Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Había una vez, una joven y alegre adolescente, que había aprendido a
hablar muy bien el inglés y el francés, y que anhelaba ser una gran artista.
Todo el día cantaba, bailaba y pintaba bonitos cuadros.
—Que bonitos anhelos tienes, Andrea, pero por ahora, ayúdame a pelar
las papas. —Dijo su mamá.
— ¿Qué? ¿Pelar papas, yo? — Replicó ella —eso no, yo soy a una artista.
—Pero papá, no puedo, estoy pintado otro bello cuadro y no puedo ser
interrumpida, ¿acaso hubieras interrumpido a Leonardo Da Vinci mientras
pintaba la Mona Lisa o a Miguel Ángel mientras pintaba la capilla Sixtina?
—El arroz con leche se le ha quedado pegado a los dientes postizos del
abuelo — dijo burlonamente su hermano David.
— ¡Sí, que aprenda a cocinar, que hoy casi nos mata! — dijo su burlón
hermano.
Fue así que a la semana hubo una gran reunión familiar. Abuelos, tíos y
primos fueron invitados al cumpleaños del padre, para sorpresa de todos
la comida estuvo deliciosa.
— ¡Esto esta tan rico que quiero más! — dijo la abuela Josefina.
— ¡Sí, ahora ella no solo sabe cantar y pintar, sino también cocinar!
—Es que me di cuenta de algo, que cocinar muy bien, es también un arte.