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Biblia
Textos Explicados y
Lecciones
“Tu palabra es una lámpara para mi pie, y una luz para mi vereda.” (Salmo 119:105)
*** w83 15/6 págs. 29-30 Génesis inspira fe, esperanza y ánimo ***
El mundo antediluviano
• 1:26—¿Cómo se hizo al hombre a la imagen y semejanza de Dios?
La forma de Dios es desconocida por el hombre (Deuteronomio 4:15-20). Pero el
hombre fue hecho a la imagen y semejanza de Jehová en el sentido de que fue dotado de
atributos divinos, como la justicia, la sabiduría, el poder y el amor (Deuteronomio 32:4;
Job 12:13; Isaías 40:26; 1 Juan 4:8). Puesto que el Hijo de Dios, la Palabra, también
posee esas cualidades, Jehová apropiadamente le dijo: ―Hagamos un hombre a nuestra
imagen, según nuestra semejanza‖. (Juan 1:1-3, 14.)
• 4:17—¿Dónde consiguió Caín su esposa?
Adán ―llegó a ser padre de hijos e hijas‖ (Génesis 5:4). Así que Caín tomó como esposa
a una de sus hermanas. Más tarde, la Ley que Dios dio a los israelitas no permitió el
matrimonio entre un hermano y una hermana carnales. (Levítico 18:9.)
• 6:6—¿En qué sentido ―sintió pesar‖ Jehová por haber hecho a los hombres?
La palabra hebrea que ahí se traduce ―sintió pesar‖ se relaciona con un cambio de
actitud o intención. Jehová es perfecto, y por lo tanto no cometió error alguno cuando creó
al hombre. Pero sí hubo un cambio en su actitud mental con relación a la inicua
generación antediluviana. Dios cambió de la actitud de Creador de humanos a la de
destructor de ellos por el desagrado que le causó la iniquidad de ellos. Jehová lamentó
que la iniquidad del hombre requiriera que se efectuara una vasta destrucción de vida,
pero se vio obligado a obrar para apoyar Sus justas normas. El hecho de que preservó a
algunos humanos muestra que su pesar se limitó a los que se habían echado a perder de
palabra y obra. (2 Pedro 2:5, 9.)
La humanidad entra en una nueva Era
• 8:11—Si el Diluvio arruinó los árboles, ¿dónde consiguió la paloma la hoja de olivo?
Sin duda alguna las aguas del Diluvio sí afectaron adversamente a muchos árboles. Sin
embargo, Teofrasto, filósofo y científico griego, y Plinio el Viejo, naturalista romano,
informaron que el olivo ha crecido bajo el agua en el mar Rojo y hasta ha conservado su
verdor en tales circunstancias. De modo que un olivo pudiera haber quedado vivo bajo el
agua por algunos meses durante el Diluvio. Al bajar las aguas que habían caído durante
el Diluvio, un olivo que hubiera quedado sumergido volvería a estar en tierra firme y
podría echar hojas, una de las cuales pudiera haber obtenido fácilmente la paloma.
• 9:24, 25—¿Por qué maldijo Noé a Canaán, si Cam fue el ofensor?
Es muy probable que Canaán fuera culpable de algún abuso o perversión contra su
abuelo Noé, y Cam presenciara esto sin oponerse a ello. En vez de eso, parece que Cam,
hijo de Noé, difundió lo ocurrido mientras Sem y Jafet tomaron medidas para cubrir a su
padre. Por consiguiente, Sem y Jafet fueron bendecidos; Canaán, el probable
perpetrador, fue maldecido, y Cam, espectador y chismoso, sufrió a causa de la
vergüenza que aquello trajo sobre su prole. Aunque las Escrituras no suministran todos
los detalles, lo importante es que Jehová hizo que Noé pronunciara la profecía, y Dios
efectuó el cumplimiento de ella cuando a los cananeos que no fueron destruidos por los
israelitas se les puso en servidumbre a los descendientes de Sem. (Josué 9:23; 1 Reyes
9:21.)
• 10:25—¿Cómo se ―dividió‖ la tierra en los días de Peleg?
Peleg vivió desde 2269 hasta 2030 a. de la E.C. Su nombre significaba ―división‖, y si
recibió ese nombre cuando nació, éste fue profético de una notable división que ocurrió
durante su vida. Fue entonces cuando ―se dividió la tierra [o ―la población terrestre‖]‖. El
registro bíblico indica que ―en sus días‖ Jehová causó una gran división al confundir el
lenguaje de los constructores de Babel y ‗dispersarlos sobre toda la superficie de la tierra‘.
(Génesis 11:9; vea también 10:1, 6, 8-10; 11:10-17.)
Patriarcas de fe duradera
• 15:13—¿Cómo se cumplió la predicha aflicción de 400 años que sufriría la prole de Abrán?
Este período de aflicción se extendió de 1913 a 1513 a. de la E.C. Cuando Isaac, hijo de
Abrahán, fue destetado a la edad de unos 5 años, en 1913 a. de la E.C., su medio
hermano Ismael (que entonces tenía unos 19 años de edad) ‗se burló‘ de él. La gravedad
de tal mofa del heredero de Abrahán se ve claramente en la reacción de Sara y el hecho
de que Jehová aprobara la insistencia de ella tocante a despedir a Agar y su hijo Ismael
(Génesis 21:8-14; Gálatas 4:29). Ese período de aflicción de 400 años terminó con la
liberación de los israelitas, quienes estaban cautivos en Egipto, en 1513 a. de la E.C.
• 19:30-38—¿Excusó Jehová el que Lot se emborrachara y engendrara hijos mediante sus dos
hijas?
Jehová no excusa ni el incesto ni la borrachera (Levítico 18:6, 7, 29; 1 Corintios 6:9, 10).
Además, Lot, sobrino de Abrahán, deploró los ―hechos desaforados‖ de los habitantes de
Sodoma, y evidentemente se lamentó de la conducta incorrecta en la que incurrió, pues el
Examinador de corazones lo consideró ―justo‖ (2 Pedro 2:8). El mismísimo hecho de que
las hijas de Lot lo emborracharan indica que ellas se daban cuenta de que él no
consentiría en tener relaciones sexuales con ellas mientras estuviera sobrio. Pero como
forasteros en la tierra, sus hijas pensaron que ésa era la única manera de evitar la
extinción de la familia de Lot. El registro no está en la Biblia para despertar pensamientos
eróticos, sino para revelar el parentesco que tenían los moabitas y los amonitas con los
descendientes de Abrahán, los israelitas.
• 28:12, 13—¿Cuál fue el significado del sueño de Jacob relacionado con una ―escalera‖?
Esta ―escalera‖ (que puede haber tenido la apariencia de un tramo ascendente de
piedras) indicó que hay comunicación entre la Tierra y el cielo. Mostró que los ángeles
ministran entre Jehová y los humanos que tienen Su aprobación. (Compare con Juan
1:51.)
• 31:19—¿Qué eran los terafim que Raquel hurtó a Labán?
Los terafim eran dioses o ídolos de familia. En Mesopotamia se han hecho hallazgos
arqueológicos que señalan que la posesión de tales imágenes tenía que ver con quién
recibiría la herencia de la familia. Es posible que Raquel tuviera eso presente y razonara
que tenía razón en tomar los terafim debido a los tratos engañosos de su padre, Labán,
con su esposo, Jacob (Génesis 31:14-16). Pero no hay nada que indique que Jacob trató
alguna vez de usar los terafim para conseguir la herencia de la familia. Jacob se deshizo
de tales ídolos, a más tardar, cuando enterró todos los dioses extranjeros que le entregó
su casa. (Génesis 35:1-4.)
• 44:5—¿Utilizó realmente José una copa para leer agüeros?
José estaba resuelto a poner a prueba a sus hermanos, que no lo reconocieron. Así que
dio a su siervo la orden de que llenara de alimento los costales de ellos, colocara el dinero
de cada uno en la boca de su costal y pusiera la copa de plata que pertenecía a José en
la boca del costal de Benjamín. Así José se estaba describiendo a sí mismo como
administrador de un país pagano. Por lo tanto, la copa y lo que se dijo de ella eran
evidentemente parte de un subterfugio. Como fiel adorador de Jehová, José no usó
realmente la copa para leer agüeros, tal como Benjamín en realidad no la hurtó.
• 49:10—¿Hay alguna diferencia entre un cetro y un bastón de mando?
Sí. El cetro es el bastón que lleva un gobernante como símbolo de su autoridad real. El bastón
de mando es una vara larga que simboliza el poder de mando. La referencia que Jacob hizo a
ambos evidentemente indicó que en la tribu de Judá residirían autoridad y poder significativos
hasta la venida de Silo. Este descendiente de Judá es Jesucristo, aquel a quien Jehová ha
dado gobernación celestial. Cristo tiene autoridad real y posee el poder de mando. (Salmo 2:8,
9; Isaías 55:4; Daniel 7:13, 14.)
*** w04 1/1 págs. 28-31 Puntos sobresalientes del libro de Génesis (parte 1) ***
EL MUNDO ANTEDILUVIANO
(Génesis 1:1–7:24)
Las palabras de apertura de Génesis, ―en el principio‖, se remontan a miles de millones de
años atrás. Los acontecimientos que tuvieron lugar durante los seis ―días‖ creativos, es decir,
los períodos de obras creativas especiales, se describen tal como los hubiera visto un
observador humano que hubiera estado presente en la Tierra. Dios crea al hombre hacia el
final del sexto día. Aunque el Paraíso no tarda en perderse debido a la desobediencia del
hombre, Jehová da esperanza. De hecho, la primera profecía bíblica alude a una
―descendencia‖ que eliminará los efectos del pecado y magullará a Satanás en la cabeza.
Durante los siguientes dieciséis siglos, Satanás logra apartar de Dios a todos los seres
humanos con excepción de unos cuantos fieles, como Abel, Enoc y Noé. Por ejemplo, Caín
asesina a Abel, su hermano justo. ―Se [da] comienzo a invocar el nombre de Jehová‖, al
parecer de manera profana. Reflejo del espíritu violento de su tiempo es el poema que
compone Lamec, en el que dice que mató a un joven, supuestamente en defensa propia. Las
condiciones empeoran cuando algunos desobedientes hijos angélicos de Dios se casan con
mujeres y engendran una prole de gigantes violentos llamados nefilim. Sin embargo, el fiel Noé
construye el arca y valerosamente advierte a las personas del inminente Diluvio, y tanto él
como su familia se salvan de aquella destrucción.
Respuestas a preguntas bíblicas:
1:16. ¿Cómo produjo Dios la luz el primer día si las lumbreras no se hicieron hasta el
cuarto día? El verbo hebreo traducido ―hacer‖ en el versículo 16 no es el mismo que el que se
vierte ―crear‖ y ―creó‖ en los versículos 1, 21 y 27 del capítulo 1 de Génesis. ―Los cielos‖, que
incluían las lumbreras, se crearon mucho antes de que siquiera empezara el ―día primero‖.
Pero su luz no llegaba hasta la superficie terrestre. En el día primero ―[llegó] a haber luz‖
porque la luz difusa atravesó el manto de nubes y se hizo visible en la Tierra, y la rotación de
nuestro planeta causó la división entre el día y la noche (Génesis 1:1-3, 5). Las fuentes de
dicha luz aún permanecían invisibles desde la Tierra. Ahora bien, durante el cuarto período
creativo se produjo un cambio notable, pues el Sol, la Luna y las estrellas empezaron a ―brillar
sobre la tierra‖ (Génesis 1:17). ―Dios procedió a hacer[las]‖ en el sentido de que ya se podían
ver desde la Tierra.
3:8. ¿Hablaba Jehová Dios directamente con Adán? La Biblia revela que cuando Dios
hablaba con seres humanos, a menudo lo hacía mediante un ángel (Génesis 16:7-11; 18:1-3,
22-26; 19:1; Jueces 2:1-4; 6:11-16, 22; 13:15-22). El vocero principal de Dios era su Hijo
unigénito, conocido como ―la Palabra‖ (Juan 1:1). Es muy probable que Dios hablara con Adán
y Eva mediante ―la Palabra‖ (Génesis 1:26-28; 2:16; 3:8-13).
3:17. ¿En qué sentido se maldijo el suelo, y por cuánto tiempo? La maldición
pronunciada sobre el suelo significó que sería muy difícil cultivarlo. Los descendientes de Adán
sintieron tan intensamente los efectos derivados del terreno maldecido, con sus espinos y
cardos, que el padre de Noé, Lamec, habló ―del dolor de nuestras manos que resulta del suelo
que Jehová ha maldecido‖ (Génesis 5:29). Después del Diluvio, Jehová bendijo a Noé y sus
hijos, y expresó su propósito de que llenaran la Tierra (Génesis 9:1). Al parecer, Dios eliminó la
maldición del suelo (Génesis 13:10).
4:15. ¿Cómo fue que Jehová ―estableció una señal para Caín‖? La Biblia no dice que se
colocara una señal en el cuerpo de Caín. Es probable que se tratara de un decreto solemne
que los demás conocían y observaban, y cuyo propósito era impedir que lo mataran por
venganza.
4:17. ¿Dónde consiguió Caín su esposa? Adán ―llegó a ser padre de hijos e hijas‖
(Génesis 5:4). Así que Caín tomó como esposa a una de sus hermanas o quizás a una de sus
sobrinas. Más tarde, la Ley que Jehová dio a los israelitas prohibió el matrimonio entre
hermanos carnales (Levítico 18:9).
5:24. ¿De qué manera ‗tomó Dios a Enoc‘? Por lo visto, Enoc se encontraba en peligro de
muerte, pero Dios no permitió que sufriera a manos de sus enemigos. ―Enoc fue transferido
para que no viera la muerte‖, escribió el apóstol Pablo (Hebreos 11:5). Estas palabras
no significan que Dios lo llevó al cielo para que siguiera viviendo allí, pues Jesús fue el
primero en ascender a los cielos (Juan 3:13; Hebreos 6:19, 20). El hecho de que fuera
―transferido para que no viera la muerte‖ puede significar que Dios lo sumió en un trance
profético durante el cual puso fin a su vida. En tales circunstancias, Enoc no sufrió, o ―no [vio] la
muerte‖, a manos de sus enemigos.
6:6. ¿En qué sentido puede decirse que Jehová ―sintió pesar‖ por haber hecho al
hombre? La palabra hebrea que en este versículo se traduce ―sintió pesar‖ se relaciona con un
cambio de actitud o intención. Jehová es perfecto y, por lo tanto, no cometió ningún error
cuando creó al hombre. Sin embargo, sí hubo un cambio en su actitud mental con respecto a la
perversa generación antediluviana. Dios cambió su papel de Creador del hombre al de
destructor de este por el desagrado que le causó la maldad de los seres humanos. El hecho de
que protegió a algunas personas muestra que su pesar se limitó a los malvados (2 Pedro
2:5, 9).
7:2. ¿Sobre qué base se hacía la distinción entre los animales limpios y los
inmundos? Parece ser que la base de la distinción tenía que ver con lo que se ofrecía en los
sacrificios vinculados a la adoración, y no con lo que se podía o no se podía comer. Antes del
Diluvio, la carne animal no figuraba en la dieta del hombre. Los términos ―limpio‖ e ―inmundo‖
referidos al alimento se utilizaron por primera vez en la Ley mosaica, y tales restricciones
terminaron cuando esta fue abolida (Hechos 10:9-16; Efesios 2:15). Por lo visto, Noé sabía lo
que era apropiado para un sacrificio de adoración a Jehová. En cuanto salió del arca, ―empezó
a edificar un altar a Jehová y a tomar algunas de todas las bestias limpias y de todas las
criaturas voladoras limpias y a ofrecer ofrendas quemadas sobre el altar‖ (Génesis 8:20).
7:11. ¿De dónde provino el agua que causó el diluvio universal? Durante el segundo
período o ―día‖ creativo, cuando se formó ―la expansión‖ atmosférica de la Tierra, había aguas
―debajo de la expansión‖ y aguas ―sobre la expansión‖ (Génesis 1:6, 7). Las aguas que se
hallaban ―debajo‖ ya estaban en la Tierra. Las que se hallaban ―sobre la expansión‖ eran
enormes cantidades de vapor de agua suspendidas muy por encima de la superficie terrestre,
las cuales formaban una ―vasta profundidad acuosa‖. Estas aguas cayeron sobre la Tierra en
los días de Noé.
Lecciones para nosotros:
1:26. Como han sido hechos a la imagen de Dios, los seres humanos tienen la capacidad de
reflejar los atributos divinos. Ciertamente, debemos esforzarnos por cultivar cualidades como el
amor, la misericordia, la benignidad, la bondad y la paciencia. Así, imitaremos a nuestro
Hacedor.
2:22-24. El matrimonio es una institución divina. El vínculo matrimonial es permanente y
sagrado, y el esposo es el cabeza de la familia.
3:1-5, 16-23. La felicidad depende de que reconozcamos la soberanía de Jehová en todo
aspecto de nuestra vida.
3:18, 19; 5:5; 6:7; 7:23. La palabra de Jehová siempre se cumple.
4:3-7. A Jehová le agradó la ofrenda de Abel porque era un hombre justo, un hombre de fe
(Hebreos 11:4). Por otro lado, como bien lo demostraron sus hechos, Caín carecía de fe. Sus
obras eran inicuas, pues se caracterizaron por los celos, el odio y el asesinato (1 Juan 3:12).
Además, es probable que no se detuviera a pensar mucho en su ofrenda y simplemente la
presentara de manera mecánica. ¿No deberíamos ofrecer nuestros sacrificios de alabanza a
Jehová con todo el corazón junto con una actitud apropiada y una buena conducta?
6:22. Aunque la construcción del arca requirió muchos años, Noé hizo precisamente lo que
Dios le mandó. Por ello, él y su familia sobrevivieron al Diluvio. Jehová nos habla a través de su
Palabra escrita y nos guía mediante su organización. Es por nuestro bien que debemos
escucharlo y obedecerle.
7:21-24. Jehová no destruye a los justos junto con los inicuos.
UNA NUEVA ERA PARA LA HUMANIDAD
(Génesis 8:1–11:9)
Con el fin del mundo antediluviano, la humanidad entra en una nueva era. Los seres
humanos reciben permiso para comer carne, pero se les ordena que se abstengan de sangre.
Jehová autoriza la pena de muerte para los casos de asesinato y establece el pacto del arco
iris, mediante el cual promete que nunca traerá otro Diluvio. Los tres hijos de Noé llegan a ser
los progenitores de todo el género humano, pero su bisnieto, Nemrod, se convierte en ―un
poderoso cazador en oposición a Jehová‖. En vez de dispersarse y poblar la Tierra, los
hombres edifican una ciudad, llamada Babel, y una torre para hacerse un nombre célebre. Pero
Jehová frustra sus intenciones confundiendo su idioma y esparciéndolos por todo el planeta.
Respuestas a preguntas bíblicas:
8:11. Si el Diluvio arruinó los árboles, ¿dónde consiguió la paloma la hoja de olivo?
Existen dos posibilidades. Puesto que el olivo es un árbol resistente, quizás permaneció vivo
bajo el agua por algunos meses durante el Diluvio. Al bajar las aguas, el olivo que hubiera
quedado sumergido volvería a estar en tierra firme y podría echar hojas. Por otra parte, la hoja
de olivo que la paloma llevó a Noé también pudo provenir de un retoño bastante joven que
brotó después de que las aguas bajaron.
9:20-25. ¿Por qué maldijo Noé a Canaán? Es muy probable que Canaán fuera culpable de
algún abuso o perversión contra su abuelo Noé. Aunque Cam, el padre de Canaán, presenció
lo ocurrido, no se opuso a ello, sino que al parecer lo difundió. No obstante, Sem y Jafet, los
otros dos hijos de Noé, procedieron a cubrir a su padre; por eso fueron bendecidos. Pero
Canaán fue maldecido, y Cam sufrió a causa de la vergüenza que aquel incidente trajo sobre
su prole.
10:25. ¿Cómo ―se dividió‖ la tierra en los días de Péleg? Péleg vivió desde 2269
hasta 2030 a.E.C. Fue ―en sus días‖ cuando Jehová provocó una notable división al confundir
el lenguaje de los edificadores de Babel y esparcirlos sobre toda la superficie de la Tierra
(Génesis 11:9). De este modo ―se dividió la tierra‖, es decir, la población del planeta, en los
días de Péleg.
Lecciones para nosotros:
9:1; 11:9. Ninguna treta ni esfuerzo humano puede frustrar el propósito de Jehová.
10:1-32. Los dos registros genealógicos correspondientes a antes y después del Diluvio, en
los capítulos 5 y 10, conectan a todo el género humano con el primer hombre, Adán, mediante
los tres hijos de Noé. Los asirios, los caldeos, los hebreos, los sirios y algunas tribus árabes
son descendientes de Sem. Los etíopes, los egipcios, los cananeos y algunas tribus africanas y
árabes son descendientes de Cam. Los indoeuropeos son descendientes de Jafet. Todos los
seres humanos estamos emparentados y todos somos iguales a los ojos de Dios (Hechos
17:26). Esta verdad debe influir en el modo como vemos y tratamos a los demás.
*** w04 15/1 págs. 26-29 Puntos sobresalientes del libro de Génesis (parte 2) ***
ABRAHÁN SE HACE AMIGO DE DIOS
(Génesis 11:10–23:20)
Unos trescientos cincuenta años después del Diluvio nace del linaje de Sem, hijo de Noé, un
hombre que sería muy allegado a Dios. Su nombre es Abrán, pero más adelante se le llamará
Abrahán. Abrán obedece el mandato divino y abandona la ciudad caldea de Ur para ser
nómada y vivir en tiendas en una tierra que Jehová ha prometido darles a él y a sus
descendientes. Por su fe y obediencia, Abrahán recibe el apelativo de ―amigo de Jehová‖
(Santiago 2:23).
Jehová destruye a los pervertidos habitantes de Sodoma y las ciudades vecinas, mientras
que preserva la vida de Lot y sus hijas. Se cumple una promesa divina con el nacimiento de
Isaac, el hijo de Abrahán. Años después, la fe del patriarca se pone a prueba cuando Jehová le
manda que ofrezca a su hijo en sacrificio. Él está dispuesto a obedecer, pero un ángel lo
detiene. No hay duda de que Abrahán es un hombre de fe, y se le garantiza que por medio de
su descendencia se bendecirán todas las naciones. La muerte de su amada esposa, Sara, le
entristece mucho.
Respuestas a preguntas bíblicas:
12:1-3. ¿Cuándo entró en vigor el pacto abrahámico, y por cuánto tiempo? El pacto que
hizo Jehová con Abrán de que ―se bendecir[ían] por medio de [él] todas las familias del suelo‖
entró en vigor, al parecer, cuando Abrán cruzó el Éufrates de camino a Canaán el 14 de Nisán
del año 1943 a.E.C., esto es, cuatrocientos treinta años antes de que se liberara a Israel de
Egipto (Éxodo 12:2, 6, 7, 40, 41). El pacto abrahámico es ―un pacto hasta tiempo indefinido‖.
Sus términos exigen que se extienda hasta que se haya consumado la destrucción de todos los
enemigos de Dios y la bendición de las familias de la Tierra (Génesis 17:7; 1 Corintios 15:23-
26).
15:13. ¿Cuándo se cumplieron los predichos cuatrocientos años de aflicción de la
prole de Abrán? Este período de aflicción comenzó en 1913 a.E.C., en el día en que su hijo
Isaac fue destetado a la edad de cinco años y su medio hermano Ismael, de 19 años, ‗se burló‘
de él (Génesis 21:8-14; Gálatas 4:29). Acabó en 1513 a.E.C., con la liberación de los israelitas
del yugo egipcio.
16:2. ¿Estuvo bien que Sarai ofreciera a su sirvienta Agar para que fuera esposa de
Abrán? Aquello era la costumbre de la época: la esposa estéril estaba obligada a dar una
concubina a su marido con el fin de producir herederos. La práctica de la poligamia surgió por
primera vez entre los descendientes de Caín. Poco a poco se convirtió en una costumbre que
acabaron aceptando algunos siervos de Jehová (Génesis 4:17-19; 16:1-3; 29:21-28).
No obstante, Dios nunca cambió su norma original, a saber: la monogamia (Génesis 2:21, 22).
Noé y sus hijos, a quienes se les reiteró el mandato de ‗ser fructíferos y llenar la tierra‘, eran
monógamos (Génesis 7:7; 9:1; 2 Pedro 2:5). Más adelante, Jesucristo confirmó esta norma
original (Mateo 19:4-8; 1 Timoteo 3:2, 12).
19:8. ¿No estuvo mal que Lot ofreciera sus hijas a los habitantes de Sodoma? Según la
ética oriental, era responsabilidad del anfitrión proteger y defender a los huéspedes hasta con
la vida, si fuera necesario. Y Lot estaba dispuesto a hacerlo. Con valor salió, cerró la puerta
tras de sí y se presentó solo ante la multitud. Para cuando Lot ofreció a sus hijas,
probablemente ya supiera que sus invitados eran mensajeros de Dios y, por tanto, pensara que
Dios podía encargarse de protegerlas tal como protegió a su tía Sara en Egipto (Génesis 12:17-
20). Y así fue, tanto Lot como sus hijas recibieron protección.
19:30-38. ¿Aprobó Jehová que Lot se emborrachara y engendrara prole con sus dos
hijas? Jehová no aprueba ni el incesto ni la borrachera (Levítico 18:6, 7, 29; 1 Corintios
6:9, 10). Lot en realidad deploraba los ―hechos desaforados‖ de los habitantes de Sodoma
(2 Pedro 2:6-8). El hecho de que sus hijas lo emborracharan indica que sabían que su padre
no consentiría en mantener relaciones sexuales con ellas mientras estuviera sobrio. Pero al ser
extranjeras en el país, sus hijas pensaron que esa era la única manera de evitar que se
extinguiera la familia de Lot. El relato está en la Biblia para revelar el parentesco que tenían los
moabitas (mediante Moab) y los amonitas (mediante Ben-ammí) con los descendientes de
Abrahán, los israelitas.
Lecciones para nosotros:
13:8, 9. Tenemos en Abrahán un magnífico ejemplo a la hora de zanjar diferencias. Nunca
debemos sacrificar las buenas relaciones con los demás por motivos económicos, preferencias
personales u orgullo.
15:5, 6. Al ver que envejecía y todavía no había engendrado un hijo, Abrahán habló de ello
con su Dios, quien entonces lo confortó. En consecuencia, Abrahán ―puso fe en Jehová‖. Si le
abrimos nuestro corazón a Jehová en oración, aceptamos el consuelo que nos da mediante la
Biblia y le obedecemos, nuestra fe se fortalecerá.
15:16. ¿Por qué se retuvo Jehová de ejecutar sentencia sobre los amorreos (o cananeos)
durante cuatro generaciones? Porque es paciente. Esperó hasta que no hubo ninguna
posibilidad de mejora. Como Jehová, nosotros también hemos de ser pacientes.
18:23-33. Jehová no destruye a la gente indiscriminadamente, sino que protege a los rectos.
19:16. Lot ―siguió demorándose‖, y los ángeles casi tuvieron que sacarlos a él y a su familia
a rastras de Sodoma. Hacemos bien en no perder nuestro sentido de la urgencia mientras
esperamos el fin del mundo malo.
19:26. Es totalmente insensato anhelar lo que hemos dejado atrás en el mundo o distraernos
con ello.
JACOB TIENE DOCE HIJOS
(Génesis 24:1–36:43)
Abrahán concierta el matrimonio de Isaac con Rebeca, una mujer que tiene fe en Jehová.
Ella da a luz a los gemelos Esaú y Jacob. Esaú desprecia su primogenitura y se la vende a
Jacob, quien más adelante recibe la bendición de su padre. Jacob huye a Padán-aram, donde
se casa con Lea y Raquel y se ocupa de los rebaños de su suegro durante veinte años antes
de partir con su familia. Mediante Lea, Raquel y sus dos sirvientas, Jacob tiene doce hijos y
varias hijas. Jacob forcejea con un ángel hasta conseguir una bendición, y se le cambia el
nombre a Israel.
Respuestas a preguntas bíblicas:
28:12, 13. ¿Cuál fue el significado del sueño de Jacob en el que aparece ―una
escalera‖? Esta ―escalera‖ (que puede haber tenido la apariencia de un tramo ascendente de
piedras) indicó que hay comunicación entre la Tierra y el cielo, y que los ángeles desempeñan
un servicio muy importante entre Jehová y los seres humanos que tienen Su aprobación (Juan
1:51).
30:14, 15. ¿Por qué cambió Raquel la oportunidad de concebir por unas
mandrágoras? En la antigüedad, la mandrágora tenía usos medicinales como narcótico y
antiespasmódico. También se la consideraba afrodisíaca, así como estimulante de la fertilidad y
la concepción (El Cantar de los Cantares 7:13). Aunque la Biblia no revela por qué hizo el
cambio, Raquel tal vez pensara que las mandrágoras la ayudarían a concebir y así acabar con
el oprobio de ser estéril. No obstante, pasaron algunos años antes que Jehová ‗le abriera la
matriz‘ (Génesis 30:22-24).
Lecciones para nosotros:
25:23. Jehová es capaz de conocer la composición genética del feto y de usar su
presciencia para seleccionar de antemano a la persona indicada para su propósito. Sin
embargo, no predetermina el resultado final de su vida (Oseas 12:3; Romanos 9:10-12).
25:32, 33; 32:24-29. El interés de Jacob por obtener la primogenitura y la lucha que sostuvo
con un ángel toda la noche hasta conseguir una bendición indican que apreciaba las cosas
sagradas. Jehová nos ha confiado muchas cosas sagradas, tales como nuestra relación con él
y su organización, el rescate, la Biblia y la esperanza del Reino. Seamos como Jacob y
demostremos que las apreciamos.
34:1, 30. La raíz del asunto que ‗acarreó extrañamiento‘ a Jacob fue que Dina hizo amistad
con gente que no amaba a Jehová. Seamos, pues, prudentes al elegir a nuestros amigos.
JEHOVÁ BENDICE A JOSÉ EN EGIPTO
(Génesis 37:1–50:26)
Los celos mueven a los hijos de Jacob a vender a su hermano José como esclavo. Ya en
Egipto, a José lo encarcelan porque se atiene fielmente y con valor a las normas morales de
Dios. Al correr del tiempo se le saca de la prisión para interpretar los sueños del Faraón, los
cuales predicen siete años de bonanza seguidos de otros tantos de escasez. Se nombra a
José administrador del alimento de Egipto. Sus hermanos acuden al país en busca de
provisiones debido al hambre. La familia se reencuentra y se asienta en la fértil tierra de Gosén.
En su lecho de muerte, Jacob bendice a sus hijos y da una profecía que ofrece una garantía
segura de que habrá grandes bendiciones en los siglos venideros. Los restos mortales de
Jacob se llevan a Canaán para ser enterrados. Cuando José muere a la edad de 110 años, se
le embalsama, y finalmente se le transporta a la Tierra Prometida (Éxodo 13:19).
Respuestas a preguntas bíblicas:
43:32. ¿Por qué era detestable para los egipcios comer con los hebreos? Tal vez se
debiera principalmente al orgullo racial y al prejuicio religioso. Además, los egipcios detestaban
a los pastores (Génesis 46:34). ¿Por qué razón? Posiblemente porque el sistema de castas
egipcio colocaba a los pastores en uno de los últimos lugares, o quizás porque sintieran un
fuerte rechazo hacia quienes buscaban pastos para los rebaños, pues escaseaba la tierra de
cultivo.
44:5. ¿Utilizó realmente José una copa para leer agüeros? La copa de plata y lo que se
dijo de ella eran evidentemente parte de una estratagema. Como fiel siervo de Jehová, José
no empleó la copa para leer agüeros, tal como tampoco la hurtó Benjamín.
49:10. ¿Qué son ―el cetro‖ y ―el bastón de comandante‖? El cetro es el bastón que lleva
un gobernante como símbolo de su autoridad real. El bastón de comandante es una vara larga
que simboliza el poder de mando. La referencia que Jacob hizo a ambos indicó que la tribu de
Judá tendría una medida importante de autoridad y poder hasta la venida de Siló. Este
descendiente de Judá es Jesucristo, aquel a quien Jehová ha otorgado gobernación celestial.
Cristo tiene autoridad real y posee el poder de mando (Salmo 2:8, 9; Isaías 55:4; Daniel
7:13, 14).
Lecciones para nosotros:
38:26. Judá no actuó bien con Tamar, su nuera viuda. Aun así, cuando se le hizo ver que
era el responsable de su embarazo, Judá admitió el error con humildad. Nosotros también
debemos estar dispuestos a reconocer los errores.
39:9. La respuesta que dio José a la esposa de Potifar indica que su forma de pensar se
amoldaba a lo que pensaba Dios sobre la moralidad y que los principios piadosos guiaban su
conciencia. ¿No deberíamos nosotros esforzarnos por lograr el mismo objetivo mientras
crecemos en el conocimiento exacto de la verdad?
41:14-16, 39, 40. Jehová puede cambiar por completo las circunstancias de aquellos que le
temen. Cuando sufrimos adversidades, es sabio depositar nuestra confianza en Jehová y serle
fieles.
ÉXODO, LIBRO DE
CONTENIDO
El rápido crecimiento de Israel hace que el gobernante de Egipto sienta temor. (Cap. 1.)
o El faraón decreta la muerte de los varones recién nacidos.
o Los hebreos no obedecen el decreto; el pueblo continúa haciéndose mas
numeroso.
Jehová libera a Israel por medio de Moisés. (Caps. 2-15.)
o Moisés es adoptado por la hija del faraón, pero es enseñado por su propia madre
(2:1-10).
o Mata a un perseguidor egipcio, huye a Madian, se casa, se hace pastor (2:11-
3:1).
o Ante la zarza ardiente recibe la comisión de ser libertador (3:2-4:17).
o Regresa a Egipto; con Aarón, se presenta ante el faraón; nueve plagas sobre
Egipto(4:18-11:10).
o Se instituye la Pascua; décima plaga (12:1-29).
o Éxodo de Israel a través del mar Rojo; destrucción del ejército del faraón(12:30-
15:27).
Jehová organiza a Israel como nación teocrática. le da la Ley. (Caps. 16-40.)
o El maná milagroso; se instituye la observancia del sábado (16:1-36).
o Se hace salir agua de una roca; por consejo de Jetro, se nombra ayudantes (17:1-
18:27).
o Moisés sube al monte Sinai mientras Jehová manifiesta su gloria a Israel (19:1-
25).
o Los Diez Mandamientos y otras leyes(20;1-23;33).
o El pacto de la Ley hecho sobre la base de sangre de animales; Moisés está en la
montaña durante cuarenta días y cuarenta noches (24:1-18).
o Instrucciones para construir el tabernáculo y su mobiliario, para hacer la
vestimenta de los sacerdotes, instalar el sacerdocio, etc.(25:1-3 1:18).
o El pueblo adora un becerro de oro durante la ausencia de Moises; este rompe las
tablas de piedra que le habían sido dadas por Jehová; los levitas se ponen de
parte de Jehová y matan a unos tres mil hombres (32:1-35).
o Moises va a la montaña con otras dos tablas de piedra; Jehová escribe sobre
ellas los Diez Mandamientos.(33:1-34:28; Compárese con Deuteronomio 10:1-5.)
o El rostro de Moisés resplandece; se pone un velo sobre el rostro (34:29-35).
o Trabajadores escogidos construyen el tabernáculo y su mobiliario; confeccionan
las vestiduras de los sacerdotes; todos los materiales son contribuidos por el
pueblo (35:1—39:43).
o Se erige el tabernáculo el 1 de Nisán de 1512 a. E.C.; Jehová manifiesta su
aprobación (40:1-38).
*** w83 15/10 págs. 23-25 Éxodo... de la tiranía al orden teocrático ***
―Esclavos bajo tiranía‖
•3:1—¿Qué clase de sacerdote fue Jetro, el suegro de Moisés?
Jetro evidentemente era el cabeza patriarcal de una tribu de madianitas y tenía la
responsabilidad de instruir a éstos y dirigirlos en asuntos seglares y religiosos. Puesto que
los madianitas eran descendientes de Abrahán mediante Cetura, tenían recuerdos de la
adoración a Jehová, la cual Abrahán siempre impuso a los de su casa. No sabemos con
certeza cuán pura fue la religión de aquella tribu en los días de Moisés. Pero Jetro mostró
bastante aprecio por Jehová aunque no fue nombrado especialmente por Dios. (Éxodo
18:1-24.)
•4:11—¿Es Jehová el responsable de defectos como la ceguera?
No. Jehová no es el responsable de cada caso de defectos físicos como la ceguera y la
sordera. Dichos defectos resultan principalmente del hecho de que Jehová ha permitido
que llegue a existir una raza humana pecaminosa, puesto que los pecadores Adán y Eva
perdieron su propia perfección y, por lo tanto, no pudieron producir hijos perfectos (Job
14:4; Romanos 5:12). A medida que sus descendientes tuvieron hijos, se manifestaron
más y más imperfecciones, incluso defectos físicos. Puesto que Dios permitió que dicha
situación se desarrollara, él pudo decir, con referencia a sí mismo, que ‗asignó‘ a los
mudos, sordos y ciegos. Con propósitos específicos, pero solo en ciertas ocasiones,
Jehová hizo que ciertas personas se volvieran ciegas o mudas en sentido físico (2 Reyes
6:18; Lucas 1:20-22, 62-64; Hechos 13:8-11). Si algunas personas optan por ser sordas y
ciegas en sentido espiritual, él permite que persistan en su incredulidad y sigan
rechazando Su mensaje, y así ‗asigna‘ a los sordos y ciegos en sentido espiritual (Isaías
6:9, 10). Pero Jehová ha concedido el oído y la vista en sentido espiritual a los que
procuran agradarle a él. Además, mediante su Reino por medio de Jesucristo, el amoroso
Dios, Jehová, liberará a la humanidad de la ceguera en sentido físico y de todas las
demás incapacidades físicas. (Isaías 61:1, 2; 1 Juan 4:8; Revelación 21:1-4.)
•4:24-26—¿La vida de quién estaba en peligro, y qué sucedió?
Dado que este pasaje no es claro, sugerimos lo siguiente: El hijo de Moisés se vio
amenazado de muerte por no satisfacer los requisitos del pacto anterior respecto a la
circuncisión (Génesis 17:9-14). Después de quitarle el prepucio al niño, Zípora hizo que
esta prueba de cumplimiento con el pacto tocara los pies del ángel materializado, y así
mostró que ya no había razón para que su hijo muriera. Si, mediante el ángel, ella se
dirigió a Jehová como a un ―novio de sangre‖, era como si hubiese aceptado una posición
de esposa en el pacto de la circuncisión, siendo Dios el esposo.
•6:3—Puesto que Abrahán, Isaac y Jacob usaron el nombre Jehová, ¿en qué sentido no se lo
había dado a conocer Dios a ellos?
El nombre Jehová literalmente significa ―El Causa que Llegue a Ser‖, es decir, conforme
al propósito de Dios. Abrahán, Isaac y Jacob usaron el nombre divino y recibieron
promesas de Jehová. Pero no conocieron a Jehová como el que hizo que aquellas
promesas se cumplieran por completo ni experimentaron la realización de dichas
promesas (Génesis 12:1, 2; 15:7, 13-16; 26:24; 28:10-15). No obstante, dentro de poco el
nombre de Jehová adquiriría mayor significado para los descendientes de ellos, los
israelitas. Éstos llegarían a conocer su verdadero significado cuando Jehová efectuara su
propósito para con Israel por medio de librar a los israelitas de la tiranía y luego darles la
Tierra Prometida en cumplimiento del pacto que Él había hecho con los antepasados de
ellos.
•7:22—¿De dónde consiguieron los sacerdotes egipcios agua que aún no se había convertido
en sangre?
Puede que hayan usado algo del agua que se había sacado del río Nilo antes de este
golpe, o plaga. Sin embargo, parece que se podía colectar agua que no había sido
afectada por esta plaga por medio de cavar pozos en el terreno húmedo en los
alrededores del Nilo (Éxodo 7:24). Quizás los sacerdotes usaron dicha agua para efectuar
su truco.
•12:29—¿Se incluyó tanto a los varones como a las hembras entre los primogénitos?
Solo los varones figuraron entre los primogénitos. Esto se ve por el hecho de que luego,
cuando se hizo un intercambio por medio de entregar a los levitas a Jehová, solo se
enumeró a los varones (Números 3:40-51). Faraón mismo era un primogénito, pero no se
le dio muerte debido a que él tenía su propio hogar, y no fueron los cabezas, sino los hijos
primogénitos del hogar, los que murieron aquella noche de la pascua. (Éxodo 12:12.)
Liberados por Jehová
•15:8—Dado que las aguas del mar Rojo quedaron ―cuajadas‖, ¿estaban congeladas?
La palabra hebrea que aquí se traduce como ―cuajadas‖ significa encogerse o
engrosarse. En Job 10:10 se usa la expresión con relación a cuajar queso. Por lo tanto,
no necesariamente significa que las paredes de agua se hubieran congelado. Puesto que
no había nada visible que detenía las aguas, parecía como si éstas estuviesen cuajadas,
como si se hubiesen vuelto tiezas o gruesas a fin de poder permanecer en posición
vertical. Si el viento que se menciona antes de esto hubiera sido suficientemente frío
como para congelar las aguas, sin duda se hubiera hecho alguna referencia al hecho de
que hacía muchísimo frío. (Éxodo 14:21.)
Organizados como teocracia
•20:5—¿Significa esto que se castigaría a los fieles?
No, porque a cada persona, después que llega a una edad de responsabilidad, se le
juzga según su propia conducta y actitud. (Compare con Ezequiel 18:20.) No obstante,
cuando la nación de Israel se volvió después a la idolatría, sufrió las malas consecuencias
de este proceder por generaciones desde allí en adelante. No se castigó a los fieles
individualmente por el pecado de la nación, pero ellos sí sintieron algunos de los efectos
de dicho pecado. A los que mantuvieron su integridad se les hizo difícil ir en contra de la
marea de la delincuencia religiosa de la nación, pero por hacerlo disfrutaron de la bondad
amorosa de Jehová.
•23:20-23—¿Quién fue el ángel que se menciona aquí, y en qué sentido estaba ―dentro de él‖
el nombre de Jehová?
Además de Jesucristo en su forma prehumana, se usó a otros ángeles para transmitir la
ley de Dios a Moisés (Juan 1:1-3, 14; Hebreos 2:2, 3). Pero es razonable concluir que el
ángel respecto al cual Jehová dijo ―mi nombre está dentro de él‖ fue Jesús en su forma
prehumana. Se le utilizó para guiar a los israelitas en camino a la Tierra Prometida (1
Corintios 10:1-4). Jesús, cuyo nombre significa ―Salvación de Jehová‖, es el que
principalmente sostiene y vindica el nombre de su Padre.
•32:25—¿Por qué no se le castigó a Aarón por haber hecho el becerro de oro?
Aarón hizo esto a petición del pueblo, no debido a que sinceramente estuviera de
acuerdo con la idolatría. Luego, él aparentemente se unió a compañeros levitas en tomar
posición a favor de Jehová y en contra de los que resistieron a Moisés en aquella ocasión.
Se dio muerte a más o menos 3.000 personas (probablemente los cabecillas), pero un
mayor número de personas eran culpables porque, después de la muerte de las 3.000
personas, Moisés recordó al pueblo que éste había pecado grandemente. Por lo tanto,
Jehová mostró misericordia a otras personas además de Aarón en aquella ocasión.
(Éxodo 32:1-6, 26-35.)
•34:26—¿Cuál era el significado de este mandato de no hervir un cabrito en la leche de su
madre?
El cocer o hervir un cabrito en la leche de su madre era, según se informa, un rito pagano
para hacer que lloviera. Por lo tanto, puede ser que se haya dado esta ley a los israelitas para
que ellos evitaran dichas prácticas. Pero este mandato, junto con otros, parece hacer hincapié
en el hecho de que hay un orden debido y apropiado respecto a todo asunto. Jehová
proporcionó leche a la madre para que ella alimentara a sus pequeñuelos. Pero el hervir las
crías en la leche resultaría en daño y muerte, lo cual era contrario al propósito divino en lo
relacionado con la leche. Parece que la ley también enseñaba al pueblo que estaba en pacto
con Dios que no debía comportarse de manera despiadada, sino compasiva.
*** w04 15/3 págs. 24-27 Puntos sobresalientes del libro de Éxodo ***
‗DIOS OYÓ EL GEMIDO DEL PUEBLO‘
(Éxodo 1:1–4:31)
Los descendientes de Jacob que viven en Egipto aumentan en número tan rápidamente que
por mandato real se les esclaviza con crueldad. El faraón reinante hasta decreta que se dé
muerte a todo varón israelita que nazca. Escapa con vida un bebé de tres meses llamado
Moisés, y es adoptado por la hija de Faraón. Aunque Moisés se cría en la casa real, a la edad
de 40 años se pone de parte de su propio pueblo y mata a un egipcio (Hechos 7:23, 24). Se ve
obligado a huir, y va a Madián, donde se casa y vive como pastor. Ante una zarza que arde
milagrosamente, Jehová le da la comisión de volver a Egipto y liberar a los israelitas de la
esclavitud. Se nombra a su hermano Aarón para que sea su portavoz.
Respuestas a preguntas bíblicas:
3:1. ¿Qué clase de sacerdote era Jetró? En los días de los patriarcas, el cabeza de la
familia servía en calidad de sacerdote de ella. Parece que Jetró era el cabeza patriarcal de una
tribu de madianitas. Como estos eran descendientes de Abrahán mediante Queturá, tal vez
conocían la adoración de Jehová (Génesis 25:1, 2).
4:11. ¿En qué sentido ‗asigna Jehová a los mudos, sordos y ciegos‘? Aunque ha
habido ocasiones en que Jehová ha causado ceguera y sordera, no es responsable de todas
las discapacidades de esa clase (Génesis 19:11; Lucas 1:20-22, 62-64). Dichos defectos son el
resultado del pecado heredado (Job 14:4; Romanos 5:12). Ahora bien, como Dios ha permitido
que exista esta situación, podía decir, con referencia a sí mismo, que ―asignó‖ a los mudos,
sordos y ciegos.
4:16. ¿Cómo ‗serviría Moisés de Dios‘ para Aarón? Moisés era un representante de Dios.
Por eso, llegó a ser como ―Dios‖ para Aarón, quien hablaba en representación de Moisés.
Lecciones para nosotros:
1:7, 14. Jehová apoyó a su pueblo cuando este se hallaba oprimido en Egipto. De igual
manera, sostiene a sus Testigos de la actualidad, incluso cuando afrontan cruel persecución.
1:17-21. Jehová nos recuerda ―para bien‖ (Nehemías 13:31).
3:7-10. Jehová responde al clamor de su pueblo.
3:14. Jehová cumple sin falta sus propósitos. Por eso podemos confiar en que convertirá en
una realidad nuestras esperanzas basadas en la Biblia.
4:10, 13. Moisés dudaba tanto de su capacidad de hablar que incluso cuando se le aseguró
que tendría el apoyo divino, rogó a Dios que enviara a otra persona para hablar con Faraón.
Sin embargo, Jehová lo utilizó a él y le dio la sabiduría y la fortaleza necesarias para llevar a
cabo su asignación. En lugar de centrarnos en nuestras limitaciones, confiemos en Jehová y
cumplamos fielmente nuestra comisión de predicar y enseñar (Mateo 24:14; 28:19, 20).
ASOMBROSOS MILAGROS RESULTAN EN LIBERACIÓN
(Éxodo 5:1–15:21)
Moisés y Aarón comparecen ante Faraón y piden que permita a los israelitas celebrar una
fiesta a Jehová en el desierto. El gobernante egipcio, desafiante, rehúsa dar permiso. Jehová
utiliza a Moisés para ocasionar un golpe intenso tras otro. Faraón no deja ir a los israelitas sino
hasta que sufre la décima plaga. No obstante, poco después él y sus fuerzas militares se
lanzan en persecución de ellos. Pero Jehová proporciona a su pueblo una salida de escape a
través del mar Rojo y los salva. Los egipcios que los persiguen se ahogan cuando el mar se
cierra.
Respuestas a preguntas bíblicas:
6:3. ¿En qué sentido no se había dado a conocer el nombre de Dios a Abrahán, Isaac y
Jacob? Aunque estos patriarcas emplearon el nombre divino y recibieron promesas de Jehová,
no conocieron a Jehová como el Cumplidor de dichas promesas (Génesis 12:1, 2; 15:7, 13-16;
26:24; 28:10-15).
7:1. ¿Cómo se convirtió Moisés en ―Dios para Faraón‖? Moisés recibió poder divino y
autoridad sobre Faraón. De modo que no había razón para temer a aquel rey.
7:22. ¿De dónde consiguieron los sacerdotes egipcios agua que no se había
convertido en sangre? Puede que hayan usado agua que se había sacado del río Nilo antes
de esta plaga. Parece que también se podía conseguir agua potable al cavar pozos en el
terreno húmedo cerca del río Nilo (Éxodo 7:24).
8:26, 27. ¿Por qué dijo Moisés que los sacrificios de Israel serían ―cosa detestable a
los egipcios‖? Se veneraban muchos animales en Egipto. Así que la mención de sacrificios
justificaba y hacía más persuasiva la insistencia de Moisés de que se permitiera a Israel salir al
desierto para ofrecer sacrificios a Jehová.
12:29. ¿A quiénes se incluyó entre los primogénitos? Solo a los varones (Números 3:40-
51). Faraón mismo era primogénito, pero no se le dio muerte, pues él tenía su propia familia.
No fueron los cabezas de familia, sino los hijos primogénitos quienes murieron como resultado
de la décima plaga.
12:40. ¿Cuánto tiempo moraron los israelitas en la tierra de Egipto? Los cuatrocientos
treinta años mencionados aquí incluyen el tiempo que los hijos de Israel pasaron ―en la tierra
de Egipto y en la tierra de Canaán‖ (Biblia con referencias, nota). Abrahán tenía 75 años
cuando cruzó el río Éufrates en 1943 a.E.C., rumbo a Canaán (Génesis 12:4). Desde entonces
hasta que Jacob entró en Egipto, a la edad de 130, pasaron doscientos quince años (Génesis
21:5; 25:26; 47:9). Esto significa que los israelitas pasaron otros doscientos quince años en
Egipto.
15:8. ¿Se solidificaron de verdad las aguas del mar Rojo, ya que el texto dice que
quedaron ―cuajadas‖? El verbo hebreo traducido ―cuajar‖ quiere decir ―encogerse‖ o
―engrosarse‖. En Job 10:10 se usa el mismo verbo con relación al proceso de cuajar la leche.
Por lo tanto, decir que las aguas quedaron cuajadas no significa necesariamente que se
congelaron hasta solidificarse. Si el ―fuerte viento del este‖, mencionado en Éxodo 14:21,
hubiera sido suficientemente frío como para congelar las aguas, sin duda se habría hecho
alguna referencia a que hacía mucho frío. Como no había nada visible que contuviera las
aguas, daban la apariencia de estar cuajadas, endurecidas o espesadas.
Lecciones para nosotros:
7:14–12:30. Las diez plagas no fueron meras coincidencias. Se predijeron, y sucedieron
precisamente como se había indicado. Demuestran vívidamente el dominio del Creador sobre
el agua, la luz solar, la vida animal y los seres humanos. También demuestran que Dios puede,
de manera selectiva, traer calamidad sobre sus enemigos mientras que protege a sus
adoradores.
11:2; 12:36. Jehová bendice a su pueblo. Parece que se estaba asegurando de que a los
israelitas se les recompensara por su trabajo en Egipto. Habían entrado en esa tierra como un
pueblo libre, no como prisioneros de guerra sometidos a esclavitud.
14:30. Podemos confiar en que Jehová salvará a sus siervos durante la venidera ―gran
tribulación‖ (Mateo 24:20-22; Revelación [Apocalipsis] 7:9, 14).
JEHOVÁ ORGANIZA UNA NACIÓN TEOCRÁTICA
(Éxodo 15:22–40:38)
En el tercer mes después de salir de Egipto, los israelitas acampan al pie del monte Sinaí.
Allí reciben los Diez Mandamientos y otras leyes, entran en un pacto con Jehová y se
convierten en una nación teocrática. Moisés pasa cuarenta días en la montaña, donde recibe
instrucciones respecto a la adoración verdadera y la construcción del tabernáculo de Jehová,
un templo portátil. Mientras tanto, los israelitas hacen un becerro de oro y le rinden adoración.
Al bajar de la montaña, Moisés ve esto y se enfurece tanto que hace añicos las dos tablas que
ha recibido de Dios. Después que los pecadores reciben su merecido castigo, Moisés sube de
nuevo a la montaña y recibe otro par de tablas. Cuando regresa, empieza la construcción del
tabernáculo. A finales del primer año de la liberación de lsrael, queda terminada esta
maravillosa tienda junto con todos sus accesorios. Tras su instalación, Jehová la llena de su
gloria.
Respuestas a preguntas bíblicas:
20:5. ¿En qué sentido trae Jehová ―castigo por el error de padres‖ sobre las
generaciones posteriores? Cuando la persona se convierte en un adulto responsable, se le
juzga según su propia conducta y actitud. Sin embargo, cuando la nación de Israel se entregó a
la idolatría, sufrió las consecuencias durante generaciones. Incluso los israelitas fieles sintieron
el efecto de la desobediencia religiosa de sus contemporáneos, ya que su influencia les hacía
difícil mantenerse íntegros.
23:19; 34:26. ¿Qué significaba el mandato de no hervir un cabrito en la leche de su
madre? Parece que hervir un cabrito en la leche de su madre era un rito pagano que se
observaba para que lloviera. Además, puesto que la leche de la madre era para que alimentara
a su cría, hervir a esta en esa leche sería cruel. Dicha ley enseñó al pueblo de Dios que debían
ser compasivos.
23:20-23. ¿Quién era el ángel que se menciona aquí, y en qué sentido estaba el
nombre de Jehová ―dentro de él‖? Es probable que este ángel fuera Jesús en su forma
prehumana. Se le utilizó para dirigir a los israelitas hacia la Tierra Prometida (1 Corintios 10:1-
4). El nombre de Jehová está ―dentro de‖ Jesús en el sentido de que él sobresale en sostener y
santificar el nombre de su Padre.
32:1-8, 25-35. ¿Por qué no se castigó a Aarón por haber hecho el becerro de oro?
En su corazón, Aarón no estaba de acuerdo con la adoración idolátrica. Posteriormente se unió
a sus compañeros levitas al ponerse a favor de Dios y en contra de los que se opusieron a
Moisés. Después que se destruyó a los culpables, Moisés recordó a los israelitas que ellos
habían cometido un grave pecado, lo que indica que otros además de Aarón recibieron la
misericordia de Jehová.
33:11, 20. ¿En qué sentido habló Dios ―cara a cara‖ con Moisés? Esta expresión se
refiere a una conversación íntima entre dos personas. Moisés habló con el representante de
Dios y, mediante él, recibió las instrucciones divinas. Pero Moisés no vio a Jehová, dado que
―ningún hombre puede ver[lo] y sin embargo vivir‖. De hecho, Jehová no habló personalmente
con Moisés. La Ley ―fue transmitida mediante ángeles por mano de un mediador‖, dice Gálatas
3:19.
Lecciones para nosotros:
15:25; 16:12. Jehová cuida a su pueblo.
18:21. Los varones que se escogen para ocupar posiciones de responsabilidad en la
congregación cristiana también deben ser hombres capaces, temerosos de Dios, dignos de
confianza y altruistas.
20:1–23:33. Jehová es el Legislador supremo. Cuando los israelitas obedecían Sus leyes,
estas hacían posible que adoraran a Jehová de manera ordenada y gozosa. Jehová tiene una
organización teocrática hoy día. Si cooperamos con ella, disfrutaremos de felicidad y seguridad.
LEVÍTICO, LIBRO DE
CONTENIDO
*** w84 15/2 págs. 29-30 Levítico... llamada a la adoración santa de Jehová ***
Ofrendas santas y servicio sacerdotal
•2:11—¿Por qué no eran aceptables a Jehová las ofrendas de miel?
Evidentemente, aquí no se trata de la miel de abejas, sino del jarabe de las frutas. A no ser así,
aquélla no se podría haber incluido entre las ―primicias‖ (Levítico 2:12; 2 Crónicas 31:5). Puesto
que el jarabe o miel de las frutas podía fermentarse, no era aceptable como ofrenda sobre el
altar.
•3:17—¿Por qué se prohibía el consumo de la grasa?
La grasa se consideraba la mejor parte o la parte más rica, como se indica por
expresiones figurativas como ―la grosura de la tierra‖ (Génesis 45:18, Versión Moderna).
Por lo tanto, el que se les prohibiera comer grasa evidentemente recalcaba a los israelitas
el hecho de que las mejores partes pertenecían a Jehová. Aunque los cristianos no están
bajo esta restricción de la Ley, ésta bien puede recordar a los siervos de Jehová del día
moderno que siempre deben dar lo mejor a él. (Proverbios 3:9, 10; Colosenses 3:23, 24.)
•10:1, 2—¿Qué puede haber estado envuelto en este pecado?
Cuando Nadab y Abiú tomaron estas libertades indebidas, puede que hayan estado bajo
la influencia de bebidas alcohólicas. Esto es probable, en vista de que poco después
Jehová prohibió a los sacerdotes usar vino o licor intoxicante mientras servían en el
tabernáculo. No obstante, lo que realmente acarreó la muerte a Nadab y Abiú fue el que
ofrecieron ―fuego ilegítimo, que él [Jehová] no les había prescrito‖ (Levítico 10:1-11). Este
incidente muestra que hoy en día los siervos de Jehová responsables tienen que cumplir
con los requisitos divinos y que no pueden, bajo la influencia de bebidas alcohólicas,
llevar a cabo debidamente sus deberes provenientes de Dios.
La adoración santa exige la limpieza
•11:40—¿Cómo puede armonizarse este reglamento con Deuteronomio 14:21, que dice: ―No
deben comer ningún cuerpo ya muerto‖?
En realidad, no hay ninguna contradicción entre estos textos. En Deuteronomio 14:21 se
prohíbe el consumo de un animal que haya muerto por sí mismo o que se haya hallado
muerto. Pero en Levítico 11:40 se indica específicamente lo que se requería que se
hiciera si un israelita violaba dicha prohibición. De igual manera, la Ley prohibía actos
como el robar, pero había personas que robaban. Las penalidades que se impusieron a
los malhechores dieron fuerza a las prohibiciones de la Ley.
•12:2, 5—¿Por qué se volvía ―inmunda‖ la mujer como resultado del parto?
Los órganos reproductivos fueron hechos para pasar a otros seres humanos vida
humana perfecta. Pero, debido a los efectos heredados del pecado, se pasó por medio de
éstos la imperfección y la vida pecaminosa a la progenie. Los períodos temporeros de
‗inmundicia‘ asociados con el parto, la menstruación y las emisiones seminales
recordaban esta herencia pecaminosa (Levítico 15:16-24; Salmo 51:5; Romanos 5:12).
Esto era especialmente cierto en el caso del parto, pues se requería una ofrenda por el
pecado con relación a ello. Es interesante que, por consideración, Jehová, en este caso,
permitió a los pobres ofrecer pájaros en vez de una oveja, la cual era más costosa
(Levítico 12:8). Tales reglamentos de purificación ayudarían a los israelitas a reconocer la
necesidad de un sacrificio de rescate para cubrir el estado pecaminoso de la humanidad y
restaurarla a la perfección. Claro, los sacrificios de animales que ellos ofrecían no podían
lograr esto. Por lo tanto, la Ley había de llevarlos a Cristo y ayudarles a apreciar el hecho
de que solo el sacrificio de él podía resultar en el verdadero perdón y, con el tiempo,
restaurar la humanidad a la perfección. (Gálatas 3:24; Hebreos 9:13, 14; 10:3, 4.)
Tiene que mantenerse la santidad
•16:29—¿Qué significaba ‗afligir el alma‘?
Muy probablemente, aquí ‗afligir el alma‘ se refería a ayunar. Entre otras cosas, en el día
de propiciación se sacrificaban animales por los pecados de los levitas y del resto de la
nación. Después que el sumo sacerdote había confesado sobre un macho cabrío vivo los
pecados que el pueblo había cometido el año anterior, el macho cabrío era conducido al
desierto, de modo que él llevaba los pecados del pueblo consigo. Por lo tanto, en vista del
proceder que se seguía en el día de expiación, el ayunar en aquel tiempo evidentemente
se asociaba con el reconocimiento de pecados. (Levítico 16:5-10, 15, 20-22.)
•20:9—¿Por qué se prescribió la pena capital para cualquiera que ―invocare el mal‖ contra sus
padres?
La persona que maldijera a sus padres y deseara que les acaeciera alguna calamidad
terrible estaría desplegando odio e inclinación al asesinato. Aunque no había usado un
arma para matarlos, en su corazón deseaba que murieran. Puesto que dicho espíritu
malvado constituye asesinato a la vista de Jehová, la Ley prescribía la misma pena para
el que injuriara de dicha manera a sus padres que para el que efectivamente los
asesinara. Esto debería impulsar al cristiano a mostrar amor, no odio, para con sus
compañeros de creencia. (1 Juan 3:14, 15.)
•25:35-37—¿Es siempre incorrecto cobrar interés a un hermano?
Si un hermano presta dinero a otro por razones de negocio, el prestamista puede
esperar que se le devuelva el principal y también puede cobrar cierto interés. El
prestatario está usando el dinero para producir cierta ganancia, y el que presta tiene
derecho de recibir cierta parte de la ganancia que produzca dicho dinero, por medio de
cobrar un interés adecuado. (Compare con Mateo 25:27.) No obstante, la Ley prohibía
que se cobrara interés sobre préstamos que se hicieran para sacar a alguien de la
pobreza. El prestamista podía esperar que se le devolviera el principal, pero se
consideraba incorrecto que recibiera una ganancia como resultado de los reveses de
algún vecino necesitado. (Éxodo 22:25.)
•26:26—¿Qué significan las ‗diez mujeres que cuecen el pan en un solo horno‘?
Normalmente, cada mujer necesitaría un horno separado para hornear todo lo que tenía que
hornear. Pero estas palabras indican que habría tanta escasez de alimento que un solo horno
bastaría para hornear todo lo que diez mujeres tendrían que hornear. Ésta fue una de las
consecuencias que se predijo del ―andar en oposición‖ a Jehová y así dejar de mantener la
santidad en Su servicio. (Levítico 26:23-25.)
*** w04 15/5 págs. 21-24 Puntos sobresalientes del libro de Levítico ***
OFRENDAS SAGRADAS: VOLUNTARIAS Y OBLIGATORIAS
(Levítico 1:1–7:38)
Algunas de las ofrendas y sacrificios estipulados en la Ley eran voluntarios, mientras que
otros, obligatorios. Las ofrendas quemadas, por ejemplo, eran voluntarias. Se presentaban a
Dios en su totalidad, tal como Jesucristo entregó su vida como sacrificio de rescate. Otra
ofrenda voluntaria era el sacrificio de comunión, el cual se compartía. Una porción se
presentaba a Dios sobre el altar, otra le correspondía al sacerdote y otra era para el que
presentaba la ofrenda. De igual manera, para los cristianos ungidos, la Conmemoración de la
muerte de Cristo es una comida de comunión (1 Corintios 10:16-22).
Las ofrendas por el pecado y por la culpa eran obligatorias. Las primeras expiaban los
pecados cometidos por error o sin querer. Las segundas tenían el propósito de satisfacer a
Dios por un derecho que se había violado o de recuperar ciertos derechos del pecador
arrepentido, o ambos. También se hacían ofrendas de grano para agradecer la generosidad de
Jehová. Estos asuntos son de interés para nosotros porque los sacrificios que se exigían bajo
el pacto de la Ley prefiguraron a Jesucristo y su sacrificio, así como los beneficios que
resultarían de este (Hebreos 8:3-6; 9:9-14; 10:5-10).
NÚMEROS, LIBRO DE
CONTENIDO
*** w84 15/4 págs. 29-30 Respete a Jehová, insta el libro de Números ***
Sucesos en el monte Sinaí
• 5:11-31—¿Qué le sucedía realmente a una esposa culpable de haber cometido adulterio?
El agua misma no causaba ningún sufrimiento. Pero se bebía ante Jehová, quien sabía
si la mujer era culpable de adulterio, o no. Si lo era, él haría que se le hinchara el vientre y
se le decayera el muslo. Evidentemente el muslo se usa aquí como eufemismo por los
órganos de procreación. (Compare con Génesis 46:26.) ―Decaer‖ indica que esos órganos
se atrofian, lo cual imposibilita la concepción. Esto estaría en armonía con el hecho de
que si la mujer era inocente, su esposo tenía que ponerla encinta.
• 8:25, 26—¿Aplica al pueblo de Jehová hoy día el principio de la ley sobre el retiro de los
levitas?
Todos los varones capacitados de las tres familias levitas principales ayudaban a los
sacerdotes. Con el tiempo los levitas se harían numerosos, pero la cantidad de puestos
de servicio en el santuario era limitada. Sin duda, pues, tanto por consideración a la edad
como para evitar un apiñamiento en tales cargos, Jehová ordenó que a los levitas que
cumplieran 50 años de edad se les debía retirar del servicio obligatorio, aunque todavía
podían ayudar voluntariamente. No obstante, eso no establece ninguna regla para los
israelitas espirituales y sus compañeros, porque ellos no están bajo la Ley (Romanos
6:14; Efesios 2:11-16). Si la edad avanzada incapacitara a un cristiano para llevar a cabo
cierta responsabilidad, éste pudiera ser cambiado a una forma de servicio que pueda
efectuar. Para los testigos de Jehová no hay jubilación o retiro de la predicación de las
buenas nuevas del Reino.
El vagar de un lugar a otro
• 12:1—¿Por qué hablaron Míriam y Aarón contra Moisés debido a su esposa cusita?
Aquello fue algo más que una objeción a la esposa de Moisés. El motivo real fue el
deseo de tener más poder, especialmente de parte de Míriam. Zípora, la esposa de
Moisés, había estado fuera del campamento, pero había vuelto a reunirse con su esposo,
y Míriam temía que ella la reemplazara como la primera dama en el campamento (Éxodo
18:1-5). Así que consiguió que Aarón se le uniera en criticar a Moisés por haberse casado
con una cusita y en desafiar la posición incomparable de él delante de Dios. Por eso
Jehová castigó tanto a Míriam como a Aarón; pero el hecho de que solo Míriam fue herida
de lepra pudiera indicar que ella fue la instigadora. La confesión de Aarón y su súplica a
favor de la leprosa Míriam mostraron su actitud correcta (Números 12:10-13). En cuanto a
Zípora, ella era la hija de Reuel el madianita (Génesis 25:1, 2; Números 10:29). En
Habacuc 3:7 se establece un paralelo entre ―la tierra de Madián‖ y Cusán, que
evidentemente es otro nombre para Madián o se relaciona con un país vecino. Además, a
ciertas tribus árabes se las llamaba kusi o kushim. Así que parece que la designación
―cusita‖ no se limitaba a los descendientes de Cam por medio de Cus, sino que también
aplicaba a algunos habitantes de Madián. Por lo tanto, se podía decir que Zípora era
cusita.
• 21:14, 15—¿Qué era ―el libro de las Guerras de Jehová‖?
Indudablemente, éste era un registro histórico confiable de las guerras del pueblo de
Jehová. Tal vez éste haya comenzado con la acción airosa de Abrahán contra los cuatro
reyes que habían capturado a Lot y su familia (Génesis 14:1-16). Las Escrituras hacen
referencia a varios escritos no inspirados, algunos de los cuales fueron usados como
fuente de información por escritores inspirados de la Biblia. (Josué 10:12, 13; 1 Reyes
11:41; 14:19, 29.)
En las llanuras de Moab
• 22:20-22—Puesto que Jehová dijo a Balaam que se fuera con los hombres de Balac, ¿por
qué se encolerizó Él cuando el profeta se fue con ellos?
Jehová dijo a Balaam que él no podía maldecir a los israelitas, pero el avaro profeta se
fue con la intención de hacer precisamente eso para que el rey moabita Balac lo
recompensara (2 Pedro 2:15, 16; Judas 11). Por tal razón la cólera de Jehová se
encendió contra Balaam. Por supuesto, Jehová desaprobaba que se maldijera a Israel.
Pero Balaam, como Caín, voluntariosamente pasó por alto la voluntad de Dios (Génesis
4:6-8). Después que Jehová cambió en bendición cada maldición intencional, la
perversidad de Balaam lo movió a sugerir a Balac que usara moabitas y madianitas para
seducir a los israelitas y envolverlos en la adoración de Baal (Deuteronomio 23:5;
Números 31:15, 16; Revelación 2:14). Eso trajo la ira de Jehová sobre Israel y resultó en
la muerte de 24.000 personas. Posteriormente, el avaro Balaam murió a manos de los
que él procuró maldecir (Números 25:1-9; 31:8). ¡Qué advertencia contra la avaricia!
• 25:10-13—¿Cómo se cumplió esta promesa relacionada con el sacerdocio?
El puesto de sumo sacerdote parece haber continuado en la línea de descendientes de
Finees hasta el tiempo del sumo sacerdote Elí, descendiente de Itamar. Este cambio
probablemente se hizo debido a una descalificación temporal en la línea de Finees. Pero
el rey Salomón reemplazó a Abiatar, descendiente de Itamar, por el sumo sacerdote
Sadoc, que era descendiente de Finees (1 Reyes 1:1-14; 2:26, 27, 35). Hasta donde
muestran los registros históricos, aparentemente de allí en adelante la línea de Finees
siguió ocupando por muchos años el puesto de sumo sacerdote.
• 30:6-8—¿Puede el esposo de una cristiana anular los votos que ella haya hecho?
No, pues los seguidores de Jesús no están bajo la Ley. Jehová ahora trata con cada persona
individualmente en lo que tiene que ver con el hacer votos, y el esposo cristiano no está
autorizado para cancelarlos o prohibirlos. Claro, una esposa cristiana no debe hacer votos que
estén en conflicto con la Palabra de Dios o con sus deberes bíblicos para con su esposo.
(Eclesiastés 5:2-6.)
*** w04 1/8 págs. 24-27 Puntos sobresalientes del libro de Números ***
EN EL MONTE SINAÍ
(Números 1:1–10:10)
El primero de los dos censos se lleva a cabo mientras los israelitas todavía se encuentran al
pie del monte Sinaí. Este recuento, efectuado obviamente con fines militares, arroja un
resultado de 603.550 varones de 20 años de edad o más, sin contar a los levitas. El número
total de integrantes del campamento, incluidos mujeres, niños y los levitas, quizás supere los
tres millones de personas.
Una vez censados, los israelitas reciben instrucciones sobre el orden de marcha, las tareas
de los levitas y el servicio del tabernáculo, los mandatos que regulaban la cuarentena, y las
leyes aplicables a los casos de celos y a los votos contraídos por los nazareos. El capítulo 7
contiene información acerca de las ofrendas realizadas por los principales de las tribus con
motivo de la inauguración del altar, y el capítulo 9 trata de la observancia de la Pascua.
También se indica a la asamblea cómo montar y levantar el campamento.
Respuestas a preguntas bíblicas:
2:1, 2. ¿Qué eran ―las señales‖ en torno a las cuales acampaban en el desierto las
divisiones de tres tribus? La Biblia no nos explica en qué consistían estas señales. Sin
embargo, no se las consideraba símbolos sagrados ni se les atribuía ningún significado
religioso. Su función era eminentemente práctica: ayudar a toda persona a encontrar su lugar
en el campamento.
5:27. ¿Qué significa el hecho de que ‗decayera el muslo‘ de una esposa culpable de
adulterio? Aquí el término ―muslo‖ alude a los órganos reproductores (Génesis 46:26). Que
estos órganos ‗decayeran‘ indica que degenerarían hasta el punto de imposibilitarse la
concepción.
Lecciones para nosotros:
6:1-7. Ser nazareo exigía abnegación, pues había que abstenerse del fruto de la vid y de
toda bebida embriagante. Al igual que las mujeres se dejaban el pelo largo en muestra de
sujeción a sus esposos o padres, los nazareos lo hacían como señal de sumisión a Jehová.
Dado que debían mantenerse limpios, no podían acercarse a ningún cadáver, ni siquiera al de
un pariente próximo. En la actualidad, los siervos de tiempo completo manifiestan tal espíritu de
sacrificio al ser abnegados y sumisos a Jehová y su organización. Algunas asignaciones tal vez
requieran mudarse a un país distante, lo que pudiera dificultarles o impedirles su regreso a
casa para asistir al funeral de un familiar cercano.
8:25, 26. Para distribuir de manera conveniente los puestos de servicio de los levitas y por
consideración a la edad, a los hombres mayores se les apartaba del servicio obligatorio. Sin
embargo, podían ofrecerse para ayudar a otros levitas. Aunque en nuestros días no se jubila a
nadie de su labor como proclamador del Reino, el principio implícito en esta ley nos enseña una
valiosa lección. Aquel cristiano cuya edad avanzada le impida desempeñar ciertas obligaciones
puede participar en otros aspectos del servicio que estén a su alcance.
DE UN LUGAR A OTRO EN EL DESIERTO
(Números 10:11–21:35)
Cuando por fin se alza la nube de encima del tabernáculo, los israelitas emprenden una
marcha que los llevará a las llanuras desérticas de Moab treinta y ocho años y uno o dos
meses después. Encontrará provechoso seguir su recorrido en el mapa de la página 9 del
folleto Veamos ―la buena tierra‖, editado por los testigos de Jehová.
En el desierto de Parán, camino de Qadés, se producen al menos tres episodios de quejas.
Jehová pone fin al primero enviando un fuego que consume a algunos miembros del pueblo.
Más adelante, los israelitas claman por carne y Jehová les suministra codornices. Por último,
las quejas de Míriam y Aarón contra Moisés tienen como consecuencia que a ella se la
castigue temporalmente con lepra.
Ya acampados en Qadés, Moisés envía a espiar la Tierra Prometida a doce hombres, que
regresan al cabo de cuarenta días. El pueblo, creyendo el informe desfavorable de diez de los
espías, quiere apedrear a Moisés, Aarón y los fieles espías Josué y Caleb. Jehová se propone
herir a los israelitas con peste, pero porque Moisés intercede, los condena a vagar por el
desierto durante cuarenta años, hasta que mueran todos los que han sido censados.
Jehová dicta más disposiciones. Coré y otros israelitas rebeldes se alzan contra Moisés y
Aarón, pero mueren consumidos por el fuego o tragados por la tierra. Al día siguiente, toda la
asamblea murmura de Moisés y Aarón, por lo que perecen 14.700 israelitas a causa de un
azote divino. Dios hace florecer la vara de Aarón a fin de que se sepa a quién ha escogido
como sumo sacerdote. Luego pasa a dar más leyes relacionadas con las responsabilidades de
los levitas y la limpieza del pueblo. El empleo de las cenizas de una vaca roja prefigura la
limpieza que se obtiene mediante el sacrificio de Jesús (Hebreos 9:13, 14).
Los hijos de Israel retornan a Qadés, donde Míriam muere. La asamblea prorrumpe de
nuevo en quejas contra Moisés y Aarón, esta vez debido a la falta de agua. Por no santificar el
nombre divino cuando Jehová milagrosamente les proporciona agua, Moisés y Aarón pierden la
oportunidad de entrar en la Tierra Prometida. Israel deja atrás Qadés, y Aarón muere en el
monte Hor. Mientras rodean Edom, los israelitas se cansan y hablan en contra de Dios y
Moisés. Jehová los castiga enviándoles serpientes venenosas. Una vez más, Moisés intercede,
y Dios le ordena que haga una serpiente de cobre y la fije en un poste para que quienes hayan
sido mordidos la miren y se curen. La serpiente prefigura el hecho de que se fijara a Jesucristo
en un madero para nuestro beneficio eterno (Juan 3:14, 15). Israel derrota a los reyes amorreos
Sehón y Og, y se apropia de sus tierras.
Respuestas a preguntas bíblicas:
12:1. ¿Por qué se quejaron Míriam y Aarón respecto a Moisés? Aparentemente, el
verdadero motivo fue que Míriam deseaba más poder. Al reencontrarse Moisés con su esposa
Ziporá en el desierto, es posible que Míriam temiese perder su posición como la mujer de más
autoridad en el campamento (Éxodo 18:1-5).
12:9-11. ¿Por qué se castigó solo a Míriam con lepra? Es muy probable que fuera ella
quien suscitó las quejas y quien convenció a Aarón para que se le uniera. Este último manifestó
una buena actitud al reconocer su error.
21:14, 15. ¿A qué libro se alude en este pasaje? En las Escrituras se mencionan diversos
libros que los escritores bíblicos emplearon como fuente de información (Josué 10:12, 13;
1 Reyes 11:41; 14:19, 29). Uno de ellos fue ―el libro de las Guerras de Jehová‖, que
comprendía un relato histórico de las guerras del pueblo de Jehová.
Lecciones para nosotros:
11:27-29. Moisés nos puso un magnífico ejemplo del modo como debemos reaccionar
cuando otros reciben privilegios en el servicio de Jehová. En vez de ponerse celoso y tratar de
ensalzarse a sí mismo, Moisés se alegró cuando Eldad y Medad empezaron a actuar como
profetas.
12:2, 9, 10; 16:1-3, 12-14, 31-35, 41, 46-50. Jehová espera que sus siervos respeten la
autoridad que él concede.
14:24. A fin de resistir la presión del mundo para que hagamos lo que está mal, es
fundamental cultivar ―un espíritu diferente‖, esto es, una actitud mental distinta a la del mundo.
15:37-41. Los peculiares flecos de la indumentaria de los israelitas tenían el propósito de
recordarles que eran un pueblo separado para adorar a Dios y obedecer sus mandamientos.
¿No deberíamos nosotros también vivir en conformidad con las normas divinas y sobresalir por
ser diferentes del mundo?
EN LAS LLANURAS DE MOAB
(Números 22:1–36:13)
Cuando los hijos de Israel acampan en las llanuras desérticas de Moab, los habitantes de
esta nación sienten verdadero pavor. Su rey, Balac, contrata a Balaam para que maldiga a los
israelitas, pero este, forzado por Jehová, los bendice. Entonces se utiliza a mujeres moabitas y
madianitas para que los varones israelitas caigan en la inmoralidad y la idolatría. Como
consecuencia, Jehová destruye a 24.000 transgresores. El azote concluye cuando Finehás
demuestra que no tolera ninguna rivalidad hacia Jehová.
El segundo censo pone de manifiesto que, salvo Josué y Caleb, no queda vivo ninguno de
los hombres registrados en el primero. Moisés designa a Josué como su sucesor. El pueblo de
Israel recibe instrucciones sobre los procedimientos de diversas ofrendas y sobre los votos
hechos a Jehová. Además, los israelitas se vengan de los madianitas. Rubén, Gad y media
tribu de Manasés se asientan al este del Jordán, y se ordena a Israel que cruce el río y ocupe
la tierra. Se establecen con detalle los límites de la tierra, y se reparten las heredades por
sorteo. A los levitas se les conceden 48 ciudades, seis de las cuales sirven de ciudades de
refugio.
Respuestas a preguntas bíblicas:
22:20-22. ¿Por qué se encendió la cólera de Jehová contra Balaam? Jehová le había
dicho al profeta Balaam que no debía maldecir a los israelitas (Números 22:12). Sin embargo,
el profeta acompañó a los hombres de Balac con el firme propósito de desobedecer aquel
mandato, pues quería complacer al rey moabita para que este lo recompensara (2 Pedro 2:15,
16; Judas 11). Pese a que contra su voluntad había tenido que bendecir a Israel en lugar de
maldecirlo, todavía trató de ganarse el favor del rey proponiéndole que empleara adoradoras
de Baal para seducir a los varones israelitas (Números 31:15, 16). Así pues, la cólera de Dios
contra Balaam fue provocada por la codicia sin escrúpulos de aquel profeta.
30:6-8. ¿Puede el varón cristiano invalidar los votos de su esposa? En nuestros días,
Jehová considera que un voto es algo que sus siervos hacen a nivel individual. La dedicación a
Jehová, por ejemplo, es un voto personal (Gálatas 6:5). El esposo no tiene autoridad para
anularlo. Sin embargo, la esposa evitará hacer un voto que esté en conflicto con la Palabra de
Dios o con sus deberes hacia su esposo.
Lecciones para nosotros:
25:11. ¡Qué ejemplo de celo por la adoración de Jehová nos puso Finehás! ¿No debería el
deseo de mantener la pureza de la congregación impulsarnos a informar a los ancianos
cristianos de cualquier caso de inmoralidad grave que conozcamos?
35:9-29. El hecho de que un homicida involuntario tuviera que abandonar su hogar, huir a la
ciudad de refugio y quedarse en ella durante un período de tiempo nos enseña que la vida es
sagrada y debemos respetarla.
35:33. Lo único que puede expiar el asesinato de personas inocentes, cuya sangre
contamina la tierra, es la sangre de quienes la han derramado. ¡Qué apropiado será que
Jehová destruya a los inicuos antes de transformar la Tierra en un paraíso! (Proverbios
2:21, 22; Daniel 2:44.)
DEUTERONOMIO, LIBRO DE
CONTENIDO
Primer discurso de Moisés.
o Marco de circunstancias (1:1-5).
o La historia de los cuarenta años de vagar por el desierto (1:6-3:29).
o La exhortación de servir solo a Jehová por medio de guardar su pacto (4:1-40).
o Se apartan tres ciudades de refugio al este rIel Jordán (4:41-49).
Segundo discurso de Moisés.
o Los Diez Mandamientos y el relato de cuando se dio la Ley en el monte Sinaí
(5:1-33).
Se expone el primer mandamiento y se exhorta a enseñar a los hijos (6:1-
25).
o Siete naciones de la tierra de Canaán tienen que ser destruidas; no se debe
formar con ellas ningún tipo de alianza; sus altares y sus ídolos tienen que ser
destruidos (7:1-6).
o El amor de Jehová; Israel ha de mostrar amor y fidelidad para tener éxito en el fu-
turo (7:7-26).
Los israelitas nunca deben olvidar los tratos de Jehová con ellos en el
desierto (8:1-20).
La fidelidad de Jehová al pacto, no la justicia de Israel, es la razón por la
que poseen la tierra (9:1-6).
Se recuerda el becerro de oro y otros casos de desobediencia; las tablas
de la Ley son dadas por segunda vez (9:7-10:11).
Amar y temer a Dios desde el corazón es esencial para poseer la tierra
(10:12-11:12).
Se exponen ante Israel las bendiciones y las maldiciones (11:13-32).
o Instrucciones a Israel para cuando entre en la Tierra Prometida.
Disposiciones reglamentarias en cuanto a comer carne y relativas a la
sangre (12:1-27).
La apostasía, los falsos profetas y el juicio de estos (12:28-13:18).
Disposiciones reglamentarias que tienen que ver con mantenerse
separados como pueblo, con el alimento, con los cuerpos muertos y con el
diezmo (14:1-29).
El año de liberación (15:1-15); esclavitud voluntaria, permanente (15:16-
18).
Presentación de los primogénitos de los animales (15:19-23).
Las tres fiestas anuales (16:1-17).
Sistema judicial (16:18-17:13).
Disposiciones reglamentarias para los reyes (17:14-20).
Disposiciones reglamentarias para los levitas (18:1-8).
Advertencias en contra de la adivinación; se predice un profeta semejante
a Moisés; cómo se puede identificar a un profeta de Jehová (18:9-22).
Disposiciones reglamentarias para las ciudades de refugio (19:1-13).
Hitos; reglas para las declaraciones de los testigos (19:14-21).
Leyes militares (20:1-20).
Limpieza de culpa por derramamiento de sangre cuando no aparece el
homicida (21:1-9); matrimonios con mujeres cautivas (21:10-14).
Derecho del primogénito; cómo tratar a los hijos rebeldes; cuerpos muertos
colgados en un madero (21:15-23).
Consideración por la propiedad del prójimo; moralidad; bondad y respeto
por la vida; pureza (22:1-12).
Relaciones maritales (22:13-30).
Quiénes no podían llegar a formar parte de la congregación (23:1-8).
Limpieza en el campamento militar; leyes concernientes a los esclavos, las
prostitutas, el interés, los votos y el amor al prójimo (23:9-25).
Divorcio, préstamos, salarios, bondad hacia los huérfanos de padre y las
viudas (24:1-22).
Administración de varazos; matrimonio de cuñado; pesas y medidas;
Amaleq tiene que ser destruido (25:1-19).
Primicias y diezmos (26:1-19).
Tercer discurso de Moisés.
o La Ley se tiene que escribir en piedras (27:1-10).
o Se han de pronunciar bendiciones desde el monte Guerizim y maldiciones desde
el monte Ebal (27:11-26).
o Profecía sobre las bendiciones por obedecer los mandamientos de Dios y las
maldiciones por desobedecerlos (28:1-68).
Cuarto discurso de Moisés; renovación del pacto.
o Recordatorio del cuidado que Jehová mostró en el desierto (29:1-9).
o Advertencia contra la desobediencia (29:10-29).
Misericordia de Dios para con los que se arrepienten (30:1-10).
o Se pone delante de Israel la posibilidad de escoger la vida o la muerte (30:11-20).
Instrucciones finales de Jehová a Moisés.
o Se comisiona a Josué como caudillo; se predice la rebeldía de Israel (31:1-30).
Canción de Moisés (32:1-52).
Bendiciones finales de Moisés (33:1-29).
Muerte y entierro de Moisés (34:1-12).
*** w84 15/7 págs. 29-31 Deuteronomio nos exhorta a servir a Jehová con gozo sincero
El primer discurso de Moisés***
·4:15-24—¿Significan estas palabras contra el hacer imágenes que es incorrecto tener a la
vista fotografías de personas?
Estos versículos prohíben el hacer imágenes para la adoración falsa. Pero a los
israelitas no se les prohibió hacer imágenes con otros propósitos. Por ejemplo, en las
telas para la tienda del tabernáculo y sobre la cubierta del arca sagrada había
representaciones que se asemejaban a querubines que tenían la aprobación de Dios. No
sería apropiado relacionar con la idolatría la costumbre de tomar fotografías y tenerlas a
la vista, a menos que deliberadamente se usaran para propósitos que tuvieran que ver
con la religión falsa. Por lo general, no hay ninguna objeción bíblica a las fotografías, las
pinturas y las esculturas que tengan algún valor artístico o práctico al representar a
personas o cosas.
El segundo discurso de Moisés
·6:6-9—¿Debe entenderse literalmente el mandamiento de ‗atar la ley de Dios como señal
sobre la mano‘?
Estos versículos no apoyan la práctica de usar filacterias (cajitas que contienen textos
bíblicos). Más bien, la fraseología señala a una aplicación simbólica. (Compárese con
Éxodo 13:9; Proverbios 7:2, 3.) No se dice que los mandamientos habían de escribirse en
algo que entonces alguien usaría o que habían de fijarse a los postes de las puertas y a
las puertas. Los israelitas habían de mantener siempre a la vista los mandamientos de
Dios, sea que estuvieran en casa, en el camino o cerca de las puertas de la ciudad,
donde los ancianos trataban casos legales. Habían de conservar en el corazón la ley de
Dios, enseñarla a sus hijos y demostrar por acción (como se expresaría mediante las
manos) que se adherían a ella. El pueblo había de identificarse públicamente como
sostenedor de la ley de Jehová, tal como si hubiera estado escrita entre sus ojos para que
todos la vieran. De igual manera, los testigos de Jehová hoy procuran demostrar que son
siervos obedientes de Dios. El corazón los mueve a obedecer la Palabra de Jehová, y
llenan la mente con cosas que son verdaderas, de seria consideración, justas, amables,
virtuosas y dignas de alabanza. Se esfuerzan en todos los aspectos por mostrar que los
mandamientos de Jehová están ante ellos en todo momento. (Filipenses 4:8; Colosenses
3:23.)
·8:3, 4—¿Significa esto solamente que se repuso el suministro de ropa?
La provisión del maná fue un milagro continuo. Así también lo fue el hecho de que no se
les gastara la ropa ni se les hincharan los pies durante los 40 años que los israelitas
vagaron por el desierto. Si simplemente se hubiera renovado de modo normal el
suministro de ropa, aquello no hubiera sido ningún milagro. No habría envuelta ninguna
dificultad en usar la misma ropa durante todos aquellos años, pues la ropa de los niños
podía pasarse a los más jovencitos, y habría llegado a haber ropa disponible para otros a
medida que fueran muriendo personas adultas. Puesto que la cantidad de israelitas era
casi la misma al terminar el viaje por el desierto que al comenzar a vagar, el suministro
original de ropa sería más o menos apropiado durante los 40 años. (Números 2:32;
26:51.)
·14:21—Puesto que los israelitas no podían comer ―ningún cuerpo ya muerto‖, ¿por qué podían
darlo a un residente forastero o venderlo a un extranjero?
Como Legislador Supremo, Jehová tenía el derecho de poner ciertas restricciones solo a
los israelitas. Ellos eran ―un pueblo santo‖ para Él. Otras naciones no observaban esta
prohibición de no comer un animal que hubiera muerto por sí solo. No había nada injusto
en dar un cadáver que no hubiera sido desangrado a un residente forastero o venderlo a
un extranjero, pues los israelitas no se valían del engaño, y el que lo recibía o lo
compraba actuaba voluntariamente. Pudiera añadirse que Deuteronomio 14:21 está en
armonía con Levítico 17:10, donde se prohibía que el residente forastero comiera sangre.
Un residente forastero que fuera prosélito no había de comer sangre, pero esta
prohibición no aplicaba a un residente forastero que no fuera totalmente prosélito. Puede
que tal persona tuviera usos para el cadáver de un animal no desangrado que un israelita
o prosélito fiel considerara inmundo.
·17:5-7—¿Por qué se requería que viniera primero la mano de los testigos sobre una persona
sentenciada a muerte?
Todos en Israel habían de mostrar celo por la adoración verdadera y estar deseosos de
ver que permaneciera limpia la organización y no se causara ningún oprobio al nombre de
Jehová. Los testigos habían de mostrar tal celo tomando la delantera en ejecutar el juicio.
(Compárese con Números 25:6-9; Deuteronomio 13:6-11.) Por supuesto, una cosa era
testificar contra alguien, y otra muy diferente ejecutar al individuo. Esto haría que un
testigo pensara con mucha cautela al prestar declaración, y sólo una persona inicua daría
falso testimonio, pues sabía que sería la primera en actuar para dar muerte al hombre o la
mujer. Los testigos de Jehová pueden aplicar estos principios al desplegar celo por la
limpieza de la congregación y también ser muy cuidadosos al dar testimonio veraz.
Después de todo, cada uno de nosotros tiene que responder por sus actos al Juez
Supremo, Jehová. (Mateo 12:36, 37.)
·22:5—En vista de esta prohibición, ¿es apropiado que una mujer se ponga pantalones?
El propósito evidente de esta ley era evitar los abusos sexuales y la confusión en cuanto
a la identidad sexual. En apariencia y atavío, normalmente el hombre quiere lucir
masculino; y la mujer, femenina. Pues el que un israelita actuara contrario a este sentido
interno de decoro hubiera podido llevar a la homosexualidad. Aunque en aquel entonces
tanto los hombres como las mujeres usaban prendas de vestir parecidas a túnicas, había
una diferencia entre la vestidura de los hombres y la de las mujeres. De igual manera, en
algunas partes de la Tierra hoy, tanto los hombres como las mujeres usan pantalones,
aunque los estilos difieren para cada sexo. El principio en este texto no descartaría que a
veces la cristiana se pusiera pantalones, como cuando trabaja en la casa o en una finca.
Y según la costumbre local y la necesidad, los pantalones pudieran ser la prenda de vestir
conveniente en climas muy fríos. La Biblia aconseja a las mujeres que ―se adornen en
vestido bien arreglado, con modestia y buen juicio‖. (1 Timoteo 2:9, 10.)
·24:6—¿En qué sentido podía ser como apoderarse de un alma el apoderarse de un molino de
mano o de la muela superior de éste como prenda?
Generalmente, el pan se horneaba diariamente, y frecuentemente había que convertir en
harina el grano. Así que el pan de cada día de una familia dependía del molino de mano.
De manera misericordiosa, pues, la ley de Dios prohibía que alguien se apoderara del
molino de mano de alguna persona o de la muela superior de éste. El apoderarse de
cualquiera de éstos resultaría en privar a la familia de su pan de cada día y equivaldría a
apoderarse de un ―alma‖ o el ―medio de vida‖.
Discursos finales, cántico y bendición
·32:39—¿Cómo puede ser que no haya dioses junto con Jehová, si Juan 1:1 dice que ‗la
Palabra estaba con Dios y era un dios‘?
Estos textos tienen que ver con asuntos completamente diferentes. Lo que se quiere
mostrar en Deuteronomio 32:39 es que los dioses falsos no tienen participación alguna
con el Dios verdadero, Jehová, en Sus actos de salvación. No pueden librar del desastre
a sus adoradores, y tales dioses no estuvieron con Jehová en nada de lo que éste hizo.
Aunque la ―Palabra‖ es un dios o alguien poderoso, no está en oposición a Jehová ni
actúa como su rival, como era el caso con los dioses falsos. (Deuteronomio 32:12, 37,
38.)
·33:1-29—¿Por qué no se menciona a Simeón en esta bendición?
Simeón y Leví habían cooperado en un acto de crueldad, y aunque habían recibido porciones
en Israel, éstas no fueron como las de las demás tribus. A los levitas se les dieron 48 ciudades
por todo el país, mientras que la parte de Simeón estaba dentro del territorio de Judá (Génesis
34:13-31; 49:5-7; Josué 19:9; 21:41, 42). De modo que cuando Moisés dirigió su atención a la
tribu de Judá, sabía bien que la porción de Simeón estaba junto con la de ella. Además, la tribu
de Simeón vino a estar bajo la bendición general: ―¡Feliz eres tú, oh Israel! ¿Quién hay como tú,
pueblo que goza de salvación en Jehová?‖. (Deuteronomio 33:29.)
*** w04 15/9 págs. 24-27 Puntos sobresalientes del libro de Deuteronomio ***
‗NO OLVIDES LO QUE TUS OJOS HAN VISTO‘
(Deuteronomio 1:1–4:49)
En su primer discurso, Moisés enumera algunas de las lecciones aprendidas en el desierto,
en particular aquellas que serán útiles a los israelitas a la hora de prepararse para tomar
posesión de la Tierra Prometida. El relato sobre el nombramiento de los jueces seguramente
les recuerda que Jehová organiza a su pueblo de modo que siempre reciba su cuidado
amoroso. Moisés también les cuenta cómo el mal informe de los diez espías llevó a que la
generación anterior no pudiera entrar en la tierra de la promesa. Imagínese el impacto que
debió de causar esta advertencia de Moisés entre sus oyentes, quienes entonces tenían esa
tierra ante sus ojos.
Recordar las victorias que Jehová había concedido a los hijos de Israel antes de cruzar el
Jordán de seguro les infundió valor cuando estaban a punto de iniciar la conquista del otro lado
del río. En aquella tierra que iban a ocupar abundaba la idolatría. ¡Qué apropiado fue que
Moisés advirtiera con firmeza contra la adoración idolátrica!
Respuestas a preguntas bíblicas:
2:4-6, 9, 19, 24, 31-35; 3:1-6. ¿Por qué aniquilaron los israelitas a algunos de los
pueblos que vivían al este del Jordán y a otros no? Jehová prohibió a Israel enfrentarse con
los hijos de Esaú. ¿Por qué? Porque eran prole del hermano de Jacob. Los israelitas tampoco
debían molestar a los moabitas y los ammonitas ni luchar contra ellos, pues eran
descendientes de Lot, el sobrino de Abrahán. En cambio, los reyes amorreos Sehón y Og
no tenían ningún derecho sobre la tierra que ocupaban. Por eso, cuando Sehón les negó a los
israelitas el paso por su territorio y Og salió a combatir contra ellos, Jehová ordenó a Su pueblo
demoler sus ciudades y no dejar a nadie con vida.
4:15-20, 23, 24. ¿Indica la prohibición de hacerse imágenes talladas que no se pueden
representar objetos con fines artísticos? No. Este mandato prohibía hacerse imágenes para
adorarlas, es decir, ‗inclinarse ante las imágenes y servirles‘. Las Escrituras no condenan
esculpir o pintar objetos con fines artísticos (1 Reyes 7:18, 25).
Lecciones para nosotros:
1:2, 19. Los hijos de Israel vagaron por el desierto durante unos treinta y ocho años, pese a
que Qadés-barnea quedaba a tan solo ―once días de viaje desde Horeb [la región montañosa
alrededor del monte Sinaí donde se les dieron los Diez Mandamientos] por camino del monte
Seír‖. ¡Qué precio pagaron por desobedecer a Jehová Dios! (Números 14:26-34.)
1:16, 17. Los criterios de justicia divinos son hoy día los mismos que en el pasado.
A quienes se les confía la responsabilidad de participar en un comité judicial no deben permitir
que el favoritismo ni el temor al hombre influyan en su decisión.
4:9. Para que a Israel le fuera bien, era fundamental que ‗no olvidara las cosas que sus ojos
habían visto‘. En nuestro caso también es vital que, a medida que se acerca el prometido
nuevo mundo, tengamos presentes los maravillosos actos de Jehová siendo estudiantes
diligentes de su Palabra.
AMA A JEHOVÁ Y OBEDECE SUS MANDAMIENTOS
(Deuteronomio 5:1–26:19)
En su segundo discurso, Moisés rememora cómo se recibió la Ley en el monte Sinaí, repite
los Diez Mandamientos y establece la completa aniquilación de siete naciones. A los hijos de
Israel se les recuerda una importante lección aprendida en el desierto: ―No solo de pan vive el
hombre, sino que de toda expresión de la boca de Jehová vive el hombre‖. En su nueva
situación tendrán que ―guardar todo el mandamiento‖ (Deuteronomio 8:3; 11:8).
A medida que vayan asentándose en la Tierra Prometida, los israelitas precisarán leyes
relacionadas no solo con su adoración, sino también con la administración de justicia, el
gobierno, la guerra y su vida privada y social de cada día. Moisés repasa estas leyes y recalca
la necesidad de amar a Jehová y obedecer sus mandamientos.
Respuestas a preguntas bíblicas:
8:3, 4. ¿Cómo sucedió que no se desgastaron las prendas de los israelitas ni se les
hincharon los pies durante su viaje por el desierto? Este hecho, al igual que el suministro
regular de maná, fue un milagro. Desde que comenzaron su viaje, los israelitas utilizaron la
misma ropa y el mismo calzado, probablemente pasándoselos unos a otros según crecían los
niños y morían los adultos. Los dos censos realizados al inicio y al final de su travesía por el
desierto revelaron que el número de israelitas no había aumentado, por lo que las existencias
originales de tales artículos habrían bastado (Números 2:32; 26:51).
14:21. ¿Por qué podían los israelitas dar a un residente forastero un animal que
no había sido desangrado o venderlo a un extranjero si ellos mismos no lo comerían? En
la Biblia, la expresión ―residente forastero‖ podía referirse tanto a una persona no israelita que
se había hecho prosélito como a un poblador que cumplía las leyes básicas de la nación, pero
que no adoraba a Jehová. El extranjero y el residente forastero que no se hicieran prosélitos
no estaban bajo la Ley, y podían utilizar de diversas maneras los animales muertos que
no habían sido desangrados. Por ello se permitía a los israelitas darles o venderles esos
animales. El prosélito, en cambio, debía obedecer el pacto de la Ley, por lo que no podía
comer la sangre de un animal, como se indica en Levítico 17:10.
24:6. ¿Por qué se compara apoderarse de ‗un molino de mano o de la muela superior
de este como prenda‘ a apoderarse de ―un alma‖? El molino de mano y su muela superior
representaban el ―alma‖ de la persona, es decir, su medio de vida. Apoderarse de cualquiera
de estos privaría a toda la familia de su pan de cada día.
25:9. ¿Qué indicaba el hecho de quitarle la sandalia y escupirle en la cara a un hombre
que se negaba a llevar a cabo el matrimonio de cuñado? Según ―la costumbre en otros
tiempos en Israel respecto al derecho de recompra [...,] [un] hombre tenía que quitarse su
sandalia y darla a su prójimo‖ (Rut 4:7). Así pues, quitarle la sandalia a un hombre que se
negaba a realizar el matrimonio de cuñado confirmaba que él había renunciado a su posición y
a su derecho a proporcionarle un heredero a su hermano muerto. Esto era motivo de
vergüenza (Deuteronomio 25:10). Escupirle en la cara era una forma de humillarlo (Números
12:14).
Lecciones para nosotros:
6:6-9. Tal como tenían que hacer los israelitas con la Ley, nosotros también debemos
conocer a fondo las normas divinas, tenerlas siempre presentes e inculcarlas en nuestros hijos.
Hemos de ‗atarlas como señal sobre nuestra mano‘ en el sentido de que nuestras acciones —
representadas por nuestras manos— deben demostrar que somos obedientes a Jehová.
Además, igual que una ―venda frontal entre los ojos‖, nuestra obediencia debe ser evidente a
todos.
6:16. Nunca pongamos a prueba a Jehová como hicieron con falta de fe los israelitas en
Masah, donde se quejaron por no tener agua (Éxodo 17:1-7).
8:11-18. El materialismo puede hacernos olvidar a Jehová.
9:4-6. No caigamos en el error de creernos justos.
13:6. No permitamos que nadie nos aleje de la adoración de Jehová.
14:1. Debe evitarse la automutilación, pues además de mostrar falta de respeto por el
cuerpo humano, puede estar relacionada con la religión falsa (1 Reyes 18:25-28). Nuestra
esperanza en la resurrección debería impedir semejantes extremos en las muestras de duelo
por los muertos.
20:5-7; 24:5. Seamos considerados con aquellos que tengan circunstancias especiales,
incluso cuando la tarea que haya que efectuar sea importante.
22:23-27. Ante un intento de violación, gritar es uno de los recursos disuasorios más
eficaces con los que cuenta la mujer.
―TIENES QUE ESCOGER LA VIDA‖
(Deuteronomio 27:1–34:12)
En su tercer discurso, Moisés estipula que tras cruzar el Jordán, los israelitas deben escribir
la Ley en grandes piedras y pronunciar las maldiciones que les acarreará la desobediencia, así
como las bendiciones que tendrán por obedecer. El cuarto discurso comienza con la
renovación del pacto entre Jehová e Israel. Una vez más, Moisés previene al pueblo contra la
desobediencia y los anima a ―escoger la vida‖ (Deuteronomio 30:19).
Además de los cuatro discursos, Moisés habla del cambio de caudillo y enseña a los
israelitas un hermoso cántico que alaba a Jehová y advierte de las trágicas consecuencias de
la infidelidad. Después de bendecir a las tribus, Moisés muere a la edad de 120 años y es
enterrado. El período de duelo dura treinta días, lo que equivale a casi la mitad del tiempo que
abarca Deuteronomio.
Respuestas a preguntas bíblicas:
32:13, 14. Puesto que los israelitas tenían prohibido comer todo tipo de grasa, ¿qué
significaba que comieran ―la grasa de carneros‖? Esta expresión, empleada aquí en
sentido figurado, denota lo mejor del rebaño. Este uso poético se deduce del hecho de que en
el mismo versículo se hable de ―la grasa de los riñones del trigo‖ y ―la sangre de la uva‖.
33:1-29. ¿Por qué no se mencionó expresamente a Simeón en la bendición de Moisés
a los hijos de Israel? Porque tanto Simeón como Leví habían actuado ―con dureza‖ y su
cólera había sido ―cruel‖ (Génesis 34:13-31; 49:5-7). Su herencia no fue como la de las demás
tribus. Leví recibió 48 ciudades, y la porción de Simeón formaba parte del territorio de Judá
(Josué 19:9; 21:41, 42). Por eso Moisés no mencionó explícitamente a Simeón. No obstante, la
bendición de esta tribu estaba incluida en la bendición general de Israel.
JOSUE, LIBRO DE
CONTENIDO
Josué es comisionado por Jehová para conducir a los israelitas a través del Jordán;
también se le insta a que sea valeroso y obedezca la Ley (1:1-9).
o Josué manda a los oficiales que den instrucciones a los israelitas para que se
preparen a fin de cruzar el Jordán (1:10, 11).
o Les recuerda a los rubenitas, gaditas y a la media tribu de Manases su obligación
de participar en la conquista; ellos acceden a cooperar (1:12-18).
o Envía dos espías para examinar Jericó y sus inmediaciones (2:1).
Los espías se alojan con Rahab, una prostituta de Jericó (2:1).
Debido a su fe en Jehová, Rahab esconde a los espías y después
dirige en otra dirección a los hombres que el rey de Jericó envió
para buscarlos; ella les pide que la dejen con vida a ella y a toda su
familia por haber ejercido bondad amorosa (2:2-13).
Los espías le garantizan a Rahab que si ella no les delata será
conservada viva, y le dan instrucciones para que ate un cordón de
hilo escarlata en la ventana y reúna a su familia dentro de la casa a
fin de que se salven (2:14,16-21).
Valiéndose de una soga, los espías descienden por la ventana de la casa
de Rahab y, después de permanecer tres días en la región montañosa,
vuelven con un buen informe a Josué (2:15, 21-24).
Los israelitas, bajo el mando de Josué, par ten del campamento en Sitim, pasan la no
che cerca del Jordán y cruzan el río (3:1-17).
Siguiendo las instrucciones divinas, los sacerdotes con el Arca encabezan la mar cha
(3:8,11,14).
En el mismo instante en que los pies de los sacerdotes que llevan el Arca pisan la orilla
de las aguas del Jordán, el río se represa milagrosamente, cumpliéndose así las
palabras que Jehová le había hablado a Josué, y suponiendo una garantía de que
Jehová estaría con Josué y de que Israel derrotaría a los habitantes de aquella tierra
(3:7, 9-16).
Mientras que los sacerdotes permanecen de pie con el Arca en medio del Jordán, los
israelitas cruzan el río (3:17).
Por orden de Josué, se depositan doce piedras recogidas de en medio del Jordán en el
primer lugar de alojamiento israelita al oeste del Jordán; también se establecen doce
piedras en medio del Jordán, en el lugar en donde los sacerdotes estuvieron de pie (4:1-
10).
Por último, los sacerdotes que llevan el Arca cruzan el río y el Jordán de nuevo se
desborda por sus riberas(4:11-19).
Doce piedras tomadas del lecho del Jordán son colocadas en Guilgal como memorial
(4:20-24).
Los habitantes de aquella tierra sienten temor al ver que los israelitas han cruza do el
Jordán de manera milagrosa (5:1).
Después de que los varones israelitas son circuncidados en Guilgal, se celebra la
Pascua; el maná cesa cuando los israelitas empiezan a comer el fruto de la tierra (5:2-
12). Un príncipe angélico se le aparece a Josué cerca de Jericó y le dice cómo tomarán
la ciudad (5:13-6:5).
Jericó es dada por entero a la destrucción cuando Jehová hace que caigan los muros;
Rahab y su casa se salvan (6:6-25, 27).
Josué pronuncia una maldición profética sobre aquel que reedifique Jericó (6:26).
Acán se apropia indebidamente de cosas dadas por entero a la destrucción (7:1).
Los israelitas son derrotados por los hombres de Hai debido a que Jehová retiene su
ayuda por el pecado de Acán; Acán y su casa son lapidados y después quemados (7:2-
26). Con la bendición de Jehová, el segundo ataque contra Hai tiene éxito (8:1-29).
Josué realiza una emboscada contra la ciudad (8:2-21).
Los habitantes son dados por entero a la destrucción, sus animales domésticos se
toman como despojo, la ciudad se reduce a un montículo desolado y su rey es colgado
en un madero hasta el atardecer (8:22-29).
Josué edifica un altar en el monte Ebal y lee las bendiciones y las maldiciones a los
israelitas; entre tanto, la mitad de la congregación está de pie enfrente del monte
Guerizim y la otra mitad enfrente del monte Ebal(8:30-35).
Mientras que los otros pueblos de Canaán se preparan para guerrear contra Israel,
astutamente los gabaonitas consiguen que Josué celebre con ellos un pacto de paz (9:1-
15,24).
A pesar de que los gabaonitas habían presentado falsamente los hechos con el fin de
salvar sus vidas, se respeta el pacto celebrado con ellos; los gabaonitas pasan a ser
esclavos (9:16-27).
Cinco reyes se alían contra los gabaonitas por haber hecho la paz con Israel (10:1-5).
o Saliendo de Guilgal, el ejército de Israel marcha durante toda la noche para ir a
defender a los gabaonitas,en respuesta a su petición de ayuda (10:6-9).
o El enemigo es derrotado, pues Jehová lucha por Israel (10:10-27).
Después de la victoria, Josué prosigue y toma las ciudades de Maquedá, Libná, Lakis,
Eglón, Hebrón y Debir; posteriormente, captura la región montañosa, el Négueb y la
Sefelá, en la parte meridional de Canaán (10:28-3).
Una coalición de los reyes cananeos procedentes del norte, encabezados por Jabín, de
Hazor, reúnen sus fuerzas en las aguas de Merom para pelear contra Israel (11:1-5).
Jehová le da la victoria a Israel; por mandato divino, Josué desjarreta los caballos y
quema los carros del enemigo (11:6-9).
Hazor es capturada y quemada (11:10-15).
Terminan las conquistas más importantes; se enumera a treinta y un reyes derrotados
(11:16-12:24).
La tierra, incluyendo aquellas partes que aún no han sido subyugadas, es repartida
como herencia entre los israelitas (13:1-7).
A los gaditas, rubenitas y a la media tribu de Manasés se les da la posesión de la he
rencia al este del Jordán, posesión que ya les había sido concedida por Moisés; los
levitas no reciben ninguna herencia (13:8-33).
Josué da Hebrón a Caleb, de la tribu de Judá; esta es una herencia especial que Jehová
le había prometido por medio de Moisés (14:6-15).
Otras herencias al oeste del Jordán se asignan por sorteo (14:1-5).
o La herencia de Judá (15:1-63).
o El territorio asignado a Efraín y a Manasés (16:1-17:18).
La herencia de los efraimitas, en la que hay que contar las ciudades
enclavadas en el territorio de Manasés (16:5-10).
Los manasitas, entre los que estaban las hijas del manasita
Zelofehad, reciben su herencia: diez lotes de tierra para los
manasitas al oeste del Jordan, así como algunas ciudades
enclavadas en Isacar y Aser (17:1-13).
Las tribus de Efraín y Manasés consideran demasiado pequeñas
sus herencias; Josué les dice que desmonten los bosques y
expulsen a los cananeos (17:14- 18).
o El tabernáculo se sitúa en Siló y la distribución de la tierra por sorteo continúa des
de allí (18:1-10).
A las tribus de Benjamín, Simeón, Zabulón, Isacar, Aser, Neftalí y Dan se
les asignan sus herencias por sorteo; Josué recibe Timnat-sérah como
herencia especial (18:11-19:51).
Se apartan seis ciudades de refugio para los homicidas involuntarios (20:1-
9).
Se destinan cuarenta y ocho ciudades para los levitas, trece de las cuales
son para los sacerdotes (21:1-42).
o Al repartir el territorio, ya se han cumplido las promesas de Jehová a Israel
(21:43-45).
Los rubenitas, los gaditas y la media tribu de Manasés vuelven a su herencia, al este del
Jordán, después de recibir el consejo y la bendición de Josué (22:1-9).
o Edifican un altar, lo que provoca que las tribus al oeste del Jordán planeen una
acción militar contra ellos por Infidelidad (22:10-12).
o El asunto del altar se soluciona pacífica mente cuando las tribus situadas al este
del Jordán revelan que el propósito del altar es hacer que sirva de memorial de
fidelidad a Jehová (22:13-34).
Josué reúne a los ancianos de Israel, los cabezas, los jueces y los oficiales; les insta a
llevar a cabo la palabra de Jehová (23:1-16).
Josué congrega a todo Israel en Siquem, re pasa con ellos los tratos de Dios y les anima
a servir a Jehová; los israelitas renuevan el pacto de hacer la voluntad de Dios (24:1-28).
Muere Josué; son enterrados los huesos de José en Siquem; muere el sumo sacerdote
Eleazar (24:29-33).
*** w04 1/12 págs. 8-12 Puntos sobresalientes del libro de Josué ***
A ―LAS LLANURAS DESÉRTICAS DE JERICÓ‖
(Josué 1:1–5:15)
Josué recibe una asignación muy importante cuando Jehová le dice: ―Moisés mi siervo está
muerto; y ahora levántate, cruza este Jordán, tú y todo este pueblo, a la tierra que les voy a dar
a ellos, a los hijos de Israel‖ (Josué 1:2). Josué dirigirá a una nación de varios millones de
personas a la Tierra Prometida. En preparación para ello, envía dos espías a Jericó, la primera
ciudad que será conquistada. Allí vive Rahab la ramera, quien ha oído de los actos poderosos
que Jehová ha efectuado a favor de su pueblo. Ella protege y ayuda a los espías, y a cambio,
estos le prometen que sobrevivirá.
Cuando regresan los espías, Josué y el pueblo están listos para emprender la marcha y
cruzar el Jordán. Aunque se desborda por sus riberas, el río no supone ningún obstáculo para
ellos, pues Jehová lo detiene como si colocara una represa y permite que las aguas de más
abajo se viertan en el mar Muerto. Los israelitas cruzan el Jordán y acampan en Guilgal, cerca
de Jericó. Cuatro días más tarde, en la noche del 14 de Abib, celebran la Pascua en las
llanuras desérticas de Jericó (Josué 5:10). Al día siguiente empiezan a comer del producto del
suelo, y cesa la provisión del maná. Durante ese tiempo, Josué circuncida a todos los varones
que nacieron en el desierto.
Respuestas a preguntas bíblicas:
2:4, 5. ¿Por qué engaña Rahab a los hombres del rey que buscan a los espías? Rahab
arriesga su vida para proteger a los espías porque ha puesto fe en Jehová. Por tanto, no está
obligada a revelar su paradero a hombres que pretenden hacer daño al pueblo de Dios (Mateo
7:6; 21:23-27; Juan 7:3-10). De hecho, Rahab fue ―declarada justa por obras‖, entre ellas la de
enviar por otro camino a los emisarios del rey (Santiago 2:24-26).
5:14, 15. ¿Quién es ―el príncipe del ejército de Jehová‖? El príncipe que acude a
fortalecer a Josué cuando empieza la conquista de la Tierra Prometida es probablemente ―la
Palabra‖: Jesucristo en su existencia prehumana (Juan 1:1; Daniel 10:13). ¡Cuánto nos
fortalece la garantía de que el glorificado Jesucristo apoya al pueblo de Dios en su guerrear
espiritual!
Lecciones para nosotros:
1:7-9. Leer la Biblia a diario, meditar regularmente sobre lo que dice y poner en práctica lo
que aprendemos es esencial para tener éxito en nuestras actividades espirituales.
1:11. Josué manda al pueblo que prepare las provisiones y que no se quede de brazos
cruzados esperando que Dios las suministre. La exhortación de Jesús sobre dejar de
inquietarnos por las necesidades de la vida, además de la promesa de que ―todas estas otras
cosas [nos] serán añadidas‖, no significa que no debamos tomar medidas para mantenernos
(Mateo 6:25, 33).
2:4-13. Tras oír las noticias sobre las grandes obras de Jehová y al darse cuenta de que el
tiempo en que vivía era crítico, Rahab decide ponerse de parte de los adoradores de Dios. Si
usted lleva algún tiempo estudiando la Biblia y reconoce que vivimos en ―los últimos días‖, ¿no
cree que debería tomar la decisión de servir a Dios? (2 Timoteo 3:1.)
3:15. Dado que el informe de los espías enviados a Jericó es favorable, Josué actúa con
rapidez y no aguarda hasta que las aguas del Jordán bajen. Con respecto a las obras
relacionadas con la adoración verdadera, debemos actuar con valor y no demorarnos
esperando a que las circunstancias parezcan más convenientes.
4:4-8, 20-24. Las doce piedras que se toman del lecho del Jordán han de servir de
recordatorio a Israel. Los actos de liberación que Jehová ha efectuado a favor de su pueblo de
la actualidad también son recordatorios de que él apoya a sus siervos.
CONTINÚA LA CONQUISTA
(Josué 6:1–12:24)
La ciudad de Jericó está ‗bien cerrada, nadie sale y nadie entra‘ (Josué 6:1). ¿Cómo se
tomará la ciudad? Jehová dice a Josué lo que tiene que hacer. Poco después, los muros se
derrumban, y la ciudad queda destruida. Solo se salvan Rahab y sus parientes.
La siguiente conquista es la ciudad real de Hai. Los espías enviados a ella informan que
tiene pocos habitantes, por lo que no se requieren muchos hombres para tomarla. Sin
embargo, los tres mil soldados que se envían para atacarla terminan huyendo de los hombres
de Hai. ¿Por qué? Jehová no está con los israelitas. Acán, de la tribu de Judá, pecó durante la
invasión de Jericó. Tras atender el asunto, Josué marcha contra Hai. El rey de esta ciudad está
ansioso de pelear con los israelitas, pues ya antes los ha vencido. Pero Josué aprovecha el
exceso de confianza de los defensores y captura la ciudad.
Gabaón es ‗una ciudad grande, mayor que Hai, y todos sus hombres son poderosos‘ (Josué
10:2). No obstante, al oír de las victorias de Israel sobre Jericó y Hai, los hombres de Gabaón
se valen de una treta para que Josué celebre un pacto de paz con ellos. Las naciones vecinas
ven en esta deserción una amenaza para ellas. Cinco de sus reyes forman una alianza y
atacan Gabaón. Israel rescata a los gabaonitas y derrota por completo a los atacantes. Entre
las demás conquistas bajo la dirección de Josué figuran ciudades en el sur y el oeste, así como
la victoria sobre la coalición de los reyes del norte. El número de reyes vencidos al oeste del
Jordán asciende a 31.
Respuestas a preguntas bíblicas:
10:13. ¿Cómo es posible tal fenómeno? ―¿Hay cosa alguna demasiado extraordinaria
para Jehová‖, el Creador de los cielos y la Tierra? (Génesis 18:14.) Si así lo decide, él puede
alterar el movimiento de nuestro planeta de modo que, desde la óptica de un observador
terrestre, parezca que el Sol y la Luna están inmóviles. O puede dejar que la Tierra y la Luna
prosigan su movimiento y refractar la luz del Sol y la Luna de forma que sigan brillando. Sea
como fuere, ―ningún día ha resultado ser como aquel‖ en toda la historia humana (Josué
10:14).
10:13. ¿Qué es el libro de Jasar? El libro se vuelve a mencionar en 2 Samuel 1:18 con
referencia a un poema llamado ―El arco‖, una canción de duelo por el rey Saúl de Israel y su
hijo Jonatán. El libro era probablemente una colección de canciones y poemas sobre temas
históricos, y parece que los hebreos lo conocían bien.
Lecciones para nosotros:
6:26; 9:22, 23. La maldición que Josué pronuncia cuando Jericó es destruida se cumple
unos quinientos años más tarde (1 Reyes 16:34). La maldición de Noé contra su nieto Canaán
se cumple cuando los gabaonitas se convierten en obreros (Génesis 9:25, 26). La palabra de
Jehová siempre se cumple.
7:20-25. Algunos quizá piensen que el robo de Acán fue una falta de poca importancia y
no perjudicó a nadie más. Tal vez consideren triviales también los pequeños robos y las
violaciones menores de las leyes bíblicas. Nosotros, sin embargo, debemos ser como Josué en
nuestra resolución de resistir la presión a cometer actos ilegales o inmorales.
9:15, 26, 27. Debemos tomar en serio los acuerdos que hacemos y cumplir nuestra palabra.
JOSUÉ ASUME SU ÚLTIMA GRAN TAREA
(Josué 13:1–24:33)
Ya entrado en años —cerca de 90—, Josué emprende la enorme tarea de repartir la tierra.
Tanto las tribus de Rubén y Gad como la media tribu de Manasés ya han recibido su herencia
al este del Jordán. A las demás tribus se les da ahora una herencia en el lado oeste echando
suertes.
Se erige el tabernáculo en Siló, en el territorio de Efraín. Caleb recibe la ciudad de Hebrón, y
Josué, Timnat-sérah. Los levitas heredan 48 ciudades, entre ellas las seis ciudades de refugio.
En su regreso a su herencia situada al este del Jordán, los guerreros de Rubén, Gad y la media
tribu de Manasés edifican un altar ―sumamente descollante‖ (Josué 22:10). Las tribus que se
encuentran al oeste del Jordán ven en esa acción un acto de apostasía, y por poco estalla una
guerra entre las tribus; sin embargo, la buena comunicación impide el derramamiento de
sangre.
Después que Josué ha vivido por algún tiempo en Timnat-sérah, reúne a los ancianos, los
cabezas, los jueces y los oficiales de Israel, y los exhorta a ser valerosos y mantenerse fieles a
Jehová. Luego congrega a todas las tribus en Siquem. Allí repasa los tratos de Jehová desde
los días de Abrahán, y de nuevo los insta a ―[temer] a Jehová y [servirle] exentos de falta y en
verdad‖. El pueblo se siente impulsado a responder: ―¡A Jehová nuestro Dios serviremos, y a su
voz prestaremos atención!‖ (Josué 24:14, 15, 24). Tras estos sucesos, Josué muere a la edad
de 110 años.
JUECES, LIBRO DE
CONTENIDO
Los antecedentes y las condiciones existentes durante el tiempo de los jueces (1:1-3:6).
o Aunque fueron tomando posesión de las herencias gracias al esfuerzo individual y
de las tribus, los israelitas no obedecieron el decreto de Dios de expulsar a los
cananeos y destruir todo lo que estuviese relacionado con la idolatría (1:1-2:5).
o Después de la muerte de Josué y de la generación de más edad, los israelitas
caen en la adoración falsa de los cananeos que aún quedaban en el país; Jehová
abandona a su pueblo en manos de sus enemigos pero levanta jueces para
liberarlos cuando estos se arrepienten (2:6-3:6).
Registro de las opresiones que llevaron a cabo los enemigos, y de las posteriores
hazañas de los jueces (3:7-16:31).
o Ocho años bajo el control del rey Cusán risataim; liberados por Otniel, hijo de
Quenas (3:7-11).
o Por dieciocho años están sometidos al rey moabita Eglón; el benjamita Ehúd,
después de matar a Eglón, reúne a los israelitas para la guerra y derrota a Moab
(3:12-30).
o Samgar derriba a 600 filisteos con una aguijada de ganado y salva a Israel (3:31).
o Veinte años de opresión por parte de Jabín, el rey de Hazor; la profetisa Débora
juzga a Israel; se comisiona a Barac para llevar la delantera en la lucha contra el
enemigo (4:1-5:31).
Barac reúne a las fuerzas israelitas en el monte Tabor, atrayendo los
carros de guerra del enemigo al valle torrencial de Cisón (4:11-13).
Jehová le da la victoria a Barac, y en esta acción se basa la canción de
Débora y Barac (4:14-5:31).
o Los israelitas son hostigados por los madianitas, los amalequitas y los orientales
durante siete años; Gedeón es comisionado por Dios como libertador (6:1-24).
Gedeón obra en armonía con su asignación: de noche, con la cooperación
de diez hombres,demuele el altar de Baal, corta el poste sagrado, edifica
un altar a Jehová y sacrifica un toro;cuando las fuerzas del enemigo
acampan en la llanura baja de Jezreel, Gedeón reúne un ejército y. por
medio de dos pruebas, se asegura de que tiene el respaldo de Jehová
(6:25-40).
Las fuerzas israelitas formadas por 32.000 hombres acampan junto al pozo
de Harod;22.000 temerosos son despedidos y, al someter a los restantes a
una prueba, finalmente el ejército se reduce a 300 hombres(7:1-8).
Gedeón inspecciona el campamento ene migo; después, él y sus hombres
tocan los cuernos, rompen los jarrones, sostienen en alto las antorchas y
lanzan un grito de guerra;Jehová pone en confusión al enemigo haciendo
que los amalequitas, madianitas y orientales se vuelvan unos contra otros
(7:9-22).
Las otras tribus de Israel son convocadas para participar en la batalla; los
efraimitas capturan a los príncipes madianitas Oreb y Zeeb, pero después
buscan con tienda con Gedeón por no haberles llama do antes; Gedeón,
con tacto, evita el conflicto (7:23-8:3).
Gedeón continúa persiguiendo al enemigo; al regresar victorioso, castiga a
los hombres de Sucot y mata a los hombres de Penuel por no prestar
ayuda; también ejecuta a los dos reyes de Madián: Zébah y Zalmuná (8:4-
21).
Rehúsa ser rey, pero hace un efod del botín de la guerra, efod que más
tarde se convierte en un objeto de veneración idolátrica (8:22-28).
o Gedeón llega a tener una familia grande; pero, después de su muerte, matan a
casi todos sus hijos, y Abimélec llega a ser rey(8:30-9:5).
Abimélec, el hijo que Gedeón tuvo con una concubina de Siquem, asesina
a todos sus medio hermanos a excepción de Jotán, el menor, y llega a ser
rey en Siquem(8:31; 9:1-21).
Surgen fricciones entre los siquemitas y Abimélec; finalmente, Abimélec
destruye Siquem y después, mientras le pone sitio a Tebez, le hacen
pedazos el cráneo y él mismo ordena a su servidor que le mate(9:22-57).
o Tolá y Jaír juzgan a Israel por veintitrés y veintidós años respectivamente (10:1-
5).
Israel se vuelve de nuevo a la adoración falsa y llega a estar bajo la opresión filistea y
ammonita; se usa al juez Jefté como libertador (10:6-12:7).
Jefté encabeza la lucha contra los ammonitas, se le bendice con una
victoria y, por esta razón, cumple un voto con respecto a su hija (11:1-40).
Los efraimitas se sienten menospreciados y acusan injustamente a Jefté
de no haber solicitado su ayuda; como resultado, hay lucha y los efraimitas
son derrotados(12:1-6).
Jefté juzga a Israel durante seis años(12:7).
Ibzán, Elón y Abdón sirven como jueces por un total de veinticinco años (12:8-15).
Israel cae bajo la dominación filistea por cuarenta años; Sansón es su salvador (13:1-
16:31).
Jehová designa como salvador a Sansón, el hijo que nacería por medio de la esposa del
danita Manóah (13:2-25).
Sansón, impulsado por el espíritu de Jehová, realiza grandes hazañas durante los veinte
años que sirve como juez; traicionado por Dalila, el objeto de su amor, Sansón es puesto
en prisión por los filisteos, pero, finalmente,a la hora de morir, mata más filisteos que
durante toda su vida (14:1-16:31).
Más información histórica que describe las condiciones durante el tiempo de los
jueces(17:1-21:25).
o El efraimita Miqueas participa en idolatría y utiliza los servicios de un joven levita:
―Jonatan hijo de Guerson‘‘(17:1-13, 18:30).
o Ciertos danitas roban los ídolos de Miqueas y también se llevan al levita consigo
a Lais:capturan Lais y el levita empieza a servir como sacerdote para ellos (18:1-
31)
El crimen sexual que, en conjunto, cometieron los hombres de Guibeah, ciudad
benjamita, provoca una guerra civil cuando los benjamita rehúsan entregar a los
culpables: casi se aniquila a la tribu de Benjamín (19:1-21:25)
*** w05 15/1 págs. 24-27 Puntos sobresalientes del libro de Jueces ***
¿POR QUÉ NECESITABAN JUECES?
(Jueces 1:1–3:6)
Comandadas por Josué, las tribus de Israel derrotan a los reyes de Canaán, y luego se
dirigen a su herencia para tomar posesión de la tierra. No obstante, los israelitas no expulsan a
sus habitantes, lo cual termina siendo una trampa para ellos.
La generación que surge después de los días de Josué ‗no conoce a Jehová ni la obra que
él ha hecho por Israel‘ (Jueces 2:10). Es más, el pueblo procede a establecer alianzas
matrimoniales con los cananeos y a servir a sus dioses. Por eso, Jehová entrega a los israelitas
en manos de sus enemigos. No obstante, cuando se recrudece la opresión, los hijos de Israel
invocan al Dios verdadero y le piden auxilio. En este clima religioso, social y político se
desenvuelve la historia de una línea de jueces a quienes Jehová hace surgir para salvar a su
pueblo de los enemigos.
Respuestas a preguntas bíblicas:
1:2, 4. ¿Por qué se designa a Judá para que sea la primera tribu en tomar posesión de
la tierra que le toca? Lo normal hubiera sido que le correspondiera este privilegio a la tribu de
Rubén, el primogénito de Jacob. Pero en la profecía que pronunció en su lecho de muerte,
Jacob predijo que, por haber perdido su derecho a la primogenitura, Rubén no iba a sobresalir.
Como Simeón y Leví habían actuado con crueldad, sus hijos serían dispersados por Israel
(Génesis 49:3-5, 7). Por tanto, el privilegio le correspondía al cuarto hijo de Jacob, que era
Judá. La tribu de Simeón, que subió con la de Judá, recibió pequeñas porciones de tierra
distribuidas por todo el enorme territorio de Judá (Josué 19:9).
1:6, 7. ¿Por qué se les cortaban los pulgares y los dedos gordos de los pies a los
reyes derrotados? La persona que perdía esos dedos evidentemente quedaba imposibilitada
para toda acción militar. ¿Cómo podría un soldado empuñar una espada o una lanza sin los
pulgares? Y la pérdida de los dedos gordos de los pies le impediría mantener bien el equilibrio.
Lecciones para nosotros:
2:10-12. Hemos de tener un programa de estudio bíblico para ‗no olvidar los hechos de
Jehová‘ (Salmo 103:2). Los padres deben grabar la verdad de la Palabra de Dios en el corazón
de sus hijos (Deuteronomio 6:6-9).
2:14, 21, 22. Jehová permite que su pueblo desobediente sufra penalidades con un
propósito: el de castigarlos, refinarlos y motivarlos a volver a él.
JEHOVÁ HACE SURGIR JUECES
(Jueces 3:7–16:31)
El emocionante relato de las hazañas de los jueces comienza con Otniel, que puso fin a
ocho años de subyugación de Israel a manos de un rey de Mesopotamia. El juez Ehúd urde
una valerosa estrategia y mata al obeso rey moabita, Eglón. El valiente Samgar mata sin ayuda
a 600 filisteos con una aguijada o picana para arrear el ganado. Gracias al apoyo de Jehová y
al ánimo de la profetisa Débora, Barac y su ejército de 10.000 hombres poco armados infligen
una derrota aplastante al poderoso ejército de Sísara. Jehová nombra juez a Gedeón y les
concede a él y a sus 300 hombres la victoria sobre los madianitas.
Por medio de Jefté, Jehová libra a Israel de la mano de los ammonitas. Entre los doce
jueces de Israel también figuran Tolá, Jaír, Ibzán, Elón y Abdón. El período de los jueces
finaliza con Sansón, quien lucha contra los filisteos.
Respuestas a preguntas bíblicas:
4:8. ¿Por qué insistió Barac en que le acompañara la profetisa Débora al campo de
batalla? Al parecer, Barac se sentía incapaz de enfrentarse solo al ejército de Sísara.
La presencia de la profetisa les daría a él y a sus hombres la seguridad de que contaban con la
guía de Dios, y eso les infundiría confianza. Por tanto, la insistencia de Barac en que Débora lo
acompañara no era indicativo de debilidad, sino de fe fuerte.
5:20. ¿Cómo pelearon desde el cielo las estrellas a favor de Barac? La Biblia no dice si
hubo ayuda angelical, meteoritos que los sabios de Sísara interpretaron como malos augurios o
predicciones astrológicas para Sísara que resultaron falsas. Como quiera que fuera, lo que está
claro es que hubo algún tipo de intervención divina.
7:1-3; 8:10. ¿Por qué dijo Jehová que los 32.000 hombres de Gedeón eran demasiados
para luchar con un ejército enemigo de 135.000? Porque era Jehová quien iba a dar la
victoria a Gedeón y sus hombres, y no quería que creyeran que habían derrotado a los
madianitas por su propia fuerza.
11:30, 31. ¿Pensaba Jefté en realizar un sacrificio humano cuando hizo su voto? Nada
estaría más lejos de su pensar, pues la Ley estipulaba: ―No debería hallarse en ti nadie que
haga pasar por el fuego a su hijo o a su hija‖ (Deuteronomio 18:10). Pero lo cierto es que Jefté
pensaba en una persona, no en un animal, pues no era común que en las casas israelitas se
guardaran animales para sacrificio. Además, ofrecer un animal no sería nada extraordinario.
Jefté sabía perfectamente que podría ser su hija quien saliera de su casa para encontrarse con
él. En tal caso tendría que ofrecerla ―como ofrenda quemada‖ en el sentido de que ella se
dedicaría al servicio exclusivo de Jehová en el santuario.
Lecciones para nosotros:
3:10. El éxito en los asuntos espirituales no depende de la sabiduría humana, sino del
espíritu de Jehová (Salmo 127:1).
3:21. Ehúd esgrimió su espada con destreza y valor. Nosotros también debemos hacernos
hábiles en el manejo de ―la espada del espíritu, es decir, la palabra de Dios‖, lo que requiere
que usemos las Escrituras con valor en el ministerio (Efesios 6:17; 2 Timoteo 2:15).
6:11-15; 8:1-3, 22, 23. La modestia de Gedeón nos enseña tres importantes lecciones:
1) Cuando se nos extiende un privilegio de servicio, debemos meditar en la responsabilidad
que entraña, en lugar de pensar en la prominencia o el prestigio que podemos obtener. 2) Al
tratar con quienes tienen una actitud belicosa, lo más sabio es manifestar modestia. 3) La
modestia evita que nos obsesionemos con el prestigio.
6:17-22, 36-40. Nosotros también debemos ser precavidos y no creer ―toda expresión
inspirada‖. Por el contrario, hemos de probar ―las expresiones inspiradas para ver si se originan
de Dios‖ (1 Juan 4:1). A la hora de dar algún consejo, el nuevo anciano cristiano hace bien en
consultar con otro más experimentado a fin de asegurarse de que lo que diga tenga una sólida
base en la Palabra de Dios.
6:25-27. Gedeón fue discreto para no encolerizar a sus adversarios innecesariamente.
Al predicar las buenas nuevas, procuremos no ofender por nuestra forma de hablar.
7:6. En lo que tiene que ver con el servicio a Jehová, debemos imitar a los 300 hombres de
Gedeón: estar alertas y vigilantes.
9:8-15. ¡Qué insensato es actuar con orgullo y ambicionar puestos o poder!
11:35-37. Sin duda, el buen ejemplo de Jefté fue decisivo al ayudar a su hija a cultivar fe
fuerte y abnegación. Hoy los padres pueden dar ese mismo ejemplo a sus hijos.
11:40. El encomio que se da a quienes sirven a Jehová con un espíritu dispuesto los anima
mucho.
13:8. Al enseñar a sus hijos, los padres deben pedirle a Jehová su guía y seguirla
(2 Timoteo 3:16).
14:16, 17; 16:16. Presionar a alguien con llantos y reproches puede perjudicar la relación
con esa persona (Proverbios 19:13; 21:19).
MÁS PECADOS DE ISRAEL
(Jueces 17:1–21:25)
En la última parte del libro de los Jueces se destacan dos relatos. El primero tiene que ver
con un hombre llamado Miqueas que coloca un ídolo en su casa y emplea a un levita para que
le sirva de sacerdote. Tras destruir la ciudad de Lais, o Lésem, los danitas construyen su propia
ciudad y la llaman Dan. Utilizan el ídolo de Miqueas y a su sacerdote para establecer allí una
nueva forma de culto. Al parecer, la captura de Lais ocurre antes de la muerte de Josué (Josué
19:47).
El segundo suceso tiene lugar poco después de la muerte de Josué. Por culpa de un crimen
sexual que cometen algunos hombres de la ciudad benjamita de Guibeah, la tribu de Benjamín
es aniquilada, a excepción de solo 600 hombres. No obstante, gracias a una disposición
práctica que les permite obtener esposas, su número aumenta a casi sesenta mil guerreros
para el tiempo del reinado de David (1 Crónicas 7:6-11).
Respuestas a preguntas bíblicas:
17:6; 21:25. ¿Promovía la anarquía el que ‗cada uno acostumbrara hacer lo que era
recto a sus propios ojos‘? No necesariamente, pues Jehová dio guía a su pueblo de muchas
maneras. Les dio la Ley y el sacerdocio para educarlos en sus caminos. El sumo sacerdote
podía consultar a Dios sobre asuntos importantes por medio del Urim y el Tumim (Éxodo
28:30). En cada ciudad había ancianos capacitados que daban valiosos consejos. Cuando el
israelita se aprovechaba de estas provisiones, obtenía guía acertada para su conciencia. En tal
caso, el que hiciera ―lo que era recto a sus propios ojos‖ tenía buenos resultados. Por otra
parte, si la persona pasaba por alto la Ley y tomaba sus propias decisiones en asuntos
relacionados con la conducta o la adoración a Dios, las consecuencias eran malas.
20:17-48. ¿Por qué permitió Jehová a los benjamitas que derrotaran dos veces a las
demás tribus, si ellos merecían castigo? Al permitir que las tribus fieles sufrieran enormes
pérdidas inicialmente, Jehová ponía a prueba su determinación de erradicar la maldad de
Israel.
Lecciones para nosotros:
19:14, 15. La negativa de los habitantes de Guibeah a brindar hospitalidad era señal de
debilidad moral. A los cristianos se les exhorta a que ―sigan la senda de la hospitalidad‖
(Romanos 12:13).
JUECES
1. Otniel (tribu de Manasés)
RUT, LIBRO DE
CONTENIDO
Aflicción de Noemí mientras residía en Moab (1:1-5).
Noemí y sus enviudadas nueras Rut y Orpá parten de Moab (1:6-18).
o Durante el camino, Noemí recomienda que Rut y Orpá regresen a Moab (1:6-13).
o Orpá besa a Noemí y se marcha (1:14).
o Rut se queda con Noemí y expresa su de terminación de ser adoradora de
Jehova (1:15-18).
Experiencias de Rut y Noemí en Belen (1:19-4:22 ).
La reacción de las personas de la localidad ante su llegada (1:19-22),
Rut espiga en el campo de Boaz y él la trata favorablemente (2:1-23).
Rut obedece las instrucciones de Noemí y le pide a Boaz que actúe como recomprador
(3:1-18).
Boaz le ofrece la oportunidad de hacer la recompra a un pariente más próximo: en vista
de la negativa de este, toma a Rut por esposa (4:1-13).
El matrimonio de Boaz con Rut es bendecido con el nacimiento de Obed. Noemí sirve de
nodriza, y con el tiempo Obed llega a ser un antepasado de David (4:14-22).
*** w05 1/3 págs. 26-29 Puntos sobresalientes del libro de Rut ***
―A DONDE TÚ VAYAS YO IRÉ‖
(Rut 1:1–2:23)
Cuando Rut y Noemí llegan a Belén, se convierten en el centro de atención. Señalando a la
mayor, las mujeres preguntan: ―¿Es esta Noemí?‖, a lo que ella responde: ―No me llamen
Noemí. Llámenme Mará, porque el Todopoderoso me ha hecho muy amarga la situación.
Estaba llena cuando me fui, y con las manos vacías Jehová me ha hecho volver‖ (Rut 1:19-21).
A consecuencia de un hambre que surgió en Israel, Noemí y su familia decidieron
trasladarse de Belén a la tierra de Moab. Aquella fue una época en la que Noemí estaba
―llena‖, pues tenía esposo y dos hijos. Sin embargo, poco después de establecerse en Moab,
murió su esposo Elimélec. Posteriormente, sus hijos se casaron con Orpá y Rut, dos mujeres
moabitas. Pasados unos diez años, los dos hombres mueren sin descendencia, dejando
desamparadas a las tres mujeres. Cuando Noemí decide regresar a Judá, las viudas de sus
hijos la acompañan. Pero en el camino, Noemí insta a sus nueras a regresar a Moab y casarse
con hombres de su propio pueblo. Aunque Orpá accede, Rut se queda con Noemí y le dice: ―A
donde tú vayas yo iré, y donde tú pases la noche yo pasaré la noche. Tu pueblo será mi
pueblo, y tu Dios mi Dios‖ (Rut 1:16).
Estas dos viudas, Rut y Noemí, llegan a Belén al comienzo de la siega de la cebada.
Aprovechando la provisión estipulada en la Ley de Dios, Rut comienza a espigar en un terreno
que casualmente pertenece a un pariente de Elimélec, un judío de edad avanzada llamado
Boaz. Rut se granjea su afecto, por lo que sigue espigando en su campo ―hasta que se acab[a]
la siega de la cebada y la siega del trigo‖ (Rut 2:23).
Respuestas a preguntas bíblicas:
1:8. ¿Por qué dijo Noemí a sus nueras que volvieran ―cada una a la casa de su madre‖
en vez de a la casa de su padre? No se indica si el padre de Orpá había fallecido o no, pero
el padre de Rut aún vivía (Rut 2:11). Con todo, Noemí hizo alusión a la casa de su madre, tal
vez con la idea de evocar el consuelo del cariño materno. Aquel recuerdo sería un bálsamo
para esas dos mujeres afligidas por tener que separarse de su querida suegra. Este comentario
quizás indique también que, a diferencia de Noemí, las madres de Rut y Orpá tenían hogares
sólidamente establecidos.
1:13, 21. ¿Fue Jehová el causante de la amargura de Noemí y de su calamidad? No, y
Noemí no culpó a Dios de ningún mal. No obstante, en vista de todo lo que le había pasado,
pensaba que Jehová estaba contra ella. Se sentía amargada y había perdido toda ilusión.
Además, en aquellos tiempos, el fruto del vientre se veía como una bendición divina, y la
esterilidad, como una maldición. Ante la muerte de sus dos hijos, que no le habían dado nietos,
tal vez Noemí se sintiera justificada a pensar que Jehová la había humillado.
2:12. ¿Qué ―salario perfecto‖ obtuvo Rut de Jehová? Rut tuvo un hijo y recibió el
privilegio de ser un eslabón en el linaje más importante de la historia: el de Jesucristo (Rut
4:13-17; Mateo 1:5, 16).
Lecciones para nosotros:
1:8; 2:20. Pese a las tragedias por las que pasó, Noemí siguió confiando en la bondad
amorosa de Jehová. Nosotros deberíamos tener esa misma actitud, particularmente al afrontar
pruebas difíciles.
1:9. El hogar debe ser algo más que un lugar donde la familia come y duerme. Tiene que ser
un remanso de paz, descanso y consuelo.
1:14-16. Orpá regresó ―a su pueblo y a sus dioses‖. No ocurrió lo mismo con Rut, quien dejó
la comodidad y la seguridad de su tierra natal y demostró lealtad a Jehová. Cultivar amor leal a
Dios y manifestar abnegación nos ayudará a no sucumbir a los deseos egoístas ni ‗retraernos
para destrucción‘ (Hebreos 10:39).
2:2. Rut era una mujer de disposición humilde y aprovechó la provisión de la rebusca,
pensada para los forasteros y los desfavorecidos. El cristiano necesitado no debería dejar que
el orgullo le impidiera aceptar la ayuda amorosa de sus hermanos en la fe o alguna asistencia
que ofrezca el gobierno.
2:7. Aunque tenía el derecho de espigar, Rut pidió permiso para hacerlo (Levítico 19:9, 10).
Esta acción reveló su mansedumbre. En nuestro caso, el proceder sabio también es el de
‗buscar mansedumbre‘, porque ―los mansos mismos poseerán la tierra, y verdaderamente
hallarán su deleite exquisito en la abundancia de paz‖ (Sofonías 2:3; Salmo 37:11).
2:11. Para Noemí, Rut fue algo más que un familiar: fue una verdadera amiga (Proverbios
17:17). Su amistad fue sólida porque se basó en cualidades como el amor, la lealtad, la
empatía, la bondad y el altruismo. Pero, lo que es más importante, se basó en su espiritualidad:
en su deseo de servir a Jehová y formar parte de su pueblo. Nosotros también tenemos
excelentes oportunidades de cultivar amistades sinceras entre los verdaderos siervos de Dios.
2:15-17. Aun cuando Boaz le aligeró a Rut el trabajo, ―ella continuó espigando en el campo
hasta el atardecer‖, pues era una mujer muy industriosa. El cristiano también debe tener la
reputación de ser diligente.
2:19-22. Al atardecer, Noemí y Rut disfrutaban de conversaciones agradables. La mayor se
interesaba en lo que había hecho la joven, y ambas expresaban con libertad lo que pensaban y
sentían. ¿Debería ser de otro modo en las familias cristianas?
2:22, 23. A diferencia de Dina, la hija de Jacob, Rut buscó la compañía de quienes adoraban
a Jehová. ¡Qué buen ejemplo para nosotros! (Génesis 34:1, 2; 1 Corintios 15:33.)
NOEMÍ VUELVE A ESTAR ―LLENA‖
(Rut 3:1–4:22)
Noemí ya es muy mayor para concebir hijos, de modo que le pide a Rut que la reemplace en
el matrimonio por recompra, o de cuñado. Rut sigue las directrices de Noemí y le pide a Boaz
que actúe de recomprador, a lo que este accede. Sin embargo, hay un pariente más cercano a
quien se le debe conceder primero tal oportunidad.
Boaz atiende el asunto con prontitud. A la mañana siguiente, reúne a diez ancianos de Belén
y en su presencia le pregunta a aquel pariente si está dispuesto a efectuar la recompra. Ante
su negativa, Boaz mismo la lleva a cabo y se casa con Rut. Como fruto de aquella unión, les
nace un hijo, Obed, el abuelo del rey David. Las mujeres de Belén le dicen ahora a Noemí:
―Bendito sea Jehová, que [...] ha venido a ser restaurador de tu alma y uno que nutre tu vejez,
porque tu nuera, que de veras te ama, que te es mejor que siete hijos, lo ha dado a luz‖ (Rut
4:14, 15). La mujer que había regresado a Belén ―con las manos vacías‖ vuelve a estar ―llena‖
(Rut 1:21).
PRIMERO DE SAMUEL
CONTENIDO
*** w05 15/3 págs. 21-24 Puntos sobresalientes del libro de Primero de Samuel ***
SAMUEL SUCEDE A ELÍ COMO JUEZ
(1 Samuel 1:1–7:17)
Ha llegado el momento de celebrar la fiesta de la Recolección, y Ana, que reside en Ramá,
no cabe en sí de gozo. Jehová ha contestado sus oraciones, y ella ha dado a luz un hijo.
En cumplimiento de su voto, Ana presenta a su hijo Samuel para que sirva en ―la casa de
Jehová‖. Allí el muchacho se convierte en ―ministro de Jehová delante de Elí el sacerdote‖
(1 Samuel 1:24; 2:11). Cuando Samuel aún es pequeño, Jehová le habla y dicta sentencia
contra la casa de Elí. Al ir creciendo Samuel, el pueblo de Israel lo reconoce como el profeta de
Jehová.
Con el tiempo, los filisteos guerrean contra Israel. Se apoderan del Arca y matan a los dos
hijos de Elí. Al enterarse de lo sucedido, el anciano Elí muere, tras haber ―juzgado a Israel
cuarenta años‖ (1 Samuel 4:18). Poseer el Arca resulta desastroso para los filisteos, de modo
que la devuelven a los israelitas. Ahora Samuel es el juez de Israel, y hay paz en el país.
Respuestas a preguntas bíblicas:
2:10. ¿Por qué pidió Ana en oración que Jehová ―[diera] fuerza a su rey‖ cuando
no había ningún rey humano en Israel? La Ley mosaica predijo que los israelitas tendrían un
rey humano (Deuteronomio 17:14-18). En su lecho de muerte, Jacob profetizó: ―El cetro
[símbolo de autoridad real] no se apartará de Judá‖ (Génesis 49:10). Además, respecto a Sara
—la antepasada de los israelitas—, Jehová dijo: ―Reyes de pueblos provendrán de ella‖
(Génesis 17:16). De modo que Ana estaba orando respecto a un rey futuro.
3:3. ¿Dormía Samuel realmente en el Santísimo? No. Samuel era un levita de la familia
no sacerdotal de los qohatitas (1 Crónicas 6:33-38). Por lo tanto, no se le permitía ―entrar para
ver las cosas santas‖ (Números 4:17-20). La única parte del santuario a la que Samuel tenía
acceso era el patio del tabernáculo. Allí es donde probablemente dormía. Parece ser que Elí
también dormía en alguna sección del patio. La expresión ―donde estaba el arca de Dios‖ debe
referirse al recinto del tabernáculo.
7:7-9, 17. ¿Por qué ofreció Samuel una ofrenda quemada en Mizpá y erigió un altar en
Ramá, en vista de que los sacrificios debían ofrecerse con regularidad únicamente en un
lugar que Jehová escogiera? (Deuteronomio 12:4-7, 13, 14; Josué 22:19.) Una vez que se
retiró el Arca sagrada del tabernáculo de Siló, dejó de ser evidente la presencia de Jehová. Por
eso, en calidad de representante de Dios, Samuel ofreció una ofrenda quemada en Mizpá y
también levantó un altar en Ramá. Al parecer, tales acciones contaban con la aprobación de
Jehová.
Lecciones para nosotros:
1:11, 12, 21-23; 2:19. La importancia que Ana daba a la oración, su humildad, su gratitud
por la bondad de Jehová y su constante cariño maternal hacen de ella un ejemplo para las
mujeres temerosas de Dios.
1:8. Elqaná puso un magnífico ejemplo en cuanto a fortalecer a otros con palabras (Job
16:5). Primero, sin erigirse en juez, le preguntó a Ana: ―¿Por qué [...] se siente mal tu
corazón?‖. Esas palabras la animaron a expresar sus sentimientos. Entonces, él le confirmó su
cariño, preguntándole: ―¿No soy yo mejor para ti que diez hijos?‖.
2:26; 3:5-8, 15, 19. Llegamos a ser ―más agradables‖ a Dios y a los hombres si cumplimos
diligentemente con la obra que Dios nos ha asignado, aprovechamos la educación espiritual
que recibimos y somos corteses y respetuosos.
4:3, 4, 10. Ni siquiera un objeto tan santo como el arca del pacto sirvió de amuleto. Debemos
―[guardarnos] de los ídolos‖ (1 Juan 5:21).
EL PRIMER REY DE ISRAEL: ¿UN ÉXITO, O UN FRACASO?
(1 Samuel 8:1–15:35)
Samuel permanece fiel a Jehová durante toda su vida, pero sus hijos no andan en los
caminos piadosos. Cuando los ancianos de Israel piden un rey humano, Jehová les concede su
petición. Samuel sigue la dirección de Jehová y unge rey a Saúl, un benjamita apuesto. Saúl
refuerza su posición real derrotando a los ammonitas.
El valeroso hijo de Saúl, Jonatán, vence a una guarnición filistea. Un enorme ejército filisteo
se enfrenta a Israel. Presa del pánico, Saúl desobedece ofreciendo un sacrificio quemado.
El intrépido Jonatán lleva consigo únicamente a su escudero y ataca otra guarnición filistea.
No obstante, el juramento impulsivo de Saúl debilita la fuerza de la victoria. El rey comienza a
―guerrear alrededor‖ contra todos sus enemigos (1 Samuel 14:47). Sin embargo, cuando
derrota a los amalequitas, desobedece a Jehová al no acabar con toda cosa ―dada por entero a
la destrucción‖ (Levítico 27:28, 29). En consecuencia, Jehová rechaza a Saúl como rey.
Respuestas a preguntas bíblicas:
9:9. ¿Qué tiene de significativo la frase ―al profeta de hoy se le llamaba vidente en
tiempos pasados‖? Estas palabras pudieran indicar que a medida que los profetas fueron
adquiriendo más relevancia en los días de Samuel y durante el período de los reyes de Israel,
la palabra vidente fue reemplazada por el término profeta. A Samuel se le considera el primer
profeta (Hechos 3:24).
14:24-32, 44, 45. ¿Perdió Jonatán el favor de Dios por comer miel en violación del
juramento de Saúl? No parece que ese acto le acarreara la desaprobación divina. En primer
lugar, él no estaba al tanto de lo que había dicho su padre. Además, sea que el juramento haya
estado motivado por un falso celo o por un punto de vista erróneo sobre el poder real, ocasionó
problemas al pueblo. ¿Cómo es posible que tal juramento contara con la aprobación divina?
Aunque Jonatán estaba dispuesto a aceptar las consecuencias por haberlo violado, se le
perdonó la vida.
15:6. ¿Por qué mostró Saúl consideración especial a los quenitas? Los quenitas eran
hijos del suegro de Moisés. Ayudaron a los israelitas después de que estos partieron del monte
Sinaí (Números 10:29-32). En la tierra de Canaán, los quenitas también moraron por algún
tiempo con los hijos de Judá (Jueces 1:16). Aunque posteriormente residieron entre los
amalequitas y varios pueblos más, mantuvieron buenas relaciones con Israel. Con razón, pues,
Saúl les perdonó la vida a los quenitas.
Lecciones para nosotros:
9:21; 10:22, 27. La modestia y la humildad que tenía Saúl al principio de su reinado evitaron
que actuara con imprudencia cuando unos ―hombres que no servían para nada‖ no aceptaron
su autoridad real. ¡Cuánto nos protege esa actitud de las acciones irracionales!
12:20, 21. Nunca permitamos que ―las cosas irreales‖, como la idolatría o la confianza en los
hombres y en la fuerza militar de las naciones, nos desvíen de servir a Jehová.
12:24. Un factor importante para seguir mostrando temor reverencial a Jehová y servirle de
todo corazón es ―ve[r] cuán grandes cosas ha hecho‖ por su pueblo tanto en el pasado como
en el presente.
13:10-14; 15:22-25, 30. Tengamos cuidado de no caer en alguna forma de conducta
insolente, sea que se evidencie en la desobediencia o en una actitud arrogante (Proverbios
11:2).
SE ESCOGE A UN JOVEN PASTOR PARA SER REY
(1 Samuel 16:1–31:13)
Samuel unge a David, de la tribu de Judá, para que sea el futuro rey. Poco después, este
derriba al gigante filisteo Goliat con una sola piedra que lanza con su honda. Se forja un lazo
de amistad entre David y Jonatán. Saúl coloca a sus guerreros bajo el mando de David. Como
resultado de las muchas victorias que este consigue, las mujeres de Israel cantan: ―Saúl ha
derribado sus miles, y David sus decenas de miles‖ (1 Samuel 18:7). Consumido por la envidia,
Saúl procura matarlo en tres ocasiones, pero David huye y se convierte en fugitivo.
Durante sus años de fugitivo, David le perdona la vida dos veces a Saúl. También conoce a
la hermosa Abigail, y luego se casa con ella. Cuando los filisteos suben contra Israel, Saúl
inquiere de Jehová, pero Jehová lo ha abandonado. Samuel ha muerto. Desesperado, Saúl
consulta una médium, y esta le dice que morirá en la lucha contra los filisteos. En la batalla,
Saúl sufre heridas graves y sus hijos pierden la vida. El relato termina indicando que Saúl
muere como un fracasado. David aún permanece escondido.
Respuestas a preguntas bíblicas:
16:14. ¿Qué espíritu malo aterrorizó a Saúl? El espíritu malo que privó a Saúl de su paz
interior era la inclinación mala de su mente y corazón, su impulso interno de hacer lo malo.
Cuando Jehová le quitó su espíritu santo, Saúl perdió su protección, y llegó a estar dominado
por un mal espíritu que provenía de él mismo. Puesto que Dios permitió que ese espíritu
reemplazara al espíritu santo, al espíritu malo se le llama ―un espíritu malo de parte de Jehová‖.
17:55-58. En vista de lo que dice 1 Samuel 16:17-23, ¿por qué preguntó Saúl de quién
era hijo David? A Saúl no le interesaba saber únicamente el nombre del padre de David.
Es muy probable que quisiera saber qué clase de hombre había engendrado a un muchacho
que acababa de efectuar la asombrosa hazaña de derribar a un gigante.
Lecciones para nosotros:
16:6, 7. En vez de quedar impresionados por la apariencia externa de los demás o juzgarlos
apresuradamente, procuremos verlos como Jehová los ve.
17:47-50. Podemos enfrentarnos con valor a la oposición o la persecución instigada por
enemigos semejantes a Goliat porque ―a Jehová pertenece la batalla‖.
18:1, 3; 20:41, 42. Podemos encontrar amigos verdaderos entre los que aman a Jehová.
21:12, 13. Jehová espera que utilicemos nuestras facultades mentales y aptitudes para
hacer frente a las situaciones difíciles de la vida. Nos ha proporcionado su Palabra
inspirada, que nos da sagacidad, conocimiento y capacidad de pensar (Proverbios 1:4).
También contamos con la ayuda de ancianos cristianos nombrados.
24:6; 26:11. David da un excelente ejemplo al mostrar verdadero respeto al ungido de
Jehová.
25:23-33. La sensatez de Abigail es digna de imitar.
28:8-19. Con el objetivo de engañar o perjudicar a la gente, los espíritus inicuos pueden
fingir ser cierta persona que ha muerto. Tenemos que abstenernos de toda forma de espiritismo
(Deuteronomio 18:10-12).
30:23, 24. Esta decisión, basada en Números 31:27, muestra que Jehová valora a los que
desempeñan un papel de apoyo en la congregación. Por eso, cualquier cosa que estemos
haciendo, ―trabajemos en ello de toda alma como para Jehová, y no para los hombres‖
(Colosenses 3:23).
SEGUNDO DE SAMUEL
CONTENIDO
Reacción de David a las noticias de la muerte de Saúl; su endecha por Saúl y Jonatán
(1:1- 27).
La casa de David contra la casa de Saúl(2:1-4:12).
o David es ungido rey sobre Judá y gobierna desde Hebrón (2:1-7).
Apoyado por Abner, Is-bóset reina sobre el resto de Israel, con Mahanaim como sede
del gobierno (2:8-11).
o Rabia la guerra entre los reinos rivales; finalmente, Abner deserta de Is-bóset y se
une a David, pero es asesinado por Joab; Da vid se da al duelo por la muerte de
Abner(2:12-3:39).
o Is-bóset es asesinado; David hace ejecutar a los asesinos (4:1-12).
David reina sobre todo Israel (5:1-24:25).
David es ungido rey sobre Israel, captura la fortaleza de Sión y convierte a Jerusalén en
su capital (5:1-16).
Los filisteos efectúan dos invasiones, pero David los derrota las dos veces (5:17-25).
David hace llevar el Arca a Jerusalén; su manera de regocijarse disgusta a su esposa
Mical; ella muere sin hijos (6:1-23).
El que David expresara su deseo de edificar un templo para Jehová provee la ocasión
para que Dios haga un pacto con él para un reino (7:1-29).
Repaso de las victorias militares de David y la extensión de su reino (8:1-18).
David ejerce bondad amorosa hacia Mefibó-set, el hijo de Jonatán, haciendo que coma a
su mesa constantemente (9:1-13).
Acontecimientos relacionados con la guerra contra los ammonitas (10:1-12:31).
o El rey ammonita Hanún humilla a los mensajeros de David, precipitando así la
guerra; los ammonitas y los ejércitos mercenarios sirios huyen (10:1-19).
o Vuelve a empezar la campaña contra los ammonitas; Joab sitia Rabá, pero David
se queda en Jerusalén y comete adulterio con Batseba (11:1-4).
o Cuando los intentos de encubrir el adulterio fallan, David dispone que Unas, el es
poso de Bat-seba, quede expuesto a una muerte prácticamente segura en la
batalla(11:5-25).
o David toma a Bat-seba por esposa; es censurado por el profeta Natán; muere el
hijo fruto de su adulterio (11:26-12:23).
o Bat-seba da a luz a Salomón (12:24, 25).
o Joab continúa la lucha contra Rabá, pero, por propia petición de él, David realiza
la captura de la ciudad (12:26-31).
Dificultades de David con su hijo Absalón(13:1-19:8).
o Absalón mata a su hermanastro Amnón por haber violado a Tamar, la hermana
de Absalón; este huye a Guesur (13:1-39).
o Valiéndose de una teqoíta, Joab consigue que David haga volver a Absalón (14:1-
28).
o Absalón consigue reconciliarse con David; posteriormente, hace que le proclamen
rey en Hebrón (14:29-15:12).
o Debido a la conspiración de Absalón, David, junto con su casa y siervos, huye de
Jerusalén, pero envía de regreso a Husai para frustrar el consejo de Ahitofel
(15:13- 37).
o Zibá, el servidor de Mefibóset, lleva provisiones a David; Simeí el benjamita
maldice a David (16:1-14).
o Absalón entra en Jerusalén; Husai frustra el consejo de Ahitofel (16:15-17:23).
o Absalón y sus fuerzas persiguen a David y son derrotados; contraviniendo la
orden de David, Joab mata a Absalón (17:24-18:33).
o David se da al duelo por la muerte de Absalón, pero Joab lo censura (19:1-8).
David es restablecido como rey en Jerusalén(19:9-43).
Se sofoca la rebelión del benjamita Seba, y Joab mata a Amasá (20:1-26).
Se venga la culpa de sangre de la casa de Saúl concerniente a los gabaonitas (21:1-14).
Varias batallas contra los filisteos (21:15-22).
Escritos poéticos de David (22:1-23:7).
Lista de los hombres poderosos de David y algunas de sus hazañas (23:8-39).
Pecado de David respecto al censo, sus con secuencias y la compra de una nueva
ubicación para el altar (24:1-25).
*** w05 15/5 págs. 16-19 Puntos sobresalientes del libro de Segundo de Samuel ***
DAVID LLEGA A SER ―CADA VEZ MÁS GRANDE‖
(2 Samuel 1:1–10:19)
La reacción de David al enterarse de la muerte de Saúl y Jonatán pone de manifiesto lo que
sentía por ellos y por Jehová. Posteriormente, David llega a ser rey en Hebrón sobre la tribu de
Judá. Is-bóset, hijo de Saúl, es coronado rey sobre el resto de Israel. David sigue ―haciéndose
cada vez más grande‖ y, unos siete años y medio después, sube al trono como rey de todo
Israel (2 Samuel 5:10).
David arrebata Jerusalén a los jebuseos y la hace capital de su reino. Su primer intento de
trasladar el arca del pacto a Jerusalén acaba en desgracia. No obstante, el segundo intento
tiene éxito, y David baila de alegría. Jehová hace un pacto con él para un reino y continúa
apoyándolo, de modo que David subyuga a sus enemigos.
Respuestas a preguntas bíblicas:
2:18. ¿Por qué se presenta a Joab y a sus dos hermanos como los tres hijos de
Zeruyá, su madre? En las Escrituras Hebreas, las genealogías normalmente reflejaban la
ascendencia del padre. Puede que el esposo de Zeruyá muriera prematuramente o por alguna
razón no se le considerara apto para ser incluido en el relato bíblico. O tal vez se mencione a
Zeruyá por haber sido la hermana o medio hermana de David (1 Crónicas 2:15, 16). La única
alusión al padre de estos tres hermanos es la que se hace en relación con su sepultura en
Belén (2 Samuel 2:32).
3:29. ¿Qué se quiere decir con la expresión ―hombre que asga el huso giratorio‖?
Normalmente eran las mujeres quienes se encargaban de tejer. Por tanto, esta expresión
puede referirse a hombres que no eran aptos para la guerra y por consiguiente se veían
obligados a realizar trabajos que por lo general hacían las mujeres.
5:1, 2. ¿Cuánto tiempo pasó entre el asesinato de Is-bóset y la coronación de David
como rey de todo Israel? Parece razonable concluir que Is-bóset comenzó su reinado de dos
años poco después de la muerte de Saúl, para el mismo tiempo en que David empezó el suyo
en Hebrón. Desde esta ciudad, David reinó siete años y medio sobre Judá. Poco después de
ser hecho rey sobre todo Israel, trasladó su capital a Jerusalén. Así pues, pasaron unos cinco
años desde la muerte de Is-bóset hasta que David llegó a ser rey de todo Israel (2 Samuel 2:3,
4, 8-11; 5:4, 5).
8:2. ¿Cuántos moabitas fueron ejecutados tras su enfrentamiento con Israel? Por lo
visto, la cantidad se determinó midiendo en vez de contando. Al parecer, David hizo que los
moabitas se acostaran lado a lado haciendo una fila en el suelo. A continuación midió la fila con
una cuerda. Dos cordeles, o dos terceras partes de los moabitas, fueron ejecutados, y a un
cordel, o un tercio de ellos, se les perdonó la vida.
Lecciones para nosotros:
2:1; 5:19, 23. David consultó a Jehová antes de residir en Hebrón y de subir contra sus
enemigos. Nosotros también debemos buscar la guía de Jehová antes de tomar decisiones que
afecten nuestra espiritualidad.
3:26-30. La venganza tiene consecuencias lamentables (Romanos 12:17-19).
3:31-34; 4:9-12. David es un ejemplo de lo que significa no guardar rencor ni ser vengativo.
5:12. Jamás debemos olvidar que Jehová nos ha educado en sus caminos y ha hecho
posible que tengamos una buena relación con él.
6:1-7. Aunque las intenciones de David eran buenas, su idea de llevar el Arca en un carruaje
iba en contra del mandamiento divino y no tuvo éxito (Éxodo 25:13, 14; Números 4:15, 19; 7:7-
9). Cuando Uzah agarró el Arca también se demostró que las buenas intenciones no cambian
los requisitos de Dios.
6:8, 9. Al afrontar una situación difícil, David se encolerizó y luego sintió miedo, quizás
incluso culpando a Jehová por la tragedia. Debemos cuidarnos de culpar a Jehová por los
problemas que resultan de pasar por alto sus mandatos.
7:18, 22, 23, 26. La humildad de David, su devoción exclusiva a Jehová y su interés en
ensalzar el nombre de Dios son cualidades que tenemos que imitar.
8:2. Se materializa una profecía hecha cuatrocientos años antes (Números 24:17).
La palabra de Jehová siempre se realiza.
9:1, 6, 7. David cumplió su promesa. Nosotros también debemos esforzarnos por ser
personas de palabra.
JEHOVÁ LEVANTA CALAMIDAD CONTRA SU UNGIDO
(2 Samuel 11:1–20:26)
―Aquí estoy levantando contra ti calamidad procedente de tu propia casa —le dice Jehová a
David—; y ciertamente tomaré a tus esposas ante tus mismos ojos y las daré a tu semejante, y
él ciertamente se acostará con tus esposas ante los ojos de este sol.‖ (2 Samuel 12:11.)
¿A qué se debió esta sentencia? Al pecado que David cometió con Bat-seba. Aunque él se
arrepintió y recibió el perdón, no se libró de las consecuencias.
Primero, la criatura que da a luz Bat-seba muere. Luego, Tamar, una hija virgen de David, es
violada por su medio hermano Amnón. El hermano carnal de ella, Absalón, se venga
asesinando a Amnón. Posteriormente, Absalón conspira contra su propio padre y se proclama
rey en Hebrón. David se ve obligado a huir de Jerusalén. Absalón tiene relaciones con diez de
las concubinas de su padre que se quedaron para atender la casa. David no vuelve a su puesto
de rey sino hasta que se da muerte a Absalón. Surge una revuelta a manos del benjaminita
Seba, que acaba con la muerte de este.
Respuestas a preguntas bíblicas:
14:7. ¿Qué simboliza ―el brillo de mis brasas‖? El brillo de las brasas que produce el
carbón cuando arde despacio se usa para referirse a una prole viva.
19:29. ¿Por qué reaccionó David como lo hizo ante la explicación de Mefibóset?
Cuando oyó a Mefibóset, David debió darse cuenta de su equivocación al creer las palabras de
Zibá (2 Samuel 16:1-4; 19:24-28). Es probable que esto molestara tanto a David que
no quisiera oír más al respecto.
Lecciones para nosotros:
11:2-15. El relato franco acerca de los errores de David da testimonio de que la Biblia es la
Palabra inspirada de Dios.
11:16-27. Si cometemos algún pecado grave, no debemos tratar de ocultarlo como hizo
David. Tenemos que confesarlo a Jehová y buscar ayuda de los ancianos de la congregación
(Proverbios 28:13; Santiago 5:13-16).
12:1-14. Natán puso un buen ejemplo para los ancianos de la congregación. Estos deben
ayudar a los que caen en el pecado a enmendarse, y tienen que cumplir hábilmente con esta
responsabilidad.
12:15-23. Tener el punto de vista correcto de lo que le sucedía ayudó a David a reaccionar
apropiadamente ante las adversidades.
15:12; 16:15, 21, 23. Cuando parecía que Absalón iba a subir al trono, el orgullo y la
ambición hicieron que el destacado consejero Ahitofel se hiciera traidor. La inteligencia sin
humildad ni lealtad puede ser una trampa.
19:24, 30. Mefibóset apreció profundamente la bondad amorosa de David y se sometió de
buena gana a la decisión del rey con respecto a Zibá. El aprecio por Jehová y su organización
debe impulsarnos a ser sumisos.
20:21, 22. La sabiduría de una sola persona puede librar de la desgracia a muchas
(Eclesiastés 9:14, 15).
CAIGAMOS ―EN LA MANO DE JEHOVÁ‖
(2 Samuel 21:1–24:25)
Hay tres años de hambre por la culpa de sangre en la que incurrió Saúl al dar muerte a los
gabaonitas (Josué 9:15). A fin de vengar esa culpa de sangre, los gabaonitas piden la
ejecución de siete hijos de Saúl. Así que David los entrega en manos de los gabaonitas, y la
sequía termina con un aguacero. Caen cuatro gigantes filisteos ―por mano de David y por mano
de sus siervos‖ (2 Samuel 21:22).
David comete un grave pecado al ordenar un censo ilegal. Se arrepiente y opta por caer ―en
la mano de Jehová‖ (2 Samuel 24:14). En consecuencia, mueren 70.000 a causa de una peste.
David sigue el mandato de Jehová y se detiene el azote.
Respuestas a preguntas bíblicas:
21:8. ¿Por qué se dice que Mical, la hija de Saúl, tuvo cinco hijos, si 2 Samuel 6:23
afirma que murió sin descendencia? La explicación más aceptada es que estos fueron los
hijos de su hermana Merab, que se casó con Adriel. Es probable que Merab muriera joven y
que Mical, quien no tenía hijos, criara a los muchachos.
21:9, 10. ¿Cuánto tiempo custodió Rizpá a sus dos hijos y a los cinco nietos de Saúl
que fueron ejecutados por los gabaonitas? Estos siete varones fueron colgados ―en los
primeros días de la siega‖ —marzo o abril—, y sus cadáveres se dejaron expuestos en una
montaña. Rizpá custodió los siete cadáveres día y noche hasta que Jehová mostró que su furia
se había aplacado poniendo fin a la sequía. Es improbable que cayera aguacero alguno antes
del final de la siega en octubre. Por lo tanto, es muy posible que Rizpá pasara hasta cinco o
seis meses vigilando los cuerpos. Después David se encargó de que se enterraran los huesos.
24:1. ¿Por qué fue un pecado tan grave el que David tomara la cuenta del pueblo?
Hacer un censo no estaba en sí prohibido por la Ley (Números 1:1-3; 26:1-4). La Biblia no dice
qué objetivo tenía David al contar al pueblo. No obstante, 1 Crónicas 21:1 indica que fue
Satanás quien lo incitó a hacerlo. En cualquier caso Joab, su jefe del ejército, sabía que la
decisión de David de hacer un censo del pueblo era desacertada y trató de disuadirlo.
Lecciones para nosotros:
22:2-51. ¡Con cuánta belleza describe esta composición de David a Jehová como el Dios
verdadero, aquel que merece nuestra confianza absoluta!
23:15-17. David tenía tanto respeto por la ley de Dios acerca de la vida y la sangre que en
esta ocasión se abstuvo de hacer algo que tan solo parecía ser una violación de dicha ley. Esa
es la actitud que debemos cultivar para con todos los mandatos divinos.
24:10. La conciencia de David lo llevó al arrepentimiento. ¿Es nuestra conciencia lo
suficientemente sensible para responder igual?
24:14. David sabía bien que Jehová es más misericordioso que los seres humanos.
¿Tenemos nosotros tal convicción?
24:17. David sintió pesar de que su pecado acarreara sufrimiento a toda la nación.
El pecador arrepentido debe sentir remordimiento por la deshonra que su acción puede haber
supuesto para la congregación.
1 REYES, LIBRO DE
CONTENIDO
Adonías, hijo de David, intenta conseguir el trono, pero al ser ungido Salomón como rey
sus esfuerzos son frustrados (1:1-53).
Las últimas instrucciones de David a Salomón y cómo este las lleva a cabo después de
la muerte de David (2:1-46).
El reinado de Salomón; sus actividades y logros (3:1-11:43).
o Salomón forma una alianza matrimonial con el faraón de Egipto, pero continúa
amando a Jehová (3:1-3).
o Cuando Jehová se le aparece en Gabaón en un sueño, Salomón le solicita
sabiduría; Dios se la concede y se ve evidencia de esto en el juicio que Salomón
hace a dos prostitutas (3:4-28).
o Los oficiales de Salomón y sus responsabilidades; el poder, la fama y la sabiduría
de Salomón (4:1-34).
o Sus tratos con Hiram para conseguir mate riales de construcción (5:1-18).
o La construcción del templo y sus utensilios y enseres; también la construcción de
otros edificios (6:1-7:51).
o Israel es reunido para la dedicación del templo (8:1-66).
Los sacerdotes introducen el arca en el templo; como prueba de que
acepta el templo, Jehová lo llena con la nube cuando salen los sacerdotes
(8:1-13).
Salomón se dirige al pueblo, ora por el favor de Dios, bendice al pueblo,
ofrece sacrificios y, finalmente, al octavo día, despide a la asamblea (8:14-
66).
o Jehová se aparece a Salomón por segunda vez, asegurándole que la obediencia
resultará en bendición, y la desobediencia, en desastre nacional (9:1-9).
o Tratos posteriores de Salomón con Hiram(9:10-14).
El reclutamiento para trabajo forzado por parte de Salomón; sus intereses
marítimos y comerciales, su riqueza,su sabiduría y la impresión que causó
a la reina de Seba cuando esta le visitó (9:15-10:29).
o La apostasía de Salomón por casarse con esposas extranjeras y las
consecuentes dificultades que surgieron hacia el final de su reinado (11:1-25).
o Jehová da a conocer su propósito de arrancarle a Salomón diez tribus y dárselas
a Jeroboán; Salomón muere y es sucedido por Rehoboam (11:26-43).
El principio del reinado de Rehoboam y la división del reino (12:1-24).
Jeroboán gobierna como rey sobre las diez tribus. Por falta de fe introduce la adoración
de becerros, y Jehová pronuncia juicio adverso contra él y su casa (12:25-14:20).
El gobierno del rey Rehoboam de Judá se caracteriza por la idolatría, y, en su quinto
año, el rey Sisaq de Egipto invade Judá (14:21-31).
Abiyam de Judá gobierna tres años mientras Jeroboán reina en Israel (15:1-8).
Durante el gobierno del rey Asá de Judá se efectúa una campaña contra la idolatría y
hay guerra constante entre su reino y el de Israel, donde gobierna Baasá, el tercer rey
del reino de diez tribus (15:9-24).
El reinado de dos años de Nadab como rey de Israel y la conspiración de Baasá (15:25-
31).
El gobierno de Baasá y el juicio de Jehová contra él (15:32-16:7).
El reinado del rey israelita Elah y la conspiración y el reinado de Zimrí, su sucesor (16:8-
15).
Omrí consigue el trono al guerrear contra Zimrí y vencerlo. Luego, con la ayuda de sus
apoyadores, vence a su rival Tibni; su iniquidad sobrepasa la de sus predecesores
(16:16-28)
Los acontecimientos del reinado del rey israelita Acab, comenzando con el año treinta y
ocho de Asá (16:29-22:40).
o Acab se casa con Jezabel y se convierte en un adorador de Baal (16:29-33).
o Hiel el betelita reedifica Jericó (16:34).
o La obra de Elias como profeta, sus milagros, su confrontación con Acab, la
ejecución de los adoradores de Baal, su huida de la ira de Jezabel y su comisión
de ungir a Hazael, Jehú y Eliseo (17:1-19:21).
o Los conflictos de Acab con el rey sirio Ben-hadad; Dios le concede la victoria y
después le reprende por no haber dado a Ben-hadad por entero a la destrucción
(20:1-43).
o Acab codicia la viña de Nabot; Jezabel maniobra la muerte de Nabot, y Acab toma
posesión de la viña; por medio de Elias, Jehová pronuncia calamidad para Acab y
su casa por causa de esta infame acción (21:1-29).
o Acab y el rey Jehosafat de Juda se unen con el fin de arrebatarles a los sirios
Ramot galaad; el ataque fracasa,y Acab es herido mortalmente en la batalla
(22:1-40).
Los reinados del rey Jehosafat de Juda y del rey Ocozías de Israel (22:41-53).
*** w05 1/7 págs. 28-31 Puntos sobresalientes del libro de Primero de los Reyes ***
UN REY SABIO PROMUEVE LA PAZ Y LA PROSPERIDAD
(1 Reyes 1:1–11:43)
Primero de los Reyes empieza con un intrigante relato acerca del intento del hijo de David,
Adonías, de usurpar el trono de su padre. La acción inmediata del profeta Natán frustra el plan,
y Salomón es nombrado rey. A Jehová le agrada la petición del recién entronizado rey y le da
―un corazón sabio y entendido‖ y ―tanto riquezas como gloria‖ (1 Reyes 3:12, 13). La sabiduría
del rey no tiene igual, y su riqueza es incomparable. Israel goza de un período de paz y
prosperidad.
Entre las obras de construcción que realiza Salomón se hallan el templo de Jehová y
diversos edificios gubernamentales. Jehová le garantiza a Salomón: ―Estableceré el trono de tu
reino sobre Israel hasta tiempo indefinido‖, con la condición de que el rey permanezca
obediente (1 Reyes 9:4, 5). El Dios verdadero también le advierte de las consecuencias de ser
desobediente. Sin embargo, con el tiempo Salomón llega a tener muchas esposas extranjeras
y, a causa de la influencia de ellas, comienza a adorar a dioses falsos cuando ya es de edad
avanzada. Jehová predice que su reino será dividido. Salomón muere en el año 997 antes de
nuestra era, lo que pone fin a su reinado de cuarenta años. Su hijo Rehoboam asciende al
trono.
Respuestas a preguntas bíblicas:
1:5. ¿Por qué intentó Adonías apoderarse del trono cuando David aún estaba vivo?
La Biblia no lo dice. Sin embargo, puesto que sus hermanos mayores, Amnón y Absalón, ya
estaban muertos, y probablemente había muerto el otro hijo de David, Kileab, es razonable
concluir que Adonías pensaba que tenía derecho al trono por ser el mayor de los hijos que le
quedaban al rey (2 Samuel 3:2-4; 13:28, 29; 18:14-17). Ya que había obtenido el apoyo de
Joab, el poderoso jefe del ejército, y de Abiatar, el influyente sumo sacerdote, es probable que
Adonías se sintiera seguro de que lograría su objetivo. La Biblia no dice si él sabía que David
planeaba darle el trono a Salomón; sin embargo, no invitó a Salomón ni a otros siervos leales a
David a ―un sacrificio‖ (1 Reyes 1:9, 10). Tal acción da a entender que consideraba a Salomón
un rival.
1:49-53; 2:13-25. ¿Por qué mandó Salomón que se diera muerte a Adonías después
que lo había perdonado? Cuando Adonías le pidió a Bat-seba que le solicitara al rey que le
entregara a Abisag como esposa, ella no se dio cuenta del verdadero motivo por el que él lo
hacía, pero Salomón sí lo percibió. Aunque David no había tenido relaciones sexuales con la
bella Abisag, era considerada su concubina. Según la costumbre de aquellos días, ella solo
podía pertenecer al heredero legal de David. Adonías tal vez pensó que si conseguía a Abisag
como esposa, podría hacer otro intento de apoderarse de la corona. Salomón interpretó la
petición de Adonías como una manifestación de su ambición de conseguir el trono y, por eso,
retiró el perdón.
6:37–8:2. ¿Cuándo se inauguró el templo? El templo se terminó en el octavo mes del
año 1027 antes de nuestra era, en el undécimo año del reinado de Salomón. Parece que tomó
once meses introducir el mobiliario en el templo y terminar los demás preparativos.
La inauguración debió de llevarse a cabo en el séptimo mes del año 1026. El relato describe
otras obras de construcción después que se terminó el templo y antes de mencionar su
inauguración, aparentemente para dar un cuadro completo de las obras de edificación
(2 Crónicas 5:1-3).
9:10-13. ¿Estaba en armonía con la Ley mosaica el que Salomón regalara veinte
ciudades de la tierra de Galilea a Hiram, el rey de Tiro? Puede que el mandato de la Ley
que se expone en Levítico 25:23, 24 solo fuera aplicable a la zona ocupada por los israelitas.
Es posible que las tierras que Salomón dio a Hiram hayan estado habitadas por no israelitas,
aunque se hallaban dentro de los límites de la Tierra Prometida (Éxodo 23:31). La acción de
Salomón también pudiera ser una indicación de que él no estaba cumpliendo por completo con
la Ley, como cuando ‗aumentó para sí caballos‘ y tomó muchas esposas (Deuteronomio
17:16, 17). Sea como fuere, Hiram no estaba contento con el regalo. Quizás los habitantes
paganos de dichas ciudades las tenían en malas condiciones, o tal vez estaban en una
ubicación poco conveniente.
11:4. ¿Se hizo infiel Salomón en su vejez debido a la senilidad? No parece que esa haya
sido la razón. Salomón era bastante joven cuando empezó a gobernar, y aunque fue rey
durante cuarenta años, no llegó a una edad muy avanzada. Además, no dejó de adorar a
Jehová por completo. Aparentemente intentó practicar alguna forma de unión de fes.
Lecciones para nosotros:
2:26, 27, 35. Siempre se cumple lo que Jehová predice. El que se removiera de su puesto a
Abiatar, un descendiente de Elí, cumplió ―la palabra de Jehová que él había hablado contra la
casa de Elí‖. El reemplazo de Abiatar por Sadoc, de la línea de Finehás, cumplió lo que dice
Números 25:10-13 (Éxodo 6:25; 1 Samuel 2:31; 3:12; 1 Crónicas 24:3).
2:37, 41-46. ¡Qué peligroso es pensar que podemos desobedecer la ley de Dios y salirnos
con la nuestra! Quienes se desvían deliberadamente del ‗camino estrecho que conduce a la
vida‘ sufrirán las consecuencias de tal decisión imprudente (Mateo 7:14).
3:9, 12-14. Jehová contesta las oraciones sinceras de sus siervos cuando le piden sabiduría,
entendimiento y guía a fin de cumplir con su servicio (Santiago 1:5).
8:22-53. Salomón expresó profunda y sincera gratitud a Jehová, un Dios de bondad
amorosa, Cumplidor de promesas y Oidor de la oración. Meditar sobre la oración que Salomón
ofreció en la inauguración aumentará nuestro agradecimiento por estos y otros aspectos de la
personalidad de Dios.
11:9-14, 23, 26. Cuando Salomón se hizo desobediente en sus últimos años, Jehová levantó
opositores contra él. ―Dios se opone a los altivos, pero da bondad inmerecida a los humildes‖,
dice el apóstol Pedro (1 Pedro 5:5).
11:30-40. El rey Salomón procuró matar a Jeroboán por lo que Ahíya había profetizado
acerca de este. ¡Qué diferente había sido la reacción del rey unos cuarenta años atrás, cuando
rehusó vengarse de Adonías y los demás conspiradores! (1 Reyes 1:50-53.) Este cambio de
actitud fue el resultado de haberse alejado de Jehová.
UN REINO UNIDO QUEDA DIVIDIDO
(1 Reyes 12:1–22:53)
Jeroboán y el pueblo se acercan al rey Rehoboam y le piden que disminuya la carga que su
padre Salomón impuso sobre ellos. En vez de acceder a su petición, el rey los amenaza
diciéndoles que impondrá cargas aún más pesadas. Diez tribus se rebelan y nombran rey a
Jeroboán. El reino queda dividido: Rehoboam gobierna en el reino meridional, compuesto de
las tribus de Judá y Benjamín, y Jeroboán gobierna en el reino septentrional de diez tribus de
Israel.
Para evitar que el pueblo vaya a Jerusalén a adorar a Jehová, Jeroboán coloca dos becerros
de oro, uno en Dan y otro en Betel. Entre los reyes que gobiernan en Israel después de
Jeroboán están Nadab, Baasá, Elah, Zimrí, Tibní, Omrí, Acab y Ocozías. Abiyam, Asá,
Jehosafat y Jehoram suceden a Rehoboam en Judá. Entre los profetas que estuvieron activos
en los días de estos reyes se encuentran Ahíya, Semaya y un hombre de Dios cuyo nombre
no se menciona, así como Jehú, Elías y Micaya.
Respuestas a preguntas bíblicas:
18:21. ¿Por qué se quedó callado el pueblo cuando Elías le pidió que escogiera entre
seguir a Jehová o a Baal? Puede que reconocieran que le habían fallado a Jehová al no darle
la devoción exclusiva que él exige, y por lo tanto, se hayan sentido culpables. O tal vez tenían
la conciencia tan endurecida que no veían nada malo en adorar a Baal mientras afirmaban ser
adoradores de Jehová. Solo después que Jehová demostró su poder dijeron: ―¡Jehová es el
Dios verdadero! ¡Jehová es el Dios verdadero!‖ (1 Reyes 18:39).
20:34. Después que Jehová le dio la victoria a Acab sobre los sirios, ¿por qué le
perdonó este la vida a su rey, Ben-hadad? En lugar de matar a Ben-hadad, Acab celebró un
pacto con él, según el cual se le asignarían a Acab ciertas calles de Damasco, la capital de
Siria, probablemente para establecer en ellas bazares o mercados. Con anterioridad, el padre
de Ben-hadad también se había apropiado de ciertas calles de Samaria con fines comerciales.
Por eso, se puso a Ben-hadad en libertad para que Acab pudiera fomentar su comercio en
Damasco.
Lecciones para nosotros:
12:13, 14. Cuando tomemos decisiones importantes en la vida, debemos buscar el consejo
de personas maduras que conozcan bien las Escrituras y que tengan en gran estima los
principios divinos.
13:11-24. Cualquier consejo o recomendación que parezca cuestionable, aunque provenga
de un compañero cristiano sincero, debe compararse con los sensatos consejos de la Palabra
de Dios (1 Juan 4:1).
14:13. Jehová nos inspecciona y busca lo bueno en nosotros. Sin importar lo insignificante
que sea ese elemento positivo, él puede hacerlo crecer a medida que procuramos servirle de
toda alma.
15:10-13. Tenemos que rechazar con valor la apostasía y promover la adoración verdadera.
17:10-16. Debido a que la viuda de Sarepta reconoció que Elías era profeta y lo recibió
como tal, Jehová bendijo sus obras de fe. Hoy día, Jehová también observa las obras de fe y
recompensa a quienes apoyan la obra del Reino de diversas maneras (Mateo 6:33; 10:41, 42;
Hebreos 6:10).
19:1-8. Podemos confiar en que Jehová nos sostiene cuando afrontamos intensa oposición
(2 Corintios 4:7-9).
19:10, 14, 18. Los verdaderos siervos de Jehová nunca están solos, pues lo tienen a él y
también a la hermandad mundial.
19:11-13. Jehová no es un dios de la naturaleza, ni una simple personificación de las fuerzas
naturales.
20:11. Cuando Ben-hadad se jactó de que destruiría Samaria, el rey de Israel contestó: ―El
que se ciñe [la armadura para la guerra] no se jacte como el que se [la] desabrocha‖ cuando
vuelve victorioso de la batalla. Cuando nos encaramos a una nueva tarea, tenemos que evitar
la confianza excesiva del jactancioso (Proverbios 27:1; Santiago 4:13-16).
2 REYES, LIBRO DE
CONTENIDO
La última etapa de la obra profética de Elías en Israel (1:1-2:13).
o Elías anuncia que el rey Ocozías morirá como consecuencia de su accidente (1:1-
18).
o Elías es llevado en la tempestad de viento mientras está en compañía de Eliseo
(2:1-13).
El servicio de Eliseo como profeta abarca los reinados de los reyes israelitas Jehoram,
Jehú, Jehoacaz y Jehoás (2:14-13:21).
o Eliseo divide las aguas del Jordán; sanea el agua de Jericó y, en camino al monte
Carmelo, invoca el mal sobre unos muchachitos que se estaban mofando,
cuarenta y dos de los cuales son despedazados más tarde por dos osas (2:14-
25).
o Durante una expedición militar contra Moab, los ejércitos aliados de Jehoram de
Israel, Jehosafat de Judá y el rey de Edom quedan atrapados en una región en la
que no hay agua; el consejo inspirado que Eliseo les da por causa de Jehosafat
los salva, y resulta en la derrota de los moabitas (3:1-27).
o Eliseo incrementa milagrosamente el aceite de la viuda, permitiéndole pagar sus
deudas(4:1-7).
o Al ser recibido hospitalariamente por un matrimonio de Sunem, Eliseo le promete
un hijo a la mujer sunamita; el hijo nace, más tarde muere, y es resucitado por
Eliseo (4:8-37).
o Eliseo hace que un guisado deje de ser dañino, multiplica la provisión de pan,
sana a Naamán de la lepra y hace que la cabeza de un hacha flote (4:38-6:7).
o Durante la guerra entre Israel y Siria, Eliseo alerta al rey de Israel de las
maniobras sirias; los sirios intentan sin éxito capturar a Eliseo (6:8-23).
o El rey sirio Ben-hadad lleva a cabo una invasión masiva contra Samaria y sitia la
ciudad, causando una gran hambre; el rey de Israel culpa a Eliseo por esto y se
propone matar al profeta (6:24-33).
o Eliseo predice el fin del hambre acarreada por el sitio; se cumple la predicción
(7:1-20).
Los tratos de Eliseo con la misma mujer sunamita, y ciertos contecimientos
en la vida de ella (8:1-6).
o Eliseo va a Damasco y allí hace saber que Hazael se convertirá en el rey de Siria;
sus palabras se cumplen (8:7-15).
o La relación entre las familias gobernantes de Judá e Israel en el tiempo de
Eliseo(8:16-29).
o Eliseo envía a su servidor para que unja a Jehú como rey; Jehú conspira contra
Jeho ram el rey de Israel, actúa contra la casa de Acab y destruye a los
adoradores de Baal(9:1-10:36).
o La obra de ejecución de Jehú también oca siona la muerte de Ocozías, el rey de
Judá (9:27, 28), dando pie a que la reina madre Atalía se apodere del trono y rija
hasta que Jehoás es ungido rey y ella es ejecutada; el reinado de Jehoás
empieza bien pero termina en fracaso (11:1-12:21).
o Israel está bajo la opresión siria durante el reinado de Jehoacaz, pero después
hay algo de alivio; su sucesor Jehoás (de Israel) visita a Eliseo y recibe una señal
de que vencerá a los sirios; Eliseo muere (13:1-21).
El rey israelita Jehoás derriba a los sirios tres veces (13:22-25).
Los reinados del rey Amasías de Judá y el rey Jehoás de Israel, y la derrota de Judá a
manos de Israel (14:1-22).
Jeroboán (II) gobierna sobre Israel y recupera el território perdido (14:23-29).
Los reinados de los reyes Azarías y Jotán de Judá, y los reyes israelitas Zacarías,
Salum, Menahem, Peqahías y Péqah (15:1-37).
El reinado del rey Acaz de Judá, su idolatría y sus tratos con Asiria (16:1-20).
El reinado del rey israelita Hosea. Por haber se hecho un mal registro ante Dios, Israel
es llevado al exilio en Asiria, y el monarca asirio establece a otros pueblos en las
ciudades de Samaria (17:1-41).
El reinado del rey Ezequías de Judá(18:1-20:21).
o La campaña de Ezequías contra la idolatria, su rebelión contra Asiria y la guerra
contra los filisteos: durante su reinado, el reino norteño es llevado al exilio en
Asiria (18:1-12).
o El rey asirio Senaquerib invade Judá: Jerusalén es amenazada, pero en
cumplimiento de la profecía de Isaías se salva cuando el ángel de Jehová
destruye a 185.000 soldados de las huestes asirias y como consecuencia hace
que Senaquerib regrese a su tierra(18:13-19:37).
o La enfermedad de Ezequías y su recuperación. Recibe a los mensajeros
babilonios. Con el tiempo muere (20:1-21).
Los reinados de Manasés y Amón (21:1-26).
El reinado de Josías (22:1-23:30).
o Se emprende la obra de reparación del templo: se halla el libro de la ley, lo cual
impulsa que se lleven a cabo extensas reformas religiosas y que se destruyan los
accesorios idolátricos (22:1-23:27).
o La muerte de Josías en la batalla contra el faraón Nekoh (23:28-30).
Los reinados de Jehoacaz y Jehoiaquim (23:31-24:7).
El gobierno de Joaquín y el primer exilio en Babilonia (24:8-17).
El reinado de Sedequías. La destrucción de Jerusalén y el templo por los babilonios, y el
subsiguiente exilio (24:1 8-25:21).
Guedalías es nombrado gobernador sobre el pueblo, es decir, sobre aquellos que no
habían sido llevados al exilio: después de su asesina to el pueblo va a Egipto (25:22-26).
El rey babilonio Evil-merodac ensalza al exiliado rey Joaquín (25:27-30).
Véase el libro ―Toda Escritura es inspirada de Dios y provechosa‖, págs. 69-74.
*** w05 1/8 págs. 8-12 Puntos sobresalientes del libro de Segundo de los Reyes ***
ELISEO SUCEDE A ELÍAS
(2 Reyes 1:1–8:29)
El rey Ocozías de Israel sufre una caída en su casa y enferma. El profeta Elías le anuncia
que no sobrevivirá. A su muerte, lo sucede su hermano Jehoram. Entretanto, Jehosafat es el
rey de Judá. Elías es arrebatado en una tempestad de viento, y Eliseo, su siervo, ocupa su
puesto de profeta. Durante los aproximadamente sesenta años que dura su ministerio, Eliseo
efectúa muchos milagros (véase el recuadro ―Los milagros de Eliseo‖).
El rey de Moab se subleva contra Israel. Por eso, Jehoram, Jehosafat y el rey de Edom
aúnan sus fuerzas para enfrentarse a él en una batalla, de la cual salen airosos gracias a la
fidelidad de Jehosafat. Posteriormente, Eliseo frustra los planes del rey de Siria de tender una
emboscada a Israel. Enfurecido, el monarca envía ―caballos y carros de guerra y una pesada
fuerza militar‖ para apresar al profeta (2 Reyes 6:14). Entonces, Eliseo realiza dos milagros y
hace que los sirios se marchen en paz. Más adelante, el rey sirio Ben-hadad sitia la ciudad de
Samaria provocando una hambruna, pero Eliseo predice que el hambre acabará.
Tiempo después, Eliseo va a Damasco. Como el rey Ben-hadad está enfermo, envía a
Hazael para averiguar si se recuperará. Eliseo predice que morirá y que Hazael gobernará en
su lugar. Al día siguiente, Hazael asfixia al rey con una ―tela [mojada] en forma de malla‖ y se
apodera del trono (2 Reyes 8:15, nota). En Judá, Jehoram, hijo de Jehosafat, llega a ser rey, y
posteriormente le sucede su hijo Ocozías (véase el recuadro ―Reyes de Judá y de Israel‖).
Respuestas a preguntas bíblicas:
2:9. ¿Por qué pidió Eliseo ―dos partes‖ del espíritu de Elías? Porque era consciente de
que para cumplir su responsabilidad como profeta de Israel necesitaría el mismo espíritu
valiente e intrépido que había tenido Elías. Además, Eliseo fue siervo de Elías durante
seis años, y fue Elías quien lo nombró su sucesor, así que Eliseo veía en él a un padre
espiritual; era como su hijo primogénito (1 Reyes 19:19-21; 2 Reyes 2:12). Y tal como el
primogénito literal recibía dos partes de la herencia de su padre, Eliseo pidió y recibió doble
porción de la herencia espiritual de Elías.
2:11. ¿A qué ―cielos‖ ―fue ascendiendo [Elías] en la tempestad de viento‖? No fue ni a
alguna parte lejana del universo físico ni al lugar espiritual en que habitan Dios y sus hijos
angélicos (Deuteronomio 4:19; Salmo 11:4; Mateo 6:9; 18:10). En realidad, Elías ascendió a los
cielos atmosféricos (Salmo 78:26; Mateo 6:26). Parece ser que el carro de fuego lo transportó a
través de la atmósfera a otro lugar de la Tierra, donde vivió algún tiempo. De hecho, años
después, Elías escribió una carta a Jehoram, el rey de Judá (2 Crónicas 21:1, 12-15).
5:15, 16. ¿Por qué no aceptó Eliseo el regalo de Naamán? Porque reconocía que la
curación milagrosa de Naamán se debía al poder de Jehová, y no al suyo. Para él habría sido
inadmisible beneficiarse del cargo que Dios le había dado. Hoy día, los auténticos siervos de
Jehová tampoco buscan sacar provecho personal de su servicio. Se toman muy en serio la
recomendación de Jesús: ―Recibieron gratis; den gratis‖ (Mateo 10:8).
5:18, 19. ¿Estaba pidiendo perdón Naamán por tener que participar en un acto
religioso? Se ve que el débil estado de salud del anciano rey sirio lo obligaba a apoyarse en
Naamán. Cuando el rey se inclinaba para adorar a Rimón, también lo hacía Naamán. Pero se
trataba de una acción puramente mecánica, con el único objetivo de servir de apoyo al rey,
no de rendir adoración. De modo que Naamán pidió perdón a Jehová por cumplir con este
deber civil. Eliseo dio crédito a sus palabras y le dijo: ―Vete en paz‖.
Lecciones para nosotros:
1:13, 14. Aprender de lo que vemos y actuar con humildad salva vidas.
2:2, 4, 6. Pese a que Eliseo había sido el ayudante de Elías durante tal vez seis años,
no quiso abandonarlo. Sin duda, es un magnífico ejemplo de lealtad y amistad (Proverbios
18:24).
2:23, 24. Parece que el principal motivo por el que unos muchachos se burlaron de Eliseo
fue porque un hombre calvo llevaba la prenda de vestir oficial de Elías. Reconocieron que
Eliseo era el representante de Jehová y simplemente no lo querían cerca. Le dijeron que
subiera, quizás dando a entender que siguiera su camino a Betel o que fuera arrebatado, tal
como le sucedió a Elías. Obviamente, reflejaron la misma actitud hostil de sus progenitores.
De ello se desprende que es esencial que los padres enseñen a sus hijos a respetar a los
representantes de Dios.
3:14, 18, 24. La palabra de Jehová siempre se cumple.
3:22. Con el reflejo de la luz del alba, el agua daba la impresión de ser sangre, quizás
porque el suelo de las zanjas recién formadas era de barro rojizo. Jehová puede optar por
valerse de fenómenos naturales para realizar sus propósitos.
4:8-11. Al darse cuenta de que Eliseo era ―un santo hombre de Dios‖, cierta mujer de Sunem
fue hospitalaria con él. ¿Verdad que deberíamos hacer lo mismo nosotros con los siervos fieles
de Jehová?
5:3. Esta niña israelita tenía fe en el poder de Dios para efectuar milagros y la defendió con
valor. Joven, ¿te esfuerzas por fortalecer tu fe en las promesas divinas y te armas de valor para
hablar de la verdad a tus profesores y compañeros de clase?
5:9-19. ¿No demuestra el ejemplo de Naamán que alguien orgulloso puede aprender a ser
humilde? (1 Pedro 5:5.)
5:20-27. ¡Qué precio tan alto por intentar vivir una mentira! Reflexionar sobre los
sufrimientos y adversidades que resultan de llevar una doble vida impedirá que caigamos en
ese proceder.
ISRAEL Y JUDÁ LLEVADOS AL DESTIERRO
(2 Reyes 9:1–25:30)
Se unge a Jehú rey de Israel. Sin dilación, Jehú pone en marcha una campaña para
aniquilar la casa de Acab y hábilmente extermina de Israel la adoración de Baal (2 Reyes
10:28). En cuanto Atalía, la madre de Ocozías, se entera de que Jehú ha matado a su hijo, ‗se
levanta y destruye a toda la prole del reino‘ de Judá y usurpa el trono (2 Reyes 11:1).
Solamente se salva el hijo menor de Ocozías, Jehoás, quien, tras permanecer seis años oculto,
es ungido rey de Judá. Gracias a la instrucción que recibe de Jehoiadá el sacerdote, Jehoás
continúa haciendo lo que es recto a los ojos de Jehová.
En cuanto a los reyes de Israel que suceden a Jehú, todos hacen lo que es malo a la vista
de Jehová. Eliseo fallece de muerte natural en los días del nieto de Jehú. El cuarto rey de Judá
después de Jehoás es Acaz, quien tampoco hace ―lo que es recto a los ojos de Jehová‖
(2 Reyes 16:1, 2). En cambio, su heredero Ezequías llega a ser un rey que sigue ―adhiriéndose
a Jehová‖ (2 Reyes 17:20; 18:6). En el año 740, mientras Ezequías gobierna en Judá, y Hosea,
en Israel, el monarca asirio Salmanasar ‗toma a Samaria y lleva a Israel al destierro en Asiria‘
(2 Reyes 17:6). En consecuencia, pueblos extranjeros ocupan el territorio de Israel y surge la
religión samaritana.
De los siete reyes que suceden a Ezequías en Judá, solo Josías toma medidas para
erradicar la adoración falsa. Finalmente, en el 607, los babilonios conquistan Jerusalén, y Judá
se va ―al destierro de sobre su suelo‖ (2 Reyes 25:21).
Respuestas a preguntas bíblicas:
13:20, 21. ¿Apoya este milagro la veneración de reliquias? No. La Biblia no indica que
los huesos de Eliseo se hubieran venerado alguna vez. El milagro se debió al poder de Dios,
como fue el caso de todos los portentos que el profeta realizó en vida.
15:1-6. ¿Por qué plagó Jehová con lepra a Azarías (Uzías, según la nota del
versículo 6)? ―Tan pronto como [Uzías] se hizo fuerte, su corazón se hizo altivo [...], de modo
que actuó infielmente contra Jehová su Dios y entró en el templo de Jehová para quemar
incienso sobre el altar del incienso.‖ Cuando los sacerdotes ―se plantaron contra Uzías‖ y le
mandaron que ―[saliera] del santuario‖, él se enfureció con los sacerdotes y fue castigado con
lepra (2 Crónicas 26:16-20).
18:19-21, 25. ¿Había entrado Ezequías en una alianza con Egipto? No. Las acusaciones
que lanzó Rabsaqué eran falsas, al igual que la afirmación de que contaba con la ―autorización
de parte de Jehová‖. El leal rey Ezequías confió únicamente en Jehová.
Lecciones para nosotros:
9:7, 26. El severo juicio contra la casa de Acab demuestra que la adoración falsa y el
derramamiento de sangre inocente son cosas detestables a los ojos de Jehová.
9:20. La reputación que tenía Jehú de guiar su carruaje de forma impetuosa indica su celo
por cumplir su cometido. ¿Se le conoce a usted por ser un celoso proclamador del Reino?
(2 Timoteo 4:2.)
9:36, 37; 10:17; 13:18, 19, 25; 14:25; 19:20, 32-36; 20:16, 17; 24:13. Podemos estar
seguros de que ‗la palabra que sale de la boca de Jehová siempre tiene éxito seguro‘ (Isaías
55:10, 11).
10:15. Tal como Jehonadab aceptó de buena gana la invitación que le hizo Jehú de subir al
carro, la ―gran muchedumbre‖ apoya de buena gana a Jesucristo, el Jehú moderno, y a sus
seguidores ungidos (Revelación [Apocalipsis] 7:9).
10:30, 31. Aunque Jehú cometió errores, Jehová valoró cuanto había hecho. Y es que ―Dios
no es injusto para olvidar [nuestra] obra‖ (Hebreos 6:10).
13:14-19. Dado que Jehoás, el nieto de Jehú, no se esforzó vigorosamente, sino que solo
golpeó el suelo con las flechas tres veces, tuvo un éxito parcial al luchar contra los sirios.
Jehová espera que nosotros cumplamos con nuestra labor asignada de todo corazón y con
fervor.
20:2-6. Jehová es el ―Oidor de la oración‖ (Salmo 65:2).
24:3, 4. Debido a la culpa de sangre en que había incurrido Manasés, Jehová ―no consintió
en conceder perdón‖ a Judá. Dios respeta la sangre de los inocentes. Podemos confiar en que
Jehová vengará la sangre inocente destruyendo a los culpables (Salmo 37:9-11; 145:20).
*** w05 1/10 Puntos sobresalientes del libro de Primero de las Crónicas ***
IMPORTANCIA DE LAS LISTAS GENEALÓGICAS
(1 Crónicas 1:1–9:44)
Las detalladas listas genealógicas que compila Esdras cumplen por lo menos tres objetivos:
aseguran la legitimidad de quienes sirvan de sacerdotes, permiten determinar las herencias
tribales y preservan el registro del linaje del Mesías. Las genealogías vinculan a los judíos con
su pasado remontándose hasta el primer hombre. De Adán a Noé hay diez generaciones, y
diez más hasta Abrahán. Tras enumerar a los hijos de Ismael, de Queturá (concubina de
Abrahán) y de Esaú, el relato se centra en los linajes de los doce hijos de Israel (1 Crónicas
2:1).
La genealogía de la tribu de Judá recibe especial atención, pues de ella procede la dinastía
davídica. Son catorce las generaciones que se suceden desde Abrahán hasta David, y otras
catorce hasta la deportación de los judíos a Babilonia (1 Crónicas 1:27, 34; 2:1-15; 3:1-17;
Mateo 1:17). Esdras menciona luego a los descendientes de las tribus que habitan al este del
Jordán, seguidos de la genealogía de los hijos de Leví (1 Crónicas 5:1-24; 6:1). A continuación
reseña los linajes de varias de las demás tribus establecidas al oeste del Jordán, y aporta un
registro detallado del linaje de Benjamín (1 Crónicas 8:1). También da los nombres de los
primeros pobladores de Jerusalén tras la cautividad en Babilonia (1 Crónicas 9:1-16).
Respuestas a preguntas bíblicas:
1:18. ¿Quién fue el padre de Selah: Cainán o Arpaksad? (Lucas 3:35, 36.) El padre de
Selah fue Arpaksad (Génesis 10:24; 11:12). El nombre ―Cainán‖, citado en Lucas 3:36, bien
pudiera ser una distorsión del término ―caldeos‖. Si así fuera, el texto original diría ―el hijo del
caldeo Arpaksad‖. Otra posibilidad es que los nombres Cainán y Arpaksad aludan a la misma
persona. Cabe mencionar que la expresión ―hijo de Cainán‖ no aparece en algunos
manuscritos (Lucas 3:36, nota).
2:15. ¿Fue David el séptimo hijo de Jesé? No, no lo fue. Jesé tuvo ocho hijos, de los
cuales David era el menor (1 Samuel 16:10, 11; 17:12). Al parecer, uno de ellos murió sin dejar
descendencia. Por cuanto no tenía ninguna relevancia en la genealogía, Esdras omitió su
nombre.
3:17. ¿Por qué se refiere Lucas 3:27 a Sealtiel, hijo de Jeconías, como el hijo de Nerí?
El padre de Sealtiel fue Jeconías, y según parece, Nerí fue su suegro. Lucas se refiere al yerno
de Nerí como si fuera hijo de este, del mismo modo que alude a José como el hijo de Elí, el
padre de María (Lucas 3:23).
3:17-19. ¿Qué parentesco había entre Zorobabel, Pedaya y Sealtiel? Zorobabel fue hijo
de Pedaya, y Pedaya era hermano de Sealtiel. Sin embargo, hay veces que la Biblia llama a
Zorobabel hijo de Sealtiel (Mateo 1:12; Lucas 3:27). Esto pudiera deberse a que Pedaya murió
y fue Sealtiel quien crió a Zorobabel; o quizá Sealtiel murió sin hijos y Pedaya se casó con la
viuda, según la ley del levirato, y de esa unión nació Zorobabel, el primogénito (Deuteronomio
25:5-10).
5:1, 2. ¿Qué significó para José recibir el derecho de primogenitura? Significó que
obtendría una doble porción de la herencia (Deuteronomio 21:17). Por ello llegó a ser padre de
dos tribus, a saber, Efraín y Manasés, mientras que los demás hijos de Israel solo dieron origen
a una tribu cada uno.
Lecciones para nosotros:
1:1–9:44. Las genealogías de personas de la vida real prueban que todo el sistema
relacionado con la adoración pura se basa en hechos y no en mitos.
4:9, 10. Jehová concedió la ferviente petición de Jabez de ensanchar pacíficamente su
territorio para poder albergar a más personas temerosas de Dios. Nosotros también debemos
rogarle de corazón que nuestra participación entusiasta en la obra de hacer discípulos
produzca fruto.
5:10, 18-22. En los días del rey Saúl, las tribus que moraban al este del Jordán derrotaron a
los hagritas, aunque el número de estos era más del doble. Aquellos hombres valerosos
obtuvieron la victoria porque confiaron en Jehová y clamaron a él por ayuda. De igual manera,
confiemos totalmente en Jehová en la guerra espiritual que sostenemos con enemigos temibles
(Efesios 6:10-17).
9:26, 27. Los porteros levitas ocupaban un puesto de gran confianza, pues tenían a su cargo
las llaves de los recintos sagrados del templo. Demostraron ser responsables en sus funciones
al abrir las puertas todos los días. A nosotros se nos ha encomendado ayudar a las personas
de nuestro territorio para que vengan a adorar a Jehová. ¿No deberíamos, pues, realizar esta
comisión con la misma responsabilidad que demostraron los porteros levitas?
EL REINADO DE DAVID
(1 Crónicas 10:1–29:30)
El relato se abre con la muerte del rey Saúl y sus tres hijos en una batalla con los filisteos en
el monte Guilboa. David, hijo de Jesé, es proclamado rey sobre la tribu de Judá. Los hombres
de todas las tribus van a Hebrón para hacerlo rey sobre todo Israel (1 Crónicas 11:1-3). Poco
tiempo después conquista Jerusalén. Posteriormente, los israelitas trasladan el arca del pacto a
Jerusalén ―con gozosa gritería y con el toque del cuerno [...], tocando fuertemente los
instrumentos de cuerda y arpas‖ (1 Crónicas 15:28).
David expresa su deseo de erigir una casa para el Dios verdadero. Aunque Jehová reserva
dicho privilegio para Salomón, celebra con él un pacto para un reino. David emprende una
campaña contra los enemigos de Israel, y Jehová le concede una victoria tras otra.
A consecuencia de un censo ilícito mueren 70.000 hombres. Tras construir un altar a Dios por
orden de un ángel, David compra un terreno a Ornán el jebuseo y comienza a hacer
―preparativos en grandes cantidades‖ para edificarle a Jehová una casa ―sobrepujantemente
magnífica‖ (1 Crónicas 22:5). Luego organiza el servicio de los levitas, descrito aquí con más
detalle que en cualquier otra parte de las Escrituras. El rey y el pueblo contribuyen
generosamente para la construcción del templo. Al cabo de cuarenta años de reinado, David
muere ―satisfecho de días, riquezas y gloria; y Salomón su hijo emp[ieza] a reinar en lugar de
él‖ (1 Crónicas 29:28).
Respuestas a preguntas bíblicas:
11:11. ¿Por qué aquí se cifran los muertos en 300 y no en 800, como dice el relato
paralelo de 2 Samuel 23:8? El principal de los tres hombres más valientes de David era
Jasobeam, o Joseb-basébet. Los otros dos eran Eleazar y Samah (2 Samuel 23:8-11).
La diferencia tal vez estribe en que los dos relatos narran proezas distintas realizadas por el
mismo hombre.
11:20, 21. ¿Qué posición ocupaba Abisai con respecto a los tres hombres poderosos
de David? Aunque Abisai no era uno de los tres hombres más poderosos que tuvo David,
estaba al mando de treinta guerreros y adquirió más fama que todos estos, según indica
2 Samuel 23:18, 19. Su reputación rivalizaba con la de los tres primeros porque había realizado
una hazaña similar a la de Jasobeam.
12:8. ¿En qué sentido era el rostro de los guerreros gaditas como ―de leones‖? Estos
valientes soldados, que se habían unido a David en el desierto, tenían una espesa melena que
les daba un aspecto feroz, como de león.
13:5. ¿Qué es ―el río de Egipto‖? Aunque hay quienes han dicho que esta expresión alude
a un brazo del río Nilo, el consenso general es que se refiere al ―valle torrencial de Egipto‖, un
largo desfiladero que señalaba la frontera sudoeste de la Tierra Prometida (Números 34:2, 5;
Génesis 15:18).
16:30. ¿Qué significan los ―dolores fuertes‖ a causa de Jehová? La palabra ―dolores‖ se
usa aquí en sentido figurado para denotar temor reverencial y alta estima a Jehová.
16:1, 37-40; 21:29, 30; 22:19. ¿Qué sistema de adoración existió en Israel desde que se
llevó el Arca a Jerusalén hasta que se construyó el templo? El Arca había estado fuera del
tabernáculo por muchos años cuando David la llevó a Jerusalén y la puso dentro de la tienda
que había preparado. Allí permaneció algún tiempo. El tabernáculo estaba en Gabaón, donde
el sumo sacerdote Sadoc y sus hermanos ofrecían los sacrificios prescritos por la Ley. Dicho
sistema perduró hasta que el templo quedó terminado. Entonces se trasladó el tabernáculo de
Gabaón a Jerusalén, y el Arca se colocó en el Santísimo del templo (1 Reyes 8:4, 6).
Lecciones para nosotros:
13:11. En vez de enojarnos con Jehová y culparlo por nuestros fracasos, debemos analizar
la situación para determinar la verdadera causa. Con seguridad eso fue lo que hizo David.
Aprendió de su error y más tarde llevó el Arca a Jerusalén sin contratiempos utilizando el medio
adecuado.
14:10, 13-16; 22:17-19. Antes de tomar cualquier decisión que pueda influir en nuestra
espiritualidad, siempre debemos orar a Jehová y buscar su dirección.
16:23-29. Adorar a Jehová debe ser el objetivo primordial de nuestra vida.
18:3. Jehová es Aquel que cumple sus promesas. Mediante David, cumplió la promesa de
dar a los descendientes de Abrahán toda la tierra de Canaán, ―desde el río de Egipto hasta el
gran río, el río Éufrates‖ (Génesis 15:18; 1 Crónicas 13:5).
21:13-15. Jehová mandó al ángel que detuviera la plaga porque se compadeció del
sufrimiento de su pueblo. De hecho, ―muchísimas son sus misericordias‖.
22:5, 9; 29:3-5, 14-16. A pesar de que no se le permitió construir el templo de Jehová, David
demostró un espíritu generoso. ¿Por qué razón? Porque reconocía que todo cuanto había
adquirido se debía a la bondad de Jehová. El mismo sentimiento de gratitud debe impulsarnos
a ser generosos.
24:7-18. El sistema de las veinticuatro divisiones sacerdotales instituido por David seguía
vigente cuando el ángel de Jehová se le apareció a Zacarías, el padre de Juan el Bautista, para
anunciarle el nacimiento de este. Como Zacarías era de ―la división de Abías‖, le había tocado
el turno de oficiar en el templo (Lucas 1:5, 8, 9). Este hecho confirma que la adoración
verdadera gira en torno a personajes históricos, no mitológicos. Por otra parte, colaborar de
manera leal hoy día con ―el esclavo fiel y discreto‖ en la bien estructurada adoración a
Jehová trae muchas bendiciones (Mateo 24:45).
Sirvamos a Jehová ―con alma deleitosa‖
Primero de las Crónicas no solo contiene genealogías; también narra diversos sucesos de la
vida de David, como el traslado del arca del pacto a Jerusalén, sus grandes victorias, los
preparativos para la construcción del templo y la organización de las divisiones de servicio de
los sacerdotes levitas. Sin lugar a dudas, todo lo referido en él por Esdras debió de beneficiar a
los israelitas, renovando su celo por la adoración a Jehová en el templo.
David dio un excelente ejemplo al hacer que la adoración a Jehová fuera el eje de su vida.
En lugar de buscar privilegios especiales para sí, procuró hacer la voluntad de Dios. Sigamos
todos nosotros su exhortación de servir a Jehová ―con corazón completo y con alma deleitosa‖
(1 Crónicas 28:9).
[Notas]
Hallará otras lecciones que pueden aprenderse del intento de David de llevar el Arca a
Jerusalén en La Atalaya del 15 de mayo de 2005, págs. 16-19.
Hallará otras lecciones que pueden aprenderse del censo ilícito de David en La Atalaya del 15
de mayo de 2005, págs. 16-19.
*** w05 1/12 Puntos sobresalientes del libro de Segundo de las Crónicas ***
UN REY CONSTRUYE UNA CASA PARA JEHOVÁ
(2 Crónicas 1:1–9:31)
Jehová concede al rey Salomón el deseo de su corazón —sabiduría y conocimiento—, y
también le da riquezas y honra. El rey construye una espléndida casa para Jehová en
Jerusalén, y el pueblo está ‗gozoso y se siente bien en el corazón‘ (2 Crónicas 7:10). Salomón
llega a ser ―más grande que todos los demás reyes de la tierra en riquezas y sabiduría‖
(2 Crónicas 9:22).
Tras reinar cuarenta años sobre Israel, Salomón ‗yace con sus antepasados, y Rehoboam
su hijo empieza a reinar en lugar de él‘ (2 Crónicas 9:31). Esdras no cuenta que Salomón se
descarrió de la adoración verdadera, y solo menciona como datos negativos su imprudencia al
adquirir caballos de Egipto y su matrimonio con la hija de Faraón; así, el cronista presenta su
relato desde un ángulo positivo.
Respuestas a preguntas bíblicas:
2:14. ¿Por qué difiere aquí el origen del artesano del que se da en 1 Reyes 7:14?
Primero de los Reyes dice que la madre del artesano era ‗una viuda de la tribu de Neftalí‘
porque estuvo casada con un hombre de dicha tribu, pero ella era de la tribu de Dan.
Al enviudar, se casó con un natural de Tiro, de cuya unión nació el artesano.
2:18; 8:10. Estos versículos indican que el número de comisarios empleados como
supervisores y capataces para vigilar las obras era de 3.600 más 250, mientras que en
1 Reyes 5:16 y 9:23 se dice que el número era de 3.300 más 550. ¿A qué se debe la
diferencia? La diferencia parece radicar en los métodos de clasificación de los comisarios.
Puede ser que Segundo de las Crónicas distinga entre 3.600 comisarios no israelitas y 250
israelitas, en tanto que Primero de los Reyes establezca una diferencia entre 3.300 capataces y
550 supervisores de mayor rango; de cualquier modo, la cifra total en cada caso es la misma:
3.850.
4:2-4. ¿Por qué se usaron representaciones de toros para construir la base del mar
fundido? En las Escrituras, el toro es símbolo de fuerza (Ezequiel 1:10; Revelación
[Apocalipsis] 4:6, 7). Elegir este animal como representación simbólica fue muy apropiado,
pues los doce toros de cobre sostenían el gran ―mar‖, que pesaba unas 30 toneladas.
La fabricación de estas figuras no quebrantó de ningún modo el segundo mandamiento, que
prohibía hacer imágenes para adorarlas (Éxodo 20:4, 5).
4:5. ¿Cuál era la capacidad máxima del mar fundido? Aunque le cabían tres mil medidas
de bato (66.000 litros), probablemente solo se llenaban dos tercios de su volumen; de ahí que
1 Reyes 7:26 diga: ―Dos mil medidas de bato [44.000 litros] era lo que [el mar] contenía‖.
5:4, 5, 10. ¿Qué objetos del tabernáculo original formaron parte del templo de
Salomón? El único objeto de la tienda de reunión original que se puso en el templo de
Salomón fue el Arca. Cuando finalizaron las obras del templo, el tabernáculo se llevó de
Gabaón a Jerusalén, donde al parecer se guardó (2 Crónicas 1:3, 4).
Lecciones para nosotros:
1:11, 12. La petición que hizo Salomón mostró a Jehová que el rey deseaba de corazón
adquirir sabiduría y conocimiento. De igual modo, las oraciones que elevamos a Dios revelan lo
que tenemos en el corazón, por lo que hacemos bien en analizar lo que decimos en ellas.
6:4. El agradecimiento sincero por la bondad amorosa y la benignidad de Jehová debe
impulsarnos a bendecirlo, es decir, a alabarlo con afecto y gratitud.
6:18-21. Si bien ningún edificio puede contener a Dios, el templo sería el núcleo de la
adoración a Jehová. Así mismo, los Salones del Reino de los Testigos de Jehová son hoy día
el núcleo de la adoración verdadera en la comunidad.
6:19, 22, 32. Jehová sería accesible a todos: desde el rey hasta los miembros más humildes
de la nación, e incluso al extranjero que de veras lo buscara (Salmo 65:2).
ESDRAS, LIBRO DE
CONTENIDO
El decreto de Ciro para el regreso de los ju díos (a fines de 538 o a comienzos de la
primavera de 537 a.E.C.) (1:1-3:6).
o Bajo el mando de Zorobabel, el Tirsatá (gobernador), regresan 42.360 israelitas,
7.337 esclavos y 200 cantores (1:5-2:70).
o Llegada a Judá en el séptimo mes (Tisri); se edifica el altar y se ofrecen
sacrificios.(3:1-6).
Reconstrucción del templo (3:7-6:22).
o Se coloca el fundamento del templo en el segundo año (3:7-13).
o Por años los adversarios descorazonan a los edificadores del templo; en 522 a.
E.C. con siguen que ―Artajerjes‖ emita un decreto por el cual se detiene la
edificación del templo hasta el segundo año de Darío 1 (Histaspes),(520-519 a.
E.C.) (4:1-24).
o Ageo y Zacarías animan a Zorobabel y Jesúa para que hagan la obra de
reconstrucción (5:1, 2).
o Oficiales de ―más allá del Río‖ ponen en tela de juicio el que los judíos tengan el
derecho de edificar, pero estos continúan la obra (5:3-17).
Darío 1 investiga los registros depositados en Babilonia y Ecbátana (6:1,
2).
Refiriéndose al decreto original de Ciro, Darío 1 emite una orden por
escrito para que la reconstrucción siga adelante sin estorbo (6:2-14).
o Se completa la edificación del templo en el tercer día del duodécimo mes (Adar),
en el sexto año de Darío I
(515 a. E.C.); se inaugura el templo reconstruido; se celebran la Pascua y la fiesta de las
tortas no fermentadas (6:15-22).
Artajerjes concede a Esdras en 468 a. E.C. un permiso por escrito para que vaya a
Jerusalén; su llegada a Jerusalén (7:1-8:36).
o La carta de Artajerjes a Esdras (7:11-26).
Aquellos que lo deseen pueden ir a Jerusalén (7:12,13).
Se les provee oro y plata, además de utensilios (7:14-23).
Se exime del impuesto a los sacerdotes, a los levitas y a los servidores del
templo(7:24).
Se autoriza a Esdras para que asigne magistrados y jueces con el fin de
que hagan cumplir la ley de Dios y la ley del rey(7:25-28).
o El viaje a Jerusalén dura cuatro meses (8:1-36).
Alrededor de 1.500 hombres se ofrecen voluntariamente para el viaje (8:1-
14).
El río Ahavá: lugar de reunión e inspección; están presentes los
sacerdotes, aun que no el resto de los levitas (8:15).
A los levitas y a los netineos de Casifía se les invita para que se unan al
grupo (258 hombres en total) (8:16-20).
Se busca la dirección de Jehová para que Él indique cuál es el camino
correcto; se pesan el oro, la plata y los utensilios(8:21-30).
En el duodécimo día del primer mes salen desde Ahavá; llegan a Jerusalén
el primer día del quinto mes;después de un descanso de tres días, en el
templo se hace entrega a los sacerdotes del dinero y de los utensilios
(8:31-36; 7:7-9).
Quedan anulados los matrimonios con esposas extranjeras (9:1-10:44).
o Oración de Esdras y confesión pública en nombre del pueblo (9:1-15).
o Muchos se arrepienten, entre ellos hay sacerdotes y levitas (10:1-6).
o Todos los de Judá convocados en Jerusalén; se hace un pacto (10:7-14).
o Todas las esposas extranjeras y sus hijos son despedidos en unos tres meses
(10:15- 17).
o Registro de los que despidieron a sus esposas extranjeras (10:18-44).
*** w86 15/1 págs. 8-9 ¡Jehová cumple sus promesas! ***
Puntos sobresalientes de la Biblia Esdras 1:1–10:44
¡Liberación! ¡Restauración! ¡Cuán reconfortantes debieron haber sido estas palabras para los
judíos cautivos en Babilonia! En cumplimiento de la promesa divina, los judíos iban a ser
repatriados después de un cautiverio de 70 años. (Jeremías 25:12; Isaías 44:28–45:7.)
Además, los utensilios que habían sido sacados del templo de Jehová iban a ser devueltos a
su debido lugar. ¡Qué acontecimientos gozosos!
Con estos acontecimientos emocionantes da comienzo el libro bíblico de Esdras. Fue escrito en
Jerusalén por el copista Esdras alrededor de 460 a. E.C. y abarca unos 70 años: desde la
liberación de los judíos hasta la terminación del segundo templo y la depuración del sacerdocio
(537-c. 467 a. E.C.). En el libro se destaca la manera como Dios cumple sus promesas.
También contiene lecciones valiosas para los testigos de Jehová del día moderno.
Se liberta a los cautivos
Lea Esdras 1:1–3:6. El rey persa, Ciro, cuyo espíritu Jehová despertó, hizo anunciar un pregón:
¡Se reedificará el templo en Jerusalén y se restaurará la adoración a Jehová! Todos los
israelitas pueden participar. Los que puedan hacerlo, quedan en libertad de regresar a su tierra
natal para la obra de reconstrucción. A los demás se les insta a contribuir liberalmente a la
financiación del proyecto. Serán devueltos los utensilios que Nabucodonosor se había llevado
del templo original a Babilonia. Bajo el liderazgo de Zorobabel, casi 50.000 personas efectúan
el viaje de regreso a Jerusalén a lo largo de unos 1.600 kilómetros (1.000 millas). Reconstruyen
el altar sagrado y ofrecen sacrificios a Jehová. Luego, en el otoño de 537 a. E.C., celebran la
Fiesta de las Cabañas. ¡Los predichos 70 años de desolación terminan al tiempo exacto!
(Jeremías 25:11; 29:10.)
· 1:3-6. ¿Fueron desleales los israelitas que permanecieron en Babilonia?
No necesariamente, aunque en algunos casos el materialismo y la falta de aprecio pudieron
haber sido factores subyacentes. El decreto de Ciro no exigía que todos regresaran, sino que lo
dejó a la elección personal. La edad avanzada, las enfermedades o las responsabilidades
familiares, tal vez impidieron a algunos emprender el viaje de regreso. Pero se esperaba de
ellos que extendieran ayuda a los que podían regresar.
· 1:8. ¿Quién fue Sesbazar?
Muy probablemente este era un nombre oficial en la corte caldea otorgado a Zorobabel.
(Compárese con Daniel 1:7.) Los hechos que en una parte de la Biblia se le atribuyen a
Sesbazar, se le acreditan más adelante a Zorobabel. (Esdras 5:16; Zacarías 4:9.) A ambos se
les da el título de ―gobernador‖. (Esdras 5:14; Ageo 2:21.) Y, en Esdras 2:2 y 3:1, 2, se
presenta a Zorobabel dirigiendo el regreso de los exiliados; en este caso, muy apropiadamente,
no se menciona el nombre de Sesbazar.
· 2:61-63. ¿Qué eran el Urim y el Tumim?
Se cree que eran suertes sagradas que se empleaban para inquirir de Jehová. Según la
tradición judía, estas suertes desaparecieron al tiempo de la destrucción del templo en 607 a.
E.C. Respalda esta conclusión el hecho de que a ciertos hombres que alegaban ser de
ascendencia sacerdotal se les excluyera del sacerdocio y del derecho a comer de las cosas
santísimas, ―hasta que un sacerdote se pusiera de pie con Urim y Tumim‖. Pero no ha quedado
registro alguno respecto al uso de estas suertes en aquel tiempo ni después.
Lección para nuestro día: Existe entre los testigos de Jehová del día moderno una situación
similiar a la de los exiliados judíos. No todos pueden emprender el ministerio de tiempo
completo o dejar sus hogares para ir a servir en lugares donde hay más necesidad de ayuda.
No obstante, hacen cuanto pueden para promover la adoración pura por medio de
contribuciones voluntarias e impartiendo ánimo a quienes pueden ensanchar su servicio.
Se oponen a la restauración
Lea Esdras 3:7–4:24. Los judíos repatriados colocan con gran regocijo el fundamento de la
casa de Jehová. Sin embargo, sus adversarios intentan por años desanimar a los que
reconstruyen el templo. Finalmente, estos enemigos convencen al rey de que una ciudad
―rebelde y mala‖ está siendo reedificada y consiguen que mediante una orden real se detenga
la obra. La prohibición continuó ―hasta el segundo año del reinado de Darío el rey de Persia‖.
· 3:12. ¿Por qué lloraban estos hombres?
Estos hombres de edad muy avanzada recordaban la magnificencia que había tenido el templo
de Salomón que Dios había diseñado. Lo que ahora estaba ante sus ojos —solo unos
cimientos— era una insignificancia en comparación con aquel. Seguramente, estaban
desanimados y dudaban que sus esfuerzos pudieran resultar en un templo que tuviera una
gloria como la del anterior. (Ageo 2:2, 3.)
· 4:1-3. ¿Por qué rechazaron la ayuda que se les ofreció?
Estos gentiles, que habían sido traídos por el rey de Asiria para repoblar la tierra, no eran
verdaderos adoradores de Dios. (2 Reyes 17:33, 41.) De aceptar su ayuda hubieran
comprometido la adoración verdadera, y Jehová les había prevenido específicamente contra
cualquier clase de iniciativa en pro de la unión de fes. (Éxodo 20:5; 34:12.) Además, en el
relato se califica a estos gentiles de ―adversarios‖.
Lección para nuestro día: Cuando en nuestro servicio a Dios nos enfrentemos a oposición,
debemos imitar a estos judíos que regresaron a Jerusalén e inmediatamente se reunieron para
adorar ―como un solo hombre‖. La confianza en Jehová y el poner su adoración en primer lugar
les infundió fuerzas para llevar a su término el trabajo asignado. (Esdras 3:1-12.)
Se completa el templo
Lea Esdras 5:1–6:22. Incitados por los profetas Ageo y Zacarías, los judíos prosiguieron la obra
con celo renovado. Los adversarios, incapaces de detenerles, se quejan de nuevo al rey. El rey
Darío ordena una investigación y se halla el decreto original de Ciro. Por consiguiente, se emite
una orden a fin de que los opositores no solo ‗cesen y desistan‘, sino que ¡además se les
ordena que contribuyan materialmente! Animados continuamente por los profetas de Jehová, el
templo llega a su terminación y se inaugura en 515 a. E.C. ¡Con gran gozo es dedicado a
Jehová, quien cumple sus promesas!
· 5:5. ¿Por qué no pudieron detener los adversarios la obra de reedificación?
El cuidado atento de Jehová estaba sobre sus siervos fieles. (2 Crónicas 16:9.) Al ser
fortalecidos por el espíritu de Dios, los ancianos no permitieron que se les intimidara. Se
remitieron al decreto original de Ciro por mucho tiempo olvidado. Dado que la ley persa no se
podía cambiar, los adversarios temieron oponerse al decreto real. (Daniel 6:8, 15.) La dirección
de Jehová fue evidente y, en consecuencia, la obra de reconstrucción continuó.
· 6:21. ¿Quiénes se habían separado de ―la inmundicia de las naciones‖?
Puede que hayan sido prosélitos que regresaron del exilio con los judíos, samaritanos que en
aquel entonces habitaban en aquella región o hasta judíos que regresaron del exilio y que
habían sido corrompidos por la influencia pagana. (Compárese con Esdras 9:1.) El adelanto
que había experimentado la adoración pura de Jehová en Jerusalén debió moverlos a hacer los
cambios necesarios en su vida.
Lección para nuestro día: Los ancianos cristianos del día moderno también deben buscar la
guía de Jehová. Él nos da el entendimiento necesario para hacer frente a los opositores.
(Salmo 32:8.)
Esdras regresa
Lea Esdras 7:1–8:36. Pasa el tiempo. En 468 a. E.C., el rey Artajerjes le concede a Esdras
―toda su solicitud‖, permitiéndole prestar ayuda en Jerusalén. La orden del rey anima a todos
los judíos que lo deseen a regresar también y concede una cantidad de plata y oro para
satisfacer todas las necesidades de la casa de Jehová. Se autoriza a Esdras a nombrar
magistrados y jueces a fin de que hagan cumplir tanto la ley de Jehová como la del rey.
Confiado en el apoyo de Dios, Esdras se fortalece y se dispone a emprender el arriesgado
viaje. Él no pide del rey una escolta armada, para que no se interprete como una falta de fe en
el poder protector de Jehová. Con la protección divina, los judíos llegan indemnes.
· 7:1, 7, 11. ¿Quién fue este Artajerjes?
Fue el rey persa Artajerjes I (Longimano). En su vigésimo año le concedió a Nehemías
autorización para regresar a Jerusalén y reconstruir sus muros y puertas. (Nehemías 2:1-8.)
Los historiadores antiguos dicen que este Artajerjes tenía un carácter benigno y generoso.
Aunque el templo se había completado unos 47 años antes, a Artajerjes se le menciona en
Esdras 6:14 entre aquellos cuyas órdenes contribuyeron a la terminación del templo. Él no es el
mismo Artajerjes que detuvo la obra de reconstrucción. (Esdras 4:7-23.) Aquel fue Gaumata,
quien reinó en 522 a. E.C. durante unos ocho meses. El nombre ―Artajerjes‖ debió ser un
nombre dinástico o título.
Lección para nuestro día: Esdras puso un buen ejemplo para los siervos de Jehová del día
moderno. Fue un hábil copista que estudió la Palabra de Dios diligentemente, reconoció que
todo el crédito correspondía al Altísimo y se interesó más en la gloria de Jehová que en su
propia seguridad. (Esdras 7:27, 28; 8:21-23.)
Se limpia la nación
Lea Esdras 9:1–10:44. Esdras pronto se dio cuenta de que muchos no se habían ―separado de
los pueblos de los países en cuanto a sus cosas detestables‖. Los judíos, y entre ellos los
sacerdotes y los levitas, se habían casado con las paganas cananeas. Esdras estaba
asombrado por esto. Presenta el problema en oración a Jehová y, con gran contrición le
expone los pecados de la nación. Bajo su liderazgo, el pueblo se arrepiente y decide despedir a
las esposas extranjeras. En unos tres meses se limpia toda la impureza.
· 9:2. ¿Por qué era un pecado tal matrimonio mixto?
Suponía una amenaza para la restauración de la adoración verdadera. (Deuteronomio 7:3, 4.)
Aquellas mujeres no eran creyentes y practicaban idolatría. Los matrimonios mixtos podían
traer como consecuencia el que fuesen gradualmente asimilados por las naciones paganas que
les rodeaban, con lo que habría desaparecido de la Tierra la adoración pura.
· 10:3, 44. ¿Por qué se despidió también a los hijos?
Por lo general, los niños necesitan a sus madres. Por otra parte, de haber permanecido los
niños, las esposas que habían sido despedidas hubiesen regresado con el tiempo. La
adoración pura de Jehová tenía que tener prioridad.
Lección para nuestro día: Como en el caso de los judíos fieles del tiempo de Esdras, los
testigos de Jehová del día moderno se adhieren a las normas divinas sobre el matrimonio.
Reconocen que deben casarse ―solo en el Señor‖. (1 Corintios 7:39.)
Jehová cumplió con su promesa de restaurar la adoración pura en la antigua Jerusalén. De
manera semejante, él cumplirá su promesa de hacer que sobre toda la Tierra se practique la
adoración pura. (Habacuc 2:14.) ¿Se hallará usted entre los adoradores del gran Cumplidor de
Promesas cuando él traiga paz y felicidad a la Tierra? (Salmo 37:10, 11; Revelación 21:3, 4.)
*** w06 15/1 págs. 17-20 Puntos sobresalientes del libro de Esdras ***
LA RECONSTRUCCIÓN DEL TEMPLO
(Esdras 1:1–6:22)
En respuesta al decreto de liberación de Ciro, 50.000 judíos exiliados vuelven a Jerusalén
comandados por el gobernador Zorobabel, o Sesbazar. Una vez allí, enseguida edifican un
altar en el campamento y ofrecen sacrificios a Jehová.
Al año siguiente, los israelitas colocan los cimientos de la casa de Jehová. Sus enemigos
no dejan de interferir en la reconstrucción, y con el tiempo consiguen que el rey ordene detener
la obra. Los profetas Ageo y Zacarías animan al pueblo y, a pesar de la prohibición, se
reanudan los trabajos en el templo; el temor a ir en contra de un irrevocable mandato persa
emitido por Ciro mantiene a distancia a los adversarios. Durante una investigación oficial se
encuentra el decreto de Ciro ―respecto a la casa de Dios en Jerusalén‖ (Esdras 6:3). Las
labores de construcción avanzan a buen ritmo hasta completarse.
Respuestas a preguntas bíblicas:
1:3-6. ¿Les faltó fe a los israelitas que no se ofrecieron a regresar a su tierra de
origen? Tal vez algunos no volvieron a Jerusalén porque se habían hecho materialistas o
porque carecían de aprecio por la adoración verdadera, pero no fue así en todos los casos.
En primer lugar, recorrer los 1.600 kilómetros [1.000 millas] que los separaban de Jerusalén
tomaba cuatro o cinco meses. Además, se necesitaba mucha fortaleza física para establecerse
en una tierra que había permanecido desolada por setenta años y llevar a cabo la
reconstrucción. Así pues, lo que impidió que algunos regresaran fueron las enfermedades, la
edad avanzada, las obligaciones familiares y otras circunstancias desfavorables.
2:43. ¿Quiénes fueron los netineos? Eran esclavos o ministros de origen no israelita que
servían en el templo. Entre ellos se encontraban los descendientes de los gabaonitas de los
días de Josué y otros ―a quienes David y los príncipes dieron al servicio de los levitas‖ (Esdras
8:20).
2:55. ¿Quiénes fueron los hijos de los siervos de Salomón? Se trató de personas que,
aun sin ser israelitas, recibieron privilegios especiales en el servicio de Jehová. Es posible que
trabajaran como escribas o copistas en el templo, o que sirvieran en alguna posición
administrativa.
2:61-63. ¿Disponían los repatriados del Urim y el Tumim, método empleado cuando se
necesitaba obtener una respuesta de Jehová? Tal vez quienes decían pertenecer al linaje
sacerdotal pero no podían probarlo usaran el Urim y el Tumim para dar validez a su afirmación,
aunque Esdras menciona esto tan solo como una posibilidad. En las Escrituras no hay
constancia de que se utilizaran entonces o en épocas posteriores. Según la tradición judía, el
Urim y el Tumim desaparecieron cuando el templo fue destruido en 607 antes de nuestra era.
3:12. ¿Por qué lloraron ―los viejos que habían visto la casa anterior‖ de Jehová? Estos
hombres podían recordar el esplendor del templo edificado por Salomón. En comparación, los
cimientos del nuevo templo que tenían ante sí eran ―como nada a sus ojos‖ (Ageo 2:2, 3).
¿Conseguirían con su labor que fuera tan glorioso como el anterior? Debieron de sentirse
desconsolados y por eso lloraron.
3:8-10; 4:23, 24; 6:15, 16. ¿Cuántos años tomó la reconstrucción del templo? Se
colocaron los cimientos en el año 536 antes de nuestra era, ―en el segundo año de su venida‖.
Los trabajos se interrumpieron en los días del rey Artajerjes, en el año 522, y la prohibición duró
hasta 520, el segundo año del reinado de Darío. Finalmente, la obra se completó en 515, en el
sexto año de Darío (véase el recuadro titulado ―Reyes persas desde 537 hasta 467 antes de
nuestra era‖). Por lo tanto, la reconstrucción del templo tomó unos veinte años.
4:8–6:18 (4:8, nota). ¿Por qué se escribieron en arameo estos versículos? Esta porción
está compuesta en gran parte por copias de cartas que funcionarios del gobierno dirigían a los
reyes y la respuesta a ellas. Esdras reprodujo tales documentos a partir de archivos escritos en
arameo, la lengua que en aquel entonces se usaba para asuntos diplomáticos y comerciales.
Otros pasajes de la Biblia escritos en este antiguo idioma semítico son Esdras 7:12-26,
Jeremías 10:11 y Daniel 2:4b–7:28.
Lecciones para nosotros:
1:2. Se cumplió lo que Isaías había profetizado unos doscientos años antes (Isaías 44:28).
Las profecías que contiene la Palabra de Jehová nunca fallan.
1:3-6. Al igual que los israelitas que se quedaron en Babilonia, muchos testigos de Jehová
no pueden ser ministros de tiempo completo o servir en lugares de mayor necesidad; pero
apoyan y animan a los que sí pueden, y hacen donaciones voluntarias para promover la obra
de predicar el Reino y hacer discípulos.
3:1-6. Los fieles repatriados ofrecieron su primer sacrificio en el séptimo mes del
año 537 antes de nuestra era (tisri, correspondiente a septiembre-octubre). Los babilonios
habían entrado en Jerusalén en el quinto mes (ab, correspondiente a julio-agosto) del año 607,
y dos meses después, la ciudad había quedado completamente deshabitada (2 Reyes 25:8-17,
22-26). Los setenta años de desolación terminaron en el momento predicho (Jeremías 25:11;
29:10). Todo lo que la Palabra de Jehová promete se cumple sin falta.
4:1-3. El resto fiel rechazó una oferta que habría significado formar una alianza religiosa con
adoradores falsos (Éxodo 20:5; 34:12). Del mismo modo, los siervos de Jehová de la actualidad
no participan en movimientos interconfesionales.
5:1-7; 6:1-12. Jehová puede dirigir los asuntos para el bien de sus siervos.
6:14, 22. Participar con celo en efectuar la voluntad de Jehová redunda en su aprobación y
bendición.
6:21. Al ver el progreso de la obra de Jehová, tanto los samaritanos que vivían en aquella
tierra como los judíos repatriados que se habían dejado llevar por las influencias paganas se
sintieron impulsados a efectuar algunos cambios necesarios. ¿No deberíamos nosotros
participar con entusiasmo en proclamar el Reino y en los demás aspectos de la labor que Dios
nos ha encomendado?
ESDRAS LLEGA A JERUSALÉN
(Esdras 7:1–10:44)
Es el año 468 antes de nuestra era y han pasado cincuenta años desde que se dedicó la
casa de Jehová reedificada. Esdras viaja de Babilonia a Jerusalén llevando consigo a un resto
del pueblo de Dios y contribuciones monetarias. ¿Qué encuentra al llegar?
Los príncipes le dicen: ―El pueblo de Israel y los sacerdotes y los levitas no se han separado
de los pueblos de los países en cuanto a sus cosas detestables‖. Además, ―la mano de los
príncipes y de los gobernantes diputados ha resultado ser prominente en esta infidelidad‖
(Esdras 9:1, 2). Esdras queda muy desconcertado, y se le anima a que ‗sea fuerte y actúe‘
(Esdras 10:4). A continuación toma medidas correctivas, a las que la gente responde
favorablemente.
Respuestas a preguntas bíblicas:
7:1, 7, 11. ¿Se refieren estos versículos al Artajerjes que detuvo las tareas de
construcción? No. Artajerjes es el nombre o título que designa a dos reyes persas. Uno de
ellos, Bardiya (o tal vez Gaumata), fue quien ordenó que dejaran de construir el templo en el
año 522. El otro, que vivió en la época en que Esdras regresó a Jerusalén, fue Artajerjes
Longimano.
7:28–8:20. ¿Por qué muchos de los judíos que vivían en Babilonia fueron reacios a ir
con Esdras a Jerusalén? Jerusalén aún estaba escasamente poblada, a pesar de que habían
pasado más de sesenta años desde que el primer grupo de judíos había regresado. Volver allí
significaba empezar una nueva vida en circunstancias incómodas y peligrosas. En aquel
entonces, la ciudad no prometía mucha prosperidad material a los judíos que quizás se habían
hecho ricos en Babilonia. Tampoco hay que olvidar el arriesgado viaje. Los que se mudaran
debían tener confianza absoluta en Jehová, celo por la adoración verdadera y valor. Hasta
Esdras se fortaleció gracias a que la mano de Jehová estuvo sobre él. Con el ánimo que este
siervo de Dios les infundió, 1.500 familias —quizás unas 6.000 personas— se prepararon para
el viaje. Y cuando Esdras tomó otras medidas, se les unieron 38 levitas y 220 netineos.
9:1, 2. ¿Representaba una amenaza muy grave casarse con la gente que vivía en
aquella tierra? La nación restaurada debía custodiar la adoración de Jehová hasta la llegada
del Mesías. Casarse con los otros habitantes del país suponía una seria amenaza para la
religión verdadera. Las alianzas matrimoniales que algunos judíos habían formado con
personas idólatras podrían haber llevado a que, con el tiempo, toda la nación fuera absorbida
por naciones paganas. La adoración pura quizás habría desaparecido de la Tierra. Entonces,
¿quiénes recibirían al Mesías? ¡Con razón Esdras se quedó atónito al ver lo ocurrido!
10:3, 44. ¿Por qué se despidió a los hijos junto con las esposas? La posibilidad de que
las esposas que habían sido despedidas regresaran habría sido mayor si sus hijos se hubieran
quedado. Además, por regla general, los niños pequeños necesitan el cuidado de sus madres.
Lecciones para nosotros:
7:10. Esdras nos dejó un excelente ejemplo, ya que fue un estudiante diligente y un buen
maestro de la Palabra de Dios. Cuando iba a consultar la Ley de Jehová, primero oraba para
preparar su corazón y luego examinaba atentamente lo que Jehová decía. Esdras aplicó lo que
aprendió y se esforzó por enseñar a los demás.
7:13. Jehová quiere siervos deseosos de adorarle.
7:27, 28; 8:21-23. Esdras atribuyó el mérito a Jehová, oró con fervor antes de emprender un
viaje largo y peligroso, y estuvo dispuesto a arriesgar su propia seguridad por la gloria de Dios.
Por todo ello, constituye un magnífico ejemplo para nosotros.
9:2. Hemos de tomarnos en serio la exhortación de casarnos ―solo en el Señor‖ (1 Corintios
7:39).
9:14, 15. Las malas compañías pueden hacer que perdamos el favor de Jehová.
10:2-12, 44. Los hombres que se habían casado con mujeres extranjeras se arrepintieron
humildemente y rectificaron su mal proceder. Tanto su actitud como sus acciones fueron
ejemplares.
NEHEMÍAS, LIBRO DE
CONTENIDO
Reacción de Nehemías al informe concerniente a las condiciones en Jerusalén (1:1-11).
o Visita a Susa de Hananí, el hermano de Nehemias, y de otros judíos; su
respuesta a la pregunta de Nehemías acerca de los judíos en el distrito
jurisdiccional de Judá (1:1-3).
o Nehemías se ve movido a darse al duelo, ayunar y orar (1:4-11).
Solicitud de Nehemías para ir a Jerusalén; se presenta oposición a la restauración del
muro de Jerusalén (2:1-4:23).
o A Nehemías se le otorga autorización real para ir a Judá; parte con jefes de la
fuerza militar y hombres de a caballo (2:1-10).
o A pesar de la oposición, se restaura el muro de Jerusalén (2:11-4:23).
Nehemías inspecciona el muro de noche(2:11-20).
Los que participaron en hacer reparaciones en varias secciones del muro
(3:1-32).
Se intensifica la oposición; Nehemías arma a los trabajadores para
enfrentarse a la amenaza del enemigo (4:1-23).
Nehemías insta a los judíos ricos a hacer restitución por haber cobrado incorrectamente
interés por préstamos a sus compañeros israelitas; gobernador desinteresado (5:1-19).
Los enemigos no tienen éxito en los complót contra Nehemías, pero, incluso después
que el muro es reedificado en 52 días, Tobías continúa amenazándole (6:1-19).
Acontecimientos que siguieron a la terminación del muro (7:1-12:47).
o Nehemías nombra porteros, coloca a Hananí y a Hananías al mando de Jerusalén
y da instrucciones acerca de la apertura y cierre de las puertas de la ciudad
escasamente poblada (7:1-4).
o Halla el libro del registro genealógico (7:5- 73).
o El pueblo es reunido en la plaza pública, cerca de la Puerta del Agua, y oye la
lectura de la Ley y las explicaciones (8:1-15).
o Sigue la fiesta de las cabañas (8:16-18).
o El 24 de Tisri (Etanim), aproximadamente dos días después de la fiesta de las
cabañas, se celebra otra asamblea (9:1-10:39).
Durante la asamblea, los israelitas hacen confesión de sus pecados y
escuchan un repaso de los tratos de Dios desde el tiempo en que escogió
a Abrán (9:1-37).
Se contrata un arreglo fidedigno y se autentica por sello; el pueblo se
compromete a abstenerse de alianzas matrimoniales con extranjeros, a
guardar los sábados y a apoyar los servicios del templo(9:38-10:39).
o Una de cada diez personas es designada por suertes para morar en Jerusalén; se
hace una lista de aquellos que moran en Jerusalén y en otros lugares;
información genealógica acerca de los sacerdotes y los levitas(11:1-12:26).
o Acontecimientos relacionados con la inauguración del muro de Jerusalén (12:27-
47).
Actividades posteriores al regreso de Nehemías a Jerusalén después de haber estado
ausente durante algún tiempo (13:1-31).
o Se lee la Ley al pueblo; la gente responde por medio de separarse de la
compañía mixta (13:1-3).
o Nehemías hace que se limpien los comedores en los patios del templo; se
encarga de que se dé apoyo material a los levitas y al templo; pone en vigor la
observancia del sábado; castiga a los que se han implicado en matrimonios
mixtos; y purifica y da asignaciones a los sacerdotes y a los levitas (13:4-31).
La adoración verdadera triunfa mediante la acción decisiva y la firme confianza en Jehová. Esa
es la esencia del libro de Nehemías. Es un vívido relato de la reedificación del muro de
Jerusalén bajo la valerosa dirección de Nehemías.
El libro abarca un período decisivo en el que comenzarían las 70 semanas de años que
llevarían a la aparición del Mesías. (Daniel 9:24-27.) El versículo de apertura y el relato escrito
en primera persona identifican claramente a Nehemías como el escritor. Este libro es una
continuación de Esdras y recoge la narración unos 12 años después de los sucesos que
Esdras registró.
Al leer este relato, podemos ver cómo Jehová dirige los sucesos maravillosamente a fin de
efectuar su voluntad. También, cómo él fortalece y consuela a sus siervos leales.
La mala situación de Jerusalén
Lea Nehemías 1:1–2:20. Nehemías, el copero del rey persa, se entera de que los muros de
Jerusalén todavía se hallan en ruinas y que la gente está ―en una situación muy mala‖.
Profundamente angustiado, Nehemías desahoga su corazón en oración fervorosa a Jehová. El
rey se da cuenta de su pesadumbre y por eso le da la oportunidad de viajar a Jerusalén para
ver lo que puede hacer para reedificar el muro de la ciudad.
· 1:1—¿En qué año tuvieron lugar estos sucesos?
Fue en el año vigésimo del rey Artajerjes (Longimano) (2:1). Puesto que en esta narración
primero se menciona el mes de Kislev (noviembre-diciembre) y luego el mes de Nisán (marzo-
abril), parece que los reyes persas contaban cada año de su reinado de otoño a otoño, aunque
también es posible que lo contaran desde el momento en que ascendían al trono. Tanto la
evidencia histórica confiable como el cumplimiento de ciertas profecías bíblicas señalan que el
mes de Nisán del año veinte de Artajerjes correspondió al del año 455 a. de la E.C. De modo
que Nehemías comenzó su relato en el otoño de 456 a. de la E.C., y el decreto de reedificar el
muro de Jerusalén se emitió en la primavera de 455 a. de la E.C.
· 2:4—¿Fue esta una oración repentina debido a su desesperación?
No, pues la condición devastada de Jerusalén había sido tema de las oraciones de Nehemías
―día y noche‖ por algún tiempo (1:4, 6). Cuando se le dio la oportunidad de hablar con el rey
Artajerjes acerca de su deseo de reedificar los muros de Jerusalén, Nehemías volvió a orar,
como tantas veces lo había hecho antes. La respuesta favorable de Jehová resultó en que
recibiera la comisión de reedificar los muros de la ciudad.
Lección para nuestro día: Nehemías buscó la dirección de Jehová. Al enfrentarnos a
decisiones de peso, nosotros también debemos ‗perseverar en la oración‘ y obrar en armonía
con la guía de Jehová. (Romanos 12:12.)
Se edifica el muro a pesar de la intriga
Lea 3:1–6:19. Cuando comienzan la edificación del muro, los adversarios se burlan y se mofan.
Más tarde, amenazan con atacar. Pero intrépidamente Nehemías exhorta a los trabajadores:
―Tengan presente a Jehová el Grande y el Inspirador de temor‖. La mitad de ellos hacen
guardia con lanzas y arcos, mientras que los demás trabajan con sus armas preparadas. ¡A
pesar de las amenazas e intrigas, los judíos completan el muro en 52 días!
· 3:5—¿Quiénes fueron los ―majestuosos‖?
Eran judíos prominentes de entre los habitantes o anteriores residentes de Teqoa, una ciudad
ubicada a unos 16 kilómetros (10 millas) al sur de Jerusalén. Probablemente estos
―majestuosos‖ eran muy orgullosos para humillarse bajo el mando de los superintendentes que
Nehemías había nombrado. (Compárese con Jeremías 27:11.)
· 4:17—¿En qué sentido trabajaron con una sola mano?
Los albañiles tendrían que utilizar ambas manos a fin de efectuar su trabajo. Por eso llevaban
las armas en la cadera (4:18). Los que llevaban las cargas podían fácilmente sostener una
espada en la mano y a la vez cargar receptáculos de tierra o escombros sobre el hombro o la
cabeza. (Génesis 24:15, 45.)
· 5:7—¿Por qué estaba mal la usura?
Era una violación directa de la ley de Jehová. (Levítico 25:36; Deuteronomio 23:19.) ―La
centésima‖, si se cobraba mensualmente, ascendería a un 12% al año (5:11). El pueblo ya
estaba en un terrible aprieto debido a la escasez de alimento y a la elevada tributación persa
(5:3, 4). Y aún así, los ricos cobraban despiadadamente altos intereses de sus hermanos
pobres.
· 6:5—¿Por qué le enviaron una ―carta abierta‖?
Las cartas confidenciales se solían colocar en bolsas selladas cuidadosamente. Por
consiguiente, Sanbalat pudo haber enviado una ―carta abierta‖ a Nehemías a modo de insulto.
O, puesto que otros podrían leer la acusación presentada en esa ―carta abierta‖, quizás
esperaba que Nehemías saliera de Jerusalén para defenderse de las acusaciones que se
habían levantado contra él. También es posible que Sanbalat haya esperado que la carta
alarmara tanto a los judíos que como resultado abandonarían la obra.
Lección para nuestro día: No debemos pensar que el trabajo duro es indigno para nosotros y
retraernos como lo hicieron los teqoítas ―majestuosos‖. Más bien, deberíamos imitar a los
demás teqoítas que efectuaron una tarea doble. (Nehemías 3:5, 27.)
Se revitaliza la adoración verdadera
Lea 7:1–10:39. Todo ese trabajo tiene un propósito en mira: restaurar la adoración verdadera.
Después de un censo, el pueblo se congrega para escuchar a Esdras y a otros levitas mientras
estos leen y exponen la Ley. Así, después de ―adquirir perspicacia‖ observan gozosamente la
Fiesta de las Cabañas. El pueblo ayuna y confiesa sus pecados y da pasos para corregir tales
errores.
· 7:6—¿Por qué difiere esta lista de la de Esdras?
Ambos relatos concuerdan con el hecho de que, aparte de los esclavos y cantores, la cantidad
total de los que regresaron fue de 42.360. (Esdras 2:64, 65; Nehemías 7:66, 67.) Pero existe
una diferencia en el número de los que regresaron según las familias en particular. Es muy
probable que Esdras y Nehemías hayan utilizado diferentes métodos para compilar sus listas.
Por ejemplo, es posible que uno haya alistado a los que se registraron para regresar, mientras
que el otro sólo a los que realmente regresaron. Algunos sacerdotes, y posiblemente otras
personas, no pudieron demostrar su linaje (7:64). Esto pudiera explicar por qué la suma total de
las listas individuales no corresponde con el total general de 42.360.
· 8:8—¿De qué manera ‗se puso significado‘ a la Ley?
Parece que, además de leer con énfasis y una buena pronunciación, Esdras y sus ayudantes
expusieron y aplicaron los principios de la Ley de manera que el pueblo pudiera entenderlos
mejor. Las publicaciones y reuniones bíblicas de los testigos de Jehová también sirven para
―ponerle significado‖ a la Palabra de Dios.
· 9:1—¿Por qué se vistieron de saco y tierra los israelitas?
El que se vistieran de saco —una prenda de vestir de color oscuro hecha de tejidos de pelo de
cabra— era una señal de tristeza. De manera similar, el poner tierra o ceniza sobre su cabeza
o cuerpo significaba gran lamento o humillación. (1 Samuel 4:12; 2 Samuel 13:19.) Los judíos lo
hicieron para demostrar el reconocimiento doloroso y humilde de sus pecados. Después de
esto hicieron un ‗contrato‘ de confesión, ―un arreglo fidedigno‖ (9:38). Del mismo modo,
humildemente debemos reconocer y confesar nuestros pecados para poder conservar nuestra
relación con Dios. (1 Juan 1:6-9.)
10:34—¿Mandaba la Ley hacer ofrendas de leña?
No, pero se necesitaba mucha leña para el fuego del altar. No debía haber muchos netineos —
personas no israelitas que eran esclavos del templo y ―recogedores de leña‖— entre los que
regresaron a Jerusalén. (Josué 9:23, 27.) De modo que, para asegurar que siempre hubiera
suficiente leña, se echaron suertes a fin de determinar qué división tribual debería proveerla
durante cierto tiempo en particular.
Lección para nuestro día: ―El gozo de Jehová‖ resultó de la perspicacia que adquirieron de la
Palabra de Dios, de aplicarla personalmente y responder a la dirección teocrática (8:10). Del
mismo modo, los testigos de Jehová reconocen la importancia del estudio personal, el asistir
con regularidad a las reuniones, y el ministerio del campo a fin de mantener un espíritu de
gozo.
Inauguración gozosa
Lea 11:1–12:47. Jerusalén necesitaba tener una población mayor para continuar como centro
de la adoración verdadera. Aparte de los que se ofrecieron de voluntarios, se escogió por
sorteo una persona de cada diez de las que moraban fuera de la ciudad para mudarse a la
ciudad. Entonces inauguraron el muro de la ciudad con una procesión gozosa. Se ofrecieron
muchos sacrificios y a la distancia se podía oír el regocijo de la gente.
· 11:2—¿Por qué se ―bendijo‖ a los que se ofrecieron voluntariamente?
El dejar sus posesiones hereditarias y mudarse a Jerusalén pudo haber resultado en gastos y
ciertamente en desventajas. Además, los que moraban en la ciudad tal vez estaban expuestos
a diversos peligros. Bajo tales circunstancias, el resto del pueblo consideró que estos
voluntarios eran dignos de encomio y, sin duda, oraron para que Jehová los bendijera.
· 12:27—¿Cuándo se inauguró el muro?
El muro quedó completado el día 25 del sexto mes, Elul, del año 455 a. de la E.C. y, al mes
siguiente, se celebraron grandes reuniones (6:15; 8:2; 9:1). La inauguración probablemente fue
el punto culminante de aquella ocasión gozosa.
Lección para nuestro día: El espíritu servicial y las expresiones de gratitud a Jehová mediante
cantos y música fueron conmovedores. Hoy día, tanto en asambleas como en otras ocasiones,
los testigos de Jehová ofrecen voluntariamente sus servicios para el provecho de otras
personas y de todo corazón cantan alabanzas a Dios.
Se elimina la inmundicia
Lea 13:1-31. Al regresar de un viaje que hizo a la corte persa, Nehemías se inquieta por lo que
ha ocurrido durante su ausencia. Inmediatamente se dispone a corregir los problemas que han
surgido.
· 13:3—¿De quiénes se componía la ―compañía mixta‖?
Parece que la ―compañía mixta‖ se componía de extranjeros, como los moabitas y los
ammonitas, y de los hijos de los israelitas que se habían casado con extranjeras (13:1, 2).
Acuérdese que anteriormente los judíos habían despedido a las esposas extranjeras junto con
sus hijos. (Esdras 10:44.) Nuevamente los judíos habían tomado esposas extranjeras, y por
eso hubo la necesidad de excluir a dichas mujeres y a sus hijos de la comunidad, de la nación
misma, y así del privilegio de adorar con el pueblo de Jehová. (Nehemías 13:23-31.)
Lección para nuestro día: Los reincidentes judíos son un ejemplo amonestador para nosotros.
Siempre debemos ser vigilantes y estar en guardia contra caer en el materialismo, la corrupción
y la apostasía.
Vez tras vez el libro de Nehemías pone de relieve el siguiente principio: ―A menos que Jehová
mismo edifique la casa, de nada vale que sus edificadores hayan trabajado duro en ella‖.
(Salmo 127:1.) La lección fundamental que aprendemos es que tendremos éxito en todas
nuestras empresas solo si contamos con la bendición de Jehová. Y podemos tener esa
bendición si mantenemos la adoración verdadera en primer lugar en nuestra vida.
ESTER, LIBRO DE
CONTENIDO
Después de una descripción breve del marco, el capítulo 1 presenta una escena que
transcurre en el patio del jardín del palacio del rey donde se está celebrando un gran
banquete para toda la gente de Susa el castillo. En plena fiesta, el rey Asuero le ordena
a la reina Vasti que se presente y que muestre al pueblo y a los príncipes su belleza.
Ante la persistente negativa de ella, y por recomendación de sus príncipes, él la
destituye y hace proclamar la destitución a todos los pueblos del imperio.
Según el capítulo 2, se hacen preparativos para reunir en Susa el castillo a todas las
vírgenes hermosas del imperio y darles un tratamiento de belleza antes de presentarlas
al rey. De entre ellas, el rey habrá de elegir a su nueva reina. La elección recae sobre
una muchacha judía llamada Ester, prima de Mardoqueo, quien cuida de ella y es un
siervo en la puerta del rey.
El capítulo 3 relata el ascenso de Hamán y cómo él consigue la autorización del rey
para promulgar un decreto que ordene la destrucción de todos los judíos del imperio.
A continuación, en el capítulo 4, Mardoqueo aconseja y exhorta a Ester para que
interceda por su pueblo, aunque el hacerlo signifique poner en peligro su propia vida.
(Est. 4:2-17.)
En el capítulo 5,sin haber sido llamada, Ester se presenta delante del rey para invitarle
a él y a Hamán a un banquete ese día. Después del banquete, el relato prosigue en la
casa de Hamán, donde este y un grupo de amigos están reunidos. Todos se confabulan
para erigir un madero de cincuenta codos de altura en el que colgar a Mardoqueo. (Est.
5:1-14.)
Ahora en el capítulo 6,Hamán se presenta ante el rey para pedirle que cuelgue a
Mardoqueo. En cambio, el rey hace que Hamán tenga que honrar a Mardoqueo por el
servicio que ha prestado al desenmascarar un complót contra su vida. Hamán se ve
obligado a vestir a Mardoqueo con ropaje real y a llevarle alrededor de la plaza de la
ciudad montado sobre un caballo y diciendo a voces: ―Así se le hace al hombre en cuya
honra el rey mismo se ha deleitado‖. Después de esta humillante experiencia, Hamán
regresa apresuradamente a su casa. (Est. 6:4-14.)
En el capítulo 7,vemos que en los aposentos de Ester se lleva a cabo un segundo
banquete. Ante la acuciante demanda del rey, Ester descubre a Hamán como el
instigador de la maquinación para exterminar a todos los judíos del imperio, entre los
que se encontraba ella misma. Después de esto, el rey hace colgar a Hamán en el
madero preparado para Mardoqueo. (Est. 7:1-10.)
Ya en el capítulo 8 encontramosque puesto que el decreto de muerte para los judíos era
inalterable según la costumbre medopersa, se promulga otro decreto contrario al
primero, permitiendo a los judíos defenderse. (Est. 8:1-17.)
El capítulo 9 cuenta cómo los judíos destruyen a sus enemigos en Susa y en todas las
provincias. Asimismo, los diez hijos de Hamán son ejecutados y colgados. Mardoqueo y
Ester ordenan que se conmemore anualmente esta liberación los días 14 y 15 de Adar,
llamados los días de Purim, debido al Pur, o suerte, usado por Hamán como forma de
adivinación para elegir el momento propicio de destruir a los judíos.
El capítulo 10 concluye el relato haciendo una breve mención de la grandeza de
Mardoqueo y su arduo trabajo a favor de su pueblo.
La matanza será de una eficacia escalofriante: jóvenes y ancianos, niños y mujeres serán
aniquilados sin excepción. Nadie se atreverá a oponerse a la trama, porque la orden de
ejecución lleva el sello del rey. ¡Sí, los judíos morirán como ganado indefenso!
Por lo menos, así es como ve las cosas Hamán, primer ministro en la antigua Persia. Él ha
urdido este asesinato en masa por el odio que le tiene a Mardoqueo, el judío. Pero mientras
Hamán espera satisfecho su victoria, la nación judía ora por su liberación. ¿El resultado? Se
revela en el dramático libro bíblico de Ester. El libro, escrito por Mardoqueo, es un relato que
fortalece la fe al mostrar cómo la ayuda divina y la fe de una joven mujer salvaron a una nación.
Ester llega a ser reina
Sírvase leer Ester 1:1–2:23. Alrededor de 484 a. de la E.C., Asuero, el rey de Persia (Jerjes I),
convoca un gran banquete. Pero, ante el requerimiento del rey, la reina Vasti rehúsa
presentarse. El rey, enfurecido, la despoja de su posición y se propone conseguir una nueva
reina. Después de examinar a las mujeres más hermosas del reino, escoge a una judía
modesta llamada Hadassá, quien ha sido preparada por su primo Mardoqueo para desempeñar
este papel. La joven oculta el hecho de que es judía valiéndose de su nombre persa, Ester.
· 1:3-5—¿Por qué se celebraron estas fiestas?
De acuerdo con el historiador Heródoto, en una ocasión Jerjes convocó una asamblea para
planear una campaña militar contra Grecia. Puede que esta haya sido esa reunión.
Probablemente, Jerjes hizo alarde de la gloria y las riquezas de su reino para convencer a los
nobles de que él podía llevar a cabo la campaña griega.
· 1:8—¿En qué consistía la ley sobre la bebida?
Parece que en tales reuniones los persas tenían por costumbre instarse unos a otros a beber
una determinada cantidad. No obstante, el rey hizo una excepción en esta ocasión. La Biblia no
dice si esto resultó en que se bebiera con más moderación o con desenfreno.
· 2:19, 20—¿Por qué estaba Mardoqueo ―sentado en la puerta del rey‖?
Seguramente Mardoqueo era uno de los funcionarios del rey Asuero. Por lo general, tales
hombres de autoridad se sentaban a la puerta, y esperaban para dar respuesta a alguna
petición real. El puesto de Mardoqueo tuvo que haber sido de mucha responsabilidad. De otra
manera, Hamán posiblemente hubiera podido despedirlo de inmediato. Por lo tanto, Mardoqueo
estuvo en posición de enterarse de un complot para asesinar al rey y de hacerlo fracasar.
Lección para nuestro día: Ester demostró el valor de la modestia al no pedir joyas ni ropa
elegante antes de comparecer ante la presencia del rey. Ella dejó que la persona secreta de su
corazón, junto con un ―espíritu quieto y apacible‖, se ganara el favor del rey. (1 Pedro 3:1-5.) De
manera similar, los del resto ungido que han sido recogidos desde 1919 en adelante han
ganado el favor del Rey Jesucristo.
La conspiración de Hamán
Lea 3:1–5:14. Asuero nombra primer ministro a un amalequita llamado Hamán. Pero
Mardoqueo, teniendo presente que Jehová había resuelto ‗tener guerra con Amaleq de
generación en generación‘, rehúsa postrarse ante Hamán. (Éxodo 17:8-16.) Para vengarse, ¡el
orgulloso Hamán persuade al rey para que aniquile a los judíos!
Mardoqueo le pide a Ester que intervenga, recordándole que, si ella se mantiene callada, ―alivio
y liberación mismos se levantarán para los judíos de algún otro lugar‖. Debido a que el destino
del pueblo de Jehová y su juicio contra los amalequitas están en juego, Mardoqueo está
convencido de que Dios proveerá escape. (1 Samuel 12:22.) Ester se acerca al rey sin ser
invitada... ¡potencialmente una ofensa capital! Sin embargo, Asuero le concede la vida y asiste
a un banquete que ella celebra. Al regresar a su hogar, Hamán, enfurecido otra vez debido a
que Mardoqueo rehúsa rendirle homenaje, planea ejecutarlo.
· 3:7—¿Qué estaba implicado en echar Pur?
―Pur‖ parece ser una palabra persa cuyo significado es ―suerte‖. Los astrólogos a menudo
echaban suertes como una forma de adivinación. Probablemente, esto se hizo para determinar
el tiempo más propicio para que Hamán llevara a cabo su plan de genocidio.
· 4:3—¿Por qué ayunaron Mardoqueo y los judíos?
Debido a que se acercaba una calamidad nacional, era tiempo de pensamientos graves y
sombríos. (Eclesiastés 3:4.) Necesitaban urgentemente la guía divina. El ayuno indicaba que se
dirigían a Jehová por la fortaleza y sabiduría que les hacía falta. Cuando usted se enfrenta a
pruebas, ¿se dirige a Dios en oración también? (Hebreos 5:7.)
· 5:6-8—¿Por qué se demoró Ester en informar al rey?
A Ester ciertamente no le falló el valor, pues ella había arriesgado su propia vida. No obstante,
es probable que primero quisiera ganarse un buen nombre ante el rey. Por lo tanto, lo invitó a
un segundo banquete. La dirección divina también estaba presente en el asunto, pues el
intervalo de tiempo entre ambos banquetes dio lugar a que se desarrollaran ciertos
acontecimientos.
Lección para nuestro día: Ester demostró fe, valor y una buena disposición de aplicar el
consejo de Mardoqueo. Los que han llegado a formar parte del resto ungido desde 1919 han
demostrado fe, valor y una buena disposición como la de Ester, de trabajar con los miembros
de la novia de Cristo de antes de 1919. ¡Son realmente ejemplos excelentes!
Queda frustrado el complot
Lea 6:1–7:10. Asuero sufre un insomnio que sin duda fue inducido divinamente. Tal vez
pensando que en algo había fallado, hizo que le leyeran del libro de los registros, tal vez el
diario real. Al darse cuenta de que Mardoqueo no ha sido recompensado por haber descubierto
un complot de asesinato, el rey pide que Hamán sugiera una recompensa apropiada. Hamán,
suponiendo que será él quien recibirá la honra, propone una ceremonia detallada. ¡Pero queda
horrorizado cuando se le manda colmar con dichos honores a Mardoqueo! Los consejeros de
Hamán consideran esto como un presagio de su caída.
Sin haberse repuesto aún de esta experiencia humillante, Hamán es escoltado al segundo
banquete de Ester. Allí el monarca invita a Ester a hacer una petición. La reina valerosa ruega:
―Que se me dé mi propia alma por petición mía, y mi pueblo por solicitud mía‖. Al revelar que es
judía, ella expone el complot de Hamán. El aterrorizado Hamán implora por su vida pero es
ejecutado en cambio... ¡en el mismo madero que había preparado para Mardoqueo!
· 7:4—¿Por qué perjudicaría al rey la destrucción de los judíos?
Si Hamán hubiera tramado vender a los judíos como esclavos, esto probablemente hubiera
resultado en gran lucro para Asuero. Pero la destrucción de todo un pueblo hubiera resultado
en una pérdida financiera mucho mayor que los 10.000 talentos de plata que Hamán había
prometido pagar. De haber triunfado el complot de genocidio, el rey hubiera perdido a su
reina... ¡verdaderamente, un perjuicio muy personal!
· 7:8—¿Por qué cubrieron el rostro de Hamán?
Hamán no cubrió su propio rostro en muestra de vergüenza ni remordimiento. Los oficiales de
la corte cubrieron su rostro, posiblemente como un símbolo de vergüenza o condenación. Es
probable que este fuese el primer paso que se daba cuando se ejecutaba la pena de muerte.
Lección para nuestro día: Aunque arriesgó su vida, Ester valerosamente reveló que era judía.
De manera similar, desde 1931, el pueblo de Dios se ha arriesgado a la persecución al
proclamarse testigos de Jehová. (Isaías 43:10-12.) ¿Es usted igualmente valeroso?
¡Se libera al pueblo de Dios!
Lea 8:1–10:3. Mardoqueo llega a ser el primer ministro en lugar de Hamán. Arriesgando su vida
de nuevo, Ester se acerca al rey sin haber sido invitada e implora que se den pasos para
deshacer la trama de Hamán. El monarca concuerda y permite que Mardoqueo dicte un decreto
en su nombre, Asuero, para contrarrestar el anterior. Aunque, según la costumbre persa, la
orden de exterminación previa no puede cancelarse, la nueva ley permite a los judíos
defenderse.
¡Prorrumpe el júbilo entre los judíos! Ya no son víctimas indefensas; ahora tienen varios meses
para organizar su defensa. Finalmente, llega el 13 de Adar (febrero-marzo). Los judíos dan
muerte a unos 75.000 ‗que buscan su perjuicio‘. Para que no olviden que esta victoria es de
Jehová, Mardoqueo decreta que la fiesta anual de Purim se observe el 14 y 15 de Adar.
· 8:5—¿Cómo demostró discernimiento Ester?
Ester pesó cuidadosamente sus palabras al suplicar al rey que deshiciera los documentos del
tramador Hamán, ―que él escribió‖. Discretamente, ella evitó cualquier referencia a la
responsabilidad del rey en este asunto. De manera similar, los cristianos ejercen discreción
cuando testifican ante funcionarios gubernamentales.
· 8:17—¿Cómo se ‗declararon judíos‘ aquellas personas?
La Versión de los Setenta dice que los persas ―se estaban circuncidando y judaizando‖. Es
evidente que consideraron el decreto de Asuero que contrarrestó el otorgado a Hamán, como
una señal de apoyo divino a favor de los judíos y, por esa razón, muchos persas llegaron a ser
judíos prosélitos. De igual manera hoy día, ―una gran muchedumbre‖ de ―otras ovejas‖ ha
tomado su posición al lado del resto ungido. (Revelación 7:9; Juan 10:16; Zacarías 8:23.)
· 9:10, 15, 16—¿Por qué no se llevaron el botín los judíos?
El decreto del rey los autorizaba a llevarse el botín. No obstante, al rehusarlo, pusieron de
manifiesto que su propósito era protegerse, no enriquecerse.
Lección para nuestro día: Al igual que los judíos del día de Ester, los testigos de Jehová
apelan correctamente a los gobiernos y a los tribunales cuando requieren protección contra sus
enemigos. Esto fue necesario especialmente durante la II Guerra Mundial, debido a los ataques
instigados por el clero contra el pueblo de Dios. Con la bendición de Jehová, muchas batallas
importantes han sido ganadas en los tribunales.
El libro de Ester sirve como una fuente de esperanza y ánimo para los testigos de Jehová hoy
día. Ellos saben que el odio intenso que Satanás les tiene pronto culminará en un intento
supremo por exterminarlos. Exactamente cómo los protegerá Jehová, todavía está por verse.
(Ezequiel 38:16-23.) Pero así como en el día de Ester, confían en que Jehová no abandonará a
su pueblo. Al tiempo debido, él les proveerá ―alivio y liberación‖.
*** w06 1/3 págs. 8-11 Puntos sobresalientes del libro de Ester ***
LA REINA TIENE QUE INTERCEDER
(Ester 1:1–5:14)
En el tercer año de su reinado (493 antes de nuestra era), Asuero celebra un banquete en su
palacio. La reina Vasti, famosa por su belleza, pierde el favor del rey y es despojada de su
título. Una judía de nombre Hadassá es elegida de entre todas las vírgenes hermosas del país
para sustituirla. Obedeciendo las instrucciones de su primo Mardoqueo, ella oculta su
nacionalidad judía y emplea su nombre persa, Ester.
Con el tiempo, un hombre altivo llamado Hamán es elevado al cargo de primer ministro.
Furioso porque Mardoqueo no ‗se inclina ni se postra‘ ante él, trama un plan para acabar con
todos los judíos del Imperio persa (Ester 3:2). Hamán convence a Asuero para que emita un
decreto ordenando el exterminio. Mardoqueo se viste de ―saco y ceniza‖ (Ester 4:1). Ha llegado
el momento de que Ester intervenga. La reina organiza un banquete privado en honor del rey y
el primer ministro, al que ellos asisten con gusto. Entonces, les pide que vuelvan al banquete
que les preparará al otro día. Hamán se siente muy complacido. No obstante, se encoleriza
cuando ve que Mardoqueo se niega a honrarlo, y hace planes para matarlo antes del banquete
del día siguiente.
Respuestas a preguntas bíblicas:
1:3-5. ¿Duró la fiesta ciento ochenta días? El texto no dice que el banquete durara todo
ese tiempo, pero sí dice que el rey mostró a los oficiales las riquezas y el esplendor de su reino
durante ciento ochenta días. Puede ser que el rey se valiera de este prolongado evento para
hacer alarde de la gloria de su imperio a fin de impresionar a los nobles y convencerlos de su
capacidad para llevar a cabo sus planes. Si este fue el caso, los versículos 3 y 5 pudieran
referirse al banquete de siete días que se ofreció al final de la reunión de ciento ochenta días.
1:8. ¿En qué sentido ―no había nadie que obligara‖ ―en cuanto al tiempo de beber
conforme a la ley‖? En esta ocasión, el rey Asuero hizo una excepción a lo que, según
parece, era la costumbre persa de animarse unos a otros a beber una cantidad determinada en
tales reuniones. Por eso, durante este banquete, ―podían beber tanto o tan poco como
quisieran‖, dice un comentario bíblico.
1:10-12. ¿Por qué se negó la reina Vasti a presentarse ante el rey? Algunos eruditos
piensan que lo hizo para no rebajarse ante los invitados borrachos del rey. O tal vez esta reina
de gran belleza externa no era realmente sumisa. Aunque la Biblia no explica el motivo, los
sabios de la época vieron en el asunto un problema de desobediencia al esposo y consideraron
que el mal ejemplo de Vasti influiría en todas las esposas de las provincias persas.
2:14-17. ¿Tuvo Ester relaciones sexuales inmorales con el rey? La respuesta es no.
El relato dice que las mujeres que eran conducidas ante el rey regresaban por la mañana a la
segunda casa, que estaba a cargo del eunuco del rey, ―el guardián de las concubinas‖. Las
mujeres que pasaban la noche con el rey se convertían en sus concubinas, o esposas
secundarias. Sin embargo, Ester no fue llevada a la casa de las concubinas después de
presentarse ante el rey. Cuando estuvo ante Asuero, ―el rey llegó a amar a Ester más que a
todas las demás mujeres, de manera que ella se granjeó más favor y bondad amorosa ante él
que todas las demás vírgenes‖ (Ester 2:17). ¿Cómo se granjeó ella el ―favor y [la] bondad
amorosa‖ de Asuero? De la misma manera como se había ganado a otras personas. ―La joven
fue grata a los ojos de [Hegai], de modo que se granjeó bondad amorosa ante él.‖ (Ester
2:8, 9.) Hegai la favoreció estrictamente por lo que observó en ella, es decir, su apariencia y
sus buenas cualidades. De hecho, ―Ester continuamente se granjeaba favor a los ojos de todos
los que la veían‖ (Ester 2:15). De igual manera, el rey quedó impresionado por lo que vio en
Ester y llegó a amarla.
3:2; 5:9. ¿Por qué se negó Mardoqueo a inclinarse ante Hamán? No estaba mal que los
israelitas reconocieran la posición de una persona encumbrada postrándose ante esta. Sin
embargo, había algo más implicado en el caso de Hamán. Este era agaguita, probablemente
amalequita, y Jehová había predicho que Amaleq sería exterminado (Deuteronomio 25:19).
Para Mardoqueo, inclinarse ante Hamán era un asunto de lealtad a Jehová, por lo que rehusó
de plano hacerlo, indicando que era judío (Ester 3:3, 4).
Lecciones para nosotros:
2:10, 20; 4:12-16. Ester aceptó la guía y los consejos de un siervo maduro de Jehová.
En nuestro caso, el proceder sabio es ser ―obedientes a los que llevan la delantera‖ entre
nosotros y ser ―sumisos‖ (Hebreos 13:17).
2:11; 4:5. No debemos ‗vigilar con interés personal solo nuestros propios asuntos, sino
también los de los demás‘ (Filipenses 2:4).
2:15. Ester mostró modestia y autodominio al no pedir más joyas ni ropa más fina de las que
le dio Hegai. Fue ―la persona secreta del corazón en la vestidura incorruptible del espíritu quieto
y apacible‖ lo que hizo que Ester se granjeara el favor del rey (1 Pedro 3:4).
2:21-23. Ester y Mardoqueo fueron buenos ejemplos de ―sujeción a las autoridades
superiores‖ (Romanos 13:1).
3:4. En algunos casos quizás sea prudente no revelar nuestra identidad, al igual que Ester.
No obstante, cuando hay que adoptar una postura firme sobre asuntos importantes, como la
soberanía de Jehová y nuestra integridad, no debemos tener miedo de dar a conocer que
somos testigos de Jehová.
4:3. Cuando afrontamos pruebas, debemos pedir a Jehová que nos dé fortaleza y sabiduría.
4:6-8. Mardoqueo buscó una solución legal a la amenaza creada por la conspiración de
Hamán (Filipenses 1:7).
4:14. La confianza que Mardoqueo tenía en Jehová es digna de imitar.
4:16. Con plena confianza en Jehová, Ester afrontó fiel y valerosamente una situación que
pudo haberla conducido a la muerte. Es de vital importancia que aprendamos a confiar en
Jehová, y no en nosotros mismos.
5:6-8. Para ganarse el favor de Asuero, Ester lo invitó a un segundo banquete. Obró con
prudencia, y nosotros debemos hacer lo mismo (Proverbios 14:15).
UN CONTRATIEMPO TRAS OTRO
(Ester 6:1–10:3)
A medida que se desarrolla la trama, se invierten los papeles. Hamán muere en la horca que
ha levantado para Mardoqueo, y el que iba a ser la víctima termina convirtiéndose en primer
ministro. ¿Y el exterminio planeado contra los judíos? Esto también da un giro espectacular.
La fiel Ester se expresa de nuevo. A riesgo de perder la vida, comparece ante el rey
suplicándole que encuentre la manera de deshacer la maquinación de Hamán. Asuero
interviene de inmediato, de modo que cuando finalmente llega el día de la masacre, los que
terminan muertos no son los judíos, sino los que procuran hacerles daño. Mardoqueo decreta la
celebración anual de la fiesta de Purim para conmemorar esta gran liberación. Como segundo
en importancia después del rey Asuero, Mardoqueo ‗trabaja para el bien de su pueblo y habla
paz a toda la prole de ellos‘ (Ester 10:3).
Respuestas a preguntas bíblicas:
7:4. ¿Cómo es posible que la aniquilación de los judíos resultara en ―perjuicio para el
rey‖? Ester destacó que la destrucción de los judíos perjudicaría al rey cuando mencionó con
prudencia la posibilidad de que fueran vendidos como esclavos, en lugar de ser aniquilados.
Las 10.000 piezas de plata que Hamán había prometido era mucho menos de lo que la
tesorería real habría ganado si Hamán hubiera tramado vender a los judíos como esclavos.
La ejecución del complot también habría significado que el rey perdiera a la reina.
7:8. ¿Por qué cubrieron el rostro de Hamán los oficiales de la corte? Quizá lo hicieron
como señal de vergüenza o para indicar que le esperaba la muerte. Cierta obra señala que ―en
la antigüedad a veces se les cubría la cabeza a los que estaban a punto de ser ejecutados‖.
8:17. ¿En qué sentido ―se declaraban judíos‖ ―muchos individuos de los pueblos del
país‖? Muchos persas aparentemente se hicieron prosélitos judíos porque concluyeron que el
que se hubiera contrarrestado el decreto anterior indicaba que los judíos contaban con el favor
divino. El mismo principio es aplicable en el cumplimiento de la siguiente profecía que se halla
en el libro de Zacarías: ―Diez hombres de todos los lenguajes de las naciones asirán, sí,
realmente asirán la falda de un hombre que sea judío, y dirán: ‗Ciertamente iremos con
ustedes, porque hemos oído que Dios está con ustedes‘‖ (Zacarías 8:23).
9:10, 15, 16. Aunque el decreto autorizaba el saqueo del botín, ¿por qué no lo hicieron
los judíos? Su negativa indicó claramente que su objetivo era protegerse, no enriquecerse.
Lecciones para nosotros:
6:6-10. ―El orgullo está antes de un ruidoso estrellarse; y un espíritu altivo, antes del
tropiezo.‖ (Proverbios 16:18.)
7:3, 4. ¿Nos identificamos valerosamente como testigos de Jehová, aunque hacerlo pudiera
resultar en persecución?
8:3-6. Podemos y debemos recurrir a las autoridades y a los tribunales en busca de
protección contra nuestros enemigos.
8:5. Ester fue sensata al no mencionar la responsabilidad que el rey tenía en el decreto
concebido para aniquilar a su pueblo. De igual manera, nosotros debemos ser prudentes
cuando damos testimonio a dirigentes destacados.
9:22. No debemos olvidar a los pobres entre nosotros (Gálatas 2:10).
JOB, LIBRO DE
CONTENIDO
La cuestión que surgió (1:1-2:10).
o Job, su casa y sus riquezas (1:1-3).
o Desempeña el papel de sacerdote para su familia (1:4, 5).
o Satanás desafia a Jehová en el asunto de la integridad de Job y Sus tratos con él
(1:6-12; 2:1-5).
A Satanás se le permite destruir la pro piedad y a los hijos de Job (1:13-
19).
Job mantiene integridad (1:20-22).
A Satanás se le permite herir a Job con una enfermedad, pero no quitarle
la vida(2:6-10).
La esposa de Job ridiculiza su ―integridad‖.
Job la reprende; permanece fiel.
Primer turno del debate con los compañeros(2:11-14:22).
o Elifaz, Bildad y Zofar se encuentran después de haberse citado, se lamentan por
Job y observan durante siete días su intenso sufrimiento (2:11-13).
o La queja de Job: Maldice el día en que nació; desearía no haber nacido o dejar de
existir; se pregunta por qué permite Dios que siga viviendo (3:1-26).
o Elifaz acusa a Job de haber pecado(4:1-5:27).
Ridiculiza la ―integridad‖ de Job; habla del mensaje recibido de un ―espíritu‖
que dice que Dios no tiene fe en los mensajeros angélicos y que no está
interesado en la integridad del hombre (4:1-21).
Da a entender que los problemas de Job son el resultado de su pecado;
dice que Job debería confesarse ante Dios, aceptar su disciplina; entonces
Dios le redimiría, haría que prosperara y le protegería; luego, añade:
nosotros hemos hallado esto por medio de investigación (5:1-27).
o Job no entiende la cuestión (6:1-7:21).
Job responde que está justificado para clamar, como lo haría cualquier
criatura; desea morir; sus compañeros le han decepcionado, han resultado
traicioneros e inútiles; él no les pide que lo rescaten, sino que está
dispuesto a aceptar que lo instruyan en el caso de que la reprensión tenga
razón de ser; ¿pueden mostrar que hay injusticia en lo que él habla? (6:1-
30).
Job ha sufrido mucho esperando la muerte, la inexistencia venidera; se
pregunta por qué Dios está tan pendiente de él, haciendo de él su blanco
constante; él no es peligroso; y aun si ha pecado, no podría llevar a cabo
nada contra Dios; es una cuestión que Job no entiende (7:1-21).
o Bildad dice que la calamidad de Job es el resultado de su pecado; arguye que
Dios no castigaría a Job si no hubiese pecado; dice que los hijos de Job
recibieron la muerte por sus pecados; para obtener una respuesta, le dice a Job
que busque la respuesta en la tradición de generaciones anteriores; insinúa que
Job es un apóstata que confía en una esperanza falsa: si continúa en ese
derrotero, acabará mal (8:1-22).
o Dios actúa con su creación de acuerdo con su voluntad (9:1-10:22).
Job sabe que Dios no es injusto; Dios no tiene que darle cuentas al
hombre; Job sabe que no puede contender contra Dios con éxito, contra
todo su poder y sabiduría. Jehová permite que los inicuos gobiernen y los
jueces juzguen injustamente; si Él no lo hace, ¿quién entonces? Job sabe
que no puede discutir con Dios poniéndose a la misma altura; sería una
derrota segura; necesita a alguien entre ellos, a un mediador (9:1-35).
Job le pregunta a Dios por qué contiende contra él; Dios no lo considera
desde el punto de vista humano; tiene una razón superior. Pero Job afirma
que él no está equivocado; le pide a Dios que recuerde que Él le dio forma
con gran cuidado; por lo tanto Job no puede entender por qué ahora Dios
parece acosarle con sufrimiento; pide que se le libre de la mirada de Dios
para que antes de morir pueda alegrarse un poco (10:1-22).
o Zofar acusa a Job de habla vacía; a pesar de que Job alega que es limpio,
debería dar- se cuenta de que merece más de lo que está recibiendo; dice que
Job no puede sondear las cosas profundas de Dios; de hecho,asemeja a Job a
una cebra joven en cuanto a no tener un buen motivo; anima a Job a que deje la
injusticia;entonces tendrá seguridad, brillantez, paz y amigos; advierte a Job que,
de otra manera, tendrá consecuencias terribles (11:1-20).
o El poder de Jehová y la debilidad del hombre (12:1-14:22).
Sarcásticamente, Job dice que sus compañeros son los hombres que
poseen toda la sabiduría; luego afirma que él tiene un buen motivo y que
no es inferior a ellos, pero que ha llegado a ser un hazmerreír; añade que
incluso los animales sienten el efecto de que Jehová permita que las cosas
sean como son, y los inicuos no sufren por su iniquidad. Además, la
sabiduría de los hombres de edad está sujeta a ser pesada y probada,
pero en Jehová residen toda la sabiduría y el poder; Él puede hacer que
los reyes y los jueces se extravíen o se vuelvan necios; permite que las
naciones prosperen (y que parezcan poderosas contra Él) a fin de
derrumbarlas (12:1-25).
Job está contento de presentar su caso ante Dios, pero los compañeros
han habla do falsamente y no han servido de ayuda; sería sabio que se
mantuviesen en silencio; consideran a Dios como a un hombre; muestran
parcialidad al pretender abogar por la causa de Dios contra Job, a quien no
pueden culpar de ser un pecador craso; Job empieza a expresar más
confianza en Dios y en el juicio que Él conducirá respecto a su inocencia;
le pide a Dios que le muestre cuáles son sus pecados y que no le
considere como enemigo (13:1-28).
La humanidad [ el pecado de Adán] es de vida corta, y todos han sido
inmundos debido a la inmundicia de los padres; el árbol cortado retoñará
de nuevo, pero cuando el hombre muere, vuelve al polvo y entra en un
―sueño‖. Sin embargo, Job pide ir a la sepultura sólo hasta el tiempo
establecido por Dios para actuar con bondad amorosa para con él y
hacerle vivir de nuevo; describe cómo se consume el hombre mortal de
manera que no sabe nada, sea bueno o malo (14:1-22).
Segundo turno del debate (15:1-21:34).
o Elifaz ridiculiza la alegación de integridad de Job (15:1-35).
Acusa a Job de responder con un conocimiento que es como el viento;
afirma que no tiene temor de Dios, y que habla erróneamente; dice que los
compañeros de Job saben tanto como él; de hecho, Elifaz llama la atención
a la sabiduría de los hombres de edad, a la tradición, como si la de ellos
fuese más grande que la de Job; él añade: ― las consolaciones de Dios por
Elifaz y sus amigos no te bastan. Afirma que Job se está volviendo contra
Dios, como lo muestran sus palabras. Acusa incorrectamente a Dios de no
tener fe en sus santos y de ver los cielos como inmundos; ridiculiza la
alegación de integridad de Job e insinúa que es detestable y corrompido
(15:1-16).
Sostiene que uno que sufre es inicuo, e indirectamente dice que Job
intenta mostrarse superior a Dios; describe mal fin que le vendrá a esa
persona y a su descendencia; concluye insinuando que Job es apóstata,
sobornador, perjudicial y engañoso (15:17-35).
o Job dice que nadie le ayuda ni consuela(16:1-17:16).
Afirma que él podría hablar de una manera no reconfortante si ellos
estuvieran en su situación, pero que no lo haría; más bien, les fortalecería;
dice que Dios le entrega a sus adversarios. Hasta los muchachos lo
maltratan.
Dios lo convierte en su blanco. No obstante, él cuenta con Dios como testigo de su
inocencia (16:1-22).
Nadie viene en ayuda de Job; aunque las personas rectas se quedan
asombradas de su condición, no por ello se desvían de su camino, sino
que aún están más decididas a permanecer en él. Los compañeros de Job
no tienen sabiduría; ponen la noche por día, ya que ofrecen una esperanza
falsa; Job ve cerca su descenso al lugar de descanso final (17:1-16).
o Bildad acusa a Job de despedazarse el alma en su cólera, lo cual es inútil, pues
las cosas permanentes no cambiarán por esto. Dios traerá su juicio sobre los
inicuos; describe lo que le acarreará: la pérdida de la descendencia, la peor de las
enfermedades y la muerte, suprimirá el nombre y los descendientes del inicuo, y
se le convertirá en un ejemplo duradero. Bildad insinúa que esto es a lo que Job
se encara (18:1-21).
o Job reprocha a sus compañeros; si él ha cometido errores, no hay ninguna
necesidad de que ellos incrementen su aflicción; Job no recibe respuesta a sus
lamentos; sus hermanos, conocidos y siervos le han abandonado,incluso su
esposa y sus hermanos le consideran asqueroso; los muchachos se mofan de él;
no es más que piel y huesos. Los compañeros de Job intentan ocupar el lugar de
Dios al perseguirle. Sin embargo, él está seguro de que Dios es su recomprador y
que recibirá juicio favorable, incluso mientras todavía esté vivo. Sus oponentes
deben tener cuidado por temor a enfrentar- se al juicio de Dios (19:1-29).
o Zofar está muy inquieto por las palabras y la advertencia de Job; se siente
ofendido. Indirectamente atribuye los sufrimientos de Job a Dios; describe al
apóstata como orgulloso en extremo; pero tal persona perderá sus posesiones, se
consumirán como tortas de estiércol; si saborea y le gusta el mal, no tendrá
escape, ni siquiera por medio de la riqueza (20:1-29).
o Job pregunta: si lo que los oponentes dicen es verdad, entonces ― qué siguen
viviendo los inicuos mismos, se han hecho superiores en riqueza?‖. Continúan
disfrutando, pero no tienen ninguna consideración para con Dios. ¿Cuán a
menudo vemos que se termina con los inicuos y su prole? El hombre pobre muere
como el rico, pero a este último se le entierra con honor. Los consoladores de Job
han sido vanos(2 1:1-34).
Tercer turno del debate (22:1-25:6).
o Elifaz ridiculiza de nuevo la alegación de Job de que Dios se interesa en su
integridad. Ahora pasa a calumniar a Job diciendo que su sufrimiento indica que
él es culpable de extorsión, codicia, injusticia, irreverencia y falta de temor a Dios.
Luego, de manera santurrona, aconseja que Job se familiarice con Dios, le ore y
abandone la injusticia, entonces será bendecido; pero de la arrogancia resultará
la humillación (22:1-30).
o Job se pregunta si Dios está interesado en la aflicción del justo y las acciones del
inicuo (23:1-24:25).
Job no puede hacer lo que los compañeros le aconsejan erróneamente. Él
desearía poder presentar su caso legal ante Dios; de ser así, Él le
escucharía; pero Dios no se manifiesta; no obstante, conoce la manera
recta de andar de Job; sabe que Job ha seguido sus mandamientos; sin
embargo, ahora Dios está haciendo algo que Job no entiende, y esto le
aterroriza (23:1-17).
Job arguye de nuevo que los inicuos (en este sistema) prosiguen sin que
les venga ningún castigo; llevan a cabo toda clase de injusticias. Describe
la situación de los que son afligidos por los inicuos: están desnudos, con
frío, hambrientos, trabajan duro, claman por ayuda y mueren. Al parecer,
Dios no se interesa en esto. Algunos aman la oscuridad más bien que la
luz; bajo su amparo se sienten libres de cometer asesinato, robo, adulterio;
la luz de la mañana es para ellos como una sombra de muerte. Los inicuos
pasan rápidamente; se ensalzan y luego, como los demás, dejan de ser; no
reciben sufrimiento por sus pe cados (24:1-25).
o Bildad repite que el hombre mortal, nacido de mujer, no puede ser considerado
justo delante de Dios, quien (según dice Bildad) considera la Luna y las estrellas
como inmundas. Niega que Dios tenga interés en la integridad del hombre (25:1-
6).
Discurso final de Job; hace callar e instruye a sus oponentes (26:1-31:40).
o Con ironía, alaba la ―sabiduría‖ de sus compañeros y la ―ayuda‖ que le han
prestado; pregunta si son como Dios, ante quien todas las cosas están expuestas.
Dios cuelga la Tierra en el espacio, suspende el agua en las nubes, sacude las
montañas, agita el mar. Estas cosas no son más que los bordes de sus caminos,
un mero susurro de su grandeza (26:1-14).
o Job expresa su determinación de mantener integridad hasta la muerte; no
justificará a sus compañeros por medio de aceptar su razonamiento falso y
considerarse un malhechor. Debido a la justicia de Job, su enemigo es un hombre
inicuo. Si Job fuese realmente un apóstata, como le habían acusado sus
compañeros, entonces él no se deleitaría en invocar a Dios, y Él no le escucharía.
Job ha hecho callar a sus oponentes; ahora los instruirá. Ellos dicen que han visto
―visiones‖; si es así, ¿por qué han sído consoladores vanos? Es verdad que aquel
que es verdaderamente ínicuo trae una espada e indigencia sobre sus
descendientes; la riqueza que él acumula es para que la reciba el justo después
de su muerte; puede que él muera rico, pero lo pierde todo (27:1-23).
o Ahora Job repasa los descubrimientos y las actividades del hombre; ha entrado
en las profundidades de la tierra, sacando a la luz cosas escondidas; ha ido a las
profundidades del mar; ha explotado el almacén de riquezas de la tierra. Pero con
todo el conocimiento que ha conseguido por medio del estudio del ‗libro de la
creación divina‘, el hombre no ha hallado verdadera sabiduría ni entendimiento;
solo Dios los posee; la única manera que tiene el hombre para conseguirlos es
temer a Jehová y apartarse del mal (28:1-28).
o Job pasa a recordar los días que antecedieron a la prueba; entonces andaba en
la luz de Dios; sus servidores eran muchos; cuan do él aparecía en la puerta de la
ciudad, los jóvenes, los mayores e incluso los caudillos lo recibían con sumo
respeto. Era conocido por su justicia, dones de misericordia, rectitud, defendía al
oprimido y castigaba al opresor; todos prestaban atención a su consejo. Era como
un rey entre sus tropas(29:1-25).
o Ahora la situación de Job se había invertido; los que no servían para nada se
reían de él. Esta vez de la humanidad, a quienes las personas echan del país a
azotes, se han convertido en sus atormentadores,escupiéndole, haciéndole
tropezar. Los compañeros de Job no le han ayudado en su terrible sufrimiento,
sino que han sido crueles. Está afligido, reducido a un esqueleto (30:1- 31).
o Job no practica el mal. Pide ser pesado por Dios. Desea pagar las consecuencias
si él ha hecho el mal. Pasa a enumerar las siguientes transgresiones: el adulterio,
la injusticia, la falta de misericordia, la opresión, el materialismo, la idolatría, la
actitud vengativa, la falta de hospitalidad, la hipocresía, el ocultar las
transgresiones para ‗salvar las apariencias‘. Después de decir que desea
presentar su litigio ante Dios,enfrentarse a las acusaciones que su oponente
tenga registradas en un documento contra él, menciona otro mal del cual es
inocente: la codicia, pues él no cultivó ni comió el fruto del campo por el cual no
había pagado.
Tampoco consiguió ilegalmente ningún campo de sus dueños (31:1-40).
Elihú corrige a Job y a sus compañeros(32:1-37:24).
o Elihú ha escuchado la discusión. Se enciende su cólera contra Job por justificarse
a sí mismo más bien que a Dios, y aún más contra los compañeros de Job por
pronunciar culpable a Dios. Elihú se había reprimido por respeto a la edad; pero el
espíritu de Jehová, que es lo que da entendimiento, le impele a hablar. Elihú les
dice a los tres compañeros de Job que no han contestado a este espíritu; Elihú no
hablará como ellos. No mostrará parcialidad ni otorgará ningún título adulador
(32:1-22).
o Elihú no alega ser superior; reprende a Job por estar demasiado interesado en su
propia justificación y por contender con Dios debido a que Él no respondió.
Describe cómo Dios exhorta o corrige al hombre a fin de apartarle del pecado: 1)
por medio de una visión en la noche, 2) permitiendo que venga sobre él la
calamidad. Para ser liberado, el hombre necesita un mediador que le diga lo que
es correcto. A través de este mediador se provee rescate para ser restaurado;
entonces Dios hace llegar su justicia al hombre, y este le cantará alabanzas. Al
obrar así, Dios muestra su paciencia y su bondad inmerecida (33:1-33).
o Elihú acude a los oyentes para que pongan a prueba sus palabras. Job había
dicho en realidad que Dios había apartado su juicio; pero Él no deja de
recompensar a aquel que le sirve de manera altruista. ¿Quién le dio a Dios la
responsabilidad de gobernar y cuidar de la Tierra? Si Él lo desea, puede quitar la
vida de todas las personas. Uno no puede decirle a un rey o a un gobernante que
está equivocado o que es inútil. Dios juzga a todos sin parcialidad; repentina
mente quita a los gobernantes de su lugar y coloca allí a otros, de manera que
todos pueden ver que se lo merecían porque habían llegado a ser opresores. Dios
juzga y actúa con los individuos o incluso con las naciones como a Él le place. Al
tratar de autojustificarse, Job obré sin conocimiento; su prueba debía continuar
hasta que la cuestión estuviese resuelta (34:1-37).
o Job dijo: ―Mi justicia es más que la de Dios‖. Él creyó que su proceder justo no le
servía de nada ante Dios. Sin embargo, uno no le hace ningún favor a Dios al
servirle, y si peca, tampoco le afecta a Él personalmente,aunque los hombres sí
pueden ser afecta dos. Gran parte de la opresión no es alivia da por Dios porque
los hombres no le invocan en verdad. Job, el siervo de Dios, debería haber
confiado y esperado en Jehová en lugar de hablar irreflexivamente(35:1-16).
o Elihú expresa su convicción de que Dios tiene un buen motivo; Él juzgará a los
afligidos, haciéndolos conscientes de su mal proceder. Librará al obediente, pero
el apóstata morirá. Bendecirá al obediente con aumento y prosperidad. Este debe
ejercer cuidado para no permitir que la furia le haga rencoroso. A causa de su
condición afligida, Job había estado demasiado deseoso de con tender contra
Dios, como en un pleito. Debería recordar que Dios es sublime, el mejor
Instructor. Job no debería desafiar sus caminos, sino, más bien, ensalzar su
actividad. Elihú describe el poderío de Dios (36:1-33).
Mientras se acerca una tormenta, Elihú continúa ensalzando la grandeza de Dios: Él usa
las fuerzas naturales,con las cuales puede detener la actividad de los hombres. Él dirige
el viento, el frío, la luz y las nubes. Trae tormentas cuyos efectos sirven para corregir y
castigar así como para mostrar su bondad amorosa. El hombre no puede entender o
controlar completamente los elementos o el clima. Nadie debería creerse sabio en su
propio corazón y censurar las acciones de Dios. Él es sublime en poder y nunca actuará
sin derecho o justicia (37:1-24).
Jehová reprende a Job y a sus compañeros(38:1-42:6).
Jehová habla desde la tormenta. Muestra que el hombre no existía cuando tuvo lugar la
creación; por consiguiente, Job no puede responder a preguntas básicas acerca del
universo visible. Le pide a Job que le informe sobre la Tierra, el mar, la luz, la muerte y la
sepultura, la nieve, el granizo, el viento, la lluvia, el rocio,la escarcha, las constelaciones
y los relámpagos (38:1-38).
Jehová empieza con la creación animal, de mostrándole a Job cuán poco sabe de las
maravillosas características que Dios ha puesto en los animales, de manera que no
necesitan que el hombre cuide de ellos de la tierra. Se hace mención de algunos
animales y sus sorprendentes instintos: el león, el cuervo la cabra montés, la cebra, el
asno silvestre, el toro salvaje, la hembra del avestruz, la cigüeña, el caballo, el halcón y
el águila (38:39-39:30).
Luego, Jehová plantea la siguiente pregunta: ― ¿pudiera contender de manera alguna un
señalador de faltas con el Todopoderoso?‖. Contrito, Job responde que no tiene nada
que decir. Jehová le hace notar que estaba invalidando Su justicia con el fin de
justificarse a sí mismo. A continuación, Él le hace notar que puede humillar a los inicuos
(40:1-14).
Jehová señala a la fuerza y tranquila confianza de ―Behemot‖ (hipopótamo), a quien Él
creó como uno de los animales más gran des, así como de ―Leviatán‖ (cocodrilo), y el
peligro de luchar con él. De este último se destacan la dureza de su corazón, su orgullo
y falta de temor (40:15-41:34).
Job se arrepiente, confiesa que habló sin conocimiento; ‗los caminos de Dios son
superiores a los caminos del hombre, y sus pensamientos a los pensamientos del
hombre‘. Admite haber hablado irreflexivamente sobre las acciones de Dios, dado que él
no tenía sabiduría, discernimiento y capacidad para hacer tal juicio. Se retracta en polvo
y ceniza (42:1-6).
Jehová bendice a Job, juzga a sus compañeros (42:7-17).
Jehová expresa su gran enojo hacia los compañeros de Job, pues ellos hablaron lo que
no era verídico. Les manda que lleven sus ofrendas a Job como Su sacerdote, por que
Jehová sólo aceptará a Job, Su ―siervo‖, y sus oraciones a favor de ellos. Ellos lo hacen
así (42:7-9).
Jehová sana a Job cuando él ora por sus compañeros, le da el doble de las posesiones
que tenía y hace que sus parientes y amigos vuelvan a él. Es evidente que su esposa
vuelve a su lado; tiene siete hijos y tres hijas,las más hermosas del país. Job vive ciento
cuarenta años más y ve cuatro generaciones de descendientes (42:10-17).
Véase el libro ―Toda Escritura es inspirada de Dios y provechosa‖, págs. 95-100.
*** w86 1/3 págs. 10-15 ¿Por qué fue tan sobresaliente la integridad de Job? ***
*** w86 1/3 págs. 15-20 ¿Quién puede imitar la integridad de Job? ***
JOB confiaba en su integridad y por eso pidió que Dios lo examinara. Su ejemplo puede
servirnos de mucho ánimo hoy día, especialmente cuando Satanás el Diablo está tratando
desesperadamente de quebrantar la integridad de todos aquellos que sirven a Dios. (1 Pedro
5:8.) Conociendo este hecho, el discípulo Santiago dijo: ―Tomen por modelo de sufrir el mal y
de ejercer paciencia a los profetas‖, en particular a Job. (Santiago 5:10, 11.) Pero ¿quién puede
imitar la integridad de Job? ¿Podemos hacerlo nosotros? ¿Qué ejemplos de integridad nos dio
Job?
2
El nombre Job significa ―objeto de hostilidad‖, y eso es lo que él realmente llegó a ser.
Cuando Jehová respondió a la petición de Satanás y quitó el ‗seto protector‘ de alrededor de
Job, nada de lo que Satanás hizo pudo quebrantar la integridad de Job a Dios. (Job 1:1–2:10.)
De este modo Job suministró una respuesta al desafío de Satanás de que podía apartar a
cualquier persona de servir a Dios. (Proverbios 27:11.) Al mantener integridad, Job estaba en
realidad declarando al entero universo: ‗Satanás, eres un mentiroso despreciable, porque
Jehová es mi Dios, y yo mantendré integridad a él venga lo que venga‘. (Job 27:5.)
Aquellos que son como Job
3
La cuestión entre Jehová y Satanás fue una cuestión universal, que afectaba a la región de
los espíritus. En el cielo, cercada por el cuidado protector de Jehová, estaba la ―descendencia‖
prometida por medio de la cual Dios iba a cumplir sus maravillosos propósitos. (Génesis 3:15.)
Cuando Jehová quitara de él ‗el seto protector‘, ¿imitaría él la integridad de Job? ¿Demostraría
que un hombre perfecto, tal como Adán lo había sido, puede mantener integridad perfecta a
Dios? (1 Corintios 15:45.) Satanás se preparó para someter a esta ―descendencia‖ a la prueba
más severa cuando se presentara en la Tierra.
4
Jesucristo demostró ser la ―descendencia‖ enviada del cielo. Desde entonces se convirtió en
el centro de la atención de Satanás, sí, el objeto principal de su hostilidad. Como prueba de
que Jehová había quitado el seto de su cuidado protector, Cristo clamó en el madero de
tormento: ―Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado?‖. (Mateo 27:46; Salmo 22:1.)
Aunque realmente sentía que Dios había quitado de él su protección, Jesús, como Job, ―no
pecó, ni atribuyó nada impropio a Dios‖. (Job 1:22.) Imitó a Job, manteniendo integridad
perfecta a Dios, y de este modo probó que ―no había ninguno como él en la tierra‖. (Job 1:8.)
Así, con Jesús, Jehová Dios tenía una respuesta completa y eterna a la falsa acusación de que
no podía poner en la Tierra a un hombre que permaneciera fiel a Él ante la más severa prueba.
5
No satisfecho con ello, Satanás sigue acusando a los hermanos espirituales de Jesús,
quienes, junto con Jesús, componen la ―descendencia‖ de la organización de Dios, una
organización asemejada a una mujer. Al describir el establecimiento del Reino en el cielo, la
Biblia dice con respecto a Satanás: ―¡Ha sido arrojado hacia abajo el acusador de nuestros
hermanos, que los acusa día y noche delante de nuestro Dios!‖. Sin embargo, Satanás hace
más que solo acusar: lanza contra ellos un ataque hostil. La Biblia explica que después de ser
echado del cielo, ―el dragón [Satanás] se airó contra la mujer, y se fue para hacer guerra contra
los restantes de la descendencia de ella, los cuales observan los mandamientos de Dios y
tienen la obra de dar testimonio de Jesús‖. (Revelación 12:7-12, 17.)
6
―Los restantes de la descendencia‖ de la mujer son los testigos ungidos de Jehová que
quedan hoy en la Tierra. Ellos encabezan ―la obra de dar testimonio de Jesús‖, declarando
públicamente por todo el mundo que él ahora está entronizado como Rey y pronto pondrá fin a
este injusto sistema de cosas. (Mateo 24:14; Daniel 2:44.) ¡Pero ellos no están solos! Ahora
una gran muchedumbre de más de tres millones de personas se ha sumado a ellos formando
una organización unida y mundial que mantiene integridad. Todas esas personas que
mantienen integridad, también han llegado a ser objeto de la persecución despiadada de
Satanás, pero el Padre celestial Jehová se deleita por motivo de su integridad. (2 Timoteo 3:12;
Proverbios 27:11.)
7
Induce a la reflexión el darse cuenta de que tal como Satanás centró su viciosa atención en
Job, así también la centra en nosotros los que estamos intentando mantener integridad a Dios.
Sin embargo, esto no debe turbarnos. ¿Por qué? Porque ―Jehová es muy tierno en cariño, y
misericordioso‖ y ―no te desamparará ni te dejará enteramente‖. (Santiago 5:11; Deuteronomio
31:6.) Sí, Jehová nos sostendrá. ―Para los que andan en integridad él es un escudo‖, dice la
Biblia. (Proverbios 2:7.) Esto no significa que Jehová no permitirá que seamos probados. Él lo
va a permitir, tal como lo hizo en el caso de Job. ―Pero Dios es fiel —escribió el apóstol Pablo—
y no dejará que sean tentados más allá de lo que pueden soportar, sino que junto con la
tentación también dispondrá la salida para que puedan aguantarla.‖ (1 Corintios 10:13.)
Cuando nos encontramos bajo prueba
8
El ejemplo de integridad de Job puede sernos de beneficio particularmente cuando nos
encaramos a pruebas severas. Job sufrió tanto que deseó morir y ser ocultado en el Seol, el
sepulcro común de la humanidad. (Job 14:13.) Algunas personas se han sentido de manera
similar hoy día, y han dicho que se han podido identificar con Job en su gran sufrimiento. Es
posible que usted se haya sentido así en alguna ocasión. Leer sobre los sufrimientos de Job
puede ser como recibir ánimo de un amigo que ha pasado por una prueba aún más severa que
la nuestra. El saber que alguien ha aguantado, y que nos entiende, ciertamente nos ayuda a
aguantar a nosotros también.
9
Conociendo nuestras necesidades, Jehová ha hecho que se escriba el libro de Job para
ayudarnos a mantener integridad tal como él la mantuvo. (Romanos 15:4; Santiago 5:10, 11.)
Jehová sabe que tal como una parte del cuerpo depende de otra, así también sus fieles siervos
se necesitan unos a otros. (1 Corintios 12:20, 26.) Recuerde las asambleas recientes
―Mantenedores de Integridad‖ a las que asistieron millones de lectores de esta revista. Los que
estuvieron en ellas recordarán lo bien que se sintieron en compañía de tantas personas cuyo
principal propósito en la vida es mantener integridad a Dios. ¡Cuánto les ayudó a mantener
integridad a todos los asistentes el saber que los muchos miles de compañeros que tenían a su
alrededor —ya fuera en sus lugares de trabajo, en la escuela o en sus propias comunidades—
también estaban manteniendo integridad bajo pruebas severas! (1 Pedro 5:9.)
10
Por otra parte, puede que no siempre mantengamos la perspectiva apropiada, como
tampoco la mantuvo Job. Una persona que sufre mucho y llega a deprimirse puede decir: ‗¿Por
qué me hace esto Dios a mí? ¿Por qué permite que ocurra?‘. Puede que hasta llegue al
extremo de preguntarse: ‗¿De qué vale servir a Dios?‘. Al no darse cuenta de la fuente de su
sufrimiento, Job cuestionó el beneficio presente de ser justo, pues parecía que los buenos
sufrían tanto, si no más, que los malos. (Job 9:22.) Según Elihú, Job dijo: ―¿De qué me ha
servido, qué he ganado con no pecar?‖. (Job 35:3, Nueva Biblia Española.) No debemos
permitir que la preocupación excesiva por nuestros propios problemas nos haga perder de vista
la perspectiva apropiada y cuestionar el valor de servir a Dios.
11
Elihú corrigió el punto de vista equivocado de Job, centrando su atención en la posición
mucho más elevada de Jehová. (Job 35:4, 5.) Elihú dijo que, independientemente de lo que
sucediese, nunca deberíamos llegar a la conclusión de que Dios no se preocupa por nosotros y
razonar que podemos causarle molestia o disgusto por lo que consideramos injusticias de Su
parte. ―Si realmente pecas —preguntó Elihú a Job—, ¿qué logras contra él? Y si tus
sublevaciones realmente aumentan, ¿qué le haces?‖ (Job 35:6.) Sí, si queremos causarle
disgusto a Dios abandonando sus caminos y su servicio, solo nos estamos perjudicando a
nosotros mismos, no a Dios.
12
Por otra parte, Elihú mostró que Jehová no se beneficia personalmente de que hagamos lo
que es correcto. Por supuesto, Dios se deleita en que mantengamos integridad, pero de ningún
modo depende de nuestra adoración, como indicó la pregunta que Elihú le formuló a Job: ―Si
de veras tienes razón, ¿qué le das, o qué recibe él de tu propia mano?‖. (Job 35:7.) Dios nos
dio la vida, y debido a él respiramos y nos movemos y existimos. ¡A él le pertenece todo!
(Hechos 17:25; 1 Crónicas 29:14.) De modo que ni nuestra iniquidad ni nuestra justicia pueden
afectar a Dios personalmente. (Job 35:8.)
Cuando somos corregidos
13
¿Cómo reaccionó Job a la corrección, primero de Elihú y después de Jehová mismo? La
aceptó, arrepintiéndose ―en polvo y cenizas‖. (Job 42:6.) Sí, Job se humilló y reconoció su error.
¿No admiramos su humildad? ¿Cuál es nuestro caso? Aunque mantengamos integridad
lealmente como Job, todos nosotros tendemos a cometer errores y a perder el equilibrio de un
modo u otro. (Santiago 3:2; Gálatas 2:11-14.) ¿Qué vamos a hacer si alguien, quizás más joven
que nosotros, como Elihú, nos llama la atención en cuanto a un error o imperfección? (Job
32:4.)
14
No es siempre fácil aceptar la corrección. (Hebreos 12:11; Proverbios 3:11, 12.) La tendencia
es intentar justificarnos. Como Job, puede que no hayamos dicho o hecho nada malo
intencionadamente. Nuestro motivo puede haber sido bueno. Pero es posible que hayamos
hablado sin pleno conocimiento, con falta de entendimiento o sensibilidad. Puede que nuestros
comentarios hayan reflejado un tono de superioridad racial o nacional, o una postura estricta
sobre una cuestión sin tener base bíblica. Si se nos hace ver que lo que hemos dicho es solo
nuestra opinión y que ha perjudicado a otros hasta el grado de poner en peligro su
espiritualidad, ¿reconoceremos nosotros, como Job, que ―hablamos sin entendimiento‖ y nos
―retractaremos‖? (Job 42:3, 6.)
Confianza en Dios, no en las riquezas
15
Bildad puso en tela de juicio el objeto de la confianza de Job, insinuando que Job había
olvidado a Dios y que su confianza no estaba en Él. (Job 8:13, 14.) Pero aunque Job había sido
bendecido con muchos bienes materiales, su confianza no estaba puesta en ellos. Su
integridad no sufrió en lo más mínimo cuando perdió todos sus bienes. (Job 1:21.) Concluyendo
su defensa, Job dijo: ―Si he puesto el oro como mi seguridad, o al oro he dicho; ‗¡Tú eres mi
confianza!‘, si solía regocijarme porque fuera mucha mi propiedad, y porque mi mano hubiera
hallado muchas cosas [...] eso también sería un error para la atención de los jueces, porque
habría negado al Dios verdadero arriba‖. (Job 31:24-28.)
16
¿Cuál es nuestro caso? ¿En qué confiamos nosotros... en Jehová, o en los bienes
materiales? Si se nos pesara en balanzas exactas, como Job deseó que se hiciera en su caso,
¿nos vería Dios íntegros a este respecto? ¿Consideramos que lo más importante es ofrecerle a
Jehová una vida íntegra con la que pueda responder al desafío de Satanás? ¿O estamos
particularmente interesados en satisfacer nuestros deseos de placeres y posesiones? ¡Cuánto
mejor si imitamos a Job y regocijamos el corazón de Jehová confiando en él, y no nos damos
importancia indebida a nosotros mismos ni a los bienes materiales que podamos tener! Si
confiamos en Jehová, y ponemos sus intereses en primer lugar, él promete que nunca nos
dejará ni abandonará. (Mateo 6:31-33; Hebreos 13:5, 6.)
Moralidad sexual
17
Los falsos consoladores de Job no le acusaron directamente de inmoralidad sexual, pero
insinuaron una y otra vez que era culpable de alguna falta secreta por la que Dios le estaba
castigando. Al ser un hombre bien acomodado, ―el mayor de todos los orientales‖, sin duda Job
tuvo oportunidades de cometer inmoralidad sexual. (Job 1:3; 24:15.) Otros siervos de Dios,
anteriores y posteriores a Job, sucumbieron ante esta tentación. (Génesis 38:15-23; 2 Samuel
11:1-5.) Job, sin embargo, se defendió de tales insinuaciones, diciendo: ―Un pacto he celebrado
con mis ojos. Por eso, ¿cómo pudiera mostrarme atento a una virgen? Si mi corazón se ha
dejado seducir hacia una mujer, y me quedé acechando al mismo paso de entrada de mi
compañero [...] eso sería conducta relajada, y eso sería un error para la atención de los
jueces‖. (Job 31:1, 9-11.)
18
Puede que Satanás no haya tenido ningún otro medio tan eficaz de quebrantar la integridad
de los siervos de Dios como la fornicación. (Números, capítulo 25.) ¿Puede usted imitar la
integridad de Job resistiendo todo tipo de tentación que lleve a la inmoralidad sexual? Es
realmente un desafío, especialmente en este mundo donde la inmoralidad sexual está tan
extendida. Pero imagínese poder decir confiadamente, cuando tenga que rendir cuentas, lo que
Job expresó: ―¡Dios llegará a conocer mi integridad!‖. (Job 31:6.)
Lo que puede ayudarnos
19
No es fácil imitar la integridad de Job, puesto que Satanás está intentando quebrantar
nuestra integridad con la misma fuerza que intentó quebrantar la de Job. Es esencial, por lo
tanto, que nos pongamos la armadura completa de Dios. (Efesios 6:10-18.) Esto implica estar
interesados en Dios, como lo estuvo Job, siempre conscientes de agradarle en cualquier cosa
que hagamos, ya sea a nivel individual o familiar. (Job 1:5.) De modo que el estudio bíblico, la
asociación regular con nuestros compañeros creyentes y la declaración pública de nuestra fe
son fundamentales. (2 Timoteo 2:15; Hebreos 10:25; Romanos 10:10.)
20
Pero lo que nos puede sostener especialmente durante la prueba es lo mismo que sostuvo a
Job: la confianza de que esta vida no es todo cuanto hay. ―Si un hombre físicamente
capacitado muere, ¿puede volver a vivir?‖ preguntó Job. Y en respuesta contestó: ―Tú llamarás,
y yo mismo te responderé‖. (Job 14:13-15.) El tener esa misma confianza absoluta de que
Jehová resucitará a sus fieles siervos puede ayudarnos también a enfrentarnos a cualquier
prueba que Satanás nos imponga. (Hebreos 6:10.) Hace mucho que el salmista bíblico escribió:
―En cuanto a mí, a causa de mi integridad me has sostenido, y me colocarás delante de tu
rostro hasta tiempo indefinido‖. (Salmo 41:12.) ¡Que este sea el futuro feliz de cada uno de
nosotros, y que Jehová nos sostenga y guarde para siempre por mantener integridad a él como
siervos suyos!
*** w06 15/3 págs. 13-16 Puntos sobresalientes del libro de Job ***
‗PEREZCA EL DÍA EN QUE NACÍ‘
(Job 1:1–3:26)
Cierto día, Satanás cuestiona la fidelidad de Job. Jehová acepta el reto y permite que
Satanás aflija a su siervo con una calamidad tras otra, pero Job se niega a ‗maldecir a Dios‘
(Job 2:9).
Tres compañeros de Job llegan para ―condolerse de él‖ (Job 2:11). Se sientan a su lado sin
pronunciar palabra hasta que él rompe el silencio y dice: ―Perezca el día en que llegué a nacer‖
(Job 3:3). Job desea ser como los ―niños que no han visto la luz‖, es decir, que han nacido
muertos (Job 3:11, 16).
Respuestas a preguntas bíblicas:
1:4. ¿Celebraban los cumpleaños los hijos de Job? No, no lo hacían. En el idioma
original, los términos empleados para ―día‖ y ―cumpleaños‖ son diferentes (Génesis 40:20).
En Job 1:4, la palabra ―día‖ designa el tiempo comprendido entre la salida y la puesta del Sol.
Parece ser que los siete hijos varones de Job organizaban todos los años una reunión familiar
de siete días, formando un ciclo. Cada hijo era el anfitrión del banquete que se ofrecía en su
casa ―en su propio día‖.
1:6; 2:1. ¿A quiénes se les permitía presentarse ante Jehová? Entre aquellos que
tomaban su puesto delante de Jehová se contaban su Hijo unigénito (la Palabra), los ángeles
fieles y los hijos angélicos de Dios que habían sido desobedientes, incluido Satanás (Juan
1:1, 18). Estos últimos no fueron expulsados del cielo sino hasta poco después del
establecimiento del Reino de Dios, en 1914 (Revelación [Apocalipsis] 12:1-12). Al permitirles
estar en su presencia, Jehová expuso delante de todas las criaturas espirituales el desafío y las
cuestiones que planteó Satanás.
1:7; 2:2. ¿Habló Jehová a Satanás directamente? La Biblia no da muchos detalles sobre
cómo se comunica Jehová con las criaturas espirituales. No obstante, el profeta Micaya tuvo
una visión en la que un ángel conversaba directamente con Jehová (1 Reyes 22:14, 19-23).
Por lo tanto, parece que Jehová habló con Satanás sin un intermediario.
1:21. ¿En qué sentido podía Job regresar al ‗vientre de su madre‘? Puesto que Jehová
formó al hombre ―del polvo del suelo‖, el término ―madre‖ se usa aquí en sentido figurado para
referirse a la tierra (Génesis 2:7).
2:9. ¿En qué estado de ánimo se encontraba posiblemente la esposa de Job cuando le
dijo a este que maldijera a Dios y muriera? Ella había sufrido las mismas pérdidas que él. Le
debe haber dolido muchísimo ver a su esposo —que en un tiempo había sido una persona
vigorosa— abatido por una repugnante enfermedad. Además, había perdido a sus queridos
hijos. Todo esto debió dejarla tan consternada que no percibió lo realmente importante: la
relación de ellos con Dios.
Lecciones para nosotros:
1:8-11; 2:3-5. Como muestra el caso de Job, para ser íntegros a los ojos de Jehová no basta
con acciones y palabras adecuadas; también hay que servirle con el motivo correcto.
1:21, 22. Si somos fieles a Jehová en circunstancias tanto favorables como desfavorables,
probaremos que Satanás es un mentiroso (Proverbios 27:11).
2:9, 10. Al igual que Job, hemos de permanecer firmes en la fe, incluso si nuestros familiares
no aprecian nuestras actividades espirituales o nos presionan para que transijamos en asuntos
relacionados con la fe cristiana o para que renunciemos a ella.
2:13. Los compañeros de Job no tenían nada animador que decir acerca de Dios y sus
promesas porque carecían de visión espiritual.
―NO QUITARÉ DE MÍ MI INTEGRIDAD‖
(Job 4:1–31:40)
En esencia, lo que los tres compañeros de Job enfatizan en sus discursos es que este tuvo
que haber hecho algo muy malo para merecer un castigo tan severo de parte de Dios. Elifaz
habla primero, seguido por Bildad, quien emplea un lenguaje más hiriente, y por Zofar, que lo
trata con mayor desprecio aún.
Job rechaza el razonamiento falso de sus visitantes. Incapaz de comprender por qué Dios ha
permitido su sufrimiento, se preocupa en demasía por defender su inocencia. Sin embargo, Job
ama a Jehová, por lo que exclama: ―¡Hasta que expire no quitaré de mí mi integridad!‖ (Job
27:5).
Respuestas a preguntas bíblicas:
7:1; 14:14. ¿A qué se refiere la expresión ―trabajo obligatorio‖? La angustia de Job era
tan dolorosa que para él la vida era como un trabajo obligatorio, arduo y agotador (Job 10:17,
nota). Y puesto que el tiempo que el ser humano pasa en el Seol —desde que muere hasta
que resucita— es un período forzoso, Job lo asemejó a un trabajo obligatorio.
7:9, 10; 10:21; 16:22. ¿Dan a entender estas afirmaciones que Job no creía en la
resurrección? Estos comentarios hacen referencia al futuro inmediato de Job. ¿Qué significan
entonces? Tal vez él quiso decir que si moría, sus contemporáneos no lo verían más. Desde el
punto de vista de ellos, él no regresaría a su casa ni se le volvería a reconocer hasta que Dios
así lo dispusiera. O quizás Job dio a entender que nadie puede regresar del Seol por sí mismo.
Job 14:13-15 deja claro que Job sí creía en una resurrección futura.
10:10. ¿Cómo procedió Jehová a ‗vaciar a Job como leche y a cuajarlo como queso‘?
Esta es una descripción poética de cómo fue formado en el vientre materno.
19:20. ¿Qué quiso decir Job con la expresión: ―Escapo con la piel de mis dientes‖?
Cuando Job dijo que escapaba con la piel de algo que por lo visto carece de ella, quizás dio a
entender que había escapado prácticamente sin nada.
Lecciones para nosotros:
4:7, 8; 8:5, 6; 11:13-15. No debemos apresurarnos a concluir que la persona que sufre está
cosechando lo que ha sembrado y carece de la aprobación divina.
4:18, 19; 22:2, 3. Nuestros consejos han de estar basados en la Palabra de Dios, no en
opiniones personales (2 Timoteo 3:16).
10:1. Job, cegado por la amargura, fue incapaz de pensar en otras posibles razones para su
sufrimiento. Nosotros no debemos amargarnos cuando estemos sufriendo, sobre todo porque
poseemos un claro entendimiento de las cuestiones implicadas.
14:7, 13-15; 19:25; 33:24. La esperanza de la resurrección puede sustentarnos al afrontar
cualquier prueba que Satanás lance contra nosotros.
16:5; 19:2. Nuestras palabras tienen que animar y fortalecer a los demás en vez de irritarlos
(Proverbios 18:21).
22:5-7. El consejo basado en acusaciones carentes de fundamento es inútil y dañino.
27:2; 30:20, 21. Para ser íntegro no hay que ser perfecto. Por ejemplo, Job cometió un error
al culpar a Dios.
27:5. Job era el único que podía quebrantar su propia integridad, pues el que una persona
sea íntegra depende del amor que le tenga a Dios. Por tal razón, es preciso cultivar un
profundo amor a Jehová.
28:1-28. El hombre sabe dónde encontrar tesoros en la Tierra. En su búsqueda, el ingenio lo
lleva a galerías subterráneas donde no llega la visión de ninguna ave de rapiña. Sin embargo,
la sabiduría divina procede del temor a Jehová.
29:12-15. Debemos manifestar bondad amorosa de buena gana para con los necesitados.
31:1, 9-28. Job nos puso un buen ejemplo al evitar el flirteo, el adulterio, el trato injusto y
despiadado a su semejante, el materialismo y la idolatría.
―ME ARREPIENTO EN POLVO Y CENIZA‖
(Job 32:1–42:17)
Un joven llamado Elihú ha estado escuchando con paciencia la discusión sin participar.
Ahora interviene y corrige tanto a Job como a sus tres crueles acusadores.
Tan pronto como Elihú termina de hablar, Jehová contesta desde una tempestad. Aunque
no explica el motivo del sufrimiento de Job, el Todopoderoso hace que este se dé cuenta de Su
impresionante poder y gran sabiduría mediante una serie de preguntas. Job admite que habló
sin entendimiento y añade: ―Por eso me retracto, y de veras me arrepiento en polvo y ceniza‖
(Job 42:6). La prueba de Job termina, y se recompensa su integridad.
Respuestas a preguntas bíblicas:
32:1-3. ¿Cuándo llegó Elihú? Puesto que Elihú escuchó todos los discursos, debió de
haber llegado antes de que Job comenzara a hablar y pusiera fin a los siete días de silencio de
sus tres compañeros (Job 3:1, 2).
34:7. ¿En qué sentido era Job como un hombre ―que bebe el escarnio como agua‖?
En su angustia, Job pensó que las burlas de sus tres visitantes iban dirigidas hacia él, aunque
en realidad estaban hablando contra Jehová (Job 42:7). Por lo tanto, él dejaba que otros lo
despreciaran como quien disfruta bebiendo agua.
Lecciones para nosotros:
32:8, 9. La edad no hace necesariamente que una persona sea sabia. Para eso se requiere
entendimiento de la Palabra de Dios y la guía de su espíritu santo.
34:36. Nuestra integridad se demuestra al ser ―probado[s] hasta el límite‖ de un modo u otro.
35:2. Elihú escuchó atentamente y, antes de hablar, determinó con exactitud cuál era el
problema (Job 10:7; 16:7; 34:5). Cuando los ancianos cristianos van a dar un consejo, primero
han de escuchar con atención, averiguar la verdad de lo sucedido y comprender claramente las
cuestiones implicadas (Proverbios 18:13).
37:14; 38:1–39:30. Reflexionar sobre las maravillosas obras de Jehová —manifestaciones
de su poder y sabiduría— nos da una lección de humildad y nos ayuda a reconocer que la
vindicación de su soberanía es mucho más importante que cualquier asunto personal (Mateo
6:9, 10).
40:1-4. Cuando nos sintamos tentados a quejarnos del Todopoderoso, deberíamos
‗ponernos la mano sobre la boca‘.
40:15–41:34. ¡Cuánto poder tienen Behemot (el hipopótamo) y Leviatán (el cocodrilo)! Para
perseverar en el servicio a Dios, nosotros también necesitamos la fortaleza que proviene del
Hacedor de estos poderosos animales (Filipenses 4:13).
42:1-6. Escuchar a Jehová y recordar las manifestaciones de Su poder le permitió a Job
‗contemplar a Dios‘, es decir, percibir la verdad acerca de Él (Job 19:26). Esto le hizo cambiar
su forma de pensar. Si alguna vez recibimos corrección basada en las Escrituras, estemos
dispuestos a reconocer nuestro error y a hacer los cambios necesarios.
*** w86 15/8 págs. 20-21 El salmista canta alabanzas a Jehová ***
Puntos sobresalientes de la Biblia Salmos 1 a 41
―Alabanzas.‖ Este es el significado del nombre hebreo para el libro de los Salmos, ¡y qué
apropiado es! De hecho, el entero libro es un continuo canto de alabanza a Jehová Dios. Los
Salmos relatan acerca de las cualidades y obras poderosas de Jehová. Contienen profecías y
nos dicen cuáles eran los sentimientos de los escritores inspirados mientras aguantaban
persecución, traición, desaliento y hasta una mala conciencia. Muchos cristianos que sufren
pruebas similares han derivado fortaleza de las palabras de los Salmos.
El libro de los Salmos se divide en cinco secciones. Aquí consideramos la primera sección,
Salmos 1 a 41.
Sometiéndonos a los propósitos de Jehová
Sírvase leer Salmos 1 a 14. Este grupo de salmos introduce algunos de los temas principales
del libro de los Salmos: la importancia de la Ley, profecías acerca del venidero Rey Mesiánico y
oraciones por ayuda para enfrentarnos a presiones severas. Además aprendemos que, aunque
los inicuos logran tener éxito por un tiempo, los justos serán bendecidos.
· 2:1—¿Qué ―cosa vacía‖ seguían ―hablando entre dientes‖ las naciones?
Las naciones seguían ―hablando entre dientes‖ (o ―meditando sobre‖) la perdurabilidad de su
propia autoridad, en vez de aceptar al Ungido de Jehová. Estas palabras tuvieron una
aplicación en el primer siglo de la E.C., cuando las autoridades romanas y judías cooperaron
juntas para matar a Jesucristo, el Rey ungido de Jehová. (Hechos 4:26-28.) Sin embargo, el
cumplimiento mayor ha tenido lugar desde 1914; desde entonces, todas las naciones han
rechazado al entronizado Rey de Dios y han tratado de promover su propia soberanía.
· 2:12—¿Por qué se dio el mandato: ―Besen al hijo‖?
En tiempos bíblicos, el besar era una expresión de amistad y se usaba para dar la bienvenida a
los invitados en un hogar. En este versículo, Jehová manda a las naciones a besar, o dar la
bienvenida, a su Hijo como su Rey ungido. (Salmo 2:2, 6-8.)
· 9:12—¿Por qué está Jehová ―buscando el derramamiento de sangre‖?
Como un juez que se sienta para juzgar, Jehová busca a los que son culpables de sangre
debido a derramar la sangre de su pueblo inocente. (Génesis 9:5, 6; Lucas 11:49, 50.) Él
también castiga a los culpables. Pero sus castigos no son sin distinción. El salmista David nos
asegura: ―De seguro no se olvidará del clamor de los afligidos‖. (Compárese con 2 Pedro 2:9.)
· 11:3—¿Qué son ―los fundamentos‖ que están demolidos?
Los fundamentos son la justicia, la ley, y el orden... los fundamentos en que se basa la
sociedad. Cuando hay un derrumbamiento en el orden social, sin ninguna posibilidad de
justicia, ¿qué debe hacer la persona temerosa de Dios? Confiar en Jehová. Él está en su trono
celestial, ve todo lo que sucede, y nunca nos fallará.
Lección para nuestro día: El Salmo 4:5 insta a las personas temerosas de Dios a que
―sacrifiquen los sacrificios de la justicia‖. En el día de David, los israelitas tenían que ofrecer
sacrificios sobre el altar de Jehová. Pero también tenían que tener los motivos correctos y estar
genuinamente arrepentidos. (Isaías 1:11-17.) Cuando los cristianos ofrecen sus sacrificios
espirituales, ellos también tienen que tener los motivos correctos y tienen que vivir de acuerdo
con las normas elevadas de Jehová. (Hebreos 13:4, 5, 15, 16; 1 Pedro 2:1, 5.)
El incomparable Dios
Lea Salmos 15 a 24. Este conjunto de salmos contiene muchas expresiones de alabanza a
Jehová. Él es el Protector de su pueblo (18), Creador y Legislador (19), Salvador (20), Protector
de su Rey escogido (21), el Gran Pastor (23), y el Glorioso Rey (24).
· 16:10—¿Quién es el ―leal‖ que se menciona aquí?
Algunos doctos bíblicos aplican este versículo a personas fieles en general, y para apoyar esto
citan el hecho de que en algunos manuscritos hebreos la palabra para ―leal‖ está en plural. No
obstante, cuando se cita este versículo en las Escrituras Griegas Cristianas, la palabra está en
singular, indicando solo un ―leal‖. ¿Quién es este? En primer lugar, es probable que sea David
mismo. Pero, proféticamente, tanto Pedro como Pablo aplican este versículo a Jesús. (Hechos
2:25-32; 13:35-37.)
· 21:3—¿Qué era la ―corona de oro refinado‖?
Quizás era una corona literal, tal como la que se removió del ídolo Malcam. (Compárese con
2 Samuel 12:29, 30.) O tal vez la corona sea sencillamente figurativa, un símbolo del hecho de
que la victoria de David le había dado más adorno a su glorioso reinado. Aunque,
proféticamente, este salmo indica que Jehová dio la corona de la gobernación a Jesús en 1914.
La ―corona de oro refinado‖ indica que su reinado es de la calidad más alta.
· 22:1—¿Había abandonado Dios a David?
No, pero cuando David estaba bajo intensa presión de sus enemigos, parecía que era así. No
obstante, la reacción humana de David a sus terribles aprietos no reflejaba falta de fe, pues
siguió orando con confianza por su liberación. (Versículos 16-19.) Un hecho interesante es que
Jesús citó de este salmo antes de morir en el madero de tormento. Al preguntar ―¿por qué?‖,
Jesús indicó que estaba sometido a gran presión, a la vez que proclamaba su inocencia de las
falsas acusaciones que lo llevaron a su ejecución.
Lección para nuestro día: El apóstol Pablo cita el Salmo 22:22 y lo aplica a la manera como
Jesucristo toma la delantera entre sus hermanos ungidos al declarar el nombre de Jehová.
(Hebreos 2:11, 12.) El Salmo 22:27 señala al tiempo cuando ―todas las familias de las
naciones‖ se unirán al pueblo de Jehová en alabarlo. Hoy día, hay una gran multitud
internacional que adora a Dios junto con los hermanos de Jesús. (Revelación 7:9.) Debemos
mantenernos apegados a este arreglo divinamente organizado.
El gran poder de Jehová
Lea Salmos 25 a 34. En los Salmos 25 y 26, David expresa su deseo de andar en integridad.
Entonces, siguen expresiones de confianza valerosa en Jehová y, en el Salmo 33, se da una
espléndida descripción del poder de Jehová.
· 28:8—¿Quién es el ―ungido‖ de Jehová?
En este versículo el ―ungido‖ es el pueblo escogido de Jehová, como se puede ver de la
expresión ―Jehová es una fuerza para su pueblo‖. Estas palabras tienen un significado profético
similar a las de Habacuc 3:13. Indican que Jehová salvará a su resto ungido en la batalla de
Armagedón.
· 29:5, 6—¿Cómo quiebra los cedros la voz de Jehová?
En este salmo el poder de Jehová se describe gráficamente al comparar su voz a una
tormenta. La tormenta viaja desde el Líbano en el norte hasta las regiones desérticas del sur,
inspirando temor reverente a medida que viaja. (Versículo 9b.) Sus vientos agitan los cedros
del Líbano, haciéndolos ―brincar como un becerro‖, y sus relámpagos derriban algunos árboles
y los ‗hace pedazos‘. De manera similar, los vientos de la tormenta ‗hacen que el desierto se
retuerza‘ (versículo 8), revolviendo la arena del desierto de modo que parezcan estar
retorciéndose angustiosamente.
· 33:6—¿Qué es ‗el espíritu de la boca de Jehová‘?
El espíritu, o aliento, referido aquí es el espíritu santo o fuerza activa de Jehová. Tal como
nuestras palabras y aliento salen de nuestra boca simultáneamente, así la palabra de Jehová,
o sus mandatos, sale con su aliento, o espíritu. Dios usó su espíritu santo al crear el Sol, la
Luna y las estrellas, es decir, todo el ejército figurativo de los cielos materiales. (Compárese
con Génesis 1:1, 2.)
Lección para nuestro día: En el Salmo 26:5, David dijo que había odiado a la congregación
de los malhechores. De manera similar, hoy día los testigos de Jehová no se asocian con los
malhechores. (1 Corintios 15:33.) Así como David mostró gran interés en la casa de Dios, estos
cristianos verdaderos se deleitan en asociarse unos con otros en la organización de Jehová.
(Salmo 26:6-8; 122:1.)
―Bendito sea Jehová‖
Lea Salmos 35 a 41. Sobresalientes en este grupo de salmos están el Salmo 36, que identifica
a Jehová como la Fuente de la vida, y el Salmo 37, que garantiza que finalmente los mansos
son remunerados. En particular es notable el Salmo 40, que contiene expresiones proféticas
respecto a Jesucristo.
· 35:19—¿Por qué habrían de ‗guiñar el ojo‘ los enemigos de David?
El texto hebreo los llama literalmente ―mis enemigos [en] falsedad‖. En otras palabras, el odio
de ellos surgió de motivos impuros. David no había hecho nada que mereciera la enemistad de
ellos, y oró para que no tuvieran ningún momento de regocijo o de exaltación sobre él.
(Versículo 19a.) Entonces pidió que sus maliciosos enemigos no tuvieran razón para ‗guiñar el
ojo‘, pues el que literalmente hicieran eso daría evidencia de que estaban regocijándose
triunfalmente por sus malvados designios. (Proverbios 10:10; 16:29, 30.) Jesús citó este
versículo y lo aplicó a los que lo odiaban. (Juan 15:24, 25.)
· 36:3—¿Habían tenido perspicacia alguna vez tales inicuos?
La implicación aquí es que hubo un cambio en la actitud de aquellas personas, de modo que ya
no eran lo que anteriormente profesaban ser. Tal vez hubo un tiempo en que desplegaban
sabiduría y hacían cosas buenas. Pero dejaron estas cosas atrás y se hicieron apóstatas. El
rey Saúl fue uno que dejó el derrotero de sabiduría y mostró odio para con David. (1 Samuel,
capítulo 18.) Algunos eruditos hasta creen que David estaba refiriéndose a Saúl en el
Salmo 36.
· 40:6—¿Qué significan las palabras ‗Mis oídos los abriste‘?
Esto podría significar que Jehová hizo que los oídos de David se ajustaran a las direcciones de
Dios, o tal vez que Jehová creó los oídos con los que David podía escuchar Sus
mandamientos. Es interesante que en la versión Septuaginta se vierten estas palabras de la
siguiente manera: ―Me preparaste un cuerpo‖. Prescindiendo de cuál haya sido la fuente de
esta traducción, lleva la misma idea básica del hebreo. Es decir, recalca lo necesario que es la
obediencia. (Compárese con 1 Samuel 15:22; Oseas 6:6.) Pablo aplicó este versículo a
Jesucristo. (Hebreos 10:5-10.) Puesto que Pablo usó las palabras de la Septuaginta, ahora la
frase ―me preparaste un cuerpo‖ forma parte de ―toda Escritura‖ que ―es inspirada de Dios‖.
(2 Timoteo 3:16.)
Lección para nuestro día: El Salmo 37 contiene muchas lecciones para nosotros los que
vivimos en medio de una generación inicua. Aunque los malhechores prosperen, no debemos
envidiarlos ni tratar de imitarlos. Más bien, debemos ‗guardar silencio delante de Jehová‘, no
buscando faltas, sino, más bien, confiando tranquilamente en que él obrará a favor nuestro a su
debido tiempo. (Salmo 37:5, 7.)
Ciertamente los Salmos proveen muchas palabras inspiradoras y consoladoras. Los primeros
41 salmos han mostrado vez tras vez que, prescindiendo de lo difíciles que sean nuestras
circunstancias, Jehová no nos abandonará. No hay duda de que después de leerlos debemos
sentirnos movidos a repetir las palabras que concluyen el Salmo 41: ―Bendito sea Jehová el
Dios de Israel desde tiempo indefinido aun hasta tiempo indefinido. Amén y Amén‖.
*** w86 15/10 págs. 29-30 Espere en Jehová **
Puntos sobresalientes de la Biblia Salmos 42 a 72
―Espera a Dios‖
Sírvase leer los Salmos 42 a 45. Cierto levita exiliado se siente triste porque no puede ir al
santuario de Jehová, pero se contenta con ‗esperar en Dios‘ para que obre como su Libertador.
(Salmos 42, 43.) Luego se presenta una súplica en favor de una nación que se encuentra en
peligro, refiriéndose tal vez a la invasión de Judá por los asirios en los días del rey Ezequías.
(Salmo 44.) A continuación, una canción de boda real señala hacia el Mesías, Jesucristo.
(Salmo 45.)
· 42:1—¿En qué sentido era el salmista como una ‗cierva que ansía agua‘?
Por alguna razón este levita estaba en el exilio. Añoraba tanto adorar en el santuario de Jehová
que se sentía como una cierva, o venada, perseguida y con sed, mientras ansiaba agua en un
país desolado y árido. Él tenía ‗sed‘, o ansias, de Jehová y del privilegio de adorar a Dios en Su
santuario. (Versículo 2.)
· 45:1—¿Qué ―asunto agradable‖ conmovió el corazón del salmista?
Parte de este salmo tenía aplicación en Jesucristo. (Salmo 45:6, 7; Hebreos 1:8, 9.) De modo
que el corazón del salmista se conmovió debido a un acontecimiento futuro... el establecimiento
del Reino Mesiánico en 1914. Los testigos de Jehová también se sienten movidos a declarar
este ―asunto agradable‖.
Lección para nuestro día: La experiencia que tuvo este salmista en el exilio debería movernos
a mostrar profundo aprecio por el compañerismo de que disfrutamos actualmente en el pueblo
de Jehová. Si debido a la persecución se nos encarcela temporalmente y se nos priva de dicho
compañerismo, podemos meditar sobre los gozos que hemos tenido en el servicio sagrado y
orar por aguante mientras ‗esperamos en Dios‘ para que nos restaure al compañerismo activo
con sus adoradores. (Salmo 42:4, 5, 11; 43:3-5.)
Nuestro misericordioso Refugio
Lea Salmos 46 a 51. Jehová, nuestro Refugio, hará que cesen las guerras. (Salmo 46.) Él es
―Rey sobre toda la tierra‖; también, este Protector invencible es nuestro Dios para siempre.
(Salmos 47, 48.) Los oprimidos deben esperar en Jehová, pero todo el que ‗ofrece acción de
gracias como su sacrificio‘ ‗verá la salvación por Dios‘. (Salmos 49, 50.) Si erramos pero nos
arrepentimos, como se arrepintió David del pecado que cometió con Bat-seba, Dios nos librará
de culpa por derramamiento de sangre porque a ‗un corazón quebrantado y aplastado, él no lo
despreciará‘. (Salmo 51.)
· 46:2—¿Cómo pudiera ser que ―la tierra sufra cambio‖?
Aun si las montañas desaparecieran en el mar debido a un cataclismo natural de la tierra, los
que confían en Dios no tendrán que temer. Prescindiendo de lo que ocurra, pueden tener
confianza firme en Jehová como su Refugio.
· 51:5—¿A qué pecado se refería David?
Él no quiso decir que las relaciones maritales, la concepción y el nacimiento sean
pecaminosos; tampoco se refirió a algún pecado específico que haya cometido su madre. Más
bien, estaba reconociendo su propia naturaleza pecaminosa como descendiente de Adán. (Job
14:4; Romanos 5:12.) Jehová le mostró misericordia a David no solo debido al pacto del Reino,
sino también por su arrepentimiento. (2 Samuel 7:12-16.)
Lección para nuestro día: El Salmo 46 encajaría con el tiempo en que Jerusalén estaba
siendo amenazada por los asirios. Dado que sabía que ‗Dios es un refugio, una ayuda que
podía hallarse prontamente durante angustias‘, el rey Ezequías oró a Jehová, y la ciudad fue
librada milagrosamente. (2 Reyes, capítulo 19.) Cuando nos hallemos en angustia, nosotros
también debemos hacer de Dios nuestro Refugio. ¿Cómo? Confiando en él, adhiriéndonos a su
Palabra y apegándonos a su organización.
Liberación segura
Lea Salmos 52 a 57. Dios ―desarraigará de la tierra de los vivientes‖ a la persona mala y
―esparcirá los huesos‖ de quienquiera que se oponga a Su pueblo. (Salmos 52, 53.) Cuando
estaba siendo perseguido por Saúl, David estaba seguro de que recibiría liberación divina y,
como víctima de la traición, arrojó su carga sobre Jehová. (Salmos 54, 55.) El salmista se
contentaba con esperar en Dios para que pusiera fin a las adversidades. (Salmos 56, 57.)
· 52:8—¿De qué manera es el justo como un olivo?
El olivo puede simbolizar productividad, belleza y dignidad. (Jeremías 11:16; Oseas 14:6.) En
este salmo, se hace un contraste entre el maquinador inicuo que terminará mal y una persona
justa que recibe protección y prospera como un olivo frondoso.
· 54:1—¿Por qué dijo David ―sálvame por tu nombre‖?
El nombre divino no tiene poderes místicos, pero puede representar a Dios mismo. Así que,
mediante esta súplica, David reconoció que Jehová tiene el poder para salvar a Su pueblo.
(Éxodo 6:1-8.) Aunque los zifeos le revelaron al rey Saúl dónde se hallaba David, una invasión
de los filisteos detuvo la persecución de Saúl contra David. (1 Samuel 23:13-29; Salmo 54,
sobrescrito.) De modo que Jehová ciertamente salvó a David.
Lección para nuestro día: Los enemigos de David habían excavado un hoyo delante de él.
(Salmo 57:6.) Tal hoyo para atrapar a un humano indicaría que había circunstancias peligrosas
o intrigas que pondrían en peligro a los siervos de Jehová. Pero los opositores del pueblo de
Dios pueden caer en sus propias trampas malvadas. Por lo tanto, si confiamos en Jehová y
ejercemos cautela, nuestra liberación es segura. (Proverbios 11:21; 26:27.)
―Esperando en silencio‖
Lea Salmos 58 a 64. Preocupado por la injusticia, David oró por retribución divina contra los
inicuos. (Salmos 58, 59.) Cuando estaba en peligro de ser derrotado, suplicó por rescate y
confiaba en que Dios aplastaría a sus adversarios. (Salmo 60.) Jehová ya había sido un refugio
para David; de modo que él esperaría la salvación en silencio. (Salmos 61, 62.) Cuando se vio
obligado a huir al desierto, posiblemente durante la rebelión de Absalón, David halló deleite ‗en
la sombra de las alas de Dios‘. (Salmo 63.) El salmista también oró por protección contra ―los
practicantes de nocividad‖ y confiaba en que el justo hallaría refugio en Jehová. (Salmo 64.)
· 58:3-5—¿De qué manera son los inicuos como una serpiente?
Las mentiras y calumnias de los inicuos pueden destruir la reputación de su víctima, del mismo
modo que el veneno de una serpiente puede ser mortífero. (Salmo 140:3; Romanos 3:13;
Santiago 3:8.) Además, los inicuos son ―sordos como la cobra que tapa su oído‖, pues rehúsan
escuchar y aceptar dirección.
· 63:3—¿En qué sentido es la bondad amorosa de Dios ―mejor que la vida‖?
El que se aparta de Dios carece de verdadero propósito en la vida. Pero el amor leal que
Jehová le manifestó a David le dio verdadero propósito a su vida. La intimidad con Dios
siempre hace que la vida de sus siervos aprobados sea significativa, les asegura la ayuda y
guía divina y les permite mirar al futuro hacia una vida eterna en felicidad.
Lección para nuestro día: David estaba contento con ‗esperar en silencio‘ para que Dios
obrara a favor de él. (Salmo 62:1-7.) Habiéndose sometido a la voluntad de Jehová, se sentía
seguro y en silencio tenía confianza en Dios. Si tenemos esa misma confianza en Jehová, ―la
paz de Dios‖ guardará nuestro corazón y nuestras facultades mentales mientras esperamos
liberación divina de los enemigos y de las tribulaciones. (Filipenses 4:6, 7; Salmo 33:20.)
Alabemos a nuestro Libertador
Lea Salmos 65 a 72. Jehová es alabado como la Fuente de cosechas abundantes,
chaparrones copiosos, pastos exuberantes y ganado fecundo. (Salmo 65.) Debe celebrarse
con melodía ―la gloria de su nombre‖. (Salmo 66.) A él se le debe elogiar y alabar como ―un
Dios de hechos salvadores‖. (Salmos 67, 68.) Se predicen los sufrimientos del Mesías, y se
ensalza a Jehová como ―el Proveedor de escape‖, en quien el salmista esperaría por ayuda.
(Salmos 69-71.) Tal confianza será remunerada, pues se asegura que habrá prosperidad y
liberación de la opresión por toda la Tierra durante el bendito reinado del Mesías. (Salmo 72.)
· 68:11—¿Quiénes constituyen el ―ejército grande‖ de mujeres?
Después que Jehová utilizó a los hombres de guerra de Israel para aniquilar al enemigo, las
israelitas proclamaron las buenas nuevas de la victoria con música, cantos y danzas. (1 Samuel
18:6, 7; compárese con Éxodo 15:20, 21.) En obediencia al ―dicho‖ o mandato de Dios, los
israelitas pelearon contra las naciones enemigas de la Tierra Prometida y las vencieron. Esto le
dio a las israelitas buenas nuevas que proclamar en las celebraciones de victorias. Hoy día, las
ministras desempeñan un papel importante como proclamadoras del Reino al declarar las
buenas nuevas respecto a los ‗dichos‘ de Jehová, que incluye el anunciar a las naciones el
hecho de que pronto serán sojuzgadas por el Rey Mesiánico, Jesucristo.
· 69:23—¿Por qué se le pidió a Dios que hiciera que las caderas del enemigo bambolearan?
Cuando los fuertes músculos de la cadera se endurecen, pueden ejercer mucha fuerza, pero
cuando la cadera se menea o bambolea, tal vez debido a temor, el resultado es que se pierde
la fuerza. En esta súplica por liberación, David le pide a Dios que prive a sus enemigos de su
fuerza, la cual quieren emplear incorrectamente.
· 72:16—¿Qué significa esta productividad?
‗El fruto como en el Líbano‘ pudiera denotar grano creciendo tan junto y tan alto que era como
la exuberante y verdosa arboleda del Líbano. Floreciendo posiblemente en terrazas hasta las
cumbres de las montañas, los tallos altos y gruesos que sostenían las pesadas espigas de
grano podrían compararse a los altos cedros del Líbano. Esto señala a una cosecha
excepcionalmente abundante durante el reinado del Mesías. Y el hecho de que ―los que son de
la ciudad florecerán como la vegetación‖ indica que los súbditos terrestres de Jesús
ciertamente serán numerosos.
Lección para nuestro día: El salmista oró: ―Porque me has hecho ver muchas angustias y
calamidades, quieras volver a hacerme revivir [Jehová]‖. (Salmo 71:20.) Aunque no es Dios
quien causa tales dificultades, él permite que seamos probados y que demos una respuesta al
Desafiador, el Diablo. (Santiago 1:13; Proverbios 27:11.) Jehová nunca deja que seamos
tentados más allá de lo que podemos soportar y puede ayudarnos a pasar a través de las
pruebas con fe fuerte. (1 Corintios 10:13; 1 Pedro 1:6, 7.) Los cristianos ungidos pasaron por
―muchas angustias y calamidades‖ cuando fueron perseguidos al fin de la I Guerra Mundial.
Pero Jehová ‗los hizo revivir‘ en 1919, y con ímpetu avanzaron en el servicio del Reino, más
tarde se unió a ellos la ―gran muchedumbre‖. (Revelación 7:9.) Por tales resultados, el Gran
Libertador ciertamente merece la alabanza.
Se requiere fe para esperar que Dios obre en favor nuestro. Tal vez tengamos que esperar en
silencio debido a que no podamos hacer nada para cambiar nuestras circunstancias difíciles.
Sin embargo, podremos aguantar, al igual que los salmistas, si estamos contentos con esperar
en Jehová.
*** w86 15/12 págs. 28-29 ―Bendigan a Jehová‖... ¿por qué? ***
Puntos sobresalientes de la Biblia Salmos 73 a 106
¿Quién de nosotros puede mostrarse desagradecido cuando piensa en todo lo que Jehová ha
hecho, está haciendo y hará por nosotros? En verdad, nuestro corazón debería incitarnos a
bendecir a nuestro Dios. En los libros Tercero y Cuarto de los Salmos se recalca que tenemos
suficientes razones para bendecir a Jehová. A medida que considera los Salmos 73 a 106,
pregúntese: ‗¿Qué razones tengo yo, personalmente, para bendecir a Jehová?‘.
No envidiemos a los inicuos
Sírvase leer Salmos 73 a 77. Se atribuyen estos Salmos a Asaf, y evidentemente esto incluye a
sus hijos. Asaf confiesa que envidiaba a los inicuos... hasta que recobró el juicio. (Salmo 73.)
Luego hay un lamento por la destrucción de Jerusalén. (Salmo 74.) A continuación se hallan
expresiones de gratitud al Dios ―inspirador de temor‖, seguido por una oración al ―Dios grande‖
para que recuerde a su pueblo afligido. (Salmos 75-77.)
· 73:24—¿A qué ―gloria‖ llevó Jehová al salmista?
Al salmista le pareció que los inicuos se hallaban en mejor situación que los justos hasta que se
dio cuenta de que ‗el acercarse a Dios era bueno para él‘. (Salmo 73:2-12, 28.) El permitir que
el ―consejo‖ de Dios lo dirigiera resultó en que recibiera ―gloria‖, es decir, el favor de Jehová,
una relación bendita con Él.
· 76:6—¿En qué sentido se ‗quedaron dormidos‘ ―el conductor de carro‖ y ―el caballo‖?
A los israelitas se les enseñó a confiar en Jehová más bien que en caballos y carros. (Salmo
20:7; Proverbios 21:31.) No tenían razón para temer a los caballos ni a los carros con hoces del
enemigo, pues Jehová podía quitar la fuerza de sus enemigos, haciendo que ‗se quedaran
dormidos‘. La referencia aquí es a ―un sueño de duración indefinida‖... la muerte. (Jeremías
51:39.) Esto debería ser una advertencia a los caudillos mundiales de hoy día, quienes confían
en sus armamentos. (Salmo 76:12.)
Lección para nuestro día: El Salmo 75 contiene una advertencia contra el orgullo cuando
dice: ―No ensalcen [...] su cuerno‖. (Versículo 5.) El cuerno era un símbolo de fuerza, poder.
(Deuteronomio 33:17.) El exaltar el cuerno demostraría un comportamiento altivo. Aquí el
salmista le advierte al inicuo que no adopte una actitud arrogante con relación a su
aparentemente segura posición de poder, pues Jehová ‗cortará los cuernos de los inicuos‘.
(Salmo 75:10.) El saber esto anima a los siervos de Dios a permanecer fieles a él a pesar de la
aparente prosperidad del inicuo. (Compárese con Salmo 144:11-15a.)
Obedezcamos al ―Altísimo‖
Lea Salmos 78 a 83. Continúan los salmos de Asaf. Se hace un recuento de las lecciones de la
historia de Israel. (Salmo 78.) Luego hay un lamento debido a la desolación del templo, seguido
por una oración por la restauración de Israel. (Salmos 79, 80.) Después de una canción de
reflexión sobre la liberación por Dios que exhorta a su pueblo a obedecerle, hay súplicas para
que Jehová ejecute juicio sobre los jueces corruptos y sobre los enemigos de Israel. (Salmos
81-83.)
· 82:1—¿De qué manera juzga Dios ―en medio de los dioses‖?
Evidentemente, ―los dioses‖ eran los jueces de Israel. Se les llamaba dioses porque eran
poderosos en autoridad judicial. Jehová, como el Juez Supremo, tenía el derecho divino de
entrar en medio de tales jueces para censurarlos por no juzgar en armonía con su ley. (Isaías
33:22; Salmo 82:2-4.)
· 83:9-15—¿Era la venganza lo que motivaba al salmista?
De ninguna manera. Él estaba orando por que Dios ejecutara juicio sobre los que ‗odiaban
intensamente‘ a Jehová. (Versículo 2.) Así, otras naciones sabrían que Dios, cuyo nombre es
Jehová, es en verdad ―el Altísimo sobre toda la tierra‖. (Versículo 18.) Esta manifestación de
poder resultaría en magnificar el nombre de Dios, Jehová, por toda la Tierra.
Lección para nuestro día: El hecho de que Jehová recompensa abundantemente a los que le
obedecen se indica por la referencia que se hace a la ―grosura del trigo‖. (Salmo 81:16.) Aquí la
palabra ―grosura‖ se usa figurativamente para indicar lo más selecto. (Compárese con Salmo
63:5.) Si los israelitas hubieran ‗escuchado la voz de Jehová‘, él los hubiera bendecido con ―la
grosura del trigo‖... lo mejor, lo más selecto de todas las cosas. (Salmo 81:11; Deuteronomio
32:13, 14.) De manera similar, si ‗escuchamos la voz de Jehová‘, él nos bendecirá
abundantemente. (Proverbios 10:22.)
Acerquémonos a Dios
Lea Salmos 84 a 89. El salmista expresa anhelo por la casa de Dios. (Salmo 84.) Luego, los
exiliados que han regresado piden que Jehová aparte su cólera. (Salmo 85.) David ora por guía
y protección, seguro de que Jehová le contestará. (Salmo 86.) Una melodía en cuanto a los
‗nacidos en Sión‘ es seguida por la súplica de un afligido. (Salmos 87, 88.) Luego viene un
salmo que hace resaltar la bondad amorosa de Jehová, como se mostró en el pacto davídico.
(Salmo 89.)
· 84:3—¿Por qué se mencionan los pájaros?
El salmista, un levita descendiente de Coré, anhelaba estar en el ―magnífico tabernáculo‖ de
Jehová. (Versículos 1, 2.) Pero había decenas de miles de levitas. Solo una vez cada seis
meses se asignaría a una división de levitas a servir por una semana en el tabernáculo. En
contraste, hasta los pájaros pequeños tenían un hogar más permanente en el santuario, pues
edificaban nidos allí. ¡Qué feliz se sentiría el salmista de poder alabar a Jehová al morar
permanentemente en la casa de Jehová!
· 89:49—¿Qué eran estos ―actos de bondad amorosa‖?
La expresión ―actos de bondad amorosa‖ se refiere al pacto del Reino con todos sus rasgos. En
tiempos de dificultad era apropiado que los israelitas sacaran a relucir ante Jehová estas
promesas, no porque dudaran del pacto, sino como medio para acudir a Dios sobre la base de
este.
Lección para nuestro día: El Salmo 85 da énfasis a lo que debería hacernos anhelar el nuevo
sistema de cosas de Dios. Solo se hace una breve mención de las bendiciones materiales.
(Versículo 12.) Se da mayor énfasis a las bendiciones espirituales: la bondad amorosa, el
apego a la verdad, la justicia y la paz. (Versículos 10-13.) Jehová no recurre a los anhelos
materialistas, sino que muestra que las bendiciones espirituales del nuevo sistema deberían ser
la motivación más poderosa para nosotros.
‗¡Jehová ha llegado a ser Rey!‘
Lea Salmos 90 a 100. Moisés contrasta la naturaleza eterna de Dios con la breve duración de
la vida del hombre, y luego hace resaltar a Jehová como nuestra fuente de seguridad. (Salmos
90, 91.) Se ensalzan las cualidades superiores de Jehová, y salmos sucesivos destacan el
poder de Dios, su bondad amorosa y su justicia, así como el tema del Reino. (Salmos 92-100.)
· 90:10—¿No vivió Moisés mucho más de 80 años?
Moisés, quien vivió 120 años, no era alguien común en comparación con la gente en general.
De la generación sin fe que salió de Egipto, los que habían sido inscritos ―de veinte años de
edad para arriba‖ habrían de morir en espacio de 40 años, lo cual encaja bien con lo que
Moisés declara. (Números 14:29-34.) El que se comente que al tiempo de morir Moisés ―su ojo
no se había oscurecido, y su fuerza vital no había huido‖ indica que tenía el poder sustentador
de Dios. (Deuteronomio 34:7.)
· 95:3—¿De qué manera es Jehová un ―Rey sobre todos los demás dioses‖?
Como Soberano Universal, Jehová es supremo y es el Rey sobre todos los dioses falsos por el
hecho de que es muy superior a todos ellos. Simplemente, no hay comparación entre Jehová
Dios y cualesquiera ángeles o cosas que algunos quizás adoren, incluso los dioses falsos que
no existen.
Lección para nuestro día: El Salmo 91 destaca otra razón que tenemos para bendecir a
Jehová... ―el lugar secreto del Altísimo‖. (Versículo 1.) Este es el lugar de seguridad espiritual,
de protección contra el daño espiritual, para los que satisfacen los requisitos expuestos en este
salmo. Es ―secreto‖ porque la gente del mundo, que carece de visión espiritual, no sabe lo que
es. El hecho de que es el lugar secreto ―del Altísimo‖ indica que solo hallamos seguridad allí si
apoyamos el lado de Jehová en la cuestión de la soberanía universal.
―¡Alaben a Jah!‖
Lea Salmos 101 a 106. David describe aquí la manera de administrar los asuntos de estado.
(Salmo 101.) Alguien afligido ora a Jehová para que ‗edifique a Sión‘. (Salmo 102.) A
continuación sigue una serie de llamados a ‗bendecir a Jehová‘ que hacen resaltar la
misericordia de Dios, su grandeza y sus obras creativas. Además, aquí aparece la primera de
las más de 20 veces que se usa en los Salmos la expresión: ―¡Alaben a Jah!‖. (Salmos 103,
104.) Finalmente, dos salmos históricos bendicen a Jehová por sus obras a favor de su pueblo.
(Salmos 105, 106.)
· 102:25—¿Quién ‗colocó los fundamentos de la tierra‘?
El salmista estaba hablando acerca de Dios, pero el apóstol Pablo aplicó estas palabras a
Jesucristo. (Hebreos 1:10, 11.) Como se puede ver, estas palabras también aplican a Jesús,
pues él actuó como Agente de Jehová cuando creó el universo. (Colosenses 1:15, 16.) Por lo
tanto, de Jesús también se puede decir que ‗colocó los fundamentos de la tierra‘.
· 103:14—¿Qué significa ―formación‖?
La palabra que aquí se vierte ―formación‖ está relacionada con el verbo ―formar‖, usado en
Génesis 2:7, y el nombre ―alfarero‖, que se usa con relación al que da forma al barro. (Isaías
29:16; Jeremías 18:2-6.) Así, el salmista nos recuerda que Jehová, el Gran Alfarero, nos trata
tiernamente, sabiendo que somos tan frágiles como vasos de barro. (Compárese con
2 Corintios 4:7.)
· 104:4—¿De qué manera ‗hace Jehová a sus ángeles espíritus‘?
Puesto que los ángeles ya son criaturas de espíritu, esto ciertamente no se refiere a sus
cuerpos espirituales. Sin embargo, la palabra ―espíritu‖ también puede significar ―viento‖ o
―fuerza activa‖. Por lo tanto, Dios puede usar a sus ángeles como fuerzas poderosas para
efectuar su voluntad. También pueden ser utilizados como agentes de ejecución... como ―un
fuego devorador‖. Es consolador para los cristianos saber que su obra de predicar está
respaldada por estas poderosas criaturas angelicales. (Compárese con Revelación 14:6, 7.)
Lección para nuestro día: El Salmo 106 nos ayuda a apreciar que los rebeldes Coré, Datán y
Abiram envidiaban la posición de Moisés como administrador de la nación de Dios. (Salmo
106:16; Números 16:2-11.) La rebelión fue aplastada finalmente, cuando ―un fuego empezó a
arder‖ entre los rebeldes. (Salmo 106:18.) Aquí, ciertamente se hacen manifiestos los peligros
del orgullo y la envidia. De igual manera, el criticar a los siervos nombrados de Jehová hoy día
puede traer Su desaprobación. (Hebreos 13:17; Judas 4, 8, 11.)
En verdad, Jehová nos ha dado mucho por lo cual estar agradecidos. Al considerar todas las
bendiciones que ha derramado sobre nosotros, ¿no deberíamos hacer como exhorta el
salmista, ‗Bendecir a Jehová, oh alma mía‘? (Salmo 103:1.)
*** w87 15/3 págs. 24-25 ¡Un Dios feliz, un pueblo feliz! ***
Puntos sobresalientes de la Biblia Salmo 107 al 150
La felicidad es una meta que la mayoría de la gente nunca alcanza. No obstante, existe un
pequeño grupo de personas para quienes la felicidad es un modo de vivir. ¿Cuál es la clave de
esa felicidad? ¡La adoración verdadera! Los Salmos nos convencen de que Jehová es un Dios
feliz y, por lo tanto, podemos ser felices si lo adoramos. Como prueba de esto, veamos el Libro
Quinto de los Salmos, es decir, los Salmos 107 a 150.
Jehová, el Libertador
Sírvase leer los Salmos 107 a 119. La oración de los judíos por liberación del cautiverio
babilónico recibe respuesta y ―los reclamados de Jehová‖ celebran su regreso con canción.
(Salmo 107.) A raíz de haber recibido liberación, David ‗produjo melodía‘ para Dios y declaró
Su bondad y amor. (Salmos 108, 109.) Habiendo recibido de Jehová poder, el Señor de David,
quien es Jesucristo, habría de subyugar a los enemigos de Dios. (Salmo 110.) Además de
rescatar a Su pueblo, Jehová bendice al hombre recto que le teme. (Salmos 111, 112.) Tras su
liberación de Babilonia, los judíos cantaban los Salmos Halel, o canciones de alabanza, en las
grandes fiestas anuales. (Salmos 113-118.) El Salmo 119 es el más largo, y de sus
176 versículos solo dos no hacen referencia a la palabra o ley de Dios.
· 107:27—¿Cómo ‗resultó confusa su sabiduría‘?
Como marineros atrapados en una tormenta destructora, la sabiduría de los judíos les resultó
inútil durante su cautiverio en Babilonia; todos los medios de liberación humanos fracasaron.
Pero al volverse a Jehová en esta situación turbulenta, recibieron liberación. Él calmó la
tormenta simbólica y los liberó al llevarlos a un ―puerto‖ seguro... a la tierra de Judá. (Salmo
107:30.)
· 110:3—¿Qué significa que haya ―hombres jóvenes justamente como gotas de rocío‖?
El rocío se asocia con bendición, productividad y abundancia. (Génesis 27:28.) Las gotas de
rocío también son delicadas, refrescantes, sostienen la vida y son numerosas. En el día de la
fuerza militar del Rey Mesiánico, sus súbditos se ofrecen con presteza y alegría en números
tan elevados que se les puede comparar a gotas de rocío. Justamente como gotas de rocío
refrescantes, por toda la organización de Jehová hoy hay muchos jóvenes que sirven a Dios y a
sus compañeros de adoración.
· 116:3—¿Qué son ―las sogas de la muerte‖?
Parecía como si la muerte hubiera atado tan fuertemente al salmista con sogas irrompibles que
el escaparse de ellas era imposible. Las sogas atadas fuertemente alrededor de las
extremidades producen dolores agudos, y la versión griega de los Setenta vierte la palabra
hebrea para ―sogas‖ como ―dolores‖. Por consiguiente, cuando Jesucristo murió, estuvo en el
agarro paralizante, o los dolores de la muerte. Por lo tanto, cuando Jehová resucitó a Jesús,
estaba ―desatando los dolores de la muerte‖. (Hechos 2:24.)
· 119:83—¿De qué manera era el salmista como ―un odre‖?
Mientras aguardaba a que Jehová lo consolara, el salmista se había puesto como un odre que
se cuelga cuando no está en uso. Debido al humo dentro de una tienda o dentro de una casa
sin chimenea, esta clase de envase de cuero se pondría con el tiempo oscuro, seco y arrugado.
De hecho, esto es lo que le sucedió al salmista a manos de sus perseguidores. (Versículo 84.)
Su estado angustioso probablemente se evidenciaba en su rostro triste y cara arrugada, y su
entero organismo pudo haber sido afectado de tal manera que haya perdido parte de su
humedad. (Compárese con Salmo 32:4.) De modo que él pudo haberse sentido sin valor
alguno como un odre seco y arrugado que se descarta porque ya no puede contener líquidos.
No obstante, no había ‗olvidado las disposiciones reglamentarias de Dios‘.
· 119:119—¿Cómo hace Dios que los inicuos cesen ―como escoria espumajosa‖?
La escoria que se forma sobre los metales derretidos o en el horno de fundición carece de todo
valor, es algo impuro que se desecha. Así el refinador separa de la ―escoria espumajosa‖
metales como el oro o la plata. Así mismo, para Jehová los inicuos solo son dignos de ir a dar
al escorial, y los hace cesar, separándolos de las personas que valen y que tienen Su
aprobación. (Compárese con Ezequiel 22:17-22.)
Lección para nosotros: Al igual que los judíos de la antigüedad, los testigos de Jehová de hoy
día esperan liberación... esta vez a través de la tormenta del Armagedón. (Revelación
16:14, 16.) Al tiempo señalado de Dios, este sistema de cosas será barrido por esa gran
guerra. Las personas que no acuden a Jehová por salvación quedarán totalmente
desamparadas al ser sacudidas por las olas de esa gran destrucción. Pero los sobrevivientes
‗darán gracias a Jehová por su bondad amorosa‘. Por lo tanto, en estos últimos días tanto los
seguidores ungidos de Jesús como la ―gran muchedumbre‖ pueden cifrar plena confianza en
Jehová. (Salmo 107:31; Revelación 7:9.)
‗Canciones de las Subidas‘
Lea los Salmos 120 a 134. A estos 15 salmos se les llama canciones ―de las Subidas‖. Los
escriturarios no concuerdan en cuanto al significado exacto de ―Subidas‖, pero quizás los
israelitas cantaban estos salmos cuando subían a la elevada ciudad de Jerusalén para celebrar
sus tres fiestas anuales. (Salmo 122:1.)
· 120:4—¿Qué eran las ―flechas aguzadas‖ y las ―brasas ardientes‖?
Una lengua calumniadora puede ser tan destructiva como un arma o un fuego. (Proverbios
12:18; Santiago 3:6.) Como pena merecida, Jehová se asegura de que a la lengua
calumniadora se le haga callar como si fuera por las flechas de un guerrero. Es interesante
notar que el carbón de la madera del arbusto llamado retama produce un calor intenso, y esto
señala a la severidad del juicio divino sobre ―la lengua mañosa‖. (Salmo 120:2, 3.)
· 131:2—¿Cómo llega a ser el alma como un ―niño destetado‖?
Antes de ser destetado, el niño anhela que su madre satisfaga su deseo de que se le alimente.
El niño destetado en los brazos de su madre siente satisfacción, seguridad y consuelo.
Satisfecho con seguir un proceder humilde (versículo 1), el salmista se sintió ―sosegado y
aquietado‖, como un niño destetado en los brazos de su madre. El esperar humildemente en
Jehová y hacer su voluntad trae seguridad y abundantes bendiciones.
Lección para nosotros: Aunque Jehová puede rescatar a su pueblo de la calamidad, no lo
protege de toda adversidad. De hecho, las adversidades movieron a los compositores de estos
salmos a escribirlos. No obstante, Dios ―no dejará que sean tentados más allá de lo que
pueden soportar, sino que [...] también dispondrá la salida‖. (1 Corintios 10:13.) Jehová sí nos
protege para que no caigamos en ruina espiritual. Bien puede manejar las situaciones para
eliminar la calamidad misma o bien puede fortalecernos para que podamos aguantar la presión.
Con ese fin es muy tranquilizadora y beneficiosa la unidad de que disfrutamos en nuestras
reuniones cristianas. (Salmo 133:1-3.)
El Dios digno de alabanza
Lea los Salmos 135 a 145. En contraste con los ídolos cuyos hacedores llegan a ser
justamente como ellos, Jehová es el Dios y Libertador digno de alabanza. (Salmos 135, 136.)
Aun cuando su pueblo estaba en Babilonia, ellos no olvidaron ―las canciones de Sión‖.
(Salmo 137.) David dice que ‗los reyes elogiarán a Jehová‘ y se regocija por la manera
maravillosa como él mismo está hecho. (Salmos 138, 139.) Ora por la protección de Dios y
ensalza Su bondad, sabiendo que solo una buena relación con Jehová trae verdadera felicidad.
(Salmos 140–145.)
· 138:2—¿Cómo engrandeció Dios su dicho sobre su nombre?
Cuando Jehová declara algo sobre la base de su nombre, esperamos mucho en cuanto al
cumplimiento de ello. No obstante, él siempre hace más de lo que esperamos, y la realización
sobrepasa por mucho nuestra expectativa. Dios magnifica su ―dicho‖ haciendo que su
cumplimiento sea mayor de lo que esperamos.
· 139:9—¿Qué se quiere decir con ―las alas del alba‖?
Esta expresión representa la luz del alba, como si tuviera alas, extendiéndose rápidamente en
el cielo desde el este hasta el oeste. Si David ―tomara las alas del alba‖ y alcanzara las
regiones más remotas del oeste, aun allí estaría bajo el cuidado y control de Jehová. (Salmo
139:10; compárese con Amós 9:2, 3.)
· 141:3—¿Por qué quiso David ‗vigilancia sobre la puerta de sus labios‘?
David sabía el daño que puede ocasionar la lengua, y que los hombres imperfectos se sienten
tentados a hablar con dureza, en especial cuando se les provoca. Moisés fue el hombre más
manso de la Tierra, pero pecó con su lengua respecto a las aguas de Meribá. (Números 12:3;
20:9-13.) Entonces, el dominio de los labios es necesario para evitar habla dañina y conservar
un buen corazón. (Santiago 3:5-12.)
· 142:7—¿Por qué pensaba David que su alma estaba en un ―calabozo‖?
Se sintió completamente solo con sus problemas, como si estuviera en un calabozo oscuro y
peligroso, sin ser comprendido, y separado de todos los humanos. Cuando sentimos algo
similar y pensamos que nuestra ―derecha‖ está expuesta a ataques, con confianza podemos
dirigirnos a Jehová pidiéndole ayuda. (Salmo 142:3-7.)
Lección para nosotros: En el Salmo 139 David expresa su deleite en el hecho de que Dios
puede ‗escudriñarlo completamente‘ y ‗conocerlo‘ a él y conocer sus caminos. Más bien que
buscar escape, David quería ceder más a la guía y control de Jehová. Sabía que Dios siempre
lo observaba. El saber eso no solo restringe a uno de hacer el mal, sino que también le
proporciona un inmenso bienestar. El hecho de que Jehová ve nuestros hechos, comprende
nuestros problemas y siempre está listo para ayudarnos produce en nosotros un intenso
sentido de seguridad y paz, lo cual es esencial para nuestra felicidad.
¡Alabe a Jah!
Lea los Salmos 146 a 150. Estos salmos tocan el tema principal del entero Libro de los Salmos:
―¡Alaben a Jah!‖. Cada uno de ellos comienza y concluye con esas palabras gloriosas. ¡Todo
esto asciende a un magnífico crescendo en el Salmo 150, en el cual se invita a toda la creación
a ‗alabar a Jah‘!
· 146:3—¿Por qué no cifrar confianza en los líderes humanos?
Los líderes humanos son mortales. No pueden salvarse a sí mismos ni a los que en ellos
confían. De modo que la confianza en el liderazgo humano está socavada por la muerte que al
fin viene. Pero ‗feliz es aquel cuya esperanza está en Jehová su Dios‘. (Salmo 146:5, 6.) El
salmista vio la necesidad de tener una guía superior a la que los humanos mismos ofrecen.
· 148:4—¿Qué son las ―aguas que están sobre los cielos‖?
Aparentemente el salmista se refirió a las nubes que portan agua sobre la tierra para
descargarla de vez en cuando en la forma de lluvia, la cual con el tiempo corre de regreso a los
océanos. Este ciclo es esencial para la vida, y su propia existencia alaba al Creador. Dado que
a la expansión atmosférica entre la tierra y las nubes puede llamársele cielos, el salmista se
refirió a las nubes como las ―aguas que están sobre los cielos‖.
Los Salmos patentizan esta verdad: Para ser verdaderamente felices, necesitamos una buena
relación con Jehová. De ese modo, la entera meta del pueblo de Dios y el propósito de nuestra
existencia pueden resumirse en la invitación final del salmista: ―Toda cosa que respire [...] alabe
a Jah. ¡Alaben a Jah!‖. (Salmo 150:6.)
*** w06 15/5 págs. 17-20 Puntos sobresalientes del libro primero de los Salmos ***
―MI DIOS ES MI ROCA‖
(Salmo 1:1–24:10)
Tras declararse feliz al hombre que se deleita en la ley de Jehová en el primer Salmo, el
segundo entra de lleno en el tema del Reino. En esta colección de salmos predominan los
ruegos a Dios, como ilustran los Salmos 3 a 5, 7, 12, 13 y 17, en los que el autor pide que lo
libren de sus enemigos. En el Salmo 8 se destaca la grandeza de Jehová al contrastarlo con el
insignificante ser humano.
David presenta a Jehová como el Protector de su pueblo cuando canta: ―Mi Dios es mi roca.
En él me refugiaré‖ (Salmo 18:2). A continuación, pasa a alabarlo por sus diversas facetas
como Creador y Legislador en el Salmo 19, como Salvador en el Salmo 20, y como Salvador de
su Rey ungido en el Salmo 21. En el Salmo 23 lo presenta como el Gran Pastor, y en el Salmo
24, como a un Rey glorioso.
Respuestas a preguntas bíblicas:
2:1, 2. ¿Qué es la ―cosa vacía‖ que las naciones siguen hablando entre dientes? La
―cosa vacía‖ es la preocupación constante de los gobiernos humanos por perpetuar su
autoridad. Se la califica de vacía porque está condenada al fracaso. ¿Cómo pueden creer los
grupos nacionales que tendrán éxito si han tomado su posición ―contra Jehová y contra su
ungido‖?
2:7. ¿Qué es el ―decreto de Jehová‖? Es el pacto para un Reino que Jehová ha hecho con
su amado Hijo, Jesucristo (Lucas 22:28, 29).
2:12. ¿En qué sentido pueden ―bes[ar] al hijo‖ los gobernantes de las naciones?
En tiempos bíblicos, el beso era una muestra de amistad y lealtad, además de una forma de
dar la bienvenida a los invitados. Así pues, los reyes de la Tierra reciben la orden de besar al
Hijo, esto es, darle la bienvenida como Rey Mesiánico.
Encabezamiento del Salmo 3. ¿Para qué son los encabezamientos que preceden a
algunos salmos? A veces identifican al escritor del salmo o aportan datos sobre las
circunstancias en las que se compuso, como ocurre en el Salmo 3. En ocasiones indican el
propósito o el uso que se le daba a ese salmo en particular (como en los Salmos 4 y 5), y otras
veces suministran instrucciones musicales (como en el Salmo 6).
3:2. ¿Qué significa la palabra Sélah? Por lo general se cree que este término marca una
pausa para meditar en silencio, ya sea cuando se canta solo o acompañado por instrumentos
musicales. Con esta pausa se quería recalcar la idea o el sentimiento que se acababa de
expresar. En la lectura pública de los Salmos no hace falta leer este término.
11:3. ¿Qué fundamentos están demolidos? Son los fundamentos en los que se basa la
sociedad humana: la ley, el orden y la justicia. Cuando estos se corrompen, reina el desorden
social y desaparece la justicia. En semejantes condiciones, ―[todo el] que sea justo‖ debe
confiar plenamente en Dios (Salmo 11:4-7).
21:3. ¿Qué tiene de especial la ―corona de oro refinado‖? No se especifica si se trataba
de una corona literal o si era una representación simbólica de la gloria que le reportaron a
David sus numerosas victorias. No obstante, este versículo alude proféticamente a la corona
real que Jehová concedió a Jesús en 1914. El hecho de que la corona sea de oro indica la
elevadísima calidad de este reinado.
22:1, 2. ¿Por qué pensó David que Jehová lo había abandonado? David soportaba tanta
presión debido a sus enemigos que su ‗corazón se había hecho como cera y se había derretido
muy dentro de sus entrañas‘ (Salmo 22:14). Igual que Jesús cuando estaba en el madero, es
posible que creyera que Jehová lo había abandonado (Mateo 27:46). Sus palabras manifiestan
la reacción humana natural en una situación desesperada. La oración que aparece en Salmo
22:16-21, no obstante, deja claro que David no había perdido la fe en Dios.
Lecciones para nosotros:
1:1. No debemos buscar la compañía de quienes no aman a Jehová (1 Corintios 15:33).
1:2. No deberíamos permitir que pase un día sin pensar en cosas espirituales (Mateo 4:4).
4:4. Hacemos bien en refrenar la lengua cuando estamos enfadados o airados para no decir
algo de lo que luego nos arrepintamos (Efesios 4:26).
4:5. Nuestros sacrificios espirituales pueden considerarse ―sacrificios de la justicia‖ solo
si tenemos los motivos correctos y si nuestra conducta está a la altura de las normas de
Jehová.
6:5. ¿Qué mejor razón habría que esta para querer seguir viviendo? (Salmo 115:17.)
9:12. Jehová busca a quienes son culpables de derramamiento de sangre para castigarlos,
pero también recuerda el ―clamor de los afligidos‖.
15:2, 3; 24:3-5. Los verdaderos adoradores dicen la verdad y evitan hacer juramentos en
falso y calumniar.
15:4. A menos que nos demos cuenta de que hemos prometido algo que está en conflicto
con las enseñanzas bíblicas, debemos hacer todo lo posible por cumplir nuestras promesas,
aun cuando nos resulte muy difícil hacerlo.
15:5. Los siervos de Jehová debemos tratar de no dar mal uso al dinero.
17:14, 15. ―Los hombres de este sistema de cosas‖ se dedican a vivir bien, criar una familia
y dejar una herencia. El principal interés en la vida de David era ganarse un buen nombre ante
Jehová para poder ‗contemplar su rostro‘, es decir, gozar de su favor. Al ‗despertar‘ a las
promesas y garantías de Jehová —o sea, al tener conciencia de ellas—, David se sentiría
‗satisfecho de ver Su forma‘; en otras palabras, se alegraría de que Jehová estuviera a su lado.
Al igual que David, ¿no deberíamos poner nuestro corazón en los tesoros espirituales?
19:1-6. Si la creación inanimada —que no puede hablar ni razonar— glorifica a Jehová, ¿no
deberíamos hacerlo con más razón nosotros, que podemos pensar, hablar y rendir adoración?
(Revelación [Apocalipsis] 4:11.)
19:7-11. ¡Cuánto nos beneficia cumplir los requisitos de Jehová!
19:12, 13. Debemos tener cuidado a fin de no pecar cometiendo equivocaciones o actos
insolentes.
19:14. Es necesario prestar atención no solo a lo que hacemos, sino también a lo que
decimos y pensamos.
―A CAUSA DE MI INTEGRIDAD ME HAS SOSTENIDO‖
(Salmo 25:1–41:13)
En los Salmos 25 y 26, David expresa un sincero y admirable deseo por mantenerse íntegro,
algo que está firmemente resuelto a hacer. Él canta: ―En cuanto a mí, andaré en mi integridad‖
(Salmo 26:11). En una oración en la que pide perdón por sus pecados, reconoce: ―Cuando me
quedé callado, se me gastaron los huesos por mi gemir todo el día‖ (Salmo 32:3). David
asegura a quienes son leales a Dios: ―Los ojos de Jehová están hacia los justos, y sus oídos
están hacia su clamor por ayuda‖ (Salmo 34:15).
Los consejos del Salmo 37, que tan prácticos fueron para los israelitas, también lo son para
nosotros, pues vivimos en ―los últimos días‖ de este sistema de cosas (2 Timoteo 3:1-5).
Refiriéndose proféticamente a Jesucristo, Salmo 40:7, 8 declara: ―Aquí he venido, en el rollo del
libro está escrito de mí. En hacer tu voluntad, oh Dios mío, me he deleitado, y tu ley está dentro
de mis entrañas‖. El último salmo de esta colección trata de cómo David pedía ayuda a Jehová
durante los difíciles años que siguieron a su pecado con Bat-seba. Allí canta: ―En cuanto a mí,
a causa de mi integridad me has sostenido‖ (Salmo 41:12).
Respuestas a preguntas bíblicas:
26:6. ¿De qué modo marchamos simbólicamente alrededor del altar de Jehová como
hizo David? Este altar representa la voluntad de Jehová de aceptar el sacrificio de Jesucristo
para redimir a la humanidad (Hebreos 8:5; 10:5-10). Nosotros marchamos alrededor del altar
de Jehová al poner fe en ese sacrificio.
29:3-9. ¿Qué se quiere ilustrar comparando la voz de Jehová a una tormenta que
siembra el temor mientras se desplaza? Así se ilustra el impresionante poder de Jehová.
31:23. ¿En qué sentido se paga en sumo grado a la persona altiva? La paga en este
caso se refiere al castigo. Jehová paga al justo por sus errores involuntarios con disciplina.
Pero paga en sumo grado —es decir, castiga de forma severa— a la persona altiva que
no rectifica su mala conducta (Proverbios 11:31; 1 Pedro 4:18).
33:6, nota. ¿Qué es ―el espíritu‖, o ―aliento‖, de la boca de Jehová? Este espíritu es la
fuerza activa de Dios, o espíritu santo, que él empleó para crear los cielos físicos (Génesis
1:1, 2). Se le llama el espíritu, o aliento, de su boca porque, como si fuera un potente soplido,
puede enviarse para realizar ciertas tareas desde lejos.
35:19. ¿Por qué pidió David que no se les permitiera guiñar el ojo a los que lo
odiaban? Que los enemigos de David guiñaran el ojo indicaría que sus malvados planes contra
él habían tenido éxito y que se alegraban por ello, de ahí que David pidiera que esto
no sucediera.
Lecciones para nosotros:
26:4. Nos conviene evitar todo tipo de relación con quienes ocultan su identidad en las salas
de charla en Internet, con compañeros de estudios o de trabajo que fingen ser nuestros amigos
con malas intenciones, con los apóstatas que aparentan sinceridad y con quienes llevan una
doble vida.
26:7, 12; 35:18; 40:9. Debemos alabar públicamente a Jehová en las reuniones cristianas.
26:8; 27:4. ¿Valoramos las reuniones cristianas?
26:11. Al mismo tiempo que expresaba su determinación a permanecer íntegro, David pedía
que se le redimiera. Su caso ilustra que nuestras imperfecciones no impiden que podamos ser
leales.
29:10, nota. El hecho de que Jehová se siente sobre ―el diluvio‖, o sobre el ―océano
celestial‖, indica que tiene pleno control de su poder.
30:5. La cualidad predominante de Jehová es el amor y no la cólera.
32:9. Jehová no quiere que seamos como mulos o asnos que obedecen porque se les obliga
con bridas o látigos. Más bien, desea que decidamos obedecerle porque comprendemos su
voluntad.
33:17-19. Ningún sistema humano, no importa lo poderoso que sea, puede brindarnos la
salvación. Debemos depositar nuestra confianza en Jehová y en su Reino.
34:10. ¡Qué reconfortante garantía da este versículo para quienes ponen los intereses del
Reino en primer lugar en la vida!
39:1, 2. Cuando las personas malvadas tratan de sonsacarnos información para perjudicar a
nuestros hermanos, nosotros ‗pondremos un bozal como guardia para nuestra propia boca‘ y
nos mantendremos callados.
40:1, 2. La confianza en Jehová puede ayudarnos a sobrellevar la depresión y sacarnos ―de
un hoyo de rugidos, desde el cieno del sedimento‖.
40:5, 12. No habrá calamidad ni debilidad personal capaz de aplastarnos, por muchas que
sean, si no perdemos de vista el hecho de que nuestras bendiciones ‗son más numerosas de lo
que podemos relatar‘.
*** w06 1/6 págs. 8-11 Puntos sobresalientes del libro segundo de los Salmos ***
JEHOVÁ ES NUESTRO ―REFUGIO Y FUERZA‖
(Salmo 42:1–50:23)
Un levita se halla en el exilio. Apenado porque no puede ir al santuario para adorar a
Jehová, se consuela diciéndose: ―¿Por qué estás desesperada, oh alma mía, y por qué estás
alborotada dentro de mí? Espera a Dios‖ (Salmo 42:5, 11; 43:5). Este versículo repetido enlaza
las tres estrofas de los Salmos 42 y 43 en un solo poema. El Salmo 44 es una súplica por Judá,
una nación angustiada, tal vez debido a la amenaza de una invasión asiria en los días del rey
Ezequías.
El Salmo 45, una canción sobre la boda de un rey, es un cuadro profético del Rey Mesiánico.
Los siguientes tres salmos representan a Jehová como ―refugio y fuerza‖, ―un gran Rey sobre
toda la tierra‖ y una ―altura segura‖ (Salmo 46:1; 47:2; 48:3). El Salmo 49 señala hermosamente
que ningún hombre ―puede de manera alguna redimir siquiera a un hermano‖ (Salmo 49:7). Los
primeros ocho salmos de la segunda sección se atribuyen a los hijos de Coré. El noveno, el
Salmo 50, es una composición de Asaf.
Respuestas a preguntas bíblicas:
44:19. ¿Qué era ―el lugar de chacales‖? El salmista quizá se refería a un campo de
batalla, donde los chacales se alimentan de los cadáveres.
45:13, 14a. ¿Quién es ―la hija del rey‖ que ―será llevada al rey‖? Es la hija del ―Rey de la
eternidad‖, Jehová Dios (Revelación [Apocalipsis] 15:3). Representa a la congregación
glorificada de 144.000 cristianos, a quienes Jehová adopta como sus hijos ungiéndolos con su
espíritu (Romanos 8:16). Esta ―hija‖ de Jehová, ―preparada como una novia adornada para su
esposo‖, será llevada ante el novio, el Rey Mesiánico (Revelación 21:2).
45:14b, 15. ¿A quiénes representan ―las vírgenes‖? A la ―gran muchedumbre‖ de
adoradores verdaderos que se unen al resto ungido y lo apoyan. Puesto que ―salen de la gran
tribulación‖ con vida, estarán en la Tierra cuando se lleve a cabo la boda del Rey Mesiánico en
el cielo (Revelación 7:9, 13, 14). En ese momento ellos sentirán gran ―regocijo y gozo‖.
45:16. ¿En qué sentido llegará a haber hijos en lugar de los antepasados del rey?
Cuando Jesús nació en la Tierra, tuvo antepasados terrestres. Estos se convertirán en sus hijos
cuando él los resucite durante su Reinado de Mil Años. Algunos de ellos se hallarán entre
quienes sean nombrados ―príncipes en toda la tierra‖.
50:2. ¿Por qué se llama a Jerusalén ―la perfección de la belleza‖? No era por la
apariencia de la ciudad, sino por el hecho de que Jehová la utilizaba y le había conferido
esplendor al convertirla en la sede de su templo y en la capital de sus reyes ungidos.
Lecciones para nosotros:
42:1-3. Tal como una cierva en una región árida ansía el agua, el levita ansiaba acercarse a
Jehová. Estaba tan triste porque no podía adorar a Jehová en su santuario que ‗sus lágrimas
llegaron a ser su alimento día y noche‘, es decir, perdió el apetito. ¿No deberíamos cultivar un
aprecio profundo por adorar a Jehová junto con nuestros hermanos en la fe?
42:4, 5, 11; 43:3-5. Si por alguna razón más allá de nuestro control se nos separa
temporalmente de la congregación cristiana, nos sostendrá recordar los momentos felices
pasados con nuestros hermanos. Aunque tales recuerdos quizá aumenten nuestra soledad al
principio, también nos ayudarán a tener presente que Dios es nuestro refugio y que
necesitamos esperar en él para recibir alivio.
46:1-3. Sin importar las calamidades que afrontemos, debemos tener una confianza
inquebrantable en que ―Dios es para nosotros refugio y fuerza‖.
50:16-19. La persona que habla con engaño y practica la maldad no tiene ningún derecho a
representar a Dios.
50:20. En vez de apresurarnos a hablar sobre las faltas de los demás, debemos pasarlas por
alto (Colosenses 3:13).
―HACIA DIOS ESPERA SILENCIOSAMENTE, OH ALMA MÍA‖
(Salmo 51:1–71:24)
Este grupo de salmos empieza con la oración sincera de David después de que pecó con
Bat-seba. Los Salmos 52 a 57 muestran que Jehová librará a los que arrojan su carga sobre él
y esperan a que los salve. Los Salmos 58 a 64 indican que David hace de Jehová su refugio
durante todas sus angustias. Él canta: ―Hacia Dios espera silenciosamente, oh alma mía,
porque de él viene mi esperanza‖ (Salmo 62:5).
La intimidad con nuestro Libertador debe impulsarnos a ―celebr[ar] con melodía la gloria de
su nombre‖ (Salmo 66:2). Se alaba a Jehová como generoso proveedor en el Salmo 65, como
un Dios de actos de salvación en los Salmos 67 y 68, y como el gran Proveedor de escape en
los Salmos 70 y 71.
Respuestas a preguntas bíblicas:
51:12. ¿De quién era el ―espíritu bien dispuesto‖ con el que David le pidió a Dios que
lo sostuviera? David no se refería a la disposición de Dios de ayudarlo ni a su espíritu santo.
Se trata, más bien, del espíritu de David, es decir, de su propia inclinación mental. Le pide a
Dios que le infunda el deseo de hacer lo que es bueno.
53:1. ¿En qué sentido es ―insensato‖ el que niega la existencia de Dios? La insensatez
a la que alude este versículo no es ninguna deficiencia intelectual. El hecho de que se refiere a
la persona moralmente insensata se desprende del desplome moral que provoca esa actitud y
que se describe en Salmo 53:1-4.
58:3-5. ¿De qué manera son los inicuos como una serpiente? Las mentiras que dicen
sobre otras personas son como la ponzoña de una serpiente. Dañan la buena reputación de
sus víctimas. ―Como la cobra que tapa su oído‖, los inicuos no escuchan la dirección ni la
corrección.
58:7. ¿En qué sentido ‗se disuelven los inicuos como en aguas que van corriendo‘?
Puede que David pensara en las aguas de ciertos valles torrenciales de la Tierra Prometida.
Aun si una inundación repentina aumentaba el nivel de agua en esos valles, dichas aguas
corrían y desaparecían rápidamente. David estaba pidiendo a Jehová que los malvados
desaparecieran con rapidez.
68:13. ¿Por qué estaban ―las alas de una paloma cubiertas de plata, y sus plumas
remeras de oro verde amarillento‖? Ciertas palomas de color gris azulado tienen un brillo
iridiscente en algunas de sus plumas, lo que les da una apariencia metálica bajo la dorada luz
del sol. David tal vez estaba asemejando a los victoriosos guerreros israelitas que venían de
una batalla a una paloma como esa: con alas fuertes y apariencia brillante. Algunos biblistas
han sugerido que pudiera ser una descripción de una obra de arte, un trofeo que fuera parte de
un botín. De cualquier modo, David hacía referencia a las victorias que Jehová dio a su pueblo
sobre sus enemigos.
68:18. ¿Quiénes eran los ―dones en la forma de hombres‖? Eran hombres que habían
sido tomados cautivos durante la conquista de la Tierra Prometida. Con el tiempo, fueron
asignados a ayudar a los levitas en sus labores (Esdras 8:20).
68:30. ¿Qué significa la petición de que se ―reprend[a] a la bestia salvaje de las
cañas‖? Refiriéndose en sentido figurado a los enemigos del pueblo de Jehová como bestias
salvajes, David pidió a Dios que los reprendiera, o sea, que no les permitiera usar su poder
para causar daño.
69:23. ¿Qué significa la expresión ―haz que [las] caderas [del enemigo] vacilen‖? Los
músculos de la cadera son esenciales para realizar tareas arduas, como levantar y llevar
cargas pesadas. Las caderas vacilantes comunican la idea de que se han perdido las fuerzas.
David pidió que sus enemigos perdieran su fuerza, su poder.
Lecciones para nosotros:
51:1-4, 17. Cometer un pecado no necesariamente nos aleja de Jehová Dios. Si nos
arrepentimos, podemos confiar en su misericordia.
51:5, 7-10. Si hemos pecado, podemos suplicar a Jehová que nos perdone teniendo en
cuenta nuestro pecado heredado. También debemos pedirle que nos purifique, que nos
restaure, que nos ayude a arrancar del corazón las tendencias pecaminosas y que nos dé un
espíritu constante.
51:18. Los pecados de David amenazaron el bienestar de toda la nación. Por eso pidió la
buena voluntad de Dios sobre Sión. Cuando una persona comete un pecado grave, a menudo
causa oprobio al nombre de Jehová y a la congregación. Es necesario que dicha persona
suplique a Dios que repare el daño que ella haya causado.
52:8. Podemos ser como un ―olivo frondoso en la casa de Dios‖ —cerca de Jehová y
productivos en su servicio— si le obedecemos y aceptamos su disciplina de buena gana
(Hebreos 12:5, 6).
55:4, 5, 12-14, 16-18. La conspiración de su propio hijo Absalón y la traición de Ahitofel, su
consejero de confianza, le causaron un profundo dolor a David. Sin embargo, su confianza en
Jehová no disminuyó. Nosotros tampoco debemos permitir que los sentimientos de dolor y
angustia debiliten nuestra confianza en Dios.
55:22. ¿Cómo arrojamos nuestras cargas sobre Jehová? Lo hacemos 1) diciéndole en
oración qué es lo que nos preocupa, 2) acudiendo a su Palabra y organización en busca de
guía y apoyo, y 3) haciendo lo que razonablemente podamos para resolver la situación
(Proverbios 3:5, 6; 11:14; 15:22; Filipenses 4:6, 7).
56:8. Jehová no solo conoce nuestra situación, sino también el efecto emocional que nos
produce.
62:11. Dios no tiene que depender de ninguna fuente externa de energía. Él es la fuente del
poder. ―La fuerza [le] pertenece‖ a él.
63:3. La ―bondad amorosa [de Dios] es mejor que la vida‖ porque sin ella la vida no tiene
ningún sentido. El proceder sabio es cultivar una relación de amistad con Jehová.
63:6. La noche —cuando todo está en silencio y no hay distracciones— puede ser un
momento propicio para meditar.
64:2-4. El chisme puede dañar el buen nombre de una persona inocente. No debemos
escuchar esa clase de habla ni esparcirla.
69:4. Para mantener la paz, a veces quizá sea prudente pedir disculpas (es decir,
―devolver‖), aunque no estemos convencidos de haber hecho algo malo.
70:1-5. Jehová oye nuestras súplicas (1 Tesalonicenses 5:17; Santiago 1:13; 2 Pedro 2:9).
Aunque Dios quizás permita que continúe una prueba, él nos dará la sabiduría para afrontar la
situación y las fuerzas para soportarla. No dejará que seamos tentados más allá de lo que
podemos soportar (1 Corintios 10:13; Hebreos 10:36; Santiago 1:5-8).
71:5, 17. David cultivó valor y fortaleza al hacer de Jehová su confianza en su juventud, aun
antes de enfrentarse al gigante filisteo Goliat (1 Samuel 17:34-37). Los jóvenes hacen bien en
confiar en Jehová en todo lo que hacen.
*** w06 15/7 págs. 10-13 Puntos sobresalientes de los libros tercero y cuarto de los
Salmos ***
―EL ACERCARME A DIOS ES BUENO PARA MÍ‖
(Salmo 73:1–89:52)
Los primeros once salmos de esta sección fueron compuestos por Asaf o por miembros de
su casa. El salmo, o canción, de apertura explica qué impidió que Asaf se descarriara por su
forma de pensar equivocada: llegó finalmente a la conclusión correcta. ―En cuanto a mí —
cantó—, el acercarme a Dios es bueno para mí.‖ (Salmo 73:28.) A continuación, en el Salmo
74, encontramos un lamento por la destrucción de Jerusalén. Los Salmos 75, 76 y 77 describen
a Jehová como el Juez justo, el Salvador de los mansos y el Oidor de la oración. El Salmo 78
resume el pasado de Israel, desde la época de Moisés hasta los días de David. El 79 llora la
destrucción del templo. En el siguiente hallamos una oración en favor de la restauración del
pueblo de Dios. El Salmo 81 es una exhortación a obedecer a Jehová. Los Salmos 82 y 83 son
ruegos para que se ejecute el juicio divino contra los jueces corruptos y los enemigos de Dios.
―Mi alma ha anhelado, y también se ha consumido, en su vivo deseo por los patios de
Jehová‖, dice una canción de los hijos de Coré (Salmo 84:2). En el Salmo 85 se le pide a Dios
que bendiga a quienes han regresado del exilio. También se destaca que las bendiciones
espirituales son mucho más valiosas que las materiales. En el Salmo 86, David suplica a Dios
que lo proteja y lo instruya. A la melodía registrada en el capítulo 87 sobre Sión y los que allí
nacieron, le sigue una oración a Jehová en el 88. El Salmo 89, compuesto por Etán —quizás
uno de los cuatro sabios de los días de Salomón—, resalta cómo el pacto davídico es una
manifestación de la bondad amorosa de Jehová (1 Reyes 4:31).
Respuestas a preguntas bíblicas:
73:9. ¿En qué sentido ―han puesto [los malvados] su boca en los mismísimos cielos, y
su lengua misma anda por la tierra‖? Puesto que no respetan a nadie, sea de los cielos o de
la Tierra, no dudan en blasfemar contra Dios con su boca y en calumniar al prójimo con su
lengua.
74:13, 14. ¿Cuándo quebró Jehová ‗las cabezas de los monstruos marinos en las
aguas y aplastó hasta hacer pedazos las cabezas de Leviatán‘? A ―Faraón, rey de Egipto‖,
se le llama ―el gran monstruo marino que yace estirado en medio de sus canales del Nilo‖
(Ezequiel 29:3). Leviatán tal vez represente a ―los fuertes de Faraón‖ (Salmo 74:14, nota).
De modo que el hecho de quebrar sus cabezas posiblemente se refiera a la aplastante derrota
que sufrieron Faraón y su ejército cuando Jehová liberó a los israelitas del cautiverio egipcio.
75:4, 5, 10. ¿Qué se simboliza con el ―cuerno‖? Los cuernos de los animales son armas
poderosas. Por lo tanto, la palabra ―cuerno‖ simboliza el poder o la fortaleza. Jehová levanta los
cuernos de su pueblo, lo que indica que lo ensalza, al tiempo que ‗corta los cuernos de los
inicuos‘. Aquí también se nos previene contra ‗ensalzar en alto nuestro cuerno‘, o desarrollar
una actitud orgullosa o arrogante. Como es Jehová quien ensalza, hemos de ver todas las
responsabilidades que se nos asignan en la congregación como dádivas procedentes de él
(Salmo 75:7).
76:10. ¿Cómo puede ―la misma furia del hombre‖ elogiar a Jehová? A veces se
producen buenos resultados cuando Dios permite que los hombres nos ataquen con furia
debido a que somos siervos de él. Las penalidades que tales ataques puedan causarnos nos
sirven de un modo u otro de disciplina o entrenamiento. Pero Jehová no tolerará que suframos
más de lo que sea necesario para completar dicho entrenamiento (1 Pedro 5:10). ‗Lo restante
de la furia del hombre, Dios lo ceñirá sobre sí.‘ ¿Y si sufrimos hasta el punto de morir? Eso
también puede alabar a Jehová, ya que quienes sean testigos de nuestro fiel aguante quizás
glorifiquen igualmente a Dios.
78:24, 25; nota. ¿Por qué se llama al maná ―el grano del cielo‖ y ―el pan mismo de
ángeles‖? Ninguna de las dos expresiones da a entender que el maná fuera la comida de los
ángeles. Era ―el grano del cielo‖ porque de ahí venía (Salmo 105:40). Puesto que los ángeles
—o ―poderosos‖— viven en el cielo, la expresión ―el pan mismo de ángeles‖ bien pudiera
significar sencillamente que provenía de Dios, quien mora en los cielos (Salmo 11:4). También
es posible que Jehová usara a ángeles para suministrar el maná a los israelitas.
82:1, 6. ¿A quiénes se llama ―dioses‖ e ―hijos del Altísimo‖? Ambas expresiones se
refieren a jueces humanos de Israel. Se les podía llamar dioses porque ocupaban el puesto de
representantes y voceros de Dios (Juan 10:33-36).
83:2. ¿Qué significa ‗levantar la cabeza‘? Este gesto denota prontitud para usar la fuerza
o para actuar, por lo general con el fin de oponerse, luchar u oprimir.
Lecciones para nosotros:
73:2-5, 18-20, 25, 28. No hemos de envidiar la prosperidad de los inicuos ni actuar como
ellos. Los malvados pisan suelo resbaloso, y de seguro ‗caerán en ruina‘. Por otra parte, ya que
bajo los gobiernos humanos imperfectos no se puede poner fin a la maldad, de nada sirve que
intentemos combatirla. Al igual que hizo Asaf, lo sabio es afrontarla ‗acercándonos a Dios‘ y
disfrutando de una relación estrecha con Él.
73:3, 6, 8, 27. Hemos de evitar la jactancia, la altivez, el escarnio y el fraude, incluso cuando
actuar así pudiera parecer provechoso.
73:15-17. En caso de que estemos confundidos debido a pensamientos negativos,
no deberíamos hablar a todo el mundo del asunto. Contando ―un cuento como ese‖ solo
conseguiríamos desanimar a los demás. Más bien, deberíamos meditar con calma en lo que
nos preocupa y resolverlo con la ayuda de nuestros hermanos en la fe (Proverbios 18:1).
73:21-24. Amargarse al ver la aparente prosperidad de la gente mala se asemeja a la
reacción de los animales irracionales. Esa reacción es impulsiva y se basa únicamente en las
emociones. En lugar de actuar así, permitamos que los consejos de Jehová nos guíen, con
plena confianza en que él ‗nos asirá de la mano derecha‘ y nos sostendrá. Además, Jehová
‗nos llevará a la gloria‘, es decir, tendremos una estrecha relación con él.
77:6. Para interesarnos de corazón en las verdades espirituales y escudriñarlas
cuidadosamente, tenemos que dedicar tiempo al estudio y la meditación. Es fundamental
disponer de algunos momentos para estar a solas.
79:9. Jehová escucha nuestras oraciones, y más aún cuando están relacionadas con la
santificación de su nombre.
81:13, 16. Escuchar la voz de Jehová y andar en sus caminos redunda en abundantes
bendiciones (Proverbios 10:22).
82:2, 5. Las injusticias ―hace[n] que todos los fundamentos de la tierra tambaleen‖. Los
abusos perturban la estabilidad de la sociedad.
84:1-4, 10-12. El aprecio de los salmistas por el lugar de adoración de Jehová y la
satisfacción que les proporcionaban sus privilegios de servicio son un ejemplo para nosotros.
86:5. ¡Cuánto agradecemos que Jehová esté ―listo para perdonar‖! Él siempre busca
cualquier razón para mostrar misericordia al pecador arrepentido.
87:5, 6. ¿Sabrán algún día quienes vivan en el Paraíso terrestre los nombres de quienes
hayan sido resucitados a la vida celestial? Estos versículos indican que existe esa posibilidad.
88:13, 14. Cuando nos parezca que nuestras oraciones respecto a cierto problema no son
contestadas con rapidez, pensemos en que quizás Jehová quiere que demostremos cuán
genuina es nuestra devoción.
―DENLE GRACIAS, BENDIGAN SU NOMBRE‖
(Salmo 90:1–106:48)
Piense en las diferentes razones que nos da el libro cuarto de los Salmos para ensalzar a
Jehová. En el Salmo 90, Moisés contrasta la existencia del ―Rey de la eternidad‖ con la corta
vida del hombre (1 Timoteo 1:17). En Salmo 91:2, Moisés considera a Jehová como ‗su refugio
y su plaza fuerte‘, Aquel con quien se siente seguro. Los siguientes salmos hablan de las
hermosas cualidades de Dios, sus profundos pensamientos y sus maravillosas obras. Tres
canciones empiezan con la expresión ―Jehová mismo ha llegado a ser rey‖ (Salmo 93:1; 97:1;
99:1). Tras indicar que Jehová es nuestro Hacedor, el salmista nos hace la siguiente invitación:
―Denle gracias, bendigan su nombre‖ (Salmo 100:4).
¿Cómo administraría su país un gobernante temeroso de Dios? El Salmo 101, escrito por el
rey David, nos da la respuesta. En el siguiente se afirma que Jehová ―se volverá hacia la
oración de los que están despojados de todo, y no despreciará su oración‖ (Salmo 102:17).
El número 103 destaca la bondad amorosa y la misericordia de Jehová. Pensando en las
muchas cosas que Dios ha creado en la Tierra, el salmista exclama: ―¡Cuántas son tus obras,
oh Jehová! Con sabiduría las has hecho todas‖ (Salmo 104:24). Las últimas dos composiciones
del libro cuarto alaban también a Jehová por sus maravillosas obras (Salmo 105:2, 5;
106:7, 22).
Respuestas a preguntas bíblicas:
91:1, 2. ¿Qué es ―el lugar secreto del Altísimo‖, y cómo podemos ‗morar‘ allí? Es un
refugio simbólico que nos ofrece seguridad espiritual, un estado en el que se nos protege de
todo daño espiritual. Ese lugar es secreto porque quienes no confían en Dios lo desconocen.
Hacemos del Altísimo nuestra ―morada‖ al considerarlo nuestro ―refugio‖ y ―plaza fuerte‖, al
ensalzarlo como Soberano del universo y al predicar las buenas nuevas del Reino. Nos
sentimos seguros en sentido espiritual porque sabemos que Jehová siempre está dispuesto a
ayudarnos (Salmo 90:1).
92:12. ¿Por qué puede decirse que el justo ―florecerá como lo hace una palmera‖? Las
palmeras son conocidas por su productividad. Igualmente, la persona justa es recta a los ojos
de Jehová y no deja de producir ―fruto excelente‖, lo que incluye buenas obras (Mateo 7:17-20).
Lecciones para nosotros:
90:7, 8, 13, 14. Las malas acciones siempre dañan nuestra relación con Jehová. Además, es
imposible ocultarle nuestros pecados. No obstante, si nos arrepentimos de corazón y dejamos
el mal proceder, Jehová nos concederá de nuevo su favor, ‗satisfaciéndonos con su bondad
amorosa‘.
90:10, 12. Puesto que la vida es corta, hemos de ―contar nuestros días‖. ¿Cómo?
Adquiriendo ―un corazón de sabiduría‖, es decir, actuando con sabiduría de modo que
no malgastemos los días de vida que nos quedan, sino que los usemos como a Jehová le
agrada. Esto implica fijar nuestras prioridades espirituales y emplear sabiamente el tiempo
(Efesios 5:15, 16; Filipenses 1:10).
90:17. Es apropiado pedirle a Jehová que establezca ―firmemente [...] la obra de nuestras
manos‖ y bendiga nuestra actividad en el ministerio.
92:14, 15. Si los hermanos de mayor edad estudian a conciencia la Palabra de Dios y se
reúnen regularmente con el pueblo de Jehová, seguirán siendo ‗gordos y frescos‘ —vigorosos
en sentido espiritual— y muy valiosos para la congregación.
94:19. Sea cual sea el motivo de nuestros ―pensamientos inquietantes‖, si leemos y
meditamos en las ―consolaciones‖ que se hallan en la Biblia, nos sentiremos reconfortados.
95:7, 8. Para evitar que se nos endurezca el corazón, debemos escuchar los consejos
bíblicos, prestarles atención y obedecerlos con prontitud (Hebreos 3:7, 8).
106:36, 37. Estos versículos asocian la adoración de ídolos con los sacrificios a demonios.
De modo que quienes los adoran pueden llegar a estar bajo la influencia demoníaca. La Biblia
nos advierte: ―Guárdense de los ídolos‖ (1 Juan 5:21).
*** w06 1/9 págs. 13-16 Puntos sobresalientes del libro quinto de los Salmos ***
FELICES POR LA BONDAD AMOROSA DE JEHOVÁ
(Salmo 107:1–119:176)
―Oh, dense gracias a Jehová por su bondad amorosa, y por sus maravillosas obras para con
los hijos de los hombres‖, cantaron los judíos que regresaron del cautiverio en Babilonia (Salmo
107:8, 15, 21, 31). David, por su parte, cantó en una alabanza a Dios: ―Tu apego a la verdad
[llega] hasta los cielos‖ (Salmo 108:4). Y en el siguiente cántico oró: ―Ayúdame, oh Jehová Dios
mío; sálvame conforme a tu bondad amorosa‖ (Salmo 109:18, 19, 26). El Salmo 110 habla
proféticamente del reinado del Mesías. ―El temor de Jehová es el principio de la sabiduría‖,
señala Salmo 111:10. Y el salmo siguiente afirma: ―Feliz es el hombre que teme a Jehová‖
(Salmo 112:1).
Los Salmos 113 a 118 reciben el nombre de Salmos de Hallel, pues usan vez tras vez la
expresión hebrea Ha·lelu-Yáh, ―aleluya‖ o ―¡alaben a Jah!‖. Según indica la Misná —obra del
siglo III que recoge tradiciones orales anteriores—, estos cánticos se entonaban en la Pascua y
en las otras tres fiestas anuales de los judíos. El Salmo 119, que es el más largo de los salmos,
así como de los capítulos de la Biblia, ensalza la palabra, o mensaje, que Jehová ha revelado.
Respuestas a preguntas bíblicas:
109:23. ¿Qué quieren decir las siguientes palabras de David: ―Cual sombra cuando
declina, me hallo obligado a irme‖? Poéticamente, David indicó que veía muy cerca el
momento de su muerte (Salmo 102:11).
110:1, 2. ¿Qué hizo el ―Señor [de David]‖, Jesucristo, mientras estuvo sentado a la
diestra de Dios? Después de resucitar, Jesús ascendió al cielo y allí esperó a la diestra de
Dios hasta que comenzó a reinar en 1914. Durante todo ese tiempo de espera reinó sobre sus
seguidores ungidos, dirigiéndolos en la obra de predicar y hacer discípulos y preparándolos
para gobernar con él en su Reino (Mateo 24:14; 28:18-20; Lucas 22:28-30).
110:4. ¿Qué es lo que Jehová ―ha jurado‖ y ―no sentirá pesar‖ de haber hecho? Este
juramento es el pacto que Jehová hizo con Jesucristo para que fuera Rey y Sumo Sacerdote
(Lucas 22:29).
113:3. ¿En qué sentido debe alabarse el nombre de Jehová ―desde el nacimiento del
sol hasta su puesta‖? Esta afirmación implica más que la existencia de un grupo de personas
que adore a Dios día tras día. Desde donde nace el Sol hasta donde se oculta —es decir, de
este a oeste—, sus rayos iluminan todo el globo terráqueo. De igual modo, Jehová ha de ser
alabado en el planeta entero, algo imposible de lograr sin organización. ¡Cuánto apreciamos los
testigos de Jehová el privilegio de alabar a Dios y participar celosamente en la labor de
proclamar el Reino!
116:15. ¿Hasta qué grado es ―preciosa a los ojos de Jehová [...] la muerte de los que le
son leales‖? Jehová considera a sus siervos tan valiosos, que su muerte como colectividad
sería una pérdida enorme que no está dispuesto a tolerar. Permitirla equivaldría a reconocer
que sus enemigos son más poderosos que él. Además, no quedaría nadie en la Tierra para
servir de fundamento del nuevo mundo.
119:71. ¿Cómo pudiera beneficiarnos sufrir aflicción? Las dificultades pueden
enseñarnos a confiar más en Jehová, a orarle con más fervor y a dedicarnos con más empeño
a estudiar la Biblia y aplicar sus normas en la vida. Por otra parte, la forma en que
respondamos a las aflicciones tal vez revele flaquezas que debamos corregir. Los sufrimientos
no nos amargarán si permitimos que nos refinen.
119:96. ¿Qué significa la frase: ―A toda perfección he visto fin‖? El salmista habla de la
perfección desde el punto de vista del hombre. Probablemente se refería a que el concepto
humano de la perfección tiene límites, mientras que el mandamiento divino no, pues es
aplicable a todos los aspectos de la vida. En armonía con este hecho, la Sagrada Biblia de
Agustín Magaña traduce así el versículo: ―He visto que toda perfección es limitada; [pero] tus
mandamientos no tienen límite ninguno‖.
119:164. ¿Qué indica la idea de alabar a Dios ―siete veces al día‖? En muchas
ocasiones, el número 7 denota plenitud. Por consiguiente, el salmista indica que Jehová
merece toda la alabanza.
Lecciones para nosotros:
107:27-31. La sabiduría del mundo ―resulta[rá] confusa‖ en la batalla de Armagedón, pues
no podrá librar a nadie de la destrucción (Revelación [Apocalipsis] 16:14, 16). Solo sobrevivirán
y podrán dar ―gracias a Jehová por su bondad amorosa‖ quienes se refugien en él.
109:30, 31; 110:5. Como el soldado empuñaba la espada con la mano derecha, esta
no recibía la protección del escudo que sostenía con la izquierda. En sentido simbólico, Jehová
se encuentra ―a la diestra‖ de sus siervos, combatiendo por ellos. Así los protege y auxilia,
razón por la que hacen bien en ―elogiar[lo] [...] en gran manera‖.
113:4-9. Jehová ocupa una posición tan elevada que tiene que condescender hasta para
―tender la vista sobre [el] cielo‖. No obstante, se compadece del humilde, el pobre y la mujer
estéril. El Señor Soberano Jehová demuestra humildad y desea que sus siervos imiten esa
virtud (Santiago 4:6).
114:3-7. Debería emocionarnos repasar los prodigios que realizó Jehová a favor de su
pueblo en el mar Rojo, el río Jordán y el monte Sinaí. En efecto, la humanidad, representada
por la ―tierra‖, debería sentir asombro —simbólicamente hablando, ―fuertes dolores‖— a causa
del Señor.
119:97-101. La sabiduría, perspicacia y entendimiento que nos brinda la Palabra de Dios
nos protegen espiritualmente.
119:105. La Palabra de Dios es una lámpara para nuestro pie en el sentido de que nos
ayuda a lidiar con los problemas cotidianos. También ilumina nuestra vereda, pues revela lo
que Dios se propone hacer en el futuro.
FELICES EN MEDIO DE LAS ADVERSIDADES
(Salmo 120:1–145:21)
¿Cómo podemos sobreponernos a las dificultades y sobrevivir a las adversidades? Los
Salmos 120 a 134 contestan con claridad esta pregunta. Si buscamos la ayuda de Jehová,
conseguiremos superar las situaciones angustiosas y mantener el gozo. Probablemente, los
israelitas cantaban estos salmos, conocidos como Canciones de las Subidas, mientras iban
ascendiendo por el camino a Jerusalén para celebrar sus fiestas anuales.
Los Salmos 135 y 136 presentan a Jehová como Hacedor de todo lo que se propone, en
marcado contraste con los ídolos, que nada pueden hacer. El Salmo 136 se compuso como
himno responsorial, es decir, para que se cantara la última parte de cada versículo en
respuesta a la primera. El siguiente salmo habla del abatimiento en que se encontraban los
judíos exiliados en Babilonia que querían adorar a Jehová en Sión. Los Salmos 138 a 145 son
de David, quien desea elogiar a Jehová ―con todo [su] corazón‖. Él mismo explica el motivo:
―Porque de manera que inspira temor estoy maravillosamente hecho‖ (Salmo 138:1; 139:14).
En los siguientes cinco salmos le solicita a Jehová que lo proteja de los malvados, lo libre de
sus perseguidores, lo censure con justicia y guíe sus pasos. Además, destaca lo feliz que vive
el pueblo de Jehová (Salmo 144:15). Tras hacer un repaso de la grandeza y benignidad de
Dios, David declara: ―La alabanza de Jehová hablará mi boca; y bendiga toda carne el santo
nombre de él hasta tiempo indefinido, aun para siempre‖ (Salmo 145:21).
Respuestas a preguntas bíblicas:
122:3. ¿De qué manera era Jerusalén una ciudad ―trabada en unidad‖? Como muchas
poblaciones de la antigüedad, Jerusalén tenía las casas pegadas unas a otras, lo que la
convertía en ciudad compacta y fácil de defender. Además, la proximidad física de los hogares
facilitaba que los vecinos se ayudaran y protegieran mutuamente. Este hecho representaba la
unidad espiritual de que gozaban las doce tribus de Israel cuando se reunían para adorar a
Dios.
123:2. ¿Qué punto destaca la comparación de los ojos de los siervos? Los siervos
miraban a las manos de sus amos por dos motivos: para ver lo que querían y para recibir
protección y sustento. Igualmente, nosotros acudimos a Jehová para saber su voluntad y
obtener su favor.
131:1-3. ¿Por qué podía decirse que David había ―sosegado y aquietado [su] alma
como un niño destetado sobre su madre‖? David aprendió a calmar su alma tal como el
niño que deja la lactancia aprende a hallar consuelo y satisfacción en los brazos maternales.
¿De qué forma logró tranquilizarse ―como un niño destetado sobre su madre‖? Evitando la
altivez de corazón, la altanería de ojos y la búsqueda de cosas demasiado grandes para él.
En vez de anhelar prominencia, David reconoció por lo general sus limitaciones y fue humilde.
Nosotros haremos bien en imitar su actitud, sobre todo si estamos esforzándonos por conseguir
privilegios de servicio en la congregación.
Lecciones para nosotros:
120:1, 2, 6, 7. La calumnia y el sarcasmo ocasionan terribles sufrimientos. Un modo de
demostrar que ―abog[amos] por la paz‖ es refrenar la lengua.
120:3, 4. Si tenemos que soportar la ―lengua mañosa‖ de alguien, nos consolará saber que
Jehová arreglará los asuntos en su debido momento. Los calumniadores sufrirán calamidad a
manos de ―un poderoso‖. Serán consumidos por el juicio destructor de Jehová, simbolizado por
las ―brasas ardientes de las retamas‖.
127:1, 2. Debemos buscar la guía de Jehová en todo lo que hagamos.
133:1-3. La unidad del pueblo de Jehová nos sosiega, nos sana y nos reanima. No debemos
perturbarla con críticas, disputas ni quejas.
137:1, 5, 6. Durante el destierro, los siervos de Jehová se sentían muy unidos a Sión, que
había representado a la organización de Dios. ¿Qué hay de nosotros? ¿Demostramos lealtad y
apego a la organización que Jehová usa en la actualidad?
138:2. Jehová ―engrandec[erá] [su] dicho aun sobre todo [su] nombre‖, pues el cumplimiento
de todo lo que ha prometido en su nombre superará con creces nuestras expectativas. Sin
duda, nos aguarda un futuro maravilloso.
139:1-6, 15, 16. Jehová sabe lo que hacemos, lo que pensamos e incluso lo que vamos a
decir. Nos conoce desde que no éramos más que un embrión, cuando todavía no se
diferenciaban las partes del cuerpo. El conocimiento que tiene Dios de cada uno de nosotros es
―demasiado maravilloso‖ para asimilarlo. ¡Cuánto nos consuela saber que Jehová no solo ve
las dificultades que atravesamos, sino que también comprende cómo nos afectan!
139:7-12. Jehová puede fortalecernos aunque nos encontremos en el lugar más remoto.
139:17, 18. ¿Nos resulta agradable adquirir conocimiento de Jehová? (Proverbios 2:10.)
Si así es, hemos encontrado una fuente de placer inagotable, pues los pensamientos de
Jehová ―son más que hasta los granos de arena‖. Siempre podremos aprender más sobre Dios.
139:23, 24. Hacemos bien en desear que Jehová examine nuestro interior en busca de
algún ―camino doloroso‖ —cualquier pensamiento, inclinación o deseo que sea malo— y que
nos ayude a desarraigarlo.
143:4-7. ¿Qué nos permitirá soportar hasta las más graves penalidades? El salmista nos da
la clave: meditar en la actividad de Jehová, interesarnos por sus obras e implorar su ayuda.
*** w99 15/9 págs. 12-15 Adquiera sabiduría y acepte la disciplina ***
¿EN QUÉ emplea su tiempo y energía? ¿Le preocupa hacerse un buen nombre? ¿Se
dedica a acumular dinero y posesiones? ¿Trata de forjarse una carrera en determinado ámbito
profesional o especializarse en una o más ramas del saber? ¿Valora tener buenas amistades?
¿Es la salud lo más importante para usted?
Todo lo dicho tal vez tenga cierto valor. Pero ¿hay algo que sea de mayor importancia? La
Biblia responde: ―La sabiduría es la cosa principal. Adquiere sabiduría‖ (Proverbios 4:7). De
modo que, ¿cómo conseguir sabiduría, y cómo nos beneficia? El segundo capítulo del libro
bíblico de Proverbios suministra la respuesta.
‗Preste atención a la sabiduría‘
Tal como hablaría un padre amoroso, el sabio rey Salomón del antiguo Israel dice: ―Hijo mío,
si recibes mis dichos y atesoras contigo mis propios mandamientos, de modo que con tu oído
prestes atención a la sabiduría, para que inclines tu corazón al discernimiento; si, además,
clamas por el entendimiento mismo y das tu voz por el discernimiento mismo, si sigues
buscando esto como a la plata, y como a tesoros escondidos sigues en busca de ello, en tal
caso entenderás el temor de Jehová, y hallarás el mismísimo conocimiento de Dios‖
(Proverbios 2:1-5).
¿Ha notado sobre quién recae la responsabilidad de obtener sabiduría? La redacción de
este pasaje en segunda persona del singular deja claro que el hecho de ir en pos de la
sabiduría y sus complementos —el discernimiento y el entendimiento— es un asunto personal.
De todas maneras, necesitamos en primer lugar ‗recibir‘ y ‗atesorar‘ en la memoria las palabras
de sabiduría que leemos en las Escrituras, por lo que tenemos que estudiar la Biblia.
Sabiduría es la capacidad de poner en práctica el conocimiento que Dios da, sabiduría que
la misma Biblia ofrece de manera excepcional. Por ello, debemos prestar atención a sus sabias
palabras, como las que se encuentran en los libros de Proverbios y Eclesiastés. También
observamos a lo largo de las Escrituras muchos casos que ponen de manifiesto los beneficios
de aplicar los principios piadosos y los peligros de pasarlos por alto (Romanos 15:4; 1 Corintios
10:11). Tomemos como ejemplo el relato del avaricioso Guehazí, el servidor del profeta Eliseo
(2 Reyes 5:20-27). ¿No se refleja en este pasaje la sabiduría que hay en eludir la avaricia? Y
cuando pensamos en el trágico resultado de las visitas aparentemente inocentes de Dina, la
hija de Jacob, a ―las hijas del país‖ de Canaán (Génesis 34:1-31), ¿nos percatamos de
inmediato de la insensatez de tener malas compañías? (Proverbios 13:20; 1 Corintios 15:33.)
Prestar atención a la sabiduría entraña obtener discernimiento y entendimiento.
Discernimiento es el ―juicio por cuyo medio percibimos y declaramos la diferencia que existe
entre varias cosas‖ (Diccionario manual e ilustrado de la lengua española). El discernimiento
piadoso es la capacidad de distinguir entre lo correcto y lo incorrecto para optar por el proceder
apropiado. A menos que ‗inclinemos el corazón‘ al discernimiento, o, en otras palabras,
ansiemos adquirirlo, nos será muy difícil permanecer en ―el camino que conduce a la vida‖
(Mateo 7:14; compárese con Deuteronomio 30:19, 20). El estudio y la aplicación de la Palabra
de Dios imparten discernimiento.
Entendimiento es la capacidad de ver cómo se relacionan entre sí los diversos aspectos de
un asunto. ¿Cómo podemos ‗clamar por él‘? La edad y la experiencia son, por supuesto,
factores que contribuyen a que adquiramos mayor entendimiento, pero no es así en todos los
casos (Job 12:12; 32:6-12). ―Me porto con más entendimiento que hombres de más edad —
cantó el salmista—, porque he observado tus propias órdenes [las de Jehová].‖ Y añadió: ―La
manifestación misma de tus palabras da luz, y hace entender a los inexpertos‖ (Salmo 119:100,
130). Jehová es ‗el Anciano de Días‘, y su entendimiento es infinitamente superior al de toda la
humanidad (Daniel 7:13). Dios puede dar al inexperto entendimiento que le permita superar en
esa cualidad incluso a quienes tienen más edad que él. Por lo tanto, debemos estudiar y aplicar
la Palabra de Dios, la Biblia, con diligencia.
En el pasaje anteriormente citado del segundo capítulo de Proverbios, la conjunción ―si‖ va
seguida de las formas verbales ―recibes‖, ―atesoras‖, ―clamas‖, ―sigues buscando‖ y ―sigues en
busca de‖. ¿Por qué emplea el escritor esas expresiones que confieren al texto una intensidad
progresiva? Una obra de consulta explica: ―El sabio hace [aquí] hincapié en la necesidad del
fervor al ir en pos de la sabiduría‖. En efecto, debemos buscar de todo corazón la sabiduría y
sus cualidades afines: el discernimiento y el entendimiento.
¿Pondrá usted el empeño necesario?
Un elemento clave en la búsqueda de la sabiduría es el estudio diligente de la Biblia, lo cual
implica mucho más que limitarse a leer a fin de informarse. La meditación concienzuda sobre lo
que leemos es una parte fundamental del estudio de las Escrituras. Si deseamos aumentar en
sabiduría y discernimiento, es necesario que reflexionemos sobre cómo aplicar lo que
aprendemos a la hora de resolver problemas y tomar decisiones. Adquirir entendimiento
requiere que relacionemos lo que acabamos de aprender con lo que ya sabemos. ¿Quién
puede negar que un estudio bíblico reflexivo de tal índole precise tiempo y esfuerzo enérgico?
La inversión de tiempo y energía se asemeja a la dedicada a ‗buscar plata y tesoros
escondidos‘. ¿Pondrá usted el empeño necesario? ¿‗Comprará el tiempo oportuno‘ para ello?
(Efesios 5:15, 16.)
Imagínese los grandes tesoros que nos aguardan si excavamos en la Biblia con un corazón
sincero. Hallaremos ―el mismísimo conocimiento de Dios‖; el conocimiento sólido, estable, vital
de nuestro Creador (Juan 17:3). También podemos conseguir otro tesoro: ―el temor de Jehová‖.
¡Qué precioso es este temor reverente! El temor sano de desagradarle debe dominar todo
aspecto de nuestra vida, lo que proporcionará una dimensión espiritual a cualquier cosa que
hagamos (Eclesiastés 12:13).
De nuestro interior tiene que brotar un intenso deseo de investigar y cavar en busca de
tesoros espirituales. Para facilitarnos dicha búsqueda, Jehová ha provisto óptimas
herramientas, como La Atalaya y ¡Despertad!, oportunas revistas de la verdad, y otras
publicaciones basadas en la Biblia (Mateo 24:45-47). Las reuniones cristianas son otra
provisión de Jehová para educarnos en su Palabra y sus caminos. Nuestro deber es asistir a
ellas con regularidad, escuchar atentamente lo que allí se dice, hacer un esfuerzo sincero por
concentrarnos y recordar las ideas principales, además de examinar nuestra relación con
Jehová (Hebreos 10:24, 25).
No fracasará
A menudo, las excavaciones en busca de gemas, oro o plata son infructuosas. Pero no es
así en el caso de la búsqueda de tesoros espirituales. ¿Por qué no? ―Porque Jehová mismo da
la sabiduría —asegura Salomón—; procedentes de su boca hay conocimiento y
discernimiento.‖ (Proverbios 2:6.)
El rey Salomón fue célebre por su sabiduría (1 Reyes 4:30-32). Las Escrituras revelan que el
alcance de su conocimiento se extendía a plantas, animales, la naturaleza humana y la Palabra
de Dios. El discernimiento que demostró, aún siendo un joven rey, al dilucidar el litigio entre dos
mujeres que afirmaban ser la madre del mismo hijo, contribuyó a que cobrara fama
internacional (1 Reyes 3:16-28). ¿De dónde procedía su gran saber? Salomón pidió a Jehová
―sabiduría y conocimiento‖ y la capacidad para ―discernir entre lo bueno y lo malo‖, y Jehová se
lo concedió (2 Crónicas 1:10-12; 1 Reyes 3:9).
Nosotros también debemos pedir la ayuda de Jehová mientras nos esmeramos en el estudio
de su Palabra. El salmista dijo en oración: ―Instrúyeme, oh Jehová, acerca de tu camino.
Andaré en tu verdad. Unifica mi corazón para que tema tu nombre‖ (Salmo 86:11). A Jehová le
pareció bien esa oración, por eso está escrita en la Biblia. Podemos estar seguros, pues, de
que nuestras oraciones constantes y sinceras, en las que pedimos su ayuda para encontrar
tesoros espirituales en la Biblia, no quedarán sin respuesta (Lucas 18:1-8).
Salomón señala: ―Para los rectos atesorará sabiduría práctica; para los que andan en
integridad él es un escudo, mediante la observación de las sendas del juicio, y él guardará el
mismísimo camino de los que le son leales. En tal caso entenderás justicia y juicio y rectitud, el
derrotero entero de lo que es bueno‖ (Proverbios 2:7-9). ¡Qué palabras más tranquilizadoras!
Jehová no solo concede sabiduría a los que con sinceridad van en pos de ella, sino que,
además, es un escudo protector para los rectos, ya que manifiestan auténtica sabiduría y se
ajustan con lealtad a sus justas normas. Que todos nosotros seamos de aquellos a quienes
Jehová ayuda a entender ―el derrotero entero de lo que es bueno‖.
Cuando ―el conocimiento mismo se haga agradable‖
A pesar de que el estudio personal de la Biblia es un requisito esencial en la búsqueda de la
sabiduría, no es una actividad que atraiga a muchas personas. Por ejemplo, Lawrence, de
58 años, dice: ―Mi trabajo siempre ha sido manual. Estudiar me resulta muy difícil‖. Michael,
de 24 años, a quien no le gustaba estudiar cuando estaba en la escuela, admite: ―Me tenía que
imponer la obligación de sentarme a estudiar‖. Aun así, se puede cultivar el deseo de hacerlo.
Veamos lo que hizo Michael. Él nos cuenta: ―Me obligaba a estudiar durante media hora al día.
Al poco tiempo empecé a notar los efectos en mi actitud, los comentarios en las reuniones
cristianas y en las conversaciones con los demás. Ahora anhelo que llegue el momento de
estudiar y me sienta muy mal que algo lo interrumpa‖. Así es, al estudio personal se le va
tomando el gusto con el tiempo, al ver cómo progresamos. Lawrence se aplicó de igual modo al
estudio de la Biblia y, finalmente, llegó a ser anciano de una congregación de los testigos de
Jehová.
Para conseguir que el estudio personal sea una experiencia agradable, se necesita esfuerzo
constante. Los beneficios, por otra parte, son enormes. ―Cuando la sabiduría entre en tu
corazón y el conocimiento mismo se haga agradable a tu mismísima alma —dice Salomón—, la
capacidad de pensar misma te vigilará, el discernimiento mismo te salvaguardará.‖ (Proverbios
2:10, 11.)
―Para librarte del mal camino‖
¿De qué maneras son la sabiduría, el conocimiento, la capacidad de pensar y el
discernimiento una salvaguarda? Salomón contesta: ―[Son] para librarte del mal camino, del
hombre que habla cosas perversas, de los que dejan las sendas de la rectitud para andar en
los caminos de la oscuridad, de los que están regocijándose en hacer el mal, que están
gozosos en las cosas perversas de la maldad; aquellos cuyas sendas son torcidas, y que son
sinuosos en su derrotero general‖ (Proverbios 2:12-15).
Así es, los que valoran la auténtica sabiduría no tienen nada que ver con el que ―habla cosas
perversas‖, es decir, contrarias a la verdad y la justicia. La capacidad de pensar y el
discernimiento brindan protección tanto contra los que rechazan la verdad para andar en la
oscuridad como contra los que son taimados y se deleitan en la maldad (Proverbios 3:32).
Qué agradecidos podemos estar de que la auténtica sabiduría y sus cualidades afines
también nos protejan del mal camino de hombres y mujeres inmorales. Según Salomón, estas
cualidades son ―para librarte de la mujer extraña, de la extranjera que ha hecho melosos sus
propios dichos, que está dejando al amigo íntimo de su juventud y que ha olvidado el mismo
pacto de su Dios. Porque abajo a la muerte de veras se hunde su casa, y abajo a los que están
impotentes en la muerte bajan sus senderos trillados. Ninguno de los que tienen relaciones con
ella volverá, ni alcanzarán de nuevo las sendas de los que viven‖ (Proverbios 2:16-19).
Se dice que ―la mujer extraña‖, la prostituta, es la que abandona ―al amigo íntimo de su
juventud‖, posiblemente al marido de su juventud (compárese con Malaquías 2:14). Ha olvidado
que el pacto de la Ley prohíbe el adulterio (Éxodo 20:14). Sus senderos llevan a la muerte. Los
que andan en su compañía puede que nunca ‗alcancen de nuevo las sendas de los que viven‘,
pues es posible que, tarde o temprano, lleguen a un punto sin retorno, a saber, la muerte. El
hombre de discernimiento y capacidad de pensar está al tanto de los señuelos de la
inmoralidad y con sabiduría evita dejarse atrapar en ellos.
‗Los rectos residirán en la Tierra‘
Salomón resume la finalidad de su consejo en cuanto a la sabiduría con las palabras: ―El
propósito es que andes en el camino de los buenos y que guardes las sendas de los justos‖
(Proverbios 2:20). ¡Qué magnífico propósito tiene la sabiduría! Nos ayuda a llevar una vida
satisfactoria y feliz que cuenta con la aprobación de Dios.
Asimismo vea las enormes bendiciones que aguardan a los que ‗andan en el camino de los
buenos‘. Salomón añade: ―Los rectos son los que residirán en la tierra, y los exentos de culpa
son los que quedarán en ella. En cuanto a los inicuos, serán cortados de la mismísima tierra; y
en cuanto a los traicioneros, serán arrancados de ella‖ (Proverbios 2:21, 22). Que nos
contemos entre los exentos de culpa que residirán para siempre en el justo nuevo mundo de
Dios (2 Pedro 3:13).
[Nota]
El término extraña se aplicaba a la persona que se apartaba de lo que estaba en armonía con
la Ley y, por lo tanto, se alejaba de Jehová. De ahí que se aluda a la prostituta con la
expresión ―mujer extraña‖, sin ser necesariamente extranjera.
*** w00 15/1 págs. 23-26 Cultivemos una relación íntima con Jehová ***
JEHOVÁ dijo al profeta Samuel: ―No de la manera como el hombre ve es como Dios ve,
porque el simple hombre ve lo que aparece a los ojos; pero en cuanto a Jehová, él ve lo que es
el corazón‖ (1 Samuel 16:7). El salmista David también cantó, centrando su atención en el
corazón figurativo: ―Tú [Jehová] has examinado mi corazón, has hecho inspección de noche,
me has refinado; descubrirás que no he tramado‖ (Salmo 17:3).
En efecto, Jehová examina nuestro corazón para determinar quiénes somos en verdad
(Proverbios 17:3). Por ello, el rey Salomón del antiguo Israel, aconseja: ―Más que todo lo
demás que ha de guardarse, salvaguarda tu corazón, porque procedentes de él son las fuentes
de la vida‖ (Proverbios 4:23). ¿Cómo podemos salvaguardar nuestro corazón figurativo? El
capítulo 4 de Proverbios nos da la respuesta.
Escuchemos la disciplina de un padre
El capítulo 4 de Proverbios empieza con estas palabras: ―Escuchen, oh hijos, la disciplina de
un padre, y presten atención, para conocer entendimiento. Porque buena instrucción es lo que
ciertamente les daré. No dejen mi ley‖ (Proverbios 4:1, 2).
A los jóvenes se les aconseja escuchar la sana instrucción de sus padres piadosos,
particularmente la del padre. Él tiene la responsabilidad bíblica de satisfacer las necesidades
físicas y espirituales de la familia (Deuteronomio 6:6, 7; 1 Timoteo 5:8). Sin esa guía, le sería
mucho más difícil al joven alcanzar la madurez. Por lo tanto, ¿no debería el hijo aceptar con
respeto la disciplina de su padre?
Pero ¿y si el joven no tiene un padre que lo instruya? Por ejemplo Jason, de 11 años de
edad, se quedó huérfano a los cuatro. Cuando un anciano cristiano le preguntó cuál era el
aspecto más difícil de su vida, Jason respondió de inmediato: ―Echo de menos a mi padre. A
veces me siento muy deprimido‖. No obstante, los jóvenes que no tienen la dirección de sus
padres pueden contar con consejo reconfortante. Jason, y otros como él, pueden recibir
consejo paternal de los ancianos y otros hermanos maduros de la congregación cristiana
(Santiago 1:27).
Salomón dice a continuación, rememorando su propia educación: ―Yo resulté ser un hijo
verdadero para mi padre, tierno y el único delante de mi madre‖ (Proverbios 4:3). El rey
evidentemente recordaba su crianza con agrado. El joven Salomón fue ―un hijo verdadero‖ que
tomó a pecho el consejo de su padre, David, por lo que debió tener una relación afectuosa y
estrecha con él. Además, Salomón fue ―el único‖, es decir, fue muy amado. Es muy importante
que el hijo crezca en un ambiente hogareño afectuoso y que disfrute de una buena
comunicación con sus padres.
Adquiramos sabiduría y entendimiento
Recordando el consejo amoroso de su padre, Salomón relata: ―Él me instruía y me decía:
‗Que tu corazón tenga firmemente asidas mis palabras. Guarda mis mandamientos y continúa
viviendo. Adquiere sabiduría, adquiere entendimiento. No te olvides, y no te desvíes de los
dichos de mi boca. No la dejes [a la sabiduría], y ella te guardará. Ámala, y ella te
salvaguardará. La sabiduría es la cosa principal. Adquiere sabiduría; y con todo lo que
adquieres, adquiere entendimiento‘‖ (Proverbios 4:4-7).
¿Por qué es la sabiduría ―la cosa principal‖? Sabiduría es la capacidad de poner por obra el
conocimiento y el entendimiento de modo que produzca buenos resultados. El conocimiento, es
decir, el saber que se consigue mediante la observación y la experiencia o mediante la lectura y
el estudio, es fundamental para conseguir la sabiduría. Pero si no tenemos la aptitud de poner
por obra ese conocimiento, nos será de poco valor. No solo debemos leer con regularidad la
Biblia y las publicaciones bíblicas que suministra ―el esclavo fiel y discreto‖, sino también
esforzarnos por poner en práctica lo que aprendemos en ellas (Mateo 24:45).
Conseguir entendimiento también es esencial. Sin él, ¿podríamos en realidad ver cómo se
relacionan los hechos unos con otros y obtener un cuadro completo del asunto que
examinamos? Si no tuviéramos entendimiento, ¿cómo podríamos percibir los porqués de las
cosas y adquirir perspicacia y discernimiento? En efecto, para razonar sobre la base de los
hechos conocidos y llegar a conclusiones correctas, necesitamos entendimiento (Daniel
9:22, 23).
Salomón continúa relatando las palabras de su padre de este modo: ―Estímala altamente a
[la sabiduría], y ella te ensalzará. Te glorificará porque la abrazas. Dará a tu cabeza una
guirnalda de encanto; te otorgará una corona de hermosura‖ (Proverbios 4:8, 9). La sabiduría
piadosa protege a todos los que la abrazan. Además, los honra y engalana. Por lo tanto,
hagamos todo lo posible por conseguir sabiduría.
‗Asgámonos de la disciplina‘
Haciéndose eco de la instrucción de su padre, el rey de Israel dice a continuación: ―Oye, hijo
mío, y acepta mis dichos. Entonces para ti los años de vida llegarán a ser muchos.
Yo ciertamente te instruiré aun en el camino de la sabiduría; ciertamente haré que pises en los
senderos trillados de la rectitud. Cuando andes, no será estrecho tu paso; y si corres,
no tropezarás. Ásete de la disciplina; no la sueltes. Salvaguárdala, pues ella misma es tu vida‖
(Proverbios 4:10-13).
Como hijo verdadero de su padre, Salomón debió apreciar el valor de la disciplina amorosa
que instruye y corrige. Sin una disciplina equilibrada, ¿cómo podríamos progresar a la madurez
espiritual o mejorar la calidad de nuestra vida? Si no aprendemos de nuestros errores o si
no corregimos las ideas equivocadas, nuestro progreso espiritual será imperceptible. La
disciplina razonable se traduce en una conducta piadosa y así nos ayuda a ‗pisar en los
senderos trillados de la rectitud‘.
Otro tipo de disciplina también hace que ‗los años de la vida lleguen a ser muchos‘. ¿Cómo?
Pues bien, Jesucristo dijo: ―La persona fiel en lo mínimo es fiel también en lo mucho, y la
persona injusta en lo mínimo es injusta también en lo mucho‖ (Lucas 16:10). Si nos
disciplinamos en las cosas pequeñas, ¿no nos será más fácil hacer lo mismo en las cosas
grandes, de las que depende nuestra misma vida? Por ejemplo, si acostumbramos al ojo a
no ‗seguir mirando a una mujer a fin de tener una pasión por ella‘ será improbable que
sucumbamos a la inmoralidad (Mateo 5:28). Naturalmente, este principio es aplicable tanto a
hombres como a mujeres. En suma, si disciplinamos la mente para ‗poner bajo cautiverio todo
pensamiento‘, será poco probable que pequemos gravemente en palabra o acciones
(2 Corintios 10:5).
Es cierto que la disciplina suele ser difícil de aceptar y puede parecer restrictiva (Hebreos
12:11). De todos modos, el rey sabio nos asegura que si nos asimos de ella, nuestra senda nos
conducirá al progreso. Tal como el debido entrenamiento hace posible que el corredor avance
a la velocidad óptima sin caerse ni lesionarse, asirse de la disciplina nos permite seguir en el
camino de la vida a un paso constante sin tropezar. Por supuesto, tenemos que escoger con
cuidado la senda debida.
Evitemos ―la senda de los inicuos‖
Salomón advierte con sentido de urgencia: ―No entres en la senda de los inicuos, y no andes
directamente adelante al camino de los malos. Esquívalo, no pases adelante por él; desvíate
de él, y pasa adelante. Porque ellos no duermen a menos que hagan maldad, y su sueño les
ha sido arrebatado a no ser que hagan tropezar a alguien. Porque se han alimentado del pan
de la iniquidad, y el vino de actos de violencia es lo que beben‖ (Proverbios 4:14-17).
Los inicuos, cuyos caminos Salomón dice que debemos evitar, persisten en sus hechos
viles. Hacer lo que es malo es como alimento y bebida para ellos. No pueden dormir a menos
que hayan realizado actos de violencia. Su misma personalidad está corrompida. ¿Podemos en
realidad salvaguardar nuestro corazón en su compañía? Sería insensato ‗andar directamente
adelante al camino de los malos‘ exponiéndonos a la violencia que contiene buena parte del
entretenimiento actual. Si queremos ser tiernamente compasivos no podemos ingerir las dosis
insensibilizadoras de escenas de maldad que se presentan en la pantalla de la televisión o el
cine.
Mantengámonos en la luz
Utilizando aún la analogía del camino, Salomón dice: ―Pero la senda de los justos es como la
luz brillante que va haciéndose más y más clara hasta que el día queda firmemente
establecido‖ (Proverbios 4:18). El estudio de la Biblia y el esfuerzo por aplicar lo que esta dice
en la vida puede compararse a emprender un viaje en la oscuridad de la noche. Cuando la
negrura del firmamento nocturno empieza a tornarse azul oscuro en la madrugada,
no podemos ver prácticamente nada, pero al despuntar el alba, los alrededores van haciéndose
cada vez más claros. Finalmente, el Sol brilla con fuerza y vemos todos los detalles. Así mismo,
la verdad se hace más y más clara a medida que seguimos estudiando las Escrituras con
paciencia y diligencia. Suministrar al corazón este nutrimento espiritual es fundamental para
salvaguardarlo contra el razonamiento falso.
El significado o importancia de las profecías bíblicas también se revela gradualmente. Las
profecías se hacen más claras cuando el espíritu santo de Jehová arroja luz sobre ellas y los
acontecimientos mundiales o las experiencias del pueblo de Dios las cumplen. En vez de
recurrir impacientemente a especulaciones sobre su realización, debemos esperar a que ‗la luz
se haga más y más clara‘.
¿Qué puede decirse de aquellos que rechazan la guía de Dios y no quieren andar en la luz?
―El camino de los inicuos es como las tinieblas —dice Salomón— no han sabido en qué siguen
tropezando.‖ (Proverbios 4:19.) Los inicuos son como el que tropieza en la oscuridad sin saber
con qué. Aunque parezca que el impío prospera debido a su injusticia, su aparente éxito es
solo temporal. El salmista cantó con respecto a tales personas: ―De seguro en suelo resbaloso
es donde los colocas [Jehová]. Los has hecho caer en ruinas‖ (Salmo 73:18).
Mantengámonos vigilantes
El rey de Israel sigue diciendo: ―Hijo mío, de veras presta atención a mis palabras. A mis
dichos inclina tu oído. No se escapen de tus ojos. Guárdalos en medio de tu corazón. Porque
son vida a los que los hallan y salud a toda su carne. Más que todo lo demás que ha de
guardarse, salvaguarda tu corazón, porque procedentes de él son las fuentes de la vida‖
(Proverbios 4:20-23).
El propio ejemplo de Salomón da testimonio del valor que tiene el consejo de salvaguardar el
corazón. Es cierto que él ‗resultó ser un hijo verdadero‘ para su padre en su juventud y fue fiel a
Jehová en su vida adulta. No obstante, la Biblia explica: ―Al tiempo en que envejeció Salomón
aconteció que sus esposas [extranjeras] mismas habían inclinado el corazón de él a seguir a
otros dioses; y su corazón no resultó completo para con Jehová su Dios como el corazón de
David su padre‖ (1 Reyes 11:4). Sin una constante vigilancia, aun el mejor de los corazones
puede ser tentado a hacer lo malo (Jeremías 17:9). Tenemos que mantener cerca de nuestro
corazón, ‗en medio de él‘, los recordatorios de la Palabra de Dios, como la guía que suministra
el capítulo 4 de Proverbios.
Examinemos la condición de nuestro corazón
¿Estamos salvaguardando bien nuestro corazón figurativo? ¿Cómo podemos conocer la
condición de nuestro ser interior? ―De la abundancia del corazón habla la boca‖, dijo Jesucristo
(Mateo 12:34). Él también declaró: ―Del corazón salen razonamientos inicuos, asesinatos,
adulterios, fornicaciones, hurtos, testimonios falsos, blasfemias‖ (Mateo 15:19, 20). En efecto,
nuestras palabras y acciones dicen mucho acerca de lo que somos en el corazón.
Por ello, Salomón nos advierte: ―Quita de ti mismo la tortuosidad del habla; y la sinuosidad
de labios aleja de ti. En cuanto a tus ojos, directamente adelante deben mirar, sí, tus propios
ojos radiantes deben mirar con fijeza directamente enfrente de ti. Allana el derrotero de tu pie, y
establézcanse firmemente todos tus propios caminos. No te inclines a la derecha ni a la
izquierda. Quita tu pie de lo que es malo‖ (Proverbios 4:24-27).
En vista de la admonición de Salomón, debemos examinar nuestra habla y nuestras
acciones. Si queremos salvaguardar el corazón y agradar a Dios, tenemos que evitar el habla
tortuosa y sinuosa (Proverbios 3:32). De modo que es necesario reflexionar con oración sobre
lo que revelan acerca de nosotros nuestras palabras y acciones. Luego, busquemos la ayuda
de Jehová para corregir cualquier debilidad que detectemos (Salmo 139:23, 24).
Sobre todo, ‗que nuestros ojos miren directamente enfrente‘. Mantengámoslos fijos en la
meta de rendir servicio de toda alma a nuestro Padre celestial (Colosenses 3:23). Que Jehová
nos conceda el éxito en ‗todos nuestros caminos‘ al seguir de manera personal este proceder
recto, y que nos bendiga abundantemente por acatar el consejo inspirado de ‗salvaguardar
nuestro corazón‘.
*** w00 15/7 págs. 28-31 Podemos ser castos en un mundo inmoral ***
ÉL ERA un hombre atractivo de tez morena. Ella, una mujer hermosa y con talento. Ambos
trabajaban para la misma empresa. Ella le colmaba de atenciones personales, y él le profesaba
admiración. Se intercambiaban regalos, y al poco tiempo se hicieron amantes. Él dejó a su
esposa por ella, mientras que la mujer decidió al final seguir con su marido y poner fin a la
aventura. Con poco entusiasmo, él trató de reconciliarse con su esposa, pero, como no sentía
verdadero remordimiento, no lo logró. Todos los implicados siguieron su vida, pero ninguno
salió ileso.
Este mundo ya no considera que la moralidad sexual sea una virtud. El afán inmoderado de
placer y satisfacción parece estar a la orden del día. The New Encyclopædia Britannica dice:
―El adulterio parece estar tan generalizado y, en algunos casos, ser tan común como el
matrimonio‖.
No obstante, Jehová desea que el matrimonio sea ―honorable entre todos‖ y que el lecho
conyugal sea ―sin contaminación‖ (Hebreos 13:4). Las Escrituras declaran: ―No se extravíen.
Ni fornicadores, ni idólatras, ni adúlteros, ni hombres que se tienen para propósitos
contranaturales, ni hombres que se acuestan con hombres [...] heredarán el reino de Dios‖
(1 Corintios 6:9, 10). Por lo tanto, para disfrutar del favor divino, tenemos que mantenernos
limpios moralmente en este mundo inmoral.
¿Cómo podemos protegernos de las influencias corruptoras que nos rodean? El rey
Salomón del antiguo Israel nos da las respuestas en el capítulo 5 del libro bíblico de
Proverbios. Examinemos lo que nos dice.
Capacidad de pensar para protegernos
―Hijo mío, oh de veras presta atención a mi sabiduría‖, comienza diciendo el rey de Israel, y
añade: ―A mi discernimiento inclina tus oídos, para guardar las capacidades de pensar; y que
tus propios labios salvaguarden el conocimiento mismo‖ (Proverbios 5:1, 2).
Para resistir las tentaciones de ceder a la inmoralidad, necesitamos sabiduría, esto es, la
capacidad de poner por obra el conocimiento de las Escrituras, y discernimiento, es decir, el
juicio por cuyo medio percibimos la diferencia que existe entre lo bueno y lo malo y optamos
por el proceder correcto. Se nos insta a prestar atención a la sabiduría y el discernimiento a fin
de guardar la capacidad de pensar. ¿Cómo podemos hacerlo? Cuando estudiamos la Palabra
de Dios, la Biblia, hemos de prestar atención a cómo actúa Jehová e inclinar el oído a su
voluntad y propósitos. Al proceder de este modo, dirigiremos nuestros procesos intelectuales a
lo que es correcto. La capacidad de pensar así adquirida está en armonía con la sabiduría y el
conocimiento piadosos. Cuando se emplea debidamente, nos protege de vernos entrampados
en las tentaciones inmorales.
Guardémonos del paladar suave
La capacidad de pensar es esencial para conservar la pureza moral en un mundo impuro,
porque la persona inmoral se vale de la seducción para atraer al semejante. Salomón nos
advierte: ―Como panal de miel los labios de una mujer extraña siguen goteando, y su paladar
es más suave que el aceite. Pero el efecto que después viene de ella es tan amargo como el
ajenjo; es tan agudo como una espada de dos filos‖ (Proverbios 5:3, 4).
En este proverbio, a la persona descarriada se la llama ―mujer extraña‖, prostituta. Las
palabras con las que seduce a su víctima son tan dulces como la miel y tan suaves como el
aceite de oliva. ¿No empiezan así la mayoría de las insinuaciones inmorales? Veamos, por
ejemplo, el caso de una atractiva secretaria de 27 años de edad llamada Amy. Ella nos cuenta:
―Hay un compañero de trabajo que me presta mucha atención y me elogia siempre que tiene
oportunidad. Me agrada que otras personas se fijen en mí, pero me doy perfecta cuenta de que
su interés es estrictamente sexual. No me voy a dejar engañar por sus insinuaciones‖. Las
palabras halagadoras del seductor o la seductora suelen resultar atrayentes, a menos que
reconozcamos su verdadera naturaleza. Para ello es necesario que empleemos la capacidad
de pensar.
Las consecuencias de la inmoralidad son tan amargas como el ajenjo y tan agudas como
una espada de dos filos: dolorosas y mortíferas. Los amargos resultados de esa conducta
suelen ser una conciencia atribulada, un embarazo no deseado o una enfermedad de
transmisión sexual. Y pensemos también en el tremendo dolor emocional que siente el cónyuge
de la persona infiel. Una infidelidad puede ocasionar heridas tan profundas que duren toda la
vida. En efecto, la infidelidad hace daño.
El sabio rey continúa su exposición comentando el modo de vida de la mujer descarriada:
―Sus pies van descendiendo a la muerte. Sus mismísimos pasos se asen del Seol mismo. Ella
no contempla la senda de la vida. Sus senderos trillados han ido errantes, y ella no sabe
adónde‖ (Proverbios 5:5, 6). Los caminos de la mujer inmoral la llevan a la muerte, sus pasos la
conducen al Seol, la sepultura común de la humanidad. ¡Qué ciertas resultan estas palabras
ante la proliferación de las enfermedades de transmisión sexual, sobre todo el sida! Tanto ella
como quienes la acompañan en sus caminos torcidos sufren las mismas consecuencias.
El rey ruega con sincero interés: ―Ahora pues, oh hijos, escúchenme, y no se aparten de los
dichos de mi boca. Mantén tu camino alejado del lado de ella, y no te acerques a la entrada de
su casa‖ (Proverbios 5:7, 8).
Tenemos que alejarnos todo lo posible de la influencia de las personas inmorales. ¿Por qué
deberíamos exponernos a sus caminos escuchando música degradante, viendo espectáculos
que corrompen o mirando pornografía? (Proverbios 6:27; 1 Corintios 15:33; Efesios 5:3-5.)
Y qué insensato es llamar su atención coqueteando o vistiéndonos y arreglándonos con
inmodestia (1 Timoteo 4:8; 1 Pedro 3:3, 4).
Un precio muy elevado
¿Cuál es otra razón por la que debemos mantenernos muy lejos de la persona descarriada?
Salomón contesta: ―Para que no des a otros tu dignidad, ni tus años a lo que es cruel; para que
los extraños no se satisfagan de tu poder, ni las cosas que conseguiste con dolor estén en la
casa de un extranjero, ni tengas que gemir en tu futuro cuando se acaben tu carne y tu
organismo‖ (Proverbios 5:9-11).
Así destaca Salomón el elevado precio que se paga por sucumbir a la inmoralidad. El
adulterio y la pérdida de la dignidad van de la mano. ¿No es realmente humillante no ser más
que un medio para satisfacer nuestra propia pasión inmoral o la de otra persona? ¿No revela
falta de amor propio el entregarse a la intimidad sexual con quien no es nuestro cónyuge?
Ahora bien, ¿qué abarca el ‗dar nuestros años, nuestro poder y el fruto de nuestro trabajo a
los extraños, o extranjeros‘? Una obra de consulta dice: ―La idea que transmiten estos
versículos está clara: el precio de la infidelidad puede ser elevado; pues podríamos perder todo
aquello por lo que trabajamos —posición, poder, prosperidad—, bien por culpa de las
codiciosas demandas que presente la mujer, bien por culpa de las reclamaciones de
indemnización que haga la comunidad‖. La inmoralidad resulta muy cara.
Una vez perdida la dignidad y agotados los recursos, el insensato se queja: ―¡Cómo he
odiado la disciplina, y mi corazón ha tratado con falta de respeto aun la censura! Y no he
escuchado la voz de mis instructores, y a mis maestros no he inclinado el oído. Fácilmente he
llegado a estar en toda suerte de maldad en medio de la congregación y de la asamblea‖
(Proverbios 5:12-14).
Con el tiempo, el pecador suelta lo que un erudito llama ―larga letanía de lamentos: si
hubiera escuchado a mi padre; si no hubiera hecho las cosas a mi modo; si hubiera prestado
atención a los consejos que me daban‖. Pero ya es demasiado tarde. La vida de la persona,
impura a partir de entonces, ya está arruinada, y su reputación ya se ha manchado. ¡Qué
importante es que tengamos en cuenta el elevado precio de la inmoralidad antes de hundirnos
en ella!
―Bebe agua de tu propia cisterna‖
¿Trata la Biblia con mojigatería el tema de las relaciones sexuales? En absoluto. La emoción
del amor romántico y el éxtasis de que disfrutan hombre y mujer son dádivas divinas. Ahora
bien, esta intimidad solo se permite a los matrimonios. Por ello, Salomón da esta exhortación al
hombre casado: ―Bebe agua de tu propia cisterna, y chorrillos que salgan de en medio de tu
propio pozo. ¿Deben esparcirse afuera tus manantiales, tus corrientes de agua en las plazas
públicas mismas? Resulten ser para ti solo, y no para los extraños contigo‖ (Proverbios 5:15-
17).
―Tu propia cisterna‖ y ―tu propio pozo‖ son expresiones poéticas con las que se hace
referencia a la esposa amada. Disfrutar de placer sexual con ella se compara a beber agua
refrescante. A diferencia del agua de los lugares públicos, las cisternas o los pozos se
consideran propiedad privada. Y al hombre se le aconseja que engendre hijos en su casa con
su esposa, en lugar de esparcir su simiente por las plazas públicas, esto es, entre otras
mujeres. Evidentemente, el consejo que se da al hombre es que sea fiel a su esposa.
El sabio continúa diciendo: ―Resulte bendita tu fuente de aguas, y regocíjate con la esposa
de tu juventud, una amable cierva y una encantadora cabra montesa. Que sus propios pechos
te embriaguen a todo tiempo. Con su amor estés en un éxtasis constantemente‖ (Proverbios
5:18, 19).
Con la expresión ―fuente de aguas‖ se hace referencia a la fuente de satisfacción sexual. El
placer sexual con nuestro cónyuge es ‗bendito‘, un don de Dios. Por ello se exhorta al hombre
a regocijarse con la esposa de su juventud. Para él es tan adorable y hermosa como una
gacela, y tan encantadora y grácil como una cabra montés.
A continuación, Salomón plantea dos preguntas retóricas: ―¿Por qué, pues, debes tú, hijo
mío, estar en un éxtasis con una extraña, o abrazar el seno de una extranjera?‖ (Proverbios
5:20). En efecto, ¿por qué debería una persona casada dejarse arrastrar a la intimidad sexual
fuera del matrimonio mediante contactos en el empleo, la escuela u otro lugar?
El apóstol Pablo da este consejo a los cristianos casados: ―Esto digo, hermanos: el tiempo
que queda está reducido. En adelante, los que tienen esposas sean como si no tuvieran‖
(1 Corintios 7:29). ¿Qué implica esto? Pues bien, los seguidores de Jesucristo han de ‗seguir
buscando primero el reino‘ (Mateo 6:33). Por lo tanto, los cónyuges no deben estar tan absortos
el uno en el otro que den a los intereses del Reino un lugar secundario en la vida.
Se necesita autodominio
Los deseos sexuales pueden controlarse. Eso deben hacer quienes desean la aprobación de
Jehová. ―Esto es la voluntad de Dios: la santificación de ustedes, que se abstengan de la
fornicación; que cada uno de ustedes sepa tomar posesión de su propio vaso [su propio
cuerpo] en santificación y honra‖, aconsejó el apóstol Pablo (1 Tesalonicenses 4:3, 4).
Por tanto, los jóvenes no deben apresurarse a contraer matrimonio cuando sientan el
despertar de sus impulsos sexuales. El matrimonio exige compromiso, y vivir de acuerdo con
esa responsabilidad requiere madurez (Génesis 2:24). Es mejor esperar hasta haber ―pasado la
flor de la juventud‖, el período en que se intensifican los deseos sexuales y pueden torcer el
juicio de la persona (1 Corintios 7:36). Y es una insensatez y un pecado que un adulto que
desea casarse mantenga relaciones inmorales simplemente porque no ha encontrado con
quién contraer matrimonio.
―Sus propios errores atraparán al inicuo‖
La razón fundamental por la que es incorrecta la inmoralidad sexual es que la desaprueba
Jehová, el Dador de la vida y quien ha otorgado al ser humano el deseo sexual. Por ello, el rey
Salomón nos da el incentivo más convincente para ser castos al decir: ―Porque los caminos del
hombre están enfrente de los ojos de Jehová, y él está contemplando todos sus senderos
trillados‖ (Proverbios 5:21). Así es: nada se esconde de los ojos de Dios, ―a quien tenemos que
dar cuenta‖ (Hebreos 4:13). Todo acto de inmundicia sexual, no importa lo secreto que sea
ni sus consecuencias físicas y sociales, va a dañar sin duda nuestra relación con Jehová.
No tiene sentido perder la paz con Dios por unos breves momentos de placer ilícito.
Puede parecer que algunas personas que se entregan desvergonzadamente a la
inmoralidad lo hacen con impunidad, pero no por mucho tiempo. Salomón declara: ―Sus propios
errores atraparán al inicuo, y en las sogas de su propio pecado será asido. Él será el que
morirá porque no hay disciplina, y porque en la abundancia de su tontedad se descarría‖
(Proverbios 5:22, 23).
¿Por qué debería descarriarse alguno de nosotros? Al fin y al cabo, el libro de Proverbios
nos advierte de los métodos seductores del mundo. Y expone ante nosotros el precio que
normalmente hay que pagar por la inmoralidad sexual: la pérdida de la salud, de los bienes
materiales, de las fuerzas y de la dignidad. Dado que se nos pone sobre aviso con tanta
claridad, no tenemos por qué encontrarnos nunca pronunciando una larga letanía de lamentos.
En efecto, mediante la aplicación del consejo que Jehová nos da en su Palabra inspirada,
podemos ser castos moralmente en un mundo inmoral.
[Nota]
La palabra extraño se aplicaba a quien no actuaba en conformidad con la Ley y así se alejaba
de Jehová. Por ello, a la prostituta se la llama ―una mujer extraña‖.
*** w00 15/11 págs. 28-31 ―Guarda mis mandamientos y continúa viviendo‖ ***
ERA un hombre joven, inteligente, ―de hermosa figura y de hermosa apariencia‖, con quien
estaba encaprichada la sensual esposa de su jefe. Aquella descarada intentaba seducirlo a
diario. ―Sucedió que en este día, como en otros días, él entró en la casa para atender a su
negocio, y no había ninguno de los hombres de la casa allí en la casa. Entonces ella se agarró
de él por su prenda de vestir, y dijo: ‗¡Acuéstate conmigo!‘.‖ Pero José, hijo del patriarca Jacob,
dejó atrás su prenda de vestir y huyó de la esposa de Potifar (Génesis 39:1-12).
Claro está, no todo el mundo huye de las situaciones tentadoras. Por ejemplo, tenemos el
caso del joven a quien el rey Salomón del antiguo Israel vio en la calle por la noche. Seducido
por una desvergonzada mujer, ―en seguida fue tras ella, como el buey que va camino al
matadero‖ (Proverbios 7:21, 22, Nueva Versión Internacional).
A los cristianos se les exhorta a que ―huyan de la fornicación‖ (1 Corintios 6:18). El apóstol
Pablo escribió lo siguiente a Timoteo, discípulo cristiano joven: ―Huye de los deseos que
acompañan a la juventud‖ (2 Timoteo 2:22). Cuando afrontamos situaciones que nos incitan a
la fornicación, el adulterio u otros actos contrarios a la moral, debemos escapar de ellas con la
misma decisión con que huyó José de la esposa de Potifar. ¿Qué fortalecerá nuestra
resolución de obrar así? Salomón nos da consejos de gran valor en el capítulo 7 del libro
bíblico de Proverbios. No solo habla de las enseñanzas que nos protegen de las artimañas de
la gente inmoral, sino que expone sus formas de actuar al describir con gran vivacidad una
escena en la que una mujer disoluta seduce a un joven.
‗Ata mis mandamientos sobre tus dedos‘
El rey empieza con el siguiente consejo paternal: ―Hijo mío, guarda mis dichos, y quieras
atesorar contigo mis propios mandamientos. Guarda mis mandamientos y continúa viviendo, y
mi ley como la niña de tus ojos‖ (Proverbios 7:1, 2).
Dios ha dado tanto al padre como a la madre —pero en particular al primero— la
responsabilidad de enseñar a sus hijos las normas divinas sobre lo bueno y lo malo. Moisés
exhortó al cabeza de familia: ―Estas palabras que te estoy mandando hoy tienen que resultar
estar sobre tu corazón; y tienes que inculcarlas en tu hijo y hablar de ellas cuando te sientes en
tu casa y cuando andes por el camino y cuando te acuestes y cuando te levantes‖
(Deuteronomio 6:6, 7). Y a los varones escribió el apóstol Pablo: ―Ustedes, padres, no estén
irritando a sus hijos, sino sigan criándolos en la disciplina y regulación mental de Jehová‖
(Efesios 6:4). Por lo tanto, no cabe duda de que entre las instrucciones paternas que se han de
atesorar —o sea, valorar muchísimo— figuran los recordatorios, los mandamientos y las leyes
que se hallan en la Palabra de Dios, la Biblia.
La enseñanza de ambos padres también puede incluir otras disposiciones: las reglas de la
familia, que se establecen para el bien de sus miembros. Es cierto que tales reglas varían,
dependiendo de las necesidades de cada familia. Y son los dos progenitores quienes deben
decidir lo que es más provechoso para su propia familia. Además, sus normas por lo general
serán una expresión de verdadero amor e interés. El consejo que reciben los jóvenes es acatar
esas reglas así como las enseñanzas bíblicas que les impartan sus padres. Es muy necesario
que traten estas instrucciones como a ‗la niña de los ojos‘, es decir, que las guarden con sumo
cuidado. Así evitarán el efecto mortífero de pasar por alto las normas de Jehová, y ‗continuarán
viviendo‘.
―Átalos [mis mandamientos] sobre tus dedos —pasa a decir Salomón—, y escríbelos sobre
la tabla de tu corazón.‖ (Proverbios 7:3.) Los dedos siempre están a la vista y son
imprescindibles para realizar lo que nos proponemos. De igual modo, en todo lo que hagamos
siempre debemos tener presente el recordatorio y la guía de las lecciones que aprendimos
cuando nos criaron según las Escrituras o cuando adquirimos el conocimiento bíblico.
Debemos grabar tales mandamientos en la tabla del corazón, o lo que es lo mismo,
incorporarlos a nuestra forma de ser.
El rey no olvida la importancia de la sabiduría y el entendimiento, pues exhorta: ―Di a la
sabiduría: ‗Tú eres mi hermana‘; y al entendimiento mismo quieras llamar ‗Pariente‘‖
(Proverbios 7:4). La sabiduría es la capacidad de aplicar bien el conocimiento divino. Hemos de
sentir por ella el mismo afecto que por una hermana querida. ¿Qué es el entendimiento? Es la
capacidad de analizar un asunto y captar su significado al percibir la relación que guardan sus
elementos entre sí y con el todo. El entendimiento debe ser algo tan cercano a nosotros como
un amigo íntimo.
¿Por qué debemos sujetarnos a la enseñanza bíblica y familiarizarnos íntimamente con la
sabiduría y el entendimiento? ―Para que [nos] guarden de la mujer extraña, de la extranjera que
ha hecho melosos sus propios dichos.‖ (Proverbios 7:5.) En efecto, dicho proceder nos
protegerá de los caminos melosos y persuasivos de una persona extraña, o extranjera, es
decir, inmoral.
El encuentro con la ‗mujer astuta‘
El rey de Israel pasa a describir una escena que él mismo observó: ―Estando yo a la ventana
de mi casa, miré hacia abajo por mi celosía, para poder atisbar a los inexpertos. Estaba
interesado en discernir entre los hijos a un joven falto de corazón, que iba pasando por la calle
cerca de la esquina de ella; y en el camino a la casa de ella marcha él, en el crepúsculo, al
atardecer del día, al acercarse la noche y las tinieblas‖ (Proverbios 7:6-9).
La ventana por la que mira Salomón tiene una celosía, al parecer un enrejado de listones de
madera que a veces tiene complejos calados. Al ir atenuándose la luz crepuscular, la oscuridad
nocturna invade las calles. El rey observa a un joven muy vulnerable que, como no tiene
discernimiento —es decir, buen juicio—, es falto de corazón. Seguramente sabe la clase de
vecindario en que ha entrado y a qué se expone. Con todo, se acerca a ―la esquina de [una
mujer]‖, que queda de camino a la casa de ella. ¿Quién es esta mujer? ¿Cuáles son sus
intenciones?
El rey observador sigue diciendo: ―¡Mira!, allí estaba una mujer que salía a su encuentro, con
la prenda de vestir de una prostituta, y astuta de corazón. Alborotadora es, y terca. En su casa
no siguen residiendo sus pies. Ahora está fuera, ahora está en las plazas públicas, y cerca de
todas las esquinas se pone al acecho‖ (Proverbios 7:10-12).
La manera como viste esta mujer dice mucho de ella (Génesis 38:14, 15). Lleva ropa
inmodesta, propia de una prostituta. Además, es astuta de corazón, o sea, es de ―corazón
falso‖ y tiene ―solapadas intenciones‖ (Straubinger; NVI). Es alborotadora y terca, habladora y
obstinada, bulliciosa y voluntariosa, descarada y desafiante. En vez de quedarse en casa,
prefiere estar en los lugares públicos y en las esquinas de las calles, al acecho de una víctima.
Espera a que pase alguien como el joven.
‗Abundante persuasiva‘
Así que un joven se encuentra con una libertina que ha trazado un plan astuto. Tal escena
debió captar la atención de Salomón, que relata: ―Se ha asido de él y le ha dado un beso.
Ha adoptado un rostro descarado, y empieza a decirle: ‗Tenía que ofrecer sacrificios de
comunión. Hoy he pagado mis votos. Por eso he salido a tu encuentro, para buscar tu rostro, a
fin de hallarte‘‖ (Proverbios 7:13-15).
Los labios de esta mujer son melosos. Adopta un rostro descarado y se expresa con
confianza. Todo cuanto dice está fríamente calculado para seducir al joven. Finge ser justa al
afirmar que ha ofrecido sacrificios de comunión ese mismo día y que ha pagado sus votos, con
lo que insinúa que no carece de espiritualidad. Los sacrificios de comunión que se ofrecían en
el templo consistían en carne, harina, aceite y vino (Levítico 19:5, 6; 22:21; Números 15:8-10).
Así da a entender que hay mucho que comer y beber en su casa, puesto que la persona que
hacía tales ofrendas podía tomar parte del sacrificio de comunión para su familia y para sí. Está
claro lo que quiere indicar: que el chico pasará un buen rato allí. Ella había salido de casa
expresamente a buscarlo. Hay que ser muy crédulo para tragarse un cuento tan tierno. ―Es
cierto que buscaba a alguien —dice un biblista—, pero ¿de verdad salió a buscarlo a él en
particular? Solo se lo creería un tonto, quizás como este.‖
Después de haberlo atraído apelando a la vista con su vestimenta; al oído, con sus halagos;
al tacto, con un abrazo, y al gusto, con el sabor de sus labios, la seductora recurre al sentido
del olfato. Dice: ―He adornado mi diván con colchas, con cosas de muchos colores, lino de
Egipto. He rociado mi cama con mirra, áloes y canela‖ (Proverbios 7:16, 17). De manera
primorosa ha arreglado su cama con lino de Egipto de vivos colores y la ha perfumado con
fragancias selectas de mirra, áloes y canela.
―De veras ven, saciémonos bebiendo del amor hasta la mañana; sí, gocemos el uno del otro
con expresiones de amor.‖ La invitación implica mucho más que una agradable cena para dos.
Le promete que gozará de relaciones sexuales con ella. Para el joven la invitación suena como
una excitante aventura. Para terminar de convencerlo, ella añade: ―Porque el esposo no está
en casa; se ha ido viajando por un camino de bastante distancia. Una bolsa de dinero ha
llevado en la mano. El día de la luna llena vendrá a su casa‖ (Proverbios 7:18-20). Le garantiza
seguridad total, pues su esposo está en un viaje de negocios y no regresará pronto. ¡Con qué
habilidad engaña al joven! ―Lo ha extraviado con la abundancia de su persuasiva. Por la
suavidad de sus labios lo seduce.‖ (Proverbios 7:21.) Haría falta un hombre del calibre de José
para resistir una invitación tan seductora (Génesis 39:9, 12). ¿Tendrá este muchacho la talla
moral que se requiere?
‗Como un toro al degüello‘
―De repente él va tras ella —indica Salomón—, como toro que viene aun al degüello, y
justamente como si estuviera en grilletes para la disciplina de un tonto, hasta que una flecha le
abre el hígado, tal como un pájaro se mete apresurado en la trampa; y él no ha sabido que en
ello está envuelta su misma alma.‖ (Proverbios 7:22, 23.)
La invitación le resulta irresistible al joven, que no hace caso al sentido común y va tras la
mujer ‗como toro al degüello‘. Tal como el hombre que está atado con grilletes no puede
escapar de la disciplina, así él es conducido al pecado. No verá el peligro de su proceder hasta
que ‗una flecha le abra el hígado‘, es decir, hasta que reciba una herida que puede provocarle
la muerte. Esta puede ser física, pues se ha expuesto a contraer una enfermedad mortífera de
transmisión sexual, pero también puede ser una muerte espiritual; ―está envuelta su misma
alma‖. Todo su ser y toda su vida se han visto muy afectados, y él ha pecado gravemente
contra Dios. De esta manera, se apresura a caer en las garras de la muerte tal como un pájaro
cae en la trampa.
―No [...] entres en sus veredas‖
Habiendo aprendido una lección de lo que observó, el sabio rey aconseja: ―Y ahora, oh hijos,
escúchenme y presten atención a los dichos de mi boca. No se desvíe tu corazón a los
caminos de ella. Ni, andando errante, entres en sus veredas. Porque muchos son los que ella
ha hecho caer muertos, y son numerosos todos los que ella va matando. Caminos al Seol es su
casa; van descendiendo a los cuartos interiores de la muerte‖ (Proverbios 7:24-27).
El consejo de Salomón es claro: no nos desviemos a los caminos mortíferos de las personas
inmorales, y ‗continuemos viviendo‘ (Proverbios 7:2). ¡Qué consejo tan oportuno para nuestros
días! No cabe duda de que es necesario evitar los lugares donde hay gente al acecho de
víctimas. ¿Por qué deberíamos someternos a sus tácticas al ir a tales lugares? En efecto, ¿por
qué deberíamos ser ‗faltos de corazón‘ y desviarnos a los caminos de una ―extranjera‖?
La ―mujer extraña‖ que vio el rey sedujo al muchacho con una invitación a ‗gozar el uno del
otro con expresiones de amor‘. ¿No es cierto que a muchos jóvenes, sobre todo chicas, se les
ha explotado del mismo modo? Pero preguntémonos: ―Cuando alguien intenta seducirnos a la
inmoralidad sexual, ¿lo hace porque nos ama de verdad, o para satisfacer sus deseos
egoístas? Si un hombre de veras ama a una mujer, ¿por qué va a presionarla para que viole su
conciencia educada en el cristianismo?‖. ―No se desvíe tu corazón‖ a esos caminos, exhorta
Salomón.
Las palabras de los seductores por lo general son melosas y están fríamente calculadas.
Mantener la sabiduría y el entendimiento a nuestro lado nos permitirá percibir sus auténticos
motivos. Algo que también nos protegerá es no olvidar nunca los mandatos de Jehová. Por lo
tanto, procuremos siempre ‗guardar los mandamientos de Dios y continuar viviendo‘, sí, por
toda la eternidad (1 Juan 2:17).
[Notas]
La palabra extraña se aplicaba a la persona que se alejaba de Jehová al apartarse de la Ley.
Por eso, a la mujer inmoral, como es el caso de la prostituta, se la llama ―mujer extraña‖.
Algunas enfermedades de transmisión sexual dañan el hígado. En casos graves de sífilis, por
ejemplo, las bacterias se apoderan de este órgano. Y el microorganismo causante de la
gonorrea puede ocasionar inflamación del hígado.
*** w01 15/3 págs. 25-28 ―Feliz es el hombre que ha hallado sabiduría‖ ***
ERA poeta, arquitecto y rey. Su sabiduría le dio renombre, y sus ingresos anuales de más de
doscientos millones de dólares lo convirtieron en el monarca más acaudalado del planeta.
Cierta reina quedó tan impresionada al visitarlo, que exclamó: ―¡Mira!, no se me había referido
ni la mitad. Has superado en sabiduría y prosperidad las cosas oídas a las que escuché‖
(1 Reyes 10:4-9). Esa era la posición que ocupaba el rey Salomón del antiguo Israel.
La sabiduría y riqueza que poseía lo convertían en la persona idónea para determinar cuál
de las dos era realmente indispensable. Él escribió: ―Feliz es el hombre que ha hallado
sabiduría, y el hombre que consigue discernimiento, porque el tenerla como ganancia es mejor
que tener la plata como ganancia; y el tenerla como producto, que el oro mismo. Es más
preciosa que los corales, y todos tus otros deleites no pueden ser igualados a ella‖ (Proverbios
3:13-15).
Ahora bien, ¿dónde podemos hallar sabiduría? ¿Por qué es más valiosa que la riqueza?
¿Qué aspectos atrayentes tiene? El capítulo 8 del libro bíblico de Proverbios, escrito por
Salomón, ofrece interesantes respuestas a estas cuestiones. En él, la sabiduría personificada,
como si pudiera hablar y actuar, revela su atractivo y su valor.
―Sigue clamando a gritos‖
El capítulo 8 de Proverbios se inicia con una pregunta retórica: ―¿No sigue clamando la
sabiduría, y no sigue dando su voz el discernimiento?‖. En efecto, la sabiduría y el
discernimiento siguen clamando, aunque de forma muy diferente a la mujer inmoral que, al
acecho en lugares oscuros, susurra palabras seductoras al oído de un joven solitario e
inexperto (Proverbios 7:12). ―En la cima de las alturas, junto al camino, en el cruce de las
veredas se ha apostado. Al lado de las puertas, a la boca del pueblo, en el lugar de acceso de
las entradas sigue clamando a gritos.‖ (Proverbios 8:1-3.) La enérgica y firme voz de la
sabiduría se escucha perfectamente en los lugares públicos: en las puertas, en los cruces de
caminos y en las entradas de la ciudad. Todo el mundo puede oírla con facilidad y responder a
ella.
¿Quién negaría que la sabiduría piadosa que se halla en la Palabra inspirada de Dios está al
alcance de casi todo habitante de la Tierra que desee obtenerla? ―La Biblia es el libro más leído
de la historia —señala The World Book Encyclopedia—. Se han distribuido más ejemplares de
ese libro que de cualquier otro. Asimismo, es la obra que se ha traducido más veces y a más
idiomas.‖ Completa o en parte, está disponible en más de dos mil cien idiomas y dialectos, así
que más del noventa por ciento de la humanidad tiene acceso a, como mínimo, una porción de
las Escrituras en su lengua vernácula.
Los testigos de Jehová proclaman el mensaje bíblico por todas partes. De hecho, predican
las buenas nuevas del Reino de Dios y enseñan las verdades de Su Palabra en 235 países.
Las revistas bíblicas La Atalaya, editada en 140 idiomas, y ¡Despertad!, impresa en 83, cuentan
cada una con una tirada de más de veinte millones de ejemplares. Sin lugar a dudas, la
sabiduría sigue clamando a gritos en los lugares públicos.
―Mi voz se dirige a los hijos de los hombres‖
La sabiduría personificada empieza a hablar: ―A ustedes, oh hombres, estoy llamando, y mi
voz se dirige a los hijos de los hombres. Oh inexpertos, entiendan sagacidad; y ustedes los
estúpidos, entiendan corazón‖ (Proverbios 8:4, 5).
El llamamiento de la sabiduría es universal, pues se dirige a toda la humanidad. Hasta a los
inexpertos se les invita a obtener sagacidad, o prudencia, y a los insensatos, entendimiento.
Los testigos de Jehová creen que la Biblia es un libro para todo el mundo, y procuran animar a
toda persona a escudriñarla y encontrar las palabras de sabiduría que contiene.
―Mi paladar profiere la verdad‖
La llamada de la sabiduría continúa: ―Escuchen, porque acerca de las cosas de primera
importancia hablo, y el abrir mis labios tiene que ver con la rectitud. Porque en voz baja mi
paladar profiere la verdad misma; y la iniquidad es cosa detestable a mis labios. Todos los
dichos de mi boca son en justicia. Entre ellos no hay nada avieso ni torcido‖. Así es, los
principios que transmite la sabiduría son excelentes, rectos, veraces y justos, y en ellos no hay
nada sinuoso ni torcido. ―Todos ellos son derechos al que discierne, y rectos a los que hallan
conocimiento.‖ (Proverbios 8:6-9.)
Apropiadamente, la sabiduría clama: ―Acepten mi disciplina y no plata, y conocimiento más
bien que oro escogido‖. Una petición razonable, ―porque la sabiduría es mejor que los corales,
y todos los otros deleites mismos no pueden ser igualados a ella‖ (Proverbios 8:10, 11). ¿Por
qué? ¿Qué la convierte en algo más precioso que la riqueza?
―Mi fruto es mejor que el oro‖
Los regalos que la sabiduría otorga a quienes la escuchan son más valiosos que el oro, la
plata o los corales. Ella misma los enumera: ―Yo, la sabiduría, he residido con la sagacidad y
hallo hasta el conocimiento de las capacidades de pensar. El temor de Jehová significa odiar lo
malo. El propio ensalzamiento y el orgullo y el mal camino y la boca perversa he odiado‖
(Proverbios 8:12, 13).
La sabiduría confiere sagacidad y capacidad de pensar. El hombre que posee sabiduría
piadosa también siente temor reverente a Dios, ya que ―el temor de Jehová es el comienzo de
la sabiduría‖ (Proverbios 9:10). Por tanto, odia lo que Jehová odia, y está muy lejos de la
altanería, la arrogancia, la conducta inmoral y el habla perversa. Su aversión a la maldad le
escuda de la influencia corruptora del poder. A quienes tienen responsabilidades en la
congregación y a los cabezas de familia les es muy necesario ir en pos de la sabiduría.
―Yo tengo consejo y sabiduría práctica —sigue diciendo la sabiduría—. Yo... entendimiento;
yo tengo poderío. Por mí reyes mismos siguen reinando, y altos funcionarios mismos siguen
decretando justicia. Por mí príncipes mismos siguen gobernando como príncipes, y todos los
nobles están juzgando en justicia.‖ (Proverbios 8:14-16.) Entre sus frutos figuran la perspicacia,
el entendimiento y el poderío, facultades que precisan los dirigentes, altos funcionarios y
nobles. Es indispensable para los que ocupan puestos de autoridad y los que han de
dar consejo.
La sabiduría verdadera está al alcance de todos. Sin embargo, no todos dan con ella, y
otros, aunque llame a su puerta, la rechazan o la eluden. ―A los que me aman, yo misma los
amo, y los que me buscan son los que me hallan.‖ (Proverbios 8:17.) Solo la consiguen los que
van sinceramente tras ella.
Las sendas de la sabiduría son justas y rectas, y quienes las buscan son recompensados.
―Riquezas y gloria están conmigo, valores hereditarios y justicia. Mi fruto es mejor que el oro,
aun que el oro refinado; y mi producto, que la plata escogida. En el camino de la justicia ando
yo, en medio de las veredas del juicio, para hacer que los que me aman tomen posesión de
sustancia; y sus almacenes mantengo llenos.‖ (Proverbios 8:18-21.)
Además de excelentes rasgos y cualidades, como la prudencia, la capacidad de pensar, la
humildad, la perspicacia, la sabiduría práctica y el entendimiento, regala riquezas y honra. La
persona sabia bien pudiera enriquecerse honradamente, y sin duda prosperará en sentido
espiritual (3 Juan 2). Asimismo, la sabiduría le reporta honra. Es más, le permite disfrutar de lo
que obtiene, de paz mental y de una conciencia limpia ante Dios. En efecto, feliz es el hombre
que ha hallado sabiduría, pues su fruto es mucho mejor que el oro refinado y la plata escogida.
En un mundo materialista que pone el acento en hacerse rico a toda costa, sin lugar a dudas
este es un consejo muy oportuno. Nunca perdamos de vista el valor de la sabiduría
ni recurramos a métodos ilícitos para enriquecernos. Que la búsqueda de riquezas jamás nos
lleve a descuidar los medios por los que obtenemos la sabiduría, como las reuniones y el
estudio personal tanto de la Biblia como de las publicaciones que nos provee ―el esclavo fiel y
discreto‖ (Mateo 24:45-47).
―Desde tiempo indefinido fui instalada‖
La personificación que el capítulo 8 de Proverbios hace de la sabiduría no es un simple
recurso para explicar las características de una cualidad abstracta. También constituye una
alusión simbólica a la creación más importante de Jehová. La sabiduría pasa a decir: ―Jehová
mismo me produjo como el principio de su camino, el más temprano de sus logros de mucho
tiempo atrás. Desde tiempo indefinido fui instalada, desde el comienzo, desde tiempos
anteriores a la tierra. Cuando no había profundidades acuosas fui producida como con dolores
de parto, cuando no había manantiales cargados pesadamente de agua. Antes que las
montañas mismas se hubieran asentado, primero que las colinas, fui producida como con
dolores de parto, cuando aún no había hecho él la tierra ni los espacios abiertos ni la primera
parte de las masas de polvo de la tierra productiva‖ (Proverbios 8:22-26).
Esta descripción de la sabiduría personificada encaja a la perfección con lo que las
Escrituras dicen de ―la Palabra‖. ―En el principio la Palabra era —escribió el apóstol Juan—, y la
Palabra estaba con Dios, y la Palabra era un dios.‖ (Juan 1:1.) La sabiduría personificada
representa al Hijo de Dios durante su existencia prehumana.
Jesucristo es ―el primogénito de toda la creación; porque por medio de él todas las otras
cosas fueron creadas en los cielos y sobre la tierra, las cosas visibles y las cosas invisibles‖
(Colosenses 1:15, 16). ―Cuando [Jehová] preparó los cielos, yo estaba allí —continúa la
sabiduría personificada—; cuando decretó un círculo sobre la haz de la profundidad acuosa,
cuando afirmó las masas de nubes arriba, cuando hizo fuertes las fuentes de la profundidad
acuosa, cuando fijó para el mar su decreto de que las aguas mismas no pasaran más allá de su
orden, cuando decretó los fundamentos de la tierra, entonces llegué a estar a su lado como un
obrero maestro, y llegué a ser aquella con quien él estuvo especialmente encariñado día a día,
y estuve alegre delante de él todo el tiempo, pues estuve alegre por el terreno productivo de su
tierra, y las cosas que fueron el objeto de mi cariño estuvieron con los hijos de los hombres.‖
(Proverbios 8:27-31.) El Hijo primogénito de Jehová estaba allí, trabajando junto al Padre, el
incomparable Creador de los cielos y la tierra. Como Obrero Maestro, se hallaba al lado de
Jehová Dios cuando este creó al primer ser humano (Génesis 1:26). No sorprende, pues, que
el Hijo de Dios esté tan interesado en la humanidad y sienta tanto cariño por ella.
―Feliz es el hombre que me está escuchando‖
Como la sabiduría personificada, el Hijo de Dios dice: ―Y ahora, oh hijos, escúchenme; sí,
felices son los que guardan mis caminos mismos. Escuchen la disciplina y háganse sabios, y
no muestren ningún descuido. Feliz es el hombre que me está escuchando al mantenerse
despierto a mis puertas día a día, vigilando a los postes de mis entradas. Porque el que me
halla ciertamente halla la vida, y consigue buena voluntad de Jehová. Pero el que no me
alcanza hace violencia a su alma; todos los que me odian con intensidad son los que de veras
aman la muerte‖ (Proverbios 8:32-36).
Jesucristo es la mismísima encarnación de la sabiduría de Dios. ―Cuidadosamente ocultados
en él están todos los tesoros de la sabiduría y del conocimiento.‖ (Colosenses 2:3.) Por ello,
no nos descuidemos en cuanto a escucharlo, y sigamos sus pasos con suma atención (1 Pedro
2:21). Rechazarlo equivale a ‗hacer violencia a nuestra alma y amar la muerte‘, ya que ―no hay
salvación en ningún otro‖ (Hechos 4:12). Aceptemos a Jesús como el medio divino de salvación
(Mateo 20:28; Juan 3:16). Si así lo hacemos, obtendremos la felicidad que se deriva de ‗hallar
la vida y conseguir buena voluntad de Jehová‘.
[Nota]
El hecho de que el término para ―sabiduría‖ sea de género femenino tanto en hebreo como en
español no impide que se utilice para representar al Hijo de Dios. El vocablo griego para
―amor‖ en la expresión ―Dios es amor‖ también es femenino; aun así, se emplea para
referirse a Dios (1 Juan 4:8).
*** w01 15/5 págs. 28-31 ‗Por la sabiduría nuestros días llegarán a ser muchos‘ ***
¿QUIÉN puede negar que la sabiduría es indispensable para enfrentarse a los problemas de
la vida? La sabiduría verdadera es la facultad de emplear el conocimiento y el entendimiento
con propiedad. Es todo lo contrario a la tontedad, la estupidez y la demencia. Por eso, la Biblia
nos exhorta a adquirirla (Proverbios 4:7). De hecho, el libro bíblico de Proverbios se escribió
fundamentalmente para impartir sabiduría y disciplina. Sus palabras de apertura rezan así: ―Los
proverbios de Salomón hijo de David, el rey de Israel, para conocer uno sabiduría y disciplina‖
(Proverbios 1:1, 2).
Analicemos, por ejemplo, las profundas enseñanzas que contienen los primeros capítulos de
Proverbios. Como un padre afectuoso que da una exhortación a su hijo, Salomón ruega a sus
lectores que acepten la disciplina y presten atención a la sabiduría (capítulos 1, 2). Nos indica
cómo cultivar una relación íntima con Jehová y cómo salvaguardar el corazón (capítulos 3, 4).
Nos aconseja permanecer moralmente castos (capítulos 5, 6). Resulta de incalculable valor la
exposición de la manera de actuar de la persona inmoral (capítulo 7). ¡Y cuánto nos atrae la
llamada de la sabiduría personificada! (Capítulo 8.) Antes de pasar a los proverbios concisos de
los capítulos posteriores, el rey Salomón presenta un resumen estimulador de lo tratado hasta
ese momento (capítulo 9).
‗Vengan, coman mi pan y beban mi vino‘
La conclusión de la primera sección de Proverbios es más que un árido resumen de los
consejos ofrecidos hasta ese instante. Más bien, mediante una emocionante y hermosa
ilustración se motiva al lector a ir tras la sabiduría.
El capítulo 9 de Proverbios se inicia con las siguientes palabras: ―La sabiduría verdadera ha
edificado su casa; ha labrado sus siete columnas‖ (Proverbios 9:1). Según un hebraísta, la
expresión ―siete columnas‖ tal vez ―evoque la imagen de una mansión cuyo patio central
alberga los siete pilares que la sustentan; dos lados del patio contienen tres columnas cada
uno, y la séptima columna ocupa el centro del tercer lateral, dejando el extremo opuesto abierto
como entrada‖. En cualquier caso, la sabiduría verdadera ha edificado una casa resistente para
recibir a sus numerosos invitados.
Todo está dispuesto para el festín; hay carne y vino, y la sabiduría ha supervisado
personalmente la preparación del alimento y de la mesa. ―Ha organizado su degollación de
carne; ha mezclado su vino; más que eso, ha dispuesto su mesa.‖ (Proverbios 9:2.) Una mesa
figurativa ofrece instructivo alimento espiritual que induce a la reflexión (Isaías 55:1, 2).
¿Quiénes son los invitados del banquete que celebra la sabiduría verdadera? ―Ha enviado a
sus criadas de compañía, para que ella pueda clamar en la cima de las alturas del pueblo:
‗Cualquiera que sea inexperto, diríjase acá‘. A cualquiera falto de corazón... ella ha dicho:
‗Vengan, aliméntense de mi pan y participen en beber el vino que he mezclado. Dejen a los
inexpertos y sigan viviendo, y anden directamente en el camino del entendimiento‘.‖ (Proverbios
9:3-6.)
La sabiduría ha enviado a sus criadas a fin de que den una invitación. Estas han ido a los
lugares públicos, desde donde pueden llamar al mayor número de personas. Todos están
invitados, tanto los que son ‗faltos de corazón‘, o carentes de entendimiento, como los
inexpertos (Proverbios 9:4). Y a todos se les promete vida. Sin lugar a dudas, la sabiduría que
contiene la Palabra de Dios, incluido el libro de Proverbios, está al alcance de casi todo el
mundo. En la actualidad, los testigos de Jehová, mensajeros de la sabiduría verdadera, se
mantienen ocupados invitando a las personas a estudiar la Biblia, dondequiera que las hallen.
En realidad, adquirir ese conocimiento las conducirá a la vida eterna (Juan 17:3).
Los cristianos han de aceptar con humildad la disciplina de la sabiduría, especialmente los
jóvenes y los que llevan poco tiempo aprendiendo acerca de Jehová. Dada su limitada
experiencia en los caminos de Dios, tal vez sean ‗faltos de corazón‘. No se pretende decir que
todos sus motivos sean malos, sino que alcanzar la condición de corazón que realmente
agrada a Jehová Dios toma tiempo. Implica hacer que los pensamientos, deseos, afectos y
metas en la vida estén en armonía con lo que Dios aprueba. Es fundamental que ―desarrollen
el anhelo por la leche no adulterada que pertenece a la palabra‖ (1 Pedro 2:2).
De hecho, ¿no deberíamos todos ir más allá de ―la doctrina primaria‖? No cabe duda de que
hemos de cultivar el interés en ―las cosas profundas de Dios‖ y nutrirnos del alimento sólido que
pertenece a las personas maduras (Hebreos 5:12–6:1; 1 Corintios 2:10). ―El esclavo fiel y
discreto‖, bajo la supervisión directa de Jesucristo, suministra con diligencia alimento espiritual
para todos al tiempo oportuno (Mateo 24:45-47). Démonos un festín en la mesa de la sabiduría
al estudiar con atención la Palabra de Dios y las publicaciones bíblicas que proporciona la
clase del esclavo.
―No censures a un burlador‖
Las enseñanzas de la sabiduría también incluyen corrección y censura, faceta que
no siempre es bien recibida. Por ello, la conclusión de la primera sección de Proverbios
contiene esta advertencia: ―El que está corrigiendo al burlador está tomando para sí deshonra,
y el que está dando una censura a alguien inicuo... ¡defecto en él! No censures a un burlador,
para que no te odie‖ (Proverbios 9:7, 8a).
El burlón alimenta rencor y odio hacia el que trata de ayudarle a enderezar su camino.
El malvado no aprecia el valor de la censura. Es imprudente enseñar la maravillosa verdad de
la Palabra de Dios al que la odia o pretende burlarse de ella. Mientras el apóstol Pablo
predicaba en Antioquía, se encontró con un grupo de judíos que no amaban la verdad.
Intentaron enzarzarlo en una discusión al contradecirlo con blasfemias, pero Pablo les dijo sin
más: ―Puesto que [...] están echando de ustedes [la Palabra de Dios] y no se juzgan dignos de
vida eterna, ¡miren!, nos volvemos a las naciones‖ (Hechos 13:45, 46).
En nuestro intento de llevar las buenas nuevas del Reino a la gente de corazón sincero,
debemos procurar no enredarnos en debates ni discusiones con los burlones. Jesucristo dio las
siguientes instrucciones a sus discípulos: ―Al entrar en la casa, salúdenla; y si la casa
lo merece, venga sobre ella la paz que le desean; pero si no lo merece, vuelva sobre ustedes
la paz de ustedes. Dondequiera que alguien no los reciba ni escuche sus palabras, al salir de
aquella casa o de aquella ciudad, sacúdanse el polvo de los pies‖ (Mateo 10:12-14).
La respuesta del sabio a la censura es la contraria a la del burlón. Salomón declara: ―Da una
censura a un sabio, y te amará. Da a un sabio, y se hará aún más sabio‖ (Proverbios 9:8b, 9a).
El sabio reconoce que ―ninguna disciplina parece por el presente ser cosa de gozo, sino
penosa; sin embargo, después, a los que han sido entrenados por ella, da fruto pacífico, a
saber, justicia‖ (Hebreos 12:11). Aunque el consejo tal vez parezca doloroso, ¿por qué
deberíamos contradecirlo o ponernos a la defensiva si aceptarlo nos hará más sabios?
―Imparte conocimiento a alguien justo, y aumentará en saber‖, añade el sabio monarca
(Proverbios 9:9b). Por sabios o maduros que seamos, siempre debemos seguir aprendiendo.
Cuánto nos deleita ver incluso a los que están en el ocaso de su vida abrazar la verdad y
dedicarse a Jehová. Esforcémonos también por mantener el deseo de aprender y por tener la
mente activa.
―Se te añadirán años de vida‖
Salomón recalca el punto principal del tema que analiza al incluir el requisito indispensable
para la sabiduría: ―El temor de Jehová es el comienzo de la sabiduría, y el conocimiento del
Santísimo es lo que el entendimiento es‖ (Proverbios 9:10). No puede haber sabiduría piadosa
sin un temor reverencial profundo del Dios verdadero. Uno tal vez tenga la mente llena de
conocimiento, pero si carece del temor de Jehová, no empleará tal conocimiento de forma que
honre al Creador. Tal vez incluso llegue a conclusiones erróneas a partir de hechos conocidos,
dando así una apariencia de tonto. Además, el conocimiento de Jehová, el Santísimo, es
esencial para obtener entendimiento, una característica notable de la sabiduría.
¿Qué fruto produce la sabiduría? (Proverbios 8:12-21, 35.) El rey de Israel dice: ―Por mí tus
días llegarán a ser muchos, y se te añadirán años de vida‖ (Proverbios 9:11). Largura de días y
años de vida son el resultado de relacionarse con la sabiduría. En efecto, ―la sabiduría misma
conserva vivos a sus dueños‖ (Eclesiastés 7:12).
Emplearse a fondo para obtener sabiduría es una responsabilidad personal. Salomón
destaca este hecho como sigue: ―Si te has hecho sabio, te has hecho sabio a favor de ti mismo;
y si te has burlado, lo soportarás, tú solo‖ (Proverbios 9:12). El sabio lo es para su propio
beneficio, y la culpa de que el burlón sufra es solo suya. En realidad, uno siega lo que siembra.
Por lo tanto, ‗prestemos atención a la sabiduría‘ (Proverbios 2:2).
―Una mujer de estupidez es alborotadora‖
Salomón introduce ahora un contraste al decir: ―Una mujer de estupidez es alborotadora. Es
la simplicidad misma, y no ha llegado a saber nada en absoluto. Y se ha sentado a la entrada
de su casa, sobre un asiento, en los lugares altos del pueblo, para llamar a los que van
pasando por el camino, a los que están yendo directamente adelante por sus sendas:
‗Cualquiera que sea inexperto, diríjase acá‘‖ (Proverbios 9:13-16a).
Se representa a la estupidez como una mujer escandalosa, indisciplinada e ignorante.
También ella ha edificado una casa y ha asumido la tarea de llamar a cualquiera que es
inexperto. De modo que los transeúntes se enfrentan a una disyuntiva: ¿Qué invitación
aceptarán?, ¿la de la sabiduría, o la de la estupidez?
―Las aguas hurtadas mismas son dulces‖
Tanto la sabiduría como la estupidez invitan a sus oyentes con las palabras ‗diríjanse acá‘.
Sin embargo, los atraen por medios diferentes. La sabiduría ofrece a la gente un banquete con
vino, carne y pan. En cambio, el atractivo de la estupidez nos recuerda el camino de la mujer
disoluta. Salomón dice: ―A cualquiera falto de corazón... también le ha dicho: ‗Las aguas
hurtadas mismas son dulces, y el pan que se come en secreto... es agradable‘‖ (Proverbios
9:16b, 17).
En vez de vino mezclado, ―Doña Locura‖ ofrece aguas robadas (Proverbios 9:13, Biblia del
Peregrino). En las Escrituras, disfrutar de placer sexual con la esposa amada se compara a
beber agua refrescante (Proverbios 5:15-17). Por ello, las aguas robadas representan
relaciones sexuales inmorales mantenidas en secreto. A tales aguas se les hace parecer
dulces, mejores que el vino, porque son hurtadas y conllevan la idea de impunidad. El pan
clandestino se presenta como más delicioso que el pan y la carne de la sabiduría,
precisamente porque se obtiene mediante ganancia injusta. Considerar atractivo lo prohibido y
lo secreto es una señal de estupidez.
Mientras que la invitación de la sabiduría incluye una promesa de vida, la mujer de estupidez
no hace referencia a las consecuencias de seguir su camino. Pero Salomón advierte: ―Él no ha
llegado a saber que allí se hallan los que están impotentes en la muerte, que los llamados
adentro por ella están en los lugares bajos del Seol‖ (Proverbios 9:18). ―La casa de Doña
Locura no es un hogar, sino un mausoleo —indica un erudito—. El que entra no sale de allí con
vida.‖ No es sabio llevar un estilo de vida inmoral; es un proceder mortífero.
Jesucristo dijo: ―Entren por la puerta angosta; porque ancho y espacioso es el camino que
conduce a la destrucción, y muchos son los que entran por él; mientras que angosta es la
puerta y estrecho el camino que conduce a la vida, y pocos son los que la hallan‖ (Mateo
7:13, 14). Alimentémonos siempre de la mesa de la sabiduría junto con los que están en el
camino que conduce a la vida.
*** w01 15/7 págs. 24-27 ‗Las bendiciones son para el justo‘ ***
―UN JOVEN era yo, también he envejecido, y sin embargo no he visto a nadie justo dejado
enteramente, ni a su prole buscando pan‖, manifestó el salmista David siendo ya de edad
avanzada (Salmo 37:25). Jehová Dios ama al justo y se interesa mucho por él. En su Palabra,
la Biblia, exhorta a sus verdaderos adoradores a buscar la justicia (Sofonías 2:3).
Ser justo implica obedecer las normas divinas sobre lo que es bueno y lo que es malo.
El capítulo 10 del libro bíblico de Proverbios nos anima a someternos a la voluntad de Dios, y
señala la gran cantidad de bendiciones espirituales de que disfrutan quienes lo hacen, entre las
que se cuentan abundante alimento espiritual nutritivo, trabajo satisfactorio y gratificante, y una
buena relación con Dios y el prójimo. Reflexionemos, por tanto, sobre Proverbios 10:1-14.
Un magnífico incentivo
Las primeras palabras del capítulo no dejan ninguna duda sobre la identidad del escritor de
los versículos siguientes, pues dicen: ―Proverbios de Salomón‖. Este rey del antiguo Israel pasa
a mencionar un magnífico incentivo para proceder con justicia: ―El hijo sabio es el que regocija
a un padre, y el hijo estúpido es el desconsuelo de su madre‖ (Proverbios 10:1).
¡Cuánto dolor ocasiona a los padres el que uno de sus hijos abandone la adoración del Dios
vivo y verdadero! El sabio rey alude en particular al desconsuelo de la madre, quizá para poner
de manifiesto que su pena es más intensa. Así resultó ser en el caso de Sara, quien cuenta:
―Cuando nuestro hijo de 21 años dejó la verdad, mi esposo, Francisco, y yo nos quedamos
destrozados. Mi dolor ha sido más fuerte que el de Francisco. Han transcurrido doce años, pero
aún no se me ha curado la herida‖.
Las acciones de los hijos pueden influir en la felicidad de su padre y afligir a su madre.
Seamos sabios y traigamos dicha a nuestros progenitores. Y, por encima de todo, regocijemos
el corazón de nuestro Padre celestial, Jehová.
‗Se satisface el alma del justo‘
―Los tesoros del inicuo no serán de provecho alguno —dice el rey—, pero la justicia es lo
que librará de la muerte.‖ (Proverbios 10:2.) Estas palabras son de un valor extraordinario para
los cristianos verdaderos que viven muy adentrados en el tiempo del fin (Daniel 12:4). Se
avecina la destrucción del mundo impío y, durante la venidera ―gran tribulación‖, al hombre
no le protegerá ninguno de los medios materiales, económicos o militares a los que ha
recurrido para obtener seguridad (Revelación [Apocalipsis] 7:9, 10, 13, 14). Solo ―los rectos
habitarán la tierra y los hombres íntegros permanecerán en ella‖ (Proverbios 2:21, Levoratti-
Trusso). Sigamos, pues, ―buscando primero el reino y la justicia de Dios‖ (Mateo 6:33).
Los siervos de Jehová no han de esperar al prometido nuevo mundo para gozar de las
bendiciones divinas. ―Jehová no hará que el alma del justo padezca hambre, pero rechazará el
deseo vehemente de los inicuos.‖ (Proverbios 10:3.) Jehová suministra abundante alimento
espiritual mediante ―el esclavo fiel y discreto‖ (Mateo 24:45). Sin duda, el justo tiene razones
para ―[clamar] gozosamente a causa de la buena condición de corazón‖ (Isaías 65:14). El
conocimiento es placentero a su alma. Le deleita buscar tesoros espirituales. El inicuo, en
cambio, no conoce tales placeres.
‗La diligencia enriquece‘
El justo se beneficia de otra manera. ―El que trabaja con mano floja será persona de escasos
recursos, pero la mano del diligente es lo que enriquece a uno. El hijo que actúa con
perspicacia recoge durante el verano; el hijo que actúa vergonzosamente está profundamente
dormido durante la siega.‖ (Proverbios 10:4, 5.)
Las palabras que el rey dirige a quienes laboran en la siega son especialmente significativas.
La temporada de la cosecha no es tiempo de dormir, sino de ser diligente y trabajar muchas
horas. Sí, hay que actuar con urgencia.
Jesús pensaba en una cosecha, no de cereales, sino de personas, cuando dijo a sus
discípulos: ―La mies es mucha, pero los obreros son pocos. Por lo tanto, rueguen al Amo de la
mies [Jehová Dios] que envíe obreros a su siega‖ (Mateo 9:35-38). La asistencia a la
Conmemoración de la muerte de Jesús del año 2000 superó los catorce millones de personas,
lo que supone más del doble de la cantidad de testigos de Jehová. ¿Quién puede negar,
entonces, que ‗los campos están blancos para la siega‘? (Juan 4:35.) Los adoradores
verdaderos del Amo le piden más obreros y, al mismo tiempo, actúan en armonía con sus
oraciones al esforzarse vigorosamente en la obra de hacer discípulos (Mateo 28:19, 20). ¡Y con
qué generosidad ha bendecido Jehová su labor! Durante el año de servicio 2000 se bautizaron
más de doscientos ochenta mil nuevos seguidores de Jesucristo, que también intentan por
todos los medios ser maestros de la Palabra de Dios. Sintamos gozo y satisfacción durante la
siega teniendo una participación plena en la obra de hacer discípulos.
‗Las bendiciones son para su cabeza‘
―Las bendiciones son para la cabeza del justo —continúa Salomón—, pero en cuanto a la
boca de los inicuos, esta encubre violencia.‖ (Proverbios 10:6.)
El que es puro y justo de corazón da sobradas pruebas de su justicia. Sus dichos son
bondadosos y edificantes, y positivos y generosos sus hechos. Los demás disfrutan de su
compañía. Tal persona se gana su estima —sus bendiciones—, por cuanto ellos hablan bien
de ella.
Por otro lado, el inicuo es malintencionado, malévolo, y en el fondo está resuelto a hacer
daño. Su forma de hablar tal vez sea amable y ‗encubra la violencia‘ oculta en su corazón, pero
con el tiempo recurre a los ataques físicos o verbales (Mateo 12:34, 35). Otra traducción es: ―La
violencia cubrirá la mismísima boca de la gente inicua‖ (Proverbios 10:6, nota). Estas palabras
indican que los malvados por lo general reciben de los demás lo que manifiestan, a saber,
hostilidad, la cual les cubre o cierra la boca, por decirlo así, y los silencia. ¿Qué bendiciones
puede esperar tal persona de los demás?
―Al recuerdo del justo le espera una bendición —escribe el rey de Israel—, pero el
mismísimo nombre de los inicuos se pudrirá.‖ (Proverbios 10:7.) La gente tiene un buen
recuerdo del justo, y mucho más aún, Jehová. Por su fidelidad hasta la muerte, Jesús ―[heredó]
un nombre más admirable‖ que el de los ángeles (Hebreos 1:3, 4). Los cristianos de la
actualidad recuerdan a los hombres y mujeres de tiempos precristianos y los consideran
ejemplos dignos de imitar (Hebreos 12:1, 2). El nombre de los malvados es muy diferente, pues
se convierte en algo repugnante y hediondo. En efecto, ―ha de escogerse un nombre más bien
que riquezas abundantes; el favor es mejor que aun la plata y el oro‖ (Proverbios 22:1).
Hagámonos un buen nombre ante Jehová y nuestro semejante.
‗El hombre de integridad andará en seguridad‘
Salomón compara al sabio con el tonto y dice: ―El sabio de corazón acepta mandamientos,
pero el que con los labios es tonto será pisoteado‖ (Proverbios 10:8). El sabio está muy al tanto
de que ―no pertenece al hombre que está andando siquiera dirigir su paso‖ (Jeremías 10:23).
Reconoce la necesidad de buscar la guía de Jehová y obedece de buena gana sus
mandamientos. El que es tonto con los labios, en cambio, no entiende este hecho fundamental.
Su parloteo sin sentido le lleva a la ruina.
El justo también disfruta de un tipo de seguridad de la que carece el perverso. ―El que está
andando en integridad andará en seguridad, pero el que está torciendo sus caminos se dará a
conocer. El que guiña el ojo dará dolor, y el que con los labios es tonto será pisoteado.‖
(Proverbios 10:9, 10.)
El íntegro actúa con honradez y por ello se gana el respeto y la confianza de los demás.
Al empleado recto se le valora y se le suelen confiar mayores responsabilidades. A causa de su
reputación, es posible que conserve su puesto de trabajo hasta cuando escasean los empleos.
Además, su honradez contribuye a que en su hogar haya un ambiente agradable y pacífico
(Salmo 34:13, 14). Su relación familiar le da seguridad. La seguridad es, sin lugar a dudas, fruto
de la integridad.
La situación es distinta en el caso del que recurre a la falta de honradez para conseguir
ganancia egoísta. El embustero quizá trate de enmascarar su falsedad hablando con
tortuosidad o mediante lenguaje corporal (Proverbios 6:12-14). A las víctimas de sus ardides
quizá les causen mucha angustia mental sus guiños maliciosos o engañosos. Pero más pronto
o más tarde sale a la luz su proceder sinuoso. El apóstol Pablo escribió: ―Los pecados de
algunos hombres son públicamente manifiestos, y conducen directamente al juicio, mas en
cuanto a otros hombres, sus pecados también se hacen manifiestos más tarde. De la misma
manera también las obras excelentes son públicamente manifiestas, y las que no lo son
no pueden mantenerse escondidas‖ (1 Timoteo 5:24, 25). La falta de honradez acaba
descubriéndose, no importa quién esté implicado: un progenitor, un amigo, un cónyuge o un
conocido. ¿Quién confía en el hombre que tiene fama de no ser honrado?
‗Su boca es fuente de vida‘
―La boca del justo es fuente de vida —dice Salomón—; pero en cuanto a la boca de los
inicuos, encubre violencia.‖ (Proverbios 10:11.) Las palabras tienen el poder de curar, o de
herir; de refrescar y animar, o de desalentar.
El rey de Israel indica qué motiva nuestros dichos: ―El odio es lo que suscita contiendas,
pero el amor cubre hasta todas las transgresiones‖ (Proverbios 10:12). El odio provoca
contiendas y conflictos en la sociedad humana. Quienes aman a Jehová deben erradicarlo de
su vida. ¿Cómo? Sustituyéndolo con el amor. ―El amor cubre una multitud de pecados.‖
(1 Pedro 4:8.) El amor ―todas las cosas las soporta‖, es decir, ―todo lo tapa‖ (1 Corintios 13:7;
González Ruiz). El amor piadoso no espera perfección de quienes son imperfectos. En vez de
revelar los errores de los demás, ese amor nos ayuda a pasarlos por alto, a menos que se trate
de males graves. El amor soporta incluso los malos tratos en el ministerio del campo, el lugar
de trabajo y la escuela.
Sigue diciendo el rey sabio: ―En los labios del entendido se halla la sabiduría, pero la vara es
para la espalda de uno falto de corazón‖ (Proverbios 10:13). La sabiduría del entendido guía
sus pasos. Las palabras edificantes que salen de sus labios ayudan a su semejante a andar en
la justicia. Ni a él ni a los que lo escuchan hay que llevarlos en la dirección correcta por la
fuerza, usando una vara para castigarlos.
‗Atesora conocimiento‘
¿Qué hace que nuestras palabras sean ‗un torrente de sabiduría que sale burbujeando‘, en
vez de un arroyo confuso de trivialidades? (Proverbios 18:4.) Salomón contesta: ―Los sabios
son los que atesoran el conocimiento, pero la boca del tonto está cerca de la ruina misma‖
(Proverbios 10:14).
Lo primero que se precisa es que la mente esté llena del edificante conocimiento de Jehová.
Hay una única fuente de tal conocimiento. El apóstol Pablo escribió lo siguiente: ―Toda
Escritura es inspirada de Dios y provechosa para enseñar, para censurar, para rectificar las
cosas, para disciplinar en justicia, para que el hombre de Dios sea enteramente competente
y esté completamente equipado para toda buena obra‖ (2 Timoteo 3:16, 17). Debemos estimar
el conocimiento y profundizar en la Palabra de Dios como si buscáramos un tesoro. Esa
búsqueda es sumamente emocionante y gratificante.
Asimismo, para que se halle la sabiduría en nuestros labios, el conocimiento de las
Escrituras debe llegarnos al corazón. Jesús dijo a quienes lo escuchaban: ―El hombre bueno,
del buen tesoro de su corazón produce lo bueno; pero el hombre inicuo produce lo que es
inicuo de su tesoro inicuo; porque de la abundancia del corazón habla su boca‖ (Lucas 6:45).
Por lo tanto, debemos tener la costumbre de meditar sobre lo que aprendemos. Es cierto que el
estudio y la meditación conllevan esfuerzo, pero estudiar de ese modo es muy enriquecedor.
No hay razón para que nadie siga el proceder de quienes parlotean sin reflexionar.
En efecto, el sabio hace lo justo a los ojos de Dios y es una buena influencia para los demás.
Disfruta de abundante alimento espiritual, y tiene mucho que hacer en la gratificante obra del
Señor (1 Corintios 15:58). Como es un hombre de integridad, anda en seguridad y goza de la
aprobación divina. Muchas son, en verdad, las bendiciones del justo. Busquemos la justicia
sujetándonos a las normas de Dios sobre lo que es bueno y lo que es malo.
*** w01 15/9 págs. 24-28 Andemos en ‗la senda de la rectitud‘ ***
―LE IRÁ bien al justo —dijo el profeta Isaías—, pues ellos comerán el mismísimo fruto de
sus tratos.‖ Y agregó: ―La senda del justo es rectitud‖ (Isaías 3:10; 26:7). Es obvio que si
nuestros tratos han de producir buen fruto, tenemos que hacer lo que es recto a los ojos de
Dios.
Pero ¿cómo podemos andar en la senda de la rectitud? ¿Qué bendiciones recibiremos? ¿Y
cómo se beneficiarán otras personas si seguimos las normas justas de Dios? En el capítulo 10
del libro bíblico de Proverbios, Salomón, rey del antiguo Israel, responde a estas preguntas al
contrastar al justo con el inicuo. Al hacerlo, utiliza la expresión ―justo[s]‖ trece veces, nueve de
ellas en los versículos 15 a 32. Por tanto, será animador analizar Proverbios 10:15-32.
Aferrémonos firmemente a la disciplina
Salomón destaca la importancia de la justicia al decir: ―Las cosas valiosas del rico son su
pueblo fuerte. La ruina de los de condición humilde es su pobreza. La actividad del justo resulta
en vida; el producto del inicuo resulta en pecado‖ (Proverbios 10:15, 16).
Las riquezas pueden protegernos de algunas incertidumbres de la vida, tal como un pueblo
fortificado da cierta seguridad a sus habitantes, mientras que la pobreza puede ser desastrosa
cuando surgen situaciones inesperadas (Eclesiastés 7:12). Ahora bien, es posible que el sabio
rey también insinuara un peligro tanto para el rico como para el pobre. El rico quizá se incline a
depositar toda la confianza en las riquezas, imaginándose que sus posesiones valiosas son
―como un muro protector‖ (Proverbios 18:11). Y el pobre tal vez piense, equivocadamente, que
su pobreza lo condena a un futuro sin esperanza. Por consiguiente, ninguno se hace un buen
nombre ante Dios.
No obstante, sea que el justo tenga mucho o poco en sentido material, su rectitud lo conduce
a la vida. ¿En qué sentido? Pues bien, está contento con lo que tiene. No permite que su
situación económica interfiera con su buena relación con Dios. Sea rico o pobre, la vida del
justo le trae felicidad ahora y le da la esperanza de vida eterna en el futuro (Job 42:10-13).
El malvado no se beneficia aunque adquiera riquezas. En lugar de agradecer el valor protector
de estas y vivir en conformidad con la voluntad divina, emplea sus bienes para llevar una vida
de pecado.
―El que se adhiere a la disciplina es una senda a la vida —pasa a decir el rey de Israel—,
pero el que deja la censura hace que se ande errante.‖ (Proverbios 10:17.) Un biblista indica
que este versículo puede entenderse de dos maneras. Una posibilidad es que la persona que
se somete a la disciplina y va tras la justicia está en la senda de la vida, pero quien deja la
censura se desvía de dicho camino. El versículo también pudiera significar que ―el que acepta
la corrección es (para los demás) un camino de vida; [pero] el que desprecia la admonición,
hace extraviar (a los demás)‖ (Proverbios 10:17, Garofalo, nota). En cualquier caso, es vital que
nos aferremos firmemente a la disciplina y que no abandonemos la censura.
Cambiemos el odio por el amor
Salomón transmite ahora una idea similar mediante un proverbio de dos partes, en el que la
segunda reafirma la primera: ―Donde hay uno que está encubriendo el odio hay labios de
falsedad‖. Si un hombre abriga en el corazón odio hacia alguien y lo oculta detrás de palabras
melosas o adulación, está obrando con engaño, tiene ―labios de falsedad‖. El sabio rey agrega:
―El que presenta un informe malo es estúpido‖ (Proverbios 10:18). En vez de ocultar su odio,
algunos hacen acusaciones falsas o esparcen comentarios despectivos acerca de la persona a
quien odian. Tal proceder es una tontedad porque el informe difamatorio realmente no cambia
lo que esa persona es. Y el oyente perspicaz se dará cuenta de la malicia del calumniador y le
perderá el respeto. Por tanto, quien difunde un informe calumnioso se perjudica a sí mismo.
El proceder justo es no recurrir ni al engaño ni a la calumnia. Dios dijo a los israelitas:
―No debes odiar a tu hermano en tu corazón‖ (Levítico 19:17). Y Jesús aconsejó: ―Continúen
amando [incluso] a sus enemigos y orando por los que los persiguen; para que demuestren ser
hijos de su Padre que está en los cielos‖ (Mateo 5:44, 45). Es mucho mejor llenar el corazón de
amor que llenarlo de odio.
‗Refrenemos los labios‘
A fin de recalcar la necesidad de dominar la lengua, el sabio rey dice: ―En la abundancia de
palabras no deja de haber transgresión, pero el que tiene refrenados sus labios está actuando
discretamente‖ (Proverbios 10:19).
―El tonto habla muchas palabras.‖ (Eclesiastés 10:14.) Su ―boca [...] hace salir burbujeando
la tontedad‖ (Proverbios 15:2). Esto no quiere decir que toda persona que habla mucho sea
tonta. Sin embargo, qué fácil es que quien actúa así se convierta en un conducto para esparcir
chismes y rumores. En muchas ocasiones, el habla necia tiene como consecuencia
reputaciones dañadas, sentimientos heridos, relaciones tensas y hasta daño físico. ―El que
mucho habla, mucho yerra.‖ (Proverbios 10:19, Nueva Versión Internacional.) Además, es
irritante estar en compañía de alguien que siempre tiene algo que decir sobre todo asunto. Que
nuestras palabras no abunden.
Quien refrena los labios no solo evita la falsedad, sino que actúa discretamente. Piensa
antes de hablar. Impulsado por amor a los caminos de Jehová y un verdadero deseo de ayudar
al prójimo, toma en consideración el efecto que tendrán sus palabras en los demás. Sus
comentarios son amorosos y bondadosos. Medita sobre cómo expresarse de manera atrayente
y útil. Sus palabras son como ―manzanas de oro en entalladuras de plata‖, es decir, dichas con
arte y dignas en todo momento (Proverbios 25:11).
‗Sigamos paciendo a muchos‘
―La lengua del justo es plata escogida —pasa a decir Salomón—; el corazón del inicuo vale
poco.‖ (Proverbios 10:20.) Lo que el justo dice es puro, como la plata escogida, refinada y libre
de escoria. Así es también en el caso de los siervos de Jehová a medida que imparten a otras
personas el conocimiento de la Palabra de Dios que salva vidas. Su Magnífico Instructor,
Jehová Dios, los ha educado y les ―ha dado la lengua de los enseñados, para que sepa[n]
responder al cansado con una palabra‖ (Isaías 30:20; 50:4). En realidad, cuando expresa la
verdad bíblica, su lengua es como plata escogida. Para los de corazón sincero, sus
comentarios son infinitamente más valiosos que las intenciones del inicuo. Anhelemos hablar
del Reino de Dios y de sus maravillosas obras.
El justo es una bendición para las personas que lo rodean. ―Los mismísimos labios del justo
siguen paciendo a muchos —dice Salomón—, pero por falta de corazón los tontos mismos
siguen muriendo.‖ (Proverbios 10:21.)
¿En qué sentido ‗sigue paciendo a muchos‘ el justo? La palabra hebrea que se utiliza aquí
transmite la idea de ‗pastorear‘ (Proverbios 10:21, nota). Implica guiar y alimentar, de forma
muy parecida a la manera como el pastor de la antigüedad cuidaba de sus ovejas (1 Samuel
16:11; Salmo 23:1-3; El Cantar de los Cantares 1:7). El justo guía o dirige a los demás en el
camino de la justicia, y su habla alimenta a sus oyentes. Como resultado, estos llevan una vida
más feliz y satisfactoria, y hasta pudieran recibir vida eterna.
Pero ¿qué decir del tonto? Por ser falto de corazón, carece de buenos motivos o no le
importan las consecuencias de su proceder. Tal persona hace lo que se le antoja, sin
preocuparse por los resultados. Por lo tanto, sufre las consecuencias de sus acciones. Mientras
que el justo ayuda a mantener vivos a los demás, el falto de corazón ni siquiera puede
mantenerse vivo a sí mismo.
Evitemos la conducta relajada
Los seres humanos solemos manifestar nuestra personalidad en las cosas que nos gustan o
nos desagradan. El rey de Israel aludió a este hecho, diciendo: ―Para el estúpido el ocuparse
en conducta relajada es como un juego, pero la sabiduría es para el hombre de discernimiento‖
(Proverbios 10:23).
Algunos ven la conducta relajada como un juego y participan en ella solo para divertirse.
Tales personas pasan por alto el hecho de que todos hemos de rendir cuentas a Dios, y se
ciegan a la maldad de su proceder (Romanos 14:12). Su razonamiento se retuerce hasta el
punto de suponer que Dios no ve su maldad. Con sus acciones dicen en realidad: ―No hay
Jehová‖ (Salmo 14:1-3; Isaías 29:15, 16). ¡Qué tontedad!
Por otro lado, el hombre de discernimiento reconoce que la conducta relajada no es un
juego. Sabe que esta desagrada a Dios y que puede romper la buena relación que una persona
tenga con él. Participar en dicha conducta es una tontedad porque despoja a las personas de la
autoestima, arruina los matrimonios, perjudica tanto la mente como el cuerpo y lleva a la
pérdida de la espiritualidad. El proceder prudente es evitar la conducta relajada y sentir por la
sabiduría el mismo afecto que por una hermana muy querida (Proverbios 7:4).
Edifiquemos sobre el fundamento correcto
Señalando el valor de edificar nuestra vida sobre el fundamento apropiado, Salomón dice:
―Lo que al inicuo es espantoso... eso es lo que le vendrá; pero el deseo de los justos será
otorgado. Como cuando pasa el viento de tempestad, así el inicuo ya no es; pero el justo es un
fundamento hasta tiempo indefinido‖ (Proverbios 10:24, 25).
El inicuo puede espantar en gran manera a otras personas. Al final, sin embargo, lo que
él teme lo alcanzará. Dado que carece de un fundamento armado sobre principios justos, es
como un edificio inestable que se desploma cuando azota una tempestad violenta.
Se derrumba cuando está bajo presión. En cambio, el justo es como el hombre que obra en
conformidad con los dichos de Jesús. Es ―un varón discreto, que edificó su casa sobre la masa
rocosa —dijo Jesús—. Y descendió la lluvia y vinieron las inundaciones y soplaron los vientos y
dieron con ímpetu contra aquella casa, pero no se hundió, porque había sido fundada sobre la
masa rocosa‖ (Mateo 7:24, 25). Tal persona es estable, pues su modo de pensar y sus
acciones están fundados sólidamente sobre los principios piadosos.
Antes de seguir contrastando al malo con el justo, el sabio rey presenta una advertencia
concisa pero importante, al decir: ―Como vinagre a los dientes y como humo a los ojos, así es el
perezoso a los que lo envían‖ (Proverbios 10:26). El vinagre provoca una molestia en los
dientes. El ácido acético que contiene produce un sabor agrio en la boca y puede ocasionar
sensibilidad dental. El humo suele causar ardor y picor en los ojos. Por lo tanto, la persona que
contrata a un perezoso o lo utiliza como su representante sin duda quedará irritada y sufrirá
pérdidas.
―El camino de Jehová es una plaza fuerte‖
El rey de Israel sigue diciendo: ―El mismísimo temor de Jehová añadirá días, pero los años
mismos de los inicuos serán acortados. La expectación de los justos es un regocijo, pero la
esperanza misma de los inicuos perecerá‖ (Proverbios 10:27, 28).
El justo se guía por el temor piadoso y procura agradar a Jehová con sus pensamientos,
palabras y acciones. Dios se interesa por él y cumple sus expectativas justas. No obstante, el
inicuo lleva una vida impía. En ocasiones, tal vez parezca que se realizan sus esperanzas, pero
es solo de forma temporal, pues sus días son acortados, muchas veces por la violencia o una
enfermedad ocasionada por su estilo de vida. El día en que muere se desvanecen todas sus
esperanzas (Proverbios 11:7).
―El camino de Jehová es una plaza fuerte para el exento de culpa —dice Salomón—, pero la
ruina es para los practicantes de lo que es perjudicial.‖ (Proverbios 10:29.) El camino de Jehová
mencionado en este versículo no se refiere a la senda de la vida en la que debemos andar,
sino a la manera como Dios trata con la humanidad. ―La Roca, perfecta es su actividad —dijo
Moisés—, porque todos sus caminos son justicia.‖ (Deuteronomio 32:4.) Los caminos justos de
Dios significan seguridad para los rectos y ruina para los malvados.
Jehová es verdaderamente una plaza fuerte para su pueblo. ―En cuanto al justo, hasta
tiempo indefinido no se le hará trastabillar; pero en cuanto a los inicuos, no seguirán residiendo
en la tierra. La boca del justo... esta da por fruto la sabiduría, pero la lengua de la perversidad
será cortada. Los labios del justo... estos llegan a conocer buena voluntad, pero la boca de los
inicuos es perversidad.‖ (Proverbios 10:30-32.)
No cabe la menor duda de que a los justos les va bien y se les bendice porque andan en la
senda de la rectitud. En realidad, ―la bendición de Jehová... eso es lo que enriquece, y él
no añade dolor con ella‖ (Proverbios 10:22). Así que, asegurémonos de obrar siempre en
armonía con los principios piadosos. Además, refrenemos los labios y utilicemos la lengua para
alimentar a los demás con la verdad de la Palabra de Dios que salva vidas, y guiémoslos en el
camino de la justicia.
[Nota]
Encontrará un análisis más detallado de Proverbios 10:1-14 en La Atalaya del 15 de julio
de 2001, págs. 24-27.
*** w02 15/5 págs. 24-28 La integridad guía a los rectos ***
―EL HOMBRE, nacido de mujer, es de vida corta y está harto de agitación‖, dice la Biblia
(Job 14:1). El dolor y el sufrimiento parecen ser propios de la existencia humana. Hasta la vida
cotidiana puede estar llena de ansiedades y agitación. ¿Qué nos servirá de guía para afrontar
con éxito las circunstancias difíciles y nos ayudará a mantener una condición aprobada ante
Dios?
Pensemos en el ejemplo de Job, un hombre rico que vivió hace unos tres mil quinientos
años en lo que hoy es Arabia. Satanás le ocasionó muchas calamidades a esta persona
temerosa de Dios. Job perdió todo su ganado, y hasta sus amados hijos murieron. Poco
después, Satanás lo hirió con un divieso maligno de pies a cabeza (Job, capítulos 1, 2). Job
no sabía por qué le sucedían estas calamidades, pero, aun así, ―no pecó con sus labios‖ (Job
2:10). ―¡Hasta que expire no quitaré de mí mi integridad!‖, exclamó (Job 27:5). En efecto, la
integridad de Job lo guió en sus pruebas.
Integridad se define como entereza moral, e implica estar sin culpa o tacha a la vista de
Dios. Sin embargo, no significa perfección en el modo de hablar o actuar, pues el ser humano
imperfecto no puede cumplir a plenitud las normas de Dios. Más bien, la integridad humana
entraña plena devoción a Jehová y a su voluntad y propósito. Tal devoción piadosa guía a los
rectos en todo lugar y en todo momento. La primera parte del capítulo 11 del libro bíblico de
Proverbios indica cómo nuestra integridad puede guiarnos en diferentes aspectos de la vida y
nos garantiza los beneficios de ese proceder. Repasemos su contenido con atención.
La integridad promueve la honradez en los negocios
El rey Salomón del antiguo Israel no utilizó términos legales, sino poéticos, para destacar el
principio de la honradez. Dijo: ―Una balanza defraudadora es cosa detestable a Jehová, pero
una pesa de piedra completa le es un placer‖ (Proverbios 11:1). Esta es la primera de las
cuatro veces que el libro de Proverbios habla de balanzas y pesas para indicar que Jehová
desea que sus adoradores sean honrados en los negocios (Proverbios 16:11; 20:10, 23).
La prosperidad de los que se valen de una balanza defraudadora —o de prácticas
fraudulentas— puede ser tentadora. Pero ¿de verdad desearíamos pasar por alto las normas
de Jehová en cuanto a lo que es bueno y lo que es malo empleando métodos comerciales poco
éticos? No, si nos guía la integridad. Evitamos la falta de honradez porque lo que agrada a
Jehová es la pesa de piedra completa, pues el peso exacto denota honradez.
―La sabiduría está con los modestos‖
El rey Salomón continúa: ―¿Ha venido la presunción? Entonces vendrá la deshonra; pero la
sabiduría está con los modestos‖ (Proverbios 11:2). La presunción siempre trae deshonra, sea
que se manifieste en forma de orgullo, desobediencia o envidia. Por otra parte, el
reconocimiento humilde de nuestras limitaciones es el proceder que indica la sabiduría. Muchos
ejemplos bíblicos ilustran muy bien la veracidad de este proverbio.
Coré, un levita envidioso, dirigió a una turba rebelde que se opuso a la autoridad de Moisés
y Aarón, los siervos nombrados por Jehová. ¿Cuál fue el resultado de aquel acto insolente? ‗El
suelo abrió su boca y se tragó‘ a algunos de los agitadores, mientras que otros, como Coré,
perecieron consumidos por el fuego (Números 16:1-3, 16-35; 26:10; Deuteronomio 11:6). ¡Qué
deshonra! También está el caso de Uzah, quien presuntuosamente alargó la mano al arca del
pacto y la agarró para que no se cayera. Murió en el acto (2 Samuel 6:3-8). Es de vital
importancia evitar la presuntuosidad.
La persona humilde y modesta no se acarrea deshonra ni siquiera cuando comete un error.
Job fue un hombre ejemplar en muchos aspectos, pero era imperfecto. Las pruebas que sufrió
pusieron de manifiesto que algunas de sus ideas eran muy erróneas. Al defenderse de sus
acusadores, perdió en cierto modo el equilibrio. Incluso dio a entender que era más justo que
Dios (Job 35:2, 3). ¿Cómo corrigió Jehová el modo de pensar de Job?
Jehová dirigió la atención de Job a la Tierra, el mar, los cielos estrellados, algunos animales
y otras maravillas de la creación, y le dio una lección sobre la pequeñez del hombre en
contraste con la grandeza del Creador (Job, capítulos 38-41). Jehová no explicó en ningún
momento la razón del sufrimiento de Job. No tenía por qué hacerlo. Job era modesto; por ello,
reconoció humildemente la gran diferencia que existía entre él y Dios, entre la imperfección y
las debilidades que lo caracterizaban, y la justicia y el poder divinos. ―Me retracto —dijo—, y de
veras me arrepiento en polvo y ceniza.‖ (Job 42:6.) La integridad de Job lo llevó a aceptar la
censura con presteza. ¿Qué puede decirse de nosotros? ¿Nos dejamos guiar por la integridad
y aceptamos con presteza la censura o la corrección cuando las necesitamos?
Moisés también fue modesto y humilde. Cuando se agotó tratando de resolver los problemas
del pueblo, su suegro, Jetró, le ofreció una solución práctica: delegar parte de la
responsabilidad en otros hombres cualificados. Moisés reconoció sus limitaciones y,
sabiamente, aceptó el consejo (Éxodo 18:17-26; Números 12:3). El hombre modesto no se
resiste a ceder parte de su autoridad, ni teme que de alguna manera perderá el control si con
sensatez comparte sus responsabilidades con otros hombres cualificados (Números 11:16, 17,
26-29). Es más, siente el intenso deseo de ayudarlos a progresar espiritualmente (1 Timoteo
4:15). ¿No deberíamos estar dispuestos a hacer lo mismo?
‗El camino del exento de culpa es derecho‘
Reconociendo que la integridad no siempre protege al justo del peligro o la calamidad,
Salomón señala: ―La integridad de los rectos es lo que los guía, pero el torcimiento por los que
obran traidoramente los despojará con violencia‖ (Proverbios 11:3). La integridad sin duda guía
a los rectos a hacer lo que está bien a los ojos de Dios, incluso en circunstancias difíciles, y a la
larga este proceder les beneficia. Job no quiso renunciar a su integridad, por lo que Jehová
―bendijo el fin de Job después más que su principio‖ (Job 42:12). Los traicioneros quizá piensen
que están progresando a expensas de los demás, y hasta puede que así sea por algún tiempo.
Pero tarde o temprano, su propio engaño los arruina.
―Las cosas valiosas no serán de ningún provecho en el día del furor —dice el rey sabio—,
pero la justicia misma librará de la muerte.‖ (Proverbios 11:4.) Sería una insensatez trabajar
arduamente para conseguir bienes materiales y no tener tiempo para el estudio, la oración, la
asistencia a las reuniones y el ministerio del campo, las actividades que profundizan nuestro
amor a Dios y fortalecen nuestra devoción a él. Las riquezas, sea cual sea su cantidad, no nos
librarán en la venidera gran tribulación (Mateo 24:21). Solo lo conseguirán los rectos por su
justicia (Revelación [Apocalipsis] 7:9, 14). Es prudente, por tanto, tomar a pecho el ruego de
Sofonías: ―Antes que venga sobre ustedes el día de la cólera de Jehová, busquen a Jehová,
todos ustedes los mansos de la tierra, los que han practicado Su propia decisión judicial.
Busquen justicia, busquen mansedumbre‖ (Sofonías 2:2, 3). Entretanto, propongámonos
‗honrar a Jehová con nuestras cosas valiosas‘ (Proverbios 3:9).
Salomón recalca el valor de ir en pos de la justicia comparando el fin de los exentos de culpa
con el de los inicuos: ―La justicia del exento de culpa es lo que hará derecho su camino, pero
en su propia iniquidad el inicuo caerá. La justicia de los rectos es lo que los librará, pero por su
deseo vehemente los de tratos traicioneros serán atrapados ellos mismos. Cuando muere un
hombre inicuo, perece su esperanza; y hasta la expectación basada en poderío ha perecido.
El justo es el que es librado aun de la angustia, y el inicuo entra en lugar de él‖ (Proverbios
11:5-8). El exento de culpa no cae en su andar ni es atrapado en sus tratos. Su camino es
derecho. Al final, se le libra de la angustia. Puede que el inicuo parezca poderoso, pero no le
espera esa liberación.
―El pueblo está jubiloso‖
Tanto la integridad de los rectos como la maldad de los inicuos repercuten en otras
personas. ―Por su boca el que es apóstata arruina a su semejante —dice el rey de Israel—,
pero por conocimiento son librados los justos.‖ (Proverbios 11:9.) ¿Quién puede negar que la
calumnia, el chisme malicioso, el habla obscena y la conversación ociosa perjudican a los
demás? Por otra parte, el habla del justo es pura, bien pensada y considerada. Se le libra por
conocimiento, pues su integridad le aporta los razonamientos necesarios para demostrar que
sus acusadores mienten.
―A causa de la bondad de los justos el pueblo está jubiloso —continúa el rey—, pero cuando
perecen los inicuos hay un clamor gozoso.‖ (Proverbios 11:10.) Por lo general, la gente ama a
los justos, quienes hacen que su prójimo se sienta jubiloso, es decir, feliz y alegre. En realidad,
a nadie le gustan ―los inicuos‖. Cuando estos perecen, en general no se suele llorar su muerte.
Nadie se lamentará cuando Jehová ‗corte a los inicuos de la Tierra y arranque de ella a los
traicioneros‘ (Proverbios 2:21, 22). Antes bien, su desaparición será motivo de alegría. Pero
¿qué puede decirse de nosotros? Conviene que reflexionemos sobre si nuestro
comportamiento contribuye a la felicidad de quienes nos rodean.
―El pueblo recibe ensalzamiento‖
Salomón sigue comparando el efecto que tienen los rectos y los inicuos en la comunidad: ―A
causa de la bendición de los rectos el pueblo recibe ensalzamiento, pero a causa de la boca de
los inicuos llega a ser demolido‖ (Proverbios 11:11).
Los ciudadanos rectos promueven la paz y el bienestar, y edifican a otros miembros de la
comunidad. Así, el pueblo recibe ensalzamiento, prospera. Sin embargo, quienes hablan de
manera calumniadora, dañina o errónea provocan malestar, infelicidad, desunión y problemas,
particularmente si son personas influyentes. Ese pueblo sufre desorden, corrupción, deterioro
moral y quizá también económico.
El principio expuesto en Proverbios 11:11 es aplicable con igual fuerza a los siervos de
Jehová que se reúnen en congregaciones, comparables a pueblos. Una congregación en la
que ejercen influencia personas espirituales —rectas y guiadas por su integridad— constituye
una comunidad feliz, activa y servicial que honra a Dios. Jehová bendice a dicha congregación,
y esta prospera espiritualmente. De vez en cuando, puede que haya unos pocos que quizá se
sientan descontentos e insatisfechos, que encuentren faltas y critiquen con amargura la forma
en que se hacen las cosas. Estos se asemejan a una ―raíz venenosa‖ que puede extenderse y
envenenar a otros que no habían sido afectados en un principio (Hebreos 12:15). Tales
personas suelen ambicionar más autoridad y prominencia. Esparcen rumores de que existe,
por ejemplo, injusticia o prejuicio racial en la congregación o de parte de los ancianos. Sin
duda, su boca puede provocar divisiones en la congregación. ¿No deberíamos hacer oídos
sordos a estos rumores y esforzarnos por ser personas espirituales que contribuyen a la paz y
unidad de la congregación?
A continuación, Salomón dice: ―El que es falto de corazón ha despreciado a su propio
semejante, pero el hombre de discernimiento amplio es uno que guarda silencio. El que anda
como calumniador está descubriendo habla confidencial, pero el que es fiel en espíritu está
encubriendo un asunto‖ (Proverbios 11:12, 13).
Alguien ―falto de corazón‖, es decir, que no tiene buen juicio, puede hacer mucho daño.
Lleva su habla ociosa hasta el extremo de la calumnia o la injuria. Los ancianos nombrados
deben poner fin con prontitud a tal influencia nociva. A diferencia del que es ―falto de corazón‖,
el hombre de discernimiento sabe cuándo guardar silencio. En vez de revelar confidencias, las
encubre. Consciente del gran perjuicio que acarrea perder el control de la lengua, el que tiene
discernimiento es ―fiel en espíritu‖. Es leal a sus hermanos en la fe y no divulga asuntos
confidenciales que pudieran ponerles en peligro. Estas personas íntegras son muy valiosas en
la congregación.
Para ayudarnos a andar en el camino de los exentos de culpa, Jehová suministra abundante
alimento espiritual preparado bajo la dirección del ―esclavo fiel y discreto‖ (Mateo 24:45).
También recibimos mucha asistencia personal mediante los ancianos cristianos en nuestras
congregaciones semejantes a pueblos (Efesios 4:11-13). Estamos muy agradecidos por ello,
pues ―cuando no hay dirección diestra, el pueblo cae; pero hay salvación en la multitud de
consejeros‖ (Proverbios 11:14). Pase lo que pase, estemos firmemente resueltos a ‗andar en
nuestra integridad‘ (Salmo 26:1).
*** w02 15/7 págs. 28-31 Sembremos justicia, y segaremos la bondad amorosa de Dios ***
―POSITIVAMENTE le irá mal a uno por haber salido fiador por un extraño, pero el que odia
andar estrechando las manos se mantiene libre de cuidado.‖ (Proverbios 11:15.) Estas
concisas palabras constituyen una convincente exhortación a que actuemos de forma
responsable. Quien avala el préstamo de un deudor poco fiable se está buscando problemas,
pero el que se abstiene de estrechar la mano —gesto que en el antiguo Israel servía para
ratificar los acuerdos— elude una trampa que pudiera suponerle un quebranto económico.
Resulta obvio que el principio aplicable es el siguiente: ―Cualquier cosa que el hombre esté
sembrando, esto también segará‖ (Gálatas 6:7). El profeta Oseas precisó: ―Siembren semilla
para ustedes en justicia; sieguen de acuerdo con bondad amorosa‖ (Oseas 10:12). Al obrar
conforme a las normas de Dios, estamos sembrando justicia, y, en consecuencia, segaremos
su bondad amorosa. Mediante el uso reiterado de tal principio, el rey israelita Salomón nos
insta a que nuestra disposición, habla y conducta se ajusten a lo que es apropiado. Un examen
detenido de sus sabios proverbios nos estimulará a sembrar semillas de justicia para nuestro
provecho (Proverbios 11:15-31).
La siembra de ―encanto‖ resulta en ―gloria‖
―Una mujer de encanto es la que se ase de la gloria —revela el rey sabio—; pero los tiranos,
por su parte, se asen de las riquezas.‖ (Proverbios 11:16.) En este versículo se observa un
contraste entre la honra perdurable que puede conseguir una mujer con encanto, una ―mujer
bondadosa‖, y las riquezas pasajeras que obtienen los tiranos (Nueva Versión Internacional).
¿Cómo se puede adquirir el encanto que resulta en gloria? ―Salvaguarda la sabiduría
práctica y la capacidad de pensar —aconseja Salomón—, y resultarán ser [...] encanto a tu
garganta.‖ (Proverbios 3:21, 22.) El salmista también aludió a ‗la gracia encantadora derramada
sobre los labios de un rey‘ (Salmo 45:1, 2). Es evidente que la sabiduría práctica, la habilidad
para pensar y el uso adecuado de la lengua realzan el valor y encanto de una persona. Así
ocurre, ciertamente, en el caso de la mujer discreta. Abigail, la esposa del insensato Nabal, fue
un ejemplo al respecto. Era ―buena en cuanto a discreción y hermosa en cuanto a forma‖, y el
rey David la alabó por su ―sensatez‖ (1 Samuel 25:3, 33).
No hay duda de que la mujer piadosa que tenga verdadero encanto conseguirá gloria para
sí. Disfrutará de una buena reputación y, si está casada, de la estima de su esposo. De hecho,
se convertirá en un motivo de orgullo para toda su familia. Y su gloria no será pasajera. ―Ha de
escogerse un nombre más bien que riquezas abundantes; el favor es mejor que aun la plata y
el oro.‖ (Proverbios 22:1.) El valor de su buen nombre ante Dios será permanente.
Ocurre lo contrario en el caso del tirano, ‗el hombre violento‘ (Proverbios 11:16, Nueva
Versión Internacional ). Al tirano se le menciona entre los malvados y los adversarios de
quienes adoran a Jehová (Job 6:23; 27:13). Tal hombre ―no [ha] colocado a Dios enfrente de sí‖
(Salmo 54:3). Puede que oprimiendo a los inocentes y abusando de ellos ―amonton[e] plata
como el polvo mismo‖ (Job 27:16). Pero quizás llegue el día en que se acueste y no vuelva a
levantarse, o en que despierte por última vez (Job 27:19). Entonces, todos sus logros y
riquezas no tendrán ningún valor (Lucas 12:16-21).
Proverbios 11:16 encierra una lección muy importante para todos nosotros. Utilizando una
breve exposición de los frutos respectivos del encanto y de la tiranía, el rey de Israel nos insta a
sembrar justicia.
―La bondad amorosa‖ tiene sus recompensas
Salomón nos da otra lección sobre las relaciones humanas cuando señala: ―Un hombre de
bondad amorosa está tratando recompensadoramente con su propia alma, pero la persona
cruel está acarreando extrañamiento a su propio organismo‖ (Proverbios 11:17). ―La esencia
del proverbio —comenta un erudito— es que nuestro comportamiento con otros, sea bueno o
malo, tiene consecuencias no planeadas o inesperadas para nosotros mismos.‖ Pensemos en
el caso de una joven llamada Lisa. Aunque tiene buenas intenciones, siempre llega tarde a sus
compromisos; no es raro que se retrase media hora o más en acudir a su cita con otros
proclamadores del Reino que la esperan para predicar. Lisa no se está tratando
recompensadoramente. ¿Puede culpar a los demás si se cansan de perder tiempo valioso y
evitan hacer planes para predicar con ella?
La persona perfeccionista —la que se fija normas excesivamente elevadas— también es
cruel consigo misma. Si se empeña en lograr objetivos inalcanzables, acabará agotada y
desilusionada. Por otra parte, establecernos metas realistas y razonables es una manera de
tratarnos recompensadoramente. Quizás no captemos las ideas con tanta rapidez como otros;
o pudiera ser que la enfermedad o la vejez nos limitaran. Sin embargo, nunca nos
impacientemos por nuestro grado de progreso espiritual. Más bien, seamos siempre razonables
respecto a nuestras limitaciones. Seremos felices si hacemos ―lo sumo posible‖ dentro de
nuestras circunstancias (2 Timoteo 2:15; Filipenses 4:5).
El sabio rey explica con más detalle por qué se beneficia el justo, mientras que la persona
cruel se perjudica: ―El inicuo obtiene salario falso; pero el que siembra justicia, sueldo
verdadero. El que se mantiene firmemente a favor de la justicia está en vías de recibir la vida,
pero el que corre tras lo que es malo está en vías de recibir su propia muerte. Los torcidos de
corazón son cosa detestable a Jehová, pero los exentos de culpa en su camino le son un
placer. Aunque mano esté a mano, la persona mala no quedará sin castigo; pero la prole de los
justos ciertamente escapará‖ (Proverbios 11:18-21).
Estos versículos destacan de varias maneras una idea básica: si sembramos justicia,
segaremos sus recompensas. Puede que el inicuo recurra al engaño o al juego por dinero a fin
de obtener algo a cambio de nada. Dado que tal salario es falso, quizás se lleve una desilusión.
El trabajador diligente podrá cifrar su confianza en ganancias verdaderas. Al contar con la
aprobación de Dios, el exento de culpa se encamina a la vida. Pero ¿qué le ocurrirá a la
persona mala? ―Aunque mano esté a mano‖ en planear la traición, el malvado no quedará sin
castigo (Proverbios 2:21, 22). ¡Qué excelente exhortación para sembrar justicia!
La verdadera belleza reside en la sensatez
Salomón prosigue diciendo: ―Como nariguera de oro en el hocico de un cerdo, así es la
mujer que es bella, pero que está apartándose de la sensatez‖ (Proverbios 11:22). Las
narigueras eran adornos populares en tiempos bíblicos. Un arete de oro que atravesara una
aleta de la nariz o el cartílago que separa las fosas nasales sería una alhaja bien visible en el
rostro de una mujer. Resultaría muy poco apropiado colocar un adorno tan delicado en el
hocico de un cerdo. Con la persona que a pesar de su belleza externa carece de ―sensatez‖
sucede algo parecido, sea hombre o mujer. El embellecimiento simplemente está fuera de
lugar; no la favorece ni hace que resulte atractiva.
Desde luego, es natural que nos interese lo que piensan los demás de nuestro aspecto. Pero
¿por qué sentirnos demasiado ansiosos o insatisfechos con la figura o el rostro que tenemos?
Muchos de nuestros rasgos no se pueden cambiar. Además, el aspecto físico no lo es todo.
¿No es cierto que la mayoría de las personas que nos agradan y a las que admiramos tienen
una apariencia bastante común? La clave de la felicidad verdadera no está en el atractivo
físico, sino en la belleza interior que emana de cualidades piadosas permanentes. Por
consiguiente, seamos sensatos y cultivemos dichas cualidades.
―El alma generosa será engordada ella misma‖
―El deseo de los justos de seguro es bueno —afirma el rey Salomón—; la esperanza de los
inicuos es furor.‖ Para ilustrar esta afirmación, añade: ―Existe el que esparce y, no obstante, se
le aumenta; también el que se retiene de lo que es recto, pero eso resulta solo en carencia‖
(Proverbios 11:23, 24).
En la medida en que nos dediquemos con diligencia a esparcir, o impartir a otros,
el conocimiento de la Palabra de Dios, sin duda mejorará nuestra propia comprensión de su
―anchura y longitud y altura y profundidad‖ (Efesios 3:18). Por otro lado, el que deja que su
conocimiento permanezca ocioso se arriesga a perderlo. En efecto, ―el que siembra
parcamente, parcamente también segará; y el que siembra liberalmente, liberalmente también
segará‖ (2 Corintios 9:6).
―El alma generosa será engordada ella misma [prosperará] —reconoce el rey—; y el que
liberalmente riega a otros, él mismo también será liberalmente regado.‖ (Proverbios 11:25.)
Jehová se complace mucho cuando utilizamos generosamente nuestro tiempo y recursos para
fomentar la adoración verdadera (Hebreos 13:15, 16). Él ‗abrirá las compuertas de los cielos y
realmente vaciará sobre nosotros una bendición hasta que no haya más carencia‘ (Malaquías
3:10). Solo hay que fijarse en la prosperidad espiritual de la que sus siervos disfrutan en la
actualidad.
Salomón presenta un nuevo ejemplo de los deseos contrapuestos de los justos y de los
inicuos: ―Al que retiene el grano... el populacho lo execrará, pero hay una bendición para la
cabeza del que deja que se compre‖ (Proverbios 11:26). Comprar mercancías cuando los
precios están bajos y retenerlas hasta que escaseen y suba su valor, puede ser un negocio
lucrativo. Aunque limitar el consumo y almacenar reservas quizás resulte útil en algunos casos,
suele despreciarse a quien lo hace por egoísmo. Por otro lado, la persona que no se aprovecha
de una situación apremiante para obtener grandes beneficios se gana el favor de la gente.
El rey israelita nos anima a ir en pos de lo que es bueno, o justo, con estas palabras: ―El que
anda procurando el bien seguirá buscando la buena voluntad; pero en cuanto al que anda en
busca de lo malo, le sobrevendrá. El que confía en sus riquezas... él mismo caerá; pero
justamente como follaje reverdecerán los justos‖ (Proverbios 11:27, 28).
El justo está ganando almas
Para ejemplificar las consecuencias ruinosas de las acciones insensatas, Salomón
advierte: ―En cuanto a cualquiera que acarree extrañamiento a su propia casa, tomará posesión
del viento‖ (Proverbios 11:29a). El mal que Acán cometió le acarreó ostracismo, por lo que
murió lapidado junto con otros miembros de su casa (Josué, capítulo 7). En la actualidad,
puede que el cabeza u otros integrantes de una familia cristiana sigan un mal proceder que
motive su expulsión de la congregación cristiana. El hombre que deja de cumplir con los
mandatos de Dios o que tolera la maldad dentro de su familia, le acarrea ostracismo a su
propia casa. Tanto él como sus seres queridos quizás queden excluidos de la hermandad
cristiana si no se arrepienten de su mal proceder (1 Corintios 5:11-13). ¿Y qué es lo que
obtiene? Solo viento: algo que carece de sustancia o valor real.
Ese mismo proverbio pasa a indicar que ―el tonto será siervo del sabio de corazón‖
(Proverbios 11:29b). El tonto carece de sabiduría práctica, así que no se le pueden confiar
responsabilidades importantes. Además, por lo mal que administra sus propios asuntos, es
posible que de alguna manera acabe sometido a otras personas. Alguien tan insensato quizás
se convierta en ―siervo del sabio de corazón‖. Obviamente, pues, es esencial que mostremos
buen juicio y sabiduría práctica en todos nuestros actos.
―El fruto del justo es un árbol de vida —nos garantiza este perspicaz rey—, y el que está
ganando almas es sabio‖ (Proverbios 11:30). ¿De qué manera se cumple el proverbio? La
persona justa nutre en sentido espiritual a otros mediante su habla y su conducta. Los anima a
servir a Jehová y así obtener en un futuro la vida que Dios pone a su alcance.
‗El pecador será recompensado aún más‘
Los proverbios mencionados nos estimulan de forma muy persuasiva a sembrar justicia.
Salomón ofrece aún otra aplicación del principio de que ―cualquier cosa que el hombre esté
sembrando, esto también segará‖, cuando asegura: ―¡Mira! El justo... en la tierra será
recompensado. ¡Cuánto más deberán serlo el inicuo y el pecador!‖ (Proverbios 11:31).
Por mucho que el justo procure hacer lo correcto, a veces cometerá errores (Eclesiastés
7:20), y por tales faltas será ―recompensado‖ con disciplina. ¿Qué sucederá, pues, en el caso
de la persona inicua que escoge deliberadamente un proceder impropio y no hace ningún
esfuerzo por volver al camino de la justicia? ¿No merece una ‗recompensa‘ mayor, un castigo
severo? El apóstol Pedro señaló: ―Si el justo con dificultad se salva, ¿dónde aparecerán el
impío y el pecador?‖ (1 Pedro 4:18). Por nuestro propio bien, entonces, resolvámonos a
sembrar semillas de justicia.
*** w03 15/1 págs. 28-31 ‗El que es bueno consigue la aprobación de Dios‘ ***
JEHOVÁ DIOS es la fuente de toda forma de vida (Salmo 36:9). ―Por él tenemos vida y nos
movemos y existimos.‖ (Hechos 17:28.) Además, ¿no es cierto que nuestro corazón se llena de
gratitud cuando pensamos en el don que otorga a quienes gozamos de una íntima relación con
él? Pues, ―el don que Dios da es vida eterna‖ (Romanos 6:23). Es vital, por tanto, que
busquemos la aprobación de Jehová.
El salmista nos asegura que ‗favor es lo que Dios da‘ (Salmo 84:11). Pero ¿a quién se lo da?
Hoy día, las personas suelen favorecer a otros dependiendo de su educación, posición
económica, color de piel, antecedentes étnicos y así por el estilo. Y Dios, ¿a quiénes favorece?
El rey Salomón del antiguo Israel contesta: ―El que es bueno consigue aprobación de parte de
Jehová, pero al hombre de ideas inicuas él lo pronuncia inicuo‖ (Proverbios 12:2).
Es obvio que a Jehová le agrada la persona buena, la virtuosa. Entre las virtudes del que es
bueno figuran la autodisciplina, la imparcialidad, la humildad, la compasión y la prudencia. Sus
pensamientos son honestos; sus palabras, animadoras; sus hechos, rectos y provechosos. La
primera parte del capítulo 12 del libro bíblico de Proverbios indica que la bondad debe influir en
nuestra vida diaria y señala los beneficios de manifestar dicha cualidad. Meditar en sus sabios
consejos nos dará ―perspicacia para hacer el bien‖ (Salmo 36:3), y aplicarlos nos ayudará a
conseguir la aprobación de Dios.
La disciplina es esencial
―El que ama la disciplina ama el conocimiento —dice Salomón—, pero el que odia la censura
es irrazonable.‖ (Proverbios 12:1.) El que es bueno anhela la disciplina porque desea mejorar.
Aplica con prontitud los consejos que recibe en las reuniones cristianas o en conversaciones
personales. Las palabras que contienen las Escrituras y las publicaciones bíblicas son como
aguijones que lo incentivan a seguir un proceder recto. Busca el conocimiento y lo utiliza para
hacer sendas rectas para sus pies. En efecto, quien ama la disciplina ama también el
conocimiento.
La disciplina es sumamente necesaria para los adoradores verdaderos, sobre todo, la
autodisciplina. Tal vez deseamos tener un conocimiento más profundo de la Biblia, o
anhelamos ser más eficientes en el ministerio cristiano y mejores maestros de la Palabra de
Dios (Mateo 24:14; 28:19, 20). Pero se requiere autodisciplina para convertir esos deseos en
realidades. La autodisciplina también es necesaria en otros campos de la vida. Por ejemplo,
hoy día abunda la información concebida para despertar deseos ilícitos. ¿No es cierto que se
requiere autodisciplina para impedir que nuestro ojo se fije en lo que es inapropiado? Por otra
parte, dado que ―la inclinación del corazón del hombre es mala desde su juventud‖, es posible
que se origine un pensamiento inmoral en algún rincón de la mente (Génesis 8:21). Hay que
tener autodisciplina para no detenernos en dicho pensamiento.
En cambio, el que odia la censura no ama ni la disciplina ni el conocimiento. Cede a la
tendencia humana pecaminosa de resentirse por la censura y, como consecuencia, se degrada
al nivel de un animal irracional —una bestia—, que carece de valores morales. Tenemos que
oponernos firmemente a tal inclinación.
‗Raíces que nadie arrancará‘
Claro está, el hombre bueno no puede ser injusto. De modo que la justicia también es
necesaria para conseguir la aprobación de Jehová. El rey David cantó: ―Tú mismo bendecirás
al justo, oh Jehová; como con un escudo grande, con aprobación lo cercarás‖ (Salmo 5:12).
Salomón contrasta la condición de los justos con la de los impíos al declarar: ―Ningún hombre
será firmemente establecido por la iniquidad; pero en cuanto al fundamento-raíz de los justos,
no se le hará bambolear‖ (Proverbios 12:3).
Pudiera parecer que los inicuos prosperan. Analicemos la experiencia del salmista Asaf. ―En
cuanto a mí —dice él—, mis pies casi se habían desviado, casi se había hecho que mis pasos
resbalaran.‖ ¿Por qué? Asaf responde: ―Llegué a tener envidia de los jactanciosos, cuando veía
la mismísima paz de los inicuos‖ (Salmo 73:2, 3). Pero cuando entró en el santuario del templo
de Dios, se dio cuenta de que era en suelo resbaloso donde Jehová los había colocado a ellos
(Salmo 73:17, 18). Cualquier aparente éxito que consigan los malvados es temporal. ¿Por qué,
pues, tenerles envidia?
Por otra parte, el que cuenta con la aprobación de Jehová es estable. Valiéndose de las
fuertes raíces de un árbol como metáfora, Salomón dice: ―La raíz del justo nadie la arrancará‖
(Proverbios 12:3, Magaña). Las raíces ocultas de un árbol gigante, como la secuoya de
California, pueden abarcar varias hectáreas y proveer un sólido anclaje en caso de
inundaciones y vendavales. Una gigantesca secuoya hasta puede soportar un terremoto fuerte.
Tal como las raíces se extienden debajo de la tierra en busca de nutrientes, nuestra mente y
corazón necesitan ahondar ampliamente en la Palabra de Dios para beneficiarse de sus aguas
vivificantes. De esta manera, nuestra fe estará fuerte y firmemente arraigada, y nuestra
esperanza será tanto segura como firme (Hebreos 6:19). No seremos ―llevados de aquí para
allá por todo viento de enseñanza‖ falsa (Efesios 4:14). Por supuesto, sentiremos los efectos de
las pruebas tormentosas, y quizá hasta temblemos ante la adversidad. Pero a nuestro
‗fundamento-raíz no se le hará bambolear‘.
―Una esposa capaz es una corona para su dueño‖
Muchos conocen el dicho ―Detrás de un gran hombre hay una gran mujer‖. Salomón señala
la importancia de una mujer que apoya a su marido, al decir: ―Una esposa capaz es una corona
para su dueño, pero como podredumbre en sus huesos es la que actúa vergonzosamente‖
(Proverbios 12:4). La palabra ―capaz‖ resume muchos elementos de la bondad. En el capítulo
31 de Proverbios se mencionan las virtudes de una buena esposa, entre las cuales figuran la
diligencia, la fidelidad y la sabiduría. La mujer que posee estos atributos es una corona para su
esposo porque su buena conducta lo honra a él y lo eleva en la estimación de otras personas.
Ella nunca se adelanta ambiciosamente a su marido ni compite con él en busca de
reconocimiento. Antes bien, es un complemento, un ayudante de él.
¿Cómo pudiera actuar vergonzosamente una mujer, y con qué resultados? Tal conducta
vergonzosa pudiera abarcar desde un espíritu discutidor hasta el adulterio (Proverbios 7:10-23;
19:13). Lo único que la esposa logra con tal comportamiento es derrumbar a su marido. Ella es
como ―podredumbre en sus huesos‖ en el sentido de que ―lo arruina, tal como una enfermedad
debilita el cuerpo‖, comenta una obra de consulta. ―Un término equivalente moderno pudiera
ser ‗un cáncer‘ u otra enfermedad que socava gradualmente la vitalidad de la persona‖, señala
otra fuente. Las esposas cristianas procuran conseguir la aprobación divina reflejando las
virtudes de la esposa capaz.
Pensamientos, actos y sus consecuencias
Los pensamientos conducen a actos y estos, a su vez, traen consecuencias. Salomón pasa
a mencionar cómo los pensamientos llevan a actos, y compara a los justos con los impíos
diciendo: ―Los pensamientos de los justos son juicio; el manejo de los inicuos es engaño. Las
palabras de los inicuos son un estar al acecho por sangre, pero la boca de los rectos es lo que
los librará‖ (Proverbios 12:5, 6).
Los pensamientos de los buenos se dirigen a lo que es sano, justo y recto. Puesto que a los
justos los motiva el amor a Dios y al prójimo, sus intenciones son buenas. Por otro lado, a los
inicuos los motiva el egoísmo. Como resultado, sus designios —los métodos que emplean para
lograr sus objetivos— son engañosos, y sus actos, traicioneros. No vacilan en tender una
trampa al inocente, quizás ante un tribunal o mediante acusaciones falsas. Sus palabras se
asemejan a quien ‗está al acecho por sangre‘ porque quieren hacer daño a sus víctimas
inocentes. Sin embargo, como los justos tienen conocimiento de sus malignas intrigas y poseen
la cautela que manda la sabiduría, evitan dicho peligro. Hasta pueden advertir a los incautos y
librarlos de los planes engañosos de los malos.
¿Qué les sucederá a los justos y a los impíos? ―Hay un derribar a los inicuos, y ya no son,
pero la mismísima casa de los justos continuará en pie‖, responde Salomón (Proverbios 12:7).
Cierta obra de consulta dice que la casa ―representa a la familia y a todo lo que la persona
valora, lo que hace posible que disfrute de la vida‖. Incluso puede referirse a los descendientes
del justo. Sea como fuere, la lección del proverbio está clara: los justos permanecerán firmes
frente a la adversidad.
Al humilde le va mejor
Recalcando el valor del discernimiento, el rey de Israel dice: ―Por su boca de discreción será
alabado el hombre, pero el que es avieso de corazón llegará a ser objeto de desprecio‖
(Proverbios 12:8). El que tiene discernimiento no habla precipitadamente. Piensa antes de
hablar y goza de relaciones pacíficas con los demás porque ―su boca de discreción‖ lo impulsa
a escoger con cuidado las palabras. Cuando responde a especulaciones insensatas, el hombre
de discernimiento es capaz de ‗retener sus dichos‘ (Proverbios 17:27). A tal hombre se le tiene
en alta estima y resulta agradable a los ojos de Jehová. ¡Cuánto difiere del que tiene opiniones
distorsionadas que emanan de un ‗corazón avieso‘!
Sin lugar a dudas, el hombre de discreción es alabado, pero el siguiente proverbio nos
enseña el valor de la humildad. Afirma: ―Mejor es el que es estimado en poco, pero tiene siervo,
que el que a sí mismo se glorifica, pero carece de pan‖ (Proverbios 12:9). Parece que Salomón
quiere decir que es mejor ser humilde, de pocos recursos materiales, y solo tener un siervo,
que gastar el sustento de la vida para intentar mantener una elevada posición social. Qué buen
consejo: no vivir por encima de nuestras posibilidades.
La vida rural suministra lecciones sobre la bondad
Salomón utiliza imágenes de la vida rural para enseñarnos dos lecciones sobre la bondad.
―El justo está cuidando del alma de su animal doméstico —dice—, pero las misericordias de los
inicuos son crueles.‖ (Proverbios 12:10.) El justo trata a sus animales con bondad, conoce sus
necesidades y se preocupa por su bienestar. Por otro lado, el inicuo tal vez diga que se
preocupa por sus animales, pero no le conmueven sus necesidades. Sus motivos son egoístas,
y el trato que les da se basa en el beneficio que puede obtener de ellos. Lo que tal persona
considera un cuidado adecuado en realidad pudiera ser un trato cruel.
El principio de tratar bien a los animales también incluye, desde luego, a las mascotas. Sería
muy cruel adoptar una mascota y luego hacerla sufrir descuidándola o maltratándola. Ahora
bien, si un animal está sufriendo mucho debido a una enfermedad grave o una herida, tal vez
sea bondadoso darle muerte.
Valiéndose de otro aspecto de la vida rural —la labranza—, Salomón dice: ―El que cultiva su
terreno quedará satisfecho él mismo con pan‖. No cabe duda de que el trabajo arduo y
efectuado con un propósito reporta beneficios. ―Pero el que sigue tras cosas que nada valen es
falto de corazón.‖ (Proverbios 12:11.) Como carece de buen juicio o entendimiento, el hombre
―falto de corazón‖ emprende aventuras comerciales vanas, especulativas y que nada valen. Las
lecciones tras estos dos versículos son claras: seamos misericordiosos y diligentes.
El justo rinde fruto
―El inicuo ha deseado la presa prendida en la red de los hombres malos‖, dice el sabio rey
(Proverbios 12:12a). ¿Cómo hace tal cosa el inicuo? Al desear el botín que se ha conseguido
por medios siniestros.
¿Qué puede decirse del bueno? Que es alguien que ama la disciplina y está firmemente
arraigado en la fe. Es justo, discreto, humilde, compasivo y diligente. Y ―en cuanto a la raíz de
los justos —señala Salomón—, esta rinde‖, o ―prospera‖ (Proverbios 12:12b; Nueva Versión
Internacional). ―La raíz de los justos perdurará siempre‖, dice la versión Cantera-Iglesias. Tales
personas son estables y gozan de seguridad. Sin lugar a dudas, ‗el que es bueno consigue la
aprobación de Dios‘. Por lo tanto, ‗confiemos en Jehová y hagamos el bien‘ (Salmo 37:3).
*** w03 15/3 págs. 26-30 ‗Los labios de la verdad durarán para siempre‘ ***
ES CAPAZ de arruinar la vida de una persona tal como un pequeño fuego puede incendiar y
destruir un bosque entero. Puede estar llena de veneno o ser ―árbol de vida‖ (Proverbios 15:4).
Muerte y vida están en su poder (Proverbios 18:21). Es tanta la influencia de la lengua, que a
pesar de su pequeñez, es capaz de manchar todo el cuerpo (Santiago 3:5-9). Por eso, somos
sabios si la controlamos.
En la segunda parte del capítulo 12 del libro bíblico de Proverbios, el rey Salomón del
antiguo Israel ofrece valiosos consejos que nos ayudan a vigilar nuestra forma de hablar.
Mediante proverbios concisos, pero llenos de significado, el sabio rey señala que lo que se dice
produce ciertas consecuencias y revela mucho de las cualidades de la persona que habla. Los
consejos inspirados de Salomón son indispensables para cualquiera que desee ‗poner
vigilancia sobre la puerta de sus labios‘ (Salmo 141:3).
‗La transgresión que tiende un lazo‘
―Por la transgresión de los labios el malo es cogido en lazo, pero el justo logra salir de la
angustia‖, dice Salomón (Proverbios 12:13). Mentir es una transgresión de los labios que se
convierte en una trampa mortal para quienes tienen ese hábito (Revelación [Apocalipsis] 21:8).
Faltar a la verdad pudiera parecer una manera fácil de librarse del castigo o de evitar una
situación desagradable. Pero ¿no es cierto que una mentira suele llevar a otra? Tal como la
persona que apuesta pequeñas cantidades de dinero se siente impulsada a aumentarlas a fin
de recuperar las pérdidas, el mentiroso pronto se ve atrapado en un círculo vicioso.
La transgresión de los labios también tiende un lazo en el sentido de que es posible que el
mentiroso acabe mintiéndose a sí mismo. Por ejemplo, puede convencerse fácilmente de que
sabe mucho y de que es brillante, aunque en realidad sepa muy poco. De modo que empieza a
vivir una mentira. En efecto, ―ha sido demasiado meloso para consigo mismo a sus propios ojos
para descubrir su error de modo que lo odie‖ (Salmo 36:2). Mentir es un verdadero lazo.
El justo, en cambio, no cae en una trampa como esa, pues ni siquiera cuando está angustiado
recurre a la falsedad.
‗El fruto que satisface‘
―No se extravíen: de Dios uno no se puede mofar —advierte el apóstol Pablo—. Porque
cualquier cosa que el hombre esté sembrando, esto también segará.‖ (Gálatas 6:7.) Dicho
principio ciertamente es aplicable a nuestra habla y a nuestros actos. Salomón declara: ―Del
fruto de la boca de un hombre este se satisface de lo bueno, y lo mismísimo que hayan obrado
las manos de un hombre volverá a él‖ (Proverbios 12:14).
La boca que ―profiere sabiduría‖ produce el fruto que satisface (Salmo 37:30). Para poseer
sabiduría hace falta conocimiento, y ningún ser humano es la fuente de todo el conocimiento.
Todos tenemos que escuchar el buen consejo y seguirlo. ―El camino del tonto es recto a sus
propios ojos —dice el rey de Israel—, pero el que escucha el consejo es sabio.‖ (Proverbios
12:15.)
Jehová nos da consejos sólidos mediante su Palabra y su organización, la cual utiliza las
publicaciones que proporciona ―el esclavo fiel y discreto‖ (Mateo 24:45; 2 Timoteo 3:16). ¡Qué
insensato sería rechazar el buen consejo e insistir en obrar a nuestra manera! Tenemos que
―ser presto[s] en cuanto a oír‖ cuando Jehová, ―Aquel que enseña conocimiento a los hombres‖,
nos aconseja mediante su conducto de comunicación (Santiago 1:19; Salmo 94:10).
¿Cómo reaccionan ante los insultos y la crítica injusta los sabios y los insensatos? Salomón
responde: ―Es persona tonta la que da a conocer su irritación en el mismo día, pero el sagaz
encubre una deshonra‖ (Proverbios 12:16).
Cuando se le ofende, el tonto responde airadamente enseguida, ―en el mismo día‖.
El prudente, en cambio, pide a Dios su espíritu a fin de obrar con autodominio, dedica tiempo a
meditar en el consejo de la Palabra de Dios y reflexiona agradecido sobre estas palabras de
Jesús: ―Al que te dé una bofetada en la mejilla derecha, vuélvele también la otra‖ (Mateo 5:39).
Como no desea devolver ―mal por mal a nadie‖, el sagaz refrena sus labios para no hablar
irreflexivamente (Romanos 12:17). De igual manera, cuando pasamos por alto las deshonras
que sufrimos, evitamos más discordias.
‗La lengua que cura‘
La transgresión de los labios puede causar mucho daño en un marco judicial. El rey de Israel
dice: ―El que lanza fidelidad informa lo que es justo; pero un testigo falso, engaño‖ (Proverbios
12:17). El testigo veraz lanza fidelidad porque su testimonio es fidedigno y confiable. Sus
palabras contribuyen a que se haga justicia. El testigo falso, por otro lado, está lleno de engaño
y promueve la corrupción judicial.
―Existe el que habla irreflexivamente como con las estocadas de una espada —continúa
diciendo Salomón—, pero la lengua de los sabios es una curación.‖ (Proverbios 12:18.) Las
palabras pueden penetrar y cortar tal como una espada, arruinando amistades y causando
problemas, o pueden ser agradables y contribuir a conservar los amigos. ¿Y no es cierto que
las injurias, los gritos, la crítica constante y los insultos degradantes son estocadas que infligen
profundas heridas? Todos deberíamos disculparnos sinceramente y buscar la curación de la
persona ofendida cuando fallemos en este campo.
Durante estos tiempos difíciles en que vivimos, no es de extrañar que haya muchas
personas ‗quebrantadas de corazón‘ y ‗aplastadas en espíritu‘ (Salmo 34:18). Cuando
‗hablamos confortadoramente a las almas abatidas‘ y ‗apoyamos a los débiles‘, aplicamos el
poder curativo de las palabras (1 Tesalonicenses 5:14). No hay duda de que las palabras
compasivas animarán a los adolescentes que luchan contra la presión de grupo. A los
hermanos mayores, una lengua comprensiva puede hacerles sentir que se les necesita y ama.
Las palabras amables alegrarán el día a los enfermos. Incluso la censura es más fácil de
aceptar cuando se da ―con espíritu de apacibilidad‖ (Gálatas 6:1). ¡Y cuánto poder curativo
tiene la lengua del que lleva las buenas nuevas del Reino de Dios a quienes escuchen!
‗El labio que perdura‘
Utilizando la palabra ―labio‖ como sinónimo de ―lengua‖, Salomón dice: ―El labio de la verdad
es el que será establecido firmemente para siempre, pero la lengua de falsedad no durará más
de un momento‖ (Proverbios 12:19). La expresión ―el labio de la verdad‖ es singular en hebreo
y significa mucho más que simplemente habla veraz. ―Implica cualidades como durabilidad,
permanencia y confiabilidad‖, menciona una obra de consulta. Y añade: ―El habla de esta clase
perdurará [...] para siempre porque es confiable, a diferencia de la lengua mentirosa [...] que
pudiera engañar por un momento, pero no puede prevalecer cuando se la somete a prueba‖.
―El engaño está en el corazón de los que fabrican la maldad —dice el sabio rey—, pero los
que aconsejan la paz tienen regocijo. Nada perjudicial le acaecerá al justo, pero los inicuos son
los que ciertamente estarán llenos de calamidad.‖ (Proverbios 12:20, 21.)
Quienes traman la maldad solo ocasionan dolor y sufrimiento. Por otro lado, los consejeros
de la paz sienten contentamiento por hacer lo que es debido y gozo al ver los buenos
resultados de su labor. Aún más importante, disfrutan de la aprobación de Dios, pues ―los
labios falsos son cosa detestable a Jehová, pero los que actúan en fidelidad le son un placer‖
(Proverbios 12:22).
‗El habla que encubre conocimiento‘
Señalando otra diferencia entre la persona que mide lo que dice y la que no lo hace, el rey
de Israel afirma: ―El hombre sagaz encubre conocimiento, pero el corazón de los estúpidos es
uno que proclama tontedad‖ (Proverbios 12:23).
El hombre sagaz, o prudente, sabe cuándo hablar y cuándo callar. Encubre sus
conocimientos al no alardear de lo que sabe. Pero esto no significa que siempre oculta su
conocimiento, sino que es discreto al hablar. Sin embargo, el estúpido no retiene sus labios y
enseguida da a conocer su tontedad. Por lo tanto, que nuestras palabras sean pocas y que
nuestra lengua se abstenga de jactarse.
Salomón establece un nuevo y elocuente contraste, esta vez entre la diligencia y la pereza,
al decir: ―La mano de los diligentes es la que gobernará, pero la mano floja llegará a usarse
para trabajo forzado‖ (Proverbios 12:24). El arduo trabajo puede traducirse en progreso e
independencia económica, mientras que la pereza puede resultar en trabajo forzado y
servidumbre. ―Con el tiempo —sostiene un estudioso—, el perezoso llegará a ser esclavo del
diligente.‖
‗La palabra que regocija‘
El rey Salomón vuelve al tema del habla y hace una observación muy interesante sobre la
naturaleza humana: ―La solicitud ansiosa en el corazón de un hombre es lo que lo agobia, pero
la buena palabra es lo que lo regocija‖ (Proverbios 12:25).
Hay muchas inquietudes y preocupaciones que pueden entristecer el corazón. Lo que hace
falta para aligerar esa carga y regocijar el corazón es que una persona comprensiva ofrezca
una buena palabra de ánimo. Pero ¿cómo sabrán los demás la intensidad de nuestras
inquietudes si no nos expresamos y hablamos de ello? En realidad, cuando sufrimos angustia o
depresión, necesitamos confiarnos a alguien que tenga empatía y que pueda ayudarnos.
Además, expresar con palabras cómo nos sentimos alivia parte de la angustia del corazón. Por
ello, es bueno confiarnos a nuestro cónyuge, a nuestros padres o a un amigo compasivo y
espiritualmente capacitado.
¿Verdad que no hay palabras más animadoras que las que se hallan en la Biblia? Por
eso, hemos de acercarnos a Dios meditando agradecidos en su Palabra inspirada. Dicha
reflexión ciertamente regocijará el corazón atribulado y hará brillar los ojos tristes. El salmista lo
confirma diciendo: ―La ley de Jehová es perfecta, hace volver el alma. El recordatorio de
Jehová es fidedigno, hace sabio al inexperto. Las órdenes de Jehová son rectas, hacen
regocijar el corazón; el mandamiento de Jehová es limpio, hace brillar los ojos‖ (Salmo 19:7, 8).
La senda que recompensa
El rey de Israel compara el camino del justo con el del inicuo: ―El justo espía su propio pasto,
pero el mismísimo camino de los inicuos hace que anden errantes‖ (Proverbios 12:26). El justo
es cuidadoso respecto a su propio pasto, es decir, los compañeros y amigos que escoge. Los
selecciona sabiamente, procurando evitar relaciones dañinas. Los inicuos no obran así, pues
rechazan los consejos e insisten en seguir su propio camino. Andan errantes, sin saber adónde
van.
A continuación, el rey Salomón pasa a mencionar la diferencia entre el flojo y el diligente
desde otra perspectiva. ―La flojedad no activa los animales de caza para uno —afirma él—,
pero el diligente es la riqueza preciosa de un hombre.‖ (Proverbios 12:27.) El flojo —―el
perezoso‖— no ―activa‖ su caza, es decir, no la ―pone a asar‖ (Biblia de Jerusalén
Latinoamericana). En realidad, dicha persona no puede terminar lo que empieza. La diligencia,
por otra parte, es sinónimo de riquezas.
La flojedad es tan dañina que el apóstol Pablo vio necesario escribir a los hermanos
cristianos de Tesalónica y corregir a algunos que ‗andaban desordenadamente‘, es decir, que
no hacían ningún trabajo, sino que se entremetían en lo que no les atañía. Tales individuos
imponían una carga costosa a los demás. Por eso, Pablo los aconsejó abiertamente,
exhortándolos a ‗trabajar con quietud a fin de que comieran alimento que ellos mismos
hubieran ganado‘. Y en caso de que no siguieran este firme consejo, Pablo exhortó al resto de
la congregación a que se ‗apartaran‘ de ellos, que los evitaran, al parecer, en el ámbito social
(2 Tesalonicenses 3:6-12).
Debemos tomar a pecho, no solo el consejo de Salomón sobre ser industriosos, sino
también su consejo sobre el uso apropiado de la lengua. Procuremos utilizar este pequeño
órgano para curar y regocijar a los demás evitando la transgresión de los labios y yendo tras un
proceder de justicia. ―En la senda de la justicia hay vida, y el viaje en su sendero no significa
muerte‖, nos asegura Salomón (Proverbios 12:28).
*** w04 15/7 págs. 27-31 ―Todo el que es sagaz actúa con conocimiento‖ ***
LA GUÍA que suministra la Palabra de Dios, la Biblia, ‗ha de desearse más que el oro, sí,
que mucho oro refinado‘ (Salmo 19:7-10). ¿Por qué razón? Debido a que ―la ley del sabio [es
decir, de Jehová] es fuente de vida, para apartar a uno de los lazos de la muerte‖ (Proverbios
13:14). Seguir los consejos de las Escrituras no solo mejora la calidad de nuestra vida, sino que
nos ayuda a evitar trampas que la ponen en peligro. Por lo tanto, es de suma importancia que
tratemos de adquirir conocimiento bíblico y pongamos en práctica lo que aprendamos.
En Proverbios 13:15-25, el rey Salomón, del antiguo Israel, da consejos que nos ayudan a
actuar con conocimiento a fin de gozar de una vida mejor y más larga. Valiéndose de
proverbios concisos, muestra cómo la Palabra de Dios nos ayuda a ganarnos el favor de los
demás, cumplir con fidelidad nuestro ministerio, tener la actitud apropiada hacia la disciplina y
escoger bien nuestras compañías. También explica lo sabio que es dejar una herencia a los
hijos, así como disciplinarlos con amor.
La buena perspicacia nos granjea el favor de los demás
Salomón revela: ―La buena perspicacia misma da favor, pero el camino de los de tratos
traicioneros es escarpado‖ (Proverbios 13:15). Una obra de consulta comenta que la expresión
utilizada en el idioma original para ―buena perspicacia‖, o buen entendimiento, ―se refiere a la
capacidad de conducirse con prudencia, obrar con buen juicio y expresar opiniones sabias‖.
A la persona que posee tales cualidades no le resulta difícil ganarse el favor de los demás.
Observemos la manera tan perspicaz como se comportó el apóstol Pablo con su compañero
cristiano Filemón al enviarle de vuelta a Onésimo, un esclavo fugitivo de Filemón que se había
hecho cristiano. Pablo exhortó a Filemón a que recibiera a Onésimo con bondad, tal como lo
recibiría a él mismo. De hecho, se ofreció a pagar cualquier deuda que Onésimo tuviera
pendiente con Filemón. Aunque el apóstol pudo haberse valido de su autoridad para ordenar a
Filemón que recibiera bien a su esclavo, optó por tratar el asunto con prudencia y amor. Pablo
sabía que de esa forma contaría con la cooperación de Filemón y que este se sentiría
impulsado a hacer incluso más de lo que se le había pedido. ¿No deberíamos tratar a nuestros
hermanos de la misma manera? (Filemón 8-21.)
En contraste, el camino de la persona traicionera es escarpado, o ―duro‖ (Reina-Valera,
1960). ¿En qué sentido? Según cierto biblista, la palabra utilizada aquí significa ―fuerte o firme,
y se refiere al comportamiento insensible de la gente malvada. [...] El hombre que está
arraigado en sus malos caminos y es insensible e indiferente a la sabia instrucción de otras
personas se dirige a la ruina‖.
Salomón pasa a decir: ―Todo el que es sagaz actúa con conocimiento, pero el que es
estúpido disemina tontedad‖ (Proverbios 13:16). El que una persona sea sagaz no significa que
sea astuta o taimada. El proverbio relaciona la sagacidad con el conocimiento y la prudencia de
quien piensa muy bien las cosas antes de actuar. Cuando se encara a críticas injustas o incluso
a insultos, el sagaz refrena sus labios. Ora a Jehová para que le ayude a manifestar el fruto del
espíritu a fin de no irritarse demasiado (Gálatas 5:22, 23). El prudente no permite que los
demás o la situación lo dominen. Antes bien, se mantiene calmado y evita las peleas en las que
suele verse envuelta la persona que se enoja enseguida cuando la ofenden.
El sagaz también actúa con conocimiento al tomar decisiones. Sabe que conjeturar, actuar
por impulso o sencillamente hacer lo que hacen todos rara vez produce buenos resultados. Por
eso, dedica tiempo a estudiar su situación. Analiza todos los hechos y determina qué opciones
tiene. Luego examina las Escrituras y decide qué leyes o principios bíblicos serían aplicables.
La senda de quien actúa así no se tuerce (Proverbios 3:5, 6).
―Un enviado fiel es una curación‖
A los testigos de Jehová se nos ha encomendado la responsabilidad de proclamar un
mensaje divino. Las palabras del siguiente proverbio nos ayudan a seguir cumpliendo fielmente
con nuestra comisión: ―Un mensajero que es inicuo cae en lo malo, pero un enviado fiel es una
curación‖ (Proverbios 13:17).
En este versículo se recalcan las cualidades del mensajero. ¿Qué ocurrirá si el portador del
mensaje lo distorsiona o altera con mala intención? ¿No es cierto que será castigado? Piense
en el caso de Guehazí, el servidor del profeta Eliseo. Por codicia, aquel siervo entregó un
mensaje falso a Naamán, el jefe del ejército sirio. La lepra que se le había quitado a Naamán
cayó sobre Guehazí (2 Reyes 5:20-27). ¿Qué sucede si el enviado resulta infiel y deja de
declarar el mensaje? La Biblia explica: ―[Si] tú realmente no te expres[a]s para advertir al inicuo
en cuanto a su camino, él mismo, como inicuo, morirá en su propio error, pero de tu propia
mano [yo, Jehová] reclamaré su sangre‖ (Ezequiel 33:8).
Sin embargo, el enviado fiel representa una curación para sí mismo y para quienes lo
escuchan. Pablo exhortó a Timoteo: ―Presta constante atención a ti mismo y a tu enseñanza.
Persiste en estas cosas, pues haciendo esto te salvarás a ti mismo y también a los que te
escuchan‖ (1 Timoteo 4:16). Piense en la curación que se logra gracias a la proclamación fiel
de las buenas nuevas del Reino. Se consigue despertar el interés de aquellos que tienen una
buena condición de corazón y conducirlos a la verdad que los libera (Juan 8:32). Incluso
aunque estas personas no quieran escuchar, el mensajero leal ‗ciertamente librará su propia
alma‘ (Ezequiel 33:9). Nunca descuidemos nuestra comisión de declarar las buenas nuevas
(1 Corintios 9:16), y procuremos ―predica[r] la palabra‖ sin ablandar ni dulcificar su mensaje
(2 Timoteo 4:2).
‗El que guarda la censura es glorificado‘
¿Debería una persona prudente ofenderse cuando recibe un consejo oportuno? Proverbios
13:18 asegura: ―El que descuida la disciplina para en pobreza y deshonra, pero el que guarda
una censura es el que es glorificado‖. Agradecer incluso la censura no solicitada es el proceder
sabio. Un buen consejo pudiera resultar especialmente útil cuando no nos damos cuenta de
que lo necesitamos. Prestar atención a este tipo de consejos puede evitarnos muchos
sufrimientos, incluso tragedias, mientras que pasarlo por alto nos traerá deshonra.
El encomio, cuando es merecido, resulta edificante y muy animador. Pero también debemos
esperar y aceptar la censura. Fijémonos en las dos cartas que el apóstol Pablo escribió a
Timoteo. Aunque en ellas lo encomiaba por su fidelidad, también le ofrecía una multitud de
consejos. Pablo aconsejó extensamente a este hombre más joven respecto a cómo tratar a los
miembros de la congregación, mantener la fe y una buena conciencia, cultivar devoción
piadosa y autosuficiencia, enseñar a los demás, oponerse a la apostasía y efectuar el
ministerio. Los miembros más jóvenes de la congregación deberían pedir consejo a quienes
tienen más experiencia y aceptarlo con gusto.
‗Ande con personas sabias‘
―El deseo, cuando se realiza, es placentero al alma —afirma el sabio rey—; pero es cosa
detestable a los estúpidos apartarse del mal.‖ (Proverbios 13:19.) Cierta obra de consulta dice
lo siguiente sobre el significado de este proverbio: ―Cuando una persona logra una meta o ve
cumplirse un deseo, la satisfacción invade todo su ser [...]. Puesto que alcanzar nuestro
objetivo es una experiencia sumamente placentera, se deduce que apartarse del mal debe ser
una abominación para los tontos. Las aspiraciones de estos solo se realizan recurriendo a
métodos infames, y si abandonaran el mal, nunca tendrían el placer de realizar sus deseos‖.
Por ello, es fundamental que cultivemos deseos apropiados.
Nuestras compañías ejercen una gran influencia en nuestros pensamientos, gustos y
aversiones. Salomón enuncia una verdad eterna al decir: ―El que está andando con personas
sabias se hará sabio, pero al que está teniendo tratos con los estúpidos le irá mal‖ (Proverbios
13:20). Así es, aquellos con quienes nos relacionamos, incluso mediante el entretenimiento,
Internet y la lectura, influyen en la clase de personas que somos o llegaremos a ser. Por eso,
es muy importante que elijamos nuestras compañías con prudencia.
Guárdese de aparentar
Mostrando conocimiento de la naturaleza humana, el rey de Israel observa: ―Existe el que se
da por rico y, no obstante, no tiene nada en absoluto; hay el que se da por persona de escasos
recursos y, no obstante, tiene muchas cosas valiosas‖ (Proverbios 13:7). Puede que alguien no
sea lo que aparenta. Hay personas pobres que se hacen pasar por ricas —quizás mediante
demostraciones ostentosas— para dar la impresión de que tienen éxito o simplemente para
salvar las apariencias. Y hay ricos que fingen ser pobres tan solo para ocultar su riqueza.
No es bueno hacer ostentación, pero tampoco es bueno ocultarse. Si nuestros recursos
materiales son escasos, gastar dinero en lujos tan solo para dar la impresión de que somos
ricos puede privarnos a nosotros y a nuestras familias de lo necesario para vivir. Por otro lado,
cuando alguien que es acaudalado se hace pasar por pobre, pudiera dar la impresión de ser
mezquino y verse privado de su dignidad, así como de la felicidad que produce ser generoso
(Hechos 20:35). Vivir sin aparentar es vivir mejor.
No sea ambicioso
―El rescate del alma de un hombre es su riqueza —dice Salomón—, pero el de escasos
recursos no ha oído la reprensión.‖ (Proverbios 13:8.) ¿Qué lección transmite este sabio
proverbio?
Ser rico tiene sus ventajas, pero las riquezas no siempre son una bendición. En los tiempos
turbulentos en los que vivimos, las personas acaudaladas y sus familias suelen encontrarse en
peligro de que los secuestren y retengan para solicitar un rescate. En ocasiones pueden pagar
el dinero para salvar su vida o la de un miembro de su familia; pero a menudo es inútil, porque
se asesina a los secuestrados. Tal amenaza siempre acecha a los ricos.
El hombre de escasos recursos no tiene esas preocupaciones. Aunque no posea las mismas
comodidades y bienes materiales que el rico, es menos probable que sea objetivo de
secuestradores. Ese es uno de los beneficios de no ser ambiciosos y no invertir tiempo y
energías en la búsqueda de riquezas (2 Timoteo 2:4).
Regocíjese en la ―luz‖
Salomón sigue demostrando que obedecer a Jehová es lo que más nos conviene, al decir:
―La mismísima luz de los justos se regocijará; pero la lámpara de los inicuos... se extinguirá‖
(Proverbios 13:9).
La lámpara simboliza aquello a lo que recurrimos para iluminar nuestra senda en la vida. ‗La
palabra de Dios es una lámpara para el pie del justo y una luz para su vereda.‘ (Salmo
119:105.) Contiene un caudal inagotable de conocimiento y sabiduría procedente del Creador.
Cuanto mejor comprendamos la voluntad y el propósito divinos, más brillará la luz espiritual que
nos guía. ¡Qué motivo de gozo! ¿Por qué dejarnos distraer por la sabiduría mundana o por el
―falsamente llamado ‗conocimiento‘‖? (1 Timoteo 6:20; 1 Corintios 1:20; Colosenses 2:8.)
Respecto al inicuo, sin importar lo mucho que parezca brillar su lámpara ni lo próspero que
aparente ser, su luz se extinguirá. Acabará en oscuridad, donde tropezará su pie. Además, ―no
resultará haber futuro‖ para él (Proverbios 24:20).
Sin embargo, ¿qué deberíamos hacer cuando no sabemos cómo proceder en determinada
situación? ¿Y si no estamos seguros de tener autoridad para actuar? Proverbios 13:10
advierte: ―Por la presunción solo se ocasiona una lucha‖. Actuar sin conocimiento o sin
autorización refleja insolencia y es una posible fuente de problemas. ¿No sería mejor consultar
con quienes tengan conocimiento y discernimiento? ―Con los que consultan juntos hay
sabiduría‖, asegura el sabio rey.
No albergue falsas expectativas
El dinero puede servir para un propósito útil. Contar con suficiente dinero es mejor que verse
obligado a vivir con austeridad o en la pobreza (Eclesiastés 7:11, 12). No obstante, los
aparentes beneficios de las riquezas de procedencia cuestionable son engañosos. Salomón
advierte: ―Las cosas valiosas que resultan de la vanidad decrecen, pero el que junta con la
mano es el que logra aumento‖ (Proverbios 13:11).
Tenga en cuenta, por ejemplo, la tentación del juego. Es posible que un jugador apueste
dinero —quizá fruto de su arduo trabajo— con la esperanza de ganar una gran suma. Sin
embargo, ¡con cuánta frecuencia lo hace a costa del bienestar de su familia! ¿Y qué ocurre si
gana? Dado que el dinero le ha llegado con tanta facilidad, puede que sienta poco aprecio por
su valor. Además, es muy probable que carezca de las aptitudes necesarias para administrar
su riqueza recién adquirida. ¿No desaparecerá tan rápido como la adquirió? Por otra parte, la
riqueza que se acumula de forma gradual —poco a poco, trabajando honradamente—
aumenta, y se le puede dar buen uso.
―La expectación pospuesta enferma el corazón —afirma el sabio monarca—, pero la cosa
deseada es árbol de vida cuando sí viene.‖ (Proverbios 13:12.) Las expectativas que no se
cumplen suelen producir desilusiones que enferman el corazón, y esto es algo que vemos
todos los días. Sin embargo, no sucede lo mismo en el caso de las expectativas basadas
firmemente en la Palabra de Dios. Podemos tener la plena seguridad de que se cumplirán, y ni
siquiera las aparentes demoras nos desilusionarán.
Por ejemplo, sabemos que el nuevo mundo de Dios está a las puertas (2 Pedro 3:13). Con
expectación ansiosa y gozo aguardamos el cumplimiento de las promesas divinas. ¿Qué ocurre
si en ese tiempo de espera nos mantenemos ocupados ―en la obra del Señor‖, animamos a
otros creyentes y edificamos una relación cada vez más estrecha con Jehová? En vez de
‗enfermar‘, nuestro corazón se llena de gozo (1 Corintios 15:58; Hebreos 10:24, 25; Santiago
4:8). El cumplimiento de un deseo largamente esperado se convierte en árbol de vida que de
verdad refresca y vigoriza.
La ley de Dios, fuente de vida
Para ilustrar lo necesario que es obedecer a Dios, Proverbios 13:13 dice: ―Del que ha
despreciado la palabra, de él se quitará una prenda de deudor; pero el que teme el
mandamiento es el que será recompensado‖. Si un deudor incumple su palabra y no devuelve
el préstamo, perderá lo que haya dado en prenda. De igual manera, si no obedecemos los
mandamientos de Dios, saldremos perdiendo. ¿Qué perderemos?
―La ley del sabio es fuente de vida, para apartar a uno de los lazos de la muerte.‖
(Proverbios 13:14.) Vivir sin la ley del Dios omnisapiente, Jehová, equivale a verse privado de
la guía que nos puede ayudar a vivir una vida mejor y más larga. Eso sería una pérdida
enorme. Por tanto, el proceder más sabio es prestar atención a la Palabra de Dios y permitir
que influya en nuestros pensamientos, habla y acciones (2 Corintios 10:5; Colosenses 1:10).
*** w05 15/7 págs. 17-20 ―El sagaz considera sus pasos‖ ***
*** w05 15/9 págs. 13-15 ―El temor de Jehová... eso es sabiduría‖ ***
―LA CONCLUSIÓN del asunto, habiéndose oído todo, es: Teme al Dios verdadero y guarda
sus mandamientos. Porque este es todo el deber del hombre.‖ (Eclesiastés 12:13.) A esta
profunda conclusión llegó el rey Salomón, del antiguo Israel, bajo inspiración divina. También el
patriarca Job reconoció el valor de temer a Dios, pues dijo: ―¡Mira! El temor de Jehová... eso es
sabiduría, y apartarse del mal es entendimiento‖ (Job 28:28).
La Biblia otorga una gran importancia a temer a Jehová. Pero ¿por qué es sabio cultivar
temor reverente a Dios? ¿Qué beneficios nos reporta individual y colectivamente a los siervos
de Jehová? En el capítulo 14 de Proverbios, versículos 26 a 35, encontramos la respuesta.
Produce ―fuerte confianza‖
―En el temor de Jehová hay fuerte confianza, y para sus hijos llegará a haber un refugio‖,
afirma Salomón (Proverbios 14:26). La persona que teme a Jehová confía de lleno en el Dios
leal y todopoderoso. No sorprende que mire hacia adelante con fuerte confianza, pues sabe
que le espera un futuro largo y colmado de bendiciones.
Pero ¿qué futuro les aguarda a quienes confían en los proyectos, organizaciones, ideologías
y riquezas de este mundo? Prescindiendo de cuál sea el futuro que ellos desean, en realidad
será corto, porque la Biblia dice: ―El mundo va pasando, y también su deseo, pero el que hace
la voluntad de Dios permanece para siempre‖ (1 Juan 2:17). Entonces, ¿qué sentido tiene que
estemos ‗amando al mundo o las cosas que están en el mundo‘? (1 Juan 2:15.)
¿Qué hacen los padres temerosos de Dios para asegurarse de que ―llegará a haber un
refugio‖ para sus hijos? El salmista cantó: ―Vengan, hijos, escúchenme; el temor de Jehová
es lo que les enseñaré‖ (Salmo 34:11). Si los padres enseñan a los niños a temer a Dios y les
ponen ellos mismos el ejemplo, es más probable que lleguen a ser hombres y mujeres con una
fuerte confianza en Jehová (Proverbios 22:6).
―El temor de Jehová es un pozo de vida —continúa Salomón—, para apartar de los lazos de
la muerte.‖ (Proverbios 14:27.) El temor de Jehová es ―un pozo de vida‖ porque el Dios
verdadero es ―la fuente de agua viva‖ (Jeremías 2:13). Adquirir conocimiento de Jehová y de
Jesucristo puede significar vida eterna para nosotros (Juan 17:3). Además, el temor de Dios
nos aparta de los lazos de la muerte. ¿Cómo? Proverbios 13:14 dice: ―La ley del sabio es
fuente de vida, para apartar a uno de los lazos de la muerte‖. Cuando tememos a Jehová,
obedecemos su ley y dejamos que su Palabra guíe nuestros pasos, sin duda se nos protege de
prácticas y sentimientos que nos hacen daño y que podrían conducirnos a una muerte
prematura.
―Adorno del rey‖
Durante la mayor parte de su reinado, Salomón temió y obedeció a Jehová, lo que
contribuyó a que su gobierno tuviera buenos resultados. ¿Cómo se sabe si un rey es buen
gobernante o no? Proverbios 14:28 responde: ―En la multitud de pueblo está el adorno del rey,
pero en la falta de población está la ruina del alto funcionario‖. La aptitud de un rey se mide por
el bienestar de sus súbditos. Si muchos desean permanecer bajo su dominación, será porque
es un buen dirigente. Salomón tenía ―súbditos de mar a mar [del mar Rojo al mar Mediterráneo]
y desde el Río [Éufrates] hasta los cabos de la tierra‖ (Salmo 72:6-8). Su gobernación se
caracterizó por paz y prosperidad sin precedentes (1 Reyes 4:24, 25). El reinado de Salomón
fue todo un éxito. Por otro lado, el dirigente que no cuenta con el favor popular acaba sufriendo
deshonra.
Teniendo eso presente, ¿qué puede decirse de la gloria del Salomón Mayor, el Rey
Mesiánico, Jesucristo? Pensemos en los súbditos que ya tiene hoy en día. En todo el planeta
hay más de seis millones de hombres y mujeres temerosos de Dios que han decidido vivir bajo
el dominio de Cristo. Tienen fe en Jesús y están unidos en la adoración verdadera del Dios vivo
(Juan 14:1). Al final del Reinado Milenario, todos los que estaban en la memoria de Dios
habrán resucitado. La Tierra, convertida en un paraíso, estará llena de personas justas y felices
que habrán demostrado gratitud por su Rey. Sin duda, eso constituirá un magnífico testimonio
del éxito del gobierno de Cristo. Por consiguiente, no perdamos nunca nuestra maravillosa
esperanza del Reino.
Beneficios espirituales y físicos
El temor reverente a Dios calma el corazón y tranquiliza el espíritu, porque entre las muchas
facetas de la sabiduría están el buen juicio y el discernimiento. Proverbios 14:29 dice: ―El que
es tardo para la cólera abunda en discernimiento, pero el que es impaciente está ensalzando la
tontedad‖. Si tenemos discernimiento, comprendemos que la cólera descontrolada perjudica
nuestra espiritualidad. Las ‗enemistades, las contiendas, los celos, los arrebatos de cólera y las
altercaciones‘ figuran entre las obras que podrían impedir que ‗heredáramos el reino de Dios‘
(Gálatas 5:19-21). Se nos aconseja incluso que no alberguemos ira, aunque esté justificada
(Efesios 4:26, 27). Por otra parte, la impaciencia puede llevarnos a decir o hacer cosas tontas
que luego lamentemos.
El rey de Israel señala ahora los efectos nocivos que tiene la cólera en la salud: ―Un corazón
calmado es la vida del organismo de carne, pero los celos son podredumbre a los
huesos‖ (Proverbios 14:30). La cólera y los enojos causan problemas de salud tales como
dificultades respiratorias, presión alta y trastornos hepáticos y pancreáticos. Los médicos
indican, además, que tales sentimientos negativos agravan e incluso provocan males como
úlceras, urticaria, asma, enfermedades de la piel y problemas digestivos. Por otro lado, ―la paz
del corazón fomenta la salud‖ (Proverbios 14:30, La Nueva Biblia Latinoamérica, 2004). Así,
seremos sabios si seguimos ―tras las cosas que contribuyen a la paz y las cosas que sirven
para edificación mutua‖ (Romanos 14:19).
El temor de Dios nos ayuda a ser imparciales
―El que defrauda al de condición humilde ha vituperado a su Hacedor, pero el que muestra
favor al pobre Lo glorifica‖, dice Salomón (Proverbios 14:31). La persona temerosa de Dios
reconoce que todo ser humano tiene el mismo Hacedor, Jehová Dios, por lo que ve al de
condición humilde como su prójimo y comprende que el trato que se le da a este le importa al
Creador de la humanidad. Para glorificar a Dios, debemos ser justos e imparciales con los
demás. Los cristianos de escasos recursos deben recibir atención espiritual sin parcialidad.
Y tenemos que llevar las buenas nuevas del Reino de Dios tanto a ricos como a pobres.
El sabio rey pasa a señalar otra ventaja del temor de Jehová: ―A causa de su maldad, el
inicuo será empujado abajo, pero el justo hallará refugio en su integridad‖ (Proverbios 14:32).
¿Cómo es empujado abajo el inicuo? Según algunos biblistas, eso significa que cuando
sobrevienen calamidades, el malvado no tiene ninguna posibilidad de recuperarse. El hombre
que teme a Dios, en cambio, se refugia en su integridad para con el Creador. Como confía
plenamente en Él hasta la muerte, manifiesta la misma resolución que Job, quien dijo: ―¡Hasta
que expire no quitaré de mí mi integridad!‖ (Job 27:5).
Para mantenernos íntegros, debemos tener temor de Dios y sabiduría. ¿Y dónde se halla la
sabiduría? Proverbios 14:33 responde: ―En el corazón del entendido descansa la sabiduría, y
en medio de los estúpidos llega a ser conocida‖. En efecto, se halla en el corazón del hombre
que tiene entendimiento. Pero ¿en qué sentido llega a ser conocida en medio de los necios?
Según una obra de consulta, ―el necio, en su afán de parecer sabio, suelta cosas que cree que
reflejan sabiduría, pero, al hacerlo, las convierte en necedad‖.
―Ensalza a una nación‖
Tras mostrar el efecto que tiene el temor de Dios en nosotros individualmente, el rey de
Israel pasa a mostrar el efecto que tiene en toda una nación. Dice: ―La justicia es lo que
ensalza a una nación, pero el pecado es cosa afrentosa a los grupos nacionales‖ (Proverbios
14:34). En el caso de la nación de Israel se cumplió claramente este principio. Cuando los
israelitas observaban las elevadas normas divinas, eran ensalzados por encima de las
naciones vecinas. No obstante, sus repetidos actos de desobediencia les acarrearon deshonra,
y con el tiempo, Jehová los rechazó. Este principio es aplicable de igual modo a los siervos de
Dios de la actualidad. La congregación cristiana se diferencia del mundo porque observa los
justos principios divinos. Ahora bien, para mantener esa posición elevada, cada uno de
nosotros debe llevar una vida casta. Si practicamos el pecado, sufriremos deshonra y nos
convertiremos en un oprobio para la congregación y para Dios.
Salomón expresó a continuación lo que complace a un rey: ―El placer del rey está con el
siervo que actúa con perspicacia, pero su furor llega a estar para con el que actúa
vergonzosamente‖ (Proverbios 14:35). Y Proverbios 16:13 afirma: ―Los labios de la justicia son
un placer para un rey magnífico; y él ama al que habla cosas rectas‖. Así es, nuestro Caudillo y
Rey, Jesucristo, se siente muy complacido cuando actuamos con justicia y perspicacia y
utilizamos nuestros labios en la obra de predicar el Reino y hacer discípulos. Por consiguiente,
participemos de lleno en esa obra y disfrutaremos de las bendiciones que reporta temer al Dios
verdadero.
[Nota]
En La Atalaya del 15 de noviembre de 2004, págs. 26-29, y del 15 de julio de 2005, págs. 17-
20, encontrará un análisis de Proverbios 14:1-25.
*** w04 15/11 págs. 26-29 ―La tienda de los rectos florecerá‖ ***
*** w06 1/7 págs. 13-16 ―Cualquiera que hace caso de la censura es sagaz‖ ***
―DE VERAS trae tu corazón a la disciplina, y tu oído a los dichos del conocimiento‖,
aconseja Proverbios 23:12. En este contexto, ―disciplina‖, o formación moral, abarca tanto la
autodisciplina como la reprensión que recibimos de otras personas. Exige saber la clase de
corrección que hay que dar y el modo de aplicarla; de ahí que resulte imprescindible disponer
de ―los dichos del conocimiento‖ procedentes de una fuente fiable.
El libro bíblico de Proverbios es una valiosísima fuente de dichos sabios escritos ―para
conocer uno sabiduría y disciplina, [...] para recibir la disciplina que da perspicacia, justicia y
juicio y rectitud‖ (Proverbios 1:1-3). Por eso es conveniente que les prestemos ―oído‖.
El capítulo 15 de dicho libro da consejos muy útiles sobre el control de la ira, el uso de la
lengua y la difusión del conocimiento. Analicemos algunos de sus versículos.
¿Qué es lo que ―aparta la furia‖?
Hablando sobre el efecto que las palabras tienen en la furia o la cólera, el rey Salomón del
antiguo Israel afirma: ―La respuesta, cuando es apacible, aparta la furia, pero la palabra que
causa dolor hace subir la cólera‖ (Proverbios 15:1). Los términos ―furia‖ y ―cólera‖ denotan un
enfado muy violento en que se pierde el dominio sobre sí mismo. ¿Cómo nos ayuda este
proverbio a reaccionar apropiadamente ante la ira propia o ajena?
Las palabras ásperas pueden empeorar una situación desagradable, mientras que una
respuesta apacible suele tener un efecto tranquilizador. Aun así, no siempre es fácil contestar
con amabilidad a una persona airada. Algo que ayuda es tratar de entender la causa del enojo.
―La perspicacia del hombre ciertamente retarda su cólera, y es hermosura de su parte pasar
por alto la transgresión‖, dice la Biblia (Proverbios 19:11). ¿Es posible que el enojo se deba a
que la persona es insegura o a que desea que se le preste atención? Tal vez el verdadero
motivo no tenga nada que ver con lo que hayamos dicho o hecho. Cuando encontramos a
alguien irritado en el ministerio cristiano, ¿no se debe muchas veces a que está mal informado
sobre nuestras creencias, o a que está cegado por algún prejuicio? ¿Deberíamos, entonces,
tomárnoslo de manera personal y responder con dureza? Aun si nos costara determinar la
causa del enojo, responder con palabras hirientes indicaría falta de autodisciplina. En efecto,
hay que evitar ese tipo de contestaciones.
El consejo de responder con apacibilidad es de enorme valor a la hora de dominar nuestra
propia ira. Nos será más fácil seguirlo si aprendemos a expresar nuestras emociones
sin ofender al oyente. Al tratar con miembros de la familia, procuremos expresar nuestros
sentimientos calmadamente, evitando hablar con brusquedad o de una manera que degrade a
los demás. Las agresiones verbales provocan el deseo de revancha. Cuando manifestamos
nuestros sentimientos con amabilidad, el tono de la conversación se vuelve menos acusatorio,
lo cual puede mover a la otra persona a corregir sus faltas.
―La lengua de los sabios hace el bien‖
La autodisciplina no solo incide en nuestra forma de hablar, sino también en lo que decimos.
―La lengua de los sabios hace el bien con el conocimiento, pero la boca de los estúpidos hace
salir burbujeando la tontedad‖, afirma Salomón (Proverbios 15:2). Cuando cultivamos el deseo
de ayudar al prójimo y le hablamos del propósito de Dios y sus maravillosas dádivas, ¿no
estamos ‗haciendo el bien con el conocimiento‘? En cambio, el estúpido, o necio, no puede
hacerlo porque carece de conocimiento.
Antes de proseguir con los consejos sobre el empleo de la lengua, Salomón menciona dos
grupos opuestos, lo cual nos pone a pensar: ―Los ojos de Jehová están en todo lugar, vigilando
a los malos y a los buenos‖ (Proverbios 15:3). Saber este hecho nos produce gran alegría,
pues se nos asegura que, ―en cuanto a Jehová, sus ojos están discurriendo por toda la tierra
para mostrar su fuerza a favor de aquellos cuyo corazón es completo para con él‖ (2 Crónicas
16:9). Dios sabe si estamos haciendo lo que es bueno, pero también vigila las acciones de los
malos, a quienes ajustará las cuentas.
A continuación, Salomón destaca el valor de hablar de una forma amable. ―La calma de la
lengua es árbol de vida —dice—, pero el torcimiento en ella significa un quebrantamiento del
espíritu.‖ (Proverbios 15:4.) La expresión ―árbol de vida‖ evoca las propiedades curativas y
vivificantes de los árboles (Revelación [Apocalipsis] 22:2). El habla calmada del sabio
reconforta a sus oyentes y apela a sus buenos sentimientos, mientras que una lengua
engañosa o perversa quebranta su espíritu.
Recibamos la disciplina y ‗esparzamos conocimiento‘
―Cualquiera que es tonto trata con falta de respeto la disciplina de su padre —sigue diciendo
el sabio rey—, pero cualquiera que hace caso de la censura es sagaz.‖ (Proverbios 15:5.)
¿Cómo puede alguien ―hace[r] caso de la censura‖ si no la ha recibido primero? ¿No nos indica
este pasaje que hay que aplicar disciplina correctiva cuando es necesario? En la familia, es
deber de los padres —especialmente del padre— dar disciplina, y es deber de los hijos acatarla
(Efesios 6:1-3). Sin embargo, a todos los siervos de Jehová se nos disciplina de un modo u
otro. ―Jehová disciplina a quien ama; de hecho, azota a todo aquel a quien recibe como hijo‖,
afirma Hebreos 12:6. Nuestra disposición para aceptarla indicará si somos sabios o tontos.
Salomón presenta este otro contraste: ―Los labios de los sabios siguen esparciendo
conocimiento, pero el corazón de los estúpidos no es así‖ (Proverbios 15:7). Difundir el
conocimiento es como esparcir la semilla. El agricultor no deposita todas las semillas en un
solo lugar, sino que las va esparciendo en cantidades pequeñas por todo el terreno. Así sucede
con el conocimiento. Por ejemplo, cuando conversamos con alguien en el ministerio, no sería
prudente decirle de golpe todo lo que sabemos de la Biblia. El sabio es disciplinado al hablar;
‗esparce‘ el conocimiento enseñando una verdad bíblica a la vez y edificando sobre ella, según
la reacción del oyente. Así lo hizo nuestro modelo, Jesucristo, cuando habló con la samaritana
(Juan 4:7-26).
Impartir conocimiento supone decir algo instructivo y útil. Si queremos enseñar y animar con
nuestras palabras, es necesario reflexionar sobre lo que vamos a decir. Es por esta razón por
la que ―el corazón del justo medita para responder‖ (Proverbios 15:28). ¡Qué importante es que
nuestras palabras sean como la lluvia suave y provechosa que empapa el suelo, y no como un
torrente inoportuno que arrolla todo lo que encuentra a su paso!
‗Santos en conducta‘
Esparcir el conocimiento de Jehová y su propósito y ofrecerle ―el fruto de labios‖ como
―sacrificio de alabanza‖ es sin duda el proceder sabio (Hebreos 13:15). Pero para que Dios
acepte nuestro sacrificio, debemos ser ‗santos en toda nuestra conducta‘ (1 Pedro 1:14-16).
Valiéndose de ideas opuestas, Salomón destaca poderosamente dicha verdad en los
siguientes dos proverbios: ―El sacrificio de los inicuos es cosa detestable a Jehová, pero la
oración de los rectos le es un placer. El camino del inicuo es cosa detestable a Jehová, pero él
ama al que sigue tras la justicia‖ (Proverbios 15:8, 9).
¿Cómo consideran la censura quienes abandonan el camino de la vida, y cuál será su
destino? (Mateo 7:13, 14.) ―La disciplina le es mala al que deja la senda; cualquiera que odia la
censura morirá.‖ (Proverbios 15:10.) En lugar de aceptar la corrección de los ancianos
cristianos y arrepentirse de corazón, algunos que se han entregado a la maldad optan por
abandonar la senda de la justicia. ¡Qué gran insensatez! Se cumplen en ellos las palabras de
este proverbio, según la versión de Salvatore Garofalo: ―Al que deja el buen camino
corresponde una corrección severa; el que odia la admonición perecerá‖.
¿Y si alguien simula que acepta la reprensión cuando, en realidad, la odia? Esto también
sería una insensatez. ―El Seol y el lugar de la destrucción están enfrente de Jehová —afirma el
rey de Israel—. ¡Cuánto más los corazones de los hijos de la humanidad!‖ (Proverbios 15:11.)
Hablando en sentido figurado, nada hay más alejado del Dios vivo que el Seol, el lugar donde
están los muertos, y, sin embargo, este se halla enfrente de él. Jehová conoce la identidad y la
personalidad de todos los que allí se encuentran y puede resucitarlos (Salmo 139:8; Juan
5:28, 29). ¡Qué fácil es para Jehová conocer lo que hay en los corazones humanos! Como
escribió el apóstol Pablo, ―todas las cosas están desnudas y abiertamente expuestas a los ojos
de aquel a quien tenemos que dar cuenta‖ (Hebreos 4:13). Así es, las apariencias pueden
engañar a los hombres, pero no a Dios.
Quien rechaza la disciplina no solo odia la reprensión, sino que también desprecia al que lo
reprende. ―El burlador no ama al que le censura‖, dice Salomón, y amplía la idea con este
pensamiento paralelo: ―A los sabios no quiere ir‖ (Proverbios 15:12). ¡Qué pocas esperanzas
tiene tal persona de enderezar sus pasos!
Actitud positiva
La referencia a la palabra corazón vincula los siguientes tres proverbios. Hablando de cómo
repercuten las emociones en el rostro, el sabio rey Salomón dijo: ―Un corazón gozoso tiene
buen efecto en el semblante, pero a causa del dolor del corazón hay un espíritu herido‖
(Proverbios 15:13).
¿Qué causa dolor de corazón? ―La solicitud ansiosa en el corazón de un hombre es lo que lo
agobia [de tristeza]‖, dice la Biblia (Proverbios 12:25). ¿Cómo evitar, entonces, que los
sinsabores de la vida nos descorazonen? En vez de pensar demasiado en las cosas que están
fuera de nuestro control, podemos meditar en las abundantes bendiciones espirituales que
Jehová nos ha concedido y en lo que él hará por nosotros en el futuro. Así nos acercaremos
más a él, el ―Dios feliz‖, lo que sin duda nos alegrará el corazón (1 Timoteo 1:11).
Además, el mensaje de la Biblia es una magnífica fuente de aliento y placer. El salmista
pronunció feliz al hombre cuyo ―deleite está en la ley de Jehová, y día y noche lee en su ley en
voz baja‖ (Salmo 1:1, 2). Aun si nuestro corazón está sufriendo, leer la Biblia y meditar en ella
nos animará. El ministerio que Dios nos ha encomendado también es una fuente de alegría.
Se nos asegura que ―los que siembran con lágrimas segarán aun con clamor gozoso‖ (Salmo
126:5).
―El corazón entendido es el que busca el conocimiento, pero la boca de los estúpidos es la
que aspira a la tontedad‖, dice Salomón (Proverbios 15:14). Este proverbio pone de relieve el
marcado contraste que hay entre el consejo del sabio y el consejo del necio. Antes de
aconsejar, la persona que tiene un corazón entendido busca el conocimiento. Escucha con
atención y se familiariza con los hechos. Además, como busca en las Escrituras las leyes y
principios pertinentes, sus consejos se fundan sólidamente en la Palabra de Dios. Por otra
parte, el necio no se molesta en averiguar los hechos y dice lo primero que se le ocurre. Por
eso, cuando necesitemos pedir consejo, consultemos a los que tienen conocimiento y madurez,
no a los que tienden a decirnos lo que queremos oír. ¡Cuánto nos alegra contar en la
congregación cristiana con ―dádivas en hombres‖, que ―busca[n] el conocimiento‖ antes de
aconsejar! (Efesios 4:8.)
El siguiente proverbio menciona uno de los grandes beneficios de tener una actitud positiva.
Dice el rey de Israel: ―Todos los días del afligido son malos; pero el que es bueno de corazón
tiene un banquete constantemente‖ (Proverbios 15:15). La vida tiene sus altibajos, sus alegrías
y sus tristezas. Si nos fijamos solo en las cosas negativas, el dolor se adueñará de nuestros
pensamientos, y todos nuestros días serán sombríos. Pero si dejamos que los beneficios que
hemos recibido y la esperanza que Dios nos ha dado dominen nuestra mente, las penas
quedarán relegadas a un segundo plano y nos sentiremos felices. En efecto, una actitud
positiva nos permite tener ―un banquete constantemente‖.
Por lo tanto, tengamos en alta estima la disciplina. Dejemos que influya no solo en nuestras
emociones, palabras y actos, sino también en nuestra actitud ante la vida.
*** w06 1/8 págs. 16-20 El temor de Dios ―es disciplina hacia la sabiduría‖ ***
*** w07 15/5 págs. 17-20 ―Tus planes serán firmemente establecidos‖ ***
EN UNO de sus salmos, David suplicó a Jehová: ―Crea en mí hasta un corazón puro, oh
Dios, y pon en mí un espíritu nuevo, uno que sea constante. Restáurame, sí, el alborozo de la
salvación por ti, y quieras sostenerme aun con un espíritu bien dispuesto‖ (Salmo 51:10, 12).
Arrepentido del pecado que cometió con Bat-seba, David le rogó a Jehová en estos versículos
que le limpiara el corazón y pusiera en él un espíritu, o inclinación mental, que le permitiera
hacer lo correcto.
¿Es cierto que Jehová crea en nosotros un corazón nuevo o incluso que pone en nosotros
un espíritu nuevo y dispuesto? ¿O es un corazón puro algo que debemos esforzarnos por
adquirir y proteger? ―Jehová es el examinador de los corazones‖, pero ¿hasta qué punto
interviene en lo que ocurre en nuestro interior? (Proverbios 17:3; Jeremías 17:10.) ¿Hasta qué
grado influye él en nuestra vida, motivos y acciones?
Los primeros nueve versículos del capítulo 16 de Proverbios, en los que el nombre divino
aparece ocho veces, muestran cómo permitir que Dios dirija nuestra vida, a fin de que ‗nuestros
planes sean firmemente establecidos‘ (Proverbios 16:3). Por su parte, los versículos 10 a 15 se
centran en las responsabilidades de un rey o un gobernante.
Los ―planes en el corazón‖: ¿quién debe hacerlos?
―Del hombre es hacer planes en el corazón‖, dice Proverbios 16:1a según la versión Reina-
Valera de 1995. Es obvio que los planes que hacemos en el corazón son nuestra
responsabilidad. Jehová no prepara nuestro corazón de manera milagrosa ni nos da un espíritu
dispuesto. Por lo tanto, tenemos que esforzarnos por obtener un conocimiento exacto de su
Palabra, la Biblia, meditar en lo que aprendemos y armonizar nuestros pensamientos con los
suyos (Proverbios 2:10, 11).
Sin embargo, la petición de David de ―un corazón puro‖ y ―un espíritu nuevo‖ es evidencia de
que reconocía su tendencia al pecado y la necesidad que tenía de que Jehová lo ayudara a
limpiar su corazón. Debido a la imperfección, podemos vernos tentados a ceder a ―las obras de
la carne‖ (Gálatas 5:19-21). Por eso, necesitamos la ayuda de Jehová para ―amortig[uar] los
miembros de [nuestro] cuerpo que están sobre la tierra en cuanto a fornicación, inmundicia,
apetito sexual, deseo perjudicial y codicia‖ (Colosenses 3:5). Es imprescindible que le pidamos
fortaleza a fin de resistir la tentación y eliminar de nuestro corazón las inclinaciones al pecado.
¿Podemos ayudar a otras personas a hacer buenos ‗planes en su corazón‘? La Biblia
declara: ―Existe el que habla irreflexivamente como con las estocadas de una espada, pero la
lengua de los sabios es una curación‖ (Proverbios 12:18). ¿Cuándo tienen nuestras palabras
un efecto curativo? Solo cuando ―de Jehová procede la respuesta de la lengua‖, es decir,
cuando lo que decimos transmite correctamente la verdad bíblica (Proverbios 16:1b).
La Biblia afirma: ―El corazón es más traicionero que cualquier otra cosa, y es desesperado‖
(Jeremías 17:9). Nuestro corazón simbólico tiende a justificarse y a engañarse. Consciente de
este peligro, el rey Salomón del antiguo Israel advierte: ―Todos los caminos del hombre son
puros a sus propios ojos, pero Jehová está avaluando los espíritus‖ (Proverbios 16:2).
Un excesivo amor propio podría llevarnos a justificar nuestros errores, a disimular defectos
de personalidad y a cegarnos a nuestra propia maldad. Pero a Jehová no podemos engañarlo.
Él está ―avaluando los espíritus‖. El espíritu de una persona es su inclinación mental
predominante, y está ligado al corazón. Las cualidades del espíritu dependen, en buena
medida, de la actividad del corazón simbólico, es decir, de los pensamientos, sentimientos y
motivos. El espíritu es lo que ―el examinador de los corazones‖ evalúa, y el juicio de este
examinador está libre de favoritismo y parcialidad. Por consiguiente, hacemos bien en proteger
nuestro espíritu.
―Haz rodar sobre Jehová mismo tus obras‖
Planificar implica pensar, una actividad propia de nuestro corazón simbólico. Por lo general,
los planes preceden a las acciones. ¿Lograremos alcanzar nuestros objetivos? Salomón
responde: ―Haz rodar sobre Jehová mismo tus obras, y tus planes serán firmemente
establecidos‖ (Proverbios 16:3). Hacer rodar sobre Jehová nuestras obras supone confiar en él
y en que él nos cuidará. Es como si hiciéramos rodar una carga de nuestros hombros y la
descargáramos sobre los suyos. El salmista cantó: ―Haz rodar sobre Jehová tu camino, y fíate
de él, y él mismo obrará‖ (Salmo 37:5).
Ahora bien, si queremos que nuestros planes queden firmemente establecidos, deben
armonizar con la Palabra de Dios y brotar de buenos motivos. Además, tenemos que rogarle a
Jehová su ayuda y apoyo, y esforzarnos por seguir los consejos bíblicos. En especial, es
importante que ‗arrojemos nuestra carga sobre Jehová‘ al enfrentarnos a problemas o
dificultades, pues ―él [nos] sustentará‖. En efecto, ―nunca permitirá que tambalee el justo‖
(Salmo 55:22).
―Todo lo ha hecho Jehová para su propósito‖
¿Qué más podemos esperar si hacemos rodar sobre Jehová nuestras obras? ―Todo lo ha
hecho Jehová para su propósito‖, dice el sabio rey (Proverbios 16:4a). El Creador del universo
es un Dios de propósito. Cuando hacemos rodar nuestras obras sobre él, nuestra vida deja de
ser inútil y vacía, y adquiere propósito y sentido. Recordemos que el propósito de Jehová para
la Tierra y para la humanidad es eterno (Efesios 3:11). Dios formó la Tierra y la creó ―para ser
habitada‖ (Isaías 45:18). Y todo lo que originalmente se propuso para la humanidad se cumplirá
sin falta (Génesis 1:28). Por lo tanto, si nos dedicamos al Dios verdadero, disfrutaremos de una
vida plena por toda la eternidad.
Jehová ha hecho ―hasta al inicuo para el día malo‖ (Proverbios 16:4b). Por supuesto, Dios
no creó a los malvados, pues ―perfecta es su actividad‖ (Deuteronomio 32:4). Pero sí les ha
permitido llegar a existir y continuar viviendo hasta que él considere oportuno ejecutar su
sentencia contra ellos. Por ejemplo, Jehová le dijo a Faraón en Egipto: ―Por esta causa te he
mantenido en existencia, a fin de mostrarte mi poder y para que mi nombre sea declarado en
toda la tierra‖ (Éxodo 9:16). Las diez plagas y la destrucción de Faraón y su ejército en el mar
Rojo fueron, sin lugar a dudas, inolvidables manifestaciones del extraordinario poder de Dios.
Jehová también puede controlar la situación de modo que los malvados, sin darse cuenta,
colaboren con Su propósito. El salmista le dirigió estas palabras: ―La misma furia del hombre te
elogiará; lo restante de la furia lo ceñirás sobre ti‖ (Salmo 76:10). Jehová quizás permita a sus
enemigos descargar su cólera contra quienes le sirven, pero solo hasta el punto necesario para
disciplinar e instruir a su pueblo. Dios cargará con ―lo restante‖, es decir, con todo lo que
exceda de dicho límite.
Jehová sostiene a sus siervos humildes, pero ¿cómo considera a las personas orgullosas y
arrogantes? ―Todo el que es orgulloso de corazón es cosa detestable a Jehová —dice el rey de
Israel—. Mano puede unirse a mano; no obstante, uno no quedará libre de castigo.‖
(Proverbios 16:5.) Los ―orgulloso[s] de corazón‖ pueden hacer causa común para apoyarse,
pero eso no los librará del castigo. Por lo tanto, con independencia de la educación, las
habilidades o los privilegios de servicio que tengamos, lo más sensato es que cultivemos la
humildad.
―En el temor de Jehová‖
Puesto que todos hemos nacido en pecado, somos propensos a equivocarnos (Romanos
3:23; 5:12). ¿Qué nos ayudará a no hacer planes que nos conduzcan a un mal camino?
Proverbios 16:6 responde: ―Por bondad amorosa y apego a la verdad se expía el error, y en el
temor de Jehová uno se aparta de lo malo‖. Si bien es cierto que Jehová expía nuestros
pecados por su bondad amorosa y amor a la verdad, es nuestro temor reverente lo que nos
disuade de pecar. Por lo tanto, además de amar a Dios y sentir gratitud por su bondad
amorosa, es vital que cultivemos temor a desagradarle.
El temor de Dios nace en nuestro corazón como resultado de la admiración y el respeto que
sentimos por su imponente poder. ¡Tan solo piense en el poder que se refleja en su creación!
El patriarca Job corrigió su modo de pensar cuando se le recordó cómo se manifestó el poder
divino en la creación (Job 42:1-6). ¿No nos sentimos igual al leer y meditar sobre la relación de
Jehová con su pueblo, tal como se describe en la Biblia? El salmista cantó: ―Vengan y vean las
actividades de Dios. Su trato con los hijos de los hombres es inspirador de temor‖ (Salmo 66:5).
Jamás demos por sentada la bondad amorosa de Jehová. Cuando los israelitas ―se rebelaron e
hicieron que su espíritu santo se sintiera herido [...,] él fue cambiado en enemigo de ellos; él
mismo guerreó contra ellos‖ (Isaías 63:10). En cambio, ―cuando Jehová se complace en los
caminos de un hombre, hace que hasta los enemigos mismos de este estén en paz con él‖
(Proverbios 16:7). ¡Cuánto nos protege el temor de Jehová!
―Mejor es un poco con justicia que una abundancia de productos sin rectitud‖, dice el sabio
rey (Proverbios 16:8). Proverbios 15:16 declara: ―Mejor es un poco en el temor de Jehová que
una abundante provisión y, junto con ella, confusión‖. No hay duda de que el temor reverencial
a Dios es imprescindible para mantenernos en la senda de la justicia.
―El corazón del hombre terrestre puede idear su camino‖
El ser humano fue creado con libre albedrío, con la capacidad de elegir entre lo bueno y lo
malo (Deuteronomio 30:19, 20). Nuestro corazón simbólico es capaz de plantearse diferentes
opciones y decidirse por una o por varias de ellas. Tomar decisiones es responsabilidad
nuestra. Así lo indica Salomón cuando dice: ―El corazón del hombre terrestre puede idear su
camino‖. Y una vez tomada la decisión, ―la dirección de sus pasos la efectúa Jehová mismo‖
(Proverbios 16:9). Puesto que Jehová puede guiar nuestros pasos, es prudente que
busquemos su ayuda a fin de que ‗nuestros planes sean firmemente establecidos‘.
Como hemos visto, el corazón es traicionero y puede tejer razonamientos falsos. Por
ejemplo, el de alguien que comete un pecado podría buscar justificaciones. En lugar de
abandonar su senda pecaminosa, la persona tal vez diga en su corazón que, como Dios es tan
amoroso, bondadoso, misericordioso e indulgente, él ‗ha olvidado, ha ocultado su rostro y
ciertamente nunca lo verá‘ (Salmo 10:11). Sin embargo, abusar de la misericordia de Dios es
un error muy peligroso.
―Indicador y balanza justos pertenecen a Jehová‖
Salomón deja de hablar del corazón y las acciones del hombre común y pasa a referirse a
las características que un rey ha de tener: ―Decisión inspirada debe estar sobre los labios de un
rey; en el juicio no debe resultar infiel su boca‖ (Proverbios 16:10). Sin duda, estas palabras se
cumplirán en el entronizado Rey Jesucristo, pues él gobernará la Tierra en armonía con la
voluntad divina.
Salomón identifica la fuente de la justicia y la rectitud al decir: ―Indicador y balanza justos
pertenecen a Jehová; todas las pesas de piedra de la bolsa son su obra‖ (Proverbios 16:11).
Jehová es quien proporciona ‗indicadores y balanzas justos‘. No se trata de pautas surgidas del
capricho de un rey. Cuando Jesús estuvo en la Tierra, dijo: ―No puedo hacer ni una sola cosa
por mi propia iniciativa; así como oigo, juzgo; y el juicio que yo dicto es justo, porque no busco
mi propia voluntad, sino la voluntad del que me envió‖. Así que esperamos justicia perfecta del
Hijo, a quien el Padre ―ha encargado todo el juicio‖ (Juan 5:22, 30).
¿Qué más podemos esperar de un rey que representa a Jehová? ―El hacer iniquidad es
cosa detestable a los reyes, pues por la justicia se establece firmemente el trono‖, señala el rey
de Israel (Proverbios 16:12). El Reino mesiánico se rige por los principios justos de Dios, pues
no tiene alianza alguna con ―el trono que causa adversidades‖ (Salmo 94:20; Juan 18:36;
1 Juan 5:19).
Obtengamos la buena voluntad del rey
¿Cómo deberían comportarse los súbditos de un rey majestuoso? Salomón declara: ―Los
labios de la justicia son un placer para un rey magnífico; y él ama al que habla cosas rectas.
La furia de un rey significa mensajeros de muerte, pero el hombre sabio es el que la evita‖
(Proverbios 16:13, 14). Los siervos de Jehová de la actualidad se toman a pecho estas
palabras y se mantienen activos en la obra de predicar el Reino y hacer discípulos (Mateo
24:14; 28:19, 20). Saben que al usar sus labios de este modo complacen al Rey Mesiánico,
Jesucristo. Si no desagradar a un rey humano poderoso y buscar su favor es un proceder
sabio, ¡cuánto más sensato es tratar de obtener la aprobación del Rey Mesiánico!
―En la luz del rostro del rey hay vida —sigue diciendo Salomón—, y su buena voluntad es
como la nube de lluvia primaveral.‖ (Proverbios 16:15.) ―La luz del rostro del rey‖ representa su
favor, tal como ‗la luz del rostro de Jehová‘ denota el favor divino (Salmo 44:3; 89:15). Al igual
que las nubes cargadas de lluvia garantizan el agua necesaria para que crezcan los cultivos, la
buena voluntad de un rey es prueba de que cosas buenas están por venir. La vida bajo el
Reino mesiánico estará colmada de bendiciones y prosperidad, tal como ocurrió, en menor
escala, durante el reinado de Salomón (Salmo 72:1-17).
Mientras esperamos que el Reino de Dios asuma el control de todos los asuntos bajo el sol,
busquemos la ayuda de Jehová para limpiar nuestro corazón. Además, cifremos nuestra
confianza en él y cultivemos temor reverente. Entonces podremos tener la plena seguridad de
que nuestros ―planes serán firmemente establecidos‖ (Proverbios 16:3).
*** w07 15/7 págs. 8-12 ―La sabiduría es para una protección‖ ***
PROVERBIOS 16:16 afirma: ―El conseguir sabiduría es ¡oh, cuánto mejor que el oro! Y el
conseguir entendimiento ha de escogerse más que la plata‖. ¿Por qué es tan valiosa la
sabiduría? ―Porque la sabiduría es para una protección lo mismo que el dinero es para una
protección; pero la ventaja del conocimiento es que la sabiduría misma conserva vivos a sus
dueños.‖ (Eclesiastés 7:12.) Ahora bien, ¿cómo logra la sabiduría conservar vivos a sus
dueños?
Adquirir sabiduría divina —es decir, obtener conocimiento exacto de la Palabra de Dios, la
Biblia, y luego actuar en armonía con ella— nos ayuda a vivir de la forma que agrada a Jehová
(Proverbios 2:10-12). Salomón, rey del antiguo Israel, declaró: ―La calzada de los rectos es
apartarse de lo malo. El que está salvaguardando su camino está guardando su alma‖
(Proverbios 16:17). En efecto, la sabiduría libra del mal camino a quienes la poseen y los
conserva vivos. Los breves pero sabios consejos registrados en Proverbios 16:16-33 ponen de
relieve la influencia tan positiva que la sabiduría divina puede ejercer sobre nuestra forma de
ser, así como sobre nuestras palabras y acciones.
‗Seamos humildes de espíritu‘
En la Biblia, la sabiduría personificada dice lo siguiente: ―El propio ensalzamiento y el
orgullo [...] he odiado‖ (Proverbios 8:13). El orgullo y la sabiduría son polos opuestos.
Es preciso que actuemos con sabiduría y procuremos no volvernos altivos o arrogantes. A este
respecto deben estar especialmente alerta aquellos a quienes les ha ido bien en determinados
aspectos de la vida o se les ha confiado un puesto de responsabilidad en la congregación.
Proverbios 16:18 nos advierte: ―El orgullo está antes de un ruidoso estrellarse; y un espíritu
altivo, antes del tropiezo‖. Piense en la caída más estrepitosa de la historia: la de un hijo
perfecto de Dios, el ser espiritual que se convirtió a sí mismo en Satanás (Génesis 3:1-5;
Revelación [Apocalipsis] 12:9). ¿Acaso no manifestó él un espíritu altivo antes de su caída? La
Biblia hace referencia a esto al recomendar que no se nombre para un puesto de
superintendencia en la congregación a un hermano recién convertido, ―por temor de que se
hinche de orgullo y caiga en el juicio pronunciado contra el Diablo‖ (1 Timoteo 3:1, 2, 6).
Es vital, por lo tanto, que no alimentemos el orgullo de otras personas ni permitamos que se
desarrolle ese defecto en nuestro corazón.
En Proverbios 16:19 leemos: ―Mejor es ser humilde de espíritu con los mansos que dividir el
despojo con los que a sí mismos se ensalzan‖. El caso del rey Nabucodonosor de Babilonia
demuestra que esta afirmación es muy sabia. Este hombre erigió orgullosamente una colosal
estatua, quizá una representación de sí mismo, en la llanura de Dura. La estatua, que
probablemente estaba colocada sobre un pedestal muy alto, alcanzaba unos 27 metros (90
pies) de altura (Daniel 3:1). Nabucodonosor pretendía que este monumento constituyera un
símbolo imponente de su imperio. Ahora bien, puede que las cosas altas y encumbradas —
como estatuas, obeliscos, torres o rascacielos— logren impresionar a los seres humanos, pero
no así a Dios. El salmista cantó: ―Jehová es alto, y, no obstante, al humilde lo ve; pero al
altanero lo conoce solo de distancia‖ (Salmo 138:6). De hecho, ―lo que entre los hombres es
encumbrado, cosa repugnante es a la vista de Dios‖ (Lucas 16:15). Es mejor dejarnos ―llevar
con las cosas humildes‖ que tener ―la mente puesta en cosas encumbradas‖ (Romanos 12:16).
Hablemos con perspicacia y de forma persuasiva
¿Cómo influye en nuestra forma de hablar el que adquiramos sabiduría? El sabio rey nos
explica: ―El que está mostrando perspicacia en un asunto hallará el bien, y feliz es el que está
confiando en Jehová. El que es sabio de corazón será llamado entendido, y el que es dulce de
labios añade persuasiva. A sus dueños la perspicacia es un pozo de vida; y la disciplina de los
tontos es la tontedad. El corazón del sabio hace que su boca muestre perspicacia, y a sus
labios añade persuasiva‖ (Proverbios 16:20-23).
La sabiduría nos permite hablar con perspicacia y persuasión. ¿Por qué? Porque quien es
sabio de corazón procura ‗hallar el bien‘ en los asuntos y ‗confía en Jehová‘. Si nos esforzamos
por ver las cosas buenas de los demás, nos sentiremos más inclinados a hablar bien de ellos.
Nuestra forma de hablar, en lugar de ser áspera o polémica, será dulce y persuasiva. Cuando
analizamos las circunstancias que rodean a cada persona, comprendemos qué dificultades
afronta y cómo las está sobrellevando.
Igual de importante es hablar con sabiduría cuando participamos en la obra de predicar el
Reino y hacer discípulos. El objetivo que perseguimos al enseñar la Palabra de Dios a otras
personas no es simplemente transmitirles información bíblica, sino llegarles al corazón. Para
lograrlo tenemos que expresarnos de forma persuasiva. El apóstol Pablo exhortó a su
compañero Timoteo a continuar en las cosas que fue ―persuadido a creer‖ (2 Timoteo 3:14, 15).
El término griego que se traduce ―persuadir‖ significa ―induc[ir] un cambio [en la] manera de
pensar mediante la influencia de la razón o de consideraciones morales‖ (Diccionario expositivo
de palabras del Antiguo y del Nuevo Testamento exhaustivo, de W. E. Vine). Para exponer
argumentos convincentes, capaces de inducir un cambio de ideas en quienes nos escuchan,
necesitamos comprender en profundidad su forma de pensar, así como sus intereses,
circunstancias y antecedentes. ¿Cómo se obtiene dicha comprensión, o perspicacia?
El discípulo Santiago nos da la respuesta: siendo ―presto en cuanto a oír, lento en cuanto a
hablar‖ (Santiago 1:19). Si logramos que la persona se exprese y prestamos cuidadosa
atención a lo que dice, podremos averiguar qué piensa y cómo es en realidad.
El apóstol Pablo poseía una habilidad extraordinaria para persuadir a otras personas
(Hechos 18:4). Tanto era así que un platero llamado Demetrio, opositor del cristianismo, tuvo
que reconocer: ―No solo en Éfeso, sino en casi todo el distrito de Asia, este Pablo ha
persuadido a una muchedumbre considerable y los ha vuelto a otra opinión‖ (Hechos 19:26).
¿Se atribuyó Pablo el mérito por su eficacia en la predicación? Ni mucho menos. Para él, su
predicación constituía ―una demostración de[l] espíritu y [...] el poder de Dios‖ (1 Corintios
2:4, 5). Nosotros también contamos con la ayuda del espíritu santo de Dios. Como confiamos
en Jehová, estamos seguros de que bendice nuestros esfuerzos por hablar con perspicacia y
de forma persuasiva en el ministerio.
No es de extrañar que ―el que es sabio de corazón‖ sea calificado de ―inteligente‖ o
―prudente‖ (Proverbios 16:21, Nueva Versión Internacional; Reina-Valera, 1960). En efecto, la
perspicacia es ―un pozo de vida‖ para quienes tienen esta cualidad. Ahora bien, ¿qué hay de
los tontos, o necios? Ellos ‗desprecian la sabiduría y la disciplina‘ (Proverbios 1:7). ¿Y qué
resultados cosechan por rechazar la disciplina de Jehová? Como vimos antes, Salomón dijo:
―La disciplina de los tontos es la tontedad‖ (Proverbios 16:22). Estas personas reciben mayor
disciplina, muchas veces en forma de castigos severos. También es posible que los necios se
acarreen diversas dificultades, vergüenza, enfermedades o hasta una muerte prematura.
El rey de Israel profundizó aún más en el buen efecto que tiene la sabiduría en nuestra
forma de hablar. Afirmó lo siguiente: ―Los dichos agradables son un panal de miel, dulces al
alma y una curación a los huesos‖ (Proverbios 16:24). Al igual que la miel es dulce y satisface
rápidamente a quien está hambriento, las palabras agradables resultan animadoras y
reconfortantes. Además, tal como dicha sustancia beneficia nuestra salud física por sus
múltiples propiedades —algunas de ellas curativas—, los dichos agradables también son
saludables en sentido espiritual (Proverbios 24:13, 14).
Cuidado con el ‗camino que parece recto‘
―Existe un camino que es recto delante del hombre, pero los caminos de la muerte son el fin
de él después‖, dijo Salomón (Proverbios 16:25). Estas palabras nos previenen contra el peligro
de razonar equivocadamente y concluir que es mejor vivir de una forma contraria a la ley divina.
Desde una perspectiva humana imperfecta, quizá nos parezca que cierto comportamiento es
admisible, cuando en realidad va en contra de los justos principios de la Palabra de Dios.
De hecho, Satanás puede valerse de tal engaño para lograr que alguien emprenda un camino
que le parece correcto, pero que realmente conduce a la muerte.
La mejor manera de evitar engañarnos a nosotros mismos es tener un corazón sabio y
entendido, además de una conciencia educada por el conocimiento de la Palabra de Dios. Así
es, para no engañarnos al tomar decisiones —sea sobre cuestiones de moralidad, nuestro
servicio a Dios o cualquier otro asunto—, debemos guiarnos por las normas de Dios, por lo que
él dice sobre lo que está bien y lo que está mal.
―El apetito de un trabajador hace que siga trabajando‖
El sabio rey continúa diciendo: ―El alma del que trabaja duro ha trabajado duro para él,
porque su boca lo ha apremiado fuertemente‖ (Proverbios 16:26). Salomón declara que el
deseo de alimentarse que siente el trabajador ‗trabaja duro para él‘, pues el hambre ‗lo
apremia‘, o impulsa. La Palabra de Dios para Todos vierte así ese versículo: ―El apetito de
un trabajador hace que siga trabajando; el hambre lo hace trabajar‖. Un deseo normal, como es
el apetito, es beneficioso si nos estimula a ser productivos. Sin embargo, si permitimos que
cualquier deseo natural crezca exageradamente hasta convertirse en codicia, el resultado será
el mismo que cuando una hoguera que se enciende para cocinar se transforma en un incendio
arrasador. Así es, la codicia —el deseo descontrolado— tiene efectos destructivos. Por eso, la
persona sabia se da cuenta del peligro latente y mantiene bajo control incluso sus deseos
legítimos.
No vayamos ―por un camino que no es bueno‖
Las palabras que salen de nuestra boca pueden ser tan devastadoras como un incendio.
Salomón advirtió sobre las consecuencias de buscar y divulgar los defectos ajenos: ―Un
hombre que para nada sirve desentierra lo que es malo, y sobre sus labios hay, por decirlo así,
un fuego abrasador. El hombre de intrigas sigue enviando contienda, y el calumniador está
separando a los que se han familiarizado entre sí‖ (Proverbios 16:27, 28).
Quien intenta arruinar la reputación de su semejante ‗no sirve para nada‘. Debemos tratar de
encontrar lo bueno de los demás y decir cosas que hagan que otras personas los respeten. Por
otro lado, ¿estaría bien que prestáramos oído a los que difunden chismes? Estos comentarios
hacen mucho daño y crean sospechas infundadas, lo cual enfría las amistades y genera
divisiones dentro de la congregación. Si somos sabios, no escucharemos a tales personas.
Salomón nos previene a continuación contra algo que puede inducirnos a seguir un mal
rumbo en la vida: ―El hombre de violencia seduce a su prójimo, y ciertamente lo hace ir por un
camino que no es bueno. Con los ojos parpadea para tramar intrigas. Apretando los labios,
ciertamente lleva a cabo a grado cabal la maldad‖ (Proverbios 16:29, 30).
¿Puede la violencia ejercer su poder de seducción sobre los verdaderos siervos de Dios?
Vivimos en un mundo que ha seducido a muchas personas para que ‗tramen intrigas‘,
promoviendo o cometiendo diversos actos violentos. Quizás no nos resulte difícil evitar la
participación directa en la violencia. Pero ¿se nos puede seducir por medios más sutiles?
¿Acaso no atraen a millones de personas los deportes y diversas formas de entretenimiento
que ensalzan la violencia? La advertencia bíblica es clara: ―El que está andando con personas
sabias se hará sabio, pero al que está teniendo tratos con los estúpidos le irá mal‖ (Proverbios
13:20). Sin duda, la sabiduría divina nos brinda una gran protección.
¿Qué hay de aquellas personas que llevan toda su vida demostrando sabiduría y
entendimiento, y que ‗no han ido por un camino que no es bueno‘? Una larga vida consagrada
al camino de la justicia es algo muy hermoso a los ojos de Dios y merece todo nuestro respeto.
―La canicie es corona de hermosura cuando se halla en el camino de la justicia‖, dice
Proverbios 16:31.
Por el contrario, la ira descontrolada no tiene nada de hermoso. La Biblia relata que Caín, el
primogénito de Adán y Eva, ―se enardeció de gran cólera‖ contra su hermano Abel, y ‗procedió
a atacarlo y a matarlo‘ (Génesis 4:1, 2, 5, 8). Aunque a veces tengamos razones para estar
enojados, debemos tener mucho cuidado para no perder el control. En Proverbios 16:32 se nos
dice con claridad: ―El que es tardo para la cólera es mejor que un hombre poderoso; y el que
controla su espíritu, que el que toma una ciudad‖. La furia descontrolada no es una virtud ni es
señal de fortaleza; es una debilidad que puede hacernos ―ir por un camino que no es bueno‖.
Cuando ‗toda decisión procede de Jehová‘
El rey de Israel declaró: ―En el regazo se echa la suerte, pero de Jehová procede toda
decisión por ella‖ (Proverbios 16:33). En el antiguo Israel hubo ocasiones en que Jehová se
valió de las suertes para dar a conocer su voluntad. Las suertes eran unos guijarros o tablillas
de madera o piedra. En primer lugar se hacía una oración a Jehová para pedirle que
interviniera en el asunto que se iba a tratar. Después se echaban las suertes dentro del pliegue
de una prenda de vestir y se extraía una. Lo que salía reflejaba la decisión de Dios al respecto.
Jehová ya no se vale de las suertes para revelar sus pensamientos e intenciones a su
pueblo. Más bien, nos comunica su voluntad a través de su Palabra. De ahí que, para obtener
sabiduría divina, resulte esencial que adquiramos un conocimiento exacto de lo que la Biblia
dice. No permitamos, por tanto, que pase ni un solo día sin leer las Escrituras inspiradas
(Salmo 1:1, 2; Mateo 4:4).
[Nota]
En La Atalaya del 15 de mayo de 2007, págs. 17-20, encontrará un análisis de Proverbios 16:1-
15.
*** w00 1/2 págs. 30-31 El sabio consejo de una madre ***
TANTO el padre como la madre pueden ser una valiosa fuente de estímulo, apoyo y
consejo. El libro bíblico de Proverbios nos habla de cierto joven rey, Lemuel, a quien su madre
‗corrigió‘ con un ―mensaje de peso‖. Encontramos estas palabras en el capítulo 31 de
Proverbios. Nosotros también podemos beneficiarnos del sabio consejo de esta madre
(Proverbios 31:1).
Consejo apropiado para un rey
La madre de Lemuel empieza planteando varias preguntas que acentúan nuestro interés:
―¿Qué estoy diciendo, oh hijo mío, y qué, oh hijo de mi vientre, y qué, oh hijo de mis votos?‖. La
triple repetición de su ruego evidencia su preocupación ansiosa por que su hijo preste atención
a sus palabras (Proverbios 31:2). Su interés en el bienestar espiritual de su prole da un
magnífico ejemplo a los padres cristianos de la actualidad.
¿Qué puede preocupar más a una madre, respecto al bienestar de su hijo, que las
diversiones estrepitosas y la disolución que se relacionan proverbialmente con el vino, las
mujeres y el canto? La madre de Lemuel va directamente al grano: ―No des tu energía vital a
las mujeres‖. Dice que la conducta promiscua es ―lo que conduce a borrar a reyes‖ (Proverbios
31:3).
No ha de pasarse por alto el beber en exceso. ―No es para los reyes, oh Lemuel, no es para
los reyes beber vino‖, advierte. ¿Cómo va a dictar un rey una sentencia lúcida y bien fundada, y
no olvidar ―lo que está decretado [ni pervertir] la causa de cualquiera de los hijos de la
aflicción‖, si está constantemente embriagado? (Proverbios 31:4-7.)
En cambio, al no tener estos vicios, el rey puede juzgar ―con justicia y [defender] la causa del
afligido y del pobre‖ (Proverbios 31:8, 9).
Aunque los jóvenes cristianos de hoy no sean reyes, el consejo sabio de la madre de Lemuel
es tan oportuno como entonces, si no más. El abuso del alcohol, el uso del tabaco y la
inmoralidad sexual proliferan entre la juventud de nuestros días, por lo que es muy importante
que los jóvenes cristianos presten atención a sus padres cuando les dan ‗mensajes de peso‘.
La esposa capaz
Es lógico que las madres se preocupen de las perspectivas matrimoniales de los hijos que
van haciéndose adultos. La madre de Lemuel dirige entonces su atención a las cualidades de
una esposa ideal. No hay duda de que los jóvenes se beneficiarían enormemente de tomar en
cuenta el enfoque femenino sobre este importante asunto.
En el versículo 10 se compara ―una esposa capaz‖ a los corales, valiosos y poco comunes,
que en tiempos bíblicos solo se conseguían con mucho trabajo. Así mismo, hallar una esposa
capaz requiere esfuerzo. En lugar de apresurarse impacientemente al matrimonio, el joven
hace bien en tomarse su tiempo para escoger cónyuge. De ese modo, es más probable que
valore mucho su inestimable hallazgo.
A Lemuel se le dice sobre la esposa capaz: ―En ella el corazón de su dueño ha cifrado
confianza‖ (versículo 11). En otras palabras, no debe insistir en que su esposa le pida su
aprobación para todo. Claro está, los cónyuges deben consultarse antes de tomar decisiones
de envergadura, como las que tienen que ver con hacer compras caras o con la crianza de los
hijos. La comunicación en estos campos contribuye a que haya un vínculo estrecho entre
ambos.
La esposa capaz, por supuesto, tiene muchas ocupaciones. En los versículos 13 a 27 se dan
consejos y principios que las esposas de toda época pueden poner en práctica para el
beneficio de su familia. Por ejemplo, en vista del aumento en el precio de la ropa y de los
artículos del hogar, la esposa capaz aprende a hacer labores manuales y a ser ahorrativa para
que su familia vaya bien vestida y esté presentable (versículos 13, 19, 21, 22). A fin de que la
familia no gaste tanto en comida, cultiva los productos que le es posible y es cuidadosa al
hacer las compras (versículos 14, 16).
Obviamente, esta mujer no come ―el pan de la pereza‖. Trabaja mucho y coordina con
eficacia las actividades de su casa (versículo 27). Ciñe ―de fuerza sus caderas‖, lo que significa
que se prepara para realizar tareas que exigen gran esfuerzo físico (versículo 17). Se levanta
antes de que salga el Sol para empezar su jornada laboral, y trabaja con diligencia hasta la
noche. Es como si la lámpara que ilumina su trabajo siempre estuviera encendida
(versículos 15, 18).
Sobre todo, la esposa capaz es una persona espiritual. Teme a Dios y le adora con profundo
respeto y temor reverencial (versículo 30). Asimismo colabora con su esposo en educar a sus
hijos a proceder igual. El versículo 26 dice: ―Con sabiduría‖ instruye a sus hijos, y ―la ley de
bondad amorosa está en su lengua‖.
El esposo capaz
Para atraer a una esposa capaz, Lemuel tenía que cumplir con las responsabilidades de un
esposo capaz. La madre de Lemuel recuerda a su hijo varias de ellas.
El esposo capaz recibe un buen informe de ―los ancianos del país‖ (Proverbios 31:23). Estas
palabras significan que es alguien capaz, honrado, digno de confianza y temeroso de Dios
(Éxodo 18:21; Deuteronomio 16:18-20). Debido a ello, es ―conocido en las puertas‖, donde los
hombres notables se reunían con el propósito de dirigir los asuntos de la ciudad. Para ser
―conocido‖ como hombre temeroso de Dios, tiene que ser razonable y trabajar en armonía con
los ancianos del ―país‖ (tal vez el distrito o la región).
Muy probablemente hablando por experiencia personal, la madre de Lemuel le recuerda a su
hijo la importancia de que valore a su futura esposa. Debe ser la persona a la que más quiera
en la Tierra. Por ello, imagínese la profunda emoción en su voz cuando confiesa ante todo el
mundo: ―Hay muchas hijas que han demostrado capacidad, pero tú... tú has ascendido por
encima de todas ellas‖ (Proverbios 31:29).
Es obvio que Lemuel valoró el sabio consejo de su madre. Observamos, por ejemplo, que en
el versículo 1 se refiere a las palabras de su madre como si fueran suyas. De modo que tomó a
pecho la ‗corrección‘ que ella le dio y se benefició de su consejo. Aprovechémonos también
nosotros de este ―mensaje de peso‖ poniendo en práctica en nuestra vida los principios que
contiene.
*** w87 15/5 págs. 28-30 Tema a Jehová y será feliz ***
Puntos sobresalientes de la Biblia Proverbios 1:1–31:31
Lea Proverbios 1:1–2:22. ―El temor de Jehová‖ es la esencia misma del conocimiento. Si
aceptamos la disciplina, no nos uniremos a los pecadores que cometen males. A los que temen
a Jehová, él da sabiduría que los salvaguarda de los malhechores.
· 1:7—¿Qué es ―el temor de Jehová‖?
Es reverencia profunda y sano temor de desagradarle porque apreciamos su bondad amorosa
y benignidad. Tener ―el temor de Jehová‖ significa reconocer que él es el Juez Supremo y el
Todopoderoso, que tiene derecho y poder para imponer castigo o dar muerte a los que le
desobedecen. También significa servir fielmente a Dios, confiando de lleno en él, y odiando lo
que a su vista es malo. (Salmo 2:11; 115:11; Proverbios 8:13.)
· 2:7—¿Qué es integridad?
Los términos hebreos que se relacionan con la integridad tienen el significado fundamental de
lo que es ―entero‖ o ―completo‖. A menudo significan condición moral sana y rectitud. ―Los que
andan en integridad‖ mantienen devoción inquebrantable a Jehová. Para estos ―rectos‖ él es un
―escudo‖ protector, porque manifiestan verdadera sabiduría y obran en armonía con sus justas
normas.
Lección para nosotros: Si tememos a Jehová, aceptaremos la disciplina que suministra
mediante su Palabra y su organización. El no hacer eso nos clasificaría con los ―tontos‖, los
pecadores impíos. Por eso, aceptemos su amorosa disciplina. (Proverbios 1:7; Hebreos 12:6.)
Aprecie la sabiduría
Lea Proverbios 3:1–4:27. Para buena perspicacia, ‗confíe en Jehová con todo su corazón‘.
Disfrutan de felicidad los que tienen en alta estima la sabiduría. Su senda es como una luz que
va haciéndose cada vez más brillante, pero tienen que salvaguardar el corazón.
· 4:18—¿Cómo va haciéndose más clara ―la senda de los justos‖?
La luz solar va haciéndose más brillante desde el amanecer hasta el momento en que ―el día
queda firmemente establecido‖. De manera similar, la luz espiritual va haciéndose más brillante
para el pueblo de Jehová con el transcurso del tiempo. Mientras más nos acercamos a ciertos
sucesos, más claramente entendemos el desarrollo de los propósitos de Jehová. Las profecías
divinas se abren a nuestro entendimiento a medida que el espíritu santo de Dios arroja luz
sobre ellas, y según se van cumpliendo en los acontecimientos mundiales o en las experiencias
del pueblo de Jehová. Así, ‗la senda de ellos se hace más y más clara‘.
Lección para nosotros: El desplegar la sabiduría verdadera y cumplir con los mandatos
divinos nos salvaguardará de seguir un proceder insensato que pueda conducirnos a una
muerte prematura. Por ejemplo, los que no prestan atención a los mandatos de Jehová contra
la inmoralidad sexual pudieran contraer enfermedades que se transmiten por contacto sexual y,
como resultado, morir prematuramente. Por eso, obremos en armonía con los requisitos de
Dios, porque entonces la sabiduría será ―árbol de vida‖ en nuestro caso. (Proverbios 3:18.)
Maneras de desplegar sabiduría
Lea Proverbios 5:1–9:18. Es despliegue de sabiduría el evitar la inmoralidad y ‗regocijarse con
la esposa de la juventud de uno‘. Se citan siete cosas que son detestables a Jehová, y se da
advertencia contra las seducciones de una ramera. La sabiduría personificada es el ―obrero
maestro‖ de Dios. Y ―el temor de Jehová es el comienzo de la sabiduría‖.
· 6:1-5—¿Se opone este consejo al espíritu de generosidad?
Este proverbio no se opone a la generosidad, aunque sí aconseja contra implicarse en los
tratos de negocio de otros, especialmente extraños. Se suponía que los israelitas ayudaran a
su hermano que hubiera ‗empobrecido‘. (Levítico 25:35-38.) Pero algunos se envolvieron en
empresas comerciales especulativas y obtuvieron apoyo financiero mediante persuadir a otros
a ‗salir fiadores‘ en beneficio de ellos, hasta prometiendo pagar a sus acreedores si se hacía
necesario. Si alguien se metía en un aprieto de esa índole, quizás por jactancia, el consejo
prudente era que se librara del aprieto sin dilación. (Proverbios 11:15.)
· 8:22-31—¿Es esto simplemente una descripción de la sabiduría?
No, porque la sabiduría siempre ha existido como atributo del Dios eterno. (Job 12:13.) Pero
aquí se dice que la sabiduría fue ―producida‖ y que estuvo ―a su lado [de Jehová] como un
obrero maestro‖ durante la creación de la Tierra. El identificar a la sabiduría personificada con
el Hijo de Dios encaja con el hecho de que ―cuidadosamente ocultados en él están todos los
tesoros de la sabiduría y del conocimiento‖. (Colosenses 1:15, 16; 2:3.)
Lección para nosotros: Al mencionar sus ―sacrificios de comunión‖ y ―votos‖, la mujer inmoral
que se menciona en el capítulo 7 de Proverbios quizás estuviera dando a entender que no
carecía de espiritualidad. Los sacrificios de comunión consistían en carne, harina, aceite y vino.
(Levítico 19:5, 6; 22:21; Números 15:8-10.) De modo que ella indicaba que en su casa había
mucho de comer y beber, y el ―joven falto de corazón‖ pasaría un buen rato allí. Esta es una
manera típica de llevar a la inmoralidad a la persona que carece de los motivos correctos.
¡Cuán importante es escuchar esta advertencia y evitar tal pecado contra Dios! (Génesis 39:7-
12.)
Contrastes para meditación
Lea Proverbios 10:1–15:33. Muchos de los proverbios de Salomón comienzan con máximas
que encierran contraste. Se da énfasis al ―temor de Jehová‖. (10:27; 14:26, 27; 15:16, 33.)
· 10:25—¿Por qué se menciona un ―viento de tempestad‖?
Los inicuos, que no se fundan en principios justos, son como edificios inestables que se
desploman al azotar tempestades violentas. Pero los justos manifiestan estabilidad porque su
pensamiento está sólidamente fundado en principios piadosos. Como una estructura que tiene
buenos cimientos, no se derrumban cuando están bajo presión. (Mateo 7:24-27.)
· 11:22—¿Cómo pudiera parecerse una mujer a una nariguera de oro en el hocico de un
cerdo?
Una nariguera de oro que atravesara un lado de la nariz o la división entre las fosas nasales
sugeriría que la persona que la llevaba era persona culta. Pero para los israelitas los cerdos
eran inmundos y repugnantes. Por eso, una mujer hermosa, pero insensata, es como una
nariguera de oro donde no debería estar, en el hocico de un cerdo.
· 14:14—¿Cómo se satisface la persona que no tiene fe?
―El que es de corazón sin fe‖ se satisface con su modo de vivir materialista. (Salmo 144:11-
15a.) El hacer lo que es correcto a la vista de Dios no le importa, y no piensa en rendir cuentas
a Jehová. (1 Pedro 4:3-5.) Pero ―el hombre bueno‖ rechaza las prácticas de los hombres sin fe
y se satisface ―con los resultados de sus tratos‖. Mantiene en primer lugar los intereses
espirituales, se adhiere a las normas de Dios, tiene el gozo supremo de servirle, y se satisface
con las bendiciones divinas. (Salmo 144:15b.)
· 15:23—¿Cómo podemos ‗regocijarnos en la respuesta de nuestra boca‘?
Esto puede suceder si se presta atención a nuestro consejo y esto produce buenos resultados.
Pero para ayudar a alguien, nosotros tenemos que escuchar a esa persona cuidadosamente,
considerar los factores que contribuyen a su problema y basar nuestro consejo en la Biblia. Tal
―palabra a su tiempo apropiado, ¡oh, cuán buena es!‖.
Lección para nosotros: La ―persona tonta‖ responde rápidamente, ―en el mismo día‖, a un
insulto o ―deshonra‖. Pero ―el sagaz‖ —un individuo prudente— ora por el espíritu de Dios para
ejercer autodominio y seguir Su Palabra. (Proverbios 12:16.) Si hacemos esto, podemos evitar
más contiendas que pudieran resultar en daño emocional o físico para nosotros mismos o para
otros.
Proverbios con paralelos
Lea Proverbios 16:1–24:34. En estos dichos sabios de Salomón principalmente se suministra
guía por pensamientos paralelos. De nuevo se da énfasis al ―temor de Jehová‖. (16:6; 19:23;
22:4; 23:17; 24:21.)
· 17:19—¿Qué hay de malo en un paso de entrada alto?
Los que no hacían bajas las puertas de sus casas y patios corrían el riesgo de que hombres
entraran a caballo en sus casas y se llevaran sus bienes. Este proverbio también pudiera aludir
a la boca como un paso de entrada hecho alto por el habla arrogante y la jactancia. Tal habla
fomenta la contienda y con el tiempo lleva al desastre.
· 19:17—¿Por qué es como prestar a Jehová el ayudar a los de condición humilde?
Los de condición humilde pertenecen a Dios, y lo que les hagamos a ellos se cuenta como
hecho a él. (Proverbios 14:31.) Si el amor y la generosidad nos impulsan a mostrar favor a los
humildes o a hacer regalos a los pobres, sin esperar nada de ellos, Jehová considera ese dar
como préstamos a él que él paga con favor y bendiciones. (Lucas 14:12-14.)
· 20:1—¿Cómo es ―burlador‖ el vino?
El vino puede hacer que el que bebe demasiado obre de manera ridícula y alborotosa. Puesto
que el beber en exceso produce tales malos efectos, los cristianos deben evitarlo. (1 Timoteo
3:2, 3, 8; 1 Corintios 6:9, 10; Proverbios 23:20, 21.)
· 23:27—¿Cómo es la ramera un ―hoyo‖ y un ―pozo‖?
Tal como se atrapaba a animales en ‗hoyos profundos‘ cavados por los cazadores, así los
patrocinadores de una prostituta o ramera son entrampados en inmoralidad. ―La extranjera‖
denota una ramera, sin duda porque la mayoría de las prostitutas que había en Israel eran
extranjeras. El sacar agua de ―un pozo angosto‖ es difícil debido a que los jarros de barro se
rompen fácilmente al dar contra sus lados. De manera parecida, los que tratan con rameras
pueden experimentar calamidades emocionales y físicas. (Proverbios 7:21-27.)
Lección para nosotros: ―El testigo mentiroso‖ muestra falta de respeto a Dios y, bajo la Ley,
podía ser condenado a muerte. Así, podía ‗perecer‘ por obra de los hombres o de Jehová.
(Proverbios 21:28; Deuteronomio 5:20; 19:16-21; compárese con Hechos 5:1-11.) Pero ‗el
hombre que escuchaba‘ atentamente sólo hablaba cuando estaba seguro de lo que había oído.
Su testimonio permanecía ―para siempre‖, pues no era rechazado después como falsedad.
Además, no se le ejecutaba como testigo falso. Los que testifican en audiencias judiciales entre
los testigos de Jehová deben haber escuchado cuidadosamente para suministrar información
exacta, porque el testimonio inexacto o falso puede causar daño espiritual.
Comparaciones útiles
Lea Proverbios 25:1–29:27. Los proverbios de Salomón transcritos por los hombres del rey
Ezequías enseñan principalmente por comparaciones. Entre otras cosas, se estimula a
depender de Jehová.
· 26:6—¿Por qué se hace una comparación con ‗mutilarse los pies‘?
La persona que se mutilara los pies se tulliría a sí misma, tal como el que empleara a ―alguien
estúpido‖ lesiona violentamente sus propios intereses. El proyecto encomendado a una
persona estúpida fracasa. ¡Cuán prudente es, pues, el ‗probar a los hombres en cuanto a
aptitud‘ antes de recomendarlos para atender responsabilidades en la congregación!
(1 Timoteo 3:10.)
· 27:17—¿Cómo se ―aguza‖ un rostro?
Tal como un pedazo de hierro puede ser útil para aguzar una hoja del mismo metal, una
persona puede aguzar la condición intelectual y espiritual de otra. Si las desilusiones y el
contacto con individuos desagradables nos deprimen, la mirada compasiva y el estímulo bíblico
de un compañero de creencia puede ser muy edificante para nosotros. La tristeza se nos va del
rostro, y nos aviva nueva esperanza para renovar nuestra actividad. (Proverbios 13:12.)
· 28:5—¿Qué se abarca en ―todo‖?
Los que practican lo que es malo son ciegos en sentido espiritual. (Proverbios 4:14-17;
2 Corintios 4:4.) No ‗entienden el juicio‘ ni lo que es correcto según las normas de Dios. Por
eso, no pueden juzgar correctamente las cuestiones ni tomar decisiones apropiadas. Pero los
que ‗buscan a Jehová‘ por oración y estudio de su Palabra ‗entienden todo‘ lo que se necesita
para servirle aceptablemente. (Efesios 5:15-17.)
· 29:8—¿Cómo ―enardecen un pueblo‖ los hombres de habla jactanciosa?
Los jactanciosos que no respetan la autoridad hablan insolentemente. Así alimentan las llamas
y los fuegos de la disputa a tal grado que enardecen a los residentes de un pueblo entero. Pero
los sabios ―vuelven atrás la cólera‖ al hablar con apacibilidad y buen sentido, apagando las
llamas de la ira y promoviendo la paz. (Proverbios 15:1.)
Lección para nosotros: Si somos orgullosos, la altivez resultará en que se nos humille.
(Proverbios 29:23.) La persona altiva tiende a ser presumida, y esto puede llevar a la deshonra,
al tropiezo y a un estrellarse. (Proverbios 11:2; 16:18; 18:12.) Puede que Dios haga que el
individuo orgulloso sea humillado, rebajado de alguna manera, quizás hasta el punto de
destrucción. Un hombre de ese tipo desea obtener gloria, pero sus caminos son abominables
para la gente. Sin embargo, la persona ―humilde de espíritu se asirá [con el tiempo] de la
gloria‖.
‗Mensajes de peso‘
Lea Proverbios 30:1–31:31. El ―mensaje de peso‖ de Agur reconoce que ―todo dicho de Dios es
refinado‖. También se mencionan cosas que son demasiado maravillosas para que puedan ser
comprendidas, y así por el estilo. (30:1-33.) ―El mensaje de peso‖ que Lemuel recibió de su
madre advierte que el consumo de bebidas embriagantes puede pervertir el juicio, insta a
juzgar con justicia, y describe a una buena esposa. (31:1-31.)
· 30:15, 16—¿Qué enseñan estos ejemplos?
Ilustran que la avidez es insaciable. Las sanguijuelas se llenan de sangre, tal como las
personas ávidas, codiciosas, siempre desean más dinero o poder. De igual modo, el Seol
nunca queda satisfecho, sino que permanece abierto para recibir más víctimas de la muerte.
Una matriz estéril ‗clama‘ por hijos. (Génesis 30:1.) La tierra azotada por la sequía embebe el
agua de la lluvia y pronto da la apariencia de estar seca de nuevo. Y el fuego que ha
consumido las cosas que se han arrojado en él envía llamas que lamen otra materia
combustible que se halle cerca. Así sucede con los ávidos y avaros. Pero los que tienen como
guía la sabiduría piadosa no son impulsados incesantemente por tal egoísmo.
EN EL libro bíblico de Eclesiastés, el sabio rey Salomón señaló a algunos de los ciclos
interminables que están asociados con la Tierra. Una generación reemplaza a otra. El Sol sale
y se pone. Los vientos siguen soplando desde diversas direcciones. Los ríos y los torrentes
desembocan en el mar, pero nunca lo llenan.—Ecl. 1:4-7.
Después de eso el sabio dijo: ―Todas las cosas son fatigosas; nadie puede hablar de ello. El
ojo no se satisface de ver, ni se llena el oído de oír. Lo que ha llegado a ser, eso es lo que
llegará a ser; y lo que se ha hecho, eso es lo que se hará; y por lo tanto no hay nada nuevo
bajo el sol. ¿Existe cosa alguna de la cual se pueda decir: ‗Mira esto; es nuevo‘? Ya ha tenido
existencia por tiempo indefinido; lo que ha venido a la existencia es desde tiempo anterior a
nosotros. No hay recuerdo de la gente de tiempos pasados, tampoco lo habrá de los que
también llegarán a ser más tarde. Resultará que no habrá recuerdo aun de ellos entre los que
llegarán a ser todavía más tarde.‖—Ecl. 1:8-11.
Evidentemente era la repetición interminable de las cosas lo que tenía presente el rey
Salomón cuando declaró lo que se acaba de citar. Existían tantos ciclos reiterativos que uno se
fatigaría si tratara de describirlos todos. Le ‗faltarían palabras.‘
La repetición de los ciclos puede afectar de tal manera al hombre que su sentido de la vista y
su sentido del oído no se satisfagan, sino que deseen algo nuevo o novedoso. Y sin embargo
realmente no hay nada nuevo en los ciclos naturales ni en los acontecimientos del vivir
cotidiano común. Las generaciones de mucho tiempo antes de la nuestra presenciaron los
mismos ciclos naturales. Y en los asuntos humanos se han observado las mismas cosas a
través de los siglos. Ha habido progreso, regresión, desilusión, opresión, corrupción y
revolución, seguidos de más opresión y corrupción todavía. La gente ha tenido las mismas
esperanzas, deseos y ambiciones. Después, al morir, esta gente fue olvidada por las
generaciones posteriores. Hasta las personas que se hicieron famosas o adquirieron un
nombre notable se desvanecieron de la memoria de los vivos y fueron eclipsadas por los vivos
que disfrutan de prominencia.
¿De qué provecho es esta información? Puede protegernos de dar indebida importancia a
seguir tras objetivos materialistas que dejan fuera de consideración al Creador. No hay logro
terrestre que no sea temporal. Por lo tanto, en vez de hacer de éstos la meta principal de la
vida, es mucho mejor disfrutar del fruto del trabajo de uno y hacerse un buen nombre ante Dios,
quien puede devolvernos la vida y poner ante nosotros un futuro eterno y feliz.—Ecl. 3:22.
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EL REY Salomón fue uno de los hombres más sabios que han vivido. Hablando con
veracidad, pudo decir: ―Yo mismo he aumentado mucho en sabiduría más que cualquiera que
se hallaba antes de mí en Jerusalén, y mi propio corazón vio muchísima sabiduría y
conocimiento.‖ (Ecl. 1:16) Al decir que su ―propio corazón vio muchísima sabiduría y
conocimiento,‖ evidentemente Salomón quiso decir que tenía más que solo un cerebro lleno de
mucha información. La sabiduría y el conocimiento habían afectado su corazón y habían
llegado a formar parte de él. Él comprendía el valor de estas cosas y se sentía movido a usar
su conocimiento y sabiduría.
Salomón no dejó sin explorar ningún aspecto mientras llegaba a conocer la sabiduría.
Comenta: ―Puse mi corazón a buscar y explorar la sabiduría con relación a todo cuanto se ha
hecho bajo los cielos. . . . Procedí a dar mi corazón a conocer la sabiduría y a conocer la
locura, y he llegado a conocer la tontería.‖ (Ecl. 1:13, 17) Salomón se sintió incitado a ser
diligente, de todo corazón, en sus esfuerzos por llegar a estar íntimamente familiarizado con la
sabiduría. No se limitó a investigar los mandatos y dictados de la sabiduría, sino que también
exploró la locura y la tontería. Observó cuidadosamente cómo otros hombres seguían un
proceder de locura e insensatez. Basándose en lo que vio, Salomón llegó a sólidas
conclusiones en cuanto a cómo evitar problemas.
¿Qué aprendió de su investigación cabal de todos los aspectos del conocimiento y la
sabiduría mundanos? ―Esto también es un esforzarse tras viento. Porque en la abundancia de
sabiduría hay abundancia de vejación, de modo que el que aumenta el conocimiento aumenta
el dolor.‖—Ecl. 1:17, 18.
Como señaló Salomón, una razón fundamental de esto es: ―Lo que se hace torcido no se
puede hacer derecho, y lo que falta absolutamente no se puede contar.‖ (Ecl. 1:15) La persona
que aumenta en conocimiento mundano llega a estar dolorosamente consciente del hecho de
que muchas cosas ‗torcidas‘ de este sistema imperfecto no se pueden enderezar. Ni el tiempo
ni las circunstancias permiten que eso sea corregido. De hecho, tantas son las cosas de los
asuntos humanos que son defectuosas que ni siquiera se pueden numerar. Por lo tanto,
mientras mayor es el conocimiento y sabiduría de uno, más agudo se hace su conocimiento de
lo limitadas que son sus oportunidades de cambiar las cosas y producir condiciones mejores.
Una vida corta y las condiciones desfavorables que rigen en una sociedad humana imperfecta
obran contra uno. Como resultado de esto hay vejación y frustración.
Sin embargo, la sabiduría divina no produce estos efectos negativos, sino que edifica
esperanza, fe y confianza. Esa sabiduría se describe de este modo en las Escrituras: ―La
sabiduría de arriba es primeramente casta, luego pacífica, razonable, lista para obedecer, llena
de misericordia y buenos frutos, sin hacer distinciones por parcialidad, sin ser hipócrita.‖ (Sant.
3:17) ¿A qué clase de sabiduría está usted dando la mayor atención... a la clase que acarrea
frustración, o a la sabiduría divina, la clase de sabiduría que puede ayudarle a obtener lo
óptimo de la vida aun ahora?
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POR ser el Creador del cielo y de la Tierra, el Altísimo merece, por parte nuestra, profundo
temor y admiración reverentes ante su sublimidad. Enérgicamente el rey Salomón enfatizó esto
cuando escribió: ―Guarda tus pies siempre que vayas a la casa del Dios verdadero; y haya un
acercamiento para oír, más bien que para dar un sacrificio como hacen los estúpidos, porque
ellos no se dan cuenta de que hacen lo que es malo. No te des prisa respecto a tu boca; y en
cuanto a tu corazón, no se apresure a producir una palabra ante el Dios verdadero. Porque el
Dios verdadero está en los cielos pero tú estás en la tierra. Es por eso que deben resultar
pocas tus palabras.‖—Ecl. 5:1, 2.
Cuando se trata de un lugar de adoración, uno debe tener presente correctamente a dónde
va, y vigilar su paso. Ciertamente la ―casa del Dios verdadero‖ no es lugar para la gente que en
sentido moral está contaminada ni para los que no estiman las cosas sagradas. (Sal. 15:1-5) Es
un lugar en el cual ―oír,‖ es decir, prestar atención a los preceptos divinos u obedecerlos.
Uno no debe ser semejante a un tonto que no utiliza sus facultades de raciocinio y opta por
un proceder que va en contra de los mandatos de Dios. Quizás el tonto ofrezca un sacrificio
como deber religioso o como manifestación exterior de piedad. Pero rehúsa reconocer que esto
deja sin valor su sacrificio; de hecho, lo hace detestable a Dios. Proverbios 21:27 hace claro
esto: ―El sacrificio de los inicuos es cosa detestable. ¡Cuánto más cuando uno lo trae junto con
conducta relajada [―mala intención,‖ Nácar-Colunga].‖
A causa de la grandeza de Dios —pues él reside en los más altos cielos— uno también debe
pensar cuidadosamente en lo que dice al orar. Al corazón, como el órgano que motiva, no se le
debe permitir que salga con palabras impulsivas, irreflexivas. Uno se debe acercar a Dios con
plena consciencia de su majestad y dignidad y no divagar descuidadamente cuando ora. Es
más apropiado expresarse con pocas palabras, pero que sean sinceras, reverenciales.
Reforzando su punto con un dicho proverbial, Salomón continúa de esta manera: ―Porque
ciertamente viene un sueño a causa de la abundancia de ocupación, y la voz del estúpido a
causa de la abundancia de palabras.‖ (Ecl. 5:3) Cuando alguien tiene la atención absorta
innecesariamente en asuntos materialistas o ambiciosos que dejan fuera del cuadro al Creador,
el resultado es sueños personales egoístas. Esa ―abundancia de ocupación‖ puede inducir
vano soñar despierto durante el día y también puede ocupar la mente del individuo por la
noche, agitándolo con sueños y no permitiéndole dormir tranquilamente. Tal como los intereses
materialistas indebidos pueden llevar al soñar vacío, así la locuacidad interminable también
acarrea problemas. En poco tiempo queda demostrado que la voz del locuaz es la de un tonto.
Casi con seguridad se dicen cosas tontas, indecorosas. Por lo tanto, es necesario guardarse de
hablar irreflexivamente y, como se mostró antes, es especialmente necesario hacer esto al
orar.
La advertencia acerca de hablar irreflexivamente sin duda aplicaría al hacer votos. Declaró
Salomón: ―Siempre que le hagas un voto a Dios, no titubees en pagarlo, porque no hay deleite
en los estúpidos. Lo que prometes en voto, págalo. Mejor es que no hagas voto que el que
hagas voto y no pagues. No permitas que tu boca haga pecar a tu carne, tampoco digas
delante del ángel que fue una equivocación. ¿Por qué debe indignarse el Dios verdadero a
causa de tu voz y tener que destrozar la obra de tus manos?‖—Ecl. 5:4-6.
Nadie está bajo ninguna obligación de hacerle un voto a Dios; es un acto espontáneo. Por
eso es necesario ser muy cuidadoso para no hablar imprudentemente cuando se le hace una
promesa solemne a Dios. Si uno titubeara en cumplir su voto, estaría haciendo el papel de
estúpido, es decir, de una persona en la cual hay defecto moral, en cuya palabra no se puede
confiar. El hablar descuidadamente con la boca puede poner al cuerpo de carne bajo la
obligación de hacer algo que quizás sea muy difícil, con el resultado de que no se cumple el
voto y así se hace que la carne peque. El ejercer cuidadosa previsión antes de hacer uno un
voto impedirá que uno hable imprudentemente. Entonces no habrá ningún deseo de librarse de
un voto por medio de alegar que fue una equivocación.
El no cumplir un voto puede tener consecuencias muy graves. Pudiera suceder que Jehová
Dios se ‗indignara‘ y retirara su favor y bendición, por lo menos parcialmente. Como resultado
de ello, lo que el individuo quizás haya edificado termina ‗destrozado.‘ El salmista resumió muy
bien el asunto así: ―A menos que Jehová mismo edifique la casa, de nada vale que sus
edificadores hayan trabajado duro en ella. A menos que Jehová mismo guarde la ciudad, de
nada vale que el guarda se haya quedado despierto.‖—Sal. 127:1.
Poniendo de relieve lo que impide que uno haga esos votos imprudentes, Salomón dice:
―Teme al Dios verdadero mismo.‖ Esto significa tener respeto reverente al Creador y no obrar
de ninguna manera que le desagrade. Cuando falta ese temor, aplica la siguiente declaración
del rey Salomón: ―Porque debido a la abundancia de ocupación hay sueños, y hay vanidades y
palabras en abundancia.‖ (Ecl. 5:7) Sí, el envolverse indebidamente en cosas no espirituales
produce sueños de egoísmo que inquietan, desilusión y frustración, ―vanidades,‖ y habla
irreflexiva delante de Dios que puede resultar en que uno haga un voto imprudente y entonces
no lo cumpla. Por eso ciertamente somos sabios siempre que hacemos todas las cosas por un
temor apropiado a Jehová Dios, o una apropiada admiración reverente mezclada con temor
ante Su sublimidad.
Por qué no asombrarse en cuanto a la opresión
Por toda la historia humana, muchos gobernantes y funcionarios encumbrados han buscado
su propio provecho y han pasado por alto los intereses de la gente. Esto puede hacerle
especialmente difícil la vida al hombre común. El sabio rey Salomón declaró: ―Si ves opresión
alguna de la persona de escasos recursos y la privación violenta de juicio y de justicia en un
distrito jurisdiccional, no te asombres del asunto, pues uno que es más alto que el alto está
vigilando, y hay quienes están muy por encima de ellos.‖ (Ecl. 5:8) Sí, a menudo la corrupción y
las injusticias de funcionarios menores solo son un reflejo de lo que hacen los que ocupan un
puesto superior. Cuando sucede esto, los ciudadanos comunes que, en realidad, están en la
parte inferior sufren el peso aplastante de la opresión que produce toda esta corrupción
combinada.
Después de hacer este comentario acerca de las injusticias, Salomón escribió: ―También, el
provecho de la tierra es entre todos ellos; al rey mismo se le ha servido para un campo.‖ (Ecl.
5:9) Es interesante que la Young‘s Literal Translation of the Holy Bible (Traducción literal de la
Santa Biblia, por Young, en inglés) dice, en este versículo: ―Y la abundancia de una tierra es
para todos. Se le sirve a un rey por un campo.‖ También merece notarse la traducción de este
versículo por la antigua Versión de los Setenta griega: ―Y el fruto de la tierra es para todos,... un
rey está pendiente del campo cultivado.‖ (Charles Thomson) ―También la abundancia de la
tierra es para todos: el rey depende del campo labrado.‖—Samuel Bagster and Sons Limited.
Entonces, ¿qué significa este versículo? Esto: La abundancia, el producto, el fruto, del país o
de la Tierra es para todos sus habitantes; dependen de lo que la tierra produce. Ni siquiera el
rey de un país está exceptuado de esto. Pero hay que trabajar, cultivar, labrar la tierra si se
quiere que produzca de acuerdo con las necesidades o preferencias de uno. Por eso, ―para un
campo,‖ no a cambio de un campo, sino para el producto o la producción abundante de un
campo, ―al rey mismo se le ha servido,‖ al haber hecho él que le cultiven, labren, trabajen el
campo. Él tiene que enviar a sus siervos a trabajar o cultivar el campo para tener una
producción abundante. (2 Cró. 26:1, 10) A menos que el rey haga que sus siervos siembren y
cultiven la tierra, no se siega una cosecha para él y su familia real. La producción por la tierra
no se puede dar por sentada, ni siquiera para un rey. En armonía con esto está la lectura de
Eclesiastés 5:9 en la antigua traducción siríaca: ―Además las riquezas de la tierra son para
todos; el rey, él mismo, es servido por el cultivo de su propio campo.‖—George M. Lamsa.
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*** w77 1/11 págs. 666-667 ¿Qué quiso decir el sabio? ***
*** w77 15/11 págs. 703-704 ¿Qué quiso decir el sabio? ***
Cuídese de corromperse
Nadie, ni siquiera un sabio, está inmune de corromperse. El rey Salomón escribió: ―Porque la
mera opresión puede hacer que un sabio se porte como loco, y una dádiva puede destruir el
corazón.‖—Ecl. 7:7.
Al verse sometido a opresión prolongada, hasta un sabio puede tomar medidas imprudentes.
Puede perder el gobierno de sí mismo y dar salida a sentimientos de frustración por medio de
fustigar a otros, o quizás trate de obtener alivio por medios ilícitos.
Por otra parte, el texto tal vez describa opresión en la que el mismo sabio participa. Cuando
alguien deja que lo domine un espíritu opresivo, prescindiendo de lo sabio que sea, obra de
manera contraria a la decencia humana y la consideración. Pasa por alto los sentimientos de la
gente y se ciega a su situación difícil. Todo lo que puede ver es lo que se relaciona con él
mismo y su posición. Se imagina que es un gran benefactor y que por lo tanto tiene el derecho
de aplastar a todo el que se atreva a criticar sus normas.—Compare con 2 Crónicas 16:10.
Una dádiva en forma de soborno puede ser tan corruptiva como la opresión y ‗destruir el
corazón‘ o buena motivación. Los que aceptan sobornos quizás traten con crueldad a los
pobres y necesitados, que sufren por la discriminación y la parcialidad.
Cómo aguantar injusticia y opresión
¿Qué puede hacer uno cuando afronta la injusticia? Las siguientes palabras de Salomón son
sumamente útiles: ―Mejor es el fin de un asunto posteriormente que su principio. Mejor es el
que es paciente que el que es altivo de espíritu. No te des prisa en tu espíritu a sentirte
ofendido, porque el ofenderse es lo que descansa en el seno de los estúpidos.‖—Ecl. 7:8, 9.
Hay sabiduría en ser paciente, en confiar en que el resultado final de las cosas será para lo
mejor con relación a los siervos de Dios. Sí, el fin de un asunto pudiera estar en agudo
contraste con el sombrío principio. Eso sin duda aplicó a los israelitas esclavizados en Egipto.
Cuando Moisés pidió por primera vez la liberación de los israelitas, la respuesta de Faraón fue
intensificar las medidas opresivas. (Éxo. 5:1-9) Pero, al fin, Jehová Dios se hizo un gran
nombre para sí al efectuar la liberación de su pueblo esclavizado.—Éxo. 12:31, 32.
La persona paciente tiene mucho menos probabilidad de tomar los asuntos en sus propias
manos y así acarrearse dificultad a sí misma o acarreársela a otros. Pero al que es altivo de
espíritu se le hace difícil mantener gobierno de sí mismo y toma medidas imprudentes, para su
propio daño. La ira se enciende rápidamente en el caso del hombre impaciente cuyas
expectativas no se realizan. Se ofende pronto o desarrolla intenso resentimiento. Abriga esa
ofensa o resentimiento y lo mantiene cerca de él como si fuera en su propio seno. Por proceder
así, Salomón lo llama correctamente ―estúpido,‖ puesto que su derrotero produce malos
resultados en forma de palabras o acciones imprudentes.
El ver el pasado desde un punto de vista que tome en cuenta la realidad de las cosas es otra
ayuda valiosa para aguantar situaciones desagradables del presente. Salomón aconsejó:
―No digas: ‗¿Por qué ha sucedido que los días anteriores resultaron ser mejores que éstos?‘
porque no se debe a sabiduría el que hayas preguntado acerca de esto.‖—Ecl. 7:10.
La persona que suspira por los ‗buenos tiempos idos‘ se olvida del hecho de que aquel
tiempo también estuvo lleno de sus propios problemas y dificultades. La vida en este sistema
imperfecto jamás es ideal. Es posible que algunas cosas del pasado hayan sido mejores, pero
otras no lo fueron. Un punto de vista nostálgico del pasado puede alejarse mucho de la
realidad. Además, nadie puede regresar al pasado. Por eso es sumamente imprudente el
pensar que algún tiempo de este mundo haya sido mejor en todo respecto y luego quedar
descontento. Ese modo de pensar no ayuda a soportar una situación penosa pero
humanamente inalterable.
*** w77 1/12 págs. 730-731 ¿Qué quiso decir el sabio? ***
*** w78 1/1 págs. 15-16 ¿Qué quiso decir el sabio? ***
*** w78 15/1 págs. 5-6 ¿Qué quiso decir el sabio? ***
LA SABIDURÍA puede tener un efecto saludable en el que la posee. ―¿Quién hay como el
sabio?‖ escribió el rey Salomón. ―¿Y quién hay que conozca la interpretación de una cosa? La
sabiduría misma del hombre hace brillar su rostro, y hasta la severidad de su rostro es
cambiada a algo mejor.‖—Ecl. 8:1.
El hombre verdaderamente sabio es sobresaliente en la sociedad humana, incomparable.
Aparte de otro sabio, no hay otro como él. Conoce la ―interpretación de una cosa,‖ es decir,
posee la perspicacia necesaria para resolver problemas de la vida que causan perplejidad.
Hasta el semblante del sabio es agradable. Su rostro irradia un gozo y satisfacción
interiores. Como resultado, un rostro que, si otra cosa fuera lo cierto, parecería severo y
repulsivo, asume una expresión atrayente.
Cómo afrontar la gobernación humana imperfecta
Como rey, Salomón estaba en buena posición para dar consejo en cuanto a cómo obrar con
sabiduría para con los gobernantes. Declaró: ―Guarda la mismísima orden del rey, y eso por
consideración al juramento de Dios. No te des prisa, para que salgas de delante de él. No te
quedes plantado en una cosa mala. Pues todo aquello que se deleite en hacer él lo hará,
porque la palabra del rey es el poder de control; y ¿quién puede decirle: ‗¿Qué estás
haciendo?‘‖—Ecl. 8:2-4.
En el Israel antiguo, pudiera ser que los ancianos que representaban a la nación entraran en
un pacto con el rey, en el cual concordaran en permanecer leales al rey. Por ejemplo, tocante a
David leemos: ―Todos los ancianos de Israel vinieron al rey, a Hebrón, y el rey David celebró un
pacto con ellos en Hebrón delante de Jehová.‖ (2 Sam. 5:3) En armonía con ello, la
desobediencia al mandato del rey significaría infidelidad al juramento de lealtad hecho delante
de Jehová. Por otra parte, la obediencia constituía respeto al Dios verdadero, en cuya
presencia se había hecho el pacto. De modo similar, por respeto a Jehová, los cristianos
verdaderos permanecen en sumisión a los gobiernos de este mundo, al reconocer que éstos
existen por permiso de Dios.—Rom. 13:1, 2.
El consejo de Salomón en cuanto a no apresurarse a salir de la presencia del rey se amplía
en Eclesiastés 10:4: ―Si el espíritu de un gobernante se levantare contra ti, no dejes tu propio
lugar, porque la calma misma templa grandes pecados.‖ Pudiera suceder que alguien en
autoridad corrigiera a otra persona. Esta pudiera resentirse por la corrección y estar presta a
renunciar a un puesto o hasta a cambiar de actitud para con el gobernante. Sin embargo,
Salomón recomienda evitar acción apresurada en cuanto a cambiar lealtades o renunciar a un
puesto. Hoy se puede aplicar el mismo principio a la relación entre patrono y empleado.
El sabio rey Salomón aconseja además contra el ‗quedarse plantado en una cosa mala,‘ es
decir, contra el envolverse en algo que el gobernante considere malo. En virtud de la autoridad
del rey, su palabra lleva mucho más peso que la palabra de cualquiera de sus súbditos. Su voz
es la que controla; tiene autoridad indisputable. Por eso nadie puede decirle en desafío: ―¿Qué
estás haciendo?‖
La persona que sigue siendo observante de la ley no debería de tener nada que temer del
gobernante. Salomón comenta: ―El que está guardando el mandamiento no conocerá ninguna
cosa calamitosa.‖ (Ecl. 8:5) El súbdito obediente no sufre una ―cosa calamitosa‖ que venga
como castigo por haber violado la ley del rey. El consejo del sabio paralela con las palabras del
apóstol Pablo: ―El que se opone a la autoridad se ha puesto en contra del arreglo de Dios; los
que se han puesto en su contra recibirán juicio para sí mismos. Porque los que gobiernan
no son objeto de temor para el hecho bueno, sino para el malo. ¿Quieres, pues, no temer a la
autoridad? Sigue haciendo el bien, y tendrás alabanza de ella.‖—Rom. 13:2, 3.
Pero ¿qué hay si el gobernante es injusto? Evidentemente en alusión a una situación de
esta índole, continuó Salomón: ―El corazón sabio conocerá tanto el tiempo como el juicio. Pues
existe un tiempo y juicio aun para todo asunto, porque la calamidad de la humanidad es
abundante sobre ella. Pues no hay quien sepa lo que llegará a ser, porque ¿quién puede
informarle justamente cómo llegará a ser?‖—Ecl. 8:5-7.
La persona sabia no se levanta en revuelta. Porque tiene un corazón impelido por la
sabiduría, se da cuenta de que hay un tiempo apropiado para entrar en acción y una manera
apropiada de aguantar a un gobernante opresivo. La rebelión abierta significaría buscar el
desastre. El buen juicio, por otra parte, impide que la persona obre en un tiempo inoportuno.
(Sal. 37:1-7) Para ―todo asunto‖ hay un tiempo y juicio o manera de tratar apropiados. De modo
que uno simplemente está buscando dificultades si hace caso omiso de este hecho y obra
apresuradamente. Los seres humanos imperfectos ya tienen suficientes problemas sin que
tengan que aumentarlos por obrar imprudentemente, pasando por alto el hecho de que ―existe
un tiempo y juicio aun para todo asunto.‖ Además, nadie puede estar seguro de lo que encierra
el futuro. Hasta los hombres que están en autoridad mueren. El tener presente este hecho
puede ayudar a uno a aguantar una situación difícil. El gobierno del tirano no puede continuar
indefinidamente. Todo en este sistema imperfecto tiene su fin.
Examen cabal del opresivo regir humano
Las conclusiones a las que llegó Salomón en cuanto al regir opresivo por el hombre se
fundaron en observación cuidadosa. Él dio consideración sincera a todo el alcance de tal regir
humano y el efecto de éste en la gente. Por esta razón pudo decir: ―Todo esto he visto, y hubo
una aplicación de mi corazón a toda obra que se ha hecho bajo el sol, durante el tiempo que el
hombre ha dominado al hombre para perjuicio suyo.‖—Ecl. 8:9.
Sin embargo, los gobernantes tiránicos no pueden hacer que su dominación continúe
indefinidamente. Continuó Salomón: ―Aunque esto es así [el que el hombre domine al hombre
para perjuicio suyo], he visto a los inicuos siendo enterrados, cómo entraron y cómo se iban del
mismísimo lugar santo y eran olvidados en la ciudad donde actuaron de aquella manera. Esto
también es vanidad.‖ (Ecl. 8:10) Mientras vivieran, los inicuos entrarían y saldrían del lugar
santo, el cual, en el día de Salomón, era la ciudad santa de Jerusalén con su templo de
Jehová. (Mat. 24:15) Allí no debieron haber practicado la iniquidad. Cuando se les entierra se
van de él por última vez. A pesar de la posición ensalzada de los inicuos, morirían, se les
enterraría y, en la ciudad en que habían estado activos, pronto se desvanecerían de la
memoria de los vivos. Así su vida como gobernantes tiránicos resultaría haber sido vana, vacía.
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*** w78 15/3 págs. 13-15 ¿Qué quiso decir el sabio? ***
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Aproveche la oportunidad
A veces se presentan excelentes oportunidades para hacer lo bueno o para obtener algo útil.
Sin embargo, debido a las incertidumbres de la vida en el sistema actual, pudiera requerirse
alguna fe para aprovechar debidamente algunas situaciones. No obstante, si tenemos dudas
en casos de esta índole, pudiera ser que perdiéramos algo que verdaderamente vale la pena.
Bien pudiera ser que no llegáramos a ser una fuente de estímulo para otros.
El sabio rey Salomón suministró consejo muy práctico sobre este asunto. Escribió: ―Envía tu
pan sobre la superficie de las aguas, pues con el transcurso de muchos días lo hallarás otra
vez. Da una porción a siete, o aun a ocho, pues no sabes qué calamidad ocurrirá en la tierra.‖
(Ecl. 11:1, 2) Por lo común se han considerado estas palabras como una exhortación a la
generosidad.
Uno nunca sabe lo que pudiera resultar de sus actos generosos. A uno pudiera parecerle
que está entregando algo a un cuerpo de ―aguas,‖ sin que parezca que haya de haber
inmediatamente buenos resultados para uno. Sin embargo, los actos generosos de uno
pudieran encariñarlo en el corazón de otros y hacer que éstos respondieran generosamente si
uno llegara a verse realmente necesitado. Esto no quiere decir que la persona verdaderamente
generosa debe ser artera y contar con que se le pague de vuelta. Más bien, se deleita en dar a
otros y confía en que siempre tendrá lo que necesita. Por eso, no restringe su dar a unos
cuantos escogidos, solo a dos o tres, sino que es generoso de todo corazón, dando a ―siete, o
aun a ocho.‖ Pudiera haber personas precavidas que creyeran que esto es sumamente
imprudente, al temer que el individuo que eso hiciera pudiera llegar a verse en condición de
necesidad si atacara la calamidad. Sin embargo, la persona generosa tiene mucha más
probabilidad de recibir ayuda al enfrentarse a algún desastre. Jesucristo expresó un
pensamiento similar cuando dijo: ―Practiquen el dar y se les dará. Derramarán en sus regazos
una medida excelente, apretada, remecida y rebosante.‖—Luc. 6:38.
Nuestros actos de generosidad hasta podrían compararse a plantar arroz en suelo cubierto
de agua. Después de ―muchos días‖ lo que así se planta llega a su madurez y produce una
abundante cosecha.
Después, Salomón se funda en ciertas leyes fijas al mostrar que la indecisión en los asuntos
de la vida no es el mejor derrotero. Hace notar lo siguiente: ―Si las nubes están llenas de agua,
derraman un verdadero aguacero sobre la tierra; y si un árbol cae hacia el sur o si hacia el
norte, en el lugar donde cae el árbol allí resultará estar.‖ (Ecl. 11:3) Estas cosas simplemente
suceden; no se pueden controlar humanamente. Por eso, ¿por qué ser indeciso y por lo tanto
vacilante en cuanto a ser generoso o hacer lo que es necesario hacer? Si va a llover, va a
llover. Si un árbol va a caer en cierta dirección, allí es donde va a caer. Eso aplica a muchas
otras cosas en la vida. La inacción sola no garantiza que esas cosas no sucederán.
Si uno tratara de regular su vida por medio de determinar primero con exactitud lo que
pudiera ser que sucediera o no sucediera, no lograría efectuar nada. Como hizo notar
Salomón: ―El que está vigilando el viento no sembrará [por temor de que el viento se lleve la
semilla]; y el que está mirando las nubes no segará [por temor de que si corta el grano se
mojará antes de que se le pueda poner en el almacén].‖—Ecl. 11:4.
Por lo tanto, tenemos que proseguir con lo que es necesario hacer, comprendiendo que de
seguro hay incertidumbres. No hay modo de desentrañar la obra de Dios, es decir, de descubrir
alguna regla mediante la cual determinar con exactitud lo que él quizás haga o tolere en el
desenvolvimiento de su propósito y luego conducir nuestros asuntos en armonía con tal regla.
Salomón indicó que para el hombre la obra de Dios es tan misteriosa como lo es el desarrollo
de un infante en el vientre. Escribió: ―Tal como no te das cuenta de cuál es el camino del
espíritu en los huesos en el vientre de la que está encinta, de igual manera no conoces la obra
del Dios verdadero, que hace todas las cosas.‖—Ecl. 11:5.
En vista de las incertidumbres de la vida y de que no está dentro del poder del hombre
cambiar ciertas leyes fijas, Salomón da este consejo: ―Por la mañana siembra tu semilla y hasta
el atardecer no dejes descansar tu mano; pues no sabes dónde tendrá éxito esto, ya sea aquí o
allí, o si ambos a la par serán buenos.‖ (Ecl. 11:6) Por lo tanto, el mejor derrotero es proseguir
diligentemente con nuestras labores, sin permitir que las incertidumbres nos preocupen a tal
grado que estorben nuestra actividad, sea que se trate de esfuerzo por adelanto espiritual,
trabajo seglar o actos de generosidad.
Esto puede contribuir a que uno tenga un punto de vista alegre de la vida. Escribió Salomón:
―La luz también es dulce, y bueno es para los ojos ver el sol; pues si viviere un hombre aun
muchos años, que en todos ellos se regocije.‖ (Ecl. 11:7, 8) Puesto que solo los que están vivos
pueden apreciar la luz y el Sol, aquí Salomón está indicando que es bueno estar vivo y que uno
debe disfrutar de la vida. Sin embargo, agrega un pensamiento que estimula a mirar a los
asuntos con seriedad: ―Que se acuerde de los días de oscuridad, aunque pudieran ser muchos;
todo día que ha venido es vanidad.‖ (Ecl. 11:8) Uno no debe perder de vista el hecho de que
puede perder su fuerza y vigor al sobrevenir los ―días de oscuridad‖ o la vejez. Reducido uno a
una condición de decrepitud, tal vez descubra que, a medida que la vida se prolonga por años,
cada día es vanidad, aparentemente vacío y sin significado. Por eso, mientras pueda, uno debe
esforzarse por disfrutar de manera sana de la vida, desplegando buen juicio y buscando la guía
de Dios en todo lo que hace.
*** w78 15/2 págs. 6-7 ¿Qué quiso decir el sabio? ***
*** w99 15/11 págs. 14-18 Acordémonos de nuestro Magnífico Creador ***
Recordemos ahora a Jehová
5
La persona que adora a Jehová de todo corazón desea emprender Su servicio tan pronto
como sea posible y permanecer en él toda la vida. Sin embargo, ¿cuáles son las perspectivas
de la persona que malgasta su juventud por no haberse acordado entonces de su Creador? El
congregador dice bajo inspiración divina: ―Acuérdate, ahora, de tu Magnífico Creador en los
días de tu mocedad, antes que procedan a venir los días calamitosos, o hayan llegado los años
en que dirás: ‗No tengo en ellos deleite‘‖ (Eclesiastés 12:1).
6
Nadie se deleita en ―los días calamitosos‖ de la vejez. Sin embargo, las personas mayores
que tienen presente a Dios se sienten contentas. Por ejemplo, el anciano Simeón tomó en
brazos al niño Jesús en el templo y declaró con gozo: ―Ahora, Señor Soberano, estás dejando
que tu esclavo vaya libre en paz, según tu declaración; porque mis ojos han visto tu medio de
salvar que has alistado a la vista de todos los pueblos, una luz para remover de las naciones el
velo, y una gloria de tu pueblo Israel‖ (Lucas 2:25-32). Ana, que contaba 84 años de edad,
también se acordaba de su Creador. Siempre estaba en el templo, y se hallaba presente
cuando se llevó allí al niño Jesús. ―En aquella misma hora se acercó y empezó a dar gracias a
Dios y a hablar acerca del niño a todos los que esperaban la liberación de Jerusalén.‖ (Lucas
2:36-38.)
7
Los testigos de Jehová de tiempos modernos que han envejecido en el servicio a Dios
posiblemente sufran los dolores y limitaciones de la edad avanzada. No obstante, se sienten
muy felices, y nosotros agradecemos de corazón su fiel servicio. Tienen ―el gozo de Jehová‖,
pues saben que él ha asumido su poder invencible con respecto a esta Tierra y ha instalado a
Jesucristo como poderoso Rey celestial (Nehemías 8:10). Ahora es el tiempo para que tanto
jóvenes como mayores observen la exhortación: ―Ustedes los jóvenes y también ustedes las
vírgenes, viejos junto con muchachos. Alaben ellos el nombre de Jehová, porque solo su
nombre es inalcanzablemente alto. Su dignidad está por encima de tierra y cielo‖ (Salmo
148:12, 13).
8
―Los días calamitosos‖ de la vejez son poco gratificantes —quizá muy penosos— para
aquellos que no tienen presente a su Magnífico Creador y que no entienden sus gloriosos
propósitos. Les falta la comprensión espiritual que puede contrapesar las pruebas de la edad
avanzada y los ayes que han acuciado a la humanidad desde que se echó a Satanás del cielo
(Revelación 12:7-12). Por ello, el congregador nos exhorta a acordarnos de nuestro Creador
―antes que se oscurezcan el sol y la luz y la luna y las estrellas, y hayan regresado las nubes,
después el aguacero‖ (Eclesiastés 12:2). ¿Qué significan estas palabras?
9
Salomón comparó la época de la juventud al verano palestino en el que el Sol, la Luna y
las estrellas emitían su luz en el cielo despejado. Todo parecía entonces muy brillante. Sin
embargo, en la vejez los días son como la temporada fría y lluviosa del invierno, con un
aguacero de problemas tras otro (Job 14:1). Sería muy triste saber del Creador pero no servirle
en el verano de la vida. En el invierno de la vejez, todo se oscurece, especialmente para
aquellos que han desaprovechado las oportunidades de servir a Jehová en su juventud por
haberse dedicado a actividades vanas. De modo que, no importa la edad que tengamos,
‗sigamos plenamente a Jehová‘, como el fiel Caleb, compañero leal del profeta Moisés (Josué
14:6-9).
Efectos de la edad avanzada
10
Salomón luego hace mención de las dificultades que acaecen ―el día en que tiemblen los
guardianes de la casa, y se hayan encorvado los hombres de energía vital, y las mujeres que
muelen hayan dejado de trabajar por haber llegado a ser pocas, y las señoras que ven por las
ventanas lo hayan hallado oscuro‖ (Eclesiastés 12:3). ―La casa‖ representa el cuerpo humano
(Mateo 12:43-45; 2 Corintios 5:1-8). Sus ―guardianes‖ son los brazos y las manos, que protegen
el cuerpo y satisfacen sus necesidades. En la vejez suelen temblar por debilidad, nerviosismo o
parálisis. ―Los hombres de energía vital‖ —las piernas— ya no son columnas fuertes, sino que
se han debilitado y encorvado de modo que los pies no pueden más que arrastrarse. En
cualquier caso, ¿no nos alegramos de ver a nuestros hermanos de edad avanzada en las
reuniones cristianas?
11
‗Las mujeres que muelen han dejado de trabajar porque han llegado a ser pocas.‘ ¿En qué
sentido? Puede que los dientes se hayan estropeado o caído, y que queden pocos o quizá
ninguno. Se hace difícil o imposible triturar el alimento sólido. ―Las señoras que ven por las
ventanas‖ —los ojos unidos a las facultades mentales que posibilitan la visión— se nublan, si
es que no se oscurecen por completo.
12
―Y —sigue diciendo el congregador— las puertas que dan a la calle hayan sido cerradas,
cuando el sonido del molino se haga quedo, y uno se levante al sonido de un pájaro, y todas
las hijas del canto suenen bajo.‖ (Eclesiastés 12:4.) Las dos puertas de la boca —los labios—
ya no se abren mucho o no se abren en absoluto para expresar lo que hay en ―la casa‖ —el
cuerpo— de las personas de edad avanzada que no sirven a Dios. No se emite nada a ―la
calle‖ de la vida pública. Sin embargo, ¿qué puede decirse de los celosos proclamadores del
Reino de edad avanzada? (Job 41:14.) Tal vez anden lentamente de casa en casa y a algunos
les cueste hablar, pero sin lugar a dudas alaban a Jah (Salmo 113:1).
13
El sonido del molino se hace quedo, pues se masca el alimento con las encías
desdentadas. El anciano no duerme profundamente de noche. Aun el gorjeo de los pájaros lo
despierta. Pocas son las canciones que entona y, si lo hace, es débilmente. ―Todas las hijas del
canto —las notas melódicas— suenan bajo.‖ El anciano no oye bien la música ni las canciones
que otros interpretan. Sin embargo, los ungidos de edad avanzada y sus compañeros, algunos
de los cuales ya no son tan jóvenes, siguen elevando su voz en cánticos de alabanza a Dios en
las reuniones cristianas. ¡Cuánto nos alegra tenerles a nuestro lado, ensalzando a Jehová en la
congregación! (Salmo 149:1.)
14
La suerte de las personas mayores, especialmente aquellas que han pasado por alto al
Creador, es muy triste. Dice el congregador: ―También se han llenado de temor meramente de
lo que es alto, y hay terrores en el camino. Y el almendro lleva flores, y el saltamontes se
arrastra, y la baya de la alcaparra se revienta, porque el hombre va andando a su casa de larga
duración y los plañidores han marchado alrededor por la calle‖ (Eclesiastés 12:5). Muchas
personas mayores tienen miedo de caerse cuando suben una escalera y miran hacia abajo.
Incluso mirar hacia arriba a algo alto puede marearles. Cuando tienen que caminar por calles
atestadas, les aterroriza la idea de lastimarse o ser asaltadas por algún ladrón.
15
En el caso del anciano, ―el almendro lleva flores‖, lo que al parecer indica que su cabello
se vuelve gris y luego blanco como la nieve. El pelo canoso cae como las blancas flores del
almendro. Se ‗arrastra‘, quizá encorvado y con los brazos colgando, o con las manos en la
cadera y los codos doblados hacia arriba, lo que le da la apariencia de un saltamontes. Si
alguno de nosotros encaja en cierto modo con esa descripción, dejemos que se vea claramente
que somos parte del rápido y enérgico ejército de langostas de Jehová (véase La Atalaya del 1
de mayo de 1998, págs. 8-13).
16
La persona de edad ya no tiene apetito, aunque el alimento que se ponga delante de ella
sea tan gustoso como la baya de la alcaparra. Estas bayas se han utilizado desde hace mucho
tiempo para estimular el apetito. El que ‗la baya de la alcaparra reviente‘ da a entender que
cuando la persona de edad pierde el apetito, ni siquiera este fruto despierta su deseo de
alimentarse. Todo ello indica que se aproxima a ―su casa de larga duración‖, el sepulcro. Este
será su casa para siempre a menos que haya tenido presente a su Creador y su proceder en la
vida no haya sido tan impropio que Dios no se acuerde de ella en la resurrección. La voz
lastimera y los quejidos que salen de las puertas de la boca del anciano son indicio de la
cercanía de la muerte.
17
Se nos exhorta a acordarnos de nuestro Creador ―antes que se remueva la cuerda de
plata, y se quebrante el tazón de oro, y se quiebre el jarro junto al manantial, y haya sido
quebrantada la rueda del agua para la cisterna‖ (Eclesiastés 12:6). ―La cuerda de plata‖ puede
referirse a la médula espinal. Cuando se daña irreparablemente este maravilloso conducto que
lleva los impulsos al cerebro, la muerte es inevitable. ―El tazón de oro‖ quizá haga referencia al
cerebro, que se halla en el interior del cráneo (parecido a un tazón), y que está unido a la
médula espinal. Es de oro por su inestimable valor, pues un fallo del cerebro augura la muerte.
18
―El jarro junto al manantial‖ es el corazón, que recibe y bombea el torrente sanguíneo para
que circule por todo el cuerpo. En el momento de la muerte, el corazón es como un jarro que se
rompe, que se hace añicos junto al manantial, porque ya no puede recibir, contener ni bombear
la sangre vital para el sustento y la revitalización del cuerpo. La ‗quebrantada rueda del agua
para la cisterna‘ deja de girar, y termina la circulación de la sangre que mantiene la vida.
De modo que Jehová reveló a Salomón la circulación de la sangre mucho antes de que la
descubriera el médico William Harvey en el siglo XVII.
19
El congregador añadió: ―Entonces el polvo vuelve a la tierra justamente como sucedía que
era, y el espíritu mismo vuelve al Dios verdadero que lo dio‖ (Eclesiastés 12:7). Una vez rota ―la
rueda del agua‖, el cuerpo humano, hecho en un principio del polvo del suelo, vuelve a este
(Génesis 2:7; 3:19). El alma muere porque el espíritu, o fuerza de vida, que Dios da vuelve al
Creador, en quien radica (Ezequiel 18:4, 20; Santiago 2:26).
*** w78 1/3 págs. 30-31 ¿Qué quiso decir el sabio? ***
Después de una investigación cabal de todo el alcance de los asuntos humanos, el rey
Salomón puso por escrito sus hallazgos. Tocante a sus esfuerzos por ayudar a otros a sacar
provecho de su investigación, escribió: ―Además de haberse hecho sabio el congregador,
también le enseñó a la gente conocimiento de continuo, y meditó e hizo un escudriñamiento
cabal, a fin de arreglar muchos proverbios ordenadamente. El congregador procuró hallar las
palabras deleitables y la escritura de palabras correctas de verdad.‖—Ecl. 12:9, 10.
La versión griega de los Setenta de Eclesiastés 12:9 y 10 dice: ―Y además, porque el
predicador era sabio, porque enseñó sabiduría a la humanidad; a fin de que el oído hallase lo
que es lindo de las parábolas, el predicador investigó diligentemente para hallar palabras
agradables y una escritura de rectitud... palabras de verdad.‖ (Thomson; 1 Rey. 4:29-34; vea
también The New English Bible y el Comentario de Ginsburg) En sus escritos él trató de
alcanzar a los lectores con palabras deleitables, con asuntos interesantes y verdaderamente
dignos de consideración. Puesto que recibió la ayuda del espíritu de Dios, hoy podemos
aceptar los hallazgos de Salomón sin duda. Además, el tiempo ha dejado probada su
veracidad.
¿A qué conclusión llegó Salomón en cuanto a toda la literatura que existía en su día?
Escribe: ―Las palabras de los sabios son como aguijones, y justamente como clavos hincados
son los que se entregan a las colecciones de sentencias; han sido dadas por parte de un solo
pastor. En cuanto a cualquier cosa además de éstas, hijo mío, acepta una advertencia: El
hacer muchos libros no tiene fin, y el aplicarse mucho a ellos le es fatigoso a la carne.‖—Ecl.
12:11, 12.
Por lo tanto, los escritos más provechosos son los que reflejan la sabiduría del ―un solo
pastor,‖ Jehová Dios. Sin embargo, la atención excesiva a otras fuentes de instrucción puede
fatigar innecesariamente a una persona, sin que obtenga mucho valor real y duradero.
Especialmente cuando esos escritos son producto del razonamiento mundano, y están en
pugna con la sabiduría piadosa, son nocivos y destruyen la fe. Por otra parte, las palabras de
los que tienen sabiduría en armonía con la guía divina obrarán como aguijones que incitarán a
los oyentes o lectores a adelantar en armonía con la sabiduría que se expresa. También, los
que se ocupan en coleccionar sentencias, es decir, dichos sabios genuinamente dignos de
consideración, son como clavos. Esto puede ser porque sus buenas palabras, que reflejan la
sabiduría de Jehová Dios, pueden servir para estabilizar y apoyar a los oyentes.
Resumiendo su entera investigación, dice Salomón: ―La conclusión del asunto, habiéndose
oído todo, es: Teme al Dios verdadero y guarda sus mandamientos. Porque esto es el deber
todo del hombre. Porque el Dios verdadero mismo traerá toda clase de obra a juicio con
relación a toda cosa escondida, en cuanto a si es buena o es mala.‖ (Ecl. 12:13, 14) Un temor o
respeto sano al Creador nos protegerá contra el adoptar en la vida un derrotero temerario que
pudiera acarrear sobre nosotros incalculable dificultad. También, el reconocer que nada pasa
inadvertido para el Creador puede servir como incentivo que lleve a la observación de sus
mandamientos. El Altísimo juzgará todas las cosas, incluso las cosas que están escondidas de
la vista de los seres humanos. Puesto que sus mandatos tienen el fin de promover nuestro
bienestar duradero, ¿no es correcto y verdaderamente sabio observarlos?
*** w87 15/9 págs. 24-25 ―Teme al Dios verdadero y guarda sus mandamientos‖ ***
Puntos sobresalientes de la Biblia Eclesiastés 1:1–12:14
En estos tiempos, para muchos el temer y obedecer a Dios es, a lo más, algo sin valor práctico.
Pero el libro de Eclesiastés (hebreo: Qo·hé·leth, congregador), escrito hace unos 3.000 años
por el rey Salomón (1:1), describe la futilidad de los esfuerzos humanos que pasan por alto el
propósito de Dios.
Lo que hace tan fascinante a este libro es la amplia diversidad de asuntos que investiga el
escritor: la sabiduría y la gobernación humanas, la riqueza material y los placeres, la religión
formalista, y así por el estilo. Todo esto es vanidad, porque no es duradero. Por otra parte, el
meditar en ello lleva a la mente perspicaz a una sola conclusión: ―Teme al Dios verdadero y
guarda sus mandamientos. Porque este es todo el deber del hombre‖. (Eclesiastés 12:13.)
―¡Todo es vanidad!‖
Sírvase leer los capítulos 1 y 2. En comparación con los ciclos interminables de la naturaleza,
todo el esfuerzo humano es efímero y temporero (1:4-7). Hasta los grandes logros del
congregador han de pasarse a alguien que quizás sea menos digno (2:18, 19). En hebreo
―vanidad‖ significa ―vapor‖ o ―aliento‖.
· 1:9.—¿En qué sentido no hay ―nada nuevo bajo el sol‖?
En los ciclos naturales de la vida cotidiana sobre los cuales brilla el Sol no hay nada realmente
nuevo. Hasta las invenciones ―nuevas‖ son principalmente aplicaciones de principios que
Jehová ya ha aplicado en la creación. Pero ―bajo el sol‖ Jehová ha causado nuevos
desenvolvimientos espirituales que tienen su efecto en la humanidad. (Véase La Atalaya, 1 de
marzo de 1987, páginas 27-29.)
· 2:2.—¿Hay algo malo en divertirse?
El divertirse no es malo. La risa, o la diversión, puede alejar de la mente por el momento los
problemas, pero no los elimina. Por lo tanto, el tratar de hallar felicidad verdadera por la
diversión es ―demencia‖; no tiene sentido. Tampoco el ―regocijo‖ resuelve los problemas de la
vida. El gozar y los placeres se contrastan, así, con la felicidad que resulta de que Jehová
bendiga el trabajo de uno (2:24).
Lección que aprendemos: Debemos escuchar el consejo de Salomón y no tener como único
objetivo en la vida el buscar las ventajas materiales y la emoción de experiencias nuevas. Más
bien, deberíamos ser ‗buenos delante de Jehová‘ mediante obedecerle. Entonces
disfrutaremos de su bendición de ―sabiduría y conocimiento y regocijo‖ (2:26).
Todo tiene su tiempo
Lea los capítulos 3 y 4. Salomón no estaba abogando por un punto de vista fatalista de la vida
(3:1-9). Más bien, señalaba que al hombre se le hace imposible alterar lo que Dios ha puesto
en movimiento (3:14). A este respecto, los humanos no son mejores que las bestias (3:19-21).
Por eso, una actitud de cooperación (4:9-12) resulta más remuneradora que un espíritu de
competencia (4:4).
· 3:11.—¿Cómo ha hecho todo ―bello a su tiempo‖ Dios?
La palabra ―bello‖ también tiene el significado de ―bueno, propio, apropiado‖. Al debido tiempo
se revelará dónde encuadra apropiadamente toda obra de Dios en Su propósito. Dios ha hecho
muchas cosas ‗bellas‘ para la humanidad. Por ejemplo, dio un comienzo perfecto a la
humanidad en Edén. Predijo la venida de una Descendencia redentora cuando el hombre cayó
en el pecado. Al tiempo apropiado, Dios envió aquella Descendencia. Y ‗lo más bello‘ de todo
es que Jehová ha hecho que la Descendencia sea el Rey de Su Reino.
· 4:6.—¿Abogaba Salomón por una vida despreocupada?
No. Pero Salomón observó que el trabajo arduo y la eficiencia por el lucro suelen conducir a
competencias y rivalidad (4:4). A su vez, esto puede resultar en problemas y hasta en muerte
prematura. (1 Timoteo 6:9, 10.) Por eso, ¿cuál es el punto de vista equilibrado? Esté contento
con menos ganancia junto con tranquilidad, más bien que con doblar la ganancia junto con afán
y contienda.
Lección que aprendemos: Ahora es cuando debemos buscar primero el Reino de Dios, más
bien que buscar lo que satisface nuestra ambición personal (3:1). Debemos trabajar en
cooperación con nuestros compañeros cristianos más bien que en aislamiento (4:9-12). De ese
modo podemos recibir la ayuda y el estímulo que necesitamos a pesar de las dificultades y la
oposición.
La adoración verdadera satisface
Lea los capítulos 5 y 6. Puesto que Jehová es todopoderoso, debemos tomar en serio nuestra
relación con él, y no obrar como tontos y esperar que él acepte nuestro ―sacrificio‖ (5:1, 2). El
que teme a Dios recibe satisfacción de usar su caudal o riqueza material, pero el que la
acapara no obtiene ningún disfrute. (Compárese 5:18-20 con 6:2, 3.)
· 5:2.—¿Cómo se aplica este consejo?
Debemos expresar nuestros sentimientos más íntimos a Dios, pero, debido a su grandeza y
majestad, no expresar palabras impulsivas, irreflexivas. (Salmo 62:8.) Más bien que divagar,
debemos expresarnos sencilla y sinceramente. (Mateo 6:7.) Con solo cinco cortas palabras
hebreas Moisés hizo una súplica a favor de Míriam y recibió respuesta favorable. (Números
12:13.)
· 6:9.—¿Qué es ―el andar de un lugar a otro del alma‖?
―Alma‖ aquí significa ―deseo del alma‖. Por eso, esta expresión se refiere a procurar siempre
satisfacer deseos que no pueden ser satisfechos. Esto se contrasta con ―el ver de los ojos‖ es
decir, enfrentarse a la realidad. Así, pues, porque sabemos que solo el Reino de Dios puede
traer un cambio verdadero, debemos desplegar contentamiento y no permitir que deseos no
realistas o inalcanzables nos priven de la tranquilidad.
Lección que aprendemos: En el lugar donde adoramos debemos comportarnos con la
dignidad debida y prestar atención (5:1). También debemos estar prestos para cumplir con
nuestras obligaciones ante Jehová. Si somos casados, esto incluye cumplir con nuestro voto
matrimonial (5:4).
Palabras de sabiduría
Lea los capítulos 7 y 8. El congregador considera cómo la muerte inspira seriedad (7:1-4), y el
valor de la sabiduría (7:11, 12, 16-19); también advierte contra la mujer mala (7:26). Se
aconseja sobre asuntos como obrar prudentemente para con los gobernantes (8:2-4) y no
encolerizarse por las injusticias (8:11-14).
· 7:28.—¿Rebajan a las mujeres estas palabras?
Parece que la norma moral que reinaba entre la gente en aquel tiempo era muy baja. Por eso,
Salomón hablaba de lo raro que era hallar hombres o mujeres justos en aquel tiempo. Entre mil
personas, era difícil hallar un solo hombre justo, y más difícil aún hallar una mujer justa. Sin
embargo, la Biblia habla de la ―mujer excelente‖ y de la ―esposa capaz‖. (Rut 3:11; Proverbios
31:10.) Este versículo también puede ser profético, porque nunca ha dado una mujer
obediencia perfecta a Jehová, mientras que ha habido un hombre que lo ha hecho: Jesucristo.
· 8:8.—¿De qué hablaba aquí el congregador?
Hablaba de la muerte. Nadie puede evitar que la fuerza vital salga de sus células y así
posponer el día de la muerte. En la guerra que tenemos con nuestro enemigo común, la
muerte, nadie puede licenciarse ni enviar un sustituto. (Salmo 49:7-9.) Ni siquiera los inicuos
con sus proyectos engañosos pueden escapar de la muerte.
Lección que aprendemos: Aunque las riquezas materiales se han convertido en la meta de
muchos en la vida, solo la sabiduría piadosa puede llevarnos a la vida eterna (7:12; Lucas
12:15). El anhelar ‗los buenos días del pasado‘ no mejorará nada para nosotros (7:10). En
realidad ‗nos resultará bien‘ solo si continuamos temiendo a Dios (8:5, 12).
Los sucesos imprevistos de la vida
Lea los capítulos 9 y 10. La vida es preciosa, y Dios quiere que disfrutemos de ella (9:4, 7).
Puesto que no tenemos dominio sobre el resultado de la vida (9:11, 12), es mejor escuchar la
sabiduría divina, aunque la mayoría de la gente no la aprecie (9:17). En vista de las
incertidumbres de la vida, debemos vigilar el corazón (10:2), ejercer cautela en todo lo que
hacemos, y obrar con sabiduría práctica (10:8-10).
· 9:1.—¿Cómo están en la mano de Dios las obras de los justos?
Aunque la calamidad ataca a los sabios y a los justos, esto sucede únicamente por permiso de
Dios, y él nunca los abandonará. Por la ―mano‖ o poder aplicado de Dios los justos pueden ser
librados de una prueba, o recibir fortaleza para aguantarla. (1 Corintios 10:13.) El recordar esto
puede consolar al siervo de Jehová cuando se encuentra en dificultades.
· 10:2.—¿Cómo está a la diestra el corazón?
La ―diestra‖ o ―derecha‖ a menudo denota una posición de favor. (Mateo 25:33.) Por eso, el
hecho de que el corazón del sabio esté ―a su diestra‖ indica que lo mueve a seguir un proceder
bueno, favorable. Pero el individuo estúpido carece de buen motivo y obra tonta e
impropiamente. El que su corazón esté a su ―siniestra‖ indica que sus motivos lo llevan por la
senda incorrecta.
Lección que aprendemos: Puesto que cualquiera de nosotros puede morir súbitamente
(9:12), debemos usar la vida en el servicio de Jehová por si la muerte pone fin a todo cuanto
hacemos (9:10). También es necesario que seamos hábiles en nuestro servicio, porque la
ineptitud, aun en asuntos sencillos como cavar un hoyo o cortar madera, puede causarnos
daño a nosotros y perjudicar a otros (10:8, 9).
La juventud y el propósito de la vida
Lea los capítulos 11 y 12. Todos debemos practicar la generosidad y tomar acción decisiva
(11:1-6). Los jóvenes que usan bien su tiempo y energía en servir al Creador no se lamentarán
más tarde en la vida al respecto (11:9, 10). Más bien, tendrán la satisfacción de agradar a Dios
antes de perder la salud y el vigor (12:1-7). (Véase La Atalaya, 15 de febrero de 1978,
página 7.)
· 11:1.—¿Qué quiere decirse con ―envía tu pan‖?
El pan sostiene la vida. El enviarlo sobre ―aguas‖ es privarse de algo valioso. Sin embargo, ―lo
hallarás otra vez‖ porque, del modo que no espera, el generoso será recompensado. (Lucas
6:38.)
· 12:12.—¿Por qué se presenta un punto de vista tan negativo acerca de los libros?
En comparación con la Palabra de Jehová, ‗el sinfín‘ de obras escritas del mundo contiene
simple razonamiento humano. Mucho de este pensar refleja la mente de Satanás. (2 Corintios
4:4.) Por consiguiente, el ―aplicarse mucho‖ a este material seglar resulta en poco que sea de
valor duradero.
Lección que aprendemos: Como Salomón, debemos meditar en lo que dice la Palabra de
Dios acerca de la vida. Entonces nos fortaleceremos en nuestra resolución de temer y
obedecer a Dios. El saber que Jehová se interesa íntimamente en nosotros (12:13, 14) nos
acerca más a él.
Por lo tanto, ‗temamos al Dios verdadero y guardemos sus mandamientos‘. Esta es nuestra
obligación y nos traerá felicidad duradera.
*** w06 1/11 págs. 13-16 Puntos sobresalientes del libro de Eclesiastés ***
¿QUÉ COSAS NO SON VANIDAD?
(Eclesiastés 1:1–6:12)
―¡Todo es vanidad!‖, exclama el congregador, para luego preguntar: ―¿Qué provecho tiene el
hombre en todo su duro trabajo en que trabaja duro bajo el sol?‖ (Eclesiastés 1:2, 3). ―Vanidad‖
y ―bajo el sol‖ son expresiones que se repiten en este libro. El término hebreo traducido
―vanidad‖ quiere decir literalmente ―aliento‖ o ―vapor‖, y transmite la idea de algo insustancial,
sin permanencia ni valor perdurable. La fórmula ―bajo el sol‖ significa ―en la Tierra‖ o ―en este
mundo‖. Así pues, todo es vanidad, entendiendo por ―todo‖ el conjunto de los afanes del
hombre que no tiene presente la voluntad de Dios.
―Guarda tus pies [o, ten mucho cuidado] siempre que vayas a la casa del Dios verdadero; y
[tienes] que [...] acercar[te] para oír‖, advierte Salomón (Eclesiastés 5:1). La participación en la
adoración verdadera no es vanidad. De hecho, dar la debida atención a nuestra relación con
Jehová Dios es la clave para vivir con propósito.
Respuestas a preguntas bíblicas:
1:4-10. ¿Por qué se dice que los ciclos naturales son ―cosas [...] fatigosas‖? El
congregador menciona tan solo tres fenómenos que posibilitan la vida en la Tierra: el curso del
Sol, las evoluciones del viento y el ciclo del agua. En realidad, los fenómenos naturales son
muy numerosos y complejos; tanto, que podemos estudiarlos toda una vida sin llegar a
comprenderlos, lo que puede convertirse en una ocupación ‗fatigosa‘. Además, ¡qué triste es
que la vida sea tan corta en comparación con estos ciclos, que se repiten sin cesar! Hasta las
tentativas de realizar descubrimientos son agotadoras. Al fin y al cabo, toda innovación no hace
más que aplicar algún principio que el Dios verdadero estableció y luego utilizó en la creación.
2:1, 2. ¿Por qué se llama ―demencia‖ a la risa? Tal vez la risa consiga que nos olvidemos
de las preocupaciones por un momento, y la diversión, que le quitemos importancia a los
problemas. Pero la risa no elimina las dificultades. Por esta razón se dice que buscar la
felicidad en la risa es pura ―demencia‖.
3:11. ¿Qué ―ha hecho [Dios] bello a su tiempo‖? Entre lo que ha hecho ―bello‖ —o bueno
y apropiado— en el momento preciso, figuran la creación de Adán y Eva, la alianza del arco
iris, los pactos con Abrahán y David, la venida del Mesías y la entronización de Cristo como
Rey del Reino de Dios. Y tenemos la certeza de que hay algo más que Jehová hará ―bello‖ en
el futuro próximo: el nuevo mundo de justicia se hará realidad a su debido tiempo (2 Pedro
3:13).
3:15b. ¿Qué significa la afirmación de que ―el Dios verdadero mismo continúa
buscando aquello tras lo cual se sigue‖? La frase ―aquello tras lo cual se sigue‖ (o ―lo
perseguido‖; La Palabra de Dios para todos, nota) puede referirse a cualquier cosa que Dios
persigue, es decir, que se propone hacer. Los seres humanos tal vez se sientan con las manos
atadas y piensen que la historia se repite vez tras vez, pues ven que alternan sin parar el
nacimiento y la muerte, así como la guerra y la paz. Sin embargo, el Dios verdadero sí puede
buscar cualquier objetivo que desee y efectuarlo (Eclesiastés 3:1-10, 15a). Por otro lado, la
frase pudiera referirse a la persona del justo, que muchas veces es perseguido por los
malvados. En tal caso, Jehová no deja de buscar a tal hombre con objeto de ―mostrar su fuerza
a favor de [este]‖ (2 Crónicas 16:9).
5:9. ¿Qué quiere decir que ―el provecho de la tierra está entre todos ellos‖? Toda la
gente depende del ―provecho de la tierra‖, es decir, de la producción de los campos. Y el rey
no es la excepción, pues él mismo se sirve del duro trabajo de sus cultivadores para
beneficiarse del fruto de la tierra.
Lecciones para nosotros:
1:15. Es inútil gastar tiempo y energías tratando de corregir los actos de opresión e injusticia
que vemos en la actualidad. El Reino de Dios es lo único que logrará eliminar la maldad (Daniel
2:44).
2:4-11. La arquitectura, la jardinería, la música y cualquier otra actividad cultural, así como
los lujos de la vida, no son más que maneras de ―esforzarse tras viento‖, pues no aportan a la
vida ni verdadero sentido ni felicidad perdurable.
2:12-16. En comparación con la tontería, la sabiduría tiene la ventaja de que ayuda a
resolver ciertos problemas. Pero a la hora de la muerte, la sabiduría humana no ofrece
ventajas. Hasta si una persona se ha hecho famosa por tener tal sabiduría, pronto caerá en el
olvido.
2:24; 3:12, 13, 22. No hay nada malo en disfrutar de los frutos de nuestro trabajo.
2:26. La sabiduría divina, fuente de regocijo, solo la recibe el ―hombre que es bueno delante
de [Jehová]‖, pues es imposible conseguirla a menos que se tenga una buena relación con
Dios.
3:16, 17. No es realista esperar que siempre se haga justicia. En vez de inquietarnos por la
situación del mundo, debemos esperar a que Jehová se encargue de arreglarla.
4:4. Podemos sentirnos muy satisfechos si trabajamos con empeño y destreza. Ahora bien,
si lo hacemos tan solo por sobresalir, alentaremos la rivalidad, las malas intenciones y los celos
de otras personas. Todos los esfuerzos que hagamos en el ministerio cristiano deben tener una
buena motivación.
4:7-12. Las relaciones humanas importan más que los bienes materiales, y no deberían
sacrificarse por estos.
4:13. El rango y la edad no siempre se ganan el respeto. Quienes ocupan cargos de
responsabilidad deben actuar sabiamente.
4:15, 16. ―El niño, que es segundo‖ —o sea, el sucesor del rey—, tal vez cuente al principio
con el respaldo de ―todos aquellos [que están] delante‖ de él, pero al final ―tampoco se
regocijará por él la gente‖, es decir, le retirarán su favor. Sin duda, la popularidad suele ser
efímera.
5:2. Las oraciones deben caracterizarse por la meditación y la reverencia, no por la
palabrería.
5:3-7. La preocupación por los bienes materiales pudiera llevarnos a fantasear con metas
egoístas e incluso perturbar nuestro descanso nocturno, volviendo el sueño agitado y ligero.
Por otro lado, la abundancia de palabras quizás logre que uno parezca estúpido o que haga
una promesa precipitada a Dios. Quien ―teme al Dios verdadero‖ evitará ambas trampas.
6:1-9. ¿De qué vale tener riquezas, fama, longevidad e incluso una gran familia si las
circunstancias nos impiden disfrutar de estas cosas? ―Mejor es el ver de los ojos [es decir,
enfrentarse a la realidad] que el andar de un lugar a otro del alma [o del ―deseo del alma‖,
según la nota]‖, luchando por hacer realidad deseos que nunca van a quedar satisfechos.
Lo más sabio es contentarse ―teniendo [...] sustento y con qué cubrirnos‖, gozar de placeres
sanos y centrarse en mantener una relación estrecha con Jehová (1 Timoteo 6:8).
CONSEJOS PARA LOS SABIOS
(Eclesiastés 7:1–12:8)
¿Cómo defendemos nuestro buen nombre? ¿Qué actitud debemos tener ante los gobiernos
y las injusticias que vemos? Dado que si morimos no tendremos conciencia de nada, ¿cómo
conviene vivir ahora? ¿Cuál es la mejor forma de usar el tiempo y las energías durante la
juventud? En los capítulos 7 a 12 de Eclesiastés hallaremos los sabios consejos del
congregador sobre estos asuntos.
Respuestas a preguntas bíblicas:
7:19. ¿En qué sentido es más fuerte la sabiduría que ―diez hombres en poder‖? La
Biblia utiliza a veces el número 10 como símbolo de plenitud. En este versículo Salomón indica,
por lo tanto, que la sabiduría protege mejor a uno que el número pleno de los guerreros que
guardan una ciudad.
10:2. ¿Qué quiere decir que el corazón de una persona esté ―a su diestra‖ o ―a su
siniestra‖? La derecha suele referirse a la posición de favor. Figurativamente, si el corazón
está a la diestra, inclina a la persona a obrar bien, y si está a la siniestra, a actuar mal.
10:15. ¿Qué significa la frase ―el duro trabajo de los estúpidos los fatiga‖? Por más
que se esfuercen, quienes carecen de buen juicio no logran producir nada de verdadera utilidad
ni se satisfacen con lo que consiguen. Afanándose una y otra vez, solo logran agotarse.
11:7, 8. ¿Por qué se dice que ―la luz también es dulce, y bueno es para los ojos ver el
sol‖? Tanto el Sol como la luz son para el disfrute de los seres vivos. Así, Salomón indica en
estos versículos que es bueno estar vivo y que uno ―se regocije‖ antes de que lleguen los días
oscuros, o sea, la vejez que nos deja sin vitalidad.
11:10. ¿Por qué son vanidad ―la juventud y la flor de la vida‖? A menos que se usen
bien, los días del vigor juvenil son vanidad, pues se esfuman muy rápido, como si fueran vapor.
Lecciones para nosotros:
7:6. Conviene evitar la risa inoportuna, pues es tan irritante y tan inútil como el chisporroteo
de los espinos al quemarse bajo una olla.
7:21, 22. No deben perturbarnos los comentarios de la gente.
8:2, 3; 10:4. Cuando nos critique o corrija el patrón o el jefe, es sabio mantener la calma.
Es mejor que ‗darse prisa y salir de delante de él‘, o lo que es lo mismo, apresurarse a
renunciar.
8:8; 9:5-10, 12. La muerte pudiera atraparnos inesperadamente, como la red al pez y la
trampa al ave. Además, los seres humanos no tenemos la capacidad de impedir que se escape
la fuerza vital cuando llega la muerte ni la capacidad de librarnos de la guerra que esta hace
contra nosotros; por eso, no debemos desperdiciar el tiempo. Jehová desea que valoremos la
vida y la disfrutemos sanamente. Para ello, el servicio a Jehová tiene que ocupar el primer
lugar.
8:16, 17. Es imposible comprender a la perfección cada una de las cosas que Dios ha hecho
o que ha permitido que ocurra en el mundo. No lo lograríamos aunque nos desveláramos
pensando. Lo único que conseguiríamos preocupándonos por todas las injusticias que se han
cometido sería perder la alegría de vivir.
9:16-18. Tenemos que valorar la sabiduría aunque la mayoría de las personas no lo hagan.
Las palabras calmadas del sabio son preferibles a los gritos escandalosos del necio.
10:1. Hay que tener cuidado con nuestra forma de actuar y hablar. Basta con un único
desliz, como una reacción furiosa, un exceso con el alcohol o una acción contraria a la
castidad, para echar a perder el respeto y el buen nombre de que gozábamos.
10:5-11. No debemos envidiar al incompetente que ocupa un alto cargo, pues su ineptitud
puede tener malas consecuencias aun cuando solo esté realizando una tarea sencilla. Más
bien, cultivemos el arte de ―usar la sabiduría para lograr éxito‖. ¡Qué importante es ser hábiles
en la obra de predicar el Reino y hacer discípulos!
11:1, 2. Debemos ejercitar la generosidad sin reservas. De este modo fomentaremos la
generosidad del prójimo (Lucas 6:38).
11:3-6. Aunque la vida sea impredecible, no seamos indecisos.
11:9; 12:1-7. Los jóvenes también tienen que rendir cuentas de sus actos a Jehová. Por ello,
hacen bien en utilizar su tiempo y energías para servirle antes de que la vejez les robe el vigor.
*** w87 15/11 págs. 24-25 ¡El amor verdadero triunfa! ***
Puntos sobresalientes de la Biblia El Cantar de los Cantares 1:1–8:14
Hay un amor que nunca falla. Es constante, duradero y triunfante. Ese amor inquebrantable
existe entre Jesucristo y su ―novia‖ o congregación engendrada por espíritu. (Revelación
21:2, 9; Efesios 5:21-33.) ¡Y qué hermoso cuadro se da de este amor en el Cantar de los
Cantares!
Compuesta hace unos 3.000 años por el sabio rey Salomón, de Israel, esta ―canción
superlativa‖ (1:1) cuenta del amor que existía entre un pastor y una campesina de la aldea de
Sunem (Schulem). A pesar de toda su riqueza y esplendor, el rey no pudo ganarse el amor de
la sulamita, porque ella era leal a su pastor amado.
Cuando este libro poético se lee con el cuidado y el aprecio debidos, da a los siervos solteros y
casados de Jehová mucho en qué pensar respecto a la pureza, la ternura, la lealtad y el amor
duradero que deben caracterizar al matrimonio cristiano. Sí, todos podemos beneficiarnos de
esta canción acerca del triunfo del amor verdadero.
La sulamita en el campamento de Salomón
Sírvase leer El Cantar de los Cantares 1:1-14. En las tiendas reales, la sulamita se expresó
como si su pastor amado estuviera presente. Salomón ensalzó la belleza de la joven y prometió
adornarla con artículos de oro y de plata. Pero la doncella resistió sus intentos y le dejó saber
que daba su amor verdadero solamente al pastor.
· 1:2, 3.—¿Por qué eran apropiadas estas comparaciones con el vino y el aceite?
El vino alegra el corazón y fortalece al alma deprimida. (Salmo 104:15; Proverbios 31:6.) Se
derramaba aceite sobre huéspedes favorecidos debido a las propiedades calmantes de esta
sustancia. (Salmo 23:5; Lucas 7:38.) Así, la sulamita angustiada se sentía fortalecida y
consolada al recordar las ―expresiones de cariño‖ y el ―nombre‖ del pastor. De manera similar,
el resto de los seguidores ungidos de Cristo se sienten animados al meditar en el amor que les
muestra y las garantías que les da su Pastor, Jesucristo, aunque todavía están en el mundo y
separados de Jesús.
Lección que aprendemos: Salomón hubiera adornado a la sulamita con ―adornos circulares
de oro‖ y ―tachones de plata‖, pero ella resistió estas tentaciones materiales y expresó
firmemente el amor inquebrantable que sentía por el pastor (1:11-14). El reflexionar en la
actitud de la sulamita puede fortalecer a la clase de la ―novia‖ en su resolución de rechazar el
materialismo seductor del mundo y permanecer fiel a su Novio celestial. Si nuestras
esperanzas son terrenales y estamos pensando en el matrimonio, que el ejemplo de esta
doncella nos mueva a interesarnos principalmente en lo espiritual, no en lo material.
Anhelo mutuo
Lea 1:15–3:5. El pastor entró en el campamento real y le expresó a la sulamita, quien lo
estimaba sobre todos los demás, su amor por ella. Cuando fueron separados, la doncella
recordó los tiempos de que había disfrutado con su amado y suplicó que él volviera
apresuradamente a su lado. Por la noche, anhelaba su presencia.
· 2:1-3.—¿Qué significan estas figuras retóricas?
La sulamita se llamó a sí misma ―un simple azafrán de la llanura costanera‖ porque era una
joven humilde y modesta que a sus propios ojos era solo una entre muchas flores comunes. Sin
embargo, el pastor se daba cuenta de que ella era ―un lirio entre yerbajo espinoso‖, que era
atractiva, capacitada y fiel a Jehová. Para la doncella, su pastor era ―como un manzano entre
los árboles del bosque‖ porque era un joven inclinado a lo espiritual que también mostraba
devoción a Dios y tenía cualidades y aptitudes muy deseables. El cristiano no casado que
quiere encontrar cónyuge debe interesarse sólo en alguien que, como compañero de creencia
fiel, tenga cualidades como las de la sulamita o su pastor amado.
· 3:5.—¿Por qué estaba asociado con estos animales este juramento?
Las gacelas y las ciervas son mansas, delicadas y hermosas, además de ser rápidas y de paso
firme. En esencia, pues, la doncella estaba poniendo a las ―hijas de Jerusalén‖ bajo juramento
por todo lo que es delicado y hermoso. Por estas criaturas, estaba obligando a aquellas
mujeres a no tratar de despertar amor en ella por nadie que no fuera su pastor amado.
Lección que aprendemos: La doncella puso a las ―hijas de Jerusalén‖, o las mujeres de la
corte que atendían al rey, bajo el juramento de ‗no incitar amor en ella sino hasta que este se
sintiera inclinado‘ (2:7; 3:5). Esto indica que no es posible sentir amor romántico por cualquier
persona. La doncella misma no se sentía atraída a Salomón. Por eso, ¡cuán prudente es que la
persona cristiana no casada que esté pensando en contraer nupcias considere solo a otra
persona elegible que adore y sea fiel a Jehová y que realmente pueda ser amada! (1 Corintios
7:39.)
La doncella en Jerusalén
Lea 3:6–6:3. Salomón regresó a Jerusalén en esplendor. El pastor se comunicó con la doncella
allí y la fortaleció con expresiones de cariño. En un sueño, ella se demoró en responder cuando
su amado tocó a la puerta, y fue maltratada por los vigilantes mientras lo buscaba
desesperadamente. Cuando se le preguntó en qué sobresalía su amado, ella dio a las ―hijas de
Jerusalén‖ una hermosa descripción de él.
· 5:12.—¿Por qué se dice que los ojos del pastor eran ‗como palomas que se bañaban en
leche‘?
Antes, los ojos de la sulamita habían sido comparados a los de una paloma porque eran
tiernos, amables (1:15; 4:1). A ese respecto, el pastor había llamado a la doncella misma su
―paloma‖ (5:2). Aquí la profundamente enamorada joven comparó los ojos del pastor a palomas
azulgrisáceas que se bañaban en charcos de leche (5:8, 12). Probablemente esta comparación
se refería al oscuro iris de los ojos del pastor, rodeado por la parte blanca y brillante del globo
ocular.
Lección que aprendemos: La sulamita era como ―un jardín cerrado con barras‖ (4:12). En el
antiguo Israel un jardín solía ser un lugar parecido a un parque, un verdadero paraíso con una
buena fuente de agua y una variedad de vegetales, flores y árboles. Por lo general estaba
encerrado por un seto o muro, y solo se podía entrar en él por una puerta que se mantenía
cerrada. (Isaías 5:5.) Para el pastor, la pureza y belleza morales de la sulamita eran como un
jardín de rara belleza, excelente fruto, deliciosas fragancias y estimulante agradabilidad. Ella no
daba sus expresiones de afecto a cualquier hombre, porque era casta, como ―un jardín cerrado
con barras‖ para los intrusos no deseados, y abierto solo a su dueño legítimo. Así, la sulamita
dio un excelente ejemplo de rectitud y lealtad moral a las cristianas no casadas de hoy día.
―La llama de Jah‖
Lea 6:4–8:14. Salomón alabó la belleza de la doncella, pero ella lo rechazó y declaró su
devoción al pastor. Salomón, al no poder ganarse su amor, dejó que ella regresara a su hogar.
Con su ―amado‖ a su lado, ella regresó a Sunem como mujer madura de estabilidad probada.
El amor entre ella y el pastor era tan fuerte como la muerte, y sus llamaradas eran como ―la
llama de Jah‖.
· 6:4.—¿A qué se refería la expresión: ―Ciudad Placentera‖?
Esta expresión se puede verter ―Tirzá‖, que significa: ―Agradabilidad, Deleite‖. Tirzá era una
ciudad de renombrada belleza que llegó a ser la primera capital del reino norteño o
septentrional de Israel. (1 Reyes 14:17; 16:5, 6, 8, 15.)
· 7:4.—¿Por qué se asemejaba a una ―torre de marfil‖ el cuello de la doncella?
Aparentemente tenía la suavidad del marfil y la esbeltez de una torre. Anteriormente su cuello
había sido asemejado a ―la torre de David‖, quizás la torre de la Casa del Rey en el muro
oriental de Jerusalén. Sobre esta ‗colgaban mil escudos circulares de los hombres poderosos‘,
lo que sugiere que el esbelto cuello de la sulamita estaba adornado con un collar que tenía
ornamentos o joyas redondas. (4:4; Nehemías 3:25-27.)
· 8:6, 7.—¿Cómo es el amor ―tan fuerte como la muerte‖?
Sin fallar, la muerte ha reclamado la vida de los humanos pecaminosos, y el amor verdadero
tiene una fuerza comparable a esa. En su insistencia en devoción exclusiva, ese amor es tan
inexorable como lo es el Seol (el sepulcro) en exigir los cadáveres de los muertos. Puesto que
Jehová Dios puso en los humanos la capacidad de amar, esta cualidad proviene de él y
apropiadamente es llamada ―la llama de Jah‖. Ni siquiera el rico rey Salomón podía comprar tal
amor.
Lección que aprendemos: La experiencia de la sulamita con el rey Salomón fue una prueba
escrutadora que ella pasó con éxito. No era inestable en el amor y la virtud, como una puerta
que se moviera fácilmente en sus goznes y tuviera que ser atrancada con un tablón de cedro
para que no se abriera a nadie indeseable o dañino. No; la doncella triunfó de cuanto el rey le
presentó para ganársela y permaneció firme como un muro contra todas las atracciones
materiales de este mundo. De manera semejante, con confianza en Dios y recordando el
excelente ejemplo de la sulamita, las cristianas de hoy día pueden dar prueba de que son
personas que se mantienen firmes en los principios de la virtud, para la alabanza de Jehová
(8:8-10).
De seguro esta ―canción superlativa‖ cuyo tema es el amor aumenta nuestro aprecio del vínculo
que existe entre Jesús y los que han sido escogidos para ser su ―novia‖ celestial. Pero tanto la
gente joven como los esposos y esposas dedicados a Jehová pueden beneficiarse de sus
esfuerzos al imitar la integridad de la sulamita y del pastor frente a pruebas y tentaciones. Y
esta espléndida porción de la Palabra de Dios debe impulsarnos a todos a permanecer siempre
leales a Jehová, la Fuente del amor triunfante.
*** w06 15/11 págs. 17-20 Puntos sobresalientes del libro de El Cantar de los Cantares ***
‗NO TRATEN DE DESPERTAR AMOR EN MÍ‘
(El Cantar de los Cantares 1:1–3:5)
―Béseme él con los besos de su boca, porque tus expresiones de cariño son mejores que el
vino.‖ (El Cantar de los Cantares 1:2.) Con estas palabras de una humilde campesina, a quien
se lleva a la tienda de Salomón, comienza el diálogo de este cantar. Pero ¿cómo fue que llegó
ante la presencia del rey esta joven?
―Los hijos de mi propia madre se encolerizaron conmigo —explica ella—; me nombraron
guardiana de las viñas.‖ Sus hermanos están molestos porque un pastor —el joven del que ella
está enamorada— la ha invitado a pasear ese precioso día de primavera, pero ellos no quieren
que vaya. Por esta razón, la han enviado a proteger las viñas de ―las zorras pequeñas que [las]
están echando a perder‖. Esta tarea lleva a la joven cerca del campamento de Salomón.
Cuando baja ―al jardín de los nogales‖, su belleza no pasa desapercibida y, por eso, la
introducen en el campamento (El Cantar de los Cantares 1:6; 2:10-15; 6:11).
Cuando la joven les cuenta a las damas de la corte cuánto extraña a su amado pastor, estas
le dicen que ‗salga a andar ella misma en las huellas del rebaño‘ hasta encontrarlo. Sin
embargo, Salomón no lo permite. Admirado por su belleza, le promete ―adornos circulares de
oro [...] junto con tachones de plata‖. Pero la joven no se deja impresionar. Mientras tanto, el
pastor, que ha estado buscándola, consigue entrar en el campamento de Salomón y, cuando la
encuentra, exclama: ―¡Mira! Eres hermosa, oh compañera mía. ¡Mira! Eres hermosa‖. La joven
sulamita, por su parte, pide a las damas de la corte: ―No traten de despertar ni excitar amor en
mí sino hasta que este se sienta inclinado‖ (El Cantar de los Cantares 1:8-11, 15; 2:7; 3:5).
Respuestas a preguntas bíblicas:
1:2, 3. ¿Por qué se comparan las expresiones de cariño del pastor con el vino, y su
nombre, con el aceite? Tal como el vino alegra el corazón del hombre y el aceite derramado
sobre la cabeza tiene un efecto tranquilizador, recordar el amor y el nombre del pastor
fortalecía y consolaba a la sulamita (Salmo 23:5; 104:15). De igual modo, los cristianos
verdaderos —y en particular los ungidos— cobran fuerzas y ánimo cuando meditan en el amor
que Jesucristo les ha demostrado.
1:5. ¿Por qué la joven campesina de tez morena se compara a ―las tiendas de
Quedar‖? El pelaje de las cabras, una vez tejido, tenía muchos usos (Números 31:20). Por
ejemplo, ―la tienda que [iba] sobre el tabernáculo‖ estaba hecha a base de ―telas de pelo de
cabra‖ (Éxodo 26:7). Y al igual que las tiendas de los beduinos actuales, es posible que las
tiendas de Quedar estuvieran hechas de pelo negro de cabra.
1:15. ¿Qué quiere decir el pastor con las palabras: ―Tus ojos son de palomas‖? Es su
forma de decir que los ojos de su compañera se ven dulces y tiernos como los de las palomas.
2:7; 3:5. ¿Por qué se hace jurar a las damas de la corte ―por las gacelas o por las
ciervas del campo‖? Las gacelas y las ciervas se caracterizan por su gracia y belleza. Así
pues, la joven sulamita les está pidiendo a las damas de la corte que le juren por todo lo que es
bello y grácil que no intentarán despertar el amor en ella.
Lecciones para nosotros:
1:2; 2:6. No está mal que una pareja de novios se muestren expresiones de cariño limpias.
Sin embargo, deben tratar de que esas expresiones sean producto del afecto sincero, y no de
una pasión inmunda, que puede conducirlos a la inmoralidad sexual (Gálatas 5:19).
1:6; 2:10-15. Los hermanos de la sulamita no le permitieron ir con su amado a un lugar
aislado en las montañas. No tomaron esta precaución porque ella fuera inmoral, ni porque
desconfiaran de sus motivos. Más bien, lo hicieron para evitar una situación en la que ella se
viera tentada a caer en la inmoralidad. La lección que todas las parejas de novios pueden
aprender es clara: deben evitar los lugares solitarios.
2:1-3, 8, 9. A pesar de su hermosura, la joven sulamita era modesta y se veía a sí misma
como una flor común, como ―un simple azafrán de la llanura costanera‖. Pero su pastor la
consideraba como ―un lirio entre yerbajo espinoso‖ debido a su belleza y su fidelidad a Jehová.
¿Y el joven pastor? ¿Cómo era él? Probablemente muy atractivo, pues ella lo comparó a ―una
gacela‖. También tuvo que ser un hombre leal a Jehová y con inclinaciones espirituales. Ella lo
describió así: ―Como un manzano [que da sombra y fruto] entre los árboles del bosque, así es
mi amado entre los hijos‖. En efecto, la fe y la lealtad a Dios son magníficas cualidades que las
personas solteras deben buscar en su futuro cónyuge.
2:7; 3:5. La campesina sulamita no sentía ningún interés romántico por Salomón. Incluso
hizo jurar a las damas de la corte que no intentarían despertar en ella amor por nadie que
no fuera su pastor. Así pues, no se puede ni se debe tener sentimientos románticos por
cualquier persona. Los cristianos solteros que desean casarse deben fijarse solo en siervos
leales de Jehová (1 Corintios 7:39).
―¿QUÉ CONTEMPLAN USTEDES EN LA SULAMITA?‖
(El Cantar de los Cantares 3:6–8:4)
A lo lejos se observa algo que ―viene subiendo del desierto como columnas de humo‖ (El
Cantar de los Cantares 3:6). ¿Qué será? Las mujeres de Jerusalén salen a ver y entonces lo
descubren. ¡Son Salomón y sus servidores que regresan a la ciudad! Y lo que es más, el rey
trae a la doncella sulamita con él.
El pastor ha seguido a la joven y pronto encuentra la forma de verla y confirmarle su amor.
Entonces, ella le expresa su deseo de abandonar la ciudad: ―Hasta que respire el día y hayan
huido las sombras, proseguiré a la montaña de mirra y a la colina de olíbano‖. Luego invita al
pastor a ‗entrar en su jardín y comer los frutos más selectos‘. ―He entrado en mi jardín, oh
hermana mía, novia mía‖, le contesta él. Y las mujeres de Jerusalén les dicen: ―¡Coman, oh
compañeros! ¡Beban y embriáguense con expresiones de cariño!‖ (El Cantar de los Cantares
4:6, 16; 5:1).
Después de contarles a las damas de la corte un sueño que tuvo, la joven sulamita les
confiesa que está ―enferma de amor‖. Entonces ellas le preguntan: ―¿De qué manera es tu
amado más que cualquier otro amado[?]‖. ―Mi amado es deslumbrante y colorado, el más
conspicuo de diez mil‖, responde la sulamita (El Cantar de los Cantares 5:2-10). Incluso cuando
Salomón la colma de alabanzas, ella pregunta con humildad: ―¿Qué contemplan ustedes en la
sulamita?‖ (El Cantar de los Cantares 6:4-13). Viendo aquí la oportunidad de ganarse su
corazón, el rey le dedica otra larga lista de elogios. Con todo, el amor de la joven por su pastor
no se tambalea ni por un instante. Y al final, Salomón la deja regresar a su hogar.
Respuestas a preguntas bíblicas:
4:1; 6:5. ¿Por qué se compara el cabello de la doncella con un ―hato de cabras‖? Esta
comparación da a entender que su pelo era brillante, hermoso y abundante como el pelaje
negro de las cabras.
4:11. ¿Qué quiere decir que los labios de la sulamita ‗goteaban miel del panal‘ y que
‗hay leche y miel debajo de su lengua‘? La miel del panal tiene un sabor más intenso y dulce
que la miel que ha estado expuesta al aire. Por eso, esta comparación, así como la idea de que
hay leche y miel debajo de su lengua, destaca que la sulamita se expresaba con palabras
amables y agradables.
5:12. ¿Cuál es la idea detrás de la expresión ―sus ojos son como palomas junto a los
canales de agua, que están bañándose en leche‖? Con estas palabras, la joven describe
poéticamente los hermosos ojos de su amado. Sus iris oscuros sobre el fondo blanco de los
ojos tal vez le recuerden a palomas de color gris oscuro que se bañan en leche.
5:14, 15. ¿Por qué se describen de este modo las manos y las piernas del pastor?
Parece que la sulamita está comparando los dedos del pastor a cilindros de oro, y sus uñas a
crisólito. Así mismo, como sus piernas son fuertes y hermosas, las asemeja a ―columnas de
mármol‖.
6:4, nota. ¿Es Jerusalén la ―Ciudad Placentera‖ mencionada en este versículo? No, se
trata de Tirzá. Esta ciudad cananea fue conquistada por Josué y, en tiempos posteriores a
Salomón, se convirtió en la primera capital del reino de Israel, es decir, de las diez tribus del
norte (Josué 12:7, 24; 1 Reyes 16:5, 6, 8, 15). Cierta obra de consulta explica: ―Es evidente que
la ciudad tiene que haber sido hermosa, lo que da cuenta de su mención aquí‖.
6:13, nota. ¿A qué alude ―la danza de dos campamentos‖? Otra posible traducción de
esta expresión es ―danza de Mahanaim‖. Había una ciudad con este nombre al este del río
Jordán, cerca del valle torrencial de Jaboq (Génesis 32:2, 22; 2 Samuel 2:29). Al hablar de ―la
danza de dos campamentos‖, tal vez se esté aludiendo a una danza que se celebraba en dicha
ciudad durante cierta fiesta.
7:4. ¿Por qué asemeja Salomón el cuello de la sulamita a una ―torre de marfil‖? Un
poco antes, la joven había recibido el siguiente halago: ―Tu cuello es como la torre de David‖ (El
Cantar de los Cantares 4:4). Las torres suelen ser largas y esbeltas, y el marfil, suave. Así
pues, parece que a Salomón le impresionó el cuello esbelto y suave de la sulamita.
Lecciones para nosotros:
4:7. Al ser capaz de resistirse a los encantos de Salomón, la sulamita demostró que, pese a
ser imperfecta, podía mantenerse pura en sentido moral. Sus firmes principios morales
realzaban todavía más su belleza física. Lo mismo es cierto en el caso de las mujeres
cristianas.
4:12. A la joven sulamita se la asemeja a un hermoso jardín rodeado por una verja o un
muro, al que solo se accede a través de una puerta con llave. ¿Por qué? Porque reservaba sus
muestras de cariño únicamente para su futuro esposo. ¡Qué magnífico ejemplo para todos los
cristianos solteros, tanto hombres como mujeres!
ISAÍAS, LIBRO DE
CONTENIDO
La culpa de Judá y Jerusalén; comisión de Isaías (1:1-6:13).
o La nación, enferma por el pecado, ha dejado a Jehová, que rechaza sus
sacrificios, observancias y oraciones, y les invita a venir y enderezar los asuntos
(1:1-23).
o Refinamiento y restauración de Sión a la justicia con jueces y consejeros (1:24-
2:22).
Los rebeldes contra Jehová se acabarán.
Las naciones afluirán a la montaña ensalzada de la casa de Jehová y no
aprenderán más la guerra.
Jehová es ensalzado, las cosas elevadas y los hombres encumbrados son
rebajados, y los ídolos de los dioses son desechados.
o Las consecuencias del pecado alcanzarán a los descarriados gobernantes de
Judá y al pueblo, incluso a las mujeres altivas.(3:1-4:1).
o Jehová promete restauración, habrá seguridad para un resto en Jerusalén (4:2-6).
o Israel y Judá, desobedientes, causan desafuero, al igual que una viña que
produce uvas silvestres (5:1-7).
o Jehová desolará la tierra y los enviará al exilio, por medio de una gran nación
lejana, debido a su pecaminosidad (5:8-30).
o Isaías recibe la visión de Jehová en su templo (6:1-13).
Se le comisiona para predicar.
Se le dice que el pueblo continuará insensible hasta que la nación sea
desolada.
Amenazas de invasiones enemigas y promesa de alivio (7:1-12:6).
o Asiria, no una confederación de Siria e Israel, invadirá Judá (7:1-25).
Isaías lleva consigo a su hijo Sear-jasub; informa a Acaz que la unión siro-
israelita fracasará.
Como señal especial de Dios, a una doncella le nacerá un hijo, Emmanuel;
antes de que sea lo suficientemente mayor para rechazar lo malo y
escoger lo bueno, Israel y Siria serán derrotadas.
Asiria traerá tiempos dificiles para todo el país.
o Isaías y su prole sirven como señales para Judá (8:1-8,18).
Antes de que el hijo de Isaías, Mahersalal-has-baz, pueda decir ―Padre
mío!‖, el rey de Asiria saqueará,Damasco y Samaria; también inundará
Judá ―hasta el cuello‖.Jehová es el único al que hay que temer, no aquello
que teme la gente (8:9-17).
o Los que acuden a los médium espiritistas y no a Dios y su ley, sufrirán oscuridad
y dificultades (8:19-22).
o Sin embargo, se promete luz y alivio: el Príncipe de Paz se sentará sobre el trono
de David hasta tiempo indefinido (9:1-7).
o La mano de Jehová está extendida en juicio en contra de los apóstatas,
malhechores y opresores del pueblo (9:8-10:4).
o Asiria es la vara de la cólera de Jehová (10:5-34).
Pero debido a su insolencia, Jehová quemara esa ―vara‘.
Un simple resto regresará del cautiverio.
Jehová liberará a Jerusalén.
Una ―ramita‖ gobernara y juzgara con justicia (11:1-12:6).
Habrá paz completa entre los hombres y los animales, y ninguna ruina en
toda la santa montaña de Dios.
La ―raíz de Jesé‖ se levantará como señal enhiesta para los pueblos.
Los celos entre Efraín y Judá desaparecerán.
Reconocerán a Jehová como Dios de salvación delante de toda la tierra.
Declaraciones formales de desolaciones internacionales (13:1-23:18).
o Declaración formal contra Babilonia(13:1-14:27).
Jehová usará a las fuerzas de Babilonia como ―armas de su denunciación;
pero Babilonia será derribada por los medos y con el tiempo llegara a estar
deshabitada.
Jehová le mostrará misericordia a la casa de Jacob, y pondrá fin a su
cautiverio.
Un dicho proverbial en contra del ―rey de Babilonia‖ predice que será
cortado hasta el Seol, y que Babilonia será desolada.
La palabra de Jehová contra Asiria y contra el resto de los opresores se
cumplirá.
o Una declaración formal predice la desolación de Filistea (14:28-32).
o La declaración formal contra Moab predice su despojo violento; dentro de tres
años, su gloria será deshonrada (15:1-16:14).
o La desolación también les acaecerá a Damasco (Siria) y a Efraín (Israel) (17:1-
14).
o Etiopía y Egipto serán destruidos (18:1-20:6).
Isaías anda desnudo y descalzo tres años como portento presagioso del
cautiverio del pueblo al rey de Asiria.
Será fútil para Juda confiar en liberación por medio de esas naciones.
o Declaraciones formales en contra del ―desierto del mar‖ (acerca del sitio y caída
de Babilonia), Dumá (Edom) y la ―llanura desértica‖ (Arabia) (21:1-17).
o La ―declaración formal del valle de la vision pronostica el pisoteo de Jerusalen y la
muerte de los habitantes;Sebna, el mayordomo, será reemplazado por
Eliaquim(22:1-25),
o En la declaración formal contra Tiro se predice su desolación por los caldeos,
conforme al consejo de Jehová;será ―olvidada‖ durante setenta años (23:1-18),
Se predice la salvación por Jehová(24:1-35:10).
o La tierra será vaciada debido a que sus habitantes han pasado por alto las leyes
de Dios, han quebrantado su pacto (24:1-23).
o Pero Jehová es una plaza fuerte para el de condición humilde; preparará un
banquete para todos los pueblos y se tragará la muerte para siempre (25:1-9),
o Moab será abatido (25:10-12).
o En Judá el pueblo cantará acerca de su confianza en Jehová; Él dará muerte a
los dueños opresivos de su pueblo y lo restaurará como si fuera de la muerte
(26:1-21).
o Jehová matará a Leviatán; después que ―el error de Jacob‖ sea expiado por
medio de la desolación, su pueblo vendrá de Asiria y Egipto, y ―se inclinarán ante
Jehová en la montaña santa de Jerusalén‖ (27:1-13),
o Tienen que venir ayes sobre los ―borrachos de Efraín‖ y juicio sobre los
fanfarrones de Jerusalen (28:1-29:24).
Jehová hablará al pueblo por medio de aquellos que tienen una lengua
diferente,Dios va a colocar en Sión una piedra angular de fundamento
probada.
Hará su obra extraordinaria de exterminio.
Ariel (Jerusalén) será abatida por ejércitos acampados, pero liberada por el
poder de Jehová.
Los profetas de Israel están dormidos: ni ellos ni el pueblo entienden los
juicios de Dios.
Dios dará entendimiento a los humildes; santificarán su nombre.
o La alianza con Egipto será inútil: traerá vergüenza y derrota (30:1-33).
Sin embargo, Jehová se mostrará como Magnífico Instructor y dirigirá a su
pueblo.
Dios restaurará a su pueblo y actuará contra Asiría por él.
Los que confían en Egipto no buscan a Jehová; Egipto tropezará y caerá;
Jehová derrotará a Asiría (31:1-9).
Un rey reinará en justicia y, después de la desolación, paz, rectitud, calma y seguridad
prevalecerán (32:1-20).
El despojador será despojado; Jerusalén llegará a ser ―un lugar de habitación
sosegado‖; Jehová el Juez,Dador de Estatutos y Rey de Judá salvará a sus
habitantes(33:1-24).
Jehová ejecuta juicio en contra de todas las naciones en la causa legal de Sión (34:1-
17).
o Edom reducido a una horrible desolación.
o Edom será desolado y habitado por animales salvajes hasta tiempo indefinido.
El desierto florecerá, los ojos de los ciegos serán abiertos; los redimidos por Jehová re-
gresarán gozosamente a Sión por el ―Camino de la Santidad‖ (35:1-10).
Jehová provee liberación de Asiria en los días de Ezequías; se predice el cautiverio a
Babilonia (36:1-39:8).
o Senaquerib, por medio de Rabsaqué, exige la capitulación de Jerusalén (36:1-
37:38).
Insulta el nombre de Jehová delante del pueblo.
Ezequías le ora a Jehová por liberación.
Jehová responde por medio de Isaías; el ángel derriba a 185.000 asirios.
Senaquerib regresa a Asiria; dos de sus hijos le dan muerte.
o Ezequías enferma de muerte y ora; Jehová prolonga su vida quince años;
Ezequías escribe una expresión poética de gracias.(38:1-22).
Merodac-baladán, rey de Babilonia, envía cartas y un regalo; Ezequías, imprudente-
mente, muestra a los mensajeros todos sus tesoros; Isaías le advierte que los tesoros,
así como los hijos de Ezequías, serán lleva dos a Babilonia como siervos (39:1-8).
Liberación de los cautivos judíos de Babilonia; restauración de Sión (40:1-41:20).
o Jehová conducirá a su pueblo de regreso desde Babilonia a Jerusalén (40:1-5).
El que lo promete es Aquel cuya palabra permanece para siempre y cuida
tiernamente de su pueblo (40:6-11).
Este es Todopoderoso y Omnisapiente, Creador de todo y Fuente de toda
energía dinámica (40:12-31).
Jehová consuela a Israel, y le garantiza su ayuda y bendición (41:1-20).
o Jehová preside el ―tribunal‖ acerca de la cuestión de la divinidad (41:21-46:13).
A los dioses falsos se les desafía a que produzcan argumentos para
demostrar su divinidad por medio de presentar evidencia de que pueden
predecir acontecimientos futuros (41:21-29).
El siervo escogido de Jehová traerá justicia a la tierra, abrirá los ojos de los
ciegos y soltará a los prisioneros (42:1-7).
Jehová les dirá a sus siervos por anticipado las cosas que tienen que
acontecer (42:8, 9).
Juntará a Jacob (42:10-43:7)
Exige que las naciones produzcan testigos a favor de sus dioses
(43:8, 9).
Los israelitas son testigos de Jehová: pueden testificar acerca de su
poder para predecir el futuro (43:10-13).
Jehová quebrará el poder de Babilonia; Él trazará una senda a
través del desierto para su pueblo, a causa de su propio nombre
(43:14-44:5).
Jehová es la única Roca; las imágenes son absurdas, y sus
hacedores carecen de perspicacia de corazón (44:6-20).
Jehová recomprará a Israel; usará a Ciro para subyugar a Babilonia
(44:21-46:13).
o Caída del imperio mundial de Babilonia (47:1-52:12).
Ella ha sido Señora, pero debe ser llevada cautiva y sentarse en el polvo
(47:1-11).
Sus hechiceros no podrán librarla (47:12-15).
Israel ha transgredido; sin embargo, después del refinamiento de Jacob,
Jehová será su Recomprador de Babilonia (48:1-22).
La tierra de Israel será rehabilitada, las ruinas restauradas, y las
naciones lo verán e irán allí (49:1-26).
Jehová se divorció de Israel y lo vendió debido a sus transgresiones,
pero lo redimirá (50:1-3).
Da a su siervo ―la lengua de los enseñados‖ y lo declara justo (50:4-11).
Sión será hecha como el jardín de Jehová; y la ―copa de furia‖
pasará de Jerusalén a aquellos que la irritan (51:1-23).
Sión será liberada de Babilonia; son hermosos los pies del que
publica buenas nuevas; se da la orden de salir de Babilonia: ―No
toquen nada inmundo‖ (52:1-12).
El siervo de Jehová, a pesar de ser despreciado por los hombres, traerá a muchos a una
posición de justos (52:13-53:12).
Actuará con perspicacia, aunque su apariencia no le sea deseable a Israel(52:13-53:2).
Llevará nuestras enfermedades y será aplastado por nuestros errores (53:3-7).
Derramará su alma hasta la muerte e intercederá por los transgresores (53:8-12).
o Sión, estéril por largo tiempo, dará a luz hijos para continuar en la bondad
amorosa de Jehová (54:1-13).
Experimentará aumento; sus hijos serán enseñados por Jehová (54:13).
Sión derrotará y condenará cualquier arma que se forme contra ella (54:14-
17).
o Invitación a los sedientos (55:1-56:8).
El perdón de Dios es grande (55:1-7).
Sus pensamientos son más altos que los del hombre; sus propósitos
ciertamente se cumplirán con éxito (55:8-13).
Eunucos y extranjeros obedientes serán bendecidos: la casa de Jehová
será casa de oración para todos los pueblos‖(56:1-8.
o El grado de prostitución de la nación de Dios (56:9-59:21
Hicieron sacrificios a dioses falsos. rebajaron los asuntos hasta el Seol
(56:9-57:10).
Solamente los de espíritu humilde recibirán paz 57:11-21.
Jehová desea que se practique justicia y compasión, más bien que ayuno
formalista (58:1-12).
Los que se deleitan en Jehová y guardan sus sábados recibirán una
posición hereditaria (58:13,14).
Los errores nacionales de Israel causan división entre el pueblo y, Jehová
59:1-21).
Se pondrá una armadura de justicia. salvación, celo y venganza, y
pagara de vuelta a sus enemigos.
Vendrá el Recomprador a los que se vuelven de la trasgresión: y
sus palabras estarán en la boca de ellos.
o La gloria de Jehová sobre Sion (60:1)
Le serán traídos los recursos de las naciones: será edificada con
materiales y cualidades superiores (60:1-17).
Jehová será su luz indefinidamente duradera (60:18-21).
Aumento: El pequeño llegara u ser mil (60:22).
Comisión y obra del ungido de Dios. Los extranjeros serán pastores de los
rebaños de Sión. Desde Babilonia, una calzada tiene que ser despejada y
terraplenada, y será levantada una señal enhiesta para los pueblos (61:1-
62:12).
o Sin la ayuda de ningún hombre, Jehová ejecuta venganza justa sobre los
pueblos‖. (63:1-6).
o El pueblo de Dios reconoce en oración su inmundicia, y ruega su ayuda 63:7-
64.12).
o La longanimidad, severidad y bendición de Jehová (65:1-25).
Ha extendido las manos todo el día a un pueblo que anda por mal camino
(65:1-4).
Dará justa retribución por los errores, pero guardara a algunos como el
racimo de una viña (65:5-16)
Los que buscan a Jehová recibirán una posesión hereditaria.
Los que adoran a los dioses de la buena Suerte y del Destino serán degollados.
o Dios alimentara a sus siervos y los llamará por otro nombre.
Jehová crea ―nuevos cielos y una nueva tierra‖ .(65:17-25).
Larga vida, bendiciones y seguridad: ningún daño o ruina.
Los habitantes no darán a luz descendencia para disturbio; las oraciones serán
contestadas.
o Se acepta a los arrepentidos en tanto que se rechaza a los transgresores (66:1-
24).
Jehová no necesita templo y no se deleita en adoración hipócrita (66:1-4).
Del templo viene el sonido de Jehová, que se venga merecidamente de
sus enemigos (66:5,6).
Sión da a luz una nación en un solo día, lo cual es causa de regocijo (66:7-
14).
Jehová viene contra toda carne, revela su gloria a todas las naciones,
reúne a su pueblo (66:15-21).
La prole y el nombre de los justos subsistirán, tal como permanecerán los
nuevos cielos y la nueva tierra.
Ellos adorarán continuamente sin oposición (66:22-24).
(Para una consideración versículo por versículo vease los libros ―Las profecías de Isaías
I y II‖,ip.S 2000,2001)
Véase el libro ―Toda Escritura es inspirada de Dios y provechosa‖, págs. 118-123.
*** w06 1/12 págs. 8-11 Puntos sobresalientes del libro de Isaías (parte 1) ***
―UN SIMPLE RESTO VOLVERÁ‖
(Isaías 1:1–12:6)
La Biblia no nos dice si Isaías pronuncia el mensaje de los primeros cinco capítulos antes o
después de su designación como profeta (Isaías 6:6-9). Lo que sí deja claro es que Judá y
Jerusalén se hallan espiritualmente enfermas ―desde la planta del pie hasta la cabeza‖ (Isaías
1:6). Prolifera la idolatría. Los líderes son corruptos. Las mujeres se han vuelto altaneras.
El pueblo no sirve a Dios como es debido. Isaías recibe la comisión de ir a hablar ―vez tras vez‖
a un pueblo que ni entiende ni quiere aprender.
Las fuerzas conjuntas de Israel y Siria amenazan con invadir Judá, pero Jehová le garantiza
a Judá el fracaso de la coalición utilizando a Isaías y sus hijos como ―señales‖ y ―milagros‖
(Isaías 8:18). La paz permanente solo llegará de la mano del ―Príncipe de Paz‖ (Isaías 9:6, 7).
Jehová también le ajustará las cuentas a Asiria, la nación que ha escogido como ―vara para [su]
cólera‖. Judá marchará finalmente al cautiverio; no obstante, ―un simple resto [...] volverá‖
(Isaías 10:5, 21, 22). La verdadera justicia será una realidad bajo el gobierno de la simbólica
―ramita del tocón de Jesé‖ (Isaías 11:1).
Respuestas a preguntas bíblicas:
1:8, 9. ¿En qué sentido quedará la hija de Sión ―como una cabaña en una viña, como
choza de vigilancia en un campo de pepinos‖? Durante la invasión asiria, Jerusalén
parecerá en extremo vulnerable, como una simple cabaña en un viñedo o una endeble choza
en un pepinar. Pero Jehová acudirá en su auxilio y no dejará que llegue a ser como Sodoma y
Gomorra.
1:18. ¿Qué quieren decir las palabras: ―Vengan, pues, y enderecemos los asuntos
entre nosotros‖? No se trata de una invitación para discutir los asuntos y llegar a un acuerdo
haciendo concesiones. El versículo se refiere, más bien, a la celebración de un foro de justicia
en el que el justo Juez, Jehová, ofrece a Israel la oportunidad de cambiar y purificarse.
6:8a. ¿Por qué utiliza Jehová aquí el pronombre ―nosotros‖? Porque hay alguien más
con él. Se trata, naturalmente, de su ―Hijo unigénito‖ (Juan 1:14; 3:16).
6:11. ¿Qué quiso decir Isaías al preguntar: ―¿Hasta cuándo, oh Jehová?‖. Isaías
no pretendía averiguar por cuánto tiempo llevaría el mensaje de Jehová a un pueblo
endurecido, sino hasta cuándo seguirían los israelitas deshonrando el nombre divino con su
enfermedad espiritual.
7:3, 4. ¿Por qué salvó Jehová al malvado rey Acaz? Los reyes de Siria e Israel se
proponían derrocar al rey Acaz de Judá y poner en su lugar un títere, al hijo de Tabeel, que
no era de la dinastía davídica. Esta diabólica trama atentaba contra el pacto del Reino
celebrado con David. De manera que Jehová salvó a Acaz para preservar la línea por la cual
vendría el prometido ―Príncipe de Paz‖ (Isaías 9:6).
7:8. ¿Cómo fue ―hecho añicos‖ Efraín en un plazo de sesenta y cinco años? La
deportación de los habitantes del reino de diez tribus y la llegada de repobladores extranjeros
comenzó ―en los días de Péqah el rey de Israel‖, poco después de formular Isaías esta
profecía, y se prolongó hasta el reinado de Esar-hadón de Asiria, hijo y sucesor de Senaquerib
(2 Reyes 15:29; 17:6; Esdras 4:1, 2; Isaías 37:37, 38). Es a este largo proceso de deportación y
repoblación que realizó Asiria en Samaria al que se refieren los sesenta y cinco años de Isaías
7:8.
11:1, 10. ¿Cómo puede ser Jesucristo ―una ramita del tocón de Jesé‖ y al mismo
tiempo ―la raíz de Jesé‖? (Romanos 15:12.) Como hombre, Jesús procedía ―del tocón de
Jesé‖, pues era descendiente de David, el hijo de Jesé (Mateo 1:1-6; Lucas 3:23-32).
No obstante, la relación con sus antepasados cambió cuando Dios le concedió el Reino. Jesús
ha recibido el poder y la autoridad para otorgar vida eterna en la Tierra, lo que le permite ser el
―Padre Eterno‖ de los seres humanos (Isaías 9:6). Por eso se dice también que es ―la raíz‖ de
sus antecesores, entre ellos Jesé.
Lecciones para nosotros:
1:3. Si desobedecemos las normas del Creador, mostraremos menos inteligencia que un
toro o un asno. Por otro lado, si agradecemos todo lo que Jehová ha hecho por nosotros,
no actuaremos como seres irracionales ni lo abandonaremos.
1:11-13. Jehová no soporta los ritos hipócritas ni los rezos formalistas. Nuestros actos y
oraciones deben tener una buena motivación.
1:25-27; 2:2; 4:2, 3. La esclavitud y la desolación de Judá terminarían cuando el resto
arrepentido volviera a Jerusalén y se restaurara la adoración verdadera, lo que demuestra la
misericordia con que trata Jehová a los pecadores que se arrepienten.
2:2-4. Al participar con celo en la obra de predicar el Reino y hacer discípulos, ayudamos a
personas de muchas naciones a aprender los caminos de la paz y a manifestar esta cualidad
en las relaciones con el prójimo.
4:4. Jehová lavará, o eliminará, la impureza moral y la culpa por la sangre derramada.
5:11-13. Divertirse sin moderación ni criterio selectivo equivale a actuar sin conocimiento
(Romanos 13:13).
5:21-23. Los superintendentes cristianos no deben ser ―sabios a sus propios ojos‖. Ellos
también tienen que evitar el favoritismo y ser moderados al ―beber vino‖.
11:3a. Como demostró Jesús con su ejemplo y enseñanzas, es posible temer a Jehová y
disfrutar haciéndolo.
―JEHOVÁ MOSTRARÁ MISERICORDIA A JACOB‖
(Isaías 13:1–35:10)
Los capítulos 13 a 23 contienen mensajes contra las naciones. Sin embargo, ―Jehová
mostrará misericordia a Jacob‖ permitiendo que todas las tribus de Israel retornen a su país
(Isaías 14:1). El mensaje de desolación contra Judá de los capítulos 24 a 27 va acompañado
de la promesa de restauración. Jehová expresa su ira contra ―los borrachos de Efraín [Israel]‖
porque se han aliado con Siria, y contra todo ―sacerdote y profeta‖ de Judá porque quieren
pactar con Asiria (Isaías 28:1, 7). Jehová anuncia calamidad contra ―Ariel [Jerusalén]‖ porque
está ―poniéndose en camino para bajar a Egipto‖ en busca de protección (Isaías 29:1, nota;
30:1, 2). Pero predice que salvará a los israelitas que muestren fe en él.
―Tal como gruñe [...] el leoncillo crinado [...] sobre su presa‖, así guardará Jehová al ―monte
Sión‖ (Isaías 31:4). Además, él hace esta promesa: ―¡Mira! Un rey reinará para justicia misma‖
(Isaías 32:1). Aunque la amenaza asiria haga llorar amargamente hasta a ―los mismísimos
mensajeros de paz‖ de Judá, Jehová promete sanar a los hijos de su pueblo, ―que habrán sido
perdonados‖ (Isaías 33:7, 22-24). ―Jehová tiene indignación contra todas las naciones, y furia
contra todo el ejército de ellas.‖ (Isaías 34:2.) En cuanto a Judá, no permanecerá desolada. ―El
desierto y la región árida se alborozarán, y la llanura desértica estará gozosa, y florecerá como
el azafrán.‖ (Isaías 35:1.)
Respuestas a preguntas bíblicas:
13:17. ¿En qué sentido consideraban la plata como nada ni se deleitaban en el oro los
medos? Para los medos y los persas valía mucho más la gloria del triunfo que el botín de
guerra. Tal fue el caso de Ciro, quien devolvió a los exiliados que retornaron a su patria los
utensilios de oro y plata que Nabucodonosor había saqueado del templo de Jehová.
14:1, 2. ¿Cómo se convirtieron los judíos en ―los apresadores de aquellos que los
tenían cautivos‖, y cómo tuvieron ―en sujeción a aquellos que los obligaban a trabajar‖?
Esta predicción se cumplió en siervos de Dios como Daniel, que ostentó un alto cargo en
Babilonia bajo el reinado medopersa; Ester, que llegó a ser reina de Persia, y Mardoqueo, que
fue nombrado primer ministro del Imperio persa.
20:2-5. ¿Anduvo Isaías completamente desnudo por tres años? Es posible que solo se
despojara de su prenda exterior y anduviera ―vestido con muy poca ropa‖ (1 Samuel 19:24,
nota).
21:1. ¿A qué región se llama ―el desierto del mar‖? A pesar de no estar nada cerca del
mar, la expresión designa a Babilonia, que se convertía todos los años en un ―mar‖ pantanoso
por el desbordamiento de los ríos Éufrates y Tigris.
24:13-16. ¿De qué manera llegarían los judíos a ser, ―entre los pueblos, como el vareo
del olivo, como la rebusca cuando ha terminado la vendimia‖? Tal como siempre quedan
algunos frutos en el árbol o la vid después de la cosecha, así también unos pocos sobrevivirían
a la destrucción de Jerusalén y Judá. Glorificarían a Jehová adondequiera que los deportaran,
ya fuera ―a la región de luz [Babilonia en el oriente]‖ o a ―las islas del mar [Mediterráneo]‖.
24:21. ¿Quiénes son el ―ejército de la altura‖ y los ―reyes del suelo‖? El ―ejército de la
altura‖ bien podría aludir a las fuerzas espirituales malignas; en ese caso, los ―reyes del suelo‖
serían los gobernantes terrenales, sobre quienes los demonios ejercen gran influencia (1 Juan
5:19).
25:7. ¿Qué es ―la envoltura que está envuelta sobre todos los pueblos, y la obra tejida
que está entretejida sobre todas las naciones‖? Esta imagen dirige la atención a dos
grandes enemigos de la humanidad: el pecado y la muerte.
Lecciones para nosotros:
13:20-22; 14:22, 23; 21:1-9. La palabra profética de Jehová siempre se hace realidad, como
sucedió con Babilonia.
17:7, 8. A pesar de que la mayoría de los israelitas no escucharon, algunos sí acudieron a
Jehová. Igualmente, hoy día hay miembros de la cristiandad que acogen favorablemente el
mensaje del Reino.
28:1-6. Israel caería ante Asiria, pero Dios se encargaría de que los fieles sobrevivieran. Los
juicios de Jehová no dejan al justo sin esperanza.
28:23-29. Jehová corrige al que es sincero tomando en cuenta sus necesidades y
circunstancias particulares.
30:15. Jehová nos salvará solo si demostramos fe ‗descansando‘, es decir, dejando de
buscar la salvación por medios humanos. También daremos prueba de que confiamos en el
poder protector de Jehová manteniéndonos ―sosegados‖, o sea, libres de temor.
30:20, 21. ‗Vemos‘ a Jehová y ‗oímos‘ su voz salvadora cuando atendemos a lo que nos dice
mediante su Palabra inspirada, la Biblia, y ―el esclavo fiel y discreto‖ (Mateo 24:45).
*** w07 15/1 págs. 8-11 Puntos sobresalientes del libro de Isaías (parte 2) ***
―¡MIRA! VIENEN DÍAS‖
(Isaías 36:1–39:8)
En el año decimocuarto del reinado de Ezequías (732 antes de nuestra era), los asirios
invaden Judá. Jehová cumple su promesa de defender Jerusalén. La amenaza de invasión
termina cuando el ángel de Jehová mata por sí solo a 185.000 soldados asirios.
Más tarde, Ezequías cae enfermo. Jehová escucha sus oraciones y hace que recobre la
salud, concediéndole quince años más de vida. Cuando el rey de Babilonia envía emisarios
para felicitarlo por su recuperación, Ezequías comete la imprudencia de enseñarles todos sus
tesoros. Por ello, Isaías le transmite este mensaje de Jehová: ―¡Mira! Vienen días, y todo lo que
hay en tu propia casa y que tus antepasados han acumulado hasta este día realmente será
llevado a Babilonia‖ (Isaías 39:5, 6). Estas palabras se cumplen poco más de cien años
después.
Respuestas a preguntas bíblicas:
38:8. ¿Sobre qué ―gradas‖ hizo Jehová retroceder la sombra? Puesto que los relojes de
sol se usaban tanto en Egipto como en Babilonia hacia el siglo VIII antes de nuestra era, estas
gradas podrían ser los grados de un reloj de sol que Acaz, padre de Ezequías, hubiera
adquirido. O quizá fueran los peldaños de una escalera en el interior del palacio. Es posible que
una columna situada junto a ella proyectara una sombra que, al ir avanzando sobre los
peldaños, sirviera para medir el tiempo.
Lecciones para nosotros:
36:2, 3, 22. Aunque Sebná fue destituido como mayordomo, se le permitió seguir al servicio
del rey en calidad de secretario del hombre que le sucedió en el cargo (Isaías 22:15, 19). Si por
alguna razón perdiéramos un puesto de responsabilidad en la organización de Jehová, ¿no
deberíamos seguir sirviendo a Dios en cualquier función que él nos permitiera desempeñar?
37:1, 14, 15; 38:1, 2. En tiempos de angustia, debemos orar a Jehová y confiar plenamente
en él.
37:15-20; 38:2, 3. Cuando Jerusalén se enfrentó a la amenaza de los asirios, la principal
preocupación de Ezequías fue la deshonra que la caída de la ciudad supondría para el nombre
de Jehová. Al enterarse de que su enfermedad sería mortal, Ezequías no se centró en sí
mismo. Lo que más pesaba en su ánimo era el efecto que tendría en la dinastía davídica el
hecho de que él muriera sin dejar un heredero. También le preocupaba quién dirigiría la lucha
contra los asirios. Al igual que Ezequías, nosotros consideramos que la santificación del
nombre de Jehová y la realización de su propósito son más importantes que nuestra propia
salvación.
38:9-20. Esta canción de Ezequías nos enseña que en la vida no hay nada más importante
que poder alabar a Jehová.
―SERÁ REEDIFICADA‖
(Isaías 40:1–59:21)
Justo después de predecir la destrucción de Jerusalén y el posterior cautiverio en Babilonia,
Isaías profetiza que habrá una restauración (Isaías 40:1, 2). ―[Jerusalén] será reedificada‖,
declara Isaías 44:28. Los ídolos de los dioses babilónicos serán llevados como ―piezas de
equipaje‖ (Isaías 46:1). La propia ciudad de Babilonia será destruida. Pues bien, todo esto se
hace realidad dos siglos después.
Jehová dará a su siervo como ―luz a las naciones‖ (Isaías 49:6). ―Los cielos‖, o clase
gobernante, de Babilonia acabarán por ―dispersarse en fragmentos justamente como humo‖, y
sus súbditos ―morirán como un sencillo jején‖. Por su parte, ‗la cautiva hija de Sión se soltará
las ataduras del cuello‘ (Isaías 51:6; 52:2). Jehová dice a quienes acuden a él para escucharle:
―Prestamente celebraré con ustedes un pacto de duración indefinida respecto a las bondades
amorosas para con David‖ (Isaías 55:3). Al obedecer los justos requisitos divinos, tendrán
―exquisito deleite en Jehová‖ (Isaías 58:14). Por otro lado, los errores del pueblo ―causan
división entre [ellos] y su Dios‖ (Isaías 59:2).
Respuestas a preguntas bíblicas:
40:27, 28. ¿Por qué dijo Israel: ―Mi camino ha sido ocultado de Jehová, y el que se me
haga justicia elude a mi Dios‖? Algunos judíos que vivían en Babilonia tal vez creyeran que
las injusticias que padecían estaban ocultas a Jehová o que él no las veía. Por eso se les
recordó que Babilonia no estaba fuera del alcance del Creador de toda la Tierra, quien no se
cansa ni se fatiga.
43:18-21. ¿Por qué se mandó a los judíos que regresaron del exilio que ‗no se
acordaran de las cosas anteriores‘? No fue porque debieran olvidar los actos de liberación
que Jehová había ejecutado en el pasado. Más bien, Jehová deseaba que lo alabaran por ―algo
nuevo‖, por algo que experimentarían en carne propia. Por ejemplo, por su viaje a salvo a
Jerusalén, tal vez siguiendo una ruta más directa a través del desierto. Por su parte, los
miembros de la ―gran muchedumbre‖ que saldrán de ―la gran tribulación‖ también tendrán
nuevos motivos para glorificar personalmente a Jehová (Revelación [Apocalipsis] 7:9, 14).
49:6. ¿Cómo es que el Mesías es una ―luz a las naciones‖, cuando su ministerio
terrestre se limitó a los hijos de Israel? Es por lo que ocurrió tras la muerte de Jesús.
La Biblia aplica Isaías 49:6 a sus discípulos (Hechos 13:46, 47). Hoy, los cristianos ungidos,
con el respaldo de una gran muchedumbre de adoradores, constituyen una ―luz a las
naciones‖, una luz que llega ―hasta la extremidad de la tierra‖ para alumbrar a todos los pueblos
(Mateo 24:14; 28:19, 20).
53:10. ¿En qué sentido se deleitó Jehová en aplastar a su Hijo? Jehová es compasivo y
bondadoso, así que sin duda le dolió ver sufrir a su amado Hijo. Aun así, se deleitó al ver que
Jesús le obedeció de buena gana y al considerar todo lo que su sufrimiento y muerte haría
posible (Proverbios 27:11; Isaías 63:9).
53:11. ¿Mediante qué conocimiento ―traerá [el Mesías] una posición de justos a
muchas personas‖? Es el conocimiento que Jesús adquirió al venir a la Tierra como ser
humano y sufrir injustamente hasta el extremo de morir (Hebreos 4:15). Así proporcionó un
sacrificio redentor, lo cual era necesario para que los cristianos ungidos y la gran muchedumbre
llegaran a tener una posición justa ante Dios (Romanos 5:19; Santiago 2:23, 25).
56:6. ¿Quiénes son ―los extranjeros‖, y de qué maneras ‗se asen del pacto de
Jehová‘? ―Los extranjeros‖ son las ―otras ovejas‖ de Jesús (Juan 10:16). Se asen del nuevo
pacto, o sea, se aferran a él, al obedecer las leyes ligadas a este y cooperar con las
disposiciones que de él dependen. Lo hacen también al participar del mismo alimento espiritual
que los ungidos y al apoyarlos en la obra de predicar y hacer discípulos.
Lecciones para nosotros:
40:10-14, 26, 28. Jehová es un Dios fuerte y tierno, todopoderoso y omnisapiente.
Su entendimiento es mucho mayor de lo que la mente humana puede concebir.
40:17, 23; 41:29; 44:9; 59:4. Las alianzas políticas y los ídolos son ‗irrealidades‘. Confiar en
ellos no vale de nada.
42:18, 19; 43:8. Cuando las personas cierran los ojos a la Palabra escrita de Dios y se tapan
los oídos a la enseñanza que él imparte mediante ―el esclavo fiel y discreto‖, se vuelven ciegas
y sordas en sentido espiritual (Mateo 24:45).
43:25. Jehová borra las transgresiones por causa de sí mismo. El hecho de que obtengamos
liberación del pecado y la muerte y alcancemos la vida eterna es secundario en comparación
con la santificación del nombre de Jehová.
44:8. Tenemos el apoyo de Jehová, quien es estable y firme como una roca. ¡Jamás
temamos dar testimonio de que él es el Dios verdadero! (2 Samuel 22:31, 32.)
44:18-20. La idolatría es una señal de que el corazón se ha corrompido. Nada debe ocupar
el lugar de Jehová en nuestro corazón.
46:10, 11. La capacidad de hacer que ‗su propio consejo subsista‘, es decir, de cumplir su
propósito, es una prueba inequívoca de la divinidad de Jehová.
48:17, 18; 57:19-21. Si esperamos la salvación de Jehová, nos acercamos a él y prestamos
atención a sus mandamientos, nuestra paz será tan abundante como las aguas de un río
caudaloso, y nuestros actos justos serán tan numerosos como las olas del mar. Quienes
no obedecen la Palabra de Dios son como ―el mar que está siendo agitado‖: no tienen paz.
52:5, 6. Los babilonios llegaron a la conclusión equivocada de que el Dios verdadero era
débil. No se dieron cuenta de que Israel cayó en la esclavitud debido a que había desagradado
a Jehová. Cuando la calamidad azota al prójimo, no debemos precipitarnos a sacar
conclusiones respecto al porqué de lo sucedido.
52:7-9; 55:12, 13. Hay al menos tres razones para que participemos con gozo en la obra de
predicar y hacer discípulos. Nuestros pies son hermosos para las personas humildes que
tienen hambre espiritual. Vemos a Jehová ―ojo a ojo‖, es decir, disfrutamos de una estrecha
relación con él. Y también gozamos de prosperidad espiritual.
52:11, 12. Para poder llevar ―los utensilios de Jehová‖ —los medios para rendir servicio
sagrado—, debemos mantener nuestra pureza espiritual y moral.
58:1-14. La exhibición hipócrita de devoción y justicia no es de ningún valor. Los verdaderos
siervos de Dios abundan en actos sinceros de devoción piadosa y de amor fraternal (Juan
13:35; 2 Pedro 3:11).
59:15b-19. Jehová observa los asuntos humanos e interviene cuando lo estima conveniente.
―TIENES QUE LLEGAR A SER UNA CORONA DE HERMOSURA‖
(Isaías 60:1–66:24)
Señalando a la restauración de la adoración verdadera tanto en tiempos antiguos como en
nuestros días, Isaías 60:1 declara: ―Levántate, oh mujer, despide luz, porque ha venido tu luz y
sobre ti ha brillado la mismísima gloria de Jehová‖. Luego se dirigen estas palabras a Sión:
―Tienes que llegar a ser una corona de hermosura en la mano de Jehová‖ (Isaías 62:3).
Isaías ora a favor de los israelitas que, estando exiliados en Babilonia, se volverán a Jehová
arrepentidos (Isaías 63:15–64:12). Después de establecer el contraste entre los verdaderos
siervos de Dios y los falsos, el profeta describe las bendiciones que Jehová otorgará a quienes
le sirvan (Isaías 65:1–66:24).
Respuestas a preguntas bíblicas:
61:8, 9. ¿Cuál es el ―pacto de duración indefinida‖, y quiénes son ―la prole‖? Se trata
del nuevo pacto con los cristianos ungidos que Jehová ha establecido. ―La prole‖ son las ―otras
ovejas‖, o sea, los millones de personas que responden favorablemente al mensaje de los
ungidos (Juan 10:16).
63:5. ¿En qué sentido sostiene a Dios su propia furia? La furia de Dios es una emoción
controlada: su justa indignación. Su furia lo sostiene en el sentido de que lo motiva a ejecutar
sus justos juicios.
Lecciones para nosotros:
64:6. Los seres humanos imperfectos no pueden salvarse a sí mismos. En lo que respecta a
expiar sus pecados, sus actos justos solo son como prendas de vestir sucias (Romanos
3:23, 24).
65:13, 14. Jehová bendice a sus siervos fieles satisfaciendo generosamente su necesidad
espiritual.
66:3-5. Jehová detesta la hipocresía.
JEREMÍAS, LIBRO DE
CONTENIDO
Proclamaciones pronunciadas en su mayor parte durante el reinado del rey Josías (2:1-
20:18).
o Primera proclamación (2:1-3:5).
El amor que Jerusalén, como ‗esposa‘, le tuvo a Jehová en un principio; el
cuidado de Jehová; pero ella le abandonó, profanó la tierra, llegó a ser
peor que las otras naciones y por su propia culpa llegó a estar en
servidumbre (2:1-17).
La vid selecta degenera; Jerusalén se prostituye; adora a Baales; rechaza
la disciplina; es infiel; culpable de derramar sangre (2:18-35a).
Dios entra en controversia con Jerusalén (2:35b-3:5).
o Segunda proclamación (3:6-6:30).
Israel sufre el divorcio, el exilio; Judá todavía es más corrupto; pero Dios
amorosamente llama de vuelta a Israel; Él promete la restauración y la
unidad entre Judá e Israel (3:6-4:2).
Dios desea la circuncisión de corazón. (4:3, 4; compárese con 9:26.)
Advertencia sobre la caída de Judá (4:5-18).
Jeremías se siente muy afligido; se estremece por la calamidad que ve
venir (4:19-31).
El pueblo es infiel y ha negado a Jehová (5:1-13).
Destrucción, pero no aniquilación completa; una nación extranjera invadirá
y tomará cautivos (5:14-19).
Dios pedirá cuentas a Jerusalén, porque los profetas, los sacerdotes y el
pueblo están ciegos espiritualmente, son de corazón terco y están
corrompidos (5:20-31).
La noche de la calamidad para Jerusalén se acerca; se dan advertencias
de sitio (6:1-9).
No hay oídos que oigan; de modo que viejos, mujeres y niños
experimentarán el derramamiento de la furia de Jehová (6:10-12).
Grandes y pequeños son falsos; dicen ―Paz‘ cuando Jehová no está en paz con ellos;sus
sacrificios no le son de ningún placer a Dios; los entregará a una nación cruel que viene
del norte. (6:13-26; véanse 8:10,11;23:17.)
Jeremías es comparado a un ―ensayador de metales‖, y la gente es como
un metal rechazado (6:27-30).
o Tercera proclamación, pronunciada en la puerta del templo (7:1-10:25).
Dios desea tratos justos, no adoración llena de formalismos (7:1-28).
Judá culpable de cosas detestables (7:29-8:12).
Vergüenza y terror están por venir (8:13-22).
Jeremías se halla muy entristecido por su pueblo, pero desea dejarlos
debido a sus tratos traicioneros (9:1-3a).
La falta de confiabilidad y la falsedad les acarrearán un ajuste de cuentas;
se prevé desolación para Jerusalén y el pueblo será esparcido (9:3b-24).
Dios pedirá cuentas a Egipto, Judá, Edom, Ammón y Moab (9:25,26).
Los dioses de las naciones no pueden compararse con Jehová (10:1-18).
Quebranto de Judá; petición a Jehová para que dirija, corrija a su pueblo
en juicio y derrame su furia sobre las naciones enemigas (10:19-25).
o Cuarta proclamación para Judá y Jerusalén (11:1-12:17).
El pueblo es maldecido debido a la desobediencia; los dioses de Judá ―han
llegado a ser tantos [...] como el número de [sus] ciudades‖; Jeremías no
debe orar por ellos(11:1-15).
Judá es como un olivo con ramas quebradas. (11:16, 17; compárese con
Romanos 11:17.)
Jeremías es como un cordero llevado al degüello, pues se han pensado
proyectos contra él (11:18-20).
Los hombres de Anatot, la ciudad natal de Jeremías, se oponen a él; una
calamidad los aniquilará (11:21-23).
Jeremías se pregunta por qué tienen éxito los inicuos (12:1-4).
Él verá cómo aumentan la iniquidad y la oposición; incluso sus parientes
cercanos están contra él (12:5, 6).
Juicio sobre la nación por rechazar a Dios (12:7-13).
La restauración vendrá; también para otras naciones, pero tienen que ser
obedientes en medio del pueblo de Dios (12:14-17).
o Quinta proclamación (13:1-27).
Jeremías esconde un cinto cerca del Éufrates; Judá es como este cinto
arruinado; está sobre las caderas, pero no sirve para nada (13:1-11).
Judá será emborrachado y hecho pedazos (13:12-14).
La altivez será rebajada; la nación irreformable quedará avergonzada
(13:15-27).
o Sexta proclamación (14:1-17:18).
La sequía causa lamento en Judá; Jeremías ora por la ayuda de Dios
(14:1-10).
Jehová no ayudará, pues los profetas han mentido; ellos y los que los
escuchan morirán (14:11-18).
Jeremías reconoce los pecados nacionales; ora por causa del nombre, el
trono y el pacto de Jehová (14:19-22).
Las peticiones a Dios no salvaran ya al pueblo; Manasés ha hecho que la
nacion peque más allá de toda posibilidad de recobro (15:1-9).
Jeremías Llama a causa de los enemigos; Jehová lo consuela, pero dejará
que Judá sea saqueado debido a sus pecados (15:10-14).
Jeremías dice no tener nada que ver con los que causan oprobio, y por eso
sufre gran angustia (15:15-18).
Jehová fortalece a Jeremías para que resista; El lo librara (15:19-21).
A Jeremías se le ordena que no se case, porque se avecina una gran
angustia para todos, incluso para los niños; no debe lamentarse,
compadecerse o banquetear con el pueblo, cuyo pecado conducirá a la es-
clavitud (16:1-13).
Israel volverá, pero primero debe ser castigado por su error y pecados
(16:14-21).
El pecado de Judá está grabado profundamente, pero el hombre que
confia en Jehová prosperará; Dios escudriña el corazón (17:1-11).
Jeremías reconoce la esperanza de Israel, ora por el apoyo de Jehová
(17:12-18).
o Séptima proclamación, pronunciada en la puerta de Jerusalén (17:19-27).
Advertencia sobre la observancia del sábado, disposición que los
antepasados quebrantaron (17:19-23).
Si obedece, Jerusalén permanecerá; de otro modo, será destruida (17:24-
27).
Octava proclamación (18:1-23).
Jehová es el Alfarero; Judá, desobediente, es un vaso para destrucción
(18:1-17).
Jeremías ora a Dios para que juzgue a sus adversarios (18:18-23).
Novena proclamación (19:1-20:18).
Jeremías quiebra un frasco en la Puerta de los Tiestos, tal como Jehová quebrara a
Jerusalén, haciendo de Hinon un valle de matanza (19:1-13).
Se dirige al templo; declara calamidad (19:14, 15).
Pasjur golpea a Jeremías y lo pone en el cepo toda la noche (20:1-3a).
El rey de Babilonia tomará Jerusalén; Pasjur morirá en Babilonia (20:3b-6).
o Jehová y su palabra sostienen a Jeremías en su servicio a pesar de las
dificultades (20:7-18).
Soltado del cepo, Jeremías dice que Jehová ha permitido que se le cause oprobio;
quiere dejar de hablar, pero el fuego de la palabra de Dios lo impele; Jehová esta con él
―como un terrible poderoso‖ (20:7-13).
Jeremías dama debido al duro trabajo y desconsuelo. (20:14-18; compárese con Job,
capítulo 3.)
Profecías especiales de juicio (21:1-29:32).
o Juicio sobre la casa real (21:1-22:30).
Se le dice al rey Sedequias que Jerusalén será entregada a
Nabucodorosor (Nabucodonosor); los que se pasen a los caldeos vivirán
(21:1-14).
A menos que Judá se arrepienta, se convertirá en un desierto; el rey
exiliado Salum (Jehoacaz) no volverá (22:1-12).
Se condena al rey Jehoiaquim por su injusticia; se predice su muerte y que
no recibirá entierro (22:13-23).
El rey Jeconías (Conías) y su madre irán al exilio, y ninguno de sus hijos
ocupará el trono (22:24-30).
o Juicio sobre los sacerdotes, profetas y pastores (23:1-40).
Las ovejas están esparcidas, pero serán recogidas (23:1-8).
Calamidad sobre los profetas a quienes Jehová no envió; los sacerdotes
también se han contaminado (23:9-40).
o Las personas son comparadas con higos buenos e higos malos; recibirán juicio
(24:1-10).
Algunos exiliados volverán (24:1-7).
Otros, entre ellos Sedequías, serán echados definitivamente del país (24:8-
10).
o Controversia de Jehová con las naciones.(25:1-38; véanse también capítulos 46
al 49.)
Nabucodonosor desolará Judá; este reino y las naciones vecinas servirán a
Babilonia durante un período de setenta años(25:1-11).
Babilonia, en cambio, será desolada para siempre (25:12-14).
Jeremías debe hacer que las naciones beban de la copa del vino de la
furia; los muertos estarán de un extremo a otro de la Tierra y no serán
lamentados (25:15-38).
o Advertencia de calamidad pronunciada en la puerta del templo (26:1-24).
Sacerdotes y profetas quieren que se dé un juicio de muerte a Jeremías; él
se defiende (26:1-15).
Principes y otras personas intervienen y salvan a Jeremías (26:16-24).
o Juicios contra Edom, Moab, Ammón, Tiro y Sídon (27:1-22).
Nabucodonosor los gobernará 27:1-10).
Los pueblos que capitulen ante Babilonia. incluyendo a los judíos, vivirán
(27:11-14).
3 Los falsos profetas engañan; todos los utensilios del templo irán a Babilonia (27:15-22).
o Juicio contra el falso profeta Ananás (28:1-17).
Hananías quiebra el yugo de madera; profetiza que el yugo del rey de
Babilonia será quebrado en dos años (28:1-11).
Jeremías predice un yugo de hierro y la muerte de Hananías. la cual
acontece ese año (28:12-17).
o Carta de Jeremías a los exiliados en Babilonia (29:1-32).
Los exiliados deben edificar casas, tener hijos y buscar la paz de Babilonia
(29:1-9).
Regresarán del exilio después de setenta años (29:10-14).
Juicio sobre los falsos profetas que están en Babilonia (29:15-32).
Profecías de restauración (30:1-33:26).
o Israel y Judá volverán a su tierra (30:1-10).
o Las naciones que oprimen a Jerusalén serán destruidas: Jerusalén sufrirá, pero
luego será reconstruida (30:11-24).
o Jehová traerá de vuelta y plantará a su pueblo esparcido; entonces cada uno
rendirá cuentas por sus propios pecados (31:1-30).
o El nuevo pacto; nunca se rechazará a toda la descendencia de Israel (31:31-40).
o Durante el sitio, el primo de Jeremías lo visita en el Patio de la Guardia donde
está preso; como recomprador,Jeremías compra el campo de su tío paterno que
está en Anatot; esto simboliza la certeza de la restauración (32:1-44).
o Jerusalén será curada y producirá alborozo; un brote justo de la línea de David
ejecutará justicia sobre la descendencia de Abrahán (33:1-26).
Profecías posteriores durante los reinados de Jehoiaquim y Sedequías (34:1-36:32).
o Se le informa a Sedequías que sera capturado y que tendrá una muerte pacífica
en Babilonia (34:1-7).
o Cuando Nabucodonosor sitia Jerusalén, Sedequías y sus príncipes, obrando en
conformidad con la Ley, liberan a sus siervos hebreos (34:8-10).
o Los príncipes cambian de parecer y esclavizan de nuevo a sus hermanos; de
modo que Jehová da libertad a la espada, a la peste y al hambre (34:11-22).
o Los recabitas demuestran su fidelidad bajo prueba; son usados como ejemplo
para la infiel Jerusalén; Jehová pacta que siempre tendrán un hombre que esté de
pie delante de Él (35:1-19).
o En el cuarto año de Jehoiaquim,Jeremías recibe el mandato de dictar a Baruc,
quien escribe dos veces el libro de todas las palabras que Jehová le ha dado a
Jeremías hasta la fecha (36:1-32).
Baruc lee el rollo en el templo durante un día de ayuno celebrado en el
mes noveno del quinto año (36:4-10).
Se informan las palabras a Jehoiaquim; los príncipes tienen una audiencia
privada con Baruc; Jeremías y Baruc se esconden para que el rey no los
encuentre (36:11-19, 26).
Jehudí lee el rollo y Jehoiaquim lo quema (36:20-25).
Jehoiaquim condenado; Jeremías escribe de nuevo el rollo, al cual se le
añaden más cosas (36:27-32).
Acontecimientos ocurridos durante los últimos días de Jerusalén (37:1-45:5).
o Cuando los babilonios se retiran temporalmente, Jeremías es arrestado al tratar
de ir a Anatot; es puesto en la casa de grilletes y trasladado por Sedequías al
Patio de la Guardia (37:1-21).
o Jeremías es echado en una cisterna y, posteriormente, liberado por Ébed-mélec;
es llevado al Patio de la Guardia; le aconseja a Sedequías que se rinda ante
Babilonia (38:1-28).
o Caída de Jerusalén; el rey Sedequias es cegado; la ciudad es incendiada (39:1-
40:12).
Ébed-mélec se le promete que sobrevivirá (39:15-18).
Se libera a Jeremías por orden de Nabucodonosor; permanece bajo Guedalías(39:11-14;
40:1-10).
Vuelven los judíos que estaban dispersados por muchos países (40:11,12).
o Baalís, rey de Ammón, envía a Ismael para asesinar al gobernador Guedalías;
Ismael cumple esta misión y también mata a los hombres de Guedalías, pero
Johanán le hace huir; la gente se prepara para ir a Egipto (40:13-41:18).
o Jeremías aconseja que no vayan a Egipto, ¡pero la gente se pone en camino
llevando consigo a Jeremías a la fuerza (42:1-43:7).
o En Tahpanhés, Egipto, Jeremías profetiza la derrota de Egipto a manos de
Nabucodonosor y la calamidad para los judíos en este lugar; el pueblo declara
que seguirá haciendo sacrificios a la ―reina de los cielos‖; se profetiza la derrota
del faraón Hofrá (43:8-44:30).
o Jehová advierte a Baruc que no siga buscando cosas grandes para sí, y lo
consuela con la promesa de liberación (45:1-5).
Profecías contra las naciones (46:1-51:64).
o El faraón Nekó es derrotado en Carquemis; Egipto caerá en manos de
Nabucodonosor (46:1-28).
o Los filisteos caerán ante el faraón (47:1-7).
o Moab se ha dado ínfulas contra Jehová y ha ridiculizado a Israel; su dios Kemós
así como sus sacerdotes y príncipes irán al exilio; no obstante, los cautivos de
Moab serán recogidos (48:1-47).
o Ammón, que había tomado las ciudades israelitas, será desolado; su dios Malcam
irá al exilio, pero a los cautivos de Ammón se les hará volver (49:1-6).
o Edom llegará a ser como Sodoma y Gomorra (49:7-22).
o Damasco sufrirá derrota (49:23-27).
o Quedar y Hazor caerán ante Nabucodonosor (49:28-33).
o Elam será desbaratado, pero después se hará volver a los cautivos (49:34-39).
Babilonia y sus dioses irán al cautiverio (50:1-51:64).
Los hijos de Israel serán liberados para volver a Sión (50:1-9, 19, 20).
Caldea se convertirá en un desierto desolado que nunca será habitado, porque se
alborozó cuando Israel fue saqueada y no dejó libres a los cautivos (50:1-13, 33-39).
Un pueblo del norte, diestro en el arco y la jabalina, devastará a Babilonia y esta
quedará como Sodoma y Gomorra (50:14-32, 40-51:5).
Mandato de salir de Babilonia; ella ha emborrachado a otras naciones; ahora no será
sanada (51:6-10).
Los reinos de Media, Ararat, Mini y Askenaz son llamados contra Babilonia (51:11-29).
Las barras de Babilonia serán quebradas y la ciudad ―tomada en todo extremo‖(51:30-
33).
Dios dirige la causa judicial de Sión contra Babilonia por su culpa de sangre contra Sión
(51:34-58).
Jeremías escribe en un libro las calamidades de Babilonia; Seraya lo lleva a Babilonia, lo
lee y lo echa al Éufrates (51:59-64).
Epílogo (52:1-34).
o Sitio de Jerusalén, desde el mes décimo del noveno año de Sedequias hasta el
noveno día del cuarto mes del año decimoprimero; Jerusalén cae (52:1-7).
o El templo es incendiado y las murallas derruidas en el décimo día del quinto mes
del decimonoveno año de
Nabucodonosor; Sedequías es cegado y llevado a Babilonia; el pueblo es llevado al exilio;
tan solo se deja a los de condición humilde (52:8-16).
o Inventario de los objetos valiosos del templo que fueron llevados a Babilonia
(52:17-23).
o El sacerdote principal y otros hombres prominentes son ejecutados en Riblá
(52:24-27).
o Recuento de todos los exiliados llevados por Nabucodonosor en los años
séptimo, decimoctavo y vigésimo tercero de su reinado (52:28-30).
o En el año trigésimo séptimo de su exilio, Joaquín es liberado de la prisión, pero
debe permanecer en Babilonia (52:31-34).
*** w07 15/3 págs. 8-11 Puntos sobresalientes del libro de Jeremías ***
―DOS COSAS MALAS QUE MI PUEBLO HA HECHO‖
(Jeremías 1:1–20:18)
Jeremías recibe su comisión de profeta en el decimotercer año de la dominación de Josías,
rey de Judá, cuatro décadas antes de la destrucción de Jerusalén en el año 607 antes de
nuestra era (Jeremías 1:1, 2). Las declaraciones que se realizan principalmente durante los
restantes dieciocho años del reinado de Josías denuncian la maldad de Judá y proclaman los
juicios divinos contra la nación. ―Haré de Jerusalén montones de piedras, [...] y de las ciudades
de Judá haré un yermo desolado, sin habitante‖, declara Jehová (Jeremías 9:11). ¿La razón?
―Porque hay dos cosas malas que mi pueblo ha hecho.‖ (Jeremías 2:13.)
La profecía contiene, además, un mensaje de restauración para un resto de israelitas
arrepentidos (Jeremías 3:14-18; 12:14, 15; 16:14-21). El profeta, no obstante, no es bien
recibido. ―El principal comisionado en la casa de Jehová‖ lo golpea y lo pone en el cepo hasta
el día siguiente (Jeremías 20:1-3).
Respuestas a preguntas bíblicas:
1:11, 12. ¿Por qué se relaciona ―un retoño de almendro‖ con que Jehová se mantenga
despierto tocante a su palabra? El almendro es ―uno de los primeros árboles que florece en
la primavera‖ (versículo 11, nota). Así, en sentido figurado, Jehová siguió madrugando y
enviando a sus profetas para advertir a su pueblo de sus juicios y se mantuvo despierto hasta
que se ejecutaron (Jeremías 7:25).
2:10, 11. ¿Por qué era tan insólito lo que hacían los israelitas infieles? Aunque las
naciones paganas como Kitim y Quedar (situadas al oeste y al este respectivamente)
incorporaban deidades de otros pueblos a su panteón, la idea de reemplazar por completo a
los dioses nacionales era algo inaudito. Sin embargo, Israel había abandonado a Jehová y
había cambiado la gloria del Dios vivo por ídolos inertes.
3:11-22; 11:10-12, 17. ¿Por qué incluyó Jeremías al reino norteño de diez tribus en sus
declaraciones si Samaria ya había caído en el año 740 antes de nuestra era? La razón es
que la destrucción de Jerusalén en el año 607 no solo fue una expresión del juicio de Jehová
sobre Judá, sino contra la entera nación de Israel (Ezequiel 9:9, 10). Además, los intereses del
reino de diez tribus —aun después de su caída— todavía estaban representados en Jerusalén,
como revelan los mensajes de los profetas de Dios.
4:3, 4. ¿Qué significa este mandato? Los judíos infieles debían preparar, mullir y limpiar el
terreno de su corazón. Tenían que quitar ―los prepucios de sus corazones‖, es decir,
desarraigar los pensamientos, sentimientos y motivos impuros (Jeremías 9:25, 26; Hechos
7:51). Para ello se requería un cambio de vida: dejar de practicar lo malo y hacer lo que
redundara en la bendición divina.
4:10; 15:18. ¿En qué sentido engañó Jehová a su pueblo renegado? En los días de
Jeremías había quienes profetizaban mentiras (Jeremías 5:31; 20:6; 23:16, 17, 25-28, 32).
Y Jehová no impidió que proclamaran mensajes engañosos.
16:16. ¿Qué quiere decir que Jehová envíe ―muchos pescadores‖ y ―muchos
cazadores‖? Es posible que se refiera a que Jehová enviaría ejércitos enemigos en busca de
los judíos infieles para ejecutar juicio sobre ellos. No obstante, en vista de las palabras de
Jeremías 16:15, también podría aludir a la búsqueda de los israelitas arrepentidos.
20:7. ¿Cómo ‗usó su fuerza‘ Jehová contra Jeremías y lo embaucó? Ante la indiferencia,
el rechazo y la persecución que le acarreó declarar los juicios de Jehová, es posible que
Jeremías pensara que no podía seguir adelante. Pero Jehová empleó su fuerza contra esta
inclinación natural y lo fortaleció. De modo que embaucó a Jeremías en el sentido de que lo
utilizó para lograr lo que el profeta mismo creía que no sería capaz.
Lecciones para nosotros:
1:8. Jehová puede librar a su pueblo de la persecución, tal vez levantando jueces
imparciales, reemplazando a funcionarios hostiles por otros más razonables o infundiendo a
sus siervos la fortaleza necesaria para aguantar (1 Corintios 10:13).
2:13, 18. Los israelitas infieles hicieron dos cosas malas: dejar a Jehová —la fuente segura
de bienestar, guía y protección— y labrarse sus propias cisternas figurativas tramando alianzas
militares con Egipto y Asiria. En la actualidad, abandonar al Dios verdadero para seguir
filosofías y teorías humanas e ideas políticas equivale a reemplazar ―la fuente de agua viva‖ por
―cisternas rotas‖.
6:16. Jehová exhorta a su pueblo rebelde a detenerse, hacer un examen de conciencia y
volverse a ―las veredas‖ de sus antepasados fieles. ¿No deberíamos detenernos a pensar si en
realidad estamos andando en el camino que Jehová desea que andemos?
7:1-15. Depositar su confianza en el templo, considerándolo una especie de amuleto,
no salvó a los judíos. Nosotros debemos andar por fe, no por vista (2 Corintios 5:7).
15:16, 17. Al igual que Jeremías, podemos luchar contra el desánimo. ¿Cómo? Disfrutando
de un estudio personal significativo, ensalzando el nombre de Jehová en el ministerio y
evitando las malas compañías.
17:1, 2. Debido a sus pecados, los sacrificios de Judá le resultaban desagradables a
Jehová. La inmundicia moral hace inaceptables nuestros sacrificios de alabanza.
17:5-8. Los seres humanos y sus instituciones son confiables solo en la medida en que
obran en armonía con los propósitos y principios divinos. En asuntos como la salvación y la
verdadera paz y seguridad, hacemos bien en cifrar nuestra confianza solo en Jehová (Salmo
146:3).
20:8-11. No debemos permitir que la apatía, la oposición o la persecución apaguen nuestro
entusiasmo por la predicación del Reino (Santiago 5:10, 11).
LAMENTACIONES, LIBRO DE
CONTENIDO
A Jerusalén se la personifica como a una viuda que está sentada solitaria en su descon-
suelo (1:1-22).
En un tiempo princesa, ahora es una esclava; sus ―amadores‖ la han abandonado; los
miembros de su pueblo se han convertido en cautivos del adversario (1:1-7).
Su pecaminosidad ha hecho de Jerusalén una cosa aborrecible; su santuario ha sido
violado por las naciones y hay hambre (1:8-11).
Ella dama porque Jehová se ha mantenido alerta ante sus transgresiones: Jehová es
quien, con justicia, le ha traído calamidad por rebelarse contra Él (1:12-20).
Jerusalén le pide a Jehová que se desquite con sus enemigos, que se están alborozando,
y que los trate tan severamente como a ella (1:21, 22).
o Jehová ha ejecutado juicio contra Jerusalén (2:1-22).
La ha arrojado ―del cielo a la tierra‖, sin recordar el ―escabel de sus píes‖; ha llegado a ser
como un enemigo (2:1-5).
Jehová ha hecho olvidar la fiesta y el sábado, y ha rechazado su santuario; en su cólera,
no ha mostrado respeto al rey ni al sacerdote (2:6, 7).
Dios ha causado ruina; hay lamento por la caída de Sión; sus profetas han visto en
visiones cosas inútiles, cosas que extravían; no han puesto al descubierto el error de
ella(2:8-14).
Los que pasan por Jerusalén se maravillan y los enemigos se recrean en su condición
desolada (2:15-17).
Jeremías ruega a Jerusalén que derrame su corazón a Jehová (2:18, 19).
Debido a las atrocidades cometidas contra la ciudad y el santuario de Dios, a Jerusalén se
la describe clamando a Él por ayuda (2:20-22).
o La nación, como si fuese un ―hombre físicamente capacitado‖, se lamenta y
expresa confianza en la misericordia de Jehová y en que Él recomprará a su
pueblo (3:1-66).
Este ―hombre físicamente capacitado‖ relata la aflicción sufrida y el resultado del furor de
Jehová (3:1-18).
Se resuelve a mostrar una actitud de espera y acepta el yugo disciplinario (3:19-30).
o Sabe que Jehová mostrará misericordia; Él ‗no ha afligido de su propio corazón‘
(3:31-33).
o Como hombre pecaminoso que es, no puede emitir queja contra los actos justos
de Dios (3:34-39).
Ruega a la nación que escudriñe sus propios caminos y se vuelva a Jehová, quien ha
obstruido el acceso a Él para que no pasen las oraciones (3:40-45).
Repasa la opresión (3:46-54).
Acude a Jehová confiando en que Él responderá (3:55-58).
Expresa fe en la justicia de Jehová y en que se vengará de sus crueles enemigos (3:59-
66).
o La angustia que viene con el sitio y el cautiverio (4:1-22).
La gloria del templo se ha oscurecido; los ―hijos‖ de Sión son de poco valor, y abundan la
sed y el hambre (4:1-5).
El castigo por el pecado es mayor que el de Sodoma; el ―aspecto de los nazareos se ha
hecho más oscuro que la negrura misma‖, y el hambre ha hecho que las mujeres se co-
man a sus propios hijos (4:6-10).
La cólera de Jehová ha sido derramada para consumir con fuego a Sión, algo increíble
para los habitantes de la tierra (4:11, 12).
Los profetas y los sacerdotes son responsables por el derramamiento de sangre (4:13-16).
El confiar en hombres no ha traído ninguna salvación (4:17).
Los enemigos son implacables; hasta el rey davídico ha sido capturado (4:18-20).
Que Edom se alboroce ahora; pero el error de Sión ha quedado pagado, ahora le tocará a
Edom recibir el pago por sus pecados (4:21, 22).
o Se hace petición a Jehová para que los libere de la desolación y del cautiverio
(5:1-22).
Se le pide a Jehová que recuerde a su pueblo que está en condición de ‗huérfano‘ (5:1-5).
Han extendido su mano a Egipto y a Asiría para conseguir pan, y han tenido que cargar
con los errores de sus antepasados (5:6, 7).
Simples siervos rigen sobre ellos; esposas y vírgenes, príncipes, hombres viejos y jóve-
nes, todos han sido humillados; su corazón ha enfermado debido a su situación (5:8-18).
A pesar de que les ha rechazado con indignación, ellos ruegan a Jehová para que les
haga volver a Él (5:19).
JEHOVÁ es ―el Dios que da esperanza‖, hasta en medio del dolor. (Romanos 15:13.) Este es
un punto que se aclara en el libro de Lamentaciones, completado en 607 a.E.C. por Jeremías,
un profeta y testigo de Jehová. Pero notemos algunas de las lecciones que contiene.
Situación difícil de Jerusalén
El pecado no trae gozo. ¡Mire! La pecaminosa Jerusalén, que antes era populosa capital de
Judá, está solitaria. Por su devastación, Judá misma es como una princesa viuda que llora. Sus
―amadores‖, como Egipto, no la salvaron de la conquista por los babilonios en 607 a.E.C. La
gente ya no afluye a Sión para las fiestas. Los hijos de Sión son cautivos, y los enemigos se
ríen del desplome de ella. Extranjeros inmundos han contaminado el templo, y su pueblo ha
tenido que dar objetos valiosos por alimento. ¡Todo esto debido al pecado! (1:1-11.)
Jehová es justo al castigar a los malhechores. Esto lo reconoce Jerusalén misma al hablar.
Ella pregunta si acaso hay dolor como la pena que Dios le ha causado. Él envió fuego que
desoló el templo. Los pecados de la ciudad se convirtieron en un yugo, y la sangre fluyó como
jugo cuando Dios pisó el ―lagar‖ de ella. Sión extendió las manos con dolor y en súplica, pero
no halló consolador, y Jehová fue justo al castigar a la rebelde Jerusalén. Que trate con igual
severidad a los enemigos de ella que se regocijan. (1:12-22.)
―La ira de Jehová‖
Los responsables llevan culpa si no condenan el pecado. Dios echó a Jerusalén ―del cielo
a la tierra‖, y permitió que fuera destruida junto con Su ―escabel‖, el templo. (Salmo 132:7.) Así
‗profanó el reino‘ de Judá. Como si fuera una simple cabaña, el templo fue destruido por
enemigos cuyos gritos de triunfo fueron como clamores de los días festivos. Niños moribundos
rogaban a sus madres que les dieran algo de comer. Pero ¿de quién era, principalmente, la
culpa? De los falsos profetas que hicieron declaraciones formales engañosas en vez de
condenar el pecado de Jerusalén. (Jeremías 14:13.) La oración es apropiada, ¡porque son
muchos los que han muerto en este ―día de la ira de Jehová‖! (2:1-22.)
Jehová sigue mostrando misericordia
Debemos ser pacientes y esperar en Jehová. Jeremías señala esto a medida que habla en
representación del pueblo afligido. Dios estorba su oración, y él ha llegado a ser el tema de la
canción de burla de sus enemigos. Parece que ha perecido su esperanza, o su ―expectación de
parte de Jehová‖. Pero desplegará ―una actitud de espera‖ porque ―bueno es Jehová al que
espera en él‖. (3:1-27.)
El arrepentimiento genuino trae la misericordia divina. Convencido de esto, Jeremías
exhorta: ―Volvámonos, sí, hasta Jehová‖. Por el pecado del pueblo, Dios ha impedido el acceso
a él en oración como con una masa de nubes de cólera. Pero Jeremías ora: ―He clamado tu
nombre, oh Jehová. [...] No escondas tu oído de mi alivio‖. Por supuesto, los enemigos
impenitentes serán aniquilados. (3:28-66.)
―Tráenos de vuelta‖
Si pecamos voluntariosamente, podemos acarrearnos destrucción. Debido al pecado de
Judá, se ha considerado a los ―preciosos hijos de Sión‖ como vasijas rotas sin valor. Durante el
sitio, a los que murieron por la espada les fue mejor que a los que murieron lentamente de
hambre. Sí, Dios había ―derramado su ardiente cólera‖. Los profetas y sacerdotes
contaminados vagaban ciegamente, y se había capturado al rey Sedequías, ―el ungido de
Jehová‖. Ahora Dios dirigiría su atención al pecaminoso Edom. (4:1-22.)
Solo Jehová da verdadera esperanza en medio del dolor. Jeremías se dio cuenta de esto,
porque suplicó: ―Acuérdate, oh Jehová, de lo que nos ha sucedido‖. ‗Extranjeros ocupan
nuestras casas. Llevamos las consecuencias del error de nuestros antepasados, y simples
muchachos cargan leña en trabajos forzados.‘ Sin embargo, Jeremías espera misericordia,
pues ora: ―Tráenos de vuelta, oh Jehová, a ti mismo, y prontamente volveremos‖. (5:1-22.)
Reflexionemos, pues, sobre estas lecciones del libro de Lamentaciones: El pecado no
trae gozo, Dios es justo al castigar a los pecadores, y los responsables llevan culpa si no
condenan el mal. Debemos esperar pacientemente en Jehová, confiando en que si hay
arrepentimiento genuino habrá misericordia divina, mientras que podemos acarrearnos
destrucción si somos pecadores voluntariosos. Este libro inspirado también nos convence de
que sólo Jehová da verdadera esperanza en medio del dolor.
*** w07 1/6 págs. 8-11 Puntos sobresalientes del libro de Lamentaciones ***
―SE ME HAN ACABADO LOS OJOS EN PURAS LÁGRIMAS‖
(Lamentaciones 1:1–2:22)
―¡Oh, cómo ha llegado a sentarse solitaria, la ciudad que abundaba en gente! ¡Cómo ha
quedado como viuda, la que era populosa entre las naciones! Aquella que era princesa entre
los distritos jurisdiccionales, ¡cómo ha llegado a ser para trabajo forzado!‖ Estas palabras dan
inicio a las lamentaciones de Jeremías por la ruina de Jerusalén. Explicando el motivo de esta
calamidad, el profeta dice: ―Jehová mismo le ha traído desconsuelo a causa de la abundancia
de sus transgresiones‖ (Lamentaciones 1:1, 5).
Representada como una mujer que ha perdido a su marido y a sus hijos, Jerusalén
pregunta: ―¿Existe algún dolor como mi dolor[?]‖. Luego clama a Dios con respecto a sus
enemigos: ―Venga delante de ti toda su maldad, y trátalos severamente, así como me has
tratado severamente a mí por causa de todas mis transgresiones. Porque son muchos mis
suspiros, y mi corazón está enfermo‖ (Lamentaciones 1:12, 22).
Jeremías dice angustiado: ―En el ardor de la cólera [Jehová] ha cortado todo cuerno de
Israel. Ha vuelto atrás su diestra de delante del enemigo; y en Jacob sigue ardiendo como un
fuego llameante que ha devorado todo en derredor‖. El profeta describe su aflicción con estas
palabras: ―Se me han acabado los ojos en puras lágrimas. Mis intestinos se hallan en agitación.
Mi hígado ha sido derramado a la misma tierra‖. Hasta los que pasan por allí preguntan
asombrados: ―¿Es esta la ciudad de la cual solían decir: ‗Es la perfección de belleza, un
alborozo para toda la tierra‘?‖ (Lamentaciones 2:3, 11, 15).
Respuestas a preguntas bíblicas:
1:15. ¿En qué sentido ―ha pisado [Jehová] el mismísimo lagar que pertenece a la
virgen hija de Judá‖? Al arrasar la ciudad —asemejada a una virgen—, los babilonios hicieron
correr tanta sangre que parecía como si se estuviera pisando uvas en un lagar. Puesto que fue
el mismo Jehová el que predijo y permitió esta aniquilación, podía decirse que él había ‗pisado
el lagar‘.
2:1. ¿De qué manera fue ‗arrojada del cielo a la tierra la hermosura de Israel‘? En vista
de que ―los cielos son más altos que la tierra‖, a veces se representa la humillación de las
cosas encumbradas diciendo que son ‗arrojadas del cielo a la tierra‘. ―La hermosura de Israel‖
—el esplendor y poder de que gozaba cuando tenía la bendición de Jehová— fue ‗arrojada‘ al
quedar destruida Jerusalén y desolada la tierra de Judá (Isaías 55:9).
2:1, 6. ¿Qué son el ―escabel‖ y la ―cabaña‖ de Jehová? El salmista cantó: ―Entremos en
su magnífico tabernáculo; inclinémonos ante el escabel de sus pies‖ (Salmo 132:7). Por lo
tanto, el ―escabel‖ de Lamentaciones 2:1 es el templo, o casa de adoración, de Jehová. Los
babilonios ―quemar[on] la casa de Jehová‖ como si fuera una cabaña, o una simple choza, en
medio de un jardín (Jeremías 52:12, 13).
2:16, 17. Siguiendo el orden del alfabeto hebreo, ¿no debería comenzar el versículo 16
con la letra ‛á·yin y el 17 con la letra pe‟? Al componer poemas de este estilo, los escritores
inspirados solían seguir el orden alfabético, pero no a costa de sacrificar la naturalidad.
El significado del contenido era más importante que ceñirse a una técnica literaria cuyo único
objetivo era facilitar la memorización. La inversión del orden de estos dos caracteres se da
también en los cantos tercero y cuarto (Lamentaciones 3:46, 49; 4:16, 17).
2:17. ¿Qué ―dicho‖ en particular tocante a Jerusalén realizó Jehová? Al parecer, aquí
se hace referencia a Levítico 26:17, donde dice: ―Fijaré mi rostro contra ustedes, y ciertamente
serán derrotados delante de sus enemigos; y simplemente los pisotearán aquellos que los
odian, y ustedes realmente huirán cuando nadie los esté persiguiendo‖.
Lecciones para nosotros:
1:1-9. Jerusalén da rienda suelta al llanto durante la noche, y las lágrimas corren por sus
mejillas. Sus puertas están desoladas, gimen sus sacerdotes, sus vírgenes están afligidas y
ella misma está llena de amargura. ¿Cuál es la causa de tanto sufrimiento? Su infame pecado.
Su inmundicia está en sus faldas. El fruto del pecado no es felicidad, sino lágrimas, suspiros,
aflicción y amargura.
1:18. Jehová es siempre justo al castigar a los transgresores.
2:20. A los israelitas se les advirtió que si no escuchaban la voz de Jehová, les
sobrevendrían maldiciones, entre ellas la de tener que comerse ‗la carne de sus hijos e hijas‘
(Deuteronomio 28:15, 45, 53). ¡Qué gran insensatez es desobedecer a Dios!
―NO ESCONDAS TU OÍDO DE MI ALIVIO‖
(Lamentaciones 3:1–5:22)
El capítulo 3 de Lamentaciones presenta al pueblo de Israel como un ―hombre físicamente
capacitado‖. Pese a las adversidades que sobre él se abaten, este hombre canta: ―Bueno es
Jehová al que espera en él, al alma que sigue buscándolo‖. También suplica al Dios verdadero:
―Tienes que oír mi voz. No escondas tu oído de mi alivio, de mi clamor por ayuda‖. Y al rogarle
que tome nota del vituperio de los enemigos, dice: ―Tú les devolverás un tratamiento, oh
Jehová, conforme a la obra de sus manos‖ (Lamentaciones 3:1, 25, 56, 64).
Jeremías desahoga su dolor por los terribles efectos del sitio de Jerusalén, que duró
dieciocho meses. Dice en lamento: ―El castigo por el error de la hija de mi pueblo también llega
a ser mayor que el castigo por el pecado de Sodoma, la cual fue derribada como en un
momento, y a la cual ninguna mano se dirigió con ayuda‖. Y añade: ―Mejores han resultado ser
los muertos a espada que los muertos por el hambre, porque estos languidecen, traspasados
por falta del producto del campo abierto‖ (Lamentaciones 4:6, 9).
El quinto poema pone las siguientes palabras en boca de los habitantes de Jerusalén:
―Acuérdate, oh Jehová, de lo que nos ha sucedido. De veras mira y ve nuestro oprobio‖. A la
vez que cuentan su tragedia, imploran: ―Oh Jehová, hasta tiempo indefinido te sentarás. Tu
trono es para generación tras generación. Tráenos de vuelta, oh Jehová, a ti mismo, y
prontamente volveremos. Trae días nuevos para nosotros como en la antigüedad‖
(Lamentaciones 5:1, 19, 21).
Respuestas a preguntas bíblicas:
3:16. ¿Qué quiere decir la expresión: ―Con grava hace que se me quiebren los
dientes‖? Según una obra de consulta, ―en el camino al destierro, los judíos se vieron
obligados a cocer su pan en huecos abiertos en la tierra, lo que hacía que se mezclara con
grava‖. Al comerlo, podían rompérseles los dientes.
4:3, 10. ¿Por qué compara Jeremías ―la hija de [su] pueblo‖ a ―avestruces en el
desierto‖? Job 39:16 dice que el avestruz ―trata a sus hijos bruscamente, como si no fueran
suyos‖. Por ejemplo, cuando los polluelos salen del huevo, la madre se marcha con otras
hembras y el macho se queda a cargo. ¿Y cómo proceden ambos padres cuando se
encuentran frente a un peligro? Huyen del nido, abandonando a sus pequeñuelos. Durante el
sitio babilónico, el hambre en Jerusalén fue tan grave que las madres, que por naturaleza son
compasivas, se volvieron crueles con sus propios hijos, como los avestruces en el desierto.
Hasta los chacales mostraban mejores sentimientos maternales.
5:7. ¿Pide cuentas Jehová a la gente por los errores de sus antepasados? No, Jehová
no castiga directamente a la gente por los pecados de sus antepasados. ―Cada uno de
nosotros rendirá cuenta de sí mismo a Dios‖, sostiene la Biblia (Romanos 14:12). No obstante,
las consecuencias de tales errores pueden perdurar y afectar a las nuevas generaciones. Por
ejemplo, la idolatría de los israelitas hizo difícil que hasta los fieles de tiempos posteriores
siguieran la senda de la rectitud (Éxodo 20:5).
Lecciones para nosotros:
3:8, 43, 44. Durante las calamidades que padecieron los habitantes de Jerusalén, Jehová se
negó a escuchar sus gritos de auxilio. ¿Por qué razón? Por su desobediencia y falta de
arrepentimiento. De manera que si queremos que Jehová conteste nuestras oraciones,
tenemos que obedecerle (Proverbios 28:9).
3:20. Jehová, ―el Altísimo sobre toda la tierra‖, es tan excelso que tiene que condescender
para ―tender la vista sobre cielo y tierra‖ (Salmo 83:18; 113:6). Pero Jeremías sabía muy bien
que el Todopoderoso está dispuesto a inclinarse hacia la gente, es decir, a descender a su
nivel para animarla. ¡Qué felices podemos estar de que el Dios verdadero no solo sea
omnipotente y omnisciente, sino también humilde!
3:21-26, 28-33. ¿Cómo podemos aguantar hasta el sufrimiento más intenso? Jeremías nos
da la respuesta. No debemos olvidar que los actos de bondad amorosa de Jehová son
abundantes y que sus misericordias son muchas. Hay que recordar asimismo que el solo hecho
de estar vivos es motivo suficiente para no perder la esperanza, y que es preciso ser pacientes
y esperar la salvación de Jehová en silencio, sin quejarnos. Además, debemos ‗poner la boca
en el mismísimo polvo‘, es decir, someternos humildemente a las pruebas reconociendo que si
Dios las permite, es por una buena razón.
3:27. Las pruebas de fe que sobrevienen en la juventud quizás impliquen aguantar
penalidades y burlas; pero ―bueno le es al hombre [...] llevar el yugo durante su juventud‖. ¿Por
qué? Porque aprender a llevar el yugo del sufrimiento en la juventud lo prepara para afrontar
los problemas que surjan más adelante en la vida.
3:39-42. No conviene ―entregarse a quejas‖ cuando se está sufriendo debido a los propios
pecados. En lugar de quejarnos por las consecuencias de las malas acciones, ―escudriñemos
nuestros caminos y explorémoslos, y volvámonos [...] hasta Jehová‖. Lo más sabio es
arrepentirse y rectificar nuestra conducta.
EZEQUIEL, LIBRO DE
CONTENIDO
Jehová comisiona a Ezequiel como atalaya(1:1-3:27).
Profecías de advertencia en contra de las infieles Judá y Jerusalén (4:1-24:27).
o Representación del sitio de Jerusalén(4:1-7:27).
Ezequiel se acuesta delante de un ladrillo durante 390 días sobre su lado
izquierdo y 40 días sobre su lado derecho, mientras se mantiene con una
dieta muy reducida (4:1-17).
Ezequiel representa el resultado del sitio afeitándose la cabeza y la barba,
quemando una tercera parte del pelo en el fuego, golpeando otra tercera
parte con la espada y esparciendo la última tercera parte al viento(5:1-17).
Profecía contra las montañas de Israel; sus lugares altos serán destruidos
y su idolatría cesará (6:1-14).
―Una calamidad singular‖ le sobrevendrá a Jerusalén, de tal modo que ni el
oro ni la plata podrán librar a nadie (7:1-27).
o La visión de Ezequiel de la apóstata Judá(8:1-11:25).
En 612 a. E.C. Ezequiel es transportado por medio de una visión a
Jerusalén, donde ve las cosas detestables que se hacían en el templo de
Jehová (8:1-18).
El hombre vestido de lino con un tintero de secretario marca en la frente a
los hombres que suspiran por las cosas detestables que se hacen en la
ciudad. Las personas marcadas serán libradas, pero las que no lo estén,
morirán por mandato divino (9:1-11).
Ezequiel ve nuevamente la gloria de Jehová levantándose por encima de
los querubines, y brasas de fuego esparcidas sobre la ciudad de Jerusalén
(10:1-22).
Los príncipes llevarán a Israel a la ruina al extraviar al pueblo; ilustración
de Jerusalén como una olla para cocinar. Pelatías muere; se predice la
restauración; Ezequiel regresa en visión a Caldea (11:1-25).
o Más profecías en Babilonia concernientes a Jerusalén (12:1-19:14).
Tanto el exilio del rey Sedequías como el de Judá son predichos por actos
simbólicos. El juicio no será postergado (12:1-28).
Los profetas estúpidos que predijeron paz son desenmascarados (13:1-
23).
Jerusalén es tan inicua que ni siquiera la presencia de Noé, Daniel y Job
podría salvarla; su ruina es segura (14:1-23).
Los habitantes de Jerusalén son como una vid inservible, que no es lo
suficientemente buena para ser usada como palo ni siquiera como estaca...
tan solo como combustible para hacer fuego (15:1-8).
La alegoría de la esposa infiel muestra cómo Jerusalén paga de vuelta a
Jehová su amor dando sus favores a los dioses paganos, prostituyéndose
y llegando a ser peor que Sodoma y Samaria; Jerusalén habrá de ser
destruida por sus amantes (16:1-63).
El enigma del águila y la vid predice que Jerusalén se volvería a Egipto por ayuda, con
consecuencias desastrosas; la ramita tierna habrá de llegar a ser un cedro majestuoso
(17:1-24).
Los desterrados en Babilonia son reprendidos por decir: ―Los padres son
los que comen el agraz, pero son los dientes de los hijos los que tienen
dentera‖. Dios corrige este punto de vista equivocado al decir: ―El alma que
peca... ella misma morirá‖ (18:1-32).
A los principales de Judá se les compara a leoncillos crinados; atrapados
por Egipto y Babilonia (19:1-14).
o Denunciaciones contra Israel (20:1-23:49).
Repaso de la larga historia de actividades detestables de Israel; rebelión
continua, a pesar de las misericordias de Jehová; no obstante, habrá
restauración (20:1-49).
Dios desenvaina su espada para traer ruina sobre Jerusalén; el trono de
David ―no llegará a ser de nadie hasta que venga aquel que tiene el
derecho legal‖ (21:1-32).
Más detalles sobre los pecados de Jerusalén; la casa de Israel ha llegado
a ser como escoria espumajosa que habrá de ser licuada ‗con el fuego‘ del
furor de Jehová (22:1-31).
Parábola de dos hermanas, Oholá y Oholibá, que se prostituyen; una es
Samaria; la otra, Jerusalén. Esta última habrá de ser destruida por sus
amantes (23:1-49).
o Comienza el sitio final de Jerusalén (24:1-27).
En 609 a. E.C. Jehová anuncia a Ezequiel que el rey de Babilonia ha
sitiado Jerusalén(24:1,2).
Se compara a Jerusalén con una olla de boca ancha; la carne representa a
sus habitantes; la ciudad está llena de derramamiento de sangre e
inmoralidad (24:3-14).
La esposa de Ezequiel muere el mismo día que comienza el sitio de
Jerusalén; Ezequiel no habría de lamentarse, como señal de que tampoco
los israelitas deberían lamentarse por la destrucción de Jerusalén, puesto
que era el juicio de Jehová (24:15-27).
Profecías contra las naciones circundantes que, como había previsto Jehová, se
regocijarían por la caída de Jerusalén (25:1-32:32).
o Profecías contra Ammón, Moab, Edom y Filistea; habrán de sufrir el mismo
destino que Jerusalén (25:1-17).
o Profecías contra Tiro (26:1-28:26).
Tiro será sitiada por el rey Nabucodorosor de Babilonia (26:1-21).
Endecha respecto a Tiro, la cual es representada como una bella nave
cargada con las mercancías y los tesoros de las naciones; será hundida en
medio del mar (27:1-36).
Será derrocado el orgulloso rey de Tiro, y Sidón tendrá que caer; Israel
será restaurado (28:1-26).
o Advertencias contra Egipto (29:1-32:32).
Nabucodorosor habrá de invadir y saquear Egipto, como el pago de Jehová
por haber destruido la ciudad continental de Tiro; Egipto llegará a ser ―más
bajo que los otros reinos‖, y nunca más se levantará por encima de otras
naciones (29:1-21).
A los apoyadores de Egipto también les espera desolación; los egipcios
serán esparcidos entre las naciones (30:1-26).
La caída de Asiría, como si de un árbol se tratara, supone una advertencia
para el faraón (31:1-18).
Endecha acerca del faraón reducido al silencio; Egipto desolado por
Babilonia; lamento por el entierro de Egipto con los incircuncisos (32:1-32).
Profecías de restauración y liberación del pueblo de Dios (33:1-48:35).
o Atalaya para los desterrados; se predice restauración (33:1-37:28).
Dios repasa la responsabilidad de Ezequiel como atalaya para advertir al
inicuo; un escapado de Jerusalén llega para contarles a los cautivos que
―la ciudad ha sido derribada!‖ (33:1-33).
Los pastores malos son reprendidos; Jehová recogerá a las ovejas
dispersadas y pondrá sobre ellas un pastor: ―Mi siervo David‖(34:1-31).
Edom llegará a ser un verdadero yermo desolado (35:1-15).
Restauración para Israel: su tierra rebosará de habitantes y llegará a ser
―como el jardín de Edén‖ (36:1-38).
A Israel se le representa en la visión del valle de huesos secos: estos,
milagrosamente, llegan a vivir y componen ―una fuerza militar grandísima.
Dios unificará a su pueblo bajo un pastor en un pacto de paz (37:1-28)
o El ataque de Gog de Magog sobre el Israel restaurado (38:1-39:29).
La prosperidad del pueblo de Dios induce a Gog de Magog a atacar,
previendo que obtendrá gran despojo: el resultado es guerra al pelear Dios
a favor de su pueblo (38:1-23).
Las hordas de Gog de Magog son destruidas: se entierran los huesos para
limpiar la tierra (39:1-20).
Israel habrá de soportar humillación: luego será restaurada: el espíritu de
Dios será derramado sobre la casa de Israel (39:21-29)
o Visión de Ezequiel del templo y de la ciudad (40:1-48:35).
La visión que tiene Ezequiel del templo situado sobre una montaña muy
alta da ánimo a los desterrados. Un ángel le muestra a Ezequiel los
detalles del templo, midiendo los muros, las puertas, las cámaras de la
guardia, los comedores y el templo propiamente dicho(40:1-46:24).
Una corriente milagrosa de agua fluye desde la casa de Jehová y
desemboca en el mar Muerto, donde los peces vuelven a la vida y surge
una industria pesquera en las costas del mar Salado. Los árboles proveen
alimento y curación para la gente (47:1-12).
Se reparte la tierra: la ciudad es llamada ―Jehová Mismo Está Allí‖ (47:13-
48:35)
(Para una consideración versículo por versículo vease el libro ,―Las
naciones sabrán que yo soy Jehová‖,kj,S 1973)
Véase el libro ―Toda Escritura es inspirada de Dios y provechosa‖, págs. 132-137.
*** w88 15/9 págs. 10-15 Escuche... ¡habla el atalaya de Jehová! ***
EL ―ATALAYA‖ de Jehová está dando el mensaje de Dios en este mismo momento. ¿Está
escuchando usted? Su mismísima vida depende de que responda a ese mensaje con aprecio y
acción. Pronto ‗las naciones conocerán a Jehová‘ cuando él santifique su santo nombre
mediante destruir a este sistema inicuo y conservar con vida a Su pueblo. ¿Espera usted ser
parte de ese pueblo? (Ezequiel 36:23; 39:7; 2 Pedro 3:8-13.) Puede serlo, pero sólo si escucha
cuando el ―atalaya‖ de Jehová habla.
2
El no escuchar a los profetas de Dios significó desastre para el reino de Judá en 607 a.E.C.
Las naciones enemigas se regocijaron por aquella desolación que causaron los babilonios.
¡Pero cuánta gloria para el nombre de Jehová cuando él manejó las circunstancias de modo
que los judíos fieles regresaran a su país de origen en 537 a.E.C.!
3
El atalaya de Jehová, Ezequiel, predijo tanto aquella desolación como la restauración. El
libro bíblico que lleva el nombre de ese atalaya, y que fue completado en Babilonia alrededor
de 591 a.E.C., contiene: 1) la comisión de Ezequiel; 2) representaciones de significado
profético; 3) mensajes contra Israel; 4) predicciones del juicio de Jerusalén; 5) profecías contra
otras naciones; 6) promesas de restauración; 7) una profecía contra Gog de Magog; y 8) una
visión del santuario de Dios. Lo invitamos a leer el libro a medida que lo estudiamos. Así verá
cómo nos afecta hoy, y escuchará mientras habla el ―atalaya‖ de Jehová.
Comisión del atalaya de Dios
4
El 5 de Tamuz de 613 a.E.C. (en el quinto año del destierro de Joaquín el rey de Judá en
Babilonia), Ezequiel, un sacerdote de 30 años de edad, estaba entre los cautivos judíos junto al
―río Kebar‖, un importante canal del río Éufrates. En una visión él contempló el carro celestial
de Jehová, un carro acompañado por ―cuatro criaturas vivientes‖. (Léase Ezequiel 1:4-10.)
Cada ‗criatura viviente‘, o querubín alado, tenía cuatro caras. (Ezequiel 10:1-20; 11:22.) Estas
indican que los querubines poseen amor (el hombre), justicia (el león), poder (el toro) y
sabiduría (el águila), cualidades que Dios les ha dado. Cada querubín estaba de pie al lado de
una enorme ‗rueda dentro de una rueda‘, y el espíritu o fuerza activa de Dios podía mover las
ruedas en cualquier dirección. (Ezequiel 1:1-21.)
5
El Conductor del carro era una gloriosa representación de Jehová. (Léase Ezequiel 1:22-
28.) ¡Qué apta representación de la organización angelical de Dios, compuesta de seres
celestiales, espíritus! (Salmo 18:10; 103:20, 21; Daniel 7:9, 10.) Jehová conduce el carro en el
sentido de que ejerce dominio sobre esas criaturas y las utiliza según Su propósito. El
Conductor estaba en calma, como el arco iris que lo acompañaba, pero Ezequiel quedó
tremendamente impresionado. De seguro esta vista imponente de la gloria y el poder de
Jehová como Organizador Supremo de sus huestes celestiales debería infundirnos humildad y
agradecimiento por el privilegio de servir a Jehová como parte de su organización terrestre.
6
Aunque a Ezequiel se le recordó su origen humano y su condición humilde cuando se le
llamó ―hijo del hombre‖, se le nombró profeta de Jehová. (Léase Ezequiel 2:1-5.) Ezequiel iría a
―naciones rebeldes‖, los reinos de Israel y Judá. Primero, por mandato divino él se comió un
rollo que contenía endechas, pero a Ezequiel le supo a miel porque agradecía ser el profeta de
Dios. También a los cristianos ungidos y a sus consiervos se les hace dulce ser testigos de
Jehová. Ezequiel profetizaría entre personas insensibles y tercas, pero Dios haría que el rostro
de él fuera tan resuelto como el rostro de ellos, y su frente tan dura como el diamante.
Profetizaría con denuedo, fuera que ellos escucharan o no. Es animador saber que tal como
Dios sostuvo a Ezequiel en circunstancias difíciles, así nos ayudará a nosotros a dar testimonio
valerosamente en cualquier territorio. (Ezequiel 2:6–3:11.)
7
Por comerse el rollo, Ezequiel adquirió ‗una furia de espíritu‘ apropiada para el mensaje
que llevaba. Moró ‗aturdido por siete días‘ en Tel-abib mientras digería el mensaje. (Ezequiel
3:12-15.) Nosotros también tenemos que meditar y estudiar diligentemente para comprender
las cosas espirituales profundas. Puesto que a Ezequiel se le dio un mensaje que tenía que
declarar, fue comisionado como el atalaya de Dios. (Léase Ezequiel 3:16-21.) El atalaya recién
nombrado iba a advertir a los israelitas quebrantadores de la Ley que les venía la ejecución
divina.
8
Si Ezequiel fallaba como atalaya, Jehová lo haría responsable por la muerte de las
víctimas. Aunque los que no querían que él los censurara pondrían cuerdas figurativas sobre
él, Ezequiel declararía con denuedo el mensaje de Dios. (Ezequiel 3:22-27.) En nuestros días
la cristiandad rehúsa escuchar, y trata de imponer restricciones a los cristianos ungidos. Pero
desde 1919 estos ungidos han servido como el ―atalaya‖ de Jehová y han declarado
valerosamente Su mensaje para ―el tiempo del fin‖ de este sistema. (Daniel 12:4.) Una
creciente ―gran muchedumbre‖ de ―otras ovejas‖ de Jesús se asocia con los ungidos en esta
obra. (Revelación 7:9, 10; Juan 10:16.) Puesto que la clase del ―atalaya‖ sigue dando el
mensaje de Dios, de seguro cada uno de los ungidos y de la ―gran muchedumbre‖ querría
declararlo como publicador regular.
Representaciones de profecías
9
Después, con humildad y denuedo Ezequiel representó ciertas profecías por pantomima, y
así dio un ejemplo que debe impulsarnos a cumplir humilde y valerosamente con las
asignaciones que Dios nos da. Para representar el sitio por los babilonios, se le mandó
acostarse de cara a un ladrillo sobre el cual él había grabado una figura de Jerusalén. Ezequiel
tenía que acostarse del lado izquierdo por 390 días para llevar el error del reino de diez tribus
de Israel, y después acostarse del lado derecho por 40 días para llevar el pecado del reino de
Judá, que constaba de dos tribus. Un día representaba un año. De modo que los 390 años se
extendieron desde la fundación de Israel en 997 a.E.C. hasta la destrucción de Jerusalén en
607 a.E.C. Los 40 años de Judá se extendieron desde que Jeremías fue nombrado profeta de
Dios en 647 a.E.C. hasta que Judá fue desolado en 607 a.E.C. (Ezequiel 4:1-8; Jeremías 1:1-
3.)
10
Ezequiel entonces representó los efectos que tendría aquel sitio. Para denotar hambre,
subsistió con solo 0,2 kilogramos (poco más de ocho onzas) de alimento y alrededor de medio
litro (una pinta) de agua al día. Su pan —una mezcla ilegal de trigo, cebada, habas, lentejas,
mijo y espelta cocida sobre excrementos— era inmundo. (Levítico 19:19.) Esta acción indicaba
que los residentes de Jerusalén sufrirían gran privación. Pero ¡qué alentador es saber que tal
como Jehová sostuvo a Ezequiel en medio de circunstancias difíciles, así nos ayudará a
nosotros a permanecer fieles y a cumplir con nuestra comisión de predicar, venga lo que
venga! (Ezequiel 4:9-17.)
11
Ezequiel entonces usó una espada para raparse el pelo de la cabeza y afeitarse la barba.
(Léase Ezequiel 5:1-4.) Los que murieran de hambre y peste se asemejarían a la tercera parte
del pelo del profeta que él quemó en medio de Jerusalén. Los que murieran en la guerra serían
como la tercera parte que él hirió con la espada. Los sobrevivientes serían dispersados entre
las naciones como la tercera parte de su pelo que él esparció al viento. Pero algunos
desterrados serían como los pocos pelos que Ezequiel tomó de aquella porción esparcida y
envolvió en su prenda de vestir para mostrar que emprenderían la adoración verdadera en
Judá después de la desolación de 70 años. (Ezequiel 5:5-17.) El hecho de que Jehová cumplió
esta representación de significado profético, y otras, debería infundirnos confianza en él como
el Cumplidor de las profecías. (Isaías 42:9; 55:11.)
¡Destrucción adelante!
12
En 613 a.E.C. Ezequiel habló al país para indicar lo que les sucedería a los habitantes de
Judá que practicaban la idolatría. (Léase Ezequiel 6:1-7.) Invasores destrozarían los lugares
altos, los estantes de incienso y los altares que se usaban en la adoración falsa. Tan solo la
idea de la devastación que causarían el hambre, la peste y la guerra llevaría a uno a gritar:
―¡Ay!‖, y a enfatizarlo palmoteando con las manos y pateando con el pie. Los cadáveres de los
fornicadores espirituales quedarían esparcidos por los lugares altos. Cuando la cristiandad —la
Jerusalén antitípica— sufra una destrucción similar, sabrá que la calamidad le viene de Jehová.
(Ezequiel 6:8-14.)
13
‗El fin venía sobre las cuatro extremidades de la tierra‘, el sistema religioso infiel de Judá.
Una ―guirnalda‖ de sucesos calamitosos le rodearía la cabeza al idólatra cuando ―la vara‖ que
Dios tenía en la mano —Nabucodonosor y sus huestes babilónicas— diera contra el pueblo de
Jehová y Su templo. Los que pertenecían a la ―muchedumbre‖ de compradores y vendedores
de Judá morirían o serían llevados al destierro, y las manos de los que se las arreglaran para
mantenerse vivos caerían de debilidad. Cuando su sistema religioso falso fuera derribado, ellos
se afeitarían la cabeza hasta la calvicie, por decirlo así, en señal de duelo. (Ezequiel 7:1-18.)
14
Nadie puede sobornar a Jehová ni a sus fuerzas de ejecución. (Léase Ezequiel 7:19.) El
soborno no podría salvar de la profanación al ―lugar oculto‖ —el Santísimo— cuando
―salteadores‖ caldeos se apoderaran de los utensilios sagrados y dejaran en ruinas el templo.
Jehová ‗hizo que cesara el orgullo de los fuertes‘ cuando se capturó al rey Sedequías y se dio
muerte a los principales del sacerdocio levítico. (2 Reyes 25:4-7, 18-21.) No, los pecadores de
la Jerusalén bajo sitio no podrían emplear soborno para escapar de la adversidad cuando Dios
‗los juzgara‘ por quebrantar su pacto con él. De manera similar, cuando dentro de poco se
profanen las cosas que la cristiandad considera sagradas, ella no podrá emplear soborno para
librarse de la ejecución del juicio divino que le vendrá. Entonces será demasiado tarde para
escuchar al ―atalaya‖ de Jehová. (Ezequiel 7:20-27.)
Los que suspiran debido a las cosas detestables
15
El 5 de Elul de 612 a.E.C., cuando Ezequiel tuvo una visión de Dios en gloria, ‗la
representación de una mano lo tomó por un mechón‘ y lo llevó a Jerusalén por el espíritu de
inspiración. El carro celestial también se había trasladado allí. Lo que Ezequiel entonces
contempló debería hacer que nos repugnara la mismísima idea de escuchar a apóstatas.
(Proverbios 11:9.) En el templo, apóstatas israelitas adoraban un símbolo idolátrico (quizás un
poste sagrado) que incitaba a celos a Dios. (Éxodo 20:2-6.) Al entrar en el patio interior, ¡qué
cosas detestables vio Ezequiel! (Léase Ezequiel 8:10, 11.) ¡Qué vergonzoso era que
70 ancianos israelitas estuvieran ofreciendo incienso a dioses falsos, representados por
entalladuras despreciables en la pared! (Ezequiel 8:1-12.)
16
La visión de Ezequiel muestra lo mortífera que es en sentido espiritual la apostasía. ¡Hasta
se había inducido a ciertas israelitas a llorar por Tamuz, un dios babilonio que era amante de
Istar, la diosa de la fertilidad! ¡Y qué abominación el que en el patio interior del templo
25 hombres, israelitas, estuvieran adorando al Sol! (Deuteronomio 4:15-19.) Empujaban hacia
la nariz de Dios un vástago obsceno, que quizás representaba el órgano viril humano. ¡No es
de extrañar que Jehová no escuchara sus oraciones, tal como la cristiandad procurará en vano
Su ayuda durante la ―gran tribulación‖! (Ezequiel 8:13-18; Mateo 24:21.)
Marcados para sobrevivir
17
Después notamos a siete hombres: uno es un secretario vestido de lino, y los otros seis
llevan armas desmenuzadoras. (Léase Ezequiel 9:1-7.) Los ―seis hombres‖ representaban a las
fuerzas de ejecución celestiales que Jehová utilizaba, aunque podía emplear a agentes
terrestres. Las personas que fueran marcadas en la frente por el ―hombre vestido de lino‖
recibirían la compasión de Dios porque no simpatizaban con las cosas detestables que se
hacían en el templo. Los ―seis hombres‖ empezaron allí su obra de ejecución con los
70 ancianos que practicaban la idolatría, las mujeres que lloraban por Tamuz y los
25 adoradores del Sol. En 607 a.E.C. los babilonios destruyeron a estas personas y a otras que
eran desleales a Dios.
18
El antitípico ―hombre vestido de lino‖ es la clase de los cristianos ungidos. Ellos van de
casa en casa para poner una marca simbólica en los que llegan a ser parte de la ―gran
muchedumbre‖ de las ―otras ovejas‖ de Cristo. La ―marca‖ es la evidencia de que esas ovejas
son personas dedicadas y bautizadas cuya personalidad es como la de Cristo. Ellas ‗suspiran y
gimen por las cosas detestables‘ que se hacen en la cristiandad, y han salido de Babilonia la
Grande, el imperio mundial de la religión falsa. (Revelación 18:4, 5.) Su ―marca‖ hará que las
fuerzas de ejecución utilizadas por Dios vean claramente que se les debe perdonar la vida
durante la ―gran tribulación‖. Pueden retener esa ―marca‖ por participar junto con los ungidos en
marcar a otras personas. Por eso, si usted ha sido ‗marcado‘, participe celosamente en la obra
de ‗marcar‘. (Ezequiel 9:8-11.)
¡Viene destrucción ardiente!
19
El hombre vestido de lino pasó por entre las ruedas del carro celestial para conseguir
brasas ardientes. Arrojó las brasas sobre Jerusalén, lo que daba noticia por anticipado de que
la destrucción de aquella ciudad sería una expresión de la ira ardiente de Dios. (Ezequiel 10:1-
8; Lamentaciones 2:2-4; 4:11.) En los días de Ezequiel, Jehová derramó su cólera mediante los
babilonios. (2 Crónicas 36:15-21; Jeremías 25:9-11.) Pero ¿qué sucederá en nuestros días? El
antitípico ―hombre vestido de lino‖ esparce el mensaje ardiente de Dios por toda la cristiandad
como notificación de que pronto vendrá la cólera divina contra ella y contra lo demás de
Babilonia la Grande. Por supuesto, los que rehúsen escuchar al ―atalaya‖ de Jehová no pueden
esperar sobrevivir. (Isaías 61:1, 2; Revelación 18:8-10, 20.)
20
De nuevo se dirige la atención al carro celestial, la organización celestial de Dios. El notar
la armonía que existe entre las ruedas del carro y los querubines debería impulsarnos a
cooperar de lleno con la organización terrestre de Dios. Por lealtad, también deberíamos
protegerla de hombres traicioneros. (Ezequiel 10:9-22.) Había hombres de esa clase en los
días de Ezequiel, porque él vio que, con ayuda egipcia, 25 príncipes gubernamentales
planeaban rebelarse contra las fuerzas de ejecución que Dios empleaba. Estos príncipes
comparaban a Jerusalén con un caldero, y se comparaban a sí mismos con carne que estaba
segura en él. Pero ¡qué equivocados estaban! La ―espada‖ de los ―extraños‖ babilonios mataría
a algunos de aquellos tramadores, mientras que otros irían al cautiverio. Esto ocurriría porque
para Dios los judíos eran responsables de haber quebrantado Su pacto. (Ezequiel 11:1-13;
Éxodo 19:1-8; 24:1-7; Jeremías 52:24-27.) Puesto que la cristiandad alega que está en pacto
con Dios, pero cifra su confianza en alianzas mundanas, perecerá bajo el ataque de las fuerzas
de ejecución que Jehová emplea.
21
Aunque los israelitas habían sido ‗esparcidos entre las tierras‘, como en 617 a.E.C., Dios
era ―un santuario‖ o refugio para los desterrados que se arrepentían. (Ezequiel 11:14-16.) Pero
¿qué más podía esperarse? (Léase Ezequiel 11:17-21.) Después de los 70 años de desolación
de Judá, un resto fue devuelto al ―suelo de Israel‖ ya limpiado. Algo que se puede comparar
con eso es que, después de un cautiverio babilónico, en 1919 el resto ungido fue librado y, bajo
la guía del espíritu de Dios, lo que había sido el ―suelo‖ desolado del Israel espiritual ha
experimentado limpieza. Por eso, ahora los que han sido ‗marcados‘ para ser conservados con
vida disfrutan del favor divino junto con el resto rehabilitado del Israel espiritual. Y si usted sigue
escuchando al ―atalaya‖ de Dios, puede que esté entre los sobrevivientes cuando Jehová
desenvaine Su espada.
―Todos los de carne tendrán que saber que yo mismo, Jehová, he sacado mi espada
de su vaina.‖ (EZEQUIEL 21:5.)
ES SOLO lo propio el que la espada de Jehová inspire terror en sus enemigos. Pero cuando
él la blandió contra los malhechores de los reinos de Judá e Israel, ¿supieron ellos realmente lo
que estaba ocurriendo? Sí; se les hizo saber que Jehová había desenvainado su espada
simbólica. (Esdras 9:6-9; Nehemías 1:8; 9:26-30.)
2
Mediante Ezequiel, su profeta y atalaya, Dios dijo: ―Todos los de carne tendrán que saber
que yo mismo, Jehová, he sacado mi espada de su vaina‖. (Ezequiel 21:5.) ¿Aplicaban solo a
la antigüedad aquellas palabras, o tienen significado para nosotros?
Predicciones del juicio de Jerusalén
3
El carro de Jehová se movió de nuevo, y la ubicación de Ezequiel también cambió. Era
como si la organización celestial divina simbolizada por un carro se hubiera movido a un puesto
de observación sobre el monte de los Olivos. Desde allí Jesús predijo la destrucción que le vino
a Jerusalén en 70 E.C., una devastación que fue un aviso profético del fin de la cristiandad.
(Marcos 13:1-20.) En visión, Ezequiel mismo había sido tomado del río Kebar, pero por el
espíritu de Dios ahora fue devuelto a su hogar en el destierro en Babilonia. Allí dijo a otros
desterrados ‗todo lo que Jehová le había hecho ver‘. De manera similar, el ―atalaya‖ ungido de
Dios y otros testigos que se asocian con ese atalaya hoy declaran todo lo que les ha revelado
el Conductor del carro celestial. (Ezequiel 11:22-25.)
4
Por actos simbólicos Ezequiel mostró a los desterrados judíos la inminencia del desastre
nacional. (Léase Ezequiel 12:1-7.) El profeta llevó ―equipaje para destierro‖ para denotar los
pocos artículos que los cautivos podrían llevar sobre los hombros. Pronto reinaría el horror en
la Jerusalén sitiada. Aunque muchas personas no aceptaban con seriedad aquellas
advertencias, Ezequiel habría de decir al pueblo: ―Ya no habrá más postergación‖. Hoy también
se manifiesta desprecio a las advertencias y profecías divinas, pero nosotros podemos
contribuir mucho a que los buscadores de la verdad confíen en su cumplimiento. (Ezequiel
12:8-28.)
5
Era necesario que los que no escuchaban al atalaya de Jehová supieran que
experimentarían la ―espada‖ de Dios. Por eso se denunció a los responsables de los falsos
conceptos acerca de la seguridad de Jerusalén y Judá. Se comparó con zorras destructivas a
los falsos profetas, y se mostró que los mentirosos estaban enluciendo los muros vacilantes, o
los proyectos vanos, de la gente. Se denunció también a las falsas profetisas. ―El día de
Jehová‖ se acercaba, y el rostro de Jehová estaba contra los que ‗se retiraban de él‘, es decir,
‗retirándose de su dedicación respecto a Dios‘. Si estamos dedicados a Jehová, de seguro
nunca querríamos retirarnos de su servicio sagrado. (Ezequiel 13:1–14:11.)
6
¿Quién pudiera haber salvado a la gente extraviada de Judá? Ni siquiera los justos Noé,
Daniel y Job podrían librarlos cuando Dios juzgara a aquel país. Por eso, para que
experimentemos la salvación, tenemos que llevar nuestra responsabilidad personal delante de
Dios y hacer su voluntad. (Ezequiel 14:12-23; Romanos 14:12.)
7
Debido a sus habitantes infieles, se comparó a Judá con una vid silvestre que no llevaba
fruto bueno y solo servía para ser echada en el fuego. (Ezequiel 15:1-8.) Aquella nación fue
asemejada también a una expósita a quien Dios salvó de Egipto y crió hasta que llegó a ser
mujer. Jehová la hizo su esposa, pero ella se volvió a dioses falsos y experimentaría
destrucción por su adulterio espiritual. Sin embargo, con los fieles Dios ‗establecería un pacto
de duración indefinida‘... el nuevo pacto con el Israel espiritual. (Ezequiel 16:1-63; Jeremías
31:31-34; Gálatas 6:16.)
8
Después Dios comparó a los gobernantes de Babilonia y Egipto con grandes águilas. Una
arrancó la cima de un cedro al quitar al rey Joaquín y reemplazarlo con Sedequías. Aunque
Sedequías había jurado lealtad a Nabucodonosor, quebrantó aquel juramento y procuró que el
gobernante de Egipto, la otra gran águila, le ayudara. Si Sedequías invocó el nombre de Dios al
hacer aquel juramento, el quebrantarlo causó oprobio a Jehová. La mismísima idea de que
causaríamos oprobio a Dios debería impedir que en alguna ocasión violáramos la palabra que
hubiéramos dado. ¡Ciertamente tenemos un gran privilegio al llevar el nombre divino como
testigos de Jehová! (Ezequiel 17:1-21.)
9
Después viene una alentadora profecía mesiánica. (Léase Ezequiel 17:22-24.) Aquí la
expresión ―una [ramita] que sea tierna‖ se refiere al Rey Mesiánico, Jesucristo. Plantado por
Jehová sobre el monte Sión celestial, él llegaría a ser ―un cedro majestuoso‖, fuente de
protección y bendición al gobernar sobre la Tierra. (Revelación 14:1.) Esto ciertamente es
alentador para nosotros.
10
Sin embargo, para beneficiarnos del cumplimiento de la profecía mesiánica tenemos que
mantener una buena relación con Jehová. Aparentemente los coterráneos desterrados de
Ezequiel pensaban que estaban en buena situación ante Dios y culpaban a sus antepasados
por los sufrimientos que padecían. Pero el profeta señaló que cada persona es responsable por
las consecuencias de su propia conducta. (Ezequiel 18:1-29; compárese con Jeremías 31:28-
30.) Después vino un llamamiento al corazón. (Léase Ezequiel 18:30-32.) Sí, Jehová es
misericordioso con el que se arrepiente, y no se deleita en la muerte de nadie. Por lo tanto,
Dios dice: ‗Vuélvanse y sigan viviendo‘. (Compárese con 2 Pedro 3:9.)
11
En una endecha por la caída de Judá, se comparó a sus gobernantes con leoncillos. El rey
Jehoacaz murió en el destierro en Egipto, Jehoiaquim fue capturado por Nabucodonosor, y
Joaquín fue enviado al destierro en Babilonia. Después Nabucodonosor colocó a Sedequías
sobre el trono de Judá, pero Sedequías se rebeló. Al fin Sedequías fue llevado al cautiverio en
Babilonia como si fuera un león enjaulado. En armonía con la endecha profética, en 607 a.E.C.
Judá llegó a ser una vid arruinada, ―y no resultó haber en ella vara fuerte, ningún cetro para
gobernar‖. ¡La ―espada‖ de Jehová la había herido! (Ezequiel 19:1-14; Jeremías 39:1-7.)
12
Ezequiel habló el mensaje de Dios cuando le hablaron ―hombres de los de edad madura
de Israel‖. Indicó que aunque Jehová había librado de Egipto a los israelitas y les había dado
Su Ley, ellos la habían rechazado y habían practicado la idolatría. Puesto que los
contemporáneos de Ezequiel eran culpables de malos hechos similares, Dios se pondría en
juicio contra ellos. Aparentemente por escepticismo, y no porque no entendieran lo que
Ezequiel quería decir, la gente preguntó: ―¿No está componiendo dichos proverbiales?‖. Pronto
aprenderían que no había nada simplemente proverbial en el mensaje de aquel profeta. De
esto deberíamos aprender que jamás debemos adoptar una actitud de escepticismo en cuanto
al cumplimiento de las advertencias bíblicas. (Ezequiel 20:1-49.)
Jehová el Guerrero
13
En el séptimo año del destierro (alrededor del 10 de Ab de 611 a.E.C.) faltaban menos de
dos años y medio para que empezara ―la batalla en el día de Jehová‖ contra Judá y Jerusalén.
(Ezequiel 13:5; 20:1.) Note lo que entonces dijo Jehová el Guerrero mediante Ezequiel. (Léase
Ezequiel 21:1-5.) La ―espada‖ de Dios significa la agencia terrestre que él utilizaría, pero puede
incluir a su organización celestial que se asemeja a un carro. Los habitantes ‗justos‘ e ‗inicuos‘
de Judá e Israel, así como las naciones que le tuvieran mala voluntad al pueblo de Dios,
caerían por la ―espada‖ de Dios. Sí, se haría que ―todos los de carne‖ supieran que Jehová
guerreaba contra ellos.
14
Como Ezequiel, los testigos ungidos de Jehová hoy llaman atención a la ―espada‖ que
Dios blandirá contra los que se adhieren a la cristiandad, cuyo dominio es el antitípico ―suelo de
Israel‖. Pronto ―toda carne de sur a norte‖ sentirá esa ―espada‖, es decir, todos los que
practican la religión falsa. Los que a sí mismos se hacían sentir seguros en los días de Ezequiel
no tenían razón para regocijarse, por concluir que la ―espada‖ de Jehová no ‗organizaría un
degüello‘ contra ellos. Aquella ―espada‖ rechazaba el cetro real del reino de Judá, tal como
rechazaba todo otro ―árbol‖ o cetro. Por lo tanto, esto garantiza que el instrumento divino de
ejecución no perdonará a los gobernantes de la cristiandad. (Ezequiel 21:6-17.)
15
La profecía de Ezequiel pasa a mostrar que nadie —y esto incluye a los demonios—
puede desviar la ―espada‖ de Jehová. (Léase Ezequiel 21:18-22.) Aunque el rey
Nabucodonosor emplearía adivinación demoníaca, Jehová se encargaría de que el gobernante
babilonio marchara contra Jerusalén, no contra la capital ammonita de Rabá, aunque esta era
más débil. De un receptáculo, Nabucodonosor escogería una flecha marcada para Jerusalén.
Usaría terafim (probablemente ídolos pequeños de forma humana) y buscaría indicaciones en
el hígado de un animal muerto. Sin embargo, a pesar de la adivinación, tomaría el camino hacia
la capital de Judá y la sitiaría. Es verdad que Nabucodonosor había entrado en un pacto con el
rey Sedequías. Pero porque no habían cumplido con su juramento, Sedequías y otros judíos
serían ―agarrados hasta por la mano‖ y llevados cautivos a Babilonia. (Ezequiel 21:23, 24.)
16
Por rebelarse, Sedequías se hirió mortíferamente a sí mismo. (Léase Ezequiel 21:25-27.)
Cuando se depuso al rey de Judá, hubo una remoción del turbante y la corona. (2 Reyes 25:1-
7.) El reino ―alto‖ de Judá fue ‗puesto bajo‘ al ser destruido en 607 a.E.C. Así, los reinos
gentiles ‗bajos‘ fueron ‗puestos altos‘, y quedaron en control de la Tierra sin la intervención de
un reino típico de Dios. (Deuteronomio 28:13, 15, 36, 43, 44.) Así empezaron ―los tiempos
señalados de las naciones‖ —los Tiempos de los Gentiles— que terminaron en el 1914 cuando
Dios confirió el reinado a Jesucristo, ―aquel que tiene el derecho legal‖ a él. (Lucas 21:20-24;
Salmo 110:1, 2; Daniel 4:15-28; 7:13, 14.) Una vez que Jesús está en su trono celestial las
naciones gentiles no pueden pisotear lo que fue simbolizado por la Jerusalén antigua, el Reino
del heredero legal de David. (Hebreos 12:22.)
17
Los profetas ammonitas decían que la capital de Ammón, Rabá, no sería destruida por la
espada de Nabucodonosor. Pero aquello era ―una mentira‖, porque toda la tierra de Ammón
sería devastada. En nuestro día, Dios ha decretado que la destrucción de las naciones vendrá
después de la destrucción de la cristiandad, tal como Rabá fue destruida después de
Jerusalén. (Ezequiel 21:28-32; Revelación 16:14-16.)
Se acusa a Jerusalén
18
Ezequiel profiere de nuevo la palabra de Jehová y denuncia a Jerusalén por pecados
como derramamiento de sangre, idolatría, conducta relajada, fraude y olvidar a Dios. Los
principales, culpables de derramamiento de sangre, abusaban del poder hasta el punto de
cometer asesinato bajo apariencia legal, y los calumniadores se libraban de sus enemigos
valiéndose de acusaciones falsas. Por aquellos malos hechos se dispersaría a los residentes
de Jerusalén. Porque conocemos estas cosas, deberíamos estar más resueltos a evitar el
abuso del poder, la conducta relajada, la calumnia y otros pecados crasos. (Ezequiel 22:1-16.)
19
Jehová también derretiría al pueblo de Judá en un horno. Esto no sería para purificarlos
en una refinación, sino para liquidarlos en su cólera ardiente. (Ezequiel 22:17-22.) Los profetas
que conspiraban, los sacerdotes desaforados, los príncipes ávidos de ganancia y el pueblo
injusto merecían aquel juicio. A todos se les denunció. Puesto que de entre ellos ningún
hombre estaba a favor de la justicia, Dios los exterminaría con el fuego de su furor. (Ezequiel
22:23-31.)
Un castigo merecido
20
Después se representa el derramamiento de la cólera de Dios como juicio ejecutado sobre
dos mujeres simbólicas que son culpables de adulterio espiritual. Una fue Oholá, el reino de
diez tribus de Israel que tenía como capital a Samaria. Ella era ―la mayor‖ porque se componía
de la mayoría de las tribus de Israel, entre ellas las que descendieron de Rubén y Simeón, los
hijos mayores de Jacob. La hermana de Oholá era Oholibá, el reino de dos tribus de Judá que
tenía a Jerusalén como capital. Oholá significa ―la Tienda de Ella‖. Oholibá significa ―Mi Tienda
Está en Ella‖, lo cual es apropiado, pues la tienda o templo de Dios estaba en Judá. (Ezequiel
23:1-4.)
21
Oholá (Israel) cesó de existir cuando fue derribada por los asirios en 740 a.E.C. ¿Qué
había hecho ella? (Léase Ezequiel 23:5-7.) Oholá, con falta de fe, había buscado la seguridad
en alianzas políticas, pero esto la llevó a adoptar la adoración falsa de sus aliados, y ella ‗se
contaminó con sus ídolos estercolizos‘. Nosotros, para quienes el adulterio espiritual de Oholá
es una advertencia, debemos cuidarnos para no entrar en enlaces mundanos que pudieran
destruir nuestra fe. (Santiago 4:4; 1 Juan 2:15-17.)
22
Porque Oholibá (Judá) siguió un proceder más pecaminoso que el de su hermana, sufrió
calamidad nacional a manos de los babilonios en 607 a.E.C. Sus hijos cayeron por la espada o
fueron llevados al cautiverio, y ella quedó en desgracia entre las naciones. Como Oholá y
Oholibá, la cristiandad comete adulterio espiritual, un pecado a la vista del Dios a quien afirma
adorar. El protestantismo, con sus muchas organizaciones religiosas, se ha contaminado con
los grandes del comercio y las potencias del mundo a grado que supera el de su hermana
mayor, el catolicismo romano. Por eso, Jehová se encargará de que se destruya a toda la
cristiandad. Entonces la gente sabrá que él es el Señor Soberano Jehová. Nos fortaleceremos
en nuestra resolución de evitar los lazos mundanos impropios si recordamos que los asociados
de la cristiandad pronto se volverán contra ella y ejecutarán en ella la sentencia divina que la
afecta por ser la parte principal de Babilonia la Grande, el imperio mundial de la religión falsa.
(Ezequiel 23:8-49; Revelación 17:1-6, 15-18.)
Los hipócritas quedan aturdidos
23
En el mismísimo día de fines de diciembre (10 de Tebet de 609 a.E.C.) en que
Nabucodonosor empezó el sitio de Jerusalén, un sitio que duró 18 meses, Dios entregó a
Ezequiel otro mensaje gráfico. En él se representó a la Jerusalén bajo asedio por el símbolo de
una olla en la cual se ‗haría hervir‘ a los residentes de la ciudad. La suciedad en cuanto a lo
moral había causado ―herrumbre‖ en aquella olla simbólica. ―Trozo por trozo‖ se sacaría de
Jerusalén a los malhechores, y el ay de ella no terminaría sino hasta que fuera destruida.
Jehová había juzgado a Jerusalén según los tratos inicuos de ella, y aquella ciudad tenía que
ser destruida, tal como tiene que ser destruida la cristiandad. (Ezequiel 24:1-14.)
24
Después, Ezequiel tendría que actuar de manera extraña. (Léase Ezequiel 24:15-18.)
¿Por qué no habría de mostrar dolor el profeta cuando muriera su esposa? Para demostrar lo
aturdidos que quedarían los judíos cuando la destrucción azotara a Jerusalén, sus habitantes y
el templo. Ezequiel ya había dicho suficiente en cuanto a aquellos asuntos y no hablaría de
nuevo el mensaje de Dios sino hasta que se le informara sobre la caída de Jerusalén. De
manera similar, la cristiandad y sus religiosos hipócritas quedarán aturdidos cuando llegue el
tiempo de su destrucción. Y después que comience la ―gran tribulación‖ bastará con lo que la
clase ungida del atalaya habrá dicho ya sobre el fin de ella. (Mateo 24:21.) Pero cuando la
―espada‖ de Dios descienda sobre la cristiandad, aquellos religiosos aturdidos, y otras
personas, ‗tendrán que saber que él es Jehová‘. (Ezequiel 24:19-27.)
*** w88 15/9 págs. 22-27 ―Tendrán que saber que yo soy Jehová‖ ***
―Ya no dejaré que mi santo nombre sea profanado; y las naciones tendrán que
saber que yo soy Jehová.‖ (EZEQUIEL 39:7.)
*** w07 1/7 págs. 11-14 Puntos sobresalientes del libro de Ezequiel (parte 1) ***
―ATALAYA ES LO QUE TE HE HECHO‖
(Ezequiel 1:1–19:14)
Tras contemplar una sobrecogedora visión del trono de Jehová, Ezequiel recibe su comisión:
―Atalaya es lo que te he hecho a la casa de Israel —le dice Jehová—, y tienes que oír habla de
mi boca y tienes que advertirles de mi parte‖ (Ezequiel 3:17). Para profetizar el asedio de la
ciudad de Jerusalén y sus consecuencias, se ordena a Ezequiel que represente dos
pantomimas. Y por medio de él, Jehová anuncia lo siguiente a la tierra de Judá: ―¡Aquí estoy!
Voy a traer sobre ustedes una espada, y ciertamente destruiré sus lugares altos‖ (Ezequiel 6:3).
A sus habitantes les dice: ―La guirnalda [de calamidad] tiene que venir a [ustedes]‖ (Ezequiel
7:7).
En el año 612 antes de nuestra era, una visión transporta a Ezequiel a Jerusalén. ¡Qué
repugnancia le causa ver lo que ocurre en el templo de Dios! Cuando Jehová exprese su ira
contra los apóstatas mediante sus fuerzas ejecutoras celestiales (representadas por ―seis
hombres‖), solo a los que hayan recibido ‗una marca en la frente‘ se les perdonará la vida
(Ezequiel 9:2-6). Pero antes deben arrojarse sobre la ciudad ―brasas de fuego‖, es decir,
ardientes mensajes de destrucción de parte de Dios (Ezequiel 10:2). Aunque Jehová ‗traerá
sobre la cabeza de los malvados su propio camino‘, promete reunir a los dispersos de Israel
(Ezequiel 11:17-21).
El espíritu de Dios trae a Ezequiel de vuelta a Caldea. Mediante una acción simbólica se
representa que el rey Sedequías y el pueblo huirían de Jerusalén. Los falsos profetas y
profetisas son denunciados, los idólatras son rechazados y Judá es comparada a una vid
inservible. Un enigma sobre dos águilas y una vid muestra las amargas consecuencias que
sufriría Jerusalén por buscar la ayuda de Egipto. El acertijo termina diciendo que Jehová
‗trasplantará una ramita tierna sobre una montaña encumbrada‘ (Ezequiel 17:22). En Judá, sin
embargo, no quedará ―ningún cetro para gobernar‖ (Ezequiel 19:14).
Respuestas a preguntas bíblicas:
1:4-28. ¿Qué representa el carro celestial? Representa la parte celestial de la
organización de Jehová compuesta por seres espirituales fieles. Su fuerza motriz es el espíritu
santo, y su Conductor —Jehová— es indescriptiblemente glorioso. Un hermoso arco iris
simboliza la calma que emana de Dios.
1:5-11. ¿Quiénes son las cuatro criaturas vivientes? En su segunda visión del carro,
Ezequiel identifica a las cuatro criaturas vivientes como querubines (Ezequiel 10:1-11; 11:22).
En esta descripción posterior, él llama a la cara del toro ―la cara del querubín‖ (Ezequiel 10:14).
Se trata de una designación muy atinada, pues el toro simboliza el poder y la fuerza, y los
querubines son espíritus poderosos.
2:6. ¿Por qué se llama reiteradamente ―hijo del hombre‖ a Ezequiel? Jehová se dirige al
profeta de este modo para recordarle que es una persona de carne y hueso, acentuando así el
contraste entre el mensajero humano y el Autor divino del mensaje. El mismo nombre se da a
Jesucristo unas ochenta veces en los Evangelios, indicando claramente que el Hijo de Dios
había venido como ser humano, no como una encarnación.
2:9–3:3. ¿Por qué le resultó dulce a Ezequiel el rollo de endechas y gemidos? Lo que
hizo que el rollo le resultara de un sabor dulce fue su actitud ante la misión encomendada.
Apreciaba mucho su servicio como profeta de Jehová.
4:1-17. ¿Representó realmente Ezequiel la escena que describía el cercano asedio de
Jerusalén? El hecho de que Ezequiel le suplicara a Jehová que le permitiera cocinar con otro
combustible y que se le concediera su petición indica que Ezequiel realmente representó la
escena. Se recostó sobre su lado izquierdo por los trescientos noventa años de culpa del reino
de diez tribus, desde su inicio en el 997 antes de nuestra era hasta la destrucción de Jerusalén
en el 607. Después se recostó sobre su lado derecho por los cuarenta años de pecado de
Judá, que iban desde el nombramiento de Jeremías como profeta en el 647 hasta el 607.
Durante todo este período de cuatrocientos treinta días, Ezequiel subsistió con muy poco
alimento y agua, apuntando proféticamente al hambre que habría durante el sitio de Jerusalén.
5:1-3. ¿Qué tiene de significativo que Ezequiel tomara unos pocos cabellos de los que
había esparcido al viento y los envolviera en los pliegues de las faldas de su vestidura?
Este acto sirvió para señalar que un resto regresaría a Judá y reanudaría la adoración
verdadera después de los setenta años de desolación (Ezequiel 11:17-20).
17:1-24. ¿Quiénes son las dos águilas grandes, en qué sentido se arrancan los
vástagos de un cedro, y quién es la ‗ramita tierna‘ trasplantada por Jehová? Las dos
águilas representan a los reyes de Babilonia y Egipto. La primera viene sobre la copa de un
cedro, que simboliza al soberano del linaje real de David. Esta águila arranca la cima de los
vástagos —las ramas nuevas— al sustituir al rey Joaquín de Judá por Sedequías. Pese al
juramento de fidelidad a Babilonia, Sedequías procura el auxilio de la otra águila, el faraón de
Egipto, pero es inútil: será llevado cautivo y morirá en Babilonia. Jehová también arranca ‗una
ramita tierna‘, a saber, el Rey Mesiánico. Esta es trasplantada ―sobre una montaña alta y
encumbrada‖ —el monte Sión celestial—, donde ―llegará a ser un cedro majestuoso‖, fuente de
verdaderas bendiciones para la Tierra (Revelación [Apocalipsis] 14:1).
Lecciones para nosotros:
2:6-8; 3:8, 9, 18-21. No deberíamos temblar ante los malvados ni retraernos de predicar el
mensaje divino, que incluye una advertencia para ellos. Cuando afrontamos indiferencia u
hostilidad, debemos ser tan duros como el diamante, pero sin hacernos agresivos, insensibles
o despiadados. Jesús se compadeció de la gente a la que predicaba, y a nosotros también
debe motivarnos la compasión al predicar (Mateo 9:36).
3:15. Tras recibir su comisión, Ezequiel moró en Tel-abib, ‗aturdido por siete días‘, digiriendo
el mensaje que habría de anunciar. ¿No deberíamos dedicar tiempo al estudio diligente y la
meditación a fin de entender las profundas verdades espirituales?
4:1–5:4. Se requirió humildad y valentía por parte de Ezequiel para representar con
pantomima las dos profecías. De igual modo, nosotros debemos ser humildes y valientes al
cumplir cualquier asignación que Dios nos dé.
7:4, 9; 8:18; 9:5, 10. No hay por qué dejar que nuestro ‗ojo se sienta apenado‘ por aquellos
que reciben el juicio adverso de Dios ni tenerles compasión.
7:19. Cuando Jehová ejecute su sentencia sobre el presente sistema de cosas, el dinero
no tendrá ningún valor en absoluto.
8:5-18. La apostasía es mortal en sentido espiritual: ―Por su boca el que es apóstata arruina
a su semejante‖ (Proverbios 11:9). Si somos sensatos, ni siquiera nos plantearemos la idea de
escuchar a los apóstatas.
9:3-6. Obtener la marca —la prueba de que somos siervos de Dios dedicados y bautizados y
que tenemos la personalidad cristiana— es vital para sobrevivir a la ―gran tribulación‖ (Mateo
24:21). Los cristianos ungidos, representados por el hombre con un tintero de secretario,
encabezan la labor de marcar, es decir, de predicar el Reino y hacer discípulos. Si queremos
conservar nuestra marca, tenemos que colaborar diligentemente con ellos en esta obra.
12:26-28. Incluso a aquellos que se burlan de su mensaje, Ezequiel debe decirles: ―Ya
no habrá más postergación en cuanto a cualesquiera palabras [de Jehová]‖. Debemos hacer
cuanto podamos por ayudar a otros a confiar en Jehová antes de que acabe con el presente
sistema de cosas.
14:12-23. Obtener la salvación es una responsabilidad personal. Nadie puede hacerlo por
nosotros (Romanos 14:12).
18:1-29. Cada cual es responsable de sus propios actos.
―RUINA, RUINA, RUINA LA HARÉ‖
(Ezequiel 20:1–24:27)
En el séptimo año del destierro, en el 611 antes de nuestra era, los ancianos de Israel
vienen a Ezequiel para ―inquirir de Jehová‖. Escuchan una larga historia de la rebelión de Israel
y la advertencia de que ‗Jehová sacaría su espada‘ contra ellos (Ezequiel 20:1; 21:3).
Dirigiéndose al principal de Israel, el rey Sedequías, Jehová le dice: ―Remueve el turbante, y
quita la corona. Esta no será la misma. Póngase en alto aun lo que está bajo, y póngase bajo
aun al alto. Ruina, ruina, ruina la haré. En cuanto a esta también, ciertamente no llegará a ser
de nadie hasta que venga aquel que tiene el derecho legal [Jesucristo], y tengo que dar esto a
él‖ (Ezequiel 21:26, 27).
Se presenta una acusación formal contra Jerusalén. La culpabilidad de Oholá (Israel) y de
Oholibá (Judá) se pone al descubierto. Oholá ya ha sido dada ―en la mano de los que la
amaban apasionadamente, en la mano de los hijos de Asiria‖ (Ezequiel 23:9). La desolación de
Oholibá se avecina. En el año 609 antes de nuestra era empieza el sitio de Jerusalén, que dura
dieciocho meses. Cuando la ciudad finalmente caiga, los judíos estarán demasiado aturdidos
para exteriorizar su dolor. Ezequiel no debe comunicar el mensaje de Dios a los desterrados
hasta que ―el escapado‖ le informe de la destrucción de la ciudad (Ezequiel 24:26, 27).
Respuestas a preguntas bíblicas:
21:3. ¿Qué es la ―espada‖ que Jehová desenvaina? La ―espada‖ que Jehová usa para
llevar a cabo su sentencia contra Jerusalén y Judá es Nabucodonosor, el rey de Babilonia,
junto con su ejército. También podría incluir a la parte celestial de la organización de Dios
formada por poderosos seres espirituales.
24:6-14. ¿Qué representa la herrumbre de la olla? La Jerusalén sitiada se compara a una
olla de boca ancha. Su herrumbre simboliza la corrupción moral de la ciudad: la inmundicia, la
conducta relajada y el derramamiento de sangre de los que es responsable. Es tal su
inmundicia que ni aun dejándola vacía sobre las brasas para que se caliente al rojo vivo es
posible desprender su herrumbre.
Lecciones para nosotros:
20:1, 49. La reacción de los ancianos de Israel indica que eran escépticos a lo que Ezequiel
estaba anunciando. No desarrollemos jamás una actitud escéptica ante las advertencias
divinas.
21:18-22. Aunque Nabucodonosor empleó la adivinación, fue Jehová quien se aseguró de
que aquel rey pagano viniera contra Jerusalén. Esto nos enseña que ni siquiera los demonios
pueden impedir que los agentes ejecutores de Jehová lleven a cabo su voluntad.
22:6-16. Jehová detesta la calumnia, la conducta relajada, el abuso de poder y el soborno.
Debemos evitar a toda costa dichas prácticas.
23:5-49. Las alianzas políticas llevaron a Israel y Judá a adoptar la adoración falsa de sus
aliados. Tengamos cuidado de no formar lazos con el mundo que puedan quebrantar nuestra fe
(Santiago 4:4).
*** w07 1/8 págs. 8-11 Puntos sobresalientes del libro de Ezequiel (parte 2) ***
‗ESA TIERRA LLEGARÁ A SER COMO EL JARDÍN DE EDÉN‘
(Ezequiel 25:1–39:29)
Previendo la reacción de Ammón, Moab, Edom, Filistea, Tiro y Sidón ante la caída de
Jerusalén, Jehová le dice a Ezequiel que profetice contra esas naciones. También le manda
declarar que Egipto será saqueado. ―Faraón el rey de Egipto y [...] su muchedumbre‖,
asemejados a un cedro que será cortado, caerán por ―la espada misma del rey de Babilonia‖
(Ezequiel 31:2, 3, 12; 32:11, 12).
Jerusalén es finalmente destruida en el año 607. Cierto hombre que ha logrado escapar
llega seis meses después adonde Ezequiel con el siguiente informe: ―¡La ciudad ha sido
derribada!‖. El profeta, quien hasta entonces había resultado ―estar mudo‖, empieza a hablar de
nuevo a los exiliados (Ezequiel 33:21, 22). Tiene profecías de restauración que pronunciar.
Jehová ‗levantará sobre ellos un solo pastor, su siervo David‘ (Ezequiel 34:23). La tierra de
Edom tiene que quedar desolada, pero su vecina, Judá, llegará a ser ―como el jardín de Edén‖
(Ezequiel 36:35). Además, Jehová promete proteger a su pueblo restaurado del ataque de
―Gog‖ (Ezequiel 38:2).
Respuestas a preguntas bíblicas:
29:8-12. ¿Cuándo estuvo desolada por cuarenta años la tierra de Egipto? Los
sobrevivientes que quedaron en Judá tras la destrucción de Jerusalén en el año 607 desoyeron
la advertencia del profeta Jeremías y huyeron a Egipto (Jeremías 24:1, 8-10; 42:7-22). Pero
no lograron ponerse a salvo, pues Nabucodonosor atacó la tierra de Egipto y la conquistó.
Es probable que los cuarenta años de desolación empezaran después de esa conquista.
Aunque en la historia no encontramos pruebas de esta devastación, podemos estar seguros de
que sí ocurrió, pues Jehová siempre se encarga de que sus profecías se cumplan (Isaías
55:11).
29:18. ¿Cómo fue que ―toda cabeza [...] quedó calva, y todo hombro [...] quedó pelado
por frotación‖? El asedio de la ciudad costera de Tiro fue tan intenso y extenuante que los
soldados de Nabucodonosor quedaron calvos por el roce de los cascos. También se les
pelaron los hombros debido a la fricción de los materiales que cargaban para la construcción de
torres y fortificaciones (Ezequiel 26:7-12).
Lecciones para nosotros:
29:19, 20. Como los habitantes de Tiro escaparon con muchas de sus riquezas a una parte
de la ciudad situada en una isla cercana, quedó muy poco despojo para el rey Nabucodonosor.
A pesar de que él era un gobernante pagano muy orgulloso y egocéntrico, Jehová le dio Egipto
como ―salario para su fuerza militar‖, compensándolo por el servicio que le había rendido.
¿No deberíamos nosotros imitar el ejemplo de Dios y pagar nuestros impuestos al Estado por
los servicios que nos presta? Prescindiendo de la conducta de las autoridades civiles y del uso
que den a los impuestos, es nuestro deber pagarlos (Romanos 13:4-7).
33:7-9. La clase del atalaya de hoy día —el resto ungido— y sus compañeros no deben
retraerse nunca de predicar las buenas nuevas del Reino y de advertir a la gente sobre la
venidera ―gran tribulación‖ (Mateo 24:21).
33:10-20. Nuestra salvación depende de que abandonemos el mal camino y obedezcamos a
Dios. Nadie puede negar que el camino que ―está bien ajustado‖ es el de Jehová.
36:20, 21. Entre las naciones se conocía a Israel como ―el pueblo de Jehová‖. No obstante,
los israelitas pisotearon el nombre de Dios al vivir de una manera indigna de él. Evitemos ser
adoradores de Jehová tan solo de nombre.
36:25, 37, 38. Pertenecemos a ―un rebaño de personas santas‖ que mora en un paraíso
espiritual. Por tanto, debemos esforzarnos por permanecer limpios.
38:1-23. ¡Qué tranquilizador es saber que Jehová rescatará a su pueblo del ataque de Gog
de la tierra de Magog! Gog es el nombre por el que se conoce a Satanás, el ―gobernante de
este mundo‖, desde que fue expulsado del cielo. Magog se refiere al ámbito terrestre, al que
están confinados Satanás y sus demonios (Juan 12:31; Revelación [Apocalipsis] 12:7-12).
―PON TU CORAZÓN SOBRE TODO LO QUE TE VOY A MOSTRAR‖
(Ezequiel 40:1–48:35)
Han pasado catorce años desde que Jerusalén fue destruida (Ezequiel 40:1). Y restan aún
cincuenta y seis años de exilio (Jeremías 29:10). Cuando Ezequiel está por cumplir 50 años, es
llevado en una visión a la tierra de Israel. Allí escucha estas palabras: ―Hijo del hombre, mira
con tus ojos, y con tus oídos oye, y pon tu corazón sobre todo lo que te voy a mostrar‖
(Ezequiel 40:2-4). ¡Qué emocionado debió sentirse al recibir la visión de un nuevo templo!
El glorioso templo que observa Ezequiel tiene seis puertas y treinta comedores; el profeta ve
también el Santo, el Santísimo y dos altares: uno de madera y otro para las ofrendas
quemadas. Del templo salen unos chorrillos de agua que crecen hasta convertirse en un
torrente (Ezequiel 47:1). En otra visión, Ezequiel contempla franjas de terreno que cruzan el
territorio de este a oeste. Se trata de las porciones que heredarán las tribus de Israel: una para
cada tribu. Entre las porciones de Judá y Benjamín hay una franja administrativa en la que se
ubican ―el santuario de Jehová‖ y una ―ciudad‖ llamada Jehová-Samah (Ezequiel 48:9, 10,
15, 35, nota).
Respuestas a preguntas bíblicas:
40:3–47:12. ¿Qué representa el templo de la visión? El colosal templo que Ezequiel
observó nunca fue construido. Más bien, sirvió para representar el templo espiritual de Dios, es
decir, las disposiciones que él ha establecido en nuestros días para que lo adoremos (Ezequiel
40:2; Miqueas 4:1; Hebreos 8:2; 9:23, 24). Aunque la visión del templo se cumple durante ―los
últimos días‖ —cuando se refina a la clase sacerdotal—, su cumplimiento final ocurrirá en el
Paraíso (2 Timoteo 3:1; Ezequiel 44:10-16; Malaquías 3:1-3). En el tiempo de Ezequiel, esta
visión sirvió para asegurar a los judíos exiliados que la adoración verdadera se restauraría y
que cada familia judía recibiría su propia herencia en la tierra.
40:3–43:17. ¿Por qué es significativo que se midiera el templo? Porque constituyó una
garantía de que el propósito de Jehová de restablecer la adoración pura se cumpliría sin falta.
43:2-4, 7, 9. ¿Qué eran ―los cadáveres de sus reyes‖ que debían sacarse del templo?
Según parece, dichos cadáveres eran ídolos. Tanto la clase gobernante de Jerusalén como el
pueblo habían contaminado el templo de Dios con sus ídolos. Para todos los efectos, estos
habían llegado a ser sus reyes.
43:13-20. ¿Qué representó el altar que Ezequiel contempló en la visión? Representó el
propósito de Dios de rescatar a la humanidad mediante el sacrificio de Jesucristo. Gracias a
dicho sacrificio es posible que los ungidos sean declarados justos y que la ―gran muchedumbre‖
tenga una condición limpia ante Dios (Revelación 7:9-14; Romanos 5:1, 2). Esto explicaría por
qué en la visión de Ezequiel no aparece ―el mar fundido‖ del templo de Salomón, aquel gran
recipiente que los sacerdotes usaban para lavarse (1 Reyes 7:23-26).
44:10-16. ¿A quién prefiguró la clase sacerdotal? Prefiguró al grupo de cristianos ungidos
de nuestros días, al cual Jehová ‗refinó y limpió‘ cuando vino a su templo en 1918 (Malaquías
3:1-5). A los que estaban limpios o se habían arrepentido se les permitió seguir sirviendo a
Dios. Pero tendrían que esforzarse por ―mantenerse sin mancha del mundo‖ y así dar el
ejemplo a la ―gran muchedumbre‖, representada por las tribus no sacerdotales (Santiago 1:27;
Revelación 7:9, 10).
45:1; 47:13–48:29. ¿Qué representan ―la tierra‖ y su repartición? ―La tierra‖ representa
el ámbito de acción del pueblo de Dios. Sin importar el país en el que viva, cada siervo de
Jehová de nuestros días tiene un lugar en esa ―tierra‖ restaurada, siempre y cuando mantenga
pura su adoración. La repartición de ―la tierra‖ tendrá su cumplimiento final cuando llegue el
nuevo mundo; allí todos los fieles heredarán un lugar en el cual vivir (Isaías 65:17, 21).
45:7, 16. ¿Qué prefigura la contribución del pueblo para el sacerdocio y el principal?
En el templo espiritual de nuestros días, la contribución es principalmente de carácter espiritual
e implica estar prestos a ayudar y ser cooperadores.
47:1-5. ¿Qué simbolizan las aguas del río que Ezequiel contempla en visión?
Simbolizan los medios que Jehová ha dispuesto para que obtengamos vida. Estas aguas
incluyen el sacrificio redentor de Jesucristo y el conocimiento de Dios que se halla en la Biblia
(Jeremías 2:13; Juan 4:7-26; Efesios 5:25-27). En nuestros días, el caudal del río ha ido
aumentando gradualmente a fin de satisfacer las necesidades de la gran cantidad de personas
que están abrazando la adoración verdadera (Isaías 60:22). Y en el Milenio, las aguas de vida
de este río fluirán con todo su poder e incluirán los ―rollos‖ que serán abiertos para aumentar
nuestra comprensión espiritual (Revelación 20:12; 22:1, 2).
47:12. ¿Qué representan los árboles frutales? Estos árboles simbólicos representan las
dádivas espirituales de Dios que permitirán a la humanidad recuperarse y alcanzar la
perfección.
48:15-19, 30-35, nota. ¿Qué prefigura la ciudad de la visión? El hecho de que ―Jehová-
Samah‖ se sitúe en suelo ―profano‖ nos hace pensar en algo terrenal. Según parece, la ciudad
prefigura una administración terrestre que beneficiará a los miembros de la justa ―nueva tierra‖
(2 Pedro 3:13). Las puertas ubicadas en cada uno de sus lados ilustran lo accesible que es.
Los superintendentes del pueblo de Dios deben ser tan accesibles como esta ciudad.
Lecciones para nosotros:
40:14, 16, 22, 26. Las palmeras grabadas en los muros de los pasos de entrada al templo
son una indicación de que solo se admite a personas rectas (Salmo 92:12). De esta ilustración
aprendemos que Jehová no aceptará nuestra adoración a menos que seamos rectos.
44:23. ¡Qué agradecidos podemos estar por todo lo que la clase sacerdotal de nuestros días
hace a favor de nosotros! ―El esclavo fiel y discreto‖ ha asumido la tarea de darnos alimento
espiritual oportuno de modo que podamos distinguir entre lo que es limpio y lo que es inmundo
a los ojos de Jehová (Mateo 24:45).
47:9, 11. El agua simbólica —que incluye el valiosísimo conocimiento de Dios— está
teniendo un maravilloso efecto revitalizante en quienes la beben (Juan 17:3). En contraste,
quienes rechazan el agua de vida serán dados ―a sal‖, es decir, serán destruidos para siempre.
Es vital, por lo tanto, que hagamos ―lo sumo posible para [...] maneja[r] la palabra de la verdad
correctamente‖ (2 Timoteo 2:15).
*** w99 1/3 págs. 8-13 ―Pon tu corazón sobre‖ el templo de Dios ***
―Hijo del hombre, [...] pon tu corazón sobre todo lo que te voy a mostrar [...]. Informa
todo lo que ves a la casa de Israel.‖ (EZEQUIEL 40:4.)
CORRÍA el año 593 a.E.C., el decimocuarto del destierro de Israel. A los judíos que vivían
en Babilonia debía parecerles muy lejana su amada tierra natal. La última vez que la mayoría
de ellos había visto Jerusalén, el fuego la consumía, sus imponentes murallas estaban
derruidas y sus soberbios edificios se encontraban en ruinas. El templo de Jehová, antaño la
gloria y corona de la ciudad, el único centro de la adoración pura en la Tierra, había quedado
reducido a escombros. El destierro de Israel solo había empezado. Faltaban aún cincuenta y
seis años para la prometida liberación (Jeremías 29:10).
2
Al fiel profeta Ezequiel debió entristecerle pensar en que el templo de Dios yacía en ruinas
a cientos de kilómetros de distancia, convertido en el desolado refugio de animales salvajes
(Jeremías 9:11). Su propio padre, Buzí, había oficiado de sacerdote en él (Ezequiel 1:3).
Ezequiel hubiera tenido el mismo privilegio, pero lo habían llevado al destierro con los nobles
de Jerusalén en 617 a.E.C., cuando aún era joven. Ya con unos 50 años de edad,
probablemente se daba cuenta de que no viviría para ver de nuevo Jerusalén ni participaría en
la reconstrucción de su templo. Podemos imaginarnos, por tanto, cuánto debió significar para él
recibir la visión de un templo glorioso.
3
Esta extensa visión, que ocupa nueve capítulos del libro de Ezequiel, proporcionó a los
desterrados de Judá una promesa que reforzó su fe. La adoración pura sería restaurada.
Durante los siglos posteriores hasta nuestro propio día, esta visión ha estimulado a quienes
aman a Jehová. ¿Por qué? Analicemos lo que la visión profética de Ezequiel significó para los
israelitas desterrados. Tiene cuatro facetas principales: el templo, el sacerdocio, el principal y la
tierra.
Restauración del templo
4
Para empezar, se lleva a Ezequiel a ―una montaña muy alta‖. Hacia el sur de esta hay un
templo enorme, como una ciudad amurallada. Un ángel cuya ―apariencia era como la
apariencia del cobre‖ lleva al profeta a hacer una visita completa del edificio (Ezequiel 40:2, 3).
La visión continúa, y Ezequiel contempla al ángel medir meticulosamente los tres pares de
puertas iguales y sus cámaras de la guardia, el patio exterior, el patio interior, los comedores, el
altar y el santuario del templo, con los compartimientos del Santo y el Santísimo.
5
Luego, Jehová mismo aparece en la visión. Entra en el templo y asegura al profeta
Ezequiel que Él residirá allí. Pero Jehová exige que primero se limpie Su casa, diciendo: ―Ahora
que alejen de mí su fornicación y los cadáveres de sus reyes, y ciertamente residiré en medio
de ellos hasta tiempo indefinido‖ (Ezequiel 43:2-4, 7, 9). Con los ―cadáveres de sus reyes‖ se
hacía referencia, por lo visto, a ídolos. Los gobernantes rebeldes de Jerusalén y el pueblo
habían contaminado el templo de Dios con ídolos y, para los efectos, los habían convertido en
reyes (compárese con Amós 5:26). Estos no eran ni mucho menos dioses o reyes vivos, sino
objetos inertes y sucios a la vista de Jehová. Había que eliminarlos (Levítico 26:30; Jeremías
16:18).
6
¿Cuál fue el significado de esta parte de la visión? Garantizó a los desterrados la
restauración total de la adoración pura en el templo de Dios. Además, el que se midiera el
templo suministró la garantía divina de que el cumplimiento de la visión era totalmente seguro
(compárese con Jeremías 31:39, 40; Zacarías 2:2-8). Se limpiaría de allí todo rastro de
idolatría. Jehová bendeciría una vez más su casa.
El sacerdocio y el principal
7
Al sacerdocio también se le iba a limpiar, a refinar. Se iba a reprender a los levitas por
haber sucumbido a la idolatría, mientras que a los hijos sacerdotales de Sadoc se les
encomiaría y recompensaría por haber permanecido limpios. No obstante, tanto los sacerdotes
como los levitas tendrían puestos de servicio en la casa restaurada de Dios, dependiendo, por
supuesto, de su fidelidad personal. Además, Jehová decretó: ―Deben instruir a mi pueblo en
cuanto a la diferencia entre una cosa santa y una cosa profana; y deben hacer que sepan la
diferencia entre lo que es inmundo y lo que es limpio‖ (Ezequiel 44:10-16, 23). De modo que se
restablecería el sacerdocio y se recompensaría el aguante fiel de los sacerdotes.
8
La visión también presenta a alguien llamado el principal. La nación había tenido
principales desde la época de Moisés. La palabra hebrea para principal, na·sí, podía referirse al
cabeza de una casa paterna, una tribu o incluso una nación. En la visión de Ezequiel, a los
gobernantes de Israel en conjunto se les reprende por oprimir al pueblo y se les insta a ser
imparciales y justos. Si bien el principal no pertenece a la clase sacerdotal, desempeña un
papel destacado en la adoración pura. Entra y sale del patio exterior con las tribus
no sacerdotales, se sienta en el pórtico de la Puerta del Este y suministra al pueblo algunos
sacrificios para que los ofrezca (Ezequiel 44:2, 3; 45:8-12, 17). De este modo, la visión
garantiza al pueblo de Ezequiel que a la nación restaurada se la bendeciría con caudillos
ejemplares, hombres que apoyarían al sacerdocio en organizar al pueblo de Dios y que serían
muy buenos ejemplos en los asuntos de naturaleza espiritual.
La tierra
9
Finalmente, la visión de Ezequiel incluye una perspectiva general de la tierra de Israel. Esta
debía dividirse de tal modo que a cada tribu correspondiera una porción de terreno. El principal
también tendría una herencia. Pero los sacerdotes no, pues Jehová dijo: ―Yo soy su herencia‖
(Ezequiel 44:10, 28; Números 18:20). La visión indica que la porción de terreno del principal
estaría a ambos lados de una zona especial denominada la contribución santa. Se trataba de
un terreno cuadrado dividido en tres franjas: la superior, para los levitas arrepentidos; la del
centro, para los sacerdotes, y la inferior, para la ciudad y su tierra productiva. El templo de
Jehová estaría ubicado en la franja de tierra de los sacerdotes, en el centro de la contribución
cuadrada (Ezequiel 45:1-7).
10
¡Cómo debió levantar el ánimo de los desterrados esta visión! Se aseguraba a todas las
familias una herencia en la tierra (compárese con Miqueas 4:4). La adoración pura ocuparía
una posición central y ensalzada. Y fijémonos que en la visión de Ezequiel, el principal, igual
que los sacerdotes, viviría en la tierra aportada por el pueblo (Ezequiel 45:16). De modo que en
la tierra restaurada, el pueblo habría de contribuir al trabajo de las personas nombradas por
Jehová para llevar la delantera, y las apoyaría cooperando con su dirección. Esta tierra era el
arquetipo de la organización, la colaboración y la seguridad.
11
¿Bendeciría Jehová su tierra? La profecía responde a esta pregunta con una
conmovedora descripción. Del templo fluye una corriente que aumenta según avanza, hasta
convertirse en un torrente cuando desemboca en el mar Muerto. Allí da vida a las aguas que
estaban muertas, y una industria pesquera florece en un trecho de la costa. A lo largo de las
riberas hay muchos árboles que producen fruto durante todo el año y dan alimento y curación
(Ezequiel 47:1-12).
12
Para los desterrados, esta promesa repetía y confirmaba anteriores profecías de
restauración que les eran muy preciadas. Los profetas inspirados de Jehová habían descrito
más de una vez en términos paradisíacos una tierra de Israel restaurada y repoblada. Un tema
profético recurrente había sido el de regiones desérticas que cobraban vida (Isaías 35:1, 6, 7;
51:3; Ezequiel 36:35; 37:1-14). Así que el pueblo podía esperar que las vivificadoras
bendiciones de Jehová fluyeran como un río desde el templo restaurado e hicieran revivir a una
nación que estaba espiritualmente muerta. Al pueblo restaurado se le bendeciría con hombres
espirituales sobresalientes, hombres justos y firmes como los árboles que había en las riberas
de la visión, hombres que tomarían la iniciativa en la reconstrucción de una tierra arruinada.
Isaías también había escrito sobre ―árboles grandes de justicia‖ que ―[reedificarían] los lugares
que [habían] estado devastados por largo tiempo‖ (Isaías 61:3, 4).
¿Cuándo se cumple la visión?
13
¿Quedaron decepcionados los desterrados que regresaron? Ni mucho menos. Un resto
restaurado volvió a su amada patria en 537 a.E.C. Andando el tiempo, bajo la dirección de
estos ―árboles grandes de justicia‖ —como el escriba Esdras, los profetas Ageo y Zacarías, y el
sumo sacerdote Josué— se reedificaron los lugares devastados por largo tiempo. Los
principales, como Nehemías y Zorobabel, gobernaron en la tierra con imparcialidad y justicia.
Se reconstruyó el templo de Jehová, y de nuevo fluyeron Sus provisiones para la vida, es decir,
las bendiciones de vivir bajo Su pacto (Deuteronomio 30:19; Isaías 48:17-20). Una de ellas fue
el conocimiento. El sacerdocio volvió a cumplir sus funciones, y los sacerdotes enseñaron la
Ley al pueblo (Malaquías 2:7). Como consecuencia, las personas revivieron espiritualmente y
de nuevo se hicieron siervos fructíferos de Jehová, como se representó mediante la curación
del mar Muerto y la generación de una industria pesquera productiva.
14
¿Fueron estos sucesos el único cumplimiento de la visión de Ezequiel? No, esta apunta a
algo mucho mayor. Piense en lo siguiente: el templo que Ezequiel vio no podía construirse
como se describió. Es cierto que los judíos tomaron muy en serio esta visión y hasta aplicaron
algunos detalles literalmente. Sin embargo, el templo de la visión en conjunto era demasiado
grande incluso para el monte Moria, la ubicación del templo anterior. Además, el templo de
Ezequiel no se encontraba en la ciudad, sino en un terreno que se hallaba a cierta distancia,
mientras que el segundo templo se edificó donde había estado el anterior, en la ciudad de
Jerusalén (Esdras 1:1, 2). Además, del templo de Jerusalén no salió nunca ningún río literal. De
modo que el Israel antiguo solo vio un cumplimiento en escala menor de la profecía de
Ezequiel, lo cual implica que esta visión debe tener un cumplimiento mayor, espiritual.
15
Hemos de buscar sin duda el cumplimiento principal de la visión de Ezequiel en el gran
templo espiritual de Jehová, del cual habla Pablo en profundidad en el libro de Hebreos. Ese
templo empezó a funcionar cuando se ungió a Jesucristo como su Sumo Sacerdote en 29 E.C.
Ahora bien, ¿se cumplió la visión de Ezequiel en los días de Jesús? Evidentemente no. En su
calidad de Sumo Sacerdote, Jesús hizo realidad el significado profético del Día de Expiación
mediante su bautismo, su muerte como sacrificio y su entrada en el Santísimo, el cielo mismo
(Hebreos 9:24). Es digno de notar, sin embargo, que la visión de Ezequiel no contiene ninguna
mención del sumo sacerdote ni del Día de Expiación. De modo que es improbable que esta
visión señalara al siglo primero de la era común. Entonces, ¿en qué tiempo se cumpliría?
16
Para obtener la respuesta, volvamos a la visión misma. Ezequiel escribió: ―En las visiones
de Dios me llevó a la tierra de Israel y gradualmente me colocó sobre una montaña muy alta,
en la cual había algo como la estructura de una ciudad hacia el sur‖ (Ezequiel 40:2). El marco
de esta visión, la ―montaña muy alta‖, nos recuerda Miqueas 4:1: ―En la parte final de los días
tiene que suceder que la montaña de la casa de Jehová llegará a estar firmemente establecida
por encima de la cumbre de las montañas, y ciertamente será alzada por encima de las colinas;
y a ella tendrán que afluir pueblos‖. ¿Cuándo empieza a cumplirse esta profecía? Miqueas 4:5
indica que es mientras las naciones aún adoran a dioses falsos. De hecho, ha sido en nuestra
época, ―la parte final de los días‖, cuando se ha elevado la adoración pura, se la ha restaurado
a su debido lugar en la vida de los siervos de Dios.
17
¿Qué hizo posible esta restauración? Recordemos que en el suceso más importante de la
visión de Ezequiel, Jehová viene al templo e insiste en que se limpie de idolatría su casa.
¿Cuándo se limpió el templo espiritual de Dios? En Malaquías 3:1-5, Jehová predice un tiempo
en que ―vendrá a Su templo‖ acompañado de su ―mensajero del pacto‖, Jesucristo. ¿Con qué
propósito? ―Él será como el fuego de un refinador y como la lejía de los lavanderos.‖ Ese
refinamiento comenzó durante la época de la primera guerra mundial. ¿Con qué resultado?
Jehová ha morado en su casa y ha bendecido la tierra espiritual de su pueblo desde 1919
(Isaías 66:8). Podemos concluir, por tanto, que la profecía del templo de Ezequiel tiene un
cumplimiento importante durante los últimos días.
18
Al igual que otras profecías de restauración, la visión de Ezequiel tiene otro cumplimiento,
el final, en el Paraíso. Solo entonces recibirá la humanidad recta los beneficios plenos de la
provisión del templo de Dios. Cristo administrará entonces el valor de su sacrificio de rescate
junto con su sacerdocio celestial, los 144.000. Se elevará a la perfección a todos los súbditos
humanos obedientes del gobierno de Cristo (Revelación [Apocalipsis] 20:5, 6). Sin embargo, el
tiempo del Paraíso no puede ser el tiempo del cumplimiento principal de la visión de Ezequiel.
¿Por qué no?
La visión se centra en nuestros días
19
Ezequiel vio un templo que tenía que ser limpiado de idolatría y fornicación espiritual
(Ezequiel 43:7-9). Es evidente que este detalle no podría aplicarse a la adoración de Jehová en
el Paraíso. Además, los sacerdotes de la visión representan a la clase sacerdotal ungida
mientras todavía está en la Tierra, no después de su resurrección celestial ni durante el Milenio.
¿Por qué? Observemos que a los sacerdotes se les representa sirviendo en el patio interior. En
artículos anteriores de La Atalaya se ha explicado que este patio simboliza la singular posición
espiritual de los subsacerdotes de Cristo mientras aún están en la Tierra. Fijémonos también en
que la visión pone de relieve la imperfección de los sacerdotes, pues se les dice que ofrezcan
sacrificios por sus propios pecados y se les previene contra el peligro de hacerse inmundos
espiritual y moralmente. De modo que no representan a los ungidos resucitados, sobre quienes
escribió el apóstol Pablo: ―Sonará la trompeta, y los muertos serán levantados incorruptibles‖
(1 Corintios 15:52; Ezequiel 44:21, 22, 25, 27). Los sacerdotes de la visión de Ezequiel están
con la gente y le sirven directamente. Eso no será posible en el Paraíso, cuando la clase
sacerdotal viva en el cielo. La visión suministra, por tanto, una buena imagen de cómo los
ungidos trabajan en estrecha colaboración con la ―gran muchedumbre‖ en la Tierra hoy día
(Revelación 7:9; Ezequiel 42:14).
20
Por tanto, la visión que tiene Ezequiel del templo anticipa los efectos curativos de la
limpieza espiritual que está teniendo lugar en la actualidad. Ahora bien, ¿qué significa eso para
nosotros? No se trata sencillamente de una cuestión teológica abstracta. La visión tiene mucho
que ver con nuestra propia adoración diaria al único Dios verdadero, Jehová. En el próximo
artículo veremos cómo.
[Notas]
Esto tal vez conmovió a Ezequiel personalmente, pues se dice que era de la familia sacerdotal
de Sadoc.
Por ejemplo, la antigua Misná da a entender que el altar, las puertas de dos hojas y las zonas
para cocinar del templo restaurado se construyeron según el modelo de la visión de
Ezequiel.
Véanse los números de La Atalaya del 1 de julio de 1996, pág. 16 y del 1 de junio de 1973,
pág. 334.
*** w99 1/3 págs. 13-18 ―El templo‖ y ―el principal‖ hoy ***
―En lo que respecta al principal en medio de ellos, cuando entran, él debe entrar; y
cuando salen, él debe salir.‖ (EZEQUIEL 46:10.)
DANIEL, LIBRO DE
CONTENIDO
Preparación de los cautivos reales y de los nobles traídos a Babilonia en 617 a. E.C.
(Cap. 1.)
o Daniel y tres compañeros solicitan exención para no tomar los manjares
exquisitos y el vino del rey; una prueba de diez días demuestra en aquel caso la
superioridad de la dieta a base de legumbres y agua (1-16).
o Después de una preparación de tres años, Daniel y sus compañeros, gracias a la
bendición de Dios, muestran ser mas sabios que los otros ―sabios‖ (17-21).
El sueño de Nabucodonosor de la imagen inmensa ―pavorosa‖. (Cap. 2.)
o Los ―sabios‖ de Babilonia no son capaces de declarar ni interpretar el sueño de
Nabucodonosor (1-13).
o Daniel revela e interpreta el sueño; da el crédito a Dios (14-28).
Describe las potencias mundiales, empezando con Babilonia y terminando
con la destrucción por medio del reino de Dios(29-45).
Daniel elevado a autoridad por encima de todos los sabios y hecho
gobernante sobre todo el distrito jurisdiccional de Babilonia; los tres
compañeros nombrados a posiciones administrativas (46,48,49).
o Nabucodonosor ensalza al Dios de Daniel (47).
La integridad de Hananias (Sadrac), Misael (Mesac) y Azarías (Abednego). (Cap.3)
o Se erige una imagen de oro gigantesca de sesenta codos de alto; se llama a
todos los oficiales para que se inclinen ante ella (1-7).
o Los tres jóvenes hebreos rehúsan inclinarse (8-18).
Son arrojados a un horno calentado más allá de lo normal; los servidores
mueren por el calor (19-23).
Con los tres hombres en el horno aparece uno que ―se asemeja a un hijo
de los dioses‖ (24,25).
Se les saca ilesos, sin siquiera haberse quemado ligeramente (26,27).
o Nabucodonosor alaba a Dios; emite una ley que prohíbe decir cualquier cosa
contra Jehová (28-30).
El sueño de Nabucodonosor relativo al gran árbol. (Cap.4.)
o La altura alcanza a los cielos; era visible por toda la Tierra; proveía alimento y ser-
vía de refugio (1-12).
o Un vigilante decreta que lo corten; se deja el tocón en la tierra atado con hierro y
cobre (13-17).
o Daniel interpreta el sueño y lo aplica a Nabucodonosor (18-27).
o Se cumple el sueño con la locura de Nabucodonosor; llega a ser como una bestia
durante ―siete tiempos‖ (28-33).
o Recobra el juicio y vuelve a ocupar el trono; Nabucodonosor alaba, ensalza y
glorifica a Dios; reconoce que Dios es el gobernante entre el ejército de los cielos
y el reino de la humanidad, y que a quien Él quiere se lo da (34-37).
o Escritura en la pared. (Cap.5.)
En un festín Belsasar profana los vasos del templo ante mil de sus grandes (1-4).
Una mano aparece y escribe sobre el enlucido de la pared unas palabras que los hombres
de la corte de Belsasar no pueden leer ni explicar (5-9).
La reina aconseja a Belsasar que llame a Daniel (10-12).
Daniel interpreta que las palabras significan que el reino de Belsasar es dado a los medos
y a los persas;Daniel es nombrado el tercer gobernante del reino (13-29).
Se da muerte a Belsasar aquella noche; Darío el medo gobierna (30,31).
Daniel en el foso de los leones. (Cap.6.)
o Daniel es elevado de posición debido al favor del rey Darío: esto provoca la
envidia de los funcionarios encumbrados y de los sátrapas (1-3).
Intentan entramparlo en algún punto de la ley de su Dios (4,5).
Inducen a Darío a que ordene que durante treinta días no se haga petición
alguna a dios o a hombre,excepto al rey (6-9).
La integridad de Daniel es puesta a prueba.
Continúa orando diariamente a pesar del decreto (10-15).
Es arrojado al foso de los leones; Dios lo libra cerrando la boca de
los leones (16-23).
Los maquinadores son arrojados junto con sus hijos y esposas al foso de
los leones; mueren (24).
o Darío emite un edicto para que el pueblo tema al Dios de Daniel (25-28).
Marcha de las potencias mundiales. (Caps.7,8.)
o Descripción de las potencias mundiales, empezando con Babilonia; son
representadas por un león, un oso,un leopardo y una bestia terrible con diez
cuernos. (Cap.7.)
o Sale un cuerno pequeño que supera a otros tres y que habla cosas grandiosas
(7:8)
Intenta cambiar el tiempo señalado de Dios para el dominio del Reino
(7:20-22, 24,25).
Lucha con los santos de Dios. Ellos son dados en su mano por un período
de tres tiempos y medio (7:25).
o El ―Anciano de Días‖ da el Reino al Hijo del hombre; a la terrible bestia y a su
cuerno pequeño se les quita la gobernación y la bestia es echada al fuego; el
Reino gobierna para siempre sobre todos los reinos y gobiernos (7:9-14, 26-28).
Un carnero, un macho cabrío y un cuerno pequeño representan las potencias mundia-
les que suceden a Babilonia (8:1-7).
El carnero de dos cuernos imperio medopersa (8:20).
El macho de las cabras = imperio griego (8:21).
El imperio griego se divide en cuatro reinos (8:8,22).
El cuerno pequeño se pone en pie contra el Príncipe de príncipes (8:9-11,
23-25).
Pasarán 2.300 días desde que se quite el ―rasgo constante‖ y la
―trasgresión que causa desolación‖ hasta que el lugar santo sea
puesto en su condición correcta (8:12-14).
El cuerno es quebrado ―sin mano‖ (8:25b).
El ángel Gabriel explica que la visión no ha de ser revelada
entonces, sino que es ―para muchos días‖ (8:26,27).
Setenta semanas (de años). (Cap.9.)
o Daniel discierne que se aproxima la liberación de los judíos cuando se cumplan
los setenta años (1,2).
o Confiesa a Dios los pecados de su nación; suplica perdón por causa del nombre
de Jehová (3-19).
o Gabriel da la visión concerniente a las setenta semanas contando desde el
decreto de reconstruir Jerusalén (20-25).
Siete semanas hasta que Jerusalén esté completamente reconstruida (25).
Sesenta y dos semanas más hasta la venida del Mesías (26).
Se pone fin a la transgresión; se lleva a cabo expiación (24a).
Se introduce la justicia para siempre; se unge al Santo de los Santos
(24b).
El pacto (abrahámico) en vigor para los judíos únicamente durante una
semana; el Mesías es cortado a la mitad de la semana; hace que cesen el
sacrificio y la ofrenda de dádiva (26a,27a).
Después la ciudad y el lugar santo quedan desolados (26b,27b).
Un ángel visita a Daniel con una visión de la ―parte final de los días‖. (Caps.10-12.)
o El príncipe de Persia (demonio) resiste al ángel por veintiún días; este es ayudado
por Miguel (10:13).
Daniel es fortalecido para recibir la visión del ángel que más tarde tenía
que luchar con el príncipe de Persia y encararse también al príncipe de
Grecia (10:7-12,15-20).
Miguel, el príncipe del pueblo de Daniel, apoya al ángel de Dios (10:21).
o El rey del norte y el rey del sur. (Cap.11.)
Después de caer el sucesor de Persia (Alejandro Magno), el reino se
divide; el rey del sur llega a ser fuerte; derrota al rey del norte (11:1-12).
El rey del norte domina por mucho tiempo (11:13-26).
El rey del sur derrota al rey del norte (11:27-30a).
El rey del norte se alía con los que dejan el pacto santo y lucha contra el
pueblo de Dios, pero no llega a destruirlo (11:30b-31a, 32).
La cosa repugnante que causa desolación ‗puesta en lugar‘ (11:31b).
El pueblo de Dios experimenta grandes pruebas, pero recibe ayuda (11:33-
35).
El rey del norte se hace poderoso, habla contra Dios y se levanta para ser
adorado, pero él mismo adora al dios de las plazas fuertes (11:36-39).
En el tiempo del fin, el rey del sur se envolverá con él (el rey del norte) en
un empuje (11:40a).
El rey del norte inunda muchos países, invade la tierra de la
Decoración (del pueblo de Jehová) (11:40b-43).
Informes del oriente y del norte perturban al rey del norte; planta
tiendas entre la santa montaña y el mar,llega hasta su fin (11:44,
45).
o Rasgos del tiempo de fin. (Cap.12.)
Miguel, el príncipe del pueblo de Daniel, se pondrá de pie (1-3).
El peor tiempo de disturbios del mundo (1).
Muchos despiertan a vida de duración indefinida o a aborrecimiento
y oprobios (2).
o Los que tienen perspicacia brillan; vuelven a muchos a la justicia (3).
El conocimiento del libro llega a ser abundante después de haber estado
sellado por mucho tiempo (4-9).
Muchos se limpian; se refinan (10a).
Los inicuos no entienden (10b).
Períodos de tiempo.
El fin de los tres tiempos y medio señala la conclusión del hacer
añicos al pueblo santo (7).
1.290 días desde que se remueve el rasgo constante y se coloca la
cosa repugnante (11).
La felicidad al final de los 1.335 días (12).
Daniel morirá, pero se pondrá de pie para su porción al fin de los días (13).
OSEAS, LIBRO DE
CONTENIDO
Adulterio y restauración de Israel; paralelo (1:1-3:5).
o La esposa de Oseas y los hijos que ella da a luz (1:1-9).
Dios manda a Oseas que tome ‗una esposa e hijos de fornicación, porque
Israel se vuelve de seguir a Jehová‘ (1:2).
Oseas obedece, toma a Gómer por esposa (1:3).
Ella le da a luz un hijo. Jesreel (1:3-5).
Ella da a luz una hija, llamada Lo ruhamá, pues Jehová no mostrará
misericordia a Israel, aunque si se la mostrará a Judá (1:6,7).
Gómer da a luz un hijo, llamado Lo-ammí, ―porque ustedes no son mí pueblo‖ (1:8,9).
o Se predijo la restauración; Israel y Judá serán ―juntados a unidad‖ (1:10-2:1).
o Jehová castigará a Israel por su fornicación y retirará las bendiciones que les
habla dado por haberlas empleado mal en la adoración de Baal (2:2-13).
o La restauración de Israel para que Jehová sea su esposo y Dios (2:14-23).
Será prometida a El en rectitud, justicia, bondad amorosa, misericordias y
fidelidad (2:14-20).
Volverá a recibir las bendiciones y, en concordancia con el significado de
Jezreel, ‗Dios sembrará a Israel como semilla y le mostrará misericordia‘
(2:21-23).
o Al igual que la redimida esposa adúltera de Oseas, ‗Israel volverá y buscará a
Jehová y a David su rey‘ (3:1-5).
Juicios proféticos contra Efraín (Israel) y Judá por su infidelidad a Jehová (4:1-13:16).
o Dios pedirá cuentas a Israel y Judá por su maldad (4:1-5:15).
En Israel prevalece la violencia y el pueblo rechaza el conocimiento de
Dios, lo cual resulta en que Dios los rechace (4:1-8).
Jehová pedirá cuentas por su idolatría y prostitución (4:9-19).
Los líderes y el pueblo no han reconocido a Jehová; Efraín y Judá
experimentarán el juicio de Dios (5:1-15).
o Se anima a las personas a que regresen a Jehová; ellas buscan alianzas
mundanas; reciben la retribución divina (6:1-8:14).
Súplica para que regresen a Jehová y Él les sane (6:1-3).
Su bondad amorosa es efímera, mientras que Jehová se deleita en la
bondad amorosa, no en el sacrificio, en el ―conocimiento de Dios más bien
que en holocaustos‖(6:4-6).
Han traspasado su pacto y han practicado iniquidad (6:7-7:7).
Efraín ha ido a Egipto y a Asiría, en lugar de a Jehová, en busca de ayuda;
Él les disciplinará por su error (7:8-16).
Han sembrado viento y segarán viento de tempestad; Israel tiene que ser
tragado y las ciudades de Judá serán quemadas (8:1-14).
o La pecaminosidad de Efraín resultará en que Dios los rechace, ―y llegarán a ser
fugitivos entre las naciones‖(9:1-17).
o Israel, ―una vid que degenera‖, sufrirá ruina (10:1-15).
o El amor de Jehová por Israel (11:1-11).
Dios ha amado a Israel desde su infancia(11:1-4),
Se predice el exilio a Asiría debido a su infidelidad, pero también habrá
restauración (11:5-11).
o La iniquidad de Efraín y sus consecuencias (11:12-13:16).
Efraín practica la mentira y el engaito; se vuelve a Asiria y a Egipto (11:12-
12:1),
Jacob, el fiel antepasado de Efraín, un ejemplo que tendría que hacer que
Efraín se volviese a Dios (12:2-14).
Efraín practicó la idolatría y olvidó a Jehová; Él les causará ruina, pero
también les redimirá de la muerte y el Seol (13:1-14).
―El viento de Jehová‖ vendrá y Samaria caerá (13:15,16).
Regresan a Jehová; sus resultados (14:1-9).
o Se exhorta a Israel a que vuelva a Jehová con los ‗toros de sus labios‘,
reconociendo que Asiria no les salvará y abandonando la idolatría (14:1-3).
o Jehová sanará su infidelidad, les mostrará amor y les concederá su bendición
(14:4-8).
o Los caminos de Jehová son rectos; los justos andarán en ellos, pero los
transgresores tropezarán en ellos (14:9).
Véase el libro ―Toda Escritura es inspirada de Dios y provechosa‖, págs. 143-145.
(Para una consideración de aplicación práctica veasé el libro ―VIVAMOS MUY
PENDIENTES DEL DIA DE JEHOVA‖,publicado en 2006,con aplicación de cada una de
los libros de los ―profetas menores‖.)
*** w89 1/3 págs. 14-15 Jehová nuestro Dios es misericordioso ***
Lecciones de las Escrituras: Oseas 1:1–14:9
Israel se extravía
Jehová otorga misericordia si el pecador se arrepiente sinceramente. (Salmo 51:17;
Proverbios 28:13.) Los tratos de Oseas con su esposa, Gomer, ilustraron que Dios estaba
dispuesto a mostrar misericordia a Israel. Como se le ordenó, Oseas tomó ―una esposa de
fornicación‖. Parece que, después de darle un hijo a Oseas, Gomer tuvo dos hijos por adulterio.
Sin embargo, el profeta fue misericordioso con su esposa y la aceptó de nuevo. De manera
similar, Israel había sido como una esposa infiel para Jehová, y erróneamente atribuía
bendiciones al falso dios Baal. Pero Jehová estaba dispuesto a mostrar misericordia a los
israelitas si se arrepentían de su adulterio espiritual. (1:1–3:5.)
Los pecadores que deseen la misericordia divina deben volverse de su proceder
pecaminoso y amoldarse al conocimiento de Dios. (Salmo 119:59, 66, 67.) Jehová tenía un
caso legal contra los habitantes de Israel porque en su país escaseaban la verdad, la bondad
amorosa y el conocimiento de Dios. Puesto que ellos rechazaban el conocimiento, Jehová los
rechazaría. Las idólatras Israel y Judá tendrían que rendir cuentas. Pero se predijo que
buscarían a Dios cuando se hallaran ―en grave aprieto‖. (4:1–5:15.)
¡Se siega viento de tempestad!
Los malhechores que quieran la misericordia de Dios tienen que hacer las obras del
arrepentimiento. (Hechos 26:20.) ―Regresemos [...] a Jehová‖, suplicó Oseas. Pero la bondad
amorosa de las naciones de Israel (llamada Efraín debido a su tribu principal) y Judá era ―como
el rocío que se va temprano‖. La gente había violado el pacto de Dios y no había producido los
frutos del arrepentimiento. ―Como una paloma simple sin corazón‖, aquel pueblo había
procurado la ayuda de Egipto y Asiria. Pero estas medidas políticas les serían como ―un arco
flojo‖ que no podría disparar flechas contra un blanco. (6:1–7:16.)
Para segar lo bueno, los que buscan la misericordia de Jehová tienen que sembrar lo
bueno. (Gálatas 6:7, 8.) Porque los israelitas habían rechazado lo bueno, segaban lo malo.
‗Seguían sembrando viento y segarían un viento de tempestad.‘ Dios ‗daría atención a sus
pecados‘, y ellos no segarían Su misericordia, sino Su juicio adverso. Llegarían a ser ―fugitivos
entre las naciones‖, y probablemente la conquista asiria contribuiría a esta situación. (8:1–9:17;
Deuteronomio 28:64, 65; 2 Reyes 15:29; 17:1-6, 22, 23; 18:9-12; 1 Crónicas 5:26.)
Solamente si seguimos apreciando lo sagrado continuará beneficiándonos la
misericordia de Dios. (Hebreos 12:14-16.) Los israelitas no tenían tal aprecio. En vez de
sembrar en justicia y segar en armonía con la bondad amorosa, araban iniquidad y segaban
injusticia. Dios había llamado a Israel de Egipto como si Israel fuera su hijo, pero ellos le
pagaron Su amor con engaño. ―A tu Dios debes volver, guardando bondad amorosa y justicia‖,
aconsejó Jehová. Pero Efraín cometía males crasos y merecía reprensión en vez de
misericordia. (10:1–12:14.)
Regreso a Jehová
Hasta los que cometen errores graves pueden regresar a Jehová y recibir misericordia.
(Salmo 145:8, 9.) Oseas de nuevo indica la ternura que Dios muestra a los israelitas. Aunque la
nación se había vuelto contra Jehová, él prometía restauración, diciendo: ‗Del Seol los redimiré;
de la muerte los recobraré‘. Samaria (Israel) tendría que pagar un precio por la rebelión. Pero
se instaba a los israelitas a regresar a Dios con palabras sanas, ‗los torillos de los labios‘. La
profecía termina con el pensamiento consolador de que los sabios y justos que andan en los
caminos rectos de Jehová disfrutarán de Su misericordia y amor. (13:1–14:9.)
Lecciones que debemos recordar: Jehová otorga misericordia si el malhechor se arrepiente
sinceramente. Pero los pecadores que deseen su misericordia tienen que amoldarse al
conocimiento de Dios y hacer las obras propias del arrepentimiento. Tienen que sembrar lo que
es bueno y seguir apreciando lo sagrado. Y consuela el saber que hasta los que cometen
errores graves pueden regresar al Altísimo con esperanza, porque Jehová nuestro Dios es
misericordioso.
*** w07 15/9 págs. 14-17 Puntos sobresalientes del libro de Oseas ***
―TÓMATE UNA ESPOSA DE FORNICACIÓN‖
(Oseas 1:1–3:5)
Jehová le ordena a Oseas: ―Ve, tómate una esposa de fornicación‖ (Oseas 1:2). Este
obedece y tiene un hijo con Gómer, quien más tarde da a luz dos hijos al parecer ilegítimos, Lo-
ruhamá y Lo-ammí. Sus nombres indican que Jehová niega su misericordia a Israel y que
rechaza a su pueblo infiel.
¿Qué siente realmente Jehová por su pueblo rebelde? Le manda a Oseas: ―Ve de nuevo,
ama a una mujer amada por un compañero y que comete adulterio, como en el caso del amor
de Jehová a los hijos de Israel mientras ellos se vuelven a otros dioses‖ (Oseas 3:1).
Respuestas a preguntas bíblicas:
1:1. ¿Por qué menciona Oseas a los cuatro reyes que gobernaron en Judá durante su
ministerio, mientras que solo menciona a uno de Israel? Se debe a que solo los reyes del
linaje davídico eran reconocidos como los legítimos monarcas del pueblo escogido por Dios.
Los reyes del reino del norte no eran descendientes de David, pero los de Judá sí.
1:2-9. ¿Se casó Oseas con ―una esposa de fornicación‖? Sí, Oseas de hecho se casó
con una mujer que más tarde llegó a ser adúltera. Nada de lo que menciona el profeta sobre su
vida privada hace suponer que se trate de un sueño o una visión.
1:7. ¿Cuándo se mostró misericordia y se salvó a la casa de Judá? Estas palabras se
cumplieron en 732 antes de nuestra era, durante el reinado de Ezequías. En aquellos días,
Jehová frustró el ataque asirio contra Jerusalén mediante un ángel que ejecutó a 185.000
soldados enemigos en una sola noche (2 Reyes 19:34, 35). Así libró Jehová a Judá, no ―por un
arco ni por una espada ni por guerra, ni por caballos ni por hombres de a caballo‖, sino por
medio de un ángel.
1:10, 11. Si el reino de Israel cayó en el 740 antes de nuestra era, ¿en qué sentido
fueron los hijos de Israel ―juntados a unidad‖ con los hijos de Judá? Muchos habitantes
del reino del norte se unieron a Judá antes de que esta nación se fuera al cautiverio en
Babilonia en el año 607 (2 Crónicas 11:13-17; 30:6-12, 18-20, 25). Entre los exiliados judíos
que regresaron a su patria en 537 había descendientes de aquellos israelitas (Esdras 2:70).
2:21-23. ¿Qué predijo Jehová con las palabras: ―Ciertamente la sembraré [a Jezreel]
como semilla para mí en la tierra, y ciertamente mostraré misericordia a aquella‖?
El nombre del hijo primogénito de Oseas con Gómer fue Jezreel (Oseas 1:2-4). El significado
de ese nombre, ―Dios Sembrará Semilla‖, indica proféticamente que Jehová reuniría a un resto
fiel de israelitas en 537 y los sembraría como semillas en Judá. La tierra, desolada durante
setenta años, ahora produciría grano, vino dulce y aceite. De manera poética, la profecía dice
que estas cosas buenas pedirían a la tierra que les proporcionara sus nutrientes y la tierra
pediría a los cielos lluvia; a su vez, los cielos pedirían a Dios que produjera nubes de lluvia.
Todo esto ocurriría a fin de cubrir generosamente las necesidades de los que regresaran. Los
apóstoles Pablo y Pedro relacionan Oseas 2:23 con la obra de recolección del resto del Israel
espiritual (Romanos 9:25, 26; 1 Pedro 2:10).
Lecciones para nosotros:
1:2-9; 3:1, 2. Piense en el sacrificio de Oseas al continuar con su matrimonio en
conformidad con la voluntad divina. ¿Hasta qué punto estamos dispuestos a renunciar a
nuestras preferencias con tal de hacer la voluntad de Dios?
1:6-9. Jehová detesta el adulterio espiritual tanto como el físico.
1:7, 10, 11; 2:14-23. Todo cuanto Jehová profetizó respecto a Israel y Judá se efectuó.
La palabra de Dios siempre se cumple.
2:16, 19, 21-23; 3:1-4. Jehová está dispuesto a perdonar a quienes se arrepientan
sinceramente (Nehemías 9:17). A imitación de Jehová, debemos ser compasivos y
misericordiosos con los demás.
―JEHOVÁ TIENE UNA CAUSA JUDICIAL‖
(Oseas 4:1–13:16)
―Jehová tiene una causa judicial con los habitantes de la tierra.‖ ¿Por qué razón? ―Porque
no hay verdad ni bondad amorosa ni conocimiento de Dios en la tierra.‖ (Oseas 4:1.) El pueblo
renegado de Israel ha estafado, derramado sangre y cometido fornicación física y espiritual.
En lugar de buscar la ayuda de Dios, ―a Egipto han clamado; a Asiria han ido‖ (Oseas 7:11).
Jehová emite su juicio diciendo: ―Israel tiene que ser tragado‖ (Oseas 8:8). El reino de Judá
no está libre de culpa. Oseas 12:2 declara: ―Jehová tiene una causa judicial con Judá, aun para
pedir cuentas a Jacob según sus caminos; según sus tratos le pagará‖. Con todo, la
restauración es segura, pues Dios promete: ―De la mano del Seol los redimiré; de la muerte los
recobraré‖ (Oseas 13:14).
Respuestas a preguntas bíblicas:
6:1-3. ¿Quién decía: ―Vengan, y regresemos de veras a Jehová‖? Puede que fueran los
mismos israelitas desleales quienes se animaran entre ellos a regresar a Jehová. De ser este el
caso, sencillamente fingían estar arrepentidos. Su bondad amorosa era tan fugaz ―como las
nubes de la mañana y como el rocío que se va temprano‖ (Oseas 6:4). Por otra parte, tal vez
fuera el propio Oseas quien con estas palabras implorara al pueblo que se volviera a Jehová.
Sea como fuere, los tercos habitantes del reino de diez tribus de Israel tenían que demostrar
verdadero arrepentimiento y regresar a Jehová.
7:4. ¿En qué sentido eran los israelitas adúlteros como ―un horno encendido‖? Esta
analogía ilustra muy bien la intensidad con la que ardían en sus corazones los malos deseos.
Lecciones para nosotros:
4:1, 6. Para andar con Dios, debemos seguir adquiriendo conocimiento de él y regir nuestra
vida por lo que aprendemos.
4:9-13. Jehová pedirá cuentas a quienes practican la inmoralidad y la adoración impura
(Oseas 1:4).
5:1. Quienes dirigen al pueblo de Dios deben rechazar rotundamente la apostasía; de lo
contrario, podrían llevar a otros a participar de la adoración falsa, convirtiéndose para estos en
‗una trampa y una red‘.
6:1-4; 7:14, 16. El arrepentimiento solo de palabra es hipócrita e inútil. Para recibir la
misericordia de Dios, el pecador debe manifestar sincero arrepentimiento, el cual se evidencia
volviéndose a algo ―más elevado‖, es decir, a una elevada forma de adoración. Su proceder
debe ajustarse a las altas normas de Dios (Oseas 7:16, nota).
6:6. La práctica del pecado indica falta de amor leal a Dios. Ninguna cantidad de sacrificios
espirituales puede contrarrestar tal carencia.
8:7, 13; 10:13. El principio de que ―cualquier cosa que el hombre esté sembrando, esto
también segará‖ fue cierto en el caso de los israelitas idólatras (Gálatas 6:7).
8:8; 9:17; 13:16. Las profecías relacionadas con el reino de Israel se cumplieron cuando su
capital, Samaria, cayó en manos de Asiria (2 Reyes 17:3-6). Estamos seguros de que Dios
hará todo cuanto ha dicho y llevará a cabo todo lo que ha hablado (Números 23:19).
8:14. Jehová envió ―fuego en [las] ciudades [de Judá]‖ en 607 antes de nuestra era por
medio de los babilonios, cuando trajo la desolación pronosticada contra Jerusalén y la tierra de
Judá (2 Crónicas 36:19). La palabra de Dios nunca falla (Josué 23:14).
9:10. Aunque estaban dedicados al Dios verdadero, los israelitas ―entraron a Baal de Peor, y
procedieron a dedicarse a la cosa vergonzosa‖. Hacemos bien en prestar atención a su
deplorable ejemplo y no quebrantar nuestra dedicación a Jehová (1 Corintios 10:11).
10:1, 2, 12. Tenemos que adorar a Dios con un corazón libre de hipocresía. Cuando
‗sembramos semilla para nosotros en justicia, segamos de acuerdo con bondad amorosa‘.
10:5. Bet-aven (que significa ―Casa de Nocividad‖) fue un término despectivo para Betel (que
quiere decir ―Casa de Dios‖). Cuando el ídolo en forma de becerro de Bet-aven fue llevado al
destierro, la gente de Samaria lloró la pérdida del objeto de su devoción. ¡Qué absurdo es
confiar en un ídolo inerte, que ni siquiera puede protegerse a sí mismo! (Salmo 135:15-18;
Jeremías 10:3-5.)
11:1-4. Jehová siempre trata con amor a su pueblo; por lo tanto, la sumisión a él nunca es
opresiva.
11:8-11; 13:14. La palabra de Jehová sobre la restauración de su pueblo a la adoración
verdadera ‗no volvió a él sin resultados‘ (Isaías 55:11). En el año 537 antes de nuestra era
finalizó el destierro en Babilonia y un resto volvió a Jerusalén (Esdras 2:1; 3:1-3). Todo cuanto
Jehová ha hablado a través de sus profetas se cumplirá sin falta.
12:6. Debemos tomar la firme determinación de manifestar bondad amorosa, obrar con
justicia y confiar siempre en Jehová.
13:6. Los israelitas ‗llegaron a estar satisfechos y su corazón empezó a ensalzarse. Por eso
olvidaron a Jehová‘. Evitemos toda tendencia al ensalzamiento personal.
JOEL, LIBRO DE
CONTENIDO
La palabra de Jehová anuncia una severa plaga de insectos (1:1-14),
A Una plaga tan grande que se hablaría de ella por generaciones (1:1-4),
o Los borrachos se despiertan, aúllan y lloran debido a la devastación por parte de
una ―nación‖ sin número que deja desnuda la tierra, cortando el suministro del
vino dulce (1:5-8).
El trigo, la cebada, las vides y los árboles quedan afectados hasta tal grado que la
ofrenda de grano y la libación en la casa de Jehová cesan, haciendo que los sacerdotes
estén de duelo (1:9-12).
Se insta a los sacerdotes a que se pongan tela de saco, santifiquen el tiempo de ayuno,
reúnan a los ancianos en la casa de Jehová y clamen a Él por socorro (1:13,14),
―El día de Jehová está cerca‖ (1:15-20).
El día de Jehová está señalado por una invasión de ―su fuerza militar‖, un
pueblo numeroso y poderoso parecido a caballos; ‗delante de el un fuego
devora y detrás de el una llama consume‘ (2:1-11).
Llamamiento para que todos vuelvan a Jehová con corazones completos,
ya que Él es benévolo, misericordioso, tardo para la cólera y abundante en
bondad amorosa, y Él responderá a la oración de su pueblo arrepentido
(2:12-19).
Jehová dispersara al ―norteño‖ en favor de ellos (2:20).
Bendecirá a su pueblo arrepentido con abundantes cosechas, les
compensara por el daño causado por la gran fuerza militar de
insectos y después derramará su espíritu sobre toda clase de carne
(2:21-29).
Portentos presagiosos en los cielos y en la Tierra preceden a la venida del
día de Jehová (2:30, 31).
Los que invocan el nombre de Jehová escaparán de su día inspirador de
temor (2:32).
Cuando los cautivos de Judá y Jerusalén sean restaurados, las naciones serán juzgadas
por la violencia con la que los trataron (3:1-3).
Por vender a los judaítas, los hijos y las hijas de Tiro, Sidón y Filistea serán
vendidos en manos de los hijos de Juda, quienes, a su vez, los venderán a
los hombres de Seba (3:4-8).
Las naciones se preparan para la guerra y bajan a la llanura baja de
Jehosafat, donde para ellos será como si estuviesen dentro de un lagar
(3:9-15),
Jehová protegerá a su pueblo al ejecutar juicio sobre las naciones
(3:16).
Como resultado de su juicio su pueblo llega a conocerlo como su
Dios y Jerusalén llega a ser un lugar santo sin extraños que pasen
por ella (3:17).
Egipto llegará a ser un yermo desolado y Edom un desierto, pero la tierra de Judá
producirá con abundancia y será habitada hasta tiempo indefinido, puesto que Jehová
considerará inocente la sangre de sus habitantes (3:18-21).
*** w07 1/10 págs. 12-15 Puntos sobresalientes de los libros de Joel***
―¡AY DEL DÍA!‖ ¿POR QUÉ?
(Joel 1:1–3:21)
Lo que Joel contempla en su visión es una invasión de orugas, langostas y cucarachas.
Se alude a estos insectos invasores como ―un pueblo numeroso y poderoso‖ y como ―hombres
poderosos‖ (Joel 1:4; 2:2-7). Joel se lamenta: ―¡Ay del día; porque el día de Jehová está cerca,
y como despojo violento del Todopoderoso vendrá!‖ (Joel 1:15). Jehová aconseja a los
habitantes de Sión: ―Vuelvan a mí con todo su corazón‖. Si lo hacen, él ―mostrará compasión a
su pueblo‖ y pondrá bien lejos ―al norteño‖, es decir, la invasión de insectos. No obstante,
Jehová dice lo que hará antes de la llegada de su gran día: ―Derramaré mi espíritu sobre toda
clase de carne‖ y ―daré portentos presagiosos en los cielos y en la tierra‖ (Joel 2:12, 18-20, 28-
31).
Se desafía a las naciones con este llamamiento: ―Batan sus rejas de arado en espadas, y
sus podaderas en lanzas‖. Se les anima a prepararse para la guerra y reciben la orden de
―sub[ir] a la llanura baja de Jehosafat‖, donde serán juzgadas y aplastadas. En cambio, de Judá
se dice que ―hasta tiempo indefinido será habitada‖ (Joel 3:10, 12, 20).
Respuestas a preguntas bíblicas:
1:15; 2:1, 11, 31; 3:14. ¿Qué es ―el día de Jehová‖? Es el momento de la ejecución de la
sentencia de Jehová contra sus enemigos, que se traduce en destrucción para ellos pero en
salvación para los fieles. Un día similar le llegó a la Babilonia antigua en el año 539 antes de
nuestra era, cuando fue conquistada por los medos y los persas (Isaías 13:1, 6). Se avecina
otro ―día de Jehová‖, en el que ejecutará su juicio contra ―Babilonia la Grande‖, el imperio
mundial de la religión falsa (Revelación [Apocalipsis] 18:1-4, 21).
2:1-10, 28. ¿Cómo se ha cumplido la profecía respecto a la invasión de insectos?
No se hace mención en la Biblia de que la tierra de Canaán haya sufrido ninguna invasión de
insectos de la magnitud descrita en el libro de Joel. Por lo tanto, dicho ataque al parecer
representa una profecía relativa al año 33 de nuestra era, cuando Jehová empezó a derramar
su espíritu sobre los primeros cristianos y estos comenzaron a predicar el mensaje que
atormentó a los falsos líderes religiosos (Hechos 2:1, 14-21; 5:27-33). En la actualidad tenemos
la oportunidad excepcional de participar en una obra semejante.
2:32. ¿Qué quiere decir ‗invocar el nombre de Jehová‘? Significa conocer el nombre de
Dios, respetarlo profundamente y confiar en el portador de dicho nombre (Romanos 10:13, 14).
3:14. ¿Qué es ―la llanura baja de la decisión‖? Se trata de un lugar simbólico donde se
lleva a cabo el juicio divino. En los días del rey Jehosafat de Judá, cuyo nombre significa
―Jehová Es Juez‖, Dios libró a Judá de las naciones vecinas confundiendo a sus fuerzas
militares. De ahí que el lugar reciba también el nombre de ―la llanura baja de Jehosafat‖ (Joel
3:2, 12). En nuestros días representa un emplazamiento simbólico en el que las naciones serán
exprimidas como uvas en un lagar (Revelación 19:15).
Lecciones para nosotros:
1:13, 14. Arrepentirse de verdad y reconocer a Jehová como el Dios verdadero son acciones
esenciales para la salvación.
2:12, 13. El verdadero arrepentimiento es sincero. Implica ‗rasgar el corazón‘ en nuestro
fuero interno, más bien que realizar manifestaciones externas como la de ‗rasgar las prendas
de vestir‘.
2:28-32. Solo quien ―invoque el nombre de Jehová escapará salvo‖ en el ―día de Jehová,
grande e inspirador de temor‖. Podemos estar muy agradecidos a Dios por derramar su espíritu
sobre toda clase de personas, y porque jóvenes y ancianos, hombres y mujeres, participen en
la obra de profetizar, es decir, hablar de ―las cosas magníficas de Dios‖ (Hechos 2:11).
A medida que se acerca el día de Jehová, deberíamos abundar ―en actos santos de conducta y
hechos de devoción piadosa‖ (2 Pedro 3:10-12).
3:4-8, 19. Joel profetizó que las naciones vecinas de Judá tendrían que rendir cuentas por
maltratar al pueblo escogido de Dios. En cumplimiento de aquellas palabras proféticas, la
ciudad continental de Tiro fue destruida por el rey babilonio Nabucodonosor. Posteriormente,
cuando la ciudad insular cayó ante Alejandro Magno, miles de sus soldados y hombres ilustres
fueron asesinados, y 30.000 de sus habitantes vendidos como esclavos. Los filisteos recibieron
un trato parecido por parte de Alejandro Magno y sus sucesores. Para el siglo IV antes de
nuestra era, Edom se había convertido en un yermo desolado (Malaquías 1:3). El desenlace de
estas profecías fortalece nuestra fe en que Jehová es Aquel que cumple sus promesas, y nos
muestra además cómo tratará a las naciones que persiguen a Sus siervos hoy día.
3:16-21. ―El cielo y la tierra ciertamente se mecerán‖, y las naciones sufrirán los juicios
adversos de Dios. ―Pero Jehová será un refugio para su pueblo‖, y le concederá vida en
condiciones paradisíacas. ¿No deberíamos estar firmemente decididos a permanecer cerca de
él a medida que se aproxima su día para ejecutar sentencia contra el mundo inicuo?
AMÓS, LIBRO DE
CONTENIDO
El juicio venidero (1:1-2:16).
o Contra Siria, Filistea, Tiro, Edom, Ammón, Moab (1:1-2:3).
Contra Siria, Filistea y Tiro por tratar cruelmente a Israel.
Contra Edom (descendientes de Esaú) y Ammón (descendientes de Lot)
por odiar y maltratar a sus hermanos israelitas; contra Moab por quemar
los huesos del rey de Edom para cal.
o Contra Judá e Israel por sus sublevaciones y sus crasas violaciones de la ley de
Dios (2:4-16).
Se publica el juicio (3:1-6:14).
o Jehová revela su juicio y da advertencia mediante sus profetas (3:1-4:3).
Como el toque de un cuerno y el rugido de un león, las nuevas asustarán a
la gente.
Es seguro que el juicio vendrá y con gran calamidad.
o Israel no se arrepiente, sigue rebelde a pesar de las acciones disciplinarias de
Jehová (4:4-13).
o Los ayes que le acaecerán a la casa de Israel (5:1-6:14).
La bondadosa llamada de Jehová a Israel para que haga lo bueno es
pasada por alto.
Israel no hallará ningún camino de escape.
Jehová no aceptará sus sacrificios ni sus canciones.
Los príncipes de Samaria viven lujosa mente, sin dar atención al día
calamitoso; por consiguiente irán al exilio al frente de los exiliados.
La destrucción será completa.
Visiones y profecías muestran que el fin de Israel está cerca (7:1-
8:14).
Desolación figurativa causada por langostas es impedida por la intercesión del profeta
(7:1-3).
Fuego simbólico destructivo también es impedido (7:4-6).
La plomada; Israel ya no será excusado, de modo que Amós ya no intercede (7:7-9).
Sacerdote de Betel ordena a Amós que cese de profetizar; Amós profetiza calamidad
para él cuando llegue la destrucción (7:10-17).
Una cesta de fruto del verano que representa el cercano fin de Israel (8:1-3).
El hambre de oír las palabras de Jehová (8:4-14).
Destrucción del reino pecaminoso y reconstrucción de la cabaña (casa real) de David
(9:1-15).
o No hay escondite para los pecadores (9:1-10).
o Prosperidad y seguridad permanentes para los cautivos recogidos (9 11-15).
*** w07 1/10 págs. 12-15 Puntos sobresalientes de los libros de Amós ***
―PREPÁRATE PARA ENCONTRARTE CON TU DIOS‖
(Amós 1:1–9:15)
Amós es portador de mensajes para las naciones enemigas que rodean a Israel, así como
para Judá e Israel. A Siria, Filistea, Tiro, Edom y Moab les aguarda destrucción por la crueldad
que manifestaron con el pueblo de Dios, y a los habitantes de Judá les espera lo mismo
―debido a que rechazaron la ley de Jehová‖ (Amós 2:4). ¿Qué le sucederá al reino de diez
tribus de Israel? Entre sus pecados se incluyen la opresión codiciosa de los pobres, la
inmoralidad y el modo irrespetuoso en que trató a los profetas de Dios. Amós advierte que
Jehová ―pedir[á] cuentas a los altares de Betel‖ y ―ciertamente derribar[á] la casa de invierno
además de la casa de verano‖ (Amós 3:14, 15).
Aunque han recibido ya varios castigos, los israelitas idólatras siguen siendo tercos. Amós le
dice al pueblo: ―Prepárate para encontrarte con tu Dios‖ (Amós 4:12). Para los israelitas, el día
de Jehová significará ir ―al destierro más allá de Damasco‖, es decir, a Asiria (Amós 5:27).
Amós tiene que soportar la oposición de un sacerdote de Betel, pero no se deja intimidar. ―El fin
ha llegado a mi pueblo Israel —le revela Jehová al profeta—. Ya no volveré a excusarlos.‖
(Amós 8:2.) Ni el Seol ni las cimas de las montañas podrán protegerlos del castigo divino
(Amós 9:2, 3). No obstante, hay una promesa de restauración. ―Recogeré de vuelta a los
cautivos de mi pueblo Israel —dice Jehová—, y ellos realmente edificarán las ciudades
desoladas y las habitarán, y plantarán viñas y beberán el vino de ellas, y harán jardines y
comerán el fruto de ellos.‖ (Amós 9:14.)
Respuestas a preguntas bíblicas:
4:1. ¿A quiénes representan las ―vacas de Basán‖? La elevada meseta de Basán, una
región situada al este del mar de Galilea, era conocida por sus excelentes animales de raza,
entre los que figuraban las vacas. Los fértiles pastos de la zona contribuían a su crianza. Amós
comparó a las mujeres de Samaria amantes del lujo con las vacas de Basán. A fin de satisfacer
su amor al lujo, dichas mujeres sin duda presionaban a ―sus amos‖, o esposos, para que
estafaran a los pobres.
4:6. ¿Qué quiere decir la expresión ―limpieza de dientes‖? Puesto que se usa junto con
la expresión ―falta de pan‖, podría referirse a una época de hambre en la que los dientes se
mantendrían limpios por falta de alimento.
5:5. ¿En qué sentido no debía Israel ‗buscar a Betel‘? Jeroboán I había instaurado la
adoración de becerros en Betel. Desde entonces, aquella ciudad se había convertido en un
centro de adoración falsa. Es probable que Guilgal y Beer-seba también fueran centros de
adoración apóstata. Para escapar de la calamidad predicha, Israel tenía que dejar de hacer
peregrinaciones a estos lugares y comenzar a buscar a Jehová.
7:1. ¿A qué se refiere la expresión ―la hierba cortada del rey‖? Probablemente se refiera
al impuesto exigido por el rey para sufragar el mantenimiento de sus caballos y jinetes. Dicho
impuesto debía pagarse ―al comienzo de la subida del sembrado tardío‖. Después, la gente
podía recoger sus cosechas. Pero antes de que lograran hacerlo, se formó un enjambre de
langostas que devoró sus cosechas junto con el resto de la vegetación.
8:1, 2. ¿Qué significaba la expresión ―una cesta de fruto del verano‖? Daba a entender
que el día de Jehová estaba cerca. El fruto del verano se recoge hacia el final de la temporada
de la siega, es decir, al final del año agrícola. Jehová hizo que Amós viera ―una cesta de fruto
del verano‖ para indicar que se acercaba el fin de Israel. Por lo tanto, Dios le dijo a Amós: ―El
fin ha llegado a mi pueblo Israel. Ya no volveré a excusarlos‖.
Lecciones para nosotros:
1:3, 6, 9, 11, 13; 2:1, 4, 6. Respecto al furor que siente hacia Israel, Judá y las seis naciones
que las rodean, Jehová asegura: ―No lo volveré atrás‖. Es imposible escapar a los castigos
divinos (Amós 9:2-5).
2:12. No deberíamos desmoralizar a los diligentes precursores, superintendentes viajantes,
misioneros o miembros de la familia Betel insistiendo en que dejen su servicio de tiempo
completo a fin de llevar una vida supuestamente normal. Al contrario, debemos animarlos a
seguir realizando su buena obra.
3:8. Tal como una persona siente miedo cuando oye rugir a un león, Amós se sintió impelido
a predicar cuando escuchó que Jehová le decía: ―Ve, profetiza a mi pueblo‖ (Amós 7:15).
El temor de Dios debería motivarnos a predicar con celo el mensaje del Reino.
3:13-15; 5:11. Con la ayuda de Jehová, el humilde guarda de ganado Amós pudo ―d[ar]
testimonio‖ a personas que eran ricas y por consiguiente se sentían satisfechas de sí mismas.
De igual modo, Jehová puede capacitarnos para declarar el mensaje del Reino sin importar lo
difícil que sea un territorio.
4:6-11; 5:4, 6, 14. A pesar de que en repetidas ocasiones los israelitas ―no volvieron‖ a
Jehová, se les aconsejó: ―Busquen a Jehová, y sigan viviendo‖. Mientras Jehová continúe
permitiendo pacientemente la existencia de este malvado sistema de cosas, debemos instar a
las personas a que busquen a Dios.
5:18, 19. ―Desea[r] con vehemencia el día de Jehová‖ sin estar verdaderamente preparado
para él es una necedad. La situación del hombre que actúa así se asemeja a la de alguien que
consigue huir de un león pero entonces se encuentra con un oso, y después logra escapar del
oso pero lo muerde una serpiente. Haríamos bien en ―mantenernos] despiertos‖ y alerta en
sentido espiritual (Lucas 21:36).
7:12-17. Deberíamos ser intrépidos al declarar el mensaje divino.
9:7-10. Ser descendientes de los patriarcas fieles y de los que fueron liberados de Egipto
como pueblo escogido de Dios no impidió que los israelitas infieles cayeran en una situación
tan desaprobada como la de los cusitas. Lograr la aprobación del Dios imparcial no solo
depende de proceder de cierto linaje, sino de ‗temerle y obrar justicia‘ (Hechos 10:34, 35).
ABDÍAS, LIBRO DE
CONTENIDO
*** w89 15/4 págs. 30-31 Advertencias divinas que le afectan ***
*** w07 1/11 págs. 13-14 Puntos sobresalientes de los libros de Abdías ***
EDOM SERÁ ―CORTADO HASTA TIEMPO INDEFINIDO‖
(Abdías 1-21)
Abdías le dice a la nación de Edom: ―Por la violencia a tu hermano Jacob, vergüenza te
cubrirá, y tendrás que ser cortado hasta tiempo indefinido‖. Al declarar esta sentencia, el
profeta tiene muy presentes los recientes actos violentos que han cometido los edomitas contra
los hijos de Jacob, es decir, los israelitas. En el año 607, cuando los babilonios destruyeron
Jerusalén, Edom no solo se quedó ―parado al lado‖ sin ayudar a los judíos, sino que se alió con
los invasores ―extranjeros‖ (Abdías 10, 11).
A diferencia de Edom, la casa de Jacob será restaurada. Esto es lo que profetiza Abdías:
―En el monte Sión es donde resultarán estar los que escapen, y tendrá que llegar a ser algo
santo‖ (Abdías 17).
Respuestas a preguntas bíblicas:
5-8. ¿Por qué habla el profeta de ―despojadores violentos‖ y ―vendimiadores‖ al
predecir la destrucción de Edom? Aquí el profeta establece un contraste. Si los ladrones
asaltaran Edom de noche, robarían solo lo que se les antojara. Y los vendimiadores seguro que
dejarían algo para la rebusca. Pero cuando caiga Edom, ―los hombres mismos que [estaban] en
pacto‖ con ellos —sus aliados babilonios— no pararán hasta encontrar y saquear todos sus
tesoros (Jeremías 49:9, 10).
10. ¿En qué sentido fue Edom ―cortado hasta tiempo indefinido‖? Tal como decía la
profecía, Edom dejó de existir como nación, con un territorio y gobierno propio. El rey babilonio
Nabonido conquistó el país a mediados del siglo VI antes de nuestra era. Dos siglos después,
el territorio de Edom estaba ocupado por los nabateos, de modo que los edomitas tuvieron que
quedarse en el sur de Judea, en la región del Négueb que llegó a conocerse como Idumea.
Después que los romanos destruyeron Jerusalén en el año 70 de nuestra era, la nación
edomita desapareció.
Lecciones para nosotros:
3, 4. Los orgullosos edomitas se sentían muy seguros, pues vivían en una zona escarpada
con elevadas montañas y profundos desfiladeros que ofrecían una gran ventaja estratégica.
Pero se engañaron, porque nadie escapa a la justicia divina.
8, 9, 15. La sabiduría y el poder de los hombres no servirán de protección en ―el día de
Jehová‖ (Jeremías 49:7, 22).
12-14. Lo que le ocurrió a Edom debería servir de advertencia a quienes se alegran de las
dificultades que padecen los siervos de Dios. Jehová toma muy en serio el maltrato que recibe
su pueblo.
17-20. La restauración de los hijos de Jacob que aquí se profetiza comenzó cuando un resto
salió de Babilonia y regresó a Jerusalén en el año 537. Puesto que la palabra de Jehová
siempre se cumple, podemos confiar plenamente en sus promesas.
JONAS, LIBRO DE
CONTENIDO
Jehová comisiona a Jonás para que vaya a Nínive y proclame un mensaje contra la
ciudad (1:1, 2).
Jonás huye de su asignación; en Jope toma una nave con destino a Tarsis (1:3).
Durante el viaje, Jehová hace que se levan te una gran tempestad, poniendo en peligro
la nave (1:4).
Los marineros claman a sus dioses por ayuda y arrojan objetos por la borda para
aligerar la nave; Jonás duerme (1:5).
El capitán de la nave despierta a Jonás (1:6).
Los marineros echan suertes para determinar por culpa de quién ocurrió la calamidad; la
suerte cae sobre Jonás (1:7).
Cuando le preguntan, Jonás relata lo que ha hecho y pide que se le arroje al mar (1:8-
12).
Puesto que no pueden llegar a tierra debido a la tormenta, los marineros acceden a la
petición de Jonás de que le arrojen por la borda; la tempestad se calma(1:13-15).
Los marineros ofrecen un sacrificio a Jehová y hacen votos (1:16).
Jehová hace que un gran pez se trague a Jonás, y este permanece en sus entrañas tres
días y tres noches (1:17).
Dentro del pez, Jonás, en oración, pide ayuda a Jehová; describe su situación y promete
pagar el voto que ha hecho (2:1-9).
El pez vomita a Jonás en tierra seca (2:10).
Jehová le dice de nuevo a Jonás que vaya a Nínive (3:1,2).
Jonás obedece: proclama que Nínive será derribada en cuarenta días (3:3, 4).
Los ninivitas se arrepienten; el rey se pone saco y ordena un ayuno para los hombres y
los animales domésticos (3:5-9).
Debido a que Jehová no destruye a Nínive, Jonás se disgusta y pide morir (3:10-4:3).
Jehová le pregunta a Jonás si su cólera es justificada (4:4).
El profeta sale de la ciudad y, más tarde, levanta una cabaña para observar lo que
llegaría a ser de Nínive (4:5).
Jehová le enseña a Jonás una lección de misericordia por medio de una calabaza
vinatera (4:6-11).
Jonás va a Nínive
Nunca evada una asignación de Jehová. Parece que el profeta que había vacilado en hacer
lo que se le había dicho ha aprendido su lección; predica en ―la gran ciudad‖. Jonás da una
advertencia sencilla, pero directa: ―Solo cuarenta días más, y Nínive será derribada‖. Algo muy
notable sucede: los ninivitas se arrepienten y evitan la calamidad. (3:1-10.)
El hombre no puede poner límites a la misericordia de Dios. Jonás se encoleriza mucho
porque se perdona a Nínive. Pero mediante una planta Jehová le enseña que Él muestra
misericordia según le place. (4:1-11.)
Lección para hoy: ¡Se puede evitar la calamidad si se presta atención a la profecía divina!
Imite a los ninivitas. Escuche con humildad a Jesucristo, un profeta mayor que Jonás. (Lucas
11:32.)
MIQUEAS, LIBRO DE
CONTENIDO
La palabra de Jehová sobre su juicio contra Samaria; un juicio que también afectaría a
Judá y Jerusalén (1:1-2:13).
o Vendrá desastre debido a las transgresiones, entre las que se incluyen la idolatría
y el fraude (1:1-2:11).
o El recogimiento del resto israelita después de la calamidad (2:12,13).
Las transgresiones de los caudillos provoca rían la destrucción de Jerusalén, pero
después vendría la restauración de la ciudad y la adoración verdadera (3:1-5:15).
o La condenación de los caudillos por su opresión, injusticias y derramamiento de
sangre; de los falsos profetas, por buscar dinero y hacer que el pueblo anduviese
errante; y de los sacerdotes por dar instrucción por precio (3:1-12).
o La montaña de la casa de Jehová se tiene que establecer por encima de las
cumbres de las demás montañas,y las naciones afluirán a ella y aprenderán los
caminos de Dios y de la paz (4:1-5).
o El recogimiento del resto tendría lugar después de haber sido llevados a
Babilonia(4:6-5:15).
Se fortalecerá a Sión (4:6-13).
Se relaciona la restauración con el gobernante venidero de Belén, el cual
pastorea ría con la fuerza de Jehová y traería libe ración del asirio (5:1-6).
El resto de Jacob será ―como rocío‖ y ―como un leoncillo crinado entre
hatos de ovejas‖ (5:7-9).
La tierra será limpiada de caballos, carros, hechicerías, practicantes de
magia y accesorios de idolatría; se ejecutará venganza sobre naciones
desobedientes (5:10-15).
La causa judicial de Jehová contra su pueblo, su ejecución y posterior perdón del resto
(6:1-7:20).
Véase el libro ―Toda Escritura es inspirada de Dios y provechosa‖, págs. 155-158.
*** w89 1/5 págs. 14-15 La justicia y el nombre de Jehová ensalzados ***
Lecciones de las Escrituras: Miqueas 1:1–7:20
Se denuncia la idolatría
Jehová no tolera para siempre a los malhechores. Cunden la idolatría y la rebelión en Israel
y Judá. Por eso, Jehová se hace testigo contra ellos. Sus imágenes serán aplastadas. Los
idólatras llegarán a ser ‗calvos como el águila‘ y serán desterrados. (1:1-16.)
Para los fieles, Jehová resulta ser el Dios de la esperanza. Se denuncia como ladrones y
asaltadores a los déspotas intrigantes. La calamidad los herirá. Sin embargo, se hace una
promesa de restauración a ―los restantes de Israel‖. ―En unidad los pondré, como rebaño en el
aprisco‖, dice Jehová. (2:1-13.)
Jehová espera que los que llevan responsabilidad entre su pueblo practiquen la justicia.
A los líderes de Israel dados al abuso se dice: ―¿No es negocio de ustedes el conocer la
justicia? Odiadores de lo que es bueno y amadores de la maldad, que arrancan la piel de la
gente y el organismo de sus huesos‖. Miqueas, ―con el espíritu de Jehová, y de justicia y
poderío‖, pronuncia los juicios divinos contra ellos. Dice que los líderes injustos juzgan por
sobornos, los sacerdotes instruyen por precio y los profetas practican la adivinación por dinero.
Por eso, Jerusalén ―llegará a ser simples montones de ruinas‖. (3:1-12.)
Mensaje de esperanza
Por toda la Tierra se practicará la adoración verdadera. Miqueas profetiza que ―en la parte
final de los días‖ gente de todas las naciones será instruida en los caminos de Jehová. Dios
juzgará, y la guerra dejará de ser. Los verdaderos adoradores ‗andarán en el nombre de
Jehová su Dios para siempre‘. A pesar de destierro y dolor, su pueblo será librado de la palma
de la mano de sus enemigos. (4:1-13.)
Podemos confiar en el Libertador que Dios ha prometido. Un gobernante que saldrá de
Belén pastoreará con la fortaleza de Jehová. Se predice ―liberación de manos del asirio‖. Un
resto de verdaderos adoradores será como rocío refrescante y aguaceros copiosos, y toda
forma de religión falsa y demonismo será desarraigada. (5:1-15.)
La justicia de Jehová triunfará
Jehová espera que su pueblo se conforme a sus normas justas y rectas. ¿Qué ha hecho
él para merecer adoración despreciable? Él ha hecho cosas buenas para su pueblo. ‗¿Y qué
está pidiendo de vuelta Jehová sino que ejerzan justicia, amen la bondad y sean modestos al
andar con su Dios?‘ Si continúan en su inicua violencia y explotación, solo pueden esperar su
juicio adverso. (6:1-16.)
Debemos confiar en la justicia y misericordia de Jehová. Hasta miembros de la misma
familia serán enemigos unos de otros. Pero Miqueas dice: ―Ciertamente mostraré una actitud
de espera por el Dios de mi salvación. Mi Dios me oirá‖. El profeta confía en la justicia de
Jehová, pues sabe que Dios ―ciertamente no tendrá asida su cólera para siempre, porque se
deleita en la bondad amorosa‖. (7:1-20.)
Lección para hoy: Jehová espera que su pueblo ejerza justicia. Con referencia a prácticas en
los negocios, en realidad el cristiano debería preguntarse: ―¿Puedo ser moralmente limpio con
balanzas inicuas y con una bolsa de pesas de piedra engañosas?‖. (6:11.) En estos últimos
días, todo el pueblo de Jehová tiene que contribuir a la unidad de su organización terrestre y
aceptar instrucción en sus caminos de paz. Deberíamos hacer todo lo posible por ensalzar el
nombre de Jehová y promover la adoración verdadera. (2:12; 4:1-4.)
*** w07 1/11 págs. 15-16 Puntos sobresalientes de los libros de Miqueas ***
―ENSANCHA TU CALVICIE‖
(Miqueas 1:1–7:20)
Miqueas expone los pecados de Israel y Judá, predice la destrucción de sus capitales y
promete una restauración. Samaria se convertirá en ―un montón de ruinas del campo‖. Por su
idolatría, Israel y Judá se merecen la ―calvicie‖ —o vergüenza— que van a sufrir. Cuando vayan
al cautiverio, su calvicie simbólica aumentará hasta ser ―como la del águila‖ (posiblemente una
especie de buitre que apenas tiene unos cuantos pelos en la cabeza). Con todo, Jehová les
promete: ―Positivamente te reuniré, Jacob‖ (Miqueas 1:6, 16; 2:12). Por culpa de los caudillos
corruptos y los falsos profetas, Jerusalén también ―llegará a ser simples montones de ruinas‖.
Pero Jehová juntará a su pueblo. De ―Belén Efrata‖ saldrá ―aquel que ha de llegar a ser
gobernante en Israel‖ (Miqueas 3:12; 4:12; 5:2).
¿Ha sido Jehová injusto con Israel? ¿Les está exigiendo demasiado? No. Lo único que
Jehová pide a su pueblo es ―ejercer justicia y amar la bondad y ser modesto‖ al andar con él
(Miqueas 6:8). Sin embargo, los contemporáneos de Miqueas se han vuelto tan malos que ―el
mejor de ellos es como un abrojo, el más recto de ellos es peor que un seto de espinos‖, que
lastiman a todo el que se les acerca. ¡Qué diferente es Jehová! El profeta exclama: ―¿Quién es
un Dios como tú[?]‖. Jehová volverá a tratar a su pueblo con misericordia y arrojará ―a las
profundidades del mar todos sus pecados‖ (Miqueas 7:4, 18, 19).
Respuestas a preguntas bíblicas:
2:12. ¿Cuándo se juntó ―a los restantes de Israel‖? Esta profecía tuvo su primer
cumplimiento en el 537 antes de nuestra era, cuando un resto de judíos salió del exilio en
Babilonia y regresó a su tierra. En la actualidad, la profecía se cumple en ―el Israel de Dios‖
(Gálatas 6:16). Desde 1919 se ha juntado a los cristianos ungidos ―como rebaño en el aprisco‖.
Y, especialmente desde 1935, se les ha unido la ―gran muchedumbre‖ de ―otras ovejas‖.
De modo que ahora hay ―alboroto de hombres‖ (Revelación [Apocalipsis] 7:9; Juan 10:16).
Todos ellos, unidos, promueven la adoración verdadera.
4:1-4. ¿Qué quiere decir la Biblia cuando asegura que ―en la parte final de los días‖,
Jehová ―dictará el fallo entre muchos pueblos, y enderezará los asuntos respecto a
poderosas naciones‖? Los ―muchos pueblos‖ y las ―poderosas naciones‖ no son países
ni instituciones políticas, sino personas de toda nación que han decidido adorar a Jehová.
Es en sentido espiritual que él dicta un fallo y endereza los asuntos con ellos.
Lecciones para nosotros:
1:6, 9; 3:12; 5:2. Todas estas profecías se cumplieron sin falta, lo cual demuestra que la
palabra de Jehová nunca falla. Los asirios destruyeron Samaria en el 740 antes de nuestra era,
mientras aún vivía Miqueas (2 Reyes 17:5, 6). Durante el reinado de Ezequías, los ejércitos
asirios llegaron hasta la mismísima Jerusalén (2 Reyes 18:13). Esta ciudad fue arrasada por los
babilonios en el 607 (2 Crónicas 36:19). Y el Mesías efectivamente nació en ―Belén Efrata‖
(Mateo 2:3-6).
2:1, 2. Sería muy peligroso afirmar que servimos a Dios cuando en realidad nuestra prioridad
son las riquezas y no ―el reino y la justicia de Dios‖ (Mateo 6:33; 1 Timoteo 6:9, 10).
3:1-3, 5. Jehová espera que quienes dirigen a sus siervos actúen con justicia.
3:4. Si queremos que Jehová conteste nuestras oraciones, no podemos pecar
deliberadamente ni llevar una doble vida.
3:8. Solo con el espíritu santo y la fortaleza de Jehová podremos llevar a cabo nuestra
comisión de predicar las buenas nuevas y proclamar los mensajes de juicio divinos.
5:5. Esta profecía mesiánica asegura que cuando los enemigos del pueblo de Dios lo
ataquen, los siervos de Jehová serán dirigidos por ―siete pastores‖ (número que indica plenitud)
y ―ocho adalides‖, es decir, por una cantidad considerable de hombres capacitados.
5:7, 8. Para muchos, los cristianos ungidos son ―como rocío de Jehová‖, una bendición
divina. La razón es que Dios los utiliza para proclamar el mensaje del Reino. Al predicar junto
con los ungidos, las ―otras ovejas‖ también contribuyen a reconfortar espiritualmente al prójimo
(Juan 10:16). ¡Qué privilegio es participar en una obra que consuela tanto a la gente!
6:3, 4. Imitemos a Jehová Dios y tratemos con bondad y compasión incluso a los que tienen
un carácter difícil o están débiles espiritualmente.
7:7. Cuando en este tiempo del fin nos enfrentemos a problemas, no nos desanimemos. Más
bien, tengamos la misma ―actitud de espera por [nuestro] Dios‖ que tuvo Miqueas.
7:18, 19. Sigamos el ejemplo de Jehová y estemos dispuestos a perdonar los pecados que
se cometen contra nosotros.
NAHUM, LIBRO DE
CONTENIDO
Jehová se venga de sus adversarios pero libra a su pueblo (1:1-2:2).
o Su denunciación afecta al mar, los ríos, las montañas, las colinas y la tierra
productiva de tal modo que nadie puede mantenerse en pie ante ella (1:1-6).
o Extermina a los enemigos pero, como ―una plaza fuerte en el día de la angustia‖,
libera a su pueblo, permitiéndole así celebrar sus fiestas sin interferencia (1:7-
2:2).
Nínive será despojada (2:3-3:19).
Los majestuosos del rey asirio tropezarán, no serán capaces de salvar la ciudad de la
calamidad a manos del invasor (2:3-8).
La ciudad será saqueada de sus riquezas prácticamente ilimitadas; este albergue de
leones será asolado (2:9-13).
Las razones para el juicio de Jehová contra Nínive y el resultado de ese juicio (3:1-7).
El despojo de Nínive es tan seguro como lo que le acaeció a No-amón (3:8-12).
Todos los esfuerzos para defender Nínive están condenados al fracaso (3:13-19).
*** w89 15/5 págs. 24-25 La salvación será posible cuando Dios ejecute venganza ***
Lecciones de las Escrituras: Nahúm 1:1–3:19
*** w07 15/11 págs. 8-9 Puntos sobresalientes de los libros de Nahúm ***
―¡AY DE LA CIUDAD DE DERRAMAMIENTO DE SANGRE!‖
(Nahúm 1:1–3:19)
Jehová, quien es ―tardo para la cólera y grande en poder‖, emite una ―declaración formal
contra Nínive‖, ciudad a la que destruirá sin falta. Sin embargo, las personas que se refugian en
Dios encontrarán en él ―una plaza fuerte en el día de la angustia‖ (Nahúm 1:1, 3, 7).
Además, Jehová ―recogerá [o restituirá] el orgullo de Jacob‖. Asiria, como si fuera un león,
ha estado ―despedazando‖ a Jacob, pues ha sembrado el terror entre el pueblo de Dios. Sin
embargo, Jehová le advierte: ―Quemaré en el humo el carro de guerra de [Nínive]. Y una
espada devorará a tus propios leoncillos crinados‖ (Nahúm 2:2, 12, 13). Luego añade: ―¡Ay de
[ti, Nínive] la ciudad de derramamiento de sangre! [...] Todos los que oigan el informe acerca de
ti ciertamente batirán las manos‖, es decir, aplaudirán con alegría (Nahúm 3:1, 19).
Respuestas a preguntas bíblicas:
1:9. ¿Cómo se beneficiará Judá cuando Nínive sufra ―un exterminio consumado‖?
Quedará libre para siempre del acoso de Asiria. ―La angustia no se levantará una segunda
vez.‖ Como si Nínive ya no existiera, Nahúm anuncia: ―¡Mira! Sobre las montañas los pies de
uno que trae buenas nuevas, uno que publica la paz. Oh Judá, celebra tus fiestas‖ (Nahúm
1:15).
2:6. ¿En qué sentido se abrirían ―las puertas [...] de los ríos‖? Tales puertas fueron los
boquetes que se abrieron en las murallas de Nínive por acción de las aguas del río Tigris. En el
año 632 antes de nuestra era, las fuerzas conjuntas de los babilonios y los medos sitiaron la
ciudad de Nínive, pero esta no se sintió amenazada. Creía que, con sus altas murallas, nadie
podría conquistarla. No obstante, las lluvias torrenciales provocaron el desbordamiento del
Tigris. Según el historiador Diodoro de Sicilia, el río ―inundó parte de la ciudad y derrumbó la
muralla a lo largo de [varios kilómetros]‖. De este modo, se abrieron ―las puertas [...] de los ríos‖
y, tal como se había predicho, Nínive fue tomada con la misma rapidez con la que el fuego
devora el rastrojo seco (Nahúm 1:8-10).
3:4. ¿Por qué se compara a Nínive con una prostituta? Porque esta ciudad engañó a
varias naciones, pues les prometió su amistad y ayuda, pero terminó sometiéndolas a su yugo.
Por ejemplo, el monarca asirio ayudó al rey Acaz de Judá a hacer frente a una conspiración de
Israel y Siria. Sin embargo, después ―vino contra él y le causó angustia‖ (2 Crónicas 28:20).
Lecciones para nosotros:
1:2-6. Jehová se venga de quienes se niegan a darle devoción exclusiva y así se convierten
en sus enemigos. Esto nos muestra que Dios exige que sus siervos lo adoremos solo a él
(Éxodo 20:5).
1:10. Las imponentes murallas de Nínive, con sus cientos de torres, no pudieron evitar que
se cumpliera la sentencia divina contra la ciudad. Hoy día, los enemigos del pueblo de Jehová
tampoco podrán impedir que él los castigue (Proverbios 2:22; Daniel 2:44).
HABACUB, LIBRO DE
CONTENIDO
Súplica por ayuda; Jehová anuncia el juicio venidero (1:1-17).
o Habacuc clama por ayuda debido a la violencia e iniquidad en Judá (1:1-4).
o Jehová identifica a los caldeos como su instrumento de juicio en contra de las
naciones (1:5-11).
Esta nación espantosa recogerá cautivos velozmente como si fueran arena (1:5-9).
Se mofará de reyes, avanzará como el viento y se hará culpable (1:10,11).
o Habacuc se pregunta por qué permite Dios que los inicuos se traguen a los justos
(1:12-17).
Se pregunta por qué Jehová, la Roca, mira a aquellos que tratan
traidoramente (1:12,13).
Dios ha hecho a los hombres como peces y como cosas que se arrastran
sin nadie que los gobierne (1:14-16).
¿Se le permitirá al enemigo que siga matando a naciones constantemente?
(1:17).
Los justos viven por su fidelidad, pero los caldeos serán destruidos (2:1-20).
El profeta tiene que registrar la visión, la cual finalmente se cumplirá (2:1-3).
Por su fidelidad el justo seguirá viviendo (2:4).
Cinco ayes muestran que el fin de los caldeos es merecido (2:5-19).
o Por haber ―lo que no es suyo‖; será despojado por otros debido a su
derramamiento de sangre y violencia (2:5-8).
o Por haber ―obtenido ganancia mala para su casa‖; una piedra del muro clamará
(2:9-11).
o Por estar ―construyendo una ciudad por derramamiento de sangre‖; es de parte
de Jehová que los pueblos se afanarán sola mente para el fuego (2:12-14).
o Por emborrachar a los compañeros ‗para mirar sus partes vergonzosas‘; beberán
la copa de la mano derecha de Jehová y serán avergonzados (2:15-18).
o Por confiar en los ídolos; no hay ningún aliento en ellos (2:19).
Jehová está en su santo templo y toda la tierra tiene que guardar silencio (2:20).
Habacuc ora para que se muestre misericordia en el juicio (3:1-19).
Hace súplica por misericordia divina y re presenta a Dios como un guerrero poderoso
(3:1-15).
o Dios marcha a través de la tierra con denunciación, trillando las naciones (3:1-12).
o Ha salido para la salvación de su pueblo (3:13-15).
Agitado, Habacuc espera ―el día de la angustia‖, expresando su determinación de
alborozarse en Jehová, el Dios de salvación(3:16-19).
*** w89 15/5 págs. 24-25 La salvación será posible cuando Dios ejecute venganza ***
Lecciones de las Escrituras: Nahúm 1:1–3:19
*** w07 15/11 págs. 9-10 Puntos sobresalientes de los libros de Habacuc ***
‗EL JUSTO SEGUIRÁ VIVIENDO‘
(Habacuc 1:1–3:19)
En los primeros dos capítulos del libro de Habacuc aparece un diálogo entre este profeta y
Jehová. Angustiado por lo que estaba sucediendo en Judá, Habacuc le pregunta a Dios: ―¿Por
qué me haces ver lo que es perjudicial, y sigues mirando [nuestro] penoso afán?‖. Jehová le
responde: ―Voy a levantar a los caldeos, la nación amarga e impetuosa‖. El profeta se
sorprende de que Dios vaya a castigar a Judá valiéndose de quienes ―tratan traidoramente‖ a
los demás (Habacuc 1:3, 6, 13). Pero Jehová le asegura que el justo seguirá viviendo y que el
enemigo recibirá su merecido. Después del diálogo encontramos cinco ayes, o expresiones de
condena, que Jehová pronuncia contra sus enemigos caldeos (Habacuc 2:4).
A continuación, Habacuc implora la misericordia divina mediante una oración en forma de
endechas, o lamentos. El profeta alude a las ocasiones en las que Jehová demostró su
impresionante poder en el mar Rojo, el desierto, Jericó y otros lugares. También predice el
momento en el que Jehová, lleno de cólera, marchará contra las naciones para destruirlas en
Armagedón. Su oración concluye así: ―Jehová el Señor Soberano es mi energía vital; y él hará
mis pies como los de ciervas, y sobre mis lugares altos me hará pisar‖ (Habacuc 3:1, 19).
Respuestas a preguntas bíblicas:
1:5, 6. ¿Por qué se asombrarían los judíos de que Dios levantara a los caldeos contra
Jerusalén? Cuando Habacuc empezó a profetizar, Judá se hallaba bajo el control de Egipto
(2 Reyes 23:29, 30, 34). Aunque los caldeos (o babilonios) iban creciendo en poderío, todavía
no habían logrado derrotar a los ejércitos del faraón Nekó (Jeremías 46:2). Además, en
Jerusalén estaban el templo de Jehová y la sede del gobierno, que había ejercido de forma
ininterrumpida la casa de David. Por eso, a los judíos les resultaba inconcebible la ―actividad‖
que Jehová iba a efectuar, a saber, permitir que los caldeos destruyeran Jerusalén. Pero en el
año 607 antes de nuestra era, la visión que anunciaba la destrucción de la ciudad a manos de
los babilonios ―sin falta se realiz[ó]‖ (Habacuc 2:3).
2:5. ¿Qué representa el ―hombre físicamente capacitado‖ de este versículo, y por qué
―no alcanzará su meta‖? Dicho hombre representa el Imperio babilónico, que con su pericia
militar había conquistado una nación tras otra. Tantas victorias lo habían embriagado, como si
de vino se tratara. Sin embargo, no lograría su meta de ‗recoger todas las naciones‘ (es decir,
controlarlas), pues Jehová lo derrocaría valiéndose de los medos y los persas. En nuestros
días, el ―hombre físicamente capacitado‖ constituye un conjunto de potencias políticas. Este
hombre, al igual que el de tiempos antiguos, está ebrio de arrogancia y tiene una insaciable sed
de conquista. Pero tampoco él alcanzará su objetivo de ‗recoger todas las naciones‘. Jehová es
el único que conseguirá reunir a la humanidad bajo un solo gobierno: el Reino de Dios (Mateo
6:9, 10).
Lecciones para nosotros:
1:1-4; 1:12–2:1. Habacuc hizo preguntas sinceras, y Jehová le respondió. El Dios verdadero
escucha las oraciones de sus siervos fieles.
2:1. Al igual que Habacuc, debemos mantenernos siempre en guardia y activos
espiritualmente. También hemos de estar dispuestos a cambiar nuestro punto de vista si se nos
―censura‖ o corrige.
2:3; 3:16. Debemos esperar con fe la venida del día de Jehová, sin perder el sentido de
urgencia.
2:4. Para sobrevivir al cercano día del juicio divino, tenemos que aguantar fielmente
(Hebreos 10:36-38).
2:6, 7, 9, 12, 15, 19. A los codiciosos, los que buscan ganancias ilícitas, los violentos, los
inmorales y los idólatras les aguarda un futuro calamitoso. Debemos evitar a toda costa
comportarnos como ellos.
2:11. Si no denunciamos la maldad de este mundo, ―una piedra [...] clamará
lastimosamente‖. Por eso, es importante que prediquemos el mensaje del Reino con valor y
tesón.
3:6. Cuando Jehová ejecute su juicio, nada se interpondrá en su camino, ni siquiera las
organizaciones humanas que parecen tan perdurables como colinas y montañas.
3:13. Tenemos la seguridad de que Jehová no destruirá de manera indiscriminada a las
personas en Armagedón, pues salvará a las que le sirvan fielmente.
3:17-19. Estamos seguros de que, a pesar de sufrir penalidades antes de la guerra de
Armagedón o durante esta, Jehová nos dará ―energía vital‖ para que sigamos sirviéndole
gozosamente.
SOFONIAS, LIBRO DE
CONTENIDO
*** w89 1/6 págs. 30-31 Busque a Jehová y sírvale con todo el corazón ***
Lecciones de las Escrituras: Sofonías 1:1–3:20
AGEO, LIBRO DE
CONTENIDO
Primer mensaje, en el primer día del sexto mes del segundo año de Darío Histaspes
(1:1-15).
o Censura por no haber reconstruido el templo (1:1-11).
El pueblo está más interesado en sus propias casas, comen y beben
mientras la casa de Dios permanece desechada (1:3-8).
Dios deja de bendecir sus cosechas y afanes (1:9-11).
o Zorobabel y Josué llevan la delantera: el pueblo es avivado para reanudar la obra
de reconstrucción en el día veinticuatro del sexto mes (1:12-15).
Segundo mensaje, en el día veintiuno del séptimo mes (2:1-9).
o Aquellos que habían visto el templo edifica do por Salomón ven la reconstrucción
como algo insignificante; parece que esto desanima a otros. (Compárese con
Zacarías 4:10.) (2:1-3.)
o Jehová les tranquiliza diciéndoles que Él está con ellos y recordándoles su pacto
con Israel; Él llenará la casa de gloria (2:4-9).
Mecerá los cielos, la tierra, el mar y el suelo seco (2:4-6).
Las cosas deseables de todas las naciones tendrán que entrar, de manera
que la gloria de esta casa será mayor que la de la anterior (2:7-9).
Tercer mensaje, en el día veinticuatro del noveno mes (2:10-19).
o El pueblo es inmundo al igual que todas sus obras y todo lo que presentan (2:10-
14).
o Aun cuando han sido heridos con escasez, sequía y granizo, no se han vuelto a
Jehová (2:15-17).
o Desde este día, Jehová otorgará bendición (2:18,19).
Cuarto mensaje, en el día veinticuatro del noveno mes (2:20-23).
o Jehová mecerá los cielos y la tierra, derribará a los reinos de las naciones (2:20-
22).
o Pondrá a Zorobabel (un descendiente de David y antepasado del Mesías) como
un anillo de sellar, como su escogido. (Véanse 1 Crónicas 3:1-19; Mateo 1:6-16;
Lucas 3:23-31.) (2:23.)
(Hay una consideración de la profecía de Ageo, versículo por versículo, en el libro El
Paraíso restaurado a la humanidad... ¡por la Teocracia!.pm.S 1974)
*** w07 1/12 págs. 8-9 Puntos sobresalientes de los libros de Ageo***
―PONGAN SU CORAZÓN EN SUS CAMINOS‖
(Ageo 1:1–2:23)
En un término de ciento doce días, Ageo pronuncia cuatro motivadores mensajes. El primero
dice: ―‗Pongan su corazón en sus caminos. Suban a la montaña, y tienen que traer madera.
Y edifiquen la casa, para que yo me complazca en ella y sea glorificado‘, ha dicho Jehová‖
(Ageo 1:7, 8). El pueblo reacciona favorablemente. El segundo contiene la siguiente promesa
de Jehová: ―Llenaré de gloria esta casa‖ (Ageo 2:7).
El tercer mensaje deja claro que el abandono total en que se halla el templo ha hecho que ‗el
pueblo y toda la obra de sus manos‘ sean inmundos delante de Jehová. No obstante, él les
‗otorgará una bendición‘ desde el día que inicien las reparaciones. El cuarto mensaje anuncia
que Jehová ―aniquilar[á] la fuerza de los reinos de las naciones‖ y pondrá al gobernador
Zorobabel ―como anillo de sellar‖ (Ageo 2:14, 19, 22, 23).
Respuestas a preguntas bíblicas:
1:6. ¿Qué significa la expresión ―hay beber, pero no hasta el punto de embriagarse‖?
Estas palabras sencillamente hacen referencia a la escasez de vino. Como el pueblo carece de
la bendición de Jehová, el vino de que dispone es tan poco que no alcanza siquiera para que
alguien se emborrache.
2:6, 7, 21, 22. ¿Quién o qué causa el mecimiento, y con qué efecto? Jehová está
‗meciendo todas las naciones‘ mediante la predicación mundial del mensaje del Reino. A raíz
de esta predicación, ―las cosas deseables de todas las naciones‖ están entrando en su casa y
llenándola de gloria. Con el tiempo, ―Jehová de los ejércitos‖ mecerá ―los cielos y la tierra y el
mar y el suelo seco‖ destruyendo de una sacudida al entero sistema de cosas malvado de la
actualidad (Hebreos 12:26, 27).
2:9. ¿En qué aspectos sería mayor ‗la gloria de la casa posterior que la de la anterior‘?
Al menos en tres aspectos: su duración, el personaje que allí enseñaría y los que acudirían a
ella para adorar a Jehová. Aunque el magnífico templo de Salomón duró cuatrocientos veinte
años (1027-607 a.e.c.), la ―casa posterior‖ se mantuvo durante más de quinientos ochenta
años, desde su terminación en 515 a.e.c. hasta su destrucción en 70 e.c. Aparte de eso, en
esta ―casa posterior‖ enseñó el Mesías, Jesucristo, y a ella afluyeron para adorar a Dios
muchísimas más personas que a la anterior (Hechos 2:1-11).
Lecciones para nosotros:
1:2-4. El hecho de que la gente oponga resistencia a nuestra predicación no es motivo para
dejar de ‗buscar primero el reino‘ y dar preferencia a nuestros propios asuntos (Mateo 6:33).
1:5, 7. Nos conviene ‗poner el corazón en nuestros caminos‘, es decir, fijarnos en cómo
repercute en nuestra relación con Dios lo que estamos haciendo con nuestra vida.
1:6, 9-11; 2:14-17. Aunque los contemporáneos de Ageo estaban dedicados a atender sus
propios intereses, no veían el fruto de sus esfuerzos. Como se habían despreocupado del
templo, no contaban con la bendición divina. En nuestro caso, debemos dar prioridad a las
cosas espirituales y servir a Dios con toda el alma. Recordemos que sea que tengamos poco o
mucho en sentido material, ―la bendición de Jehová [...] es lo que enriquece‖ (Proverbios
10:22).
2:15, 18. Jehová exhortó a los judíos a que desde ese día en adelante ‗pusieran su corazón‘,
no en la negligencia que habían demostrado en el pasado, sino en la reconstrucción del
templo. De la misma manera, nosotros debemos adorar a Jehová mirando siempre hacia
adelante.
ZACARÍAS, LIBRO DE
CONTENIDO
MALAQUIAS, LIBRO DE
CONTENIDO
El amor de Jehová por Jacob no correspondido por los israelitas (1:1-14).
o El que Jehová aceptase a Jacob y rechazase a Esaú constituyó una prueba de su
amor por su pueblo (1:1-5).
o El que los sacerdotes presenten sacrificios inferiores deshonra a Dios (1:6-14).
Se censura a los sacerdotes y al pueblo por hacer el mal y se les notifica acerca de la
venida del Señor y mensajero del pacto al templo para juicio (2:1-3:18).
o Los sacerdotes no guardan el pacto de Leví y no instruyen al pueblo en el camino
de la justicia (2:1-9).
o El pueblo trata traidoramente, haciéndose culpables de divorciarse injustamente
(2:10-17).
o Jehová anuncia su propósito de enviar a su mensajero; también su propia venida
al templo con el ―mensajero del pacto‖ (3:1-18).
La venida resultará en limpiar a los hijos de Leví y en juicio adverso contra
los malhechores (3:1-5).
Hay oportunidad para arrepentirse antes de que empiece el juicio; este
hará una clara distinción entre el justo y el inicuo(3:6-18).
El día de Jehová será precedido por la venida de Elías (4:1-6),
Véase el libro ―Toda Escritura es inspirada de Dios y provechosa‖, págs. 172-175.
*** w89 1/7 págs. 30-31 El Señor verdadero viene para juicio ***
Lecciones de las Escrituras: Malaquías 1:1–4:6
*** w07 15/12 págs. 26-29 Puntos sobresalientes del libro de Malaquías ***
LOS SACERDOTES ―HAN HECHO QUE MUCHOS TROPIECEN‖
(Malaquías 1:1–2:17)
Jehová le dice al pueblo de Israel lo que siente por ellos: ―Los he amado‖. Pero los
sacerdotes han despreciado Su nombre. ¿Cómo lo han hecho? ―Al presentar sobre [su] altar
pan contaminado‖ y al ofrecer en sacrificio ―un animal cojo o uno enfermo.‖ (Malaquías 1:2, 6-
8.)
Los sacerdotes ―han hecho que muchos tropiecen en la ley‖. Los pobladores tratan
―traidoramente unos con otros‖. Algunos se han casado con extranjeras, mientras que otros han
traicionado a ―la esposa de [su] juventud‖ (Malaquías 2:8, 10, 11, 14-16).
Respuestas a preguntas bíblicas:
2:2. ¿En qué sentido maldeciría Jehová las bendiciones de los sacerdotes rebeldes?
En el sentido de que las bendiciones que ellos pronunciaran terminarían por convertirse en
maldiciones.
2:3. Jehová dijo que ―esparcir[ía] estiércol‖ sobre el rostro de los sacerdotes. ¿Qué
quiso decir? De acuerdo con la Ley, el estiércol de los animales ofrecidos en sacrificio tenía
que quemarse fuera del campamento (Levítico 16:27). Por eso, al decir que les arrojaría
estiércol en la cara, Jehová dio a entender que despreciaba aquellos sacrificios y a quienes los
ofrecían.
2:13. ¿De quiénes eran las lágrimas que cubrían el altar de Jehová? De las mujeres
judías que iban al santuario a llorar sus penas ante Jehová. ¿Qué las hacía sufrir así? Que sus
esposos las habían abandonado; se habían divorciado de ellas sin motivos válidos, tal vez para
casarse con extranjeras más jóvenes.
Lecciones para nosotros:
1:10. A Jehová no le complacían las ofrendas de los codiciosos sacerdotes, que cobraban
hasta por cosas tan simples como cerrar las puertas o encender el altar. Es esencial, pues, que
el amor a Dios y al prójimo sea el verdadero motivo de nuestros actos de adoración, incluida
nuestra participación en el ministerio cristiano. ¡Jamás lo hagamos por dinero! (Mateo 22:37-39;
2 Corintios 11:7.)
1:14; 2:17. Jehová no soporta la hipocresía.
2:7-9. Quienes reciben el privilegio de enseñar en la congregación deben siempre
asegurarse de que lo que enseñan concuerda con la Palabra de Dios, las Santas Escrituras, y
con las publicaciones bíblicas que proporciona ―el mayordomo fiel‖ (Lucas 12:42; Santiago
3:11).
2:10, 11. Jehová les pide a sus siervos que tomen en serio el consejo de casarse ―solo en el
Señor‖ (1 Corintios 7:39).
2:15, 16. Los cristianos verdaderos deben honrar el pacto que los une a la esposa de su
juventud.
‗EL SEÑOR VERDADERO VENDRÁ A SU TEMPLO‘
(Malaquías 3:1–4:6)
―Súbitamente vendrá a Su templo el Señor verdadero [Jehová Dios]‖ acompañado del
―mensajero del pacto [Jesucristo]‖. Dios ‗se acercará a su pueblo para el juicio‘, y él mismo
testificará sin vacilar contra todo tipo de malhechores. Además, se escribirá ―un libro de
recuerdo‖ para los que temen a Jehová (Malaquías 3:1, 3, 5, 16).
―El día que está ardiendo como el horno‖ vendrá y devorará a todos los malvados. Pero
antes de aquel día, un profeta ―tendrá que volver el corazón de padres hacia hijos, y el corazón
de hijos hacia padres‖ (Malaquías 4:1, 5, 6).
Respuestas a preguntas bíblicas:
3:1-3. ¿Cuándo vinieron al templo ―el Señor verdadero‖ y ―el mensajero del pacto‖, y
quién fue enviado delante de ellos? Mediante Jesucristo como su representante, Jehová vino
al templo el 10 de nisán del año 33 de nuestra era para limpiarlo. Ese día, Jesús entró al
templo y echó a los que compraban y vendían en él (Marcos 11:15). Esto sucedió tres años y
medio después de que Jesús fuera ungido para ser rey. Correspondientemente, parece que
tres años y medio después de su coronación como rey celestial, Jesús acompañó a Jehová al
templo espiritual y halló que el pueblo de Dios necesitaba una limpieza. Allá en el siglo primero,
Juan el Bautista fue enviado a preparar a los judíos para la venida de Cristo. En tiempos más
recientes, también se envió a un ―mensajero‖ a preparar el camino para la venida de Jehová a
su templo espiritual. Este mensajero fue un grupo de estudiantes que, ya desde la década
de 1880, se dedicó a implantar muchas verdades bíblicas elementales en el corazón de
personas sinceras.
3:10. ¿Es dar el diezmo, es decir, ―traer todas las décimas partes‖, un símbolo de
dedicación completa a Jehová? Aunque la Ley mosaica quedó anulada con la muerte de
Jesús y ya no es un requisito entregar la décima parte de todo lo que tenemos, todavía el
diezmo tiene un significado simbólico (Efesios 2:15). Pero no representa dedicarnos por
completo a Jehová. ¿Por qué? Porque el diezmo se daba año tras año, mientras que la
dedicación se hace una sola vez en la vida y se simboliza con el bautismo. A partir de ese
momento, todo lo que tenemos le pertenece a Jehová. Pero aun así, él nos deja escoger una
porción de ello —un diezmo simbólico— para usarlo en su servicio. Le entregamos a Jehová
todo lo que las circunstancias nos permitan y el corazón nos impulse a dar. Nuestras ofrendas
incluyen el tiempo, las energías y los recursos que empleamos en la predicación del Reino y en
la obra de hacer discípulos. También incluyen asistir a las reuniones, visitar a hermanos
enfermos o mayores y apoyar económicamente la adoración verdadera.
4:3. ¿Cómo ―pisotearán a los inicuos‖ los adoradores de Jehová? Los siervos de Dios
en la Tierra no ―pisotearán a los inicuos‖ literalmente; es decir, no serán ejecutores del juicio
divino. Más bien, la frase da a entender que lo harán en sentido figurado, participando con
entusiasmo en la celebración de victoria que seguirá al fin del mundo de Satanás (Salmo
145:20; Revelación [Apocalipsis] 20:1-3).
4:4. ¿Por qué deberíamos ―recordar la ley de Moisés‖? Aunque dicha Ley no es
obligatoria para el cristiano, contiene ―una sombra de las buenas cosas por venir‖ (Hebreos
10:1). Al prestarle atención, vemos cómo se cumple lo escrito en ella (Lucas 24:44, 45).
Además, también contiene ―representaciones típicas de las cosas en los cielos‖. Por
consiguiente, es fundamental estudiarla para comprender las enseñanzas cristianas y cuál
debe ser nuestra conducta (Hebreos 9:23).
4:5, 6. ¿A quién representa ―Elías el profeta‖? La profecía indica que ―Elías‖ haría una
obra de restauración: la de preparar el corazón de la gente. En el siglo primero de nuestra era,
Jesucristo identificó a Juan el Bautista como ―Elías‖ (Mateo 11:12-14; Marcos 9:11-13).
El ―Elías‖ de nuestros tiempos, enviado ―antes de la venida del día de Jehová, grande e
inspirador de temor‖, no es otro que ―el esclavo fiel y discreto‖ (Mateo 24:45). Este grupo de
cristianos ungidos también ha estado realizando con empeño una obra de restauración
espiritual.
Lecciones para nosotros:
3:10. Si no le damos a Jehová lo mejor, nos perdemos sus bendiciones.
3:14, 15. Por culpa del mal ejemplo de los sacerdotes, los judíos perdieron el aprecio por el
servicio a Dios. Quienes ocupan puestos de responsabilidad en la congregación cristiana
deben ser ejemplares (1 Pedro 5:1-3).
3:16. Jehová lleva un registro de todos los que le temen y le son fieles, y los protegerá
cuando acabe con el mundo malvado de Satanás. Por tanto, jamás permitamos que se debilite
nuestra determinación de mantenernos íntegros (Job 27:5).
4:1. En el día de ajuste de cuentas con Jehová, tanto la ―raíz‖ como la ―rama mayor‖
acabarán igual: los niños pequeños recibirán la misma condena que sus padres. En vista de la
enorme responsabilidad que recae sobre los padres cristianos, ambos han de hacer un gran
esfuerzo por buscar y mantener la aprobación de Dios (1 Corintios 7:14).
(Para una consideración de aplicación práctica veasé el libro ―VIVAMOS MUY
PENDIENTES DEL DIA DE JEHOVA‖,publicado en 2006,con aplicación de cada una de
los libros de los ―profetas menores‖.)
*** w89 15/7 págs. 24-25 Joyas del Evangelio de Mateo ***
JEHOVÁ DIOS inspiró a Mateo, quien había sido recaudador de impuestos, para que escribiera
un emocionante relato del nacimiento, la vida, la muerte y la resurrección de Jesucristo. En
algunos manuscritos posteriores al siglo X se dice, al pie, que este Evangelio se escribió
alrededor del año octavo después de la ascensión de Jesús (c. 41 E.C.). Esto no está en
conflicto con la prueba interna, puesto que el relato termina cuando Jesús da a sus seguidores
la comisión de hacer discípulos, en 33 E.C., y no dice nada de la destrucción de Jerusalén por
los romanos en 70 E.C.
En su Historia Eclesiástica, Eusebio, historiador del siglo IV, cita a Papias e Ireneo, del siglo II,
y a Orígenes, del III, y muestra que todos estos atribuyen el Evangelio a Mateo y dicen que lo
escribió en hebreo. ¿Se escribió en realidad en arameo? No según los documentos que
menciona George Howard, un profesor de religión en la Universidad de Georgia, E.U.A. Él
escribió: ―La razón principal para suponer esto es que se creía que en la Palestina de los días
de Jesús ya no se usaba el hebreo, que supuestamente había sido reemplazado por el
arameo. El descubrimiento posterior de los Rollos del mar Muerto (muchos de los cuales son
composiciones en hebreo) y de otros documentos palestinos hebreos que en general son de
los tiempos de Jesús muestra ahora que el hebreo estaba vivo y activo en el primer siglo‖.
Parece que Mateo escribió su Evangelio para provecho de cristianos hebreos, pero puede que
también lo tradujera al griego común.
Le instamos a leer el Evangelio de Mateo. Mientras examinamos algunas de las joyas que
contiene, note la información que se da para aclarar el relato.
Nacimiento y ministerio temprano
El Evangelio de Mateo comienza con la genealogía y el nacimiento de Jesús. Cuando José, el
prometido de María, se dio cuenta de que ella estaba encinta, ―tenía la intención de divorciarse
de ella secretamente‖ (1:19). Pero ¿cómo podía hacer eso, cuando solo eran prometidos? Pues
bien, para los judíos la mujer prometida en matrimonio tenía las mismas obligaciones que la
mujer casada. Si tenía relaciones sexuales con alguien, podía ser apedreada como si fuera
adúltera. (Deuteronomio 22:23-29.) Por lo tanto, debido a la obligatoriedad que encerraba el
compromiso, José planeaba divorciarse de María, aunque ceremonialmente no habían sido
unidos en matrimonio.
Algunos de los primeros capítulos del Evangelio de Mateo contienen el Sermón del Monte de
Jesús. En este, Jesús advirtió que el que se dirigiera a un hermano usando ―una palabra
execrable de desdén‖ (5:22) tendría que rendir cuentas ―al Tribunal Supremo‖. El expresarse
así equivalía a llamar al hermano de uno un necio o tonto que no tuviera nada en la cabeza.
Pero ¿qué era el ―Tribunal Supremo‖? Era el Sanedrín de 71 miembros de Jerusalén. ¿Qué
requisitos había que satisfacer para ser miembro de ese Sanedrín? La Cyclopedia de
McClintock y Strong dice: ―El que solicitaba aceptación tenía que ser sin tacha en sentido moral
y físico. Tenía que ser de mediana edad, alto, apuesto, rico, instruido [...] Se exigía que supiera
varios idiomas [...] Se tenía por inelegibles debido a sus idiosincrasias a los de edad demasiado
avanzada, los prosélitos, los eunucos y los netineos; tampoco se podía elegir a hombres que
no tuvieran hijos, porque no podrían comprender por experiencia los asuntos domésticos [...]; ni
se aceptaba a los que no tuvieran prueba de ser prole legítima de un sacerdote, levita o
israelita. [...] Ante todo se requería que el candidato al Gran Sanedrín hubiera sido juez en su
pueblo nativo; que de ese puesto hubiera sido transferido al Pequeño Sanedrín [...], y luego,
que además hubiera adelantado al segundo Pequeño Sanedrín [...] antes de que se le pudiera
recibir entre los setenta y uno‖.
Por lo tanto, Jesús quiso decir que ―quienquiera que se dirija a su hermano con una palabra
execrable de desdén‖ lleva culpa comparable a la de la persona a quien el Tribunal Supremo
judío habría hallado culpable y sentenciado a muerte. ¡Qué advertencia contra el difamar a
nuestros hermanos! Refrenemos la lengua para que nunca merezcamos condenación en el
mayor de los tribunales, delante de Jehová, ―el Juez de toda la tierra‖. (Génesis 18:25; Santiago
3:2-12.)
Jesús, maestro eficaz
Este Evangelio también presenta a Jesús como maestro hábil en contestar preguntas. Por
ejemplo, en respuesta a una pregunta explicó por qué sus discípulos no ayunaban (9:14-17).
No había razón para que ayunaran mientras él estaba vivo. Pero, como predijo, ayunaron y
estuvieron de duelo cuando Jesús murió, porque no sabían por qué se había permitido que
muriera. Sin embargo, después que los discípulos fueron iluminados al recibir el espíritu santo
en el Pentecostés, ya no ayunaron por tristeza.
Jesús, todavía considerando el mismo asunto, añadió que nadie pone un remiendo de tela que
no se ha encogido en una prenda de vestir vieja, porque la fuerza del remiendo puede hacer
peor la rotura. También dijo que el vino nuevo no se pone en odres viejos. El odre, o botella de
piel, era una piel de animal curtida, cerrada toda mediante costura excepto por una extremidad
que se dejaba abierta. La fermentación del vino nuevo genera anhídrido carbónico, que ejerce
suficiente presión como para reventar odres viejos y secos. Según la comparación de Jesús, la
verdad que Cristo enseñaba era demasiado poderosa para el viejo e inflexible judaísmo.
Además, Jesús no estaba tratando de remendar ni perpetuar ningún sistema religioso gastado,
con sus costumbres de ayunos y otros ritos. Más bien, Dios estaba utilizando a Jesús para
instituir un nuevo sistema de adoración. Por lo tanto, de seguro nosotros no deberíamos dar
ningún apoyo a movimientos de unión de fes ni esforzarnos por perpetuar la religión falsa.
Preste atención al consejo del Hijo de Dios
Según el relato de la transfiguración que encontramos en Mateo, Dios llamó a Jesús Su Hijo
aprobado, y dijo que debemos escucharle (17:5). Por eso, debemos prestar atención a todo el
consejo de Cristo, lo que incluye su advertencia de que al que causara tropiezo a uno que
pusiera fe en él le iría mejor si lo hundían en el mar con una piedra de molino colgada del
cuello (18:6). ¿Qué clase de piedra era esta? No era pequeña, porque Jesús quiso decir una
piedra superior de molino, que medía de un metro a metro y medio de diámetro (de cuatro a
cinco pies). El hacer que una piedra como esa girara sobre una gran piedra inferior exigía la
fuerza de un animal. Nadie podría sobrevivir en el mar con un peso tan grande alrededor del
cuello. Por eso, el consejo de Jesús era que evitáramos hacernos culpables de causar tropiezo
a uno de sus seguidores. El apóstol Pablo escribió lo siguiente con intención similar: ―Es bueno
no comer carne, ni beber vino, ni hacer cosa alguna por la cual tu hermano tropiece‖.
(Romanos 14:21.)
El Hijo de Dios dio consejo indirecto al pronunciar un ay contra los escribas y los fariseos y
decir que parecían sepulcros blanqueados (23:27, 28). Se acostumbraba blanquear los
sepulcros y las tumbas para que la gente no los tocara accidentalmente y se hiciera inmunda.
Con una alusión a esta práctica, Jesús mostró que los escribas y fariseos parecían justos por
fuera, pero estaban ―llenos de hipocresía y desafuero‖. El prestar atención a este consejo
implícito nos llevará a evitar la tortuosidad y a obrar por ―fe sin hipocresía‖. (1 Timoteo 1:5;
Proverbios 3:32; 2 Timoteo 1:5.)
Nuestro Dechado fue íntegro
Después de poner por escrito la profecía de Jesús acerca de ‗la señal de su presencia‘, Mateo
describe sucesos como la traición, el arresto, el juicio, la muerte y la resurrección de Cristo.
Sobre el madero, Jesús se niega a aceptar vino mezclado con hiel, una sustancia narcotizante
(27:34). Las mujeres acostumbraban dar aquel tipo de vino a los criminales porque
amortiguaría el dolor de la ejecución sobre un madero. Marcos 15:23 dice que el vino estaba
―drogado con mirra‖, lo que le mejoraría el sabor. Parece que el vino que Cristo rechazó
contenía tanto hiel como mirra. Jesús, al llegar a la culminación de su derrotero terrestre, no
quiso estar drogado o estupefacto. Deseaba estar en pleno dominio de sus sentidos para ser
fiel hasta la muerte. Como nuestro Dechado, siempre estemos interesados en mantenernos
íntegros a Jehová Dios. (Salmo 26:1, 11.)
*** w08 15/1 págs. 29-31 Puntos sobresalientes del libro de Mateo ***
―EL REINO DE LOS CIELOS SE HA ACERCADO‖
(Mat. 1:1–20:34)
Mateo se propone destacar el tema del Reino y las enseñanzas de Jesús, razón por la que
no expone los sucesos en estricto orden cronológico. Por ejemplo, el Sermón del Monte
aparece en los primeros capítulos del libro, aunque Jesús lo pronunció hacia la mitad de su
ministerio.
A lo largo de su ministerio en Galilea, Jesús realiza milagros, da instrucciones para la
predicación a los doce apóstoles, denuncia a los fariseos y relata ilustraciones relacionadas con
el Reino. Luego sale de Galilea y llega a ―los términos de Judea al otro lado del Jordán‖ (Mat.
19:1). En el camino les dice a sus discípulos: ―¡Miren! Subimos a Jerusalén, y el Hijo del
hombre será [...] condena[do] a muerte, [...] y al tercer día será levantado‖ (Mat. 20:18, 19).
Respuestas a preguntas bíblicas:
3:16. ¿En qué sentido ―se abrieron‖ los cielos cuando se bautizó Jesús? Esa expresión
parece indicar que recuperó los recuerdos de su existencia prehumana en los cielos.
5:21, 22. ¿Constituye un pecado más grave dar rienda suelta a la furia que
simplemente abrigarla? Jesús indicó que si una persona estaba furiosa con su hermano,
cometía un pecado grave. No obstante, si expresaba su furia dirigiéndole a este una palabra
despectiva, el pecado era aún más grave, por lo que tendría que responder ante el ―Tribunal
Supremo‖, y no solo ante un tribunal local.
5:48. ¿De verdad es posible ser ―perfectos, como [nuestro] Padre celestial es
perfecto‖? Sí, en cierto sentido. En ese momento, Jesús estaba hablando del amor, y lo que
les dijo a sus oyentes fue que debían ser perfectos o completos en su manifestación de amor, a
imitación de su Padre celestial (Mat. 5:43-47). ¿Cómo lo lograrían? Amando también a sus
enemigos.
7:16. ¿Qué abarcan los ―frutos‖ que identifican a la religión verdadera? Abarcan
no solo nuestra conducta, sino también nuestras creencias, las enseñanzas que seguimos.
10:34-38. ¿Puede culparse a la Biblia de causar divisiones en la familia? De ningún
modo. La verdadera causa es la postura de los familiares no creyentes. Cuando estos
no aceptan el cristianismo o se oponen a él, surgen divisiones en el seno familiar (Luc. 12:51-
53).
11:2-6. Juan ya sabía que Jesús era el Mesías, pues había escuchado a Jehová
aprobándolo. ¿Por qué, entonces, le preguntó a Jesús si él era ―Aquel Que Viene‖? Tal
vez quería que el propio Jesús se lo confirmara. Pero es muy probable que, además, quisiera
saber si iba a venir ―uno diferente‖ con poder del Reino para cumplir todas las esperanzas de
los judíos. La respuesta que recibió Juan mostró que Jesús no iba a tener ningún sucesor.
19:28. ¿Qué representan ―las doce tribus de Israel‖ que serán juzgadas? Para
empezar, no pueden representar a las doce tribus del Israel espiritual (Gál. 6:16; Rev. 7:4-8).
¿Cómo lo sabemos? Porque los apóstoles a quienes estaba hablando Jesús formarían parte
del Israel espiritual, y no iban a juzgarse a sí mismos. ¿Qué representan, entonces? Pues bien,
Jesús celebró un pacto con sus discípulos ―para un reino‖. Iba a hacer de ellos ―un reino y
sacerdotes para [...] Dios‖ (Luc. 22:28-30; Rev. 5:10). Además, los que componen el Israel
espiritual ―juzgarán al mundo‖ (1 Cor. 6:2). Por lo tanto, ―las doce tribus de Israel‖ (que son
juzgadas por los que están en los tronos celestiales) deben representar a todos los humanos
que no forman parte de esa clase real y sacerdotal y que fueron prefigurados por las doce
tribus no sacerdotales en el Día de Expiación (Lev., cap. 16).
*** (Para una explicación actualizada de la parábola del trigo y la cizaña véase
Ws.15/03/2010 pag.24 parr.5 a pag.26 parr.11)***
Lecciones para nosotros:
4:1-10. Este relato nos enseña que Satanás no es la cualidad abstracta del mal, sino una
persona real. Él nos tienta mediante ―el deseo de la carne y el deseo de los ojos y la exhibición
ostentosa del medio de vida de uno‖. Pero si aplicamos los principios bíblicos, nos
mantendremos fieles a Dios (1 Juan 2:16).
5:1–7:29. Tengamos conciencia de nuestra necesidad espiritual. Seamos pacíficos.
Despidamos de la mente todo pensamiento inmoral. Cumplamos nuestra palabra. Al orar,
demos prioridad a los asuntos espirituales, y no a los materiales. Seamos ricos para con Dios.
Busquemos primero el Reino y la justicia de Dios. No juzguemos a los demás. Hagamos la
voluntad de Dios. ¡Cuántas lecciones prácticas contiene el Sermón del Monte!
9:37, 38. Si le pedimos al Amo que ―envíe obreros a su siega‖, debemos ser consecuentes y
participar con celo en la obra de hacer discípulos (Mat. 28:19, 20).
10:32, 33. Nunca nos debe dar miedo hablar de nuestra fe.
13:51, 52. Captar el sentido de las verdades del Reino conlleva la responsabilidad de dar a
conocer esos tesoros al prójimo.
14:12, 13, 23. Todos necesitamos pasar ratos a solas para meditar en asuntos que valgan la
pena (Mar. 6:46; Luc. 6:12).
17:20. Se necesita fe para superar los obstáculos que impiden el progreso espiritual, sobre
todo si son tan grandes como montañas. Por lo tanto, esforcémonos siempre por fortalecer
nuestra fe en Jehová y en sus promesas (Mar. 11:23; Luc. 17:6).
18:1-4; 20:20-28. A los discípulos de Jesús les gustaba destacar entre los demás, en parte
por la imperfección humana y en parte por haberse criado en una religión que daba mucha
importancia al prestigio y la posición social. Es fundamental que cultivemos la humildad,
evitemos las tendencias pecaminosas y tengamos una visión equilibrada de los privilegios y las
responsabilidades.
―EL HIJO DEL HOMBRE HA DE SER ENTREGADO‖
(Mat. 21:1–28:20)
Jesús entra en Jerusalén ―montado sobre un asno‖ el 9 de nisán del año 33 (Mat. 21:5).
Al día siguiente va al templo y expulsa a los mercaderes y cambistas. El 11 de nisán imparte
enseñanza en el templo y denuncia a los escribas y los fariseos, tras lo cual les revela a sus
discípulos ―la señal de [su] presencia y de la conclusión del sistema de cosas‖ (Mat. 24:3).
Un día después les dice a los discípulos: ―Saben que de aquí a dos días ocurre la pascua, y el
Hijo del hombre ha de ser entregado para ser fijado en un madero‖ (Mat. 26:1, 2).
Llega el 14 de nisán. Después de instituir la Conmemoración de su muerte —ya inminente—,
Jesús es traicionado, detenido, juzgado y, finalmente, ejecutado en un madero. Al tercer día
resucita de entre los muertos. Antes de ascender al cielo, les manda a sus seguidores: ―Vayan,
por lo tanto, y hagan discípulos de gente de todas las naciones‖ (Mat. 28:19).
Respuestas a preguntas bíblicas:
22:3, 4, 9. ¿Cuándo se emitieron los tres llamamientos a los invitados del banquete de
bodas? El primer llamamiento para reunir a la clase de la novia empezó en el año 29 de
nuestra era, cuando Jesús y sus discípulos comenzaron a predicar, y se prolongó hasta el año
33. El segundo se extendió desde el derramamiento del espíritu santo en el Pentecostés del
año 33 hasta el año 36. Ambos llamamientos fueron dirigidos exclusivamente a los judíos, los
prosélitos del judaísmo y los samaritanos. El tercero, en cambio, se dirigió a los gentiles
incircuncisos, representados por la gente que se hallaba en los caminos que salían de la
ciudad. Este último llamamiento comenzó en el 36 con la conversión del militar romano
Cornelio y ha proseguido hasta nuestros días.
23:15. ¿Por qué eran los prosélitos, o conversos, del fariseísmo ―merecedor[es] del
Gehena dos veces más‖ que los propios fariseos? Es posible que en el momento de
convertirse al fariseísmo, algunos individuos ya estuvieran cometiendo pecados graves. Pero
cuando adoptaban la ideología extremista de los fariseos, su situación empeoraba,
probablemente porque se volvían más extremistas aún que sus maestros. De ahí que fueran
―merecedor[es] del Gehena dos veces más‖ que ellos.
27:3-5. ¿Qué hizo que Judas sintiera remordimiento? Nada indica que Judas sintiera
remordimiento porque estuviera arrepentido de verdad. En lugar de pedir perdón a Dios, fue a
confesar su pecado a los sacerdotes principales y a los ancianos. Como había cometido ―un
pecado que sí incurre en muerte‖, lo atormentaban los sentimientos de culpa y de
desesperación, y con razón (1 Juan 5:16). Lo que hizo que Judas sintiera remordimiento fue la
situación desesperada en que se hallaba.
Lecciones para nosotros:
21:28-31. Lo que cuenta para Jehová es que hagamos su voluntad. Por ejemplo, debemos
participar con celo en la obra de predicar el Reino y hacer discípulos (Mat. 24:14; 28:19, 20).
22:37-39. Los dos mandamientos principales constituyen un resumen conciso de lo que Dios
espera de sus siervos.
*** w08 15/2 ¿Qué significa para usted la presencia de Cristo? ***
¿Quiénes reconocerían la señal?
8
En cierta ocasión en que los fariseos le preguntaron cuándo vendría el Reino, Jesús
contestó que no vendría de modo que fuera ―llamativamente observable‖ para ellos (Luc. 17:20,
21). Así es: los incrédulos no entenderían. ¿Cómo iban a entender, si ni siquiera reconocieron a
Jesús como su futuro Rey? Entonces, ¿quiénes reconocerían la señal de la presencia de Cristo
y, además, comprenderían su significado?
9
Jesús pasó a decir que sus discípulos verían la señal tan claramente como si vieran un
―relámpago [...] [que] resplandece desde una parte debajo del cielo hasta otra parte debajo del
cielo‖ (léase Lucas 17:24-29). Es interesante observar que Mateo 24:23-27 establece una
relación directa entre esta misma comparación y la señal de la presencia de Cristo.
La generación que vería la señal
10
Hace algunos años, esta revista explicó que la expresión ―esta generación‖ de Mateo
24:34 se refería, en lo que respecta al siglo primero, a ―la generación contemporánea de judíos
incrédulos‖. Esta explicación parecía razonable debido a que el término generación tenía una
connotación negativa en todos los demás pasajes en que Jesús lo utilizó. De hecho, en la
mayoría de los casos, Jesús tachó a la generación de ―inicua‖ o la calificó con otros términos
negativos (Mat. 12:39; 17:17; Mar. 8:38). Por eso se creyó que, en el cumplimiento moderno,
Jesús se estaba refiriendo a la ―generación‖ inicua de incrédulos que verían tanto los aspectos
que caracterizarían ―la conclusión [syntéleia] del sistema de cosas‖ como el fin (télos) de dicho
sistema.
11
Es verdad que Jesús empleó la palabra generación con un sentido negativo cuando se
dirigía a las personas malvadas de su día o cuando hablaba de ellas. Pero ¿se refirió
necesariamente a tales personas cuando pronunció las palabras que leemos en Mateo 24:34?
Recuerde que los cuatro apóstoles conversaron con él ―privadamente‖ (Mat. 24:3). Puesto que
Jesús no empleó términos negativos cuando les habló de ―esta generación‖, seguramente los
apóstoles entendieron que ellos y los demás discípulos formaban parte de la ―generación‖ que
no pasaría ―hasta que suced[ieran] todas estas cosas‖.
12
¿Cómo llegamos a esa conclusión? Examinando detenidamente el contexto. Según Mateo
24:32, 33, Jesús dijo: ―Aprendan de la higuera como ilustración este punto: Luego que su rama
nueva se pone tierna y brota hojas, ustedes saben que el verano está cerca. Así mismo
también, ustedes, cuando vean todas estas cosas, sepan que él está cerca, a las puertas‖
(compárese con Marcos 13:28-30; Lucas 21:30-32). Entonces, en Mateo 24:34, leemos: ―En
verdad les digo que de ningún modo pasará esta generación hasta que sucedan todas estas
cosas‖.
13
Según Mateo 24:33, Jesús dijo que sus discípulos, que pronto iban a ser ungidos con
espíritu santo, serían quienes podrían llegar a ciertas conclusiones cuando vieran ocurrir ―todas
estas cosas‖. De modo que Jesús debió de haberse referido a sus discípulos cuando declaró:
―De ningún modo pasará esta generación hasta que sucedan todas estas cosas‖.
14
A diferencia de los incrédulos, los discípulos de Jesús no solo verían la señal, sino que
también comprenderían su importancia. ‗Aprenderían‘ al contemplar los distintos aspectos de
esa señal y, por tanto, ‗sabrían‘ su verdadero significado. No tendrían ninguna duda de que ―él
está cerca, a las puertas‖. Es verdad que tanto los judíos incrédulos como los fieles cristianos
ungidos del siglo primero vieron un cumplimiento limitado de las palabras de Jesús.
No obstante, solo sus discípulos ungidos ‗aprendieron‘ de aquellos sucesos, es decir,
comprendieron su verdadero significado.
15
En nuestros días, las personas que no comprenden los asuntos espirituales consideran
que la señal de la presencia de Jesús no se ha visto de una manera ―llamativamente
observable‖. Les parece que todo continúa igual que siempre (2 Ped. 3:4). Por otro lado, los
fieles hermanos ungidos de Cristo, la clase Juan de nuestros días, han reconocido la
señal como si de un relámpago se tratara y han comprendido lo que realmente significa.
Como grupo, estos ungidos componen en tiempos modernos la ―generación‖ de
contemporáneos que no pasará ―hasta que sucedan todas estas cosas‖. Esto parece
indicar que algunos hermanos ungidos de Cristo aún estarán vivos en la Tierra cuando
comience la predicha gran tribulación.
[Notas] *** w08 15/2 pág. 25 ¿Qué significa para usted la presencia de Cristo? ***
¿Podemos calcular cuánto dura ―esta generación‖?
La palabra generación suele referirse a las personas de distintas edades cuyas vidas
coinciden en cierto momento o se van traslapando a lo largo de cierto período. Por ejemplo,
Éxodo 1:6 nos dice: ―Con el tiempo murió José, y también todos sus hermanos y toda aquella
generación‖. José y sus hermanos eran de distintas edades, pero vivieron experiencias
comunes durante un mismo período. Entre los miembros de ―aquella generación‖ se contaban
varios hermanos de José que nacieron antes que él, algunos de los cuales incluso continuaron
viviendo tras la muerte de José (Gén. 50:24). ―Aquella generación‖ también incluía a otras
personas que, como Benjamín, nacieron después que José y quizá siguieron viviendo después
que él murió.
De modo que cuando el término generación se refiere a las personas que viven en un período
particular, no puede calcularse la duración exacta de este. Lo único que puede decirse es que
tal período tiene un fin y que su duración no es excesivamente larga. Por lo tanto, al emplear la
expresión ―esta generación‖, como se registra en Mateo 24:34, Jesús no dio a sus discípulos
una fórmula para calcular cuándo acabarían ―los últimos días‖. De hecho, justo después les
recalcó que no sabrían ―aquel día y hora‖ (2 Tim. 3:1; Mat. 24:36).
Puede comprobarse el significado de parousía contrastando la ―presencia‖ y la ―ausencia‖ del
apóstol Pablo tanto en 2 Corintios 10:10, 11 como en Filipenses 2:12. Para un examen más
detallado, véase la obra Perspicacia para comprender las Escrituras, vol. 2, págs. 710-713.
Véase La Atalaya del 1 de noviembre de 1995, págs. 11-15, 19, 30, 31.
El período en que vive ―esta generación‖ parece corresponder al período en que se cumple la
primera visión del libro de Revelación (Rev. 1:10–3:22). Este aspecto del día del Señor se
extiende desde 1914 hasta que el último de los ungidos fieles muera y sea resucitado (véase
el libro Apocalipsis... ¡se acerca su magnífica culminación!, pág. 24, párr. 4).
*** w01 15/12 Un remedio práctico contra las tensiones de la vida ***
*** w78 15/6 págs. 29-31 El Sermón del Monte... Sus antecedentes y
marco de circunstancias ***
EL Sermón del Monte es el más famoso sermón que se ha predicado. Frases de él se hallan en
el corazón y en los labios de centenares de millones de personas por toda la Tierra. ¿Tiene
este discurso de Jesucristo, que se presentó hace casi 2.000 años, un mensaje para la gente
de hoy?
Bueno, ¿se está esforzando todavía la gente por hallar felicidad? ¿Necesitan todavía los seres
humanos principios rectos como guía para saber comportarse unos con otros? ¿Hay hoy día
personas que deseen saber lo que Dios requiere en el sentido de adoración aceptable?
Los individuos que desean información verídica sobre estos asuntos abundan más que nunca.
Puesto que éstas son las mismísimas cosas que se consideraron en el Sermón del Monte, el
sermón está tan al día en el siglo veinte como lo estuvo cuando se pronunció. Por lo tanto, será
provechoso para nosotros examinar lo que Jesús dijo en ese famoso sermón.
Pero antes de que hagamos eso, demos un vistazo a los antecedentes y el marco de
circunstancias de este gran discurso.
DOS RELATOS ARMONIOSOS
Parece que el Sermón del Monte se presenta en dos relatos del Evangelio. (Mateo, capítulos 5-
7; Lucas 6:20-49) El relato del sermón por Lucas equivale en tamaño a una cuarta parte del
tamaño del relato que da Mateo. Solo cinco versículos y medio de la presentación de Lucas
no aparecen en la de Mateo. Cuando los dos relatos corren paralelos, a menudo difieren
considerablemente en cuanto a fraseología. ¿Debería hacer esto que surgieran dudas en
cuanto a la autenticidad del sermón según aparece en nuestras Biblias?
Tocante a una objeción que surge del hecho de que Lucas omite grandes porciones del sermón
según aparece en Mateo, A. T. Robertson escribe en A Harmony of the Gospels for Students of
the Life of Christ (Una armonía de los Evangelios para estudiantes de la vida de Cristo): ―Esto
deja fuera de consideración a las varias porciones grandes del mismo asunto que Lucas ha
colocado en otras partes, o que Jesús repitió en otras ocasiones ([compare] Mat. 6:9-13 con
Luc. 11:2-4; Mat. 6:25-34 con Luc. 12:22-31). A menudo Jesús repitió sus dichos en otras
ocasiones como lo hacen y deberían hacer todos los maestros. . . . Tampoco debe
sorprendernos el que Lucas, escribiendo por lo general para todos los cristianos, omita
porciones grandes de a principios del sermón que eran especialmente para judíos (vea Mat.
5:17-27; 6:1-18).‖ Luego agrega Robertson:
―Además, para contrarrestar estas variaciones, que pueden ser explicadas, se debe recordar
que los dos discursos principian del mismo modo y terminan del mismo modo, que tienen una
similitud general en el orden de las diferentes partes, y que muestran una semejanza general y
a menudo absoluta identidad de expresión.‖
JESÚS abrió su Sermón del Monte con una serie de nueve declaraciones que describen a las
personas que son verdaderamente felices. En la primera de estas ―felicidades,‖ Jesús dijo:
―Felices son los que están conscientes de su necesidad espiritual, puesto que a ellos pertenece
el reino de los cielos.‖—Mat. 5:3, NM; Versión Popular.
―Los que están conscientes de su necesidad espiritual‖ son, según el griego literal de Mateo,
personas ―pobres [en cuanto] al espíritu.‖ El relato paralelo de Lucas informa que Jesús dijo:
―Felices son ustedes, los pobres, porque de ustedes es el reino de Dios.‖ (Luc. 6:20) Jesús
señaló que una razón importante para su venida como Mesías era ―declarar buenas nuevas a
los pobres.‖ (Luc. 4:18) Esto no indica ningún mérito especial en ser pobre o que los pobres
tengan automáticamente el favor de Dios. Pero los que siguieron a Jesús, personas a quienes
se había dado la esperanza de participar en las bendiciones del reino de Dios, fueron
principalmente sacados de entre la gente pobre o común. (1 Cor. 1:26-29; Sant. 2:5) Estas
personas oprimidas se reconocían como pobres ―en cuanto al espíritu‖ (espiritualmente)
también. En vez de sucumbir a la amargura debido a las circunstancias exteriores, llegaron a
estar ―conscientes de su necesidad espiritual,‖ más cabalmente al tanto del hecho de que
dependían de Dios.
En contraste, Jesús declaró: ―Mas ay de ustedes los ricos, porque ya disfrutan de su
consolación completa.‖ (Luc. 6:24) Muchas veces la riqueza material embota el sentido de
necesidad espiritual. Un ejemplo de esto se puede ver en las palabras de reprensión de Jesús
a ciertos cristianos de Laodicea, Asia Menor: ―Dices: ‗Soy rico y he adquirido riquezas y
no necesito absolutamente nada,‘ mas no sabes [es decir, no estás consciente de que
espiritualmente] eres desdichado y lastimoso y pobre y ciego y desnudo.‖—Rev. 3:17.
La razón por la cual deben sentirse felices los que están conscientes de su necesidad espiritual
es que ―a ellos pertenece el reino de los cielos.‖ Ellos aceptaron a Jesús como el Mesías, y
esto les presentó oportunidades de gobernar con él en el reino celestial de Dios por medio de
Cristo. (Luc. 22:30; Juan 14:1-4) ¡Cómo debió haber alentado el corazón de la humilde ―gente
común‖ aprender que podían estar encaminados hacia el reino de Dios, mientras que las
personas ricas y bien educadas que confiaban en su riqueza y que consideraban a la gente
común como ‗maldita‘ no lo estaban! (Juan 7:49) Por supuesto, personas acaudaladas
pudieran manifestar el mismo espíritu de humildad y aprecio espiritual que les haría obtener
felicidad también.—1 Tim. 6:17-19; Sant. 1:9, 10.
¿QUIÉNES SON LOS QUE SE LAMENTAN QUE SERÁN CONSOLADOS?
La segunda ―felicidad‖ que Jesús declaró fue: ―Felices son los que se lamentan, puesto que
ellos serán consolados.‖ (Mat. 5:4) El relato paralelo por Lucas dice: ―Felices son ustedes los
que lloran ahora, porque reirán.‖—Luc. 6:21.
―Los que se lamentan‖ no son todas las personas que expresan tristeza. Más bien, éstos
pertenecen a la misma clase de personas que ―los que están conscientes de su necesidad
espiritual‖ a las cuales se menciona en la declaración anterior de Jesús. Su lamentación es una
―tristeza de manera piadosa‖ debido a su propio estado pecaminoso y las circunstancias
aflictivas. que han sido el resultado de la pecaminosidad humana. (1 Cor. 5:2; 2 Cor. 7:10) Ellos
escuchan el consejo del escritor bíblico Santiago: ―Acérquense a Dios, y él se acercará a
ustedes. Límpiense las manos, pecadores, y purifiquen su corazón, indecisos. Sientan la
desdicha y laméntense y lloren.‖—Sant. 4:8, 9.
Estos lamentadores piadosos ―serán consolados.‖ (Compare con Lucas 2:25.) Entre los
consuelos que vienen por medio de Jesucristo están el perdón de pecados y la vida eterna.
A los lamentadores a quienes se refirió Jesús se les puede llamar ―felices‖ tanto ahora como en
el futuro. Porque ejercen fe en Jesús, disfrutan del bienestar que proviene de una relación
favorable con Jehová Dios. (Juan 3:36) En cuanto a la felicidad futura, los que ahora se
lamentan debido a la injusticia de la humanidad pueden esperar ‗alivio al tiempo de la
revelación del Señor Jesús desde el cielo con sus poderosos ángeles en fuego llameante, al
traer él venganza sobre los que no conocen a Dios y sobre los que no obedecen las buenas
nuevas acerca de nuestro Señor Jesús.‘—2 Tes. 1:7, 8.
En contraste con la felicidad que se pronuncia sobre los que se lamentan, Jesús declaró: ―Ay,
ustedes que ríen ahora, porque se lamentarán y llorarán.‖ (Luc. 6:25) Esto no condena la risa
ni el divertirse. Obviamente Jesús se estaba refiriendo a los buscadores de placeres cuyas
vidas están dedicadas a sus propias comodidades. Estos ni se lamentan por su condición
pecaminosa heredada ni se conduelen por el sufrimiento de sus congéneres. Esos individuos
buscan sus propias ―comodidades‖ en una vida en que buscan su propia satisfacción y los
placeres pasajeros que esa vida puede ofrecer.
Jesús dio énfasis a que la risa frívola de éstos está limitada solo a ―ahora.‖ Esos individuos ―se
lamentarán y llorarán‖ cuando Dios ponga fin al sistema de cosas actual que ha suministrado
las ocasiones para la hilaridad y la alegría de ellos. (Mat. 13:42, 50; 22:13; 24:51; 25:30) En
armonía con las palabras de Jesús, Santiago amonesta: ―Que su risa se torne en lamento, y su
gozo en desaliento. Humíllense a los ojos de Jehová, y él los ensalzará.‖—Sant. 4:9, 10; 5:1-6.
FELICIDADES PARA LOS ―DE GENIO APACIBLE‖
Después Jesús dijo: ―Felices son los de genio apacible, puesto que ellos heredarán la tierra.‖
(Mat. 5:5) ¿A qué clase de personas se refirió?
En las Escrituras el término para ‗apacibilidad de genio,‘ o ―mansedumbre,‖ no sugiere
cobardía, debilidad ni un disfraz de delicadeza condescendiente, hipócrita. Al contrario, la
mansedumbre es una cualidad interior de apacibilidad y sosiego que la gente ejerce ante todo
en su relación con Dios, en su respuesta a Su voluntad y guía. Los individuos realmente
mansos, en vez de amargarse ante la extensa opresión e injusticia que hay en la Tierra,
disciernen que estos ayes se deben en gran medida a la imperfección humana. Para con Dios
no sienten amargura, sino un sentido intenso de dependencia. Esta disposición mental, a su
vez, se refleja en comportarse para con sus congéneres en armonía con este consejo:
―No devuelvan mal por mal a nadie. . . . Si es posible, en cuanto dependa de ustedes, sean
pacíficos con todos los hombres.‖—Rom. 12:17-19; Tito 3:1, 2.
La felicidad de estas personas de genio apacible se debe a que ―heredarán la tierra.‖ ¿Cómo
se realiza eso? Jesús, quien en sentido perfecto era ―de genio apacible y humilde de corazón,‖
es el principal Heredero de la Tierra. (Sal. 2:8; Mat. 11:29; 28:18; Heb. 1:2; 2:5-9) Las
Escrituras Hebreas predijeron que el ―hijo del hombre‖ tendría quienes estuvieran asociados
con él en la gobernación en su reino celestial. (Dan. 7:13, 14, 22, 27) Como ―coherederos con
Cristo,‖ los de genio apacible participarán en la herencia de la Tierra perteneciente a Jesús.
(Rom. 8:17) Además, en la región o esfera terrestre del reino de Jesús muchas otras personas
que por sus cualidades son ‗como ovejas‘ entrarán en la vida eterna. (Mat. 25:33, 34, 46)
¡Ciertamente una expectativa de felicidad!
*** w78 15/7 págs. 8-10 El Sermón del Monte... Las felicidades 4 y 5 ***
COMO cuarta ‗felicidad‘ de su Sermón del Monte, Jesús declaró: ―Felices son los que tienen
hambre y sed de justicia, puesto que ellos serán saciados.‖ (Mat. 5:6) El relato que Lucas da de
esta declaración dice: ―Felices son ustedes los que tienen hambre ahora, porque serán
saciados.‖—Luc. 6:21.
Si uno considerara solamente el Evangelio de Lucas pudiera pensar que Jesús habló
exclusivamente de personas que tenían hambre de alimento material. Sin embargo, Mateo
muestra claramente que él se refería a los que tenían un intenso deseo de justicia. Sin
embargo, estos dos pensamientos armonizan. Con frecuencia las personas que carecen de
alimento y bebida literales están más intensamente al tanto de la extensa injusticia que hay en
el sistema de cosas actual. Por eso, su hambre o deseo de ver que reine la justicia puede ser,
a ese grado, más apremiante.
La ―justicia‖ de la cual Jesús habló significa la calidad de corrección que está en plena
conformidad con la voluntad y los mandamientos de Dios. El salmista, expresando un
pensamiento similar al de Jesús, dijo que él estaba ‗aplastado de ansiar‘ las rectas decisiones
judiciales de Dios.—Sal. 119:20; compare con Isaías 26:9, 10.
En contraste con esta declaración formal de felicidad, Jesús declaró: ―Ay de ustedes los que
están saciados ahora, porque padecerán hambre.‖ (Luc. 6:25) Los que ahora están ―saciados‖
se sienten satisfechos con lo que este mundo ofrece. Aunque quizás aleguen que creen en
Dios, ni reconocen la gran necesidad que tienen de él ni ansían sus normas de justicia. (Rev.
3:17) Sin embargo, es posible que tiempos de calamidad despierten momentáneamente tal
hambre de guía divina. Esto será especialmente cierto cuando Dios ponga fin al sistema de
cosas actual en la venidera ―grande tribulación.‖ (Mat. 24:21; Rev. 7:14) Esas personas que
anteriormente se han sentido complacidas ―padecerán hambre‖ entonces. No se prestará
atención a sus gritos desesperados a Dios para que les dé ayuda y dirección. (Compare con
1 Samuel 28:4-6; Salmo 18:41; Proverbios 1:28-32.) En cuanto a escuchar la palabra de
Jehová, en aquel tiempo experimentarán ‗hambre y sed‘ sin esperanza.—Amós 8:11, 12.
Pero Jesús declara ―felices‖ a los que tienen hambre y sed de justicia ahora. ¿Por qué? Porque
―serán saciados,‖ es decir, plenamente satisfechos. Jesús mismo contribuyó mucho a esto.
Mientras denunciaba la hipocresía de la falsa piedad de los líderes religiosos ―que confiaban en
sí mismos de que eran justos,‖ Jesús enseñó que todos los que admitían su estado
pecaminoso y con arrepentimiento buscaban perdón podían alcanzar una posición de justos
delante de Dios.—Luc. 18:9-14; compare con Mateo 5:20; 23:23, 24.
Más satisfacción del hambre y la sed de justicia se hizo posible por la muerte y resurrección de
Jesús. Acerca de esto leemos: ―Porque todos han pecado y no alcanzan a la gloria de Dios, y
es como don gratuito que por su bondad inmerecida se les está declarando justos mediante la
liberación por el rescate pagado por Cristo Jesús.‖—Rom. 3:23, 24; compare con Isaías 53:11;
Daniel 9:24-27; Revelación 7:9, 14.
Se hizo posible ‗saciar‘ más esta hambre y sed vital después del Pentecostés de 33 E.C.,
porque entonces el espíritu santo empezó a ‗dar al mundo evidencia convincente respecto a la
justicia.‘ (Juan 16:8) Esto se hizo realidad cuando el espíritu de Dios fue responsable por la
producción de las Escrituras Griegas Cristianas, un instrumento indispensable ―para disciplinar
en justicia.‖ (2 Tim. 3:16) La misma fuerza activa de Dios permite a las personas ponerse la
―nueva personalidad,‖ que donde antes estaban las prácticas inicuas y la hipocresía coloca la
―verdadera justicia.‖ (Efe. 4:24) Se experimentará una satisfacción final y completa del hambre
y sed de justicia cuando los adoradores fieles de Dios obtengan vida eterna bajo condiciones
de justicia perfecta.—2 Ped. 3:13; Rev. 21:1-5.
JESÚS declaró la ‗felicidad‘ número seis de su Sermón del Monte como sigue: ―Felices son los
de corazón puro, puesto que ellos verán a Dios.‖—Mat. 5:8.
―Los de corazón puro‖ son personas interiormente limpias. Su pureza es una pureza de afectos,
deseos, aprecio y motivos. Esto está en marcado contraste con lo que es limpieza simplemente
externa o ceremonial. (Mat. 23:25-28; Mar. 7:3, 4) En vez de dar realce a los despliegues
externos de piedad, las Escrituras animan a uno a desplegar ―amor procedente de un corazón
limpio y de una buena conciencia y de fe sin hipocresía.‖—1 Tim. 1:5.
Los de corazón puro disfrutan de felicidad especialmente porque ―verán a Dios.‖ Esto
no significa necesariamente un ver literal con el ojo humano, porque ‗ningún hombre puede ver
a Dios y todavía vivir.‘ (Éxo. 33:20; Juan 1:18; 1 Juan 4:12) Pero hay otras maneras en las
cuales los adoradores que tienen motivo correcto en la Tierra pueden ‗ver a Dios‘ en la
actualidad. Por ejemplo, el observar que Dios actúa a favor de uno debido a la integridad que
uno despliega es una manera de ‗contemplar a Dios.‘ (Job 19:26; 42:5) Las visitas al templo de
Jerusalén para adorar se describen como ir a ―ver el rostro de Jehová,‖ o presentarse uno
delante de él.—Éxo. 34:24; Deu. 31:11; Isa. 1:12.
La palabra griega que Mateo usa para ‗ver‘ también significa ―ver con la mente, percibir,
conocer.‖ Puesto que Jesús reflejaba perfectamente la personalidad de Dios, podía decir: ―El
que me ha visto a mí ha visto al Padre también.‖ (Juan 14:7-9) Los de corazón puro que
aceptaron a Jesús como Mesías y le escucharon obtuvieron una profunda percepción de la
personalidad de Dios. Al ejercer fe en el sacrificio expiador de pecados de Jesús obtuvieron
perdón de pecados y una relación con Dios y pudieron rendir adoración aceptable delante de
su trono. (Efe. 1:7) El ver a Dios en este sentido alcanzará su culminación para los cristianos
ungidos por espíritu cuando lleguen al cielo, porque allí realmente verán a Dios y Cristo.—
1 Juan 3:2; 2 Cor. 1:21, 22.
Sin embargo, la oportunidad de ver a Dios por medio de conocimiento exacto y adoración
verdadera es solo para los de corazón puro. Las Escrituras muestran que los que practican el
pecado no han visto a Dios y su hijo ni llegan a conocerlos. ―El que hace el mal no ha visto a
Dios.‖—1 Juan 3:6; 3 Juan 11; Sal. 24:3, 4.
DESPUÉS de las nueve ‗felicidades‘ de su Sermón del Monte, Jesús hizo un comentario en
cuanto a cómo afectarían a la humanidad sus seguidores. Dijo: ―Ustedes son la sal de la
tierra.‖—Mat. 5:13, compare con Mar. 9:50; Luc. 14:34, 35.
La sal era cosa bien conocida a los que escuchaban a Jesús. Servía tanto para dar mejor sabor
al alimento como para preservarlo de corromperse. Patentemente porque la sal representaba
libertad de corrupción o decadencia, Dios ordenó que la sal acompañara ―toda ofrenda‖ que se
hiciera sobre su altar. (Lev. 2:13) En los días de Jesús los sacerdotes que desempeñaban sus
funciones en el templo de Jehová en Jerusalén salaban las ofrendas animales, de grano y de
incienso que se presentaban sobre el altar de la ofrenda quemada. La historia judía dice que
con este fin había un enorme montón de sal cerca de la subida plana que conducía al altar. En
la zona del templo había un gran almacén, conocido como ―la cámara de la sal,‖ para asegurar
un suministro amplio.
Los discípulos de Jesús habían de ser ―la sal de la tierra.‖ Esto sería cierto tanto en sus
actividades de testificar a otros acerca del reino de Dios como en su conducta personal. El
testificar cristiano ha resultado en que muchas personas acepten a Jesús como el Mesías
prometido y ejerzan fe en su sacrificio que hace expiación por los pecados. Esto ha presentado
a esos creyentes la oportunidad de ver sus vidas preservadas para la eternidad. (Juan 6:47;
Rom. 10:13-15) Además, por influir en la gente y llevarla así a vivir según los principios bíblicos,
los seguidores de Jesús demoran el aumento de la decadencia moral y espiritual en la
sociedad humana.
Sin embargo, Jesús añadió una nota de advertencia, al decir: ―Si la sal pierde su fuerza, ¿cómo
se le restaurará su salinidad? Ya no sirve para nada, sino para echarla fuera para que los
hombres la pisoteen.‖ El comentador bíblico Albert Barnes hace notar que, a diferencia de la sal
común de mesa (cloruro de sodio), la sal con la cual estaban familiarizados Jesús y sus
contemporáneos ―era impura, mezclada con sustancias vegetales y de la tierra; de modo que
pudiera perder toda su salinidad, y todavía quedar una cantidad considerable de materia
terrestre. Esto no servía para nada, excepto que se usaba, como se dice, para colocarlo en
sendas, o paseos, tal como nosotros usamos la grava.‖
Los cristianos tienen que tener cuidado para no descontinuar sus esfuerzos de compartir las
―buenas nuevas‖ del reino de Dios con su prójimo. (Mar. 13:10) Además, deben vigilar para
no caer en patrones o modelos de conducta que no armonicen con las pautas bíblicas. De otro
modo, sufrirán deterioro en sentido espiritual y llegarán a ser como sal dañada —insípida, sin
sabor, sin gusto— que ya no sirve para nada.—Compare con Hebreos 6:4-8; 10:26-29.
LUZ QUE BRILLA PARA LA GLORIA DE DIOS
Dando otra indicación del efecto beneficioso que tendrían sus seguidores en la humanidad,
Jesús dijo: ―Ustedes son la luz del mundo.‖—Mat. 5:14.
De la Palabra inspirada de Dios, especialmente de las enseñanzas y ejemplo de Jesucristo,
viene luz espiritual que ayuda a las personas a ver las cosas como Dios las ve. (Pro. 6:23; Isa.
51:4; Mat. 4:16; Luc. 1:79; 2:32; Juan 1:4-9; 3:19-21; 8:12; 9:5) Por sus actividades de
testificación pública, los discípulos de Jesús iluminan a la gente con relación a la condición
pecaminosa de la humanidad, el propósito de Dios de remover el pecado por medio de
Jesucristo, y su arreglo del Reino para bendecir con vida eterna a todos los que ejercen fe en
Jesús.—Juan 3:16, 36; Rom. 3:23, 24.
Pero el ser ―la luz del mundo‖ envuelve más que eso. El apóstol Pablo escribe: ―Sigan andando
como hijos de luz, porque el fruto de la luz consiste en toda clase de bondad y justicia y
verdad.‖ (Efe. 5:3-9) Los cristianos deben ser ejemplos brillantes de conducta que concuerde
con los principios bíblicos.
Respecto a sus discípulos como portadores de luz, Jesús declaró además: ―No se puede
esconder una ciudad cuando está situada sobre una montaña. No se enciende una lámpara y
se pone debajo de la cesta de medir, sino sobre el candelero, y alumbra a todos los que están
en la casa.‖—Mat. 5:14, 15.
Una ‗ciudad situada sobre una montaña‘ se vería con facilidad, hasta desde considerable
distancia. De manera similar, a las personas que imitan a Jesucristo se les reconoce fácilmente
como un pueblo ―celoso de obras excelentes.‖ (Tito 2:14) Sus esfuerzos por manifestar
cualidades de devoción piadosa tales como las de moderación, castidad, diligencia en el
trabajo, habla sana y unidad familiar impresionan favorablemente a otras personas. (Tito 2:1-
12) Ellos también están resueltos a ‗no ser parte del mundo,‘ no participar en su política, ni en
su guerrear y modo inmoral de vivir. (Juan 15:19; 17:14-16) A veces esto hace que otros se
mofen de los cristianos concienzudos y los persigan.—Mat. 24:9; 1 Ped. 4:4.
Con buena razón, por lo tanto, Jesús añade que la gente pone una lámpara, ―no debajo de la
cesta de medir [griego, modios, con capacidad de dos galones],‖ sino ―sobre el candelero,‖
donde puede iluminar una habitación entera. Los seguidores de Jesús no deben permitir que la
oposición del mundo los lleve a esconderse o a mantener para sí las verdades que han llegado
a conocer acerca de Dios. Tampoco pueden ellos adoptar la práctica de conducta que
no concuerde con los principios bíblicos, porque, aun si las personas que hicieran eso
continuaran proclamando celosamente la verdad bíblica, sus acciones arrojarían sombra sobre
el valor de ésta.—2 Ped. 2:2.
Con referencia a una lámpara que brillara sobre un candelero, Jesús después declaró: ―Así
mismo resplandezca la luz de ustedes delante de los hombres, para que vean sus obras
excelentes y den gloria a su Padre que está en los cielos.‖ (Mat. 5:16) ¡Qué poderosa razón
para continuar ‗resplandeciendo como iluminadores en el mundo‘! (Fili. 2:15) Al observar las
―obras excelentes‖ del cristiano, las personas pueden percibir la excelencia del Dios de ellos.
Con frecuencia, esos observadores se sienten movidos a ‗dar gloria‘ a Dios por medio de llegar
a ser sus adoradores también. Por eso, el apóstol Pedro dio esta amonestación: ―Mantengan
excelente su conducta entre las naciones, para que, en la cosa en que hablen contra ustedes
como de malhechores, ellos, como resultado de las obras excelentes de ustedes de las cuales
ellos son testigos oculares, glorifiquen a Dios en el día para la inspección por él.‖—1 Ped. 2:12.
*** w78 1/9 págs. 29-31 El Sermón del Monte... ―No vine a destruir, sino a cumplir‖ ***
EN EL Sermón del Monte, Jesús expresó profundo amor y respeto a la Palabra escrita de Dios.
Dijo: ―No piensen que vine a destruir la Ley o los Profetas [es decir, las Escrituras Hebreas en
conjunto]. No vine a destruir, sino a cumplir.‖—Mat. 5:17.
Tanto en palabra como en hechos Jesús mostró que era diferente de los maestros religiosos
judíos de su día. Él habló de un tiempo en el cual la gente ya no adoraría a Dios en el templo
de Jerusalén. (Juan 4:21) Comparó su enseñanza a ―vino nuevo‖ al que no podrían contener
―odres viejos.‖ (Luc. 5:37) Jesús también comía con ―recaudadores de impuestos y pecadores‖
y ejecutaba milagros de curación en el día sabático semanal. (Mar. 2:13-17; 3:1-5) Este
comportamiento no violaba ninguna ley de Dios; pero sí iba en oposición a tradiciones judías
que se consideraban de mayor importancia que las Escrituras Hebreas. Los fariseos y los
seguidores de Herodes, puesto que veían a Jesús como transgresor de la ley de Dios, habían
proyectado matarlo aun antes de que él pronunciara su famoso Sermón del Monte.—Mar. 3:6.
Sin embargo, el Hijo de Dios aseguró a los que le escuchaban que él no había venido ―a
destruir‖ la Ley. Ni desobedecía sus mandamientos ni declaraba que parte alguna de ella
no fuera obligatoria para los israelitas. En vez de eso, Jesús vino ―a cumplir‖ aquella legislación
divina. Como persona sin pecado, la guardó perfectamente, ―hasta la muerte, sí, muerte en un
madero de tormento.‖ (Fili. 2:8; Heb. 4:15; 1 Ped. 2:22) Su muerte de sacrificio también cumplió
tipos proféticos que habían sido suministrados por el sistema de sacrificios animales de la
Ley.—Dan. 9:26, 27; Heb. 10:1-9.
Jesús cumplió, no solo la letra de la Ley, sino también el espíritu que había detrás de aquella
Ley. Mientras que la Ley prohibía actos pecaminosos, Jesús denunció las actitudes que
mueven a tales actos. Por ejemplo, el asesinato y el adulterio eran violaciones de la ley de
Dios; pero Jesús mostró que el continuar enojado con alguien y mirar a una mujer con lascivia
son las disposiciones mentales que llevan a tales transgresiones. (Mat. 5:21, 22, 27, 28; Sant.
1:13-15) Además, el que Jesús sacrificara voluntariamente su vida humana para el beneficio de
la humanidad fue un despliegue superlativo de amor, a lo que la Biblia llama ―el cumplimiento
de la ley.‖—Rom. 13:8-10; compare con Juan 15:13.
Después, en su sermón, Jesús declaró: ―En verdad les digo que antes pasarían el cielo y la
tierra que pasar de modo alguno una letra diminuta o una pizca de una letra de la Ley sin que
sucedan todas las cosas.‖—Mat. 5:18.
Como se muestra en The Kingdom Interlinear Translation, Jesús aquí usó la palabra ―Amén,‖
que significa ―en verdad,‖ ―así sea.‖ En su posición de Hijo ungido de Dios, el Mesías
prometido, él ciertamente podía dar seguridad de que las cosas que decía eran verdad.—
Compare con 2 Corintios 1:20; Revelación 3:14.
El cumplimiento de la ley de Dios llegaría hasta la ―letra diminuta o una pizca de una letra.‖ En
el alfabeto hebreo entonces corriente, la letra diminuta era yod ()י. Ciertas letras hebreas
llevaban un trazo diminuto, o ápice o ―tilde.‖ Los escribas y fariseos consideraban muy
significantes, no solo las palabras y letras de la ley de Dios, sino también estos trazos o ‗pizcas
diminutas.‘ Una leyenda rabínica pone en boca de Dios estas palabras: ―Salomón y miles como
él pasarán, pero no permitiré que una tilde tuya (de la Tora [el Pentateuco]) sea erradicada.‖
Tan remota era la posibilidad de que dejara de cumplirse siquiera el detalle más minúsculo de
la ley de Dios que ―antes pasarían el cielo y la tierra.‖ Esto era equivalente a decir ―nunca,‖
porque las Escrituras indican que los cielos y la Tierra literales permanecerán para siempre.—
Sal. 78:69; 119:90.
Jesús dio más énfasis a lo mucho que estimaba la ley de Dios al decir: ―Cualquiera, pues, que
quiebre uno de estos mandamientos más pequeños y enseñe así a la humanidad, será llamado
‗más pequeño‘ con relación al reino de los cielos. En cuanto a cualquiera que los haga y los
enseñe, éste será llamado ‗grande‘ con relación al reino de los cielos.‖—Mat. 5:19.
Uno pudiera ‗quebrar‘ uno de los mandamientos por medio de desobedecerlo
voluntariosamente. O pudiera hacer lo que se consideraba como peor que eso, a saber,
enseñar a compañeros judíos que estaban sujetos a la Ley que algunos de sus mandamientos
no eran obligatorios. Mientras el pacto de la Ley estaba en vigor, era una expresión de la
voluntad de Dios para su pueblo. La transgresión o el enseñar cosas contrarias a los
mandamientos que algunos quizás hubieran considerado hasta ‗más pequeños‘ en importancia
sería apostasía contra Dios.—Compare con Santiago 2:10, 11.
La Ley se dio para llevar a los israelitas al Mesías, quien sería el gobernante principal en el
reino de Dios. (Gál. 3:24; Isa. 11:1-5; Dan. 7:13, 14) Por eso, en lo que se refiere a entrar en el
reino de Dios, a las personas que quebraran los mandamientos de Dios se les ‗llamaría ―más
pequeñas.‖‘ No entrarían de ninguna manera en el reino.—Mat. 21:43; Luc. 13:28.
Por otra parte, a los que observaran la ley mosaica en la medida de su capacidad se les
‗llamaría ―grandes‖ con relación al reino de los cielos.‘ Serían como las personas que aceptaron
a Jesús como el Mesías y a quienes con el tiempo se llamó a participar en la gobernación con
él en el Reino. (Luc. 22:28-30; Rom. 8:16, 17) Es interesante el hecho de que las Escrituras
llaman ―grandes‖ a los miembros de la realeza.—Pro. 25:6; Luc. 1:32.
Jesús después hace una declaración que puede haber sorprendido a los que le oían: ―Les digo
a ustedes que si su justicia no abunda más que la de los escribas y los fariseos, de ningún
modo entrarán en el reino de los cielos.‖—Mat. 5:20.
Los ―escribas‖ del día de Jesús eran una clase de hombres especialmente instruidos en la Ley.
Aunque algunos de ellos quizás hayan pertenecido al grupo de los saduceos, muchos escribas
eran de la ―secta‖ de los fariseos, cuyas exigencias con referencia a limpieza ceremonial, el
pago de diezmos y otros deberes religiosos iban más allá de los requisitos mosaicos.—Hech.
15:5.
Aquellos líderes religiosos tenían un punto de vista estrecho y legalista acerca de la obtención
de la justicia. Creían que ésta venía solamente de hechos que literalmente se conformaran a la
letra de la ley. Según la tradición judía, cada vez que un individuo observaba un mandamiento
ganaba ―mérito.‖ Se creía que toda transgresión incurría en ―deuda.‖ Se entendía que un
exceso de méritos hacía que la persona fuera ―justa,‖ mientras que una gran abundancia de
deudas la hacía ―inicua.‖
Sin embargo, ese punto de vista legalista quedaba muy lejos de la norma de lo correcto de
Dios. (Rom. 10:2, 3) Se daba poca atención al desarrollo de cualidades como el amor, la
justicia, la mansedumbre, la bondad y la fidelidad. Sin embargo, Dios considera a éstas más
importantes que la observación literal de preceptos legales. (Deu. 6:5; Lev. 19:18; Miq. 6:8) Con
buena razón exclamó Jesús: ―¡Ay de ustedes, escribas y fariseos, hipócritas! porque dan el
décimo de la hierbabuena y del eneldo y del comino, pero han desatendido los asuntos de más
peso de la Ley, a saber, la justicia y la misericordia y la fidelidad.‖—Mat. 23:23; compare con
Luc. 11:42.
La justicia cristiana tendría que ‗abundar más que la de los escribas y fariseos.‘ Según Jesús,
todos los que desean ser adoradores verdaderos de Dios tienen que ‗adorar al Padre con
espíritu y con verdad.‘ (Juan 4:23, 24) Su adoración tiene que ser, no simplemente actos
externos de piedad en armonía con un código legal, sino ―con espíritu,‖ motivada de corazones
que estén llenos de fe y amor.—Mat. 22:37-40; Gál. 2:16.
[Nota]
El código antiguo de la ley judía conocido como la Mishnah declara: ―Mayor rigor aplica a [la
observancia de] las palabras de los Escribas que a [la observancia] de las palabras de la Ley
[escrita].‖—Tratado Sanhedrin, 11:3, traducido al inglés por Herbert Danby.
*** w78 15/9 págs. 29-31 El Sermón del Monte...***
La cólera prolongada puede ser mortífera
DESPUÉS de declarar que había venido, no a destruir, sino a cumplir la ley de Dios, Jesús
enlazó la cólera prolongada con el asesinato. Empezó con estas palabras: ―Oyeron que se dijo
a los de la antigüedad: ‗No debes asesinar; pero quienquiera que cometa un asesinato será
responsable al tribunal de justicia.‘‖—Mat. 5:21.
La frase ―Oyeron que se dijo‖ puede referirse tanto a cosas que se declararon en las Escrituras
Hebreas inspiradas como a enseñanzas de la tradición judía. (Mat. 5:21, 27, 33, 38, 43; Juan
12:34) Una ley que describía el asesinato como ofensa capital ciertamente era conocida ―a los
de la antigüedad,‖ es decir, a personas de generaciones anteriores a la del día de Jesús. De
hecho, una ley de esa índole puede hallarse allá en el tiempo de Noé.—Gén. 9:5, 6; Éxo.
20:13; 21:12; Lev. 24:17.
El ser ―responsable al tribunal de justicia‖ significaba ser sentenciado por uno de ―los tribunales
locales‖ (griego, synedria, ―Sanedrines Menores‖) ubicados por toda la tierra de Palestina. (Mat.
10:17; Deu. 16:18) La tradición judía dice que la cantidad de jueces en estos tribunales era
de 23 en ciudades en las cuales había una población de varones adultos de 120 o más. Se
imponía la pena de muerte a las personas convictas de asesinato. Sin embargo, en el tiempo
de Jesús los tribunales judíos tenían que buscar autorización de los oficiales romanos para
imponer la pena capital.—Juan 18:31.
Jesús señaló que Dios puede ver a alguien como merecedor de pena capital, aunque esa
persona realmente no hubiera cometido un asesinato. Hablando con autoridad como quien
había sido enviado directamente por Dios, Jesús declaró: ―Sin embargo, yo les digo que todo el
que continúe airado con su hermano será responsable al tribunal de justicia.‖—Mat. 5:22a.
―Todo el que continúe airado con su hermano,‖ según Jesús, es tan culpable delante de Dios
como el que ha sido convicto de asesinato. Esto se debe a que el permitir que la cólera arda
dentro de uno es realmente odiar al prójimo de uno, y ―todo el que odia a su hermano es
homicida.‖ (1 Juan 3:15) Aunque puede ser que a veces algunos individuos tengan razón para
encolerizarse o indignarse, la ira prolongada contra el hermano o congénere de uno puede ser
mortífera a ambos.—Mar. 3:5; Efe. 4:26; Sant. 1:19, 20.
―Quienquiera que se dirija a su hermano con una palabra execrable de desdén,‖ continuó
Jesús, ―será responsable al Tribunal Supremo.‖ (Mat. 5:22b) ―Una palabra execrable de
desdén‖ vierte la palabra griega raca, que se deriva del hebreo y significa ―seso hueco,‖
―cabeza vacía,‖ ―bobalicón.‖ ¿Cómo ve Dios a la persona que, no solo abriga odio y cólera
asesinos en su corazón, sino que lo expresa con habla de desdén?
Según Jesús, esa persona lleva una medida de culpa comparable a la del que ha sido convicto
y sentenciado a muerte por el ―Tribunal Supremo‖ judío. Ese era el Sanedrín principal que
estaba en Jerusalén, compuesto de ―los principales sacerdotes [los que tenían la
superintendencia de las funciones sacerdotales en el templo] con los ancianos y los escribas.‖
(Mar. 15:1) Este cuerpo legislativo, que, según informes, constaba de 71 jueces, se encargaba
solo de casos de gravedad o complejidad excepcionales y oía las apelaciones que venían de
los tribunales inferiores.
Jesús entonces fue un paso más allá, y dijo: ―Quienquiera que diga: ‗¡Despreciable necio!‘
estará expuesto al Gehena ardiente.‖ (Mat. 5:22c) La palabra griega que se vierte ―despreciable
necio‖ es moré. Un término hebreo de sonido similar (moreh) significa ―rebelde,‖ ―dado a
motines.‖ Mientras que raca sugiere estupidez intelectual, moré designa al que está desprovisto
de valor moral, un apóstata y rebelde contra Dios. En sus Hebrew and Talmudical Exercitations,
(Ensayos hebreos y talmúdicos), John Lightfoot señala: ―‗Raca‘ denota ciertamente
‗displicencia, y liviandad de costumbres y vida:‘ pero ‗necio‘ juzga enconadamente acerca del
estado espiritual y eterno, y decreta al hombre a destrucción segura.‖
Las personas que denunciaron de esa manera a su compañero estarían ‗expuestas al Gehena
ardiente.‘ Aquí Jesús se refiere al valle de Hinón (hebreo: Gei Hinnom) cerca de Jerusalén, que
llegó a ser un basurero donde continuamente ardían fuegos para consumir la basura y los
cuerpos muertos que se arrojaban en él. Según un diccionario griego por Liddell y Scott, en
aquel valle ―se quemaban los cadáveres de los peores malhechores.‖ Si los fuegos del Gehena
no consumían totalmente aquellos cadáveres, los gusanos y cresas que se criaban allí
terminaban aquel trabajo.—Isa. 66:24; Mar. 9:47, 48.
Jesús usó el Gehena como símbolo apropiado de la destrucción eterna. Puesto que la persona
que quisiera condenar a su compañero como ―despreciable necio‖ digno del Gehena estaría
deseando la destrucción eterna para esa persona, desde el punto de vista de Dios el que
pronuncia tal condenación se trae esa severa sentencia a sí mismo.—Compare con
Deuteronomio 19:17-19.
―PRIMERO HAZ LAS PACES CON TU HERMANO‖
Después de advertir a los que le escuchaban acerca de lo mortífero de la cólera prolongada,
Jesús dirigió los pensamientos de ellos hacia arrancar de raíces las causas de la cólera. Dijo:
Si, pues, traes tu don al altar y allí te acuerdas de que tu hermano tiene algo contra ti, deja tu
don allí enfrente del altar, y vete; primero haz las paces con tu hermano, y luego, cuando hayas
vuelto, ofrece tu don.‖—Mat. 5:23, 24.
―Don‖ en este caso quería decir cualquier ofrenda sacrificatoria que alguien presentara en el
templo de Jehová. Los sacrificios animales eran de considerable importancia, pues Dios mandó
que se hicieran como parte de la adoración verdadera. Pero para el que quizás recordara ‗que
su hermano tenía algo contra él,‘ había un asunto de mayor importancia todavía. ―Deja tu don
allí enfrente del altar, y vete,‖ dijo Jesús. ―Primero haz las paces con tu hermano, y luego,
cuando hayas vuelto, ofrece tu don.‖
Esto no tendría que haber sido tan difícil como parece, puesto que el tiempo en que se solía
traer aquellos sacrificios era durante las tres fiestas de temporada de la Pascua, el Pentecostés
y las Cabañas. (Deu. 16:16, 17) Probablemente el hermano ofendido estaría entre los
peregrinos que acudían en grandes cantidades a Jerusalén para estas fiestas.
Uno aquí pudiera recordar el requisito mosaico acerca de las ofrendas de culpa. En casos de
robo, pérdida o engaño con relación a propiedad, la ley de Dios exigía que el culpable
arrepentido restaurara la cantidad completa junto con un 20 por ciento adicional antes de
presentar su ofrenda. (Lev. 6:1-7) Sin embargo, Jesús no limitó sus comentarios a las ofrendas
de culpa y transgresiones específicas. Según el Hijo de Dios, cualquier ofrenda debería
posponerse si uno recordaba que su hermano tenía, con razón, algo contra uno... algo que su
conciencia le dijera que, incorrectamente, uno hubiera hecho o dejado de hacer para con su
hermano; o pudiera ser que uno percibiera, por la actitud de su hermano para con uno, que
había algún sentimiento de ofensa. En tal caso, la ofrenda se debería dejar viva ―allí enfrente
del altar,‖ a saber, el altar de las ofrendas quemadas en el patio o atrio de los sacerdotes en el
templo.
Desde el punto de vista de Dios la relación de uno con sus congéneres es una parte clara,
importante, de la adoración verdadera. Los sacrificios animales, hasta el punto de ―miles de
carneros,‖ no tenían significado para Dios si los que los ofrecían no trataban debidamente a su
congénere. (Miq. 6:6-8) ―Porque el que no ama a su hermano, a quien ha visto, no puede estar
amando a Dios, a quien no ha visto.‖—1 Juan 4:20.
Además, Jesús instó a los que le escuchaban a evitar las demoras en rectificar agravios, al
decir: ―Ocúpate en arreglar prestamente los asuntos con el que se queja contra ti en juicio,
mientras estas con él en camino hacia allá.‖—Mat. 5:25a.
‗Mientras estaba con el que tenía la queja en camino al tribunal‘ el ofensor debería hacer
esfuerzos vigorosos por resolver el asunto fuera del tribunal. Si el ofensor admitiera su error,
expresara dolor e indicara un deseo de hacer la restitución debida, probablemente el que se
quejaba se inclinaría a mostrar misericordia, y quizás hasta concordaría en términos con los
cuales el ofensor pudiera cumplir sin indebida penalidad.
Dando una razón práctica para tal arreglo rápido de los asuntos, Jesús declaró: ―No sea que el
querellante te entregue al juez, y el juez al servidor del tribunal, y seas echado en prisión.‖—
Mat. 5:25b.
Una vez que el caso llegaba al tribunal, si se probaba que el acusado era culpable y no podía
pagar su deuda, el juez pudiera entregarlo a un ―servidor del tribunal.‖ Este oficial, a su vez,
metería en prisión al culpable. ¿Por cuánto tiempo?
―Te digo en verdad,‖ declaró Jesús: ―De seguro que no saldrás de allí hasta que hayas pagado
la última moneda de ínfimo valor.‖ (Mat. 5:26) Según el texto griego de Mateo, el
aprisionamiento continuaría hasta que se pagara el último kodrantes, ―cuadrante,‖ una moneda
que valía la sexagésima cuarta parte del salario que se acostumbraba pagar por día a los que
trabajaban en la agricultura. A menos que alguien viniera y pagara la deuda del prisionero, éste
pudiera permanecer en la cárcel por largo tiempo.
La adoración aceptable tiene que incluir el tratar debidamente al congénere de uno. El apóstol
Pablo aconseja a compañeros de creencia: ―Hagan que esto sea la decisión suya: el no poner
delante de un hermano tropiezo ni causa para dar un traspié.‖ (Rom. 14:13) Si surgiera tal
causa de tropiezo, el cristiano debería recordar las palabras de Jesús y ‗ocuparse en arreglar
prestamente los asuntos.‘ (Mat. 5:25) ―Porque en bondad amorosa me he deleitado,‖ dice
Jehová, ―y no en sacrificio.‖—Ose. 6:6.
[Notas]
Josefo declara que los tribunales locales solo tenían siete jueces, pero cada juez tenía dos
levitas como ayudantes.—Antiquities of the Jews, Libro IV. capítulo VIII, sección 14.
El Theological Dictionary of the New Testament (Diccionario teológico del nuevo testamento)
dice lo siguiente acerca del Sanedrín principal de Jerusalén: ―A la cabeza de este cuerpo, que
se reunía en la boule [cámara del concilio] . . . estaba el sumo sacerdote. Él era el líder del
pueblo judío; solamente él podía presidir en el Sanedrín. Alrededor de él estaban los archiereis
[sacerdotes principales], la aristocracia sacerdotal, simpatizantes de los Saduceos. Por virtud
de su oficio los sacerdotes principales del templo tenían asiento y voz en el Sanedrín y
formaban una facción sólida. Los ancianos eran el segundo grupo. Es verdad que
originalmente a todos los miembros de la gerousia [asamblea de hombres de más edad] se les
llamaba ancianos. Gradualmente, sin embargo, este término adquirió un sentido más
restringido, de modo que solo a líderes de las familias legas influyentes de Jerusalén se les
llamaba presbyteroi [ancianos]. Sin excepción, estos patricios eran, también, saduceos por
creencia. Los fariseos se las arreglaron para entrar en el Alto Consejo en los días de la reina
Alejandra [76-67 a. de la E.C.]. Desde entonces en adelante el poder y la influencia de los
grammateis [escribas] aumentó continuamente en el Sanedrín. En el período romano los
archiereis [sacerdotes principales] todavía eran primeros en rango, pero de hecho no se podían
tomar ni ejecutar decisiones sin que concordaran en ellas los escribas farisaicos.‖
*** w78 1/10 págs. 28-30 El Sermón del Monte... Evitando el adulterio y el divorcio ***
*** w78 15/10 págs. 13-14 El Sermón del Monte... ―No juren de ninguna manera‖ ***
DESPUÉS de considerar el adulterio y el divorcio, Jesús dirigió su Sermón del Monte al tema
de las declaraciones juradas. Dijo: ―Otra vez oyeron ustedes que se dijo a los de la antigüedad:
‗No debes jurar y no cumplir, sino que tienes que pagar tus votos a Jehová.‘‖—Mat. 5:33.
Los judíos que oían a Jesús sabían que, por lo que decía la ley mosaica, sus antepasados
habían oído mucho acerca de hacer declaraciones juradas. A veces, el jurar era obligatorio.
(Éxo. 22:10, 11; Núm. 5:21, 22) Repetidamente la Palabra de Dios da énfasis a la importancia
de cumplir los votos hechos.—Núm. 30:2, 3; Deu. 23:21-23; Ecl. 5:4, 5.
―Sin embargo, yo les digo,‖ continuó Jesús: ―No juren de ninguna manera, ni por el cielo,
porque es el trono de Dios; ni por la tierra, porque es el escabel de sus pies; ni por Jerusalén,
porque es la ciudad del gran Rey. Ni por tu cabeza debes jurar, porque no puedes volver
blanco o negro un solo cabello.‖—Mat. 5:34-36.
¿Era la intención de Jesús abolir todos los juramentos y votos? No, porque la ley de Dios que
mandaba jurar en ciertas ocasiones todavía estaba en vigor. (Gál. 4:4) Cuando estuvo siendo
sometido a juicio delante del sumo sacerdote, Jesús mismo no objetó a que se le pusiera bajo
juramento. (Mat. 26:63, 64) Cuando Jesús dijo que la gente ‗no debe jurar de ninguna manera,‘
se estaba refiriendo a un deterioro y perversión del hacer juramentos. ¿Por qué?
Las declaraciones juradas que se mencionan favorablemente en la Biblia siempre tenían que
ver con asuntos de gran importancia, como decisiones que tenían que ver con la adoración
verdadera, el hacer pactos y testificar en audiencias judiciales. (Gén. 24:2-4, 9; 31:44, 50, 53;
Éxo. 22:10, 11) Sin embargo, con el transcurso del tiempo los judíos llegaron a acostumbrarse
a hacer votos respecto a una amplia variedad de asuntos cotidianos. Por ejemplo, escritos
rabínicos antiguos mencionan el hecho de que algunos individuos hacían el voto de no dormir,
no hablar, no andar y no tener relaciones sexuales con sus esposas. Se hacían muchos votos
por medio del uso de la palabra ―corbán,‖ que significaba ―un don dedicado a Dios.‖ Se creía
que por pronunciar esta palabra la gente podía declarar ciertas cosas tan prohibidas para ella
misma u otras personas como los sacrificios del templo. Respecto a esto, Jesús dijo a los
fariseos:
―Diestramente ponen ustedes a un lado el mandamiento de Dios para retener su tradición. Por
ejemplo, Moisés dijo: ‗Honra a tu padre y a tu madre,‘ y: ‗El que injurie a padre o a madre
termine en muerte.‘ Pero ustedes dicen: ‗Si un hombre le dice a su padre o a su madre: ―Todo
lo que tengo por lo cual pudieras sacar provecho de mí es corbán, (es decir, un don dedicado a
Dios,)‖‘... ya no lo dejan hacer ni una sola cosa por su padre o su madre, y así invalidan la
palabra de Dios por la tradición suya que ustedes transmitieron.‖—Mar. 7:9-13.
También se había corrompido el método de hacer votos. En vez de seguir los ejemplos bíblicos
de hacer declaraciones juradas en el nombre de Dios, se hizo popular el jurar ―por el cielo,‖ ―por
la tierra,‖ ―por Jerusalén‖ y hasta por la ―cabeza‖ (o vida) de otro ser humano. (Deu. 6:13; Dan.
12:7) Entre las autoridades judías había controversia en cuanto a la validez de muchos votos
que se hacían en el nombre de estas cosas creadas. Está claro que ciertas personas pensaban
que podían retirar las declaraciones juradas con impunidad.—Compare con Mateo 23:16-22.
Sin embargo, Jesús mostró que, puesto que el cielo era ―el trono de Dios,‖ la tierra ―el escabel
de sus pies‖ y Jerusalén ―la ciudad del gran Rey,‖ el jurar por estas cosas era lo mismo que
jurar en el nombre de Dios. (Isa. 66:1; Sal. 48:2) De manera similar, el hacer un voto por la
―cabeza,‖ o vida, de alguien era lo mismo que hacer el voto en el nombre de Dios, puesto que
él es el Autor y Sustentador de la vida; y ningún ser humano controla su vida hasta el grado de
―volver blanco o negro un solo cabello.‖—Sal. 36:9.
Después de desanimar el hacer juramentos promiscuamente, Jesús añadió: ―Simplemente
signifique su palabra Sí, Sí, su No, No; porque lo que está en exceso de esto proviene del
inicuo.‖—Mat. 5:37.
El hacer juramentos con frecuencia para añadir credibilidad a lo que se decía se hizo popular
debido a lo mucho que se mentía y engañaba. Sin embargo, Jesús mostró que en la vida
cotidiana un simple Sí o No debería ser completamente digno de confianza y no necesitar que
se le reforzara adicionalmente con declaraciones juradas. Las personas que se ven obligadas a
ir ―en exceso‖ de esto por medio de estar continuamente ‗jurando‘ lo que dicen, revelan que
fundamentalmente no son dignas de confianza. Manifiestan el espíritu del ―inicuo,‖ Satanás el
Diablo, a quien la Biblia llama ―el padre de la mentira.‖—Juan 8:44; Sant. 5:12.
―Siempre que le hagas un voto a Dios, no titubees en pagarlo, porque no hay deleite en los
estúpidos. Lo que prometes en voto, págalo. Mejor es que no hagas voto que el que hagas voto
y no pagues.‖—Ecl. 5:4, 5.
[Nota]
En realidad, tal hombre estaría diciendo a sus padres: ‗En cuanto a ustedes, mi propiedad es
―corbán,‖ un don dedicado a Dios, y ustedes no pueden usarla ni beneficiarse de ella de
ninguna manera.‘ Al decir la palabra ―corbán,‖ la persona no necesariamente dedicaba su
propiedad a Dios. Por lo general la palabra significaba que la persona simplemente estaba
haciéndola como un don dedicado a Dios, de modo que la persona o personas a quienes él
hablaba no la usaran. En Life and Times of Jesus the Messiah (La vida y tiempos de Jesús el
Mesías), Alfred Edersheim escribe: ―No se puede negar que aquellos votos, con relación a los
padres, tendrían poder de obligar, y que en realidad se hacían.‖
*** w78 1/11 págs. 8-10 El Sermón del Monte... ―No resistan al que es inicuo‖ ***
DESPUÉS de considerar los juramentos y votos en su Sermón del Monte, Jesús habló acerca
de cómo tratar con las personas que quizás causen daño y ofensa a otras. Empezó por medio
de señalar a algo que los que le oían habían aprendido de la ley mosaica: ―Oyeron ustedes que
se dijo: ‗Ojo por ojo y diente por diente.‘‖—Mat. 5:38; compare con Éxodo 21:23-25; Levítico
24:19-21.
Hay quienes han criticado esta ley, diciendo que era dura. Sin embargo, esta ley no hacía lícita
la venganza personal como lo hace la notoria ―vendetta‖ o venganza de tiempos más cercanos
a nosotros, porque las mismas Escrituras Hebreas también declaran: ―No digas: ‗Tal como me
hizo a mí, así voy a hacerle a él. Le pagaré a cada uno según su obrar.‘‖ (Pro. 24:29) La ley de
―ojo por ojo y diente por diente‖ había de administrarse después que los individuos hubieran
sido sometidos a juicio ―delante de Jehová, delante de los sacerdotes y los jueces que estén en
funciones en aquellos días.‖—Deu. 19:15-21.
―Sin embargo, yo les digo,‖ continuó Jesús: ―No resistan al que es inicuo.‖ (Mat. 5:39a) ¿Cómo
debe entenderse esto? Jesús ayudó a los que le escuchaban por medio de darles cuatro
ilustraciones que les ayudarían a tratar debidamente con el ―que es inicuo,‖ es decir, la persona
que les hiciera daño de alguna manera.
1—INSULTO O DAÑO PERSONAL
Jesús primero explicó qué hacer cuando los que le escuchaban sufrieran insulto o daño: ―Al
que te dé una bofetada en la mejilla derecha, vuélvele también la otra.‖—Mat. 5:39b.
Esto no significa que la persona a quien se abofeteara o golpeara debería ‗pedir más‘ por
medio de rehusar defenderse. Jesús, cuando se le abofeteó en la cara durante su juicio injusto
delante del sumo sacerdote, objetó a aquel maltrato, diciendo: ―Si hablé mal, da testimonio
respecto al mal; mas si bien, ¿por qué me pegas?‖—Juan 18:22, 23; compare con Hech. 23:3.
La referencia de Jesús a un abofetear ―en la mejilla derecha‖ recordaría a los que le oían,
no tanto un golpe que causara dolor, como uno que insultara y avergonzara. El comentario
sobre Mateo por W. F. Albright y C. S. Mann declara: ―Jesús aquí habla de lo que todavía es
realidad en el Cercano Oriente... pues el más insultante de todos los golpes físicos es el de
herir la mejilla derecha con el revés de la mano.‖ La tradición judía fijaba la multa por abofetear
insultantemente con el revés de la mano en 400 zuz (igual a 400 denarios), lo cual era una
cantidad que pasaba del salario de un año para un obrero agrícola.
El relato del evangelio de Lucas, escrito principalmente para personas no judías, da a las
palabras de Jesús expresión más general: ―Al que te hiera en una mejilla, ofrécele también la
otra.‖ (Luc. 6:29a) Esto no aplica simplemente a un abofetear insultante, sino más bien a golpes
dados con violencia. Fuera en un caso o en el otro, el consejo de Jesús era ‗volver la otra
mejilla.‘ Él deseaba que sus seguidores estuvieran dispuestos a aguantar insulto y daño
personales sin recurrir a la represalia. De esta manera podrían imitar a Jesús mismo, de quien
el apóstol Pedro escribe: ―Cuando lo estaban injuriando, no se puso a injuriar en cambio.
Cuando estaba sufriendo, no se puso a amenazar, sino que siguió encomendándose al que
juzga con justicia.‖—1 Ped. 2:23; compare con Isaías 50:6.
DESPUÉS de declarar que los que le escuchaban ‗no deberían resistir al que es inicuo,‘ Jesús
añadió: ―Oyeron ustedes que se dijo: ‗Tienes que amar a tu prójimo y odiar a tu enemigo.‘‖—
Mat. 5:39, 43.
Los que estaban presentes en la ocasión del Sermón del Monte eran judíos que habían ‗oído‘
el mandato de Dios: ―No debes tomar venganza ni tener inquina contra los hijos de tu pueblo; y
tienes que amar a tu prójimo como a ti mismo.‖—Lev. 19:18.
Sin embargo, los líderes religiosos de Israel daban énfasis al hecho de que las expresiones ―los
hijos de tu pueblo‖ y ―tu prójimo‖ se referían solo a los judíos. También daban énfasis al hecho
de que otros mandatos de la ley de Dios exigían que los israelitas permanecieran separados de
otros pueblos. (Deu. 7:1-4) Aunque esto se refería a lo separado de Israel como nación
respecto a otros grupos nacionales, con el tiempo surgió el punto de vista de que todos los
no judíos eran ‗enemigos,‘ que habían de ser odiados como individuos. Un ejemplo de esta
actitud se puede ver por la siguiente declaración de La Mishna:
―No se dejará ganado en los mesones de los gentiles, puesto que se sospecha que cometen
bestialidad; ni quedará una mujer a solas con ellos, puesto que están bajo sospecha de
lascivia; ni quedará un hombre a solas con ellos, puesto que están bajo sospecha de derramar
sangre. La hija de un israelita no ayudará a una mujer gentil a dar a luz, puesto que estaría
ayudando a dar a luz una criatura para la idolatría, pero una gentil puede ayudar a la hija de un
israelita. La hija de un israelita no amamantará a la criatura de una gentil, pero una gentil puede
amamantar a la criatura de la hija de un israelita dentro del dominio de éste.‖—Tratado Abodah
Zarah (―Idolatría‖) 2:1.
―Sin embargo, yo les digo,‖ declaró Jesús haciendo un contraste refrescante: ―Continúen
amando a sus enemigos y orando por los que los persiguen.‖ (Mat. 5:44) Aquí vemos más
evidencia de que el Hijo de Dios vino, ‗no a destruir, sino a cumplir‘ la Ley escrita de Dios,
porque aquella Ley mandaba tratamiento considerado, bondadoso, para los extranjeros.—Mat.
5:17; Éxo. 22:21; 23:4, 5; Lev. 19:33, 34; Deu. 10:19.
Pero Jesús no tenía la intención de limitar este principio a enemigos gentiles de Israel.
Deseaba que sus seguidores obraran amorosamente para con toda persona que les mostrara
hostilidad. Escribiendo especialmente para los no judíos, Lucas registra de la siguiente manera
las palabras de Jesús: ―Mas les digo a ustedes que escuchan: Continúen amando a sus
enemigos, haciendo bien a los que los odian, bendiciendo a los que los maldicen, orando por
los que los insultan.‖—Luc. 6:27, 28.
Según Jesús, los que estaban ‗escuchando,‘ es decir, realmente tomando en serio sus dichos,
tenían que hacer frente a un aspecto triple del odio con una correspondiente expresión triple de
amor: (1) ‗Hacer bien a los que los odian,‘ por medio de responder a los sentimientos de
animosidad del enemigo con obras bondadosas. (2) Si el odio estalla en insulto verbal,
‗bendecir a los que los maldicen.‘ En vez de devolver maldición por maldición, los seguidores
de Jesús deben hablar con bondad y consideración a los que se les oponen. (3) Si la
enemistad se extiende hasta más allá del abuso verbal y efectivamente es ‗persecución‘ de los
discípulos de Cristo por medio de violencia física u otro tratamiento ‗insultante,‘ deben ‗orar por‘
los perseguidores, y suplicar amorosamente a Dios que los opositores cambien de opinión y
entren en el favor de Dios.—Compare con Romanos 12:14-21; 1 Corintios 4:12; 1 Pedro 3:8, 9.
Jesús entonces dio una poderosa razón para mostrar amor a los enemigos de uno: ―Para que
demuestren ser hijos de su Padre que está en los cielos.‖ (Mat. 5:45a) Para el beneficio de sus
lectores gentiles, Lucas reemplaza la frase: ―su Padre que está en los cielos,‖ con ―el
Altísimo.‖—Luc. 6:35a.
Las personas que prestan atención al consejo de Jesús llegan a ser ―hijos‖ de Dios en el
sentido de que lo imitan por medio de reflejar su benevolencia imparcial para con amigo y
enemigo igualmente. (Compare con Mateo 5:9; Efesios 4:31-5:2; 1 Juan 3:9-12.) Dios da el
ejemplo perfecto porque ―hace salir su sol sobre inicuos y buenos y hace llover sobre justos e
injustos‖ (Mat. 5:45b); ―es bondadoso para con los ingratos e inicuos.‖—Luc. 6:35b.
Para dar énfasis a lo importante que sería el que sus oyentes ‗continuaran amando a sus
enemigos,‘ Jesús añadió: ―Porque si aman a los que los aman, ¿qué galardón tienen?
¿No hacen también la misma cosa los recaudadores de impuestos? Y si saludan a sus
hermanos solamente, ¿qué cosa extraordinaria hacen? ¿No hace la misma cosa también la
gente de las naciones?‖—Mat. 5:46, 47.
Las personas que desean imitar a Dios no deben limitar sus expresiones de amor a individuos
que pagan de la misma manera. Esto no merecería ningún ―galardón‖ o favor especial ante
Dios. Hasta los ―recaudadores de impuestos‖ estaban acostumbrados a desplegar amor a los
que los amaban, aunque los judíos consideraban a éstos como personas que estaban entre la
gente más despreciable.—Luc. 5:30; 7:34.
El saludo común entre los israelitas incluía la palabra shalom (―paz‖), que daba a entender un
deseo de que la persona a quien se saludaba tuviera salud, bienestar y prosperidad. El limitar
tal saludo a personas a las que se consideraba ―hermanos‖ no sería ―cosa extraordinaria,‖
porque algo similar podía observarse entre ―gente de las naciones,‖ a quienes los judíos
consideraban impíos, inmundos y personas a las cuales evitar.
El evangelio de Lucas, escrito con consideración para los que no eran judíos, reemplaza las
expresiones ―recaudadores de impuestos‖ y ―gente de las naciones‖ (que en este contexto solo
tendrían significado para judíos) con el término más general ―pecadores.‖ Leemos: ―Y si
ustedes aman a los que los aman, ¿de qué mérito les es a ustedes? Porque hasta los
pecadores aman a los que los aman a ellos. Y si hacen bien a los que les hacen bien,
realmente, ¿de qué mérito les es a ustedes? Hasta los pecadores hacen lo mismo. También, si
prestan sin interés a aquellos de quienes esperan recibir, ¿de qué mérito les es? Hasta los
pecadores prestan sin interés a los pecadores para que se les devuelva otro tanto.‖—Luc. 6:32-
34.
Jesús concluyó esta porción del Sermón del Monte con la declaración: ‗―Ustedes en efecto
tienen que ser perfectos, como su Padre celestial es perfecto.‖—Mat. 5:48.
Esto no es un mandato para que los discípulos de Jesús lleguen a ser física y moralmente
intachables, porque en la actualidad eso es imposible debido al pecado heredado. (Rom. 3:23;
5:12) Más bien, estas palabras estimulan a la gente a imitar al ―Padre celestial,‖ Jehová, por
medio de perfeccionar su amor, haciendo que llegue a la medida plena y completándolo por
medio de incluir a sus enemigos en su alcance. En armonía con esto, el relato paralelo de
Lucas dice: ―Continúen haciéndose misericordiosos, así como su Padre es misericordioso.‖—
Luc. 6:36.
*** w78 1/12 págs. 30-31 El Sermón del Monte... ‗Que sus dones de misericordia sean en
secreto‘ ***
DESPUÉS de sus comentarios acerca de evitar la hipocresía al dar dones de misericordia a los
pobres, Jesús dijo: ―También, cuando oren ustedes, no deben ser como los hipócritas.‖—Mat.
6:5a.
La expresión ―cuando oren ustedes‖ indica que, para los discípulos de Jesús, la oración sería
parte regular de la adoración verdadera. Sin embargo, no habían de imitar a los ―hipócritas,‖ o
fariseos pagados de su propia rectitud, cuyo despliegue público de devoción religiosa era
simplemente una simulación.—Mat. 23:13-32.
Acerca de aquellos hipócritas, Jesús declaró: ―A ellos les gusta orar de pie en las sinagogas y
en las esquinas de los caminos anchos para ser vistos de los hombres.‖—Mat. 6:5b.
Para el primer siglo E.C., se había convertido en costumbre el que los judíos oraran como
congregación durante el tiempo de las ofrendas matutinas y vespertinas en el templo de
Jerusalén, como a las 9 de la mañana y las 3 de la tarde. Muchos habitantes de aquella ciudad
lo hacían junto con una muchedumbre de compañeros de adoración en el recinto del templo.
Fuera de Jerusalén, los judíos devotos frecuentemente optaban por orar dos veces al día ―en
las sinagogas.‖ La posición usual durante la oración era ―de pie.‖—Vea también Lucas
18:11, 13.
Puesto que la mayoría de las personas no estarían cerca del templo o de una sinagoga al
tiempo en que se había de ofrecer la oración matutina y la vespertina, había la costumbre de
orar dondequiera que uno se hallaba. A ciertos individuos ‗les gustaba‘ que la hora de la
oración los alcanzara mientras estaban ―en las esquinas de los caminos anchos.‖ Les agradaba
mucho la idea de ―ser vistos de los hombres‖ que pasaban en cuatro direcciones. En un
despliegue de falsa santidad, ‗por pretexto hacían largas oraciones,‘ para despertar admiración
en los observadores.—Luc. 20:47.
Sobre aquellos hipócritas, Jesús declaró: ―Verdaderamente les digo a ustedes: Ellos ya
disfrutan de su galardón completo.‖ (Mat. 6:5c) Estaban obteniendo lo que deseaban
intensamente... el reconocimiento y la alabanza de otros hombres; y ésa era toda su
recompensa. Sus oraciones hipócritas no recibirían respuesta de Dios.
―Tú, sin embargo,‖ continuó Jesús, ―cuando ores, entra en tu cuarto privado y, después de
cerrar tu puerta, ora a tu Padre que está en lo secreto; entonces tu Padre que mira en secreto
te lo pagará.‖—Mat. 6:6.
Estas palabras de Jesús no prohibieron orar con la congregación. El propósito de la
amonestación en el sentido de orar en ‗un cuarto privado después de cerrar la puerta‘ era hacer
que se evitara el hacer oraciones públicas con el fin de llamar atención a uno mismo o atraerse
declaraciones de encomio de admiradores. Esto es semejante al consejo acerca de dar
limosnas para ayudar a los pobres. ―No sepa tu mano izquierda lo que hace tu derecha.‖ (Mat.
6:3) Jesús dio un ejemplo perfecto al orar sin llamar atención a sí mismo. Por ejemplo, cuando
pasó una noche entera en oración antes de escoger a sus doce apóstoles, no presentó sus
peticiones a Dios frente a observadores, sino que ―salió a la montaña a orar.‖—Luc. 6:12.
Dirigiendo la atención a otra manera en que los hipócritas abusaban del privilegio de la oración,
Jesús dijo: ―Al orar, no digas las mismas cosas repetidas veces, así como la gente de las
naciones, porque ellos se imaginan que por su uso de muchas palabras se harán oír.‖—Mat.
6:7.
Jesús no estaba diciendo que sus discípulos deberían evitar la repetición de súplicas y
expresiones sinceras de gracias en la oración. El evangelio de Mateo relata que en el Jardín de
Getsemaní Jesús oró hasta tarde en la noche, y usó repetidamente ―la misma palabra.‖—Mat.
26:36-45.
Sin embargo, sería incorrecto copiar las oraciones redundantes de la ―gente de las naciones.‖
Ellos acostumbraban balbucear ―repetidas veces‖ frases aprendidas de memoria entre las
cuales había muchas palabras superfluas. La Biblia contiene el ejemplo de adoradores de Baal
de tiempos antiguos que ―siguieron invocando el nombre de Baal desde la mañana hasta el
mediodía, diciendo: ‗¡Oh Baal, respóndenos!‘‖ (1 Rey. 18:26) Y acerca de los opositores
gentiles del cristianismo en Éfeso, leemos: ―Se levantó un mismo grito de parte de todos, al
vociferar ellos por unas dos horas: ‗¡Grande es Artemis de los efesios!‘‖ (Hech. 19:34) En una
obra del poeta romano Terencio (siglo segundo a. de la E.C.), leemos la siguiente queja: ―Por
favor, esposa, cesa de aturdir a los dioses con expresiones de gracias, porque tu hijo está a
salvo; a menos que por ti misma juzgues de ellos, que no pueden entender nada, si no se les
dice cien veces.‖
Hasta el presente, mucha ―gente de las naciones‖ hace oraciones redundantes a sus dioses.
Por ejemplo, hay budistas que usan un rosario de hasta 108 cuentas mientras repiten
monótonamente el namu amida butsu (―en paz descanse el alma‖). De manera semejante, en
muchas iglesias de la cristiandad los individuos rezan las mismas frases vez tras vez en
repetición mecánica, pensando que ―se harán oír‖ debido a tal repetición constante. Pero este
―uso de muchas palabras‖ no tiene valor a juicio de Dios.
―Pues bien, no se hagan semejantes a ellos,‖ continuó Jesús, ―porque Dios su Padre sabe qué
cosas necesitan ustedes aun antes que se las pidan.‖—Mat. 6:8.
Está claro que muchos de los líderes judíos ‗se habían hecho semejantes‘ a los gentiles por
excesiva verbosidad en sus oraciones. El siguiente relato que se encuentra en el Talmud de
Babilonia ilustra esta tendencia: ―Cierto [lector] se inclinó en la presencia del r[abino] Hanina y
dijo: Oh Dios, el grande, potente, terrible, majestuoso, poderoso, imponente, fuerte, denodado,
seguro y honrado.‖ El rabino denunció aquel innecesario acopio de palabras como ―un insulto‖
a Dios.
La oración sincera regular que incluye alabanza, acción de gracias y petición a Dios es parte
importante de la adoración verdadera. (Fili. 4:6) Pero no sería correcto decir las mismas cosas
vez tras vez en la creencia de que tal repetición ininterrumpida se necesita para informar a Dios
acerca de nuestras necesidades, como si Dios fuera ignorante, o no prestara atención o fuera
olvidadizo. Uno debe orar con reconocimiento pleno de que está comunicándose con Aquel
que ―sabe qué cosas necesitan ustedes aun antes que se las pidan.‖
[Nota]
Acerca de la oración en las calles y en lugares públicos, los escritos rabínicos judíos dan
ejemplos como los siguientes: ―El rabino Jochanan ha dicho: ‗He visto al rabino Jannai ponerse
de pie y orar en el Mercado de Sepphoris y entonces andar cuatro codos y decir la oración
Musaf [adicional].‘‖ (Talmud de Palestina) ―Si uno está de pie y orando en la calle o en una
zona abierta, se echa a un lado [por] un asno, un arreador de asno o un alfarero [que se
aproxima] sin interrumpir su oración. Acerca del rabino Chanina ben Dosa [aproximadamente
70 E.C.] se relata que estaba de pie y orando. Entonces una serpiente venenosa lo mordió. Él,
sin embargo, no interrumpió su oración.‖—Tosephta (escritos que complementan la Mishna).
*** w79 1/1 págs. 5-6 El Sermón del Monte... ―Ustedes, pues, tienen que orar de esta
manera‖ ***
DESPUÉS de considerar el dar limosnas y la oración, Jesús dirigió atención a un tercer aspecto
de importancia en la adoración que practicaban los judíos, a saber, el del ayuno. Pero antes de
notar lo que el Hijo de Dios dijo sobre este asunto, consideremos alguna información básica
útil.
El ayuno no se mencionaba específicamente en la ley de Dios dada por medio de Moisés. Pero
la Ley sí mandaba que en el Día de la Expiación los israelitas ‗se afligieran,‘ lo cual se entiende
que significaba ayunar. (Lev. 23:27; Núm. 29:7; vea también Levítico 16:29-31, Biblia de
Jerusalén; compare con Salmo 35:13; Isaías 58:3, 5.) Aunque éste era el único ayuno público
que exigía la ley mosaica, los israelitas observaban muchos otros. Ayunaban públicamente en
aniversarios de desastres nacionales y durante tiempos de sequía, escasez de cosechas,
pestilencia y guerra.—Zac. 7:5; 8:19.
Además, ciertas personas emprendían ayunos voluntarios y particulares para procurar favor
especial de Dios o en ocasiones de duelo. (2 Sam. 12:16) El ayuno podía durar un solo día o
un espacio de tiempo más largo. La tradición judía especifica que en realidad la abstención de
alimento no se extendía por un período entero de 24 horas, sino solo durante las horas de la
luz del día. Por lo general los individuos emprendían estos ayunos voluntarios solamente en
circunstancias calamitosas.
Pero en el caso de los fariseos la situación era diferente. Según una parábola de Jesús, ciertos
miembros de aquella fraternidad religiosa emprendieron por propia cuenta el proceder de
‗ayunar dos veces a la semana.‘ (Luc. 18:12) Los días en que esto solía hacerse eran el lunes y
el jueves. Parece que los fariseos creían que el celebrar con regularidad ayunos voluntarios les
traería bendiciones de Dios y evitaría calamidades nacionales. Como indicación de los
extremos a los cuales algunos podían llegar, el Talmud de Babilonia relata lo siguiente acerca
de un rabino que vivió durante el primer siglo E.C.:
―El r[abino] Zadok observó ayunos por cuarenta años para que Jerusalén no fuera destruida, [y
adelgazó tanto que] cuando comía algo, se podía ver el alimento [mientras pasaba por su
garganta]. Cuando quería restablecerse, solían traerle un higo, y él solía chupar el jugo y tirar lo
demás.‖
EL CONSEJO DE JESÚS SOBRE EL AYUNO
Jesús comenzó su consejo sobre la abstinencia de alimento diciendo: ―Cuando ayunen, dejen
de ponerse de rostro triste como los hipócritas, porque ellos desfiguran su rostro para que les
parezca a los hombres que ayunan.‖—Mat. 6:16a.
Jesús nunca mandó a sus discípulos que ayunaran, y se conocía que ellos no practicaban
ayunos con regularidad alguna. (Mat. 9:14, 15) Por otra parte, el Hijo de Dios no dio a sus
seguidores la dirección de evitar aquella práctica por completo. La expresión, ―cuando ayunen,‖
indica que algunos de sus discípulos ayunarían en ocasiones especiales.—Vea Hechos 13:2,
3; 14:23.
Pero nunca deberían ‗desfigurar su rostro para que les pareciera a los hombres que ayunaban.‘
Los hipócritas a quienes se refirió Jesús presentaban a propósito una apariencia de ―rostro
triste.‖ Descuidaban la apariencia del rostro durante los días de ayuno, probablemente por
no lavarse o peinarse y por medio de echarse cenizas sobre la cabeza. El verdadero motivo
que tenían para hacer esto era ―para que les parezca a los hombres que ayunan.‖ Disfrutaban
de que los miraran con admiración y les hicieran movimientos de aprobación con la cabeza
otros hombres a quienes impresionaba su despliegue externo de devoción o piedad.
Como en el caso de las personas que hacían una exhibición del dar limosnas y oraban en
público para ser observadas por los hombres, Jesús dijo acerca de los que ayunaban por
razones similares: ―Verdaderamente les digo a ustedes: Ellos ya disfrutan de su galardón
completo.‖ (Mat. 6:16b; compare con 6:2, 5.) En vez de obtener bendiciones de Dios, la
admiración de congéneres humanos era todo el ―galardón‖ que recibían. Lo recibían ―completo‖
y Dios no le añadiría nada.
―Mas tú, cuando ayunes,‖ continuó Jesús, ―úntate la cabeza con aceite y lávate el rostro.‖ (Mat.
6:17) Los judíos tenían como práctica regular el frotarse el cuerpo con aceite y lavarse. Sin
embargo, la tradición judía prohibía hacer aquello en los días de ayuno público como el Día de
Expiación y el noveno día del mes quinto, Ab (el aniversario de la destrucción del templo de
Dios en Jerusalén). Los fariseos se pusieron a observar por propia cuenta prohibiciones
similares durante los ayunos que voluntariamente efectuaban dos veces a la semana. Sin
embargo, si acaso surgía una ocasión en la cual los que oían a Jesús desearan ayunar,
deberían ‗untarse la cabeza con aceite y lavarse el rostro,‘ es decir, presentar apariencia
normal.
En cuanto a la razón para hacer esto, Jesús declaró: ―Para que no les parezca a los hombres
que ayunas, sino a tu Padre que está en lo secreto.‖ (Mat. 6:18a) Ellos no deberían agradar a
los hombres, sino a Dios, quien está ―en lo secreto,‖ muy alejado de la mirada penetrante de los
ojos humanos. Por eso, no habría necesidad de dar evidencia visible de estar ayunando.
Pero Jesús aseguró que, aunque los seres humanos no observaran y alabaran al que rehusara
hacer un despliegue público del ayuno, ―tu Padre que mira en secreto te lo pagará.‖ (Mat.
6:18b) Dios ciertamente está ‗mirando,‘ observando cómo sus siervos efectúan su adoración.
Lo que cuenta con Dios no es una exhibición exterior de hechos píos, sino sinceridad de
corazón junto con hechos de bondad amorosa para con el congénere de uno. (1 Sam. 16:7;
1 Cró. 28:9) Sobre ayunar, Isaías escribió:
―En realidad ustedes hallaban deleite en el mismísimo día de su ayuno, cuando allí estaban
todos sus trabajadores que ustedes obligaban a trabajar. En realidad para riña y para lucha
ustedes ayunaban, y para golpear con el puño de la iniquidad [debido a que el hambre los
irritaba]. ¿No siguieron ayunando como en el día de hacer oír su voz en la altura? ¿Debe el
ayuno que yo escojo llegar a ser como éste, como día en que el hombre terrestre se aflija el
alma? ¿Para inclinar su cabeza justamente como un junco, y para que extienda mera tela de
saco y cenizas como su lecho? ¿Es esto lo que tú llamas un ayuno y un día acepto a Jehová?
―¿No es éste el ayuno que yo escojo? ¿Desatar los grillos de la iniquidad, soltar las ataduras de
la vara de yugo, y despachar libres a los quebrantados, y que ustedes rompan en dos toda vara
de yugo? ¿No es el repartir tu pan al hambriento, e introducir en tu casa los afligidos, sin
hogar? ¿Que, en caso de que veas a alguien desnudo, de veras lo cubras, y que no te
escondas de tu propia carne?‖—Isa. 58:3-7.
Jesús aseguró que Dios les ‗pagaría‘ a las personas que, con motivo correcto, ayunaban a
veces. Ese pago excede por mucho lo que los seres humanos pueden dar. De hecho, a los que
oían el Sermón del Monte les presentaba la oportunidad de adquirir vida inmortal en el cielo
como parte del reino mesiánico de Dios.—Luc. 22:28-30; Juan 14:2-4; Rev. 20:6.
*** w79 1/2 págs. 9-10 El Sermón del Monte... ‗Acumulen tesoros en el cielo‘ ***
DESPUÉS de dar consejo en cuanto a apartarse del materialismo, Jesús exhortó a su auditorio
a evitar el preocuparse indebidamente en cuanto a obtener las necesidades de la vida: ―Por
este motivo les digo: Dejen de inquietarse respecto a su alma en cuanto a qué comerán o qué
beberán, o respecto a su cuerpo en cuanto a qué se pondrán. ¿No significa más el alma que el
alimento y el cuerpo que la ropa?‖—Mat. 6:25.
―Por este motivo,‖ es decir, porque uno ‗no puede servir como esclavo a Dios y a las Riquezas,‘
los discípulos de Jesús deberían evitar preocuparse excesivamente hasta en cuanto a obtener
las necesidades del día. (Mat. 6:24) El Hijo de Dios no tuvo la intención de desanimar a la
gente de interesarse apropiadamente en obtener alimento y ropa y trabajar diligentemente para
obtenerlos. (Ecl. 2:24; Efe. 4:28; 2 Tes. 3:10-12) Pero no hay necesidad de ―inquietarse‖ en
cuanto a conseguir estas cosas esenciales. El ‗alma y el cuerpo‘ (que aquí representan a la
persona como un todo) son más importantes que el alimento y la ropa. Puesto que Dios
concedió vida física a la humanidad, ciertamente él puede ver que sus adoradores obtengan el
sustento necesario.
Jesús hizo este punto aún más claro por medio de una ilustración: ―Observen atentamente las
aves del cielo, porque ellas no siembran, ni siegan, ni recogen en graneros; no obstante, su
Padre celestial las alimenta.‖—Mat. 6:26a.
―Las aves del cielo‖ que vuelan libremente sobre nosotros no efectúan labores de agricultura.
Sin embargo, Dios ve que obtengan suficiente alimento. (Compare con Job 38:41; Salmo
147:9.) Esto era algo que merecía ‗observarse atentamente,‘ hacerse asunto de seria
meditación. Los judíos que componían el auditorio de Jesús podían llamar a Dios su ―Padre
celestial,‖ especialmente en vista de que los israelitas habían sido ‗escogidos‘ como el pueblo
bajo pacto con Dios. (Deu. 7:6) Contrastándolos con las aves del cielo, Jesús preguntó: ―¿No
valen ustedes más que ellas?‖ (Mat. 6:26b) Si Dios provee para las criaturas volátiles, ¡cuánto
más lo hará para sus adoradores!
Para mostrar la futilidad de preocuparse indebidamente en cuanto a adquirir las necesidades
de la vida, Jesús pasó a decir: ―¿Quién de ustedes por medio de inquietarse puede añadir un
codo al largo de su vida?‖ (Mat. 6:27) Las Escrituras asemejan con frecuencia la largura de la
vida de los seres humanos a un viaje, por medio de expresiones como ―el camino de los
pecadores‖ y ―la senda de la rectitud.‖ (Sal. 1:1; 27:11) El inquietarse por las necesidades del
día no puede extender la largura de la vida de uno ni siquiera por una fracción, ni ―un codo,‖ por
decirlo así. Más bien que beneficiar a la gente, la preocupación indebida puede perjudicar la
salud y hasta acortar la vida.
Jesús entonces introdujo una segunda ilustración, al decir: ―También, en cuanto al asunto de
ropa, ¿por qué se inquietan? Aprendan una lección de los lirios del campo, cómo crecen; no se
afanan, tampoco hilan; pero les digo que ni aun Salomón en toda su gloria se vistió como uno
de éstos.‖—Mat. 6:28, 29.
Es probable que la expresión ―los lirios del campo‖ incluya diversas flores de brillantes colores
que se ven en los campos de Galilea. A Dictionary of the Bible (Un diccionario de la Biblia), de
Hasting, declara:
―Todos éstos crecen entre el grano, y frecuentemente sobresalen entre éste, e iluminan los
espaciosos campos con sus diversos matices de color que varían desde el púrpura rosado
hasta el profundo púrpura violeta y el azul; colores verdaderamente reales. Cualquiera que
haya estado en medio de los campos de trigo de Galilea, y haya visto los preciosos racimos de
estas flores, despuntando en toda dirección por encima del maíz erguido, se da cuenta,
inmediatamente, de lo apropiado de la alusión de nuestro Salvador. . . . Sin embargo, si por
‗lirios del campo‘ simplemente entendemos lirios silvestres, éstos también quedarán incluidos
en la expresión. Entonces la comparación de nuestro Salvador será como una ‗fotografía
compuesta,‘ una referencia a todos los espléndidos colores y bellas formas de las numerosas
plantas silvestres comprendidas bajo el nombre de lirios.‖
Cuando una persona observa ―cómo‖ estas flores ―crecen,‖ advierte que lo hacen sin el
‗afanarse‘ ni ‗hilar‘ que los seres humanos tienen que efectuar para producir ropa. Sin embargo,
los lirios del campo ‗se visten‘ con una belleza que no podría ser igualada por el atavío de
ningún ser humano, ni siquiera el de alguien tan famoso por sus galas como el rey Salomón.—
2 Cró. 9:15-21.
En cuanto a la ―lección‖ de esta ilustración, Jesús declaró: ―Bueno, pues, si Dios viste así a la
vegetación del campo, que hoy está aquí y mañana se echa al horno, ¿no los vestirá a ustedes
con mucha más razón, hombres de poca fe?‖—Mat. 6:30.
Entre ―la vegetación del campo‖ están las flores a las cuales Jesús se había referido. Durante
los calurosos veranos de Palestina, bastaría con dos días para que se marchitara esa
vegetación. Los tallos de las flores y la hierba secos se juntaban como combustible para
hornear. Puesto que Dios ―viste‖ hermosamente la vegetación que tan rápidamente se seca,
esta pregunta de Jesús es muy apropiada: ―¿No los vestirá a ustedes con mucha más razón,
hombres de poca fe?‖ Los siervos de Dios son mucho más importantes que las flores. La
preocupación excesiva en cuanto a obtener la ropa necesaria sería una indicación de ―poca fe.‖
―Por eso, nunca se inquieten y digan: ‗¿Qué hemos de comer?‘ o ‗¿qué hemos de beber?‘ o
‗¿qué hemos de ponernos?‘‖ continuó diciendo Jesús, ―porque todas éstas son las cosas en
pos de las cuales las naciones van con empeño. Pues su Padre celestial sabe que ustedes
necesitan todas estas cosas.‖—Mat. 6:31, 32.
Esta fue la tercera vez en su sermón que Jesús hizo una comparación con ―las naciones,‖ o los
no judíos. (Vea Mateo 5:47; 6:7.) Ellos no tenían relación con Dios, y centraban su vida en las
cosas materiales y los placeres carnales. Se ve, pues, que si los siervos de Dios dudaban de
Su aptitud y presteza respecto a proveerles las cosas necesarias de la vida, serían como gente
de las naciones que estaban ―sin Dios en el mundo.‖—Efe. 2:11, 12.
Puesto que el Altísimo ‗conoce las necesidades‘ de su pueblo, los que escuchaban a Jesús
harían bien en prestar atención a su siguiente consejo: ―Sigan, pues, buscando primero el reino
y Su justicia, y todas estas otras cosas les serán añadidas.‖—Mat. 6:33.
Los discípulos de Jesús lo habían aceptado como el Mesías, lo cual los ponía en línea para
llegar a ser parte del gobierno o ―reino‖ mesiánico celestial de Dios. (Luc. 22:28-30; Juan 14:1-
4; Dan. 7:13, 14, 18, 22, 27) Pero tenían que ‗seguir buscándolo‘ ―primero,‖ y continuamente
hacer del Reino el asunto de mayor importancia en su vida. También tenían que buscar ―Su
justicia‖ [es decir, la de Dios] por medio de ejercer fe en el Mesías de Dios y ser practicantes de
conducta que se conformara a los demás mandamientos de Dios. Por supuesto, esto nunca
debería hacerse con el punto de vista legalista de que la ejecución de preceptos religiosos y
hechos meritorios obliga a Dios a bendecir a uno. La justicia que cuenta con Dios debe brotar
de corazones llenos de amor y aprecio por lo que él ha hecho a favor de la humanidad. (Vea
Romanos 10:3; 1 Juan 4:19.) Los que verdaderamente ponen la adoración de Dios en primer
lugar en su vida pueden confiar en que el Dios benévolo a quien adoran ‗les añadirá‘ ―todas‖
sus necesidades del día.
―Por lo tanto, nunca se inquieten acerca del día siguiente,‖ continuó diciendo Jesús, ―porque el
día siguiente tendrá sus propias inquietudes. Suficiente para cada día es su propia maldad.‖
(Mat. 6:34) Cada día tiene sus propias dificultades que causan cierta medida de frustración.
Con frecuencia las dificultades diarias surgen inesperadamente y se deben a causas que están
más allá del control humano. (Note Eclesiastés 9:11.) Los siervos de Dios deben ver tales
situaciones difíciles como ‗suficientes para cada día‘ y enfrentarse a ellas día por día según
surgen. El inquietarse en cuanto al día siguiente, en vez de mejorar las cosas, revela falta de fe
en Dios y hace más difícil el enfrentarse a la ―maldad‖ del día presente.
[Notas]
El consejo de Jesús que se considera en este artículo (Mat. 6:25-34) también aparece, con leve
variación, en Lucas 12:22-31. El contexto en Lucas tiene como marco unas circunstancias de
alrededor de un año después del Sermón del Monte que Jesús dio en Galilea, y sitúa lo dicho
durante la parte final del ministerio de Jesús en Judea. Evidentemente Jesús consideró
apropiado repetir esta advertencia.
Jesús usó la expresión ―de poca fe‖ solamente con relación a sus discípulos. Esta expresión
aparece también en Mateo 8:26; 14:31; 16:8 y en Lucas 12:28. La frase aparece en escritos
rabínicos, lo que indica que era bien conocida. Por ejemplo, el Babylonian Talmud (Talmud de
Babilonia) relata: ―El r[abí] Eliezer el Grande declara: Cualquiera que tiene un pedazo de pan
en su cesta y dice: ‗¿Qué comeré mañana?‘ solo pertenece a los que tienen poco en cuanto a
fe.‖
*** w79 15/4 págs. 22-23 El Sermón del Monte... ―Sigan pidiendo‖ ***
*** w79 15/5 págs. 29-31 El Sermón del Monte... ―Entren por la puerta angosta‖ ***
DESPUÉS de animar a los que le escuchaban a orar encarecidamente por ayuda para hacer la
voluntad de Dios, Jesús declaró: ―Entren por la puerta angosta; porque ancho y espacioso es el
camino que conduce a la destrucción, y muchos son los que entran por él; mientras que
angosta es la puerta y estrecho el camino que conduce a la vida, y pocos son los que la
hallan.‖—Mat. 7:13, 14.
En la antigüedad, carreteras o caminos que pasaban por puertas o entradas eran el medio de
entrar en las ciudades. Las Escrituras con frecuencia asemejan un camino o senda al curso o
derrotero de vida que los individuos siguen. (Pro. 4:18, 19) Según el Hijo de Dios, el camino a
la ―destrucción,‖ o a la muerte fuera del favor divino, es ―ancho y espacioso.‖ Ese camino
permite que la gente viva precisamente como desee, sin efectuar cambios para amoldarse a las
normas bíblicas para la conducta. ―Muchos‖ han escogido esa espaciosa vía de ‗la vida
cómoda,‘ o ‗la vida fácil.‘
Por otra parte, la Biblia asemeja el reino mesiánico de Dios a una ciudad, a la cual se obtiene
acceso por medio de una puerta ―angosta‖ y un camino ―estrecho.‖ (Vea Hebreos 11:10; 13:14.)
Las personas que se hallan en este ―camino que conduce a la vida [eterna]‖ deben disciplinar
su corazón para desarrollar móviles correctos. Deben ejercer dominio de sí mismas en todo
aspecto de la conducta humana; y, a veces, ―el camino‖ de la adoración verdadera exige
aguante de persecución violenta. (Hech. 9:2; 19:9, 23; 22:4) Puesto que la mayoría de las
personas prefiere vivir sin esfuerzos que signifiquen sacrificarse, y sin restricciones, no buscan
el camino de la vida que agrada a Dios. Por consiguiente, ‗pocos son los que hallan‘ la puerta
angosta y el camino estrecho que lleva a la vida.—Compare con Mateo 7:8; Lucas 13:24.
Entonces Jesús pasó a dar una advertencia a las personas que quieran permanecer en el
camino a la vida: ―Guárdense de los falsos profetas que vienen a ustedes en ropa de oveja,
pero por dentro son lobos voraces.‖—Mat. 7:15.
Por la expresión ―falsos profetas,‖ Jesús quiso decir maestros religiosos que falsamente alegan
representar a Dios. Estos engañadores se presentarían ―en ropa de oveja.‖ Por medio de
presentar un despliegue hipócrita de ternura, humildad y otras cualidades como de oveja,
tratarían de dar la impresión de ser parte del ―rebaño‖ de adoradores de Dios. (Vea Salmos
78:52; 80:1; 100:3.) Pero por dentro los falsos profetas serían ―lobos voraces,‖ es decir,
extremadamente codiciosos, deseosos de apoderarse de cosas, y ansiosos de hacer presa de
otros para satisfacción personal.
El Hijo de Dios declaró que los falsos profetas ‗vendrían a ustedes,‘ es decir, desde fuera del
rebaño que él, como ―el pastor excelente,‖ recogería. (Juan 10:11) En vez de ser una amenaza
que hubiera de venir en el futuro distante, los engañadores estaban en existencia en aquel
mismo tiempo. Evidentemente Jesús pensaba especialmente en los fariseos, quienes
falsamente alegaban ser los voceros de Dios. Ellos se habían ―sentado en la cátedra de
Moisés,‖ y alegaban ser los intérpretes oficiales de la ley divina. (Mat. 23:2) Pero los fariseos
eran hipócritas que de hecho impedían que la gente hallara la puerta angosta y el camino
estrecho que lleva a la vida. (Mat. 23:13-15; Luc. 6:39) En cuanto a la engañosa ―ropa de
oveja,‖ estas palabras de Jesús dichas en una ocasión posterior son informativas:
―¡Ay de ustedes, escribas y fariseos, hipócritas! porque se asemejan a sepulcros blanqueados,
que por fuera realmente parecen hermosos pero por dentro están llenos de huesos de muertos
y de toda suerte de inmundicia. Así ustedes también, por fuera realmente, parecen justos a los
hombres, pero por dentro están llenos de hipocresía y de desafuero.‖—Mat. 23:27, 28.
¿Cómo pudiera alguien reconocer a los ‗lobos en ropa de oveja‘? Jesús dio una pauta
fundamental junto con una ilustración: ―Por sus frutos los reconocerán. Nunca se recogen uvas
de espinos o higos de cardos, ¿verdad? Así mismo todo árbol bueno produce fruto excelente,
pero todo árbol podrido produce fruto inservible; un árbol bueno no puede dar fruto inservible,
tampoco puede un árbol podrido producir fruto excelente. Todo árbol que no produce fruto
excelente llega a ser cortado y echado al fuego.‖—Mat. 7:16-19.
Todo árbol o planta que lleva fruto produce su propio tipo particular de fruta. No todas las
plantas llevan fruto que sirva para consumo humano. Sería una pérdida de tiempo el tratar de
obtener frutos como uvas e higos de los espinos y los cardos. Los frutos apropiados para
consumo humano deben venir de un árbol que esté saludable y que sea de la clase apropiada.
Si un árbol continuamente llevara ―fruto inservible,‖ eso sería una indicación segura de que el
árbol mismo se habría ―podrido.‖ Un árbol así, podrido, sería ―cortado‖ y usado junto con
cambrones, espinos y malas hierbas como combustible para fuegos.—Compare con Salmos
58:9; Eclesiastés 7:6; Isaías 44:14-16; Mateo 6:30; 13:30.
Mientras sus oyentes tenían fresca en la mente esta ilustración tomada de la vida agrícola,
Jesús repitió el principio básico o fundamental: ―Realmente, pues, por sus frutos reconocerán a
aquellos hombres.‖ (Mat. 7:20) Hablando en sentido figurado, entre aquellos ―frutos‖ estaría lo
que los falsos profetas dijeran como enseñanza. Sobre esto, Jesús añadió: ―El hombre bueno
del buen tesoro de su corazón produce lo bueno, pero el hombre inicuo produce lo que es
inicuo de su tesoro inicuo; porque de la abundancia del corazón habla su boca.‖—Luc. 6:45.
Entre los frutos que revelarían la verdadera naturaleza de los falsos profetas también estaría su
derrotero general de conducta. (Compare con Marcos 7:21-23.) Uno no puede ocultar su
verdadera condición de corazón indefinidamente. Con el tiempo sus palabras y actos revelan lo
que uno es.
[Nota]
Acerca de los fariseos como falsos profetas, David Hill escribe lo siguiente en la revista Biblica
(1976, vol. 57): ―Josefo sabe de fariseos que poseían presciencia de ciertos acontecimientos y
usaban su don con fines políticos (Ant. XVII 41-45), y en otros lugares habla acerca de cierto
Pollion y su discípulo Samaias, quienes profetizaban (Ant. XIV 172-176; XV 3, 370). Pero más
importante que la poca y quizás confusa información de Josefo es el hecho de que los fariseos
como grupo se consideraban herederos de la gran tradición profética: tomaron la tradición de
los hombres de la Gran Asamblea, que la habían recibido del último en la fila de los profetas. Y
como intérpretes peritos de las Escrituras los fariseos participaban en un proceso que en su
tiempo era la más cercana aproximación posible a la revelación mediada por los profetas de
una época anterior. . . . De ellos, como de sucesores, se podía decir que ‗si no son profetas, sin
embargo son hijos de los profetas‘ (atribuido a Hillel [un rabino que vivió para aproximadamente
el tiempo de Jesús]). En completa consonancia con esto está la palabra de Jesús acerca de
que los fariseos construían las tumbas de los profetas y adornaban los monumentos de los
justos (Mat. 23,29). Por lo tanto, no es imposible que los fariseos del día de Jesús alegaran
tener derecho al papel y autoridad (sino al nombre) de profeta.‖
*** w79 1/4 págs. 14-15 El Sermón del Monte... ¿Entran todos en el Reino? ***
DESPUÉS de advertir a los que le oían acerca de falsos profetas a los cuales pudieran llegar a
conocer durante el primer siglo E.C., Jesús dijo: ―No todo el que me dice: ‗Señor, Señor,‘
entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los
cielos.‖—Mat. 7:21; compare con Lucas 6:46.
Para disfrutar de las bendiciones del reino de Dios, es necesario que las personas reconozcan
el señorío de Jesucristo. (Rom. 10:9; Fili. 2:11) Pero esto envuelve más que solo dar lealtad de
dientes afuera al Hijo de Dios por medio de llamarlo ―Señor, Señor.‖
A la plenitud de bendiciones del Reino solo se admite al ―que hace la voluntad de mi Padre que
está en los cielos.‖ Esa ―voluntad‖ se expresa adecuadamente en el Sermón del Monte. Exige
hacer ―obras excelentes‖ de declarar las verdades del Reino a otras personas. También incluye
transformar la personalidad de uno para desplegar cualidades como las de Dios, tales como
apacibilidad, castidad, confiabilidad, altruismo, amor, sinceridad y fe.—Vea Mateo 5:16, 21, 22,
27-30, 33-48; 6:1-18, 25-34.
Las palabras que Jesús dice después muestran que muchas personas que alegarían ser sus
seguidores fallarían respecto a eso: ―Muchos me dirán en aquel día: ‗Señor, Señor,
¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre expulsamos demonios, y en tu nombre
ejecutamos muchas obras poderosas?‘ Y sin embargo, entonces les confesaré: ¡Nunca los
conocí! Apártense de mí, obreros del desafuero.‖—Mat. 7:22, 23.
―En aquel día,‖ cuando Dios ejecute juicio contra sus enemigos (Zac. 14:1-3; 2 Tes. 2:1, 2;
2 Ped. 3:10-12), ―muchos‖ procurarán que se les considere favorablemente por medio de alegar
que han logrado cosas sorprendentes ‗en Su nombre,‘ es decir, como si fueran representantes
de Jesucristo y por medio de poder divino que hubieran obtenido mediante él.
Preguntarán: ―¿No profetizamos [es decir, expresar comunicaciones divinas y quizás
predicciones de acontecimientos futuros] en tu nombre?‖ Pero tal ‗profetizar‘ no es una
identificación segura del discipulado cristiano verdadero. Según las Escrituras, falsos profetas
también proclamaron predicciones que a veces se realizaron, así como mensajes que
entregaron como si fuera por autoridad divina.—Deu. 13:1-3; Jer. 14:14.
Algunos se jactarían de haber ‗expulsado demonios en el nombre‘ de Jesús. Hoy en la
cristiandad hay personas que alegan que tienen tal poder. Pero la práctica de exorcizar
demonios (por medio de ritos místicos) siempre ha sido un rasgo de religiones que no son
bíblicas. Además, ciertos judíos del primer siglo E.C. expulsaban demonios por medio de
fórmulas mágicas que creían que habían sido entregadas desde el rey Salomón.
Lo que identifica a los cristianos verdaderos no es el profetizar sobrenatural, la expulsión de
demonios ni ninguna otra ‗obra poderosa‘ (milagro). De hecho, al predecir la señal de su
presencia y la conclusión del sistema de cosas actual, Jesús declaró: ―Se levantarán falsos
Cristos y falsos profetas y darán grandes señales y prodigios para extraviar, si fuera posible,
aun a los escogidos.‖ (Mat. 24:24) Esos falsos profetas, impostores, aparecerían en la misma
congregación cristiana e intentarían descarriar a muchos de sus miembros.—Hech. 20:29;
2 Ped. 2:2, 3, 10-22; Jud. 4, 8-13, 16-19.
Como ya se ha indicado, Jesús señaló que el cristiano genuino sería ―el que hace la voluntad
de mi Padre.‖ ¿Y qué es la ―voluntad‖ de su Padre para este día? Según la predicción de
Jesús, es: ―Estas buenas nuevas del reino [establecido] se predicarán en toda la tierra habitada
para testimonio a todas las naciones‖ antes de que venga el fin (Mat. 24:14) ¿Proclaman las
sectas de la cristiandad que el reino de Dios se haya acercado? No, porque lo consideran
como algo que simplemente está en el corazón de la gente, o en el futuro muy lejano. Con
hipocresía dan lealtad o alabanza de dientes afuera a Jesús, pero se retienen de hacer la
voluntad de Su Padre. Queda al grupo comparativamente pequeño conocido como testigos de
Jehová el ‗declarar buenas nuevas de cosas buenas‘ de los propósitos de Dios relacionados
con el Reino ―hasta los extremos de la tierra habitada.‖—Rom. 10:15, 18; vea también
1 Corintios 9:16.
A todos los que alegan tener una relación con Jesucristo, sin hacer las obras del Reino
ni vestirse de una personalidad verdaderamente semejante a la de Cristo, les irá mal cuando él
ejecute venganza divina contra el sistema de cosas actual. Entonces Jesús ‗confesará,‘ o hará
que quede públicamente manifiesto, que ‗nunca conoció‘ a las personas cuyo cristianismo
no fue más profundo que el de rendir servicio de dientes afuera y ostentar los llamados dones
―carismáticos.‖ Jamás han engañado al Hijo de Dios las ―muchas obras poderosas‖ de que se
jactan. En vez de desplegar justicia, estas personas en verdad han resultado ser ―obreros del
desafuero.‖ Por eso, cuando Jesús obre como ejecutor de la justicia para Dios en la venidera
―grande tribulación,‖ les declarará: ―Apártense de mí.‖ A esos cristianos de imitación se les
negará la entrada en las bendiciones eternas del reino de Dios.—Compare con Mateo 24:21,
22; 25:41, 46.
[Nota]
Respecto a que los judíos expulsaran demonios, leemos en Exorcism Through the Ages (El
exorcismo a través de las edades): ―La característica principal de estos exorcismos judíos es el
hecho de que se pronuncian nombres de los cuales se cree que son eficaces, es decir,
nombres de ángeles buenos, que se usan o solos o en combinación con Él (—Dios);
ciertamente el confiar en simples nombres había llegado a ser una superstición entre los judíos
desde mucho tiempo antes, y se consideraba muy importante que se usaran los nombres
apropiados, que variaban para diferentes tiempos y ocasiones. No hay duda de que fue esta
creencia supersticiosa lo que impulsó a los hijos de Esceva, quienes habían sido testigos del
buen éxito de los exorcismos de San Pablo en el nombre de Jesús, a tratar de emplear por su
cuenta la fórmula: ‗Te conjuro por Jesús a quien Pablo predica,‘ con resultados desastrosos
para ellos. (Hechos, xix, 13). Era una creencia judía popular, aceptada hasta por un docto
cosmopolita como Josefo, que Salomón había recibido el poder de expulsar demonios, y que
había compuesto y transmitido ciertas fórmulas que eran eficaces para ello. El historiador judío
registra que cierto Eleazar, en la presencia del emperador Vespasiano y sus oficiales, logró, por
medio de un anillo mágico aplicado a la nariz de un poseído, sacar al demonio por las narices...
debiéndose la virtud del anillo al hecho de que encerraba cierta raíz rara que estaba indicada
en las fórmulas de Salomón, y que era extremadamente difícil de obtener.‖—Vea Antiquities of
the Jews (Antigüedades judaicas) de Josefo, Libro 8, cap. 2, sec. 5 y Guerra de los judíos,
Libro 7, sec. xxv, párrafo 3.
*** w79 15/2 págs. 13-15 El Sermón del Monte... ‗Oigan estos dichos, y háganlos‘ ***
JESÚS concluyó el Sermón del Monte con una ilustración doble: ―Por lo tanto a todo el que oye
estos dichos míos y los hace se le asemejará a un varón discreto, que edificó su casa sobre la
masa de roca. Y descendió la lluvia y vinieron las inundaciones y soplaron los vientos y dieron
con ímpetu contra esa casa, pero no se hundió, porque había sido fundada sobre la masa de
roca.‖—Mat. 7:24, 25; compare con Lucas 6:47, 48.
La expresión ―estos dichos míos‖ se refiere a las cosas que se enseñaron en el Sermón del
Monte. ―Todo el que oye‖ esos dichos no es una frase que solo se refiera a los que de hecho
estuvieron presentes para escuchar el gran discurso de Jesús. Esto también incluye a todos los
que posteriormente oyen verbalmente y por lectura su famoso sermón. Sin embargo, los
beneficios duraderos solamente los recibe el que tanto oye como ―hace‖ lo que Jesús estimuló
a hacer.
Esto no significa simplemente ejecutar actos de adoración, abnegación y caridad que otros
puedan admirar. Pocos pudieran igualar el celo que mostraban los fariseos por tales cosas. Sin
embargo, ellos efectuaban estas cosas con hipocresía, y por eso éstas no significaban nada
para Dios. (Note Mateo 6:1, 2, 5, 16.) En vez de dar énfasis a hechos que los seres humanos
pueden ver, Jesús instó a los que le escuchaban a transformarse desde lo interior, por medio
de cultivar las disposiciones mentales y del corazón que verdaderamente agradan a Dios. Por
ejemplo, el Hijo de Dios dio a su auditorio la amonestación de reconocer que eran pobres en
sentido espiritual y necesitaban a Dios (Mat. 5:3), de desarrollar apacibilidad de temperamento
con relación a Dios y el congénere humano (Mat. 5:5), de amar la justicia y ser misericordiosos,
de corazón puro y pacíficos. (Mat. 5:6-9) Las personas que escuchen este consejo
desarrollarán una personalidad verdaderamente semejante a la de Dios. Esto se manifiesta en
―obras excelentes‖ que resplandecen para la gloria de Dios. Entre éstas está el sentirse uno
movido, como se sintieron muchos de los que escucharon a Jesús en aquel tiempo, a
proclamar las ―buenas nuevas‖ a otras personas.—Mat. 5:14-16; compare con Colosenses
3:10, 16.
La persona que es ‗discreta‘ (discernidora, que muestra buen juicio, prudente) edifica su casa
―sobre la masa de roca,‖ un gran cuerpo rocoso como una montaña, un peñasco o una enorme
formación rocosa. La casa que está sólidamente fijada sobre un fundamento de roca
permanece intacta durante la furia de las tormentas. ―La lluvia‖ y ―las inundaciones‖ (que
ocurren súbitamente en los valles de torrente durante un aguacero) no barren con su
fundamento. Los ―vientos‖ que la azotan desde todo lado no hacen que la casa ‗se hunda‘
durante una tormenta.
En sentido figurado, el construir la casa de uno sobre la masa de roca significa amoldar los
pensamientos, motivos y hechos subsiguientes de uno a todo el cuerpo o conjunto de ―estos
dichos míos,‖ como se encuentran en el Sermón del Monte. Las adversidades que azotan de
súbito como una tempestad violenta en Palestina no pueden llevarse un fundamento tan sólido
para la conducta piadosa. Es durante tiempos de dificultad que el que es hacedor de las
palabras de Jesús ‗se asemejará‘ a (o demostrará que es como) el constructor discreto que
edifica sobre un fundamento de roca. Los rasgos y cualidades personales que él ha
desarrollado en armonía con la Palabra de Dios no ‗se hundirán‘ cuando sobrevengan
circunstancias difíciles. No abandonará su servicio a Dios.
Por otra parte, Jesús pasó a decir: ―A todo el que oye estos dichos míos y no los hace se le
asemejará a un varón necio, que edificó su casa sobre la arena. Y descendió la lluvia y vinieron
las inundaciones y soplaron los vientos y dieron contra esa casa y se hundió, y fue grande su
desplome.‖—Mat. 7:26, 27; compare con Lucas 6:49.
En el país donde Jesús efectuó su ministerio sería insensato construir una casa sobre arena.
La lluvia, las inundaciones y los furiosos vientos terminarían rápidamente con tal construcción.
‗Su desplome sería grande‘... completo y sin posibilidad de reparaciones.
Algo similar le sucedería figurativamente al que ―oye estos dichos míos y no los hace.‖ Tal
persona no basa su vida en la obediencia a las enseñanzas de Cristo, sino en desobediencia
egoísta a los dichos de Cristo, la cual, como arena, se va en una inundación. Durante los días
tranquilos, en los cuales la vida fluye sin muchas dificultades, tal individuo pudiera ocultar el
hecho de que en él faltan cualidades de piedad o devoción. Pero tan pronto como azotan las
dificultades ‗se le asemeja,‘ o resulta ser similar, al insensato que ha edificado sobre la arena.
En cuanto a cualquier fingimiento por parte de él en el sentido de que sea siervo de Dios, las
adversidades tempestuosas harán que se pandee y sufra un ‗gran desplome.‘ Santiago, quien
escribió parte de la Biblia, al considerar el hecho de que era necesario reemplazar los
pensamientos y motivos incorrectos con pensamientos y motivos correctos para llegar a ser un
feliz ‗hacedor de la obra de Dios,‘ dio consejo similar al que dio Jesús:
―Háganse hacedores de la palabra, y no solamente oidores, engañándose a ustedes mismos
con razonamiento falso. Porque si alguno es oidor de la palabra, y no hacedor, éste es
semejante al hombre que mira su rostro natural en un espejo. Pues se mira, y se va e
inmediatamente olvida qué clase de hombre es. Pero el que mira con cuidado en la ley perfecta
que pertenece a la libertad y persiste en ella, éste, por cuanto se ha hecho, no un oidor
olvidadizo, sino un hacedor de la obra, será feliz al hacerla él mismo.‖—Sant. 1:22-25.
Después, el relato del Evangelio de Mateo añade: ―Ahora bien, cuando Jesús terminó estos
dichos, el efecto fue que las muchedumbres quedaron atónitas por su modo de enseñar;
porque les enseñaba como persona que tiene autoridad, y no como sus escribas.‖—Mat. 7:28,
29.
El ―modo de enseñar‖ de Jesús, es decir, todo el conjunto de información instructiva del
Sermón del Monte, causó asombro en sus oyentes. No era la clase de enseñanza que estaban
acostumbrados a recibir de ―sus escribas,‖ quienes eran doctos en la tradición oral judía.
Cuando los escribas enseñaban algo, lo decían ―en el nombre de‖ alguna autoridad previa.
Respecto a esto, leemos en el Theological Dictionary of the New Testament (Diccionario
teológico del Nuevo Testamento):
―El término mish-shum [―en el nombre de‖] es importante en la tradición judía. El r[abino] Meir
da una parábola en el nombre (mish-shum) del rabino Gamaliel, . . . El que oía algo en la casa
de instrucción y lo pasaba a otras personas tenía la obligación de citar la autoridad a la cual
recurría, en cuyo nombre pasaba a otros la tradición. Una de las 48 condiciones necesarias
para adquirir la Tora es que ‗uno pronuncie todo dicho en el nombre de su autor. . . ,‘ Ab[oth], 6,
6; cf. Meg[illah], 15a. Esto muestra qué autoridad, o cuánta, tiene la declaración.‖
Un relato rabínico dice que Hillel el Grande, quien vivió durante el primer siglo E.C., enseñó
cierta tradición correctamente. ―Pero, aunque discursó sobre aquel asunto todo el día,
no recibieron su doctrina, hasta que dijo al fin: Así lo oí de Shemaia y Abtalión [autoridades
anteriores a Hillel].‖
Jesús no enseñó así. En vez de hablar en el nombre de otro ser humano, el Hijo de Dios
declaró con frecuencia: ―En verdad [yo] les digo,‖ ―Sin embargo, yo les digo.‖ (Vea, por ejemplo,
Mateo 5:18, 20, 22, 26, 28, 32, 34, 39, 44.) Habló como ―persona que tiene autoridad,‖ una que
representaba directamente a Dios, como sucedió en el caso de los profetas inspirados de antes
del cristianismo. (Compare con Mateo 28:18.) ¡Cuán agradecidos podemos estar de que a Dios
le haya parecido conveniente que este gran discurso se haya registrado en su Palabra
inspirada!
[Nota]
Para un relato de lo rápidamente que las tempestades y las inundaciones destructivas pueden
presentarse en Palestina, vea la experiencia moderna que se registra en ¡Despertad! del 22 de
julio de 1970, página 24.
MARCOS, LAS BUENAS NUEVAS SEGÚN
CONTENIDO
El ministerio de Juan el Bautista (1:1-11).
La actividad de Jesús desde que fue tentado por el Diablo basta que envió a los doce
apóstoles (1:12-6:6).
o Tentado por el Diablo; empieza el ministerio en Galilea después del arresto de
Juan (1:12-15).
o Llama a sus primeros discípulos; expulsa demonios y cura a los enfermos (1:16-
45).
o Los fariseos también critican sus acciones; traman contra él (2:1-3:6).
o Cura a muchos y expulsa demonios; selecciona a los doce apóstoles (3:7-19).
Refuta la acusación de que expulsaba demonios por medio del gobernante de los
demonios (3:20-30).
o Compara a sus seguidores a hermanos, hermanas y madre (3:31-35).
Enseñanza: Varias ilustraciones, entre ellas la del sembrador y la del grano de mostaza;
explicación privada para los discípulos (4:1-34).
Varios milagros: Calma la tempestad de viento; sana al hombre endemoniado; sanaa la
mujer que padecía flujo de sangre; resucita a la hija de Jairo (4:35-5:43).
Predicación en su propio territorio (6:1-6).
El ministerio de Jesús desde que envió a los doce apóstoles hasta que partió de las
regiones de Tiro y Sidón (6:7-7:30).
o Envía a los doce apóstoles (6:7-13).
o Las noticias de las obras poderosas de Jesús llegan a Herodes (6:14-29).
o Los apóstoles regresan con un informe en cuanto a su actividad (6:30-32).
o La enseñanza y los milagros de Jesús: alimenta a cinco mil, anda sobre el mar y
sana a enfermos (6:33-56).
o La cuestión del lavado de manos tradicional (7:1-23).
o En las regiones de Tiro y Sidón es sanada la hija endemoniada de la mujer
sirofenicia (7:24-30).
Desde que Jesús parte de las regiones de Tiro y Sidón hasta que comienza su ministerio
en Perea (7:31-9:50).
o Milagros: Sana a un hombre sordo; alimenta a unos cuatro mil hombres (7:31-
8:9).
o Disputa con los fariseos en cuanto a la señal; advierte en cuanto a la levadura de
los fariseos y la de Herodes (8:10-21).
o Restauración progresiva de la vista de un ciego en Betsaida (8:22-26).
o Pedro identifica a Jesús como el Cristo y pone objeciones en cuanto a las cosas
que le tenían que acontecer a Jesús; Pedro es censurado (8:27-33).
o Los requisitos para ser seguidor de Jesús (8:34-38).
o La visión de la transfiguración (9:1-13).
Curación de un muchacho endemoniado a quien los discípulos de Jesús no pudieron
sanar (9:14-29).
o Jesús predice su muerte y resurrección; corrige y enseña a los discípulos (9:30-
50).
El ministerio de Jesús en Perea e inmediaciones de Jericó (10:1-52).
o Jesús puesto a prueba sobre la cuestión del divorcio (10:1-12).
o El reino pertenece a personas que sean como niñitos (10:13-16).
o Le dice al hombre rico los requisitos para conseguir la vida eterna: las
bendiciones que resultan de ser seguidor de Jesús (10:17-31).
o Los sufrimientos futuros de Jesús; la petición de Santiago y Juan de sentarse a la
diestra de Jesús (10:32-45).
o La curación del ciego Bartimeo cerca de Jericó (10:46-52).
Días finales del ministerio público de Jesús (11:1-14:16).
La entrada triunfal de Jesús en Jerusalén (11:1-11).
La higuera maldecida (11:12-14).
El templo limpiado (11:15-18).
Se les enseña a los discípulos acerca de la fe y de la oración (11:19-25).
Los principales sacerdotes y otros ponen en duda la autoridad de Jesús; su respuesta y
la ilustración de la viña y los cultivadores inicuos (11:27-12:12).
Los esfuerzos para entrampar a Jesús en el asunto de los impuestos y la resurrección:el
mayor mandamiento de la Ley (12:13-40).
Jesús observa a los que hacían contribuciones en el templo; la dádiva de una viuda
pobre (12:41-44).
Predice la destrucción del templo; después da una ―señal‖ en respuesta a la pregunta de
los discípulos (13:1-36).
Complot contra Jesús; Judas accede a traicionarle (14:1-11).
Los preparativos para la Pascua (14:12-16).
14 de Nisán, el último día de Jesús sobre laTierra (14:17-15:41).
La celebración de la Pascua seguida por la institución de la Cena del Señor (14:12-26).
A todos se les haría tropezar y Pedro repudiaría a Jesús tres veces (14:27-31).
Los acontecimientos en el jardín de Getsemaní (14:32-52).
Jesús ora; Pedro, Santiago y Juan se duermen (14:32-42).
Judas traiciona a Jesús con un beso; la chusma detiene a Jesús; todos le
abandonan y huyen (14:43-52).
Jesús juzgado y declarado culpable de blasfemia; Pedro le niega (14:53-72).
Consulta del Sanedrín al amanecer; Jesús ante Pilato, el cual cede ante las demandas
de que lo fijen en un madero (15:1-15).
Los soldados se burlan de Jesús, lo conducen fuera y es fijado en un madero; expira
(15:16-41).
El entierro de Jesús, su resurrección (15:42-16:8).
Se aparece después de su resurrección (conclusión larga; 16:9-20).
*** w89 15/10 págs. 30-31 Joyas del Evangelio de Marcos ***
JEHOVÁ, mediante su espíritu, inspiró a Marcos para que escribiera un relato lleno de acción
sobre la vida y el ministerio terrestres de Jesús. Aunque este Evangelio no dice que Marcos fue
su escritor, hay prueba de esto en las obras de Papías, Justino Mártir, Tertuliano, Orígenes,
Eusebio, Jerónimo y otros cuyos escritos son de los primeros cuatro siglos de nuestra era
común.
Según la tradición, el apóstol Pedro suministró la información básica para este Evangelio. Por
ejemplo, Orígenes dijo que Marcos lo escribió ―de acuerdo con las instrucciones de Pedro‖.
Pero parece que Marcos tuvo a su alcance también otras fuentes, pues los discípulos se
reunían en la casa de su madre. De hecho, puesto que puede que Marcos haya sido el ―joven‖
que evadió a los que arrestaron a Jesús, quizás se relacionó personalmente con Cristo.
(Marcos 14:51, 52; Hechos 12:12.)
¿Para quiénes se escribió?
Al parecer Marcos escribió principalmente para lectores gentiles. Por ejemplo, su estilo conciso
se adaptaba a la naturaleza romana. Definió ―corbán‖ como ―una dádiva dedicada a Dios‖
(7:11) y mencionó que el templo se podía ver desde el monte de los Olivos (13:3). Marcos
explicó también que los fariseos ―practicaban el ayuno‖ y que los saduceos ―dicen que no hay
resurrección‖ (2:18; 12:18). Esos comentarios serían innecesarios para lectores judíos.
Por supuesto, la lectura del Evangelio de Marcos puede beneficiar a cualquier persona. Pero
¿qué datos pueden ayudarnos a apreciar algunas de sus joyas?
El Hijo de Dios como obrador de milagros
Marcos relata los milagros que Cristo efectuó mediante el poder de Dios. Por ejemplo, en cierta
ocasión había una multitud tan grande en una casa que hubo que bajar a un paralítico por una
abertura cavada en el techo a fin de acercarlo a Jesús para que lo sanara (2:4). Debido a que
la casa estaba atestada de gente, puede ser que subieran al hombre por una escalera de mano
o por una escalera exterior que fuera parte de la casa. Pero ¿por qué fue necesario cavar por el
techo? Pues bien, la mayoría de los techos eran planos y se apoyaban en vigas que iban de
una pared a otra. Cruzaban las vigas unos cabios o listones cubiertos con ramas, cañas y
elementos estructurales por el estilo. Encima había una capa gruesa de tierra cubierta por un
enlucido de arcilla o de arcilla mezclada con cal. Por consiguiente, para poner al paralítico en
presencia de Jesús, unos hombres tuvieron que cavar por el techo de tierra. Pero ¡qué
bendición recibieron después, por lo que hicieron! Cristo sanó al hombre, y todos los presentes
glorificaron a Dios (2:1-12). ¡Qué excelente garantía de que el Hijo de Jehová efectuará
curaciones maravillosas en el nuevo mundo!
Jesús efectuó uno de sus milagros a bordo de una barca cuando calmó una tempestad de
viento en el mar de Galilea, después de ser despertado de su sueño sobre ―una almohada‖
(4:35-41). Parece que la almohada no era del tipo suave que se usa ahora para recostar la
cabeza en la cama. Puede que haya sido un simple vellón sobre el cual se sentaban los
remeros, o un almohadón o cojín que servía de asiento en la popa. De todos modos, cuando
Jesús dijo al mar: ―¡Silencio! ¡Calla!‖, los presentes allí fueron testigos de la fe en acción, pues
―el viento se apaciguó, y sobrevino una gran calma‖.
Ministerio en la Decápolis
Después de cruzar el mar de Galilea, Jesús entró en la Decápolis o región de diez ciudades.
Aunque sin duda en ellas había grandes poblaciones judías, aquellas ciudades eran centros de
cultura griega o helenística. Allí, en el país de los gerasenos, Jesús libró del poder de los
demonios a un hombre que ―tenía su guarida entre las tumbas‖ (5:1-20).
A veces tumbas labradas en la roca eran guaridas de dementes, escondites de delincuentes o
moradas de pobres. (Compárese con Isaías 22:16; 65:2-4.) Según cierta obra del siglo XIX, una
persona que visitó la zona donde Jesús halló al endemoniado dijo lo siguiente sobre una
morada de ese tipo: ―La tumba tenía unos ocho pies (2,4 metros) de altura por dentro, pues
había un gran escalón desde la piedra del umbral hasta el piso. El sitio medía unos doce pasos
de ancho por otros doce de largo; pero como en él no se recibía luz sino por la entrada, no
podíamos ver si había una cámara interior como en otras tumbas. Todavía quedaba dentro un
sarcófago en perfecto estado, y este lo usaba ahora la familia como baúl para el maíz y otras
provisiones, de modo que este profanado sepulcro de los muertos se había convertido así en
un refugio seguro, fresco y conveniente para los vivos‖.
Jesús y la tradición
En cierta ocasión los fariseos y unos escribas se quejaron de que los discípulos de Jesús
comían sin lavarse las manos. Para beneficio de los lectores gentiles, Marcos explicó que los
fariseos y otros judíos ‗no comían a menos que se lavaran las manos hasta el codo‘. Al
regresar del mercado, no comían sino hasta después de haberse limpiado por rociadura, y
entre otras de sus tradiciones había la de los ―bautismos de copas y cántaros y vasos de cobre‖
(7:1-4).
Además de rociarse santurronamente antes de comer, aquellos judíos bautizaban, o sumergían
en agua, las copas, los cántaros y los vasos de cobre que usaban en las comidas. El erudito
John Lightfoot ilustró lo apegados que estaban a las tradiciones. Por citas de obras rabínicas
mostró que se prestaba mucha atención a detalles como la cantidad de agua, el modo y el
tiempo satisfactorios para lavarse. Lightfoot citó una fuente que indicaba que ciertos judíos se
lavaban cuidadosamente antes de las comidas para evitar que les hiciera daño Shibta, ―un
espíritu malvado que se asienta sobre las manos de los hombres por la noche: y si alguno toca
su alimento sin haberse lavado las manos, ese espíritu se asienta en ese alimento, y este se
hace peligroso‖. ¡No es de extrañar que Jesús condenara a los escribas y los fariseos por
‗soltar el mandamiento de Dios mientras asían firmemente la tradición de los hombres‘ (7:5-8)!
El ministerio público final de Jesús
Después de informar sobre el ministerio posterior de Jesús en Galilea y Su obra en Perea,
Marcos fijó la atención en los sucesos que tuvieron lugar en Jerusalén y sus alrededores. Por
ejemplo, habló de una ocasión en que Cristo observaba a la gente echar dinero en las arcas de
la tesorería del templo. Jesús vio que una viuda pobre contribuyó solamente ‗dos monedas
pequeñas de muy poco valor‘. Sin embargo, dijo que ella había dado más que todos los demás,
porque ellos habían contribuido de lo que les sobraba, mientras que ella, ‗de su indigencia,
echó todo lo que tenía para vivir‘ (12:41-44). Según el texto griego, ella contribuyó dos
leptones. El leptón era la más pequeña moneda judía de cobre o de bronce, y hoy su valor
monetario es casi insignificante. Pero aquella pobre hizo cuanto pudo, y dio un ejemplo
excelente de generosidad en apoyo de la adoración verdadera. (2 Corintios 9:6, 7.)
Hacia el fin del ministerio de Jesús, él fue interrogado por Poncio Pilato, cuyo nombre y el título
de ―prefecto‖ aparecen en una inscripción encontrada en Cesarea en 1961. En las provincias
remotas como Judea, el gobernador (prefecto) tenía dominio militar, era responsable de la
administración financiera y servía como juez instructor. Pilato tenía autoridad para poner en
libertad a Cristo, pero cedió a la presión de los enemigos de Jesús y, procurando satisfacer a la
muchedumbre, lo entregó para que fuera fijado en un madero y puso en libertad al sedicioso
asesino Barrabás (15:1-15).
Hay varias tradiciones respecto a la vida posterior de Pilato y su muerte. Por ejemplo, el
historiador Eusebio escribió: ―Pilato mismo, el gobernador en los días de nuestro Salvador,
estuvo implicado en calamidades tan graves que se vio obligado a convertirse en su propio
verdugo y a castigarse con su propia mano: la justicia divina, al parecer, no tardó en
alcanzarlo‖. No obstante, prescindiendo de tal posibilidad, la muerte más importante fue la de
Jesús. El oficial del ejército romano (centurión) que fue testigo ocular de la muerte de Cristo y
de los sucesos extraordinarios que la acompañaron dijo realmente la verdad cuando declaró:
―Ciertamente este hombre era Hijo de Dios‖ (15:33-39).
*** w08 15/7 págs. 12-16 ***Es Dios quien ―lo hace crecer‖
―Ni el que planta es algo, ni el que riega, sino Dios que lo hace crecer.‖ (1 COR. 3:7.)
EL APÓSTOL Pablo mencionó un privilegio del que todos los cristianos podemos disfrutar: el
de ser ―colaboradores de Dios‖ (léase 1 Corintios 3:5-9). ¿En qué colaboramos con él? En la
obra de hacer discípulos. Pablo compara dicha labor a la de sembrar y regar la semilla, y nos
recuerda que Dios es quien la hace crecer. En efecto, para cosechar buenos resultados
necesitamos la ayuda de Jehová.
2
Tener eso presente nos ayuda a ser humildes y adoptar la debida actitud hacia nuestro
ministerio. Aunque prediquemos y enseñemos con empeño, el mérito por el crecimiento es de
Jehová. ¿Por qué? Porque por mucho que lo intentemos, ninguno de nosotros puede entender
del todo el proceso de crecimiento, y mucho menos controlarlo. El rey Salomón dijo
atinadamente que nosotros ―no conoce[mos] la obra del Dios verdadero, que hace todas las
cosas‖ (Ecl. 11:5).
3
Pero el hecho de que no comprendamos plenamente el proceso de crecimiento no hace
que nuestra labor sea frustrante. Al contrario, la vuelve interesante, intrigante. Salomón dijo:
―Por la mañana siembra tu semilla, y hasta el atardecer no dejes descansar la mano; pues
no sabes dónde tendrá éxito esto, aquí o allí, o si ambos a la par serán buenos‖ (Ecl. 11:6).
Cuando un agricultor siembra, no sabe si las semillas van a brotar ni dónde lo van a hacer,
porque hay muchos factores que escapan a su control. Lo mismo sucede en la obra de hacer
discípulos, y el capítulo 4 del Evangelio de Marcos recoge dos parábolas de Jesús que así lo
demuestran. Veamos lo que podemos aprender de ellas.
Diferentes tipos de terreno
4
En el pasaje de Marcos 4:1-9, Jesús habla de un sembrador que esparce semillas, las
cuales van cayendo en diferentes lugares. Allí leemos: ―¡Miren! El sembrador salió a sembrar.
Y al ir sembrando, parte de la semilla cayó a lo largo del camino, y las aves vinieron y se la
comieron. Y otra parte cayó sobre el pedregal, donde, por supuesto, no tenía mucha tierra, y
brotó inmediatamente por no tener profundidad de tierra. Mas cuando salió el sol, se chamuscó,
y, por no tener raíz, se marchitó. Y otra parte cayó entre los espinos, y los espinos crecieron y
la ahogaron, y no dio fruto. Mas otras cayeron sobre la tierra excelente, y, creciendo y
aumentando, empezaron a dar fruto, y llevaban de a treinta y de a sesenta y de a ciento por
uno‖.
5
En tiempos bíblicos, el sembrador normalmente llevaba las semillas en un pliegue de la
ropa o en una bolsa, y las sembraba a voleo, es decir, arrojándolas al aire con la mano.
De modo que si en esta parábola la semilla termina en diferentes tipos de terreno no es porque
esa sea la intención del sembrador, sino porque, al ser esparcida en el aire, cae por casualidad
en diversos lugares.
6
No hace falta adivinar el significado de esta parábola, pues Jesús mismo pasó a explicarla,
como leemos en Marcos 4:14-20: ―El sembrador siembra la palabra. Estos, pues, son aquellos
a lo largo del camino donde se siembra la palabra; mas luego que la han oído viene Satanás y
se lleva la palabra que ha sido sembrada en ellos. Y, así mismo, estos son los que han sido
sembrados sobre los pedregales: luego que han oído la palabra, la aceptan con gozo. Sin
embargo, no tienen raíz en sí mismos, sino que continúan por un tiempo; entonces, luego que
surge tribulación o persecución a causa de la palabra, se les hace tropezar. Y hay otros que
son sembrados entre los espinos; estos son los que han oído la palabra, pero las inquietudes
de este sistema de cosas y el poder engañoso de las riquezas y los deseos de las demás
cosas van entrando y ahogan la palabra, y esta se hace infructífera. Finalmente, los que han
sido sembrados en la tierra excelente son los que escuchan la palabra y la reciben
favorablemente y llevan fruto de a treinta y a sesenta y a ciento por uno‖.
7
Notemos que Jesús no dice que el sembrador use distintos tipos de semilla. Lo que dice es
que esta cae en diferentes tipos de terreno; eso es lo que hace que los resultados varíen.
El primer tipo de terreno es duro, el segundo es poco profundo y el tercero está lleno de
espinos. El cuarto, en cambio, es tierra buena que produce fruto (Luc. 8:8). ¿Qué representa la
semilla? El mensaje del Reino que encontramos en la Palabra de Dios (Mat. 13:19). ¿Y los
diferentes tipos de terreno? Las diferentes actitudes del corazón (léase Lucas 8:12, 15).
8
¿A quiénes representa el sembrador? A los colaboradores de Dios, quienes proclaman las
buenas nuevas del Reino. Al igual que Pablo y Apolos, ellos plantan y riegan; pero por mucho
que se esfuercen, no todos logran los mismos resultados. ¿Por qué? Porque no todos los que
escuchan el mensaje tienen la misma actitud de corazón. Recordemos que el sembrador de la
parábola no puede controlar los resultados. Saber esto consuela a todos los cristianos y en
particular a los que llevan muchos años, incluso décadas, predicando fielmente sin muchos
resultados aparentes. ¿Por qué los consuela ese hecho?
9
La fidelidad del sembrador no se mide por los resultados de su trabajo. Así lo confirmó
Pablo cuando dijo: ―Cada persona recibirá su propio galardón según su propia labor‖ (1 Cor.
3:8). Lo que se recompensa es la labor, no los resultados. Jesús les recalcó eso a sus
discípulos en una ocasión en la que estos acababan de regresar de una gira de predicación.
Los discípulos estaban muy contentos porque, al usar el nombre de Jesús, los demonios
quedaban sometidos a ellos. Aunque eso era motivo de alegría, él les dijo: ―No se regocijen a
causa de esto, de que los espíritus queden sujetos a ustedes, sino regocíjense porque sus
nombres hayan sido inscritos en los cielos‖ (Luc. 10:17-20). Puede que un sembrador de la
palabra no vea que su labor esté rindiendo mucho fruto; sin embargo, eso no significa que haya
sido menos diligente o fiel que otros. Los resultados dependen en buena medida de la actitud
de corazón de quienes le escuchan. Y, después de todo, es Dios quien hace crecer la semilla.
La responsabilidad de quienes escuchan la palabra
10
¿Qué puede decirse de quienes escuchan la palabra? ¿Están predestinados a responder
de cierto modo? No. Son ellos quienes deciden si serán comparables a tierra excelente o no.
La actitud de corazón de la persona puede cambiar para bien o para mal (Rom. 6:17). En su
parábola, Jesús dijo que en cuanto algunos oyen la palabra, ―viene Satanás y se [la] lleva‖.
Pero eso no tiene por qué suceder. En Santiago 4:7 se anima a los cristianos a oponerse al
Diablo, pues de ese modo él huirá de ellos. Jesús indicó que otros aceptan la palabra con gozo
pero al cabo de un tiempo tropiezan porque ―no tienen raíz en sí mismos‖. Sin embargo, las
Escrituras exhortan a quienes quieren servir a Dios a estar ―arraigados y establecidos sobre el
fundamento‖ para que puedan comprender ―cuál es la anchura y longitud y altura y
profundidad‖ y puedan ―conocer el amor del Cristo que sobrepuja al conocimiento‖ (Efe. 3:17-
19; Col. 2:6, 7).
11
Jesús dice que hay otros que oyen la palabra pero dejan que ―las inquietudes de este
sistema de cosas y el poder engañoso de las riquezas‖ influyan en ellos y ahoguen la palabra
(1 Tim. 6:9, 10). ¿Cómo pueden evitar que eso les ocurra? El apóstol Pablo responde: ―Que su
modo de vivir esté exento del amor al dinero, y estén contentos con las cosas presentes.
Porque él ha dicho: ‗De ningún modo te dejaré y de ningún modo te desampararé‘‖ (Heb. 13:5).
12
Por último, Jesús señaló que los que son sembrados en la tierra excelente dan ―fruto de a
treinta y a sesenta y a ciento por uno‖. De modo que algunos de los que responden a la palabra
tienen una buena actitud de corazón y producen fruto. No obstante, la cantidad de fruto, es
decir, la participación en la predicación, varía según las circunstancias de cada uno. Por
ejemplo, hay quienes no pueden hacer tanto como quisieran en el ministerio debido a su edad
o su estado de salud (compárese con Marcos 12:43, 44). Aunque como sembradores tienen
poco o ningún control sobre eso, cuando ven que Jehová produce crecimiento, se alegran
mucho (léase Salmo 126:5, 6).
El sembrador que duerme
13
En Marcos 4:26-29 encontramos otra parábola sobre un sembrador: ―De esta manera el
reino de Dios es como cuando un hombre echa la semilla sobre la tierra, y duerme de noche y
se levanta de día, y la semilla brota y crece alta —precisamente cómo, él no lo sabe—. Por sí
misma la tierra gradualmente fructifica: primero el tallo de hierba, luego la espiga, finalmente el
grano lleno en la espiga. Pero tan pronto como el fruto lo permite, él mete la hoz, porque ha
llegado el tiempo de la siega‖.
14
¿Quién es este sembrador? Algunos comentaristas de la cristiandad opinan que es
Jesucristo. Pero no tiene sentido decir que Jesús duerme y no sabe cómo crece la semilla. Sin
duda él conoce muy bien el proceso de crecimiento. Este sembrador, al igual que el de la
parábola anterior, representa a cada uno de los proclamadores del Reino, quienes siembran la
semilla del Reino con su celosa predicación. Y la semilla representa la palabra que predican.
15
Jesús dice que el sembrador ―duerme de noche y se levanta de día‖. Esas palabras
no indican que sea negligente, sino que sigue la rutina de vida de la mayoría de la gente, es
decir, trabaja de día y duerme de noche. Mientras tanto, ―la semilla brota y crece alta‖. Jesús
añade: ―Precisamente cómo, él no lo sabe‖. En el pasaje se destaca el hecho de que la tierra
fructifica ―por sí misma‖.
16
¿Qué quería enseñar Jesús con esta parábola? Notemos que lo que se enfatiza es el
crecimiento gradual de la planta. ―Por sí misma la tierra gradualmente fructifica: primero el tallo
de hierba, luego la espiga, finalmente el grano lleno en la espiga.‖ (Mar. 4:28.) El crecimiento
de una planta se produce poco a poco y por etapas. Ninguno de nosotros puede forzarlo
ni acelerarlo. Lo mismo sucede con el crecimiento espiritual. La persona correctamente
dispuesta para la vida eterna va progresando por etapas en la medida en que Jehová permite
que la verdad vaya creciendo en su corazón (Hech. 13:48; Heb. 6:1).
17
La parábola señala que ―tan pronto como el fruto lo permite‖, el sembrador participa en la
cosecha. ¿En qué sentido? Como hemos visto, Jehová hace crecer la verdad del Reino en el
corazón del nuevo discípulo. Pues bien, llega un momento en que el amor a Dios impulsa a tal
persona a dedicar su vida a él. Más adelante lo demuestra públicamente bautizándose. Y si se
trata de un varón, a medida que progresa va asumiendo más responsabilidades en la
congregación. Cuando alguien llega a ser discípulo, se regocijan tanto el sembrador de la
semilla que produjo a ese discípulo como otros cristianos que no participaron directamente en
su siembra (léase Juan 4:36-38). En efecto, ―el sembrador y el segador se regocij[a]n juntos‖.
EL AGRICULTOR tiene que ser paciente (Sant. 5:7). Después de sembrar las semillas, tiene
que esperar que germinen y crezcan. Se trata de un proceso gradual. Cuando las condiciones
son favorables, van apareciendo uno tras otro los brotes en el terreno. Luego los tallos siguen
creciendo hasta que finalmente producen espigas. Y una vez que estas maduran, el campo
queda listo para la cosecha. Contemplar el milagroso proceso de crecimiento sin duda nos llena
de asombro. Pero también nos da una lección de humildad. En efecto: nosotros podemos
sembrar la semilla y podemos regarla, pero el único que puede hacerla crecer es
Dios (compárese con 1 Corintios 3:6).
2
Como vimos en el artículo anterior, Jesús comparó la obra de predicar el Reino con la labor
de un sembrador. En la parábola de los diferentes tipos de terreno destacó que aunque la
semilla sea de buena calidad, lo que determina si esta crecerá y dará fruto es la actitud de
corazón de cada persona (Mar. 4:3-9). Y en la parábola del sembrador que duerme, mostró que
el labrador no comprende plenamente el proceso de crecimiento. La razón, según vimos, es
que el crecimiento se produce gracias al poder de Dios y no a los esfuerzos humanos (Mar.
4:26-29). Examinemos ahora otras tres parábolas de Jesús: la del grano de mostaza, la de la
levadura y la de la red barredera.
La parábola del grano de mostaza
3
La parábola del grano de mostaza, que también aparece en el capítulo 4 de Marcos,
resalta dos ideas: en primer lugar, el sorprendente crecimiento en la cantidad de personas que
han aceptado el mensaje del Reino, y en segundo lugar, la protección que estas reciben. Jesús
dijo: ―¿A qué hemos de asemejar el reino de Dios, o en qué ilustración lo presentaremos?
Como un grano de mostaza, que al tiempo que se sembró en la tierra era la más pequeña de
todas las semillas que hay en la tierra..., pero cuando se ha sembrado, sale y se hace mayor
que todas las demás legumbres, y produce grandes ramas, de modo que las aves del cielo
pueden hallar albergue bajo su sombra‖ (Mar. 4:30-32).
4
En esta parábola se habla del crecimiento del ―reino de Dios‖, crecimiento que se
manifiesta en la gran difusión que ha tenido el mensaje del Reino y en el aumento que ha
experimentado la congregación cristiana desde el Pentecostés del año 33. El grano de
mostaza, que es diminuto, se utiliza a veces para representar cosas muy pequeñas (compárese
con Lucas 17:6). Pero, aunque es de tamaño reducido, produce una planta que puede alcanzar
una altura de 3 a 5 metros (10 a 15 pies) y llegar a tener ramas fuertes, por lo que
prácticamente se la puede considerar un árbol (Mat. 13:31, 32).
5
La congregación cristiana se formó cuando 120 discípulos fueron ungidos con espíritu
santo en el Pentecostés del año 33. Aunque en ese momento constituían un grupo reducido, en
relativamente poco tiempo se les unieron miles de creyentes (léase Hechos 2:41; 4:4; 5:28; 6:7;
12:24; 19:20). En menos de tres décadas aumentó tanto la cantidad de cosechadores que el
apóstol Pablo pudo decir a la congregación de Colosas que las buenas nuevas ya se habían
―predicado en toda la creación que est[aba] bajo el cielo‖ (Col. 1:23). ¡Qué crecimiento tan
espectacular!
6
Desde el establecimiento del Reino de Dios en los cielos en el año 1914, las ramas del
simbólico árbol de mostaza se han extendido mucho más allá de lo esperado. El pueblo de
Dios ha presenciado el cumplimiento literal de la siguiente profecía del libro de Isaías: ―El
pequeño mismo llegará a ser mil, y el chico una nación poderosa‖ (Isa. 60:22). El grupito de
ungidos que participaba en la obra del Reino a principios del siglo XX no podía siquiera
imaginar que en el año 2008 habría casi siete millones de testigos de Jehová realizando dicha
obra en más de doscientos treinta países y territorios. Un crecimiento extraordinario, sin duda,
tanto como el del grano de mostaza de la parábola de Jesús.
7
Pero ahí no termina el crecimiento. Llegará el momento en que toda persona que viva en
este planeta sea súbdito del Reino de Dios. Para entonces, todos los malvados habrán sido
eliminados. Y eso no ocurrirá gracias a los esfuerzos humanos, sino a la intervención del Señor
Soberano Jehová (léase Daniel 2:34, 35). Entonces veremos el cumplimiento final de otra
profecía de Isaías, que dice: ―La tierra ciertamente estará llena del conocimiento de Jehová
como las aguas cubren el mismísimo mar‖ (Isa. 11:9).
8
Jesús dijo que las aves del cielo hallan refugio bajo la sombra del árbol, es decir, del Reino.
Estas aves no representan a los enemigos del Reino que intentan comerse las semillas, como
sucede con las aves de la parábola de los diferentes tipos de terreno (Mar. 4:4). En la parábola
del grano de mostaza, las aves representan a la gente de corazón recto que busca refugio en
la congregación cristiana. Tales personas ya están recibiendo protección de las prácticas moral
y espiritualmente degradantes de este mundo (compárese con Isaías 32:1, 2). Jehová hizo una
comparación similar entre el Reino mesiánico y un árbol al profetizar lo siguiente: ―A la montaña
de la altura de Israel la trasplantaré, y ciertamente echará ramas mayores y producirá fruto y
llegará a ser un cedro majestuoso. Y debajo de él realmente residirán todos los pájaros de toda
ala; en la sombra de su follaje residirán‖ (Eze. 17:23).
La parábola de la levadura
9
El crecimiento no siempre es visible a los ojos humanos. Esa es la idea que destacó Jesús
en su siguiente parábola, que dice: ―El reino de los cielos es semejante a la levadura, que una
mujer tomó y escondió en tres grandes medidas de harina, hasta que toda la masa quedó
fermentada‖ (Mat. 13:33). ¿Qué representa esta levadura, y qué relación guarda con el
crecimiento del Reino?
10
En la Biblia, la levadura a menudo representa el pecado. Por ejemplo, el apóstol Pablo la
utiliza para referirse a la influencia corruptora que ejercía cierto pecador en la congregación de
Corinto (1 Cor. 5:6-8). ¿Quiere decir eso que Jesús estaba utilizando aquí la levadura para
simbolizar el crecimiento de algo malo?
11
Antes de contestar esa pregunta, hemos de tener en cuenta tres factores básicos.
En primer lugar, aunque Jehová no permitía el uso de levadura en el período de la Pascua, en
otras ocasiones sí lo aceptaba. Los israelitas utilizaban levadura en las ofrendas de comunión
por acción de gracias, que presentaban voluntariamente para agradecer las muchas
bendiciones de Jehová. Las comidas que acompañaban a dichas ofrendas eran ocasiones
alegres (Lev. 7:11-15).
12
En segundo lugar, aunque en las Escrituras a veces un elemento represente algo
negativo, en otras ocasiones puede representar algo positivo. Por ejemplo, en 1 Pedro 5:8 se
compara a Satanás con un león, lo que indica que es peligroso y feroz. Sin embargo, en
Revelación 5:5 es a Jesús a quien se compara con un león, pues se le llama ―el León que es
de la tribu de Judá‖. En este caso, el león es un símbolo de valor y justicia.
13
En tercer lugar, Jesús no dijo que la levadura hubiera corrompido la masa, haciéndola
inservible. Simplemente estaba hablando del método de elaboración del pan. La mujer de la
parábola agregó levadura a la masa a propósito, y los resultados fueron positivos. Ahora bien,
como la levadura estaba escondida en la masa, el proceso de fermentación quedó oculto a sus
ojos. Esto nos recuerda la parábola del hombre que siembra la semilla y duerme de noche.
Jesús dijo que ―la semilla brota y crece alta —precisamente cómo, [el hombre] no lo sabe—‖
(Mar. 4:27). ¡Qué forma tan sencilla de ilustrar que el proceso de crecimiento espiritual no es
visible! Sin embargo, aunque al principio no podamos verlo, al final los resultados son obvios.
14
El crecimiento espiritual no solo es invisible a los ojos humanos, sino que también tiene
lugar por toda la Tierra. Esta es otra idea que se destaca en la parábola que estamos
analizando. La levadura fermenta toda la masa, las ―tres medidas grandes de harina‖ completas
(Luc. 13:21). De igual modo, la predicación del Reino que da origen al crecimiento espiritual se
ha extendido hasta tal punto que hoy las buenas nuevas se predican ―hasta la parte más
distante de la tierra‖ (Hech. 1:8; Mat. 24:14). ¡Qué honor es para nosotros contribuir a esta
increíble expansión de la obra del Reino!
La red barredera
15
Más importante que la cantidad de personas que quieren llegar a ser discípulos de
Jesucristo es la calidad de esos discípulos. Jesús se refirió a ese aspecto del crecimiento del
Reino en otra de sus parábolas, la de la red barredera, que empieza así: ―El reino de los cielos
es semejante a una red barredera bajada al mar, y que recoge peces de todo género‖ (Mat.
13:47).
16
La red barredera, que representa la predicación del Reino, recoge peces de todo tipo.
Jesús sigue diciendo: ―Cuando [la red] se llenó, la sacaron sobre la playa y, sentándose,
juntaron los [peces] excelentes en receptáculos, pero tiraron los que no eran apropiados. Así es
como será en la conclusión del sistema de cosas: saldrán los ángeles y separarán a los inicuos
de entre los justos, y los echarán en el horno de fuego. Allí es donde será su llanto y el crujir de
sus dientes‖ (Mat. 13:48-50).
17
¿Se refiere esa separación al juicio final de las ovejas y las cabras que se llevará a cabo
cuando Jesús llegue en su gloria? (Mat. 25:31-33.) No. Ese juicio final tendrá lugar durante la
gran tribulación, mientras que la separación mencionada en la parábola de la red barredera
tiene lugar durante ―la conclusión del sistema de cosas‖. Ese es el período en el que vivimos
ahora, un período que culmina en la gran tribulación. Entonces, ¿en qué consiste la separación
que se está llevando a cabo hoy día?
18
Millones de peces simbólicos del mar de la humanidad se han sentido atraídos a la
organización de Jehová en tiempos modernos. Algunos de ellos asisten a la Conmemoración,
otros van a las reuniones y otros aceptan con gusto estudiar la Biblia. Pero ¿demuestran todos
ellos que son cristianos verdaderos? Es cierto que los ―sacaron sobre la playa‖. Sin embargo,
Jesús nos dice que solo a los peces excelentes se les junta en los receptáculos, que
representan a las congregaciones cristianas. Los peces que no resultan apropiados se
desechan y con el tiempo se arrojan en el horno de fuego, que simboliza la destrucción.
19
Entre los peces que no son apropiados están muchas de las personas que estudiaban la
Biblia con los testigos de Jehová pero dejaron de hacerlo. También están algunos jóvenes que,
pese a haberse criado en hogares cristianos, en realidad nunca desearon seguir los pasos de
Jesús. No quisieron tomar la decisión de servir a Jehová, o si la tomaron, al poco tiempo
dejaron de servirle (Eze. 33:32, 33). No obstante, es imprescindible que todas las personas
sinceras dejen que se las junte en los ―receptáculos‖, o congregaciones, antes del día de juicio
final y que permanezcan en esos refugios.
20
¿Qué hemos aprendido al repasar brevemente estas tres parábolas de Jesús relativas al
crecimiento? De la primera hemos aprendido que, al igual que el grano de mostaza, los
intereses del Reino en la Tierra han crecido enormemente. Nada puede impedir que la obra de
Jehová siga adelante (Isa. 54:17). Además, quienes buscan ―albergue bajo [la] sombra‖ del
árbol están protegidos en sentido espiritual. La segunda parábola nos ha enseñado que es
Dios quien produce el crecimiento espiritual. Tal como la levadura escondida que acaba
fermentando toda la masa, ese crecimiento no siempre ha sido claramente perceptible, pero se
ha producido. Y de la tercera parábola hemos aprendido que no todos los que responden al
mensaje resultan ser discípulos de calidad. Algunos son como los peces no apropiados que
menciona Jesús.
21
¡Qué alentador es ver que Jehová está atrayendo a tantos peces excelentes! (Juan 6:44.)
Así lo demuestran los espectaculares aumentos que ha habido en país tras país. Y todo el
mérito es de Jehová Dios. En vista de lo que hemos analizado, todos deberíamos sentirnos
impulsados a obedecer esta exhortación de la antigüedad: ―Por la mañana siembra tu
semilla, [...] pues no sabes dónde tendrá éxito esto, aquí o allí, o si ambos a la par serán
buenos‖ (Ecl. 11:6).
[Notas]
Las explicaciones que siguen modifican lo que se publicó en los números de La Atalaya del 15
de junio de 1992, págs. 17-22, y del 15 de marzo de 1976, págs. 173-191.
Aunque el pasaje de Mateo 13:39-43 se refiere a un aspecto distinto de la obra de predicar el
Reino, se cumple en el mismo período que la parábola de la red barredera, es decir, durante
―la conclusión del sistema de cosas‖. La separación de los peces simbólicos es un proceso
continuo, tal como lo es la obra de sembrar y cosechar que se lleva a cabo durante este
período de tiempo (La Atalaya del 15 de octubre de 2000, págs. 25, 26; Adoremos al único
Dios verdadero, págs. 178-181, párrs. 8-11).
¿Significa eso que los ángeles ya han considerado inapropiados y han desechado a todos los
que han dejado de estudiar o de relacionarse con el pueblo de Jehová? De ningún modo. Si
alguien desea sinceramente regresar a Jehová, tiene las puertas abiertas (Mal. 3:7).
*** w08 15/2 págs. 28-30 Puntos sobresalientes del libro de Marcos ***
EL EXTRAORDINARIO MINISTERIO EN GALILEA
(Marcos 1:1–9:50)
En solo catorce versículos, Marcos relata la obra de Juan el Bautista y lo que sucedió
durante los cuarenta días que Jesús pasó en el desierto. Luego inicia una emocionante
descripción del ministerio de Jesús en Galilea. El empleo repetido de la palabra
inmediatamente confiere un tono de urgencia a la narración (Mar. 1:10, 12).
En menos de tres años, Jesús efectúa tres campañas de predicación en Galilea. Marcos
presenta la mayor parte del relato en orden cronológico, y omite tanto el Sermón del Monte
como muchos de los discursos más largos de Jesús.
Respuestas a preguntas bíblicas:
1:15. ¿A qué se refería Jesús cuando dijo que se había cumplido ―el tiempo
señalado‖? Jesús quiso decir que se había cumplido el tiempo señalado para que comenzara
su ministerio. Puesto que él estaba presente como el futuro rey que Jehová había elegido,
podía afirmar que el Reino de Dios se había acercado. Las personas sinceras que se sintieran
motivadas por su predicación podrían entonces dar pasos para obtener la aprobación divina.
1:44; 3:12; 7:36. ¿Por qué no quería Jesús que se dieran a conocer sus milagros?
Él no quería que las personas llegaran a conclusiones basadas en informes sensacionalistas o
posiblemente distorsionados. Más bien, quería que comprobaran por sí mismas que él era el
Cristo y que tomaran su decisión en consecuencia (Isa. 42:1-4; Mat. 8:4; 9:30; 12:15-21; 16:20;
Luc. 5:14). Hizo una excepción en el caso del hombre del país de los gerasenos que había
estado endemoniado, a quien curó y ordenó que fuera a contárselo a sus parientes. A Jesús le
habían pedido que abandonara aquella región, por eso tuvo muy poco contacto, si acaso
alguno, con sus habitantes. La presencia y el testimonio de un hombre al que Jesús había
curado podrían servir para contrarrestar cualquier comentario negativo sobre la pérdida de la
piara de cerdos (Mar. 5:1-20; Luc. 8:26-39).
2:28. ¿Por qué se llama a Jesús ―Señor hasta del sábado‖? El apóstol Pablo escribió
que ―la Ley tiene una sombra de las buenas cosas por venir‖ (Heb. 10:1). Tal como estipulaba
la Ley, el sábado venía al cabo de seis días de trabajo, y Jesús realizó muchas de sus
curaciones en sábado. Aquello prefiguró el descanso pacífico y otras bendiciones que la
humanidad disfrutará bajo el Reinado de Mil Años de Cristo una vez termine la opresiva
dominación de Satanás. Por lo tanto, el Rey de ese Reino es también ―Señor del sábado‖ (Mat.
12:8; Luc. 6:5).
3:5; 7:34; 8:12. ¿Cómo pudo Marcos conocer detalles relativos a los sentimientos de
Jesús? Marcos no era uno de los doce apóstoles ni tampoco un amigo íntimo de Jesús. Según
la tradición antigua, obtuvo buena parte de la información de su gran amigo, el apóstol Pedro
(1 Ped. 5:13).
6:51, 52. ¿Cuál era ―el significado de los panes‖ que los discípulos no captaron?
Apenas unas horas antes, Jesús había alimentado con solo cinco panes y dos pescados a
5.000 hombres, además de mujeres y niños. ―El significado de los panes‖ que los discípulos
deberían haber captado en aquella ocasión era que Jehová Dios le había dado poder a Jesús
para realizar milagros (Mar. 6:41-44). Si hubieran entendido la magnitud del poder que Jesús
había recibido, no se habrían sorprendido tanto cuando caminó milagrosamente sobre el agua.
8:22-26. ¿Por qué le devolvió Jesús la vista al ciego en dos etapas? Es probable que lo
hiciera por consideración al hombre. El ciego llevaba mucho tiempo acostumbrado a la
oscuridad, y recuperar la vista de forma gradual posiblemente le permitiera ir adaptándose al
brillo de la luz solar.
Lecciones para nosotros:
2:18; 7:11; 12:18; 13:3. Marcos habla de costumbres, expresiones, creencias y lugares tal
vez poco conocidos para los lectores que no fueran judíos. Aclara que los fariseos ―practicaban
el ayuno‖, que corbán es ―una dádiva dedicada a Dios‖, que los saduceos decían que ―no hay
resurrección‖, y que el templo estaba ―a la vista‖ desde ―el monte de los Olivos‖. Puesto que la
genealogía del Mesías posiblemente interesara solo a los judíos, ni siquiera la menciona.
Marcos nos pone así un ejemplo. Debemos tomar en consideración los antecedentes de las
personas cuando estemos predicando o pronunciando discursos en las reuniones de
congregación.
3:21. Los parientes de Jesús no eran creyentes. Por lo tanto, él comprende cómo se sienten
quienes debido a su fe reciben oposición o burlas de sus familiares incrédulos.
3:31-35. Al bautizarse, Jesús se convirtió en Hijo espiritual de Dios, y ―la Jerusalén de arriba‖
llegó a ser su madre (Gál. 4:26). A partir de ese momento, Jesús sintió más cariño y afecto por
sus discípulos que por sus parientes carnales. Esto nos enseña a poner los intereses
espirituales en primer lugar en nuestra vida (Mat. 12:46-50; Luc. 8:19-21).
8:32-34. Deberíamos reconocer y rechazar rápidamente cualquier muestra de bondad
equivocada por parte de otros. El discípulo de Cristo tiene que estar preparado para
―repud[iarse] a sí mismo‖, es decir, negarse a sí mismo rechazando sus deseos y ambiciones
egoístas. Ha de estar dispuesto a ―tom[ar] su madero de tormento‖, es decir, a sufrir si fuera
necesario, pasar vergüenza, ser perseguido e incluso asesinado, por ser cristiano. Y debe
seguir ―de continuo‖ a Jesús viviendo tal como él lo hizo. Si queremos ser discípulos de Cristo,
hemos de desarrollar y mantener un espíritu de sacrificio semejante al suyo (Mat. 16:21-25;
Luc. 9:22, 23).
9:24. No deberíamos avergonzarnos de hablar de nuestra fe ni de pedir que se nos conceda
más fe (Luc. 17:5).
EL ÚLTIMO MES
(Marcos 10:1–16:8)
Hacia finales del año 32 de nuestra era, Jesús llega a ―los términos [o fronteras] de Judea y
al otro lado del Jordán‖, y de nuevo las muchedumbres vienen a él (Mar. 10:1). Después de
predicar allí, se dirige hacia Jerusalén.
El 8 de Nisán, Jesús se encuentra en Betania. Está reclinado a la mesa cuando una mujer
se le acerca y derrama aceite perfumado sobre su cabeza. Lo que sucede desde la entrada
triunfal de Jesús en Jerusalén hasta su resurrección se describe en orden cronológico.
Respuestas a preguntas bíblicas:
10:17, 18. ¿Por qué corrigió Jesús al hombre que lo llamó ―Buen Maestro‖? Al negarse
a aceptar dicho título halagador, Jesús dirigió la gloria a Jehová y mostró que el Dios verdadero
es la fuente de todas las cosas buenas. Además, Jesús llamó la atención sobre una verdad
fundamental: que el Creador de todo, Jehová Dios, es el único que tiene el derecho a
establecer las normas respecto a lo que es bueno o malo (Mat. 19:16, 17; Luc. 18:18, 19).
14:25. ¿Qué quiso dar a entender Jesús cuando dijo a sus apóstoles fieles: ―De
ningún modo beberé yo más del producto de la vid hasta aquel día en que lo beba nuevo
en el reino de Dios‖? Jesús no estaba diciendo que hubiera vino literal en los cielos.
No obstante, puesto que el vino a veces es símbolo de regocijo, Jesús se refería al gozo que
iba a sentir cuando estuviera en el Reino con sus discípulos resucitados (Sal. 104:15; Mat.
26:29).
14:51, 52. ¿Quién era el joven que ―se escapó desnudo‖? Marcos es el único que
menciona este incidente, por lo que es razonable llegar a la conclusión de que hablaba de sí
mismo.
15:34. ¿Mostró Jesús falta de fe cuando dijo: ―Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has
desamparado?‖? De ninguna manera. Aunque no sabemos con certeza cuáles fueron los
motivos de Jesús para decir esto, sus palabras indican que comprendía que Jehová había
retirado su protección a fin de que se pusiera a prueba por completo la integridad de su Hijo.
También es posible que lo dijera porque quería cumplir con lo que Salmo 22:1 predijo respecto
a él (Mat. 27:46).
Lecciones para nosotros:
10:6-9. El propósito de Dios es que los cónyuges permanezcan juntos. Por lo tanto, en vez
de recurrir enseguida al divorcio, la pareja debe esforzarse por poner en práctica los principios
bíblicos para superar cualquier dificultad que surja en su matrimonio (Mat. 19:4-6).
12:41-44. El ejemplo de la viuda pobre nos enseña que debemos ser generosos al apoyar la
adoración verdadera.
JESUCRISTO, el Hijo de Jehová, es bien conocido por su compasión. Por eso, ¡cuán
apropiado es que el evangelista Lucas dé énfasis a la compasión, la misericordia y el
compañerismo! Lucas escribió un relato verdaderamente conmovedor sobre la vida terrestre de
Jesús para beneficio de judíos y gentiles.
Ciertos aspectos de este Evangelio indican que fue escrito por un erudito. Por ejemplo,
contiene una introducción clásica y un vocabulario extenso. Esto se ajusta al hecho de que
Lucas era un médico bien educado. (Colosenses 4:14.) Aunque Lucas no se hizo creyente sino
hasta después de la muerte de Jesús, acompañó a Pablo a Jerusalén después del tercer viaje
misional de ese apóstol. Por lo tanto, después que Pablo fue arrestado allí y encarcelado en
Cesarea, Lucas, investigador cuidadoso, pudo recoger datos mediante entrevistarse con
testigos oculares y consultar registros públicos (1:1-4; 3:1, 2). Es posible que haya escrito su
Evangelio en Cesarea durante los dos años que Pablo pasó en prisión allí, alrededor de 56-
58 E.C.
Rasgos singulares
Por lo menos seis de los milagros de Jesús se mencionan únicamente en el Evangelio de
Lucas. Son: una pesca milagrosa (5:1-6); la resurrección del hijo de una viuda de Naín (7:11-
15); la curación de una mujer encorvada (13:11-13); la curación de un hombre que tenía
hidropesía (14:1-4); la limpieza de diez leprosos (17:12-14); y el sanar la oreja del esclavo del
sumo sacerdote (22:50, 51).
También aparecen solo en el relato de Lucas algunas parábolas de Jesús. Entre ellas están las
de: los dos deudores (7:41-47); el prójimo samaritano (10:30-35); la higuera sin fruto (13:6-9); la
gran cena (14:16-24); el hijo pródigo (15:11-32); el hombre rico y Lázaro (16:19-31); y la viuda y
el juez injusto (18:1-8).
Incidentes conmovedores
El médico Lucas mostró interés en mujeres, niños y personas mayores. Sólo él mencionó que
Elisabet era estéril y que concibió, y el nacimiento de Juan. Sólo su Evangelio informó que el
ángel Gabriel se le apareció a María. Lucas se sintió impelido a decir que Juan como bebé en
desarrollo saltó en la matriz de su madre cuando María le habló a Elisabet. Únicamente él
mencionó la circuncisión de Jesús y su presentación en el templo, donde lo vieron los
envejecidos Simeón y Ana. Gracias a este Evangelio sabemos algo acerca de la infancia de
Jesús y la de Juan el Bautizante (1:1–2:52).
Cuando Lucas escribió sobre la desconsolada viuda de Naín cuyo único hijo había muerto, dijo
que Jesús ―se enterneció por ella‖ y luego hizo que el joven volviera a la vida (7:11-15). Otro
incidente conmovedor que solo aparece en este Evangelio envuelve a Zaqueo, un jefe de los
recaudadores de impuestos. Porque era de baja estatura, Zaqueo se subió a un árbol para ver
a Jesús. ¡Qué sorpresa cuando Jesús le dijo que se alojaría en su casa! Lucas informa que la
visita fue una gran bendición para el alegre anfitrión (19:1-10).
El punto de vista de un médico
Este Evangelio contiene muchos términos o palabras que tienen significado médico o
importancia médica. Los demás escritores de las Escrituras Griegas Cristianas no dieron
ningún uso a estas palabras, o por lo menos no en sentido médico. Pero esperaríamos
lenguaje médico de la pluma de alguien que ejerciera la medicina.
Por ejemplo, solamente Lucas señaló que la suegra de Pedro tenía ―una fiebre alta‖ (4:38).
También escribió: ―¡Mira!, ¡un varón lleno de lepra!‖ (5:12). Para los demás evangelistas bastó
con decir lepra. Pero no para el médico Lucas, quien indicó que la enfermedad estaba en etapa
avanzada.
Información sobre costumbres
Según Lucas, María ―envolvió [a Jesús recién nacido] con bandas de tela‖ (2:7). La costumbre
era bañar al infante recién nacido y frotarlo con sal, quizás para secarle la piel y hacerla firme.
Entonces se envolvía en bandas de tela al bebé, casi como a una momia. Las bandas
mantenían recto y caliente el cuerpo, y quizás el pasarlas por debajo de la barbilla y sobre la
cabeza para mantener cerrada la boca hacía que el niño aprendiera a respirar por la nariz. Un
informe del siglo XIX sobre costumbres similares citó las palabras de un visitante a Belén que
dijo: ―Tomé a la criaturita en mis brazos. Su cuerpo estaba tieso e inflexible, por lo ceñido que
estaba con lino blanco y púrpura. Tenía las manos y los pies bien restringidos, y la cabeza
ceñida con un pequeño chal rojo de suave textura que le pasaba por debajo de la barbilla y por
la frente con pequeños dobleces‖.
El Evangelio de Lucas también informa sobre las costumbres fúnebres del primer siglo. Jesús
estaba cerca de la puerta de la ciudad de Naín cuando vio que ―sacaban a un muerto, el hijo
unigénito de su madre [viuda]‖, y ―estaba con ella una muchedumbre bastante numerosa de la
ciudad‖ (7:11, 12). Los entierros solían efectuarse fuera de la ciudad, y amigos del difunto
acompañaban el cadáver hasta la tumba. El féretro era una camilla, quizás de mimbre, con
varas que sobresalían de cada esquina para que cuatro personas la cargaran sobre los
hombros en la procesión al lugar del entierro.
En otra ilustración que registró Lucas, Jesús dijo que un hombre había sido golpeado por
salteadores. Cierto prójimo samaritano ―le vendó sus heridas, y vertió en ellas aceite y vino‖
(10:34). Así se acostumbraba atender las heridas. El aceite de oliva suavizaba el lugar de las
heridas y producía alivio. (Isaías 1:6.) Pero ¿qué hacía el vino? La revista The Journal of the
American Medical Association dice: ―El vino era uno de los medicamentos principales en
Grecia. [...] Hipócrates de Cos (460-370 a.C.) [...] se valió extensamente del vino; lo recetaba
para vendar heridas, para refrescar cuando había fiebre, y como purgante y diurético‖. La
ilustración de Jesús aludió a las propiedades antisépticas y desinfectantes del vino, así como a
la eficacia del aceite de oliva con relación a sanar heridas. Por supuesto, la lección de la
parábola es que el verdadero prójimo es misericordioso. Así debemos tratar a otras personas
(10:36, 37).
Lecciones de humildad
Sólo Lucas relató la ilustración que dio Jesús cuando vio que los invitados escogían los lugares
más prominentes en una comida. Durante los banquetes, los invitados se reclinaban en lechos
colocados a lo largo de tres lados de una mesa. Por el cuarto lado se servía la comida. Por lo
general en cada lecho se podían acomodar tres personas que miraban hacia la mesa mientras
se apoyaban sobre el codo izquierdo y comían con la mano derecha. Los tres lugares
denotaban que la persona ocupaba la posición alta, la media o la baja en el lecho. El que
ocupara la posición baja en el tercer lecho ocupaba el lugar de menos importancia en la
comida. Jesús dijo: ‗Cuando alguien te invita a un banquete, escoge el lugar más bajo y el
anfitrión te dirá: ―Sube más arriba‖. Entonces tendrás honra delante de los demás convidados
contigo‘ (14:7-10). Sí, seamos humildes y antepongamos los demás a nosotros. De hecho, al
aplicar la ilustración Jesús dijo: ―Todo el que se ensalza será humillado, y el que se humilla
será ensalzado‖ (14:11).
Otra ilustración de Jesús que da énfasis a la humildad, y que solo hallamos en el Evangelio de
Lucas, es la del recaudador de impuestos y el fariseo que oraban en el templo. Entre otras
cosas, el fariseo dijo: ―Ayuno dos veces a la semana‖ (18:9-14). La Ley solo requería que se
ayunara una vez al año. (Levítico 16:29.) Pero los fariseos iban al extremo en cuanto al ayuno.
El fariseo de la ilustración ayunaba el segundo día de la semana porque, según se creía, en
ese día Moisés subió al monte Sinaí, donde recibió las dos tablas del Testimonio. Se dice que
bajó de la montaña el quinto día de la semana. (Éxodo 31:18; 32:15-20.) El fariseo dijo que
ayunaba dos veces a la semana para probar su piedad. Pero esta ilustración debe llevarnos a
ser humildes, y a no hacernos justos a nuestros propios ojos.
Estas joyas del Evangelio de Lucas prueban que es singular e instructivo. Los incidentes que
menciona nos ayudan a volver a vivir sucesos conmovedores de la vida terrestre de Jesús.
También nos benefician los datos sobre ciertas costumbres. Pero nos bendecirá especialmente
el aplicar lecciones como las de la misericordia y la humildad, que se enseñan tan
excelentemente en el Evangelio de Lucas, el médico amado.
*** w08 15/3 págs. 30-32 Puntos sobresalientes del libro de Lucas ***
EL INICIO DEL MINISTERIO DE JESÚS
(Lucas 1:1–9:62)
Tras dar detalles sobre los nacimientos de Juan el Bautista y de Jesús, Lucas indica que
Juan emprendió su ministerio en el año decimoquinto del reinado de Tiberio César, es decir, en
la primavera del año 29 (Luc. 3:1, 2). En el otoño de ese mismo año, Juan bautiza a Jesús
(Luc. 3:21, 22). En el año 30, Jesús vuelve a Galilea y comienza a enseñar en las sinagogas
(Luc. 4:14, 15).
Jesús inicia su primer viaje de predicación por Galilea y dice a la muchedumbre: ―También a
otras ciudades tengo que declarar las buenas nuevas del reino de Dios‖ (Luc. 4:43). Lleva
consigo a Simón el pescador y a otros discípulos, a quienes asegura: ―De ahora en adelante
estará[n] pescando vivos a hombres‖ (Luc. 5:1-11; Mat. 4:18, 19). Durante el segundo viaje de
predicación por Galilea, los doce apóstoles acompañan a Jesús (Luc. 8:1). En el tercer viaje
envía a los doce ―a predicar el reino de Dios y a hacer curaciones‖ (Luc. 9:1, 2).
Respuestas a preguntas bíblicas:
1:35. ¿Utilizó Jehová un óvulo de María para la concepción de Jesús? A fin de que el
hijo de María fuera un verdadero descendiente de sus antepasados Abrahán, Judá y David —
tal como Dios había prometido—, fue preciso utilizar un óvulo de María (Gén. 22:15, 18; 49:10;
2 Sam. 7:8, 16). No obstante, Jehová se valió de su espíritu santo para transferir la vida
perfecta de su Hijo desde el cielo y originar la concepción (Mat. 1:18). Parece que esto anuló
toda imperfección existente en el óvulo de María y, desde el mismo principio, protegió de
cualquier defecto al embrión en desarrollo.
1:62. ¿Se quedó Zacarías sordo además de mudo? No, solo su habla se vio afectada.
Aunque otras personas le preguntaron a Zacarías ―por señas‖ qué nombre quería darle a su
hijo, esto no se debió a que estuviera sordo. Es muy probable que hubiera oído lo que su
esposa había dicho respecto al nombre del niño. Quizás los demás, haciendo alguna señal o
gesto, pidieron a Zacarías que lo confirmara. Además, el hecho de que solo se le devolviera el
habla indica que su oído no se había visto afectado (Luc. 1:13, 18-20, 60-64).
2:1, 2. ¿Cómo ayuda a determinar la fecha del nacimiento de Jesús la referencia a
―esta primera inscripción‖? Durante el gobierno de César Augusto se efectuó más de una
inscripción: la primera tuvo lugar en el año 2 antes de nuestra era (en cumplimiento de Daniel
11:20), y la segunda en el año 6 ó 7 de nuestra era (Hech. 5:37). Quirinio era el gobernador de
Siria cuando se realizaron ambas inscripciones, por lo que es obvio que ocupó dicho puesto en
dos ocasiones. La referencia que hace Lucas a la primera inscripción sitúa la fecha del
nacimiento de Jesús en el año 2 antes de nuestra era.
2:35. ¿En qué sentido atravesaría ―una espada larga‖ el alma de María? Esta expresión
alude a la angustia que María iba a experimentar al ver que la mayor parte de la gente
rechazaba a Jesús como el Mesías. También hace referencia a la profunda tristeza que sentiría
por la dolorosa muerte de su hijo (Juan 19:25).
9:27, 28. Lucas afirma que la transfiguración ocurrió ―ocho días‖ después de que
Jesús prometiera a sus discípulos que algunos de ellos no ―gustar[ían] la muerte‖ hasta
que hubieran visto la venida de su Reino. En cambio, Mateo y Marcos dicen que ocurrió
―seis días después‖. ¿A qué se debe la diferencia? (Mat. 17:1; Mar. 9:2.) Al parecer, Lucas
incluye dos días adicionales: el de la promesa y el del cumplimiento, es decir, el mismo día de
la transfiguración.
9:49, 50. ¿Por qué no impidió Jesús que cierto hombre expulsara demonios, aunque
no era discípulo suyo? Jesús no se lo impidió porque la congregación cristiana aún no se
había formado. Por lo tanto, no era necesario que el hombre acompañara literalmente a Jesús
para que ejerciera fe en su nombre y expulsara demonios (Mar. 9:38-40).
Lecciones para nosotros:
1:32, 33; 2:19, 51. María conservó en su corazón los hechos y dichos que cumplían
profecías. ¿Hacemos nosotros lo mismo respecto a lo que predijo Jesús sobre ―la conclusión
del sistema de cosas‖, comparando sus predicciones con lo que ocurre en la actualidad? (Mat.
24:3.)
2:37. El ejemplo de Ana nos enseña que debemos adorar a Jehová con constancia,
―persever[ar] en la oración‖ y no ―abandonar el reunirnos‖ con la congregación cristiana (Rom.
12:12; Heb. 10:24, 25).
2:41-50. José puso los intereses espirituales en primer lugar en su vida y se preocupó del
bienestar físico y espiritual de su familia. A este respecto, es un magnífico ejemplo para los
cabezas de familia.
4:4. No debemos dejar que pase un solo día sin que hayamos analizado algún tema
espiritual.
6:40. Un maestro de la Palabra de Dios debe dar un buen ejemplo a sus estudiantes y poner
en práctica lo que predica.
8:15. Para ser de los que ―retienen [la palabra] y llevan fruto con aguante‖, debemos
comprender, asimilar y reconocer el valor de la Palabra de Dios. Cuando leemos la Biblia y las
publicaciones cristianas, es necesario que oremos y meditemos.
EL MINISTERIO POSTERIOR DE JESÚS
(Lucas 10:1–24:53)
Jesús envía delante de él a 70 discípulos suyos para que vayan a ciudades y lugares de
Judea (Luc. 10:1). Luego viaja ―de ciudad en ciudad y de aldea en aldea, enseñando‖ (Luc.
13:22).
Cinco días antes de la Pascua del año 33, Jesús entra en Jerusalén montado sobre un
pollino. Ha llegado el tiempo para que se cumplan estas palabras que dijo a sus discípulos: ―El
Hijo del hombre tiene que pasar por muchos sufrimientos y ser rechazado por los ancianos y
los sacerdotes principales y los escribas, y ser muerto, y al tercer día ser levantado‖ (Luc.
9:22, 44).
Respuestas a preguntas bíblicas:
10:18. ¿A qué se refería Jesús cuando les dijo a los 70 discípulos: ―Contemplaba yo a
Satanás ya caído como un relámpago del cielo‖? Jesús no estaba diciendo que Satanás ya
hubiera sido expulsado del cielo. Eso no aconteció sino hasta poco después de que Cristo
fuera entronizado como Rey celestial en 1914 (Rev. 12:1-10). Aunque no podemos ser
dogmáticos en este asunto, al hablar de un acontecimiento futuro utilizando el tiempo pasado,
Jesús aparentemente quería destacar que sin duda ocurriría.
14:26. ¿En qué sentido deben los seguidores de Cristo ―odiar‖ a sus parientes? En la
Biblia, ―odiar‖ puede referirse a amar a una persona o cosa menos que a otra (Gén. 29:30, 31).
Los cristianos deben ―odiar‖ a sus parientes en el sentido de amarlos menos que a Jesús (Mat.
10:37).
17:34-37. ¿Quiénes son ―las águilas‖, y qué es ―el cuerpo‖ junto al que estas se
reúnen? A quienes son ‗llevados‘ —es decir, salvados— se les compara con águilas de vista
poderosa. ―El cuerpo‖ junto al que se reúnen es el Cristo verdadero durante su presencia
invisible y el alimento espiritual que Jehová les suministra (Mat. 24:28).
22:44. ¿Por qué experimentó Jesús tanta angustia? Debido a varias razones. Por un
lado, le preocupaba la repercusión que su muerte como delincuente tendría en Jehová Dios y
en su nombre. Y por otro, estaba muy consciente de que su vida eterna y el futuro de toda la
familia humana dependían de que se mantuviera fiel.
23:44. ¿Fue provocada por un eclipse solar la oscuridad que duró tres horas? No, pues
los eclipses solares solo se producen en la fase de luna nueva, y no en la de luna llena, como
ocurrió durante la Pascua. La oscuridad que hubo el día de la muerte de Jesús fue un milagro
de Dios.
Lecciones para nosotros:
11:1-4. Al comparar estas instrucciones con las palabras ligeramente diferentes de la
oración modelo —que se pronunció en el Sermón del Monte cerca de un año y medio antes—,
queda claro que nuestras oraciones no deben ser una mera repetición de ciertas palabras (Mat.
6:9-13).
11:5, 13. Aunque Jehová desea contestar nuestras oraciones, debemos ser persistentes al
orar (1 Juan 5:14).
11:27, 28. La verdadera felicidad proviene de cumplir fielmente la voluntad de Dios y no de
las relaciones familiares o los logros materiales.
11:41. Nuestras dádivas de misericordia deben proceder de un corazón bien dispuesto y
lleno de amor.
12:47, 48. Quien recibe más responsabilidades pero no cumple con ellas es más censurable
que quien no conoce o comprende a cabalidad sus obligaciones.
14:28, 29. Es prudente no vivir por encima de nuestras posibilidades.
22:36-38. Jesús no les pidió a sus discípulos que portaran un arma para protección o
defensa propia. Ahora bien, el que llevaran espadas la noche en que Jesús fue traicionado
permitió que les enseñara una lección fundamental: ―Todos los que toman la espada perecerán
por la espada‖ (Mat. 26:52).
*** w90 15/3 págs. 24-25 Joyas del Evangelio de Juan ***
MEDIANTE su espíritu santo Jehová inspiró al envejecido apóstol Juan para que escribiera un
relato conmovedor de la vida y el ministerio de Jesucristo. Este Evangelio se escribió en Éfeso
o cerca de allí alrededor del año 98 E.C. Pero ¿cuál es la esencia del relato? Y ¿qué joyas
contiene?
En gran parte suplementario
Juan escogió bien lo que escribió, pues repitió poco de lo que escribieron Mateo, Marcos y
Lucas. En realidad su relato de testigo ocular es en gran parte suplementario, porque más
del 90% de su Evangelio considera asuntos que no se mencionan en los demás. Por ejemplo,
sólo él nos habla de la existencia de Jesús antes de ser humano y que ―la Palabra vino a ser
carne‖ (1:1-14). Mientras que los demás evangelistas dicen que Jesús limpió el templo al final
de su ministerio, Juan dice que Cristo también lo hizo al principio de su obra (2:13-17).
Solamente el envejecido apóstol nos cuenta ciertos milagros que Jesús ejecutó, como la
conversión del agua en vino, la resurrección del muerto llamado Lázaro y la pesca milagrosa
después de Su resurrección (2:1-11; 11:38-44; 21:4-14).
Todos los evangelistas relatan cómo instituyó Jesús la Conmemoración de su muerte, pero
Juan es el único que señala que Cristo dio a los apóstoles una lección de humildad al lavarles
los pies aquella noche. Además, únicamente Juan pone por escrito los discursos francos y la
oración de Jesús por ellos en aquella ocasión (13:1–17:26).
En este Evangelio el nombre Juan alude al Bautizante, mientras que el escritor se refiere a sí
mismo como ‗el discípulo a quien Jesús amaba‘ (13:23). El apóstol ciertamente amó a Jesús, y
nuestro propio amor a Cristo se intensifica cuando Juan lo describe como la Palabra, el pan de
la vida, la luz del mundo, el Pastor Excelente, el camino, la verdad y la vida (1:1-3, 14; 6:35;
8:12; 10:11; 14:6). Esto cumple el propósito declarado de Juan: ―Estas [cosas] han sido escritas
para que ustedes crean que Jesús es el Cristo el Hijo de Dios, y que, a causa de creer, tengan
vida por medio de su nombre‖ (20:31).
La humildad y el gozo
El Evangelio de Juan presenta a Jesús como la Palabra y el Cordero que expía los pecados, y
alude a milagros que demuestran que Jesús es ―el Santo de Dios‖ (1:1–9:41). Entre otras cosas
el relato destaca la humildad y el gozo de Juan el Bautizante. Fue el precursor de Cristo, pero
dijo: ―No soy digno de desatar la correa de su sandalia‖ (1:27). Las sandalias se sujetaban con
tiras o correas de cuero. Un esclavo pudiera desatarle las correas de las sandalias a otra
persona y cargarlas por ella, pues esto era una tarea servil. Así Juan el Bautizante manifestó
humildad y consciencia de su insignificancia en comparación con su Amo. ¡Qué lección
excelente, pues solamente los humildes son adecuados para servir a Jehová y su Rey
Mesiánico! (Salmo 138:6; Proverbios 21:4.)
Juan el Bautizante, en vez de manifestar orgullo y sentirse agraviado a causa de Jesús, dijo: ―El
amigo del novio, cuando está de pie y lo oye, tiene mucho gozo a causa de la voz del novio.
Por eso, este gozo mío se ha hecho pleno‖ (3:29). Como representante del novio, el amigo del
novio realizaba trámites con relación a las bodas, pues a veces preparaba los esponsales y
llevaba regalos a la novia, y el precio de la novia al padre de esta. Tenía razón para alegrarse
cuando había cumplido su deber. De igual manera, Juan se regocijó al reunir a Jesús con los
primeros miembros de Su novia. (Revelación 21:2, 9.) Tal como los servicios del amigo del
novio duraban poco tiempo, así la obra de Juan no duró mucho. Continuó menguando,
mientras la de Jesús siguió aumentando. (Juan 3:30.)
El interés de Jesús en la gente
Junto a un pozo cerca de la ciudad de Sicar, Jesús habló con una samaritana acerca del agua
simbólica que imparte vida eterna. Cuando sus discípulos llegaron ‗se admiraron de que
hablara con una mujer‘ (4:27). ¿Por qué? Pues bien, los judíos despreciaban a los samaritanos
y no tenían tratos con ellos (4:9; 8:48). También era raro que un maestro judío hablara en
público con una mujer. Pero el interés compasivo de Jesús en la gente lo movió a dar aquel
testimonio, y el resultado fue que residentes de la ciudad ―empezaron a venir a él‖ (4:28-30).
El interés de Jesús en la gente lo movió a decir: ―Si alguien tiene sed, venga a mí y
beba‖ (7:37). Parece que con esto aludió a una costumbre que se había añadido a la fiesta de
las Cabañas, que duraba ocho días. Por siete días, cada mañana un sacerdote sacaba agua
del estanque de Siloam y la derramaba en el altar del templo. Entre otras cosas, se decía que
eso representaba el derramamiento del espíritu. A partir del Pentecostés de 33 E.C. el espíritu
de Dios impelió a los seguidores de Jesús a llevar aguas dadoras de vida a la gente por toda la
Tierra. Únicamente de Jehová, ―la fuente de agua viva‖, y mediante Cristo, puede alguien
recibir vida eterna. (Jeremías 2:13; Isaías 12:3; Juan 17:3.)
*** w08 15/4 págs. 30-32 Puntos sobresalientes del libro de Juan ***
―¡MIRA, EL CORDERO DE DIOS[!]‖
(Juan 1:1–11:54)
En cuanto alcanza a ver a Jesús, Juan el Bautista lo identifica sin titubeos: ―¡Mira, el Cordero
de Dios que quita el pecado del mundo!‖ (Juan 1:29). Más tarde, Jesús recorre Samaria,
Galilea, Judea y las tierras al este del Jordán, predicando, enseñando y realizando obras
poderosas, lo que atrae a muchas personas y hace que pongan fe en él (Juan 10:41, 42).
Uno de los milagros más impresionantes de Jesús es la resurrección de Lázaro. Al ver a un
hombre que ha estado muerto por cuatro días volver a la vida, muchos ponen fe en Jesús. Pero
los sacerdotes principales y los fariseos se confabulan para matarlo. Por eso, Jesús se retira ―al
país cerca del desierto, a una ciudad llamada Efraín‖ (Juan 11:53, 54).
Respuestas a preguntas bíblicas:
1:35, 40. ¿Quién era el otro discípulo de Juan el Bautista que estaba con Andrés?
Como el narrador siempre se refiere a Juan el Bautista como ―Juan‖ y nunca se identifica a sí
mismo por nombre, está claro que el otro discípulo —del que no se dice el nombre en este
pasaje— es el propio Juan, el escritor del Evangelio.
2:20. ¿Por qué dijeron los judíos que el templo había sido ―edificado en cuarenta y
seis años‖? Porque cuando lo dijeron —en el año 30 de nuestra era—, la reconstrucción del
templo de Zorobabel a cargo de Herodes, rey de Judea, todavía seguía en marcha. Según el
historiador Josefo, las obras comenzaron en el año decimoctavo del reinado de Herodes, es
decir, entre el año 18 y el 17 antes de nuestra era. Aunque el santuario y otras estructuras
principales se terminaron en ocho años, el resto de las obras no habían concluido para la
Pascua del año 30.
5:14. ¿Quiso decir Jesús que la gente se enferma porque comete pecados? No, eso
no fue lo que quiso decir. El hombre al que Jesús curó llevaba treinta y ocho años enfermo por
haber heredado la imperfección (Juan 5:1-9). Pero ahora que había sido objeto de la
misericordia divina, tenía que seguir el camino a la salvación y dejar de pecar voluntariamente.
De otro modo, se causaría algo peor que una enfermedad: podría cometer un pecado
imperdonable y hacerse merecedor de morir sin esperanza de resurrección (Mat. 12:31, 32;
Luc. 12:10; Heb. 10:26, 27).
5:24, 25. ¿Quiénes pasan ―de la muerte a la vida‖? Jesús está hablando de los que
estaban muertos en sentido espiritual, pero que, al escuchar sus palabras, ponen fe en él y
abandonan su estilo de vida pecaminoso. Pasan ―de la muerte a la vida‖ en el sentido de que
se les perdona la condena de muerte y reciben la esperanza de vivir eternamente debido a su
fe en Dios (1 Ped. 4:3-6).
5:26; 6:53. ¿Qué significa ‗tener vida en sí mismo‘? En el caso de Jesucristo, significa
que Dios le otorga dos facultades: la de hacer posible que los seres humanos obtengan una
buena posición delante de Jehová y la de impartir vida mediante la resurrección de los muertos.
En el caso de los discípulos de Jesús, significa disfrutar de la plenitud de vida. Los cristianos
ungidos la reciben cuando son resucitados a la vida en los cielos. Los siervos fieles de Dios con
esperanza terrenal experimentarán la plenitud de vida cuando pasen la prueba final que
ocurrirá justo después de concluir el Reinado Milenario de Cristo (1 Cor. 15:52, 53; Rev. 20:5,
7-10).
6:64. Cuando Jesús escogió a Judas Iscariote, ¿ya sabía que lo iba a traicionar?
Al parecer, no. Sin embargo, más tarde, en el año 32, Jesús les dijo a los apóstoles: ―Uno de
ustedes es calumniador‖. Así, es posible que en ese momento Jesús haya notado en Judas
Iscariote un ―principio‖ o comienzo de un mal proceder (Juan 6:66-71).
Lecciones para nosotros:
2:4. Aquí Jesús le señala a María que, habiéndose bautizado y en calidad de Hijo ungido de
Dios, solo recibe órdenes de su Padre celestial. Aunque su ministerio apenas ha comenzado,
Jesús ya está plenamente consciente de la hora, o el momento, en que debe realizar la obra
que tiene asignada, lo que incluye su muerte en sacrificio. De modo que no puede permitir que
nadie, ni siquiera un familiar tan cercano como María, interfiera en cómo cumple la voluntad
divina. Nosotros debemos servir a Jehová con igual decisión.
3:1-9. El caso de Nicodemo, ―un gobernante de los judíos‖, nos enseña dos lecciones.
La primera es que, al estar dispuesto a reconocer al hijo de un simple carpintero como maestro
enviado por Dios, manifestó humildad, perspicacia y conciencia de su propia necesidad
espiritual. Hoy también, el verdadero cristiano necesita humildad. La segunda es que, a pesar
de ello, no se atrevió a hacerse cristiano mientras Jesús vivió en la Tierra. ¿Por qué? Tal vez
por temor al hombre, por apego a su puesto en el Sanedrín o por amor a las riquezas.
En nuestro caso, no debemos permitir que tendencias de ese tipo nos impidan tomar nuestro
madero de tormento y seguir a Jesús de continuo (Luc. 9:23).
4:23, 24. Para que nuestra adoración le agrade a Dios, tiene que ser guiada por el espíritu
santo y concordar con la verdad revelada en las páginas de la Biblia.
6:27. Trabajar ―por el alimento que permanece para vida eterna‖ significa hacer el esfuerzo
por cubrir nuestra necesidad espiritual. Si lo hacemos, seremos felices (Mat. 5:3).
6:44. Jehová se interesa por cada uno de nosotros y lo demuestra al atraernos a su Hijo.
¿Cómo nos atrae? Con la predicación, que oímos a nivel personal, y con su espíritu santo, que
permite que comprendamos y apliquemos en nuestra vida las verdades espirituales.
11:33-36. Expresar las emociones no es señal de debilidad.
―CONTINÚA SIGUIÉNDOME‖
(Juan 11:55–21:25)
Al acercarse la Pascua del año 33, Jesús regresa a Betania. El 9 de nisán entra a Jerusalén
montado sobre un asno y, un día después, el 10 de nisán, vuelve al templo. En respuesta a su
oración en la que pide que el nombre de su Padre sea glorificado, una voz del cielo dice: ―Lo
glorifiqué, y también lo glorificaré de nuevo‖ (Juan 12:28).
Durante la cena de la Pascua, Jesús les da a sus discípulos algunos consejos de despedida
y también ora por ellos. Pronto es arrestado, enjuiciado y ejecutado en un madero.
No obstante, Dios lo resucita.
Respuestas a preguntas bíblicas:
14:2. ¿En qué sentido Jesús iba a ―preparar un lugar‖ en el cielo para sus discípulos
fieles? Para que pudiera comenzar la resurrección celestial, era necesario que Jesús validara
primero el nuevo pacto ante la presencia de Dios presentándole el valor de su sangre. También
tendría que recibir autoridad como rey. Entonces podría comenzar la resurrección de sus
seguidores ungidos (1 Tes. 4:14-17; Heb. 9:12, 24-28; 1 Ped. 1:19; Rev. 11:15).
14:16, 17; 16:7, 8, 13, 14. Al referirse al ayudante, o espíritu de la verdad, ¿por qué se
utilizaron en el texto griego pronombres neutros en Juan 14:16, 17, mientras que en Juan
16:7, 8, 13, 14 se utilizaron pronombres masculinos? La razón es puramente gramatical.
En griego, el idioma en que se escribió el Evangelio de Juan, la palabra que se traduce
―ayudante‖ es masculina, mientras que la que se traduce ―espíritu‖ es neutra. Por lo tanto, el
uso del masculino no implica que se trate de una persona.
19:11. Al hablarle a Pilato del hombre que lo había entregado, ¿se refería Jesús a
Judas Iscariote? En lugar de pensar en Judas o en alguna otra persona específica, parece
que Jesús estaba incluyendo a todos los que compartían la culpa de su asesinato. Entre ellos
estaban Judas, ―los sacerdotes principales y todo el Sanedrín‖ y hasta ―las muchedumbres‖ que
se dejaron convencer y pidieron a Barrabás (Mat. 26:59-65; 27:1, 2, 20-22).
20:17. ¿Por qué le dijo Jesús a María Magdalena que dejara de colgarse de él? Parece
que María se colgó de Jesús porque pensaba que él estaba a punto de ascender al cielo y
no lo volvería a ver. Por eso, para tranquilizarla, Jesús le dijo que dejara de colgarse de él y
que fuera, más bien, a darles la noticia de su resurrección a los demás discípulos.
Lecciones para nosotros:
12:36. Para ser ―hijos de la luz‖, o portadores de luz, debemos obtener conocimiento exacto
de la Palabra de Dios. Luego tenemos que utilizar ese conocimiento para sacar a otros de la
oscuridad espiritual y traerlos a la luz de Dios.
14:6. Aparte de Jesucristo, no hay otro medio por el que podamos conseguir la aprobación
de Dios. La única manera de acercarnos a Jehová es ejerciendo fe en Jesús y siguiendo su
ejemplo (1 Ped. 2:21).
14:15, 21, 23, 24; 15:10. La obediencia a la voluntad divina nos permitirá permanecer en el
amor de Dios y en el de su Hijo (1 Juan 5:3).
14:26; 16:13. El espíritu de Jehová nos enseña y nos ayuda a recordar. También nos revela
ciertas verdades. Por lo tanto, puede ayudarnos a aumentar en conocimiento, sabiduría,
perspicacia, buen juicio y capacidad de razonamiento. Por eso debemos perseverar en la
oración, pidiendo específicamente ese espíritu (Luc. 11:5-13).
21:15, 19. Jesús le preguntó a Pedro si lo amaba más que a ―estos‖, es decir, a los peces
que tenían ante ellos. Con esta pregunta, Jesús le remarcó a Pedro la importancia de que, en
lugar de dedicarse a la pesca, se dedicara a seguirlo todo el tiempo. ¿Qué hay de nosotros?
A medida que analicemos los Evangelios, procuremos fortalecer nuestra resolución de amar a
Jesús por encima de cualquier otra cosa que pudiera parecernos atractiva. Sí, continuemos
siguiéndolo con todo el corazón.
HECHOS DE APÓSTOLES.
CONTENIDO
El Pentecostés y el extenso testimonio dado en Jerusalén (1:1-6:7).
o Jesús predijo que los discípulos recibirían poder del espíritu santo para testificar
(1:1-11).
o Los discípulos reciben el espíritu santo; testifican en lenguas (1:12-2:13).
o Pedro muestra que el derramamiento del espíritu por parte de Cristo es
cumplimiento de profecía (2:14-41).
Insta al arrepentimiento y al bautismo en el nombre de Jesús; unos 3.000
judíos y prosélitos se bautizan.
Hay unidad, asociación estrecha, se comparten los bienes y se ve aumento
(2:42-47).
o Curación de un hombre cojo; Pedro y Juan arrestados y liberados; aumenta la
cantidad de creyentes a unos 5.000 (3:1-4:22).
o Dios manifiesta su aprobación por el proceder denodado de los apóstoles (4:23-
31).
o Se ponen en común los recursos económicos y se distribuyen; Ananías y Safira
mueren por ―tratar con engaño al espíritu santo‖ (4:32-5:11).
o Los apóstoles son puestos en prisión debido a su ministerio, son liberados por un
ángel (5:12-21a).
o Los apóstoles sientan el precedente: ―Obedecer a Dios más bien que a los
hombres‖ cuando surge un conflicto entre ambas autoridades; los discípulos
aumentan (5: 21b-6 :7).
Como resultado de la persecución se extiende el testimonio (6:8-9:43).
o Esteban es aprehendido y da un testimonio denodado; muere como mártir (6:8-
7:60).
o La persecución esparce a todos los discípulos por varias regiones, salvo a los
apóstoles (8:1-4).
El ministerio de Felipe en Samaria es bendecido; conversión del eunuco
etíope (8:5-40).
Pedro y Juan son enviados a los samarita nos para que puedan recibir el
espíritu santo (8:14-17).
o Jesús se aparece al perseguidor Saulo; Saulo se convierte, se bautiza y comienza
su celoso ministerio a lo que sigue un período de paz (9:1-31).
o Pedro sana a Eneas y resucita a Dorcas (9:32-43).
El testimonio llega a los no judíos (10:1-12:25).
o Pedro predica a Cornelio y a otros gentiles incircuncisos, los cuales creen, reciben
el espíritu santo y son bautizados (10:1-48).
o El informe del apóstol impulsa la predicación a las naciones (11:1-30).
o Herodes mata a Santiago, pone a Pedro en prisión; Pedro es liberado por un
ángel (12:1-19).
o Herodes muere por no dar la gloria a Dios; la palabra de Jehová se difunde
(12:20-25).
Primer viaje evangelizador de Pablo. Le acompaña Bernabé (13:1-14:28).
o Desde Antioquia de Siria, va a Chipre y a ciudades de Asia Menor (13:1-14:25).
Los judíos persiguen a Pablo de ciudad en ciudad.
Se establecen congregaciones.
o Regreso a Antioquia de Siria (14:26-28).
Desafía la cuestión sobre la circuncisión de los cristianos (15:1-35).
Los apóstoles y hombres de mayor edad de Jerusalén toman la decisión guiados por el
espíritu santo.
Los creyentes han de abstenerse de la idolatría, de la sangre y de la fornicación.
Segundo viaje evangelizador de Pablo (15:36-18:22).
o Pablo y Silas viajan desde Antioquia a través de Siria y Asia Menor (15:36-16:8).
o En respuesta a una visión, Pablo visita Macedonia (16:9-17:15).
Pablo y Silas encarcelados en Filipos; el carcelero se hace creyente.
Pablo y Silas predican en Tesalónica y Berea; los judíos forman una
chusma.
o En Atenas, Pablo habla en la colina de Mar te; algunos se hacen creyentes
(17:16-34).
o Pablo predica en Corinto durante dieciocho meses (18:1-17).
o Regresa a Antioquia de Siria pasando por Éfeso y Cesarea (18:18-22).
Tercer viaje de Pablo; llega a Jerusalén (18:23-21:26).
o El ministerio de Pablo entre los efesios es fructífero; se forma un alboroto por tal
motivo (18:23-19:41).
o Visita a los creyentes de Macedonia, Grecia y Troas (20:1-16).
o El apóstol se reúne en Mileto con los ancianos de Éfeso y los exhorta (20:17-38).
o Llega a Jerusalén y sigue las instrucciones de Santiago y los demás ancianos
(21:1-26).
Pablo testifica a pesar de oposición y prisión (21:27-28:31).
o Después de haber sido atacado en Jerusalén por una chusma, Pablo comparece
delante del Sanedrín (21:27-23:10).
o Es llevado ante Félix; comparece varias veces ante él (23:11-24:27).
o En su defensa ante Festo, Pablo apela a César (25:1-12).
o El apóstol hace una defensa ante el rey Agripa (25:13-26:32).
o El viaje a Roma se destaca por un naufragio en Malta (27:1-28:16.)
o Como prisionero en Roma, Pablo predica acerca de Cristo y el Reino (28:17-31).
*** w90 15/5 págs. 24-26 ¡Testigos celosos de Jehová en marcha! ***
LOS testigos de Jehová del primer siglo actuaban con denuedo y celo. Cumplían con empeño
la comisión que Jesús les dio: ―Vayan [...] hagan discípulos de gente de todas las naciones‖.
(Mateo 28:19, 20.)
Pero ¿cómo sabemos que los primeros seguidores de Cristo tomaron en serio aquella
comisión? Pues bien, el libro bíblico de Hechos de Apóstoles prueba que eran testigos celosos
de Jehová, ¡gente verdaderamente en marcha!
BENEFICIOS Y OTROS RASGOS
La similitud de lenguaje y estilo del tercer Evangelio y el libro de Hechos indica que fueron
escritos por la misma persona: Lucas, ―el médico amado‖. (Colosenses 4:14.) Las
conversaciones y oraciones que se registran en Hechos están entre los rasgos singulares de
este libro. Más o menos el 20% del libro consiste en discursos, como los que pronunciaron
Pedro y Pablo en apoyo de la fe verdadera.
El libro de Hechos se escribió en Roma alrededor de 61 E.C. Eso explicaría por qué no se
menciona la comparecencia de Pablo ante César ni la persecución que Nerón lanzó contra los
cristianos cerca de 64 E.C. (2 Timoteo 4:11.)
Al igual que el Evangelio de Lucas, Hechos fue dirigido a Teófilo. Se escribió para fortalecer la
fe e informar sobre el aumento del cristianismo. (Lucas 1:1-4; Hechos 1:1, 2.) El libro
demuestra que la mano de Jehová estaba con sus siervos leales. Nos hace conscientes del
poder de Su espíritu y fortalece nuestra confianza en la profecía inspirada de Dios. Hechos
también nos ayuda a aguantar persecución, nos impulsa a ser testigos abnegados de Jehová y
hace más firme nuestra fe en la esperanza del Reino.
EXACTITUD HISTÓRICA
Lucas, quien fue compañero de Pablo, llevó el registro de los viajes que ellos hicieron. También
habló con testigos oculares. Estos factores y la investigación cuidadosa que efectuó hacen de
sus escritos una obra maestra de exactitud histórica.
Por eso el erudito William Ramsay pudo decir: ―Lucas es un historiador de primera calidad: no
es simplemente que su exposición de los hechos sea fidedigna, sino que él posee el verdadero
sentido histórico [...] Debería incluirse a este autor entre los más grandes historiadores‖.
PEDRO: TESTIGO FIEL
Solo por el poder del espíritu santo de Jehová pueden sus siervos llevar a cabo la obra que él
les da de declarar las buenas nuevas. Por eso, cuando los seguidores de Jesús reciban
espíritu santo serán sus testigos en Jerusalén, Judea, Samaria y ―hasta la parte más distante
de la tierra‖. Se llenan de espíritu santo en el Pentecostés de 33 E.C. Puesto que apenas son
las nueve de la mañana, de seguro no están embriagados como creen algunos. Pedro da un
testimonio emocionante, y 3.000 personas se bautizan. Los opositores religiosos tratan de
acallar a los proclamadores del Reino, pero en respuesta a sus oraciones Dios fortalece a sus
testigos para que hablen Su palabra con denuedo. Cuando se les amenaza de nuevo,
responden: ―Tenemos que obedecer a Dios como gobernante más bien que a los hombres‖. La
obra sigue efectuándose a medida que ellos predican de casa en casa (1:1–5:42).
Por confianza en el espíritu de Jehová sus testigos aguantan la persecución. Así, después que
se da muerte a pedradas al fiel testigo Esteban, los seguidores de Jesús se ven obligados a
esparcirse, pero esto solo difunde la palabra. Felipe el evangelizador inicia el ministerio en
Samaria. Para sorpresa de muchos, el violento perseguidor Saulo de Tarso se convierte.
Sirviendo ahora como el apóstol Pablo, sufre persecución en Damasco, pero escapa de los
designios asesinos de los judíos. Pablo se asocia brevemente con los apóstoles en Jerusalén y
luego sigue adelante en su ministerio (6:1–9:31).
Hechos pasa a mostrar que la mano de Jehová está con sus testigos. Pedro resucita a Dorcas
(Tabita). Luego responde al llamamiento de ir a Cesarea, donde declara las buenas nuevas a
Cornelio y a la familia y los amigos de este. Son los primeros gentiles que se bautizan como
discípulos de Jesús. Así, en 36 E.C. terminan las ―setenta semanas‖. (Daniel 9:24.) Poco
después, Herodes Agripa I ejecuta al apóstol Santiago y manda arrestar a Pedro. Pero el
apóstol es libertado de la prisión por intervención angelical, y ‗la palabra de Jehová sigue
creciendo y difundiéndose‘ (9:32–12:25).
LOS TRES VIAJES MISIONALES DE PABLO
Los que se gastan en el servicio de Dios como lo hizo Pablo reciben muchas bendiciones. Su
primer viaje misional empieza en Antioquía, Siria. En la isla de Chipre el procónsul Sergio Paulo
y muchas otras personas se hacen creyentes. Desde Perga de Panfilia, Juan Marcos parte
hacia Jerusalén, pero Pablo y Bernabé siguen adelante a Antioquía de Pisidia. En Listra los
judíos fomentan persecución. Aunque una chusma apedrea a Pablo y lo da por muerto, él se
recupera y sigue cumpliendo su ministerio. Por fin él y Bernabé regresan a Antioquía de Siria y
así termina el primer viaje (13:1–14:28).
Como el cuerpo gobernante del primer siglo, el Cuerpo Gobernante de hoy resuelve cuestiones
bajo la guía del espíritu santo. La circuncisión no estuvo entre las ―cosas necesarias‖:
‗abstenerse de cosas sacrificadas a ídolos, y de sangre, y de cosas estranguladas, y de
fornicación‘ (15:28, 29). Cuando Pablo empieza un segundo viaje misional, Silas lo acompaña,
y más tarde se une a ellos Timoteo. Al recibir el llamamiento de pasar a Macedonia, se dirigen
allá sin dilación. En Filipos la testificación da como resultado un alboroto y el encarcelamiento
de Pablo y Silas. Pero estos recobran la libertad como resultado de un terremoto, y predican al
carcelero y a su familia; estos se hacen creyentes y se bautizan (15:1–16:40).
Los siervos de Jehová deben ser estudiantes diligentes de Su Palabra como lo fue Pablo y lo
fueron los bereanos, quienes examinaban con cuidado las Escrituras. En el Areópago de
Atenas Pablo testifica acerca de Jehová como Creador y algunos se hacen creyentes. Los
habitantes de Corinto muestran tanto interés en la verdad que él permanece allí 18 meses.
Mientras reside en aquel lugar, Pablo escribe la Primera y la Segunda a los Tesalonicenses.
Después se separa de Silas y Timoteo y se embarca para Éfeso, y de allí sale hacia Cesarea y
luego viaja a Jerusalén. Su regreso a Antioquía de Siria marca el fin de su segundo viaje
misional (17:1–18:22).
Como mostró Pablo, la testificación de casa en casa es un rasgo vital del ministerio cristiano.
En su tercer viaje (52-56 E.C.) el apóstol principalmente recorre el trayecto de su segundo
viaje. Su ministerio suscita oposición en Éfeso, donde escribe la Primera a los Corintios.
Escribe la Segunda a los Corintios en Macedonia, y mientras está en Corinto escribe a los
romanos. En Mileto, Pablo se reúne con los ancianos de Éfeso y les recuerda que les enseñó
públicamente y de casa en casa. Su tercer viaje termina cuando llega a Jerusalén (18:23–
21:14).
PERSECUCIÓN INEFICAZ
La persecución no sella los labios de los testigos fieles de Jehová. Por eso, cuando en el
templo de Jerusalén se forma una chusma violenta contra Pablo, él testifica con denuedo a los
enfurecidos amotinadores. Una conspiración para asesinarlo fracasa cuando lo envían al
gobernador Félix de Cesarea bajo guardia militar. Pablo permanece encadenado por dos años
porque Félix espera recibir un soborno que nunca se le ofrece. Su sucesor, Festo, oye a Pablo
apelar a César. Pero el apóstol presenta una defensa conmovedora ante el rey Agripa antes de
partir para Roma (21:15–26:32).
Los siervos de Jehová siguen predicando intrépidamente a pesar de las pruebas que afrontan.
Esto ciertamente es así en el caso de Pablo. Por haber apelado a César, el apóstol se dirige a
Roma con Lucas cerca de 58 E.C. En Mira de Licia pasan a otra nave. Aunque sufren un
naufragio que los pone en la isla de Malta, más tarde otra nave los lleva a Italia. Aun mientras
está bajo guardia militar en Roma, Pablo llama a algunos y les declara las buenas nuevas.
Mientras está encarcelado allí escribe a los efesios, a los filipenses, a los colosenses, a
Filemón y a los hebreos (27:1–28:31).
SIEMPRE EN MARCHA
El libro de Hechos demuestra que los testigos de Jehová del primer siglo siguieron dando
adelanto fielmente a la obra que inició el Hijo de Dios. Sí, testificaron con celo bajo el poder del
espíritu santo de Dios.
La mano de Dios estuvo con aquellos primeros seguidores de Jesús porque ellos oraban a Dios
con confianza. El resultado fue que miles de personas se hicieron creyentes, y las ‗buenas
nuevas se predicaron en toda la creación que estaba bajo el cielo‘. (Colosenses 1:23.)
¡Ciertamente tanto en el primer siglo como en nuestros días los verdaderos cristianos han
manifestado ser testigos celosos de Jehová en marcha!
CORNELIO EL CENTURIÓN: Cornelio era un oficial del ejército, o centurión (10:1). El salario
anual de un centurión era unas cinco veces el de un soldado ordinario, o sea, unos
1.200 denarios, pero podía ser mucho más. Al jubilarse, el centurión recibía una concesión en
dinero o terreno. Su traje militar era llamativo, desde el yelmo de plata que llevaba hasta una
prenda parecida a la falda escocesa, un elegante capote de lana y grebas decoradas. En teoría
el centurión mandaba una compañía de 100 hombres, pero a veces había solo unos 80. Al
parecer ―la banda italiana‖ conseguía reclutas de entre ciudadanos romanos y libertos en Italia.
ORACIÓN EN LA AZOTEA: Pedro no estaba ostentándose cuando oró a solas en la azotea
(10:9). Es muy probable que un pretil alrededor del techo llano lo ocultara de la vista de otras
personas. (Deuteronomio 22:8.) El techo también era un sitio donde se descansaba y se
escapaba del ruido de la calle por la noche.
EL CARCELERO SE HACE CREYENTE: Cuando un terremoto abrió las puertas de la prisión y
soltó las cadenas de los presos, el carcelero filipense iba a suicidarse (16:25-27). ¿Por qué?
Porque la ley romana decretaba que el carcelero tenía que sufrir la pena del que escapara.
Obviamente el carcelero prefería suicidarse a ser torturado hasta la muerte, lo cual era,
probablemente, la pena de algunos de los presos. Sin embargo, aceptó las buenas nuevas, y
‗él y los suyos fueron bautizados sin demora‘ (16:28-34).
APELACIÓN A CÉSAR: Como ciudadano romano de nacimiento, Pablo tenía derecho a apelar
a César y ser juzgado en Roma (25:10-12). Al ciudadano romano no se le debía encarcelar,
azotar ni castigar sin que hubiera sido sometido a juicio (16:35-40; 22:22-29; 26:32).
GUARDIANA DEL TEMPLO DE ÁRTEMIS: Cierto platero llamado Demetrio suscitó un motín
porque no le gustó lo que predicó Pablo. Pero el registrador de la ciudad dispersó a la
muchedumbre (19:23-41). Los plateros hacían pequeños templetes de plata de la parte más
sagrada del templo, donde estaba la estatua de Ártemis, la diosa de la fertilidad que tenía
muchos pechos. Algunas ciudades competían unas con otras por el honor de ser su
ne·o·kó·ros, o ―guardiana del templo‖.
PROBLEMAS EN EL MAR: Cuando el barco que llevaba a Pablo fue azotado por el viento
tempestuoso llamado euroaquilón, ‗apenas pudieron tomar posesión del esquife que estaba en
la popa‘ (27:15, 16). El esquife era una barca pequeña que las naves solían llevar a remolque.
Los barcos llevaban cables que podían colocarse alrededor del casco para ceñir el barco por
debajo y disminuir así la presión causada por el manejo del mástil durante las tempestades
(27:17). Los marineros echaron cuatro anclas y aflojaron las amarraduras de los remos
timoneros que se usaban para dirigir la nave (27:29, 40). El barco de Alejandría llevaba el
mascarón de proa ―Hijos de Zeus‖... Cástor y Pólux, considerados patrones de los marineros
(28:11).
LLAMADOS DIOSES EN FORMA HUMANA: Cuando Pablo sanó a un varón cojo, los
residentes de Listra creyeron que unos dioses se habían materializado en forma de hombres
(14:8-18). Zeus, el dios principal de los griegos, tenía un templo en aquella ciudad, y su hijo,
Hermes, el mensajero de los dioses, era notable por su elocuencia. Puesto que la gente creyó
que Pablo era Hermes, porque tomaba la delantera al hablar, pensaron que Bernabé era Zeus.
Se acostumbraba coronar las imágenes de los dioses falsos con guirnaldas de flores o de hojas
de ciprés o pino, pero Pablo y Bernabé rechazaron aquel homenaje idolátrico.
―Tenemos que obedecer a Dios como gobernante más bien que a los hombres.‖ (HECHOS
5:29.)
JEHOVÁ DIOS había permitido que 12 hombres fueran llevados ante un tribunal supremo.
Corría el año 33 E.C., y el tribunal era el Sanedrín judío. Se sometía a juicio a los apóstoles de
Jesucristo. ¡Escuche! ‗Les ordenamos que no enseñaran sobre la base de este nombre —dice
el sumo sacerdote—, pero ustedes han llenado a Jerusalén con su enseñanza.‘ Ante eso,
Pedro y los demás apóstoles declararon: ―Tenemos que obedecer a Dios como gobernante
más bien que a los hombres‖. (Hechos 5:27-29.) Dijeron, en efecto: ―¡Jehová es nuestro
Gobernante!‖.
2
Sí; Jehová es el Gobernante de los verdaderos seguidores de Jesús. Esto lo deja bien
sentado el libro bíblico de Hechos de Apóstoles, escrito en Roma alrededor del año 61 E.C. por
―Lucas el médico amado‖. (Colosenses 4:14.) Al igual que los apóstoles, hoy día el pueblo de
Jehová obedece a su Gobernante celestial cuando lo que exigen humanos está en pugna con
la voluntad divina. Pero ¿qué más podemos aprender del libro de Hechos? (Le sugerimos que
durante su estudio personal lea las porciones de ese libro especificadas en letras negritas.)
Jesús comisiona a testigos
3
Los apóstoles podían adoptar una postura firme a favor de Dios porque se les había
fortalecido espiritualmente. Cristo había muerto en un madero de tormento, pero ellos sabían
que había sido resucitado (1:1-5). En cuerpos materializados Jesús ―se les mostró vivo‖ y les
enseñó verdades del Reino durante 40 días. También dijo a sus discípulos que esperaran en
Jerusalén por el bautismo ―en espíritu santo‖. Entonces la predicación sería lo primordial para
ellos, como lo es para los testigos de Jehová en la actualidad. (Lucas 24:27, 49; Juan 20:19–
21:24.)
4
Los apóstoles, todavía no bautizados en espíritu santo, tenían la idea equivocada de una
gobernación terrestre que pondría fin a la dominación romana cuando preguntaron: ―Señor,
¿estás restaurando el reino a Israel en este tiempo?‖ (1:6-8). En realidad Jesús dijo que no,
pues ‗no les pertenecía a ellos conocer los tiempos y sazones‘. ‗Cuando el espíritu santo
llegara sobre ellos‘, los facultaría para testificar acerca del Reino celestial de Dios, no de uno
en esta Tierra. Predicarían en Jerusalén, Judea y Samaria, ―y hasta la parte más distante de la
tierra‖. Con la ayuda del espíritu, en estos últimos días los testigos de Jehová efectúan por todo
el mundo una obra como aquella.
5
Jesús acababa de dar aquella comisión de predicar por todo el mundo cuando empezó a
ascender al cielo. Aquella ascensión empezó con un movimiento hacia arriba que lo alejó de
sus discípulos, y algún tiempo después Jesús entró ante la presencia de su Gobernante
celestial y pasó a estar activo en la región de los espíritus (1:9-11). Después que una nube
ocultó de la vista de los apóstoles a Jesús, él se despojó de su cuerpo carnal materializado.
Dos ángeles aparecieron y dijeron que él ‗vendría de la misma manera‘. Y así ha sido.
Únicamente los discípulos de Jesús lo vieron partir, tal como solo los testigos de Jehová
reconocen su vuelta invisible.
Jehová escoge
6
Poco tiempo después los apóstoles estuvieron de regreso en Jerusalén (1:12-26). En un
aposento de arriba (tal vez en la casa de la madre de Marcos, llamada María), los 11 apóstoles
leales persistían en orar con los medio hermanos de Jesús, sus otros discípulos y su madre,
María. (Marcos 6:3; Santiago 1:1.) Pero ¿quién recibiría el ―puesto de superintendencia‖ de
Judas? (Salmo 109:8.) Unos 120 discípulos estaban presentes cuando Dios escogió a un
hombre para reemplazar a Judas, quien había traicionado a Jesús, y restablecer la cantidad de
12 apóstoles. El escogido tenía que ser alguien que hubiera sido discípulo durante el tiempo
del ministerio de Jesús y que hubiera sido testigo de su resurrección. Por supuesto, aquel
hombre también tenía que reconocer a Jehová como su Gobernante. Después de orar, se
echaron suertes sobre Matías y José Barsabás. Dios hizo que la suerte cayera sobre Matías.
(Proverbios 16:33.)
7
Ciertamente Judas Iscariote no había reconocido a Jehová como Gobernante suyo. ¡Había
traicionado al Hijo de Dios por 30 piezas de plata! Judas devolvió aquel dinero a los sacerdotes
principales, pero Pedro dijo que el traidor ―compró un campo con el salario de la injusticia‖.
¿Cómo fue eso? Pues bien, suministró el dinero y la razón para comprar el ―Campo de
Sangre‖, como se le llamó. Este ha sido identificado como un terreno llano en la parte sur del
valle de Hinón. Judas había arruinado por completo su buena relación con el Gobernante
celestial, así que ―se ahorcó‖. (Mateo 27:3-10.) Puede que la cuerda o la rama del árbol se
haya roto, de modo que él ‗cayera de cabeza y reventara ruidosamente por en medio‘ al dar
contra rocas dentadas. ¡Que ninguno de nosotros sea un falso hermano!
¡Llenos de espíritu santo!
8
¿Qué sucedió en cuanto al prometido bautismo en espíritu santo? Este vino en el Pentecostés
de 33 E.C., diez días después de la ascensión de Jesús (2:1-4). ¡Qué acontecimiento
emocionante fue aquel bautismo! ¡Imagínese la escena! Unos 120 discípulos estaban en el
aposento de arriba cuando, ‗de repente, desde el cielo un ruido como el de una brisa impetuosa
y fuerte llenó la casa‘. No era un viento, pero sonaba como si lo fuera. Una lengua ―como de
fuego‖ se asentó sobre cada discípulo y cada apóstol. ―Todos se llenaron de espíritu santo y
comenzaron a hablar en lenguas diferentes.‖ Cuando aquel bautismo tuvo lugar, fueron
también engendrados por espíritu santo, ungidos y sellados en prenda de una herencia
espiritual. (Juan 3:3, 5; 2 Corintios 1:21, 22; 1 Juan 2:20.)
9
Aquel acontecimiento afectó a los judíos y los prosélitos que habían venido a Jerusalén de
‗toda nación bajo el cielo‘ (2:5-13). Asombrados, estos preguntaron: ‗¿Cómo es que cada uno
de nosotros oye habla en su lenguaje de nacimiento?‘. El habla pudiera ser la lengua de
lugares como Media (al este de Judea), Frigia (en Asia Menor) y Roma (en Europa). Muchos
oyentes quedaron pasmados de asombro al oír a los discípulos hablar ―acerca de las cosas
magníficas de Dios‖ en varios lenguajes, pero los burlones sugirieron que los discípulos
estaban borrachos.
―Como [la congregación] andaba en el temor de Jehová y en el consuelo del espíritu santo,
siguió multiplicándose.‖ (HECHOS 9:31.)
UNO de los discípulos se halló frente a una prueba suprema. ¿Seguiría íntegro ante Dios?
¡Claro que sí! Había andado en el temor de Dios, con reverencia a su Hacedor, y moriría como
fiel testigo de Jehová.
2
Aquel discípulo temeroso de Dios que se mantuvo íntegro fue Esteban, ―varón lleno de fe y de
espíritu santo‖. (Hechos 6:5.) Su asesinato provocó una ola de persecución, pero después la
congregación, esparcida por toda Judea, Galilea y Samaria, entró en un período de paz y se
edificó espiritualmente. Además, ―como andaba en el temor de Jehová y en el consuelo del
espíritu santo, siguió multiplicándose‖. (Hechos 9:31.) Como testigos de Jehová hoy, podemos
tener la certeza de que Dios nos bendecirá sea que experimentemos paz o persecución, como
lo muestran los capítulos 6 al 12 de Hechos. De modo que andemos con temor reverente a
Dios cuando se nos persiga, y aprovechemos toda pausa en la persecución para edificarnos en
sentido espiritual y estar más activos en su servicio. (Deuteronomio 32:11, 12; 33:27.)
*** w90 15/6 págs. 10-14 El pueblo de Jehová hecho firme en la fe ***
―Las congregaciones continuaron haciéndose firmes en la fe y aumentando en número de día
en día.‖ (HECHOS 16:5.)
JEHOVÁ DIOS utilizó a Saulo de Tarso como ―un vaso escogido‖. Cuando este llegó a ser el
apóstol Pablo ‗sufrió muchas cosas‘. Pero mediante su obra y la de otros la organización de
Jehová disfrutó de unidad y logró una asombrosa expansión. (Hechos 9:15, 16.)
2
Más y más gentiles se convertían al cristianismo, y una significativa reunión del cuerpo
gobernante contribuyó mucho a fomentar la unidad entre el pueblo de Dios y a hacerlo firme en
la fe. Será muy provechoso considerar estos desenvolvimientos, y otros, que se relatan en
Hechos 13:1–16:5, pues los testigos de Jehová experimentan ahora crecimiento y bendiciones
espirituales similares. (Isaías 60:22.) (Al estudiar en privado los artículos sobre Hechos que
aparecen en este número, le sugerimos que lea para sí los pasajes del libro que se indican en
letras negritas.)
Misioneros entran en acción
3
Hombres enviados de la congregación de Antioquía, Siria, ayudaron a los creyentes a
hacerse firmes en la fe (13:1-5). En Antioquía estaban estos ―profetas y maestros‖: Bernabé,
Symeón (Niger), Lucio de Cirene, Manaén y Saulo de Tarso. Los profetas explicaban la Palabra
de Dios y predecían sucesos, mientras que los maestros instruían en las Escrituras y en el vivir
piadoso. (1 Corintios 13:8; 14:4.) Bernabé y Saulo recibieron una asignación especial. Llevaron
consigo a Marcos, primo de Bernabé, y partieron hacia Chipre. (Colosenses 4:10.) Predicaron
en sinagogas del puerto oriental de Salamina, pero no hay ningún registro de que los judíos
respondieran bien. Puesto que aquellos eran gente acomodada en sentido material, ¿para qué
necesitaban al Mesías?
4
Dios bendijo la testificación que se efectuó en otra parte de Chipre (13:6-12). En Pafos los
misioneros encontraron a Bar-Jesús (Elimas), un hechicero y falso profeta judío. Cuando este
trató de impedir que el procónsul Sergio Paulo oyera la palabra de Dios, Saulo se llenó de
espíritu santo y dijo: ‗Oh hombre lleno de fraude y de villanía, hijo del Diablo, enemigo de todo
lo justo, ¿no cesarás de torcer los caminos correctos de Jehová?‘. Entonces la mano de castigo
de Dios cegó a Elimas por algún tiempo, y Sergio Paulo ―se hizo creyente, pues quedó atónito
por la enseñanza de Jehová‖.
5
Desde Chipre el grupo se embarcó para la ciudad de Perga, en Asia Menor. Entonces Pablo y
Bernabé viajaron hacia el norte por desfiladeros —probablemente ‗en peligros de ríos y por
parte de salteadores‘— hasta Antioquía, Pisidia. (2 Corintios 11:25, 26.) Allí Pablo habló en la
sinagoga (13:13-41). Repasó los tratos de Dios con Israel e identificó a Jesús, descendiente de
David, como el Salvador. Aunque los gobernantes judíos habían exigido la muerte de Jesús, la
promesa hecha a los antepasados de los judíos se había cumplido cuando Dios lo resucitó.
(Salmo 2:7; 16:10; Isaías 55:3.) Pablo advirtió a sus oyentes que no despreciaran el don de la
salvación que Dios había provisto mediante Cristo. (Habacuc 1:5, Septuaginta.)
6
El discurso de Pablo despertó interés entre sus oyentes, tal como lo hacen los discursos
públicos que presentan los testigos de Jehová hoy día (13:42-52). El sábado siguiente casi
toda la ciudad se reunió para oír la palabra de Jehová, y esto llenó de celos a los judíos. ¡Pues
en una sola semana los misioneros aparentemente habían convertido a más gentiles que
aquellos judíos durante toda su vida! En vista de que los judíos contradijeron con blasfemias a
Pablo, fue tiempo para que la luz espiritual resplandeciera en otro lugar, y por eso se les dijo:
‗Puesto que están echando la palabra de Dios y no se juzgan dignos de vida eterna, nos
volvemos a las naciones‘. (Isaías 49:6.)
7
Ahora los gentiles empezaron a regocijarse, y todos los que estaban correctamente
dispuestos para la vida eterna se hicieron creyentes. Sin embargo, mientras la palabra de
Jehová se llevaba por todo el país, los judíos alborotaron a mujeres estimables (probablemente
para que presionaran a sus esposos u otras personas) y a hombres prominentes para que
persiguieran a Pablo y Bernabé y los echaran de sus límites. Pero aquello no detuvo a los
misioneros. Ellos simplemente ―sacudieron el polvo de los pies contra ellos‖ y se fueron a Iconio
(la moderna Konya), una ciudad prominente en la provincia romana de Galacia. (Lucas 9:5;
10:11.) Pues bien, ¿qué hay de los discípulos que quedaron en Antioquía de Pisidia? Porque
se les había hecho firmes en la fe, ―continuaron llenos de gozo y de espíritu santo‖. Esto nos
ayuda a comprender que la oposición no tiene que impedir el progreso espiritual.
Firmes en la fe a pesar de persecución
8
Pablo y Bernabé mismos demostraron firmeza en la fe a pesar de ser perseguidos (14:1-7).
En respuesta a su testificación en la sinagoga de Iconio, muchos judíos y griegos se hicieron
creyentes. Cuando los judíos incrédulos incitaron a los gentiles contra los nuevos creyentes,
aquellos dos trabajadores hablaron con denuedo por la autoridad de Dios, y él mostró su
aprobación facultándolos para efectuar señales. Esto dividió a la chusma, pues algunos
estaban por los judíos pero otros por los apóstoles (los enviados). Los apóstoles no eran
cobardes, pero cuando se enteraron de que existía una conspiración para apedrearlos
ejercieron prudencia y partieron de allí para predicar en Licaonia, una región de Asia Menor en
el sur de Galacia. Si nosotros obramos con prudencia, muchas veces nosotros también
pudiéramos permanecer activos en el ministerio a pesar de oposición. (Mateo 10:23.)
9
La ciudad licaónica de Listra fue la siguiente que recibió testimonio (14:8-18). Allí Pablo sanó
a un hombre que había sido cojo de nacimiento. Las muchedumbres, que no se dieron cuenta
de que el milagro había venido de Jehová, clamaron: ―¡Los dioses se han hecho como
humanos y han bajado a nosotros!‖. Bernabé y Pablo no sabían lo que sucedía, porque las
muchedumbres se habían expresado en la lengua licaónica. Porque Pablo llevaba la delantera
al hablar, la gente creía que él era Hermes (el mensajero elocuente de los dioses) y que
Bernabé era Zeus, el dios principal de los griegos.
10
El sacerdote de Zeus hasta trajo toros y guirnaldas para ofrecer sacrificios a Pablo y
Bernabé. Los visitantes prontamente explicaron —probablemente en el griego que se entendía
comúnmente, o mediante un intérprete— que ellos también eran humanos que tenían
sufrimientos y que declaraban las buenas nuevas para que la gente se volviera de ―estas cosas
vanas‖ (dioses sin vida, o ídolos) al Dios vivo. (1 Reyes 16:13; Salmo 115:3-9; 146:6.) Sí, antes
Dios había permitido que las naciones (pero no los hebreos) fueran por sus propios caminos,
aunque no se había dejado a sí mismo sin testimonio acerca de su existencia y bondad ‗al
darles lluvias y épocas fructíferas, llenando por completo sus corazones de alimento y de
alegría‘. (Salmo 147:8.) A pesar de aquel razonamiento, Bernabé y Pablo apenas pudieron
lograr que las muchedumbres desistieran de hacerles sacrificios. Sin embargo, los misioneros
no aceptaron homenaje como dioses, ni usaron aquella autoridad para fundar el cristianismo en
aquella zona. ¡Qué excelente ejemplo para nosotros, especialmente si nos inclinamos a anhelar
adulación por lo que Jehová nos permite lograr en su servicio!
11
De repente surgió horrible persecución (14:19-28). ¿Cómo sucedió esto? Las
muchedumbres, persuadidas por los judíos de Antioquía de Pisidia y de Iconio, apedrearon a
Pablo y lo arrastraron hasta fuera de la ciudad, creyendo que estaba muerto. (2 Corintios
11:24, 25.) Pero cuando los discípulos lo cercaron él se levantó y entró en Listra sin que lo
pudieran reconocer, probablemente al amparo de la oscuridad. Al día siguiente él y Bernabé
partieron para Derbe, donde una buena cantidad de personas se hicieron discípulos. Al volver a
visitar a Listra, Iconio y Antioquía, los misioneros fortalecieron a los discípulos y los animaron a
permanecer en la fe, y dijeron: ―Tenemos que entrar en el reino de Dios a través de muchas
tribulaciones‖. Como cristianos, nosotros también esperamos pasar por tribulaciones y no
debemos tratar de evadirlas mediante transigir en cuanto a nuestra fe. (2 Timoteo 3:12.) En
aquel tiempo hubo nombramiento de ancianos para congregaciones a las cuales Pablo escribió
su carta a los gálatas.
12
Mientras pasaban por Pisidia, Pablo y Bernabé hablaron la palabra en Perga, una ciudad
prominente de Panfilia. Con el tiempo regresaron a Antioquía, Siria. Ahora que había terminado
el primer viaje de Pablo, los dos misioneros informaron a la congregación ―las muchas cosas
que Dios había hecho mediante ellos, y que había abierto a las naciones la puerta a la fe‖.
Pasaron algún tiempo con los discípulos en Antioquía, y sin duda alguna aquello contribuyó
mucho a hacer a estos firmes en la fe. Las visitas que hacen los superintendentes viajantes hoy
día producen efectos similares en sentido espiritual.
Se resuelve una cuestión importante
13
La firmeza en la fe exigía unidad de pensamiento. (1 Corintios 1:10.) Para que el cristianismo
no se dividiera en una facción de hebreos y otra de no judíos, fue necesario que el cuerpo
gobernante decidiera si los gentiles que entraban a raudales en la organización de Dios tenían
o no que guardar la Ley de Moisés y circuncidarse (15:1-5). Ciertos hombres de Judea ya
habían viajado a Antioquía de Siria y se habían puesto a enseñar a los gentiles creyentes de
aquel lugar que a menos que se circuncidaran no podían ser salvos. (Éxodo 12:48.) Por
consiguiente, Pablo, Bernabé y otros fueron enviados a los apóstoles y ancianos de Jerusalén.
Aun allí, creyentes que habían sido fariseos de mentalidad legalista insistieron en que los
gentiles tenían que circuncidarse y observar la Ley.
14
Se celebró una reunión para determinar cuál era la voluntad de Dios (15:6-11). Es cierto que
hubo disputas, pero no hubo contienda a medida que hombres de convicciones firmes se
expresaron... ¡un excelente ejemplo para los ancianos hoy día! Entonces Pedro dijo: ‗Dios hizo
la selección de que, por mi boca, gentiles [como Cornelio] oyeran las buenas nuevas y
creyeran. Dio testimonio dándoles espíritu santo y no hizo ninguna distinción entre nosotros y
ellos. [Hechos 10:44-47.] Entonces, ¿por qué están ustedes poniendo a Dios a prueba,
imponiendo sobre el cuello de ellos un yugo [la obligación de guardar la Ley] que ni nosotros ni
nuestros antepasados pudieron cargar? Nosotros [los judíos según la carne] confiamos en ser
salvados mediante la bondad inmerecida del Señor Jesús tal como esas personas‘. El que Dios
hubiera aceptado a gentiles incircuncisos mostraba que la circuncisión y el guardar la Ley no se
requerían para la salvación. (Gálatas 5:1.)
15
La congregación quedó callada cuando Pedro concluyó, pero se oiría más (15:12-21).
Bernabé y Pablo mencionaron las señales que Dios había ejecutado mediante ellos entre los
gentiles. Entonces el presidente de la reunión, Santiago, el medio hermano de Jesús, dijo:
‗Symeón [el nombre hebreo de Pedro] ha contado cómo Dios dirigió su atención a las naciones
para sacar de entre ellas un pueblo para su nombre‘. Santiago indicó que la predicha
reedificación de ―la cabaña de David‖ (el restablecimiento de la gobernación real en el linaje de
David) se estaba cumpliendo mediante el recogimiento de los discípulos de Jesús (los
herederos del Reino) de entre los judíos y los gentiles. (Amós 9:11, 12, Septuaginta; Romanos
8:17.) Puesto que este era el propósito de Dios, los discípulos deberían aceptarlo. Santiago
recomendó que se escribiera a los cristianos gentiles que se abstuvieran de: 1) cosas
contaminadas por los ídolos, 2) fornicación, y 3) sangre y lo estrangulado. Estas prohibiciones
estaban en los escritos de Moisés que se leían en las sinagogas todos los sábados. (Génesis
9:3, 4; 12:15-17; 35:2, 4.)
16
Ahora el cuerpo gobernante envió una carta a los cristianos gentiles de Antioquía, Siria y
Cilicia (15:22-35). El espíritu santo y los escritores de la carta pedían que ellos se abstuvieran
de: cosas sacrificadas a ídolos; sangre (algo que algunas personas consumían regularmente);
cosas estranguladas y no desangradas (para muchos paganos aquella carne era un manjar
exquisito); y fornicación (griego: por·néi·a, que denota relaciones sexuales ilícitas fuera del
matrimonio bíblico). Por aquella abstinencia prosperarían espiritualmente, como lo hacen los
testigos de Jehová hoy día porque cumplen con ―estas cosas necesarias‖. Las palabras
―¡Buena salud a ustedes!‖ equivalen a decir: ―¡Que les vaya bien!‖, y nadie debe llegar a la
conclusión de que estos requisitos tenían que ver principalmente con medidas de salud.
Cuando la carta se leyó en Antioquía, la congregación se regocijó por el estímulo que
suministró. En aquella ocasión el pueblo de Dios en Antioquía también recibió firmeza en la fe
por las palabras animadoras de Pablo, Silas, Bernabé y otros. ¡Busquemos nosotros también
maneras de animar y edificar a nuestros compañeros de creencia!
Empieza la segunda gira misional
17
Surgió un problema cuando se propuso un segundo viaje misional (15:36-41). Pablo sugirió
que él y Bernabé volvieran a visitar a las congregaciones de Chipre y Asia Menor. Bernabé
concordó, pero quiso llevar consigo a su primo Marcos. Pablo no estuvo de acuerdo con
aquello, porque Marcos los había abandonado en Panfilia. Entonces ocurrió ―un agudo estallido
de cólera‖. Pero ni Pablo ni Bernabé procuraron justificarse personalmente mediante tratar de
implicar a otros ancianos ni al cuerpo gobernante en su asunto personal. ¡Qué excelente
ejemplo!
18
No obstante, aquella disputa causó una separación. Bernabé tomó consigo a Marcos y partió
para Chipre. Pablo, con Silas como acompañante, ―pasó por Siria y Cilicia, fortaleciendo a las
congregaciones‖. Puede que los lazos familiares hayan influido en Bernabé, pero él debería
haber reconocido el apostolado de Pablo y el hecho de que era ―un vaso escogido‖. (Hechos
9:15.) ¿Y qué hay de nosotros? ¡Aquel incidente debe inculcar en nosotros lo necesario que es
reconocer la autoridad teocrática y cooperar de lleno con ―el esclavo fiel y discreto‖! (Mateo
24:45-47.)
Progreso en paz
19
No se permitió que aquella disputa afectara la paz de la congregación. El pueblo de Dios
siguió haciéndose firme en la fe (16:1-5). Pablo y Silas fueron a Derbe y luego a Listra. Allí vivía
Timoteo, hijo de la judía creyente Eunice y su esposo griego, quien era incrédulo. Timoteo era
joven, pues hasta 12 o 15 años después todavía se le dijo: ―Que nadie jamás menosprecie tu
juventud‖. (1 Timoteo 4:12.) Puesto que ―los hermanos de Listra y de Iconio [a unos
29 kilómetros (18 millas) de distancia] daban buenos informes acerca de él‖, Timoteo era bien
conocido por su excelente ministerio y sus cualidades piadosas. Los jóvenes cristianos de hoy
deben buscar la ayuda de Jehová para ganarse una reputación similar. Pablo circuncidó a
Timoteo porque visitarían los hogares y las sinagogas de judíos que sabían que el padre de
Timoteo era gentil, y el apóstol no quería que nada sirviera de obstáculo a hombres y mujeres
judíos que necesitaban aprender acerca del Mesías. Sin violar principios bíblicos, los testigos
de Jehová hoy también hacen lo que pueden para que las buenas nuevas sean atrayentes a
gente de toda clase. (1 Corintios 9:19-23.)
20
Con Timoteo como acompañante, Pablo y Silas entregaron a los discípulos, para que los
observaran, los decretos del cuerpo gobernante. ¿Y cuál fue el resultado? Aparentemente
refiriéndose a Siria, Cilicia y Galacia, Lucas escribió: ―Las congregaciones continuaron
haciéndose firmes en la fe y aumentando en número de día en día‖. Sí, el haber obrado en
armonía con la carta del cuerpo gobernante redundó en unidad y prosperidad espiritual. ¡Qué
excelente ejemplo para nuestros tiempos críticos, cuando el pueblo de Jehová necesita
permanecer unido y firme en la fe! ***
―De una manera poderosa, la palabra de Jehová siguió creciendo y prevaleciendo.‖ (HECHOS
19:20.)
JEHOVÁ estaba abriendo una puerta que llevaba a actividad. El que particularmente
encabezaría aquella obra sería Pablo, el ―apóstol a las naciones‖. (Romanos 11:13.) Sí,
mientras continuamos nuestro estudio de Hechos de Apóstoles lo hallamos ocupado en
emocionantes viajes misionales. (Hechos 16:6–19:41.)
2
Pablo también manejó la pluma de escritor bajo inspiración divina. Desde cerca de 50 E.C.
hasta 56 E.C., escribió 1 y 2 Tesalonicenses desde Corinto; Gálatas, desde aquella misma
ciudad o desde Antioquía de Siria; 1 Corintios, desde Éfeso; 2 Corintios, desde Macedonia; y
Romanos, desde Corinto. Y a medida que Dios bendijo el ministerio de Pablo y el de otros, ―de
una manera poderosa, la palabra de Jehová siguió creciendo y prevaleciendo‖. (Hechos 19:20.)
De Asia a Europa
3
Pablo y sus acompañantes dieron un ejemplo excelente de aceptar dirección mediante
espíritu santo (16:6-10). Quizás por revelaciones audibles, sueños o visiones, el espíritu impidió
que predicaran en el distrito de Asia y la provincia de Bitinia, aunque después se proclamaron
allí las buenas nuevas. (Hechos 18:18-21; 1 Pedro 1:1, 2.) ¿Por qué impidió que se testificara
allí el espíritu? Había pocos trabajadores, y el espíritu los estaba guiando a campos más
productivos en Europa. Por eso hoy día, si está obstaculizado el camino a cierto territorio, los
testigos de Jehová predican en otro lugar, seguros de que el espíritu de Dios los dirigirá a los
que son mansos como ovejas.
4
Pablo y sus acompañantes ―pasaron por alto‖ como campo misional a Misia, una región de
Asia Menor. Sin embargo, en una visión Pablo vio a un macedonio que suplicaba ayuda. De
modo que los misioneros fueron prontamente a Macedonia, una región de la península
balcánica. Igualmente, por espíritu santo muchos Testigos reciben dirección para servir ahora
donde hay gran necesidad de proclamadores del Reino.
5
La palabra de Jehová prevaleció en Macedonia (16:11-15). Parece que en Filipos, colonia
donde principalmente vivían ciudadanos romanos, había pocos judíos y no había sinagoga. Así
que los hermanos fueron a ―un lugar de oración‖ junto a un río fuera de la ciudad. Entre los
presentes allí estaba Lidia, posiblemente una prosélita judía de Tiatira, ciudad de Asia Menor
conocida por su industria del tinte. Ella vendía tinte púrpura o telas y ropa teñida con aquel
tinte. Después que Lidia y su casa se bautizaron, ella extendió hospitalidad con tanta solicitud
que Lucas escribió: ―Sencillamente nos obligó a aceptar‖. Agradecemos el tener hermanas
como esas hoy día.
*** w90 15/6 págs. 21-25 ¡Proclamen con denuedo el Reino de Jehová! ***
―Recibía amablemente a todos los que venían a él, predicándoles el reino de Dios.‖ (HECHOS
28:30, 31.)
JEHOVÁ siempre apoya a los proclamadores del Reino. ¡Cuán cierto fue eso en el caso del
apóstol Pablo! Con el apoyo divino, él compareció ante gobernantes, aguantó ataques de
chusmas y proclamó con denuedo el Reino de Jehová.
2
Aun como prisionero en Roma, Pablo ―recibía amablemente a todos los que venían a él,
predicándoles el reino de Dios‖. (Hechos 28:30, 31.) ¡Qué ejemplo excelente fue para los
testigos de Jehová de hoy día! Podemos aprender mucho del ministerio de Pablo, del cual
informa Lucas en los últimos capítulos del libro bíblico de Hechos (20:1–28:31).
Edificó a compañeros de creencia
3
Después de calmarse el disturbio en Éfeso, Pablo continuó su tercera gira misional (20:1-12).
Sin embargo, cuando estaba a punto de embarcarse para Siria se enteró de que los judíos
tramaban un complot contra él. Puesto que era posible que ellos hubieran planeado subir a
bordo del mismo barco y matar a Pablo, el apóstol se fue por Macedonia. En Troas pasó una
semana edificando a sus compañeros de creencia como lo hacen ahora los superintendentes
viajantes entre los testigos de Jehová. La noche antes de su partida, Pablo prolongó su
discurso hasta la medianoche. Parece que Eutico, sentado a la ventana, estaba agotado
debido a las faenas del día. Sumido en sueño, cayó desde el tercer piso y murió, ¡pero Pablo le
devolvió la vida! ¡Cuánto gozo debe haber causado aquello! Entonces piense en el gozo que
habrá cuando muchos millones de personas sean resucitadas en el nuevo mundo venidero.
(Juan 5:28, 29.)
4
En camino a Jerusalén, Pablo se reunió en Mileto con los ancianos de Éfeso (20:13-21). Les
recordó que les había enseñado ―de casa en casa‖ y que ‗había dado testimonio cabalmente,
tanto a judíos como a griegos, acerca del arrepentimiento para con Dios y de la fe en nuestro
Señor Jesús‘. Los que al fin habían llegado a ser ancianos se habían arrepentido, y tenían fe.
El apóstol también los había estado adiestrando para que proclamaran con denuedo el Reino a
incrédulos en un ministerio de casa en casa como el que efectúan los testigos de Jehová hoy
día.
5
Pablo fue ejemplar en aceptar dirección mediante el espíritu santo de Dios (20:22-30). ―Atado
en el espíritu‖, o sintiéndose obligado a seguir la guía del espíritu, el apóstol iría a Jerusalén
aunque allí le esperaban cadenas y tribulaciones. Apreciaba la vida, pero lo más importante
para él era ser íntegro ante Dios, y eso debe ser lo más importante para nosotros. Pablo
exhortó a los ancianos a ‗prestar atención a todo el rebaño, entre el cual el espíritu santo los
había nombrado superintendentes‘. Después de su ―partida‖ (aparentemente al morir), ‗lobos
opresivos no tratarían al rebaño con ternura‘. Hombres de aquella índole se levantarían de
entre los ancianos mismos, y discípulos poco discernidores aceptarían sus enseñanzas
aviesas. (2 Tesalonicenses 2:6.)
6
Los ancianos tenían que permanecer alerta en sentido espiritual para protegerse de la
apostasía (20:31-38). El apóstol les había enseñado acerca de las Escrituras Hebreas y las
enseñanzas de Jesús, las cuales tienen poder santificador que podría ayudarles a recibir el
Reino celestial, ―la herencia entre todos los santificados‖. Por trabajar para su propio sustento y
el de sus acompañantes, Pablo también animó a los ancianos a ser buenos trabajadores.
(Hechos 18:1-3; 1 Tesalonicenses 2:9.) Si seguimos un derrotero similar a ese y ayudamos a
otros a alcanzar la vida eterna, comprenderemos estas palabras de Jesús: ―Hay más felicidad
en dar que en recibir‖. El sentido de esa declaración se halla en los Evangelios, pero el único
que la cita es Pablo, quien tal vez la recibió verbalmente o por inspiración. Podemos disfrutar
de gran felicidad si somos tan abnegados como lo fue Pablo. ¡Él había dado tanto de sí que su
partida entristeció muchísimo a los ancianos efesios!
Que se efectúe la voluntad de Jehová
7
Hacia el fin de su tercer viaje misional (c. 56 E.C.), Pablo dio un ejemplo excelente al
someterse a la voluntad de Dios (21:1-14). En Cesarea, él y sus acompañantes se alojaron con
Felipe, cuyas cuatro hijas vírgenes ―profetizaban‖ mediante predecir sucesos por espíritu santo.
Allí el profeta cristiano Ágabo se ató las manos y los pies con el cinturón de Pablo, y el espíritu
lo impelió a decir que los judíos atarían al dueño de aquel cinturón en Jerusalén y lo
entregarían en manos de gentiles. ―Estoy listo no solo para ser atado, sino también para morir
en Jerusalén por el nombre del Señor Jesús‖, dijo Pablo. Los discípulos asintieron diciendo:
―Efectúese la voluntad de Jehová‖.
8
Pablo relató a los ancianos de Jerusalén lo que había hecho Dios entre los gentiles mediante
su ministerio (21:15-26). Si alguna vez se nos hace difícil aceptar buen consejo, podemos
recordar cómo lo aceptó Pablo. Para probar que no estaba enseñando a los judíos en tierras de
gentiles ―una apostasía contra Moisés‖, prestó atención al consejo de los ancianos respecto a
someterse a limpieza ceremonial y pagar sus propios gastos y los de otros cuatro hombres.
Aunque la muerte de Jesús quitó del camino la Ley, Pablo no hizo nada malo al cumplir con los
rasgos de esta relacionados con los votos. (Romanos 7:12-14.)
¿CÓMO puede un humano pecaminoso ser justo a la vista de Dios y alcanzar así la vida
eterna? Esta cuestión causó disputas acaloradas en el primer siglo de nuestra era común.
¿Sabe usted la respuesta? Sea que la sepa o no, le será provechoso leer cómo trató
magistralmente este asunto el apóstol Pablo en el libro bíblico de Romanos. Eso le ayudará a
entender la importante relación que existe entre la fe, las obras, la justicia y la vida.
PABLO Y LOS ROMANOS
El libro de Romanos es una carta que Pablo escribió a los cristianos de Roma alrededor del
año 56 E.C. ¿Por qué la escribió? Aunque Pablo todavía no había visitado Roma en 56 E.C.,
evidentemente conocía a muchos cristianos de aquella ciudad, pues en su carta mencionó a
muchos por nombre. Además, Pablo anhelaba ir a Roma para estimular a sus hermanos
cristianos, y también parece que planeaba hacer escala en Roma en el viaje que se había
propuesto hacer a España. (Romanos 1:11, 12; 15:22-24.)
Sin embargo, el propósito principal de Pablo al escribir esta carta fue contestar la pregunta:
¿Cómo puede alcanzar la gente la justicia que lleva a la vida? La respuesta resulta ser la mejor
de las noticias. La justicia se cuenta sobre la base de la fe. Pablo señala esto y establece el
tema de su carta cuando escribe: ―No me avergüenzo de las buenas nuevas; son, en realidad,
el poder de Dios para salvación a todo el que tiene fe, al judío primero, y también al griego;
porque en ellas se revela la justicia de Dios a causa de fe y hacia fe, así como está escrito:
‗Mas el justo... por medio de la fe vivirá‘‖. (Romanos 1:16, 17.)
LA FE Y LA LEY
En el primer siglo no todos concordaban en que la justicia se contaba sobre la base de la fe.
Una minoría ruidosa insistía en que se necesitaba algo más. ¿No había provisto Jehová la Ley
de Moisés? ¿Cómo podría alguien ser justo si no se sometía a aquella provisión inspirada?
(Véase Gálatas 4:9-11, 21; 5:2.) En el año 49 E.C. el cuerpo gobernante de Jerusalén
consideró la cuestión de la adherencia a la Ley y llegó a la conclusión de que los gentiles que
aceptaban las buenas nuevas no tenían que circuncidarse ni someterse a los reglamentos de la
Ley judía. (Hechos 15:1, 2, 28, 29.)
Unos siete años después Pablo escribió su carta a los Romanos en apoyo de aquella decisión
trascendental. En realidad él fue más allá. No solo era innecesario que los cristianos gentiles
observaran la Ley, sino que los judíos que dependieran de la obediencia a ella no serían
declarados justos para la vida.
JUSTICIA MEDIANTE LA FE
Al leer el libro de Romanos usted notará con cuánto cuidado desarrolla Pablo su argumento,
apoyando sus declaraciones con muchas citas de las Escrituras Hebreas. Cuando habla a los
judíos, a quienes pudiera hacérseles difícil aceptar su enseñanza inspirada, lo hace con afecto
y consideración. (Romanos 3:1, 2; 9:1-3.) No obstante, presenta su caso con claridad notable y
lógica indisputable.
En los capítulos 1 a 4 de Romanos Pablo empieza con la verdad de que toda persona es
culpable de pecado. Por lo tanto, la única manera de declarar justos a los humanos es sobre la
base de la fe. Es cierto que los judíos procuraron alcanzar la justicia mediante cumplir con la
Ley de Moisés. Pero fracasaron. Por eso Pablo dice con denuedo: ―Tanto los judíos como los
griegos están todos bajo pecado‖. Da prueba de esta verdad poco popular con una serie de
citas de las Escrituras. (Romanos 3:9.)
Puesto que ―por obras de ley ninguna carne será declarada justa‖, ¿qué esperanza hay? Dios
declarará justos a los humanos como don gratuito sobre la base del sacrificio de rescate de
Jesús. (Romanos 3:20, 24.) Para que puedan valerse de esta provisión, tienen que ejercer fe
en ese sacrificio. ¿Es una novedad esta enseñanza de que a los humanos se les declara justos
sobre la base de la fe? De ningún modo. Abrahán mismo fue declarado justo por su fe antes de
que la Ley siquiera hubiera sido inaugurada. (Romanos 4:3.)
Después de establecer la importancia de la fe, en el capítulo 5 Pablo considera el fundamento
de la fe cristiana. Este fundamento es Jesús, cuyo derrotero de justicia anula los malos efectos
del pecado de Adán en el caso de los que ejercen fe en Él. Así, ―mediante un solo acto de
justificación‖, no por obediencia a la Ley de Moisés, ―el resultado a toda clase de hombres es el
declararlos justos para vida‖. (Romanos 5:18.)
RESPUESTA A OBJECIONES
Pero si los cristianos no están bajo la Ley, ¿qué impedirá que pasen a cometer pecados y
cuenten con que se les declare justos de todos modos, gracias a la bondad inmerecida de
Dios? Pablo contesta esta objeción en el capítulo 6 de Romanos. Los cristianos han muerto
con relación a su derrotero pecaminoso del pasado. Su nueva vida en Jesús los obliga a luchar
contra sus debilidades carnales. Insta: ―No dejen que el pecado continúe reinando en su cuerpo
mortal‖. (Romanos 6:12.)
Pero ¿no debería ser que por lo menos los judíos se adhirieran todavía a la Ley de Moisés? En
el capítulo 7 Pablo explica cuidadosamente que no debería ser así. Tal como una mujer casada
queda libre de la ley de su esposo cuando este muere, así la muerte de Jesús libró a los judíos
creyentes de la sujeción a la Ley. Pablo dice: ―A ustedes también se les hizo morir a la Ley
mediante el cuerpo del Cristo‖. (Romanos 7:4.)
¿Quiere decir esto que había algún defecto en la Ley? De ningún modo. La Ley era perfecta. El
problema era que gente imperfecta no podía obedecer la Ley. ―Sabemos que la Ley es
espiritual —escribió Pablo—; pero yo soy carnal, vendido bajo el pecado.‖ Un ser humano
imperfecto no puede cumplir con la Ley perfecta de Dios, y por eso es condenado por ella.
¡Cuán maravilloso, pues, que ‗no tengan condenación los que están en unión con Cristo Jesús‘!
Los cristianos ungidos han sido adoptados por espíritu para ser hijos de Dios. El espíritu de
Jehová les ayuda a luchar contra las imperfecciones de la carne. ―¿Quién presentará acusación
contra los escogidos de Dios? Dios es Aquel que los declara justos.‖ (Romanos 7:14; 8:1, 33.)
Nada puede separarlos del amor de Dios.
LA JUSTICIA Y LOS JUDÍOS SEGÚN LA CARNE
Si ya no se necesita la Ley, ¿dónde deja esto a la nación de Israel? ¿Y qué hay de los textos
bíblicos que prometen la restauración de Israel? Estas preguntas se consideran en los
capítulos 9 a 11 de Romanos. En las Escrituras Hebreas se predijo que solo una minoría de los
israelitas alcanzarían la salvación y que Dios dirigiría su atención a las naciones. En armonía
con eso, las profecías sobre la salvación de Israel no se cumplen en el Israel carnal, sino en la
congregación cristiana, que tiene un núcleo de creyentes que son judíos según la carne al que
se han añadido, para completar el grupo, gentiles de corazón recto. (Romanos 10:19-21; 11:1,
5, 17-24.)
PRINCIPIOS DE JUSTICIA
En los capítulos 12 a 15 de Romanos Pablo pasa a explicar cómo pueden ajustar su vida de
manera práctica los cristianos ungidos al hecho de que se les haya declarado justos. Por
ejemplo, dice: ―Presenten sus cuerpos como sacrificio vivo, santo, acepto a Dios, un servicio
sagrado con su facultad de raciocinio. Y cesen de amoldarse a este sistema de cosas; más
bien, transfórmense rehaciendo su mente‖. (Romanos 12:1, 2.) Debemos confiar en el poder
del bien y no usar el mal para luchar contra el mal. ―No te dejes vencer por el mal —escribió el
apóstol—, sino sigue venciendo el mal con el bien.‖ (Romanos 12:21.)
Roma era el centro del poder político en los días de Pablo. Por eso, sabiamente Pablo
aconsejó a los cristianos: ―Toda alma esté en sujeción a las autoridades superiores, porque no
hay autoridad a no ser por Dios‖. (Romanos 13:1.) Los tratos entre los cristianos también son
parte del vivir de acuerdo con la justicia. ―No deban a nadie ni una sola cosa —dijo Pablo—,
salvo el amarse unos a otros; porque el que ama a su semejante ha cumplido la ley.‖ (Romanos
13:8.)
Además, cada cristiano debe mostrar consideración a la conciencia de los demás, y no juzgar.
Pablo exhorta: ―Sigamos tras las cosas que contribuyen a la paz y las cosas que sirven para
edificación mutua‖. (Romanos 14:19.) ¡Qué excelente consejo para aplicarlo en todo aspecto de
la vida del cristiano! Entonces, en el capítulo 16, Pablo concluye con saludos personales y
palabras finales de estímulo y consejo.
PARA LOS UNGIDOS Y LAS OTRAS OVEJAS
Lo que se considera en Romanos fue importante en el primer siglo y todavía es de interés vital
hoy. A todos los siervos de Jehová les interesa mucho la justicia y la vida eterna. Es cierto que
Romanos se escribió a una congregación de cristianos ungidos, mientras que hoy la gran
mayoría de los testigos de Jehová son de la ―gran muchedumbre‖ y tienen una esperanza
terrestre. (Revelación 7:9.) Con todo, esta carta tiene un mensaje vital para ellos también. ¿En
qué consiste?
El libro de Romanos prueba que a los cristianos se les declara justos mediante la fe. Para los
ungidos esto significa que llegarán a ser cogobernantes con Jesús en el Reino celestial. Sin
embargo, también se declarará justos a los miembros de la gran muchedumbre, pero como
‗amigos de Dios‘, como en el caso del patriarca Abrahán. (Santiago 2:21-23.) Su condición de
justos los llevará a sobrevivir a la gran tribulación y se basa en la fe que ejercen en la sangre
de Jesús, como en el caso de los ungidos. (Salmo 37:11; Juan 10:16; Revelación 7:9, 14.) Por
consiguiente, el razonamiento de Pablo en Romanos es de gran interés tanto para las otras
ovejas como para los ungidos. Y el excelente consejo que contiene este libro respecto a vivir en
armonía con el que hayamos sido declarados justos es vital para todos los cristianos.
The Book of Life (El libro de la vida), edición preparada por los doctores Newton Marshall Hall e
Irving Francis Wood, declara: ―En cuanto a la parte argumentativa y doctrinal, [Romanos]
alcanza el punto culminante de la enseñanza inspirada de Pablo. Es cortés, prudente, pero a la
vez autoritativo. [...] El estudiar esta epístola resulta profunda y abundantemente remunerador‖.
¿Por qué no lee personalmente usted el libro y se regocija con ―las buenas nuevas‖ que
contiene, las cuales son ―el poder de Dios para salvación‖? (Romanos 1:16.)
*** w08 15/6 págs. 29-31 Puntos sobresalientes de la carta a los Romanos ***
¿DE QUÉ MANERA SON DECLARADOS JUSTOS LOS SERES HUMANOS?
(Rom. 1:1–11:36)
―Todos han pecado y no alcanzan a la gloria de Dios‖, escribe Pablo, y añade: ―Es como
dádiva gratuita que por [la] bondad inmerecida [de Dios] se les está declarando justos mediante
la liberación por el rescate pagado por Cristo Jesús‖. Y después, el apóstol especifica que ―el
hombre es declarado justo por fe aparte de obras de ley‖ (Rom. 3:23, 24, 28). Mediante la fe en
―un solo acto de justificación‖, los cristianos ungidos y los de la ―gran muchedumbre‖ de ―otras
ovejas‖ pueden ser ‗declarados justos‘: los primeros para vivir en el cielo como coherederos
con Cristo y los últimos como amigos de Dios, a la espera de sobrevivir a ―la gran tribulación‖
(Rom. 5:18; Rev. 7:9, 14; Juan 10:16; Sant. 2:21-24; Mat. 25:46).
―¿Cometeremos un pecado porque no estamos bajo ley, sino bajo bondad inmerecida?
¡Jamás suceda eso!‖, dice Pablo. Luego pasa a explicar: ―Son esclavos [...], ya sea del pecado
con la muerte en mira o de la obediencia con la justicia en mira‖ (Rom. 6:15, 16). Después
declara: ―Si por el espíritu hacen morir las prácticas del cuerpo, vivirán‖ (Rom. 8:13).
Respuestas a preguntas bíblicas:
1:24-32. ¿A quiénes se atribuyen esos actos depravados, a los judíos o a los gentiles?
La descripción se podría aplicar tanto a unos como a otros, pero Pablo se refería
concretamente a los israelitas apóstatas. Estos conocían ―el justo decreto de Dios‖ y, sin
embargo, ―no aprobaron el tener a Dios en conocimiento exacto‖. Por eso su conducta era tan
reprensible.
3:24, 25. ¿Cómo era posible que ―el rescate pagado por Cristo Jesús‖ se aplicara a
―los pecados que habían ocurrido en el pasado‖, antes de la muerte de Cristo?
La primera profecía mesiánica, registrada en Génesis 3:15, se cumplió en el año 33 de nuestra
era, cuando se dio muerte a Jesucristo en un madero de tormento (Gál. 3:13, 16). No obstante,
en el momento en que Jehová pronunció aquella profecía, para él era como si ya se hubiera
pagado el precio del rescate, pues nada puede impedir que lleve a cabo lo que se propone. Por
lo tanto, basándose en el futuro sacrificio de Jesucristo, Jehová pudo perdonar los pecados de
los descendientes de Adán que tenían fe en dicha promesa. El rescate también hace posible la
resurrección de personas de tiempos precristianos (Hech. 24:15).
6:3-5. ¿Qué significan el bautismo en Cristo Jesús y el bautismo en su muerte?
Cuando Jehová unge a los cristianos con espíritu santo, estos llegan a estar unidos a Jesús y a
formar parte de la congregación que es el cuerpo de Cristo y de la cual él es Cabeza (1 Cor.
12:12, 13, 27; Col. 1:18). Este es su bautismo en Cristo Jesús. Los cristianos ungidos también
son ―bautizados en [la] muerte‖ de Cristo en el sentido de que viven una vida de sacrificio y
renuncian a toda esperanza de vivir eternamente en la Tierra. Por ello, su muerte es un
sacrificio como lo fue la muerte de Jesús, aunque la de ellos no tiene valor redentor. Este
bautismo en la muerte de Cristo se completa cuando mueren y son resucitados para vivir en el
cielo.
7:8-11. ¿Cómo recibió el pecado ―un incentivo por medio del mandamiento‖? La Ley
ayudó a los israelitas a ver todo lo que abarca el pecado e hizo que fueran más conscientes de
que eran pecadores. De modo que se dieron cuenta de que muchos actos que antes
no consideraban pecado en realidad sí lo eran, y hubo más individuos que reconocieron que
eran pecadores. Por eso puede decirse que el pecado recibió un incentivo por medio de la Ley.
Lecciones para nosotros:
1:14, 15. Tenemos muchas razones para declarar las buenas nuevas con vivo interés. Una
de ellas es que estamos en deuda con todos aquellos que fueron comprados con la sangre de
Jesús y tenemos la obligación de ayudarlos espiritualmente.
1:18-20. Las personas caracterizadas por la impiedad y la injusticia son ―inexcusables‖, pues
en la creación se evidencian las cualidades invisibles de Dios.
2:28; 3:1, 2; 7:6, 7. Tras algunas declaraciones que a los judíos les pudieran parecer
despectivas, Pablo añade comentarios que las suavizan. Un buen ejemplo para que cuando
tratemos asuntos delicados lo hagamos con tacto y pericia.
3:4. Cuando existe una discrepancia entre la palabra del hombre y la Palabra de Dios,
probamos que Dios es veraz si confiamos en el mensaje de la Biblia y obramos en conformidad
con la voluntad divina. Además, con nuestra fervorosa participación en la obra de predicar el
Reino y hacer discípulos también ayudamos al prójimo a darse cuenta de que Dios es veraz.
4:9-12. Mucho antes de que Abrahán fuera circuncidado a los 99 años de edad, su fe le fue
contada por justicia, es decir, Dios ya había tomado en cuenta su fe para contarlo entre los
justos (Gén. 12:4; 15:6; 16:3; 17:1, 9, 10). De esta manera Dios mostró que es gracias a la fe
que podemos tener una posición justa ante él.
4:18. La esperanza es un elemento esencial de la fe. En realidad, es el fundamento de
nuestra fe (Heb. 11:1).
5:18, 19. Al presentar de manera lógica la similitud entre Jesús y Adán, Pablo explica
concisamente cómo es posible que un solo hombre pueda ―dar su alma en rescate en cambio
por muchos‖ (Mat. 20:28). El razonamiento lógico y la brevedad son métodos didácticos
excelentes y dignos de imitar (1 Cor. 4:17).
7:23. Debemos evitar el uso indebido de la lengua, las manos, las piernas o cualquier otra
parte de nuestro cuerpo, pues pueden ‗conducirnos cautivos a la ley del pecado‘.
8:26, 27. Cuando afrontamos situaciones tan desconcertantes que no sabemos qué pedir en
oración, ―el espíritu mismo aboga por nosotros‖, y Jehová, el ―Oidor de la oración‖, acepta
algunas oraciones pertinentes registradas en su Palabra como si las hubiéramos hecho
nosotros (Sal. 65:2).
8:38, 39. Ni calamidades ni espíritus malignos ni gobiernos humanos pueden conseguir que
Jehová deje de amarnos; tampoco deberían lograr que nosotros dejemos de amarlo a él.
9:22-28; 11:1, 5, 17-26. Muchas profecías sobre la restauración de Israel se cumplen en la
congregación de cristianos ungidos, cuyos miembros son llamados ―no solo de entre los judíos,
sino también de entre las naciones‖.
10:10, 13, 14. Además de tener amor a Dios y al prójimo, poseer una fe fuerte en Jehová y
en sus promesas nos motivará a participar con celo en el ministerio cristiano.
11:16-24, 33. ―La bondad y la severidad de Dios‖ se manifiestan de una manera sumamente
justa y equitativa. ―La Roca, perfecta es su actividad, porque todos sus caminos son justicia.‖
(Deu. 32:4.)
EL HECHO DE HABER SIDO DECLARADOS JUSTOS TIENE QUE REFLEJARSE EN
NUESTRA VIDA
(Rom. 12:1–16:27)
―Por consiguiente, les suplico por las compasiones de Dios, hermanos —dice Pablo—, que
presenten sus cuerpos como sacrificio vivo, santo, acepto a Dios.‖ (Rom. 12:1.) ―Por
consiguiente‖, o en vista de lo anterior —de que los cristianos son declarados justos por su fe—
, lo que Pablo dice a continuación debería influir en su actitud hacia sí mismos, los demás y las
autoridades gubernamentales.
―Digo a cada uno que está allí entre ustedes que no piense más de sí mismo de lo que sea
necesario pensar‖, escribe Pablo, y exhorta: ―Sea su amor sin hipocresía‖ (Rom. 12:3, 9). Más
adelante dice: ―Toda alma esté en sujeción a las autoridades superiores‖ (Rom. 13:1). En lo
que tiene que ver con cuestiones de conciencia, Pablo anima a los cristianos a ‗no juzgarse
unos a otros‘ (Rom. 14:13).
Respuestas a preguntas bíblicas:
12:20. ¿Cómo ―amontonar[emos] brasas ardientes‖ sobre la cabeza de un enemigo?
En tiempos bíblicos, para fundir metales se introducía el mineral en un horno con una capa de
brasas debajo y otra encima. El calor de arriba ayudaba a fundir el metal y a separarlo de las
impurezas. En nuestro caso, colocamos ―brasas ardientes‖ sobre la cabeza de un enemigo
cuando lo tratamos con bondad para derretir su corazón de hierro y hacer que afloren sus
buenas cualidades.
12:21. ¿Cómo podemos seguir ―venciendo el mal con el bien‖? Una manera de hacerlo
es predicando sin temor las buenas nuevas del Reino hasta que hayamos cumplido esta
asignación de Jehová a su entera satisfacción (Mar. 13:10).
13:1. ¿En qué sentido ―están colocadas por Dios en sus posiciones relativas‖ las
autoridades superiores? En el sentido de que las autoridades gobiernan por permiso de Dios.
Cuando él previó la existencia de algunos gobiernos e hizo registrar en la Biblia profecías sobre
ciertos gobernantes, pudiera decirse que estas autoridades fueron ―colocadas por Dios en sus
posiciones relativas‖.
Lecciones para nosotros:
12:17, 19. Quien se desquita del mal se está tomando la justicia por su mano en lugar de
dejar los asuntos en manos de Jehová. ¡Qué presuntuoso sería atribuirnos el derecho de
devolver ―mal por mal‖!
14:14, 15. No debemos contristar a nuestro hermano ni hacerlo tropezar por la comida o la
bebida que le ofrecemos.
14:17. Lo principal para contar con el favor de Dios no es lo que uno come o bebe, o lo que
uno evita comer o beber, sino la justicia, la paz y el gozo.
15:7. Debemos acoger con imparcialidad en la congregación a todos los que buscan
sinceramente la verdad, y predicar el mensaje del Reino a todas las personas con quienes nos
encontramos.
Estímulo (1:1-9).
Exhortación a la unidad (1:10-4:21).
o Seguir a los hombres es muestra de sabiduría mundana insensata y causa
divisiones (1:10-21).
o Hay que jactarse en Dios, quien proporciona todas las cosas por medio de Cristo,
no en los hombres (1:22-4:21).
Sabiduría de Dios enseñada a los santos por el espíritu de Dios. (Cap. 2.)
La obra de edificación espiritual será probada, la obra inferior destruida.
(Cap. 3.)
Dios trata con los apóstoles como subordinados de Cristo‖ para mostrar la
tontedad de estar hinchados de sabiduría mundana. (Cap. 4.)
Limpiarse de inmoralidad (5:1-6:20).
o Expulsar al hombre incestuoso (5:1-13).
o Los hermanos no deberían llevarse a los tribunales mundanos (6:1-8).
o La inmundicia espiritual o moral contamina el templo de Dios, e impide entrar en
el Reino (6:9-20).
La fornicación hace que el que es miembro del cuerpo de Cristo se
convierta en una sola carne con una ramera.
La fornicación, un pecado contra el propio cuerpo.
Matrimonio y soltería (7:1-40).
o Hay que rendir el débito conyugal, pero los cónyuges deben mostrarse
consideración (7:1-7).
o Aquel que está encendido de pasión haría mejor casándose (7:8, 9).
o El cristiano no debe dejar al cónyuge incrédulo (7:10-16).
El mérito de familia abarca al cónyuge y a los hijos.
Puede con el tiempo ayudar al cónyuge a aceptar la verdad.
o No es necesario cambiar de estado al llegar a ser cristiano (7:17-35).
Circuncisos o incircuncisos, solteros o casados, libres o esclavos.
Permanecer soltero da más libertad para dedicarse completamente a Dios.
o Es apropiado casarse, pero ―solo en el Señor‖ (7:36-40).
o Consideración a la conciencia y a las circunstancias de los hermanos (8:1-10:33).
El amor es superior al conocimiento (8:1-3).
La cuestión de comer alimento ofrecido a los ídolos (8:4-13).
Derecho del ministro a recibir ayuda material; Pablo no ejerció este derecho (9:1-27).
Advertencia en contra de la complacencia, la inmoralidad y la idolatría (10:1-22).
Todas las cosas son lícitas, pero no todas las cosas edifican (10:23-33).
El orden en la congregación (11:1-14:40).
o Jefatura (11:1-16).
o Cena del Señor (11:17-34).
o Dones del espíritu (12:1-31).
o El camino sobrepujante del amor (13:1-13).
o Que las reuniones de congregación se efectúen decentemente y por arreglo
(14:1-40).
La resurrección (15:1-58).
o La resurrección de Cristo es una garantía (15:1-34).
o El cuerpo físico y el cuerpo espiritual (15:35-49).
o Inmortalidad e incorrupción (15:50-58).
Exhortación general, saludos y encomio para los hermanos fieles (16:1-24).
*** w90 15/9 págs. 24-25 ―Hagan todas las cosas para la gloria de Dios‖ ***
*** w08 15/7 págs. 26-28 Puntos sobresalientes de la primera carta a los Corintios ***
―DESPIERTOS‖, ―FIRMES‖ Y ―PODEROSOS‖
(1 Cor. 1:1–16:24)
Pablo escribe: ―Los exhorto, hermanos, [...] a que todos hablen de acuerdo‖ (1 Cor. 1:10).
Les explica que deben edificar las cualidades cristianas sobre Jesucristo, y no sobre ―ningún
otro fundamento‖ (1 Cor. 3:11-13). Además, les habla de un caso de inmoralidad sexual dentro
de la congregación y les da la siguiente orden: ―Remuevan al hombre inicuo de entre ustedes‖
(1 Cor. 5:13). ―El cuerpo no es para fornicación —les recalca—, sino para el Señor.‖ (1 Cor.
6:13.)
Teniendo presentes ―las cosas [sobre las] que escribieron‖ los corintios, el apóstol les ofrece
buenos consejos acerca del matrimonio y la soltería (1 Cor. 7:1). Luego les habla sobre el
principio cristiano de autoridad, el orden que debe mantenerse en las reuniones y la certeza de
la resurrección. Finalmente, les dice: ―Manténganse despiertos, estén firmes en la fe, pórtense
como hombres, háganse poderosos‖ (1 Cor. 16:13).
Respuestas a preguntas bíblicas:
1:21. ¿De verdad recurre Jehová a la ―necedad‖ para salvar a los creyentes? Por
supuesto que no. Pero eso es lo que pudieran pensar quienes pertenecen al ―mundo [que]
mediante su sabiduría no llegó a conocer a Dios‖. A sus ojos, los medios que Dios utiliza para
salvar a las personas son puras tonterías (Juan 17:25).
5:5. ¿Qué significa entregar al pecador ―a Satanás para la destrucción de la carne, a
fin de que el espíritu sea salvado‖? Cuando alguien peca gravemente y no se arrepiente, es
expulsado de la congregación. Como en ese momento vuelve a formar parte del mundo
malvado de Satanás, puede decirse que ha sido entregado al Diablo (1 Juan 5:19). Además,
con la expulsión se destruye, o elimina, una influencia carnal, o corruptora, y se protege el
espíritu, o actitud reinante, de la congregación (2 Tim. 4:22).
7:33, 34. ¿Qué son ―las cosas del mundo‖ por las que se inquietan los cristianos
casados? Son los asuntos del diario vivir de los que deben ocuparse —como la comida, la
ropa y la vivienda—, y no las cosas malas del mundo, que todos debemos evitar (1 Juan 2:15-
17).
11:26. ¿Con cuánta frecuencia debe conmemorarse la muerte de Jesús, y hasta
cuándo? Este versículo no da a entender que la muerte de Jesús se conmemoraría muy a
menudo. La palabra griega traducida ―cuantas veces‖ también puede verterse ―siempre que‖ o
―cada vez que‖. Por tanto, lo que el apóstol indicó es que cada vez que los ungidos participaran
del pan y del vino de la Conmemoración —una vez al año, el 14 de nisán—, estarían
―proclamando la muerte del Señor‖. Y lo harían ―hasta que él lleg[ara]‖ para recibirlos en el cielo
gracias a la resurrección (1 Tes. 4:14-17).
13:13. ¿En qué sentido es el amor mayor que la fe y la esperanza? Cuando lleguen ―las
cosas que [...] esperan‖ los siervos de Dios y se haga realidad su ―expectativa segura‖, habrá
determinados aspectos de su fe y esperanza que perderán vigencia (Heb. 11:1). Sin embargo,
el amor durará para siempre, y por eso se dice que es mayor que la fe y la esperanza.
15:29. ¿Qué significa bautizarse ―con el propósito de ser personas muertas‖? Estas
palabras no significan que haya que bautizarse en favor de las personas que han muerto sin
estar bautizadas. El apóstol habla de la vida que llevan los ungidos como si fuera una
inmersión. Tienen que mantenerse íntegros hasta la muerte para luego levantarse en la
resurrección como seres espirituales.
Lecciones para nosotros:
1:26-31; 3:3-9; 4:7. Debemos ser humildes y no jactarnos, o hablar con orgullo, de nosotros,
sino solo de Jehová. Así fortaleceremos la unidad de la congregación.
2:3-5. Cuando Pablo fue a predicar a Corinto, quizás se preguntara si sería capaz de
convencer a alguien en aquel gran centro de la cultura y filosofía griega. Pero no se dejó
dominar por sus miedos y debilidades, sino que llevó a cabo el ministerio que Dios le había
encomendado. Nosotros tampoco debemos darnos por vencidos si hacemos frente a
situaciones poco comunes. Como Pablo, pedimos ayuda a Jehová y seguimos anunciando las
buenas nuevas del Reino de Dios.
2:16. Tener ―la mente de Cristo‖ significa conocer bien su forma de razonar, pensar como él,
comprender todos los rasgos de su personalidad e imitar su ejemplo (1 Ped. 2:21; 4:1). Para
lograrlo, es esencial estudiar a fondo su vida y ministerio.
3:10-15; 4:17. Debemos analizar nuestro modo de enseñar y hacer discípulos, y esforzarnos
por mejorar (Mat. 28:19, 20). Si somos negligentes, el estudiante tal vez no sobreviva a las
pruebas de fe. Y aunque nosotros nos salvemos, será ―como a través de fuego‖: con el dolor de
haberlo perdido.
6:18. Para ―[huir] de la fornicación‖, no basta con evitar los actos sexuales englobados por el
término griego pornéia. Hay que rechazar todo lo que podría llevarnos a caer en ella, como la
pornografía, la inmundicia moral, las fantasías eróticas y el coqueteo (Mat. 5:28; Sant. 3:17).
7:29. Los cónyuges no deben estar tan pendientes el uno del otro que dejen los intereses del
Reino en segundo plano.
10:8-11. A Jehová le ofendió mucho que los israelitas hablaran mal de Moisés y Aarón. Por
eso, no sería sabio que cayéramos en el vicio de andar criticando a los demás.
16:2. La planificación y la regularidad son esenciales para no descuidar nuestra aportación
monetaria a favor de la obra del Reino.
*** w90 15/9 págs. 26-27 ―Sigan poniéndose a prueba para ver si están en la fe‖ ***
*** w08 15/7 pág. 28 Puntos sobresalientes de la segunda carta a los Corintios ***
―CONTINÚEN [...] SIENDO REAJUSTADOS‖
(2 Cor. 1:1–13:14)
Al enterarse Pablo de que un pecador de la congregación corintia había respondido bien a la
reprensión recibida y se había arrepentido, recomienda a los hermanos ―perdonarlo
bondadosamente y consolarlo‖. Es cierto que el apóstol los había afligido con su primera carta,
pero estaba muy contento porque con ella había conseguido que fueran ―entristecidos para
arrepentimiento‖ (2 Cor. 2:6, 7; 7:8, 9).
Ya que ―están abundando en todo‖, Pablo los anima a que ―abunden también en [...] dar‖.
Luego responde a las acusaciones de sus enemigos y da un último consejo: ―Continúen
regocijándose, siendo reajustados, siendo consolados, pensando de acuerdo, viviendo
pacíficamente‖ (2 Cor. 8:7; 13:11).
Respuestas a preguntas bíblicas:
2:15, 16. ¿En qué sentido somos ―un olor grato de Cristo‖? Los cristianos obedecemos
lo que dice la Biblia y predicamos su mensaje. De este modo, difundimos un ―olor‖ que resulta
muy agradable para Jehová y para la gente de buen corazón, pero que a los injustos les
produce repugnancia.
5:16. ¿Cómo es que los ungidos ―no [conocen] a nadie según la carne‖? Ellos
no juzgan a ninguna persona según criterios carnales, es decir, haciendo distinciones étnicas,
sociales o nacionales. Consideran que lo más importante es su relación espiritual con los
hermanos en la fe.
11:1, 16; 12:11. ¿Fue Pablo irrazonable y presumido con los corintios? No, pero
algunos quizás lo pensaran al escuchar las cosas que tuvo que decir para defender su
autoridad como apóstol.
12:1-4. ¿Quién ―fue arrebatado al paraíso‖? Es razonable pensar que fue Pablo, pues él
habla de este suceso justo después de haber defendido su condición de apóstol, y en ningún
lugar de la Biblia se dice que otra persona tuviera la visión mencionada. Probablemente, lo que
Pablo contempló fue el paraíso espiritual del que disfrutaría la congregación cristiana en ―el
tiempo del fin‖ (Dan. 12:4).
Lecciones para nosotros:
3:5. De este versículo se desprende el siguiente principio: Jehová es quien nos capacita
para el ministerio cristiano. Y lo hace valiéndose de su Palabra, su fuerza activa y la parte
terrestre de su organización (Juan 16:7; 2 Tim. 3:16, 17). Por eso, apliquémonos al estudio de
la Biblia y de las publicaciones que la explican; pidámosle a Jehová su espíritu
constantemente, y asistamos con asiduidad a las reuniones, sin olvidarnos de participar en
ellas (Sal. 1:1-3; Luc. 11:10-13; Heb. 10:24, 25).
4:16. Jehová renueva ―de día en día‖ al ―hombre que somos interiormente‖. Por ello,
tenemos que aprovechar siempre las ayudas que nos da y no permitir que pase una sola
jornada sin hacer algo por nuestra espiritualidad.
4:17, 18. Tener presente que ―la tribulación es momentánea y liviana‖ nos ayudará a
soportarla.
5:1-5. Esta bella descripción de Pablo muestra cuánto desean los ungidos vivir en el cielo.
10:13. Por lo general, debemos limitarnos a predicar en el territorio asignado a nuestra
congregación, a menos que nos pidan que ayudemos en cierta zona donde hay necesidad.
13:5. Los cristianos deben estar ―poniéndose a prueba para ver si están en la fe‖, es decir,
examinando si su conducta está de acuerdo con lo que manda la Biblia. Además, deben estar
―dando prueba de lo que [...] son‖, o sea, evaluando su espiritualidad, sus ―facultades
perceptivas‖ y sus obras de fe (Heb. 5:14; Sant. 1:22-25). Sin duda, los sabios consejos de
Pablo nos ayudan a seguir en el camino de la verdad.
PRIMERA A TIMOTEO
CONTENIDO
Saludo y bendición (1:1,2).
Se insta a sostener la verdad y a luchar contra la doctrina falsa (1:3-20).
o Se tiene que ordenar a aquellos que enseñen doctrina falsa que no lo hagan; la
Ley es excelente cuando se maneja legítimamente y no por personas que
carecen de entendimiento (1:3-11).
o La asignación de Pablo a un ministerio es una expresión de la bondad inmerecida
del Señor; el apóstol atribuye la honra y la gloria a Dios, el ―Rey de la eternidad‖
(1:12-17).
o Se exhorta a pelear la excelente pelea y a adherirse a la fe y a una buena
conciencia (1:18-20).
Consejo sobre la oración y la conducta de las mujeres en las reuniones de
congregación (2:1-15).
o Motivos para orar respecto a hombres de toda clase, incluso respecto a aquellos
que están en puestos gubernamentales altos (el propósito de Dios para toda clase
de hombres es que obtengan salvación; un solo Dios y un solo mediador, que se
dio a si mismo como rescate correspondiente por todos); los varones deben
representar a la congregación en oración (2:1-8).
o Las mujeres tienen que adornarse con vestido bien arreglado y con modestia; no
han de enseñar ni ejercer autoridad sobre el varón (2:9-15).
Requisitos para los varones nombrados superintendentes y siervos ministeriales; la
congregación cristiana es una columna y apoyo de la verdad; el ‗secreto sagrado de la
devoción piadosa‘ (3:1-16).
En períodos de tiempo posteriores algunos se apartarían; el papel de Timoteo en
restringir esa tendencia (4:1-11).
o Algunas de las cosas que serían enseñadas por aquellos que se apartarían (4:1-
5).
o Timoteo tenía que negarse a admitir cuentos falsos (4:6-11).
Instrucciones a Timoteo sobre él mismo y sobre asuntos de congregación (4:12-6:21).
Timoteo tenía que poner un buen ejemplo y esforzarse por adelantar (4:12-16).
Los hombres de mayor edad tenían que ser tratados como padres, los más jóvenes
como hermanos, las mujeres de mayor edad como madres y la mujeres jóvenes como
hermanas (5:1,2).
Las viudas que reunían los requisitos mere cían ayuda material (5:3-16).
Los ancianos que presiden son merecedores de ―doble honra‖; solo se admitiría una
acusación en contra de un anciano por la evidencia de dos o tres testigos (5:17-19).
Hay que censurar a las personas que practican el pecado; Timoteo no tenía que actuar
según una inclinación parcial, ni compartir los pecados de otros por medio de hacer
nombramientos precipitados (5:20-22).
Timoteo, debido a enfermedad, tenía que usar un poco de vino a causa de su estómago
(5:23).
La conducta incorrecta y las obras excelentes con el tiempo se hacen manifiestas
(5:24,25).
Los esclavos tenían que comportarse apropiadamente con sus dueños, especialmente si
estos eran hermanos (6:1,2).
Resultados de las enseñanzas falsas; importancia de la devoción piadosa, la
autosuficiencia y el no desear riquezas materiales (6:3-10).
Se exhorta a Timoteo que se comporte correctamente, dé instrucciones a los ricos para
que no sean altaneros y se aparte de las vanas palabrerías (6:11-21).
TITO, CARTA A
CONTENIDO
FILEMON, CARTA A
CONTENIDO
*** w91 15/2 págs. 24-25 Por qué es superior la adoración cristiana ***
Puntos sobresalientes de la carta a los hebreos
CUANDO Jehová Dios envió a su Hijo Jesucristo a la Tierra introdujo rasgos de adoración
superiores. Esto se debió a que Jesús, el Fundador del cristianismo, es superior a los ángeles y
al profeta Moisés. El sacerdocio de Cristo es muy superior al de los levitas del Israel antiguo.
Además, el sacrificio de Jesús es sumamente superior al de los animales que se ofrecían bajo
la Ley de Moisés.
Estos puntos quedan claros en la carta a los hebreos. Evidentemente el apóstol Pablo escribió
esta carta en Roma alrededor de 61 E.C. y la envió a los creyentes hebreos de Judea. Desde
los primeros tiempos del cristianismo los cristianos griegos y los asiáticos sostuvieron que
Pablo fue el escritor, y esto está apoyado tanto por el extenso conocimiento del escritor sobre
las Escrituras Hebreas como por el desarrollo lógico que este emplea, rasgos característicos
del apóstol. Puede que él haya omitido su nombre debido al prejuicio de los judíos contra él y
porque se le conocía como ―apóstol a las naciones‖. (Romanos 11:13.) Ahora examinemos más
de cerca los rasgos superiores del cristianismo como se revelan en la carta de Pablo a los
hebreos.
Cristo es superior a los ángeles y a Moisés
Lo primero que se revela es la posición superior del Hijo de Dios (1:1–3:6). Los ángeles le
rinden homenaje, y su gobernación real está sostenida por Dios. Por eso, debemos prestar
atención extraordinaria a las palabras del Hijo. Además debemos recordar que, aunque el
hombre Jesús fue inferior a los ángeles, fue ensalzado por encima de ellos y se le dio dominio
sobre la tierra habitada por venir.
Jesucristo también es superior a Moisés. ¿De qué manera? Pues Moisés fue solo un servidor
en la casa israelita de Dios. No obstante, Jehová colocó a Jesús sobre la casa entera, o la
congregación del pueblo de Dios.
Los cristianos entran en el descanso de Dios
El apóstol entonces señala que se puede entrar en el descanso de Dios (3:7–4:13). Los
israelitas que fueron librados de la esclavitud en Egipto no entraron en ese descanso porque
fueron desobedientes y no ejercieron fe. Pero si nosotros ejercemos fe en Dios y
obedientemente seguimos a Cristo, podemos entrar en ese descanso. Entonces, en vez de
simplemente guardar un sábado semanal, disfrutaremos a diario de la bendición superior de
descansar de toda obra egoísta.
El entrar en el descanso de Dios es una promesa procedente de su palabra, la cual ―es más
aguda que toda espada de dos filos, y penetra hasta dividir entre alma y espíritu‖. Logra esto
en el sentido de que penetra para discernir motivos y actitudes, para dividir entre los deseos
carnales y la disposición mental. (Compárese con Romanos 7:25.) Si a nuestra ―alma‖, o vida
como individuo, unimos un ―espíritu‖ o disposición que se amolde a lo piadoso, podemos entrar
en el descanso de Dios.
SANTIAGO, CARTA DE
CONTENIDO
El aguante cristiano bajo pruebas produce felicidad (1:1-18).
o Hace que el cristiano sea sano y completo (1:1-4).
o Dios es invariable al dar buenos dones que ayudan a los cristianos a obtener la
corona de la vida (1:5-18).
La sabiduría para aguantar es un don para los que la piden con fe (1:5-11).
Dios no somete a prueba con cosas malas; las pruebas son causadas por
los propios deseos de uno; el resultado es pecado y muerte (1:12-15).
La voluntad de Dios es producir a los cristianos por su palabra de la verdad
para que sean ―ciertas primicias‖ de sus criaturas (1:16-18).
La verdadera forma de adoración (1:19-2:13).
o Desechar la presteza a la ira y toda suciedad e inmoralidad (1:19-21).
o Ser un hacedor de la palabra, no solo un oidor (1:22-25).
o Cuidar de los huérfanos y de las viudas y mantenerse sin mancha del mundo
(1:26,27).
o No tratar de tener la fe de Jesucristo y la ley de un pueblo libre y sin embargo
mostrar favoritismo (2:1-14).
Evidencias de que se muestra favoritismo (2:1-7).
Ejemplo: Según la ley judía, el que quebrantaba parte de la Ley la infringía
toda (2:8-12).
El que no practique misericordia será juzgado sin misericordia (2:13).
La fe sin obras esta muerta (2:14-26).
o El ayudar a los hermanos cristianos es una obra esencial (2:14-17).
o Hasta los demonios creen que hay un solo Dios, y se estremecen (2:18-20).
o Abrahán y Rahab son ejemplos de una fe perfeccionada por obras: fueron
declarados justos (2:21-26).
El poder de la lengua: es necesario trabajar para controlarla (3:1-18).
o Ejemplos del poder de la lengua: el freno del caballo, el timón del barco, el
pequeño fuego que incendia el bosque. La lengua mancha todo el cuerpo (3:1-6).
o La lengua es indomable por medios humanos: esta llena de veneno (3:7,8).
o No es consecuente: maldice a los hombres, quienes son obra de Dios, y no
obstante bendice a Dios (3:9-12).
o Solo la sabiduría de arriba vencerá los celos, los alardes, la mentira, el espíritu de
contradicción, el desorden y toda cosa vil (3:13-16).
o Descripción de la sabiduría de arriba, la cual produce fruto justo bajo condiciones
pacificas para los que hacen la paz (3:17,18).
Evitar la amistad con el mundo, la cual es enemistad con Dios (4:1-12).
El espíritu de envidia, los deseos vehementes de placer sensual, es lo que causa las
luchas,guerras, asesinatos (4:1-3).
Descripción del adulterio espiritual (4:4-6).
Sujetarse a Dios: oponerse al Diablo (4:7).
Servir con las manos y el corazón limpiados, con humildad (4:8-10).
Dejar de juzgar a los hermanos, que en realidad equivale a juzgar ley (4:11,12).
El aguante paciente con un corazón firme trae felicidad (4:13-5:12).
o Evitar el alardear presuntuosamente; decir más bien: ―Si Jehová quiere‖, pues
nadie sabe con seguridad lo que será su vida mañana (4:13-16).
o El dejar de hacer lo que uno sabe que es correcto es pecado (4:17).
o Vienen pruebas para los ricos que viven en lujo, se dan al placer sensual y
practican opresión; estos hombres están almacenando fuego para los ―últimos
días‖ (5:1-6).
o Hay que esperar a que el Señor juzgue (5:7-12).
Hay que evitar quejarse unos de otros (5:7-9).
Al seguir el ejemplo de aguante de los profetas se disfrutara del mismo
resultado (5:10,11).
Que su Sí signifique Sí, y su No No, evitan do de ese modo caer bajo juicio
(5:12).
Procedimiento que se debe seguir en los casos de enfermedad espiritual (5:13-20).
o Hay que llamar a los ancianos y confesar los pecados a fin de que puedan orar y
dar el consejo apropiado para que haya curación espiritual (5:13-15).
o Tal ruego a Dios puede lograr mucho; puede volver a un pecador del error y
salvarle de la muerte (5:16-20).
*** w08 15/11 págs. 20-21 Puntos sobresalientes de la carta de Santiago ***
DIOS DA SABIDURÍA A QUIENES SE LA PIDEN CON FE
(Sant. 1:1–5:20)
―Feliz es el hombre que sigue aguantando la prueba —escribe Santiago—, porque al llegar a
ser aprobado recibirá la corona de la vida.‖ Jehová nos ayudará a aguantar las pruebas
dándonos sabiduría, pero debemos pedírsela con fe (Sant. 1:5-8, 12).
Santiago señala que también los maestros de la congregación necesitan fe y sabiduría.
Luego advierte a sus hermanos que la lengua, aunque es pequeña, puede manchar todo el
cuerpo, y los previene contra las tendencias mundanas que pueden perjudicar su relación con
Dios. También explica lo que debe hacer un cristiano enfermo espiritualmente a fin de
recuperarse (Sant. 3:1, 5, 6; 5:14, 15).
Respuestas a preguntas bíblicas:
2:13. ¿Por qué dijo Santiago que ―la misericordia se alboroza triunfalmente sobre el
juicio‖? Cuando tengamos que rendirle cuentas a Dios, él recordará nuestras obras de
misericordia y nos perdonará mediante el sacrificio redentor de su Hijo (Rom. 14:12). ¿Verdad
que vale la pena esforzarnos por ser misericordiosos?
4:5. ¿Qué texto bíblico está citando Santiago? Aquí Santiago no está citando ningún
versículo en concreto. Estas palabras inspiradas por Dios posiblemente se basan en textos
como Génesis 6:5; 8:21; Proverbios 21:10 y Gálatas 5:17.
5:20. ¿De quién es el alma que se salva de la muerte? Santiago dice que ―el que hace
volver a un pecador del error de su camino salvará su alma de la muerte‖. Aquí Santiago se
está refiriendo al alma del pecador que se ha arrepentido y cambia. El cristiano que lo ayuda lo
salva de la muerte espiritual y tal vez de la destrucción eterna. De esta manera, tal cristiano
cubre ―una multitud de pecados‖: los que había cometido el pecador.
Lecciones para nosotros:
1:14, 15. El pecado nace de los malos deseos. Por eso no deberíamos alimentar esos
deseos recreándonos en ellos. Concentrémonos, más bien, en las cosas que edifican y
llenemos con ellas nuestra mente y corazón (Fili. 4:8).
2:8, 9. El favoritismo va en contra de ―la ley real‖, la ley del amor. Por eso los cristianos
verdaderos no tratamos a nadie con parcialidad.
2:14-26. Nosotros hemos sido ―salvados mediante fe‖, no ―debido a obras‖ de la Ley
mosaica o del cristianismo. Pero no basta con decir que tenemos fe en Dios (Efe. 2:8, 9; Juan
3:16). También debemos actuar de acuerdo con su voluntad.
3:13-17. ―La sabiduría de arriba‖ es muy superior a la sabiduría ―terrenal, animal,
demoníaca‖. Así pues, busquemos la sabiduría de Dios como si fuera un tesoro (Pro. 2:1-5).
3:18, notas. La semilla de las buenas nuevas del Reino ―se siembra con paz por los que
están haciendo la paz‖. Por eso es importante que seamos personas conciliadoras y humildes,
y que evitemos las peleas y las discusiones.
PRIMERA DE PEDRO
CONTENIDO
*** w08 15/11 pág. 21 Puntos sobresalientes de la primera carta Pedro ***
―SÓLIDOS EN LA FE‖
(1 Ped. 1:1–5:14)
Pedro les recuerda a sus hermanos que tienen ―una esperanza viva‖: recibir su herencia
celestial. Les dice: ―Ustedes son ‗una raza escogida, un sacerdocio real, una nación santa‘‖.
Después de darles consejos específicos sobre la sumisión, los exhorta a ser ―de un mismo
ánimo y parecer, compartiendo sentimientos como compañeros, teniendo cariño fraternal,
siendo tiernamente compasivos, de mente humilde‖ (1 Ped. 1:3, 4; 2:9; 3:8).
Puesto que ―el fin [del sistema judío] se ha acercado‖, Pedro recomienda a sus hermanos
que sean ―de juicio sano‖ y ―vigilantes en cuanto a oraciones‖. Y añade: ―Mantengan su juicio,
sean vigilantes. [...] Pónganse en contra de [Satanás], sólidos en la fe‖ (1 Ped. 4:7; 5:8, 9).
Respuestas a preguntas bíblicas:
3:20-22. ¿Qué papel desempeña el bautismo en nuestra salvación? Aunque el bautismo
es indispensable para la salvación, lo que en realidad nos salva es ―la resurrección de
Jesucristo‖. Por lo tanto, los que se bauticen deben tener fe en que la salvación solo es posible
porque el Hijo de Dios entregó su vida como sacrificio y fue resucitado. También deben creer
que ―está a la diestra de Dios‖ y que tiene autoridad sobre vivos y muertos. El bautismo
motivado por esta clase de fe fue prefigurado por el hecho de que ocho personas ―fueron
llevadas a salvo a través del agua‖.
4:6. ¿Quiénes eran ―los muertos‖ a los que se les declararon las buenas nuevas? Eran
los que antes de escuchar las buenas nuevas ―estaban muertos en sus ofensas y pecados‖, es
decir, muertos espiritualmente (Efe. 2:1). Cuando aceptaron las buenas nuevas, empezaron a
vivir en sentido espiritual.
Lecciones para nosotros:
1:7. Para que nuestra fe sea de calidad, hay que ponerla a prueba. Esa clase de fe es la que
conserva ―viva el alma‖ (Heb. 10:39). Nunca retrocedamos ante las pruebas de fe.
1:10-12. Los ángeles deseaban entender las profundas verdades espirituales sobre la
congregación cristiana ungida, acerca de las cuales habían escrito los profetas de la
antigüedad. Sin embargo, estas verdades no se comprendieron hasta que Jehová formó la
congregación cristiana (Efe. 3:10). Sigamos el ejemplo de los ángeles e investiguemos ―las
cosas profundas de Dios‖ (1 Cor. 2:10).
2:21. Al igual que Jesús, nuestro Modelo, debemos estar dispuestos a sufrir hasta la muerte
a fin de apoyar la soberanía de Jehová.
5:6, 7. Si le expresamos a Jehová nuestras inquietudes, él nos ayudará a dar prioridad a la
adoración verdadera y a no preocuparnos demasiado por el futuro (Mat. 6:33, 34).
SEGUNDA DE PEDRO
CONTENIDO
Saludo (1:1).
Recordatorio a los cristianos de los requisitos para alcanzar la aprobación divina y la
entra da en el Reino (1:2-3:18).
o Se necesita: fe, virtud, conocimiento, auto- dominio, aguante, devoción piadosa,
cariño fraternal y amor (1:2-15).
o Se debe prestar atención a la palabra profética; esta proviene del espíritu de Dios
y fue confirmada por la visión de la transfiguración (1:16-21).
Guardarse de falsos maestros y otras personas corruptas (2:1-22),
Surgirán falsos maestros entre los cristianos; no escaparán al juicio, como
indica lo que les aconteció a los ángeles desobedientes, al mundo del día
de Noé y a Sodoma y Gomorra (2:1-10).
Se describe a los que desean contaminar la carne y menosprecian el
señorío (2:10-19).
Las personas que se apartan de la senda de la justicia son como el perro
que vuelve a su vómito y la cerda bañada que se re vuelca en el fango
(2:20-22).
o Deben tener presente el día de Jehová y la promesa de nuevos cielos y nueva
tierra (3:1-18).
La venida del día de Jehová es segura; los burlones desatienden la
destrucción pasa da de los impíos en el día de Noé (3:1-7).
Jehová no es lento, sino paciente, da a las personas la oportunidad de
arrepentirse y escapar de la destrucción (3:8-10).
Es necesario mantener una buena conducta y evitar ser descarriado, en
vista de la venidera destrucción y el advenimiento de nuevos cielos y
nueva tierra (3:11-18).
*** w91 15/3 pág. 31 ¡Prestemos atención a la palabra profética de Dios! ***
Puntos sobresalientes de Segunda de Pedro
LA PALABRA o mensaje de profecía de Jehová es como una lámpara que resplandece en un
lugar oscuro, y los cristianos verdaderos tienen que prestar atención estricta a ella. Eso no es
fácil cuando falsos maestros tratan de promover la apostasía. Pero con la ayuda divina se
puede lograr. Además, tenemos que adherirnos constantemente a la palabra de Dios si
queremos sobrevivir al día de Jehová, que se acerca con rapidez.
La segunda carta inspirada del apóstol Pedro nos puede ayudar a prestar atención a la palabra
profética de Dios. Es posible que Pedro haya escrito esta epístola desde Babilonia alrededor de
64 E.C. En su carta defiende la verdad de Dios, advierte a compañeros de creencia que el día
de Jehová viene como ladrón, y ayuda a los lectores de su carta para que eviten ser llevados
por el error de gente desafiadora de ley. Puesto que el día de Jehová está por llegar, podemos
beneficiarnos muchísimo de las palabras inspiradas de Pedro.
Confiemos en la palabra profética
Como cristianos tenemos que esforzarnos por desplegar cualidades piadosas y tenemos que
prestar atención a la palabra profética (1:1-21). Para no caer en la inactividad ni ser
infructíferos, tenemos que ‗suministrar a nuestra fe: virtud, conocimiento, autodominio, aguante,
devoción piadosa, cariño fraternal y amor‘. Cuando Pedro vio a Jesús en la transfiguración y
oyó a Dios hablar acerca de Cristo en aquella ocasión, la palabra profética se hizo más segura.
(Marcos 9:1-8.) Tenemos que prestar atención a esa palabra inspirada por Dios.
Guardémonos de los apóstatas
Por atención estricta a la palabra profética de Dios podemos guardarnos de los apóstatas y
otros individuos corruptos (2:1-22). Pedro advirtió que falsos maestros se infiltrarían en la
congregación. No obstante, Jehová juzgaría adversamente a aquellos apóstatas, así como
juzgó a los ángeles desobedientes, al mundo impío de los días de Noé y a las ciudades de
Sodoma y Gomorra. Los falsos maestros menosprecian la autoridad procedente de Dios y
cautivan a los débiles para que se unan a ellos en su proceder incorrecto. A tales apóstatas les
hubiera sido mejor no haber conocido ―la senda de la justicia que, después de haberla conocido
con exactitud, apartarse del santo mandamiento que les fue entregado‖.
¡Viene el día de Jehová!
Como personas que prestamos atención a la palabra profética en estos últimos días, debemos
rechazar la influencia de burlones que se mofan del mensaje sobre la presencia de Jesús (3:1-
18). Ellos olvidan que el Dios que se ha propuesto destruir este sistema de cosas destruyó el
mundo que precedió al Diluvio. La paciencia de Jehová no debe considerarse como lentitud,
pues él quiere que la gente se arrepienta. Este sistema será destruido en ―el día de Jehová‖ y
será reemplazado por los ‗nuevos cielos y una nueva tierra donde la justicia habrá de morar‘.
Por eso debemos hacer lo sumo posible por estar ―inmaculados y sin tacha y en paz‖. En vez
de dejarnos extraviar por falsos maestros, crezcamos en el conocimiento de Jesucristo.
Tomemos a pecho las palabras de Pedro. Nunca dejemos de guardarnos de los falsos
maestros. Vivamos al tanto de que el día de Jehová viene pronto. Y siempre prestemos
atención a la palabra profética de Dios.
Echados en el Tártaro: Jehová ―no se contuvo de castigar a los ángeles que pecaron, sino
que, al echarlos en el Tártaro, los entregó a hoyos de densa oscuridad para que fueran
reservados para juicio‖. (2 Pedro 2:4.) Este no es el Tártaro mitológico que en la Ilíada, de
Homero, se describe como un lugar subterráneo donde los falsos dioses menores —Crono y
los demás espíritus titánicos— estaban aprisionados. El Tártaro de la Biblia es la condición
rebajada, parecida a prisión, en la que Dios echó a los ángeles desobedientes en los días de
Noé. (Génesis 6:1-8; 1 Pedro 3:19, 20; Judas 6.) La ―densa oscuridad‖ es el resultado de que
Dios los aísle de la iluminación espiritual por haber sido echados de su familia. Solo tienen una
perspectiva sombría por haber sido reservados para Su juicio adverso. El Tártaro antecede al
encierro de Satanás y sus demonios en el abismo antes de que empiece el Reinado de Mil
Años de Cristo. Su destrucción vendrá después del Reinado Milenario de Jesús. (Mateo 25:41;
Revelación 20:1-3, 7-10, 14.)
*** w08 15/11 págs. 21-22 Puntos sobresalientes de la segunda carta de Pedro ***
―EL DÍA DE JEHOVÁ VENDRÁ‖
(2 Ped. 1:1–3:18)
―La profecía no fue traída en ningún tiempo por la voluntad del hombre —escribe Pedro—,
sino que hombres hablaron de parte de Dios al ser llevados por espíritu santo.‖ Si prestamos
atención a la palabra profética, no nos corromperán los ―falsos maestros‖ ni ninguna otra
persona (2 Ped. 1:21; 2:1-3).
―En los últimos días vendrán burlones con su burla‖, advierte Pedro. Pero ―el día de Jehová
vendrá como ladrón‖. El apóstol concluye su carta con consejos para los que esperan y tienen
―muy presente la presencia del día de Jehová‖ (2 Ped. 3:3, 10-12).
Respuestas a preguntas bíblicas:
1:16-19. ¿Quién es ―el lucero‖? ¿Cuándo se levanta? ¿Cómo sabemos que esto ya ha
ocurrido? ―El lucero‖ es Jesucristo después de ser coronado rey (Rev. 22:16). En 1914, Jesús
se ―levantó‖ ante toda la creación como Rey Mesiánico, anunciando el amanecer de un nuevo
día. La transfiguración que presenció Pedro fue una vista por anticipado de la gloria y el poder
real de Jesús y puso de relieve lo confiable que es la palabra profética de Dios (Mar. 9:1-3).
Si prestamos atención a esta palabra, se iluminarán nuestros corazones y sabremos que el
Lucero se ha levantado.
2:4. ¿Qué es el ―Tártaro‖? ¿Cuándo fueron arrojados en él los ángeles rebeldes?
El Tártaro es una condición restringida en la que se pone a algunas criaturas espirituales, no a
los seres humanos. Es un estado mental de densa oscuridad espiritual con respecto al
magnífico propósito de Dios. Quienes están en ese estado no tienen ninguna esperanza para el
futuro. Dios arrojó al Tártaro a los ángeles desobedientes del tiempo de Noé, y estos
permanecerán en esa condición degradada hasta el día en que sean destruidos.
3:17. ¿Qué conocimiento tenían de antemano los cristianos? Aquí Pedro se estaba
refiriendo a la presciencia, es decir, al conocimiento de los sucesos futuros que habían recibido
por inspiración él y otros escritores bíblicos. Claro, aquel conocimiento no era absoluto, de
modo que los primeros cristianos no conocían todos los detalles del futuro. Pero sí tenían una
idea general de lo que podían esperar.
Lecciones para nosotros:
1:2, 5-7. Si nos esforzamos por cultivar fe, aguante y devoción piadosa, no solo tendremos
más ―conocimiento exacto de Dios y de Jesús‖, sino que no nos haremos ―inactivos o
infructíferos‖ (2 Ped. 1:8).
1:12-15. Para estar ―firmemente establecidos en la verdad‖, necesitamos que se nos
recuerden constantemente los principios bíblicos. Por eso son tan provechosos el estudio, la
lectura de la Biblia y las reuniones.
2:2. Debemos tener cuidado para que nuestra conducta nunca manche el nombre de Jehová
y de su organización (Rom. 2:24).
2:4-9. Por lo que ha hecho en el pasado, podemos estar seguros de que ―Jehová sabe librar
de la prueba a personas de devoción piadosa, pero reservar a personas injustas para el día del
juicio para que sean cortadas de la existencia‖.
2:10-13. Aunque ―los gloriosos‖ (los superintendentes cristianos) tienen defectos y se
equivocan, no debemos hablar mal de ellos (Heb. 13:7, 17).
3:2-4, 12. Si prestamos atención a ―los dichos hablados previamente por los santos profetas‖
y al ―mandamiento del Señor y Salvador‖, no olvidaremos lo cerca que está el día de Jehová.
3:11-14. Quienes estamos ―esperando y teniendo muy presente la presencia del día de
Jehová‖ debemos 1) tener una conducta santa y mantenernos puros en sentido físico, mental,
moral y espiritual; 2) abundar en obras que reflejen ―devoción piadosa‖, como predicar el Reino
y hacer discípulos; 3) luchar para estar ―inmaculados‖, es decir, para que el mundo no manche
nuestra conducta y personalidad; 4) asegurarnos de que nuestras intenciones siempre sean
nobles y así vivir ―sin tacha‖, y 5) estar ―en paz‖ con Dios, con nuestros hermanos y con las
demás personas.
PRIMERA DE JUAN
CONTENIDO
*** w08 15/12 págs. 27-28 Puntos sobresalientes de la primera carta de Juan ***
SIGAN EN EL CAMINO DE LA LUZ, EL AMOR Y LA FE
(1 Juan 1:1–5:21)
Juan dirige su primera carta a la entera asociación de los que están en unión con Cristo y
suministra buenos consejos para ayudarlos a resistir la apostasía y a mantenerse firmes a favor
de la verdad y la justicia. También destaca la importancia de seguir el camino de la luz, el amor
y la fe.
Juan escribe: ―Si andamos en la luz, como [Dios] mismo está en la luz, [...] tenemos
participación unos con otros‖. Y tomando en cuenta que Dios es la Fuente del amor, el apóstol
dice: ―Continuemos amándonos unos a otros‖. Además, señala que mientras que ―el amor de
Dios‖ nos mueve a ―observ[ar] sus mandamientos‖, ―nuestra fe‖ en Jehová, en su Palabra y en
su Hijo nos ayuda a vencer al mundo (1 Juan 1:7; 4:7; 5:3, 4).
Respuestas a preguntas bíblicas:
2:2; 4:10. ¿En qué sentido es Jesús ―un sacrificio propiciatorio‖? ―Propiciatorio‖ es
aquello que sirve para ―aplacar la justicia divina y tener a Dios propicio‖, es decir, favorable.
Jesús dio su vida como un sacrificio propiciatorio en el sentido de que, al hacerlo, aplacó o
satisfizo la norma de justicia perfecta. Y sobre la base de ese sacrificio, Dios podría mostrar
misericordia y perdonar los pecados de los que ejercieran fe en Jesús (Juan 3:16; Rom. 6:23).
2:7, 8. ¿A qué mandamiento llamó Juan ―viejo‖ y a la vez ―nuevo‖? El apóstol se refería
al mandamiento sobre mostrarse amor fraternal y abnegado (Juan 13:34). Lo llamó ―viejo‖
porque Jesús lo había establecido más de sesenta años antes de que Juan escribiera su
primera carta inspirada. Por eso dijo que los creyentes lo habían tenido ―desde el principio‖ de
su vida como cristianos. Sin embargo, el mandamiento también era ―nuevo‖ en el sentido de
que ya no implicaba solo ‗amar al prójimo como a uno mismo‘, sino estar dispuesto a
sacrificarse por él (Lev. 19:18; Juan 15:12, 13).
3:2. ¿Qué es lo que ―no se ha manifestado‖ a los cristianos ungidos, y a quién verán
―tal como él es‖? Lo que no se les ha manifestado a ellos es cómo serán cuando resuciten
con cuerpos espirituales en el cielo (Fili. 3:20, 21). No obstante, sí saben que ―cuando [Dios]
sea manifestado ser[án] semejantes a él, porque lo ver[án] tal como él es‖, como ―Jehová el
Espíritu‖ (2 Cor. 3:17, 18).
5:5-8. ¿Cómo dieron testimonio el agua, la sangre y el espíritu de que ―Jesús es el Hijo
de Dios‖? El agua dio testimonio porque cuando Jesús se bautizó en agua, Jehová expresó
que lo aprobaba como Hijo suyo (Mat. 3:17). La sangre, que representa la vida que Jesús
ofreció como ―rescate correspondiente por todos‖, también demostró que Cristo es el Hijo de
Dios (1 Tim. 2:5, 6). Y el espíritu santo dio testimonio de que Jesús es el Hijo de Dios cuando
descendió sobre él durante su bautismo, lo que le permitió ir ―por la tierra haciendo bien y
sanando a todos los que eran oprimidos por el Diablo‖ (Juan 1:29-34; Hech. 10:38).
Lecciones para nosotros:
2:9-11; 3:15. El cristiano que permita que algo o alguien destruya su amor fraternal andará
en oscuridad espiritual y no sabrá ni a dónde va.
SEGUNDA DE JUAN
CONTENIDO
Introducción: El ―anciano‖ escribe expresan do el amor de todos los creyentes por la ―se
ñora escogida‖ y sus hijos (1-3).
Hay que andar en la verdad y mostrar amor por medio de obedecer los mandamientos
de Dios (4-11).
o Juan se regocija de que algunos de los hijos de la señora escogida estén
andando en la verdad, y los anima a mostrarse amor unos a otros (4-6).
o Hay que cuidarse de los engañadores, los que se adelantan y no permanecen en
la enseñanza del Cristo (7-9).
o A tal engañador no se le debería saludar ni recibir en el hogar, para no participar
así en sus obras inicuas (10, 11).
Conclusión: El escritor espera visitarlos personalmente, y les envía saludos de los hijos
de una ―hermana‖ de la ―señora‖ (12,13).
*** w08 15/12 pág. 28 Puntos sobresalientes de la segunda carta de Juan ***
SIGAN ―ANDANDO EN LA VERDAD‖
(2 Juan 1-13)
Juan empieza su segunda carta con estas palabras: ―El anciano, a la señora escogida y a
sus hijos‖. Él expresa su alegría al hallar a ―ciertos hijos [de ella] andando en la verdad‖ (2 Juan
1, 4).
Tras animar a los hermanos a cultivar amor, Juan escribe: ―Esto es lo que el amor significa:
que sigamos andando según sus mandamientos‖. También advierte sobre ―el engañador y el
anticristo‖ (2 Juan 5-7).
Respuestas a preguntas bíblicas:
1, 13. ¿Quién es ―la señora escogida‖? Juan pudiera referirse a una mujer específica a
quien llama Kiria, que en griego significa ―señora‖. O tal vez, a fin de confundir a los
perseguidores, empleó una figura retórica para dirigirse a una congregación en particular. En tal
caso, los hijos de ella serían los miembros de la congregación y ―los hijos de [su] hermana‖
serían los miembros de otra congregación.
7. ¿De qué venida habla Juan, y cómo es que los engañadores ―no [la] confiesan‖?
No se refiere a la futura venida invisible de Jesús, sino a su venida en la carne y su ungimiento
como el Cristo (1 Juan 4:2). Los engañadores no confiesan esta venida en la carne. Quizás
nieguen que Jesús vivió o que fue ungido con espíritu santo.
Lecciones para nosotros:
2, 4. Conocer esta ―verdad‖ —todo el conjunto de enseñanzas cristianas que forman parte
de la Biblia— y atenernos a ella es esencial para nuestra salvación (3 Juan 3, 4).
8-11. Si no queremos perder la ―bondad inmerecida, [la] misericordia y [la] paz de parte de
Dios el Padre y de parte de Jesucristo‖ ni el amoroso compañerismo de nuestros hermanos en
la fe, debemos ‗cuidarnos‘ en sentido espiritual y rechazar a quienes ―no permanece[n] en la
enseñanza del Cristo‖ (2 Juan 3).
TERCERA DE JUAN
CONTENIDO
Introducción: El anciano a Gayo, que está andando en la verdad (1-4).
Se encomia a Gayo por mostrar hospitalidad a los hermanos que visitan la congregación
cumpliendo una misión cristiana (5-8).
o Le aconseja que les ponga en camino con la misma hospitalidad (6,7).
o Tal hospitalidad es una obligación cristiana (8).
Diótrefes, ambicioso de posición, muestra falta de respeto por la autoridad teocrática e
intenta echar a los que reciben a los herma nos viajeros con respeto; el escritor
esperaba enderezar los asuntos con una visita personal (9,10).
Se le aconseja a Gayo que sea un imitador de lo bueno; se menciona a Demetrio como
uno de quien se ha dado testimonio (11,12).
Palabras de conclusión con las que le desea paz y envía saludos (13,14).
A lo largo de las tres cartas, se destaca la unidad cristiana, el amor a Dios por medio de
guardar sus mandamientos, el evitar la oscuridad y andar en la luz, el mostrar amor a los
hermanos y el continuar andando en la verdad. A pesar de su edad avanzada, este
―anciano‖, Juan, fue una gran fuente de ánimo y fortaleza para las congregaciones de
Asia Menor y para todos los cristianos que leen sus cartas.
JUDAS, CARTA DE
CONTENIDO
Introducción (1:1-3).
Cartas a las siete congregaciones (1:4-3:22).
o El autor, el conducto y el medio utilizado para dar la Revelación (1:4-19).
o Explicación de las siete estrellas y los siete candelabros (1:20).
o Descripción de las condiciones existentes en las congregaciones. Encomio,
consejo y advertencia (2:1-3:22).
Acontecimientos delante del trono de Dios (4:1-11:19).
o La visión del trono de Dios (4:1-11).
o El rollo sellado; el Cordero es el único que está capacitado para abrirlo (5:1-14).
o La apertura de seis de los siete sellos del rollo (6:1-17).
Guerra, hambre, plaga mortífera y Hades (6:1-8).
Las almas que están debajo del altar claman por venganza (6:9-11).
Terremoto; los hombres intentan escapar de la ira de Dios (6:12-17).
o Se sella a los 144.000; la gran muchedumbre está de pie delante del trono (7:1-
17).
o Se abre el séptimo sello; se tocan las siete trompetas (8:1-11:19).
Silencio en el cielo; ángel junto al altar (8:1-6).
Seis trompetas proclaman ayes para la tierra (8:7-9:21).
Los siete truenos hablan; a Juan se le da un rollo para comer (10:1-11).
Se mide el santuario del templo; se da muerte a dos testigos, se les
resucita, entran en el cielo; terremoto (11:1-14).
La séptima trompeta anuncia el reino de Dios y de Cristo; las naciones se
aíran; se abre el santuario del templo (11:15-19).
Las señales en el cielo: la mujer y su principal enemigo, el dragón (12:1-17).
o La mujer a punto de dar a luz (12:1, 2).
El dragón intenta devorar al niño recién nacido, pero Dios arrebata al niño a su trono
(12:3-6).
o Una guerra en el cielo resulta en que Satanás sea arrojado a la Tierra; regocijo en
el cielo, ay para la Tierra; lucha continua de Satanás, la serpiente, contra la mujer
y su descendencia (12:7-17).
Las bestias salvajes: enemigos terrestres de los santos de Dios (13:1-18).
o La bestia de siete cabezas sale del mar con una cabeza herida; luego es sanada
(13:1-10).
o La bestia salvaje de dos cuernos asciende de la Tierra (13:11-13).
o Se hace una imagen de la bestia de siete cabezas; la marca de la bestia (13:14-
18).
El Cordero y sus 144.000 fieles sellados; la proclamación de buenas nuevas eternas; la
Tierra es segada; la vid de la Tierra es vendimiada y pisada (14:1-20).
Las siete últimas plagas (15:1-16:20).
o La canción del Cordero; los ángeles de las siete plagas (15:1-16:1).
o El efecto de las plagas en la Tierra, el mar, los ríos, el Sol, el trono de la bestia
salvaje, el Éufrates y el aire (16:2-18).
o Babilonia la Grande es sacudida; llega el tiempo de su juicio (16:19-21).
Babilonia la Grande y su destrucción (17:1-18:24).
o Emborracha a los habitantes de la Tierra; cabalga sobre una bestia salvaje de
color escarlata y de siete cabezas (17:1-11).
o Los cuernos de la bestia combaten sin éxito contra el Cordero; se vuelven contra
la ramera y es devastada y quemada (17:12-18).
o Lamentaciones por su destrucción (18:1-24).
Las bodas del Cordero y su guerra contra la bestia salvaje, el falso profeta y los ejércitos
de la Tierra (19:1-21).
Satanás es atado por mil años; su lucha y fracaso al final del reinado milenario de Cristo
(20:1-10).
Rasgos del día de juicio de mil años (20:11-22:5).
o El juicio, que abarca a los muertos resucita dos (20:11-15).
o La Nueva Jerusalén, la ciudad de Jehová y del Cordero (21:1-27).
o El río de agua de vida (22:1-5).
Conclusión (22:6-21).
(Para un análisis versículo por versículo del libro de Revelación, consulte el libro
―Apocalipsis... ¡se acerca su magnífica culminación!‖,re.S 1988)
*** w91 1/5 págs. 21-23 Visiones emocionantes que fortalecen la fe ***
Manténgase despierto: Entre las palabras proféticas acerca de la guerra de Dios, Har–
Magedón (Armagedón), se dice: ―¡Mira! Vengo [es decir, Jesucristo viene] como ladrón. Feliz es
el que se mantiene despierto y guarda sus prendas de vestir exteriores, para que no ande
desnudo y la gente mire su vergüenza‖. (Revelación 16:15.) Puede que esto aluda a los
deberes del superintendente u oficial del monte del templo en Jerusalén. Durante las vigilias él
caminaba por el templo para ver si los guardias levitas estaban despiertos o dormidos en sus
puestos. A cualquier guardia que se hallara dormido se le golpeaba con un palo, y sus prendas
de vestir exteriores podían ser quemadas como castigo vergonzoso. Puesto que el Armagedón
está tan cerca ahora, el resto ungido del ―sacerdocio real‖ o ―casa espiritual‖ está resuelto a
permanecer despierto en sentido espiritual. Sus compañeros, la ―gran muchedumbre‖ que tiene
esperanzas terrestres, tienen que actuar de la misma manera, pues ellos también rinden
servicio sagrado a Dios en el templo. (1 Pedro 2:5, 9; Revelación 7:9-17.) En particular los
superintendentes cristianos deben permanecer vigilantes contra el desarrollo de condiciones
malas en la congregación. Porque ellos siguen despiertos, todos los que adoran lealmente en
el templo espiritual de Dios siguen con sus ―prendas de vestir exteriores‖ puestas, unas
prendas que denotan su servicio privilegiado como testigos de Jehová.
*** w09 15/1 págs. 30-32 Puntos sobresalientes del libro de Revelación (parte 1) ***
―EL CORDERO‖ ABRE SEIS DE LOS SIETE SELLOS
(Rev. 1:1–7:17)
En primer lugar, Juan ve a Jesús glorificado y recibe varios mensajes que debe escribir en
un rollo y enviar ―a las siete congregaciones‖ (Rev. 1:10, 11). Después, Juan ve un trono
celestial. Y en la mano derecha del que está sentado en el trono hay un rollo sellado con siete
sellos. ―¿Quién es digno de abrir el rollo [...]?‖ Nada menos que ―el León que es de la tribu de
Judá‖, el ―cordero [...] que [tiene] siete cuernos y siete ojos‖ (Rev. 4:2; 5:1, 2, 5, 6).
La tercera visión revela lo que sucede cuando ―el Cordero‖ abre cada uno de los primeros
seis sellos. Al abrir el sexto sello, ocurre un gran terremoto que marca la llegada del gran día de
la ira (Rev. 6:1, 12, 17). Pero la siguiente visión muestra a ―cuatro ángeles [...] reteniendo los
cuatro vientos de la tierra‖ hasta que se termina de sellar a los 144.000. A continuación
aparece ―una gran muchedumbre‖ de personas que no han sido selladas y que están ―de pie
delante del trono y delante del Cordero‖ (Rev. 7:1, 9).
Respuestas a preguntas bíblicas:
1:4; 3:1; 4:5; 5:6. ¿Qué significa la expresión ―los siete espíritus‖? El número siete
representa lo completo desde el punto de vista de Dios. De modo que el mensaje que
originalmente fue dirigido a ―las siete congregaciones‖ se hace extensivo a las más de cien mil
congregaciones del pueblo de Dios hoy día (Rev. 1:11, 20). Puesto que Jehová otorga su
espíritu santo conforme a lo que desea lograr, la expresión ―los siete espíritus‖ significa que el
espíritu santo opera a plenitud para que quienes prestan atención a la profecía puedan
comprenderla y así reciban bendiciones. El libro de Revelación parece seguir un patrón basado
en grupos de siete elementos. En este libro, dicho número representa lo completo; y en efecto,
Revelación habla de la forma en que ―queda terminado‖, o se completa, ―el secreto sagrado de
Dios‖ (Rev. 10:7).
1:8, 17. ¿A quién se le llama ―el Alfa y la Omega‖ y ―el Primero y el Último‖? Es a
Jehová a quien se le llama ―el Alfa y la Omega‖. Este título destaca el hecho de que ni antes
ni después de él hay dios que pueda comparársele. Él es ―el principio y el fin‖ (Rev. 21:6;
22:13). Ahora bien, aunque Revelación 22:13 llama a Jehová ―el primero y el último‖ —pues
no hay nadie antes ni después de él—, el título ―el Primero y el Último‖ que aparece en el
capítulo 1 se refiere a Jesucristo, tal como lo demuestra el contexto. Él fue el primero y el último
ser humano a quien Jehová resucitó personalmente para vivir como espíritu inmortal (Col.
1:18).
2:7. ¿Qué es ―el paraíso de Dios‖? Puesto que estas palabras fueron dirigidas a cristianos
ungidos, el paraíso del que aquí se habla debe referirse al cielo, a la mismísima presencia de
Jehová. Este es, sin duda, un lugar paradisíaco. Los ungidos que permanezcan fieles podrán
comer ―del árbol de la vida‖, es decir, recibirán inmortalidad (1 Cor. 15:53).
3:7. ¿Cuándo recibió Jesús ―la llave de David‖? ¿Cómo la ha usado? Jesús fue
escogido para llegar a ocupar el trono de David, su antepasado, cuando se bautizó, en el año
29. Sin embargo, no recibió ―la llave de David‖ sino hasta el año 33, cuando se sentó a la
diestra de Dios en el cielo. Se le confirió pleno derecho sobre el Reino davídico y desde
entonces ha estado empleando dicha llave para ―abrir‖ u ofrecer oportunidades de servicio
relacionadas con el Reino. En 1919, Jesús entregó ―la llave de la casa de David‖ al ―esclavo fiel
y discreto‖, es decir, lo nombró ―sobre todos sus bienes‖ (Isa. 22:22; Mat. 24:45, 47).
3:12. ¿Cuál es el ―nuevo nombre‖ de Jesús? Ese nombre está relacionado con la nueva
posición que ocupa Jesús y con sus recién adquiridas responsabilidades (Fili. 2:9-11). Aunque
nadie más llega a conocer ese nombre tan bien como él, Jesús lo escribe sobre sus fieles
hermanos que resucitan en el cielo, con lo que se estrecha aún más su relación con ellos (Rev.
19:12). De hecho, él comparte sus responsabilidades con ellos.
Lecciones para nosotros:
1:3. En vista de que está tan cerca ―el tiempo señalado‖ para que Dios ejecute su sentencia
contra el mundo de Satanás, es urgente que nos esforcemos por comprender el mensaje del
libro de Revelación y que actuemos en conformidad con él.
3:17, 18. Para ser ricos en sentido espiritual, debemos comprar el ―oro acrisolado por fuego‖
que ofrece Jesús, o sea, debemos ser ―ricos en obras excelentes‖ (1 Tim. 6:17-19). Hemos de
ponernos ―prendas de vestir exteriores blancas‖ que nos identifiquen como discípulos de Jesús.
Y debemos usar ―pomada para los ojos‖ —los consejos que recibimos en La Atalaya y otras
publicaciones— para mejorar nuestra visión espiritual (Rev. 19:8).
7:13, 14. Los veinticuatro ancianos representan a los 144.000 ungidos en el cielo, donde
además de ser reyes son sacerdotes. Este grupo fue prefigurado por los sacerdotes del antiguo
Israel, a quienes el rey David organizó en veinticuatro divisiones. Uno de los ancianos le revela
a Juan la identidad de la gran muchedumbre. De esto se deduce que la resurrección de los
cristianos ungidos debió de comenzar antes de 1935. ¿Por qué lo decimos? Porque en ese año
se dio a conocer a los cristianos ungidos que aún estaban en la Tierra cuál era la identidad de
la gran muchedumbre (Luc. 22:28-30; Rev. 4:4; 7:9).
EL SÉPTIMO SELLO Y EL TOQUE DE SIETE TROMPETAS
(Rev. 8:1–12:17)
Cuando el Cordero abre el séptimo sello, siete ángeles reciben una trompeta cada uno. Seis
de ellos tocan su trompeta para anunciar mensajes de condenación contra ―la tercera parte‖ de
la humanidad: la cristiandad (Rev. 8:1, 2, 7-12; 9:15, 18). Eso es lo que Juan ve en su quinta
visión. En la siguiente visión, Juan se convierte en un participante más al comerse un pequeño
rollo y medir el santuario del templo. Después del toque de la séptima trompeta, se oyen voces
fuertes que anuncian: ―El reino del mundo sí llegó a ser el reino de nuestro Señor y de su
Cristo‖ (Rev. 10:10; 11:1, 15).
Las palabras de Revelación 11:15, 17 introducen ahora la séptima visión. Se ve una gran
señal en el cielo: una mujer da a luz un hijo varón. Entonces, el Diablo es echado del cielo y,
enfurecido con la mujer, se va a guerrear ―contra los restantes de la descendencia de ella‖
(Rev. 12:1, 5, 9, 17).
Respuestas a preguntas bíblicas:
8:1-5. ¿Por qué se hizo un silencio en el cielo? ¿Qué se arrojó después a la Tierra?
Se hizo un ―silencio‖ en el cielo para que se pudieran oír ―las oraciones de los santos‖ que
estaban en la Tierra. Esto ocurrió al final de la primera guerra mundial. Los cristianos ungidos
no ascendieron al cielo al final de los tiempos de los gentiles, como muchos de ellos
esperaban; además, enfrentaron graves dificultades durante la guerra. De modo que estaban
orando fervientemente para saber qué debían hacer. En respuesta a sus oraciones, un ángel
arrojó a la Tierra fuego simbólico, y este encendió el fervor y entusiasmo de aquellos cristianos.
Aunque eran pocos, iniciaron una campaña mundial de predicación que convirtió al Reino de
Dios en un tema candente, y causaron, por decirlo así, un incendio en la cristiandad.
Retumbaron las duras advertencias de la Palabra de Dios, relumbraron con fulgor las verdades
bíblicas y se sacudieron los cimientos de la religión falsa, tal como se sacuden los edificios
durante un terremoto.
8:6-12; 9:1, 13; 11:15. ¿Cuándo se prepararon los siete ángeles para tocar sus
trompetas? ¿Cómo y cuándo se escuchó el toque de las trompetas? Como parte de la
preparación para tocar las siete trompetas, se dieron instrucciones a los revitalizados miembros
de la clase Juan. Como resultado, de 1919 a 1922, los ungidos reorganizaron la predicación y
construyeron las instalaciones que necesitaban para imprimir (Rev. 12:13, 14). El toque de las
trompetas representa la proclamación intrépida de la sentencia divina contra el mundo de
Satanás, proclamación que el pueblo de Dios llevó a cabo con la ayuda de los ángeles. Dicha
proclamación comenzó en la asamblea que se efectuó en Cedar Point (Ohio) en 1922 y se
prolongará hasta la gran tribulación.
8:13; 9:12; 11:14. ¿Por qué se dice que los últimos tres toques de trompeta son
―ayes‖? Los primeros cuatro toques de trompeta proclamaron la muerte espiritual de la
cristiandad, pero los tres últimos son ―ayes‖, o lamentos, que están relacionados con tres
sucesos específicos, como veremos a continuación. El quinto toque se relaciona con la
liberación del ―abismo‖ de inactividad que experimentó en 1919 el pueblo de Dios, y con su
imparable predicación, que se convirtió en una dolorosa plaga para la cristiandad (Rev. 9:1).
El sexto toque se relaciona con el ataque de caballería más grande de la historia: la campaña
mundial de predicación que comenzó en 1922. El último toque se relaciona con el nacimiento
del Reino mesiánico.
Lecciones para nosotros:
9:10, 19. Las contundentes declaraciones basadas en la Biblia que aparecen en las
publicaciones del ―esclavo fiel y discreto‖ contienen un punzante mensaje (Mat. 24:45). Ese
mensaje corresponde tanto a las colas de las langostas, que tienen ―aguijones semejantes a
[los de] escorpiones‖, como a caballos, cuyas ―colas son semejantes a serpientes‖. ¿Por qué?
Porque dichas publicaciones advierten que se acerca ―el día de la venganza de [Jehová]‖ (Isa.
61:2). Llevémoslas a la gente con celo y valor.
9:20, 21. Con la expresión ―los demás de los hombres‖, Revelación se refiere a la gente de
los países llamados no cristianos. Aunque muchas personas sinceras de esos países han
respondido al mensaje que proclamamos, no esperamos conversiones en masa. Aun así,
seguimos predicando con ahínco.
12:15, 16. ―La tierra‖ —es decir, elementos políticos del mundo de Satanás— ha defendido
la libertad religiosa. A partir de la década de los cuarenta, los gobiernos de diversos países se
tragaron ―el río [de persecución] que el dragón había lanzado de su boca‖. Como vemos,
cuando Jehová así lo decide, puede influir en las autoridades para llevar a cabo su voluntad.
Sin duda, son muy atinadas estas palabras de Proverbios 21:1: ―El corazón de un rey es como
corrientes de agua en la mano de Jehová. Adondequiera que él se deleita en hacerlo, lo
vuelve‖. Esta verdad debe fortalecer nuestra fe en Dios.
*** w09 15/2 Puntos sobresalientes del libro de Revelación (parte 2) ***
SE DERRAMAN LOS SIETE TAZONES DE LA CÓLERA DE DIOS
(Rev. 13:1–16:21)
Revelación 11:18 declara: ―Las naciones se airaron, y vino tu propia ira [la de Dios], y el
tiempo señalado para [...] causar la ruina de los que están arruinando la tierra‖. ¿A qué se debe
la ira de Dios? Se debe a las actividades de la ―bestia salvaje [...] con diez cuernos y siete
cabezas‖ que se describe en la octava visión (Rev. 13:1).
En la novena visión, Juan ve al ―Cordero de pie sobre el monte Sión, y con él ciento cuarenta
y cuatro mil‖ que han sido ―comprados de entre la humanidad‖ (Rev. 14:1, 4). Y a continuación
se dan anuncios angélicos. En la décima visión, Juan contempla a ―siete ángeles con siete
plagas‖. Todo indica que es Jehová mismo quien ordena a estos ángeles que derramen ―los
siete tazones de la cólera de Dios‖ sobre varios elementos del mundo de Satanás. Los tazones
contienen declaraciones y advertencias sobre los juicios de Dios (Rev. 15:1; 16:1). Estas dos
visiones nos dan detalles de otros juicios del Reino relacionados con el tercero de los ―ayes‖, o
lamentos, y con el toque de la séptima trompeta (Rev. 11:14, 15).
Respuestas a preguntas bíblicas:
13:8. ¿Qué es ―el rollo de la vida del Cordero‖? Es un rollo simbólico en el que están
escritos los nombres de quienes gobernarán con Jesús en su Reino celestial. Esta lista incluye
los nombres de los cristianos ungidos que tienen la esperanza de ir al cielo pero que aún viven
en la Tierra.
13:11-13. ¿Qué significa que la bestia salvaje de dos cuernos hable como un dragón y
haga bajar fuego del cielo? El hecho de que la bestia salvaje de dos cuernos —la potencia
mundial angloamericana— hable como un dragón significa que recurre a amenazas, presiones
y actos violentos para obligar a la gente a aceptar su manera de gobernar. ¿En qué sentido
hace bajar fuego del cielo? En que, asumiendo la función de un profeta, proclama que ha
vencido a las fuerzas del mal en las dos guerras mundiales del siglo XX y que le ha ganado la
batalla al comunismo.
16:17. ¿Qué es ―el aire‖ sobre el que se derrama el séptimo tazón? ―El aire‖ representa
la manera de pensar satánica, ―el espíritu [o actitud] que ahora opera en los hijos de la
desobediencia‖. El entero mundo de Satanás respira este aire envenenado (Efe. 2:2).
Lecciones para nosotros:
13:1-4, 18. ―Una bestia salvaje‖ que simboliza los gobiernos humanos sale ―del mar‖. El mar
simboliza, a su vez, las masas agitadas de la humanidad (Isa. 17:12, 13; Dan. 7:2-8, 17). Esta
terrible criatura, que fue creada por Satanás y recibe su poder de él, lleva el número 666, el
cual representa la imperfección extrema. Puesto que nosotros conocemos la identidad de esta
bestia, no la seguimos con admiración ni la adoramos, como hace la humanidad en general
(Juan 12:31; 15:19).
13:16, 17. Aunque nos resulte más difícil realizar actividades cotidianas tales como ―comprar
o vender‖, no debemos ceder a la presión y dejar que la bestia salvaje controle nuestra vida.
Aceptar la marca de la bestia salvaje en la mano o en la frente equivaldría a permitir que dicha
bestia controlara nuestra conducta o influyera en nuestra forma de pensar.
14:6, 7. La proclamación del ángel nos muestra lo urgente que es dar a conocer las buenas
nuevas del Reino de Dios ya establecido. Debemos ayudar a nuestros estudiantes a cultivar un
sano temor a Jehová y el deseo de glorificar su nombre.
14:14-20. Cuando se termine de recoger ―la mies [o cosecha] de la tierra‖, es decir, a
quienes serán salvados, el ángel arrojará ―la vid de la tierra‖ en ―el gran lagar de la cólera de
Dios‖. Allí será destruida para siempre. La vid representa el corrupto sistema político de
Satanás, y los ―racimos‖ de la vid representan su mal fruto. Nunca dejemos que la vid de la
tierra influya en nosotros.
16:13-16. Las ―expresiones inspiradas inmundas‖ no son otra cosa que propaganda
demoníaca. Su propósito es que los reyes de la Tierra no respondan favorablemente al
derramamiento de los siete tazones de la cólera de Dios, sino que se dejen manipular y se
enfrenten a Jehová (Mat. 24:42, 44).
16:21. Justo antes de que este mundo llegue a su fin, es probable que la proclamación del
mensaje de juicio contra el malvado mundo de Satanás incluya extraordinarias expresiones de
condena, que al parecer están representadas por piedras de granizo. Con todo, la mayor parte
de la humanidad seguirá blasfemando contra Dios.
YA REINA EL REY VICTORIOSO
(Rev. 17:1–22:21)
―Babilonia la Grande‖, el imperio mundial de la religión falsa, es uno de los repugnantes
elementos del mundo de Satanás. En la undécima visión aparece representada por una ―gran
ramera‖, o prostituta, ―sentada sobre una bestia salvaje de color escarlata‖. Serán precisamente
―los diez cuernos‖ de esa bestia los que la destruyan por completo (Rev. 17:1, 3, 5, 16). En la
siguiente visión se compara esta prostituta a una ―gran ciudad‖, se anuncia su caída y se hace
un llamamiento urgente al pueblo de Dios: ―Sálganse de ella‖. Muchísimas personas lloran la
caída de la gran ciudad, pero en el cielo hay gran regocijo debido a ―las bodas del Cordero‖
(Rev. 18:4, 9, 10, 15-19; 19:7). En la decimotercera visión, el jinete del ―caballo blanco‖ guerrea
contra las naciones y acaba con el malvado mundo de Satanás (Rev. 19:11-16).
¿Qué sucederá con ―la serpiente original, que es el Diablo y Satanás‖? ¿Cuándo será
―arrojado al lago de fuego‖? Este es uno de los temas que se tratan en la decimocuarta visión
(Rev. 20:2, 10). Las últimas dos visiones nos permiten entrever cómo será la vida durante el
Milenio. Ya al final de la ―revelación‖, Juan ve un río de agua de vida que fluye por en medio de
un camino ancho y escucha la invitación que se hace a ―cualquiera que tenga sed‖ (Rev. 1:1;
22:1, 2, 17).
Respuestas a preguntas bíblicas:
17:16; 18:9, 10. ¿Por qué lamentan ―los reyes de la tierra‖ la destrucción de Babilonia
la Grande si ellos mismos la destruyeron? Su lamento se debe a puro egoísmo. Parece que
después de destruir a Babilonia la Grande, se dan cuenta de lo útil que les había sido. Ella les
había ayudado a cubrir su despotismo con un manto de piedad, a reclutar jóvenes para sus
guerras y a mantener a la gente subyugada.
19:12. ¿Qué significa que nadie conozca el nombre de Jesús, aparte de él mismo?
Al parecer, este nombre (que no se especifica) se refiere a la posición de Jesús y a los
privilegios de que disfruta durante el día del Señor, como los que se mencionan en Isaías 9:6.
El hecho de que nadie más conozca ese nombre significa que sus privilegios son únicos y que
nadie más entiende lo que implica ocupar un cargo tan elevado como el suyo. Sin embargo,
Jesús comparte algunos de esos privilegios con los miembros de la clase de su novia y escribe
―ese nuevo nombre‖ suyo sobre ellos (Rev. 3:12).
19:14. ¿Quiénes cabalgan con Jesús en Armagedón? Los ejércitos de los cielos que
acompañan a Jesús a pelear la guerra de Dios están formados por ángeles y por los ungidos
que han vencido y han recibido su recompensa celestial (Mat. 25:31, 32; Rev. 2:26, 27).
20:11-15. ¿De quiénes son los nombres escritos en ―el rollo [o ―el libro‖] de la vida‖?
Son los nombres de todas las personas que tienen la perspectiva de recibir vida eterna: los
cristianos ungidos, los miembros de la gran muchedumbre y los fieles siervos de Dios que
vuelvan a la vida cuando ocurra la ―resurrección [de los] justos‖ (Hech. 24:15; Rev. 2:10; 7:9).
¿Y qué hay de las personas que vuelvan a la vida durante la ―resurrección [de los] injustos‖?
Sus nombres solo se escribirán en ―el rollo de la vida‖ si obedecen ―las cosas escritas en los
rollos‖ de instrucciones que se abrirán durante el Milenio. Sin embargo, ninguno de esos
nombres se escribe de manera permanente desde el principio. Los de los ungidos quedan
registrados definitivamente una vez que mueren fieles (Rev. 3:5). Y los de las personas que
vivirán en la Tierra, una vez que hayan pasado la prueba final que tendrá lugar al acabar el
Milenio (Rev. 20:7, 8).
Lecciones para nosotros:
17:3, 5, 7, 16. ―La sabiduría de arriba‖ nos permite entender ―el misterio de la mujer y de la
bestia salvaje [de color escarlata] que la lleva‖ (Sant. 3:17). Esta bestia salvaje simbólica
comenzó siendo la Sociedad de Naciones y después revivió como la Organización de las
Naciones Unidas. En vista de que a nosotros se nos ha revelado este antiguo misterio, ¿no
deberíamos predicar con entusiasmo las buenas nuevas del Reino de Dios y proclamar el día
de juicio de Jehová?
21:1-6. Podemos tener plena certeza de que las maravillosas promesas relacionadas con el
Reino se harán realidad. ¿Por qué? Porque la Biblia habla de ellas como si ya se hubieran
cumplido. En Revelación leemos: ―¡Han acontecido!‖.
22:1, 17. El ―río de agua de vida‖ representa los medios que Jehová utiliza para eliminar los
efectos del pecado y la muerte. Aun ahora hay agua disponible para las personas obedientes.
Dios nos invita a beber ―gratis el agua de la vida‖. Aceptemos su invitación con gratitud y
llevémosla con entusiasmo a nuestros semejantes.
*** dx50-85 Preguntas de los lectores ***
Lista por textos (Los textos armonizados se buscan por el primero)
Génesis 1:11-13 y 2:5, 6 armonizados: w56 350-1
Génesis 2:1, 2 y Juan 5:17 armonizados: w64 639-40
Génesis 2:10-14, Pisón y Guihón, ¿son ríos?: w63 542
Génesis 2:17; 3:5, 22, ―conocimiento de lo bueno y lo malo‖: w60 351; w51 351
Génesis 3:1, ¿por qué dice NM ―cautelosa‖ en lugar de ―astuta‖?: w59 762
Génesis 3:16, ¿habría habido algún dolor en el parto si la mujer no hubiera pecado?: w54 671
Génesis 3:22, ¿tenía Jesús conocimiento de lo bueno y lo malo?: w80 15/5 30
Génesis 5, ¿son útiles para la cronología las edades traslapadas de hombres?: w81 1/5 30-1
Génesis 6:6, ¿sintió pesar Jehová por haber hecho al hombre?: w70 703-4; w54 446-7
Génesis 6:16, la ―abertura para iluminación‖ y la ―ventana‖, ¿eran lo mismo en el arca de Noé?:
w59 763
Génesis 7:2, ¿siete, o siete parejas?: w54 382-3
Génesis 7:11; 8:2, ¿hubo lluvia desde los cielos además de un ―brotar de agua desde debajo
de la tierra‖?: w63 126-7
Génesis 8:13, ¿qué era la ―cubierta del arca‖?: w59 763
Génesis 8:22, ¿en el nuevo sistema existirán las estaciones del año como las conocemos hoy?:
w64 286
Génesis 9:2, ¿tenían temor al hombre los animales antes del Diluvio?: w65 448
Génesis 9:25, ¿por qué maldijo Noé a Canaán?: w53 733-4
Génesis 10:5 y 11:1 armonizados: w78 1/10 32
Génesis 11:31-12:4 y Hechos 7:2-4 armonizados: w60 159-60
Génesis 15:7, 8 y Éxodo 6:3 armonizados: w54 62-3
Génesis 19:8 y 19:14 armonizados: w62 30-1
Génesis 19:24, ¿apoya la Trinidad?: w82 15/8 31
Génesis 30:14, 15, ¿por qué estuvo dispuesta Raquel a ceder la oportunidad de concebir a
cambio de mandrágoras?: w67 576
Génesis 30:37-43, ¿afecta a su prole lo que la madre experimenta durante el embarazo?: w51
191-2
Génesis 44:5, ¿usó José una copa para leer agüeros?: w66 703
Génesis 49:10, ¿hay diferencia entre un cetro y un bastón de comandante?: w67 62-3
Éxodo 3:1, ¿fue Jetró sacerdote?: w65 384
Éxodo 4:11, ¿puede ser culpado Jehová por los minusválidos?: w53 638-9
Éxodo 4:20, 21 armonizados: w53 607
Éxodo 4:24-26, circuncisión del hijo de Moisés: w75 763-4; w53 607
Éxodo 7:22, ¿qué agua utilizaron los sacerdotes egipcios?: w78 1/8 31-2
Éxodo 12:32, ¿qué quiso decir Faraón?: w65 512
Éxodo 15:8, ―aguas fueron cuajadas‖, ¿es literal?: w59 319
Éxodo 20:5 y Ezequiel 18:20 armonizados: w54 157-8
Éxodo 20:11, ¿qué cielos y Tierra se incluyen en los seis días creativos?: w60 702
Éxodo 20:13, ¿por qué usa ―asesinar‖ en lugar de ―matar‖?: w64 94-5
Éxodo 23:19, ‗no cocer un cabrito en la leche de su madre‘: w65 384
Éxodo 23:20-23, ¿era Jesús el ángel que guiaba a los israelitas?: w64 62-3
Éxodo 23:20-23 y Hebreos 2:2, 3 armonizados: w64 62-3
Éxodo 24:10, Jehová, ¿visto por los hombres?: w51 734
Éxodo 34:27, 28 y Deuteronomio 10:1-4 armonizados: w53 702
Levítico 11:40 y Deuteronomio 14:21 armonizados: w54 479
Levítico 25:11, 12, ¿cómo podían los israelitas comer ‗lo que la tierra produce‘ sin segar
durante el año del Jubileo?: w66 223-4
Levítico 27:28, 29, ¿por qué ninguna cosa dada por entero podía redimirse?: w53 510
Números 5:19-22, ―agua amarga‖, ―que se te decaiga el muslo‖: w55 670
Números 12:1, ¿era cusita Ziporá, la esposa de Moisés?: w58 478
Números 12:3, ¿se proclamó Moisés a sí mismo manso?: w84 1/7 31
Números 25:9 y 1 Corintios 10:8 armonizados: w66 511-12
Números 33:31, 32 y Deuteronomio 10:6 armonizados: w68 223
Deuteronomio 6:8, 9, ¿es literal el ‗atar la ley de Dios sobre su mano‘ o ‗entre los ojos‘?: w73
510-11
Deuteronomio 21:10-13, ¿no contradice los textos que prohibían que los israelitas se casaran
con extranjeros?: w53 30-1
Deuteronomio 23:2, ¿pueden los hijos ilegítimos llegar a ser cristianos?: w74 511-12
Deuteronomio 26:5, ¿por qué se llama sirio a Jacob?: w55 255
Deuteronomio 31:2, Moisés ya no podía ―salir y entrar‖: w79 15/5 31-2
Deuteronomio 32:39 y Juan 1:1 armonizados: w75 351
Deuteronomio 33:6-24, ¿por qué se omitió a Simeón de la bendición de Moisés?: w64 415
Josué 11:6, ¿por qué se le ordenó a Josué desjarretar los caballos?: w63 351
Jueces 14:6, ¿en qué sentido se ‗desgarraba a un cabrito en dos‘?: w85 1/10 31
Jueces 16:28, ¿por qué difiere la Traducción del Nuevo Mundo de otras traducciones?: w62 31
Jueces 20, ¿por qué sufrieron derrota dos veces los israelitas ante la tribu de Benjamín?: w61
447
1 Samuel 13:13, ¿cómo pudo haber sido ‗hecho firme hasta tiempo indefinido‘ el reino de
Saúl?: w64 702-3
1 Samuel 18:10, ―espíritu malo de Dios‖: w65 383-4
1 Samuel 18:19, 2 Samuel 6:23 y 2 Samuel 21:8 armonizados: w63 95-6
1 Samuel 19:12, 13, ¿por qué toleró David que su esposa tuviera un terafim?: w65 383
1 Samuel 19:20-24, ―portarse como profetas‖: w72 574-5
1 Samuel 23:9-12, efod que se usó para inquirir de Jehová: w65 480
1 Samuel 28:6 y 1 Crónicas 10:14 armonizados: w56 543
1 Samuel 31:4 y 2 Samuel 1:10 armonizados: w60 702
2 Samuel 6:23, 21:8 y 1 Samuel 18:19 armonizados: w63 95-6
2 Samuel 11:4, ¿se debió a su ciclo menstrual la inmundicia de Bat-seba?: w74 287
2 Samuel 12:31 y 1 Crónicas 20:3, ¿trató David de manera bárbara a los ammonitas?: w51 223
2 Samuel 24:1 y 1 Crónicas 21:1 armonizados: w52 607
2 Samuel 24:9 y 1 Crónicas 21:5 armonizados: w52 607
1 Reyes 7:14 y 2 Crónicas 2:14 armonizados: w79 1/10 31-2
1 Reyes 7:23-26 y 2 Crónicas 4:2-6 armonizados: w66 543-4; w60 95
1 Reyes 8:12, Jehová reside en ―densas tinieblas‖: w80 1/8 31
1 Reyes 15:14 y 2 Crónicas 14:5 armonizados: w68 159
1 Reyes 15:33 y 2 Crónicas 16:1 armonizados: w56 382
1 Reyes 19:20, respuesta de Elías a Eliseo: w63 350-1
2 Reyes 6:18, 19, ceguera del ejército sirio: w63 671
2 Reyes 6:25, ¿cómo se usaba el ―estiércol de paloma‖?: w70 575-6
2 Reyes 9:27 y 2 Crónicas 22:8, 9 armonizados: w64 61-2
2 Reyes 23:11, que cesaran de entrar los caballos en la casa de Jehová: w59 223
2 Reyes 25:8 y Jeremías 52:12 armonizados: w64 383
1 Crónicas 28:9, ¿figurará Salomón entre los resucitados?: w65 735-6
2 Crónicas 14:3, 5 y 15:17 armonizados: w55 318-19
2 Crónicas 17:6 y 20:33 armonizados: w55 318-19
Job 1:4, ¿celebraban cumpleaños los hijos de Job?: w68 574-5
Job 3:14, reyes que edifican ―lugares desolados‖: w79 1/10 31
Job 14:22, ¿enseña que hay tormento después de la muerte?: w55 575
Job 19:26, ¿verá Job a Dios en la carne?: w61 383-4
Job 28:5, ―fuego‖, ¿se refiere al interior de la Tierra?: w72 128
Job 31:1, ‗pacto con mis ojos‘: w79 15/5 32
Job 38:31, 32, constelaciones: w54 190-1
Salmo 5:4, ¿por qué se le permitió a Satanás permanecer en los cielos tanto tiempo?: w75 191
Salmo 34:7, ¿nos protege Jehová de los desastres naturales?: w63 670-1
Salmo 72:8, ―el Río‖: w66 128
Salmo 78:24, 25, ¿necesitan alimento los ángeles?: w64 127
Salmo 89:19, ‗los que son leales‘: w79 1/10 32
Salmo 90:2, por qué difiere NM: w63 543-4
Salmo 90:10, ¿por qué dice 70 años cuando Moisés vivió 120?: w69 574-5
Salmo 102:25, 26, ¿perecerán los cielos y la Tierra?: w72 95-6
Salmo 104:3, cómo edifica Jehová en ―las aguas mismas‖: w65 542
Salmo 110:1, 5 armonizados: w55 702
Salmo 127:3, por qué dice NM ―vientre‖ en vez de ―matriz‖: w60 319
Proverbios 8:22-31, ¿aplica a Jesús?: w76 31-2
Proverbios 10:6, ‗boca del inicuo‘: w81 15/1 31
Proverbios 11:16, por qué difiere NM: w83 15/11 31
Proverbios 11:29, significado: w66 703-4
Proverbios 14:17, por qué difiere NM: w64 350-1
Proverbios 16:4, ¿hace Jehová que los hombres sean inicuos?: w55 95
Proverbios 19:25, dos métodos de impartir instrucción: w79 15/5 31
Proverbios 25:21, 22, ‗amontonar brasas sobre la cabeza‘: w70 543
Proverbios 26:4, 5 armonizados: w72 575-6; w52 191
Proverbios 27:6, por qué difiere NM: w64 63
Eclesiastés 1:4, ¿significa ―tiempo indefinido‖, para siempre?: w58 542-3; w57 255
Eclesiastés 1:9, ―nada nuevo bajo el sol‖: w56 638-9
Eclesiastés 1:18, ―sabiduría‖: w62 383
Eclesiastés 3:11, ―tiempo indefinido‖ en el corazón de la humanidad: w66 384
Eclesiastés 7:16, 17, no debemos ser ‗justos, ni inicuos en demasía‘: w53 319-20
Eclesiastés 7:28, ‗un hombre entre mil, pero ninguna mujer‘: w53 350
Eclesiastés 9:5, 6, ‗recuerdo de los muertos se ha olvidado‘: w74 95-6
Eclesiastés 10:11, significado: w65 512
Eclesiastés 12:7, espíritu vuelve a Dios: w51 511
Isaías 4:1, escasez de hombres: w52 223-4
Isaías 7:8, profecía sobre Efraín: w72 224
Isaías 7:14, ―doncella‖: w54 606-7
Isaías 7:14, ¿por qué se llama Emmanuel a Jesús?: w70 575; w52 479
Isaías 14:12, ¿tiene alguna aplicación a Satanás el Diablo?: w65 351-2; w58 30-1
Isaías 14:22, ¿cada babilonio individual destruido?: w66 608
Isaías 14:23, por qué difiere NM: w64 734-5
Isaías 14:29, ―culebra abrasadora volante‖: w55 670-1
Isaías 19:18, ―lenguaje de Canaán‖: w70 350
Isaías 21:11, 12, declaración contra Dumá: w75 383-4
Isaías 25:5, ¿alude a la explosión de una bomba atómica?: w57 126-7
Isaías 29:4, significado: w61 703
Isaías 40:22, ¿prueba que la Tierra es redonda?: w68 96
Isaías 45:7, ¿crea Jehová el mal?: w51 543
Isaías 52:14, Jesucristo, ¿era una persona desfigurada?: w67 95
Isaías 53:2, 3, ¿se refiere a la apariencia física de Jesús?: w55 127
Isaías 54:1, ¿quién es la ―mujer que tiene dueño marital‖?: w55 605-6
Isaías 60:3, ¿quiénes son los ―reyes‖?: w63 575-6
Isaías 61:1, 2, ¿constituye una ordenación de las ―otras ovejas‖?: w64 671
Isaías 66:8, ―tierra‖ y ―nación‖: w60 414-16
Isaías 66:23, ¿se observará el sábado en el nuevo sistema de cosas?: w60 575
Jeremías 10:3-5, ¿se refiere a árboles de Navidad?: w51 287-8
Jeremías 22:30, ¿no tuvo hijos Joaquín?: w67 638
Jeremías 25:33 y Ezequiel 39:12 armonizados: w53 222-3
Jeremías 31:22, ―hembra estrechará en derredor a un hombre‖: w62 575
Jeremías 51:39, 57, en vista de esto, ¿habrá una resurrección para los habitantes de
Babilonia?: w66 63-4
Ezequiel 3:18 y Lucas 19:40 armonizados: w54 126-7
Ezequiel 21:21, ―ha mirado en el hígado‖: w66 511; w61 383
Ezequiel 21:25-27, ¿aplica al rey Sedequías?: w71 224
Ezequiel 24:16, 17, ¿está prohibido el duelo por los muertos?: w54 702-3
Ezequiel 29:1-16, Egipto desolado por cuarenta años: w71 543-4
Daniel 2:41-43, pies y dedos de los pies de la imagen: w85 1/7 31
Daniel 4:23, ¿por qué se le pusieron dos ataduras al tronco del árbol?: w80 15/3 31
Daniel 10:13, Miguel, ―uno de los príncipes prominentes‖: w60 383-4
Daniel 11:20, ¿se refiere al decreto de registrarse emitido por César Augusto? (Lu 2:1-7): w61
95-6
Daniel 11:37, ―deseo de las mujeres‖: w60 671
Daniel 12:1, ¿cuándo ha de ponerse de pie Miguel?: w79 15/6 31-2; w74 479-80
Daniel 12:4, ―Muchos discurrirán‖: w64 639
Joel 2:28, significado de la profecía: w71 479
Amós 3:14, ―cuernos del altar ciertamente serán cortados‖: w63 159
Amós 4:1-3, ―vacas de Basán‖: w78 15/2 32
Amós 5:5, ¿por qué ‗no buscar a Betel‘?: w80 1/7 31
Amós 7:9, ―lugares altos de Isaac‖: w55 318-19
Amós 8:9, ¿es literal?: w62 575
Amós 9:13, ―arador realmente alcanzará al cosechador‖: w62 31
Miqueas 4:3, ¿significa que Jehová resuelve los asuntos políticos?: w63 319-20
Habacuc 1:12, por qué difiere NM: w67 255-6
Habacuc 2:5, ¿quién ―ha hecho espaciosa su alma‖?: w80 1/12 31
Habacuc 3:3, ¿es Temán el origen de Dios?: w62 255
Sofonías 2:3, ¿no es segura la vida eterna, ni siquiera para los fieles?: w64 191-2
Sofonías 2:9; puesto que la ciudad de Amman se ha edificado encima del antiguo Ammón,
¿puede decirse que la profecía no se ha cumplido?: w63 31-2
Zacarías 8:19, ¿qué conmemoraban los cuatro diferentes ayunos?: w67 639-40
Zacarías 11:12, 13 y Mateo 27:9, 10, ¿indican que Jesús es Jehová?: w59 607
Zacarías 12:10, ¿son Jehová y Jesús la misma persona?: w53 762
Mateo 1 y Lucas 3, ¿por qué es diferente la genealogía de Jesús?: w62 414
Mateo 2:23, ¿qué profecía predijo que Jesús ‗sería llamado nazareno‘?: w65 96
Mateo 4:1, ¿qué ―espíritu‖ condujo a Jesús para ser tentado?: w81 1/12 31
Mateo 4:24, por qué dice ―epilépticos‖ la Traducción del Nuevo Mundo: w70 31
Mateo 5:5, ―los de genio apacible‖: w63 670; w59 703
Mateo 5:22, ¿qué tres peligros se mencionan?: w54 29-31
Mateo 5:39, ¿cómo armoniza esto con el derecho a la defensa personal?: w56 63
Mateo 5:43, ¿dónde se encuentra el mandamiento de ‗odiar a los enemigos‘?: w68 383-4; w53
734-5
Mateo 6:13, ―no nos metas en tentación‖: w70 478-9
Mateo 6:22, significado de un ojo ―sencillo‖: w82 15/10 31
Mateo 6:27, ¿por qué se aplica la palabra ―codo‖ a la duración de la vida?: w61 639
Mateo 8:11 y 11:11 armonizados: w62 478-80
Mateo 8:22, ¿debemos evitar los funerales?: w53 126-7
Mateo 8:28-32, ¿por qué consintió Jesús en que los demonios entraran en una piara de
cerdos?: w58 94
Mateo 9:15, ¿significa esto que los cristianos deben practicar el ayuno?: w53 542-4
Mateo 9:25, ¿se hizo inmundo Jesús cuando tocó a la niña muerta?: w72 736
Mateo 10:9 y Marcos 6:8, 9 armonizados: w77 544
Mateo 10:23, ¿qué significa: ‗de ninguna manera completarán el circuito de las ciudades hasta
que llegue el Hijo del hombre‘?: w62 510-11
Mateo 10:41, ―galardón de profeta; [...] galardón de justo‖: w66 415-16
Mateo 11:2-6, ¿por qué preguntó Juan si Jesús era el Mesías?: w52 318-19
Mateo 11:11, ¿indica que habrá diferentes rangos en el Reino?: w61 191-2
Mateo 11:16, 17, ‗tocamos la flauta, plañimos, pero no respondieron‘: w74 704
Mateo 12:30 y Marcos 9:39, 40 armonizados: w52 222
Mateo 12:43-45, espíritu inmundo sale y luego vuelve: w52 446-7
Mateo 13:55, ―hermanos‖: w51 287
Mateo 13:58, ¿dependen los milagros de la fe de la persona?: w63 126
Mateo 17:12, 13 y Juan 1:21 armonizados: w56 223
Mateo 17:20, ¿habla de una montaña literal?: w57 190
Mateo 17:21, ¿deben ayunar los cristianos?: w53 542-4
Mateo 17:21, por qué se omite de NM: w66 351-2
Mateo 17:26, ―los hijos están libres de impuestos‖: w67 703-4
Mateo 18:15, ¿cuál es la aplicación correcta?: w55 286-7
Mateo 18:18, ¿está el cielo sujeto a las decisiones de los hombres?: w81 1/7 31
Mateo 19:9, ¿es ―fornicación‖ la palabra correcta?: w52 286
Mateo 19:24, ¿debería ser ―camello‖ o ―soga‖?: w58 510-11
Mateo 19:24, ¿es literal la expresión ‗un camello por el ojo de una aguja‘?: w51 384
Mateo 20:29, Marcos 10:46 y Lucas 18:35 armonizados: w57 158-9
Mateo 22:29, 30, ¿qué deberían haber sabido los saduceos en cuanto a la resurrección?: w61
606-7
Mateo 23:9 y 1 Corintios 4:15 armonizados: w52 764
Mateo 23:35, ¿a qué Zacarías se refiere?: w68 671
Mateo 24:7, ¿eran simbólicos los terremotos mencionados por Jesús?: w64 31-2
Mateo 24:12, ¿tiene cumplimiento en la cristiandad, o entre los Testigos?: w84 1/10 31; w68
287
Mateo 24:15, ―use discernimiento el lector‖: w61 63
Mateo 24:19, ―mujeres encintas‖, ¿dentro o fuera de la congregación?: w63 702-3
Mateo 24:29, ‗señales del cielo‘, ¿ha de tomarse literalmente?: w62 639
Mateo 24:30, ―verán al Hijo del hombre‖: w61 319
Mateo 24:34, ―esta generación‖: w08 15/2 pág. 24 párr. 15
Mateo 26:52, ¿se han cumplido las palabras de Jesús?: w55 62-3
Mateo 26:74, ¿usó Pedro lenguaje irreverente?: w82 15/3 31
Mateo 27:9, ¿por qué se le atribuyen las palabras a Jeremías en vez de a Zacarías?: w56 126
Mateo 27:19, sueño de la esposa de Pilato: w65 416
Mateo 27:44 y Lucas 23:39 armonizados: w51 127
Mateo 27:46, ¿en qué sentido fue Jesús desamparado por Dios?: w72 607; w58 762; w51 351
Mateo 27:52, 53: w76 287-8
Mateo 28:9, ¿adoraron en realidad a Jesús, como dice la versión del Rey Jaime?: w65 127-8
Mateo 28:19 y Efesios 4:5, ¿es el mismo bautismo?: w69 351-2
Marcos 6:52, ―significado de los panes‖: w81 1/2 31
Marcos 7:19, ―limpios todos los alimentos‖: w78 15/11 31
Marcos 10:17, 18, ‗nadie es bueno sino Dios‘: w51 638-9
Marcos 10:46, Mateo 20:29 y Lucas 18:35 armonizados: w57 158-9
Marcos 15:25 y Juan 19:14 armonizados: w52 158
Marcos 15:33, ¿ocurrió la oscuridad como consecuencia de un eclipse de Sol?: w66 95-6
Lucas 1:5-26, nos ayuda a determinar la fecha del nacimiento de Jesús: w54 637-9
Lucas 2:8, fotografía de un periódico en la cual aparecían pastores en el campo durante la
Navidad: w70 382-3; w58 94-5
Lucas 2:22, ¿Jesús purificado?: w82 1/10 31
Lucas 2:35, palabras proféticas de Simeón a María: w66 479
Lucas 2:39, ¿estaba el niño Jesús en Nazaret cuando sus padres huyeron a Egipto?: w52 511-
12
Lucas 4:29, ¿da a entender que los judíos querían apedrear a Jesús?: w56 127
Lucas 10:1, ¿había 70, ó 72 discípulos?: w77 127-8
Lucas 10:18, ¿había sido echado ya del cielo Satanás?: w66 735-6
Lucas 11:2, ¿por qué omite NM parte de la oración?: w59 575
Lucas 12:25, ¿por qué se usa ―codo‖ para describir la duración de la vida?: w61 639
Lucas 13:33, ¿por qué ―no es admisible que un profeta sea destruido fuera de Jerusalén‖?: w70
415-16
Lucas 14:23, ―oblígalos‖: w61 351
Lucas 14:26, ―odia a su padre y madre‖: w52 510
Lucas 16:9, ―riquezas injustas‖, ¿significa que la falta de honradez no es mala?: w73 511-12
Lucas 18:25, ¿es literal la expresión ‗un camello por el ojo de una aguja‘?: w51 384
Lucas 20:34-36, ¿resurrección terrenal, o celestial?: w68 350-2
Lucas 21:25, 26, ‗señales en el cielo‘, ¿hemos de tomarlas literalmente?: w62 639
Lucas 22:30, los que ‗se sientan sobre tronos‘ y ―las doce tribus de Israel‖: w64 510-11
Lucas 22:37, ―desaforados‖: w67 638-9
Lucas 22:44, sudor de Jesús como sangre: w53 382
Lucas 23:34, ¿es espuria una parte del texto?: w63 605-6
Lucas 23:43, ¿por qué aparecen dos puntos después de ―hoy‖ en NM?: w71 606-8
Lucas 24:37-43, ¿se materializó Jesús?: w62 478
Juan 1:1, ―un dios‖: w77 670; w76 318-20
Juan 1:18, ¿por qué dice NM ―dios unigénito‖?: w62 671
Juan 2:4, ¿mostró Jesús falta de respeto a su madre?: w70 543-4
Juan 2:19, ¿no indica que Jesús se resucitaría a sí mismo?: w73 575-6
Juan 2:20, ¿templo edificado en 46 días?: w77 159-60
Juan 3:13, ¿por qué omite NM la frase ―que está en el cielo‖?: w83 1/5 31
Juan 3:13, ¿significa que Jesús experimentó ascensiones previas?: w59 447
Juan 3:16, 17, ―mundo‖: w59 733-6
Juan 5:14, ¿enfermamos debido a que hemos pecado?: w83 1/9 31
Juan 5:28, por qué NM emplea la expresión ―tumbas conmemorativas‖ en vez de ―tumbas‖: w65
575-6; w59 287
Juan 7:22, ¿no debería estar la frase ―por esto‖ al final del versículo 21?: w53 670-1
Juan 7:39, ―porque aún no había espíritu‖: w70 63-4
Juan 8:58, ¿por qué dice NM ―yo he sido‖ en vez de ―yo soy‖?: w57 734-5
Juan 9:1-3, ¿prueba la existencia prehumana o la predestinación?: w53 510-11
Juan 9:4, ―noche‖, ¿se refiere al Armagedón?: w55 350-1
Juan 11:16, ―Vamos nosotros también, para que muramos con él‖: w64 703-4
Juan 11:26, ―no morirá jamás‖: w67 479
Juan 13:4-16, ¿es el lavamiento de los pies una ceremonia para los cristianos?: w51 31
Juan 13:36 y 16:5 armonizados: w78 15/10 31-2
Juan 14:12, ―obras mayores que estas‖: w54 348
Juan 14:30, ―no hablaré mucho [...] el gobernante del mundo viene‖: w62 383
Juan 15:15, en vista de esto, ¿por qué hablamos de los cristianos como esclavos de Cristo?:
w52 543-4
Juan 17:17, ¿aplica a las Escrituras Hebreas?: w68 414-15
Juan 18:37, respuesta de Jesús a Pilato: w63 639
Juan 19:37, ¿son Jehová y Jesús la misma persona?: w53 762
Juan 20:17, ¿por qué después de su resurrección le dijo Jesús a María Magdalena que no se
colgara de él?: w69 127-8; w51 31
Juan 20:23, ¿están algunos humanos autorizados para perdonar pecados?: w69 479-80
Juan 20:25, ¿fue Jesús colgado con un clavo en cada mano?: w70 447-8
Juan 20:28, ¿demuestra que Jesús es Dios?: w56 94-5
Juan 21:22, significado: w62 255
Hechos 1:8, ¿por qué predicar en Samaria?: w71 639-40
Hechos 2:38, ¿el bautismo en el nombre de Jesús borra los pecados?: w58 126
Hechos 6:3, ―varones acreditados‖: w66 127-8
Hechos 6:15, rostro de Esteban ―como el rostro de un ángel‖: w65 32
Hechos 7:59, ¿significa la oración hecha a Jesús que existe una Trinidad?: w59 479
Hechos 11:8, ¿todavía se adhería Pedro a la ley mosaica?: w63 606-7
Hechos 12:15, ¿tenía Pedro un ángel de la guarda?: w76 607-8
Hechos 13:2, ¿significa que el ayuno es obligatorio para los cristianos?: w53 542-4
Hechos 14:14, ¿por qué se llama ―apóstol‖ a Bernabé?: w54 95
Hechos 15:20, 29 y 1 Corintios 8:1-10 armonizados: w52 382
Hechos 21:20-26, ¿por qué efectuó Pablo ceremonias en el templo?: w52 702-3
Hechos 23:1-5, de acuerdo con esto, ¿son apropiadas las denunciaciones que hace La Atalaya
concernientes a los gobernantes de la cristiandad?: w60 447
Hechos 23:6, ¿por qué alegó Pablo ser fariseo?: w65 736; w54 670-1
Hechos 24:15, ‗resurrección de inicuos‘: w51 255
Romanos 1:25, ¿a quién se refiere?: w83 1/5 31
Romanos 6:7, ¿serán todavía imperfectos los resucitados?: w75 127-8
Romanos 7:5-8, ¿introdujo el pecado la ley mosaica?: w72 639-40
Romanos 7:9, ¿cómo vivió Pablo antes de que la Ley ‗llegara‘?: w55 702-3
Romanos 8:19, ¿cuándo acontece la ―revelación de los hijos de Dios‖?: w81 1/8 31
Romanos 8:26, 27, ¿cómo aboga el espíritu santo de Dios por los santos?: w71 159-60
Romanos 8:30, ¿cuándo son ‗glorificados‘ los cristianos?: w81 1/12 30-1
Romanos 8:39, ―ni altura, ni profundidad‖: w60 383
Romanos 10:12, ¿quién es ―Señor‖?: w77 288
Romanos 10:18, ¿por qué se aplica Salmo 19:4 a los humanos?: w59 763-4
Romanos 11:26, ¿se convertirán todos los judíos?: w75 478-80
1 Corintios 1:12, alegación de los corintios de ‗pertenecer a Cefas‘: w80 1/8 30-1
1 Corintios 1:17, ¿bautizó Pablo a creyentes?: w68 735-6
1 Corintios 2:9, ¿cita apócrifa?: w79 1/8 32
1 Corintios 3:21, ―todas las cosas les pertenecen a ustedes‖: w72 670-1
1 Corintios 6:3, ¿juzgarán los cristianos a ángeles?: w80 1/6 30-1
1 Corintios 6:18, ¿el que practica la fornicación peca contra su propio cuerpo?: w71 62-4
1 Corintios 7:1, ―hombre no toque mujer‖: w73 415-16
1 Corintios 7:14, hijos considerados como ―santos‖: w76 763-4
1 Corintios 7:14, ¿será salvado el esposo incrédulo en Armagedón?: w52 762-3
1 Corintios 7:29, esposos ―como si no tuvieran‖ esposas: w75 575-6
1 Corintios 7:36, ―pasado la flor de la juventud‖: w75 415-16
l Corintios 7:36-38, ―su propia virginidad‖: w82 1/8 31
1 Corintios 9:17, ―galardón‖: w80 15/6 31
1 Corintios 10:4, israelitas ―bebían de la masa rocosa espiritual que los seguía‖: w69 222-3
1 Corintios 10:13, ―tentación‖ y ―la salida‖: w74 415-16
1 Corintios 11:14, 15, ¿es el cabello largo una deshonra para los hombres?: w68 479-80
1 Corintios 11:18, 19, sectas entre los corintios: w81 15/2 29
1 Corintios 11:29, ―el cuerpo‖: w61 63
1 Corintios 13:8, ¿será ‗eliminado el conocimiento‘?: w69 703
1 Corintios 13:10, ―lo que es completo‖: w75 414-15
1 Corintios 14:2, ‗el que habla en una lengua habla a Dios‘: w61 735-6
1 Corintios 14:36, significado: w83 1/8 31
1 Corintios 15:19, ¿en qué sentido ―dignos de lástima‖ si ‗solo en esta vida se ha esperado en
Cristo‘?: w84 1/10 30-1
1 Corintios 15:22, ―todos serán vivificados‖, ¿incluye a Adán?: w51 127
1 Corintios 15:26, ―último enemigo‖, ¿la muerte, o Satanás?: w65 606-7
1 Corintios 15:32, ¿luchó Pablo con bestias salvajes literalmente?: w56 446-7
2 Corintios 2:15, 16, ¿cristianos un ―olor‖?: w78 15/1 32
2 Corintios 5:16, ¿prueba que Jesús no regresaría en la carne?: w67 479-80
2 Corintios 6:7, ―armas de la justicia‖: w73 479
2 Corintios 12:2, 4, ―tercer cielo‖ y ―paraíso‖: w71 415-16
Gálatas 2:19, ¿cómo ‗murió Pablo tocante a ley‘?: w80 15/4 31
Gálatas 3:17, ¿430 años entre el pacto abrahámico y el de la Ley?: w53 415
Gálatas 3:24, ‗ley es un tutor que conduce a Cristo‘: w72 415-16
Gálatas 4:3, ―cosas elementales que pertenecen al mundo‖: w72 573-4
Gálatas 4:15, ¿se refiere a los trasplantes?: w73 671
Gálatas 4:25, ¿en qué sentido estaba Jerusalén ―en esclavitud‖?: w85 15/9 31
Gálatas 5:19, significado de ―conducta relajada‖: w74 126-7
Gálatas 6:12-15, ¿por qué circuncidó Pablo a Timoteo, en vista de?: w52 703-4
Efesios 3:10, ¿cómo aprenden los ángeles por medio de la congregación?: w63 414-15
Efesios 3:14, 15, ¿hay ‗familias en el cielo‘? ¿son los nombres de familias terrestres dados por
Dios?: w62 671
Efesios 4:5 y Mateo 28:19, ¿es el mismo bautismo?: w69 351-2
Efesios 4:6, Dios ―sobre todos y por todos y en todos‖: w71 543
Efesios 4:23, ―fuerza que impulsa su mente‖: w72 31-2
Efesios 5:3, ¿es incorrecto hablar o escribir acerca de la fornicación?: w67 159-60
Efesios 5:13, ¿por qué cambió en 1961 la edición del NM?: w63 478-9
Filipenses 2:9, ‗nombre por encima de todo otro nombre‘: w83 1/6 31
Filipenses 2:10, ―los [que están] debajo del suelo‖: w62 31
Filipenses 2:11, ¿por qué no se vierte kyrios como Jehová en NM?: w62 445-7
Filipenses 3:11, ―resurrección más temprana‖: w63 287-8
Colosenses 1:16, ―autoridades‖, ¿son las mismas que en Romanos 13:1?: w63 671
Colosenses 2:8, ―cosas elementales‖: w72 573-4; w60 702-3
Colosenses 2:9, ―plenitud de la cualidad divina‖: w63 159-60; w52 30
1 Tesalonicenses 4:17, ―arrebatados‖: w75 222-4; w64 511-12
2 Tesalonicenses 3:6, ¿por qué dice NM ―tradición‖?: w61 639-40
2 Tesalonicenses 3:14, 15, ‗señalar‘: w85 15/4 30-1; w82 15/6 31; w74 30-2
2 Tesalonicenses 3:14, 15, ¿se refiere a la expulsión?: w65 671-2
1 Timoteo 2:9, 10, adorno de las mujeres: w62 159-60
1 Timoteo 2:15, ‗las mujeres se mantendrán en seguridad mediante tener hijos‘: w69 575-6;
w51 415-16
1 Timoteo 3:2, por qué un anciano debe ser ―esposo de una sola mujer‖: w81 15/2 29-30
1 Timoteo 4:10, ¿se salvarán algunos infieles?: w84 15/7 31
1 Timoteo 4:12, ¿qué edad tenía Timoteo?: w64 95-6
1 Timoteo 5:11, 12, ¿son infieles las viudas jóvenes que se casan?: w55 414-15
1 Timoteo 6:16, ―el único que tiene inmortalidad‖: w79 1/5 31
2 Timoteo 1:9, ―antes de tiempos de larga duración‖: w72 383-4
2 Timoteo 3:1-7, ―últimos días‖, ¿tuvieron cumplimiento inicial?: w76 704
2 Timoteo 3:6, 7, ¿quiénes son hombres y mujeres?: w73 31-2
Tito 2:13, traducción correcta: w81 1/10 31
Tito 3:5, ―el baño que nos trajo a la vida‖: w73 95-6
Hebreos 1:6, ¿adoraron a Jesús los ángeles?: w71 286-8; w54 573-5
Hebreos 1:6, ¿alude a la segunda venida de Jesús?: w83 1/9 31
Hebreos 1:7, ―hace a sus ángeles espíritus [...] una llama de fuego‖: w84 15/3 31
Hebreos 1:10-12, ¿perecerán los cielos y la Tierra?: w72 95-6; w52 255-6
Hebreos 2:14, ¿tiene el Diablo ―el medio para causar la muerte‖?: w57 606
Hebreos 4:15, Jesús probado: w80 1/2 31-2
Hebreos 8:13, ¿se refiere al fin del sistema judío?: w84 15/1 31
Hebreos 9:10, ―diversos bautismos‖: w78 1/10 31
Hebreos 9:14, ―espíritu eterno‖: w70 763-4
Hebreos 10:24-29, ¿es un pecado imperdonable faltar a las reuniones?: w81 15/11 31
Hebreos 10:26, en vista de esto, ¿habrá resurrección para los cristianos que apostatan de la
adoración verdadera y mueren antes del fin?: w66 31
Hebreos 11:1, conexión entre la ―fe‖ y la ―demostración evidente‖: w62 30
Hebreos 11:26, ¿aplica a Moisés, puesto que no era ungido?: w64 543
Hebreos 11:35, ―resurrección mejor‖: w51 127-8
Hebreos 12:13, ¿en qué sentido ‗lo cojo no sea descoyuntado‘?: w58 127
Hebreos 12:22, 23, ¿quiénes son los ―justos que han sido perfeccionados‖?: w81 15/3 30-1
Santiago 1:12, ―corona de la vida‖: w79 1/11 31-2
Santiago 3:1, ‗no muchos deberían hacerse maestros‘: w59 383
Santiago 4:5, ―con tendencia hacia la envidia‖: w78 1/1 31-2
Santiago 5:6, ―han asesinado al justo‖: w72 542-4
1 Pedro 3:3, 4, adorno de las mujeres: w62 159-60
1 Pedro 3:19, ―espíritus en prisión‖: w72 63-4
2 Pedro 1:20, ―interpretación privada‖: w66 159
2 Pedro 3:6, ¿por qué se refiere al fin del kosmos?: w65 287
2 Pedro 3:10, ¿cielos y Tierra perecerán?: w72 287-8; w54 735
1 Juan 2:7, ‗viejo‘ y ‗nuevo mandamiento‘: w71 671-2
1 Juan 3:18, ¿cómo amar ―en hecho y verdad‖?: w51 63
1 Juan 4:18, ―amor perfecto echa fuera el temor‖: w71 95-6
1 Juan 5:18, significado: w71 127-8
2 Juan 10, ¿aplica únicamente a promotores de doctrinas falsas?: w85 15/7 30-1
Revelación 1:7, presencia de Cristo, ¿visible?: w53 702-3
Revelación 2:17, ―nombre nuevo‖: w58 318-19
Revelación 3:15, 16, ―caliente‖ y ―frío‖: w66 607-8
Revelación 4:5, ¿por qué siete lámparas en vista de 1 Reyes 7:49?: w60 319-20
Revelación 5:10, ¿por qué vierte NM ―sobre‖ en vez de ―en‖?: w75 447-8; w61 31
Revelación 7:4-8, ¿por qué se omiten Efraín y Dan?: w62 223
Revelación 7:17, ¿se cumple hoy día la frase ‗no habrá más lágrimas‘?: w83 15/5 31
Revelación 11:8, ―Sodoma y Egipto‖: w78 15/6 31-2
Revelación 12:4, ―la tercera parte de las estrellas‖: w64 415
Revelación 12:14, ―un tiempo y tiempos y medio tiempo‖: w78 15/9 31-2
Revelación 13:1, ¿quién está de pie en la orilla del mar?: w58 447
Revelación 13:18, número de la bestia salvaje: w57 158
Revelación 14:3, ¿quiénes son los ―ancianos‖ mencionados aquí?: w73 478-9; w56 701-3
Revelación 14:6, 8, 9, ¿simboliza el ‗ángel‘ a la clase del ―esclavo fiel y discreto‖?: w64 543
Revelación 16:13, ¿qué son ‗las expresiones inmundas‘, y quiénes son el ‗dragón, la bestia
salvaje y el falso profeta‘?: w56 158
Revelación 19:7, bodas del Cordero, ¿qué son y cuándo tienen lugar?: w67 63-4
Revelación 19:10, dar testimonio de Jesús es lo que inspira el profetizar: w71 671
Revelación 19:21, ―los demás‖: w80 1/1 31-2
Revelación 20:5, ¿resurrección después del milenio?: w83 15/6 31; w74 607-8; w51 95
Revelación 20:8, ―como la arena del mar‖: w58 190
Revelación 20:10, ―atormentados‖: w51 607
Revelación 20:12, ―rollo de la vida‖: w60 31-2
Revelación 21:4, ‗no habrá muerte‘, ¿aplica también a los animales?: w51 159
Revelación 22:13, ‗Alfa y Omega‘, ¿Jehová, o Jesucristo?: w53 287