Deilys F.

Rivas M
Abogado.
I.P.S.A. 218651

Yo, DAVID RICARDO CÁCERES DELGADO, venezolano, mayor de edad, casado, titular

de la Cédula de Identidad Nro. V-9.694.535, domiciliado en el Conjunto Residencial Terrazas

de San Diego, Torre 42, Apartamento 47, Municipio San Diego, Estado Carabobo, por medio

del presente documento declaro: Que confiero PODER GENERAL DE

ADMINISTRACIÓN Y DISPOSICIÓN, a la Ciudadana, SHEYLA CARILI

MARCIALES DE HORTA, venezolana, mayor de edad, casada, titular de la Cédula de

Identidad Nro. V-14.249.407, con domicilio en la Urbanización Valle de Oro, Conjunto

Residencial Los Budares Casa Nro 34, Municipio San Diego, Estado Carabobo, para que en

mi nombre y en mi representación sostenga, ejerza, defienda y haga valer mis derechos,

intereses y acciones en todo lo que tenga que ver en mis bienes muebles e inmuebles, cuentas

bancarias personales. En consecuencia mi nombrada apoderada queda facultada para comprar,

vender, arrendar, subarrendar, permutar, constituir opción a compra, así como también podrá

estipular y recibir el precio por las ventas que se haga de los mismos, recibir cantidades de

dinero, otorgando los respectivos documentos, finiquitos y recibos; abrir, cerrar y movilizar

cuentas bancarias, retirar chequeras gestionar cambios de claves cualquier tipo de operación

que tenga que ver con mis tarjetas de debito y de crédito que pudieran llegar a mi nombre en

cualquier agencia bancaria del país, igualmente podrá en mi nombre, gestionar, retirar, firmar

y realizar todos los trámites pertinentes y necesarios para lograr la legalización y apostillado

de cualquier documento de mi interés, así como el de introducir, llenar formularios, firmar los

libros, solicitar y retirar ante los organismos correspondientes tales como: Ministerio del Poder

Popular Para Las Relaciones Interiores Justicia y Paz, Ministerio del Popular Para Las

Relaciones Exteriores, Embajadas, Consulados, Registros, Notarias y cualquier otro ente

público. Y todos los documentos de mi interés, hacer solicitudes, entregar recaudos, retirar

documentos, y en fin hacer todas las diligencias necesarias para lograr lo citados documentos,

así como también podrá tramitar cualquier otro documento de mi interés. Podrá mi apoderada

constituir garantías, citar o darse por citados o notificados, cobrar letras de cambio, otorgar las

escrituras, recibos y cancelaciones referentes a los bienes vendidos; así como los respectivos

protocolos y registros que requieran las operaciones o actos jurídicos para los cuales queda

facultada. Igualmente podrá sustituir ese mandato en forma total o parcial y otorgar y revocar
poderes judiciales en mi nombre abogados de su confianza, confiriéndole inclusive facultades

especiales de convenir, desistir, transigir, comprometer en árbitros, solicitar la decisión según

la equidad, recibir cantidades de dinero otorgando los respectivos finiquitos y recibos y

cualquier otra que creyere conveniente. Con el otorgamiento de este poder queda amplia y

suficientemente facultada para representarme en todos y cada uno de los actos de la vida civil

ejercidos ante cualquier autoridad de la República, realizar gestiones pertinentes y necesarias

para la legalización para la posterior y apostillas de La Haya, de mis documentos personales,

tales como partida de nacimiento, documentos de estudios, etc., en virtud de este mandato

podrá mi apoderada introducir, llenar formularios, firmar los mismos, solicitar y retirar ante

los organismos correspondientes tales como jefaturas y Alcaldías, Registros Principales,

Ministerios del Poder Popular Para La: Educación, Justicia, Relaciones Interiores, Exteriores y

cualquier otro Ente, Ministerio u Organismo necesario y en todos aquellos asuntos no indicado

en el presente documento. En general queda mí apoderada facultada ampliamente para hacer,

con respecto a mis bienes, derechos y acciones, sin ilimitación alguna, en cuanto no sea

opuesto al derecho, pues la anterior enumeración es solo enunciativa y por ningún respecto

taxativa o limitativa. JURO LA URGENCIA DEL CASO, EN CONCORDANCIA CON

EL ARTICULO 29 DE LA LEY DE REGISTRO Y NOTARIAS, HABILITO EL

TIEMPO QUE SEA NECESARIO. Es todo en el lugar y a la fecha de su presentación.