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SERGIO AGUAYO QUEZADA

VS.
PRIMITIVO RODRÍGUEZ OCEGUERA
JUICIO ORDINARIO CIVIL
DAÑO MORAL

C. JUEZ DE LO CIVIL EN TURNO, EN EL DISTRITO FEDERAL.


P r e s e n t e.

SERGIO AGUAYO QUEZADA, por mi propio derecho, señalando como domicilio


para oír y recibir notificaciones, el ubicado en Bosque de Duraznos número 69,
torre B, oficina 1005, colonia Bosques de las Lomas, Delegación Miguel Hidalgo,
C. P. 11700, en México, Distrito Federal, autorizando en los términos del cuarto
párrafo del artículo 112 del Código de Procedimientos Civiles para el Distrito
Federal, a los señores licenciados en derecho Rodolfo Vidal Gómez Alcalá, con
cédula profesional expedida por la Dirección General de Profesiones de la
Secretaría de Educación Pública número 1147048, Graciela Rodríguez Manzo,
con cédula profesional expedida por la Dirección General de Profesiones de la
Secretaría de Educación Pública número 4095848 y Luis Miguel Cano López, con
cédula profesional expedida por la Dirección General de Profesiones de la
Secretaría de Educación Pública número 4095847, así como autorizando
simplemente para oír notificaciones y recoger toda clase de documentos, a los
señores Raúl Bragi Sánchez Jiménez, Miguel Cortés Torres, Israel Alberto
Hernández y Jorge Alberto Morales Ramírez, siendo indiferente que lo hagan de
forma conjunta o separada, ante Usted, respetuosamente comparezco para
exponer:

Que por medio de este escrito, en la VÍA ORDINARIA CIVIL y en ejercicio de la


acción personal que me corresponde para la reclamación de la reparación del
DAÑO MORAL del que he sido sujeto, que previene el artículo 25 del Código de
Procedimientos Civiles para el Distrito Federal, y con fundamento en los artículos
1910, 1912, 1916 y 1916 BIS y demás relativos del Código Civil para el Distrito
Federal, así como los artículos 255, 256 y demás relativos del Código de
Procedimientos Civiles para el Distrito Federal, los artículos sexto y séptimo de la
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, y los artículos 12 de la
Declaración Universal de Derechos Humanos, 17 del Pacto Internacional de
Derechos Civiles y Políticos, V de la Declaración Americana de los Derechos y
Deberes del Hombre, y 11 de la Convención Americana sobre Derechos
Humanos, así como los artículos 1, 4 y demás relativos a la Ley de Imprenta,
vengo a demandar de PRIMITIVO RODRÍGUEZ OCEGUERA, quien tiene como
domicilio el ubicado en Tehuantepec número 247, departamento 201, colonia
Roma Sur, Delegación Cuauhtémoc, en México, Distrito Federal, y cuyo
teléfono es el 55 74 08 31, el cumplimiento de las siguientes:

P R E S T A C I O N E S

I.- La declaratoria judicial de que la parte demandada, señor PRIMITIVO


RODRÍGUEZ OCEGUERA, ha causado a la parte actora, SERGIO AGUAYO
QUEZADA, un daño moral, por la afectación a mi derecho al honor, mi reputación,
así como la consideración que de mí tienen las demás personas, por los hechos y
consideraciones que se exponen en la presente demanda, en atención a que
ejercitó su libertad de expresión y su derecho a la información en forma ilícita.

II.- Con motivo de la declaratoria que se solicita en el numeral anterior, la


publicación, a través de los medios informativos que su Señoría considere
convenientes, acorde a lo ordenado en la parte final del último párrafo del artículo
1916 del Código Civil para el Distrito Federal, de los extractos de la sentencia que
reflejen adecuadamente la naturaleza y alcance de la decisión que se adopte en
este juicio, en el que se deberá declarar que la parte demandada, señor
PRIMITIVO RODRÍGUEZ OCEGUERA, ha ejercido su libertad de expresión y su
derecho a la información de forma abusiva e ilícita afectando con ello mi derecho
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al honor, así como mi reputación y la consideración que de mí tienen las demás


personas, provocándome un daño moral.

III.- Como consecuencia de las prestaciones anteriores, el pago de la


indemnización, para reparar el daño moral que se ha causado a la parte actora,
derivado de la afectación que de manera ilícita se ha presentado en detrimento de
mi derecho al honor, así como mi reputación y la consideración que de mí tienen
las demás personas, la cual deberá fijar su Señoría considerando la lesión de que
he sido objeto en mis derechos, el grado de responsabilidad de la parte
demandada, su situación económica, la de la parte demandante, así como las
demás circunstancias que se actualizan en este caso.

IV.- El pago de los gastos y costas que se originen por el presente procedimiento.

El cumplimiento de estas prestaciones y la decisión que en su momento deberá


adoptarse por su Señoría encuentran su sustento en los siguientes:

H E C H O S

1.- Quien suscribe esta demanda es SERGIO AGUAYO QUEZADA. Nací en


Jalisco y en 1971 obtuve una beca para venirme a estudiar la licenciatura en
relaciones internacionales en El Colegio de México. La terminé y también becado
hice estudios de posgrado en el exterior. Cuando regresé al país en 1977 fui
contratado por el Centro de Estudios Internacionales de El Colegio de México
como profesor-investigador, cargo que sigo ocupando hasta la fecha. He llevado
la vida de un académico que imparte clases y conferencias, escribe libros y
artículos académicos y dirige tesis. He tenido reconocimiento en este terreno. Al
mismo tiempo empecé a escribir columnas para periódicos. Lo hice en La Jornada
desde su fundación en 1984 hasta 1996 cuando empecé a publicar en el diario
Reforma. También doy mis opiniones en radio y televisión y en el Canal Once del
Instituto Politécnico Nacional participo en un programa de análisis denominado
Primer Plano. Simultáneamente me involucré en la defensa de los derechos
humanos y he participado en numerosos organismos civiles. Entre otros, la
Academia Mexicana de los Derechos Humanos de la cual fui presidente y Alianza
Cívica en la cual participé como integrante de su Coordinación Nacional entre
1994 y 1999. Los hechos anteriores les constan a las instituciones mencionadas.

En este tipo de actividades influye mucho el prestigio y reputación que se tenga.


Mi trabajo serviría de muy poco si existiesen dudas sobre la independencia,
autonomía y objetividad que tiene mi actuación. Así, resulta evidente que mi
trabajo depende de la opinión que tenga el público que conozca de mis
actividades. Pero la decisión de presentar esta demanda tiene que ver sobre todo
con mi dignidad. Si recurro a la protección de la ley es por ser el único camino
que me queda para protegerme de acusaciones falsas, ofensivas y maliciosas.

Esta decisión ha implicado para mí una profunda reflexión, pues evidentemente


estimo que la libertad de expresión y el derecho a la información son dos derechos
humanos de la mayor trascendencia, no sólo porque protegen intereses
individuales sino por su valor como garantías institucionales en un régimen
democrático. En efecto, la libertad de expresión y el derecho a la información
permiten que las personas expresen las opiniones, así como que busquen y
reciban la información, que en conjunto contribuirá a generar un debate y
deliberación públicos que a su vez ayudarán a la formación de una opinión pública
necesaria para fomentar el avance democrático de la sociedad de que se trate.

Sin embargo, no obstante su importancia, ni la libertad de expresión ni el derecho


a la información son derechos absolutos. Existen otros derechos de terceras
personas que el titular de aquella libertad y aquel derecho han de respetar al
ejercerlos, derechos como el que todo individuo tiene a su vida privada, a su
propia imagen o, como sucede en el presente caso, a su honor. Es por ello que si
se ejercen abusivamente la libertad de expresión y el derecho a la información, sin
respetar sus debidas restricciones, generan responsabilidades ulteriores para sus
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titulares, pues los demás no deben soportar que se tomen de pretexto para
provocarles una afectación que se base en acusaciones ofensivas y falsas.

Al ponderar estas situaciones, me he decidido a iniciar este procedimiento, no sólo


porque requiero de la protección de la ley en mi caso concreto, sino también
porque estimo que en nuestro ordenamiento jurídico faltan pronunciamientos
judiciales que resuelvan el enfrentamiento que surge entre la libertad de expresión
y el derecho a la información, cuando se topan con el derecho al honor, definiendo
las fronteras de esos tres derechos. Esas decisiones son indispensables para
asegurar a las personas que ejercemos correctamente esas libertades de
comunicación, la seguridad de que no se nos acusará de un abuso únicamente
para impedir nuestro análisis cotidiano, pero de igual forma, son necesarias para
fomentar un sentido de la responsabilidad que permita ejercerlas con el debido
respeto por los derechos de los demás, pues, como acontece en mi caso, ninguna
persona debe sufrir ataques ilícitos provenientes de alguien que pretende encubrir
acusaciones ofensivas, falsas y maliciosas, en el ejercicio de aquellos derechos.

2.- Hace diez años jamás hubiera imaginado que terminaría demandando al señor
PRIMITIVO RODRÍGUEZ OCEGUERA. El me conoció a principios de los años
setenta en El Colegio de México. Él estudiaba el doctorado en historia, yo la
licenciatura en relaciones internacionales. Nos hicimos grandes amigos porque
veníamos de la misma región –él de Michoacán y yo de Jalisco– y porque
compartíamos ideas. Tan grande era la amistad que la parte demandada aceptó
ser el padrino de mi hija primogénita Cristina Aguayo Mazzucato en 1975.

Lo anterior le consta a la propia parte demandada y se prueba con la constancia


de fe de bautismo de mi hija, la cual se acompaña como anexo 1 a este escrito.

Como sea, él dejó El Colegio de México y se fue a la Universidad de Chicago a


hacer el doctorado. Se quedó en los Estados Unidos de América a defender los
derechos de los migrantes en una organización muy conocida, El Comité de los
Amigos. Yo inicié mi carrera académica en El Colegio de México y mis actividades
en defensa de refugiados guatemaltecos y otros grupos vulnerables. Nos veíamos
ocasionalmente pero con afecto. En 1993 era presidente de la Academia
Mexicana de Derechos Humanos y lo invité a regresar a México como director de
la misma. Lo hizo y participó en Alianza Cívica, de hecho fue integrante de su
Coordinación en el Distrito Federal. En esa época nunca expresó ninguna
objeción verbal o escrita al origen de los fondos recibidos por Alianza Cívica,
organización en la que participó activamente.

Años después empezó a criticar el financiamiento que Alianza Cívica y otras


organizaciones habían recibido de la Fundación Nacional para la Democracia,
como se acreditará en los hechos siguientes. Inicialmente lo hizo en privado y
después lo empezó a difundir por todos los medios impresos a su alcance. No
obtuvo las respuestas que esperaba y exigía y por motivos sobre los cuales podría
especular pero que sólo él conoce se obsesionó conmigo. Como se evidenciará
con esos hechos sucesivos la parte demandada tiene frente al suscrito un
resentimiento y animadversión que lo han llevado a falsear la realidad y afectarme
en mi honor, mi reputación y en la consideración que los demás guardan de mí, al
lanzarme acusaciones gravísimas, expresadas de una manera ofensiva, y por
medio de la cuales una y otra vez me acusa sin evidencia alguna y falseando los
hechos de ser un agente de los servicios de inteligencia estadounidenses, es decir
de la Agencia Central de Inteligencia de ese país, la CIA por sus siglas en inglés, e
instrumento de la política exterior de los Estados Unidos de América.

3.- PRIMITIVO RODRÍGUEZ OCEGUERA ha tenido diversos trabajos desde que


dejó voluntariamente la Dirección de la Academia Mexicana de Derechos
Humanos. Por su conocimiento sobre la migración se ha desempeñado como
asesor externo de la presidencia de la República durante el sexenio de Ernesto
Zedillo y durante el gobierno de Vicente Fox ha trabajado en el DIF nacional y en
la Secretaría de Relaciones Exteriores. También ha escrito columnas en los
diarios “La Jornada” y “Reforma” y participa en al menos una organización que
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defiende los derechos políticos de los migrantes. Aunque carezco de información


sobre sus actividades actuales, ha de tener los recursos para vivir holgadamente,
lo que no impide que desde este momento se solicite a su Señoría para que
requiera a la parte demandada que informe los ingresos que ha percibido en los
últimos cinco años, así como las distintas actividades laborales que ha
desempeñado, con el propósito de que se pueda determinar, en el momento
oportuno, la reparación correspondiente que se reclama en este procedimiento.

4.- El suscrito, dirigí una carta al diario “La Jornada”, misma que fue publicada el 8
de junio de 1994, bajo el título “Los temores de Washington”, la cual se acompaña
a la presente demanda como anexo 2.

5.- La carta que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:

“LA JORNADA Miércoles 8 de junio de 1994.

Los temores de Washington

por Sergio Aguayo

Washington, D.C. Una columna de opinión publicada el viernes pasado en el


Wall Street Journal muestra algunas de las facetas de la complicada relación
que hay entre la transición política mexicana y los actores internacionales.

El viernes 3 de junio el Wall Street Journal publicó un artículo (“Observing


the Mexican Elections Observers”) de Delal Baer, una académica con acceso
a los altos círculos del poder mexicano y estadounidense, y que dirige el
programa sobre México del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales
de esta capital.

En su colaboración Delal Baer hizo una crítica directa a Alianza Cívica, la


coalición de organizaciones sociales que está organizando una observación
integral de las elecciones de agosto. La estadounidense aseguró que la
Alianza tiene una “fuerte tendencia a favor del (populista) Partidos de la
Revolución Democrática” y para demostrarlo cita los nombres de algunos
miembros de organizaciones asociadas a la Alianza Cívica que son candidatos
del PRD a puestos de elección popular. La acusación es grave porque la
Alianza fue creada para observar las elecciones y si se demostrara que está
cargada a favor de un partido sería normal poner en duda su imparcialidad.

Las afirmaciones no tienen fundamento porque también hay candidatos de


otros partidos que pertenecen a alguna de las organizaciones que integran
Alianza y porque se está teniendo un cuidado especial en que quienes
compiten por un puesto no participen en la observación.

En el curso de una fascinante conferencia sobre México, que se realizó el


lunes pasado en esta ciudad refuté públicamente la tesis de Delal. Di cifras y
nombres para demostrar la permanente búsqueda de la pluralidad en la
Alianza donde participan simpatizantes de todos los partidos, pero en donde la
mayoría son ciudadanos alejados de la vida partidaria.

También me refería a la evidente necesidad de garantizar la imparcialidad y


el profesionalismo de una organización de observadores que dará una opinión
sobre la confiabilidad de las elecciones. Que esta organización ciudadana
tiene credibilidad en algunos círculos, lo demuestra el acuerdo en principio al
que llegó con la Organización de las Naciones Unidas para recibir asesoría
técnica y apoyo financiero. Sin embargo, dados los retos tan grandes que
plantea la elección de agosto es indudable la necesidad de extremar el
cuidado.

Conocidos estos hechos sobre Alianza Cívica una pregunta que recorre los
círculos de Washington interesados en México es la razón para el ataque tan
directo de la academia estadounidense. Hay diversas versiones. Algunos
hablan con complicidades con poderosos mexicanos; otros de fobias
anticardenistas. También se dice que fue un acto bien intencionado que
estuvo mal fundamentado y que incurrió en el error de no checar su
información con los aludidos. En abono de esta última tesis estaría una cita del
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artículo donde Delal Baer dice que –“todavía hay tiempo para que la Alianza
practique lo que predica buscado que en sus filas se de un paralelismo real y
una tolerancia ideológica”. El comentario podrá ser de buena fé, pero supone
que Alianza no es plural ni tolerante y está perneando de ese paternalismo de
aquellos estadounidenses que sólo entienden y aprueban lo que es idéntico a
lo suyo.

En mi opinión el artículo refleja los temores –algunos de ellos inconscientes-


que tienen algunos estadounidenses por los acontecimientos mexicanos.
Saben que debe haber cambios pero les aterra la posibilidad de que eso
suceda porque pueden verse afectados sus intereses. Ante la duda se inclinan
por descalificar lo nuevo, y Alianza es un actor nuevo ante el cual se reacciona
descalificando.

Para seguir adelante con la historia hace falta algunos antecedentes que
tienen que ver con el origen de los recursos de Alianza Cívica, un tema
frecuentemente invocado.

A reserva de que esta organización (a la que pertenezco) presente a la


opinión pública un informe detallado sobre sus finanzas adelanto algunos
aspectos. La observación que está haciendo Alianza tiene un costo muy alto
pero lo que no se toma en cuenta es que entre el 80 y 90 por ciento proviene
del trabajo voluntario y de lo que aportan las diversas organizaciones que la
integran.

Sin embargo hay gastos que requieren de efectivo (renta de locales,


llamadas de larga distancia, equipo de oficina). El dinero se ha buscado en
México con poco éxito porque el sistema de castigos y recompensas existente
inhibe y dificulta que quien tiene recursos los done para algo tan delicado
como la defensa de elecciones confiables. En consecuencia ha sido
indispensable recurrir a la cooperación internacional. Se han solicitado –y
recibido- fondos de Europa, Canadá y Estados Unidos y se hará una petición
formal de fondos a la Organización de las Naciones Unidas. De todo esto hay
y habrá informes y auditorias externas, y todo lo que haga falta para dar
transparencia y certidumbre.

Pero lo que está en juego no es sólo dinero sino el reconocimiento que eso
implica. Esto resulta claro para los conocedores de cómo funciona el crédito
internacional. En momento de crisis el gobierno de México ha buscado
préstamos del Fondo Monetario Internacional o del Banco Mundial. Lo que
verdaderamente les ha importado es que si el Fondo aprueba su donativo ello
representa un nivel que legitima ante otros centros financieros internacionales.

Algo similar está pasando con Alianza Cívica que lentamente ha ido ganando
legitimidad. La mera posibilidad de que una institución nueva pueda opinar
sobre la confiabilidad de unas elecciones competidas y difíciles preocupó a
diversos sectores y ese es, en mi opinión, el origen del artículo de Delal Bear.
Tal vez lo hizo de buena fe, tal vez fue influida por intereses en México o
Estados unidos. En lugar de intentar comprender vino la descalificación y la
puesta en duda de la legitimidad.

Esta hipótesis se fortalece porque otra de las ideas centrales del artículo es
hacer un llamado a aquellos que “aprueben los fondos y deciden la política de
Estados Unidos que tienen la obligación de promover la imparcialidad o, si eso
es imposible, la diversidad”. Delal Baer tiene el derecho a exigir a otros
estadounidenses que presionen hasta lograr una reproducción de lo que
considera el ideal. A Alianza Cívica le toca decidir si acepta o no presiones o
las sugerencias.

Por México han pasado, y pasarán, ciudadanos de diversas nacionalidades


dando sugerencias al movimiento cívico que cuando son razonables se
adoptan. Sin embargo, cuando se trata de exigencias ilógicas, la respuesta de
antes y de ahora sigue siendo que Alianza Cívica es una organización de
mexicanos que reivindica su independencia del gobierno, de los partidos y de
extranjeros, y que va a ejercer su derecho de decidir qué es lo que va a
observar y cómo va a hacerlo.
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No está demás recordar que uno de los orígenes de la Alianza es el deseo


de evitar la presencia de observadores internacionales. En agosto tendremos
muchos visitantes de otros países y todos ellos serán bienvenidos. Hay un
límite: ninguno de ellos viene a determinar la legalidad o la confiabilidad de
las elecciones. Eso nos corresponde a los mexicanos.

Han cambiado muchos aspectos en la relación México-Estados Unidos, y qué


bueno. Todavía persisten resabios del pasado. En el fondo el artículo y los
miedos de Washington son el reflejo de una vieja historia: todavía hay
estadounidenses acostumbrados a ir por el mundo repartiendo “consejos,
dando dictámenes de buena conducta y seguros de que ellos nunca se
equivocan. Sigue habiendo mexicanos determinados a defender el derecho a
la autodeterminación”.

6.- El suscrito, pronuncié un discurso que se difundió en el diario “La Jornada”,


texto que fue publicado el 3 de mayo de 1995, bajo el título “Los significados de un
premio”, el cual se acompaña a la presente demanda como anexo 3.

7.- El artículo que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:

“Sergio Aguayo Quezada

Los significados de un premio

Washington, D. C. ¿Qué significado tiene que la Fundación Nacional para la


Democracia de Estados Unidos, institución privada donde está representada la
élite política de este país, le conceda a un mexicano un reconocimiento por
contribuciones a la democracia?

La nacionalidad del recipiente es importante por algunas peculiaridades de la


relación entre México y Estados Unidos. Pese a sus diferencias, en la década
de los años veinte las élites que gobiernan ambos países llegaron a un
entendimiento informal de apoyo mutuo. No está codificado en ningún tratado
y se maneja con discreción extrema, pero este entendimiento es uno de los
pilares de la relación. Washington ha sido fiel al acuerdo porque la estabilidad
en México es fundamental para su interés nacional. Una consecuencia
desafortunada es que Washington relacionó estabilidad con permanencia en el
poder del Partido revolucionario Institucional, y con ello se convirtió en una
fuerza a favor del orden establecido.

Los ejemplos de respaldo son múltiples. En la crisis financiera de 1976 el


apoyo fue de 600 millones de dólares; en 1983 fue de cinco mil millones, y en
1995 puede llegar a 50 mil millones. Los Informes Anuales que produce el
Departamento de Estado sobre derechos humanos en México se caracterizan
por le cuidado que tienen en proteger la imagen de los gobernantes. Es
igualmente notable la facilidad con que Washington califica de
democratizadores a los presidentes mexicanos, incluyendo a Ernesto Zedillo.
Es curioso como, en el caso de los gobernantes mexicanos, bastan
declaraciones de lo que piensan hacer en uno y otro acto simbólico para que
reciban sus certificados de buena conducta democrática.

Hay unas frases en un documento preparado para James Carter en 1978 (el
PRM 41) que simbolizan el entendimiento. Cuando se piensa en Carter se le
asocia con derechos humanos y con elevados estándares morales que, sin
embargo, no aplicó a México. El PRM 41 muestra que el gobierno de Carter
sabía perfectamente que en México se violaban muchos derechos, pero
concluyó que sería “poco recomendable y contraproducente para Estados
Unidos criticar públicamente a México”. En consecuencia, la recomendación
fue “alentar una mejoría en los derechos humanos”… siempre y cuando no
hubiera un “costo indebido a nuestros otros intereses”.

Alrededor de 1994 aparecieron indicios de que diferentes sectores de


Washington empezaban a revisar el entendimiento y a preocuparse por la
falta de democracia en México. No es una política bien delineada o
condensada, porque depende de la organización o de la persona la expresión
que toma, pero la tendencia es clara.
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El premio otorgado forma parte de esta metamorfosis inacabada que se


explica, en primer lugar, por el agotamiento del régimen surgido de la
Revolución Mexicana, lo que provoca que empiece a aceptarse que el
autoritarismo está afectando los intereses de Estados Unidos. En esta
revaloración es igualmente importante el reconocimiento que se da al vigoroso
movimiento a favor de la democracia en México. A veces no percibimos en
México la enorme y profunda legitimidad que en el mundo se otorga a nuestra
lucha por la democracia y la justicia social.

En este movimiento confluyen partidos de oposición, y grupos como Alianza


Cívica que en 1994 articuló a centenares de grupos y a miles de ciudadanos
en una intensa campaña a favor de las elecciones libres y confiables. Pese a
que hubo algunos avances en las elecciones presidenciales de 1994,
fracasamos en lograr una elección confiable. Nuestros éxitos fueron haber
hecho una radiografía bastante exacta de las irregularidades electorales y del
estado que tiene nuestra cultura cívica. También logramos crear conciencia
en muchos ciudadanos de una verdad elemental: los mexicanos tenemos
derechos y debemos, podemos defenderlos. La democracia es un derecho
que debemos conquistar.

Desde que me informaron que la Fundación Nacional para la Democracia me


otorgaría una distinción traigo sentimientos encontrados. Me siento honrado,
pero considero que el premio a la democracia corresponde a los centenares
de miles de mexicanos que han luchado desde hace décadas en contra del
autoritarismo y la amplia gama de violaciones a los derechos humanos que
incluyen, entre otros, asesinatos políticos sin castigo, la mutilación de la
verdad que de manera permanente hacen los principales canales de
televisión, la agresión a trabajadores e indígenas y la falta de elecciones
confiables.

En la quinta Reunión Mundial sobre Democracia, que organiza la Fundación


Nacional par la Democracia, participa un distinguido grupo de líderes sociales
mexicanos que han hecho grandes contribuciones a la causa de la
democracia. Ana Lilia Cepeda, Patricia Bracho y Monique Mitasstein de
Mujeres en Lucha por la Democracia; Mariclaire Acosta de la Comisión
Mexicana para la Defensa y Promoción de los Derechos Humanos; Julio
Faesler del Consejo para la Democracia; y Martha Pérez, la respetada
Secretaria Ejecutiva de Alianza Cívica.

Hay muchos otros que merecen ser honrados. Entre ellos, los miembros de la
Academia Mexicana de Derechos Humanos y en especial Oscar Ortiz, del
Programa de Promoción de Derechos Políticos, investigadores de El Colegio
de México y otras instituciones de enseñanza superior y aquellos medios de
comunicación que cotidianamente reivindican la decencia y la ética.

México vive los inciertos momentos del ocaso de un régimen deteriorado y


desprestigiado. Nuestros gobernantes le fallaron a su pueblo y a su país, y
para redimirse ante la historia deberían aceptar la exigencia nacional de una
democratización integral. Es imposible determinar el tiempo que durará la
agonía del autoritarismo, el costo social que tenderemos que pagar y el tipo de
régimen que seremos capaces de construir. Una cosa es cierta: somos
muchos los mexicanos que estamos determinados a reconstruir a México y a
lograr que no sea en mano el altísimo precio que estamos pagando por un
programa económico que nos ha sido impuesto por los gobiernos de México y
de Estado Unidos.

Estamos cansados de que cada seis años llegue un profeta a informarnos lo


que es mejor para nosotros y para el país. Estamos cansados de pagar las
cuentas de los errores que cometen gobernantes irresponsables. Queremos
ser corresponsables de las decisiones sobre el futuro. Queremos ser
ciudadanos.

En ese esfuerzo, y en ese sueño, reconforta constatar que en otros países


existen grupos e individuos dispuestos a entender y valorar el significado de lo
que estamos haciendo y a respetar nuestra sensibilidad nacionalista.
Buscamos, necesitamos el apoyo de otras sociedades en nuestro esfuerzo por
construir la democracia en México, pero también exigimos que se respete el
derecho que tenemos a decidir las modalidades de nuestra democracia. Es
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justo reconocer que la Fundación Nacional para la Democracia ha sido una de


las organizaciones estadunidenses que han mostrado solidaridad y respeto a
lo que estamos haciendo.

Estos serían los principales significados que tiene un premio que acepto
porque lo entiendo como un reconocimiento que la sociedad estadunidense
hace a la lucha de los mexicanos que estamos decididos a construir nuestra
versión de democracia.

(Palabras pronunciadas durante la ceremonia de entrega del “Premio por


Contribuciones a la Democracia”, otorgado por la Fundación Nacional para la
Democracia de Estados Unidos)”

8.- El suscrito, di una entrevista al periódico “El Financiero”, misma que fue
publicada en un reportaje el 30 de abril de 1997, bajo el título “Ni legal ni ilegítimo,
el apoyo externo a ONG: Aguayo”, el cual se acompaña a la presente demanda
como anexo 4.

9.- El reportaje que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:

“EL FINANCIERO / Política Miércoles 30 de abril de 1997

Ni ilegal, ni ilegítimo, el apoyo externo a ONG: Aguayo

Congelada, la iniciativa de reformas al Cofipe impulsada por el PRI

Francisco Gómez Maza / Víctor Chávez / Sergio Leñero

El financiamiento externo que reciben organizaciones no gubernamentales


mexicanas “no es ni ilegal ni ilegítimo sino que: forma parte de una práctica
internacional reconocida en la cual también participa el gobierno de México” –
afirmó Sergio Aguayo, integrante de la Coordinación Nacional de Alianza
Cívica.

También Gabriel Sánchez Díaz, coordinador de la organización Presencia


Ciudadana considera que de ningún modo el financiamiento externo atenta
contra la soberanía.

Asimismo, el diputado del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Raúl


González herrera, presidente de la Comisión de Gobernación y Puntos
Constitucionales de la Cámara de Diputados, anunció que la propuesta de su
partido de impedir a las ONG recibir recursos externos no prosperó.

¡Nos pararon en seco!; nuestra iniciativa de impedir que las ONG reciban
recursos del exterior quedó congelada hasta la próxima legislatura” puntualizó.

Para Sergio Aguayo: “la intención de algunos diputados del PRI de


presentarnos como traidores a la patria o como mexicanos que estamos
haciendo algo ilegítimo al recibir esa ayuda, nos pareció ofensiva y nos
agravió”.

La semana pasad la bancada priista de la Cámara de Diputados pretendió


introducir reformas al Código Federal de Instituciones y Procedimientos
Federales (Cofipe) para prohibir las ayudas económicas extranjeras a las
organizaciones de observación electoral, iniciativa que no prosperó por ser
inconstitucional.

Desde hace 40 años existen fundaciones internacionales que apoyan a


organizaciones sociales mexicanas empresariales, no gubernamentales, de
protección al ambiente e inclusive hasta a partidos políticos.

Aguayo advirtió que en Alianza Cívica “sí creemos que debe ser necesario
que se aclare y se fije los parámetros sobre cómo debe llegar esta ayuda
internacional, sobre la cual sólo existe la obligación de informar a la Secretaría
de Hacienda, lo que se hace puntualmente, porque no es un secreto”.
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Agregó que Alianza Cívica organizará un foro para discutir el tema de los
financiamientos extranjeros a organizaciones sociales mexicanas para obtener
un criterio que pueda incorporarse a una legislación que los permita y acepte.

Antonio Sánchez explicó por su parte, que contrario a lo que señalan los
diputados del PRI que buscan reformar el Cofipe no significa que los donantes
que aportan recursos a las ONG tengan injerencia al interior de estas
organizaciones.

Detalló que Presencia Ciudadana incluye en sus estatutos las donaciones


externas siempre y cuando no se pretenda influir en las decisiones de la
organización.

Esta organización se pronunció por la inmediata creación de un fondo


integrado con recursos públicos y privados, administrado por la ONU, para el
apoyo de las tareas de observación electoral. En este sentido recordó que en
1994 el gobierno federal envió recursos a un fideicomiso de la ONU para
observación electoral en países africanos principalmente.

Por su parte, el diputado González Herrera, quien dijo el pasado jueves que
su partido buscaría presentar la iniciativa de reforma al Código Federal de
Instituciones y Procedimientos Electorales (Cofipe) esta semana, afirmó ayer
que su propuesta se dictaminó aunque sin el apoyo de los partidos de
oposición “pero ya no nos dejaron presentarla ante el pleno”.

Aunque aclaró que ya no hubo el suficiente tiempo para negociar cpn los
representantes parlamentarios del PAN y del PRD, estimó que hubiera sido
imposible llegar a un consenso con ellos “en un tema que los beneficia sin
importarles el riesgo que corre nuestra soberanía”.

Pese a que la ley marca que las reformas al Cofipe sólo se pueden hacer 90
días antes de iniciado el proceso electoral, detalló: “existen los mecanismos
para que nuestra iniciativa prosperara, sin embargo, algunos de nuestros
compañeros prefirieron no hacer más ruido”.

Incluso, dijo: “nuestro coordinador: Juan José Osorio, califica la propuesta de


los priistas como una verdadera obra maestra en materia jurídica”.

Por ello, advirtió, que el PRI no abandonará esta lucha “hasta que estos
cabrones dejen de recibir recursos del extranjero, obtengan beneficios
personales y los filtren a los partidos”.

En tanto Alianza Cívica y la agrupación política causa Ciudadana,


anunciaron en conferencia de prensa, la realización los díias 6, 7 y 8 de junio
de una consulta nacional en la que la población diga cómo y para qué deben
legislar los diputados.”

10.- La parte demandada, señor PRIMITIVO RODRÍGUEZ OCEGUERA, dirigió


una carta al periódico “La Jornada”, misma que fue publicada en ese diario el 2 de
junio de 1997, bajo el título “Reitera el carácter intervencionista del apoyo
financiero de EU a ONG”, la cual se ajunta a la presente demanda como anexo 5.

11.- La carta que se menciona en el hecho que antecede, que fue elaborada por la
parte demandada, es del tenor siguiente:

“Reitera el carácter intervencionista del apoyo financiero de Estados Unidos a


ONG

Estimada Carmen: En una carta publicada el 1o de junio, dirigentes de


organizaciones como Alianza Cívica, la Academia Mexicana de Derechos
Humanos y el Movimiento Ciudadano por la Democracia responden a otra
escrita por mí sobre el carácter intervencionista del apoyo financiero que el
gobierno de EU otorga a estas y otras organizaciones civiles.

Los firmantes de la carta denuncian ataques en su contra provenientes de


gente asociada al gobierno, como sugieren es mi caso. Con todo, pasan por
alto información que conocen sobre una de las agencias que financia sus
10

organizaciones: la National Endowment for Democracy (NED). Ahí está el


verdadero peligro a su prestigio y credibilidad. Les recuerdo parte de la
información.

En un reportaje sobre la intervención de EU en otros países, The New York


Times (31 de marzo) afirma que la NED fue creada por el gobierno
estadunidense en calidad de agencia no gubernamental para que pudiese
realizar, de manera abierta, operaciones que por décadas la CIA realizó de
forma clandestina. Por otra parte un alto ex funcionario estadounidense
declaró a La Jornada (19 de abril) que, previsto el triunfo del PRI en 1994, la
NED financió a Alianza Cívica y otras organizaciones de observación para
hacer creíble el resultado de las mismas. A su vez, la directora de la NED
para América Latina señaló al diario The Dallas Morning News (27 de abril)
que su agencia apoya a grupos ciudadanos para contribuir a crear en México
un sistema bipartidista que responda a la voluntad del pueblo.

Información como ésta demanda respuesta clara e inmediata de las


organizaciones que dependen de la NED. Darán con ello ejemplo de lo que
con sobrada razón exigen del gobierno, partidos políticos y autoridades
electorales: un proceso electoral confiable y transparente. ¿Por qué retrasar,
como proponen, por tres meses la respuesta? Suena a Conasupo.

Primitivo Rodríguez O.”

12.- Del contenido de la carta mencionada en el hecho que antecede, se


desprende lo siguiente:

Este escrito ilustra el inicio de la estrategia pública de la parte demandada para


perjudicar mi honra, reputación y la consideración que los demás tienen de mi
persona, componentes éstos de mi derecho al honor. Llamo la atención de su
Señoría de que en esta carta no aparece mi nombre, pero como se puede
desprender de los hechos 15 y 16 siguientes, la misma tenía como objeto de sus
acusaciones, entre otros, al suscrito. De cualquier manera, la incluyo porque ahí
aparece por primera vez la acusación de que diversas organizaciones de la
sociedad civil mexicanas ocultaron información sobre la Fundación Nacional para
la Democracia (National Endowment for Democracy o NED por sus siglas en
inglés, organización a la que en el desarrollo de esta demanda se le puede
identificar simplemente como la “Fundación”), institución de la que recibían
financiamiento. En este tenor, debido es precisar que Alianza Cívica, organismo a
cuya Coordinación Nacional pertenecí entre 1994 y 1999 y en la cual también
trabajó la parte demandada, efectivamente recibía financiamiento por parte de la
mencionada Fundación.

Con base en unos artículos de la prensa extranjera –que volverá a citar


constantemente a lo largo de los años– la parte demandada asegura que esas
organizaciones y sus dirigentes dependen de la Fundación Nacional para la
Democracia, porque es ella la que los financia, y en consecuencia, que participan
de una política intervencionista que el gobierno de los Estados de Unidos de
América busca llevar a cabo en México. En ese marco, vierte dos acusaciones
concretas, que previendo una victoria del Partido Revolucionario Institucional en
las elecciones efectuadas en 1994, tal Fundación intervino y utilizó a los
organismos civiles mexicanos para hacer creíble el resultado de las mismas, así
como para lograr instaurar un sistema bipartidista en nuestro país.

Al respecto, debe recalcarse que es falso que Alianza Cívica, una de las
organizaciones que ha recibido financiamiento por parte de la citada Fundación,
así como sobre todo, la parte demandante, seamos dependientes de la Fundación
Nacional para la Democracia. Con mayor razón, resulta falso que participemos de
una política intervencionista encabezada por el gobierno estadounidense. De
igual manera, es falso que mi labor y la de Alianza Cívica se hayan encaminado
por instrucciones de esa Fundación o del gobierno norteamericano, a la tarea de
hacer creíble el resultado de las elecciones de 1994 en nuestro país, ni tampoco
para buscar instaurar un sistema bipartidista en México. En este sentido, debe
hacerse notar a su Señoría que todas estas falsedades, la parte demandada las
11

presenta como hechos incontrovertibles y que dice fundarlas en el análisis veraz y


objetivo de ciertos textos, pero sin que ello se haya demostrado fehacientemente.

13.- El suscrito, concedí una entrevista para el periódico “El Financiero”, misma
que fue publicada el 17 junio de 1997 en un reportaje bajo el título “Dólares de EU
para la democracia mexicana”, el cual se adjunta a esta demanda como anexo 6.

14.- El reportaje que se menciona en el hecho que antecede es del tenor


siguiente:

“El Financiero/Sociedad Martes 17 de Junio de 1997

Dólares de EU para la democracia mexicana


Araceli Muñoz Valencia

La sombra de su origen la condena, pero los beneficios la remiden. La


Fundación Nacional para la democracia (Nacional Edowment for Democracy,
NED) tiene dos aristas: es una amenaza para los gobiernos de los países
subdesarrollados y esperanza de algunos movimientos ciudadanos de estas
naciones.

A México llegó en 1985 para financiar programas educativos y seminarios de


entretenimiento de la Confederación de Trabajadores de México (CTM),
actualmente contribuye económicamente con los proyectos de observación
electoral de Alianza Cívica y de procuración de derechos humanos de otras
organizaciones.

Conforme se acercan las elecciones de julio –Distrito Federal y seis estados-,


sus opositores reviven la controversia: la NED es otra forma de
intervencionismo estadounidense en México.

Billetes verdes

En este año se suma otra fundación que, como la NED, está financiada por el
Congreso estadounidense. La Agencia Internacional por el Desarrollo de
Estados Unidos (US Agency For Internacional Development USAID) que
también ayudara a las ONG mexicanas con similares objetivos como su
colega.

Así, desde 1994 hasta que finalice 1997, el gobierno de Estados Unidos habrá
ofrecido 4.5 millones de dólares en apoyo a las organizaciones no
gubernamentales que contribuyen “al fortalecimiento de la democracia”.

Tan solo la NED destinará este año 639 mil 712 dólares a las organizaciones
mexicanas encabezadas por Alianza Cívica, quien recibirá 150 mil dólares.
También se beneficia Presencia Ciudadana con 40 mil, La Comisión
Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos con 50 mil, la
Escuela de Capacitación Cívica con 84 mil 568.

Además de 270 mil dólares que se destinarán al Centro Cívico y la Asociación


Nacional Cívica Femenina, mediante el Instituto Internacional Republicano,
organismo perteneciente al Partido Republicano.

En tanto, la USAID distribuirá 300 mil dólares en el mismo periodo a


organizaciones mexicanas como el Movimiento Ciudadano por la Democracia.

El pasado 31 de marzo, The New York Times señaló que la NED hace el
trabajo secreto que xxxxxxxxx Centro de Inteligencia estadounidense, la
temida CIA.

Casi un mes después, el 27 de abril, The Dallas Morning News añadió que las
ONG mexicanas reciben donativos constantes y “cuantiosos” de la NED desde
1994.

La polémica, pues, revive principalmente por el origen de la NED, a la que se


le atribuye la caída del gobierno sandinista en Nicaragua y la ascensión a la
presidencia de Violeta Barrios.
12

William Clinton, su principal partidario actualmente, la defiende por ser la


“mejor promotora en el mundo de la democracia y del libre mercado”.

La NED está sataniza desde su nacimiento. Su creador Ronald Rcagan


escribió su destino (EL FINANCIERO. 18-VII-94).

Creada en 1983, el mandatario ordenó diseñar el organismo para respaldar en


el extranjero los objetivos de seguridad nacional de Estados Unidos, señaló a
este diario Chip Berlrt, miembro de Political Research Associates, un grupo de
investigación con sede en Cambridge, Massachussets.

Antes, como una estrategia geopolítica del gobierno estadounidense, la CIA


financió secretamente a partidos políticos, sindicatos, asociaciones
estudiantiles, medios de difusión y grupos empresariales de los países del
tercer mundo.

Evidentemente sus beneficiaros se deslindan de cualquier relación entre la


CIA y la NED.

Bajo sospecha

La NED “nada tiene que ver con la CIA”, asegura Mariclaire Acosta Urquidi,
presidenta de la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos
Humanos, organización dedicada a la ayuda jurídica y documental de las
violaciones a los derechos humanos en nuestro país.

Estas insinuaciones añade, “son una campaña concertada para desprestigiar


a las organizaciones que reciben dinero de la NED, que no es del gobierno
norteamericano. Siempre va a ver secciones mal intencionados, sobre todo en
un régimen autoritario que amenaza a través de la intimidación, el acoso o el
desprestigio a las organizaciones no gubernamentales que están señalando
problemas reales”.

-Sus críticos, incluidos agentes y exagentes de la CIA aseguran que la NED


realiza el trabajo que por mucho tiempo hizo CIA

-comenta la reportera.

-No puedo negar que la NED fomentó en Nicaragua muchas organizaciones


de derechos humanos que promovían la democracia y que se oponían al
gobierno sandinista.

También sé que la CIA ha sido uno de los organismos más siniestros, más
sádicos, más desestabilizadores de los que se ha tenido memoria.

La CIA desestabilizó y tiró gobiernos, hizo horror y medio en nombre de la


democracia, de misma forma que la KGB por el comunismo, pero la NED no
tiene nada que ver con la CIA ¿a caso la CTM está desestabilizando a la
sociedad mexicana?

Para Acosta Urquidi es importante transparentar los estados financieros de las


organizaciones.

“Del total de nuestros fondos sólo recibimos 18 por ciento de la NED”

Insiste en que la mayoría de los recursos proviene de los gobiernos de otros


países, principalmente europeos.

Entre las principales mecenas de las organizaciones mexicanas están


Nederlnndse Organisatic oor Interxxxx (NOVIB), del gobierno holandes:
Onlwikkelins Samanwerking, Cannadian Axxx-Workers. Internacional (Center
for Human Rights y Democrnxx Development ICHRDDK).

Para Sergio Aguayo director de Alianza Cívica e Investigador de El Colegio de


México “no hay ningún nexo entre la NED y la CIA” ni mucho menos la
posibilidad de intervensionismo.
13

Confiesa: “A mi no me gusta recibir dinero del extranjero, por que en México


no logramos conseguirlo. Primero no hay una cultura de derechos humanos
entre los empresarios, que podrían financiarla.

Segundo, la Secretaria de Hacienda no permite la deducibilidad de impuestos


a las organizaciones que procuran la democracia. Por su parte el Instituto
Federal Electoral, que debería ofrecer esos recursos para la observación, no
los brinda.}

El historiador señala que los financiamientos internacionales son producto de


la globalización mundial, incluso el gobierno mexicano recibe de esos recursos
y eso no significa formas de intervensionismo.

Una guerra epistolar

Los defensores de la contribución internacional, en particular la NED, y sus


críticos defienden sus argumentos en misivas que son intercambiadas con
severos alegatos.

Primitivo Rodríguez, asesor externo de la Presidencia de la República para


asuntos de migración en la frontera México-Estados Unidos y comunidades
latinas y afroamericanas sostiene que la NED se funda para “permitir acciones
que CIA realizaba de forma clandestina como una estrategia geopolítica”.

En una “última” carta dirigida a los directores de las ONG que reciben
financiamiento de la fundación estadounidense el también historiador les
advierte que “es muy distinto el apoyo de la NED, que de gobiernos como
Holanda, España o Francia, no sólo por la defensa de la soberanía y de los
intereses intervencionistas, sino porque históricamente Estados Unidos ha
querido intervenir en la política mexicana aunque sea con huecas intenciones”.

-Las organizaciones que reciben recursos del NED señalan que no ponen en
riesgo su autonomía e independencia-se le dice.

-El problema no es autonomía, es el uso político que se le da al resultado de


sus trabajos. En 1994 utilizaron la observación de Alianza Cívica para dar
credibilidad a las elecciones. La administración Clinton decidió apoyarse en
organizaciones independientes para hacer creíble el triunfo de Ernesto Zedillo
en elecciones “más o menos libres y justas”.

Estoy seguro, agrega, de que si las encuestas hubieran favorecido a Cárdenas


no hubiera sucedido lo mismo.

En enero de 1983, tras la iniciativa presidencial NSDD77 (National Security


Decision Directive) y la legalización de la NED el 22 de noviembre de ese año,
se estableció (sección 502-a) que la fundación “no es una agencia o
establecimiento del gobierno de los Estados Unidos, y (sección 503-c) nada de
este documento debe ser interpretado en forma que haga a la fundación una
agencia o establecimiento del gobierno o que haga a los miembros del consejo
directivo de la fundación, o a los funcionarios o empleados de la fundación,
funcionarios o empleados de los Estados Unidos”.”

15.- Unas semanas después, la parte demandada dirigió una carta a varias
personas –a mí entre ellas– fechada el 30 de junio de 1997, la cual se acompaña
a la presente demanda como anexo 7.

Lo anterior le consta tanto a la parte demandada como a las personas Mariclaire


Acosta Urquidi, Emilio Álvarez-Icaza Longoria, Rogelio Gómez-Hermosillo Marín y
Luz Beatriz Rosales Esteva.

16.- La carta que se menciona en el hecho anterior es del tenor siguiente:

“Fecha: 30 Junio 97

Para: Luz Rosales


Ned
14

De: Primitivo Rodríguez Oceguera

Asunto: Mandé copia de esta carta a la ANAD, Causa Ciudadana, Cencos,


Conai y Equipo Pueblo.

NÚMERO DE PÁGINAS INCLUYENDO LA CUBIERTA: 7

FINANCIAMIENTO DEL GOBIERNO NORTEAMERICANO A


ORGANIZACIONES DE OBSERVACIÓN ELECTORAL Y DERECHOS
HUMANOS

¿INTERVENCIÓN O GLOBALIZACIÓN?
BALANCE DEL DEBATE Y SUGERENCIAS PARA EL FUTURO

Mariclaire Acosta, Sergio Aguayo, Emilio Álvarez-Icaza, Enrique Calderón


Alzate, Ana Lilia Cepeda, Miguel Concha, Rogelio Gómez Hermosillo, Oscar
González, Marta Pérez y Luz Rosales, dirigentes de la Comisión Mexicana
para la Defensa y Promoción de los Derechos Humanos, Alianza Cívica,
Academia Mexicana de Derechos Humanos, Mujeres en Lucha por la
Democracia Movimiento Ciudadano por la Democracia.

Imagino lo molestos y molestas que deben estar conmigo. Del mes de abril a
la fecha, a través de cartas dirigidas a ustedes (excepto Luz y Ana Lilia) y de
publicaciones en medios de información periodística nacional, he insistido una
y otra vez sobre lo negativo que resulta el financiamiento del gobierno de EU a
las organizaciones de que forman parte. Entiendo que piensen que participo
en una campaña gubernamental más en contra de su labor crítica. De entrada,
cuentan con un dato para sospecharlo: trabajo de asesor externo para la
Oficina de la Presidencia de la República. Al respecto, amplio una sugerencia
que les hice en la carta del 23 de abril dirigida al P. Concha: hacer pública
cualquier información que puede indicar o probar mi participación en alguna
campaña gubernamental, del PRI o de otra organización o persona en contra
de ustedes.

Con todo, me parece que esto no es lo importante. Aun suponiendo que fuese
yo el Córdova II de los Pinos, la información que he usado en mis cartas y
escritos es pública y no proviene del gobierno o del PRI. Sigo creyendo que
información como ésta es la que en verdad pone en peligro el prestigio de
ustedes. Para beneficio de este balance me permito rehuir parte de la
información, sobre todo la referente a la agencia que financia sus proyectos,
The National Endowment for Democracy (NED).

En un reportaje sobre la intervención norteamericana en otros países, The


New York Times (31 de marzo) reveló que la NED es una organización creada
por el gobierno norteamericano en 1983 para realizar como agencia no
gubernamental operaciones que la CIA tendría dificultad en llevar a cabo. El
diario añade que llegó a esta conclusión después de analizar documentos
desclasificados del gobierno estadounidense, así como memorias de
audiencias congresionales. A una conclusión similar llegaron en 1990 dos
reconocidas instituciones norteamericanas que investigaron a la NED, The
Council on Hemispheric Affairs y The Inter-Hemispheric Resource Center.
Para estas instituciones, el carácter “no gubernamental” de la NED le da
precisamente la cobertura apropiada para moverse con agrupaciones civiles
de otros países sin levantar mayores sospechas de intervencionismo.
Inclusive, centros de investigación conservadores y de gran influencia, como la
Heritage Foundation, defienden a la NED argumentando que Ronald Reagan
la creó no sólo para combatir a los enemigos de Estados Unidos, sino también
para promover los valores norteamericanos de “libertad, democracia y libre
empresa”.

La información citada, con referencia exacta de autores, fuentes y fechas la


conocen muy bien ustedes. Pero hay más. Los propios funcionarios del
gobierno norteamericano y de la NED se encargaron de revelar a los diarios
La Jornada (15 de abril) y The Dallas Morning News (27 de abril) qué hace y
para qué sirve la NED en México. Resumo algunas de sus declaraciones:

* Previendo el triunfo del PRI en 1994, el gobierno norteamericano decide


financiar a través de la NED a organizaciones de observación electoral como
15

Alianza Cívica para hacer creíbles los resultados de esas elecciones “más o
menos limpias y justas”. ¿Sabían ustedes que para eso los financiaban?
¿Predeterminó el financiamiento norteamericano el juicio final de Alianza
Cívica y otras organizaciones de observación sobre las elecciones de 1994?
¿Tienen idea de cuáles son los objetivos no manifiestos de la NED para las
elecciones del 6 de julio?

* Personal del Departamento de Estado recomienda a la NED en 1994 no


identificarse demasiado con grupos como Alianza Cívica. ¿Por qué esa
recomendación?

* No obstante la polémica que causa el financiamiento directo e indirecto de


los Estados Unidos a organizaciones civiles mexicanas, éste seguirá como
parte de la presencia norteamericana en la región. ¿Qué significa esta
“presencia” o actividad norteamericana en la región? ¿Es saludable que
organizaciones ciudadanas jueguen un papel en los planes norteamericanos
sobre México?

* La NED financia a grupos civiles para construir en México un sistema


bipartidista de gobierno que responda a la voluntad del pueblo. ¿Les dijo
alguna vez la NED que para tal propósito apoyaba su trabajo? Esta
declaración la hizo hace dos meses la directora de la NED para América
Latina. De entrada suena ridícula. ¿Pero lo es en realidad? Al parecer, el
dominio absoluto del PRI no garantiza ya los intereses norteamericanos. ¿Con
qué partido desea EU que el PRI comparta el poder? ¿Con el PRD? Son
varias las organizaciones de orientación panista que la NED financia desde
hace años.

Son ustedes expertos en seguridad nacional y relaciones exteriores. Y más


que nada, han demostrado que tienen un agudo y atinado sentido crítico frente
a cualquier acción del gobierno mexicano que busca engañar, cooptar y
utilizar al pueblo. Por ello se han ganado con sobrada razón respeto y
admiración de amplios sectores. ¿Por qué, entonces, continúan declarando,
contra toda evidencia que la NED es una agencia no gubernamental, pues así
la definen sus estatutos? Es como argumentar, también con estatutos en la
mano, que el PRI decide quienes serán sus candidatos a la presidencia de la
república. ¿Alguien lo creería? ¿Por qué han rehuido aclararse la información
de The New York Times o las declaraciones de los funcionarios
estadounidenses sobre ustedes es correcta o falsa? Han dicho (La Jornada, 1
de junio) que hablarán de la NED en Septiembre, que manejan con honestidad
los fondos que reciben y que ya no tocarán el asunto de la NED para no
distraerse del importante trabajo que llevan a cabo. Ello suena –me duele
decirlo- a los boletines de la Presidencia, SEGOB o la PGR ante información o
preguntas incómodas.

La NED no es ninguna desinteresada y generosa Madre Teresa. Escoge bien


a los grupos y proyectos que financia. Lo hace en estrecha consulta con
embajadas y el Departamento de Estado. Esto lo sabe todo el mundo. Vamos,
así lo describen los propios folletos de la NED y así lo dejan en claro las
audiencias congresionales en Washington donde se discute el presupuesto
gubernamental a la NED en base al beneficio que EU obtiene de los proyectos
financiados por ella.

Información como ésta tiene serias implicaciones para el trabajo que ustedes
realizan. Además, información similar continuará apareciendo, bien porque
funcionarios estadounidenses no resistirán revelar qué eficaces han resultado
las operaciones de la NED en México, o porque algún periódico o centro de
investigación seguirá hurgando la adicción intervencionista de EU. De no
deslindarse de la NED, ¿cómo van a responder a información más detallada y
comprometedora sobre los objetivos que asignó al trabajo que hacen? Es
común que la NED desprestigie a grupos por la manipulación que hace de
ellos y finalmente los abandone una vez que cumple sus objetivos. Así pasó
en Nicaragua con la organización de observación electoral Vía Cívica y
organizaciones de derechos humanos. Todas ellas complementaron en lo
político lo que la Contra realizaba en lo militar para derrotar a los sandinistas.

Para llevar a cabo sus planes, la NED vende su carácter “privado” y “no
gubernamental”. Pero una vez que crea dependencia económica abre la
16

entrada al financiamiento directo del gobierno estadounidense a grupos civiles.


Tal es el caso en México. La Jornada y The Dallas Morning News dieron
cuenta de más de dos millones de dólares que ha comenzado a distribuir entre
algunas de las organizaciones a las que ustedes pertenecen otra controvertida
agencia norteamericana: la US Agency for International Development (USAID).
Ese dinero viene, según el Dallas Morning News, para promover desde la
embajada norteamericana el “Proyecto Especial Democracia”.

Algunos de ustedes han dicho que a falta de fondos nacionales, los aceptan
de donde vengan con tal de que no haya condiciones. La NED no condiciona
el trabajo pero sí lo selecciona y utiliza para sus propios fines. ¿Se han
preguntado cómo fue que la NED pasó a apoyar a la CTM y la COPARMEX a
financiar organizaciones civiles de observación electoral, educación política y
derechos humanos? Al respecto ustedes argumentan que EU mantuvo el
gobierno autoritario de México con jugosos préstamos, retrasando así la
reforma democrática del país. Ahora, EU ha recapacitado y da fondos a los
luchadores por la democracia y los derechos humanos. Si ustedes usaran su
buen sentido crítico, llegarían a otra conclusión: EU no financia autoritarismo o
democracia, sino sus intereses. El fin de los billones de dólares para mantener
al gobierno autoritario de México es el mismo que los millones para ustedes
proteger y promover los intereses norteamericanos. No hay una
“recapacitación” de EU. Lo que existe es un cambio profundo desde abajo y
desde dentro en México. EU lo entiende y simplemente multiplica sus campos
de penetración política para no quedar fuera del juego.

En 1994 formé parte del grupo coordinador de Alianza Cívica en el DF. Para
ese entonces, ya tenía información sobre la NED, debido a sus operaciones
en Nicaragua. El equipo coordinador se opuso a que los fondo de la NED
entraran al DF. Así lo comunicamos a Sergio Aguayo. Con todo, nuestra
oposición fue más bien un acto simbólico de independencia. Decidimos no
tener un debate al respecto para no dañar a Alianza Cívica. Creo que fue una
opción equivocada. Quizás el debate público hubiese evitado el despliegue de
la NED entre grupos de ciudadanos progresistas.

Dirigentes de organizaciones civiles mexicanas, amigos de ustedes, me han


comentado lo que he descrito sobre la NED. Para unos está muy mal lo que
hago. Dicen que si EU financia al gobierno mexicano, debe también apoyar a
organizaciones civiles. ¿Qué tiene de malo? Menos, aclaran, cuando sirve a la
causa de la democracia y los derechos humanos. Añaden que el problema de
ustedes es no reconocer la validez del financiamiento norteamericano. Otros
señalan que en la época de la globalización la soberanía nacional ha perdido
valor. Así lo entiende el gobierno de México, así debe entenderlo las
organizaciones apoyadas por EU. En vez de condenar el financiamiento de EU
a ONGs hay que promoverlo a fin de contrarrestar el que se otorga al
gobierno.

Algunos más no están de acuerdo con que la NED y la USAID den dinero a
ustedes. Les parece que depender del gobierno norteamericano es tan malo,
si no peor, que depender del gobierno mexicano. Opinan que el argumento de
la globalización de la democracia y los derechos humanos no debe servir para
dar entrada a EU en áreas sensitivas de la soberanía popular. Cuentan que no
han podido tratar este asunto con ustedes, ya sea porque es un tema
incómodo o porque no han encontrado una actitud abierta. Siempre hay una
razón para no discutir a fondo el tema del apoyo norteamericano. Les parece
que la dependencia que la NED ha generado es muy fuerte. Piensan que los
grupos financiados por la NED no romperán con ella y que EU por nada dejará
caer el éxito de las redes que ha tendido con organizaciones civiles.

Comparto las opiniones de éste último grupo, pero soy optimista.


Conociéndolos a ustedes no creo que vayan a dar carta de naturalización
entre las organizaciones ciudadanas a la intervención estadounidense en
México. Cono todo, para quietarle a este debate el carácter personal o
subjetivo y darle la dimensión social que amerita, les propongo llevar a cabo
acciones que responden a sus demandas de apertura en asuntos públicos y
de consulta a la ciudadanía para orientar la toma de decisiones. Por ejemplo:

* Que la Asociación Nacional de Abogados Democráticos (ANAD) y su


contraparte estadounidense, el National Lawyers Guiad (NLG), hagan una
17

investigación sobre la NED y la USAID. La información sobre ambas agencias


es pública y fácil de adquirir. Igualmente la relativa a lo que la NED ha hecho
en países como Nicaragua y Cuba. También es de fácil acceso la información
sobre las “buenas” acciones de la NED en Chile, Filipinas y Sudáfrica. Estas
presentan un denominador común: una vez que las dictaduras impuestas o
sostenidas por EU dejan de ser útiles, los norteamericanos deciden apoyar a
grupos disidentes “moderados” para evitar la primacía de los “radicales” en la
transformación de estos países. El reporte de la ANAD y el NLG sobre qué
son y hacen en México la NED y la USAID serviría de base para discutir el
financiamiento de EU organizaciones civiles mexicanas en la reunión nacional
que ustedes tienen planeado realizar en agosto o septiembre de este año.

* Que Causa Ciudadana y Equipo Pueblo hagan un referéndum preguntando


a la población del D.F. dos cosas muy sencillas: si es bueno que el gobierno
norteamericano financie a grupos de observación electoral y derechos
humanos mexicanos; y si creen que EU entrega su dinero de manera
desinteresada. La respuesta a este referéndum, que puede ser modesto pero
representativo en el número de participantes, serviría también para la
discusión y la toma de decisiones en la reunión de septiembre.

* Que el magnifico suplemento de La Jornada sobre derechos humanos y


ciudadanía dirigido por el P. Concha dedique un número a analizar las
visiones e intereses norteamericanos sobre la vida política de México; el papel
que EU ha asignado a las organizaciones civiles en la transformación del país;
y los planes concreto de financiamiento a éstas para cambiar el sistema
político. Por su conocimiento de temas como los señalados podrían solicitarse
las contribuciones, por ejemplo, de Lorenzo Meyer, Cecilia Loria, Pablo
González Casanova, Denise Dresser, Luis Hernández Navarro, Emilio Krieger,
Luis González Souza y José Antonio Crespo. A todos ellos se les mandaría
literatura de contexto: los reportajes del The New York Times, La Jornada, The
DallasMorning news y El Financiero sobre la NED y la USAID. Se podrían
añadir folletos producidos por la NED explicando qué es y qué hace, junto con
investigaciones o reportes que sobre la NED y la USAID han escrito las
instituciones antes citadas. Los análisis de estos especialistas contribuirían
significativamente al debate sobre la relación entre EU y organizaciones civiles
mexicanas.

De no llevar a cabo sugerencias como éstas, temo que la NED y la USAID


aprovecharán la reunión de septiembre sobre financiamiento del exterior a
organizaciones civiles para legitimar sus operaciones en México. Ambas
agencias utilizarían el argumento general y válido de que asuntos como
democracia y derechos humanos son de interés global, y por lo tanto, el
financiamiento del exterior para lograrlos, incluido el de gobierno, es
bienvenido. La diferencia está, claro, en que ningún gobierno europeo tiene
sobre México y su pueblo la historia, geografía, TLC e intereses que tiene EU.
De verse cuestionadas en la reunión, la NED y la USAID saldrían con el
chantaje de que rehuir el financiamiento de EU implicará que el nuevo
Congreso mexicano vete todo apoyo del exterior a organizaciones civiles.

Cortar con la NED y la USAID será una tarea bastante difícil. Pero lograrlo,
dará a ustedes una ejemplar autoridad moral dentro y fuera de México.
Además, su valiente determinación alentaría la llegada de nuevos y sanos
recursos.

Muchas gracias por su infinita paciencia. Reitero mi ofrecimiento a hacer


públicas las sospechas o pruebas sobre mi participación en alguna campaña
gubernamental en contra de ustedes. Aclarar públicamente esto u otro asunto
que les interese sería de loa más saludable para ambas partes.

Atentamente.

Primitivo Rodríguez Oceguera

Tel/fax 574-0831

cc ANAD, Causa Ciudadana, CENCOS, CONAI, Equipo Pueblo, José Antonio


Crespo, Luis Hernández Navarro, Lorenzo Meyer.”
18

17.- Del contenido de la carta mencionada en el hecho que antecede, se


desprende lo siguiente:

En este documento la parte demandada comienza a orientar sus acusaciones en


contra mía, en principio, centrando sus imputaciones en contra de Alianza Cívica,
organización en cuya Coordinación Nacional participé, y en la que reconoce haber
participado.

La parte central de su argumentación gira en un supuesto: el financiamiento


otorgado por la Fundación Nacional para la Democracia es parte de la estrategia
del gobierno de los Estados Unidos de América para desplegar una política
intervencionista en apoyo a sus intereses. Sin embargo, este razonamiento resta
importancia a que la citada Fundación sea definida en sus estatutos como una
organización no gubernamental, para después asumir precipitadamente como un
hecho innegable que ella es un instrumento al servicio de los intereses
intervencionistas estadounidenses, al afirmar que su presupuesto se discute con
base en el beneficio que ese país obtiene de los proyectos financiados por esa
Fundación, por lo que con el financiamiento que otorga a ciertas organizaciones,
consigue manipularlas de tal forma que ayuden a cumplir con los objetivos de esa
política intervencionista, pero no sólo eso, sino que lo mismo acontece con los
dirigentes de esas organizaciones financiadas y dependientes de la Fundación.

Este documento es también interesante porque ilustra otro método que la parte
demandada empleará para desprestigiarme: a la acusación central de ser
instrumento de Estados Unidos de América le añade otras acusaciones, en este
caso una previamente empleada, que al observar la elección presidencial de 1994,
Alianza Cívica participó en la legitimación del triunfo del Partido Revolucionario
Institucional en las elecciones realizadas en México en 1994.

Por último, no está de más resaltar que un método que reiteradamente utilizará la
parte demandada para intentar dotar de interés público a sus acusaciones, aunque
en realidad obedezcan a sus muy particulares intereses personales, es pedir que
participen otras organizaciones o personas para validar lo que ella dice o para que
ayuden a que se transparente la información supuestamente ocultada. Es
sugestivo notar que involucra a estas organizaciones y personas sin consultarles.

Al respecto, debe recalcarse que es malicioso utilizar el hecho consistente en que


Alianza Cívica ha recibido financiamiento de la referida Fundación, para con base
en él aseverar como algo innegable que Alianza Cívica y la parte demandante
hemos sido manipulados por la citada Fundación, lo cual es falso, como también
es falso que ayudemos a cumplir con los objetivos de una supuesta política
intervencionista que el gobierno de los Estados Unidos de América realiza a través
de la Fundación Nacional para la Democracia. Asimismo, resulta falso que
Alianza Cívica y yo, tuviéramos como objetivo legitimar el triunfo del Partido
Revolucionario Institucional en las elecciones realizadas en México en 1994, al
participar como observadores de las elecciones efectuadas ese año en el país. En
este sentido, debe hacerse notar que todas estas falsedades, la parte demandada
las presenta como hechos incontrovertibles y que dice fundarlas en el análisis
veraz y objetivo de ciertos textos, pero sin que ello se encuentre demostrado.

18.- El suscrito, escribí un artículo en el periódico “Reforma”, mismo que fue


publicado el 19 de mayo de 1999, bajo el título “Sociedad y Partidos”, el cual se
acompaña a la presente demanda como anexo 8.

19.- El artículo que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:

“ENTRE PASADO Y PRESENTE


SOCIEDAD Y PARTIDOS

Sergio Aguayo Quezada Miércoles 19 de mayo de 1999,


REFORMA
19

Las organizaciones civiles surgen y existen porque hay necesidades enormes


que los gobiernos y partidos no han podido resolver y que en ocasiones ni
siquiera incorporan a sus programas.

Mientras el Palenque se alborota con el revoloteo de los precandidatos crece


el número de los asuntos importantes que se relegan. En la Cámara de
Diputados se amontonan las iniciativas, entre las que está la “Ley del Fomento
a las Actividades de Desarrollo Social de las Organizaciones Civiles”. Un
nombre horrible para un tema importante.

En las últimas décadas aparecieron y proliferaron en México las


organizaciones civiles (también conocidas como Organizaciones No
Gubernamentales). Hay de todos los sabores y colores, damas que entregan
caridad a un sector desprotegido, indígenas que luchan por defender sus
recursos naturales y autonomía, activistas que organizan obreras de
maquiladoras, profesionales que promueven el desarrollo o protegen algún
recurso natural, ciudadanos que verifican la limpieza electoral, et, etc.

Estas organizaciones surgen porque hay necesidades enormes que los


gobiernos y partidos no han podido resolver y que en ocasiones ni siquiera
incorporan a sus programas. Ante la inacción o los pocos resultados
aparecieron centenares, miles de iniciativas que fueron llenando huecos y
creando una realidad política que no acaba de ser aceptada políticamente, ni
tampoco se integra a la nueva institucionalidad. Casi todas estas
organizaciones tienen el estatuto legal de “Asociación Civil”, insuficiente para
enmarcar jurídicamente lo que hacen.

En algunos círculos políticos la aparición de estas organizaciones y su


incursión en la vida pública, es interpretada como el resultado de diabólicas
conspiraciones, que para algunas mentes calenturientas se originan en el
extranjero. En esta lectura se les acusa de querer profanar el sacro territorio
que monopolizan los partidos políticos. También se descalifican a las
organizaciones civiles diciendo que no tienen quien las controle.

Para enfrentar esta situación, organizaciones civiles tan diversas como el


Centro mexicano para la Filantropía, la Convergencia de Organismos Civiles
por la Democracia, El Foro de Apoyo Mutuo y la Fundación Miguel Alemán
(respaldada por la Universidad Iberoamericana), se pusieron a elaborar una
iniciativa de ley que cubriera los huecos y apaciguara las inquietudes.

La iniciativa es notable por el esfuerzo invertido en consensuar el


documento. En la revista Alegatos de la UNAM Atzcapozalco, Ernestina
Godoy y Rafael Reygadas publicarán próximamente un trabajo (“Reforma del
Estado y Organizaciones Civiles”) que explica la actividad desplegada por
este grupo: “de 1994 a 1997, las redes de organizaciones que formularon la
propuesta distribuyeron más de 10 mil ejemplares de la misma; realizaron
consultas con más de 3 mil fundaciones, asociaciones, sociedades civiles e
instituciones de asistencia privada; hicieron llegar la propuesta a todos los
secretarios de Estado, gobernadores, senadores y diputados federales;
asistieron a reuniones en más de 20 estados acerca del marco legal para las
actividades de bienestar y desarrollo social; y participaron en el proceso de la
Consulta de Participación Ciudadana organizada por la Cámara de
Diputados”.

La iniciativa parte de que el campo de participación ciudadana es distinto al


de los negocios, al religioso y al partidista. Las asociaciones son consideradas
de “interés general” y define con precisión sus propósitos, campo de actividad
y requisitos que deberán cumplir para transparentar sus actividades.

En noviembre de 1998 esta iniciativa fue presentada ante la Cámara de


Diputados. A estas alturas, la sensación que priva entre las organizaciones
civiles es de desaliento por la indiferencia mostrada por los partidos políticos.

En esta actitud seguramente influye que los partidos andan obsesionados


por las elecciones del año próximo y su horizonte de atención se ha reducido a
los ires y venires de los precandidatos, y a la desesperada búsqueda de
nuevos cargos.
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La frialdad de los partidos también tiene que ver con una forma de
conceptuar la política. Para un sector muy importante de la clase política, la
única forma válida de participar en la vida pública es a través de los partidos.
Visto así el mundo, las organizaciones civiles son percibidas como formas
imperfectas de organización social que deben incorporarse o someterse a los
partidos. Abundan los ejemplos que muestran la fortaleza de estas
percepciones.

La pluralidad de las organizaciones civiles dificulta hacer generalizaciones


que capturen su diversidad. Pese a ello, puede asegurarse que existe una
actitud de desconcierto por la indiferencia de los partidos políticos y de
insatisfacción por la ineficacia que han demostrado en la resolución de
problemas. Sorprende que a la luz de sus magros resultados se empeñen en
preservar el monopolio de los asuntos públicos y se rehúsen a legislar sobre
los mecanismos que permitirán la participación de los organismos civiles.

Ante esta situación, al interior de las organizaciones civiles se está gestando


un buen número de iniciativas. El Parlamento Ciudadano, Vertebra, Inter.-
agendas, son algunos de los esfuerzos que se están haciendo por crear una
articulación que permita influir en los partidos. Lo mismo puede decirse de la
Consulta Ciudadana organizada el domingo pasado en el Distrito Federal.
Pese a que el número no cumplió con las expectativas, la participación
muestra que persiste la inquietud sobre ciertos temas.

Al interior de las organizaciones sociales se están configurando dos grandes


corrientes. Una que sigue empeñada en consolidar un espacio de participación
civil no partidista. Seguirá por tanto la presión civil para que a la mayor
brevedad se apruebe la ley y sigan creándose espacios para la participación
social.

Otra corriente está decidida a involucrarse más directamente en las


actividades públicas. Entre las ideas que circulan está la de asumir las
responsabilidades de gobernar municipios. Propuestas de este corte enfrentan
obstáculos legales, porque los candidatos independientes tampoco han sido
incluidos en las prioridades de los partidos. Una alternativa es, por supuesto,
la creación de un partido de las “organizaciones civiles” que les sirva de
plataforma. Difícil y poco realista en el corto plazo.

Una salida posible es el establecimiento de convenios con uno o varios de


los 11 partidos políticos que actuarán durante las elecciones del próximo año.
Ello supone que los partidos entiendan las particularidades de las
organizaciones civiles y reconozcan la exigencia de autonomía relativa (de
hacerlo podrán recoger un caudal de votos y energía social que está a la
espera de ser reconocido).

Para que avancen este tipo de procesos tendrá que transformarse la cultura
política y reconocer que las organizaciones civiles son actores legítimos que
pueden enriquecer la vida pública y contribuir a la solución de muchos
problemas. Antes que nada ello supone la rápida aprobación de la “Ley de
Fomento a las Actividades de Desarrollo Social de las Organizaciones Civiles”.

Comentarios: fax: (5) 683 93 75.


Correo electrónico: sergioaguayo@infosel.net.mx”

20.- La parte demandada escribió una carta dirigida a las coaliciones que luchan
por el voto de los mexicanos en Estados Unidos de América, de la cual envió una
copia a la parte demandante vía fax, con fecha 9 de julio de 1999, la cual se
acompaña a la presente demanda como anexo 9.

Lo anterior le consta tanto a la parte demandada como a la señora Luz Beatriz


Rosales Esteva.

21.- La carta que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:

“FAX

Primitivo Rodríguez Oceguera


21

Tel. – Fax 574-0831

Fecha: 9 de julio de 1999

Para: Sergio Aguayo

De: Primitivo

Asunto: Las ONGs y el voto de los mexicanos y mexicanas en el extranjero.

¿Es sano que la lucha por el voto en el extranjero tenga de apoyo en México a
ONGs como el Movimiento Ciudadano por la Democracia, al que patrocina
desde hace años el Departamento de Estado Norteamericano a través de
agencias como la National Edowment of Democracy y la US Agency for
International Development?

Julio de 1999

Estimados amigos de las coaliciones que luchan por el voto de los mexicanos
y mexicanas en Estados Unidos (o en el extranjero) para el 2000:

Durante y después de su última visita a México el mes de junio para demandar


ante la Presidencia de la República, dirigentes políticos y miembros del
Congreso Ciudadano por la Democracia (MCD) surgió ante la opinión pública
como la más visible ONG a favor de esa demanda.

Pueden encontrar la historia, objetivos y programas del MCD en su página de


Internet (http://laneta.apc.org/mcd), mas no hallarán referencia a sus fuentes
de financiamiento. Menos a una en particular: la que recibe del Departamento
de Estado Norteamericano a través de la National Endowment for Democracy
(NED) y de la Agency for International Development (AID).

Una buena introducción a las operaciones de espionaje e intervención de la


NED y la AID en Centroamérica y otras regiones del mundo la ofrece Ph.
Agee, ex agente de la CIA, en el Internet. Pidan a Yahoo que les busque CIA-
NED y los remitirá a unas cinco referencias, dos de las cuales son de Agee.
Por otra parte, a fin de conocer a la NED y la AID en su propia versión de lo
que son, pueden solicitar a Yahoo les busque National Endowment for
Democracy, y US Agency for International Development. El rollo de ésta última
es muy largo, pero bien interesante. Para que nadie se llame a engaño, la AID
aclara en su primer párrafo de presentación que es una agencia que tiene
como objetivo dar financiamiento en el extranjero para promover los intereses
económicos y políticos de Estados Unidos.

Esa breve introducción a la NED y la AID puede completarse con reportajes


periodísticos como los siguientes (los medio traduzco cuando son en diarios
estadounidenses):

¿Una Mancha Extranjera en las Elecciones? Un Boomerang para EU, The


New York Times, 31 de marzo de 1997. el reportaje de primera plana revela
en sus párrafos iniciales que la NED fue creada por Ronald Reagan “para
hacer de manera abierta lo que la Agencia Central de Inteligencia ha realizado
de manera oculta por décadas…”

Fondos de EU a ONG mexicanas para promoción electoral, La Jornada, 19 de


abril de 1997. El reportaje es sumamente revelador en sus líneas y
entrelíneas. Cita, por ejemplo, a ex funcionarios del Departamento de Estado
dando a conocer la decisión que hizo su gobierno de financiar a Alianza Cívica
(de la que forma parte el MCD) a través de la NED para hacer creíble el triunfo
del PRI en las elecciones presidenciales de 1994. Estados Unidos se pasó al
IFE por el arco del triunfo en ese año y querrá hacerlo nuevamente en el 2000,
promoviendo a través de ONG y otros medios los alegatos de un IFE acosado
y dividido, y por lo tanto sin credibilidad. Estados Unidos se convertiría así en
el juez supremo del proceso electoral y sus resultados. Como en 94, a través
de Alianza Cívica.

Recibirá Alianza Cívica y la AMDH fondo estadunidense para monitoreo


electoral, La Jornada, 30 de abril de 1997; y Estados Unidos apoyará el
22

esfuerzo de México por la democracia, The Dallas Morning News, 27 de abril


de 1997. Ambos reportajes dan cuenta del patrocinio a ONGs por parte del
gobierno norteamericano. El del Dallas Morning News habla incluso del monto
de dólares que la embajada estadounidense en México entrega al MCD.

Si después de esta segunda introducción al tema quieren seguirle, podrían


consultar el libro clásico sobre la conexión NED y AID con la CIA y otras
agencias de espionaje, así como las operaciones de aquellas “a favor de la
democracia” en Centroamérica: La Fundación Nacional para la Democracia
(NED): Una Rama de la Política Exterior que Creció Torcida, Council of
Hemispheric Affaire and Inter-Hemispheric Resource Center, Washington, DC,
1990. El libro, del que quedan pocos ejemplares, se consigue en el Inter-
Hemispheric Resource Center, con base en Albuquerque, NM. Tel. (505) 842-
8288 y fax (505) 246-1601. Ahí mismo pueden solicitar, si la curiosidad de
saber más sobre el tema se hace inaguantable, dos estudios a cerca del papel
de la NED y la AID en las elecciones mexicanas de 1994: Apoyo Exterior al
Proceso Mexicano de Democratización, Beth Sims, Resource Center Press,
Albuquerque, NM, mayo de 1994; y La Administración Clinton y las Elecciones
Mexicanas, Jared Cotier, Resource Center Press, Albuquerque, NM, diciembre
1994. Estos dos trabajos informan de las ONGs y organizaciones patronales y
sindicales que han sido financiadas por la NED de 1987 a 1994.

No podría faltar, claro, un documento con la versión del MCD, Alianza Cívica y
otras ONGs sobre su patrocinadora, la NED: “Carta a la H. Cámara de
Diputados y a la opinión pública”, 21 de abril de 1997. La carta es oro molido
de principio a fin. Lo más interesante (o cómico) es cuando los firmantes
argumentan que la NED no tiene nada que ver con el gobierno
norteamericano, que es una ONG, y lo prueban citando a la propia NED en
sus documentos constitutivos. ¿Han conocido ustedes a un agente de la CIA
que se presente como “Hola, qué tal, soy Jim Smith, trabajo para la CIA”? Si el
PRI fuese juzgado por sus documentos básicos merecería Premio Nóbel de la
Democracia y la Justicia Social. Esta carta la pueden conseguir, de no
haberse “agotado” o “extraviado”, del propio MCD, tel 211-6919.

Una última referencia, sabrosa para el chisme, sería el reportaje de La


Jornada, del 25 de marzo de este año, sobre la supuesta “campaña” que un
servidor trae desde hace rato y con las peores intenciones en contra del MCD,
Alianza Cívica y la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los
Derechos Humanos. No se lo pierdan.

En ese reportaje, la dirigente de la Comisión Mexicana dice que su


organización no recibe fondos de la NED, pero oculta que los obtuvo de 1993
a 1997 y que es ella parte del Consejo Directivo del MCD y otras ONG que los
siguen recibiendo. Por su lado, el dirigente de Alianza Cívica señala que su
organización no acepta, por supuesto que no, dinero de la AID, pro ser una
agencia de mala fama por su intervencionismo en Centroamérica. Se lo olvidó
contar que Alianza Cívica es la ONG que más dólares ha recibido de la NED,
cuya fama pública es igual o peor que la de la AID. Por último, la dirigente del
MCD, Luz Rosales, responde que no obstante lo que digo su colega de
Alianza Cívica, el MCD sí recibe financiamiento de la AID, pues esta agencia
tiene su parte mala y su parte buena. Con esa lógica ¿Por qué pedir se
castigue a los autores intelectuales y materiales de Acteal y Aguas Blancas?
¿no tienen ellos también su “parte buena”? Respondí a este reportaje en una
carta publicada en La Jornada el 12 de abril. Tampoco dejen de leerla en el
Internet. Es de gratis y aumenta la comezón del chisme.

Cuando los y las dirigentes del MCD y demás ONGs patrocinadas por la NED
hacen declaraciones como las apuntadas en el párrafo anterior no es que
sean tontos. Lo que sucede es que ni un Einstein podría defender, sin caer en
el ridículo, que ONGs que navegan con la bandera de independientes,
progresistas, izquierdistas y anti neoliberales sean patrocinadas por el
gobierno de Estados Unidos a través de agencias de espionaje e intervención.
¿Qué les parecería a ustedes promover los derechos humanos con
financiamiento de la Fundación Roberto Albores o Rubén Figueroa?

Con todo, este no es un asunto sobre incongruencias o ridículos. El rollo es


bastante serio. Las ONG patrocinadas por la NED y la AID trabajan temas y
regiones del país bastante sensibles para la lucha social y política del pueblo y
23

la seguridad nacional de México. La NED y la AID tienen por ley la obligación


de informar al Congreso de Estados Unidos cómo han servido los dólares que
distribuyen a los intereses económicos y políticos de Norteamérica. Lo hacen
cada año. Consideran el financiamiento dado a ONGs como el MCD de lo más
barato y rentable para Estados Unidos.

Lo menos que debe pedirse al MCD, antes de aceptar su apoyo, es que


discuta públicamente en México y/o en Estados Unidos el porqué de su fuerte
y larga relación con agencias de espionaje norteamericanas, no obstante
presentarse como una organización “independiente,” “progresista”, y “anti
neoliberal”. Si el MCD cree que el Departamento de Estado es el mejor aliado
de quienes luchan por la autodeterminación y derechos del pueblo mexicano
en ambos lados de la frontera que lo explique de manera pública. A mi me
pueden acusar de ser lo que gusten. Ello no exime al MCD, Alianza Cívica y
otras ONGs de dar cuenta a la ciudadanía de porqué trabajan para el gobierno
norteamericano, y también de porqué han ocultado y siguen ocultando
información como la aquí presentada a sus propias compañeras y compañeros
de trabajo, a los miembros de sus consejos de dirección y a las
organizaciones con las que se relacionan. ¿Acaso el MCD les dijo a ustedes
que era patrocinado por la NED y la AID?

Ojalá que Juan Manuel y Jesús puedan convencer al MCD de debatir con
ustedes los temas aquí reseñados.

Gracias amigos y compañeros por su atención a estas notas.

¡EL VOTO VA! ¡HASTA LA VICTORIA, SIEMPRE!

Primitivo Rodríguez Oceguera

Tel y Fax 574-0831

P.D.

En privado, algunos dirigentes del MCD y Alianza Cívica me han dicho que
aceptan el financiamiento de la NED y la AID porque viene sin condiciones y
sirve para hacer cosas buenas. Con esa lógica del fin justifica los medios, ¿por
qué no recibir dinero de Paz y Justicia en Chiapas, sin condiciones y para
cosas buenas, como construir escuelas en los municipios autónomos?

Dicen también que Estados Unidos ya cambió, que se ha puesto a favor de la


democracia en México y por ello financia al MCD y otras ONG progresistas. El
problema con este decir es que la propia NED y la AID, en sus páginas de
internet, afirman que su objetivo es promover las democracias de libre
mercado (¿serán estas democracias anti neoliberales?), y promover los
intereses de Estados Unidos (¿serán éstos los intereses de los inmigrantes y
del pueblo mexicano?)

Otro argumento con el que estas ONG buscan justificar el patrocino del
Departamento de Estado es afirmar que los derechos y la democracia ya se
globalizaron. Que México ha firmado varios tratados al respecto y que por lo
mismo, Estados Unidos hace bien en reclamarle al gobierno mexicano, de
manera directa o a través de las ONG que financia, que cumpla con lo
firmado. Todo ello está bien, excepto por lo que falta añadir.

Estados Unidos defiende los derechos de las y los mexicanos, pero de lo que
están en México. Una vez que las mujeres, hombres y niños se convierten en
inmigrantes, al gobierno estadounidense como que se le olvida la dignidad de
los mexicanos. Y eso para no hablar de las ciudadanas y ciudadanos
estadounidenses cuya dignidad y derechos son violados cotidianamente, por
ejemplo, en los campos agrícolas y en los talleres de costura. Y lo más
importante: que el gobierno norteamericano no ha dado un dólar al MCD, a
Alianza Cívica o cualquier otra ONG para que lo denuncien en foros
internacionales de la ONU o la OEA por la masiva violación de derechos en
Norteamérica. Mas sí paga y bien para que ONG mexicanas lo hagan en
contra del gobierno de México. Estados Unidos no gasta dinero en esto por
amor a la justicia, sino para presionar, chantajear y sacar más concesiones de
México, o para retrasar y bloquear, de ser posible, el tratado de comercio con
24

la Unión Europea. Esta no es entonces globalización de la democracia y los


derechos, sino globalización de la unilateralidad y la hipocresía
norteamericanas y de la subordinación de gobiernos y de ONG a Estados
Unidos.

Ya no sigo con ejemplos similares porque me encabrono o me muero de risa.


Dejen que el MCD les haga éstos y otros planteamientos a ustedes, si se
atreve a hacerlo.

C.c.p. en México: Juan Manuel, Jesús y Luz Rosales (Secretaria Ejecutiva del
MCD). Le pediría a Luz que de copias de esta carta a todas las ONG que han
recibido y reciben dinero de la NED y la AID. Le pediría un segundo favor:
reiterarles a esas ONG la invitación de mi parte para debatir el tema de la
carta y cuanto se les ocurra sobre mi persona, donde quieran, cuando quieran
y con quien quieran. Se que no lo harán. Es nada más para el expediente (ya
bastante gordo al respecto). Espero que ustedes corran con mejor suerte.”

22.- Del contenido de la carta mencionada en el hecho que antecede, se


desprenden las siguientes acusaciones en contra de la parte demandante:

En este escrito la parte demandada intensifica la campaña de desprestigio que ha


comenzado a relatarse, añadiendo algunas acusaciones particularmente graves.
En principio, califica de operaciones de espionaje a las actividades de la
Fundación Nacional para la Democracia, además de que reitera su carácter
intervencionista. Asimismo, asevera sin reparo alguno que Estados Unidos de
América busca convertirse en el juez supremo de los procesos electorales en
México, pasando por alto y desprestigiando al Instituto Federal Electoral.

Por otro lado, aunque todavía no me ubica en el centro de sus acusaciones, ya


puede observarse que empieza a ponerme en la mira al incluir acusaciones contra
el dirigente de Alianza Cívica que oculta que esta organización es la que recibe la
mayor cantidad de dólares por parte de la mencionada Fundación. Asimismo, la
parte demandada cuestiona la independencia y la orientación social, económica y
política de las organizaciones, siempre que estas sean patrocinadas por el
gobierno de Estados Unidos de América a través de agencias de espionaje e
intervención como es, según su postura muy particular, la citada Fundación.

En este orden de ideas, no esta por demás reiterar que con base en ciertas
publicaciones utilizadas en el pasado, la parte demandada asegura, sin ningún
sustento, que utilizar recursos provenientes de la Fundación Nacional para la
Democracia, implica automáticamente trabajar para el gobierno estadounidense e
involucrarse en actividades de espionaje e intervención a favor de dicho gobierno.

Al respecto, debido es recalcar que es falso afirmar que aquél que recibe recursos
provenientes de la Fundación Nacional para la Democracia se convierte por ese
motivo en agente al servicio del gobierno norteamericano o, todavía de mayor
gravedad, que se involucra por ello en actividades de espionaje e intervención en
beneficio de los Estados Unidos de América. El hecho de que la parte demandada
me acuse de ser un agente de la inteligencia norteamericana constituye una
expresión en sí misma maliciosa que denota con claridad su intención de
ofenderme y desprestigiarme en público. Asimismo, resulta falso aseverar que he
ocultado información sobre el financiamiento que ha recibido Alianza Cívica, pero
sobre todo ilustra una actitud maliciosa de la parte demandada, utilizar esa
falsedad para intentar soportar sus falsedades anteriores. En este sentido, debe
hacerse notar a su Señoría que todas estas falsedades, la parte demandada las
presenta como hechos incontrovertibles y que dice fundarlas en el análisis veraz y
objetivo de ciertos textos, pero sin que ello se haya demostrado fehacientemente.

Con independencia de todo ello, es importante hacer notar a su Señoría que en


1999 renuncié a formar parte de la Coordinación Nacional de Alianza Cívica, y que
durante los años que participé en dicha Coordinación las decisiones se tomaron
de manera colegiada.
25

23.- La parte demandada dirigió una carta a la parte demandante, con fecha 12 de
julio de 1999, la cual se acompaña a la presente demanda como anexo 10.

Lo anterior le consta tanto a la parte demandada como a las personas Mariclaire


Acosta Urquidi y P. Miguel Concha Malo.

24.- La carta que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:

“12 de julio de 1999.

Sergio Aguayo Quesada


México, DF

Sergio, escuché el pasado viernes tu recado en la grabadora del teléfono.


Dices que en pocos días sería posible reunirnos con José Luis Pérez
Canchola (JLPC) para hablar de la relación de las agencias National
Endowment for Democracy (NED) y la US Agency for International
Development (AID) con ONG mexicanas. Reunión que por cierto hace
alrededor de un mes prometiste tendría lugar en una o dos semanas.

En esa ocasión, te comunicaste para comentar la carta al editor que envié a


Reforma sobre un artículo tuyo en el que hablabas de “mentes calenturientas”
que acusan a ONG de ser manejadas por gobiernos extranjeros. Te di noticia
de esa carta antes de su posible publicación, con copia para René Delgado y
Roberto Zamarripa.

La carta no se publicó. Tampoco tuvo lugar la reunión con JLPC. No me


llamaste siquiera para informar que se había postergado o suspendido.

Ahora vuelves a hacer la invitación después de haber recibido el pasado


viernes copia de un documento mío a dirigentes de organizaciones mexicanas
con base en Estados Unidos que luchan por el voto en el extranjero. En ese
documento argumenté la inconveniencia de aceptar el apoyo (al menos sin
condicionarlo) de ONG como el Movimiento Ciudadano por la Democracia,
debido a su vieja liga con el Departamento de Estado Norteamericano a través
de la NED y la AID.

No obstante el respeto y admiración que tengo por JLPC, me veo obligado a


no aceptar la reunión que propones. No existe el ambiente de confianza para
hacerlo.

La carta que envié a Reforma debió publicarse. Siendo tú promotor de la


transparencia y el derecho a la información en asuntos de interés público, era
de esperarse que apoyarías la publicación de esa carta. Las objeciones que
tenías sobre la misma pudiste expresarlas en Reforma, es lamentable que tú,
miembro destacado de la recién estrenada “Transparencia Mexicana”,
rechaces discutir en público un modesto comentario a tu frase sobre “las
mentes calenturientas”. Hay en esa actitud opacidad, no transparencia.
Reproduce la vieja cultura del encubrimiento ante información incómoda.

El patrocinio que dan la NED y AID a ONG es de interés público, no particular.


Desde hace más de dos años, primero en cartas privadas y posteriormente en
cartas abiertas, he pedido la discusión pública de ese delicado tema. Con
todo, el debate no se ha dado, a pesar de promesas tuyas y de otros
dirigentes de ONG a miembros de la Cámara de Diputados y lectores(as) de
La Jornada.

Existen pruebas documentales para tener, al menos, la seria sospecha de que


la NED y la AID son parte del aparato de espionaje e intervención del gobierno
norteamericano. Las hay, en consecuencia, para argumentar que las ONG
que reciben su financiamiento trabajarían para Estados Unidos en campos
sensibles de la lucha social y política del pueblo y la soberanía del país.

El objetivo de la NED y la AID es claro, incluso cínico por explícito: el capital


transnacional (el mexicano incluido) debe tener en México y el resto del Tercer
Mundo el tipo de democracia y estado de derecho que le den garantías de
estabilidad, rentabilidad y dominio. Democracia sí, pero de “libre mercado”.
26

Lucha contra la corrupción, desde luego, pero la ramplona y atrasada de los


gobiernos priistas, no contra la “moderna” y sancionada de Estados Unidos y
Europa. Respeto a los derechos humanos de las mexicanas y mexicanos, por
supuesto, pero de los que viven en México, no de quienes se atrevieron a
cruzar la frontera. Patrocinio de Estados Unidos a ONG mexicanas para
fiscalizar al gobierno, faltaba más, pero que ni piensen los gobernantes y
legisladores de México hacer lo mismo con ONG de Norteamérica.

Basta leer las páginas de la NED y la AID en el Internet, así como solicitar a
Yahoo buscar CIA-NED, para oler y ver que se trata de agencias de espionaje
e intervención. Por ello, varias ONG no aceptaron los cortejos de esas
agencias y otras que lo hicieron, pronto se dieron cuenta dónde estaban y
pintaron su raya.

Si la “sociedad civil” representada en las ONG ligadas a la NED y a la AID


fuese coherente con la ética y transparencia que predica, hace rato que habría
hecho del debate sobre puntos como los aquí señalados una prioridad de su
agenda pública.

Así las cosas, con el apoyo de amigas y amigos de aquí y el Otro Lado,
continuaré escribiendo sobre la conexión NED-AID-ONG en los espacios que
lo permitan. Si te interesa discutir el tema (mis motivaciones al respecto
incluidas), me complacerá enormemente hacerlo en la arena pública, no en
privado.

Sergio, gracias por tu atención a los asuntos de esta carta. No han perdido
relevancia. Por el contrario, ante el proceso electoral para renovar la
Presidencia y el Congreso, Estados Unidos buscará ser una vez más el juez
del proceso y de sus resultados a través de organizaciones y personajes
“independientes” y “críticos”. Como lo hizo en 1994, según ex funcionarios del
Departamento de Estado, para legitimar el triunfo del PRI a través de las ONG
que dirigían Alianza Cívica, casi todas financiadas por la NED.

Primitivo Rodríguez Oceguera

P.D. Si tienes comentarios a la presente, te pediré me los envíes por escrito.


C.c.p. José Luis Pérez Canchola, Mariclaire Acosta y el P. Miguel Concha.”

25.- Del contenido de la carta mencionada en el hecho que antecede, se


desprenden las siguientes acusaciones en contra de la parte demandante:

Directamente la parte demandada me acusa de no apoyar la publicación de una


carta suya dirigida al periódico “Reforma”, por lo que, según su peculiar
razonamiento, ese supuesto proceder de mi parte demuestra opacidad, falta de
transparencia y una actitud de encubrimiento ante información incómoda. Sin
embargo, la parte demandada pasa por alto que nunca he tenido cargo directivo
alguno en ese diario, en el cual solamente publico una columna semanal, por lo
que no depende de mí que se publiquen o no las cartas dirigidas a su “editor”.

Asimismo, no está de más hacer notar a su Señoría que otro método que
constantemente utilizará la parte demandada para intentar dotar de interés público
a sus acusaciones, aunque en realidad obedezcan a sus muy particulares
intereses personales, es exigirme que debata públicamente con ella sus
acusaciones. Sobre el tema, en este punto concreto me reprocha que no se
hubiera organizado un foro que prometieron ciertos organismos civiles,
circunstancia que en mi caso corregí organizando una conferencia pública meses
después. Como sea, le resultará evidente a su Señoría que no puedo
responsabilizarme por las decisiones que adopten diferentes organizaciones.

Cuestión aparte pero de la mayor trascendencia, consiste el hecho de resaltar la


manera en que la parte demandada arriba a las conclusiones que sustentan sus
acusaciones. Insiste la parte demandada en acusar a las organizaciones que
reciben financiamiento de la Fundación Nacional para la Democracia, de trabajar
al servicio del gobierno de los Estados Unidos de América, pero tan delicada
aseveración la basa en sospechas de que esa Fundación realiza actividades de
27

espionaje, luego de lo cual, sin reparo alguno, a partir de esas mismas sospechas
no tiene duda de que las organizaciones receptoras del financiamiento sirven a los
intereses estadounidenses. Entre esos planes de intervención, nuevamente
afirma la parte demandada que ese país buscaría influir destacadamente en las
elecciones para renovar la Presidencia y el Congreso de México, recurriendo a
organizaciones y personajes independientes y críticos, como Alianza Cívica, tal
cual lo efectuara, según su punto de vista, en las elecciones realizadas en 1994.

Estas acusaciones esgrimidas por la parte demandada, obligan a reiterar su


falsedad. Al respecto, debe recalcarse que es falso que Alianza Cívica, una de las
organizaciones que ha recibido financiamiento por parte de la citada Fundación,
así como sobre todo, la parte demandante, seamos dependientes de la Fundación
Nacional para la Democracia. Con mayor razón, resulta falso que participemos de
una política intervencionista encabezada por el gobierno estadounidense. El
hecho de que la parte demandada me acuse de ser un agente de la inteligencia
norteamericana constituye una expresión en sí misma maliciosa que denota con
claridad su intención de ofenderme y desprestigiarme en público. De igual
manera, es falso que mi labor y la de Alianza Cívica se hayan encaminado por
instrucciones de esa Fundación o del gobierno norteamericano, a la supuesta
tarea de legitimar un triunfo del Partido Revolucionario Institucional en las
elecciones de 1994 en nuestro país, ni tampoco para que los Estados Unidos de
América influyeran en alguna otra elección en México. En este sentido, debe
hacerse notar a su Señoría que todas estas falsedades, la parte demandada las
afirma como hechos incontrovertibles y que dice fundarlas en el análisis veraz y
objetivo de ciertos textos, pero sin que ello se haya demostrado fehacientemente.

26.- La parte demandada dirigió una carta, con fecha 21 de junio de 2000, a
Alejandro Junco de la Vega, Director General del periódico “Reforma”, la cual se
acompaña a la presente demanda como anexo 11.

Lo anterior le consta a la parte demandada.

27.- La carta que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:

“21 de junio de 2000

Alejandro Junco de la Vega


Director General
Reforma

Señor Director:

Felicito al editorialista de Reforma, Sergio Aguayo, por los párrafos que tiene
en su editorial del 21 de este mes, “El arte de la evasión”, sobre ética y
congruencia en la vida pública de México.

Aguayo es conocido como promotor de la transparencia y del libre debate de


ideas en asuntos de interés público. Con base en ello, me permito hacerle dos
comentarios y una pregunta que estoy seguro responderá con agrado.

Alianza Cívica, de la que Sergio Aguayo fue fundador y dirigente, ha sido


financiada desde su creación en 1994 por la Fundación Nacional para la
Democracia (NED, pos sus siglas en inglés). El diario The New York Times (31
de marzo de 1997) y respetadas instituciones norteamericanas de
investigación, como The Cato Institute (1993) y The Inter-Hemispheric
Resource Center (1990), revelaron que la NED fue creada para realizar
abiertamente operaciones antes reservadas a la CIA y documentaron
operaciones de espionaje e intervención de la NED en varios países. Aguayo
conoce muy bien esta literatura.

En marzo de 1997 Alianza Cívica y otras ONG fueron acusadas por el Dip.
Luis Sánchez Aguilar, adscrito a la fracción del PRD, de trabajar para el
Departamento de Estado norteamericano por sus ligas con la NED. En
respuesta, Aguayo y otros dirigentes civiles negaron en una carta dirigida a la
Cámara de Diputados y la opinión pública (21 de abril) que la NED fuese parte
28

del gobierno y prometieron organizar un foro abierto a los medios de


comunicación para discutir el financiamiento a ONG. Renovaron la promesa
en carta publicada en un diario nacional el 1 de junio. El foro nunca se realizó.

Como candidato a Diputado por el PCD, Sergio Aguayo afirma que promoverá
en la Cámara la transparencia y la rendición de cuentas por parte de
funcionarios y representantes populares. ¿Podría Aguayo dar a la ciudadanía
un adelanto de sus convicciones políticas organizando, ahora sí, un foro
público para transparentar la relación NED-Alianza Cívica, al menos durante
los años que él la dirigió?

Primitivo Rodríguez Oceguera


Tehuantepec 247-201, Col. Roma Sur, México DF Tel. 55-74-08-31”

28.- Del contenido de la carta mencionada en el hecho que antecede, se


desprenden las siguientes acusaciones en contra de la parte demandante:

Me acusa de ocultar información sobre el financiamiento que Alianza Cívica ha


recibido de la Fundación Nacional para la Democracia, la que según reitera la
parte demandada es una agencia de espionaje al servicio del gobierno de los
Estados Unidos de América. Con base en ello, cuestiona la congruencia de mi
crítica a los problemas de transparencia en el gobierno, bajo el razonamiento de
que yo mismo no informo sobre la relación entre Alianza Cívica y dicha Fundación,
con lo que pretende sembrar dudas sobre mi seriedad como analista en ese tema.

Al respecto, debe recalcarse que es falso que haya ocultado información sobre el
financiamiento recibido por Alianza Cívica, pero sobre todo es importante destacar
que la parte demandada evidencia una actitud maliciosa al usar esa falsedad para
atacar mi congruencia, profesionalismo e independencia en las críticas que realizo
sobre los problemas de transparencia gubernamental. En este sentido, debe
hacerse notar a su Señoría que esa falsedad, la parte demandada las presenta
como un hecho incontrovertible y que dice fundarla en el análisis veraz y objetivo
de ciertos textos, pero sin que ello se haya demostrado fehacientemente.

Independientemente de las mencionadas acusaciones, debido es hacer notar a su


Señoría que en el momento en que se envió esta carta por la parte demandada,
yo ya no formaba parte de la Coordinación Nacional de Alianza Cívica.

29.- La parte demandada dirigió una carta al periódico “La Jornada”, misma que
fue publicada en ese diario el 19 de abril de 2001, reconociendo su autoría, bajo el
título “Señala vínculos de ONG mexicanas con la ultraderechista NED”, la cual se
acompaña a la presente demanda como anexo 12.

30.- La carta que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:

“Señala vínculos de ONG mexicanas con la ultraderechista NED

Estimada Carmen: El voto de condena a Cuba promovido por Estados Unidos


en la Comisión de Derechos Humanos de la ONU ha suscitado un amplio
debate sobre la posición del gobierno mexicano al respecto. Contribuyo con la
siguiente información sobre actores clave en este debate: Mariclaire Acosta y
Sergio Aguayo, y su relación con la Fundación Nacional para la Democracia
(NED por sus siglas en inglés), agencia que financia a grupos ultraderechistas
de cubanos exiliados.

El 18 de marzo de 1997, Acosta, Aguayo y otros dirigentes de ONG fueron


acusados en la Cámara de Diputados de trabajar para el gobierno de Estados
Unidos por recibir financiamiento de la NED. El 21 de abril del mismo año,
Acosta, Aguayo y los demás aludidos enviaron una carta abierta a esa
Cámara señalando que la acusación formaba parte de una sucia campaña y
que la NED era una agencia independiente. Además, prometieron discutir en
un foro abierto el financiamiento extranjero a las ONG. El 1 de junio repitieron
la promesa en una carta publicada en El Correo Ilustrado.
29

Acosta y Aguayo no cumplieron lo prometido. Quizá, porque en esos meses


se conoció en México un reportaje del diario The New York Times, aparecido
el 31 de marzo, donde se revelaba que la NED había sido creada por Ronald
Reagan para complementar el trabajo de la CIA. El diario confirmaba lo que
por años habían dicho de la NED institutos de investigación y ONG
estadunidenses.

La NED financió por cinco años a la Comisión Mexicana de Defensa y


Promoción de los Derechos Humanos, dirigida por Acosta, y desde su
fundación hasta el día de hoy, a Alianza Cívica, dirigida por Aguayo.
Actualmente, Aguayo pertenece al Comité Ejecutivo del Movimiento Mundial
por la Democracia creado por la NED y dedicado a impulsar los intereses de
Estados Unidos (ver http://www.ned.org).

En el contexto del debate sobre la política mexicana en derechos humanos,


Acosta y Aguayo deberían cumplir su promesa de explicar porqué aceptaron el
patrocinio de una agencia de espionaje, cuyo trabajo incluye promover directa
e indirectamente entre las ONG condenas al gobierno de Cuba, pero no al de
Estados Unidos, por la muerte y abuso cotidiano de inmigrantes mexicanos.

Primitivo Rodríguez Oceguera”

31.- Del contenido de la carta mencionada en el hecho que antecede, se


desprenden las siguientes acusaciones en contra de la parte demandante:

En principio, es de destacarse que en ella se intensifican las acusaciones que me


hace la parte demandada. En ese tenor, retoma las acusaciones que con
anterioridad esgrimiera en contra de Alianza Cívica y, como es trascendental no
perder de vista, las transforma en acusaciones en contra de mi persona. Así, me
acusa directamente de aceptar el patrocinio de una agencia de espionaje, como
califica a la Fundación Nacional para la Democracia, circunstancia por la cual
concluye que me dedico a impulsar los intereses de los Estados Unidos de
América. En el caso concreto, la parte demandada interpreta que si firmo cartas o
escribo sobre la violación de los derechos humanos en Cuba y sobre el voto de los
representantes diplomáticos de nuestro país ante la Comisión de Derechos
Humanos de la Organización de la Naciones Unidas respecto de ese tema, lo
hago porque coincide con la agenda estadounidense. Como es evidente, esa
interpretación lesiona el prestigio que me he forjado como analista independiente.

A todo esto, la parte demandada alega como prueba de ese supuesto patrocinio
que recibo de una agencia de espionaje, no sólo el financiamiento recibido por
Alianza Cívica, sino también que esa Fundación, desde su particular perspectiva,
me ha colocado en el Comité Ejecutivo del Movimiento Mundial por la Democracia,
que según su dicho, está dedicado a impulsar los intereses norteamericanos.

A partir de estos peculiares razonamientos, la parte demandada concluye que


debiera abstenerme de criticar ciertas violaciones de derechos humanos, porque
desde su punto de vista, mis críticas sólo demuestran que promuevo la agenda de
intereses estadounidenses, a los que me encuentro sometido. En definitiva, la
parte demandada me acusa de carecer de independencia en mi labor cotidiana.

Al respecto, debe recalcarse que es falso que yo haya aceptado el patrocinio de


una agencia de espionaje, como es falso que me dedique a impulsar los intereses
del gobierno estadounidense. Además, resulta conveniente reparar en que la
parte demandada recurre a esas falsedades para, de forma por demás maliciosa,
tachar mis opiniones en materia de derechos humanos como carentes de
independencia y orientadas a defender una supuesta agenda estadounidense en
esta materia. De igual modo, aclara la malicia con la que se desenvuelve la parte
demandada, que sus falsedades las funde en el financiamiento que ha recibido
Alianza Cívica por parte de la Fundación Nacional para la Democracia y en mi
participación en el Movimiento Mundial por la Democracia, como si ello conllevara
irremediablemente la pérdida de autonomía en mis actividades cotidianas y mi
sometimiento a intereses norteamericanos. En este sentido, debe hacerse notar a
su Señoría que todas estas falsedades, la parte demandada las presenta como
30

hechos incontrovertibles y que dice fundarlas en el análisis veraz y objetivo de


ciertos textos, pero sin que ello se haya demostrado fehacientemente.

32.- La parte demandada dirigió una carta al periódico “La Jornada”, misma que
fue publicada en ese diario el 23 de abril de 2001, reconociendo su autoría, bajo el
título “Mariclaire Acosta debió conocer actividades de espionaje de la NED”, la
cual se acompaña a la presente demanda como anexo 13.

33.- La carta que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:

“Mariclaire Acosta debió conocer actividades de espionaje de la NED

Señora directora: A nombre de la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción


de los Derechos Humanos (CMDPDH), Laura Salas contestó el 21 de este
mes en El Correo Ilustrado a una carta mía publicada en el mismo espacio el
día 19, donde informaba sobre el financiamiento de la controvertida agencia
estadunidense Fundación Nacional para la Democracia (NED, por sus siglas
en inglés) a la CMDPDH. En la carta, Salas afirma que la CMDPDH ha sido
víctima de una campaña de desprestigio y que las agencias que la financian
no le ponen condiciones. Respondo con los siguientes comentarios.

Como presidenta de la CMDPDH, Mariclaire Acosta aceptó dinero de la NED


por cinco años para investigar y divulgar violaciones a los derechos humanos
en México. Al aceptar el financiamiento, Acosta seguramente conocía, por ser
del dominio público en Estados Unidos, que la NED patrocinaba a grupos
ultraderechistas de cubanos exilados, y que dicha agencia tenía un amplio
historial de actividades de intervención y espionaje en países como Nicaragua,
Panamá, Filipinas, Sudáfrica y Polonia. Si alguna duda quedaba al respecto,
el periódico The New York Times reveló el 31 de marzo de 1997 que la NED
había sido creada por Ronald Reagan para llevar a cabo operaciones antes
reservadas a la CIA.

Pero quizá lo más grave, es que justamente durante los años que Acosta
aceptó el patrocinio del gobierno estadunidense, éste puso en práctica las
políticas de control migratorio que han causado la muerte de más de mil
mexicanas y mexicanos, además de un aumento sin precedente de abuso y
racismo contra inmigrantes. ¿Habría aceptado Amnistía Internacional dinero
de Roberto Albores para denunciar abusos contra los pueblos indios de
Chihuahua, así no le hubiesen puesto condición alguna para realizar el
trabajo?

La incongruencia de Acosta y de otros dirigentes de ONG patrocinadas por la


NED, como Sergio Aguayo, y el hecho de que no rindan cuentas a la
ciudadanía, muestra la urgente necesidad que tienen las ONG en su conjunto
de adoptar públicamente un código de ética y transparencia. Mientras no lo
hagan, agencias de espionaje como la NED las seguirán cooptando y
desprestigiando.

Atentamente,

Primitivo Rodríguez Oceguera”

34.- Del contenido de la carta mencionada en el hecho que antecede, se


desprenden las siguientes acusaciones en contra de la parte demandante:

Este documento conviene resaltarse toda vez que a través suyo la parte
demandada pone de manifiesto que le es prioritario desprestigiarme. En efecto, a
pesar de que su carta se endereza a acusar también falsamente a otra persona y
organización, la parte demandada no deja pasar la oportunidad de esgrimir
acusaciones en contra mía. Me acusa de incongruente y de no rendir cuentas a la
ciudadanía, porque desde su particular punto de vista, al haber sido dirigente de
una organización no gubernamental patrocinada por la Fundación Nacional para la
Democracia, a la que califica de agencia de espionaje, he sido cooptado y
desprestigiado por esa misma Fundación. En realidad, es la parte demandada la
que continúa atacando mi honra y reputación al considerar que mi participación en
una organización que recibe un porcentaje de su financiamiento por parte de la
31

mencionada Fundación, es motivo suficiente para que yo mismo carezca de


independencia frente a ella.

Obviamente, habrá que insistir tantas veces como sea necesario en que resulta
falso que haya perdido independencia o que carezca de autonomía en relación
con la Fundación Nacional para la Democracia, por el hecho de que ésta haya
otorgado financiamiento a Alianza Cívica. Sobre el particular, ilustra la malicia con
que procede la parte demandada, que nunca comunique a los destinatarios de sus
escritos una trascendental circunstancia, a saber, que en Alianza Cívica las
decisiones relativas a la aceptación de diversas fuentes de financiamiento no
recaían en mi persona, sino que se adoptaban por instancias colegiadas. Como
sea, debe hacerse notar a su Señoría que todas estas falsedades, la parte
demandada las presenta como hechos incontrovertibles y que dice fundarlas en el
análisis veraz y objetivo de ciertos textos, pero sin que ello se haya demostrado.

35.- Cansado de este tipo de acusaciones, decidí enviar una carta al periódico
“La Jornada”, misma que fue publicada en ese diario el 6 de mayo de 2001, bajo el
título “Precisiones de Aguayo a Primitivo Rodríguez”, la cual se acompaña a la
presente demanda como anexo 14.

36.- La carta que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:

“Precisiones de Aguayo a Primitivo Rodríguez

Estimada Carmen: Por las acusaciones lanzadas en mi contra en este diario,


te solicito atentamente que publiques este texto dirigido a los lectores de La
Jornada: El jueves 19 de abril pasado apareció una carta con imprecisiones e
insinuaciones tendenciosas.

1. Primitivo Rodríguez Oceguera me califica de "actor clave" en el reciente


debate sobre la situación de los derechos humanos en Cuba. Exagera, sólo
firmé una carta que pedía al gobierno mexicano condenar el embargo de EU
contra la isla y la violación a los derechos humanos que comete el gobierno
cubano contra sus ciudadanos.

2. Primitivo recuerda que en 1997 fui acusado en la Cámara de Diputados,


junto con otros dirigentes de ONG, de "trabajar para el gobierno de EU por
recibir financiamiento de la NED". Nos acusó el entonces diputado Luis
Sánchez Aguilar, secundado y alentado por diputados del PRI y funcionarios
del gobierno de Ernesto Zedillo que tenían en la mira a Alianza Cívica (AC) por
las observaciones electorales, el apoyo al EZLN y las demandas contra el
presidente. AC se fundó en marzo de 1994 para pelear por elecciones limpias
y confiables; participaron centenares de ONG y miles de mexicanas y
mexicanos. Sí recibió financiamiento de la Fundación Nacional para la
Democracia (NED), organización privada con sede en Washington que obtiene
buena parte de sus fondos del Congreso de EU.

Tomamos como principal criterio para aceptar fondos que no hubiera ningún
tipo de condicionamiento a nuestros métodos de trabajo y decisiones. Aquel
año recibimos más de 2 millones de dólares, 80 por ciento proporcionados por
la ONU y empresarios mexicanos que hicieron donativos. Una cantidad menor
provino de fundaciones extranjeras, el NED entre ellas. Sabíamos de las
críticas, pero después de amplias consultas aceptamos los fondos siempre
que no hubiera el mínimo condicionamiento. Jamás lo hubo. El financiamiento
continuó después de 1994 y en parte sirvió para organizar la consulta nacional
solicitada por el EZLN en 1995; para interponer demanda contra Zedillo para
averiguar sus ingresos y gastos de la partida secreta, para observar
elecciones en varios estados. Todo fue informado y discutido en foros y por
ello es falso asegurar que AC trabajó para EU.

3. En la carta habla de que la preocupación por Cuba se acompaña de una


indiferencia a la situación de los migrantes mexicanos. Falso. Por más de dos
décadas he defendido los derechos de refugiados y migrantes, y como
presidente de la Academia Mexicana de Derechos Humanos (AMDH)
interpuse una demanda, junto con otras organizaciones, contra el gobierno de
EU por el maltrato a connacionales.
32

4. Primitivo empezó a escribir cartas en mayo de 1997. En los últimos cuatro


años se ha lanzado contra AC, Movimiento Ciudadano por la Democracia,
Mujer en Lucha por la Democracia, Comité Mexicano para la Promoción y
Defensa de los Derechos Humanos. Con excepciones, ha obtenido silencio.
Cuando se discutió en AC la respuesta que debía dársele, el consenso fue
ignorarlo porque:

a) En 1994 formó parte de la Coordinación de AC del Distrito Federal y


conoció sobre el financiamiento y aprobó el manejo de los fondos (incluidos,
los del NED). Nunca, ni verbalmente ni por escrito puso objeción.

b) A fines de 1994 aceptó una oferta de trabajo de Jaime Serra Puche para
irse con él a la Secretaría de Hacienda. Su incorporación --si es que se dio--
debió haber durado poco ya que, por la catástrofe de diciembre, Serra dejó
Hacienda. Tiempo después Primitivo reapareció como asesor externo de la
Presidencia de Zedillo y en ese cargo empezó a escribir cartas criticando a AC
y a otras ONG (siempre a las progresistas). Sus cartas fueron vistas como
provocación de alguien que, sin representatividad o legitimidad en la
comunidad de ONG mexicanas, hacía el trabajo sucio del gobierno de Zedillo.

No tengo inconveniente en hablar de mi experiencia en AC o en la AMDH,


pues no tengo nada de qué avergonzarme ni esconder, ni del pasado ni del
presente. En relación a las cartas de Primitivo, lo invito a discutir cada una de
sus afirmaciones. Estoy a sus órdenes en el 5595 5284; fax: 5683 9374;
saguayo@colmex.mx

Agradezco el espacio a La Jornada

Atentamente:

Sergio Aguayo Quezada”

37.- La parte demandada dirigió una carta al periódico “La Jornada”, misma que
fue publicada en ese diario el 10 de mayo de 2001, reconociendo su autoría, bajo
el título “A debate público llama Rodríguez Oceguera a Sergio Aguayo”, la cual se
acompaña a la presente demanda como anexo 15.

38.- La carta que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:

“A debate público llama Rodríguez Oceguera a Sergio Aguayo

Querida Carmen: Con cuatro años de atraso, Sergio Aguayo respondió


finalmente el 6 de mayo en El Correo Ilustrado a las cartas de un servidor
sobre la relación de Alianza Cívica y otras ONG con la estadunidense
Fundación Nacional para la Democracia (NED). Aguayo afirma que no tiene
nada que esconder al respecto. Y ahí comienza el problema.

Aguayo esconde en su respuesta lo que ha ocultado desde 1994. Que como


experto en sistemas de inteligencia y seguridad nacional supo que la NED era
el brazo "no gubernamental" del Departamento de Estado y la cara amable de
la CIA. Si alguna duda le quedaba, los diarios The New York Times (31 de
marzo) La Jornada (19 de abril) y The Dallas Morning News (27 de abril) en el
año de 1997 se encargaron de recordárselo.

No obstante, Aguayo aceptó viajes pagados por la NED al extranjero y


también ser miembro del Comité Coordinador del Movimiento Mundial por la
Democracia, creado por esa agencia para promover la política exterior de EU.
Aguayo ocultó a las lectoras y lectores de La Jornada que el nombre de
Alianza Cívica es una variación de la red de ONG denominada Vía Cívica,
creada por la NED contra el gobierno Sandinista, y de Cruzada Cívica,
hechura de la misma NED para combatir al general Noriega (cuando ya no era
útil a EU) e impedir el triunfo de los que recogieron el legado nacionalista de
Torrijos.

Aguayo cuenta que he combatido a las ONG que patrocina la NED por
órdenes de Zedillo y que carezco por lo mismo de toda autoridad moral para
33

que me vean y me oigan. Concluye su carta invitándome a llamarlo a su casa


para conciliar nuestras diferencias. Agradezco tan gentil invitación, pero como
el tema de la conexión NED-ONG no es de carácter privado, sino de interés
público, lo invito a que por medio de El Correo Ilustrado me diga cuándo y
dónde discutimos públicamente este asunto, incluído cuanto quiera poner en
la mesa sobre mi vida y milagros.

Como promotor de transparencia y rendición de cuentas, Aguayo aceptará


gustoso esta invitación. Por lo pronto, en el querido Masiosare habrá un
extenso relato de este sabroso lío el próximo domingo.

Primitivo Rodríguez Oceguera”

39.- Del contenido de la carta mencionada en el hecho que antecede, se


desprenden las siguientes acusaciones en contra de la parte demandante:

Me acusa de ocultar que es de mi conocimiento que la Fundación Nacional para la


Democracia es el brazo no gubernamental del Departamento de Estado de los
Estados Unidos de América y la cara amable de la Agencia Central de Inteligencia
de ese país (CIA por sus siglas en inglés), lo que obviamente no tiene fundamento
alguno. Es de resaltarse que en esta carta la parte demandada insiste en
presentar su opinión sobre esa Fundación como un hecho objetivo e irrefutable,
pero como se verá en este juicio, sin aportar ningún sustento sólido a su dicho.

Con base en esa acusación, deriva otras igualmente infundadas a partir de viajes
efectuados al extranjero y de mi participación en el Movimiento Mundial por la
Democracia que, según la visión de la parte demandada, tiene como objetivo
promover la política exterior estadounidense, en el sentido de que al aceptar
dichas invitaciones, me he convertido en un promotor de los intereses
norteamericanos, o bien, que al esconder las similitudes en la denominación de
Alianza Cívica con otras organizaciones patrocinadas por aquella Fundación y
que, según su parecer, le han servido para realizar operaciones en América
Latina, he dado prueba suficiente de mi apoyo a un movimiento intervencionista
trasnacional que conspira a favor de los Estados Unidos de América, cuestión esta
última que si no fuera por el daño moral que me ocasiona, no pasaría más que
como una peculiar anécdota que ilustra las personales asociaciones que en la
mente de la parte demandada se originan. Por último, cuestiona mi compromiso
con la transparencia y asevera mi intención de excluir del debate público este
asunto, basándose simplemente en que le facilité los números de teléfono y de
fax, así como el correo electrónico, a través de los cuales podía contactarme.

Al respecto, debido es recalcar que es falso que yo sea promotor de los intereses
norteamericanos y que apoye a un movimiento intervencionista favorable a los
Estados Unidos de América, acusaciones que al igual que las relatadas en los
hechos que anteceden al presente, resultan ofensivas por sí mismas. Asimismo,
no debe pasar desapercibido que esas falsedades las vierte la parte demandada
en forma por demás maliciosa, al afirmar que oculto que la mencionada Fundación
sea el brazo no gubernamental del Departamento de Estado de los Estados
Unidos de América y la cara amable de la Agencia Central de Inteligencia de ese
país, cuando es evidente que esta es únicamente la opinión que de tal Fundación
guarda la parte demandada, aunque insista también de modo malicioso en
presentarla como un hecho irrefutable. En el mismo tenor, denota malicia que la
parte demandada interprete que los viajes que he realizado al extranjero o mi
participación en el Movimiento Mundial por la Democracia prueben que me
encuentro al servicio de intereses externos a mi propio albedrío. En relación a
esto último, tal vez valga la pena aclarar que he participado en centenares de
conferencias nacionales e internacionales y que tengo como criterio aceptar mi
participación si se me cubren los gastos de viaje, así como que en el Movimiento
que menciona –al cual renuncié en junio del 2001– participan dirigentes cívicos y
políticos de las principales corrientes políticas. En este sentido, debe hacerse
notar a su Señoría que todas estas falsedades, la parte demandada las presenta
como hechos incontrovertibles y que dice fundarlas en el análisis veraz y objetivo
de ciertos textos, pero sin que ello se haya demostrado.
34

40.- La parte demandada escribió un artículo que fue publicado en el suplemento


“Masiosare” del periódico “La Jornada”, con fecha 13 de mayo de 2001, bajo el
título “La conexión ONG mexicanas-EU”, el cual se acompaña a la presente
demanda como anexo 16.

41.- El artículo que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:

“Fundación Nacional para la Democracia

La conexión ONG mexicanas-EU

De l997 a la fecha, diversas organizaciones no gubernamentales mexicanas


han sido cuestionados privada y públicamente por haber aceptado
financiamiento de la agencia estadunidense Fundación Nacional para la
Democracia (NED, por sus siglas en inglés). De acuerdo con estos dirigentes,
se trata de una agencia privada e independiente del gobierno de Estados
Unidos. Según sus críticos, e incluso algunos de sus defensores, la
independencia de la NED es justamente la fachada que le dio el gobierno de
Ronald Reagan para que desarrollara su trabajo de intervención sin despertar
mayores sospechas. Se relatan a continuación aspectos centrales de este
debate que creemos es de interés público

Primitivo RODRIGUEZ OCEGUERA

El 18 de marzo de 1997, el diputado Luis Sánchez Aguilar, adscrito a la


bancada perredista, acusó a dirigentes de ONG especializadas en
observación electoral de trabajar para el gobierno estadunidense por recibir
financiamiento de éste a través de la NED.1 En respuesta, el 21 de abril,
Mariclaire Acosta, Sergio Aguayo y otros dirigentes de ONG dieron a conocer
una carta dirigida a la Cámara de Diputados y a la opinión pública en la cual
afirmaban que se había iniciado "una campaña de desprestigio e injurias
contra organizaciones no gubernamentales --y contra algunos de sus
miembros-- que han promovido la democracia en los últimos años". Negaron
que la NED fuese una agencia del gobierno estadunidense, y prometieron
convocar "a un foro nacional en el que se discuta de manera plural y abierta el
tema del financiamiento nacional y extranjero a las organizaciones civiles."2
Acosta, Aguayo y otros firmantes reiteraron la promesa en una carta publicada
en La Jornada el 1o. de junio.3 Con todo, no cumplieron lo prometido. De
esta manera, siguió abierta la pregunta sobre la NED: ¿era una agencia del
gobierno de Estados Unidos, como afirmaba el diputado Sánchez Aguilar, o
una organización no gubernamental, como señalaban las ONG?

Para demostrar que la NED era independiente del gobierno, los firmantes de la
carta abierta citaron los propios estatutos de la organización, en los cuales se
afirma que "Nada en este documento debe ser interpretado en forma que haga
a la fundación una agencia o establecimiento del gobierno de Estados
Unidos..."4 Mas omitieron citar un párrafo clave de su Declaración de
Principios y Objetivos, que se abre a la ambigüedad: "La NED mantiene al
Poder Ejecutivo bien informado de sus programas y solicita la opinión de
importantes funcionarios del gobierno en Washington y en las embajadas.
Como se asienta en el Acta de Fundación, la NED está sujeta desde luego a la
apropiada supervisión del Congreso".5 Por otra parte, hay datos que parecen
indicar que efectivamente trabaja para el gobierno. Por ejemplo, el Congreso
estadunidense la proveé de 98% de su presupuesto anual, y éste sube o baja
en función de los beneficios que recibe Estados Unidos a través del
financiamiento otorgado por la NED a ONG, sindicatos, organismos
empresariales y partidos políticos en el extranjero. Para mantener el apoyo, la
fundación presenta al Congreso anualmente testimonios de dirigentes a los
que patrocina y de personalidades políticas. Entre los que divulgó en l995 se
encuentran los siguientes:

"La NED continúa gozando de un amplio apoyo bipartidista en el Senado


estadunidense porque sus actividades sirven a los intereses de Estados
Unidos y reflejan los valores de América": Bob Dole, líder de la mayoría
republicana en el Senado. El trabajo de la NED es "absolutamente crítico si
tenemos que construir una efectiva línea de defensa contra tiranos que
35

trabajan contra los intereses de América": Lee Hamilton, congresista


demócrata. La NED es "una inversión crítica y de costo relativamente bajo
para lograr una América más segura": ex consejeros de seguridad nacional
Richard Allen, Frank Carlucci, Zbigniew Brzezinski y Brent Scowcroft.6 "La
creación de la NED por la administración Reagan no fue una cínica táctica
para combatir a los enemigos de Estados Unidos, sino un reflejo de los valores
americanos fundamentales de libertad, democracia y libre empresa": The
Heritage Foundation.7

*La NED y la intervención

Sin embargo, más allá de sus ligas institucionales con el gobierno,


funcionarios estadunidenses y críticos de la fundación han dado cuenta del
trabajo que la agencia desarrolla en el terreno de la política exterior y las
operaciones de inteligencia norteamericanas.

El 19 de abril de 1997, en un reportaje sobre el financiamiento de la NED a


Alianza Cívica y otras ONG de observación electoral, La Jornada informó que
"El gobierno de Estados Unidos tiene un interés sustancial 'en apoyar
elecciones libres y justas en México' este año, y otorgará de manera directa e
indirecta unos 800 mil dólares para ofrecer capacitación y apoyo financiero a
ONG..." El reportaje señalaba también que un alto ex funcionario del gobierno
de Clinton había revelado que en las elecciones presidenciales de 1994, su
gobierno sabía que Zedillo podría ganar, mas que su triunfo no tendría
credibilidad. Por lo mismo, "fue muy importante apoyar a grupos
independientes, aun a los que el gobierno se oponía, y que después podrían
ofrecer una evaluación independiente de que las elecciones sí fueron más o
menos libres y justas", dijo el ex funcionario. Ante el peligro de que las ONG
fuesen cuestionadas por recibir dinero de Estados Unidos, una dirigente de la
fundación comentó a La Jornada que "... algunos funcionarios del
Departamento de Estado habían advertido a la NED sobre el riesgo de
identificarse demasiado con algunos grupos a los que estaba apoyando, como
el caso de Alianza Cívica". El reportaje termina indicando que "Aunque
funcionarios del gobierno estadunidense reconocen que este tipo de esfuerzos
frecuentemente provocan controversia en México, insisten que tanto los
apoyos directos como indirectos son parte importante de la participación
estadunidense en la región".

Por su lado, el diario The Dallas Morning News informó el 27 de mismo mes
de abril que "Desde 1994, el gobierno de Estados Unidos y los principales
partidos estadunidenses han dado 4.5 millones de dólares a grupos
ciudadanos mexicanos...", Alianza Cívica incluida. Años antes, en 1993, un
conocido centro de investigación en Washington, The Cato Institute, había
revelado en una de sus publicaciones lo siguiente: "La NED, que también tiene
una historia de corrupción y mala administración financiera, es superflua, y en
el mejor de los casos, el contribuyente estadunidense ha pagado para que
grupos de interés hostiguen a gobiernos legítimamente elegidos de países
amigos, interfieran en elecciones en el extranjero y propicien la corrupción de
movimientos democráticos".8

Pero quizás lo que causó mayor impacto público en relación con la NED fue
un reportaje de primera plana del diario The New York Times (31 de marzo de
l997) sobre intervenciones del gobierno de Estados Unidos en otros países.
En este caso, el periódico dio a conocer las conclusiones a que había llegado
analizando documentos desclasificados, memorias y reseñas de audiencias en
el Congreso: "La Fundación Nacional para la Democracia, creada hace 15
años para hacer de manera abierta lo que la Agencia Central de Inteligencia
ha llevado a cabo de manera oculta por décadas, gasta anualmente 30
millones de dólares para apoyar partidos políticos, sindicatos, movimientos
disidentes y medios de comunicación en decenas de países". El diario
neoyorquino publicaba lo que ya era conocido en institutos de investigación
sobre política exterior y entre las ONG progresistas y de izquierda
estadunidenses.

El estudio más conocido sobre la relación de la NED con el gobierno de


Estados Unidos es: La Fundación Nacional para la Democracia: una rama de
la política exterior que creció torcida, publicado en 1990 por el Council of
Hemispheric Affairs de Washington, DC, y el Inter-Hemispheric Resource
36

Center de Albuquerque, NM.9 El libro da cuenta de las ligas de la fundación


con el Departamento de Estado y el aparato de inteligencia estadunidense, de
sus operaciones de intervención en Centroamérica y otros países, y de los
canales que utiliza para distribuir el dinero: sindicatos, organizaciones
empresariales, centros de investigación, e institutos dependientes de los
partidos Demócrata y Republicano. Dos años después, el ultraconservador
think tank The Enterprise Institute publicó el libro de Joshua Muravchik
titulado: Exportando la democracia. Cumpliendo el destino de América. En el
capítulo dedicado a la NED, el autor relata intentos que hizo el gobierno
estadunidense para crear una agencia que no dependiese directamente del
gobierno, recibiera su presupuesto de las arcas públicas, actuara fuera de la
clandestinidad y liberara a la CIA de operaciones que fácilmente podrían ser
descubiertas. De acuerdo con Muravchik esta idea finalmente se hizo realidad
en 1983 con la creación de la fundación. Los demócratas en el extranjero
aceptarían su patrocinio pues podrían argumentar, en caso de verse
cuestionados, que no recibían dinero del gobierno estadunidense.10 Por otra
parte, solicitando a Yahoo! buscar en Internet las referencias a CIA-NED
remite, entre otros, a un documento escrito por el ex agente de la CIA Philip
Agee, donde se relatan las operaciones de intervención y espionaje de esa
agencia y la NED en Centroamérica.

*La entrada de la NED en la política y los derechos humanos

El objetivo inmediato de la fundación fue contribuir en las operaciones del


gobierno estadunidense dirigidas a desestabilizar a regímenes socialistas,
particularmente en Europa del Este y Cuba, y al gobierno sandinista y los
movimientos revolucionarios en Centroamérica. Otra prioridad suya ha sido
desplazar a movimientos populares y de izquierda en países donde regímenes
autoritarios impuestos o apoyados por Estados Unidos habían entrado en
descomposición, como en las Filipinas, Sudáfrica, Chile y Panamá. En estas
naciones, el gobierno estadunidense y la NED se metieron al movimiento
social de cambio para proteger los intereses de Estados Unidos y asegurarse
un lugar protagónico en la transición a la democracia. Tal parece ser el caso
de México.

El autoritarismo, la corrupción, el crecimiento del narcotráfico, la crisis


financiera, y más que nada, la política hacia Centroamérica de los gobiernos
de José López Portillo y Miguel de la Madrid convencieron al gobierno de
Ronald Reagan de promover el fin de los regímenes priístas. México se había
convertido en un serio problema de seguridad nacional para Estados Unidos,
sobre todo por negarse a apoyar la intervención estadunidense en
Centroamérica y el combate a Cuba. Tiempo después, el surgimiento del
Frente Democrático Nacional y su histórico impacto en las elecciones
presidenciales de l988 confirmó a Estados Unidos que el largo reino del PRI
había entrado en una profunda crisis y que era necesario evitar que fuerzas
nacionalistas y de izquierda llegasen al poder. Este escenario fue ratificado
más tarde con el levantamiento del EZLN y el asesinato del candidato
presidencial del PRI Luis Donaldo Colosio.

Uno de los instrumentos de que se valdría Estados Unidos para tener un


conocimiento más exacto del movimiento insurgente contra el PRI, de las
fuerzas y dirigentes que lo formaban, de la capacidad del PAN para encabezar
el cambio y evitar el fortalecimiento de la izquierda, así como para aumentar
las opciones estadunidenses en el manejo de la transición fue la NED. Antes
de 1994, la agencia había financiado ONG de observación electoral cercanas
al PAN y al PRD, y otras como la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción
de los Derechos Humanos. Para enfrentar la disputada e incierta elección
presidencial, la fundación promovió la formación de Alianza Cívica justamente
con las ONG previamente financiadas por ella. Una vez creada, Alianza
Cívica aprovechó la experiencia adquirida por la NED en países como
Filipinas, Sudáfrica y Chile rodeándose de personalidades que la protegiesen
de cuestionamientos sobre el patrocinio estadunidense y la legitimasen como
el órgano independiente y determinante en la calificación de las elecciones.
Por otro lado, la NED pasó a Alianza Cívica el know how de organización,
campañas, consignas y manejo de medios. El propio nombre de "Alianza
Cívica" es una variación de la red de ONG "Vía Cívica" creada por la
fundación contra el gobierno sandinista y "Cruzada Cívica," también hechura
suya para combatir al general Manuel Antonio Noriega (cuando dejó de servir
37

a Estados Unidos) e impedir el triunfo de quienes en Panamá recogieron la


herencia nacionalista de Omar Torrijos.

*Transparencia y rendición de cuentas

Cuando Sergio Aguayo, Rogelio Gómez Hermosillo, Mariclaire Acosta y otros


dirigentes de ONG aceptaron financiamiento de la NED seguramente conocían
qué era y a qué se dedicaba esa agencia.11 Si alguna duda les quedaba, los
reportajes en conjunto de The New York Times, La Jornada y The Dallas
Morning News habían dejado en claro que era el brazo "no gubernamental" del
gobierno estadunidense y que tenía una documentada historia en operaciones
de intervención en varias partes del mundo. Sin embargo, cuando estos
reportajes salieron a la luz pública ninguno de los dirigentes antes
mencionados los comentó o desmintió. Por el contrario, al cuestionarse su
relación con la fundación en cartas publicadas en La Jornada, El Financiero y
Reforma respondieron que eran víctimas de una campaña de desprestigio.
Siguieron, así, una costumbre de los gobiernos priístas con sus críticos: atacar
al mensajero y ocultar el mensaje.

Por otra parte, en el año de l997, Aguayo, Acosta y Gómez Hermosillo


recibieron copia de los reportajes antes señalados y de literatura
estadunidense a favor y en contra de la NED con la petición de que
distribuyesen tal información entre los miembros de sus mesas directivas y
dirigentes de otras ONG a fin de discutir la conveniencia de continuar
percibiendo el dinero de dicha agencia. No lo hicieron. Se les sugirió,
también, que ONG estadunidenses de toda su confianza, como Global
Exchange, hicieran una investigación sobre la fundación y la diesen a conocer
para una discusión abierta. Tampoco lo aceptaron. De igual manera, les fue
solicitado que en los folletos y páginas de Internet de sus ONG informaran que
recibían dinero de la agencia, citaran reportajes y publicaciones favorables y
críticos a la misma, y explicaran por qué habían decidido aceptar su patrocinio.
No lo llevaron a cabo. Se les pidió que al menos cumplieran con su promesa
de organizar un foro para discutir públicamente el apoyo que recibían de la
NED y otras agencias extranjeras. No lo hicieron. Incluso, cuando dirigentes
de otras ONG solicitaron analizar a fondo y de manera informada este tema,
no hubo respuesta. Esta falta de transparencia y rendición de cuentas dio
inicio a prácticas de encubrimiento y complicidad dentro de las ONG. Su ropa
sucia no se lavaría en casa, mucho menos fuera.

Hay preguntas que no han tenido respuesta por parte de quienes aceptaron el
patrocinio de la NED. Por ejemplo, cómo y a través de quiénes establecieron
la relación con ella; por qué motivo no cumplieron la promesa de discutir en
foros públicos el financiamiento que recibían del extranjero, y qué explica que
no hayan impulsado entre las ONG la adopción pública de un código de ética y
transparencia, como se les ha pedido en varias ocasiones desde l997.

En las pocas ocasiones en que las ONG se han referido a la NED han dicho
que aceptaron su patrocinio porque la defensa de la democracia y los
derechos humanos no reconoce fronteras. Siendo ello cierto, hay sin embargo
incongruencia: esas ONG nunca han recibido financiamiento suyo, por
ejemplo, para denunciar a Estados Unidos en foros internacionales por la
violación a derechos humanos y al de la propia vida de inmigrantes, o bien,
con el objeto de combatir la compra de candidatos y legisladores por las
grandes compañías estadunidenses de tabaco y armamento. Han señalado,
también, que la fundación no puso condiciones a su apoyo financiero. El
argumento, que de entrada parece convincente, tiene algunas deficiencias:
¿habría aceptado Amnistía Internacional dinero de Roberto Albores para
promover los derechos de los pueblos indios, así no la hubiesen condicionado
para realizar el trabajo? En el mismo supuesto, ¿habrían recibido las ONG de
observación electoral dinero de Carlos Salinas, o del gobierno de Carlos
Menem? Aun admitiendo que no pone condiciones, la NED escoge las áreas
de trabajo y a las ONG que financia en estrecha consulta con el Departamento
de Estado y las embajadas estadunidenses, como lo indican sus estatutos.

De ahí que para conocer los objetivos y saldos de la relación de la NED con
ONG mexicanas sería necesario tener acceso a la correspondencia entre
ambas partes, así como al intercambio epistolar de la embajada con la
fundación y el Departamento de Estado. La historia de la transición
38

democrática en México tiene actores fundamentales que hasta el momento no


han recibido la atención que merecen: el gobierno de Estados Unidos,
embajadores como John Gavin y el experto en operaciones de inteligencia y
contrainsurgencia John D. Negroponte, y agencias como la NED. Al parecer,
Gavin y Negroponte fueron actores clave en el ingreso de la fundación al
campo de la observación electoral y de los derechos humanos, así como en
las operaciones estadunidenses dirigidas a fortalecer los movimientos de
derecha y debilitar a los nacionalistas y de izquierda.

Por lo mismo, es importante para la ciudadanía conocer si la fundación es una


especie de Madre Teresa de la democracia o la cara amable y "no
gubernamental" del Departamento de Estado, y sobre todo, lograr que las
ONG adopten públicamente un código de ética y transparencia. Este incluiría
poner a disposición de las interesadas e interesados y de la población en
general la correspondencia con instituciones públicas estadunidense que les
dan apoyo financiero u otro tipo de asistencia, por ejemplo, la Agencia para el
Desarrollo Internacional (USAID), la Agencia de Información (USIA) y la NED.
El código de ética y transparencia haría difícil que el gobierno estadunidense
utilice a las ONG, evitaría prácticas de encubrimiento y complicidad entre ellas
y fortalecería su credibilidad ante la ciudadanía.*

Notas

1 Carta abierta a la Cámara de Diputados y la opinión pública, p. 1.


2 Carta abierta, p. 3. Firman la carta Sergio Aguayo, por Alianza Cívica;
Mariclaire Acosta, Comisión Mexicana para la Promoción y la Defensa de los
Derechos Humanos; Gabriela Romero, Asociación Nacional Cívica Femenina;
Julio Faesler, Consejo para la Democracia; Laura Becerra, Equipo Pueblo; Luz
Rosales, Movimiento Ciudadano por la Democracia; y Ana Lilia Cepeda,
Mujeres en Lucha por la Democracia.
3 Firman esta segunda carta Sergio Aguayo, por Alianza Cívica; Mariclaire
Acosta, Comisión Mexicana para la Defensa y Promoción de los Derechos
Humanos; Oscar González, Academia Mexicana de Derechos Humanos;
Marisol López, Centro de Derechos Humanos Fray Francisco de Vitoria;
Teresa Aguilar, Asociación Nacional Cívica Femenina; Julio Faesler, Consejo
para la Democracia; Luz Rosales, Movimiento Ciudadano por la Democracia; y
Ana Lilia Cepeda, Mujeres en Lucha por la Democracia.
4 Carta abierta, p.2. Para informarse sobre la NED puede consultarse su
página en Internet (www.ned.org). Ahí aparecen los informes anuales, así
como publicaciones y foros que patrocina para fortalecer su imagen de
seriedad e independencia. Desde su creación, ha dedicado la mayor parte del
presupuesto para Latinoamérica a financiar diversas actividades contra el
gobierno de Cuba, incluyendo las realizadas por grupos de ultraderecha y
programas para promover la condena de Cuba ante la Comisión de Derechos
Humanos de la ONU en Ginebra.
5 Folleto de presentación de la NED, Declaración de Principios y Objetivos, p.
2. Otra importante agencia que financia a ONG es la Agencia para el
Desarrollo Internacional (USAID), página de Internet: www.usaid.gov. Los
objetivos de la USAID para México se desarrollan en coordinación con la NED.
6 Informe Anual de la NED, 1995
7 La Fundación Nacional para la Democracia, una prudente inversión en el
futuro, Washington, DC, p.1.
8 Una organización fuera de control: la Fundación Nacional para la
Democracia, Washington, DC, noviembre de 1993, p.1.
9 Otros libros de interés publicados por el Inter-Hemispheric Resource Center
son: Apoyo Exterior al proceso mexicano de democratización, Beth Sims,
1994, y La administración Clinton y las elecciones mexicanas, Jared Kotler,
1994.
10 Pp. 204-206.
11 Sergio Aguayo en especial es conocedor desde los años setenta de los
sistemas de inteligencia y seguridad nacional de Estados Unidos y México.
Recientemente, en un artículo del Washington Post, publicado el 22 de enero
de este año, se dice que "Aguayo, quien está escribiendo un libro sobre la
historia de las operaciones de inteligencia en México y a quien le fue
concedido un acceso limitado el año pasado a los archivos del Cisen y las
agencias que lo precedieron, fue la primera persona externa que revisa los
expedientes desde 1920". Aguayo es en la actualidad miembro del Comité
39

Coordinador del Movimiento Mundial por la Democracia, creado por la NED


para promover la política exterior de Estados Unidos.

La Fundación Nacional para la Democracia, ¿la cara amable del


Departamento de Estado norteamericano para intervenir en otros países,
incluido México? Las ONG nacionales deben hacer transparentes sus
relaciones con las financiadoras internacionales

FINANCIAMIENTO OTORGADO POR LA NED EN MEXICO, 1984-2000

Total en
Beneficiarios Años
dólares
Centro de
Estudios en
1984,
Economía y $ 66,000
1986
Educación
(Monterrey)
Confederación de
Trabajadores de 1985 $ 100,000
México (CTM)
Confederación
Patronal de la
1987,
República $ 223,118
1988,1998
Mexicana
(Coparmex)
Democracia,
Solidaridad y Paz 1988-
$ 666,780
Social (Demos 1994
Paz)
Desarrollo
Empresarial
1989 $ 40,000
Mexicano (Desem-
Monterrey)
Confederación de
Cámaras
Nacionales de 1990 $ 111,506
Comercio
(Concanaco)
Grupos de
observación en las
1992 $ 84,625
elecciones de
Sinaloa
Convergencia y
grupos de
observación en las 1992 $ 72,154
elecciones de
Chihuahua
Consejo para la
1992-l994 $ 373,000
Democracia
1992, l993,
Frente Cívico
l994,1996, $ 329,568
Potosino
l997
Comisión
Mexicana en
Defensa y 1993-
$ 235,000
Promoción de los 1997
Derechos
Humanos
1993,
Movimiento
1994,
Ciudadano por la $ 270,000
1997,
Democracia*
1998
Alianza Cívica** 1994- $
40

2000 1,137,174
Mujeres en Lucha
1994,1995 $ 124,000
por la Democracia
Free Trade Union 1994-
$ 289,400
Institute 1995
Centro Cívico de
1995 $ 211,420
Solidaridad
1995,
Presencia
1996,
Ciudadana $ 274,400
1998,1999,
Mexicana
2000
Asociación
1997,
Nacional Cívica $ 744,407
1998, 2000
Femenina
Centro de Apoyo
al Movimiento
1999 $ 20,000
Popular
Oaxaqueño
Equidad de 1999-
$ 77,000
Género 2000

Fuente: Informes Anuales de la NED


* El MCD recibe además financiamiento de la Agencia de Desarrollo
Internacional (USAID) a través de la embajada estadunidense.
** La NED tiene una red de agencias similares en otros países, algunas de las
cuales también han financiado a Alianza Cívica.”

42.- Del contenido del artículo mencionado en el hecho que antecede, se


desprenden las siguientes acusaciones en contra de la parte demandante:

En este escrito vuelven a reiterarse, aunque de manera más elaborada, las


aseveraciones de la parte demandada en el sentido de que la Fundación Nacional
para la Democracia es una agencia al servicio de los intereses intervencionistas
del gobierno de los Estados Unidos de América, mismas que intenta fundar
recurriendo a diversas fuentes. No obstante, un punto a discutir es si la forma en
que utiliza esas fuentes se corresponde con un adecuado ejercicio de la libertad
de expresión y el derecho a la información. Todo ello sin ignorar la existencia de
otras opiniones sobre tal Fundación que enfatizan su carácter no-gubernamental y
transparente, y su independencia del gobierno de los Estados Unidos de América.

Con independencia de ello, básico es destacar que las acusaciones a esa


Fundación, trasladadas a las organizaciones que reciben financiamiento de ella,
sirven de pretexto a la parte demandada para imputarme en lo personal que me
encuentro al servicio de esos mismos intereses intervencionistas, porque según su
razonamiento, como dirigente de Alianza Cívica, como insiste en identificarme,
acepté el financiamiento proveniente de aquella Fundación, como si la decisión
sobre ese aspecto fuera una que hubiera podido adoptar individualmente, o bien,
porque he participado en el Movimiento Mundial por la Democracia. También
asegura sin fundamento que dicha Fundación promovió la formación de Alianza
Cívica para influir en las elecciones de 1994 en nuestro país y que todas sus
actividades se encaminan a salvaguardar los intereses norteamericanos.

Es de añadirse que la parte demandada cree ver fortalecidos sus ataques en mi


contra al suponer que ha sido mi intención excluir del debate público la
información que critica a la Fundación Nacional para la Democracia, acusándome
de ocultarla por no comentar toda la literatura que le ha servido para construir su
personal juicio sobre esa Fundación. Así, tal parece que no consentir a las
pretensiones de la parte demandada equivale a no ser transparente, a realizar
prácticas de encubrimiento de las actividades de esa Fundación y, en
consecuencia, a ser cómplice del gobierno de los Estados Unidos de América.
41

Sin embargo, es fundamental hacer una distinción elemental. Aunque será


indispensable que la parte demandada proporcione información sobre la
Fundación Nacional para la Democracia, este juicio no es sobre dicho organismo,
sino sobre las acusaciones que la parte demandada ha vertido para
desprestigiarme.

En ese orden de ideas, no puede dejarse de recalcar que resulta falso que esté al
servicio de supuestos intereses intervencionistas del gobierno estadounidense
promovidos por la Fundación Nacional para la Democracia. En relación con esta
falsa acusación, es evidente que la parte demandada actúa maliciosamente al
interpretar que mi participación en el Movimiento Mundial por la Democracia
prueba que me encuentro al servicio de esos intereses, y lo mismo sucede cuando
ignora deliberadamente que en Alianza Cívica las decisiones relativas a la
aceptación de diversas fuentes de financiamiento no recaían en mi persona, sino
que se adoptaban de forma colegiada. De igual manera, es falso que la formación
de Alianza Cívica obedeciera a instrucciones de esa Fundación o del gobierno
norteamericano, para influir en las elecciones de 1994 en nuestro país. También
es falso que en algún momento haya tratado de ocultar información que pudiera
ser desfavorable a la mencionada Fundación, acusación en la que la parte
demandada de modo malicioso confunde mi desinterés por iniciar un debate sobre
el tema, con un supuesto encubrimiento a las actividades de esa Fundación o
como indicio de mi complicidad con el gobierno norteamericano. En este sentido,
debe hacerse notar a su Señoría que todas estas falsedades, la parte demandada
las presenta como hechos incontrovertibles y que dice fundarlas en el análisis
veraz y objetivo de ciertos textos, pero sin que ello se haya demostrado siquiera.

43.- El suscrito, dirigí una carta al diario “La Jornada”, misma que fue publicada el
20 de mayo de 2001, bajo el título: “Rodríguez Oceguera sin credibilidad: Aguayo”,
la cual se acompaña a la presente demanda como anexo 17.

44.-La carta que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:

“Rodríguez Oceguera sin credibilidad: Aguayo

Señora directora: Le solicito, una vez más, espacio para el siguiente mensaje
a los lectores de La Jornada.

En cartas y artículos publicados en La Jornada, Primitivo Rodríguez Oceguera


se ha dedicado a manipular de manera intencionada la información para, de
esa manera, probar teorías conspiratorias.

Incapaz de construir, Primitivo quiere hacerse de un lugar en el mapa político


manchando el trabajo y el prestigio de organizaciones como Alianza Cívica y
la Comisión Mexicana de Promoción y Defensa de los Derechos Humanos, e
insultando a personas como Mariclaire Acosta, Rogelio Gómez-Hermosillo y
quien esto escribe.

Hace tiempo se erigió en juez que dicta sentencias sobre la moralidad pública
queriendo, de esa manera, disimular su pasado turbio como asociado político
de Rafael Aguilar Talamantes, asesor de Jaime Serra Puche y empleado de
Ernesto Zedillo.

No le concedo ni credibilidad ni representatividad al personaje, pero como sus


acusaciones son muy graves, diversos lectores me han escrito o llamado
preguntándome sobre ellas. Ya he abordado en diversas conferencias el
asunto del financiamiento internacional aprobado de manera colegiada por las
organizaciones de las que he formado parte (entre otras, Alianza Cívica y la
Academia Mexicana de Derechos Humanos). No tengo nada de qué
avergonzarme u ocultar.

Acabo de aceptar la invitación para impartir una conferencia pública sobre ese
mismo tema en agosto próximo en la ciudad de México. Dado el interés que
ha mostrado La Jornada en este asunto, si no tiene inconveniente, informaré
en este mismo espacio sobre el lugar y hora en que se realizará dicha plática.
42

Sergio Aguayo Quezada”

45.- Como se advertía inicialmente, las acusaciones enderezadas cada vez más
en contra mía, llevaron a que algunos periodistas empezaran a tomar como un
hecho lo que aseguraba la parte demandada. En ese contexto, la parte
demandante tuvo conocimiento de un artículo aparecido en la dirección electrónica
www.antiimperialista.com/es/view.shtml?category=20&id=992350481&keyword=+,
de fecha 5 de junio de 2001, escrito por Mario Rivera Ortiz, bajo el título “Las ONG
“mexicanas”, su matriz, sus tareas y sus perspectivas”, del cual se acompaña una
impresión a la presente demanda como anexo 18.

46.- El artículo que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:

“Las ONG "mexicanas", su matriz, sus tareas y sus perspectivas


Mario Rivera Ortiz, México, 5 de junio 2001

Su matriz universal

El 28 de mayo próximo pasado hizo 40 años que el abogado Peters Benerson,


especialista en procesos políticos internacionales, fundó la organización
filantrópica Amnistía Internacional (AI), cuya actividad se enfocó a la defensa
de los derechos humanos y contra la pena de muerte, las torturas, las
desapariciones, los procesos injustos y en especial para demandar la libertad
de los presos de conciencia. Afirma AI que desde su fundación ha participado
en 45,000 casos de ese tipo y ha respondido a 17,000 llamadas urgentes de
personas en peligro. En ocasión de dicho aniversario de AI Jonathan Power
dijo que esta organización debe jugar un papel más importante en los
consejos de administración de empresas multinacionales para lograr que los
ejecutivos de alto nivel adopten los principios de los derechos humanos y, en
su informe anual correspondiente a 2001 AI, además de denunciar la violación
de los derechos humanos en 149 países y territorios, incluidas algunas de las
últimas acciones criminales de los Estados Unidos contra la población civil de
Irak, hizo también una severa crítica a “la globalización” económica por sus
efectos “nefastos” para la mayoría de los seres humanos; planteó, así mismo,
por primera vez en su historia, que los gobiernos deben velar por la protección
de los trabajadores, demostrando con ello su misión preventiva de clase. Por
todo lo anterior la actividad de AI ha merecido el reconocimiento de varias
organizaciones internacionales y en 1977 recibió el Premio Nobel de la Paz.
Vista así la historia de AI podría calificase de noble y humana, sin embargo, si
se examina más cuidadosamente su cuaderno de bitácora se comprobará que
no es la organización imparcial que pretende hacernos creer que ha sido. Y
esto es natural, pues se trata de una institución propiedad de los más
poderosos países capitalistas europeos y auspiciada por los altos círculos de
la socialdemocracia de este continente. La historia de esta organización no es
el tema fundamental de este escrito y por ello no entramos en mayores
detalles sobre este último punto, pero estamos seguros que en un balance
objetivo de su quehacer podría demostrarse fácilmente que sus gestiones se
han dirigido preponderantemente a criticar aquellos gobiernos que resisten de
alguna manera las múltiples presiones económico-políticas de las grandes
potencias industriales, al mismo tiempo que soslaya o minimiza la mayoría de
los crímenes de lesa humanidad consumados por dichas potencias. Sobre
este particular la presidenta de la oficial Comisión Nacional de Derechos
Humanos (CND) de México, Mireilli Roccatti, en respuesta a una fuerte crítica
que Amnistía Internacional hizo a la organización que ella preside, declaró a la
prensa que “algunos organismos no gubernamentales a nivel internacional
esconden intereses mezquinos tras la defensa de los derechos humanos y se
convierten en instrumentos de intervencionismo sofisticado en países del
Tercer Mundo” (La Jornada 08.02.97)

Decíamos que AI no es el tema; pero, por lo que viene a cuento, es porque se


trata de la matriz universal y la nodriza moral de toda una generación de
Organizaciones No Gubernamentales (ONG) que aparecieron y se
multiplicaron en los países subdesarrollados hace varias décadas. En 1997
había 2,500 de estas ONG acreditadas en la ONU y ahora, en el 2001, existen
unas 100,000. En México, para esta última fecha, se reconocen 15,000. A
partir de entonces las ONG se han convertido en un jugoso y próspero
negocio administrado por damas y caballeros “voluntarios” que manejan
43

cuantiosos medios y recursos de todo tipo de procedencia nacional y


extranjera. Las ONG más conocidas actualmente son las organizaciones
“humanitarias” que intervienen en los conflictos sociales aunque existen otras,
ya sea con un proyecto de “educación alternativa” o bien formando parte de
una “red sanitaria de base”;

Sus tareas concretas

La aparición masiva de ONG se ha llegado a calificar por sus promotores


crípticos como uno de los fenómenos sociológicos más relevantes del fin de
siglo y se le ha pretendido explicar como la “renovación del espíritu de lucha”
de la sociedad civil. Nada más falso, en realidad; las ONG sólo son una de
tantas formas de expresión política de la globalización del capital y el apellido
de “No Gubernamentales” es absolutamente impropio porque casi todas ellas
viven de los fondos públicos y de las empresas transnacionales privadas. Su
subsidio global asciende aproximadamente a...10,000 millones de dólares
según opinión del sociólogo norteamericano James Petras.

En cuanto a la estructura y composición de las ONG hay que decir que en la


realidad no corresponden a la imagen que se ha difundido de ellas:
organizaciones de masas naturales y espontáneas de la sociedad civil. De
ninguna manera, habitualmente son pequeños grupos de personas de la
mesocracia urbana, creados desde arriba, dirigidos por uno o dos ex
luchadores sociales, que venden bien cara su poca o mucha experiencia
política. Su aparente vigor social deriva del dinero que les permiten disponer
de amplios espacios en los medios de comunicación y jinetear los
movimientos populares. En cuanto a su capacidad de convocatoria no se les
puede sobreestimar, pero sería un error despreciar su capacidad de
manipulación, pues en las ciudades del Tercer Mundo de hoy en día, más que
nunca hay muchos mercenarios potenciales dispuestos a todo, desde votar
por “X” o “Z” candidato a lo que sea, hasta salir a la calle con alguna pancarta
para que sus fans les tomen la foto. Y entonces ¿cuáles son las verdaderas
tareas políticas de las ONG, particularmente en México?: En términos
generales promover una “oposición democrática” y “humanitaria” cuya fuerza
demagógica pueda arrastrar a las masas populares en una dirección
predeterminada. Bien dijo Carlos Fazio que “El imperio de los derechos
humanos es un truco publicitario for export del canciller Jorge Castañeda y de
su embajadora especial Mariclaire Acosta (La Jornada 27.05.01.) Ya en
términos más concretos el trabajo de las ONG es manipular los procesos
electorales y movimientos populares espontáneos; encubrir y paliar los efectos
de la desinversión del Estado en los servicios de salud, seguridad social y
educación y su trasferencia al sector privado; atenuar las consecuencias
genocidas de los programas de ajuste impuestos por el FMI y el Banco
Mundial; corromper y cooptar a los ex luchadores sociales; destruir o sustituir
los partidos políticos, los sindicatos y las organizaciones sociales más
combativas.

Luego también suelen promover la formación de inútiles “comisiones de la


verdad” o bien, mascaradas de juicios contra algunos genocidas reconocidos,
que terminan en nada. Eso sí, todas, repetimos, siguiendo el modelo y la
peculiar experiencia de AI. En cuanto a la esencia política de su quehacer
práctico James Petras, en un artículo publicado recientemente titulado “Las
dos caras de las ONG”, afirma que estos agrupamientos se convirtieron en el
rostro “comunitario” del neoliberalismo y se relacionaron íntimamente con los
de arriba. En lugar de dar educación política sobre la naturaleza del
imperialismo y sobre las bases clasistas del neoliberalismo, las ONG discuten
sobre “los excluidos”, “los indefensos”, y la “extrema pobreza”, sin jamás pasar
de sus síntomas superficiales al análisis del sistema social que produce estas
condiciones. Ocultan su conformidad hacia las estructuras nacionales e
internacionales del poder. Los funcionarios de las ONG proporcionan la
retórica “populista” en torno a la sociedad civil que legitima la política del libre
mercado. A cambio, nombramientos como funcionarios gubernamentales
satisfacen sus ambiciones de movilidad y ascenso social (La Jornada,
diciembre del año 2000)

Su largo y suculento cordón umbilical


44

Por algún tiempo las sospechas acerca del origen de sus fondos se basaban
sólo en datos dispersos que llegaban desde Polonia, Checoslovaquia, Cuba y
algunos países africanos, pero ahora en México se conocen perfectamente los
lazos que unen a las ONG con sus matrices extranjeras a partir la polémica
que se libró en las páginas de La Jornada (junio de 1997-mayo de 2001) entre
dirigentes de Alianza Cívica (AC), la Academia Mexicana de Derechos
Humanos (AMDH), la Comisión Mexicana para la Defensa y Promoción de los
Derechos Humanos (CMDPDH) y Primitivo Rodríguez Oceguera, un personaje
de la política mexicana que al parecer conoce muy bien todos estos
enjuagues. En el curso de esta polémica Rodríguez Oceguera demostró con
documentos fehacientes la dependencia económica de 20 organizaciones
sociales mexicanas con la agencia del gobierno de los Estados Unidos,
llamada Fundación para la Democracia (NED por sus siglas en inglés). Según
la tabla de datos publicada por Primitivo Rodríguez Oceguera en (La Jornada
13 de mayo de 2001), el financiamiento otorgado por la NED privilegió a
Alianza Cívica con 1.137, 174 dólares de manera directa, más otras partidas
concedidas indirectamente a través de sus agencias en otros países, después
de 1984. En condiciones similares están la Comisión Mexicana de Defensa y
Promoción de Derechos Humanos, el Frente Cívico Potosino, el Movimiento
Ciudadano por la Democracia y las demás agrupaciones incluidas en la tabla
mencionada.

En la susodicha polémica se ha reconocido, incluso por algunos miembros de


las ONG mencionadas arriba, que la NED es la fachada que le dio el gobierno
de Ronald Reagan a uno de sus instrumentos ingerencistas destinado a
perturbar la vida interna de Estados supuestamente soberanos, por ello es de
especial importancia las denuncias que sobre este asunto se han hecho en
México. Las ONG ya no se limitan a manipular los procesos electorales y a
trabar la lucha de clases, sino incluso, según ha dado a conocer el propio
Rodríguez Oseguera, a financiar con fines inconfesables, manifestaciones de
masas, entre ellas algunas encabezadas por el Ejército Zapatista de
Liberación Nacional (EZLN), como fue la consulta ciudadana organizada por
este agrupamiento indígena en 1995 (La Jornada, 06.05.01.).

¿Hasta qué punto y con qué fines las ONG han apoyado económicamente
algunas acciones civiles y de propaganda del EZLN? No lo sabemos, pero
dados sus nexos comprobados con el gobierno de los EU no puede
descartarse su interés en fomentar las autonomías indígenas y finalmente la
balcanización del país. Por lo demás esta diversificación de tareas que vienen
desarrollando las ONG develan en parte el misterio de la “habilidad mediática”
que Ignacio Ramonet, director de Le Monde Diplomatique, atribuye al
subcomandante Marcos. Sobre este particular habría que recordar el asombro
de la diputada francesa Pascale Girard, ante el apoyo multitudinario que el
zapatour recibió hace algunos meses. Ella llegó a decir, incluso, que le parecía
“sospechoso”. (La Jornada, 08.03.01.). Decíamos pues, que es necesario que
se conozcan en todo el mundo las imputaciones mencionadas porque es una
buena muestra de la estrategia ingerencista del gran capital, particularmente
norteamericano, en los países del Tercer Mundo, incluso dentro de los
movimientos aparentemente más limpios. Por otra parte la veracidad de tal
denuncia está fuera de duda ya que las partes involucradas en este affaire –el
gobierno de los Estados Unidos y las organizaciones aludidas- han respondido
con la cínica aceptación de los hechos imputados o con el silencio. Ejemplo de
la primera forma de respuesta la dieron altos funcionarios estadounidenses al
declarar a La Jornada (15.04.97.) y al Dallas Morning News (27.04.97.), que el
financiamiento directo e indirecto a las ONG continuaría a pesar de la
polémica que generaba en México. Y en cuanto a la segunda forma de
respuesta, el silencio, tenemos el ejemplo de la mayoría de las organizaciones
sociales acusadas públicamente y sus más conspicuos dirigentes: Mariclaire
Acosta (actual embajadora “especial” del gobierno de FOX), Sergio Aguayo y
Rogelio Gómez Hermosillo.

Algunos dirigentes de tales agrupamientos al verse pillados en sus enjuagues


antinacionales, sólo han atinado a decir que aceptaron el patrocinio de la NED
porque dizque “la defensa de la democracia y de los derechos humanos no
reconocen fronteras” y porque la fundación no pone condiciones para
entregarles sus generosas mesadas. En otras palabras, que lo que ellos están
haciendo se debe a que ellos concuerdan plenamente con los criterios del
Departamento de Estado. Esta confesión de parte, sólo ha despertado en el
45

pueblo mexicano una sorda e inconmensurable sensación de repugnancia,


porque el trabajo de las ONG nada tiene que ver con la defensa de los
derechos humanos de ninguna parte, pues es sabido que la NED asigna a sus
asalariados las tareas que deben cubrir, en estrecha consulta con el
Departamento de Estado y las embajadas, y que, por supuesto, no incluye
ninguna crítica a los atropellos genocidas que cotidianamente cometen sus
patrones, dentro y fuera de su territorio. Pero las ONG mencionadas y otras no
sólo han recibido dinero de EU y Europa Occidental, también han disfrutado
de un vigoroso apoyo proveniente de todos los medios de comunicación,
incluso los más liberales como La Jornada, que sin ningún límite les han
brindado cotidianamente amplios espacios, los mismos que niegan o regatean,
a los individuos y grupos que genuinamente actúan en la oposición política
democrática y socialista.

Sus perspectivas

Aceptamos que la denuncia de Primitivo Rodríguez Oceguera y otras


personas es un acto de valor cívico poco común en nuestro tiempo y lugar, un
acto que incrementa la experiencia y la información política del pueblo
mexicano; pero es necesario discrepar con él cuando propone luchar por
reformar a las ONG mediante un “código de ética y transparencia”. Nos parece
que esta no es la solución ¿Qué anti-ética diferente a la que practican podrían
adoptar estas agrupaciones? ¿Qué más transparencia de la que les han dado
las confesiones de sus propios promotores y miembros? Ante el descrédito de
las ONG, algunos de sus dirigentes han optado, paradójicamente, por fusionar
y metamorfosear sus grupúsculos en partidos políticos sin programa ni
ideología (¿...?) para así disfrutar del subsidio estatal que la ley otorga a los
institutos políticos y, por supuesto, para mudar de piel. Las ONG también
están promoviendo el nombramiento de un relator especial de la ONU para
México en materia de derechos humanos con el fin de potenciar mutuamente
su actividades ingerencistas al servicio de terceros. Rodríguez Oceguera en
carta publicada por La Jornada (23.05.01.) propone a Mariclaire Acosta,
Rogelio Gómez Hermosillo y Sergio Aguayo, un debate público sobre sus
reiteradas acusaciones contra Alianza Cívica y otras ONG “ligadas al sistema
de inteligencia estadounidense”. No creemos que los acusados osen
presentarse ante ningún foro público aquí en México, quizá lo hagan en Praga
o en Varsovia; pero bueno, ojalá hubiese esa oportunidad para que
escucharan la opinión que la gente tiene sobre ellos. La única perspectiva
para las ONG, incluso las que aparentemente son “independientes”, es su
desaparición total y definitiva. Los trabajadores y el pueblo mexicano,
terminarán por orientarse a formar y reforzar sus propios partidos políticos de
clase, sus organizaciones sindicales, campesinas y estudiantiles, para, desde
ahí defender todos sus derechos y alcanzar una nueva sociedad socialista.

Mario Rivera Ortiz


Círculo de Estudios “26 de Julio Opina””

47.- Del contenido del artículo mencionado en el hecho que antecede, se


desprende que las acusaciones en contra de la parte demandante vertidas por la
parte demandada, han tenido impacto en su autor, el cual las ha considerado
como una verdad incontrovertible, en consideración a lo siguiente:

Antes que todo, ha de destacarse que el autor de este artículo hace referencia
expresa al artículo publicado por la parte demandada en el suplemento Masiosare
del periódico “La Jornada”, de fecha 13 de mayo de 2001, mencionado en el
hecho 40, y a una carta que la parte demandada envió al diario “La Jornada” y que
dice fue publicada el 23 de mayo de 2001, cuando en realidad fue publicada el 23
de abril de 2001, referida en el hecho 32. De igual forma, el autor de este artículo
hace mención expresa de algunos artículos que la parte demandada utiliza como
fuente de sus acusaciones en mi contra, como lo son el publicado en el periódico
“La Jornada”, el 19 de abril de 2001, y el aparecido en el diario “The Dallas
Morning News”, el 27 de ese mismo mes y año.

En cuanto al contenido del artículo a que se refiere este hecho, puede notarse que
inicialmente su autor alude a la polémica librada entre la parte demandada y
Alianza Cívica, entre otras organizaciones, relativa a su financiamiento, pero sobre
46

todo, como se ha advertido, destaca que su autor considera como verdades


incontrovertibles las acusaciones en mi contra vertidas por la parte demandada.

Por ejemplo, asegura que la parte demandada demostró con documentos


fehacientes la dependencia económica que 20 organizaciones sociales
mexicanas, entre ellas Alianza Cívica, tienen respecto de la Fundación Nacional
para la Democracia, a la que califica de agencia del gobierno de Estados Unidos
de América, fundando su aseveración expresamente en el artículo escrito por la
parte demandada del que se ha dado referencia en el hecho número 40 de la
presente demanda.

También afirma que algunos miembros de las organizaciones no gubernamentales


involucradas en este asunto, sin identificar cuáles en específico, han reconocido
que la Fundación Nacional para la Democracia, es la fachada que le dio el
gobierno estadounidense a uno de sus instrumentos injerencistas destinado a
perturbar la vida interna de estados supuestamente soberanos.

De igual manera, siguiendo a la parte demandada, afirma que las organizaciones


no gubernamentales cuyos nexos con el gobierno de Estados Unidos de América
están comprobados, financian actividades de organizaciones como el Ejército
Zapatista de Liberación Nacional, con la intención de “balcanizar” al país. Como
sea, estas aseveraciones sumamente peculiares se utilizan para referirse a la
consulta ciudadana organizada por Alianza Cívica en 1996 a petición de dicho
grupo armado para saber si seguían la vía pacífica.

En esa misma línea, afirma que los nexos de algunas organizaciones no


gubernamentales con el gobierno de Estados Unidos de América están
comprobados, y que es por ello que deviene de su interés fomentar las
autonomías indígenas para conseguir finalmente la balcanización del país.

En idéntico orden de ideas, afirma que la veracidad de la denuncia de la parte


demandada queda fuera de duda, ya que el gobierno de Estados Unidos de
América y las mismas organizaciones no gubernamentales han respondido con la
cínica aceptación de los hechos imputados o con el silencio, respectivamente,
aludiendo expresamente a mi persona como ejemplo de una confesión silenciosa.

Igualmente, afirma que algunos dirigentes de tales organizaciones no


gubernamentales, al ser descubiertos en sus maniobras antinacionales, sólo han
dicho que aceptaron el patrocinio de la Fundación Nacional para la Democracia
porque la defensa de la democracia y los derechos humanos no reconocen
fronteras, así como porque la referida Fundación no pone condiciones para
entregarles sus generosas mesadas, a partir de lo cual, concluye que lo que esos
dirigentes están haciendo, se debe a que concuerdan plenamente con los criterios
del Departamento de Estado de los Estados Unidos de América, toda vez que
aquella Fundación asigna a sus asalariados las tareas que deben realizar, en
consulta con el Departamento de Estado y las embajadas norteamericanas.

Asimismo, acaba por reconocer el alto valor cívico de la denuncia que ha hecho la
parte demandada, aunque discrepa con ella en la solución a este problema.

Casi para finalizar, afirma que algunos de los dirigentes de las organizaciones no
gubernamentales envueltas en el tema, ante el descrédito, han optado por fusionar
y metamorfosear sus grupúsculos en partidos políticos sin programa ni ideología,
para así disfrutar del subsidio estatal y por supuesto, para mudar de piel.

Por último, culmina este singular autor aseverando que no cree que los acusados
por la parte demandada, entre los que nuevamente se refiere expresamente a mi
persona, osen aparecer ante ningún foro público para debatir con ella este tema.

48.- En esta misma categoría, la parte demandante tuvo conocimiento de un


artículo escrito por Gastón Pardo, aparecido en la revista “Bajo Palabra”, número
20, del 16 de junio de 2001, bajo el título “ONGs mexicanas, asalariadas del
47

Senado gringo. Agentes de EU, Mariclaire Acosta y Sergio Aguayo”, el cual se


acompaña a la presente demanda como anexo 19.

49.- El artículo que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:

“ONGs mexicanas, asalariadas del Senado gringo

Agentes de EU: Mariclaire Acosta y Sergio Aguayo

La asesora en Derechos Humanos de Fox y el colaborador de Aguilar Zinser


en el Consejo de Seguridad Nacional, presumiblemente vinculados con los
aparatos de Inteligencia de Washington

Gastón Pardo

El 18 de marzo de 1997, Luis Sánchez Aguilar, diputado del PRD, acusó a


dirigentes de organizaciones no gubernamentales dedicadas a la observación
electoral de trabajar al servicio del gobierno de Estados Unidos (La Jornada:
Primitivo Rodríguez Oceguera, 13/V/2001). Tal señalamiento se sustenta en
evidencias de que tales organismos reciben financiamiento de Washington a
través de la Fundación Nacional para la Democracia (FND), proyecto
bipartidista controlado por el Centro Carter.

Las respuestas de Mariclaire Acosta y Sergio Aguayo al respecto, entre otros


dirigentes de ONGS, no se hicieron esperar. En un escrito dirigido a la
Cámara de Diputados y a la opinión pública afirmaron que se había
emprendido una campaña de desprestigio e injurias en contra de
organizaciones no gubernamentales, las cuales, según ellos, han promovido la
democracia en los últimos años.

Asimismo, negaron que la FND sea una agencia del gobierno estadunidense,
al tiempo que ofrecieron convocar a un foro nacional para discutir, plural y
abiertamente, el tema del financiamiento nacional y extranjero a las ONGS.

En otra misiva publicada en La Jornada el 1 de junio de 1997, Acosta, Aguayo


y otros firmantes reiteraron su promesa de convocar a un foro nacional, pero
jamás cumplieron su ofrecimiento.

Para demostrar que la FND era independiente del gobierno estadunidense,


entonces presidido por William Clinton, citaron los propios estatutos de la
referida organización, en los cuales se afirma que nada de lo ahí referido debe
interpretarse de tal manera que convierta a la fundación en una agencia del
gobierno de Estados Unidos.

Sin embargo, olvidaron citar un párrafo fundamental de la declaración de


objetivos y principios de la FND, mediante el cual esa institución se
compromete a mantener informado al Poder Ejecutivo de Estados Unidos de
sus programas, además de solicitar la opinión de importantes funcionarios del
gobierno y de las embajadas estadunidenses. En el acta de fundación, la FND
asienta con toda claridad que se encuentra sujeta a la apropiada supervisión
del Congreso de Estados Unidos. En tal sentido, diversos datos parecen
indicar que efectivamente trabaja para ese país.

Por ejemplo, el Congreso estadunidense le suministra 98 por ciento de su


presupuesto anual, el cual aumenta o disminuye de acuerdo con los beneficios
para Estados Unidos derivados del financiamiento otorgado por la FND a
organizaciones no gubernamentales, sindicatos, organismos empresariales y
partidos políticos en el extranjero.

Para no perder el apoyo económico, anualmente la fundación presenta al


Congreso estadunidense testimonios de dirigentes y personalidades del
mundo político a los que patrocina.

Entre ellos a Mariclaire Acosta, dirigente de la Comisión Mexicana en Defensa


y Promoción de los Derechos Humanos, que entre 1993 y 1997 recibió 235 mil
dólares.
48

Y Sergio Aguayo, de la Alianza Cívica, que de 1994 al año 2000 recibió un


millón 137 mil 174 dólares. Ambas cantidades provenientes de la Fundación
Nacional para la Democracia, cabe la reiteración.

Al servicio del yanqui

De los informes divulgados en 1995 se infiere que la FND aún goza del
importante apoyo bipartidista del Senado estadunidense, por la sencilla razón
de que sirve a los intereses de Washington y suscribe su ideología.

Por consiguiente, las actividades de la FND indican que Sergio Aguayo y


Mariclaire Acosta –colaborador de Adolfo Aguilar Zinser en el Consejo de
Seguridad Nacional y asesora en Derechos Humanos del presidente Fox,
respectivamente– son agentes del gobierno estadunidense.

Pues bien, Sergio Aguayo, experto desde los años setenta en los sistemas de
seguridad de Estados Unidos y México, “en la actualidad escribe un libro sobre
la historia de las operaciones de Inteligencia en México”, advierte The
Washington Post en su edición del 22 de enero de 2001.

El rotativo agrega que a Sergio Aguayo se le permitió, durante el año 2000,


“acceso limitado a los archivos del Centro de Inteligencia y Seguridad Nacional
(Cisen) y de las agencias que lo precedieron. “Aguayo es la primera persona
no perteneciente a los círculos de Inteligencia que revisa los expedientes
desde 1920”, finaliza el influyente diario estadunidense.

Es decir, que a Sergio Aguayo, cuyos vínculos con la Fundación Nacional para
la Democracia son indiscutibles, como asimismo su condición de agente del
gobierno federal de Estados Unidos por las causas antes señaladas, ha sido
oficialmente autorizado para investigar el sistema político mexicano y sus
sistemas de seguridad.

Luego pues, que el señor Adolfo Aguilar Zinser nos indique cuál es el
significado de tal autorización.

Desintegración nacional

Por su parte, el periodista Primitivo Rodríguez informa que más allá de sus
ligas internacionales con el gobierno, funcionarios de Estados Unidos han
dado cuenta del trabajo desarrollado por la FND en relación con la política
exterior y las operaciones de Inteligencia de ese país.

El punto de partida de la asimilación de la Fundación Nacional para la


Democracia a la Inteligencia estadunidense fue revelada por los consejeros de
seguridad nacional: Richard Allen, Frank Carlucci, Zbigniew Brzezinzki y Brent
Scowcroft.

Brzezinzki, cabe subrayar, es el promotor de un acucioso diseño de


desintegración balcánica, el cual afectó a los países musulmanes de la
desaparecida URSS. Su ayudante, Robert Pastor, es el promotor de la
desintegración de la gran Colombia para favorecer a los negocios ilícitos. A su
vez, el Centro Carter, al cual se encuentran vinculados todos estos
personajes, impulsa los proyectos de manipulación étnica impuestos en todas
las zonas productoras de cocaína, incluido Perú.

La ingenuidad del Partido Republicano ante este proyecto fue evidenciada por
Bob Dole, líder de la mayoría de ese partido en el Senado, al explicar que las
labores efectuadas por la fundación son cruciales para el caso de que sea
necesario levantar una efectiva línea de defensa tendiente a detener a los
“tiranos” que trabajan en contra de los intereses de América.

Tal ingenuidad debe ser descartada, señaló la Subsecretaría de Asuntos


Latinoamericanos del Departamento de Estado.”

50.- Del contenido del artículo mencionado en el hecho que antecede, se


desprende que las acusaciones en contra de la parte demandante vertidas por la
parte demandada, han tenido impacto en su autor en consideración a lo siguiente:
49

Se refiere a mí como una persona vinculada con los aparatos de inteligencia de


Washington y patrocinada por la Fundación Nacional para la Democracia, a la que
califica de ser una agencia del gobierno estadounidense. Derivado de lo anterior y
de las actividades que dicha Fundación realiza como “agencia del gobierno
estadounidense”, el autor de este artículo concluye y asevera que soy agente de
ese gobierno. De igual manera, afirma que debido a mis “indiscutibles vínculos”
con la Fundación Nacional para la Democracia y a mi condición de “agente del
gobierno federal de los Estados Unidos de América”, es que se me autorizó
oficialmente a consultar los archivos del Centro de Inteligencia y Seguridad
Nacional y a investigar el sistema político mexicano y sus sistemas de seguridad.

En este sentido, puede advertirse que haciendo mención expresa de la parte


demandada y del artículo publicado en el suplemento “Masiosare” al que se hizo
referencia en el hecho 40, el autor de este artículo recoge, actualiza y afirma como
ciertas, algunas de las principales acusaciones que la parte demandada ha
lanzado en mi contra desde hace ya algunos años y que causan daño a mi honor y
reputación. De hecho, si se compara con cuidado el texto de este artículo con ese
otro de la parte demandada, es fácil notar que la información publicada en este
último es repetida por el autor del artículo de “Bajo Palabra” casi textualmente.

Ejemplos de esa reiteración casi textual es la referencia a las acusaciones del


diputado Luis Sánchez Aguilar; a los estatutos y a la “Declaración de Principios y
Objetivos de la Fundación Nacional para la Democracia”; a las declaraciones de
Bob Dole y de ex consejeros de seguridad nacional como Richard Allen, Frank
Carlucci y Zbigniew Brzezinski; a los informes anuales de la Fundación Nacional
para la Democracia; a los montos de financiamiento recibidos por Alianza Cívica y
la Comisión Mexicana para la Defensa y Promoción de los Derechos Humanos por
parte de dicha Fundación, y a mi acceso a los archivos del Centro de Inteligencia y
Seguridad Nacional, referido en un artículo publicado en el diario “The Washington
Post”, el 22 de enero de 2001 al que se alude en la nota 11 del citado artículo de
Masiosare. Debe resaltarse que el autor de este artículo retoma esta información
y la aprovecha para lanzar una nueva acusación en mi contra, consistente en
afirmar que mi acceso a los archivos del Centro de Inteligencia y Seguridad
Nacional se debió a mis “estrechos vínculos” con la Fundación Nacional para la
Democracia y a mi condición de agente del gobierno estadounidense.

De igual manera, las acusaciones en mi contra vertidas por la parte demandada


que han impactado en el autor de este artículo, pueden encontrase en las
publicaciones mencionadas en los hechos 29 y 37, correspondientes a los días 19
de abril, y 10 de mayo 2001, respectivamente, toda vez que en ellas, la parte
demandada se refiere a mí como persona vinculada y patrocinada por la
Fundación Nacional para la Democracia, a la que califica de agencia de espionaje
estadounidense.

En este contexto, quisiera llamar la atención de su Señoría de que en la medida


en la que la parte demandada focalizó sus críticas en mí, fueron agravándose las
acusaciones que se me hacían en otros círculos para los cuales mi trabajo
académico, cívico y político se explica ahora porque soy un agente del gobierno
estadounidense, lo que prueba que ante estos sectores se me ha desprestigiado.

51.- El suscrito, dirigí una carta al periódico “La Jornada”, misma que fue publicada
el 29 de agosto de 2001, bajo el título: “Sobre el financiamiento internacional de
ONG”, por medio de la cual hice notar mi disposición a discutir públicamente los
cuestionamientos sobre el tema y para difundir la información relativa por todos los
medios a mi alcance. Sin embargo, es debido recalcar que la parte demandada
no se presentó a dicha conferencia pese a que había insistido constantemente en
que debían organizarse foros públicos, lo que demuestra la malicia con que
esgrime esas acusaciones. Esa carta se adjunta a esta demanda como anexo 20.

52.-La carta que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:

“Sobre el financiamiento internacional de ONG


50

Estimada directora: En seguimiento de una carta que me publicaron hace


algunas semanas quisiera informar a los lectores de La Jornada que el
próximo jueves 30 de agosto a las 17 horas impartiré la conferencia titulada El
financiamiento internacional y la transición a la democracia: la experiencia de
Alianza Cívica en Casa Lamm, ubicada en Álvaro Obregón 99, Col. Roma.

El texto escrito podrá consultarse al día siguiente en: alianzacivica.org.mx o


podrá también solicitarse a: saguayo@colmex.mx o al teléfono 5449-3039.

Atentamente:

Sergio Aguayo Quezada”

53.- Como en su momento anuncié públicamente, el suscrito, impartí una


conferencia el 30 de agosto de 2001 en Casa Lamm titulada “El financiamiento
extranjero y la transición democrática mexicana: el caso de Alianza Cívica”, cuyo
texto se acompaña a la presente demanda como anexo 21. Vuelvo a llamar la
atención a su Señoría sobre mi disposición a entregar información en un foro
público al que la parte demandada nunca se presentó. Como es posible observar
hice un esfuerzo honesto por responder a los principales cuestionamientos.

54.- La conferencia que se menciona en el hecho que antecede es del tenor


siguiente:

“Texto de la conferencia presentada en Casa Lamm de la ciudad de México, el


30 de agosto de 2001.

EL FINANCIAMIENTO EXTRANJERO Y LA TRANSICION DEMOCRÁTICA


MEXICANA: EL CASO DE ALIANZA CÍVICA.

Sergio Aguayo Quezada [Profesor-investigador de tiempo completo del Centro


de Estudios Internacionales de El Colegio de México desde 1977. Miembro de
la Coordinación Nacional de Alianza Cívica de 1994 a 1999.]

Introducción

En la transición mexicana a la democracia, las elecciones presidenciales del 2


de julio de 2000 son consideradas como el parteaguas que nos separa del
autoritarismo. Es una fecha simbólica, en la cual convergieron procesos y
tendencias extraordinariamente complejos. En la medida en que el 2 de julio
se aleja en la distancia es conveniente precisar el papel jugado por diferentes
actores. En este caso, pongo el acento en el significado del financiamiento
extranjero y en el trabajo realizado por Alianza Cívica.

La transición mexicana a la democracia se inició en los años sesenta y se fue


tejiendo por la interacción de tres grandes variables: 1) la degradación y/o
transformación del régimen existente (agotamiento del viejo modelo
económico, autonomización de instituciones estratégicas como el Instituto
Federal Electoral, divisiones al interior de la clase política, etcétera); 2) la
aparición y/o fortalecimiento de actores (entre otros, partidos políticos, medios
de comunicación, organizaciones no gubernamentales) que se opusieron al
régimen de diferentes maneras; y 3) una cambiante relación con la comunidad
internacional por la apertura comercial, el final del respaldo acrítico al régimen,
el interés cada vez mayor del mundo por lo que sucedía en el país, etcétera.
[1]

Cada una de estas variables se puede desagregar en elementos, cada uno de


los cuales tuvo una cierta autonomía e interactuó con las otras piezas
dibujando el complejo fresco de la transformación política y social mexicana.
Los organismos no gubernamentales (ONG) de derechos humanos, por
ejemplo, aparecieron en los resquicios de la vida pública de los años sesenta.
En los primeros años fueron ignorados en buena medida porque ellos mismos
se replegaban con la idea de que formaban parte de la retaguardia para el
cambio (para algunos la vanguardia era el partido, para otros el movimiento
armado).
51

Con el paso de los años estas ONG fueron madurando mientras se iba
modificando su presencia en la sociedad. Un factor determinante fue su
organización en "redes" temáticas que les permitieron incrementar
exponencialmente su presencia por todo el país. Simultáneamente, y en la
medida en la que avanzaba la liberalización del sistema político y que el país
modificaba su interacción con el mundo se ampliaba la agenda original de las
ONG. El cambio más significativo vino con las elecciones de Sonora y
Chihuahua de 1985 y 1986, y la presidencial de 1988. Las protestas
generadas por los fraudes electorales llevaron a que un número importante de
ONG reconocieron que la defensa del voto podía ser un poderoso instrumento
de transformación social.

Esto explica el inicio, en 1990, de un movimiento cívico a favor de elecciones


limpias y confiables que creció rápidamente hasta desembocar en la creación
de Alianza Cívica en marzo de 1994. El acuerdo inicial de las ONG que
fundaron Alianza era que ésta desaparecería en diciembre de ese año
después de vigilar las elecciones presidenciales de aquel año. Sin embargo,
después de que realizara con éxito un ambicioso programa de observación
electoral el acuerdo se modificó y a partir de 1995 Alianza amplió su agenda
para incorporar la vigilancia de funcionarios, la organización de consultas
ciudadanas, la educación cívica, etcétera.

Durante sus siete años de existencia Alianza Cívica y sus dirigentes han
recibido críticas de diverso tipo. Una bastante frecuente la sintetiza un
columnista de, El Economista, quien en 1994 acusó a Alianza de agrupar a
una "verdadera plaga" de "observadores electorales tendenciosos" que
expresaban una "abierta simpatía, colaboración o hasta militancia en algún
partido o con algún candidato opositor (Cárdenas, generalmente)" y que
tenían un "prejuicio obsesivo para observar con desconfianza únicamente
aquello que hace el PRI, ignorando la actuación de los demás partidos". [2]

Otro condena bastante frecuente apuntó a la metodología de observación


empleada por Alianza en la elaboración de sus informes. El documento más
importante que ha elaborado --el de la elección presidencial de 1994-- fue
también el más polémico. Los argumentos centrales fueron, primero, que el
país había tenido elecciones de dos tipos (una limpia y otra fraudulenta) y,
segundo, que el porcentaje de irregularidades que habían sido detectados no
invalidaba los resultados presidenciales, pero sí afectaban elecciones locales
lo que repercutía en la distribución de fuerzas que llegaron al Congreso. Las
descalificaciones fueron de diverso tipo y seriedad y llegaron de los principales
rincones del abanico ideológico. [3] A la distancia creo que hicimos lo correcto
porque respetamos la información reunida por los observadores. Hubiera sido
absurdo que adecuáramos los resultados de la observación a las opiniones de
una Coordinación Nacional que sólo tenía la obligación de procesar los datos
con profesionalismo.

Finalmente, la acusación más frecuente giró en torno al financiamiento. En


diferentes tonos se ha repetido que Alianza Cívica estuvo contaminada por
haber recibido dinero de organismos de otros países. El caso más
mencionado ha sido el de la Fundación Nacional para la Democracia (NED)
con sede en Washington. Las acusaciones más fuertes han calificado a
Alianza de ser un instrumento del gobierno de Estados Unidos argumentando
y equiparando al NED con la CIA. En 1997, un diputado apoyado por una
fracción del PRI empujó una iniciativa de ley para imponer una prohibición al
financiamiento internacional que llegaba a los grupos que hicieron observación
electoral. Alianza Cívica fue mencionada una y otra vez. [4] Un ex-miembro de
la Coordinación de Alianza Cívica en el Distrito Federal, Primitivo Rodríguez
Oseguera, retomó algunos de estos argumentos y reelaboró otros. También
exigió que las organizaciones que recibieron financiamientos del NED
informaran públicamente del origen y finalidad de estos. [5]

Como miembro de la Coordinación Nacional, resultó lógico que me criticaran


pública y anónimamente. Un columnista decía en un artículo que estaba al
"servicio de una potencia extranjera". Después añadió que el autor de este
ensayo es un "mercenario. O cipayo. O, mejor aún, traidor a la patria". A tan
pesada acusación añadió que quien esto escribe "se llevó (en 1994) al bolsillo
nada más y nada menos que 155 mil dólares" del NED. [6] En agosto del 2000
un apasionado de mi obra se puso a espulgarla para encontrar
52

contradicciones con que alimentar un largo anónimo distribuido profusamente


en México y el extranjero. [7]

En algunos casos respondí por medio de cartas o declaraciones a medios de


comunicación, en otros en las columnas periodísticas que escribo en diversos
medios desde 1984. Reconozco que el análisis que aquí presento debería
haberlo hecho con anterioridad. Lo pospuse por las exigencias de mi trabajo
académico (toda mi participación en Alianza fue voluntaria), por creer que el
hablar de un aspecto de la experiencia de Alianza --el financiamiento--
obligaba a dar toda la historia y porque me parecía impropio cronicar hechos
en los que participé activamente. Por eso es que, cuando decidí hace algunos
meses explicar el papel jugado por el financiamiento internacional en el trabajo
de Alianza Cívica concluí que tenía que ser la primera parte de un trabajo
bastante más ambicioso. En otras palabras, este es el borrador del capítulo de
un libro sobre la experiencia de Alianza Cívica que elaboraré durante un
período sabático que tomaré de mi trabajo como profesor en El Colegio de
México.

Este trabajo, o el libro, no busca solamente responder a las críticas hechas a


Alianza (aunque esa es por supuesto una de sus intenciones). Mi interés
principal está en explicar uno de los factores que han hecho posible el trabajo
de una organización que, pese a los errores que cometió, hizo aportes a la
limpieza de las elecciones, al fortalecimiento de una autoridad electoral
independiente, a la exigencia de que los funcionarios rindan cuentas sobre el
dinero que administran o ganan, a la necesidad de que los medios de
comunicación informen con objetividad y oportunidad, a la paz en Chiapas, a
la defensa de los derechos de los pueblos indios y a la popularización de la
consulta como método de participación ciudadana. En suma, Alianza
contribuyó a la democratización de México para lo cual obtuvo recursos que
ha administrado escrupulosamente informando permanentemente a sus
miembros.

Es conveniente añadir que no ignoro las contribuciones a la democracia que


hicieron otras organizaciones y redes de diferentes partes de México. En
algunos casos continúan trabajando, en otros desaparecieron. Todos ellos
deben formar parte de una historia más completa del papel jugado por la
sociedad civil mexicana en la construcción de las condiciones que hicieron
posible el 2 de julio del 2000.

La creación de Alianza Cívica

La historia es caprichosa. Desde 1991 diversas organizaciones no


gubernamentales habían alentado una vigorosa movilización cívica a favor de
elecciones libres y confiables. Con ese objetivo habían observado la limpieza
de elecciones estatales y municipales, desarrollado metodologías para
verificar la imparcialidad de los medios de comunicación, aprendido la forma
de hacer encuestas de salida y conteos rápidos. Uno de los rasgos que
caracterizaron ese movimiento fue el involucramiento de ciudadanos comunes
y corrientes que se movilizaban con las herramientas que proporcionaba el
conocimiento especializado.

En el trabajo, esas organizaciones habían llegado a acuerdos de apoyo mutuo


por los cuales llegaban a un estado particular activistas de todo el país. El 28
de noviembre de 1993 estaba implementándose una observación en Yucatán
cuando, a media mañana, los medios informaron que el PRI había nombrado a
Luis Donaldo Colosio como candidato de ese partido a la Presidencia de la
República. Era la hora del "destape", y la atención de la opinión pública se
desvió de la península hacia el centro. Aunque no tengo evidencia para
demostrarlo, siempre he pensado que buscó aprovecharse el "destape" para
manipular la elección yucateca. Esa misma tarde se desató un operativo de
inducción del voto que incluyó un apagón monumental que dejó a oscuras
amplias regiones de la peninsula. Coincidentemente, durante ese lapso se
hicieron una serie de maniobras fraudulentas.

Por esas razones la observación se descuadró y los representantes de las


organizaciones reunidas en Mérida aprovechamos la noche para tomar la
decisión de unir nuestros esfuerzos para vigilar la elección presidencial de
1994. De regreso, en el Distrito Federal, se iniciaron las pláticas en casa de
53

Julio Faesler en Coyoacán. Hubo varios acuerdos iniciales: la organización


que se creara tendría como único objetivo vigilar los comicios de 1994 y
desaparecería en diciembre de aquel año; habría una coordinación nacional
en la cual se tomarían las decisiones colegiadamente y de preferencia por
consenso; y los proyectos se financiarían con los recursos que cada una de
las organizaciones tuviera.

En esas reuniones ya se encontraban quienes meses después integrarían la


Coordinación Nacional de Alianza Cívica. Las enumero por orden alfabético:
Academia Mexicana de Derechos Humanos (AMDH), Acuerdo Nacional para
la Democracia (ACUDE), Consejo por la Democracia (CD), Convergencia de
Organismos Civiles por la Democracia (Convergencia), Fundación Arturo
Rosenblueth (Fundación), Movimiento Ciudadano por la Democracia (MCD) y
el Instituto Superior de Cultura Democrática (ISCD). Esas organizaciones
representaban una amplia pluralidad en sus orígenes, membresía y fuentes de
financiamiento

La AMDH, ACUDE y CD eran organizaciones formadas por individuos que


habían destacado en diferentes áreas de la vida nacional y estuvieron
representadas por el autor de este trabajo, Clara Jusidman y Julio Faesler,
respectivamente. Convergencia y MCD eran redes nacionales de ONG de
orientación progresista y sus representantes fueron Martha Pérez Bejarano
(cuando pasó a ser Secretaría General fue sustituida por Rogelio Gómez-
Hermosillo y José Luis Barajas) y Luz Rosales. La Fundación Rosenblueth es
una empresa que trabaja con la información y estuvo representada por
Enrique Calderón Alzati. Finalmente, el Instituto Superior de Cultura
Democrática era un centro de capacitación con nexos con el Partido Acción
Nacional y otros sectores de centro-derecha y su representante fue Eduardo
Mendoza Ayala.

Cada una de las organizaciones que formaron la Alianza Cívica llegaron con
sus contrapartes en otros países. El Consejo por la Democracia y el Instituto
Superior de Cultura Democrática, por ejemplo, ya tenía financiamiento del
Instituto Nacional Republicano y de la Fundación Nacional para la Democracia
(NED). La Fundación Rosenblueth tenía los ingresos de una empresa
altamente especializada. La Academia Mexicana de Derechos Humanos tenía
recursos de la Fundación MacArthur, Inter Pares de Canadá y la Consejería
en Proyectos y Servicios con sede en Costa Rica.

Cuando decidimos en noviembre de 1993 que uniríamos nuestras fuerzas


para vigilar las elecciones de 1994 teníamos claridad sobre algunas de las
dificultades que enfrentaríamos. A esas alturas, el régimen presumía del
exitoso proyecto salinista (mezcla de la corrupción y cinismo de los viejos
métodos con la modernidad globalizante) mientras se preparaba para la
entrada en vigor del Tratado de Libre Comercio de América del Norte; el PRI y
su candidato superaban a sus contrincantes en las encuestas de opinión y
tenían el control de los principales instrumentos de poder (entre otros, el
Instituto Federal Electoral); en Gobernación despachaba un hombre duro
acostumbrado a imponer su voluntad (Patrocinio González Garrido, que había
cambiado la gubernatura en Chiapas por Bucareli). En suma, se anticipaba
que 1994 seria una marcha triunfal del PRI.

La rebelión zapatista del 1° de enero de 1994 transformó el panorama


nacional y preparó el marco que haría posible la aparición de Alianza Cívica.
El EZLN fue un proyectil que pegó en la línea de flotación del salinismo y tuvo
consecuencias profundísimas para el país, la transición y el papel que jugaría
la "sociedad civil" progresista organizada en ONG. De entrada demostró la
fuerza y variedad de esta "sociedad civil". Una parte de este movimiento se
concentró en la lucha por la paz en Chiapas, mientras que la otra llevó el
movimiento cívico a niveles sin precedente. Esto se debió a que la rebelión
elevó la prioridad de las elecciones libres y confiables y atrajo la atención
internacional lo que facilitó la llegada de fondos internacionales. La sensación
de urgencia se reforzó por el asesinato de Luis Donaldo Colosio en marzo de
aquel año.

Dos días después de esa muerte, las ONG que venían reuniéndose tomaron
la decisión de fundar Alianza Cívica --el nombre se inspiró en la experiencia
potosina, porque el doctor Salvador Nava había creado una organización de
54

nombre similar--. Alianza tuvo un crecimiento espectacular, tanto cuantitativo


como cualitativo. A las diferentes campañas se sumaron más de 400 ONG y
organizaciones sociales (sindicatos, productores de café, etcétera). Entre abril
y agosto de aquel año se presentaron docenas de informes con monitoreos de
la objetividad de los medios de comunicación; se sistematizaron y denunciaron
judicialmente delitos electorales relacionados con la compra y coacción del
voto; se hicieron estudios muestrales de la lista nominal de electores; se
levantaron tres encuestas nacionales sobre asuntos electorales; y se lanzó la
campaña nacional de educación ciudadana "Juego Limpio".

Esto fue el preámbulo para la jornada electoral del 21 de agosto de 1994


durante la cual se movilizaron 40 mil ciudadanos para hacer una observación
muestral, complementaria y de zonas rurales de alto riesgo, además de un
conteo rápido con base en dos muestras (aleatoria y estratificada) y el
despliegue de 450 observadores internacionales de 19 países (América del
Norte, América Latina y Europa). Se desarrollaron proyectos especiales, como
la observación que se hizo de las elecciones en la zona zapatista (a invitación
de éstos). No parece exagerado decir que Alianza Cívica se convirtió en un
referente para la calificación de los resultados por su pluralismo, su capacidad
profesional y por el sustento y contundencia de los resultados. El
Subcomandante Marcos, declararía que Alianza Cívica "nace para vigilar un
proceso electoral, adquiere una autoridad moral impresionante, como para
calificar un proceso electoral y la gente cree lo que dice. Lo que no le cree al
gobierno, a Alianza Cívica sí le cree". [8]

Y sí. Alianza gozó de una enorme credibilidad y fue mucho lo que pudimos
hacer. En parte se debió al trabajo de base que tenía años realizándose entre
la sociedad civil. También influyó la motivación de ciudadanas y ciudadanos
que fueron contagiándose con el entusiasmo de quien está convencido de que
su trabajo tendrá efectos positivos y que formaban parte de una organización
que tomaba decisiones de manera horizontal y transparente. Finalmente,
estaría la obtención de una cantidad extraordinaria de recursos. Una parte la
aportaron las organizaciones que habían obtenido donativos de sus
contrapartes de diferentes países. Otra fue obtenida en un tiempo
extraordinariamente corto por Alianza Cívica.

El dinero de la Alianza

Antes de presentar y comentar los cuadros con la información sobre los


recursos que ha recibido Alianza Cívica quisiera hacer algunas precisiones: a)
la Coordinación Nacional decidió no cobrar por su trabajo --el Secretariado
Técnico sí ha percibido un salario--; b) la forma como se distribuyó el dinero
fue aprobado por la Asamblea de acuerdo a criterios conocidos y aceptados
por todos; c) se entregaron cuentas claras a todos los donantes y Alianza
jamás ha sido acusada de malos manejos; y, finalmente, d) Alianza jamás
sometió su agenda, metodología o independencia política a la obtención de
donativos.

Con este marco presento dos cuadros que resumen el origen de los recursos
manejados por Alianza entre 1994 y 2000. Por las fluctuaciones que tuvo el
peso, se pusieron en dólares para facilitar su comparación.

Donativos recibidos por Alianza Cívica por año y donante, 1994-2000

1994 Monto en Porcentaje


Dólares
Programa de 71.2%
Naciones $1,277,087.
Unidas para el 00
Desarrollo
PNUD
Fideicomiso 18.5%
para la $331,764.00
Democracia
Fundación 8.6%
Nacional para la $155,000.00
Democracia,
NED
55

Donativos 1.0%
diversos $17,647.00
Instituto 0.5%
Nacional $8,941.00
Demócrata, NDI
Banco 0.1%
Mexicano de $1,548.00
Comercio
Exterior
Banco Obrero 0.1%
$1,470.00
Total $1,793,457. 100.0%
00

Tipo de cambio: 3.40 (3 de mayo de 1994)

1995 Monto en Porcentaje


Dólares
NED $105,000.0 57.7%
0
NDI 27.5%
$50,000.00
Centro 8.4%
Internacional $15,207.00
para el
Desarrollo de
los Derechos
Humanos y la
Democracia
Desarrollo y $11,666.00 6.4%
Paz
Total 100.0%
$181,873.0
0

Tipo de cambio: 5.97 (3 de mayo de 1995)

1996 Monto en Porcentaje


Dólares
NED $95,700.00 55.0%
NDI $63,700.00 36.6%
Departamento 8.3%
de Educación y $14,510.00
Asuntos
Internacionales.
Fondo de
Justicia Social.
Trabajadores
Canadienses
Automotrices
Total $173,910.0 100.0%
0

Tipo de cambio: 7.45 (3 mayo 1996)

1997 Monto en Porcentaje


Dólares
PNUD $221,941.0 38.2%
0
NED $150,000.0 25.8%
0
Centro 14.8%
Internacional $85,736.00
para el
Desarrollo de
los Derechos
Humanos y la
56

Democracia
NDI $76,662.00 13.2%
Inter Pares $14,174.00 2.4%
Desarrollo y $10,680.00 1.8%
Paz
Angelica Fund $7,500.00 1.3%
of the Tides
Foundation
Project $6,994.46 1.2%
Counselling
Service
Consejería en $6,784.00 1.2%
Proyectos y
Servicios
Guatemala,C.A.
Total 100.0%
$580,471.4
6

Tipo de cambio: 7.93 (3 de mayo de 1997)

1998 Monto en Porcent


Dólares aje
NED $81,861.00
70.9%
NDI $22,555.00 19.5%
Desarrollo y $11,017.00 9.5%
Paz
Total 100.0%
$115,433.00

Tipo de cambio: 8.49 (3 de mayo de 1998)

1999 Monto en Porcentaj


Dólares e
Inter Pares $85,732.00 33.7%
NED $77,859.00 30.6%
NDI $49,462.00 19.5%
Centro $22,835.00 9.0%
Internacional
para el
Desarrollo de
los Derechos
Humanos y la
Democracia
Fundación Ford $18,352.00 7.2%
Total 100.0%
$254,240.00

Tipo de Cambio: 9.30 (3 de mayo de 1999)

2000 Monto en Porcentaje


Dólares
PNUD 46.4%
$287,762.0
0
NDI 17.1%
$106,312.0
0
NED 14.5%
$90,000.00
Inter Pares 13.8%
$85,516.00
Centro 2.8%
Internacional $17,094.00
para el
Desarrollo de
57

los Derechos
Humanos y la
Democracia
Threshold $13,035.00 2.1%
Desarrollo y $10,302.00 1.7%
Paz
Angelica Fund 10,000.00 1.6%
of the Tides
Foundation
Total $620,021.0 100.0%
0

Tipo de cambio: 9.23 (3 de mayo de 2000)

Fuente: Informes financieros de Alianza Cívica, Declaraciones a la Secretaría


de Hacienda y Crédito Público.

Financiamiento recibido por Alianza Cívica entre 1994 y 2000 por el porcentaje
correspondiente a cada donante.

Fundación Monto Porcentaje


Angelica Fund of $17,500.00
the Tides
Foundation
(Estados Unidos) 0.47%
Banco Mexicano $1,548.00
de Comercio
Exterior 0.04%
Banco Obrero $1,470.00 0.04%
Centro $140,872.00
Internacional
para el
Desarrollo de los
Derechos
Humanos y la
Democracia
(Canadá) 3.79%
Consejería en $6,784.00
Proyectos y
Servicios.
Guatemala, C.A. 0.18%
Departamento de $14,510.00
Educación y
Asuntos
Internacionales.
Fondo de Justicia
Social.
Trabajadores
Canadienses
Automotrices 0.39%
Desarrollo y Paz $43,665.00
(Canadá) 1.17%
Donativos varios $17,647.00 0.47%
Fideicomiso para $331,764.00
la Democracia
(Empresarios
mexicanos) 8.92%
Fundación Ford $18,352.00
(oficina en
México) 0.49%
Inter Pares $185,422.00
(Canadá) 4.99%
NDI (Estados $377,632.00
Unidos) 10.15%
NED (Estados $755,420.00
Unidos) 20.31%
PNUD $1,786,790.0 48.04%
58

(Organismo 0
Internacional de
Naciones
Unidas)
Project $6,994.46
Counselling
Service (Costa
Rica) 0.19%
Threshold $13,035.00
(Estados Unidos) 0.35%
Total 3,719,405.46 100.00

Fuente: Informes financieros de Alianza Cívica y declaraciones a SHCP.

Inicio mis comentarios a las cifras resaltando lo excepcional que fue 1994
porque al millón 793 mil dólares que recibió Alianza, habría que agregar los
presupuestos que tenía cada una de las organizaciones. Fue una cantidad
notable porque la organización se legalizó apenas en abril y porque es
bastante difícil obtener recursos para promover la democracia. Cuando se
funda la Alianza no tenía fondos propios para operar los proyectos. Después
de valorarse las posibles fuentes de financiamiento y entre las alternativas que
se exploraron estuvo la Fundación Nacional para la Democracia (NED) con
sede en Washington. La razón era muy simple: el Consejo para la Democracia
presidido por Julio Faesler ya había recibido un donativo del NED en 1992.
Miembros de la Coordinación Nacional viajaron a Washington donde después
de una presentación sobre el proyecto de Alianza, el NED otorgó 155 mil
dólares (al final representaría un 8.6 por ciento del total).

La cantidad recaudada creció a partir de que, en abril de 1994, llegaron a


México los representantes de la Unidad para la Promoción de la Democracia
de las Naciones Unidas. Después de negociaciones muy rápidas con el
entonces secretario de Gobernación, Jorge Carpizo, aceptaron venir a México
a dar "asesoría técnica" a los grupos de observadores que, en esos
momentos, se multiplicaban. El gobierno mexicano hizo un donativo especial a
las Naciones Unidas por 5 millones de dólares que luego regresaron a México
para ser administrados por la Unidad antes mencionada y por el Programa de
Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD). Alianza presentó el proyecto más
ambicioso y sólido y recibió la mayor cantidad de fondos (casi un millón 300
mil dólares) que representaron un 71 por ciento de todo lo recibido aquel año.
Poco después, se estableció el Fideicomiso para la Democracia, creación de
Santiago Creel Miranda y Jaime González Graff. Obtuvo recursos del sector
empresarial mexicano y entregaron a Alianza su donativo más importante (330
mil dólares que representaban el 18.4 por ciento).

En otras palabras, en el año más importante de la movilización a favor de


elecciones libres y confiables, Alianza Cívica recibió el 90 por ciento de su
financiamiento de fuentes mexicanas (a través de la intermediación de un
organismo internacional y un fideicomiso). Quisiera también recordar que las
mayores tensiones que se tuvieron aquel año fueron con las Naciones Unidas
que no estuvieron totalmente de acuerdo con las metodologías que empleaba
Alianza Cívica. Al final, se logró impulsar el programa tal y como fue planeado
y aprobado por la Coordinación Nacional y la Asamblea de la Alianza.

Si se observan los cuadros y las cifras desde una perspectiva más amplia, es
evidente que en los tres años que hubo elecciones federales (1994, 1997 y
2000) Alianza recibió más recursos que luego caían en los años intermedios.
Esto llevó a un fenómeno que podría titularse el "síndrome del 94". Explico el
significado que le doy al término. Si se recuerda, el acuerdo inicial era que
Alianza desaparecería en diciembre de 1994, pero la presencia e influencia
alcanzada llevó a una presión muy fuerte para que la organización tuviera un
carácter permanente. Esto se justificaba porque había una amplia agenda que
cubrir en términos de limpieza electoral, rendición de cuentas y participación
ciudadana.

Cuando se tomó la decisión de continuar la experiencia de 1994 se transformó


en la medida. El año que nos enorgullecía se convertiría poco a poco en un
fantasma que nos perseguiría porque una de las debilidades de la Alianza era
su endeble situación financiera. Es decir, en 1995 se mantenía el entusiasmo
59

y las expectativas sobre lo que Alianza podría hacer, pero ya no había los
recursos para cumplir con los ambiciosos programas. Si se observan los
cuadros, de 1994 a 1995 cayeron los financiamientos en un 90 por ciento. Por
otro lado, en 1995 se inician las tensiones fuertes con el gobierno de Ernesto
Zedillo Ponce de León por el programa "Adopte un Funcionario" que despegó
con una enorme vitalidad. La adopción del presidente mismo, de Roberto
Madrazo (gobernador de Tabasco) y de otros funcionarios había irritado a
algunos sectores de la clase política. También había enojo por las dos
consultas que se hicieron ese año: la de febrero, que era una crítica abierta a
la política económica, a los préstamos que se recibían de Estados Unidos y a
la agresividad contra los zapatistas y la de agosto, que fue en respuesta a una
petición del EZLN.

La irritación oficial se expresó de diferentes maneras. Solicitamos a la


Secretaría de Hacienda la autorización para recibir donativos que pudieran ser
deducibles de impuestos. La solicitud nos fue rechazada lo que dificultó la ya
de por sí difícil tarea de obtener recursos en México para impulsar la
democracia. Además de ello, el gobierno se acercó a diferentes gobiernos
extranjeros (como el de Canadá) para que bloquearan el apoyo que ONG
canadienses daban a Alianza. El caso más conocido fue, por supuesto, el
bloqueo explícito que hizo la Secretaría de Relaciones Exteriores ante la
Unión Europea para evitar que la Academia Mexicana de Derechos Humanos
recibiera un donativo por 400 mil dólares para vigilar las elecciones para Jefe
de Gobierno del Distrito Federal.

Se desplomaron los recursos, pero no las expectativas de diversos sectores.


En junio de 1995, la Comandancia zapatista nos solicitó --sin preguntar
nuestra opinión de manera anticipada-- que organizáramos una consulta que
los orientaría sobre las decisiones que debían tomar acerca de su futuro. Fue
una situación por demás extraña porque todas las negociaciones se hicieron a
través de un intermediario (jamás hubo un encuentro con la Comandancia o
con Marcos) y porque hubo diferencias muy serias sobre el lenguaje que
utilizaban en las preguntas. A través del intermediario les hicimos algunas
objeciones a lo cual nos respondieron que eso no era negociable. Eso provocó
tensiones (y hasta renuncias) al interior de la Alianza porque algunos
consideraron inaceptable que se aceptaran las exigencias de los zapatistas.

La consulta fue un éxito porque opinó más de un millón de personas en más


de 10 mil casillas instaladas en todo el territorio. Fue notable la logística que
permitió entregar los resultados con enorme rapidez. Aun los críticos del EZLN
aceptaron el profesionalismo de la Alianza. Tiempo después Marcos
comentaría que fue la "única alianza del EZLN que ha tenido resultados
concretos. Y nos hemos tomado tantas fotos con el PRD, con el PT, con
Cárdenas y con las ONGs y no hay nada concreto. Y con ellos (Alianza Cívica)
nunca nos tomamos la foto y hubo algo concreto que fue la consulta". [9]
Paradojas que tiene la historia. Tanto esa consulta como la de febrero que
criticaba al gobierno de Estados Unidos fue financiada en buena medida con
recursos provenientes del NED, una fundación de Estados Unidos que opera
con fondos públicos.

El caso del NED

Quisiera reiterar lo dicho anteriormente. Alianza jamás sometió su agenda,


metodología o independencia política a un donativo. No lo hizo con las
Naciones Unidas o alguna otra financiadora. Tampoco lo hizo con el NED que
durante estos años jamás impuso condicionamiento político alguno, ni exigió
información que fuera más allá de la justificación de la manera en que se
gastaban los recursos. Dicho esto, me parece necesario hacer algunas
precisiones sobre el NED cuyos financiamientos a la Alianza (y a otras
organizaciones) han generado severas críticas y acusaciones muy fuertes.

El NED es una organización no-gubernamental sin fines de lucro fundada en


1984 y con sede en Washington. Recibe fondos privados y públicos. Estos
últimos los aprueba el Congreso de Estados Unidos. Con esos recursos
respalda iniciativas a favor de la democracia y los derechos humanos que
recibe de todo el mundo. El modelo de ONG que promueve la democracia con
fondos públicos fue establecido por las fundaciones de los partidos alemanes
(la Ebert, la Adenauer y la Naumann). También lo utiliza la Fundación
60

Westminster de Gran Bretaña y el Centro Internacional para el Desarrollo de


los Derechos Humanos y la Democracia de Canadá. Como reciben fondos
públicos, estas ONG son supervisadas por los congresos de sus respectivos
países.

Que el NED mantenga informado al gobierno de su país no significa que


trabaja para éste. Su estatuto legal rechaza explícitamente que el NED sea
una "agencia o institución del gobierno de Estados Unidos". Una forma de
garantizar su independencia del gobierno es con su Junta Directiva que entre
sus privilegios tiene la aprobación de todos los donativos. En esa Junta no
puede haber ningún funcionario del Poder Ejecutivo (sí hay algunos
congresistas). Se trata de un grupo representativo de la sociedad
estadunidense. Por ejemplo, en él participa Antonia Hernández, presidenta del
Mexican American Defense Council (MALDEF).

Por su independencia y pluralidad, el NED ha financiado grupos de todas las


corrientes ideológicas en diversos países del mundo. Eso incluye a críticos de
la política exterior de Estados Unidos. En el Perú de Alberto Fujimori apoyó al
Instituto Prensa y Sociedad (defensora de periodistas) y al Foro Democrático
(observación electoral). En México son varias las organizaciones progresistas
que han recibido financiamiento del NED: Mujeres en Lucha por la
Democracia, Movimiento Ciudadano por la Democracia, Diversa, la Comisión
Mexicana de Promoción y Defensa de los Derechos Humanos y el Frente
Indígena Oaxaqueño Binacional. Algunos de ellos han criticado la política
exterior de Estados Unidos. Como antecedente vale la pena recordar que en
medio de la crisis económica de 1994, Alianza organizó una consulta en
febrero de 1995 que incluía la siguiente pregunta. "¿Debe el Congreso de la
Unión rechazar el préstamo ofrecido por el gobierno de Estados Unidos?". La
mayoría de quienes opinaron estuvieron de acuerdo en que fuera rechazado
(lo que no fue atendido por el gobierno mexicano).

Financiar actividades de promoción de la democracia y los derechos humanos


generalmente provoca reacciones encontradas. El NED ha sido criticada por la
izquierda y por la derecha. Incluyo un par de ejemplos. El "Cato Institute", por
ejemplo, habla de que algunos círculos piensan que "el NED está en las
manos del Partido Social Demócrata (neo-trostkista) que tienen entre sus
miembros al presidente del NED Carl Gershman". Un periódico cubano ha
criticado al NED por “los millones que gastan en zurdos (comunistas) en
México, Centro y Sudamérica y hasta en el mismo exilio cubano”. [10]

Otro ángulo es que Alianza Cívica jamás estableció una relación de


exclusividad con alguna financiadora u organización. Desde un primer
momento Alianza tuvo relaciones de trabajo con un buen número de
organizaciones progresistas (o cuando menos respetuosas de nuestras
posturas) de Canadá, Estados Unidos y otros países. En el caso de Canadá
recibió solidaridad y financiamientos de "Desarrollo y Paz" que depende del
Episcopado canadiense y de "Inter Pares". Ambas reciben recursos públicos,
principalmente de la Agencia Canadiense de Desarrollo Internacional. Desde
un primer momento trabajó con la estadunidense Global Exchange, cuyo
director (Ted Lewis) fue expulsado de México por el trabajo de
acompañamiento de comunidades zapatistas en Chiapas. El "Institute for
Policy Studies" con sede en Washington representa los "intereses y
preocupaciones de trabajadores, feministas, minorías, activistas de paz,
ambientalistas, granjeros y consumidores". [11] En 1997, este organismo
altamente representativo de la izquierda estadunidense, le concedió a Alianza
Cívica el Premio de Derechos Humanos Letelier-Moffit por sus aportes a la
democracia.

Todos nuestros miembros en México, todas nuestras contrapartes en el


extranjero, fueron informados siempre del financiamiento que recibíamos del
NED. No hubo objeción porque se trata de una organización privada que
utiliza de manera independiente fondos públicos. En ese sentido vale la pena
añadir que el NED es una organización transparente. Por recibir fondos
públicos, y pese a su carácter no-gubernamental, tiene que cumplir con las
exigencias que impone la famosa Ley de Libertad de Información (cualquier
persona --sea de la nacionalidad que sea-- puede solicitar por escrito, y
obtener, información del NED). En consecuencia, cualquier duda sobre la
61

autonomía, programas y mandato de esta organización deberán solicitársela


directamente a ella.

Balance

Este relato bosqueja una pequeña parte de una de las variables que
intervinieron en la transición democrática mexicana. Alianza Cívica se fundó
con un objetivo preciso y claro: impulsar elecciones libres y confiables en
1994. Después de esa experiencia hubo una decisión colectiva de continuar
observando elecciones, y de ampliar la agenda para exigir a los funcionarios
que rindieran cuentas sobre los recursos que manejaban e impulsar la
organización popular a través de consultas, campañas educativas, etcétera.

Es una historia hecha posible porque la comunidad internacional modificó su


actitud frente al autoritarismo mexicano. La Fundación Ford, por ejemplo,
decidió a principio de los años ochenta reorientar sus prioridades y empezó a
financiar organismos de la sociedad civil. Sin ese viraje, la Academia
Mexicana de Derechos Humanos no hubiera nacido con el vigor con que lo
hizo. Cualquier aportación que quiera reconocerse a la Academia, a Alianza
Cívica y a tantas otras organizaciones, debe incluir el papel jugado por la
comunidad internacional, que además de entregar recursos, concedió una
solidaridad que resultó vital en algunos momentos (ese aspecto lo incluiré en
el libro).

Para impulsar sus proyectos la Alianza buscó recursos en México y el


extranjero. Aceptó los que no imponían ningún condicionamiento y eran
legítimos. Así, tomó el riesgo de recibir los recursos de las Naciones Unidas
que ésta había obtenido por un donativo del gobierno mexicano. También
solicitó y obtuvo apoyo del NED (entre otras financiadoras). Todos los
recursos se utilizaron para lo cual fueron solicitados. Las decisiones siempre
fueron colegiadas. No hubo sometimientos a ninguna organización nacional o
extranjera. Alianza Cívica no tiene nada perverso o siniestro que ocultar.
Como miembro que fui de su Coordinación Nacional puedo asegurar con la
frente en alto que no tengo, que no tenemos, nada de que avergonzarnos; y sí
mucho de que enorgullecernos.

Nota. Esta es la primera versión de la parte del libro que abordará el tema del
financiamiento nacional o internacional. Cualquier información, corrección o
sugerencia enviarla a:

Sergio Aguayo
Centro de Estudios Internacionales
El Colegio de México
Camino al Ajusco 20
México, D.F. 01000
Tel. (5) 449 30 39
Correo electrónico: saguayo@colmex.mx

[Enseguida se transcriben las notas de pie de página que aparecen en el


original]

1. Estas variables fueron tomadas de una de las mejores reflexiones teóricas


sobre el cambio social: Theda Skocpol, States and Social Revolutions: A
Comparative Analysis of France, Russia and China, Nueva York, Cambridge
University Press, 1979.
2. Alejo Garmendia, "Observadores Electorales", El Economista, 11 de agosto
de 1994. José Carlos Robles expresaba ideas similares en El Sol de México,
17 de agosto de 1994.
3. Las críticas más serias y representativas fueron las de Germán Pérez
Fernández del Castillo, El Nacional, 21 de septiembre de 1994; Jorge Alcocer,
Proceso, 26 de septiembre de 1994; Jaime Labastida, Excelsior, 29 de
septiembre de 1994; Raúl Trejo Delarbre, Excelsior, 4 de octubre de 1994; y
Luis Javier Garrido, La Jornada, 7 de octubre de 1994.
4. Se trata del diputado socialdemócrata Luis Sánchez Aguilar, y la iniciativa la
presentó el 18 de marzo de 1997. Sus intervenciones fueron consultadas en la
versión estenográfica de los debates en la Cámara de Diputados.
62

5. Entre mayo de 1997 y junio del 2001 Primitivo ha publicado cuatro cartas en
Reforma y 16 en La Jornada. No tengo el registro de lo aparecido en otros
diarios.
6. Miguel Angel Ferrer, Impacto, abril 1 de 1997.
7. Anónimo, “Sergio Aguayo y su Alianza cínica”, agosto del 2000,14 páginas.
8. Yvon LeBot, Subcomandante Marcos. El sueño zapatista, México, Plaza y
Janes, pp. 300-301.
9. Idem, p. 301.
10. Joaquín Pérez, “Ayuda, sí, pero bien dada”, La Gaceta Mambisa, Miami
Florida, junio de 2001.
11. Página del IPS consultada el 25 de agosto de 2001.”

55.- La parte demandada siguió insistiendo en sus acusaciones y como parte de


su ejercicio de desprestigio en contra mía, dirigió una carta al periódico “La
Jornada”, misma que fue publicada en ese diario el 6 de septiembre de 2001,
reconociendo su autoría, bajo el título “Sobre las actividades de la NED en
México”, la cual se acompaña a la presente demanda como anexo 22.

56.- La carta que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:

“Sobre las actividades de la NED en México

Querida Carmen: La agencia estadunidense National Endowment for


Democracy (NED) premiará al presidente Vicente Fox durante su visita a EU.
Dado que la NED es una agencia que ha suscitado fuertes controversias por
sus operaciones de espionaje e intervención, ofrezco algunos datos sobre ella,
recomendando a la vez consultar el suplemento dominical Masiosare del 13 de
mayo, en el cual se documentan de manera puntual los orígenes de la NED y
lo que ha hecho en México.

La NED fue creada en 1983 por el gobierno de Ronald Reagan para realizar
de manera abierta operaciones antes reservadas a la CIA. Opera como el
brazo "no gubernamental" de EU en el financiamiento e infiltrar partidos,
sindicatos, medios de comunicación, movimientos sociales y ONG. De esa
manera, la NED ha complementado el trabajo de agencias de inteligencia para
derrocar gobiernos en Europa del este, Centroamérica y otras regiones,
combatir al régimen cubano e impedir que movimientos populares a favor del
cambio democrático sean capitalizados por fuerzas nacionalistas y de
izquierda, como en el caso mexicano.

La NED inició sus operaciones en México en 1984 y entró al campo de la


política desde 1988. En esos años, EU había decidido terminar con la activa
diplomacia de México en defensa del régimen sandinista y la insurgencia
centroamericana, y evitar que el movimiento por democracia, justicia y
soberanía encabezado por Cuauhtémoc Cárdenas llegase al poder. Más
tarde, el levantamiento del EZLN confirma al gobierno norteamericano la
urgencia de frenar el ascenso de fuerzas populares contrarias a sus intereses.

Además de patrocinar organizaciones de derecha, la NED consigue hacerlo


con ONG de derechos humanos y observación electoral. Su mayor logro fue
haber creado Alianza Cívíca (AC) en 1994, a la que ha financiado desde
entonces y a la cual ha dirigido a través de personas como Sergio Aguayo y
Rogelio Gómez Hermosillo. En Washington se considera que las operaciones
de infiltración y cooptación de ONG y de organizaciones sociales realizadas
aquí por la NED han sido las más exitosas de América Latina. Junto con la
derecha, la "sociedad civil" patrocinada por Norteamérica habría logrado quitar
al movimiento popular y a las agrupaciones políticas de izquierda la bandera
de la transformación democrática, dando a EU valiosa información y mayor
espacio de maniobra para lograr un cambio de gobierno que consolidara la
subordinación de México a los intereses de la Unión Americana.

Atentamente:

Primitivo Rodríguez Oceguera”

57.- Del contenido de la carta mencionada en el hecho que antecede, se


desprenden las siguientes acusaciones en contra de la parte demandante:
63

Me acusa directamente de ser el instrumento por medio del cual la Fundación


Nacional para la Democracia ha obtenido su mayor logro, que es dirigir a Alianza
Cívica a través mío, organización que según la parte demandada esa Fundación
creó por sí sola en 1994 y a la cual ha mantenido ininterrumpidamente, con lo que,
a su vez, desde la sociedad civil patrocinada por los Estados Unidos de América,
se ha impedido al movimiento popular y a las agrupaciones políticas de izquierda
encabezar la transformación democrática de México, con la intención de que
nuestro país siga estando subordinado a los intereses norteamericanos.

Como sea, una circunstancia que evidencia que la parte demandada ha estado
siempre más interesada en desprestigiarme en lo personal, que en hacer un
análisis objetivo sobre el financiamiento extranjero que reciben las organizaciones
no gubernamentales de la sociedad civil de México, es que esgrime acusaciones
maliciosas como las referidas en este hecho, en el 2001, dos años después de
que dejara de ser integrante de la Coordinadora Nacional de Alianza Cívica.

En esta ocasión guarda silencio sobre su exigencia de un debate público. Tal vez
porque ya me había presentado en un foro público anunciado en “La Jornada” a
discutir las acusaciones que con anterioridad me lanzara, lo que lamentablemente
no le impediría retomar esa exigencia con posterioridad para acusarme falsamente
de ser una persona poco transparente y que oculta información.

En todo caso, debe recalcarse que es falso que yo sea el instrumento a través del
cual la mencionada Fundación haya dirigido a Alianza Cívica, en primer lugar
porque es falso que yo sea dependiente de o me encuentre subordinado a, tal
Fundación y, en segundo lugar, porque es falso que yo en algún momento haya
conducido a mi arbitrio a Alianza Cívica. La parte demandada confunde
maliciosamente en esta acusación, para intentar fundarla, que yo ocupara en su
oportunidad la presidencia del Consejo Directivo de esa asociación civil, con un
hecho bien distinto y falso, consistente en aseverar que dirigía unilateralmente a
Alianza Cívica. Alianza Cívica tomaba decisiones de manera colegiada y
democrática. Asimismo, es a todas luces falso que la Fundación Nacional para la
Democracia haya creado a Alianza Cívica. En este sentido, debe hacerse notar a
su Señoría que todas estas falsedades, la parte demandada las presenta como
hechos incontrovertibles y que dice fundarlas en el análisis veraz y objetivo de
ciertos textos, pero sin que ello se haya demostrado fehacientemente.

58.- La parte demandada dirigió una carta al semanario “Proceso”, misma que fue
publicada en esa revista el 21 de octubre de 2001, reconociendo su autoría, bajo
el título “De Primitivo Rodríguez Oceguera”, la cual se acompaña a la presente
demanda como anexo 18.

59.- La carta que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:

“Proceso
21 de octubre de 2001

Palabra de Lector

De Primitivo Rodríguez Oceguera

Señor director:

Le agradecería publicar en Palabra de Lector las siguientes notas sobre la


entrevista a Sergio Aguayo publicada en Proceso 1302.

Es muy sano para la democracia conocer atroces violaciones a la ley de los


derechos humanos que realizaron agencias de espionaje contra quienes
fueron vistos como enemigos de los regímenes priistas. Sería igualmente
benéfico investigar actividades políticas no públicas que realizan en México
gobiernos como el de Estados Unidos. Doy un ejemplo al respecto.
64

El 18 de marzo de 1997, el diputado federal de la bancada del PSD Luis


Sánchez Aguilar, acusó a Sergio Aguayo, director de Alianza Cívica, y a otros
dirigentes de ONG de trabajar para Estados Unidos por recibir financiamiento
de una agencia dependiente del Departamento de Estado: la Fundación
Nacional para la Democracia (NED, por sus siglas en inglés).

Días después, el 31 de marzo, el diario The New York Times publicó un


reportaje sobre las actividades de intervención realizadas por agencias como
la CIA y la NED. De esta última, el diario reveló que había sido creada por el
presidente Ronald Reagan “para hacer de manera abierta lo que por décadas
la CIA ha llevado a cabo de manera encubierta”.

El diario neoyorquino confirmaba lo que con anterioridad habían dado a


conocer sobre la NED prestigiados centros de investigación, como The Cato
Institute, The American Enterprise Institute, The Committee on Hemispheric
Affairs y exagentes de la CIA, particularmente Philip Agee.

La NED afirma en sus estatutos que cada año informa al Congreso de sus
actividades, y que realiza sus operaciones en consulta con el Departamento
de Estado y las embajadas estadunidenses (ver: http://www.ned.org y pedir a
Yahoo! buscar las referencias a CIA-NED).

¿Qué podría decir de todo esto Sergio Aguayo, premiado por la NED en
1996 y dirigente del Movimiento Mundial por la Democracia, creado por dicha
agencia?

Atentamente
Maestro Primitivo Rodríguez Oceguera
Distrito Federal”

60.- Del contenido de la carta mencionada en el hecho que antecede, se


desprenden las siguientes acusaciones en contra de la parte demandante:

Me acusa de encubrir actividades políticas del gobierno de los Estados Unidos de


América en nuestro país, basándose en que fui premiado por la Fundación
Nacional para la Democracia en 1996 y en que, según la parte demandada, dirigí
el Movimiento Mundial por la Democracia que esa misma Fundación creó.

Con independencia de esta acusación específica, de igual importancia es notar


que mientras que en 1997 la parte demandada mencionaba a un gran número de
organizaciones civiles y de individuos en sus escritos, gradualmente los olvidó
para centrarse exclusivamente en mi persona, con lo que demuestra una actitud
deliberada y orientada exclusivamente para desprestigiarme a mí.

En todo caso, debido es recalcar que es falso que yo encubriera actividades


políticas del gobierno norteamericano. Asimismo, no puede pasar desapercibido
que resulta altamente ofensivo que la parte demandada afirme que por recibir
premios de una Fundación, he entregado mi lealtad incondicional y subordinada a
los intereses estadounidenses. También he recibido premios de instituciones de
otros sectores políticos de los Estados Unidos de América –además de participar
en diversas actividades conjuntas– y ello no me hace dependiente de ellos.
Igualmente, es falso que haya dirigido al Movimiento Mundial por la Democracia y,
de cualquier manera, denota malicia en su proceder que la parte demandada
aproveche mi participación en dicho Movimiento para negar mi autonomía política.
En este sentido, como ha sido necesario reiterar, debe hacerse notar a su Señoría
que todas estas falsedades, la parte demandada las presenta como hechos
incontrovertibles y que dice fundarlas en el análisis veraz y objetivo de ciertos
textos, pero sin que ello se haya demostrado siquiera.

61.- La parte demandada dirigió una carta al periódico “La Jornada”, misma que
fue publicada en ese diario el 12 de diciembre de 2001, reconociendo su autoría,
bajo el título “Cuestiona reuniones de ONG con organismo de seguridad de EU”, la
cual se acompaña a la presente demanda como anexo 23.

62.- La carta que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:
65

“12/diciembre/2001

Cuestiona reuniones de ONG con organismos de seguridad de EU

Querida Carmen: Al parecer, algunos defensores mexicanos de derechos


humanos se han entrevistado con representantes del Consejo Nacional de
Seguridad del gobierno de Estados Unidos. Al respecto hago los siguientes
comentarios.

¿Quiénes en Washington promueven estas reuniones? ¿Bajo qué criterios se


juzga que el Consejo Nacional de Seguridad es una instancia apropiada de
interlocución con defensores de derechos en México? ¿Tiene tal Consejo con
ex directores como Henry Kissinger, alguna autoridad moral en el campo de la
promoción y defensa de los derechos humanos?

En la política exterior norteamericana los derechos humanos están


subordinados a los intereses “superiores” de proteger la seguridad nacional y
preservar la hegemonía en el mundo. Así lo muestran las guerras sucias que
Estados Unidos ha promovido, apoyado o encubierto en Latinoamérica, de las
cuales México no parece haber sido la excepción. Es conocida, por ejemplo,
la estrecha relación que tuvo la CIA con la Dirección Federal de Seguridad.

Por otra parte, desde principios de la pasada década, el gobierno


norteamericano ha patrocinado ONG de derechos humanos y observación
electoral a través del Departamento de estado y del brazo “no gubernamental”
de la CIA, la Fundación Nacional para la Democracia (NED), con el objetivo de
fortalecer su capacidad de acción en áreas críticas, como serían el movimiento
popular por la democracia y la insurgencia social. Para obtener una
información básica sobre la NED ver The New York Times, 31 de marzo de
1997 y/o pedir a los servidores Yahoo! y Alta Vista las referencias a CIA-NED.

Por lo mismo, las ONG no pueden seguir negándose a discutir públicamente la


relación con el gobierno de EU. ¿Es éste un aliado confiable en las luchas del
pueblo por justicia y democracia? Una manera de iniciar dicho proceso de
transparencia sería que las ONG patrocinadas por la NED, especialmente
Alianza Cívica, hicieran pública su correspondencia con dicha agencia. Al
respecto, puede consultarse el artículo sobre la relación ONG-gobierno de EU
aparecido en el suplemento Masiosare de La Jornada del 13 de mayo del
2001.

La respuesta a este artículo la escribió Sergio Aguayo, dirigente del


Movimiento Mundial por la Democracia, creado y financiado por la NED, en
alianzacivica.org.mx

Atentamente:

Primitivo Rodríguez Oceguera”

63.- Del contenido de la carta mencionada en el hecho que antecede, se


desprenden las siguientes acusaciones en contra de la parte demandante:

Después de mencionar una reunión entre organismos de derechos humanos y el


Consejo Nacional de Seguridad de Estados Unidos, la parte demandada concluye
que es obligación de las organizaciones dedicadas a la defensa de los derechos
humanos, y específicamente de Alianza Cívica, discutir públicamente su supuesta
relación con el gobierno norteamericano, la cual, en su particular opinión, existe
siempre que se hayan recibido financiamientos de la Fundación Nacional para la
Democracia. A partir de ambas premisas y de recordar un anterior artículo escrito
de su autoría, del cual ya se ha dado referencia en el hecho número 40 de esta
demanda, la parte demandada me involucra en este asunto haciendo alusión a mi
participación en el Movimiento Mundial por la Democracia, que afirma ha sido
auspiciado por la referida Fundación, propiciando que mi labor en el área de los
derechos humanos pueda ser cuestionada utilizando las sospechas que ella
misma ha imaginado ciertas. En su mente, como he sido miembro de Alianza
Cívica, que es una organización que ha sido financiada por la Fundación Nacional
66

para la Democracia, mi tarea en materia de derechos humanos no responde más


que a la agenda estadounidense.

Sin embargo, lo que no puede perderse de vista es que la obsesión de la parte


demandada por desprestigiarme, provoca que vierta sospechas e incluya
acusaciones en mi contra, aún cuando jamás participé en la aparente reunión que
menciona entre defensores mexicanos de derechos humanos y el Consejo
Nacional de Seguridad de los Estados Unidos de América, circunstancia con la
que se hace evidente que tal reunión, que es el hecho que teóricamente motiva la
carta que envía al periódico “La Jornada”, en realidad le sirve a la parte
demandada como pretexto para reiterar sus acusaciones en mi contra y para
involucrarme buscando personalizar en mí, lo que otros supuestamente hacen.

Como sea, no sobra recordar que resulta falso que haya dirigido al Movimiento
Mundial por la Democracia, ni tampoco está de más negar categóricamente que
mi desempeño en el área de la defensa y promoción de los derechos humanos se
ha visto influido por algún factor externo a mis propias convicciones. En este
sentido, debe hacerse notar a su Señoría que todas estas falsedades, la parte
demandada las presenta como hechos incontrovertibles y que dice fundarlas en el
análisis veraz y objetivo de ciertos textos, pero sin que ello se haya demostrado.

64.- Las acusaciones tan insistentes de la parte demandada inclusive han


repercutido en círculos académicos. En ese tenor, la parte demandante tuvo
conocimiento de un artículo escrito por David Velasco Yáñez, S. J., titulado
“¿Participación electoral o ciudadana? La Unión de los Colonos Independientes
del Cerro del 4”, aparecido en el libro coordinado por Renée de la Torre y Juan
Ramírez Sáiz, bajo el título “La ciudadanización de la política en Jalisco”, editado
por el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente, en 2001, el
cual se acompaña a la presente demanda como anexo 24.

65.- En las páginas 54 y 55 del libro que se menciona en el hecho anterior se


pueden leer los párrafos del tenor siguiente:

“Después del 2 de julio

Uno de los efectos de los resultados electorales del 2 de julio de 2000 es la


necesaria reestructuración de los principales partidos políticos. Por diversas
razones, el Partido Revolucionario Institucional (PRI), el Partido Acción
Nacional (PAN) y el Partido de la Revolución Democrática (PRD) se plantean
una especie de “Refundación partidaria”.

Para el PRI, la pérdida de la presidencia de la república equivale


prácticamente a haber perdido su razón de ser como partido de estado. No
tener línea, no tener el factor de la unidad interna y la disciplina del partido, es
plantearse de manera radical una forma distinta de ser partido, o, mejor dicho,
de ser realmente un partido político, incluso con la duda de si está en
condiciones de construirse como tal a la altura de las exigencias del siglo XXI
o de disgregarse en un conjunto de partidos regionales.

El PAN desde sus primera victorias electorales significativas, como cuando


ganó la gubernatura de Chihuahua, ha venido experimentando el arribo de
hombres y mujeres con deseos de hacer política, muchas veces sin importar si
comulgan con sus principios y doctrina. La asociación Amigos de Fox es un
caso digno de estudio, pues se le ha calificado como organización
“parapartidaria”. El triunfo de electoral de Vicente Fox plantea muchas
preguntas acerca de la manera como el PAN pretende reestructurarse y si a
todos los “Amigos de Fox” les interesa afiliarse al partido. Lo cierto es que los
primeros cuestionamientos y dudas de algunos de los principales dirigentes
del PAN sí tocan el problema de cómo mantener los principios doctrinarios que
le han dado vida a este partido y sus planteamientos de hace más de 60 años
tienen vigencia ante los desafíos del siglo que comienza.

La catástrofe electoral del 2 de julio de 2000 fue, para el PRD, la piedra de


toque para convocar a una verdadera “refundación del partido”, como algunos
dirigentes la llamaron. Aquí cabe destacar el realismo político del propio
67

Cuauhtémoc Cárdenas la misma noche de aquella jornada electoral y días


después, en un breve artículo en el diario La Jornada, donde el principal
dirigente perredista señala las tareas para construir una oposición
constructiva. Reconoce la decisión en favor de la derecha conservadora,
plantea indicadores de lo que pudiera ser un cambio de fondo y no sólo de
fachada y de nombres. A partir de ahí plantea las tareas de lo que llama “la
oposición democrática y progresista”, entre las que destacan “buscar el
acercamiento y tender puentes hacia las organizaciones sociales y grupos
ciudadanos de carácter progresista y democrático, hacia otros partidos
políticos, con los cuales pueda coincidirse en lo que serán los objetivos
prioritarios de nuestra acción política” (Cárdenas, 2000).

A grandes rasgos, esa es la situación de los tres grandes partidos políticos a


raíz de las pasadas elecciones, presidenciales y para renovar el Poder
Legislativo.

Si bien es cierto que los principales partidos se plantean su reorganización


interna, es importante considerar al menos cuatro aspectos que tienen que ver
con la llamada sociedad civil y su participación electoral.

El abstencionismo. A pesar de la intensa campaña realizada, larga y costosa;


de lo cerrado de la competencia, al grado de que generó un alto nivel de
incertidumbre política, en medio de guerras de encuestas y competencias
entre los principales medios de comunicación, algo ocurrió que 36% del listado
nominal, en promedio nacional, no acudió a votar. ¿Por qué, habiéndose
inscrito, no acuden a emitir su voto en una jornada considerada por muchos
histórica? Es relevante que alrededor de uno de cada tres electorales inscritos
no haya ido a votar el 2 de julio. La proporción de quienes no votaron por
Vicente Fox, ni fueron a votar, aumenta si se considera al conjunto de la
población en edad de hacerlo. Su victoria, por tanto, no deja de tener una
frágil legitimidad.

La observación electoral. A partir de la experiencia acumulada en anteriores


elecciones, las del 2 de julio fueron muy observadas, tanto por organismos
nacionales como extranjeros. Se discute mucho sobre las fuentes de
financiamiento [EN EL TEXTO SE REENVÍA A LA NOTA DE PÁGINA
NÚMERO 2 DEL TENOR SIGUIENTE: Es conocido el debate de Primitivo
Rodríguez Oceguera –sobre todo en La Jornada– contra algunas
organizaciones no gubernamentales (ONG) defensoras de los derechos
humanos por no dar a conocer sus fuentes de financiamiento, y contra la
Alianza Cívica por no hacer público que recibe financiamiento de la Fundación
Nacional para la Democracia (NED) de Estados Unidos, en otro tiempo ligada
a la CIA y dependiente del Congreso.]. Lo que llama la atención, sin embargo,
es el creciente interés de un sector de la sociedad, más consciente, con
mayores niveles de ingresos y de educación, en la observación electoral, a
pesar de que no se conocen casos juzgados por delitos electorales como los
muy documentados, ocurridos en 2001, en las elecciones de Chiapas.

…”

66.- Del contenido de la nota al pie de página número dos de la hoja 55 del
artículo mencionado en el hecho que antecede, se desprende que las acusaciones
en contra de la parte demandante vertidas por la parte demandada, han tenido
impacto en su autor en consideración a lo siguiente:

La persona que escribe este artículo concede reconocimiento a la discusión


entablada por la parte demandada sobre la falta de transparencia relativa a las
fuentes de financiamiento de ciertas organizaciones no gubernamentales
defensoras de los derechos humanos, entre las que se recuerda expresamente a
Alianza Cívica, de la que se menciona concretamente que no ha hecho público
que recibe financiamiento de la Fundación Nacional para la Democracia,
organización de la que se relata que en otro tiempo estuvo vinculada con la
Agencia Central de Inteligencia y el Congreso de los Estados Unidos de América.

Con la inclusión de ese texto a pie de página es posible demostrar que una de las
afirmaciones centrales de la parte demandada, la que establecía un nexo entre
68

aquella Fundación y la Agencia Central de Inteligencia, ha puesto en entredicho,


por lo menos para el autor de este artículo académico, la actividad realizada por
Alianza Cívica y, por extensión, a la parte demandante, ya que para esas fechas
todavía se hacía una asociación inmediata de Alianza Cívica con mi persona.

67.- Lamentablemente, la actividad de la parte demandada también ha causado


impacto en revistas tan influyentes como “Milenio Semanal”. Es el caso de un
artículo del que tuvo conocimiento la parte demandante, escrito por Enidh Álvarez
Soberanis, aparecido precisamente en ese semanario, el 18 de febrero de 2002,
bajo el título “La CIA, tras registros en el IFE”, el cual se acompaña a la presente
demanda como anexo 25.

68.- Del artículo que se menciona en el hecho que antecede, a continuación se


transcribe su apartado inicial:

“18 de febrero de 2002.

La CIA, tras registros en el IFE

Por Enidh Alvarez Soberanis

De las diez organizaciones que esperan a que el Instituto Federal Electoral


(IFE) las reconozca como partidos políticos, una de ellas, el Partido México
Posible (PMP), encabezado por Sergio Aguayo y Patricia Mercado, recibió
financiamiento de la Fundación Nacional para la Democracia (NED, por las
siglas en inglés) que, de acuerdo con Philip Agee, ex agente de la Agencia
Central de Inteligencia (CIA), y The New York Times, tiene nexos con la CIA, y
recibe más del 90 por ciento de su financiamiento de parte del Congreso
estadounidense.

Una investigación de Milenio Semanal revela que Alianza Cívica, la


organización no gubernamental (ONG) presidida por Sergio Aguayo recibió
entre 1994 y 2000 un millón 137 mil 174 dólares por parte de la NED y
Equidad de Género, la ONG a cargo de Patricia Mercado, obtuvo 77 mil
dólares entre 1999 y 2000, por la misma vía. Ambos dirigentes conforman hoy
el Partido México Posible que busca su registro ante el IFE.

En entrevista Aguayo reconoció haber sido financiado por la fundación, pero


negó rotundamente que ésta tuviera que ver con la CIA. “Es una calumnia, es
una infamia de quienes me han acusado”.

No obstante, agregó que, en todo caso, “no era una decisión personal, (fue)
una decisión colectiva”.

Un reportaje de primera plana de The New York Times, fechado el 31 de


marzo de 1997, revela, que “la Fundación Nacional para la Democracia,
creada hace 15 años para hacer de manera abierta lo que la Agencia Central
de Inteligencia ha llevado a cabo de manera oculta por décadas, gasta
anualmente 30 millones de dólares para apoyar partidos políticos, sindicatos,
movimientos disidentes y medios de comunicación en decenas de países”.

Declaraciones de Bob Dole, líder de la mayoría republicana en la Cámara


Alta, en su momento afirmó: “La NED continúa gozando de un amplio apoyo
bipartidista en el Senado estadounidense porque sus actividades sirven a los
intereses de Estados Unidos y reflejan los valores de América”. Asimismo, ex
consejeros de seguridad nacional como Richard Allen, Frank Carlucci y
Zbigniew Brzezinski coincidieron en que la NED “es una inversión crítica y de
costo relativamente bajo para lograr una América (Estados Unidos) más
segura”.

De los informes anuales de la NED se desprende que hay otras entidades


mexicanas que se han beneficiado con los recursos de ésta, entre las que se
encuentra la Confederación de Trabajadores de México (CTM) y la
Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex)

En un ensayo intitulado La Fundación Nacional para la democracia: una


rama de la política exterior que creció torcida –publicado en 1990 por el
69

Consejo de Asuntos Hemisféricos de Washington, y el Centro de Recursos


Interhemisféricos de Albuquerque-, Primitivo Rodríguez Oceguera, ex
integrante de Alianza Cívica, detalla la relación de la NED con el gobierno de
Estados Unidos, el Departamento de Estado y el aparato de inteligencia
estadounidense, de sus operaciones de intervención en Centroamérica y otros
países, y de los canales que utiliza para distribuir el dinero: sindicatos,
organizaciones empresariales, centros de investigación e institutos
independientes de los partidos Demócrata y Republicano.

Dos años después, continúa Rodríguez, el ultraconservador think tank The


Enterprise Institute, publicó el libro de Joshua Muravchik titulado: Exportando
la democracia. Cumpliendo el destino de América. En el capítulo dedicado a
la NED, el autor relata los intentos que hizo el gobierno estadounidense para
crear una agencia que no dependiese directamente del gobierno, recibiera su
presupuesto de las arcas públicas, actuara fuera de la clandestinidad y
liberara a la CIA de operaciones que fácilmente podrían ser descubiertas. De
acuerdo con Muravchic, esta idea finalmente se hizo realidad en 1983 con la
creación de la fundación.

Los demócratas en el extranjero aceptarían su patrocinio pues podrían


argumentar, en caso de verse cuestionados, que no recibían dinero del
gobierno estadounidense.

El ex agente de la CIA Philip Agee, en un congreso al que fue invitado a


principios de la década de los noventa aseguró que “en los ochenta, en
Nicaragua y El Salvador, Estados Unidos encontró el vínculo para exportar su
democracia a través de la Fundación Nacional para la Democracia”.

Sergio Aguayo Quezada, autor de La Charola (una investigación especial


sobre la Dirección Federal de Seguridad y el Cisen), no sólo ha recibido
financiamiento, sino que además forma parte del comité directivo del
Movimiento Mundial por la Democracia, organismo creado y financiado por la
NED.

…”

69.- Del contenido de la parte transcrita del artículo mencionado en el hecho que
antecede, se desprende que las acusaciones en contra de la parte demandante
vertidas por la parte demandada, han tenido impacto en su autora en
consideración a lo siguiente:

La influencia que tuvo la parte demandada en la publicación de este reportaje se


aprecia si se compara cuidadosamente el texto de este artículo con el escrito por
la propia parte demandada, del cual se ha dado referencia en el hecho número 40
de la presente demanda, toda vez que es fácil notar que la información publicada
en ese último artículo es repetida por la autora del artículo de “Milenio Semanal”,
incluso de manera textual.

Ejemplos de esa reiteración textual son las citas del periódico “The New York
Times”, del 31 de marzo de 1997; la referencia a las declaraciones de Bob Dole y
de ex consejeros de seguridad nacional como Richard Allen, Frank Carlucci y
Zbigniew Brzezinski; de los informes anuales de la Fundación Nacional para la
Democracia; del ensayo titulado “La Fundación Nacional para la Democracia: una
rama de la política exterior que creció torcida”; o bien, del libro de Joshua
Muravchik titulado “Exportando la democracia. Cumpliendo el destino de
América”, entre otros. Ello si contar que la autora de este artículo menciona
expresamente a la parte demandada como la fuente que le ha detallado las
relaciones de la Fundación Nacional para la Democracia con el Departamento de
Estado, la Agencia Central de Inteligencia y, en general, el gobierno de los
Estados Unidos de América, así como sus operaciones de intervención en
América Latina y la forma en que distribuye sus recursos monetarios. Con base
en esa información, esta persona retoma las acusaciones que la parte demandada
esgrime en mi contra, y repite que no sólo he recibido financiamiento de dicha
Fundación, sino que también prueba mis ligas con ella, el hecho de que formo
parte del Movimiento Mundial por la Democracia, creado y financiado por ella.
70

En este sentido, no debe pasarse por alto que desde el primer párrafo de este
artículo aparecido en “Milenio Semanal”, se lleva a cabo una asociación entre la
citada Fundación, la Agencia Central de Inteligencia de los Estados Unidos de
América, el partido político México Posible y quien presenta esta demanda,
circunstancia que pone de manifiesto que su autora recupera y da credibilidad a la
acusación central que ha difundido durante años la parte demandada.

70.- Como respuesta al artículo referido en el hecho 67, el suscrito dirigí una carta
a la revista “Milenio Semanal”, misma que fue publicada el 25 de febrero de 2002,
bajo el título “Precisiones de México Posible”, la cual se acompaña a la presente
demanda como anexo 26.

71.- La carta que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:

“MILENIO SEMANAL / buzón 25 febrero de 2002.

Precisiones de México Posible

SEÑOR DIRECTOR:

El reportaje de Enidh Álvarez Soberanis publicado el 18 de febrero por


MILENIO Semanal (“La CIA, tras registros en el IFE”) viola principios
fundamentales de los códigos de ética periodística reconocidos
internacionalmente. Además de lanzar acusaciones infundadas, suprime y
distorsiona información, lo que viola el derecho que tenemos a información
oportuna, veraz y objetiva.

Abre su reportaje (por cierto, la cabeza está disociada del texto), asegurando
que el “Partido México Posible (PMP), encabezado por Sergio Aguayo y
patricia Mercado, recibió financiamiento de la Fundación Nacional para la
Democracia (NED)” de Estados Unidos. Lo que dice es una mentira.

Igualmente grave es que la Srita. Álvarez Soberanis suprime información


esencial. En la primera parte de su reportaje concede credibilidad y dedica
espacio a la errónea versión de que Alianza Cívica y Equidad de Género
(entre otras ONG) fueron instrumentos de la política exterior de Estados
Unidos por haber recibido financiamiento del NED. Además de que estas ONG
no tienen nada que ver con México Posible, es deshonesto que la reportera
sólo incluya la versión que condena a las ONG que tomó en cuenta la
información que le proporcioné sobre el financiamiento internacional a Alianza
Cívica, misma que he presentado públicamente y que pongo a disposición de
los lectores interesados (pueden solicitarla a maracortes@yahoo.com o al 55
95 52 84). No tengo nada que ocultar, nada de qué avergonzarme y la
información que lo demuestra fue ignorada por la reportera.

Cuando la Srita. Álvarez Soberanis me pidió la entrevista le sugerí que mejor


hablara con Patricia Mercado (presidenta de México Posible) explicándole que
yo era uno de los 31 miembros que tiene la Coordinadora Nacional.
Finalmente acepté conversar con ella, pero le insistí en varias ocasiones que
se comunicara con Patricia mercado. La reportera no lo hizo, pese a que los
otros entrevistados para ese reportaje son los presidentes de los partidos a
que ahí se alude. Mi presencia en el texto está fuera de lugar, lo que
seguramente se debe a que el objetivo de la reportera siempre fue
descalificar, no explicar.

No tengo los elementos para especular sobre las motivaciones o intereses


de Enidh Álvarez Soberanis. Como parte agraviada, le sugiero que revise con
cuidado el “Código Internacional de Ética Periodística” de la UNESCO y la
“Declaración de Principios de Conducta de los Periodistas” de la Federación
Internacional de Conducta de los Periodistas.

De acuerdo con éstos y otros códigos de ética, lo que hizo la reportera fue
una “distorsión maliciosa” que incluye “acusaciones infundadas”, lo que se
considera una “grave ofensa profesional”.
71

Por lo anterior, también solicito al ombudsman de MILENIO, Luis Petersen,


su opinión sobre el reportaje que motivó esta carta.

ATENTAMENTE
SERGIO AGUAYO QUEZADA”

72.- La parte demandada dirigió una carta al semanario “Milenio Semanal”, misma
que fue publicada en esa revista el 25 de febrero de 2002, reconociendo su
autoría, bajo el título “Invitación a Aguayo para debatir”, la cual se acompaña a la
presente demanda como anexo 26.

73.- La carta que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:

“Invitación a Aguayo para debatir

SEÑOR DIRECTOR:

Sergio Aguayo fundador del Partido México Posible, señala en el excelente


reportaje “La CIA, tras registros en el IFE”, que él practica “una política basada
en la transparencia y claridad” (Milenio Semanal, 18 de febrero de 2002). Al
parecer no es el caso.

Como dirigente de Alianza Cívica (AC), Sergio Aguayo ocultó a observadores


electorales y a la opinión pública que el principal recurso de financiamiento y
asesoría de AC, la Fundación Nacional por la Democracia (NED por sus siglas
en inglés), era una agencia con un amplio expediente en operaciones de
intervención y espionaje.

También que la NED, de acuerdo con sus estatutos, consulta con el


Departamento de Estado y las embajadas a cuáles organizaciones ligarse en
el extranjero, y que informa al Ejecutivo y al Congreso norteamericanos de los
beneficios que los Estados Unidos recibe con el financiamiento que otorga.

Aguayo ha ocultado, igualmente que las ligas de la NED con la CIA y el


Departamento de estado nos son “una calumnia”, sino que las documentaron,
entre otras fuentes, el diario The New York Times (31 de marzo de 1997),
Philip Agee, ex agente de la CIA, y reconocidos centros de investigación
estadounidenses como The Comitee on Hemispheric Affairs, The Inter
Hemispheric Resource Center, The Cato Institute y The American Enterprise
Institute.

Aguayo tampoco ha dado a conocer que la NED le pagó viajes a la India y


Brasil para promoverlo como dirigente del Movimiento Mundial por la
Democracia, la internacional creada y financiada por dicha agencia. Esta
información puede consultarse en el sitio de la NED en internet: www.ned.org

A la vez, para tener una breve introducción a operaciones conjuntas de la CIA


y la NED, sólo hay que pedir a los servidores Yahoo! y Alta Vista las
referencias a CIA-NED.

En una conferencia que dictó sobre AC el pasado mes de agosto, Aguayo


volvió a ocultar lo antes expuesto. Por ser de interés público, invito a Sergio
Aguayo a debatir conmigo estos temas y lo que guste añadir. Que escoja el
lugar, día y hora.

Primitivo Rodríguez Oceguera”

74.- Del contenido de la carta mencionada en el hecho que antecede, se


desprenden las siguientes acusaciones en contra de la parte demandante:

Me acusa de ocultar a los observadores electorales y a la opinión pública que el


principal recurso de financiamiento y asesoría de Alianza Cívica es la Fundación
Nacional para la Democracia, una agencia que, según afirmación de la parte
demandada, cuenta con un amplio expediente en operaciones de intervención y
espionaje; de ocultar que esa misma Fundación, de acuerdo con sus estatutos,
consulta con el Departamento de Estado de los Estados Unidos de América y las
72

embajadas de ese país, a cuáles organizaciones ligarse en el extranjero, así como


que informa al Ejecutivo y al Congreso norteamericanos de los beneficios que
recibe ese país con el financiamiento que otorga aquella Fundación; de ocultar
que las ligas de la referida Fundación con la Agencia Central de Inteligencia y el
Departamento de Estado de los Estados Unidos de América, se encuentran
documentadas por el periódico “The New York Times”, del 31 de marzo de 1997,
el ex agente de esa Agencia, Philip Agee, así como reconocidos centros de
investigación de los Estados Unidos de América; y finalmente, de no dar a conocer
que la Fundación Nacional para la Democracia me ha pagado viajes a la India y
Brasil para promoverme como dirigente del Movimiento Mundial por la
Democracia, creado y financiado por ella misma. Con fundamento en tales
acusaciones, la parte demandada pone en entredicho que practique una política
de transparencia y claridad y, como a estas alturas es posible corroborar, reitera
que soy alguien al servicio de los intereses intervencionistas estadounidenses.

Al respecto, cabe recalcar que es falso que yo no sea una persona transparente,
pero sobre todo, importa hacer notar a su Señoría la malicia con la que la parte
demandada vierte sus acusaciones en contra mía, pues no debe pasar
desapercibida la maniobra que utiliza para atacarme, que no es otra que aseverar
que he ocultado información, lo cual es falso, simplemente porque no comparto la
lectura que hace de diversas notas periodísticas y académicas, que dicho sea de
paso, presenta como si se tratara de hechos verídicos e irrefutables. En este
sentido, debe insistirse en que todas estas falsedades, la parte demandada las
presenta como hechos incontrovertibles y que dice fundarlas en el análisis veraz y
objetivo de ciertos textos, pero sin que ello se haya demostrado fehacientemente.

75.- El suscrito, escribí un artículo en el diario “Reforma”, mismo que fue publicado
el 17 de abril de 2002, bajo el título “México y Cuba. Primitivismos”, el cual se
acompaña a la presente demanda como anexo 18.

76.- El artículo que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:

“MEXICO Y CUBA
PRIMITIVISMOS

Sergio Aguayo Quezada Reforma, miércoles 17 de abril de 2002

Las opiniones sobre el voto mexicano acerca de Cuba en la Comisión de


Derechos Humanos de las Naciones Unidas sacaron a la luz intolerancias y
falta de espacios donde puedan airearse, con civilidad, posturas encontradas.

En los últimos años ha sido frecuente que se descalifique a quienes


pensamos que en Cuba se violan los derechos humanos. Una de las
acusaciones más utilizadas es la de asegurar que la postura sobre Cuba viene
de una complicidad con la política estadounidense hacia la isla. En mi caso,
Primitivo Rodríguez Oseguera tiene años enviando cartas a las redacciones
de los medios nacionales. Algunas veces se las publican, otras no, pero su
llegada está tan garantizada como el engarrotamiento que le provoca a la
selección nacional de futbol el cobro de un penal. Como es igualmente incierto
que algunos medios me concedan espacio para responder adecuadamente,
utilizo este espacio porque las cartas desembocan en asuntos importantes.

En sus cartas, Primitivo denuncia a la Fundación Nacional para la Democracia


(NED) acusándola de ser un brazo de la política exterior de Estados Unidos y
de tener nexos con los servicios de inteligencia de aquel país. Luego convierte
en títeres de Washington a las ONG mexicanas que han recibido
financiamiento del NED. Al correr de los años la lista de los mencionados se
ha ido reduciendo hasta concentrarse obsesivamente en Alianza Cívica y en el
autor de esta columna a quien, además, exige un debate público. No ha
faltado quien tome como verdaderas sus ideas. En la red anda circulando un
comentario a un libro que publiqué el año pasado (La Charola) en el que se
cita a Primitivo para asegurar que "públicamente se ha dicho y no hay ningún
desmentido, que el autor de La Charola es un buen amigo de 'La Compañía'"
(uno de los nombres más comunes para referirse a la CIA, agencia de
espionaje estadounidense).
73

México tiene una sólida tradición de acusaciones de traición lanzadas contra


personas involucradas en la vida pública. Como rumor hablado o por escrito
es una forma fácil y barata de lanzar una sombra de sospecha sobre él o la
acusada. El método es siempre el mismo: se lanza una afirmación y se
incluyen sólo aquellos elementos que puedan apuntalar una conclusión
predeterminada. Todo lo que contradiga o matice esa verdad es excluido,
ignorado o minimizado. En su último libro, Noam Chomsky hace una
fascinante disección de lo antiintelectual del método que, sin embargo, tiene
una enorme fascinación para los que aman las teorías conspiratorias
(Understanding Power, The New Press, 2002).

¿Qué hacer frente a incriminaciones de este tipo? La indiferencia absoluta


puede tomarse como aceptación tácita. Para refutar el rumor hay que
proporcionar información y razones (eso es precisamente lo que hago en "El
financiamiento extranjero y la transición democrática mexicana: el caso de
Alianza Cívica" disponible en www.alianzacivica.org). Sostengo que no hay
nada siniestro u oculto con el NED ni con el financiamiento que concedió a
ONG como Alianza Cívica. El NED es un organismo privado que recibe fondos
públicos aprobados por el Congreso de Estados Unidos, que no tiene relación
con ninguno de los servicios de inteligencia estadounidenses y que tiene en su
Consejo Directivo a una representación de la pluralidad estadounidense. En lo
que a mi concierne no está por demás reiterar que jamás, nunca, bajo ninguna
circunstancia, he estado al servicio de ningún gobierno extranjero. Mi trabajo y
mis opiniones en la academia, los medios y los organismos de derechos
humanos han estado siempre a la vista de todos y estoy en la disposición de
participar en cualquier discusión seria sobre este o cualquier asunto en el que
me considere capacitado para dar una opinión.

Uno de los problemas más interesantes y difíciles de la democracia es el de la


rendición de cuentas. Estoy convencido de que es una obligación de quien
participa en la vida pública (gobernantes, políticos, comentaristas, ONG,
etcétera). Hay, sin embargo, una interrogante: ¿ante quién y bajo qué
condiciones se rinden las cuentas? En sus cartas, Primitivo demanda un
debate público en el cual se ubica como protagonista. No es el interlocutor
adecuado por lo tortuoso de su historial, lo turbio de sus motivos y lo mañoso
de sus argumentos.

Del Partido Socialista de los Trabajadores de Rafael Aguilar Talamantes,


Primitivo pasó a las ONG de derechos humanos y en 1994 fue parte de la
coordinación de Alianza Cívica del Distrito Federal. En ese momento guardó
silencio y aceptó que la Alianza recibiera financiamiento del NED. Terminados
los comicios pasó a trabajar con economistas neoliberales: fue asesor de
Jaime Serra Puche durante los pocos días que éste fue Secretario de
Hacienda y luego reapareció en la oficina de la presidencia de la república
desde dónde empezó su campaña de cartas y escritos en los que asume
posturas de izquierda radical. Actualmente es funcionario del DIF nacional
cuya Directora Ana Teresa Aranda fue presidenta de la Asociación Nacional
Cívica Femenina (Ancifem), una organización que también recibió
financiamiento del NED y que curiosamente jamás ha sido incorporada en las
denuncias de Primitivo.

Sus críticas, además de selectivas, pueden tener motivaciones y asociaciones


que, reconozco, me inquietan. El 30 de junio de 1999, Los Angeles Times
publicó un artículo de Maribeth Sheridan sobre Fernando Gutiérrez Barrios. En
el texto se cita a Primitivo Rodríguez comentando una negociación que tuvo la
dirigencia del PST (de la que él formaba parte) con quien fuera jefe de la
policía política mexicana. De acuerdo al relato, Gutiérrez Barrios les pidió que
cancelaran una marcha, lo que aceptó el partido dirigido por Aguilar
Talamantes. Después de eso, cuenta Primitivo, "Gutiérrez Barrios repartió
sobres llenos de dinero… Nos hizo una oferta que no podíamos resistir".

Historias de este tipo se enganchan con los métodos que se utilizan para
dirimir diferencias. Hubo una vez en que la izquierda intelectual respaldaba
unánimemente al régimen de La Habana. Eso se acabo por la interacción de
procesos extraordinariamente complejos. En relación a Cuba estoy contra la
agresión estadounidense contra la isla, me preocupa la violación que se hace
de los derechos humanos en la isla y estoy de acuerdo con el voto que acaba
74

de dar el gobierno de México en Ginebra. Esto me pone en un lugar diferente


frente a colegas y amigos a los que respeto profundamente (entre otros, Pablo
González Casanova, Héctor Díaz Polanco, Carlos Montemayor y Oscar
González).

La discusión de este año ha sido --y será-- particularmente ríspida con


acusaciones de que hablar de derechos violados en Cuba es el resultado de
hilos jalados desde Washington. La inferencia es tan absurda y reduccionista
como la de quienes mantienen que la defensa del régimen cubano la hacen
mexicanas y mexicanos que están al servicio de los órganos de inteligencia
castristas. Lo preocupante es que en los meses que llevamos discutiendo
sobre Cuba no se hayan organizado foros académicos --en México y/o en
Cuba-- donde se confronten civilizadamente nuestras encontradas posturas.
La descalificación empobrece, las divergencias en la civilidad enriquecen. Los
métodos primitivos ni los acepto, ni me intimidan.

La miscelánea

Arturo Alcalde Justiniani es un abogado comprometido con la defensa de


sindicatos y derechos laborales. Es un hombre honesto, decente y mesurado.
Me uno a quienes condenan la violenta agresión de que fue objeto y que
atenta contra el estado de derecho.

Comentarios: Fax (5) 683 93 75; e-mail: saguayo@colmex.mx”

77.- La parte demandada dirigió una carta al periódico “Reforma”, misma que fue
publicada en ese diario el 25 de abril de 2002, reconociendo su autoría, bajo el
título “Cuestiona a Aguayo”, la cual se adjunta a esta demanda como anexo 27.

78.- La carta que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:

“Cuestiona a Aguayo

Así fuese yo el chupacabras que Sergio Aguayo pinta en su artículo editorial


del pasado miércoles 17, él no queda exento de responder a lo que fuentes
autorizadas han revelado sobre la Fundación Nacional para la Democracia
(NED, por sus siglas en inglés). Esta agencia financia a Alianza Cívica desde
1994, premió a Aguayo en 1995, y le pagó viajes a la India (1999) y Brasil
(2000) para promoverlo como dirigente del Movimiento Mundial por la
Democracia, patrocinado y dirigido por dicha agencia.

Conocidas instituciones estadounidenses de investigación como The Inter


Hemispheric Resource Center, The Committee on Hemispheric Affairs, The
Cato Institute y The American Enterprise Institute han documentado la
estrecha relación de la NED con el Departamento de Estado y con agencias
de inteligencia.

A su vez, el diario The New York Times (31 de marzo de 1997) publicó un
reportaje de primera plana sobre las operaciones estadounidenses de
intervención en otros países, revelando que la NED había sido creada en 1983
“para hacer de manera abierta lo que la Agencia Central de Inteligencia ha
llevado a cabo de manera oculta por décadas”.

Una breve introducción a las operaciones conjuntas de la NED y la CIA se


encuentra solicitando al servidor Yahoo! las referencias a CIA-NED; de ellas,
es particularmente ilustrativo el documento de Philip Agee, ex agente de la
CIA, titulado “Siguiendo las operaciones encubiertas en el futuro”.

Por mi parte, publiqué en el suplemento Masiosare un ensayo sobre la


relación de la NED con Alianza Cívica y otras ONG mexicanas. En él se da
cuenta de estudios y reportajes sobre la NED, monto de dinero recibido por las
ONG, las propuestas hechas a las mismas para transparentar su relación con
la NED y la respuesta negativa al respecto.

Aguayo y los demás dirigentes de ONG que han recibido el patrocinio de la


NED conocen toda esta información. ¿Por qué la siguen ocultando a la
75

ciudadanía? ¿Por qué no hacen pública la correspondencia que han tenido


con la NED como se les ha pedido desde hace ya buen rato?

Por creerlo de interés público invito a Sergio Aguayo a debatir conmigo lo


dicho anteriormente y cuanto guste añadir sobre mi persona. Tendría el gusto
de probar como cierto lo que escribió sobre un servidor, o bien, la pena de
reconocerlo como falso. Que escoja lugar, día y hora.

Primitivo Rodríguez Oceguera”

79.- Del contenido de la carta mencionada en el hecho que antecede se


desprenden las siguientes acusaciones en contra de la parte demandante:

A partir de las mismas fuentes a las que constantemente recurre la parte


demandada para cuestionar que la Fundación Nacional para la Democracia es en
realidad una organización al servicio de la política intervencionista del gobierno de
los Estados Unidos de América, unas inclusive de su propia autoría, se me acusa,
basándose en que esa Fundación ha financiado a Alianza Cívica, que me ha
premiado y que me ha pagado viajes para promoverme como dirigente del
Movimiento Mundial por la Democracia, del cual se añade en esta ocasión que es
dirigido por esa Fundación, de estar al servicio de los intereses norteamericanos.
Además, se acompaña esa acusación de otra también repetida muchas veces por
la parte demandada, a saber, que he ocultado a la ciudadanía la información que
cuestiona a la referida Fundación y que no he hecho pública mi correspondencia
con ella, con lo que evidencio, en su opinión, mi falta de transparencia.

Como a estas alturas resulta evidente para su Señoría, la anterior carta ejemplifica
de forma clara y suficiente que a la parte demandada en su afán por
desprestigiarme, no le importa la excesiva reiteración de sus mismas acusaciones.

En ese contexto, pacientemente habrá de recalcarse que es falso que esté al


servicio de intereses norteamericanos, como es falso que sea mi intención ocultar
información de cualquier índole relacionada con la citada Fundación. Asimismo,
actúa con malicia la parte demandada al basar esas falsedades en el
financiamiento recibido por Alianza Cívica, puesto que tal financiamiento no
comprometía a esta asociación civil y mucho menos me comprometía a mí; en que
se me hubiere premiado, toda vez que recibir reconocimientos en ningún momento
me ha significado perder mi independencia; y en que se me hubieran cubierto los
gastos para realizar ciertos viajes, en razón de que es una constante que las
instituciones que invitan a un conferencista a impartir alguna plática, se hagan
cargo de sus gastos, lo que de todos modos no compromete la imparcialidad de mi
desempeño. Por último, también es falso que yo haya dirigido al Movimiento
Mundial por la Democracia. En este sentido, debe hacerse notar a su Señoría,
cuantas veces sea necesario, que todas estas falsedades, la parte demandada las
presenta como hechos incontrovertibles y que dice fundarlas en el análisis veraz y
objetivo de ciertos textos, pero sin que ello se haya demostrado fehacientemente.

79 BIS.- Con motivo de la carta transcrita en el hecho 78 anterior, el suscrito, dirigí


una carta al diario “Reforma”, misma que fue publicada el 25 de abril de 2002, bajo
el título “Responde editorialista”, la cual se acompaña a la presente demanda
como anexo 27.

79 TER.- La carta que se menciona en el hecho que antecede es del tenor


siguiente:

“Responde editorialista

En su campaña contra mí, Primitivo Rodríguez Oceguera no quiere debatir,


quiere destruir.

Ha ignorado sistemáticamente la información que he presentado rebatiendo


sus afirmaciones. Está a disposición en “El Financiamiento extranjero y la
transición democrática mexicana: el caso de Alianza Cívica”
76

(www.laneta.apc.org/alianza y www.alianzacivica.org). Ampliare esa información


en un libro en preparación.

Ha evadido ese debate público que pide en sus cartas. En agosto de 2001 di
una conferencia pública en Casa Lamm y aclare todas las inquietudes que
planteó el auditorio (incluido por supuesto el financiamiento del NED a Alianza
Cívica). Primitivo no se presentó pese a saber del encuentro y ahora regresa
a la carga exigiendo una especie de duelo al atardecer.

Sus acusaciones son selectivas. ¿Por qué no critica a su jefa Ana Teresa
Aranda, actual directora del DIF nacional y ex presidente de la Asociación
Nacional Cívica Femenina (Ancifem), organización que recibió financiamiento
del NED y que jamás ha sido incorporada en las denuncias de Primitivo?

Ignoro qué resortes lo han llevado a esa obsesión que exhibe en su campaña
de cartas. No descarto la posibilidad deque lo haga por encargo de grupos
cercanos a lo que fue la Federal de Seguridad (al menos en una ocasión
Primitivo recibió dinero de Fernando Gutiérrez Barrios), de algún salinista
(Primitivo trabajó para ellos) y hasta de alguien cercano al gobierno cubano.

No tengo nada que ocultar sobre mi trayectoria de las últimas décadas. Soy
un académico que escribe columnas y que ha participado en la promoción de
los derechos humanos y la democracia. Pienso seguir haciéndolo pese a
difamaciones e intentos de intimidación.

Sergio Aguayo Quezada”

80.- La parte demandada dirigió una carta al periódico “La Jornada”, misma que
fue publicada en ese diario el 3 de mayo de 2002, reconociendo su autoría, bajo el
título “Pide esclarecer lazos de ONG con la NED”, la cual se acompaña a la
presente demanda como anexo 28.

81.- La carta que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:

“Pide esclarecer lazos de ONG con la NED

Señora directora: La Fundación Nacional para la Democracia (NED, por sus


siglas en inglés), patrocinadora de Alianza Cívica y otras ONG en México, ha
sido agarrada con las manos en la masa.

El pasado 25 de abril el diario The New York Times publicó un reportaje sobre
Venezuela, cuyo primer párrafo revela que "en el último año Estados Unidos
ha canalizado cientos de miles de dólares en donaciones a grupos
venezolanos y norteamericanos opuestos al presidente Hugo Chávez,
incluyendo la central obrera cuyas protestas llevaron al breve derrocamiento
del presidente venezolano hace un mes. Los fondos fueron entregados por la
Fundación Nacional por la Democracia...", señala el texto.

El 26 de abril La Jornada dio a conocer un amplio reportaje sobre el mismo


tema.

La NED tiene un largo expediente en operaciones de intervención y espionaje.


El 31 de marzo de 1997, en un artículo de investigación de primera plana, The
New York Times señaló que la NED había sido creada "para hacer de manera
abierta lo que la Agencia Central de Inteligencia (CIA) ha llevado a cabo de
manera oculta por décadas".

Por otra parte, el suplemento Masiosare de La Jornada publicó el 13 de mayo


de 2001 un ensayo sobre la presencia de la NED en México y el
financiamiento que ha dado a varias de la ONG más conocidas.

Entre los dirigentes de ONG que por años aceptaron el patrocinio de la NED
están Mariclaire Acosta y Sergio Aguayo. Este último forma parte del consejo
del Movimiento Mundial por la Democracia, financiado y dirigido por esa
agencia.
77

Dado que Mariclaire Acosta y Sergio Aguayo han sido promotores de la


transparencia y el acceso a la información en asuntos de interés público, sería
muy útil que diesen a conocer su correspondencia con la NED. Incluso, que la
entregasen a personas como Rosario Ibarra de Piedra, Pablo González
Casanova, Elena Poniatowska y Carlos Montemayor.

Dicha correspondencia ayudaría a conocer los objetivos de la NED en nuestro


país. Todo indica que la historia de la NED es parte de la historia de la otra
charola, la gran charola, la charola imperial.

Atentamente:

Primitivo Rodríguez Oceguera”

82.- Del contenido de la carta mencionada en el hecho que antecede, se


desprenden las siguientes acusaciones en contra de la parte demandante:

A partir de las publicaciones del 25 y 26 de abril de 2002 apuntadas en esa carta,


la parte demandada expone como un hecho irrefutable que la Fundación Nacional
para la Democracia es una agencia de intervención y espionaje al servicio de los
intereses estadounidenses, tesis que pretende confirmar con la alusión tantas
veces reiterada al periódico “The New York Times” del 31 de marzo de 1997 y al
artículo de su propia autoría aparecido el 13 de mayo de 2001, el cual se ha
comentado en el hecho 40 de la presente demanda. Inmediatamente después,
menciona que soy uno de los dirigentes de organismos no gubernamentales que
por años aceptaron el patrocinio de dicha Fundación, así como que he formado
parte del Movimiento Mundial por la Democracia, financiado y dirigido por la citada
Fundación, acusándome por esa asociación de participar de los mismos intereses
intervencionistas y de espionaje norteamericanos. Con base en ello, la parte
demandada cuestiona mi trabajo en materia de transparencia a menos que haga
del conocimiento público mi supuesta correspondencia con aquella Fundación,
afirmando que ello permitiría conocer sus objetivos en relación con México.

Al respecto, debe recalcarse que es falso que de mis decisiones unilaterales haya
dependido que Alianza Cívica recibiera financiamiento de la citada Fundación,
como sobre todo es falso que colabore con supuestos intereses intervencionistas y
de espionaje estadounidenses, así como es falso que posea elementos que
permitan conocer los imaginados objetivos intervencionistas de la Fundación
Nacional para la Democracia en nuestro país. En este sentido, debe hacerse
notar a su Señoría que todas estas falsedades, la parte demandada las presenta
como hechos incontrovertibles y que dice fundarlas en el análisis veraz y objetivo
de ciertos textos, pero sin que ello se haya demostrado fehacientemente.

83.- Como respuesta a la carta de la parte demandada referida en el hecho 80, el


suscrito dirigí otra al diario “La Jornada”, misma que fue publicada el 6 mayo de
2002, bajo el título “Respuesta de Aguayo a Rodríguez Oceguera”, la cual se
acompaña a la presente demanda como anexo 29.

84.- La carta que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:

“Respuesta de Aguayo a Rodríguez Oceguera

Estimada Carmen: Solicito atentamente que incluyas mi respuesta a la carta


que publicó Primitivo Rodríguez Oceguera el viernes 3 de mayo.

Siempre he estado dispuesto a informar sobre Alianza Cívica y los


financiamientos que recibió, así como sobre mi participación en diferentes
organizaciones. El problema es que Primitivo no busca debatir u obtener
información. Desecha lo que contradice su elemental esquema mostrando,
además, una clara selectividad. Su misión en la vida, su cruzada, su obsesión,
es difamarme con una versión distorsionada y parcial de la realidad.

En 1994, Primitivo formó parte de la Coordinación de Alianza Cívica en el DF y


estuvo de acuerdo en los financiamientos que recibió la organización. Fue
hasta 1997 cuando empezó a publicar cartas que repiten lo mismo. En agosto
78

del 2001 di una conferencia pública en Casa Lamm e informé sobre el evento
en El Correo Ilustrado. A Primitivo le falló el coraje y no se presentó. En esa
ocasión aclaré todas las inquietudes sobre el financiamiento internacional que
recibió Alianza Cívica (incluido, por supuesto, el proveniente del NED).

El texto El financiamiento extranjero y la transición democrática mexicana: el


caso de Alianza Cívica está a disposición de los interesados en
(www.laneta.apc.org/alianza y www.alianzacivica.org). En las cartas que ha
publicado desde entonces, Primitivo ha ignorado el material ahí incluido
porque contradice sus afirmaciones.

La selectividad de sus obsesiones se ejemplifica en que jamás ha criticado a


su jefa, Ana Teresa Aranda, actual directora del DIF nacional y ex presidenta
de la Asociación Nacional Cívica Femenina (Ancifem), organización que
también recibió financiamiento del NED.

Ignoro los motivos de Primitivo. En un primer momento pensé que tenía una
preocupación auténtica con la transparencia. Cuando evadió el debate público
que solicitó, cuando ignoró la información que contradecía su afirmación,
concluí que su empeño por desprestigiarme puede venir por encargo de
grupos cercanos a lo que fue la Federal de Seguridad (en una entrevista para
Los Angeles Times Primitivo acepta haber recibido dinero de Fernando
Gutiérrez Barrios) o de sectores cercanos al salinismo (Primitivo trabajó para
ellos).

Durante las últimas décadas he participado en la promoción de la democracia


y los derechos humanos. Siempre he actuado con transparencia, y aunque he
cometido errores de estrategia y juicio, no tenga nada que ocultar, ni de qué
avergonzarme. En relación a este asunto, ampliaré la información en un libro
que preparo sobre Alianza Cívica, en una pá- gina de la web pondré la
documentación relacionada y en los próximos días me reuniré con escritores y
personalidades que forman parte de la comunidad de La Jornada para
proporcionarles toda la información que tengo al respecto.

Sergio Aguayo Quezada”

85.- La parte demandada dirigió una carta al periódico “La Jornada”, misma que
fue publicada en ese diario el 15 de mayo de 2002, bajo el título “Rodríguez
Oceguera insta a debate a Aguayo”, la cual se acompaña a la presente demanda
como anexo 30.

86.- La carta que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:

“Rodríguez Oceguera insta a debate a Aguayo

Querida Carmen: Agradezco a Sergio Aguayo los méritos que me adjudica en


su carta a El Correo Ilustrado del 6 de mayo. Con todo, en honor a la verdad,
deseo hacer algunas aclaraciones.

No he sido yo, sino publicaciones como The New York Times, centros de
investigación como The Inter-Hemispheric Resource Center, The Cato Institute
y The American Enterprise Institute, y ex agentes de la CIA como Philip Agee,
los que han documentado las operaciones de intervención y espionaje de la
Fundación Nacional para la Democracia (NED, por sus siglas en inglés), así
como su estrecha relación con el Departamento de Estado y la propia CIA. A
la vez, han sido dirigentes de ONG como Mariclaire Acosta y Sergio Aguayo,
no un servidor, quienes han aceptado financiamiento de la NED.

Los estudiantes, investigadores y personas interesadas en la relación de la


NED con ONG mexicanas pueden consultar un ensayo al respecto publicado
por el suplemento Masiosare de La Jornada el 13 de mayo de 2001.

La ONG que desde su fundación ha estado más ligada a la NED es Alianza


Cívica y quien ha establecido mayores vínculos con la esta organización y
más se ha beneficiado de ello es Sergio Aguayo. Por lo mismo, sería muy útil
que en su próxima reunión con editorialistas de La Jornada, Aguayo les
79

entregue copia de la correspondencia e intercambio de documentos que ha


sostenido con la NED.

Igualmente, que haga llegar tal material a personas como Rosario Ibarra,
Pablo González Casanova, Elena Poniatowska y Carlos Montemayor, y lo
ponga a disposición de los interesados en la biblioteca de El Colegio de
México.

Dicha documentación, junto con la correspondencia mantenida por la NED con


el Departamento de Estado y la embajada estadunidense permitirían conocer
si la NED es, como afirma Aguayo, una ONG independiente o, bien, el rostro
"no gubernamental" de la otra charola, la gran charola, la charola imperial.

Invito a Sergio Aguayo a debatir conmigo lo aquí escrito y cuanto desee añadir
sobre mi persona. De esa manera tendría el gusto de probar como cierto lo
que escribió sobre mí o, bien, la pena de reconocerlo como falso. Por
ejemplo, la traducción que hizo de un artículo de The Los Angeles Times
sobre Gutiérrez Barrios (30 de junio de 1999) muestra que Aguayo no sabe
inglés o que carece de honradez intelectual. Que escoja lugar, día y hora.

Primitivo Rodríguez Oceguera”

87.- Del contenido de la carta mencionada en el hecho que antecede, se


desprenden las siguientes acusaciones en contra de la parte demandante:

Inicialmente, es fundamental reparar en que la parte demandada intenta justificar


sus afirmaciones sobre la Fundación Nacional para la Democracia al considerarlas
únicamente como la reproducción fidedigna de la información que sobre esa
Fundación ha aparecido en otras fuentes periodísticas o de investigación, cuestión
que en este juicio tendrá oportunidad de probar, pero que resulta falsa toda vez
que no es cierto que se trate de una simple reproducción fidedigna, puesto que lo
que ha venido haciendo la parte demandada es disfrazar sus muy personales
opiniones como si fueran la narración de hechos incontrovertibles, para basar en
ellos las acusaciones que vierte en contra mía. En ese tenor, en el documento
que se comenta en esta ocasión, la parte demandada no duda en calificar las
actividades de la citada Fundación como intervención y espionaje vinculado a
agencias del gobierno de los Estados Unidos de América, luego de lo cual asevera
que he aceptado financiamiento de ella y me acusa directamente de ser la
persona más ligada con tal Fundación y que más se ha beneficiado de ello,
haciéndome ver como una persona al servicio de los intereses estadounidenses.

Es falso que yo haya sido financiado por la Fundación Nacional para la


Democracia e igual de falso es que yo sea la persona más vinculada a y más
beneficiada por, dicha Fundación. En este sentido, no se debe cesar en hacer
notar a su Señoría que todas estas falsedades, la parte demandada las presenta
como hechos incontrovertibles y que dice fundarlas en el análisis veraz y objetivo
de ciertos textos, pero sin que ello se haya demostrado fehacientemente.

88.- Con motivo de la carta a que se hace mención en el hecho 85, el suscrito
recibí un correo electrónico de parte de la señora Silvia Alonso Félix, de fecha 15
de mayo de 2002, bajo el título “Primitivo de nuevo”, del cual se acompaña una
impresión a la presente demanda como anexo 31.

Lo anterior le consta a la señora Silvia Alonso Félix.

89.- El correo electrónico que se menciona en el hecho que antecede es del tenor
siguiente:

“De: Silvia Alonso Félix <salonso@laneta.apc.org>


Para: <sergioaguayo@infosel.net.mx>
Cc:
Tema: primitivo de nuevo
Fecha: Wed, 15 may 2002 18:56:51 -0500

Hola Sergio, cómo estás?


80

Sergio no sé si ya tuviste oportunidad de leer en el correo ilustrado de la


jornada de hoy, la carta de Primitivo.

Ante la carta de principios de mayo, desde la coordinación de Alianza


pensamos enviar una carta a La Jornada haciendo referencia al tema pero
después consideramos que no era adecuado porque era darle más elementos
para seguir dando lata, por otro lado cada vez me queda más claro que él ya
lo convirtió en un problema personal contigo y de refilón menciona a Alianza,
pero la verdad es que ya me hartó pues aunque no parezca si tiene eco en
algunos grupos. Qué hacemos?

un abrazo

Silvia”

90.- Del contenido de la carta mencionada en el hecho que antecede, se


desprende lo siguiente:

Este documento debido es recalcarlo porque sirve para que su Señoría posea
elementos suficientes para convencerse de las reales intenciones de la parte
demandada, la cual intenta justificar las acusaciones que esgrime en contra mía
como si fueran legítimos cuestionamientos sobre los vínculos que las
organizaciones no gubernamentales guardan con las entidades que las financian,
cuando en el fondo se trata de ataques falsos que pudieran encontrar su origen en
los personales y peculiares sentimientos que mantiene sobre mi persona.

91.- La parte demandada escribió un artículo que fue publicado en el suplemento


“Masiosare” del periódico “La Jornada”, con fecha 28 de julio de 2002, bajo el título
“Miss NED habla a rajatabla”, el cual se acompaña a la presente demanda como
anexo 32.

92.- La carta que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:

“LOS NUEVOS DEMOCRATAS

PRIMITIVO RODRIGUEZ OCEGUERA

Miss NED habla a rajatabla

Nací en la Casa Blanca con el nombre de Fundación Nacional para la


Democracia, o “NED” para los cuates, y tuve como padrino al Imperio del Bien
y de madrina, a su consorte la CIA. Aprendí a gatear derrumbando gobiernos
comunistas en Europa Oriental. A México ingresé desde niña bajo el cuidado
de las cotorronas de la Coparmex y la CTM. Pero después del sustote que el
Inge nos puso en 88 y el EZLN en 94, mi madrina me internó en el convento
de la sociedad civil organizada, donde me ha ido de perlas y diamantes. Esto
y mucho más, confiesa Miss NED en el programa televisivo La verdad os hará
cómplices.

-Miss NED, le damos la bienvenida a nuestro programa televisivo de gran


rating intelectual, La verdad os hará cómplices. En primer lugar, díganos sus
generales y específicos para que el respetable conozca que como usted no
hay dos, ni siquiera tres.

–Gracias por permitir que hable sin embrujos ni tapujos. Nací en la Casa
Blanca con el nombre de Fundación Nacional para la Democracia, o "NED"
para los cuates, y tuve como padrino al Imperio del Bien y de madrina, a su
consorte la CIA, con quien trabajo noche y día. Aprendí a gatear derrumbando
gobiernos comunistas en Europa Oriental, y más crecidita me gané la medalla
Coscolina y Leperina por mis trabajos en el Lejano Oriente, las Filipinas y
Centroamérica. A México ingresé desde niña bajo el cuidado de las
cotorronas de la Coparmex y la CTM. Pero después del sustote que el Inge
nos puso en 88 y el EZLN en 94, mi madrina me internó en el convento de la
sociedad civil organizada, donde me ha ido de perlas y diamantes.
81

–Miss NED, ya que entró usted en materia y espíritu, díganos cuáles han sido
sus mayores triunfos en el país del cielito lindo y la cárcel de Cananea.

–En esta tierra de hombres cabales y peniches llevé a su máxima expresión y


expansión el primer mandamiento de toda hermandad que se respete: tapaos
los unos a los otros. Pero fui nominada para recibir el codiciado trofeo Orejas
de Oro por haber logrado que mis alumnos oenegeneros aprendieran el genial
juego patentado por el maestro Gutiérrez Barrios: el 3x1.

–¿Se refiere usted al programa gubernamental para sacar del olvido y meter
en lo chido a las comunidades de los migrantes?

–Desde luego que no. Hablo de la fórmula que convierte la transparencia en


chapopote sin que la audiencia lo note: cuando algo se destapa, otros tres
algos se tapan. ¿No ha leído ni oído al Doctor Aguayo? Es mi pupilo más
aventajado en el arte del 3x1. Lo que cuenta no es la ropa sucia que usted
saca al lavadero, sino la que encierra en el ropero.

–Miss Ned, ¿no le pone usted más crema a sus hamburguesas que Televisa a
Lorena Herrera? ¿No teme que por andar de boca suelta la declaren espía
non grata y la devuelvan a Bushlandia?

–Tengo una coraza a prueba de revelaciones y primitivas obsesiones. Mire,


para saber a qué le tiro y a qué le pego, basta con darse una paseadita por el
diario The New York Times del 31 de marzo de 1997 y el del 25 de abril de
este año, los cuales dan fe de mis hazañas desestablizadoras; seguirle por el
Masiosare del 13 de mayo de 2001, donde se cuenta la verdadera historia de
la conquista de ONG por el Departamento de Estado; y luego pedir al servidor
Google de la Internet que le traiga vivas y coleando las referencias a CIA-NED
para conocer mis adentros y afueras. ¿Y qué? El mismísimo embajador
Davidow anunció con bocinas estereofónicas en La Jornada del 20 de junio
que los USA darán buenos fajos de dólares a organizaciones como Alianza
Cívica Nacional y Alianza Cívica Chiapas, y ¿alguien sentenció "eso huele
gacho, Nacho"? Peor tantito. El Partido México Posible lleva el mismo
nombre y apellido que el Partido Perú Posible. Yo soy la nodriza de tan bellos
mellizos, pero fuera de Milenio Semanal del 18 de febrero, donde me dieron el
periodicazo, "La CIA tras registros en el IFE," ¿quién más ha dicho esta boca
es de mi tía?

–¿No teme usted, al menos, que una comisión de la verdad sobre las
fechorías cometidas por el Tío Sam, del 68 a la revolufia de San Salvador
Atenco, la deje más en cueros que la Diana Casadera?

–Ya le dije que yo y mis achichincles somos inmunes e impunes.

–Miss NED, lo mismo decía Luis Echeverría. Mejor cómprese unas barbas de
cabra cabrita y póngalas a remojar cada vez que salga a espiar.

Para transparentar su relación con Estados Unidos las ONG necesitan:

1. Adoptar un código de ética y transparencia.

2. Hacer pública su correspondencia con la NED y la USAID.

3. Preguntar a la ciudadanía si deben recibir dinero de EUA.”

93.- Del contenido del artículo mencionado en el hecho que antecede, se


desprenden las siguientes acusaciones en contra de la parte demandante:

Con curioso estilo, la parte demandada repite sus afirmaciones sobre la calidad de
la Fundación Nacional para la Democracia, a la que de plano tacha de espía, para
acusarme con base en ello de ser una persona poco transparente al aseverar que
soy el pupilo más aventajado de esa Fundación en el arte del 3x1, que convierte la
transparencia en chapopote. Añade en esta ocasión la parte demandada una
referencia al artículo de Enidh Álvarez Soberanis aparecido en “Milenio Semanal”
el 18 de febrero de 2002, el cual se ha comentado en el hecho número 67 de esta
82

demanda, para cuestionar al Partido México Posible, y a mi de forma indirecta, si


se recuerda lo dicho en ese reportaje titulado La CIA, tras registros en el IFE”.

Al respecto, no sobra insistir en que es falso que yo sea un pupilo de la referida


Fundación, como tampoco está de más dejar constancia de que desconozco cual
sea ese supuesto arte del 3x1, que la parte demandada me adjudica. En este
sentido, debe hacerse notar que todas estas falsedades, la parte demandada las
presenta como hechos incontrovertibles y que dice fundarlas en el análisis veraz y
objetivo de ciertos textos, pero sin que ello se haya demostrado.

94.- La parte demandada dirigió una carta al semanario “Milenio Semanal”, misma
que fue publicada en esa revista el 11 de noviembre de 2002, reconociendo su
autoría, bajo el título “Comentarios sobre entrevista”, la cual se acompaña a la
presente demanda como anexo 18.

95.- La carta que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:

“11/noviembre/2002

Comentarios sobre entrevista

SEÑOR DIRECTOR:

En la excelente entrevista que María Elena Cantú hizo a Patricia Mercado,


presidenta del Partido México Posible, ésta afirma que una de las diferencias
que tiene el nuevo partido respecto a los demás es la “otra forma de hacer
política. Los políticos no han sido honrados, no han sido honestos… Nosotros
queremos dignificar la política” (Milenio Semanal, 4 de noviembre de 2002)
Hago al respecto los siguientes comentarios.

El Partido México Posible tiene un nombre similar al Partido Perú Posible, con
el cual ganó las elecciones Alejandro Toledo. Existe otra coincidencia: el Perú
Posible, así como las ONG Equidad de Género, fundado por Patricia Mercado
y Alianza Cívica, creada por Sergio Aguayo, pertenecen al Movimiento
Mundial por la Democracia, dirigido por la agencia estadounidense Fondo
Nacional para la Democracia (NED, por siglas en inglés).

Por otra parte, Equidad de Género recibió financiamiento del NED por dos
años, en tanto que Alianza Cívica lo ha obtenido desde su aparición en 1994.
En 2000, Mercado y Aguayo fueron invitados por el NED a Brasil para
participar en el segundo encuentro del movimiento antes mencionado,
eligiéndose a Aguayo miembro de su comité coordinador.

El NED declara ser una organización no gubernamental que no pone


condiciones al dinero que ofrece. Con todo admite que recibe 97 por ciento de
su presupuesto del Congreso norteamericano y que consulta con el
Departamento de Estado y las embajadas estadounidenses a cuáles
organizaciones patrocinar en el extranjero (ver www.ned.org).

El 31 de marzo de 1997, el diario The New York Times publicó un reportaje de


primera plana revelando que el NED fue creado en 1983 “para realizar de
manera abierta lo que la Agencia Central de Inteligencia ha llevado a cabo de
manera oculta por décadas”. El mismo diario informó el pasado 25 de abril
sobre el patrocinio dado por el NED a dirigentes del frustrado golpe de Estado
en Venezuela. Información que completó The Boston Globe el 18 de agosto.

Sería de utilidad pública que Patricia Mercado y Sergio Aguayo explicasen por
qué decidieron vincularse al NED.

PRIMITIVO RODRIGUEZ OCEGUERA”

96.- Del contenido de la carta mencionada en el hecho que antecede, se


desprenden las siguientes acusaciones en contra de la parte demandante:

Luego de afirmar que soy el creador de Alianza Cívica, aseveración que resulta
insostenible con tan sólo consultar sus estatutos, de repetir que esta organización
83

ha sido financiada por la Fundación Nacional para la Democracia, y de señalar


que ésta me invitara a Brasil, la parte demandada me solicita explicaciones sobre
mis supuestos vínculos con tal Fundación, poniendo en tela de juicio mi
independencia respecto de ella, y haciéndome partícipe de lo que, desde su muy
particular punto de vista, es una agencia al servicio de intereses estadounidenses.

Al respecto, conviene recalcar que es falso que yo sea el creador de Alianza


Cívica, como es falso que yo dependa de la mencionada Fundación. En este
sentido, debe hacerse notar a su Señoría que todas estas falsedades, la parte
demandada las presenta como hechos incontrovertibles y que dice fundarlas en el
análisis veraz y objetivo de ciertos textos, pero sin que ello se haya demostrado.

97.- Como respuesta a la carta de la parte demandada referida en el hecho 94, el


suscrito dirigí otra a la revista Milenio Semanal, misma que fue publicada el 18
noviembre de 2002, bajo el título “Respuesta de Sergio Aguayo”, la cual se
acompaña a la presente demanda como anexo 33.

98.- La carta que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:

“MILENIO SEMANAL / buzón 18 de noviembre de 2002

Respuesta de Sergio Aguayo

SEÑOR DIRECTOR:

Le solicito que incluya la siguiente respuesta a la carta de Primitivo Rodríguez


Oceguera que MILENIO Semanal publicó en “Buzón” el domingo 10 de
noviembre.

La semana pasada, en esta revista, Primitivo Rodríguez Oceguera se


aprovecha de una entrevista a Patricia Mercado (presidenta del partido México
Posible) para lanzarse contra ella y contra mí. Desde hace seis años envía
cartas con la misma información y la misma exigencia de explicaciones
rodeadas de acusaciones e insinuaciones.

Finalmente, decidí debatir públicamente lo que escribe y dice. En agosto de


2001 di una conferencia en Casa Lamm en la cual aclaré todas las inquietudes
sobre el financiamiento internacional que recibió Alianza Cívica (incluido, por
supuesto el proveniente de la Fundación Nacional para la Democracia, NED).
El texto “El financiamiento extranjero y la transición democrática mexicana: el
caso de Alianza Cívica” está a la disposición de los interesados en
(www.laneta.apc.org/alianza ó www.alianzacivica.org).

Primitivo no asistió, pero siguió enviando cartas en las que evade la


información que contradice su dictamen de la realidad. Tipo contradictorio que
cuando fue miembro de Alianza Cívica jamás cuestionó los financiamientos
que recibió la organización y que jamás ha pedido explicaciones a su actual
jefa, Ana Teresa Aranda, directora del DIF nacional y ex presidenta de la
Asociación Nacional Cívica Femenina (Ancifem), organización que recibió
financiamiento del NED.

Aunque ignoro sus motivaciones últimas, y no quiero especular sobre sus


posibles patrocinadores, me queda claro que decidió gastar una parte de su
vida en una cruzada para difamarme con versiones distorsionadas y parciales
de la realidad.

Independientemente de primitivismos, Alianza Cívica es una experiencia que


merece ser contada y para ello estoy escribiendo un libro que terminaré el
próximo año. Cuando lo termine entregaré el fondo documental que he ido
acumulando sobre sociedad civil y transición a alguna biblioteca. Por la
intensidad de sus obsesiones, Primitivo seguirá alimentando las secciones de
cartas al director. Por respeto a los lectores tendré que seguirle contestando.

Atentamente
SERGIO AGUAYO QUEZADA”
84

99.- La parte demandada dirigió una carta al semanario “Milenio Semanal”, misma
que fue publicada en esa revista el 25 de noviembre de 2002, reconociendo su
autoría, bajo el título “Respuesta a Aguayo”, la cual se acompaña a la presente
demanda como anexo 18.

100.- La carta que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:

“(Milenio Semanal, 25 nov. 2002)

Respuesta a Aguayo

Por creerlo de interés público, respondo a la carta escrita por Sergio Aguayo
(MILENIO Semanal, 18 de noviembre) comentando una mía que se publicó en
“Buzón” el 11 de este mes sobre los vínculos de Patricia Mercado y el propio
Aguayo, dirigentes del Partido México Posible, con el Fondo Nacional para la
Democracia (NED, pos sus siglas en inglés).

Aguayo se incomodó con la información que proporcioné, pero no la


desmiente. Quizá porque fue el diario The New York Times, no yo, el que
reveló las ligas del NED con la CIA, y fue The New York Times, junto con The
Boston Globe, los que informaron sobre el patrocinio del NED a líderes del
frustrado golpe de Estado a Venezuela.

Invito a Aguayo, dirigente de un partido financiado con dinero de los


contribuyentes y que apuesta a ser honesto con la ciudadanía, a debatir
públicamente el carácter del NED, sus operaciones en México y cuanto guste
añadir sobre mi persona. Que escoja lugar, fecha y hora.

Primitivo Rodríguez Oceguera”

101.- Del contenido de la carta mencionada en el hecho que antecede, se


desprenden las siguientes acusaciones en contra de la parte demandante:

Me acusa directamente de estar vinculado con la Fundación Nacional para la


Democracia, organización que la parte demandada asegura está ligada a la
Agencia Central de Inteligencia de los Estados Unidos de América, y de la que
afirma patrocinó un golpe de estado en Venezuela, pretendiendo basar tales
aseveraciones en diversos artículos de los periódicos “The New York Times” y
“The Boston Globe”, para de esa manera cuestionar mi honestidad, así como el
desempeño que tuviera en aquella época en el Partido México Posible. En este
sentido, debe hacerse notar que estos ataques, la parte demandada dice fundarlos
en el análisis veraz y objetivo de ciertos textos, pero sin que ello esté demostrado.

También vale la pena resaltar que en esta ocasión la parte demandada vuelve a
retarme a un debate público, pero sobre todo, que ello lo hace al mismo tiempo
que maliciosamente guarda silencio sobre un hecho incontrovertible: que impartí
una conferencia pública a la que ni siquiera se presentó.

102.- El suscrito, concedí una entrevista para el periódico “La Jornada de Oriente”,
misma que fue publicada el 12 de mayo de 2003, en un reportaje bajo el título
“Partido México Posible aspira a ocupar el espacio que perdió el PRD: Sergio
Aguayo”, la cual se acompaña a la presente demanda como anexo 34.

103.- El texto de la entrevista que se menciona en el hecho que antecede es del


tenor siguiente:

“LA JORNADA DE ORIENTE / Puebla Política


Lunes 12 de mayo de 2003.

Partido México Posible aspira a ocupar el espacio que perdió el PRD:


Sergio Aguayo

“Sostiene que ni la CIA ni Jorge Castañeda Gutman están atrás de su


fundación”
85

por Fermín Alejandro Gracía

En corto plazo el objetivo del Partido México Posible (PMP) será conseguir en
los comicios el 2 por ciento de votación que exige la legislación electoral. Pero
a largo plazo su objetivo principal será dignificar la política y renovar la
izquierda partidista, lo que en algunos estados de la República como Puebla,
le permitiría ocupar el espacio del Partido de la Revolución Democrática. Para
conseguir estos objetivos el PMP se ha propuesto enarbolar la lucha de la
diversidad sexual, el combate a la inequidad, la protección del medio ambiente
y la promoción de la cultura de los derechos humanos, temas que aunque
están en la agenda laboral de las fuerzas políticas, en los hechos no son
tomados en cuenta.

Las definiciones anteriores fueron hechas en entrevista con La Jornada de


Oriente por Sergio Aguayo, quien es candidato plurinominal por la
circunscripción a la que pertenece Puebla y uninominal por un distrito en
Morelos por el PMP, periodo en el que está encargado de la presidencia de la
Coordinadora Nacional. El aspirante, además de ser un denotado académico
de El Colegio de México –especialista en investigaciones sobre seguridad
nacional y y organismos policiacos- estuvo al frente de la organización
Alianza Cívica (AC) –que vigiló los comicios de 1994 y 1997- y la Academia
Mexicana de derechos Humanos.

Ni la CIA ni Castañeda…

Uno de los detractores de Sergio Aguayo es Primitivo Rodríguez Oceguera,


quien fue participante de AC y lo acusa de, al aspirante de PMP, haber
obtenido financiamiento de la Fundación Nacional para la Democracia (NED
por sus siglas en inglés) -que lo mismo es apoyada por miembros de los
partidos Republicano y Demócrata de estados Unidos- sin que lo supieran
integrantes de AC. Este organismo denunció haber sido un brazo de la
Agencia Central de Inteligencia (CIA por sus siglas en inglés) que ha servido
para operar en México y otras partes de América Latina.

Entrevistado en las oficinas de la sede estatal de PMP. Aguayo aceptó


hablar sobre el tema. Primero deslindó al PMP de la NED al indicar que en su
fundación y ahora en su campaña electoral el partido “no la tenido padrinos”.
Eso sin contar que la legislación electoral mexicana prohíbe a las fuerzas
políticas obtener financiamiento del extranjero.

Después hizo un deslinde, QLa decisión de recibir dinero del NED no fue de
Sergio Aguayo, yo era un integrante de la Coordinadora Nacional –de AC- que
integrábamos varias personas. Primitivo Rodríguez era integrante de Alianza
Cívica y nunca cuestionó a la NED, que no sólo financió a Alianza Cívica sino
a muchas organizaciones, algunas progresistas, otras conservadoras, otras
gubernamentales –como la CTM- Coparmex, Aneifem, Mujeres en Lucha por
la Democracia. Primitivo decidió obsesionarse conmigo desde hace años,
digamos, su función en la vida es desenmascararme de mi supuesta
conspiración ignorando toda evidencia que no cuadra con su hipótesis de la
existencia de un complot.

“Alianza Cívica –agregó- surge en 1994 como una coalición de


organizaciones que buscaron recursos de varias organizaciones, entre ellas la
NED dio dinero. Nunca hubo un condicionamiento y la NED nunca ha tenido
una relación con la CIA. Lo que Primitivo Rodríguez dice son tres líneas de un
artículo de un periodista que salió en el New York Times, pero al mismo
tiempo el New York Times en una editorial habla de la independencia de la
NED.

Otra sospecha que ha existido contra el PMP es que pudiera ser el partido
político que anda buscando Jorge G. Castañeda Gutman para postularse en
2006 como candidato presidencia. Ante la pregunta de cómo observa el
activismo del ex secretario de Relaciones Exteriores, Aguayo dijo: “Es una
personalidad que llama mucho la atención por muchas cosas: es atípico y dice
lo que piensa, es extravagante, sofisticado, provoca, le gusta pelear en un
país en el que las formas son fundamentales… es irreverente en muchos
sentidos. En una entrevista para El País dijo claramente cuáles son sus
86

propuestas, a él le gustaría ser presidente, pero ahora su problema es que no


tiene partido aparentemente”.

Antes de que el reportero ñe preguntara se adelantó y estableció “México


Posible no es el partido de Jorge Castañeda, es un partido cargado de
mujeres, no depende de nadie, pero bueno como él lo planteó en una
metáfora: puede faltar el balón pero no el jugador… lo que está diciendo es
que mis ideas pueden pasar pero yo no –como candidato- pero forma parte de
una democracia normal en cualquier país; cuando se inicia la carrera hay
decenas de aspirantes que se alinean a la puerta de salida y en la medida que
van avanzando el proceso se va reduciendo”.

-En el supuesto que Jorge Castañeda G. fuera avanzando tendría cabida en


México Posible? Habría coincidencias? -preguntó el reportero.

-No lo sé, es muy difícil, pero no me parecería porque somos un partido con
un estilo bastante de sociedad civil, en el que hay una discusión muy intensa y
Jorge Castañeda G. es una figura muy polémica, que genera sentimientos
encontrados a favor y en contra. Nosotros, en este momento, para ser franco,
en lo que menos pensamos es en el 2006, estamos con toda la energía
concentrada para obtener los votos necesarios para el registro, de lograrlo,
entonces ya veríamos qué vamos a hacer –señaló.

La izquierda social

El origen del PMP data de hace 40 años –relata Sergio Aguayo- cuando se
empezó a crear en México una izquierda social, una izquierda entrante que ha
buscado un partido y creyó que el PRD podía ser una opción, pero finalmente
no lo fue. Ahora se intenta que el PMP, que encabeza Patricia Mercado, sea
esa alternativa. Reconoce que son justificados los cuestionamientos hacia los
partidos pequeños o llamados emergentes, pues su única búsqueda ha sido la
de obtener prerrogativas. Ejemplifica “Un caso paradigmático es el Partido
Verde Ecologista de México, que se ha caracterizado por la sagacidad con la
que realiza negocios pero que no es vista por toda la comunidad ambientalista
como su representante”.

Considera Aguayo, que una de las perversidades que tiene el sistema de


partidos en México es la excesiva cantidad de dinero que reciben las fuerzas
políticas. En el Partido México Posible, para evitar reproducir vicios de otras
agrupaciones, unicamente se permite que la dirigencia maneje el 10 por ciento
del presupuesto y el 40 cuando no sean años electorales, lo piensa dedicar a
proyectos sociales.

Otra distinción del PMP de los demás, es el origen de sus integrantes y sus
propuestas. Al respecto indica Aguayo “Nosotros tenemos como un mínimo de
aval las luchas en que cada uno de nosotros ha participado. Patricia Mercado
tiene 20 años de estar luchando por los derechos de la mujer, antes estuvo en
el PRT. Yo vengo de la academia y de la lucha de los derechos humanos, no
tengo experiencia partidista, por eso somos diferentes. También estamos
intentando ser diferentes en las propuestas y los programas que estamos
planteando como son: la despenalización del aborto, la legalización y consumo
de la marihuana y el respeto a la diversidad sexual, temas todos, que no son
precisamente los más apropiados para tener la aceptación a ese centro
blandengue al que muchos partidos aspiran.

Del por qué buscar el poder político comenta: “Muchos de nosotros ya


estamos cansados de hacer sugerencias, de trabajar en proyectos que jamás
se transforman en políticas públicas sostenibles… estamos decididos a dar el
brinco y salirnos de la lógica de las organizaciones no gubernamentales y
meternos a la lógica de un partido que es la búsqueda de posiciones de poder
para tomar decisiones”.

Los temas y propuestas que impulsa PMP, señala, son tomados en cuenta
en las plataforma de los partidos, pero en los hechos son ignorados. En el
caso del PAN justifica ese comportamiento por ser el instrumento político de la
derecha. En otros partidos, como son los de la izquierda son producto de una
crisis.
87

“Los partidos de la izquierda, con sus excepciones, se han convertido en


reductos de burocracia, cuya única o principal preocupación es obtener el
número satisfactorio de votos para mantener las prerrogativas y por tanto
sostener un aparato que se reproduce asimismo. En la medida que esto ha
sucedido se han ido alejando de la izquierda social, esa izquierda errante que
ve con frustración y desesperación, cómo va cayendo –la izquierda- en las
preferencias electorales. La caída del Partido de la Revolución Democrática en
las preferencias en estados como en Puebla, es la condena más explícita,
clara y tajante de esta burocratización, de esta esclavitización de un partido
que cuando nació era muy vigoroso”.

En el PMP, en cuya integración tiene más de un 70 por ciento de mujeres, lo


que une a los integrantes es el convencimiento de que hay que dignificar la
política y renovar la izquierda partidista. La podemos renovar en un aspecto
político y socialmente reducido. También podemos crecer para ocupar el lugar
que tuvo el Partido de la Revolución Democrática. Puebla es un caso, aquí –el
partido del sol azteca- se ha derrumbado en las preferencias electorales por
sus errores.

Sin embargo, acota. “Pero en este momento el objetivo es obtener el 2 por


ciento de los votos y una vez obtenidos podremos trabajar para presentar
candidatos extraordinariamente buenos para presidentes municipales y
empezar a tener gobiernos de calidad y acercarnos a la gente…. En los que
se combine esa propuesta de izquierda moderna de respeto a la diversidad,
combate a las inequidades de género, recuperación del medio ambiente y la
promoción de la cultura de derechos humanos.”

104.- La parte demandada dirigió una carta al semanario “Proceso”, misma que
fue publicada en esa revista el 18 de mayo de 2003, reconociendo su autoría, bajo
el título “De Primitivo Rodríguez Oceguera”, la cual se acompaña a la presente
demanda como anexo 35.

105.- La carta que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:

“Proceso
18 de mayo de 2003

Palabra de Lector

De Primitivo Rodríguez Oceguera

Señor director:

Le agradecería incluir en Palabra de Lector los siguientes comentarios al


excelente reportaje de Kate Doyle titulado La “diplomacia tranquila” de
Estados Unidos, y a un artículo de Raúl Monge (Huecos en la carrera de
Macedo: Sergio Aguayo), publicados en Proceso 1384.

Desde 1992, la Fundación Nacional para la Democracia (NED, por sus siglas
en inglés) ha financiado a ONG mexicanas. Alianza Cívica, fundada por
Sergio Aguayo, es la ONG que más dinero ha recibido de la NED. Así mismo,
esta agencia premió a Aguayo en 1996, le pagó viajes a la India (1999) y a
Brasil (2000), y lo hizo miembro del comité coordinador del Movimiento
Mundial por la Democracia.

La NED, creada por el presidente Ronald Reagan, se presenta como una


ONG, pero reconoce que recibe del Congreso estadounidense 97% de sus
fondos y que consulta con el Departamento de Estado a qué organizaciones
financiar.

Por otra parte, los diarios The New York Times (25 de abril de 2002) y The
Boston Globe (18 de agosto) revelaron el patrocinio dado por la NED a líderes
del fracasado golpe de estado en Venezuela. Tiempo antes, The New York
Times (31 de marzo de 1997) había publicado un reportaje sobre las
operaciones de intervención y espionaje de la CIA y la NED en diversos
países. El diario neoyorquino confirmaba lo que conocidas instituciones
estadunidenses de investigación habían escrito sobre ambas agencias.
88

Desde hace tiempo se ha pedido a Sergio Aguayo hacer pública su


correspondencia con la NED. No lo ha hecho. Presentó, eso sí, en Casa
Lamm, una ponencia sobre el financiamiento de Alianza Cívica (agosto de
2001), pero maquilló las cifras y ocultó las fuentes estadunidenses críticas de
la NED. Tampoco ha aceptado un debate con el suscrito acerca de sus
relaciones con esa agencia.

Por lo mismo, me permito preguntar a Kate Doyle si podría conseguir la


correspondencia entre la NED y las organizaciones civiles que ha financiado
en México y dar copia de ella a instituciones como El Colegio de México o la
UNAM. Sería de gran utilidad pública para transparentar las actividades de
Estados Unidos en México.

Atentamente
Primitivo Rodríguez Oceguera
Distrito Federal”

106- Del contenido de la carta mencionada en el hecho que antecede, se


desprenden las siguientes acusaciones en contra de la parte demandante:

Este documento ilustra la estrategia que la parte demandada ha seguido para


desprestigiarme. Primero, afirma que la Fundación Nacional para la Democracia
ha financiado a Alianza Cívica, que esa Fundación me premió en 1996, me pagó
viajes a la India y a Brasil y me hizo miembro del Movimiento Mundial por la
Democracia. Inmediatamente después, presenta como hecho incontrovertible que
en diversos medios de comunicación se ha documentado que la mencionada
Fundación se dedica a operaciones de intervención y espionaje auspiciadas por el
gobierno de los Estados Unidos de América. A partir de ahí, me acusa de no
hacer pública mi correspondencia con aquella Fundación, de negarme a debatir
con la parte demandada, de maquillar las cifras de financiamiento que Alianza
Cívica recibiera de esa Fundación, así como de ocultar las fuentes informativas
que la critican, y en consecuencia, me acusa de participar de los mismos intereses
que la parte demandada atribuye a la Fundación Nacional para la Democracia.

De forma paralela, esta carta nuevamente ilustra a la perfección el método que la


parte demandada ha intentado llevar a cabo para dotar de relevancia pública a las
acusaciones que sólo se originan debido a sus particulares intereses personales,
lo que se observa al tratar de incluir a investigadores como Kate Doyle para que
obtengan la documentación que supuestamente demostrará sus afirmaciones. En
este sentido, quizá vale la pena comentar que se han elaborado diversas tesis,
escritos y libros sobre Alianza Cívica y el papel jugado por la parte demandante, a
cuyos autores se les ha dado acceso a toda la información y archivos disponibles.

De cualquier manera, habrá que insistir en que resulta falso que participe de los
intereses de la Fundación Nacional para la Democracia, que según la parte
demandada obedecen a actividades de espionaje a favor del gobierno
norteamericano, como es falso que trate de ocultar información sobre el tema, por
el hecho de que ella haya financiado a Alianza Cívica, de que se me haya
premiado, de que se me hubieran cubierto los gastos de algunos viajes que he
realizado, o bien, de que haya participado en el Movimiento Mundial por la
Democracia, pues ninguna de estas circunstancias prueba lo que la parte
demandada maliciosamente afirma, que he entregado mi lealtad a esa Fundación
y que respecto de ella he perdido mi independencia. En este sentido, debe
hacerse notar a su Señoría que todas estas falsedades, la parte demandada las
presenta como hechos incontrovertibles y que dice fundarlas en el análisis veraz y
objetivo de ciertos textos, pero sin que ello se haya demostrado fehacientemente.

107.- La parte demandada concedió una entrevista al periódico “La Jornada de


Oriente”, misma que fue publicada en ese diario el 19 de mayo de 2003, bajo el
título “Atrás del Partido México Posible sí está el apoyo de la NED, dijo Primitivo
Rodríguez”, la cual se acompaña a la presente demanda como anexo 36.
89

108.- La entrevista que se menciona en el hecho que antecede es del tenor


siguiente:

“Atrás del Partido México Posible sí está el apoyo de la NED, dijo Primitivo
Rodríguez

Fermín Alejandro García

Existen suficientes pruebas de que la Fundación Nacional para la Democracia


(NED por sus siglas en inglés) sirve para financiar redes políticas o de
organizaciones no gubernamentales que se utilizan para proteger los intereses
de los Estados Unidos, de acuerdo con las pautas que marca el Departamento
de Estado de ese país. En México, el Partido México Posible (PMP) es el
resultado del dinero que la NET dio a agrupaciones que encabezaron los
dirigentes de este instituto político, y entre sus objetivos actuales está frenar el
avance electoral de la izquierda.

Lo anterior fue señalado por Primitivo Rodríguez Oceguera a La Jornada de


Oriente en respuesta a una entrevista -publicada por este diario la semana
pasada- en la que Sergio Aguayo, el titular de la Coordinación Nacional del
PMP y candidato plurinominal por Puebla, sostiene que la NED nada tuvo que
ver con la creación de este partido. El también investigador del Colegio de
México sostiene que dicha fundación es ajena al gobierno de los Estados
Unidos, que ha financiado a diversas organizaciones -no gubernamentales,
oficiales, políticas y gremiales-, y cuando otorgó fondos a Alianza Cívica (AC)
lo hizo sin ningún tipo de condicionamiento, y el único propósito fue la
vigilancia de la limpieza de los comicios federales de 1994 y 1997.

Primitivo Rodríguez desde 1994 denunció el financiamiento de la NED a AC, y


ha documentado la participación de dicha fundación, que en 1983 fue creada
por el entonces presidente de EU, Ronald Reagan, en diversas actividades de
América Latina. En una carta que publicó este domingo en la revista Proceso
asevera que este organismo estuvo atrás de los promotores del golpe de
estado de Venezuela de hace un año. Antes, sirvió para atacar al movimiento
sandinista de Nicaragua, y en Panamá para derrocar al presidente José
Antonio Noriega y perseguir a los grupos del extinto mandatario panameño
Omar Torrijos.

Durante una conversación telefónica que sostuvo con el reportero, Rodríguez


Oceguera, quien también fue directivo de AC y actualmente participa en
organizaciones protectoras de derechos humanos y políticos de migrantes
mexicanos en Estados Unidos, señala que el financiamiento de la NED ha
fluido a diversas agrupaciones, pero principalmente a las que están ligadas al
PAN, como la Asociación Cívica Femenina y la Confederación Patronal de la
República Mexicana (Coparmex).

Las organizaciones que reciben financiamiento de la NED al final proporcionan


información a esta fundación, sobre todo de procesos electorales y conflictos
sociales, que después se convierten en datos de inteligencia que son usados
por Estados Unidos, indicó.

-¿Para qué está utilizando el gobierno de EU al PMP, qué objetivos se


siguen?-preguntó el reportero, a lo que el entrevistado respondió: "Lo que le
dijo Sergio Aguayo en la entrevista que le hizo". En esa conversación el
directivo de México Posible establece que su partido aspira a ocupar en
algunos estados del país, como Puebla, el espacio que tuvo el PRD, además
de "dignificar a la izquierda".

La llegada de la NED

La década de los años noventa fue cuando la Fundación Nacional para la


Democracia dio más financiamiento a agrupaciones de México, sobre todo a
organizaciones de observación electoral o enseñanza política.

Primitivo Rodríguez tiene la hipótesis de que la presencia de la NED se debió


a la preocupación del Departamento de Estado de Estados Unidos -que nació
al final del gobierno de Miguel de la Madrid- de que el cambio político en el
país, luego de un largo periodo de hegemonía política del PRI, se diera por
90

parte de la izquierda mexicana, sobre todo a raíz del éxito que tuvo el
entonces Frente Democrático Nacional que encabezó Cuauhtémoc Cárdenas
Solórzano. Además, había molestia por el papel que tuvo el gobierno
mexicano a través del Grupo Contadora para evitar que se avasallara al
movimiento sandinista en Nicaragua y del Frente Farabundo Martí en El
Salvador, entre otros factores.

Aguayo sostiene que la NED no tiene vínculos con la Agencia Central de


Inteligencia (CIA por sus siglas en inglés) u otra agencia del gobierno de
Estados Unidos. Incluso, en la entrevista que otorgó a La Jornada de Oriente
destaca un editorial de The New York Times, en el que se reconoce la
neutralidad política de esta fundación.

A ello, Rodríguez Oceguera refuta a Sergio Aguayo al indicar que la NED fue
creada por Ronald Reagan; recibe el 97 por ciento de sus fondos del
Congreso de EU, al que debe informar de sus actividades y resultados;
consulta a las embajadas de Estados Unidos en cada país para elegir a qué
organizaciones financiar y muchos de sus directivos son ex funcionarios del
Departamento de Estado y del Consejo de Seguridad del gobierno
estadounidense. La mayor parte de esta información está en los mismos
estatutos y la página de internet de la fundación.

Aguayo, quien desde los años setenta ha sido un especialista en temas de


inteligencia de los Estados Unidos y México, destaca Rodríguez, no puede
presentarse como ignorante de esa información, él ha sido parte fundamental
de la NED en México; incluso, lo reta a sostener en Puebla un debate público
o que dé a conocer la correspondencia que desde hace muchos años ha
sostenido con la Fundación Nacional para la Democracia.

Dos coincidencias

Rodríguez Oceguera reconoce que es verdad lo que dice Aguayo de que el


PMP no recibió dinero de la Fundación Nacional para la Democracia, pues no
se lo permite la legislación electoral mexicana, pero hace la siguiente
observación:

La NED financió al grupo Antorcha Campesina, que encabezó Sergio Aguayo;


a la Comisión Mexicana y Promoción de los Derechos Humanos, que dirigió
Mariclaire Acosta, y a la organización Equidad y Género, que creó Patricia
Mercado. Estas tres personas ahora son los directivos del Partido México
Posible. "Por lo tanto, la NED ha de estar feliz por el surgimiento de este
partido".

Otras coincidencias son que la NED financió al Partido Perú Posible, el que
llevó a Alejandro Toledo a la presidencia de dicho país; el nombre de AC es
similar al de Acción Cívica, una organización que se usó en Panamá contra el
gobierno de Noriega, o el de Cruzada Cívica, una agrupación que financió
Estados Unidos contra los sandinistas en Nicaragua. Ello parece mostrar
similitudes entre las organizaciones que han sido financiadas en México y el
resto de América Latina.

Con todos estos datos, destaca, se puede llegar a la conclusión de que la


NED no financió la creación de México Posible, pero de manera indirecta sí
contribuyó a su conformación, y su objetivo es el de interferir con el avance
electoral que pueda tener el Partido de la Revolución Democrática, es decir, la
izquierda.”

109.- Del contenido de la entrevista mencionada en el hecho que antecede, se


desprenden las siguientes acusaciones en contra de la parte demandante:

La parte demandada me acusa de interferir desde el Partido México Posible con el


avance de la izquierda, que cree ver representada en el Partido de la Revolución
Democrática, ello por órdenes de la Fundación Nacional para la Democracia y en
defensa de los intereses del gobierno de los Estados Unidos de América, lo que se
confirma, desde su particular punto de vista, porque aquella Fundación ha
financiado a Alianza Cívica, organización en la que participé. En este contexto,
además de las reiteradas acusaciones hacia mi persona en el sentido de que soy
91

un agente al servicio de los intereses intervencionistas norteamericanos, la parte


demandada me acusa de desviar recursos de Alianza Cívica para apoyar las
actividades del Partido México Posible, al decir que a través mío, la Fundación
Nacional para la Democracia contribuyó indirectamente a su conformación.

Este tipo de declaraciones de por sí sumamente graves y ofensivas, además de


lesionar mi credibilidad personal, llegaron a afectar tanto los derechos políticos del
Partido México Posible a obtener los votos suficientes para lograr que sus
candidatos ocuparan los cargos públicos a los que los postularan, como mi propio
derecho a ser votado, porque la parte demandada presenta como hecho
incontrovertible que el Partido México Posible –por el cual era candidato a
diputado plurinominal– estaba influido por el gobierno estadounidense, lo que
obviamente pudo repercutir en la imagen pública que conservábamos ante el
electorado, a partir de nuestra intachable trayectoria profesional y política.

En todo caso, debido es recalcar que es falso que yo pretendiera interferir con el
avance de la izquierda, porque de hecho, las posturas defendidas desde el Partido
México Posible podían perfectamente ubicarse en esa tendencia política, cuestión
que no impide que resalte la malicia con que se conduce la parte demandada, la
cual me acusa de esa interferencia simplemente porque no comparto sus
personales visiones políticas. Con mayor razón, resulta falso que esa inexistente
interferencia obedeciera a órdenes de la mencionada Fundación y que buscara
proteger intereses estadounidenses de cualquier índole. Y sobre todo, es falso y
altamente ofensivo que se me acuse de ello, que yo haya desviado fondos
recibidos por Alianza Cívica para canalizarlos al Partido México Posible. En este
sentido, debe hacerse notar a su Señoría que todas estas falsedades, la parte
demandada las presenta como hechos incontrovertibles y que dice fundarlas en el
análisis veraz y objetivo de ciertos textos, pero sin que ello se haya demostrado.

110.- La parte demandante tuvo conocimiento de un artículo aparecido en la


dirección electrónica www.manu-dornbierer.com.mx, de fecha 24 de mayo de
2003, escrito por Manú Dornbierer, bajo el título “¿Se puede calumniar en
México?”, del cual se acompaña una impresión a la presente demanda como
anexo 18.

111.- El artículo que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:

“SATIRICOSAS

Manú Dornbierer - 24 de mayo 2003

¿SE PUEDE CALUMNIAR EN MEXICO?

¡Sí, se puede! ¡Sí, se puede! e impunemente, dijo esta semana el presidente


Fox en el desayuno del Casino Marte, ¡Y a su propia “primera dama“ por
añadidura! .Si no lo creen, pregúntenle a la argentina Olga Wornat,
especialista en la vida privada de Menem y sus diferentes mujeres y hoy de la
pareja Fox y sus respectivos excónyuges. Esta nueva autora de Grijalbo, que
en dos días hizo fama y fortuna mintiendo - Marta dixit -estuvo muy ligada a la
dictadura militar argentina por lo que sus fuentes de información- aunque se le
conoce más como “chismosa” que como investigadora o analista- son los
servicios policiacos de su país y, por lo visto, de otros. No se entiende como
con estas “éticas” características Marta le abrió las puertas de Los Pinos.
¿Dónde estaban sus asesores, los mismos que el año pasado pudieron ser los
que sofocaron con buen éxito mi libro “Foxtrot”? En cambio para editorial
Grijalbo, con la que terminaré pronto una relación de 12 años y 12 libros
publicados con su sello (me obligan a conservar el contrato de este último libro
hasta agosto próximo), el triunfo es total. “La Jefa”, de Olga Wornat, es la perla
de la corona de éxitos taquilleros de corte “Alarma” entre los que destacan la
historia de una pupila de la proxeneta Gloria Trevi y aquel tragiquísimo libro
sobre el narco de Yolanda Figueroa, que desató el asesinato de la propia
firmante y de toda su familia.

HOY ACAPTA FOX EL “LIBERTINAJE DE EXPRESIÓN”, PERO AYER


PADECI LA CENSURA POR UN LIBRO QUE NO ES LIBERTINO, pero que
92

fue el primero en tratar de analizar, después de dos años de desafortunado


ejercicio de Fox, quienes son las personas que gracias al cambio
indispensable de partido dominante que logró la votación del 2 de julio 2000,
tienen en sus manos el destino de México, entre ellos, por supuesto, la pareja
presidencial misma y los amigos que llevaron a Fox al triunfo. Mi libro toca
informaciones de todo tipo, de interés nacional e internacional, ventilados en
mis artículos y en los de otros colegas participantes. Pero lo que al parecer
provocó que la editorial prácticamente escondiera el libro, lo que molestó
pues, fueron los 2 primeros capítulos que escribí (con el último también)
exclusivamente para “Foxtrot”: “ El y Ella” y “Los Amigos de Fox”, temas cada
día más candentes que se conocían -como me dijo el editor regiomontano
Ernesto Hinojosa “te felicito por haberte adelantado a los libros de Marta que
no dicen más de lo que dijiste”- pero pretendía el foxismo que pasaran
desapercibidos y que no prosperaran. Sólo que se fueron apoderando del
escenario más y más como era de esperarse.... Marta Sahagún todavía en el
2002 manejaba “la libertad de expresión a su antojo” y pretendía rodearse de
un escudo protector contra los que, como yo, ventilan temas incómodos. Se
rodeó de un grupo de asesores especialistas en medios de comunicación.
Entre ellos podrían haber estado Carlos Salomón Cámara, hoy vicepresidente
editorial de 52 periódicos la OEM, quien fuera el encargado de corromper a
periodistas en tiempos de Salinas y después director de la Lotería Nacional a
la que defraudó; Ramón Alberto Garza, creador de Reforma del que salió,
director de El Universal del que se fue raspado (para fortuna de los lectores
del diario) y director de la revista “Cambio” en donde se aprovecha del nombre
de Gabriel García Márquez para darse respetabilidad; otro personaje más
sofisticado, misterioso es Sergio Aguayo, quien durante años dice haber
luchado por la democracia a la cabeza de una asociación financiada por
Washington según el desaparecido (gracias a un trailer) luchador social que
fue Luis Sánchez Aguilar. Muy amigo de los Fox, Aguayo aparecía siempre en
internet junto a la pareja presidencial en los viajes iniciales de Fox y es autor
de un almanaque en Grijalbo editado en colaboración con la revista “Proceso”.

¿QUÉ LE HICIERON A FOXTROT.... Entregué el libro en septiembre de 2002.


Debía imprimirse y ver la luz a finales de octubre. Mientras, me dijeron, vete
tranquila de viaje, y cuando regreses estará el libro listo y el lanzamiento
preparado. Tenía que cumplir deleitosos compromisos fuera de México y me
fui confiada y tranquila. En Grijlabo todo mundo estaba encantado con mi libro
para el que habían invertido más de lo acostumbrado y se esperaba “mucho
ruido”. Pero cuando regresé el 7 de noviembre como previsto, “Foxtrot”
parecía ser un estorbo que había que esconder. Y nada de lanzamiento, nada
de presentación, nada de publicidad, de entrevistas, de anuncios (hasta que
Excelsior y otros diarios me pusieron algunos a mi regreso) y nada querían
que yo hiciera (salvo una comidita en la Zona Rosa) por mi libro cuya primera
edición de 10 mil ejemplares había sido, dijeron totalmente distribuida, porque
“Sanborns no quiere tu libro”, explicaron y sólo compró 5 ejemplares para
algunas tiendas. No había libros, no le había llegado “Foxtrot” ni siquiera a las
personas que mencionaba en los “agradecimientos”. “Proceso” que tiene un
arreglo promocional con los editores consistente en publicar un capítulo
adelantado en exclusiva, no publicó una palabra sobre mi libro y eso que Julio
Scherer se decía mi amigo. Durante la venta navideña cuando lectores y
amigos buscaban el libro, no había, hubiera dicho Traven “charamuzcas que
vender”. Se me hizo un gran daño moral y económico. La consigna de
sofocamiento del libro era evidente en todas partes, por lo que tuve que
contratar al bufete de abogados Carlos Shön, que logró cuando menos que se
cumpliera un poquito con el contrato del libro y se hiciera otra endeble edición
de 2 mil ejemplares en febrero 2003. Más no se pudo por el contrato leonino
que las editoras le hacen firmar a los autores a los que puede destruir
impunemente. ¿Responsables? Grijalbo y Marta Fox. 8 MESES DESPUÉS DE
QUE SALIÓ “FOXTROT” podré por fin el 11 y el 12 de junio 2003, correrle la
cortesía a los lectores de Durango y Coahuila presentando públicamente el
libro bajo los auspicios “El Siglo de Torreón” que por cierto publicó demoledora
encuesta para Fox.

www.manu-dornbierer.com.mx”

112.- Del contenido del artículo mencionado en el hecho que antecede, se


desprende que las acusaciones en contra de la parte demandante vertidas por la
93

parte demandada, han tenido impacto en su autora en consideración a lo


siguiente:

Esta autora se refiere a mí como personaje sofisticado y misterioso, como posible


asesor en medios de comunicación de la señora Marta Sahagún y como amigo
cercano de la pareja presidencial. Afirma que durante años he luchado por la
democracia como dirigente de una asociación financiada por Washington y
menciona al diputado Luis Sánchez Aguilar como fuente de esta última acusación.

En este sentido, puede advertirse que la autora de este artículo recoge, actualiza y
afirma como ciertas, algunas de las principales acusaciones que la parte
demandada ha lanzado en mi contra desde hace ya algunos años y que causan
daño a mi honor y reputación.

Las acusaciones de referencia pueden encontrarse, principalmente, en las


publicaciones mencionadas en los hechos 29, 40 y 58, La Jornada, 19 de abril,
Masiosare, 13 de mayo, y Proceso, 21 de octubre, todos de 2001,
respectivamente, en las que la parte demandada hace mención expresa de las
acusaciones vertidas por el diputado Luis Sánchez Aguilar en mi contra, como
“dirigente” de Alianza Cívica, mismas que la propia parte demandada utiliza como
fuente de sus propias acusaciones en mi contra, así como en las publicaciones
mencionadas en los hechos 10, 29, 32, 37, 40, 55, 58, 61, 80, 85, 91, 94, 99 y 107,
es decir, La Jornada, 2 de junio 1997, 19 de abril, 23 de abril, 10 de mayo;
Masiosare, 13 de mayo, 6 de septiembre; Proceso, 21 de octubre y La Jornada, 12
de diciembre, todas de 2001; La Jornada, 3 y 15 de mayo; Masiosare, 28 de julio;
Milenio Semanal, 11 y 25 de noviembre, todas de 2002, y La Jornada de Oriente,
19 de mayo de 2003, respectivamente, en las que la parte demandada se refiere a
mí como “dirigente” de una organización financiada por la Fundación Nacional
para la Democracia, esto es, como dirigente de Alianza Cívica, lo que para la
demandada equivale a dirigir una organización que por haber recibido
financiamiento de esa Fundación, se encuentra al servicio de los intereses
intervencionistas del gobierno de los Estados Unidos de América.

Considerando lo anterior, es patente que las acusaciones en contra mía difundidas


constantemente por la parte demandada, han tenido impacto en esta autora que
asegura que participé en una organización financiada por Washington. Al
respecto, no debe pasar desapercibido que como esta columna, obra de Manú
Dornbierer, se reproduce en diversos periódicos del país, el impacto sobre mi
reputación ha sido considerable, a tal grado que en conferencias impartidas en
estados como Sonora he sido cuestionado con base en ese tipo de afirmaciones.

113.- El suscrito dirigí una carta al semanario “Proceso”, misma que fue publicada
el 25 mayo de 2003, bajo el título “De Sergio Aguayo”, la cual se acompaña a la
presente demanda como anexo 37.

114.- El texto de la carta que se menciona en el hecho que antecede es del tenor
siguiente:

“PROCESO, # 1386 25 de mayo de 2003.

Palabra de Lector

De Sergio Aguayo

Señor director:

En el número 1385 de Proceso, Primitivo Rodríguez Oceguera sigue


obsesionado por desprestigiarme. Su campaña de cartas tiene ciclos, y se le
removió la neura desde que soy candidato a diputado federal por México
Posible por la cuarta circunscripción (Distrito Federal, Hidalgo, Morelos,
Puebla y Tlaxcala). En lugar de tomar este espacio en reiterar mi respuesta ya
publicada en este mismo espacio, invito a los lectores interesados a visitar la
página www.sergioaguayo.org ; ahí encontrarán una respuesta puntual a las
acusaciones del obseso Primitivo.
94

Por otro lado me pongo a las órdenes de Kate Doyle o de cualquier otro
reportero de Proceso para entregarles cualquier información que les interese
sobre mi pasado, presente y mis proyectos para el futuro.

Atentamente,
SERGIO AGUAYO”

115.-La parte demandada dirigió una carta a la parte demandante, con fecha 4 de
junio de 2003, la cual se acompaña a la presente demanda como anexo 38.

Lo anterior le consta a la parte demandada.

116.- La carta que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:

“4 de junio de 2003

Sergio Aguayo Quesada


México, DF

Sergio, consulté la página que tienes en la Internet como candidato del PMP
(sergioaguayo.org), y leí la sección de respuesta a las críticas que has
recibido. Agradezco, de entrada, que esta sección esté dedicada a mi
persona.

Si de acuerdo a los datos que aportas resulta a todas luces evidente que eres
“profundamente nacionalista, independiente y progresista”, y que con similar
claridad mis “difamaciones” contra ti pueden encontrar respuesta, según
afirmas, “en su personalidad o en los grupos y políticos con quienes se ha
asociado y a quienes ha entregado su lealtad” (¡sopas!), ¿porqué rehuyes,
entonces, un debate público al que te he invitado desde hace años sobre el
centro de nuestra disputa: el financiamiento de la agencia estadounidense The
National Endowment for Democracy (NED) a Alianza Cívica y otras
organizaciones civiles mexicanas, así como la estrecha relación que ha
mantenido contigo. He dicho también que en ese debate tú puedes añadir los
temas que gustes sobre mi vida y milagros.

Creo que el asunto no es de carácter personal, sino de interés público, debido


a que la NED según fuentes que la apoya o critican promueve, en el mejor de
los casos, los intereses del gobierno norteamericano en el exterior, y en el
peor, lo hace en coordinación con la CIA y el Departamento de Estado.

La conferencia que diste en Casa Lamm (agosto de 2001) sobre el


financiamiento a Alianza Cívica fue eso, una conferencia, y no un debate entre
tú y yo. Ambas cosas son distintas: en la primera no hay igualdad de
condiciones en cuanto a temas y tiempo de intervenciones, en le segundo sí.

En caso de que aún pienses que busco debatir contigo para ganar publicidad,
prometo ir con la máscara de Blue Demon y distorsionar la voz. Incluso, el
público podría creer que mi nombre “Primitivo” es un seudónimo. ¿No te
parece? El debate lo podría moderar Carmen Aristegui, Kate Doyle, Lorenzo
Meyer, Luis Hernández Navarro, un taxista o quien tú prefieras.

En relación a las respuestas que das en tu página de la Internet a mis críticas


tengo los siguientes comentarios.

1. Reportaje del diario The New York Times sobre la NED y la CIA. En 1997
no inicié una “campaña” para desprestigiarte, sino la búsqueda que ha
resultado larga y tortuosa para transparentar la relación de la NED con ONG
de observación electoral y derechos humanos con las que me había
relacionado a través del trabajo que realicé a favor de migrantes para la ONG
American Friends Service Committee, y como director general de la Academia
Mexicana de Derechos Humanos en 1994, puesto que tuviste a bien
ofrecerme a mi regreso de EUA. Lo que denominas “campaña” se inició a
propósito de la aparición en el diario The New York Times (31 de marzo de
1997) de un reportaje de primera plana sobre las operaciones de intervención
y espionaje de la NED y la CIA en varios países. El reportaje, según su autor,
95

tenía como base información desclasificada y audiencias en el Congreso


estadounidense. Envié copias del artículo, con carta adjunta de comentarios a
Mariclaire Acosta, Luz Rosales, Martha Pérez, Emilio Álvarez Icaza, Rogelio
Gómez Hermosillo, Ana Lilia Cepeda, Miguel Concha, Óscar González y a ti,
en su carácter de directores y miembros de los consejos de las ONG
financiadas por la NED. Ante la nula respuesta a esa y otras cartas, excepto
dos conversaciones telefónicas contigo, en la que aclaraste hablabas a
nombre personal y en las cuales no llegamos a un acuerdo para transparentar
la relación ONG-NED, hice público el asunto, pues me parecía de interés
general.

2. Convertirte en centro del debate. En los últimos dos años he centrado mis
comentarios sobre Alianza Cívica y tu persona debido a que esta ONG es la
que más ha recibido dinero de la NED desde su fundación en 1994 a la fecha,
y a que tú has sido el dirigente de ONG más ligado a la NED, siendo el punto
culminante de ello el nombramiento que recibiste en 2000 para formar parte
del comité coordinador del Movimiento Mundial por la Democracia, creado,
financiado y dirigido por la NED. Para tal efecto, la NED te pagó los viajes a la
India (1999) y Brazil (2000), donde participaste en las conferencias que dieron
nacimiento al Movimiento antes mencionado. Por ello, y por ser tú especialista
en sistemas de inteligencia y seguridad nacional de México y EUA, decidí
también invitarte a debatir el tema de la NED y mis obras completas, incluidos
tus comentarios públicos de que actúo quizás bajo la batuta de ex miembros
de la Federal de Seguridad, de salinistas o del gobierno cubano. Por cierto,
¿no son ese tipo de insinuaciones parecidas a las usadas por gobernantes y
policías de los regímenes priistas para desprestigiar a sus críticos, y de las
que tú mismo has sido víctima? En varias ocasiones he dicho que así fuese
yo la clonación conjunta de José Córdova y Gutiérrez Barrios, ello no eximiría
a las ONG de transparentar sus ligas con la NED, así como de adoptar
públicamente un código de ética y rendición de cuentas a la ciudadanía.

3. Las “pruebas”. Cuentas en tu página que yo te difamo sin prueba alguna.


Las “pruebas” que tengo, no para difamarte, sino para documentar el carácter
de la NED y sus operaciones en México, son las que he citado varias veces y
que resumí en el ensayo publicado en el suplemento Masiosare de La Jornada
(13 de mayo de 2001) y a los que he añadido fuentes recientes. En conjunto,
he utilizado reportajes de los diarios The New York Times, The Dallas Morning
News, The Boston Globe, La Jornada y El Financiero, así como publicaciones
de los institutos de investigación The Heritage Foundation, The Cato Institute,
The Inter.-Hemisperic Research Center, The Committee on Hemispherica
Affairs, sitios de la internet especializados en operaciones de la CIA, NED y
USAID, los propios estatutos de la NED y sus informes anuales, y libros como
Exporting Democracy (Joshua Muravchik) y Exporting “Made in America”
Democracy. The National Endowment for Democracy and U.S. Foreign Policy
(Colin S Cavell, 2002). Tú conoces estas fuentes, pero con excepción de uno
de los reportajes del The New York Times y una publicación de Cato Institute,
no las citas en tus escritos o la internet. ¿Por qué? Si no son fuentes
confiables, deberías decirlo. ¿O las ignoras por no haber manera de
refutarlas, y de paso, hacer valer tu argumento de que yo “invento” o
“acomodo” datos para hacerte de cuadritos la vida?

4. Editorial vs Reportaje. Comentas en la Internet que mi obsesión contra ti


tiene como base una sola fuente, el famoso reportaje del The New York Times
del 31 de marzo de 1997, y que escondo un editorial del periódico (21 de julio
de 1999) en el que se destaca el carácter independiente de la NED.
Desconocía esa editorial. La consulté en su versión resumida y hago al
respecto las siguientes observaciones. La editorial se opone a la propuesta de
un senador republicano que pide al Congreso siga financiando a la NED, ya
que los luchadores civiles en regímenes autoritarios voltean a Washington en
busca de apoyo. El último párrafo del resumen de la editorial señala que, The
endowment (la NED) finances four international affairs institutes, run by the
Republican and Democratic parties, the Chamber of Commerce and the AFL-
CIO. The endowment also gives money directly to organizations abroad that
promote the rule of law and democracy. One of its strengths is that its budget
is independent of the State Department. Sobre esa base argumentas que la
editorial del periódico tiene mayor peso que el reportaje de uno de sus
periodistas, y que por lo tanto mi principal fuente para atacarte carece de
valor. Pienso que es exactamente lo contrario: el reportaje en cuestión sobre
96

las operaciones de intervención de la NED y la CIA no es una opinión editorial,


sino el recuento de hecho en base a documentos oficiales. Por otra parte, el
propio The New York Times en otro reportaje del 25 de abril de 2002 revela el
financiamiento que hizo la NED a líderes del fallido golpe de Estado en
Venezuela. Los directivos del diario no desmintieron a su reportero, ¿o si?
Además, dicho patrocinio también fue documentado por The Boston Globe (18
de agosto) y varias publicaciones más de de Estados Unidos. Estas citas
también las ignoras graciosamente en tu página de la Internet. ¿No cuadran
con tu alegato sobre mi obsesiva obsesión en “calumniarte”?

5. Maquillas el financiamiento de Alianza Cívica. Cuando en tu ponencia de


Casa Lamm haces la relación del financiamiento recibido por Alianza Cívica
(1994-2000) subrayas que la mayor parte ha provenido de varias fuentes,
particularmente de las Naciones Unidas, y no de la NED. Con todo, separas
los fondos otorgados por la NED de los entregados por uno de sus brazos
operativos: el Instituto Nacional Demócrata. De sumarlos, como debiste
hacerlo, queda claro que: A) fuera de los años 1994 y 2000 en que tuvieron
lugar las elecciones federales y las Naciones Unidas dieron un alto porcentaje
de dinero a Alianza Cívica para observación electoral, en el resto de los años
la NED y el Instituto Nacional Demócrata aportaron el grueso del
financiamiento; B) que sin este importante patrocinio otorgado en 1995, 96, 97,
98, 99, 2001 y 2002, Alianza Cívica no habría subsistido, o por lo menos, no
se habría hecho dependiente de los fondos de la NED. De ahí que la gran
madrina de Alianza Cívica ha sido la NED, y desde el año pasado, también el
Departamento de Estado, que a través de la USAID comenzó a entregarle
fondos.

6. Hacer pública tu correspondencia con la NED. En varias ocasiones he


solicitado que hagas pública tu correspondencia con la NED (entregándola,
por ejemplo, a El Colegio de México), sobre la base de tus propios
argumentos: que la NED es una ONG independiente preocupada sólo en
promover la democracia, y que tú has demostrado ser un gran defensor e
impulsor de la transparencia y rendición de cuentas en asuntos de interés
público. Esa correspondencia sería muy útil para establecer los objetivos de la
NED en México, así como la información que ha recibido. Ello ser mejoraría si
las otras ONG financiadas por la NED hacen lo mismo, y alguien como Kate
Doyle consigue, de existir, la correspondencia entre la NED, el Departamento
de Estado y la embajada estadounidense en México. Pero tan sólo lo tuyo
sería de gran valor para el cambio democrático de México. ¿No es tiempo ya
de que estudiantes e investigadores ajenos a nuestros enredos puedan tener
acceso a fuentes tan valiosas como tu correspondencia con la NED?

7. Ejemplo de congruencia. Uno de tus mayores logros como director de la


Academia Mexicana de Derechos Humanos fue exigir que en los medios
gubernamentales no se use el dinero de los contribuyentes para favorecer
directa o indirectamente a partidos y candidatos. Ahora que tú eres dirigente
del Partido México Posible y su candidato plurinominal a la Cámara de
Diputados, ¿no sería un magnífico ejemplo de congruencia el que salieras por
lo que resta de la campaña del programa Primer Plano de Canal Once, o bien,
de que otros candidatos se incluyeran en el mismo, a fin de que nuestros
impuestos no contribuyan así sea de manera indirecta a favorecerte a ti sobre
otros contendientes? Estoy seguro que si los también candidatos Elba Esther
Gordillo, Francisco Barrio o José Luis Cuevas participaran en ese programa y
tu dirigieras como parte de la sociedad civil el monitoreo de medios, ya habrías
denunciado el hecho, con toda razón, como inequitativo en la contienda
electoral. ¿Cierto?

Sergio, gracias por tu atención a estas notas. Espero sinceramente que un


día aceptes debatir temas como los aquí señalados.

Primitivo Rodríguez Oceguera

C.c.p. Carmen Aristegui, Kate Doyle, Lorenzo Meyer y Luis Hernández.”

117.- Del contenido de la carta mencionada en el hecho que antecede, se


desprenden las siguientes acusaciones en contra de la parte demandante:
97

Este documento adquiere relevancia porque a través suyo la parte demandada


pretende justificar los ataques que ha vertido en contra mía a lo largo de estos
últimos años. Con independencia de que durante este juicio se presente la
oportunidad para demostrarle a su Señoría que las acusaciones esgrimidas por la
parte demandada en todos y cada uno de los hechos reseñados en esta demanda
son falsas, lo que no debe perderse de vista es que la acusación central que
demerita mi derecho al honor causándome un daño moral, no tiene fundamento
alguno, toda vez que nada de lo que menciona la parte demandada justifica que
me acuse de estar al servicio del gobierno de los Estados Unidos de América vía
la Fundación Nacional para la Democracia, ni que a partir de esa acusación
cuestione mi labor docente, periodística, política, en materia de defensa de
derechos humanos y de transparencia de la información pública.

Al respecto, la parte demandante no cesará en recalcar que es falsa esa


acusación central esgrimida por la parte demandada, pues de ninguna manera se
puede aseverar que yo trabaje para el gobierno estadounidense, ni para la
Fundación Nacional para la Democracia. En este sentido, debe hacerse notar a
su Señoría que todas las falsedades provenientes de la parte demandada, las
presenta como hechos incontrovertibles y que dice fundarlas en el análisis veraz y
objetivo de ciertos textos, pero sin que ello se haya demostrado fehacientemente.

Asimismo, son de resaltarse las diferencias que mantiene este documento con el
que se refiere y transcribe en los hechos siguientes 118 y 119, respectivamente,
pues a partir de su contraste se podrá corroborar que lo que la parte demandada
publica sobre mí, dista mucho de lo que escribe en sus cartas menos públicas.

Como sea, la carta que se comenta en este punto es de la mayor trascendencia


puesto que en ella la parte demandada no sólo reitera las mismas acusaciones
que se han venido mostrando, sino que hace una aclaración importante, al señalar
que: “La conferencia que diste en Casa Lamm (agosto de 2001) sobre el
financiamiento a Alianza Cívica fue eso, una conferencia, y no un debate entre tú y
yo. Ambas cosas son distintas: en la primera no hay igualdad de condiciones en
cuanto a temas y tiempo de intervenciones, en el segundo sí”, aseveración de la
cual es posible derivar las reales intenciones que persigue la parte demandada.

En ese orden de ideas, su objetivo e intención, además de desprestigiarme, es


tener la posibilidad de discutir conmigo en igualdad de circunstancias. De hecho,
esperaba que a la conferencia que presentara en la Casa Lamm acudiera la parte
demandada, pues tenía la convicción de responder a todas sus preguntas, lo que
inclusive hubiera generado el debate que quería. Lamentablemente, no se
presentó, porque en realidad lo que la parte demandada persigue es la supuesta
visibilidad que espera obtener teniendo un debate conmigo. Pregunto a su
Señoría: ¿es posible entrar en un debate de las características que exige con
alguien que de manera sistemática falsea la información para desprestigiarme?

En este tenor, un aspecto igualmente revelador de esas intenciones de la parte


demandada es que solicitó a varios académicos y periodistas que organizaran el
debate. Ninguno de ellos tomó en serio sus peticiones. Durante todos estos años
ninguna de las personalidades a las que menciona le ha hecho algún caso.
Desafortunadamente, existen otros círculos que efectivamente le han dado mucha
atención a la parte demandada, como aquí se demuestra con la exposición de los
artículos en los que han tenido impacto sus falsas y ofensivas acusaciones.

118.- La parte demandada escribió un artículo que fue publicado en el suplemento


“Masiosare” del periódico “La Jornada”, con fecha 29 de junio de 2003, bajo el
título “Respuesta a sergioaguayo.org”, el cual se acompaña a la presente
demanda como anexo 39.

119.- El artículo que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:

“Los Nuevos Demócratas

PRIMITIVO RODRÍGUEZ OCEGUERA


98

Respuesta a sergioaguayo.org

El bueno, el malo y lo feo. Cuenta Aguayo en su página que mis


“difamaciones” contra él podrían explicarse por mi “personalidad”, o bien, por
“los grupos y políticos con quienes se ha asociado y a quienes ha entregado
su lealtad” (¡sopas!), y termina confesando que él es “profundamente
nacionalista, independiente y progresista” (¡ajúa!). Estando así de claro y
nítido el asunto, ¿por qué aceptó Aguayo llevarse de a piquete de ombligo con
la Fundación Nacional para la Democracia (NED, por sus siglas en inglés),
agencia que en la versión de sus defensores fue creada por el presidente
Ronald Reagan para promover los intereses de Estados Unidos en el exterior,
y que, según sus críticos, eso lo hace en coordinación con la CIA y el
departamento de Estado?

Aguayo fue premiado por la NED en 1995, y viajó a la India (1999) y Brasil
(2000), todo pagado por esta agencia para participar en la creación del
Movimiento Mundial por la Democracia, nombrándosele miembro de su
consejo directivo. Esta información la da la propia NED. ¿Serán
difamaciones?

Prueba vs prueba. Aguayo cita una editorial del diario The New York Times
(21 de julio de 1999) donde se afirma que la NED es una agencia
independiente del Departamento de Estado aunque recibe su presupuesto del
Congreso (98 por ciento). Según Aguayo esa editorial tiene más peso que un
reportaje del mismo periódico (31 de marzo de 1997) donde se revela, con
base en documentos desclasificados y audiencias del Congreso, que la NED
fue creada para realizar de manera abierta operaciones que la CIA llevaba a
cabo de manera encubierta. El reportaje describe intervenciones de la NED
en varios países. ¿Cuál versión gana la partida?

Y aún hay más. Por otra parte, Aguayo oculta fuentes que documentan las
ligas de la NED con la CIA o el Departamento de Estado. Por ejemplo, La
Jornada (19/04/97), The Dallas Morning News (27/04/97), publicaciones de
The Inter-Hemispheric Resource Center y The Committee on Hemispheric
Affairs (1990), The Cato Institute (1993), los libros de Joshua Muravchik
Exportando la democracia. Cumpliendo el destino de América (1992) y Collin
S. Cavell Exportando la democracia ‘hecha en América’. La NED y la política
exterior de EUA (2002), el artículo del ex agente de la CIA, Philip Agee “Cómo
dar seguimiento en el futuro a las operaciones encubiertas” (1993), y dos
reportajes recientes, uno de The New York Times (25/04/02) y otro The Boston
Globe (18/08/02), los cuales revelan el patrocinio de la NED a líderes del
fallido golpe de Estado en Venezuela.

Sin la NED Alianza Cívica no existiría. En una conferencia que dictó en la


Casa Lamm (agosto de 2001), Sergio Aguayo afirmó que Alianza Cívica ha
recibido dinero de distintas fuentes y que la NED no ha sido la que más
recurso s le ha dado. Con todo, Aguayo maquilla las cifras: pone en lugares
diferentes lo aportado por la NED y lo entregado por el Instituto Nacional
Demócrata, uno de sus brazos operativos. Sin estos dólares Alianza Cívica no
habría subsistido entre 1995 y 1999, o en 2001 y 2002. Desde el año pasado
Alianza Cívica también recibe dinero del Departamento de Estado.

Que otros se transparenten, yo no. En varias ocasiones se ha pedido a


dirigentes de ONG financiadas por la NED, como Sergio Aguayo y Mariclaire
Acosta que hagan pública su correspondencia con la NED. No lo han hecho.
¿A qué le temen?

Cámara mata congruencia en Canal OnceTV. Como presidente de la


Academia Mexicana de Derechos Humanos, Aguayo exigió que el gobierno no
utilizara los medios de comunicación que operan con dinero de los
contribuyentes para favorecer de manera directa o indirecta a candidatos en
campaña. Sobre esa base, le pedí que durante el periodo electoral saliera del
programa Primer Plano, en el que participa en Canal Once, para que no
tuviera ventajas sobre otros candidatos, a costa de los contribuyentes. No lo
hizo.
99

Y dejar que el respetable decida. Invito a Sergio Aguayo a debatir


públicamente temas como los aquí señalados y cuanto guste incluir sobre mi
vida y milagros. Hago extensiva la invitación a Patricia Mercado, presidenta
del PMP, quien como directora de la ONG Equidad de Género también recibió
dinero de la NED en 1999 y 2000.”

120.- Del contenido del artículo mencionado en el hecho que antecede, se


desprenden las siguientes acusaciones en contra de la parte demandante:

Me acusa directamente de llevarme de “piquete de ombligo” con la Fundación


Nacional para la Democracia, agencia que presenta como dedicada a promover
los intereses de los Estados Unidos de América, incluso en coordinación con
dependencias gubernamentales de ese país, y aquella aseveración pretende
fortalecerla mencionando que esa Fundación me ha premiado y pagado viajes al
extranjero para participar en el Movimiento Mundial por la Democracia, como si
ello fuera prueba irrefutable de que mi independencia se ha visto comprometida y
mi lealtad entregada a la nombrada Fundación a cambio de premios y viajes.

Asimismo, inicia contrastando dos fuentes periodísticas que versan sobre la citada
Fundación, aparecidas ambas en el diario “The New York Times”, de las cuales la
usada en repetidas ocasiones por la parte demandada corresponde con el
reportaje de una persona y no con la opinión del periódico, distinción que esa
parte demandada siempre se ha abstenido de comunicar, para después acusarme
de ocultar información que desde su punto de vista documenta las ligas de tal
Fundación con la Agencia Central de Inteligencia o el Departamento de Estado de
los Estados Unidos de América, como si no compartir las aficiones de lectura de la
parte demandada fuera prueba irrefutable de que escondo información, lo cual,
también se probaría, desde su perspectiva, porque no hago pública mi supuesta
correspondencia con la Fundación Nacional para la Democracia.

De igual forma, prosigue sus acusaciones en contra mía al imputarme la


manipulación de las cifras que demostrarían que el financiamiento de la Fundación
Nacional para la Democracia ha sido lo único que ha mantenido la existencia de
Alianza Cívica, como si la decisión de recibir tal o cual financiamiento fuera una
que pudiera adoptar por cuenta propia y presuponiendo que quien financie a
Alianza Cívica por ese sólo hecho obtiene el control de mi persona y mi trabajo.

Como sea, no constituye una cuestión menor destacar que esta columna es una
reiteración de las acusaciones que la parte demandada había venido haciendo en
contra mía, pero sobre todo, que por aparecer en un periódico tan importante
como “La Jornada”, seguramente influyó negativamente en mi reputación.

En este mismo orden de ideas, como el artículo que se analiza retoma, actualiza y
evidencia la continuidad de las acusaciones que hasta ese momento la parte
demandada había esgrimido en contra mía, de igual manera resulta prudente
recalcar que es falso que Alianza Cívica, una de las organizaciones que ha
recibido financiamiento por parte de la Fundación Nacional para la Democracia,
así como sobre todo, la parte demandante, seamos dependientes de tal
Fundación; que con mayor razón, resulta falso que participemos de una política
intervencionista encabezada por el gobierno estadounidense; y que es falso
aseverar que he ocultado información sobre el financiamiento que ha recibido
Alianza Cívica. Además, aclara la malicia con la que se desenvuelve la parte
demandada, que sus falsedades las funde en el financiamiento que ha recibido
Alianza Cívica por parte de la Fundación Nacional para la Democracia,
financiamiento que se decidía colegiadamente y nunca por una resolución
unilateral de mi parte, o bien, en que se me ha premiado o en que he participado
en el Movimiento Mundial por la Democracia, como si tales circunstancias
conllevaran irremediablemente la pérdida de autonomía en mis actividades
cotidianas y mi sometimiento a intereses norteamericanos. En este sentido, debe
hacerse notar a su Señoría que todas estas falsedades, la parte demandada las
presenta como hechos incontrovertibles y que dice fundarlas en el análisis veraz y
objetivo de ciertos textos, pero sin que ello se haya demostrado fehacientemente.
100

121.- La parte demandada escribió un artículo que fue publicado en el suplemento


“Masiosare” del periódico “La Jornada”, con fecha 21 de septiembre de 2003, bajo
el título “Hasta luego, valientes”, el cual se acompaña a la presente demanda
como anexo 40.

122.- El artículo que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:

“Domingo 21de septiembre de 2003

Hasta luego, valientes

PRIMITIVO RODRIGUEZ OCEGUERA

Distinguidas lectoras y lectores de esta columna:

He aceptado la invitación que me hizo Patricia Olamendi, subsecretaria de


Temas Globales y Derechos Humanos en la Secretaría de Relaciones
Exteriores, para colaborar en el área de migrantes. Conozco a Patricia desde
hace buen rato y tengo en gran estima su inteligencia, profesionalismo y
capacidad de servicio a México. Patricia y su equipo, esté yo o no con ellos,
harán una mejor labor en derechos humanos que la realizada en los tres
pasados años.

Estudié filosofía y teología con los padres jesuitas e historia en El Colegio de


México y la Universidad de Chicago. Viví 17 años en Estados Unidos, 12 de
los cuales trabajé por los derechos de los migrantes y las obreras de las
maquiladoras para la ONG American Friends Service Committee, ganadora
del Premio Nobel de la Paz en 1947. De 1998 a 2002 estuve a cargo del
programa de apoyo a la familia migrante en el DIF, y por cerca de dos años he
fungido como coordinador en México de la Coalición por los Derechos
Políticos de los Mexicanos en el Extranjero.

El respeto a los derechos humanos fortalece al país y a sus instituciones de


gobierno, y es un pilar fundamental para orientar, normar, dotar de base social
de apoyo y hacer efectivas las políticas de seguridad pública y nacional. Por
el contrario, la violación a derechos hace un grave daño a las libertades y la
salud de México.

La protección de la vida y derechos de los migrantes es crucial para nuestra


dignidad y soberanía. Igual lo es proteger a quienes llegan al país o lo utilizan
como vía de tránsito a Norteamérica. Por ello, México necesita adecuar leyes,
instituciones y políticas a lo dispuesto por la Declaración Universal sobre los
Derechos de Todos los Trabajadores Migratorios y sus Familiares, documento
que tuvimos el privilegio de impulsar y que hemos ratificado.

El mejor aliado de México en Estados Unidos son sus migrantes. A la vez, los
mejores defensores de los migrantes son ellas y ellos mismos. Por ambas
razones deben ocupar el importante lugar que les corresponde en la
elaboración de estrategias sobre defensa de sus derechos y los de quienes
llegan al país o pasan por él en condición de indocumentados.

Necesitamos transformar la política de puertas abiertas a la observación en


política de paridad y mutua responsabilidad en derechos humanos. Estados
Unidos puede seguir evaluándonos, pero lo justo y necesario será acordar
proyectos de respeto a la vida y la dignidad humana aquí y allá sobre la base
de leyes nacionales y documentos de la ONU y la OEA ratificados por ambos
países. Algo similar debe llevarse a cabo con la Unión Europea, recurriendo a
la Cláusula Democrática del TLC firmado con ella. En el ámbito del respeto a
migrantes, Estados Unidos, la Unión Europea y México tenemos un buen
número de obligaciones no cumplidas.

Admiro el gran aporte que han hecho las ONG de todo el país en el campo de
los derechos, no obstante el alto costo que ello ha representado para la
seguridad y la propia vida de sus miembros. He sido también un crítico de
dirigentes de ONG que han aceptado financiamiento de la Fundación Nacional
para la Democracia (NED, por sus siglas en inglés), agencia norteamericana
que patrocina observación electoral y derechos humanos para realizar
101

operaciones de inteligencia e intervención. Consúltese al respecto lo que


escribí para Masiosare el 13 de mayo de 2001 y el pasado 26 de junio. El
vínculo de ONG con la NED no es sano para el movimiento civil por los
derechos humanos. Invito una vez más a Sergio Aguayo, quien ha mantenido
una larga relación con la NED, a que como promotor de transparencia y
rendición de cuentas haga pública su correspondencia con dicha agencia. Lo
invito también a debatir lo antes dicho y cuanto guste sobre mi persona.

Agradezco a usted lectora y lector su generosidad. Con mayor gusto


agradeceré ahora sus críticas y propuestas. Me pongo a sus órdenes en
primo1044@yahoo.com.mx”

123.- Del contenido del artículo mencionado en el hecho que antecede, se


desprenden las siguientes acusaciones en contra de la parte demandante:

En este escrito la parte demandada denomina sin reparo alguno a la Fundación


Nacional para la Democracia como agencia norteamericana dedicada a realizar
operaciones de inteligencia e intervención, a partir de lo cual cuestiona a las
organizaciones no gubernamentales dedicadas a las defensa de los derechos
humanos que poseen vínculos con esa Fundación, y directamente me acusa de
mantener una larga relación con ella, haciendo caer en mi persona la sospecha de
que sirvo a los intereses promovidos por esa misma Fundación y poniendo en
duda mi labor en materia de transparencia y rendición de cuentas públicas, al
aseverar que no he hecho pública mi supuesta correspondencia con la citada
Fundación y también porque me he rehusado a debatir con la parte demandada.

De igual importancia deviene reparar en el hecho de que esta columna demuestra


de nueva cuenta que cualquier excusa es buena para la parte demandada en su
afán de deslizar las acusaciones en mi contra y establecer algún tipo de relación
entre mi persona y las supuestas operaciones de inteligencia e intervención
norteamericanas vía la Fundación Nacional para la Democracia. Así, es evidente
que no existe justificación alguna para que a partir de un texto en que la parte
demandada anuncia su incorporación al gobierno de Vicente Fox, termine por
reiterar las acusaciones que ha vertido durante estos años en contra mía.

Con todo, lo que la parte demandada no puede evitar es que resulte falso que yo
sirva a los supuestos intereses intervencionistas promovidos por la Fundación
Nacional para la Democracia y, en relación con esto último, debe hacerse notar a
su Señoría que esta repetida falsedad, la parte demandada la presenta como un
hecho incontrovertible que dice fundar en el análisis veraz y objetivo de ciertos
textos, pero sin que al día de hoy ello se haya demostrado fehacientemente.

124.- La parte demandante tuvo conocimiento de un artículo que por las


referencias que hace a publicaciones como Proceso debe haber sido escrito en el
segundo semestre del 2003 y el cual conocí hasta el 2005, firmado por personas
que se identifican como familiares de desaparecidos políticos y como personas
relacionadas con familiares de dichos desaparecidos políticos, bajo el título “Ahora
es cuando los gorilas se disfrazan de académicos (a propósito del libro La Charola
de Sergio Aguayo Quezada)”, el cual se adjunta a esta demanda como anexo 41.

Lo anterior le consta a las personas Andrea Ramírez Sánchez y Raúl Alejandro


Ramírez Larrañaga, quienes fueron los que me alertaron de dicho artículo del cual
acabo de tener conocimiento de su aparición.

125.- El artículo que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:

“AHORA ES CUANDO LOS GORILAS SE DISFRAZAN DE ACADÉMICOS


(A PROPÓSITO DEL LIBRO LA CHAROLA DE SERGIO AGUAYO
QUEZADA)

Cuando en el mes de junio del 2001, en el número 20 de la revista Bajo


Palabra (Periodismo de investigación) leímos un artículo de Gastón Pardo, en
el que se evidenciaba como “Agentes de Estados Unidos [a] Mariclaire Acosta
y Sergio Aguayo” (páginas 68–69), como que dudamos un poco de la
102

veracidad de su contenido. En su artículo este autor señalaba que ello se


había descubierto a raíz de la denuncia hecha por el Diputado del PRD Luis
Sánchez Aguilar que el 18 de marzo de 1997 acusó a dirigentes de
Organizaciones no Gubernamentales dedicadas a la observación electoral de
trabajar al servicio del gobierno de Estados Unidos.

Para reforzar su dicho el autor citaba a Primitivo Rodríguez Oceguera en La


Jornada del 13 de mayo del 2001, quién había recogido la nota y había hecho
la investigación al respecto. Argumentaba que dicha denuncia se sustentaba
“en evidencias de que tales organismos reciben financiamiento de Washington
a través de la Fundación Nacional para la Democracia (FDN), proyecto
bipartidista controlado por el Centro Carter”.

Gastón Pardo abundaba en que La Fundación Nacional para la Democracia


en su declaración de objetivos y principios “se compromete a mantener
informado al poder Ejecutivo de Estados Unidos, además de solicitar la
opinión de importantes funcionarios del gobierno y de las embajadas
estadounidenses”. Además de que obliga a los que patrocina y a la fundación
“...a la apropiada supervisión del Congreso de Estados Unidos”, el cual le
suministra el 98 por ciento de su presupuesto anual a tal Fundación y ésta
está obligada a presentar al Congreso estadounidense testimonios de
dirigentes y personalidades del mundo político” (1) Destacaba a la gente que
patrocina:

“Entre ellos Mariclaire Acosta, dirigente de la Comisión Mexicana en Defensa y


Promoción de los Derechos Humanos, que entre 1993 y 1997 recibió 235 mil
dólares”.

“Y Sergio Aguayo, de la Alianza Cívica, que de 1994 al año 2000 recibió 137
mil 174 dólares. Ambas cantidades provenientes de la Fundación Nacional
para la Democracia...”

Pero el autor del artículo señalaba también que habían sido los propios
consejeros de Seguridad de la Casa Blanca: Richard Allen, Frank Carlucci,
Zbigniew Brzezinzki y Brent Scowcroft, quienes habían hecho evidente que la
llamada Fundación para la Democracia era un organismo subsidiado por el
Parlamento estadounidense y dependiente del Consejo de Seguridad de la
Casa Blanca.

Todo ello nos hacía recordar que éste es el mismo equipo constituido por
Henri Kissinger, que aún continúa dominando el mundo de la política de rapiña
internacional del gran Imperio, aunque formalmente Kissinger estuvo en el
Consejo de Seguridad y en la Casa Blanca de fines de 1969 hasta enero de
1977.(2)

Recordamos hoy, también, como en aquella ocasión, que este es el equipo


que ha diseñado, entre otras estrategias, las que han determinado ‘el nuevo
orden mundial’.(3) Aunque éste equipo ha extendido sus tentáculos hacia
otras partes del mundo, exportando expertos en Seguridad para garantizar los
intereses de la Oligarquía Financiera estadounidense en otros países y
regiones; verbigracia, a fines del 2001 hacia Afganistán, en este año a Irak y
hace algún tiempo a México a donde, nos parece, han mandado a Samuel P.
Huntington como representante de la DEA. Este último es autor de varios
libros entre los que podemos señalar El choque de las civilizaciones y la
reconfiguración del orden mundial. En realidad no les preocupa tanto combatir
el narcotráfico como controlarlo, ésa es una parte de las disputas entre los
grupos de poder. Pero lo que más aún les mueve es el petróleo, las áreas de
influencia, el predominio del gran Imperio, con su dominio absoluto, una vez
vencido el social–imperialismo ruso. Les interesa la disputa con el imperio
chino y les importa mucho que no se consoliden tendencias nacionalistas
árabes, musulmanas o latinas que les pongan trabas en sus aspiraciones
imperiales totalitarias. A eso le llaman el dominio de su democracia. Por ello
una de las estrategias determinadas desde la Casa Blanca (desde la época de
Kissinger) ha sido impulsar la desarticulación de los estados nacionales
promoviendo la división de los países mediante luchas intestinas de corte
nacional étnicas.
103

Pero su estrategia mundial es la conflagración entre lo que ellos llaman


‘culturas’ o ‘civilizaciones’. Occidentales contra no occidentales, árabes contra
europeos, etc. Huntington es uno de los principales estrategas de la Casa
Blanca, formó parte del equipo del ya mencionado Henry Kissinger y estuvo
integrado en el equipo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca de Estados
Unidos, es autor de las estrategias militares de globalización y soporte de las
políticas imperialistas liberales del FMI, Banco Mundial, Banco Interamericano
de Desarrollo, en consecuencia. Con su asignación a México la Casa Blanca
le manda asesoría a los gobernantes mexicanos para la desarticulación de la
República mexicana para favorecer los planes de privatización que no han
podido imponer Zedillo y hasta ahora Fox, una fichita pues.

Pero regresando un poco, diremos que éstos peones del tablero del ajedrez
político– militar mundial, ejecutores de las estrategias unipolares del gran
Imperio, tienen a su servicio a individuos como Sergio Aguayo y Mariclaire
Acosta ya que “las actividades de la FND indican que Sergio Aguayo y
Mariclaire Acosta –colaborador de Adolfo Aguilar Zinzer en el Consejo de
Seguridad Nacional y asesora en Derechos Humanos del presidente Fox,
respectivamente– son agentes del gobierno estadounidense”, deducía el
articulista.

Y a manera de colofón terminaba diciendo que “Sergio Aguayo, experto desde


los años sesenta en los temas de Seguridad de Estados Unidos y México, ‘en
la actualidad escribe un libro sobre la historia de las operaciones de
Inteligencia en México’ advierte The Washington Post en su edición del 22 de
enero del 2001”. Ese libro al que hacían referencia era el que hoy conocemos
como “La charola, Una historia de los Servicios de Inteligencia en México”, de
Sergio Aguayo; Editorial Grijalbo, México, 2001. 413 páginas.

Es triste en verdad el caso de Sergio Aguayo Quezada, ¡cómo me dan pena


las abandonadas! Le han mal pagado su trabajo sucio. No entendió que si le
habían dado la primicia en la consulta de los archivos del Cisen-DFS, etc, era
por dos circunstancias: una por su larga trayectoria en los ámbitos policíacos.
Hijo de un miembro de la extinta DFS, estrechas ligas con la derechista
Federación de Estudiantes de Guadalajara (FEG); ahora ya saben a lo que se
dedicaba Sergio Aguayo (por si no lo sabían, compañeros, ex militantes de la
Federación de Estudiantes Revolucionarios y los compas que hayan salido del
Barrio de San Andrés), seguramente para que le dieran ese trabajo sucio
contaron mucho los servicios policíacos prestados por él durante el combate a
la guerrilla en Guadalajara, particularmente en el Barrio de San Andrés, por su
conocimiento de los compañeros que se habían reclutado en el movimiento
revolucionario; así como por sus largos estudios y especialización en asuntos
de Seguridad de Estados Unidos y México (o sea en los asuntos policíacos),
realizados casi simultáneamente a su colaboración policíaca etc., por su
colaboración con la Dirección Federal de Seguridad al servicio de Alberto
Estrella a principios de la década de los ochenta. ¿Quién puede recibir tantas
becas y oportunidades para hacer estudios de orden policiaco sino alguien
que ha estado vinculado desde su nacimiento con la policía? Como
cínicamente lo afirma él mismo, su larga trayectoria le llevó a codearse con lo
más graneado de la policía política del país. Le ofrecieron conferencias en la
Defensa Nacional, en la Naval, discutió conceptos e ideas sobre seguridad
nacional o sea sobre temas policíacos con Jorge Carrillo Olea, Jorge Tello
Peón, etc.

En La Charola Sergio Aguayo maneja una hipótesis fundamental: aquella que


afirma que los servicios de Seguridad en México han quedado obsoletos para
los tiempos que vive el país. En consecuencia propone que el gobierno debe
especializarlos y profesionalizarlos. Y aunque no lo dice tajantemente, insinúa
claramente que el ejemplo a seguir son el FBI y la CIA estadounidenses. Deja
perfectamente claro que él es uno de los cuadros más especializados en la
Seguridad pues en varias partes de su libro se extiende ilustrándonos con los
estudios realizados por él, pero su esmero en mostrarse como indispensable
para el sistema por lo visto no convenció a las más altas esferas del poder a
asignarlo como Director del Cisen o como se llame ahora el organismo de la
policía política en México. Pero como decimos que sea Sergio Aguayo el que
se encargue de ése trabajo sucio, para la CIA es circunstancial, aunque para
Sergio Aguayo sea el motivo de toda su vida.
104

La segunda circunstancia es que le han autorizado el acceso a los archivos de


la policía política no para darle una apariencia de apertura a la consulta de los
archivos de la Guerra Sucia. Ni para aparentar que ha llegado un cambio en
el gobierno. Sino por que su colaboración con la CIA y con la policía política,
como vemos, no es reciente. Pero la CIA utiliza a sus piezas, una vez que ya
no le sirven les bota. ¿No fueron suficientes ejemplos los casos de los
Talibanes y de Bin Laden en Afganistán?¿O el más reciente de Sadam
Hussein en Irak? Todos ellos formados, subsidiados, por la CIA y
posteriormente destruidos por la misma, cuando ya le estorbaban.

Ni cabe duda que en ausencia del gato comunista, los ratones policíacos–
demócratas–oportunistas hacen su fiesta. La chamba que le ofrecieron y que
cumplió bien Sergio Aguayo fue la de consultar, como hasta ahora nadie lo ha
hecho, los archivos y documentos del Archivo General de la Nación, del
CISEN y particularmente los de la Guerra Sucia para que denunciara desde
hace tiempo sus fortalezas, así como sus debilidades.(4) Su corrupción, y la
forma en cómo podía desarticularse para operar un cambio para arrebatarle el
poder al grupo que antes lo detentaba en el país.

A través de su libro Aguayo nos ilustra con el manejo de una derivada de la


hipótesis anterior: afirma que los organismos de Seguridad en México,
particularmente la Dirección Federal de Seguridad (creada en 1947) han
estado supeditados a la voluntad de los grupos de poder, particularmente de
uno encabezado desde su fundación, el constituido por Gustavo Díaz Ordaz,
Luis Echeverría Álvarez, Fernando Gutiérrez Barrios, Javier García Paniagua–
Miguel Nazar Haro y José Antonio Zorrilla Pérez y que éstos cinco últimos
determinaron su existencia prácticamente hasta su desaparición en 1985
(Págs. 91-119). Pero nos aclara también que los organismos Policíacos de
Seguridad Nacional son piedra fundamental para el sostenimiento del poder.
Que a ése grupo les sirvió de palanca para afianzar el poder y sucedérselo
uno tras otro. Lo cual logra demostrar. Y en consecuencia para arrebatarles el
mismo debía destruirse su Policía Política y sus vínculos con todos los demás
órganos del poder: el ejército, las Cámaras, el Judicial, la Banca, la Industria,
etc. Cuestión a la que se avocó el nuevo grupo de poder desde hace años.

Repetimos, el régimen por mandato de la CIA, después de los asesinatos del


periodista Buendía (1984) y del agente de la CIA Camarena en 1985, había
tomado la decisión para la alternancia del poder, esto es, para arrebatarle el
poder al grupo que lo detentaba y había venido sentando las bases para la
alternancia (misma a lo que se negó Salinas porque representaba aparentar
que perdía el PRI pero que en el sexenio de Zedillo, éste había determinado
operarla y en consecuencia se darían a conocer los archivos secretos de los
organismos de Seguridad; entretanto, parte de esa información la utilizarían
como catapulta para obligar al PRI a salir de los Pinos) por ello le encargaron
a Sergio Aguayo que escribiera abundantemente sobre los organismos de
inteligencia en México, lo que ha venido haciendo desde algunos años, se
dieron varios encarcelamientos de funcionarios de alto nivel: Acosta Chaparro,
se persiguió a Arevalo Gardoqui, se encarceló a Zorrilla, etc., el objetivo era ir
desarticulando a la Nomenclatura. Es suficiente recordar la enorme cercanía
de Aguayo con el equipo de Salinas: Córdova Montoya y parece que Camacho
salieron del Colegio de México en dónde está adscrito Aguayo.

Pero sacar a la luz pública la información de la Guerra Sucia, era peligroso, ya


que como consecuencia se podía ayudar a ‘revivir los fantasmas del pasado’,
como dicen ellos. Se corría el riesgo de revivir el comunismo, por ello, era
indispensable que si como consecuencia se provocaba el resurgimiento y
reorganización del comunismo, éste debería estar controlado por la policía,
por la inteligencia policíaca, pero lo mejor era evitar que se reorganizara.

Los viejos rectificadores–renegados, una vez más se prestarían,


conjuntamente con la policía política a ofrecerse como ‘alternativa’ a quiénes
ingenuamente estuvieran dispuestos a reorganizarse. A propósito de los 35
años del Asalto al cuartel de Cd. MaderA en 1965, en el 2000 se realizarían
eventos en los que sujetos pagados por Abascal y Fox ¿Quiénes? Uno: Jorge
Poo Hurtado (ex–militante del grupo Lacandones, que no de la Liga) había
estado al servicio del Secretario de Gobernación Diódoro Carrasco y
públicamente se supo que para el evento había recibido subsidio de Abascal
Carranza (5), flamante Secretario del Trabajo.
105

Otros: Igualmente la gente del grupo de incondicionales de Gustavo Hirales


Morán, cuya larga trayectoria policíaca es sabida por todo mundo: primero
como delator, infiltrado en la guerrilla, protegido por la policía aparentando su
encarcelamiento, posteriormente, sabido es que delató a muchos camaradas
tan pronto como en 1973 había “caído preso” lo anduvieron ‘paseando’ por
todo el país para que delatara a todos los que él conocía como militantes de la
Liga Comunista 23 de Septiembre, protegiéndolo lo trasladaban en avión y lo
mismo ‘aparecía’ en un lado del país como se le veía en otro, igualmente para
evitar que le reconocieran lo protegían trasladándolo en camionetas con
vidrios polarizados. Posteriormente a la muerte del Comandante Ventura de la
INTERPOL, se sabría que él así como José Luis Sierra estuvieron
coordinados desde los setentas por el Comandante Florentino Ventura
realizando actividad de infiltración al seno de la Liga Comunista 23 de
Septiembre. Posteriormente se descaró como asesor en Gobernación, asesor
contra el EZLN, actualmente es parte del equipo de la Comisión Nacional de
Derechos Humanos (CNDH) desde dónde aparenta ‘investigar’el paradero de
los que delató y simultáneamente es asesor en la Fiscalía Especial para
Delitos del Pasado (asesor de Carrillo Prieto, ya se imaginarán para que sirve,
entonces la Fiscalía Especial).

Otro de los promotores: fue aquel individuo que le dio formación militar al
grupo paramilitar priísta y ‘cardenista’ que había perpetrado el asesinato de los
indígenas de Acteal: Anzaldo Meneses. Pero parece que algunas de estas
‘cartas’ se le quemaron muy pronto a la policía política y tuvieron que entrar al
relevo otros menos ‘quemados’, ello en septiembre del año 2000.

Una vez llegado el actual grupo a alternarse en el poder, a lo que Sergio


Aguayo contribuyó con sus trabajos, le encargaron escribir un libro sobre la
historia de los organismos de Seguridad (la historia y funcionamiento de los
órganos de la policía política), éste debería ser escrito en la misma línea ya
determinada desde hace muchos años por la CIA (la de la misma Guerra
Sucia), con el objetivo de evitar que se reconstituyan los viejos grupos de
poder que hasta la década anterior lo había detentado.

Por eso era urgente, también, que Sergio Aguayo embarrara de suciedad la
historia de la Liga Comunista 23 de Septiembre. El objetivo era limarle el filo a
la información que se haría pública desacreditando de antemano todo intento
de reorganización del movimiento revolucionario del proletariado.

Esta historia (la historia del movimiento revolucionario en general y la de La


Liga Comunista 23 de Septiembre, particularmente) debía adocenarse
imbricándola con la historia de la policía política y concretamente con la
historia de la Dirección Federal de Seguridad (¿Por qué les preocupará tanto
la Liga si según todos ellos dicen que ya ha sido eliminada? –Nos
preguntamos–). Esta táctica no es nueva, así lo hacían los nazis: acusaban a
los comunistas de estar al servicio del gobierno y de ser agentes extranjeros.
Desde hace muchos años, casi desde que los gobiernos mexicanos formaron
la Dirección Federal de Seguridad la táctica determinada por la CIA fue esa:
Acusar a los comunistas de estar al servicio de la misma CIA o de estar al
servicio de Cuba o de Rusia.

Durante muchos años se ha manejado el mismo esquema: se ha acusado a la


Liga Comunista 23 de Septiembre de haber sido un proyecto impulsado por el
gobierno. Así lo manejaron los renegados (se llamaron a sí mismos
rectificadores) durante 1975–76. Así lo decían, haciendo campañas en contra
de la Liga, todos los partidos demócratas oportunistas. Así lo hacía circular la
misma policía política conjuntamente con el oportunismo a su servicio, así lo
hacen hasta la fecha.

El libro de Sergio Aguayo se inscribe en la misma línea. La particularidad de


La Charola estriba en que en éste trabajo Aguayo utiliza toda la técnica de
investigación y sustento para fundamentar tales tesis. No importa la
honestidad académica, se deja de lado toda ética y moral para acomodar
mañosamente los datos y las fuentes utilizando éstas muy selectivamente, de
la policía política no se puede esperar otra cosa.
106

Aunque ya en reiteradas ocasiones a través del periódico MaderA, Órgano


Central de la organización revolucionaria Liga Comunista 23 de Septiembre,
mismo que se publicó durante toda su existencia en la más absoluta
clandestinidad, se había explicado que la Liga se había formado después de
un intenso período de discusiones durante casi todo el año del ’72, éste que
ha sido hasta la fecha el más serio intento del proletariado por darse su
organización revolucionaria de vanguardia y por constituir el Partido
Revolucionario que represente unilateralmente sus intereses de clase, en un
intento por superar la enorme dispersión orgánica del movimiento
revolucionario, la Liga se fundó a principios del ’73 con la fusión de los
principales grupos armados que se habían venido formando en los últimos
años: Los Lacandones, los llamados Macías, los Guajiros, el FER, EL
Movimiento 23 de Septiembre, algunos compañeros que venían del MAR y el
grupo los Procesos. Aunque todo esto se explicó durante muchas ocasiones a
través de MaderA, no está por demás volverlo a señalar.

Sin duda alguna que tal proceso de constitución de la Liga, aunque se dio
sobre la base de un enérgico deslinde de posiciones y desarrollando una
intensa lucha en contra de las posiciones políticas oportunistas, tanto
demócratas de diversos matices como ‘militaristas’, a las que se inclinaban
muy comúnmente los grupos revolucionarios armados; adolecía de muchas
deficiencias pues aún después de la constitución de la Liga se siguieron
presentando muchas posiciones de ésa índole, pero no tan sólo ello, era tanto
el afán de superar la enorme dispersión orgánica del movimiento que incluso
en el mismo proceso de constitución de los grupos así como en sus métodos
de reclutamiento, y el método para constituir la Dirección Nacional (lo que en
ése entonces se llamó el Buró Político), así como los Comités Regionales,
direcciones locales de la Organización Revolucionaria, se vinieron arrastrando
deficiencias y desviaciones; pero esa enorme distensión en los métodos de
organización y reclutamiento demostraban la juventud del movimiento
revolucionario, su inexperiencia, por un lado. Por otro lado, esa distensión en
los métodos del clandestinaje había traído como consecuencia una cuestión
que no pasaba desaperciba para Ignacio Arturo Salas Obregón pues estaba
consciente de ello, el oportunismo al seno de la Liga y la Policía Política, que
habían logrado infiltrarse en la Organización, trabajaban
mancomunadamente.(6)

Fue gracias a Oseas (Ignacio Arturo S. Obregón) que había alcanzado a


ubicar a varios infiltrados que se pudo resguardar el grueso de la militancia. Él
fue quien advirtió que debían desarticularse la Dirección Nacional y los
Comités de varias partes con el objetivo de reducir los vínculos de la militancia
a relaciones personales, a relaciones personales; ¡Oseas había logrado
deducir el grado de infiltración a que había sido sometida la Organización
Revolucionaria! Meritoriamente desarrolló una gran actividad frecuentando las
Brigadas y Comités de casi todas las Regiones del país para reconstituirlos. Y
cuando esto lo sometió a discusión al seno de la Organización, a fines de
1973 y principios de 1974, él ya había tomado las medidas pertinentes para
constituir nuevos Comités con militantes más probados, seguros y con
posiciones verdaderamente revolucionarias. La Policía Política respondió con
una cruenta persecución, desarticulando varios comités asesinando a sus
miembros, encarcelando a muchos militantes, entre ellos a varios dirigentes.
En el desarrollo de ésa ofensiva de la bestia burguesa también Oseas sería
objeto de la represión, en abril de 1974 es herido, detenido y secuestrado,
después de un enfrentamiento que sostuvo con el objeto de impedir verse
aprehendido. Hasta la fecha se encuentra seguramente, como les consta a
muchos camaradas que han logrado salir, en las mazmorras del Campo Militar
No. 1

Por otro lado, independientemente de que lo deseen o no, los diversos grupos
de poder, en sus pugnas Inter–burguesas por arrebatarse el poder unos a
otros han sacado y seguramente seguirán sacando a flote información que
comúnmente se encuentra soterrada en los archivos secretos de la policía
política o en archivos ‘personales’(7) cuestión que no debe pasar
desapercibida para el proletariado(8) ya que sabiéndose estudiar debida y
detenidamente ésta información puede servir, por las experiencias, las
enseñanzas, la asimilación de los errores cometidos por el movimiento
revolucionario, así como la profesionalización de los métodos conspirativos
que deben aplicarse en la lucha en contra de la policía política y su actividad
107

de espionaje. Por ello conviene la lectura de La charola, aunque sólo fuera por
eso.

Finalmente(9) diremos que al parecer Sergio Aguayo y Mariclaire Acosta son


otros de los policías políticos que ‘se le han quemado’ al régimen, en virtud de
que como hemos visto en este material, desde 1997, pero sobre todo en el
2000 y 2001 han provocado tal reacción en los medios priístas desplazados
que han hecho evidente sus vínculos con las fuerzas reaccionarias de la CIA,
el FBI, el Parlamento estadounidense y los órganos de Seguridad de Estados
Unidos que le han llevado a ser ‘descalificado’ por sus propios jefes del gran
Imperio que le han dejado solo: sólo así se pueden entender las lastimosas
quejas de Sergio Aguayo aparecidas en Proceso 1384 del 11 de mayo del
2003 plasmadas en la entrevista que le realizó el reportero (10) que dice
“Ubicado en el primer lugar de la lista de los candidatos plurinominales del
partido que fundó con Patricia Mercado y otros personajes, Sergio Aguayo
establece que su deseo de encontrar respuestas no oculta ningún interés
especial ni, menos aún, afanes de venganza”(11) Refiriéndose a la Guerra
sucia.

“En otra parte de la entrevista, justifica su incursión en la política: ‘ya me cansé


de que no me hagan caso como ciudadano, de que mis propuestas no se
traduzcan en políticas públicas. El razonamiento fue elemental: si no me
responden como ciudadano, lo tendrán que hacer con la autoridad que me den
los votos”. Los cuáles serían más votos a favor de la CIA, de la política
neoliberal, de privatizaciones, etc. Por que como afirma ya se cansó de
“esperar. Tengo 30 años de esperar los cambios, avances en la democracia.
El Presidente Fox escamotea las transformaciones...” Como lo podemos ver,
hay quién en la orgía de democracia al estilo del gran imperio que se ha
venido implantando en el mundo y particularmente en México, hay quién
considera que ha hecho suficientes méritos policíacos sirviendo a la CIA y
demás órganos de ‘Inteligencia’ y no se siente debidamente correspondido...
ese es el Señor Aguayo un individuo que del género Gorilla gorilla, dejando a
un lado el radio transmisor y la charola, prueba a verse en el espejo con toga
y birrete.

FIRMANTES:
Dr. José Enrique González Ruiz asesor de los familiares de los desaparecidos
políticos.
David Cilia Olmos y Reina García González, familiares de Hortensia García
Zavala y Ramón Cardona Medel desparecidos en 1978.
Guillermo Reyes García y Beatriz Reyes García, familiares de Roque Reyes
García y Hortensia García Zavala, secuestrados en 1981 y 1978,
respectivamente.
Manuel Gallangos Cruz, familiar de Roberto, su esposa Carmen Pérez,
Avelino y Francisco Gallangos Cruz secuestrados en distintas fechas.
Alejandro Goroztiola Toríz, familiar de Francisco Gorostiola Toriz (Fernando) y
cuñado de “Irma”, esposa del anterior, secuestrados por la policía y La Brigada
Blanca el 28 de agosto de 1976. Así como hermano de Carlos Gorostiola Toríz
(Joel) asesinado por las fuerzas represivas del gobierno el 7 de agosto de
1976.
Enrique Torres, Fernando Fernández Jaramillo, María Dolores López
Mariscal, Mario Álvaro Cartagena López (El Guaymas).

(1) Subrayado nuestro.


(2) Consúltese a Henri Kissinger: Mis memorias. Editorial Atlántida, Buenos
Aires 1979.
(3) Igualmente, se puede consultar un pequeño trabajo cuyo título es
Reconsideraciones del Nuevo orden mundial. Del Fondo de Cultura
Económica, México, 1995. De Henri Kissinger.
(4) Por que además a nadie le permiten consultar esos archivos del AGN ni
del CISEN. Los familiares de los secuestrados políticos (desaparecidos) sólo
tenemos derecho a pedir información exclusivamente sobre los nuestros y eso
en términos muy limitados. Sólo nos proporcionan lo que el encargado Vicente
Capello y su equipo autorizan, o sea que la información selectiva que se nos
proporciona debe ser supervisada por el personal que formó parte del equipo
de Nazar Haro.
108

(5) Consúltese el artículo de José Gil Olmos: Piden exguerrilleros a Fox


otorgar amnistía a todo grupo Armado, en La Jornada, domingo 24 de
septiembre de 2000, página 5.
(6) Puede consultarse a éste respecto el artículo Mas de seis años de prensa
revolucionaria, que aparece en el Número 50 de MaderA, de junio de 1980,
Órgano Central de la Liga Comunista 23 de Septiembre, páginas 1 a 8.
(7) Se recordará que en varias ocasiones filtró la información en los medios
acerca de que el archivo ‘personal’ de Fernando Gutiérrez Barrios era de los
más completos en el espionaje sobre grupos revolucionarios de México.
(8) No es lo mismo abrir los archivos policíacos después de un movimiento
revolucionario como sucedió en Rusia después del triunfo Bolchevique en
octubre de 1917, que sacaron a flote cómo operaba la Ojrana, la policía
política del zarismo, que como viene sucediendo con éste remedo de cambio
del gobierno foxista.
(9) Aunque el libro de Aguayo merece aún más atención, por ello no daremos
por concluido su análisis.
(10) Raúl Monge.
(11) Eso resulta obvio, del señor Aguayo, pues como vemos su oficio es
estrictamente policiaco. Subrayado nuestro.”

126.- Del contenido del artículo mencionado en el hecho que antecede, se


desprende que las acusaciones en contra de la parte demandante vertidas por la
parte demandada, han tenido impacto en sus autores en consideración a lo
siguiente:

Afirman que estoy al servicio de los ejecutores de las estrategias unipolares de los
Estados Unidos de América, debido a que las actividades de la Fundación
Nacional para la Democracia indican que soy agente del gobierno estadounidense.
Asimismo afirman que me han pagado mal mi trabajo sucio y que si me
permitieron consultar los archivos del Centro de Inteligencia y Seguridad Nacional
se debe a mi larga trayectoria en los ámbitos policíacos, los que, según los
autores de este artículo, me becaron para hacer estudios de orden policíaco y en
los que presté mis servicios durante el combate a la guerrilla en Guadalajara, y a
mi colaboración con la CIA y con la policía política. De igual manera, afirman que
mis escritos sobre los organismos de inteligencia y seguridad en México los he
elaborado por encargo de la propia CIA y que formo parte de la policía política, así
como que estoy vinculado además de con la CIA, con el FBI, con el Congreso y
con los órganos de seguridad estadounidenses. Finalmente, afirman que votar por
mí como candidato del Partido México Posible implicaría votar por la CIA, por la
política neoliberal y de privatizaciones.

En este sentido, puede advertirse que, haciendo mención expresa de la parte


demandada y de las cartas y artículos que ésta ha podido publicar, así como del
artículo de Gastón Pardo publicado en la revista Bajo Palabra a la que se ha
hecho referencia en el hecho 48, y que, como entonces quedó demostrado,
denota el impacto que en este autor han causado las acusaciones que la parte
demandada ha hecho en mi contra, de igual forma, los autores de este artículo
recogen, actualizan y afirman como ciertas, algunas de las principales
acusaciones que la parte demandada ha lanzado en mi contra desde hace ya
algunos años y que causan daño a mi honor y reputación.

Las acusaciones de referencia pueden encontrarse principalmente en las


publicaciones mencionadas en los hechos 10, 29, 37, 55, 61, 40, 58, 72, 94, 99,
77, 79, 85 y 91, es decir, La Jornada, 2 de junio de 1997; La Jornada,19 de abril,
10 de mayo, 6 de septiembre y 12 de diciembre, todas de 2001; Masiosare, 13 de
mayo de 2001, y Proceso, 21 de octubre de 2001; Milenio Semanal, 25 de febrero,
11 y 25 de noviembre, todas de 2002; Reforma, 25 de abril de 2002; La Jornada, 3
y 15 de mayo de 2002, y Masiosare, 28 de julio de 2002, respectivamente, en las
que la parte demandada afirma que, en virtud de las actividades de espionaje e
intervención realizadas por la Fundación Nacional para la Democracia que han
sido documentadas por diversos periódicos e instituciones estadounidenses,
puede concluirse que al ser el “dirigente” de Alianza Cívica, organización civil
financiada por dicha Fundación, soy, en realidad, agente del gobierno
estadounidense y sirvo a sus intereses.
109

Otras de las acusaciones vertidas por la parte demandada que han impactado en
la consideración que tienen de mí los autores de este artículo, se encuentran en
las publicaciones referidas en los hechos 61 y 72, que corresponden a La Jornada,
12 diciembre 2001 y Milenio Semanal 25 de febrero de 2002, respectivamente, en
las que la parte demandada afirma que, como “dirigente” de Alianza Cívica,
organización financiada por la Fundación Nacional para la Democracia, me
encuentro vinculado a los órganos de seguridad estadounidenses.

Asimismo, en las publicaciones descritas en los hechos 90, 94 y 99, Masiosare, 28


de julio de 2002 y Milenio Semanal, 11 y 25 noviembre de 2002, respectivamente,
la parte demandada afirma que el Partido México Posible, del que fui candidato a
diputado, era dirigido por la Fundación Nacional para la Democracia, organización
estrechamente relacionada con la Agencia Central de Inteligencia, y a la que,
según la demandada, me encuentro vinculado.

Finalmente, en la publicación referida en el hecho 40, es decir, Masiosare del 13


de mayo 2001, la parte demandada, en la nota al pie número 11, hace mención de
mi conocimiento sobre los sistemas de inteligencia y seguridad nacional de los
Estados Unidos de América, de mi acceso a los archivos del Centro de Inteligencia
y Seguridad Nacional y a mi libro sobre la historia de las operaciones de
inteligencia en México, y utiliza toda esta información para asegurar que cuando
“acepté” el financiamiento de la Fundación Nacional para la Democracia ya
conocía sus actividades de espionaje e intervención, mismas que encubro y de las
que soy cómplice. Los autores del artículo que se comenta recogen todos estos
datos para lanzar nuevas acusaciones en mi contra y criticar mi libro “La Charola”.

127.- La parte demandante tuvo conocimiento de un artículo escrito por Manú


Dornbierer, aparecido en el periódico “El Siglo de Durango”, del 17 de julio de
2004, bajo el título “Las señoras del empoderamiento”, el cual se acompaña a la
presente demanda como anexo 18.

128.- El artículo que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:

“El Siglo de Durango


17 julio 2004

SATIRICOSAS
Las señoras del “empoderamiento”
MANÚ DORNBIERER

El verbo inglés "to empower" significa simplemente "habilitar o capacitar a


alguien para hacer algo" y "empowerment" se utili-za con frecuencia en
materia legislativa pues tam-bién se puede habilitar "algo", un reglamento, una
norma, una ley para que funcione mejor o para tor-narla más severa. Al
escuchar, con cierta risa, a Marta Sahagún lanzar en su reciente visita a Para-
guay la expresión "empoderamiento de las muje-res", pensé que la esposa del
presidente Fox (hoy ya no, pero en aquel momento todavía precandida-ta a la
Presidencia de México) era la autora del neologismo y que lo pudo haber
sustraído del in-glés, ya que es profesora del idioma de Shakespea-re aunque
cuando se le escuchan en TV algunas palabritas parece que no lo habla muy
bien, pero hade ser por su encantador zzzzezzeo. Hoy sin embar-go sé que no
es ella la autora, o cuando menos no la única, de tan amenazante terminajo.
Fue acuña-do en 2003 durante la reunión de una serie de mu-jeronas políticas
precisamente para parir la filoso-fía "empoderante", al festejar los 50 años del
voto de la mujer en México. Así lo escribió una de ellas, Patricia Mercado,
candidata ( a no recuerdo qué)del partido "México Posible",diseño de Sergio
Aguayo, amigo de Fox, de la NED y de la CIA. ¡To-do sea por la democracia!
¿DE QUÉ QUIERENAPODERARSE LAS MUJERES DE LA CAS-TA
POLÍTICA? Del poder, por supuesto, pero también del dinero. Lo mismo que
los hombres y están en su derecho porque son iguales ante la ley. Pero, oh
pero, para tal efecto no están dispuestas a basarse nada más en sus méritos y
capacidad. Quieren seguir utilizando las viejas y no precisa-mente nobles
armas femeninas y eso en materia de progreso laboral, político, profesional,
no es ético y no se vale ni hacia los hombres ni hacia las muje-res mismas que
110

tienen de la lucha feminista un en-foque más limpio y equitativo. Es muy difícil


en-contrar en la política mexicana una mujer libre de ese pecado que, no le
temamos a la verdad, está muy emparentado con la prostitución. Todas, con
pocas excepciones - celebremos a Amalia García, hoy gobernadora electa de
Zacatecas -fueron "em-poderadas" por algún o algunos tipos y una vez en la
cúspide se ponen a perorar sobre la durísima ba-talla que han librado en pro
de la dignidad de la mujer... por lo que exigen el apoyo y el voto del gé-nero.
Caramba. El caso es que las tres principales "gallonas", que no gallinas, de
aquella reunión con-vocada por la ex perredista Rosario Robles con mi-ras al
"empoderamiento" de las mujeres (ellas, sus cuatas) están hoy fatal: la misma
Rosario, Elba Es-ter Gordillo y -last but not least- Marta Sahún de Fox. De
hecho, ella fue la única empoderada. A las otras, por la lamentable omisión de
no haber pescado marido presidente, les fue como en feria. Rosario, protegida
de Cuauhtémoc Cárdenas, ade-más cometió la increíble imprudencia de
enamo-rarse de un argentino y de soltarle la bolsa del Go-bierno del DF (antes
de colgarse de la suya) al gra-do de dejar a su partido el PRD en la quiebra y
al borde de la desaparición, lo que sería lamentabilí-simo pues es, con todo y
la crisis bejarana, la única opción frente al vomitivo PRIanismo cada vez más
obvio, que se trate del grupo elbista o del madra-cista, ya que los priistas
decentes, que los hay, no parecen haberse empoderado mucho que digamos
en estos cuatro años. En cuanto a Doña Batracia Gordillo cayó del
empoderamiento, aunque no de su inmensa riqueza, al desbancarla Emilio
Chauyf-fet, cuan misógino, de la coordinación priista en la Cámara, para
beneplácito de millones de mujeres y de hombres que saben lo que es la
salinista mais-tra. DESINTEGRANDO INSTITUCIONES, por fin Marta se calló
(crucemos los dedos), mas no se cayó, sólo se tambaleó, con el escándalo de
su apo-deramiento de los recursos de la Lotería Nacional, que desde el
principio del sexenio le fue servida en charola de plata por Jorge Salomón
Cámara, su va-let preferido , hoy subdirector de la Organización Editorial
Mexicana y asesor aparentemente del Secretario de la Defensa, un hombre
este Salomón Cámara, que los periodistas más bravos no mencio-nan ni
siquiera en relación con este nuevo escanda-lazo (decir su nombre en 2001
me costó la suspen-sión fulminante de un comentario radiofónico que tenía los
lunes en el excelente noticiero de mi ami-go Ricardo Rocha). En el sexenio
pasado este otro tabasqueño había desintegrado ya la Lotería Na-cional de la
que era director, y sólo siguió sus pa-sos Laura Valdés, su sucesora, que por
lo pronto sonríe radiante por el agradecimiento que le ma-nifestó Fox , a
sabiendas de que el mago de los números , el más apestado Prianista, Tomás
Ruiz, y el mismo Salomón Cámara, que no pisó jamás el bote por el fraude
zedillista a la Lotería, a dife-rencia de sus colaboradores que sólo cumplían
sus órdenes, la van a salvar de la cárcel a la que tam-bién la quieren enviar
algunos senadores y sena-doras. Salomón Cámara es el arquitecto del de-
sastre de la Lotería. Con él y no sólo con Laura tronó como globo. Tomás Ruiz
podrá maquillar todos los números que quiera, pero en buen tiem-po no
logrará que la gente vuelva a comprar bole-tos. La venta de lotería cayó en
picada con Lau-ra Valdés. ¿Creerá Fox que cambiando directores de la
Lotería Nacional, en una ceremonia semi-privada, sin importancia, actuada
con cínica lige-reza, sin ninguna explicación seria, la ciudadanía va a olvidar
que por mantener la impunidad de Salomón Cámara y la loquera de su esposa
Marta Sahagún, todo un presidente de la República ha permitido la
desintegración de la secular institu-ción mexicana para la asistencia pública?

www.manu-dornbierer.com.mx”

129.- Del contenido del artículo mencionado en el hecho que antecede, se


desprende que las acusaciones en contra de la parte demandante vertidas por la
parte demandada, han tenido impacto en su autora en consideración a lo
siguiente:

En él su autora afirma que el Partido México Posible fue diseño mío y que soy
amigo de la Fundación Nacional para la Democracia y de la Agencia Central de
Inteligencia de los Estados Unidos de América. En este sentido, puede advertirse
que la autora de este artículo recoge, actualiza y afirma como ciertas, algunas de
las principales acusaciones que la parte demandada ha lanzado en mi contra
desde hace ya algunos años y que causan daño a mi honor y reputación.
111

Las acusaciones de referencia pueden encontrarse principalmente en las


publicaciones y en otras cartas mencionadas en los hechos 29, 37, 40, 55, 57, 60,
72, 77, 80, 85, 91, 94, 99, 104, 107, 118 y 120, de fechas 19 de abril, 10 de mayo,
13 de mayo, 6 de septiembre, 21 de octubre y 12 de diciembre, todas de 2001; 25
de febrero, 25 de abril, 3 y 15 de mayo, 28 de julio, 11 y 25 de noviembre, todas
de 2002, y 18 y 19 de mayo, 29 de junio y 21 de septiembre, todas de 2003,
respectivamente, en tanto que en ellas la parte demandada se refiere a mí como
persona vinculada y patrocinada por la Fundación Nacional para la Democracia, a
la que considera una agencia de espionaje relacionada con la Agencia Central de
Inteligencia, así como en los hechos 72, 99, 107 y 118, correspondientes a las
fechas 25 de febrero y 25 de noviembre, ambos de 2002, y 19 de mayo y 29 de
junio, todos de 2003, toda vez que en ellas, la parte demandada se refiere a mí
como creador o dirigente del Partido México Posible.

130.- La parte demandada dirigió una carta al semanario “La Jornada”, misma que
fue publicada en ese diario el 15 de agosto de 2004, reconociendo su autoría, bajo
el título “La NED, instrumento de EU contra Venezuela”, la cual se acompaña a la
presente demanda como anexo 18.

131.- La carta que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:

“La NED, instrumento de EU contra Venezuela

Querida Carmen: Una de las agencias que Estados Unidos ha utilizado para
desestabilizar al gobierno del presidente Hugo Chávez en Venezuela es la
Fundación Nacional para la Democracia (NED, por sus siglas en inglés).
Diarios como The New York Times (25 de abril), La Jornada (26 de abril) y The
Boston Globe (18 de agosto) documentaron en 2002 la asistencia financiera y
logística de la NED a líderes del fallido golpe de Estado en ese país.
Posteriormente, la NED ha seguido apoyando a quienes buscan hacer
ingobernable a Venezuela y revocar el mandato de Chávez en el referéndum
del próximo domingo.

Creada por Ronald Reagan en 1983 para realizar abiertamente operaciones


antes reservadas a la CIA, la NED tiene un amplio expediente de espionaje e
intervención contra gobiernos que dejaron de ser útiles a Estados Unidos o
que son contrarios a sus intereses, así como de infiltrar ONG, partidos y
movimientos nacionalistas y de izquierda.

En México, la NED ha financiado a ONG de observación electoral y derechos


humanos, especialmente a Alianza Cívica y la Comisión Mexicana en Defensa
y Promoción de los Derechos Humanos, las cuales reciben también dólares
del Departamento de Estado. Una reseña de los objetivos de la NED en
México y de las organizaciones que ha financiado puede consultarse en
Masiosare, suplemento dominical de La Jornada, 13 de mayo de 2001, y en la
columna Los Nuevos Demócratas, del mismo suplemento, 29 de junio de
2003.

En varias ocasiones se ha pedido a Sergio Aguayo, Mariclaire Acosta y otros


dirigentes de ONG que han establecido estrechos vínculos con la NED que
entreguen a instituciones de investigación como la UNAM o El Colegio de
México su correspondencia con dicha agencia. De esta manera, estudiantes,
investigadores y reporteros podrán analizar lo que pretende realizar la NED en
el país. Se han negado a hacerlo. ¿Qué ocultan? ¿A qué le temen?

Esperemos que la NED y sus patrones de Washington sean derrotados por el


pueblo de Venezuela este domingo. Ojalá, también, que las ONG mexicanas
de observación electoral y derechos humanos tengan la congruencia y el valor
civil de adoptar un código de transparencia y rendición de cuentas a la
ciudadanía, que incluya hacer públicas su relación y correspondencia con
agencias nefastas como la NED.

Primitivo Rodríguez Oceguera”

132.- Del contenido de la carta mencionada en el hecho que antecede, se


desprenden las siguientes acusaciones en contra de la parte demandante:
112

A partir de que asevera que la Fundación Nacional para la Democracia posee un


amplio expediente de espionaje e intervención contra gobiernos que dejaron de
ser útiles a los Estados Unidos de América o que son contrarios a sus intereses, y
de afirmar que se especializa en infiltrar organizaciones no gubernamentales,
entre otros actores, así como de calificarla de agencia nefasta, la parte
demandada relata que esa Fundación ha financiado a Alianza Cívica, junto con el
Departamento de Estado de los Estados Unidos de América, reenviado inclusive a
dos artículos de su autoría para dar cuenta de la información que en su opinión
demuestra los objetivos que tiene esa Fundación en nuestro país, oportunamente
comentados respectivamente en los hechos 40 y 118 de la presente demanda,
para inmediatamente después acusarme de haber establecido estrechos vínculos
con dicha Fundación y de que mi supuesta correspondencia con ella, de hacerse
pública, serviría para averiguar lo que esa Fundación pretende realizar en México,
que si se analiza todo el texto de este artículo, pudiera ser desestabilizar al
gobierno y buscar la ingobernabilidad del país, como parece sugerir la parte
demandada ha sucedido en Venezuela, con lo que hace recaer en mi persona el
desprestigio de colaborar con una agencia de tan cuestionable reputación, por lo
menos desde la perspectiva que defiende la parte demandada en este juicio.

A estas alturas, pudiera parecer innecesario reiterar que se trata de las mismas
acusaciones provenientes de la parte demandada, las cuales pacientemente se
han narrado –y leído– a lo largo de esta demanda, y que la misma actualiza cada
vez que escribe un artículo y en él cita sus escritos pasados, si no fuera porque
resulta conveniente hacer notar a su Señoría que la única diferencia es que esas
falsas acusaciones ahora quedan insertadas en esta carta aprovechando el
contexto de una elección en Venezuela, sobre la cual ni siquiera la parte
demandante para ese tiempo había emitido opinión alguna y sin que la parte
demandada mostrara ningún reparo en el hecho de que para ese momento yo
estaba alejado de Alianza Cívica y de cualquier actividad de observación electoral.

No obstante, esa actualización de las acusaciones vertidas desde un principio por


la parte demandada, es útil para reiterar que es falso que de cualquier manera sea
dependiente de la Fundación Nacional para la Democracia, como es falso que
esté al tanto de lo que ella pretenda realizar en México. En este sentido, debe
hacerse notar a su Señoría que todas estas falsedades, la parte demandada las
presenta como hechos incontrovertibles y que dice fundarlas en el análisis veraz y
objetivo de ciertos textos, pero sin que ello se haya demostrado fehacientemente.

133.- La parte demandada dirigió una carta al semanario “Proceso”, misma que
fue publicada en ese diario el 22 de agosto de 2004, “Más acerca de Estados
Unidos y la NED”, la cual se acompaña a la presente demanda como anexo 42.

134.- La carta que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:

“PROCESO, # 1451 22 de agosto de 2004

Más acerca de Estados Unidos y la NED

Señor director:

Felicito a la reportera Sanjuana Martínez por su excelente artículo Sobornos


de Washington publicado en Proceso 1450, donde da cuenta del
financiamiento de agencias estadunidenses como la Fundación Nacional para
la Democracia (NED por sus siglas en inglés), a promotores del fallido golpe
de estado en Venezuela y del referéndum revocatorio que tuvo lugar el pasado
15 de agosto en ese país. Por creerlo de interés público agrego la siguiente
información sobre la NED.

El 31 de marzo de 1997, The New York Times publicó un reportaje de


primera plana sobre operaciones de injerencia y desestabilización practicadas
por la NED y la CIA en diversas partes del mundo contra gobiernos que
habían dejado de ser útiles a Estados Unidos o que eran contrarios a sus
intereses. El mismo diario dio a conocer, el 25 de abril de 2002 la asistencia
113

logística y financiera de la NED a los líderes del golpe contra el gobierno del
presidente Hugo Chávez, y lo propio hizo el periódico The Boston Globe el
siguiente 18 de agosto.

Años antes, la NED había creado en Nicaragua la red Vía Cívica para
combatir al gobierno sandinista, y en Panamá, la Cruzada Cívica, dirigida
contra el gobierno de Manuel Antonio Noriega y los herederos del
nacionalismo impulsado por Omar Torrijos.

En México la NED ha financiado desde mediados de los años noventa a


diversas ONG de observación electoral y derechos humanos, particularmente
a la Alianza Cívica y a la Comisión Mexicana para la Defensa y promoción de
los Derechos Humanos, según consta en sus informes anuales
(www.ned.org).

Sería de utilidad pública que Sergio Aguayo, Mariclaire Acosta y otros


dirigentes de ONG que aceptaron el dinero de la NED entregasen a
instituciones de investigación, como la UNAM o El Colegio de México, los
archivos de su correspondencia con dicha agencia. De esta manera
estudiantes, investigadores y periodistas podrían analizar el papel que la NED
ha jugado en nuestro país.

Atentamente
PRIMITIVO RODRIGUEZ OCEGUERA
Distrito Federal”

135.- Del contenido de la carta mencionada en el hecho que antecede, se


desprenden las siguientes acusaciones en contra de la parte demandante:

En este documento la parte demandada me acusa nuevamente de haber aceptado


dinero de la Fundación Nacional para la Democracia, ignorando insistentemente y
de forma por demás maliciosa, que en ningún momento el financiamiento que
recibía Alianza Cívica fue decidido de manera unilateral por mí, sino que ese tipo
de decisiones se adoptaban colegiadamente, así como que nunca los recursos
entregados a Alianza Cívica estuvieron en mi control ni mucho menos a mi
disposición. Asimismo, vuelve a acusarme de que mi supuesta correspondencia
con dicha Fundación podría esclarecer el papel que ha jugado en México, como si
yo fuera partícipe en la adopción de las actividades que realiza en nuestro país.
También es de notar, que por el contexto en que vierte sus acusaciones, la parte
demanda pretende exhibirme como cómplice de una organización que promueve
maniobras injerencistas y de desestabilización, según su perspectiva, en contra de
gobiernos que han dejado de ser útiles al gobierno estadounidense.

Al respecto, debido es recalcar que esta actualización de las acusaciones vertidas


desde un principio por la parte demandada, es útil para reiterar que es falso que
yo sea un agente al servicio de los intereses norteamericanos, como es falso que
de cualquier manera sea dependiente de la Fundación Nacional para la
Democracia, al igual que es falso que esté al tanto de lo que ella pretenda realizar
en México, como por último es falso que haya recibido dinero de ella. El hecho de
que la parte demandada me acuse de ser un agente de la inteligencia
norteamericana constituye una expresión en sí misma maliciosa que denota con
claridad su intención de ofenderme y desprestigiarme en público. En este sentido,
debe hacerse notar a su Señoría que todas estas falsedades, la parte demandada
las presenta como hechos incontrovertibles y que dice fundarlas en el análisis
veraz y objetivo de ciertos textos, pero sin que ello se haya demostrado.

136.- La obsesión que tiene la parte demandada en contra mía, la ha llevado a


dirigir un correo electrónico al Director del periódico “El País”, con fecha 31 de
agosto de 2004, mismo que fue reenviado por John Carlin a la parte demandante,
y del cual se acompaña una impresión a la presente demanda como anexo 43.

Lo anterior le consta a la parte demandada.


114

137.- El correo electrónico que se menciona en el hecho que antecede es del


tenor siguiente:

“Fecha: Tue, 31 Aug 2004 20:32:14 +0200


De: “John Carlin” jcarlin903@aol.com
Asunto: Re: De Sergio Aguayo
A: “silvio ortiz” qas_47@yahoo.com.mx

Llegó esto al diario hoy. No se publicará, but fyi…

CartasDirector@elpais.es

Agrego la siguiente información sobre la controvertida agencia Fundación


Nacional para Democracia (NED, por sus siglas en inglés) a la entrevista que
hizo John Carlin a Sergio Aguayo (El País, Edición Internacional, 28 de agosto
de 2004).

Aguayo estableció una cercana relación con la NED como dirigente de la ONG
de observación electoral, Alianza Cívica, financiada desde su creación en
1994 por esa agencia. Posteriormente, la NED lo premió (1995) y llevó a la
India (1999) y Brasil (2001) para formar el Movimiento Mundial por la
Democracia. En Brasil, Aguayo fue electo miembro del Comité Coordinador
de dicho Movimiento, mismo que dirige la NED desde sus oficinas en
Washington.

El diario The New York Times (31 de marzo, 1997) e investigaciones


realizadas en los años 90 por instituciones norteamericanas como The Inter-
Hemispheric Resource Institute, The Committee on Hemispheric Affairs y The
Cato Institute revelaron que la NED fue creada por el presidente Ronald
Reagan en 1983 para realizar operaciones de intervención, antes reservadas
a la CIA, contra gobiernos que habían dejado de ser útiles a los Estados
Unidos o eran contrarios a sus intereses, dando ejemplos al respecto.

Recientemente, The New York Times (25 de abril, 2002), The Boston Globe
(18 de agosto del mismo año), el diario La Jornada (23 de agosto, 2004) y el
semanario Proceso (15 de agosto, 2004), estos últimos editados en México,
dieron cuenta del financiamiento y asesoría de la NED a dirigentes del fallido
golpe de Estado de Venezuela y a promotores del referéndum revocatorio del
mandato de Hugo Chávez.

En varias ocasiones se ha pedio públicamente a Sergio Aguayo entregue a El


Colegio de México, donde enseña, los archivos de su correspondencia con la
NED. De esta manera, estudiantes, investigadores y periodistas podrían
analizar el papel que dicha agencia ha jugado en México. No lo ha hecho.
Por el contrario, Aguayo se incomoda y busca desacreditar a quienes
cuestionamos sus vínculos con la NED.

Primitivo Rodríguez Oceguera


Tehuantepec 247-201, Colonia Roma Sur, 06760 México, DF. Tel. 5574-0831

Clave de credencial de elector: RDOCPR44222316H900

Pasaporte # 98370038380”

138.- Del contenido del correo electrónico mencionado en el hecho que antecede,
se desprenden las siguientes acusaciones en contra de la parte demandante:

Este documento resulta interesante porque confirma la obsesión de la parte


demandada por desprestigiarme y ofenderme ante cualquier medio público que
me entrevista. Como ya es costumbre, la parte demandada basa sus acusaciones
en mi contra a partir de presentar como hechos incontrovertibles basados en
diversas fuentes periodísticas y de investigación, lo que únicamente se
corresponde con sus personales y desfavorables opiniones sobre la Fundación
Nacional para la Democracia, exhibiéndome como una persona con una relación
cercana a dicha Fundación, y respaldando tal aseveración en mi participación en
Alianza Cívica, organización financiada en parte por esa Fundación, así como en
115

que ésta me premió y me ha llevado a la India y a Brasil para que participe en el


Movimiento Mundial por la Democracia, el cual desde la perspectiva de la parte
demandada se encuentra dirigido por aquella Fundación, como si esas
circunstancias obedecieran a una especie de retribución hacia mi persona a
cambio de alguna acción de mi parte, todo lo cual, continuando con el peculiar
punto de vista de la parte demandada demuestra que mis vínculos con la citada
Fundación me han puesto a su servicio, y que si publicara mi supuesta
correspondencia con ella, podría conocerse el papel que ha jugado en México.

Al respecto, debe recalcarse que es falso que cualquier relación que hubiera
podido mantener con la Fundación Nacional para la Democracia, haya significado
que pudiera estar involucrado en supuestas operaciones de intervención o
espionaje realizadas por ella a favor del gobierno estadounidense. En este
sentido, debe hacerse notar a su Señoría que esta falsedad, la parte demandada
la presenta como un hecho incontrovertible que dice fundar en el análisis veraz y
objetivo de ciertos textos, pero sin que ello se haya demostrado fehacientemente.
De igual forma, también resulta revelador reparar en la malicia con la que se
desenvuelve la parte demandada, puesto que su acusación principal la pretende
fundar en el financiamiento que ha recibido Alianza Cívica por parte de la
Fundación Nacional para la Democracia, financiamiento que se decidía
colegiadamente y nunca por una resolución unilateral de mi parte, o bien, en que
se me ha premiado o en que he participado en el Movimiento Mundial por la
Democracia, como si tales circunstancias conllevaran irremediablemente la
pérdida de autonomía en mis acciones y mi rendición a intereses norteamericanos.
De cualquier manera, no sobra reiterar que al recurrir a dichas expresiones, la
parte demandada me ha ofendido, ha afectado mi honor, mi reputación y me ha
causado un desprestigio frente a los demás, al acusarme frente al público de ser
un agente al servicio de aquella Fundación y de los intereses norteamericanos.

139.- Particularmente preocupante me ha resultado el alcance que ha obtenido la


campaña de la parte demandada, al conocer que sus ideas aparecen reproducidas
en una carta dirigida a Joaquín Estefanía, Director de la Escuela de Periodismo de
“El País”, de fecha 31 de agosto de 2004, escrita por Guillermo Ibarra Ramírez, en
su calidad de Coordinador General de Comunicación y Proyectos de la Comisión
Nacional de los Derechos Humanos, carta que fue puesta a mi atención gracias a
John Carlin, la cual se acompaña a la presente demanda como anexo 44.

140.- La carta que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:

“México, D. F. a 31 de agosto de 2004.

Señor Don Joaquín Estefanía


Director de la Escuela de
Periodismo de El País
P r e s e n t e.

Señor Director:

Sorprende que un gran periódico como “El País” haya dedicado una página
completa para presentar el sábado 28 a sus lectores en México un trabajo de
John Carlin que –de acuerdo con los géneros del periodismo profesional- no
es un reportaje, ni es una nota informativa, ni es tampoco la opinión de quien
hace una semblanza de un personaje de la vida pública; más bien la pieza
resulta un híbrido de todo, como corresponde a un escrito tan apologético
hecho desde la más acrítica e indefensa admiración del devoto.

Durante mucho tiempo, los mexicanos consideramos como propio de las


deformaciones de un sistema político setentón el honrar a personajes de la
vida política, principalmente políticos, erigiéndoles monumentos en vida e
imponiendo su nombre a escuelas, calles y avenidas. La realidad es que ellos
mismos se autopromovían de esa manera o hacían vista gorda ante tales
expresiones de hagiografía política, lisonja, chabacanería, ofensa pública y
mal gusto personal. Como lector y suscriptor de “El País” creí estar vacunado
en contra de tales calamidades, pero me equivoqué.
116

La pieza escrita por Carlin es el monumento verbal más acrítico dedicado a la


glorificación de un personaje de la actualidad pública mexicana como Sergio
Aguayo, quien me imagino se habrá sonrojado al verse retratado de esa
manera como uno de los “Héroes Mexicanos”.

Sin comentar otros elementos que los mencionados por Carlin, resulta –según
la pieza que nos asestó “El País”- que Aguayo, el héroe, creó la observación
electoral; creó el Partido México Posible y ahora, impulsado por “una misión
histórica” dará en los próximos 20 años una buena batalla para que la
democracia funcione en México.

Actualmente servidor público en la CNDH creo y sostengo que Aguayo es un


investigador y luchador social sujeto a escrutinio público, discutido y polémico
sobre todo a partir de que decidió buscar posiciones políticas y de poder,
olvidándose de los adarmes de pureza que él adjudica a la pertenencia a la
sociedad civil, a la que una y otra vez regresa cuando sus afanes políticos no
le resultan.

Hace tiempo que Aguayo es criticado por quienes, habiendo sido sus
compañeros en actividades tan importantes como las de Alianza Cívica, se
mostraron inconformes con la poca transparencia en los vínculos
desarrollados por él y por algunos otros dirigentes con organizaciones como la
National Endowment for Democracy, NED, la cual como se sabe, ha sido
utilizada por distintas administraciones norteamericanas para desestabilizar
gobiernos constituidos que no son de su agrado y para financiar otras
acciones muy poco cívicas.

Varias veces la nota de John Carlin subraya el activismo político de 40 años


de su personaje. Si, como Aguayo mismo dice, regresó a México en 1977, de
sus estudios en el extranjero, y suponiendo que desde el momento de su
arribo está dedicado a tal activismo, entonces tendríamos, en el mejor de los
casos, una carrera política de 27 años, o un activismo académico de 40, lo
cual es muy distinto. Y no es por regatear méritos, sino por simple
congruencia con el nombre de las cosas y las fechas.

Le agradezco la publicación de la presente y lo saludo atentamente.

Guillermo Ibarra Ramírez


Coordinador General de Comunicación y Proyectos”

141.- Del contenido de la carta mencionada en el hecho que antecede, se


desprende que las acusaciones en contra de la parte demandante vertidas por la
parte demandada, han tenido impacto en su autor en consideración a lo siguiente:

Afirma que he desarrollado vínculos ocultos y poco transparentes con la


Fundación Nacional para la Democracia, organización que el autor de esta carta
considera ha sido utilizada por el gobierno de Estados Unidos de América para
desestabilizar gobiernos constituidos que no son de su agrado y para financiar
otras acciones muy poco cívicas.

En este sentido, no puede dejar de resaltarse que, haciendo mención tácita de la


parte demandada, como mi compañero de actividades en Alianza Cívica, el autor
de esta carta recoge, actualiza y afirma como ciertas, algunas de las principales
acusaciones que la parte demandada ha lanzado en mi contra desde hace ya
algunos años y que causan daño a mi honor y reputación.

Las acusaciones de referencia pueden encontrarse principalmente en las


publicaciones y en otras cartas mencionadas en los hechos 29, 37, 40, 55, 58, 60,
72, 77, 80, 85, 91, 94, 99, 104, 107, 118 y 133, correspondientes a las fechas 19
de abril, 10 y 13 de mayo, 6 de septiembre, 21 de octubre y 12 de diciembre, todas
de 2001; 25 de febrero, 25 de abril, 3 y 15 de mayo, 28 de julio, 11 y 25 de
noviembre, todas de 2002; 18 y 19 de mayo, 29 de junio y 21 de septiembre, todas
de 2003, y 22 de agosto de 2004, respectivamente, en tanto que en ellas la parte
demandada se refiere a mí como persona vinculada y patrocinada por la
117

Fundación Nacional para la Democracia, organización que califica de agencia de


espionaje e intervención dedicada a la desestabilización de diversos gobiernos.

No está de más reiterarle a su Señoría que este texto es particularmente


trascendente porque proviene de un individuo que ocupa un importante cargo
público en la principal organización gubernamental defensora de los derechos
humanos en nuestro país, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos.
Siendo así, si en ese ámbito se toma con seriedad las afirmaciones de la parte
demandada, si una persona ostentándose como funcionario público del organismo
al que constitucionalmente le está encomendado defender mis derechos humanos,
entre ellos mi derecho al honor, le ha dado credibilidad a, y reproduce y actualiza,
las acusaciones que la parte demandada esgrime en mi contra, el nivel de
desprestigio en contra mía ha alcanzado parámetros preocupantes. De hecho,
esta carta por sí sola bien podría ser un factor suficiente para convencerme de
buscar protección de la justicia y una definición de los derechos enfrentados.

142.- La parte demandada dirigió una carta al periódico “La Jornada”, misma que
fue publicada el 31 de agosto de 2004, bajo e título “Las ONG deben rendir
cuentas a la ciudadanía”, la cual se acompaña a la presente demanda como
anexo 45.

143.-La carta a que se hace mención en el hecho anterior es del tenor siguiente:

“Las ONG deben rendir cuentas a la ciudadanía

Señora directora: Tienen razón las organizaciones civiles en demandar a la


Comisión de Derechos Humanos del Senado de la República transparencia en
la elección del ombudsman nacional (La Jornada, 27 de agosto). Así lo exige
el importante papel que el ombudsman cumple en la defensa de la dignidad
humana.

Las organizaciones civiles deben también honrar la transparencia y rendición


de cuentas a la ciudadanía. Por ejemplo, casi ninguna de las ONG de
derechos humanos y observación electoral que tienen residencia en la ciudad
de México informa en sus sitios de Internet sobre las fundaciones o
instituciones gubernamentales que financian sus programas.

Esto último es crucial dado que ciertas agencias estadunidenses tienen como
fin patrocinar a ONG para promover los intereses del gobierno de Estados
Unidos, en ocasiones, a través de medios que violan la soberanía y las leyes
del país en que operan. Tal es el caso de la Fundación Nacional para la
Democracia (NED, por sus siglas en inglés), especializada en infiltrar y
combatir gobiernos, partidos y movimientos nacionalistas y de izquierda.

Por ejemplo, los diarios The New York Times (25 de abril de 2002), The
Boston Globe (18 de agosto del mismo año), La Jornada (23 de agosto de
2004) y el semanario Proceso (15 de agosto de 2004) documentaron el apoyo
financiero y logístico de la NED a quienes han buscado derrocar al presidente
Hugo Chávez en Venezuela.

Desde hace años, la NED patrocina a ONG como Alianza Cívica y la Comisión
Mexicana en Defensa y Promoción de los Derechos Humanos. Incluso, el
gobierno de George W. Bush financia directamente a ambas nada menos que
¡para combatir el fraude electoral y defender los derechos humanos!

Por ello, sería muy sano que se creara un Observador Ciudadano de


Organizaciones Civiles, una de cuyas tareas sería exigir la adopción de un
código de transparencia y rendición de cuentas a la ciudadanía.

Primitivo Rodríguez Oceguera”

144.- Del contenido de la carta transcrita en el hecho que antecede, se


desprenden lo siguiente:
118

Este escrito sirve a la perfección para ilustrar a su Señoría que la parte


demandada no cesará en su campaña de desprestigio en contra mía, acudiendo a
la misma estrategia con la que se inicio este recuento de hechos. Como es debido
recordar, el primer documento proveniente de la parte demandada transcrito en
esta relación en el hecho número 10 le sirvió para poner en duda la buena
reputación de Alianza Cívica a fin de que en posteriores ocasiones pudiera
enfocarse en mi persona. En el que se acaba de referir en el hecho antecedente
de nueva cuenta la parte demandada se centra en atacar a Alianza Cívica
tomando como pretexto sus supuestos vínculos con la Fundación Nacional para la
Democracia, a fin de hacerla aparecer como cómplice de lo mismo de lo que
acusa a esa Fundación, básicamente, de estar al servicio de intereses
intervencionistas del gobierno de los Estados Unidos de América que violan la
soberanía y las leyes de nuestro país, y que pretenden combatir movimientos
nacionalistas y de izquierda. El cuadro estará completo si se considera lo dicho
por la parte demandada en el discurso que se relata en los hechos 148 y 149
siguientes, con lo que claramente se podrá apreciar que al final, todas las
acusaciones falsas, ofensivas y que de forma maliciosa vierte la parte demandada
en contra de Alianza Cívica o cualquier otro, las termina por apuntar en mi contra.

Como sea, debe hacerse notar a su Señoría que todas estas falsedades, la parte
demandada las presenta como hechos incontrovertibles y que dice fundarlas en el
análisis veraz y objetivo de ciertos textos, pero sin que ello se haya demostrado.

145.- Con todo, mi anterior decisión se reafirmó al leer un artículo de una


defensora de derechos humanos a la que respeto profundamente, texto aparecido
en la dirección electrónica www.cronica.com.mx y fechado el 15 de septiembre de
2004, escrito por María Teresa Jardí, bajo el título “¿Reelegir o no al ombudsman
actual?”, el cual se acompaña a la presente demanda como anexo 18.

146.- El artículo que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:

“¿Reelegir o no al ombudsman actual?

María Teresa Jardí

En noviembre próximo concluye el primer periodo de José Luis Soberanes al


frente de la CNDH. No me simpatiza Soberanes y quienes han seguido mis
colaboraciones lo saben. Me parece del todo incorrecto que ex empleados de
la PGR trabajen en la CNDH. Pero eso no me ofusca al grado de llevarme a
desconocer que, dentro de lo que es el gobierno foxista, Soberanes ha sido un
buen ombudsman. Personalmente creo que Soberanes tendría que continuar
al frente de la CNDH a lo largo del próximo periodo, incluso en función de que
se pueda dar continuidad a algunos de sus programas y porque aquello de
que más vale malo conocido que bueno por conocer, no vaya a ser que acabe
al frente de esa institución un empleado de la CIA. Realmente me alarma,
aunque cada vez que se acerca el cambio de periodo suceda lo mismo, que
quede como ombudsman alguno de los que ya se promueven para encabezar
esa Institución, inclusive diciendo que se descartan. Muy grave sería, con el
entreguismo gubernamental que impera, que quedará de ombudsman quien
ha recibido dinero del Departamento de Estado de Norteamérica. Me alarma
que se olvide que hoy gobierna la ultraderecha que ya ha dado al traste con la
Suprema Corte de Justicia. En fin. Diversas de las principales organizaciones
defensoras de los derechos humanos han manifestado ante el Senado su
interés en que en el proceso de elección se opte por la persona más
calificada, comprometida y que demuestre mayor conocimiento en la
protección de los derechos humanos. Consideran que así se contribuirá a
demostrar el compromiso por parte de los legisladores con la consolidación de
una cultura de derechos humanos, condición fundamental de las democracias.
Y solicitan al Senado de la República, que garantice, respetar, desde luego, el
cumplimiento de lo establecido por la Ley, como requisitos que debe llenar
aquel a quien elijan para ocupar el cargo de presidente de la CNDH.
Requisitos a los que las ONGs han añadido, entre otros, los siguientes: No ser
dirigente de organizaciones religiosas o militares por lo menos desde un año
antes del momento de presentar su candidatura y contar con un amplio
conocimiento de las organizaciones no gubernamentales así como
119

reconocimiento de aquellas dedicadas a la defensa y promoción de los


derechos humanos, como son los derechos indígenas, económicos, sociales,
culturales, políticos, ambientales, sexuales y reproductivos en el país y tener
una actitud abierta y con plena atención a las necesidades que en materia de
derechos humanos planteé la sociedad civil organizada. Requisitos atendibles
todos y con los que no creo que nadie pueda estar en desacuerdo. Pero
insisto en que creo que Soberanes reúne los requisitos para continuar al frente
de la CNDH y el acento habría que ponerlo en los requisitos que también
deben llenar los otros funcionarios de la CNDH. Nota al margen sobre la
comparecencia de Gil Díaz. A los muchos adjetivos que los legisladores
usaron para definir al actual secretario de Hacienda, yo añadiría: tan finito. Lo
que me lleva a preguntarme dónde se perdió en nuestro país la hombría y la
pasión política. Tan saben que mienten los foxistas neoliberales que nada de
lo que les puedan decir los legisladores los conmueven. Van preparados con
la coraza que se han puesto como los únicos privilegiados a costa del hambre
de millones. En privado, claro, deben quitarse la careta, para reírse de la
República.”

147.- Del contenido del artículo mencionado en el hecho que antecede, se


desprende que las acusaciones en contra de la parte demandante vertidas por la
parte demandada, han tenido impacto en su autora en atención a lo siguiente:

Antes que todo, debido es aclarar que en conversación telefónica que tuve con la
autora de este artículo, me confirmó que a pesar de no mencionarme
expresamente en el texto, sí se refería a mí en su escrito porque había tomado en
cuenta las acusaciones de la parte demandada y porque no había visto ninguna
de mis aclaraciones. Con ello queda claro que al aceptar como válidas las
acusaciones provenientes de la parte demandada en contra mía, la autora de este
artículo no tuvo inconveniente en referirse a mí como empleado de la Agencia
Central de Inteligencia, así como de afirmar que he recibido financiamiento del
Departamento de Estado del gobierno de los Estados Unidos de América.

En este sentido, no puede dejar de resaltarse que la autora de este artículo


recoge, actualiza y afirma como ciertas, algunas de las principales acusaciones
que la parte demandada ha lanzado en mi contra desde hace ya algunos años y
que causan daño a mi honor y reputación.

Las acusaciones de referencia pueden encontrarse principalmente en las


publicaciones y en otras cartas mencionadas en los hechos 29, 37, 40, 55, 58, 60,
72, 77, 80, 85, 91, 93, 99, 107, 118 y 133, correspondientes a las fechas 19 de
abril, 10 y 13 de mayo, 6 de septiembre, 21 de octubre y 12 de diciembre, todas de
2001; 25 de febrero, 25 de abril, 3 y 15 de mayo, 28 de julio y 11 y 25 de
noviembre, todas de 2002; 19 de mayo y 29 de junio, ambas de 2003, y 22 de
agosto de 2004, respectivamente, toda vez que la parte demandada afirma tanto
que la Fundación Nacional para la Democracia me patrocina, como que ella se
encuentra estrechamente vinculada con la Agencia Central de Inteligencia y con el
Departamento de Estado de los Estados Unidos de América.

148.- La parte demandada compareció ante la Comisión de Derechos Humanos


del Senado de la República y ante ella pronunció un discurso, con fecha 11 de
octubre de 2004, cuyo texto íntegro se adjunta a esta demanda como anexo 46.

149.- El discurso que se menciona en el hecho que antecede es del tenor


siguiente:

“Versión estenográfica de la comparecencia de los Organismos no


gubernamentales, ante la Comisión de Derechos Humanos del Senado de la
República, presidida por el C. Senador Miguel Sadot Sánchez Carreño,
celebrada en la Sala “Miguel Ramos Arizpe” el 11 de octubre de 2004, a las
17:00 horas.

[…]

-El Maestro Primitivo Rodríguez Oceguera, de la Coalición de los Derechos


Políticos de los Mexicanos en el Extranjero: Muy buenas tardes, señor
120

Presidente de la Comisión de Derechos Humanos, senador Sadot Sánchez


Carreño.

[…]

Apartado tercero.

Las organizaciones Civiles de Derechos Humanos, deben hacer suyas la


transparencia y rendición de cuentas a la ciudadanía.

El buen desempeño de la CNDH depende en gran medida de una relación


seria y productiva con las organizaciones civiles de derechos humanos,
establecidas en la capital y en el resto del país.

Al la vez, para que este vínculo rinda importantes frutos en el cuidado y


promoción de los derechos, es necesario garantizar la transparencia y
rendición de cuentas a la ciudadanía, por parte de las organizaciones civiles
de derechos humanos.

Habrá que agradecer a la Comisión Mexicana de Derechos Humanos, a los


Centros de Derechos Humanos Fray Francisco de Victoria, el Padre Agustín
Pro-Juárez, a la Red Todos los Derechos para Todos y a Fundar, el
importante papel que jugaron en transparentar el proceso del Senado para
elegir al Presidente de la CNDH.

Con todo, estas organizaciones no hicieron transparente su propio proceso


para elegir a las candidatos y candidatos a la Presidencia de la CNDH.

Perdieron con ello la oportunidad de educar a la sociedad en la importancia


que para el buen desarrollo del país tiene la CNDH, y de convocarla para
haber acordado juntos prioridades de trabajo y criterios en la selección de
candidatas y candidatos.

De ahí que las personas impulsadas por estas ONGS llegan


independientemente de su calidad y capacidad personal, con un vicio de
origen; el haber sido seleccionados en un proceso que no se realizó de cara a
la sociedad, ni siquiera con la participación abierta del conjunto de
organizaciones civiles que se ocupan de los derechos humanos en los estados
de la República.

Alicia Elena Pérez Duarte, ha dado ha conocer abiertamente su candidatura a


la Presidencia de la CNDH. Señalando la trayectoria profesional que la avala,
así como la visión que tiene de la misma y el programa de acción que llevaría
a cabo.

Con base en ello y teniendo en cuenta el papel determinante que tendrá la


CNDH, el hacer del respeto y aprecio de la dignidad humana el fundamento de
la relación entre gobernantes-ciudadanos, recomiendo a Alicia Elena Pérez
Duarte, para que forme parte de la terna que esta comisión presentara al
pleno del Senado.

Sin lugar a dudas, es necesario reformar y fortalecer a la CNDH. Lo es,


igualmente, que para bien de la sociedad y de ellas mismas las
organizaciones civiles de derechos humanos, adopten un código de ética y
transparencia, que incluya dar a conocer a la ciudadanía el origen, monto y
propósito de los fondos nacionales y extranjeros que reciben, así como la
correspondencia que mantienen con las instituciones gubernamentales y
organizaciones civiles que las financian.

Este último es de particular importancia, debido a que algunas de las ONGS


más conocidas en el campo de los derechos humanos, han recibido o reciben
actualmente financiamientos de agencias, como la Fundación Nacional para la
Democracia, NET, por sus siglas en inglés.

Esta agencia, de acuerdo de reportajes de diarios, como el de New York


Times, de Boston Glob, La Jornada y el Semanario Proceso, entregó dinero y
asesoró a dirigentes del fallido golpe de estado en Venezuela, y de los
121

intentos posteriores para hacer ingobernable a ese país y sacar a Hugo


Chávez de la Presidencia.

Dicho reportaje sobre la NET; confirmaron lo que habían revelado con


anterioridad centros de investigaciones estadounidenses, como Inter
Hemisferio Risoc, Institut de Comerce Hemisferic Ferts, Decato Institut, y el ex
agente de la CIA, Phillips Payit, que la NET fundada por el Presidente Ronald
Reagan, en 1983, es una agencia especializada en operaciones de
inteligencia y desestabilización contra gobiernos y movimientos contrarios a
los Estados Unidos.

Dejó copia, señor Presidente, a esta Comisión de los documentos citados y


otros similares, incluyendo una ponencia de Sergio Aguayo, sobre el
financiamiento que la ONGs Alianza Cívica ha recibido de la NEG.

Esta agencia norteamericana premió a Aguayo en 1995 y lo hizo en el 2000


miembro del Consejo Coordinador del Movimiento Montiel por la Democracia
creado y dirigido por ella.

Las principales son de derechos humanos en la ciudad de México, han


recibido copia también de estos documentos, así como la invitación de mi
parte que hoy reitero al debatir su contenido públicamente.

Senador Sadot Sánchez Carreño, Presidente de la Comisión de Derechos


Humanos y senadores miembros de la misma:

Agradezco de nuevo haberme invitado a participar en esta importante


audiencia sobre las CNDH, la existencia de la Comisión de Derechos
Humanos del Senado de la República, es un componente indispensable del
balance institucional y de la relación con la ciudadanía para impulsar el
respeto a la divinidad de toda mexicana y mexicano y de cuántas mujeres y
hombres se encuentran en territorio nacional.

Son ustedes una garantía republicana para fortalecer y orientar a la CNDH,


por ello, deseo sigan adelante en la valiosa labor que realizan a favor de los
derechos humanos.

Muchas gracias.

-El C. Presidente Sadot Sánchez Carreño: Muchas gracias, maestro y como lo


comentábamos le agradecemos sus reflexiones, las propuestas, su
participación, que desde luego enriquece todo este proceso que estamos
llevando a cabo en el Senado de la República.

Tenga la seguridad de que será una de las referencias para las evaluaciones
que tomará esta Comisión.”

150.- Del contenido del discurso mencionado en el hecho que antecede, se


desprenden las siguientes acusaciones en contra de la parte demandante:

En el marco de una comparecencia ante la Comisión de Derechos Humanos de la


Cámara de Senadores, la parte demandada incluyó como parte de su discurso
ante los senadores, el tema de la transparencia y la rendición de cuentas de las
organizaciones no gubernamentales dedicadas a los derechos humanos,
criticando que ciertas de esas organizaciones que contribuyeron a transparentar el
proceso de elección del titular de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos
seguido ante el Senado de la República, no transparentaron sin embargo sus
propios procesos internos para respaldar las candidaturas de su elección a la
presidencia de ese organismo autónomo, con lo que los posibles candidatos por
ellas apoyados, en su opinión, poseen un vicio de origen que pone en tela de juicio
su calidad y capacidad personal, al haber sido seleccionados en un proceso
interno cubierto por la opacidad y no abierto al resto de esas organizaciones. Las
inconsistencias de la parte demandada se ilustran porque ella misma no explica el
proceso interno que siguió la organización que supuestamente representaba, lo
cual deja ver que en realidad lo que buscaba con estos dichos era tener un
pretexto para llevar sus acusaciones en contra mía a este importante foro.
122

Inmediatamente después, la parte demandada retoma su conocido discurso


acerca de la necesidad de que se transparenten los vínculos que las
organizaciones no gubernamentales dedicadas a los derechos humanos
mantienen con las instituciones y organizaciones de las que reciben
financiamiento, sea éste de origen nacional o extranjero, y en ese marco, inicia
sus ataques a las organizaciones no gubernamentales que han recibido
financiamiento de la Fundación Nacional para la Democracia, a la que califica en
esta ocasión de agencia especializada en operaciones de inteligencia y
desestabilización contra gobiernos contrarios a los Estados Unidos de América,
para lo cual ocupa el ejemplo que desde su perspectiva confirma esta información,
sus supuestas operaciones de financiamiento y asesoría a dirigentes del fallido
golpe de estado en Venezuela y sus intentos para hacer ingobernable ese país.

Es en ese momento cuando la parte demandada se refiere a mí expresamente y


menciona el financiamiento que Alianza Cívica ha recibido de esa Fundación, que
he sido premiado por ella y que me hizo miembro del Consejo Coordinador del
Movimiento Mundial por la Democracia que ella ha creado y dirige, según su
personal punto de vista, lo cual, si se analiza el contexto, si se consideran sus
afirmaciones anteriores inmediatas, le sirve para acusarme por asociación de lo
mismo que ha acusado a la Fundación Nacional para la Democracia. Es así que
esta estrategia la ocupa la parte demandada para acusarme de servir a intereses
intervencionistas y desestabilizadores al servicio del gobierno estadounidense,
aseveración que en sí misma constituye una expresión maliciosa, ofensiva y que
me desprestigia en una instancia de la importancia del Senado de la República.

En este sentido, no debe escapar a su Señoría que el texto de esta


comparecencia nuevamente confirma la disposición de la parte demandada para
atacar mi derecho al honor, mi reputación incluida, en cualquier escenario y bajo
cualesquiera circunstancias, porque sin que viniera al caso si se considera el tema
del foro en el que participaba, ni la índole de su actividad, pues su presencia la
justificaba para respaldar una candidatura a la presidencia de la Comisión
Nacional de los Derechos Humanos, entrega documentación en contra mía nada
menos que al Senado de la República, obteniendo por respuesta del senador que
preside la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara de Senadores, una por
demás preocupante para mi persona: “Tenga la seguridad de que será una de las
referencias para las evaluaciones que tomará esta Comisión.”

A todo esto, evidenciada la continuidad de las acusaciones de la parte demandada


y que en todas las ocasiones que me ataca sigue un patrón de conducta similar,
no puede dejarse de recalcar que resultan falsas sus aseveraciones en contra
mía, como falsa es su acusación central, pues yo no dependo de, ni defiendo
supuestos intereses intervencionistas y de espionaje, sea que se imaginen
provenientes de la Fundación Nacional para la Democracia o del propio gobierno
estadounidense. En este sentido, debe hacerse notar a su Señoría que esta
falsedad, la parte demandada la presenta como un hecho incontrovertible que dice
fundar en el análisis veraz y objetivo de ciertos textos, pero sin que ello se haya
demostrado fehacientemente. De igual forma, hay que repetir que es revelador
reparar en la malicia con la que se desenvuelve la parte demandada, puesto que
su acusación principal la pretende fundar en el financiamiento que ha recibido
Alianza Cívica por parte de la mencionada Fundación, financiamiento que se
decidía colegiadamente y nunca por una resolución unilateral de mi parte, o bien,
en que se me ha premiado o en que he participado en el Movimiento Mundial por
la Democracia, como si tales circunstancias conllevaran irremediablemente la
pérdida de autonomía en mis acciones y mi rendición a intereses norteamericanos.
Al respecto, tampoco soba reiterar que dichas acusaciones son en sí mismas
ofensivas, maliciosas y que me han desprestigiado ante la Cámara de Senadores.

151.- La parte demandante tuvo conocimiento de un artículo escrito por Manú


Dornbierer, aparecido en el periódico “Diario Monitor”, del 13 de noviembre de
2004, bajo el título “Los videos y los amigos de Marta”, el cual se acompaña a la
presente demanda como anexo 18.
123

152.- El artículo que se menciona en el hecho que antecede es del tenor siguiente:

“SATIRICOSAS -Manú Dornbierer- 13 de noviembre 2004

LOS VIDEOS Y LOS AMIGOS DE MARTA

Es natural que Marta Sahagún, vocera de Vicente Fox cuando fue candidato y
unas semanas presidente, haya tendido muchos lazos y establecido muchas
complicidades en los medios de comunicación. Era su chamba “conchavarse”
a periodistas como Ramón Alberto Garza, exdirector de Reforma, Universal y
Cambio; a Jorge Salomón Cámara, al que salvó de la cárcel por el fraude de la
Lotería Nacional y aprovechando “la asistencia pública” para ungirla a “Vamos
México”; a Sergio Aguayo, que recibe “para promover la democracia” fondos
del Departamento de Estado de USA, entre otros más poderosos.

Pero no es normal ni legal, que se sintiera con derecho a movilizar a


semejante camarilla cuando cambió de condición, de vocera a compañera de
Fox, dando rienda suelta e inmediata a su ambición, fuera de lugar y de
momento, de ser candidata a la presidencia. Su prisa trastornó a todo el
gobierno de su marido y al adelantar casi cinco años la sucesión le impidió al
propio Fox gobernar. Tuvo que dedicarse a la campaña de su mujer,
adoptando ambos la causa de un falso feminismo. El país y sus enormes
problemas quedaron relegados a un segundo plano, con las promesas
olvidadas. Fox se desgastó impulsando y defendiendo a su amada cónyuge.
Quizás el presidente tenía buenas intenciones de hacer algo mejor, a no ser
que ya viniera totalmente maniatado por Salinas /los gringos y Zedillo / los
gringos. Fox no pudo desempeñar la presidencia por la que tantos años
trabajó y ahora... el tiempo se le acabó.

Hoy Marta Fox se calla y pretende hacernos creer que ha controlado su


hermoso sueño, pero ya logró la primera victoria concreta del complot que
capitanea contra Amlo. ¿La innombrable aliada del innombrable? Bejarano,
ahora ex perredista cercano al Jefe de gobierno, está en la cárcel, el PRD
quedó muy tocado y dividido, y el complot sigue adelante, puesto que la
señora Fox cuenta con el apoyo de un presidente, dos partidos políticos, así
como muchos aliados eclesiásticos, legisladores, judiciales, empresariales,
burocráticos, mediáticos y de todos los empleados de su marido, hasta de
alguno que pudiera ser su rival en la carrera presidencial. Pero...

EL MEJOR AMIGO DE MARTA ES BERNARDO GOMEZ, el hombre que


manda en Televisa y que ocupa el despacho del legendario Tigre Azcárraga
(quien debe estar frito en el otro mundo pues detestaba al individuo). Según
impecable información son ellos dos los originales productores y directores de
la aburrida pero terrible telenovela videográfica cuyo primer capítulo “Cuando
el millonario Ahumada le da 50 mil dólares a René Bejarano”, ha roto todos los
records en la televisión mexicana.

Lo malo es que fue el único capítulo que les interesó promover aunque tienen
muchos otros, a saber “Ahumada y los hijos de Marta”, “Ahumada y el
hermano de Fox”, “Ahumada cooperando a la campaña de Cárdenas Batel”, y
la última gran novedad: “Ahumada-Robles y Madrazo-Beltrones”

En efecto, “recordó” hace unos días Manlio Fabio, presidente de la Cámara de


Diputados (en el pasado también productor del video que destapó a Zedillo
como único posible sucesor del sacrificado Colosio del que era jefe de
campaña), que él también tuvo el gusto de conocer a Ahumada, en compañía
de Roberto Madrazo, presidente del PRI y candidato a la presidencia del 2006.
Ambos jerarcas priistas se reunieron con la apasionada Rosario Robles (qué
cursis cartas, señora, le exhibe Reforma en internet) y su novio, repartidor de
los millones ¿de quién? Quien sabe... Los muy abusados procuradores tanto
el federal MacPedo de la Concha, como el capitalino Bátiz no se han
preocupado de investigar de que político manantial le brotó tanto dinero al Ché
Ahumada. Todo mundo pregunta ¿dónde quedaron los 50 mil dólares que tan
golosamente se embolsaba en la TV Bejarano? Pero nadie pregunta de
donde venían EN REALIDAD los ríos de dinero con los que Carlos Ahumada
corrompió a tantos ingenuos políticos mexicanos.
124

POBRE BEJARANO. No lo conozco y no me enteré a fondo de su historia por


no soportar más el video con el que desquició a la sociedad mexicana
Bernardo Gómez, quien después de su chiste, emigró al parecer con todo y
familia al rojo país del norte. Con tan abundante cuanto confusa
desinformación durante meses y con tanta entrevista que al fin le hizo Televisa
(y TV Azteca y hasta el “terrible” Canal 40, que la imitan), haciéndose la
arrepentida y la imparcial cuando ya Bejarano estaba prácticamente la lona y
todo estaba listo para la puntilla, nunca me quedó claro si es bueno, malo o
todo lo contrario.

Pero de lo que sí no hay la menor duda es que culpable o no, a René


Bejarano Gómez y Marta le hicieron cumplir la misión de superchivo expiatorio
de todo el régimen actual, por los 45 mi dólares del maletín negro, 500 mil
pesos (de aquel momento), que suenan a poca cosa dentro de la danza de
miles de millones fraudulentos de los megacorruptos de esta tan pulcra
democracia: los inauditos millones de dólares del Robaproa, los 1000 millones
de pesos del Pemexgate, los 500 millones, no se sabe si de dólares o de
pesos, de Los Amigos de Fox, los quien sabe cuanto millones de Vamos
México, los otros más del delito electoral de Santiago Creel en su campaña
para Jefe de Gobierno, del 2000, etc.

Lo que sí queda claro es que René Bejarano es el único de los ahumados (o


no) que paga la cuenta, y que mandan al bote para que no vayan otros
muchos de diversos partidos políticos: el bandido del gobernador de Morelos
Estrada Cajigal del PAN, Romero Deschamps, Muñoz Leos y hasta el nuevo
de Pemex, Rosario Robles, Sosamontes, Imaz,Lázaro, entre otros del PRD y
toda la runfla de ladrones priistas a los que Fox había prometido enjuiciar para
acabar con la corrupción y con los que finalmente se alió.

www.manu-dornbierer.com.mx”

153.- Del contenido del artículo mencionado en el hecho que antecede, se


desprende que las acusaciones en contra de la parte demandante vertidas por la
parte demandada, han tenido impacto en su autora en consideración a lo
siguiente:

Esta autora se refiere a mí como periodista relacionado con la señora Marta


Sahagún y como su cómplice y también afirma que recibo fondos del
Departamento de Estado de Estados Unidos de América. En este último sentido,
no puede dejar de resaltarse que la autora de este artículo recoge, actualiza y
afirma como ciertas, algunas de las principales acusaciones que la parte
demandada ha lanzado en mi contra y que causan daño a mi honor y reputación.

Las acusaciones de referencia pueden encontrarse principalmente en las


publicaciones y en otras cartas mencionadas en los hechos 29, 37, 40, 55, 58, 61,
72, 77, 80, 85, 91, 94, 99, 107, 118 y 133, correspondientes a las fechas 19 de
abril, 10 y 13 de mayo, 6 de septiembre, 21 de octubre y 12 de diciembre, todas de
2001; 25 de febrero, 25 de abril, 3 y 15 de mayo, 28 de julio y 11 y 25 de
noviembre, todas de 2002; 19 de mayo y 29 de junio, ambas de 2003, y 22 de
agosto de 2004, respectivamente, toda vez que la parte demandada afirma tanto
que la Fundación Nacional para la Democracia me patrocina, como que ella se
encuentra estrechamente vinculada con la Agencia Central de Inteligencia y con el
Departamento de Estado de los Estados Unidos de América.

154.- La parte demandante tuvo conocimiento de un artículo escrito por Juan


Manuel Zaragoza y José Moisés Hernández Zamora, titulado “Cómo participamos
en política las ONG de Morelos”, aparecido en el libro coordinado por Medardo
Tapia, Morgan Quero y David Moctezuma, bajo el título “Los rituales del cambio.
Transformaciones del régimen y cultura política en Morelos”, editado por el Centro
Regional de Investigaciones Multidisciplinarias, Universidad Nacional Autónoma
de México, en 2004, el cual se acompaña a la presente demanda como anexo 47.

155.- Las páginas 255 a 257 del libro que se menciona en el hecho que antecede
son del tenor siguiente:
125

“LOS PROBLEMAS DE LAS ONG MORELENSES EN SU MISIÓN:

EL FINANCIAMIENTO

El CED, así como las organizaciones civiles de más tradición en el estado, se


han caracterizado por el tipo de relación particular que establecen con las
agencias financiadoras. Se ha buscado definir con cuáles sí y con cuáles no
se debe establecer relación, así como los problemas sociales que se abordan.
El tipo de relación con los organismos que nos apoyan es de pares. Esta
relación se ha vuelto tensa por momentos, pues los fondos que ellas obtienen
son de origen gubernamental, así como de ciudadanos y ciudadanas de esos
países interesados en apoyar a los países pobres. Sin embargo, su visión y
explicación de las causas de la pobreza muchas veces son impactados por
noticias como la que difundió el gobierno de Carlos Salinas de Gortari.
Particularmente su gobierno difundió internacionalmente nuestra entrada como
país al primer mundo. Esta noticia generó desinterés por la cooperación
internacional con las ONG mexicanas, sobre todo con aquellas que nos
pronunciamos por acciones diferentes a las filantrópicas solamente.

Para la llamada cooperación internacional, el problema de la pobreza se ha


vuelto el tema principal. En el CED creemos que es importante realizar
programas que enfrenten esta situación intolerable, pero la idea de formación
de sujetos, hombres y mujeres que terminen definitivamente con ella es la idea
guía de nuestro quehacer.

Existen organizaciones civiles mexicanas que reciben fondos del organismo


norteamericano National Endowment for Democracy, dependiente del
congreso norteamericano. Este organismo apoyó la contrainsurgencia de
Nicaragua, la oposición cubana en Miami y ahora apoya la promoción de la
democracia en México. Ha habido preguntas públicas de ciudadanos sobre
este financiamiento a pesar de que las organizaciones tienen toda la libertad
de ejercer los fondos entregados.

Después del último ascenso de las ONG con los problemas de medio
ambiente en el país y el conflicto en Chiapas, las organizaciones sociales se
empezaron a multiplicar intensamente. Surgieron organizaciones que parecen
estar a la espera de recibir recursos del gobierno a través de la Secretaría de
desarrollo Social (SEDESOL) o directamente del Banco Mundial o del Fondo
Monetario Internacional. Estas organizaciones establecen sus programas a
partir del financiamiento que logran y de alguna manera se vuelven
dependientes de esos recursos.

La administración de los recursos recolectados por las ONG también es un


tema central. Generalmente, cuando se reciben fondos para movimientos
sociales o proyectos como el de nuestras asociaciones, si no se tiene
experiencia en el manejo se pueden producir fácilmente problemas. Ha
habido casos en los que las directivas de estas ONG se han beneficiado de
instalaciones, terrenos, mobiliario que originalmente era para proyectos
sociales.

Finalmente, para mucha gente de la sociedad es sospechoso que recibamos


fondos internacionales. Esto al parecer tiene que ver con la tradición
nacionalista de México. Existe además la idea de que el trabajo social es
gratuito o de poco valor económico.

Se requiere avanzar en formas más democráticas de organización como ONG


para predicar la organización democrática de la sociedad civil con el ejemplo.
Aquí está también presente el desafío que se han planteado las ONG
morelenses: transformar caudillismos por liderazgos democráticos. El caso de
CIDHAL con una dirección colectiva, es una buena referencia para retomar la
experiencia y buscar alternativas.

Aunque destacamos que el ambiente laboral que caracteriza a nuestras


organizaciones es de respeto y fraternidad, el trato con la población también
es característico por ese respeto y atención a lo que ella opina y piensa.
Aunque no faltan las confrontaciones con ciudadanos, hombres casi siempre,
que pretenden abusar del espacio plural que hemos construido”
126

156.- Del contenido de la página 255 del artículo mencionado en el hecho que
antecede, se desprende que las acusaciones en contra de la parte demandante
vertidas por la parte demandada, han tenido impacto en sus autores en
consideración a lo siguiente:

Estos autores se refieren al financiamiento que organizaciones civiles mexicanas


han recibido de la Fundación Nacional para la Democracia, institución a la que
ellos consideran dependiente del congreso estadounidense y un apoyo de causas
tan contrastantes como la contrainsurgencia de Nicaragua, la oposición cubana en
Miami, o bien, la promoción de la democracia en México. Asimismo, hacen
mención de la existencia de preguntas públicas de ciudadanos sobre este
financiamiento. En este sentido, no puede dejar de resaltarse que, haciendo
referencia tácita de la parte demandada como ciudadano que ha hecho preguntas
públicas sobre el financiamiento de la Fundación Nacional para la Democracia a
organizaciones civiles mexicanas, los autores de este artículo recogen, actualizan
y afirman como ciertos, algunos de los principales argumentos que la parte
demandada ha utilizado como fundamento de las acusaciones que ha lanzado en
mi contra desde hace tiempo y que causan daño a mi honor y reputación.

Las argumentos de referencia pueden encontrarse principalmente en las


publicaciones y en otras cartas mencionadas en los hechos 10, 29, 32, 37, 40, 55,
58, 61, 72, 77, 80, 85, 91, 94, 99, 104, 106, 118, 121 y 133, que corresponden a
los días 2 de junio de 1997; 19 y 23 de abril, 10 y 13 de mayo, 6 de septiembre, 21
de octubre y 12 de diciembre, todos de 2001; 25 de febrero, 25 de abril, 3 y 15 de
mayo, 28 de julio, 11 y 25 de noviembre, todos de 2002; 18 y 19 de mayo, 29 de
junio y 21 de septiembre, todos de 2003, y 22 de agosto de 2004,
respectivamente, en las cuales, la parte demandada se refiere a la Fundación
Nacional para la Democracia como agencia de espionaje e intervención,
dependiente del gobierno estadounidense y con funciones desestabilizadoras de
gobiernos que se oponen a los intereses de los Estados Unidos de América.

157.- La parte demandante tuvo conocimiento de un libro escrito por Earl Shorris,
bajo el título “The Life and Times of Mexico”, editado por la W. W. Norton &
Company, en 2004, el cual se acompaña a la presente demanda como anexo 48.

158.- La traducción oficial de las páginas 682 a 691 del libro que se menciona en
el hecho que antecede, aclarando que la transcripción que aquí se realiza coloca
las notas de pie de página al final del texto, es del tenor siguiente:

“HUESOS COLORADOS

En los últimos meses antes de terminar este libro, visite a dos intelectuales del
mundo de la política mexicana. [1] Platicamos respecto al país, sus partidos y
las implicaciones para el futuro de México. Ellos representan dos senderos
para la política mexicana: la reforma de lo antiguo y el nacimiento de lo nuevo,
un sistema bipartidista modelado con base en los Estados Unidos y un
sistema multipartidista volátil, más similar al de Italia. Ninguno de ellos está
satisfecho con el status quo. Aunque ambos son catedráticos, bien versados
en historia, política y cultura tanto estadounidense como mexicana, los estilos
y orígenes de ambos son muy distintos, casi tan opuestos como su política.
Uno de ellos, un activista de derechos humanos bien conocido, Sergio
Aguayo, ha sido muy importante para crear un nuevo partido político: México
Posible. El otro, Alejandro Carrillo Castro, descrito a menudo como un priísta
de hueso colorado [2] debido a su lealtad al partido, recién había sido
nombrado Director del Instituto Nacional de Administración Pública (INAP),
una institución privada que funciona como una combinación de la Escuela
Kennedy de Gobierno en Harvard y la Escuela Woodrow Wilson de Asuntos
Públicos e Internacionales en Princeton, aunque sin ser el equivalente de
ninguna de las dos. Cada año, seis mil académicos, funcionarios
gubernamentales y aspirantes políticos pasan la totalidad o parte del año en el
INAP. El instituto mexicano está relacionado con el Instituto Internacional de
Ciencias Administrativas de Bruselas, donde Carrillo es miembro del comité
académico. Durante muchos años, el INAP fue considerado el centro de
capacitación del PRI (Salinas lo encabezó alguna vez), pero ahora parece ser
127

menos partidista, pues Carrillo intenta integrar al INAP más estrechamente


con alguna universidad. La administración de Fox ayudó a aclarar el futuro del
instituto cuando Ramón Muñoz, el jefe de la oficina presidencial de Fox para la
innovación en el gobierno puso fin al financiamiento gubernamental del INAP.
Carrillo lo describió como un revés saludable, pues ahora el INAP estaría en
libertad de ser mucho más parecido a las escuelas de postgrado de
administración pública en países democráticos.

Debe puntualizarse que tanto Aguayo como Carrillo han estado sujetos a una
crítica feroz en uno u otro momento, Carrillo mucho más debido a que ha
detentado altos cargos gubernamentales, incluyendo el nada envidiable
puesto de comisionado de inmigración, el cual le ganó una reputación de
represor de periodistas y de activistas de derechos humanos en Chiapas.
Quienes no tenían visas adecuadas recibían la orden de abandonar el país.
Carrillo, fieramente nacionalista, desde hace mucho tiempo ha argumentado
que la diferencia entre las reglas estadounidenses y mexicanas para las visas
era injusta. [3] Aguayo no ha escapado a la crítica con base en las relaciones
entre los Estados Unidos y México, especialmente en la Jornada, el periódico
que él contribuyó ayudó a fundar.

La impresión mayoritaria es que Carrillo representa al "nuevo PRI", en tanto


que el presidente nacional del partido, Roberto Madrazo Pintado, representa a
los "dinosaurios", los viejos y adinerados traficantes del poder que amasaron
fortunas extraídas de la organización corporativista del partido y el país. Se
rumora que los "dinosaurios" pertenecían a una sociedad secreta, el Grupo
Atlacomulco, 14 hombres, incluyendo al papá de Madrazo, que gravitaban en
torno al finado Carlos Hank González. Hank insistió en que el grupo nunca
existió sino como un lugar de reunión para viejos (y muy ricos) amigos, pero
nadie acepta su desmentido. Aguayo representa un enfoque académico hacia
la política. Su partido, México Posible, es estudioso, ingenuo, quijotesco,
clasemediero y no familiarizado con el poder fuera de los pasillos de la
academia.

Antes de tomar posesión como director del INAP, Carrillo fue catedrático de
derecho, ex-cónsul de México en Chicago, director de inmigración [4] y
participó activamente en la presidencia de López Portillo. Es hijo de un hombre
que era amigo de Lázaro Cárdenas y nieto de un hombre que trabajó
estrechamente con Álvaro Obregón. Carrillo es autor más notablemente de El
Dragón y el Unicornio (Aguilar, 1999), una investigación de la historia social,
sicológica, filosófica y mítica de la cultura mundial. El cuerpo del libro
curiosamente excluye a la cultura mesoamericana, pero Carlos Fuentes
subsanó la omisión en una larga introducción dedicada a Coatlicue, la diosa
madre de la cultura omitida.

Aguayo no es sólo un catedrático de relaciones internacionales en el Colegio


de México, sino que ha impartido cátedra en la Universidad John Hopkins, de
la cual obtuvo un doctorado en relaciones internacionales, así como en la
Universidad de Berkeley. Es autor de varios libros y tiene una larga trayectoria
como defensor de los derechos humanos y la democracia. Ha recibido la
medalla al mérito del gobierno de los Estados Unidos – un premio patrocinado
por la Fundación Nacional para la Democracia (NED). Aguayo manifiesta que
creció en un barrio pobre de Guadalajara, escapándose hacia la vida
académica mediante una beca en el Colegio de México, mientras que muchos
de sus amigos del barrio eligieron políticas radicales de izquierda, uniéndose a
movimientos guerrilleros.

Los dos hombres llegaron a su posición de intelectuales desde orígenes


opuestos, pero ambos son de inteligencia refinada. Carrillo Castro es más
nacionalista, más receloso de los Estados Unidos que Aguayo, quien expresa
que no hay que intimidarse por el poder de los Estados Unidos. Ambos tienen
hijos mayores y están casados con mujeres extraordinarias. La esposa de
Aguayo, Eugenia, una española de Cataluña, es agente de columnistas de
periódicos. Carrillo está casado con Talina, una estrella de la radio y la
televisión de México. Eugenia Aguayo de prejuicio contra ella pues su cabello
es rubio y tiene un ligero acento catalán. Talina es lo suficientemente famosa
para ser reconocida en la calle, otro tipo de problema. Carrillo es más literario,
en tanto que Aguayo es más académico. Carrillo ha ocupado posiciones de
poder, lo cual le ha ayudado a evitar las ilusiones políticas. Aguayo es proclive
128

a hacer los pronunciamientos ostentosos de los amateurs. Carrillo tiene una


posición más desahogada, tal vez "rico" sería la palabra correcta. Aguayo vive
con un sueldo de catedrático. Carrillo y yo platicamos en español, aunque su
inglés es impecable. Aguayo se expresó en inglés, con un acento muy
marcado pero correctamente.

Antes de nuestra conversación, Sergio Aguayo tuvo la amabilidad de


ofrecerme un vaso de vino blanco en un delicado vaso largo especial para ello.
Eugenia Aguayo preparó una cena ligera y bromeó un poco con su marido,
como si quisiera tranquilizarlo. Me pregunté si él sabía que yo había leído que
un reemplazo de la CIA había sido la fuente de los fondos para parte de su
trabajo en pro de la democracia. [5] Preguntarle a un hombre si los fondos de
su trabajo provienen de dicha fuente es como preguntarle si golpea a su
esposa. O bien él dice que la golpea o la historia es que "X niega que golpea a
su esposa". Si esto fuera cierto o no importaba poco. ¿Había algo en México
–desde la propiedad de sus bancos principales hasta la elección de sus
funcionarios gubernamentales más importantes y hasta el precio del maíz—
de lo que los Estados Unidos no tuvieran el control? General Motors seguía
siendo uno de los empleadores privados más grandes que pagaban un sueldo
de subsistencia. Las maquiladoras bajo propiedad estadounidense habían
representado casi todo el crecimiento en empleos en el sector manufacturero
durante la última década. El dinero y poder de los Estados Unidos habían
determinado la historia de México desde que se apoderaron de la mitad del
país en 1848. Sería una gran sorpresa si los Estados Unidos no hubieran
invertido en el trabajo de Aguayo, probablemente no por razones morales sino
por el interés de la estabilidad de su flanco sur.

Carrillo me pidió que lo acompañara con un vaso de tequila, lo cual acepté y


su esposa Catalina puso dos vasos y una botella nueva de Herradura
(reposado) en la mesa. Es una vieja tradición en México, una prueba de
hombría e intenciones y tuve la buena suerte de haber disfrutado la prueba
muchas veces, aunque no siempre con un tequila tan fino. Carrillo y yo nos
echamos un trago, el primero de muchos otros y empezamos nuestra
conversación. Eran las once en punto de la mañana.

Después, durante una comida en Polanco un domingo en la tarde, le pregunté


a la cuñada de Carrillo, Marcella Gavaldón, si él siempre empezaba a tomar
antes del medio día. Ella se rió y me contestó "el no toma". [6]

AGUAYO

Sergio Aguayo vive en un cómodo departamento en condominio en un


pequeño edificio en San Jerónimo, en la parte sur de la ciudad. Él es de risa
fácil, pero de repente se pone serio. Luego, se inclina hacia delante y sus
anteojos sin marco dominan su cara. Su campo es el estudio de las actitudes
de los Estados Unidos hacia México. Sin embargo, es el futuro de México el
que tenemos en mente y el partido político que él ayudó a fundar. El partido
por sí mismo no debe ser tomado en serio, pero es un partido cuyos directivos
han tenido cierta influencia en México, tanto en el mundo académico como en
diversas organizaciones cívicas y de derechos humanos. No resulta del todo
claro por qué fundaron un partido político, pero existe el precedente de
académicos que han tenido éxito en el área política en México. Después de
todo, el PAN fue fundado en 1939 por Manuel Gómez Morín, el ex-rector de la
UNAM, quien fue su Presidente durante diez años, mientras el partido luchaba
por sobrevivir.

Igual que el PAN se vio atacado por sus conexiones con los sinarquistas
derechistas radicales durante el transcurso de sus primeros años, México
Posible y su cofundador Aguayo han sido atacados en el periódico de
izquierda La Jornada por ser un instrumento de una ala política del gobierno
de los Estados Unidos, la Fundación Nacional para la Democracia. Para la
NED fue un uso juicioso de la influencia. Era improbable que México ganara
alguna elección, al menos no en el corto plazo, pero para el gobierno de los
Estados Unidos era una oportunidad de cortejar a catedráticos universitarios y
a profesionistas en México y tal vez para tener alguna conexión hasta el
interior del gobierno en México. El propio Aguayo dijo que se le habían
ofrecido dos puestos en el gobierno de Fox; uno en relaciones exteriores y el
129

otro en un puesto interno. Dijo que rechazó ambas ofertas porque no estaba
de acuerdo con las ideas conservadoras del gobierno de Fox.

Aguayo recordó los inicios del partido: "Patricia Mercado, Presidenta de


México Posible y un grupo de amigos y yo desayunamos en una cafetería
unos pocos día después de que fue electo el Presidente Fox. A medida que
empezamos a hablar de la elección nos dimos cuenta de que
representábamos a varios sectores de la población, aunque no a todos.
Éramos los huérfanos de los partidos políticos mexicanos, pues éstos no
cumplían lo prometían, como por ejemplo el PRD, el cual está lleno de gente
decente que no ha podido organizarse a sí misma. Teníamos credibilidad pero
ningún partido político que representara nuestros intereses. Por lo tanto. ¿Por
qué no fundar un partido? La idea de crear un partido de la sociedad civil
había estado latente durante muchos años.

"Ese era el principio. Empezamos a platicar con otras personas, obteniendo


buenas respuestas y nos pasamos un año en cuestiones de organización. En
un principio el partido se llamó Equidad y Ecología, pero pronto nos dimos
cuenta de que el nombre no era muy bueno. Por lo tanto, consideramos tres
mil nombres de partidos políticos, escogimos cinco y organizamos grupos de
enfoque para evaluarlos. Como miembros de organizaciones no
gubernamentales hemos aprendido a combinar el conocimiento especializado
con nuestras actividades, lo cual es característico de las ONGs. Elegimos el
nombre de inmediato y el voto fue unánime. Perú Posible era el modelo.

"Tuvimos éxito en obtener suficientes firmas en una petición para ser


reconocidos como un partido político legítimo por el Instituto Electoral Federal,
así como financiamiento del mismo. Creo que en el 2003 llegaremos al
Congreso. Estamos en evolución. En la actualidad somos urbanos,
clasemedieros, con una escolaridad superior al promedio y experiencia en
organizaciones sociales – intelectuales. Creo que noventa por ciento de
nosotros tenemos educación universitaria."

Él describió a México Posible como un partido que utilizaba el psicoanálisis,


entre otras técnicas, para entrenar a su gente en resistir la frustración. "Lo que
nos distingue del resto es que no tenemos temor a experimentar. Tenemos un
seminario para líderes sobre cómo crear autoestima y cómo manejar la
crítica."

Como casi todos los que participan en la política en México, él definió a su


partido al caracterizar a los demás: "El PRI es una vieja máquina política; muy
profesional; el partido de grupos organizados – corporativista.

"El PAN es el partido ciudadano mejor organizado, integrado por individuos,


ciudadanos involucrados en un partido. Tiene los mejores estatutos y es un
partido muy sólido.

"El PRD es el partido más importante de la izquierda en la historia mexicana,


pero al observar los estatutos nos damos cuenta que ha incorporado el
germen de su propia desunión. Asimismo, no pueden resolver las diferencias
culturales entre los grupos debido a que la izquierda está hecha de diversas
culturas políticas". Él señaló que el PRD no sabía qué hacer con la idea de
liderazgo moral, que podría no funcionar en el mundo de la política práctica.
Era una admisión conmovedora, pues el liderazgo moral claramente era su
meta.

Y la oferta de México Posible: "Podemos prometer que somos diferentes y


sabemos dónde concentrar nuestros recursos. Una ONG [la mayoría de los
miembros de México Posible eran o catedráticos o empleados de
organizaciones no gubernamentales o ambos] es como una guerrilla, aquí y
allá, y cuando usted es una guerrilla, usted elige dónde atacar."

Sergio Aguayo rápidamente señaló los que consideró principales problemas


de México: "Hay tres contradicciones en México: (una) elecciones libres sin
instituciones democráticas funcionales, (dos) pobreza, y (tres) el hecho de que
seamos vecinos de los Estados Unidos, lo cual se incorpora normalmente en
la planeación para el futuro. Castañeda ha escrito que los involucrados con los
Estados Unidos serán los líderes en México." Castañeda, quien es uno de los
130

amigos de Aguayo, habla del carácter dulce y quijotesco del partido,


deseando, al igual que la mayoría de los demás mexicanos sofisticados, que
hubiera un lugar para dicha partido en México. ¿Habría sido Castañeda el
candidato presidencial de México Posible? La cuestión es académica, pues el
partido no alcanzó los votos suficientes para conservar su registro.

Pero luego se volvió muy difícil averiguar qué es lo que el partido proponía
hacer respecto a las "tres contradicciones". La plataforma es vaga, basada en
la sociedad civil, una idea que se origina con el filósofo alemán Hegel. [7]
Aguayo no discutiría la plataforma económica de México Posible, ni siquiera
bajo presión. Es una postura curiosa para un hombre que afirma estar en la
izquierda. Respondió la pregunta de la misma forma cada vez que fue
planteada: "Estamos desarrollando programas dirigidos a grupos específicos
en virtud de que ése es el tamaño de nuestro partido. Si prosperamos,
tendremos que desarrollar un programa económico para todo el país."

Lo que parecía interesarle más respecto a México Posible se centraba en el


gobierno local, en el desarrollo de un proceso en el que toda la comunidad
participara en cuestiones tales como la decisión sobre el presupuesto, el cual
podría ser un proceso interesante en un país centralista como México, donde
la mayor parte del dinero para los gastos estatales y locales proviene del
gobierno federal. La forma en que México Posible lograría su idea de gobierno
directo no resultaba clara: "No me refiero a un gobierno en el que todos
decidan respecto a todo; ésa es una utopía. No funciona; no es eficiente".
Pero luego prosiguió diciendo que "incorporarían a la gente para que decida
con nosotros, tomando las decisiones económicas a nivel local." [8]

La plataforma de México Posible incluye todas las palabras de moda de la


política moderna: ambientalismo, el derecho de las mujeres a decidir sobre su
propio cuerpo, desarrollo sustentable, justicia social (lo que significa terminar
con la pobreza), educación, igualdad entre los géneros, derechos de los
homosexuales, derechos humanos, participación, menos criminalidad y así
sucesivamente. Esta contiene una curiosa sección que dice: "Deseamos dejar
atrás los programas que solamente perpetúan la dependencia de los pobres
de sus "benefactores" políticos". Posteriormente dice que México Posible no
desea repartir el pastel de manera distinta, sino crear un pastel más grande.
Los dos tablones de la plataforma podrían haber sido escritos para los
antiguos Republicanos de Rockefeller en los Estados Unidos. Es difícil saber
qué es lo pretenden Aguayo y México Posible. El partido intenta atraer a
todos, excepto a los homófobos, los torturadores y los antiabortistas. Es
progresista en temas sociales, pero no en la cuestión política fundamental de
la redistribución del ingreso. De hecho, no hay ningún partido político
importante en México dispuesto a considerar la redistribución de la riqueza...
esa idea se esfumó con tata Lázaro y no es probable que regrese pronto.

En lo referente a las relaciones internacionales, Aguayo siguió el concepto de


su amigo Castañeda respecto a una actitud más asertiva hacia los Estados
Unidos, aunque admitió que eso sería difícil en virtud de la cuestión del
desequilibrio entre la única superpotencia mundial que queda y una nación en
desarrollo. Al mismo tiempo, como todos los demás, él favoreció un contexto
más global para México.

Entonces, recurrió al ensueño informado: "En este mundo uno está atado a
un orden económico que se le impone. Uno puede hacer campaña sobre una
plataforma, pero al asumir el poder se percata de que del 70 al 80% de su
economía está en las manos del Banco Mundial, así que creo que
eventualmente cuando nosotros (México Posible) crezcamos lo suficiente para
competir por la presidencia, tendremos que proponer un plan que incluya el
patrón mundial. Cualquier programa político que no incluya los factores
externos se está engañando solo.

"México está en una situación peculiar, porque estamos en el TLC y eso ata a
nuestra economía con la de Estados Unidos y Canadá. Reconociendo esta
realidad fundamental, empezaremos con esta nueva política. Tendremos una
política internacionalista."

Entonces, reflexionó sobre lo que había dicho y no pudo menos que reírse de
su propia petulancia. "Entiendo que esto podría sonar demasiado fuerte. Uno
131

debe experimentar. A menos que uno experimente, va a ser difícil atacar los
problemas mexicanos. Incorporaremos ideas que han estado floreciendo por
todo el mundo. Somos parte de la nueva realidad del mundo postmoderno."

México Posible es un partido de soñadores, una cruzada de ingenuos, pero


tiene voz en el debate nacional. Aguayo escribe una columna que aparece en
dieciséis periódicos de México, entre los que se incluye Reforma, un periódico
conservador líder. México Posible pasó su primera prueba cuando fue
reconocido por el IFE. Se enfrentó a otra prueba en las elecciones del año
2003 cuando tenía que obtener el dos por ciento del número total de votos
emitidos para seguir siendo financiado por el IFE. El columnista de periódicos
Graco Ramírez, presidente del PRD en Morelos, donde México Posible
esperaba ganar un escaño en el congreso local teniendo a Aguayo como su
candidato, señaló antes de la elección que México Posible no podría ganar
suficientes votos para seguir obteniendo financiamiento federal. Ramírez,
quien tiende a hablar sin rodeos, es leal a su partido, el cual obtuvo menos del
20% de la votación en Morelos y corría el riesgo de perder algunos de sus
partidarios ante México Posible... pero no muchos.

Actualmente, hay muchos partidos políticos en México, pero únicamente tres


de consideración: PRD, PAN y PRI. Las opciones para el futuro cercano son
convertirse en un país multipartidista, con una legislatura caótica y una serie
de presidentes que representan cada vez a menos votantes, o un sistema
bipartidista, similar al de los Estados Unidos y Gran Bretaña. Sergio Aguayo
prefiere la primera opción, al menos por ahora. ¿Y si México Posible falla?
"Bueno, -- dijo, encogiéndose de hombros, sabiendo que esto era inevitable al
menos para el año 2003 -- soy un académico y regresaré a la docencia."
Mientras tanto, había una cosa que mencionó sin reservas: México Posible no
es un trampolín/pantalla para una campaña presidencial de Jorge Castañeda
en el 2006.". Ese había sido el rumor antes, cuando se formó el partido, pero a
medida que se acercaban las elecciones, el rumor se desvaneció. La gente
había aprendido que los miembros de México Posible eran como los laputanos
de los viajes de Gulliver de Swift, que se perdían en la especulación tan a
menudo que necesitaban que sus sirvientes les golpearan en la boca o en el
oído con una vejiga de cerdo inflada para regresarlos a la realidad.

Las elecciones de 2003 fueron un símil de las vejigas de cerdo de Swift para
México Posible. Graco Ramírez había tenido razón en su evaluación del
partido de catedráticos y soñadores. Al final resultó tener casi tantos
candidatos como votantes. México Posible obtuvo únicamente nueve décimas
de uno por ciento del voto a nivel nacional, menos de la mitad de lo que se
necesitaba para continuar como partido registrado con derecho a obtener
financiamiento del Instituto Federal Electoral. Patricia Mercado, presidenta del
partido, manifestó después de la elección que México Posible continuaría, que
no era un partido de masas sino de ideas. Al escribir en el periódico Reforma
el día 9 de julio de 2003, únicamente tres días después de la elección, Sergio
Aguayo no mencionó a su propio partido. Criticó al PAN por ser tímido, por
tratar de llegar a arreglos con el PRI, por ser el partido de los grandes
empresarios. Asimismo, manifestó que los mapaches del PRI habían vuelto a
las andadas.

Aguayo obtuvo un poco más de 2000 votos en su campaña en Cuernavaca, lo


cual lo colocó casi en último lugar de una larga lista de candidatos a diputados
federales. La inversión del catedrático había sido pequeña y el riesgo
insignificante. Poco tiempo después de la elección, el alto comisionado de las
Naciones Unidas para derechos humanos lo invitó a él y a varios otros a
escribir un informe sobre México. Con ello, estaba de regreso haciendo el
trabajo que más le importaba y, de nuevo, envuelto en un mar de crítica.

[1] Hubo una tercera conversación con Jorge Castañeda, pero no pudimos
pasar más allá de una serie de respuestas "prefabricadas", aunque considero
que ambos lo intentamos. El es un hombre astuto, como debe serlo cualquier
hombre de grandes ambiciones. Con los otros dos sí hubo verdadero diálogo,
pues los cálculos quedaron relegados a un segundo plano. Tal vez Castañeda
pensó que su política conservadora y en pro de la globalización no harían
sintonía conmigo, o que desaprobaría su relación con Salinas y Gordillo.
132

[2] Los huesos colorados son las vértebras ubicadas justamente debajo del
cráneo de una vaca y que sostienen su cabeza erguida.

[3] Los ciudadanos estadounidenses reciben visas sin costo al entrar a


México a través de los aeropuertos y puertos o pueden solicitarlas en los
puentes de cruce internacional. Los mexicanos, incluyendo a Carrillo Castro,
cuando fue nombrado Cónsul General en Chicago, deben pagar una cuota de
cien dólares y esperar hasta seis o más meses para recibir autorización. El
mencionó que había tratado el tema con el embajador estadounidense,
preguntándole por que no había reciprocidad. Cuando les planteó el tema a
los funcionarios mexicanos, la respuesta fue suficientemente clara: Si los
ciudadanos estadounidenses fueran a esperar seis meses y pagar cien
dólares para obtener una visa mexicana, entonces se irían a vacacionar a
otros lugares y México perdería miles de millones de dólares en ingresos por
turismo cada año... El dólar yanqui era invencible... Cuando los ciudadanos
estadounidenses viajaban a Chiapas, ostensiblemente como periodistas o
trabajadores de derechos humanos autodesignados, Carrillo aparentemente lo
consideraba una afrenta a la soberanía mexicana.

[4] Como Director de Inmigración, Carrillo regularizó el estatus migratorio de


dieciocho mil refugiados guatemaltecos que habían huido a México para evitar
ser masacrados por el gobierno guatemalteco. Lo hizo por razones
humanitarias, sabiendo que sus acciones violaban la ley mexicana.
Inmediatamente después presentó su renuncia como director de ayuda a
refugiados. Posteriormente se convirtió en comisionado de inmigración.

[5] Aguayo encabezó Alianza Cívica, la cual fue financiada parcialmente por
un brazo del gobierno de los Estados Unidos, la Fundación Nacional para la
Democracia. Aguayo se desempeñó en un comité directivo de una sección de
la NED.
En el Washington Post del 22 de septiembre de 1991, Allen Weinstein,
fundador y primer presidente de la NED indicó que la organización fue
constituida (en 1984) para hacer abiertamente lo que la CIA había hecho de
manera encubierta. En fechas recientes, la NED recibió una asignación
presupuestal anual de 150 millones de dólares de parte del Congreso de los
Estados Unidos. Este nexo no implica a Aguayo en actividades de la CIA, pero
es una prueba de la participación del gobierno estadounidense en la política
interna de México.
Aguayo se describe a sí mismo como "izquierdista", pero la NED
históricamente ha estado relacionada con la derecha política. Sergio Aguayo y
mi viejo amigo Primitivo Rodríguez, columnista de la Jornada, han tenido una
desavenencia. No sé cuál sea la causa, pero su desacuerdo es público y ha
sido ventilado en los periódicos.

[6] Carrillo mencionó después que no es un abstemio. Disfruta de la comida y


el vino y de un ocasional vaso de tequila. Sin embargo, en México decir que
"alguien toma" significa que "es un borracho".

[7] Dicho de la manera más básica, una sociedad civil es aquella en la que la
gente está en interdependencia, a la vez que mantiene sus derechos
individuales, personales y patrimoniales. El estado estaría integrado por una
serie de organizaciones de gente y estas organizaciones garantizarían que se
cubrieran las necesidades de la gente.

[8] En 1989, la Ciudad de Pôrto Alegre, Brasil, adoptó un sistema de


presupuesto participativo que Aguayo identificó como el modelo para su idea.”

159.- Del contenido de las páginas 682 a 691 del libro mencionado en el hecho
que antecede, se desprende que las acusaciones en contra de la parte
demandante vertidas por la parte demandada, han tenido impacto en su autor en
consideración a lo siguiente:

Este autor hace referencia expresa a las críticas y acusaciones que la parte
demandada ha vertido en mi contra en torno a mi supuesta dependencia del
gobierno estadounidense, e incluso no tiene ningún reparo en reconocer
abiertamente que parte de la información que recibió le fue proporcionada por su
“viejo amigo Primitivo Rodríguez Oceguera”, es decir, la parte demandada, y que
133

concede plena validez a las declaraciones que ella le dio al periódico “La Jornada
de Oriente”, documento en donde se asegura que la Fundación Nacional para la
Democracia estaba indirectamente tras de mí y del Partido México Posible, como
oportunamente se ha referido en el hecho 107 de la presente demanda.

Asimismo, este autor afirma que le sorprendería que los Estados Unidos de
América no hubiesen invertido en mi trabajo por la democracia realizado dentro de
Alianza Cívica, a través de la Fundación Nacional para la Democracia, institución a
la que considera precisamente un brazo del gobierno estadounidense
estrechamente vinculado con la Agencia Central de Inteligencia de ese país.

De igual manera, este autor se refiere a los ataques de los que he sido objeto en
torno a mi participación en el Partido México Posible, el cual fungió, según la parte
demandada, como instrumento de la Fundación Nacional para la Democracia,
institución a la que en esta oportunidad el autor de este libro califica como un ala
política del gobierno de los Estados Unidos de América. De esta forma, el citado
autor aprovecha esta información para sostener que el Partido México Posible
constituía una oportunidad para el gobierno estadounidense de cortejar a
catedráticos universitarios y a profesionistas en México, y tal vez para tener alguna
conexión hasta el interior del gobierno de nuestro país, a través de mí.

En este sentido, puede advertirse que, haciendo mención expresa de la parte


demandada y de las cartas y artículos que ésta ha podido publicar, en específico
en los diarios “La Jornada” y “La Jornada de Oriente”, el autor de este libro recoge,
actualiza y afirma como ciertas, algunas de las principales acusaciones que la
parte demandada ha lanzado en mi contra desde hace ya algunos años y que
causan daño a mi honor y reputación.

Las acusaciones de referencia pueden encontrarse principalmente en las


publicaciones mencionadas en los hechos 29, 37,40, 55, 58, 61, 72,77, 80, 85, 91,
94, 99, 107,118 y 133, correspondientes a las fechas 19 de abril, 10 y 13 de mayo,
6 de septiembre, 21 de octubre y 12 de diciembre, todas de 2001; 25 de febrero,
25 de abril, 3 y 15 de mayo, 28 de julio, 11 y 25 de noviembre, todas de 2002; 19
de mayo y 29 de junio, ambas de 2003, y 22 de agosto de 2004, en tanto que en
ellas, la parte demandada se refiere a mí como agente del gobierno de los
Estados Unidos de América, patrocinado por la Fundación Nacional para la
Democracia, organización que califica de encontrarse estrechamente vinculada a
la Agencia Central de Inteligencia y al Departamento de Estado norteamericanos,
así como en las publicaciones mencionadas en el hecho 107, del 19 de mayo de
2003, en el que la parte demandada afirma que el Partido México Posible, del cual
formé parte, fue financiado y constituyó un instrumento de la Fundación Nacional
para la Democracia, a la que califica de agencia de espionaje e intervención
perteneciente al gobierno de los Estados Unidos de América, para intervenir, en
favor de los intereses norteamericanos, en las elecciones mexicanas.

En definitiva, como es fácil apreciar, este caso en particular ilustra hasta donde
han y pueden llegar a repercutir las actividades de desprestigio en mi contra
provenientes de la parte demandada, puesto que una obra publicada por una de
las editoriales más importantes de los Estados Unidos de América incluye sin
reparo alguno, falsedades sobre mi trabajo. Al respecto, es de hacerse notar que
como este tipo de libros terminan en bibliotecas de ese país y el mundo entero,
ello significa que la campaña de desprestigio iniciada por la parte demandada me
afectará en otros países, cuestión que me resulta particularmente agraviante.

160.- Como último hecho de esta demanda, no conviene dejar pasar la


oportunidad de comentarle a su Señoría que busco la protección de la ley para
enfrentar un acoso sistemático sobre mi honor y reputación, así como para
recuperar la consideración que las personas tenían de mi persona, acoso que
pacientemente se ha expuesto –y leído– en todos los hechos que conforman tal
demanda. Como resulta evidente de esta narración y de esos hechos, en los
últimos años la parte demandada ha difundido una serie de afirmaciones falsas
cuyo propósito es presentarme públicamente en los diversos medios de
134

comunicación referidos en esos mismos hechos, en forma consistente y


permanente, como un empleado o agente de la Fundación Nacional para la
Democracia, de la Agencia Central de Inteligencia, es decir la CIA por sus siglas
en inglés, o del Departamento de Estado de los Estados Unidos de América, en
fin, como una persona al servicio de intereses intervencionistas y de espionaje
norteamericanos. Asimismo, es fácil apreciar que se trata de un esfuerzo
sistemático y deliberado que se mantiene hasta la fecha, que se ha intensificado, y
que con el paso del tiempo ha adquirido mayor resonancia en ámbitos diversos.

Como queda evidenciado, la parte demandada ha presentado sus acusaciones


falsas en contra mía, como si fueran hechos incontrovertibles, los cuales dice
fundar en el análisis veraz y objetivo de ciertos textos, pero sin que en ningún
momento ello se haya demostrado fehacientemente, entre otras, por la simple y
sencilla razón de que resulta falso que se haya demostrado objetiva y claramente
que la Fundación Nacional para la Democracia sea un instrumento al servicio de
los intereses intervencionistas norteamericanos. Como otro ejemplo de esas
falsedades, que además sirve a la perfección para ilustrar la malicia con que actúa
la parte demandada, pueden referirse sus afirmaciones en el sentido de que dirijo
Alianza Cívica y decido unilateralmente aceptar los financiamientos que recibe,
cuando le es claro que ambos hechos resultan falsos, pues en ningún momento
dirigí ni decidí a mi arbitrio nada de eso, como le consta a Martha Pérez Bejarano,
Luz Beatriz Rosales Esteva, Enrique Calderón Alzate y Rogelio Gómez-
Hermosillo Marín, pero sobre todo, como se acredita con los estatutos de esa
asociación civil, los cuales se acompañan a la presente demanda como anexo 49.

En todo caso, las expresiones públicas esgrimidas por la parte demandada y


relatadas en los hechos anteriores, denotan expresiones en sí mismas maliciosas,
ofensivas y utilizadas con la clara intención de ofenderme, desprestigiarme,
afectar mi honor, y hacerme ver como una persona que representa los intereses
intervencionistas y de espionaje norteamericanos, a sabiendas de que es del
conocimiento público, tal como se precisó en el hecho primero de esta demanda,
que soy una persona autónoma, independiente y objetiva en todo lo que realizo.

De cualquier manera, no es menor insistir en que estas actividades de la parte


demandada han repercutido en diversos sectores de la opinión pública de México
y otros países, en los que se han tomado como ciertas sus afirmaciones de que
mis actividades están determinadas por lo que decide el gobierno de los Estados
Unidos de América, aseveraciones que de ese modo se han reproducido en un
buen número de medios impresos, libros y el internet, cada vez con mayor
alcance. Así, las acusaciones en mi contra han aparecido en los medios impresos
más importantes del país y en algunos círculos eso ha generado una
animadversión en mi contra que ha lesionado mi prestigio, el cual es indispensable
para el trabajo que realizo como académico, columnista e integrante de diversos
organismos civiles. Incluso, estas acusaciones también han menoscabado el
derecho que tengo para participar en partidos políticos como lo fue México
Posible, partido que perdió su registro en las elecciones federales de 2003.

Como ha quedado constatado, a lo largo de estos años respondí de diferentes


maneras a las acusaciones. Ninguno de mis razonamientos fue tomado en cuenta
por la parte demandada que está obsesionada en destruir mi credibilidad. Fue por
ello que concluí que la única esperanza de reestablecer mi honor, mi reputación y
la consideración que los demás guardan de mi persona, dañados como
consecuencia de las falsedades vertidas por la parte demandada, es presentando
esta demanda para que la afectación a mi derecho al honor no quede impune.

Como se ha expuesto y demostrado por medio de los hechos que se han narrado,
mismos que se acreditan en el presente juicio por medio de los documentos que
en el apartado siguiente se enlistan y que se acompañan a la presente demanda,
así como con los testimonios conducentes que se rendirán en su debida
oportunidad, las conductas desplegadas por el señor PRIMITIVO RODRÍGUEZ
OCEGUERA, parte demandada en este procedimiento, constituyen una ilícita
afectación de mi honor, de mi reputación y de la consideración que de mi persona
135

tienen los demás, con lo que se produce la actualización en mi contra de un daño


moral, derivado precisamente del ejercicio indebido, abusivo e ilícito de la libertad
de expresión y el derecho a la información de la parte demandada.

Así las cosas, el suscrito exhibe desde este momento los documentos que a
continuación se enlistan, los cuales fundamentan la acción que se promueve.

D O C U M E N T O S

1.- La Documental Privada, consistente en el original de la certificación expedida


por la Arquidiócesis de Guadalajara, Parroquia de San Antonio de Padua, en la
que se hace constar un ejemplar del Acta de Bautismo de la señorita CRISTINA
AGUAYO MAZZUCATO y en donde aparece como padre, la parte actora y como
padrino la parte demandada, la cual se adjunta al presente escrito como anexo 1.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere al hecho 2.

2.- La Documental Pública, consistente en la copia certificada por el Instituto de


Investigaciones Bibliográficas de la UNAM, de la página 10 del periódico “La
Jornada”, de fecha 8 de junio de 1994, en donde consta el artículo de la parte
actora bajo el título “Los temores de Washington”, la cual se acompaña al presente
escrito como anexo 2.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere al hecho 4 y 5.

3.- La Documental Pública, consistente en la copia certificada por el Instituto de


Investigaciones Bibliográficas de la UNAM, de las páginas 1 y 10 del periódico “La
Jornada”, de fecha 3 de mayo de 1995, en donde consta el artículo de la parte
actora bajo el título “Los significados de un premio”, la cual se acompaña al
presente escrito como anexo 3.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 6 y 7.

4.- La Documental Pública, consistente en la copia certificada por el Instituto de


Investigaciones Bibliográficas de la UNAM, de la página 68 del periódico “El
Financiero”, de fecha 30 de abril de 1997, en donde consta la entrevista dada por
la parte actora a ese diario, publicada en un reportaje, bajo el título “Ni legal ni
ilegítimo, el apoyo externo a ONG: Aguayo”, la cual se acompaña al presente
escrito como anexo 4.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere al hecho 8 y 9.

5.- La Documental Pública, consistente en la copia certificada por el Instituto de


Investigaciones Bibliográficas de la UNAM, de la página 2 del Periódico “La
Jornada” de fecha 2 de junio de 1997, número 4576, año XIII, en donde consta la
carta de la parte demandada bajo el título “Reitera el carácter intervencionista del
apoyo financiero de EU a ONG”, la cual se adjunta a este escrito como anexo 5.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 10 a 12.

6.- La Documental Pública, consistente en la copia certificada por el Instituto de


Investigaciones Bibliográficas de la UNAM, de las páginas 40 y 41 del periódico “El
Financiero”, de fecha 17 junio de 1997, en donde consta la entrevista que la parte
actora concedió a ese diario y que apareció publicada en el reportaje, bajo el título
“Dólares de EU para la democracia mexicana”, el cual se acompaña al presente
escrito como anexo 6.
136

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 13 y 14.

7.- La Documental Privada, consistente en la copia de la carta de fecha el 30 de


junio de 1997 suscrita por la parte demanda y dirigida a diversas personas entre
ellas, a la parte actora, la cual se acompaña al presente escrito como anexo 7.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 15 a 17.

8.- La Documental Pública, consistente en la copia certificada por el Instituto de


Investigaciones Bibliográficas de la UNAM, de la página 11-A del Periódico
“Reforma”, de fecha 19 de mayo de 1999, en donde consta la carta de la parte
actora, bajo el título “Sociedad y Partidos”, la cual se acompaña al presente escrito
como anexo 8.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 18 y 19.

9.- La Documental Privada, consistente en copia de la carta dirigida a las


coaliciones que luchan por el voto de los mexicanos en Estados Unidos de
América, elaborada por la parte demandada y de la cual envió una copia a la parte
actora vía fax, con fecha 9 de julio de 1999, la cual se acompaña al presente
escrito como anexo 9.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 20 a 22.

10.- La Documental Privada, consistente en la copia de la carta de fecha 12 de


julio de 1999, elaborada por la parte demandada y dirigida a la actora, la cual se
acompaña al presente escrito como anexo 10.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 23 a 25.

11.- La Documental Privada, consistente en copia de la carta que con fecha 21 de


junio de 2000, dirigió la parte demandada a Alejandro Junco de la Vega, Director
General del periódico “Reforma”, la cual se acompaña al presente escrito como
anexo 11.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 26 a 28.

12.- La Documental Pública, consistente en la copia certificada por el Instituto de


Investigaciones Bibliográficas de la UNAM, de la carta que la parte demandada
dirigió al periódico “La Jornada”, misma que se publicó con fecha 19 de abril de
2001, bajo el título “Señala vínculos de ONG mexicanas con la ultraderechista
NED, la cual se acompaña al presente escrito como anexo 12.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 29 a 31.

13.- La Documental Pública, consistente en la copia certificada por el Instituto de


Investigaciones Bibliográficas de la UNAM, de la carta dirigida por la parte
demandada al periódico “La Jornada”, misma que fue publicada en ese diario el 23
de abril de 2001, bajo el título “Mariclaire Acosta debió conocer actividades de
espionaje de la NED”, la cual se acompaña al presente escrito como anexo 13.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 32 a 34.
137

14.- La Documental Pública, consistente en la copia certificada por el Instituto de


Investigaciones Bibliográficas de la UNAM, de la carta dirigida por la parte actora
al periódico “La Jornada”, misma que fue publicada en ese diario el 6 de mayo de
2001, bajo el título “Precisiones de Aguayo a Primitivo Rodríguez”, la cual se
acompaña al presente escrito como anexo 14.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 35 y 36.

15.- La Documental Pública, consistente en la copia certificada por el Instituto de


Investigaciones Bibliográficas de la UNAM, de la carta dirigida por la parte
demandada al periódico “La Jornada”, con fecha 10 de mayo de 2001, bajo el
título “A debate público llama Rodríguez Oceguera a Sergio Aguayo”, la cual se
acompaña al presente escrito como anexo 15.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 37 a 39.

16.- La Documental Pública, consistente en copia certificada por el notario público


número 217 del D. F., actuando como asociado en el protocolo de la notaría
número 186 del D. F., de las páginas correspondientes del suplemento
“Masiosare” del diario “La Jornada”, bajo el título “La conexión ONG mexicanas-
EU”, la cual se acompaña al presente escrito como anexo 16.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 40 a 42.

17.- La Documental Pública, consistente en la copia certificada por el Instituto de


Investigaciones Bibliográficas de la UNAM, de la carta dirigida por la parte actora
al periódico “La Jornada”, misma que fue publicada en ese diario el 20 de mayo de
2001, bajo el título “Rodríguez Oceguera sin credibilidad: Aguayo”, la cual se
acompaña al presente escrito como anexo 17.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 43 y 44.

18.- La Documental Pública, consistente en la fe de hechos levantada por el


notario público número 217 del D. F., actuando como asociado en el protocolo de
la notaría número 186 del D. F., en donde certifica la existencia del artículo de
fecha 5 de junio de 2001, aparecido en la dirección electrónica
www.antiimperialista.com/es/view.shtml?category=20&id=992350481&keyword=+,
escrito por Mario Rivera Ortiz, bajo el título “Las ONG “mexicanas”, su matriz, sus
tareas y sus perspectivas”, la cual se adjunta al presente escrito como anexo 18.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 45 a 47.

19.- La Documental Pública, consistente en copia certificada por el notario público


número 217 del D. F., actuando como asociado en el protocolo de la notaría
número 186 del D. F., de las páginas correspondientes de la revista “Bajo
Palabra”, número 20, del 16 de junio de 2001, bajo el título “ONGs mexicanas,
asalariadas del Senado gringo. Agentes de EU, Mariclaire Acosta y Sergio
Aguayo”, la cual se acompaña al presente escrito como anexo 19.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 48 a 50.

20.- La Documental Pública, consistente en la copia certificada por el Instituto de


Investigaciones Bibliográficas de la UNAM, de la carta dirigida por la parte actora
al periódico “La Jornada”, misma que fue publicada en ese diario el 29 de agosto
de 2001, bajo el título “Sobre el financiamiento internacional de ONG”, la cual se
acompaña al presente escrito como anexo 20.
138

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 51 y 52.

21.- La Documental Privada, consistente en la copia del texto de la conferencia


impartida por la parte actora en Casa Lamm, el 30 de agosto de 2001, bajo el título
“El financiamiento extranjero y la transición democrática mexicana: el caso de
Alianza Cívica”, la cual se acompaña al presente escrito como anexo 21.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 53 y 54.

22.- La Documental Pública, consistente en la copia certificada por el Instituto de


Investigaciones Bibliográficas de la UNAM, de la carta dirigida por la parte
demandada al periódico “La Jornada”, misma que fue publicada en ese diario el 6
de septiembre de 2001, bajo el título “Sobre las actividades de la NED en México”,
la cual se acompaña al presente escrito como anexo 22.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 55 a 57.

23.- La Documental Pública, consistente en la fe de hechos levantada por el


notario público número 217 del D. F., actuando como asociado en el protocolo de
la notaría número 186 del D. F., en donde certifica la existencia de las páginas
correspondientes de la revista “Proceso”, en la que se incluye una carta de la parte
demandada, misma que fue publicada en esa revista el 21 de octubre de 2001,
bajo el título “De Primitivo Rodríguez Oceguera”, la cual se acompaña al presente
escrito como anexo 18.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 58 a 60.

24.- La Documental Pública, consistente en la copia certificada por el Instituto de


Investigaciones Bibliográficas de la UNAM, de la carta que dirigió la parte
demandada al periódico “La Jornada”, misma que fue publicada en ese diario el 12
de diciembre de 2001, bajo el título “Cuestiona reuniones de ONG con organismo
de seguridad de EU”, la cual se acompaña al presente escrito como anexo 23.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 61 a 63.

25.- La Documental Pública, consistente en copia certificada por el notario público


número 217 del D. F., actuando como asociado en el protocolo de la notaría
número 186 del D. F., en donde certifica la existencia de las páginas
correspondientes del artículo escrito por David Velasco Yáñez, S. J., titulado
“¿Participación electoral o ciudadana? La Unión de los Colonos Independientes
del Cerro del 4”, aparecido en el libro coordinado por Renée de la Torre y Juan
Ramírez Sáiz, bajo el título “La ciudadanización de la política en Jalisco”, editado
por el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente, en 2001, la
cual se acompaña al presente escrito como anexo 24.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 64 a 66.

26.- La Documental Pública, consistente en la copia certificada por el Instituto de


Investigaciones Bibliográficas de la UNAM, del artículo publicado por Enidh
Álvarez Soberanis, aparecido en el semanario, “Milenio Semanal”, el 18 de febrero
de 2002, bajo el título “La CIA, tras registros en el IFE”, la cual se acompaña al
presente escrito como anexo 25.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 67 a 69.
139

27.- La Documental Pública, consistente en la copia certificada por el Instituto de


Investigaciones Bibliográficas de la UNAM, de la carta que dirigió la parte actora al
semanario “Milenio Semanal”, misma que fue publicada en esa revista el 25 de
febrero de 2002, bajo el título “Precisiones de México Posible”, la cual se
acompaña al presente escrito como anexo 26.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 70 y 71.

28.- La Documental Pública, consistente en la copia certificada por el Instituto de


Investigaciones Bibliográficas de la UNAM, de la carta que dirigió la parte
demandada al semanario “Milenio Semanal”, misma que fue publicada en esa
revista el 25 de febrero de 2002, bajo el título “Invitación a Aguayo para debatir”, la
cual se acompaña al presente escrito como anexo 26.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 72 a 74.

29.- La Documental Pública, consistente en la fe de hechos levantada por el


notario público número 217 del D. F., actuando como asociado en el protocolo de
la notaría número 186 del D. F., en donde certifica la existencia del artículo escrito
por la parte actora publicado en el diario Reforma, en fecha 17 de abril de 2002,
bajo el título “México y Cuba. Primitivismos”, la cual se acompaña al presente
escrito como anexo 18.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 75 y 76.

30.- La Documental Pública, consistente en la copia certificada por el Instituto de


Investigaciones Bibliográficas de la UNAM, de la carta que dirigió la parte
demandada al periódico “Reforma”, misma que fue publicada en ese diario el 25
de abril de 2002, bajo el título “Cuestiona a Aguayo”, la cual se acompaña al
presente escrito como anexo 27.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 77 a 79.

31.- La Documental Pública, consistente en la copia certificada por el Instituto de


Investigaciones Bibliográficas de la UNAM, de la carta que dirigió la parte actora al
periódico “Reforma”, misma que fue publicada en ese diario el 25 de abril de 2002,
bajo el título “Responde editorialista”, la cual se acompaña al presente escrito
como anexo 27.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 79 BIS y 79 TER.

32.- La Documental Pública, consistente en la copia certificada por el Instituto de


Investigaciones Bibliográficas de la UNAM, de la carta que dirigió la parte
demandada al periódico “La Jornada”, misma que fue publicada en ese diario el 3
de mayo de 2002, bajo el título “Pide esclarecer lazos de ONG con la NED”, la
cual se acompaña al presente escrito como anexo 28.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 80 a 82.

33.- La Documental Pública, consistente en la copia certificada por el Instituto de


Investigaciones Bibliográficas de la UNAM, de la carta que dirigió la parte actora al
periódico “La Jornada”, misma que fue publicada en ese diario el 6 de mayo de
2002, bajo el título “Respuesta de Aguayo a Rodríguez Oceguera”, la cual se
acompaña al presente escrito como anexo 29.
140

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 83 y 84

34.- La Documental Pública, consistente en la copia certificada por el Instituto de


Investigaciones Bibliográficas de la UNAM, de la carta que dirigió la parte
demandada al periódico “La Jornada”, misma que fue publicada en ese diario el 15
de mayo de 2002, bajo el título “Rodríguez Oceguera insta a debate a Aguayo”, la
cual se acompaña al presente escrito como anexo 30.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 85 a 87.

35.- La Documental Privada, consistente en la copia del correo electrónico enviado


por la señora Silvia Alonso Félix a la parte actora con fecha 15 de mayo de 2002,
bajo el título “Primitivo de nuevo”, la cual se acompaña al presente escrito como
anexo 31.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 88 a 90.

36.- La Documental Pública, consistente en la copia certificada por el Instituto de


Investigaciones Bibliográficas de la UNAM, del artículo que publicó la parte
demandada en el suplemento “Masiosare” del periódico “La Jornada”, con fecha
28 de julio de 2002, bajo el título “Miss NED habla a rajatabla”, la cual se
acompaña al presente escrito como anexo 32.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 91 a 93.

37.- La Documental Pública, consistente en la fe de hechos levantada por el


notario público número 217 del D. F., actuando como asociado en el protocolo de
la notaría número 186 del D. F., en donde certifica la existencia de la carta dirigida
por la parte demandada al semanario “Milenio Semanal”, misma que fue publicada
en esa revista el 11 de noviembre de 2002, bajo el título “Comentarios sobre
entrevista”, la cual se acompaña al presente escrito como anexo 18.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 94 a 96.

38.- La Documental Pública, consistente en la copia certificada por el Instituto de


Investigaciones Bibliográficas de la UNAM, del artículo que publicó la parte actora
en la revista “Milenio Semanal”, con fecha 18 de noviembre de 2002, bajo el título
“Respuesta de Sergio Aguayo”, la cual se acompaña al presente escrito como
anexo 33.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 97 y 98.

39.- La Documental Pública, consistente en la fe de hechos levantada por el


notario público número 217 del D. F., actuando como asociado en el protocolo de
la notaría número 186 del D. F., en donde certifica la existencia de la carta dirigida
por la parte demandada al semanario “Milenio Semanal”, misma que fue publicada
en esa revista el 25 de noviembre de 2002, bajo el título “Respuesta a Aguayo”, la
cual se acompaña al presente escrito como anexo 18.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 99 a 101.

40.- La Documental Pública, consistente en copia certificada por el notario público


número 217 del D. F., actuando como asociado en el protocolo de la notaría
número 186 del D. F., de la página correspondiente al diario “La Jornada de
Oriente”, en donde aparece una entrevista hecha a la parte actora, misma que fue
141

publicada en esa revista el 12 de mayo de 2003, bajo el título “Partido México


Posible aspira a ocupar el espacio que perdió el PRD: Sergio Aguayo”, la cual se
acompaña al presente escrito como anexo 34.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 102 y 103.

41.- La Documental Pública, consistente en copia certificada por el notario público


número 217 del D. F., actuando como asociado en el protocolo de la notaría
número 186 del D. F., de las páginas correspondientes de la revista “Proceso”, en
donde aparece una carta de la parte demandada, misma que fue publicada en esa
revista el 18 de mayo de 2003, bajo el título “De Primitivo Rodríguez Oceguera”, la
cual se acompaña al presente escrito como anexo 35.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 104 a 106.

42.- La Documental Pública, consistente en copia certificada por el notario público


número 217 del D. F., actuando como asociado en el protocolo de la notaría
número 186 del D. F., de las páginas correspondientes del diario “La Jornada de
Oriente”, en donde se publicó una entrevista que dio la parte demandada, misma
que fue publicada en ese diario el 19 de mayo de 2003, bajo el título “Atrás del
Partido México Posible sí está el apoyo de la NED, dijo Primitivo Rodríguez”, la
cual se acompaña al presente escrito como anexo 36.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 107 a 109.

43.- La Documental Pública, consistente en la fe de hechos levantada por el


notario público número 217 del D. F., actuando como asociado en el protocolo de
la notaría número 186 del D. F., en donde certifica la existencia de un artículo
aparecido en la dirección electrónica www.manu-dornbierer.com.mx, de fecha 24
de mayo de 2003, escrito por Manú Dornbierer, bajo el título “¿Se puede calumniar
en México?”, la cual se acompaña al presente escrito como anexo 18.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 110 a 112.

44.- La Documental Pública, consistente en copia certificada por el notario público


número 217 del D. F., actuando como asociado en el protocolo de la notaría
número 186 del D. F., de las páginas correspondientes a la revista “Proceso”, en
donde aparece una carta que la parte actora dirigió a dicha revista, misma que fue
publicada en ese diario el 25 de mayo de 2003, bajo el título “De Sergio Aguayo”,
la cual se acompaña al presente escrito como anexo 37.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 113 y 114.

45.- La Documental Privada, consistente en copia de la carta que dirigió la parte


demandada a la parte actora, con fecha 4 de junio de 2003, la cual se acompaña
al presente escrito como anexo 38.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 115 a 117.

46.- La Documental Pública, consistente en copia certificada por el notario público


número 217 del D. F., actuando como asociado en el protocolo de la notaría
número 186 del D. F., del artículo escrito por la parte demandada que fue
publicado en el suplemento “Masiosare” del periódico “La Jornada”, con fecha 29
de junio de 2003, bajo el título “Respuesta a sergioaguayo.org”, la cual se
acompaña al presente escrito como anexo 39.
142

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 118 a 120.

47.- La Documental Pública, consistente en la copia certificada por el Instituto de


Investigaciones Bibliográficas de la UNAM, del artículo que publicó la parte
demandada en el suplemento “Masiosare” del periódico “La Jornada”, con fecha
21 de septiembre de 2003, bajo el título “Hasta luego, valientes”, la cual se
acompaña al presente escrito como anexo 40.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 121 a 123.

48.- La Documental Privada, consistente en copia del artículo aparecido en el


segundo semestre de 2003, firmado por personas que se identifican como
familiares de desaparecidos políticos y como personas relacionadas con familiares
de dichos desaparecidos políticos, bajo el título “Ahora es cuando los gorilas se
disfrazan de académicos (a propósito del libro La Charola de Sergio Aguayo
Quezada)”, la cual se acompaña al presente escrito como anexo 41.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 124 a 126.

49.- La Documental Pública, consistente en la fe de hechos levantada por el


notario público número 217 del D. F., actuando como asociado en el protocolo de
la notaría número 186 del D. F., en donde certifica la existencia de un artículo
escrito por Manú Dornbierer, aparecido en el periódico “El Siglo de Durango”, del
17 de julio de 2004, bajo el título “Las señoras del empoderamiento”, la cual se
acompaña al presente escrito como anexo 18.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 127 a 129.

50.- La Documental Pública, consistente en la fe de hechos levantada por el


notario público número 217 del D. F., actuando como asociado en el protocolo de
la notaría número 186 del D. F., en donde certifica la existencia de una carta que
dirigió la parte demandada al periódico “La Jornada”, misma que fue publicada en
ese diario el 15 de agosto de 2004, reconociendo su autoría, bajo el título “La
NED, instrumento de EU contra Venezuela”, la cual se acompaña al presente
escrito como anexo 18.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 130 a 132.

51.- La Documental Pública, consistente en copia certificada por el notario público


número 217 del D. F., actuando como asociado en el protocolo de la notaría
número 186 del D. F., de la carta escrita por la parte demandada, misma que fue
publicada en el semanario “Proceso”, con fecha 22 de agosto de 2004, bajo el
título “Más acerca de Estados Unidos y la NED”, la cual se acompaña al presente
escrito como anexo 42.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 133 a 135.

52.- La Documental Privada, consistente en copia del correo electrónico enviado


por la parte demandada al periódico “El País”, con fecha 31 de agosto de 2004, la
cual se acompaña al presente escrito como anexo 43.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 136 a 138.

53.- La Documental Privada, consistente en copia de la carta dirigida a Joaquín


Estefanía, Director de la Escuela de Periodismo de “El País”, de fecha 31 de
143

agosto de 2004, escrita por Guillermo Ibarra Ramírez, en su calidad de


Coordinador General de Comunicación y Proyectos de la Comisión Nacional de
los Derechos Humanos, la cual se acompaña al presente escrito como anexo 44.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 139 a 141.

54.- La Documental Pública, consistente en copia certificada por el notario público


número 217 del D. F., actuando como asociado en el protocolo de la notaría
número 186 del D. F., de la carta escrita por la parte demandada, misma que fue
publicada en el diario “La Jornada” con fecha 31 de agosto de 2004, bajo el título
“Las ONG deben rendir cuentas a la ciudadanía”, la cual se acompaña al presente
escrito como anexo 45.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 142 a 144.

55.- La Documental Pública, consistente en la fe de hechos levantada por el


notario público número 217 del D. F., actuando como asociado en el protocolo de
la notaría número 186 del D. F., en donde certifica la existencia de un artículo
aparecido en la dirección electrónica www.cronica.com.mx, fechado el 15 de
septiembre de 2004, escrito por María Teresa Jardí, bajo el título “¿Reelegir o no
al ombudsman actual?”, el cual se acompaña al presente escrito como anexo 18.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 145 a 147.

56.- La Documental Pública, consistente en copia certificada por el Juzgado


Decimoquinto de Distrito en Materia Administrativa en el Distrito Federal, de las
copias simples del discurso pronunciado por la parte demandada en su
comparecencia ante la Comisión de Derechos Humanos del Senado de la
República, ocurrida el 11 de octubre de 2004, el cual se acompaña al presente
escrito como anexo 46.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 148 a 150.

57.- La Documental Pública, consistente en la fe de hechos levantada por el


notario público número 217 del D. F., actuando como asociado en el protocolo de
la notaría número 186 del D. F., en donde certifica la existencia de un artículo
escrito por Manú Dornbierer, aparecido en el periódico “Diario Monitor”, del 13 de
noviembre de 2004, bajo el título “Los videos y los amigos de Marta”, el cual se
acompaña al presente escrito como anexo 18.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 151 a 153.

58.- La Documental Pública, consistente en copia certificada por el notario público


número 217 del D. F., actuando como asociado en el protocolo de la notaría
número 186 del D. F., de las páginas 255 a 257 del artículo escrito por Juan
Manuel Zaragoza y José Moisés Hernández Zamora, titulado “Cómo participamos
en política las ONG de Morelos”, aparecido en el libro coordinado por Medardo
Tapia, Morgan Quero y David Moctezuma, bajo el título “Los rituales del cambio.
Transformaciones del régimen y cultura política en Morelos”, editado por el Centro
Regional de Investigaciones Multidisciplinarias, Universidad Nacional Autónoma
de México, en 2004, la cual se acompaña al presente escrito como anexo 47.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 154 a 156.

59.- La Documental Pública, consistente en copia certificada por el notario público


número 217 del D. F., actuando como asociado en el protocolo de la notaría
144

número 186 del D. F., de las páginas 682 a 691 del libro escrito por Earl Shorris,
titulado “The Life and Times of Mexico”, editado por la W. W. Norton & Company,
en 2004, así como su traducción oficial al idioma español, realizada por perito
traductor autorizado por el Tribunal Superior de Justicia, los cuales se acompañan
al presente escrito como anexo 48.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere a los hechos 157 a 159.

60.- La Documental Pública, consistente en copia certificada por el notario público


número 50 del D. F. de la escritura número 64061 en la que consta el acta
constitutiva y los estatutos de la asociación civil denominada “Alianza Cívica”, de
fecha 25 de abril de 1994, la cual se adjunta al presente escrito como anexo 49.

Esta documental se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la presente
demanda, particularmente por lo que se refiere al hecho 160.

D E R E C H O

En cuanto al procedimiento resultan aplicables los artículos 25, 255, 256 y demás
aplicables del Código de Procedimientos Civiles para el Distrito Federal.

En cuanto al fondo resultan aplicables los artículos 1910, 1912, 1916 y 1916 BIS y
demás relativos del Código Civil para el Distrito Federal, los artículos sexto y
séptimo de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, y los
artículos 12 de la Declaración Universal de Derechos Humanos, 17 del Pacto
Internacional de Derechos Civiles y Políticos, V de la Declaración Americana de
los Derechos y Deberes del Hombre, y 11 de la Convención Americana sobre
Derechos Humanos, así como los artículos 1, 4 y demás relativos de la Ley de
Imprenta.

Asimismo, importa anunciar, siquiera brevemente, la argumentación que habrá de


evidenciar la presencia en este juicio de un ejercicio ilícito de la libertad de
expresión y el derecho a la información atribuible a la parte demandada, que ha
originado la afectación al derecho al honor de la parte demandante, así como la
argumentación que demuestra que con tal conducta ilícita y abusiva se actualizan
indudablemente los extremos del daño moral que ha sufrido la parte demandante.

En principio, habrá de distinguirse entre la libertad de expresión y el derecho a la


información de una manera bastante sencilla, pues la primera propicia que sus
titulares expresen todo tipo de opiniones, juicios de valor y cualquier postura que
guarden en relación con algún tema en particular, sin que sea posible fijar un
parámetro de corrección que permita decidir si tales expresiones son adecuadas o
no, puesto que en una sociedad democrática no deben existir principios absolutos,
y determinados a priori, que definan lo que está bien o mal. Sin embargo, ello no
implica que la libertad de expresión sea irrestricta, pues si se le toma de pretexto
para esgrimir opiniones ofensivas, es claro que sobrepasaría los límites de su
debido ejercicio, toda vez que no ha de confundirse con un inexistente derecho a
insultar, ofender y desprestigiar sin razón alguna a las demás personas.

En cambio, el derecho a la información, sobre todo cuando se presenta en su


vertiente de comunicar informaciones fácticas a los demás, requiere para su
debido ejercicio del apego al criterio de veracidad, pues es evidente que las
personas no tienen derecho a informar falsedades, o en otras palabras, que el
derecho a la información como derecho a informar, no implica el derecho a mentir
para desinformar a la opinión pública. En ese tenor, tampoco se puede pretender
limitar aquel derecho al extremo de exigir a sus titulares que se aseguren de forma
absoluta sobre la verdad de lo que informan, pues esa certeza absoluta es casi
imposible de realizar en torno a cualquier hecho, pero sobre todo, porque de ese
modo se coartaría excesivamente el derecho a la información, que sólo demanda
para su adecuado goce, un deber de diligencia que impone a sus titulares el
compromiso de no informar a partir de fuentes que ni siquiera han buscado
145

contrastar a fin de corroborar su confiabilidad. Así, es claro que si se informa con


descuido descarado, o peor aún, si se alteran las fuentes de información, no se
podrá alegar la protección que el derecho a la información concede a sus titulares.

En este orden de ideas, definidas de esa manera las fronteras que enmarcan el
adecuado ejercicio tanto de la libertad de expresión como del derecho a informar,
aparece una limitante adicional para la primera, en razón de que no deben
presentarse como informaciones de hechos verificados con un mínimo de
objetividad, lo que únicamente se corresponde con ideas, opiniones, juicios de
valor o puntos de vista subjetivos pertenecientes a la persona que de esa manera
quiere hacer pasar a sus meras expresiones como si fueran informaciones sólidas.
Habrá de tenerse mucho cuidado en distinguir cuándo una persona ejercita su
libertad de expresión y cuándo recurre a su derecho a la información. Sin olvidar
que constituye una limitante a la libertad de expresión, el formular manifestaciones
en sí mismas maliciosas, vertidas con la intención de ofender o desprestigiar a las
personas, lo que sin duda se actualiza en el hecho de públicamente afirmar que
una persona, en este caso el suscrito, defiende los intereses norteamericanos, se
encuentra empleado en actividades de espionaje y que se le financia
económicamente por medio de una agrupación que defiende dichos intereses.

Por su parte, en el caso que se presenta en este juicio, la parte demandada ha


actuado de manera ilícita al abusar de su libertad de expresión y su derecho a la
información en detrimento de mi derecho al honor, por lo que importa definir el
contenido de este último derecho, reconocido como tal en los tratados
internacionales en los cuales se basa esta demanda, pero sobre todo, cuyos
contenidos reciben adecuada protección gracias a la institución del daño moral,
que coincidentemente salvaguarda como bienes de la personalidad, la honra, la
reputación y la consideración que de una persona tienen sus semejantes. En este
sentido, al contenido esencial del derecho al honor se ofrece protección en el
ordenamiento jurídico civil doméstico, precisamente por medio del daño moral.

En el derecho al honor tradicionalmente se han distinguido dos aspectos, uno


subjetivo que guarda relación con el sentimiento de autoestima que cada persona
tiene de si misma, y otro objetivo que se vincula con la opinión que los demás
poseen sobre sus actividades, con la reputación y fama que cada uno ha podido
forjarse entre sus semejantes. Como debe ser claro en un estado constitucional
de derecho como el que se pretende construir en nuestro país, ninguna de esas
vertientes que conforman el derecho al honor descansa sobre distinciones
hereditarias o que de cualquier otra manera rompan con la igualdad sin
discriminaciones de la que gozamos todas las personas en el ordenamiento
jurídico mexicano. Al contrario, el derecho al honor encuentra fundamento en la
dignidad humana con la que contamos todos los individuos, y su respeto se
encamina a permitir a cada uno de sus titulares el libre desarrollo de su
personalidad, que a su vez hace posible su desenvolvimiento en sociedad, es
decir, permite que las personas entablen relaciones sociales con los demás en
consideración de la imagen que basada en hechos y no en apariencias, cada uno
de nosotros ha logrado fraguarse a lo largo de los años con sus propias acciones.

De analizarse detenidamente estos elementos, resulta relativamente sencillo


percatarse que la libertad de expresión y el derecho a la información pueden llegar
a limitarse si sus restricciones legales devienen necesarias para proteger otros
derechos, como el derecho al honor, que de otra forma quedarían a merced de su
ejercicio abusivo. Evidentemente, esas posibles restricciones no pueden derivar
en una censura previa sino que se limitan al establecimiento de responsabilidades
ulteriores, las cuales habrán de fijarse caso por caso con la intención de encontrar
parámetros que puedan generalizarse para la resolución de futuras oposiciones.

En ese entendido, el enfrentamiento de la libertad de expresión y el derecho a la


información, por un lado, con el derecho al honor, por el otro, requiere para su
adecuada resolución antes que todo la verificación de que todos esos derechos se
pretenden hacer valer dentro de las fronteras que le son propias, de que su
ejercicio es acorde con su contenido, pues por ejemplo, quien pretenda escudarse
146

en el ejercicio de la libertad de expresión para esgrimir palabras ofensivas, lo que


en realidad demuestra es que no ejerce esa libertad sino un inexistente derecho a
insultar a los demás, o en el caso del derecho a la información, una conducta no
se puede enmarcar en él, si en lugar de informar con respeto a mínimas
exigencias de veracidad, lo que se intenta es ejercer un inexistente derecho a la
mentira, o del otro lado, no se puede pretender basar el derecho al honor en
meras apariencias y denunciar como un ataque al mismo, las opiniones o
informaciones que en realidad han desenmascarado acciones poco honorables.
Sólo si el ejercicio de esos derechos es respetuoso de sus contenidos, podrá
actualizarse un juicio de ponderación entre ellos para resolver el caso concreto.

Todo esto sin olvidar que la institución civil del daño moral ha sido incluida en
nuestro ordenamiento jurídico como una restricción a la libertad de expresión y al
derecho a la información, precisamente para intentar proteger bienes de la
personalidad que a su vez conforman la esencia del derecho al honor. Llegada la
reflexión a este punto, lo que se demostrará durante este juicio es que las
conductas provenientes de la parte demandada no corresponden a un adecuado
ejercicio de sus libertades de comunicación, sino que por el contrario, obedecen a
su abuso ilícito, en tanto no permitido, pues disfraza opiniones desfavorables
como hechos inobjetables, utiliza expresiones ofensivas y maliciosas con el ánimo
de desprestigiarme públicamente, y distorsiona fuentes de información, a fin de
intentar fundar de forma maliciosa y ofensiva acusaciones en detrimento de mi
derecho al honor que al final resultan falsas y que dañan mi calidad moral.

En fin, como consecuencia de este entretenido ejercicio de argumentación, se


apreciará que la parte demandada ha abusado de su libertad de expresión y su
derecho a la información, originando esta conducta ilícita, la afectación del
derecho al honor del que debe gozar la parte demandante, razón por la que a esta
última se le ha causado un daño moral que deberá ser reparado por aquélla.

Por lo expuesto y fundado,

A USTED, C. JUEZ DE LO CIVIL EN TURNO, EN EL DISTRITO FEDERAL,


atentamente pido se sirva:

PRIMERO.- Tenerme por presentado con la personalidad que ostento,


demandando las prestaciones contenidas en este escrito, así como autorizando a
las personas señaladas al inicio del mismo y para los efectos ahí indicados.

SEGUNDO.- Admitida la presente demanda, con las copias simples anexadas,


ordene el emplazamiento a juicio de la parte demandada, a fin de que tenga la
oportunidad de contestarla alegando lo que a su derecho convenga.

TERCERO.- En su debido momento, declarar que la parte demandada ha ejercido


de forma ilícita y abusiva su libertad de expresión y su derecho a la información,
provocando con esa conducta ilícita la afectación a mi derecho al honor y con ello
la actualización de un daño moral en mi contra y, en consecuencia, dictar
sentencia condenatoria a la parte demandada en el presente juicio, haciéndole
cumplir todas y cada una de las prestaciones demandadas en este ocurso.

PROTESTO LO NECESARIO, en la ciudad de México, Distrito Federal, a los


veintiocho días del mes de junio de dos mil cinco.

SERGIO AGUAYO QUEZADA

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