es- postura de la que defendió Giorgio Agamben en su tri-
tado de naturaleza ya que todo nos puede ser logía Homo Sacer. el filosofo italiano proponía en esa
arrebatado. trilogía el campo de concentración, con el estado de ex-
19
Para el uso que el concepto de de persona tiene cepción que le es inherente, como paradigma biopolí-
en diferentes culturas y su evolución sigue siendo im- tico de lo moderno, pero aquí se afirma algo totalmente
presicindible el estudio de marcel mauss titulado distinto: que el fin de la metafísica, al menos tal y como
“sobre una categoría del espíritu humano: la noción de la concibe Hobbes, puede tener resultados tan antagó-
persona y la noción de yo. Allí afirma: “[...] ‘persona’ es nicos como las democracias liberales y los estados to-
algo más que el resultado de una organización, es algo talitarios. no deja de ser desconcertante, sin embargo,
más que el nombre o el derecho de un personaje o de que una noción del pensamiento que enfatiza la finitud

ISEGORÍA, N.º 52, enero-junio, 2015, 267-293, ISSN: 1130-2097 291


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Jorge Brioso y Jesús M. Díaz Álvarez

de todo lo que existe, el carácter contingente de toda José Colomina, Antonio Lastra, Joan David mateu, Fe-
verdad respecto al orden civil, la ausencia de funda- derico Petrolati, David Pérez Chico, Pedro J. Pérez, mi-
mento ultimo, pueda producir nociones de la politeia guel A. Quintana, Vicente Raga y Gabriel Rodríguez.
tan opuestas entre sí. Abundaremos en esta ambigüedad Decir, por otro lado, que la bibliografía sobre Rorty es
en el desarrollo de la segunda parte del trabajo y la dis- ya inmensa, pero en este contexto quizá merezca la pena
cutiremos más en profundidad en la coda. mencionar un libro que a finales de los ochenta se pre-
26
Para algunas de esas diferencias, no menores, cf. , guntaba, a propósito de un ensayo del filósofo estadou-
por ejemplo, Vattimo, 2012. También se leerá con nidense, si la filosofía como “institución” y como
mucho provecho marramao, 2009, 98-108. Paras las disciplina estaba en crisis. Cf. Cohen y Dascal, 1989.
confluencias, sirvan como botón de muestra, Rorty, 30
un apunte breve con respecto al por qué de la
2009b, 177-187. Para diferencias y confluencias anali- elección de Rorty y no de Vattimo para desarrollar este
zadas por los propios protagonistas, ver Rorty/Vattimo, asunto. Hemos escogido a Rorty porque parece haber
2006. La bibliografía sobre ambos autores por separado tratado la tríada educación, universidad y filosofía de
es enorme. sobre la que cubre la figura de Rorty hare- un modo más “orgánico” en relación al conjunto de su
mos un breve apunte más adelante. en relación a Vat- pensamiento. el estatuto de la filosofía, su función en el
timo, recomendar la ya insuficiente que aparece en seno de la sociedad y su lugar y relación con el conjunto
zabala, 2009, 477-496 y reconocer entre nosotros la de los demás saberes le interesaron al filósofo pragma-
labor de traducción e interpretación de Teresa oñate y tista a lo largo de toda su vida. es más, no es una exa-
Carmen Revilla, entre otros. geración decir que una parte importante de sus
27
Hay que señalar que el fin de la metafísica se ha reflexiones han estado relacionadas, de una u otra
pensado de muy diferentes modos y su formulación está forma, con ese tipo de indagaciones metafilosóficas, in-
muy condicionada por la tradición filosófica a la que se dagaciones que tuvieron un cierto nivel de intensifica-
pertenezca. nosotros hemos dado cuenta en este ensayo ción en los 10 últimos años de su vida. Cf.,
de dos relatos sobre el particular, pero alguien como Ru- especialmente, la segunda parte del volumen cuarto de
dolf Carnap o Karl Popper, por citar sólo dos ejemplos, sus Philosophical Papers titulada precisamente Philo-
entiende el fin de la metafísica de modo muy diferente sophy’s Place in Culture. el propio título que da nom-
a como lo hacen Heidegger, Rorty o Vattimo. en la coda bre al libro, Philosophy as Cultural Politics, indica
se reflexionará sobre el sentido que puede tener la pre- igualmente la importancia que le concedió. También
gunta sobre el final de la metafísica desde un punto de hemos tenido especialmente en cuenta los artículos
vista estrictamente pragmático. “education as socialization and as Individualization” y
28
Al hilo de esta tesis, no podemos entrar ahora en “The Humanistic Intellectual: eleven Theses” (Rorty,
un asunto altamente polémico en el pensamiento de 1999b, 114-130). Por otra parte, no queremos concluir
Rorty: las tensión público/privado y el modo en que eso esta nota explicativa sin mencionar que existen des-
afecta al estatuto de la filosofía. nuestra interpretación acuerdos entre Vattimo y Rorty sobre estos asuntos. Vat-
entiende, frente a lo que suele ser común y, a veces, timo parece temer en ciertas ocasiones una excesiva
frente las ambigüedades del mismo Rorty, que la filo- “literaturización” de la filosofía por parte de Rorty. Pero
sofía conversacional tiene un amplio papel emancipa- más allá de la justicia o no de esta y otras críticas, pen-
dor en la esfera pública. Pensamos que la idea rortyana samos que tales desacuerdos se dan siempre dentro de la
de la filosofía como política cultural, que desarrollamos asunción compartida de un gran marco común. sobre
más adelante, así lo atestigua. sobre algunas de estas esa comunidad de fondo es muy ilustrativo ese encen-
tensiones, cf. Del Águila, 1998, 9-25 y Raga Rosaleny, dido homenaje a Rorty que es Comunismo hermenéu-
en Colomina y Raga 2010, 89-111. tico. De Heidegger a Marx. sus autores dicen allí, entre
29
Dos obras muy recientes permeadas por estas otras cosas, que el filósofo norteamericano es, junto a
ideas son: Vattimo, 2013 y Rorty 2010. La relación de Derrida, el inspirador del libro (Vattimo y zabala, 2012,
la filosofía con las humanidades, así como la nueva Pos 288).
identidad no metafísica de la filosofía débil o conversa- 31
Las intervenciones de Rorty sobre la educación se
cional, serán abordada más adelante desde la óptica rort- enmarcan en las disputas más amplias que la derecha y la
yana. sobre todos estos asuntos y otros aledaños a ellos izquierda estadounidense tienen sobre los temas cultura-
en el conjunto de la obra del estadounidense, cf., entre les y la propia identidad del pais. La posición del prag-
nosotros, el excelente volumen La filosofía de Richard matista, vinculada a lo que podría llamarse el ala
Rorty. Entre pragmatismo y relativismo (Colomina y socialdemócrata y liberal de esa izquierda, también lla-
Raga, 2010). el volumen contiene artículos de algunos mada “izquierda reformista”, ha sido ampliamente con-
de los más cualificados especialistas en la obra de Rorty testada, desde luego, por los conservadores en general y
dentro del ámbito español: Ramón del Castillo, Juan por los straussianos a lo Allan bloom ––con quien com-

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La parábola del rey filósofo y el pragmatista. Dos relatos sobre el fin de la filosofía, la democracia...

partió clase en Chicago––, en particular. Pero las impug- tura humanista de Rorty a partir de ciertas ideas de Hob-
naciones más feroces han venido por parte de lo que en bes.
algunas obras califica como “izquierda cultural” o “iz- 35
Cf., el ilustrativo texto de Vattimo de la nota 4 y
quierda neonietzscheana”. sobre ésta, grandemente in- Rorty, 2009b, 181.
fluenciada, aunque no sólo, por las obras de nietzsche, 36
Parece, por lo indicado anteriormente, que la uni-
Heidegger, Foucault y Derrida, cf., Rorty, 1999a, 71-96. versidad no sería el mejor ámbito para su desarrollo.
32
Rorty, 1999b, 114-126. 37
el capítulo más relevante del Leviatán a este res-
33
el papel de la razón será precisamente roturar, pecto, aunque es un tema que aparece en muchos otros,
urbanizar el terreno o “espacio lógico” previamente mo- es el XXV: “Del consejo”.
dificado o reinventado por la imaginación. Cf. Rorty, 38
“Las leyes escritas, si son breves, pueden ser fá-
2010, 189-212. cilmente mal interpretadas debido a los diversos signi-
34
Para una postura muy crítica ante esta noción de ficados que cabe dar a una y dos palabras; y si son leyes
la universidad y de las humanidades, ver el libro de An- largas, serán todavía más oscuras...Para él[el legislador]
tonio Valdecantos El saldo del espíritu (Valdecantos, no puede haber en la ley ningún nudo insoluble, ya sea
2014). Resulta también muy recomendable la reseña porque puede encontrar los cabos que le guíen a desha-
que hizo sobre esta obra José Luis moreno Pestaña: cerlo, ya sea por el procedimiento de hacer tantos cor-
“Para que no se salde el espíritu nos sigue valiendo or- tes como quiera, lo mismo que hizo Alejandro con su
tega. Conversación con Antonio Valdecantos” (moreno espada en el caso del nudo Gordiano, haciendo uso del
Pestaña, http://moreno-pestana.blogspot.com.es). en la poder legislativo, cosa que ningún otro intérprete de la
coda de este texto se hará una lectura crítica de la pos- ley puede hacer”(Hobbes, 2011, 239).

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