Judas the good neighbor

“I move to a new neighborhood and soon I have problems with a neighbor. I discuss, harass,
denounce, discriminate against me ... is a bad neighbor ... and the worst thing is that there are
other neighbors, also very but very bad, who support ...

I move to another neighborhood and again the same. The plague of bad neighbors. They envy me,
I think, they are stupid and proud, they are sick ... and while I say that I am the chosen one of God,
I am moving from neighborhood to neighborhood, climate change, regions, ocean crosses, deserts,
forests ... but sooner or later ... everywhere the same ... those damn bad neighbors who do not
understand me and who falsely accuse me.

The years and the years pass, the centuries go by, I am the eternal errant ... thousands of years
pass. No matter the regions, or the color of skin or religion, or the language spoken by my
neighbors, nor the political regime that supports them ... I always end up having problems ... and
to the four winds I proclaim and write in sacred papyrus my role of victim.

Millennia of bad neighbors who never understood me ... so I conclude, according to my sound and
irrefutable logic, that the problem is in the neighbors, it is not in my .... damn neighbors…”

JUDAS, EL BUEN VECINO

"Me mudo a un nuevo barrio y al poco tiempo tengo problemas con un vecino. Discuto, me
hostiga, lo denuncio, me discrimina... es un mal vecino... y lo peor es que hay otros vecinos,
también muy pero muy malos, que lo apoyan...

Me mudo a otro barrio y otra vez lo mismo. La plaga de los malos vecinos. Me envidian, pienso,
son estúpidos y soberbios, están enfermos.... y mientras digo que soy el elegido de dios, me voy
mudando de barrio en barrio, cambio de clima, de regiones, cruzo oceános, desiertos, bosques....
pero más tarde o más temprano... en todos lados lo mismo... esos malditos malos vecinos que no
me entienden y que me acusan falsamente.

Pasan los años y los años, pasan los siglos, soy el eterno errante... pasan miles de años. No importa
las regiones, ni el color de piel o la religión, ni la lengua que hablen mis vecinos, ni el régimen
político que los sustente... siempre acabo teniendo problemas... y a los cuatro vientos proclamo y
escribo en sagrados papiros mi papel de victima.

Milenios de malos vecinos que jamás me entendieron... por lo que concluyo, según mi sana e
irrefutable lógica, que el problema está en los vecinos, no está en mi.... malditos vecinos..."