Psicología Evolutiva Niñez Cat.

I
Prof. Adj. Reg. a cargo: Dra. María Elisa Pizzo

TRABAJO DE CAMPO

Ayudante de Trabajos Prácticos: Bruno Karina

Apellido y nombre: Bosco Maria Florencia

Nº de Libreta Universitaria: 370525980
e-mail: florbosco@hotmail.com

Apellido y nombre: Olmos Carvajal Virginia Mabel

Nº de Libreta Universitaria: 380652680
e-mail: Vicky_kim_16@hotmail.com

Comisión: 5
Cuatrimestre: 1ero
Año: 2016
Datos del niño:

Nombre: Teo

Edad: 5

Fecha de nacimiento: 29/03/2011

Sexo: masculino

Escolaridad (si posee): preescolar (en curso)

Datos de la familia:

- Padre

Nombre: Federico

Edad: 36 años

Ocupación: Cocinero

Nivel de escolaridad alcanzado: Terciario

- Madre

Nombre: María Agustina

Edad: 36 años

Ocupación: Atención al cliente / Cosmetóloga

Nivel de escolaridad alcanzado: Universitario incompleto

Consigna a los padres:

El primer contacto con la madre fue cara a cara, mediante una conocida

nuestra, donde le explicamos brevemente en lo que consistía la observación.

Le comentamos que somos estudiantes de la Facultad de Psicología de la

Universidad de Buenos Aires. Y como parte de una materia, de la carrera,

llamada Psicología Evolutiva Niñez necesitábamos observar a un niño de la

edad de Teo.

La madre de Teo nos hizo un par de preguntas sobre el trabajo, a lo que se

mostró conforme con nuestras respuestas y accedió a formar parte de nuestro

trabajo de campo. La madre nos pidió que nos comunicáramos con ella, a la

tarde, ese mismo día para acordar el día y horario de la visita. Vía telefónica

acordamos lo necesario para la observación y le comunicamos que

posteriormente, al menos unas semanas después de ésta, nos volveríamos a

encontrar para hacerle una entrevista personal sobre el crecimiento de Teo. La

madre se mostró entusiasmada por la entrevista. Además, como parte de la

consigna le pedimos que le informara a su hijo de nuestra visita y le pedimos

que el día de la observación interviniera lo menos posible con Teo.

Le recordamos y aclaramos que de nuestra observación y los datos tomados

mediante la entrevista no le podríamos dar ningún tipo de resultado, a lo que la

madre de Teo se mostró un poco decepcionada. Por lo que le recalcamos

nuestro carácter de estudiantes y resaltamos que lo datos proporcionados por

la madre se iban a mantener en absoluta reserva.

Datos de la observación:

Fecha de la observación: 16/04/2016

Lugar donde se realizó la observación: Casa de Teo / Habitación de Teo

Duración de la observación: 17:10 a 17:40

 1. OBSERVACIÓN

Hora de llegada: 17 hs. Hora de finalización: 17:40 hs.

El lugar donde se realiza la observación es un departamento de dos

ambientes. Al entrar se puede observar un pasillo que da directamente al living.

Este era un espacio levemente reducido donde se visualizaba un sillón-cama,

computadora, mesa y una pila de juegos de mesa en una esquina. El living da

a otro pasillo donde se encuentra la habitación de Teo. Ésta habitación está

compuesta por una cama de una plaza posicionada contra la pared y tiene una

mesa de luz al costado con un pequeño velador. Posee un placar, un estante

con juguetes al costado y varios juguetes desparramados por el suelo. En

diagonal a la cama se encuentra una mesa con el televisor. En el medio de la

habitación hay una mesa de juegos.

Teo tiene 5 años recién cumplidos, mide 108 cm, es de contextura delgada, tez

blanca, ojos celestes y cabello lacio claro. Cuando llegamos estaba vestido con

un buzo azul y jogging gris, en los pies sólo tenía puestas unas medias a rayas.

Llegamos al departamento. Tocamos timbre y nos sale a abrir la madre,

Agustina. Al ingresar nos presentamos y le explicamos brevemente como iba a

ser la observación de Teo. Le entregamos el consentimiento y lo firma. Le

preguntamos: - “¿Dónde está Teo?” y nos conduce hacia la habitación de él. El

niño se encontraba mirando dibujitos en la televisión. La mamá nos presenta y

Teo al vernos se va corriendo y se esconde adentro de su mesa de luz. La

mamá se excusa y le dice: - “Teo, salí de ahí.”. Él le responde: - “Teo no está,

está en el placard!”. La madre siguiéndole el chiste lo va a buscar al placar y le

dice: - “Teo no está acá. Dale, salí de ahí.”. Al decirle esto el niño sale de la

mesa de luz y nos mira. Nos presentamos a él y le decimos: - “Venimos a estar

un rato acá con vos.”, acto seguido Teo se esconde detrás de las piernas de su

mamá evitando cualquier contacto visual con nosotras. La mamá le ofrece

tomar la merienda y él grita: - “Nooo!”. La madre le obliga a salir de atrás suyo

con una advertencia: - “Teo, si no salís de atrás mío voy a apagar la tele.”, con

lo cual él sale. La madre le alcanza una espada de juguete y dice: - “Mostrale a

las chicas lo que hace la espada”. La madre se queda en el cuarto debido a

que Teo no quería quedarse a solas con nosotras. Él agarra la espada y la

enciende, el juguete hace ruidos y se prende y se apaga una luz azul. Se dirige

hacia nosotras y exclama: - “Hay algo adentro con lo que el juguete hace

ruido.” y tira la espada. Agarra una pelota que se encuentra en el suelo con

ambas manos, de manera firme, a lo que dice: - “Esto es mío.” y la tira contra la

pared de forma repetitiva. Nosotras nos posicionamos en el umbral de la puerta

de la habitación. Cuando la pelota cae lejos de él, va a buscarla gateando de

manera rápida, y al levantarse dice: - “Estoy muy loquito.”. Le tira la pelota a la

mamá golpeándola y la invita a jugar con él: - “Maaa, jugá conmigo!”, a lo que

ella acepta. A continuación, se ponen a jugar a una especie de vóley. La mamá

le dice: - “Hace como te enseñé el otro día.”. El niño se posiciona sobra la

cama dando pequeños saltos preparándose para jugar. Teo golpea la pelota

con las palmas, tratando de imitar la forma de jugar de la madre. Mantienen

esta forma de juego durante unos minutos, dándose “pases” con la pelota,

hasta que él le indica: - “Mamá, yo soy el aro.” (Teo imita la forma de un aro de

básquet con sus brazos). La mamá comprende la idea del juego que propone el

hijo y se prepara para tirar la pelota y Teo le grita: - “¡Así no!”. Madre: -
“¿Cómo, entonces?”. N.O: - “Así” (muestra su antebrazo, junta las muñecas

abriendo las manos en forma de canasta y hace un gesto de tirar la pelota

saltando). La mamá hace lo mismo, pero sin saltar y Teo le grita nuevamente

de manera fuerte: - “¡No, mamá, así no!”. Él se baja de la cama y se distrae

mirando la tele, parado en el medio de la habitación y luego vuelve a subir a la

cama y continúan con el juego. Esto ocurre de manera alternada, por lo que

juega y mira la tele al mismo tiempo. Mientras juegan la pelota golpea el

velador y el control remoto que estaban sobre la mesa de luz y ambos se caen.

N.O: - “Uy, se cayó la calcudadora. La cacudatota, cacudateta.” (Trata de decir

múltiples veces la palabra calculadora y no logra decirlo correctamente y

empieza a asociar con otras palabras). N.O: - “mamá, eso suena a”eso” que

tienen las mamás”. M: - “¿Qué cosa?”. N.O: - “Tetas.”. M: - “¡No digas eso!”, a

lo que él replica: - “Sabes cómo se dicen tetas en inglés?” (No espera

respuesta) “Tetotas.”. La mamá responde: - “No digas esas cosas en el jardín.”.

Luego, se baja de la cama corriendo y se sube sobre la mesa de juegos, salta

desde ella y vuelve corriendo a la cama nuevamente. Se recuesta allí,

comienza a hacer volteretas en la cama y da vueltas carnero. Apoya contra la

pared en forma de V sus piernas y le dice a la mamá: - “Tirá la pelota entre las

piernas, <acá>” (él indica con su dedo que es entre sus piernas que actuarían

como un arco). Ella le dice: - “Bueno.” y tira la pelota ahí varias veces hasta

que el niño grita: - “¡Mamá, me pegaste en el pito!”, a lo que ambos se ríen.

Teo agarra la pelota y se golpea repetidamente la cara con está. La mamá le

pide la pelota y le aclara que no haga eso. A lo que él le dice: - “Mamá, pégame

en la cara.”. Ella le responde: - “¿Vos estás loco?” y retiene la pelota en sus

manos. Después del reto, Teo ignora a la madre y se queda mirando la tele. De
la anda se baja de la cama y pregunta “¿Dónde está mi raqueta? Y no espera

la respuesta a su pregunta y comienza a buscarla por sí mismo. La madre le

pregunta: - “¿Dónde la pusiste la última vez?” a lo que Teo no contesta

mientras vacía un balde que tenía pequeños juguetes adentro. Se dirige con el

balde hacia el estante de juguetes. Luego el niño da vuelta el tacho, se sube y

se para sobre su base y estira los dos brazos para llegar al estante en el cual

se encuentra la raqueta. Falla en su intento de alcanzarla, debido a que está se

encuentra en la parte superior del estante y dice: - “Caramba, no llego.”. Le

pide a la mamá: - “Por favor” con voz tierna, para que se la alcance. Ella lo

hace y Teo le pide que juegue nuevamente con la pelota y la raqueta a una

especie de tenis. Él agarra la raqueta de una forma segura, con ambas manos.

Juegan un rato más. Después Teo dice: - “Mamá, quiero la leche.”. La mamá

se va a preparar la leche y él se queda con nosotras en la habitación sin

hablarnos y mirando la tele de forma concentrada y atenta. Al pasar los 40

minutos y Teo a punto de tomar su merienda, damos por finalizada nuestra

observación. Nos despedimos de Teo al unísono con un: - “Chau, Teo” al cual

no responde, pero gira la cabeza, nos mira y luego continúa mirando la tele. Le

agradecemos a Agustina, la madre de Teo, su hospitalidad y nos retiramos de

su departamento.

N.O: niño observado

M: madre de Teo