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LA PRUEBA

ANTECEDENTES

Se puede asumir que la idea de probar algo, de demostrar algo, de acreditar


algo, de sustentar algo, es casi tan antigua como el hombre civilizado (o sujeto
a reglas sociales). En efecto, desde sus primeros inicios como miembro de una
sociedad organizada, el ser humano debió haberse visto en la necesidad de
tener que demostrar algo, ya sea su posesión sobre un bien, sobre su
morada, sobre un territorio, respecto a la responsabilidad de un crimen, etc.

Es por ello, que desde el surgimiento de las primeras formas o intentos de


derecho positivo, por ejemplo: El denominado CODIGO DE HAMMURABI, que
era un conjunto de reglas escritas en una estela de piedra, del pueblo
sumerio, en el cual predominaban sanciones draconianas, como la llamada
Ley del Talión; se aprecia, que ya se manifiesta aunque de manera muy
embrionaria el derecho a probar. En efecto, en dicho conjunto de normas, tan
antiguo, denominado por muchos primitivo, se vislumbra ya la necesidad de
PROBAR, en un afán humano tan importante como la vida misma: determinar a
los responsables de un crimen sin perjudicar a los inocentes. Allí igualmente,
se vislumbran, primitivos afanes, por defender lo que hoy en día conocemos
como un PRINCIPIO sustancial, que se encuentra hondamente ligado al
derecho penal y a la PRUEBA: el Principio de Presunción de Inocencia.

Efectivamente, conforme lo proponen diversos estudios, ya en el Código de


Hammurabi hay un embrionario PRINCIPIO DE PRESUNCION DE
INOCENCIA, que aparece ligado a la necesidad de que aquello que se imputa
a alguien, tenga que ser debidamente probado. Al respecto, señala JULIO
PEREZ GIL: “La prevención frente a falsas acusaciones estaba garantizada
con el principio del Talión, previéndose que el que acusara a otro de un delito
sin poder aportar prueba debería sufrir la misma pena que el acusado si ésta
llegara a demostrarse”

ALGUNAS NORMAS PRIMITIVAS SOBRE LA PRUEBA:

En el denominado CODIGO DE HAMMURABI:

“Si un hombre acusa a otro hombre y le imputa un asesinato pero no puede


probarlo, su acusador será ejecutado”.
“Si uno en un proceso ha dado testimonio de cargo y no ha probado la palabra
que dijo, si este proceso es por un crimen que podría acarrear la muerte, este
hombre es condenable a muerte.”

“Si los testigos de tal señor no estuviesen a mano, los jueces le señalarán un
plazo de seis meses. Y si al (término del) sexto mes, no presenta sus testigos,
este señor es un falsario. Sufrirá en su totalidad la pena de este proceso.”

“Si el dueño de la cosa perdida no ha llevado los testigos que conozcan la cosa
perdida: Es culpable, ha levantado calumnia, será muerto.”

CONCEPTO

Según Alcalá Zamora, la prueba es la obtención del cercioramiento


judicial acerca de los hechos indispensables para la resolución del
conflicto sometido a proceso. Probar es, lograr efectivamente dicho
cercioramiento, ya sea a través de la actividad de las partes o de los terceros
(principio dispositivo), o ya sea por el juez directamente (principio inquisitorio).

El tratadista Jeremías Bentham, considera a la prueba indispensable en el


proceso al afirmar "...el arte del proceso no es esencialmente otra cosa que el
arte de administrar las pruebas." quien al resolver que es la prueba, nos lo
define en su acepción genérica y con respecto a su finalidad, de la siguiente
forma, "...En el más amplio sentido de esa palabra, se entiende por tal un
hecho supuestamente verdadero que se presume debe servir de motivo de
credibilidad sobre la existencia o inexistencia de otro hecho.

BIBLIOGRAFIA

Art. 22 del Código de Lipit-Ishtar y 1 a 4 del Código de Hammurabi. Vid.


KOROSEC, V..,

Tratado de las pruebas judiciales, T.I., E.J.E.A. Buenos Aires, 1971, p. 10.

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