El Muchacho Desobediente

Havía una vez un pequeño muchacho llamado Juan Santos. Este

muchacho tenía una afectuosa madre que lo amava muchísimo. un día
Juan estaba saliendo a la calle, y su madre le dijo, "Juan, no bayas al
río. Tengo miedo de que te ahogues si lo hases."

No sé lo que juan dijo a su madre; pero me temo que él pensó, "no

importa lo que mi madre dise; iré al río"; porque él salió y se encontro
con otro muchacho, llamado Jorge que vivía en una casa muy cerca de
dónde el padre de Juan vivía, y los dos vajaron al río.

Jorge era más grande que Juan. Él tenia dos años o tres años más,
Jorge y Juan entraron a una canoa. Sabes lo que es una canoa Es una
pequeña barca. Estos dos pequeños muchachos entraron en esta
pequeña barca para tomar un paseo en el río. Ellos estaban
completamente solos.

Fueron a un lugar donde una ves huvo un puente para que la gente
caminara o fuera a caballo para cruzar el río. Parte del puente se había
caído y quitado; pero había todavía algunos postes dejados allí,
permanecían debajo del agua; y muy pronto la pequeña varca golpeó
contra uno de estos postes, y la desestabilisó, los dos muchachos
calleron al agua. ¡Oh, cómo se esforsaron, y gritaron para que alguien
biniera a ayudarlos! Pero nadie estaba serca.

Jorge podía nadar, y después de un poco de trabajo consiguió salir; y

entonces corrió y yamó a algunos hombres para que binieran y salvaran
a Juan de ahogarse; pero cuando llegaron al lugar no lo pudieron
encontrar.