Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Diptico Wiki
Diptico Wiki
Ir a la navegaci�nIr a la b�squeda
Este art�culo trata sobre obras de arte. Para impresos publicitarios, v�ase d�ptico
(publicidad) .
Se conoce como d�pticos (del griego d?? "dos" y pt??? "placa") a ciertas placas de
marfil, madera o metal, decoradas con relieves o pinturas y unidas de modo que
puedan plegarse como las tapas de un libro. Si constan de tres hojas se denominan
tr�pticos, y si tienen m�s, pol�pticos. Por extensi�n, se llama tambi�n d�pticos,
tr�pticos y pol�pticos a los cuadros divididos en compartimientos, aunque sean de
notables dimensiones y no puedan plegarse.
Historia
El uso de los d�pticos estuvo muy en boga entre los romanos como libritos de notas
y como art�culos de lujo para aguinaldos. De ellos, los m�s notables que se
conservan son los llamados consulares, que sol�an dar los c�nsules del imperio como
aguinaldo a otros personajes y a los amigos a principios de a�o. Tienen adornada
con relieves la parte exterior de las tablitas figurando de ordinario el retrato
del mismo c�nsul en actitud de presidir e inaugurar los juegos p�blicos, arrojando
al circo la mappa o pa�uelo que lleva en su mano. Todos los d�pticos de este tipo
que se conservan son de marfil y de estilo bizantino, propios del siglo V y primera
mitad del VI, siendo uno de ellos el del c�nsul Api�n, a�o 539, que se conserva en
la catedral de Oviedo. Hay, no obstante, algunos otros d�pticos romanos, m�s
antiguos y sencillos que fueron de uso particular o de magistrados inferiores.
Adoptando la Iglesia desde los primeros siglos la costumbre romana, tuvo sus
d�pticos eclesi�sticos, adornados por fuera con asuntos religiosos y dispuestos por
dentro para inscribir en ellos (ya grab�ndolos en la misma l�mina o escribi�ndolos
sobre hojas de pergamino all� adheridas) los nombres de personas benem�ritas ya de
la jerarqu�a eclesi�stica y civil ya de m�rtires y de fieles difuntos que deb�an
tenerse presentes en la misa. Hab�a d�pticos de vivos y d�pticos de difuntos que se
le�an durante la misa y de esta costumbre, que dur� hasta el siglo XII en la
Iglesia occidental y hasta el XV en la de Oriente ha quedado el recuerdo de los
Mementos en el Canon de la misa y han resultado los calendarios, martirologios y
necrologio y el profesor d�as