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Estudios Internacionales 175 (2013) - ISSN 0716-0240 • 9-39

Instituto de Estudios Internacionales - Universidad de Chile

Ejes y modelos en la etapa actual de la integración


económica regional en América Latina

Axes and models in the current scenario of regional


economic integration in Latin America

José Briceño Ruiz*

Resumen

Este trabajo se propone revisar el escenario actual de la integración re-


gional en América Latina. En este sentido, se argumenta que en la región
existe actualmente una fragmentación de la integración económica en
tres ejes: un eje de integración abierta, un eje revisionista y un eje anti-
sistémico. En cada uno de estos ejes se han adoptado distintos modelos
económicos de integración. Acudiendo a Max Weber proponemos la
existencia de tres tipos ideales de modelos de integración económica: el
regionalismo estratégico, el regionalismo productivo y el regionalismo
social. En el trabajo se analizan las interacciones existentes entre los ejes
y los modelos de integración existentes en la región latinoamericana.

Palabras clave: integración económica, modelos, América Latina,


ALBA, Mercosur, Alianza del Pacífico.

Abstract

This paper analyses the current scenario of regional economic integra-


tion in Latin America. Thus, we argue that a fragmentation of regional

*
Doctor en Ciencia Política del Instituto de Estudios Políticos de Aix-en-Provence, Francia. bricenoruiz@
gmail.com

Recibido el 3 de febrero de 2013. Aceptado el 7 de junio de 2013.

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integration in three axes currently exists in Latin America: an open


integration axis, a revisionist axis and an anti-systemic axis. In each of
these axes, different models of regional integration have been adopted.
By using Max Weber’s idea on ideal types, we propose three models
of regional integration: strategic regionalism, productive regionalism
and social regionalism. In the paper, we examine interactions between
the current axis and models of economic integration in Latin America.

Keywords: economic integration, models, Latin America, ALBA, Mer-


cosur, Pacific Alliance.

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José Briceño Ruiz • Ejes y modelos de la etapa actual de la integración económica...

La integración latinoamericana está hegemonía estadounidense (Rigirozzi,


en una nueva fase de su desarrollo en 2010).
la que emergen nuevas realidades y En este trabajo se acepta que la inte-
se ha roto el consenso en cuanto al gración latinoamericana está viviendo
modelo de integración que existió en una nueva fase, en la cual varios países
la década de 1990. La denominación han roto claramente con las premisas
de esta nueva etapa es aún objeto de dominantes durante la etapa del re-
discusión. Autores como José Antonio gionalismo abierto. No es fácil indicar
Sanahuja (2010), Pedro Da Motta Veiga cuándo se inicia esta nueva fase, pero
y Sandra Rios (2007), han acuñado la sí pueden señalarse algunos momentos
expresión «regionalismo post-liberal», críticos, como la firma del Consenso de
para definir la sustitución del contenido Buenos Aires en octubre de 2003 por
de la agenda de la integración latinoa- Luiz Ignacio Lula da Silva y Néstor Kir-
mericana, que pasó de estar centrada chner, el colapso de la negociación del
en la liberalización del comercio y las Area de Libre Comercio de las Américas
inversiones para dar prioridad a objeti- (ALCA) en la Cumbre de la América
vos políticos, sociales y productivos. No realizada en Mar del Plata en noviem-
está claro si para los autores señalados bre de 2005 o la reunión Cumbre de la
el regionalismo post-liberal es una eta- Comunidad Sudamericana de Naciones
pa del regionalismo latinoamericano o (CASA), realizada en Cochabamba,
un modelo de integración, pero para realizada en diciembre de 2006, en la
ellos sí lo está que el periodo del regio- cual se planteó un amplio debate sobre
nalismo abierto concluyó. Pia Rigirozzi, el modelo de integración que condujo
en cambio, prefiere utilizar la expresión a la transformación de esa iniciativa de
«regionalismo post-hegemónico», en el integración en la Unión de Naciones
cual se propone realizar una ruptura Sudamericanas (UNASUR).
con el discurso hegemónico durante la Al margen de cuál sea el momento
década de 1990, que asociaba el regio- inicial, es claro que el regionalismo la-
nalismo a los procesos de globalización tinoamericano atraviesa por un nuevo
bajo inspiración de las ideas neolibe- período, caracterizado por su compleji-
rales. En ese marco, el regionalismo se dad, por contradictorios momentos de
percibía como una respuesta defensiva continuidad y de ruptura con el modelo
a esos procesos globales. Para Rigirozzi, económico hegemónico en la década de
el regionalismo que se desarrolla en 1990. Igualmente, el nuevo momentum
América Latina en el decenio de 2000 regionalista se define por una compleja
intenta ir más allá de ser un mecanismo agenda, que no se limita a la integración
defensivo y en vez de ello sería más bien económica (que en el decenio de los no-
un espacio de contestación y resistencia venta privilegió la promoción de zonas
para enfrentar el neo-liberalismo y la de libre comercio o uniones aduaneras),
sino que comprende objetivos políticos,

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estratégicos, sociales, además de inten- humanos para proteger o transformar


tar ampliar la dimensión económica las estructuras existentes». Finalmente,
de la integración al incluir objetivos de el regionalismo es un proceso que tiene
carácter productivo. diversas manifestaciones e intensidades.
En este trabajo se adopta el concepto Así, el regionalismo comprende ini-
de «regionalismo» como la categoría ciativas de integración económica, de
ontológica objeto de análisis. El re- cooperación económica, de integración
gionalismo se define como un proceso política o cooperación o concertación
de tipo asociativo en que se producen política. La intensidad de esas mo-
en ámbitos espaciales delimitados del dalidades es variable. Por ejemplo, la
sistema internacional, denominadas integración económica regional puede
«macro-regiones» o regiones interna- expresarse desde la forma básica de una
cionales. Varios aspectos definen estas zona de libre comercio hasta la unión
regiones. En primer lugar, aunque el monetaria, pero incluso puede ir mucho
elemento de la contigüidad geográ- más allá de lo comercial y expresarse
fica es una variable para delimitar el en estrategia de desarrollo productivo
regionalismo, esta se suele interpretar conjunto.
de manera algo flexible. Así, las «Amé- Con base en estas premisas, se exa-
ricas» es considerada una región, cuya mina el estadio actual del regionalismo
base institucional es la Organización latinoamericano. El trabajo se centra en
de los Estados Americanos (OEA). No una dimensión específica de este último:
obstante, no existe contigüidad entre la integración económica regional. En
todos los países de esta región y su este sentido, se argumenta que en la
delimitación espacial es más bien dada nueva etapa post-liberal-post-hegemó-
por la ideas de Western Hemisphere nica del regionalismo latinoamericano
o Hemisferio Occidental, promovidas se observa la existencia de varios ejes
especialmente por Estados Unidos. Algo de integración regional, que expresan
similar sucede con el Foro de Coopera- la adopción de distintos modelos eco-
ción Asia-Pacífico (APEC en sus siglas nómicos, lo que a su vez es resultado
en inglés), «macro región» en la cual de complejos procesos políticos y eco-
no existe contigüidad geográfica entre nómicos que están teniendo lugar en
todos los países, sino que su ámbito es- la región desde inicios de la primera
pacial es definido por la noción espacial década del nuevo milenio.
«Océano Pacífico». En segundo lugar,
una «macro región internacional» es
1. Los ejes de la integración
socialmente construida. En este sentido,
se coincide con Björn Hettne y Fredrik económica latinoamericana
Söderbaum (2000: 38), quienes aseve-
Ciertamente, como bien señala
ran que «las regiones son proyectos po-
Roberto Russell (2010), la década
líticos y sociales, diseñados por actores

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de 1990 fue un periodo particular en heterogeneidad o fragmentación, ex-


América Latina, pues hubo cierta ho- presada en la existencia de varios ejes
mogeneidad sobre la conveniencia de de integración regional con modelos
una estrategia de desarrollo basada en económicos marcadamente distin-
el libre mercado y la apertura. Se debe tos. Puede señalarse que la evidencia
relativizar un poco ese consenso, pues histórica demuestra que en la fase del
existieron «velocidades» en cuanto a la regionalismo abierto también existieron
forma de aplicar esa estrategia. No fue ejes. Así durante el primer lustro de la
igual el proceso de reforma económica década de 1990 en el Cono Sur se pudo
en la Argentina gobernada por Carlos observar una fuerte regionalización de
Menem que en el Brasil de Fernando la interdependencia comercial en torno
Henrique Cardoso. El consenso y las al Mercosur, al que se sumarían Bolivia
distintas velocidades existieron en los y Chile como miembros asociados en
procesos de integración: aunque todos 1996, mientras que la región andina
adoptaron el discurso del «regionalis- se producía una reactivación de la in-
mo abierto», varió la forma en que este tegración andina en torno al dinámico
efectivamente se aplicó. Así, mientras núcleo Caracas-Bogotá (cf. Gutiérrez,
en el Tratado de Libre Comercio de 1999). Igualmente, México, Colombia
América del Norte (TLCAN) se optó y Venezuela intentaron crear un eje de
por un modelo de radical apertura integración en la Gran Cuenca del Ca-
acompañada por normas OMC plus ribe, mediante la creación del Grupo de
para los temas vinculados con el co- los Tres (G-3), que se articularía con las
mercio, en el Mercado Común del Sur iniciativas de cooperación e integración
(Mercosur), se excluyeron del acuerdo que se desarrollaban en América Cen-
sectores considerados estratégicos y tral y el Caribe Insular (cf. Giacalone,
no se adoptaron normas OMC plus. 1999). No obstante, con sus matices y
No obstante estos matices, en términos variantes todos esos ejes compartían
generales en la mayoría de los esquemas un modelo de integración basado en
regionales creados o relanzados en la la apertura comercial y la inserción
década de 1990, el núcleo central de la internacional. El escenario actual es
estrategia de integración era la promo- diferente, pues no se trata solo de que
ción del libre comercio y la búsqueda existen al menos tres ejes de integra-
de la inserción internacional. Este era ción, sino que estos proponen diversos
el modelo de integración hegemónico y modelos de integración, en algunos
era en torno a este modelo que existía aspectos contradictorios.
cierta homogeneidad. En el presente trabajo se examinan
En la nueva etapa del regionalismo estos distintos ejes de integración y
latinoamericano que se desarrolla a los diversos modelos de integración
partir de 2003 no existe homogenei- que propone cada uno de ellos. En
dad. En vez de ello se observa una este sentido, se propone la existencia

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de tres ejes de integración: el eje del implicaciones para la región. Finalmen-


regionalismo abierto; el eje revisionis- te, se presentan algunas conclusiones.
ta y el eje antisistémico. Acudiendo al Como se observa en la figura 1, en
concepto weberiano de tipos ideales, el actual escenario de la integración
en la sección siguiente, se proponen latinoamericana pueden observarse tres
tres modelos de integración regional: ejes de integración claramente diferen-
el modelo de regionalismo estratégico, ciados. Estos comenzaron a configu-
el modelo de regionalismo social y el rarse desde inicios del nuevo milenio,
modelo de regionalismo productivo. En cuando las transformaciones políticas
una tercera parte se examina el modelo en la región y el mundo comenzaron a
de integración que ha sido adoptado en crear condiciones adversas al modelo
cada uno de los ejes actualmente y sus imperante en la región.

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1.1 El eje de la integración abierta: «Norte-Sur», al reunir en su seno a


de los TLC a la Alianza del países desarrollados y en vías de desar-
Pacífico rollo. Su propulsor principal, Estados
Unidos, intentó expandir este modelo
El modelo en que se basa el primer
mediante el Área de Libre Comercio de
eje, al que denominamos «eje del inte-
las Américas (ALCA) y ante el estanca-
gración abierta», es el TLCAN suscrito
miento de este proceso ha optado por
entre Canadá, Estados Unidos y México
suscribir tratados bilaterales de libre
en 1994. Este es un proceso que consti-
comercio, como el CAFTA+RD celebra-
tuye un modelo de integración distinto
do con los países de América Central
de los modelos tradicionales que se
y República Dominicana o los TLC
desarrollaron en las oleadas previas de
firmados con Chile, Perú y Colombia.
regionalismo económico en las décadas
A partir de 2007 la mayoría de
del 1960 y 1970, mostrando diferencias
estos países que han suscrito TLC
sustanciales con la Unión Europea, el
comenzaron a adoptar una estrategia
referente externo más importante para
regional para responder a los críticos
los países latinoamericanos.
del enfoque sobre integración regional
El TLCAN es una expresión de esta
dominante en los años 1990. En tal
integración abierta, puesto que su obje-
sentido, en 2007 se lanzó el «Foro del
tivo de promover un espacio comercial
Arco del Pacífico Latinoamericano»,
preferencial no se hace a expensas del
un grupo regional constituido por
sistema multilateral de comercio. Al
Colombia, Costa Rica, Chile, Ecuador,
contrario, la preferencia regional se
El Salvador, Honduras, Nicaragua y
concibe como un paso previo hacia una
México. Esta iniciativa incluía, por un
mayor apertura global. Sin embargo, el
lado a los países que aún apoyaban el
TLCAN corresponde más a una versión
modelo de regionalismo abierto, ex-
del Asia Pacífico del regionalismo abier-
cepto Nicaragua y Ecuador. Por otro
to que a la propuesta por la CEPAL,
lado, con la excepción de Ecuador, en
pues carece de instrumentos para el fo-
el Foro se agrupaban todos los países
mento de la transformación productiva
que habían suscrito TLC con Estados
con equidad. Además de promover una
Unidos y la Unión Europea.
integración regional abierta, el TLCAN
El Foro se transformó en la Alianza
plantea la regulación de sectores como
del Pacífico en abril de 2011, cuando
la propiedad intelectual, las compras
solo Colombia, Chile, Perú y México
gubernamentales y las normas am-
establecieron un nuevo bloque regional
bientales y laborales relacionadas con
orientado a promover la «integración
el comercio. Los antiguos procesos de
profunda» y el libre comercio (De-
integración no incluirán estas materias.
claración Presidencial de Lima, 28 de
Por otro lado, el TLCAN se presenta
abril de 2011). La Alianza del Pacifico
como una modalidad de integración
representa una respuesta política de

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los gobiernos latinoamericanos que to- aunque se admitía la posibilidad de


davía apoyan el modelo de integración acuerdos sectoriales. A pesar de este
abierta, es una reacción al creciente pro- sesgo «comercialista», el Mercosur no
tagonismo del eje del ALBA y del go- adoptó la modalidad de «integración
bierno de Hugo Chávez en el escenario profunda», pues si bien se propuso
de la integración económica en América normar aspectos como la propiedad
Latina. El nuevo bloque se propone intelectual o las compras gubernamen-
buscar también ser un factor de equili- tales, no se planteó hacerlo aprobando
brio frente al cada vez mayor liderazgo normas de tipo OMC plus. De igual ma-
brasilero en América del Sur, sea en su nera, aunque en el Tratado de Asunción
accionar unilateral o en el marco del no se consideró la dimensión social, en
Mercosur. Finalmente, se argumenta la década de 1990 el Mercosur logró
que la Alianza constituye un mecanismo desarrollar una importante agenda
para negociar en común con los países sociolaboral, que condujo a la aproba-
del Pacífico (véase Briceño Ruiz, 2012). ción de una Declaración al respecto en
1998 y la firma de un acuerdo regional
sobre seguridad social ese mismo año.
1.2 El eje revisionista Desde el año 2000, en el Mercosur
Desde sus inicios el Mercosur fue se ha intentado establecer una sólida
un modelo híbrido, que aunque nació dimensión social que transcienda lo
con elementos típicos del «regionalis- meramente laboral. En otras palabras,
mo abierto», en particular su énfasis se trata de la aplicación de políticas
inicial en la apertura y desgravación redistributivas que se propone proveer
comercial, al mismo tiempo careció de a amplios sectores de la población del
una agenda de «integración profunda». acceso a educación, salud, vivienda y
El Mercosur combinó un proceso de servicios públicos de calidad. Son me-
apertura sin «integración profunda» didas típicas del Estado de bienestar,
con la ausencia de mecanismos para dirigidas a reducir la pobreza, redis-
avanzar en la integración social y pro- tribuir la riqueza, promover la justicia
ductiva. Sin embargo, desde el año 2003 social y reglamentar las instituciones
ha comenzado a revisar este modelo de mercado. Expresión de este proceso
de integración para crear y fortalecer es la creación de instancias como la
los aspectos sociales y productivos en Reunión de Ministros y Autoridades
el bloque regional, proceso de revisión de Desarrollo Social en 2000, la crea-
que se mantiene incluso en nuestros ción del Instituto Social del Mercosur
días. en 2007 y la aprobación en 2008 del
El Tratado de Asunción, estableció Plan Estratégico de Acción Social del
como objetivos el perfeccionamiento Mercosur.
de una zona de libre comercio y la De igual manera, el Mercosur ha
adopción de un arancel externo común, venido gradualmente rescatando la idea

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de convertir la integración regional en se transforma la UNASUR, proyecto


un mecanismo para promover la inte- mucho más ambicioso con objetivos en
gración productiva, en particular la in- las esferas ambiental, social, política y
dustrialización. Se están apenas dando de seguridad. La UNASUR es parte del
los primeros pasos en esta dimensión proceso de revisión del regionalismo
productiva del Mercosur al adoptarse en América Latina, pero no es una ini-
un Programa Regional de Integración ciativa de integración económica. Por
Productiva (2008), aprobarse un fondo ello, no se puede ubicar en los modelos
de apoyo a las PYMES (2008) y comen- descritos en esta sección de este trabajo.
zar a tratarse las asimetrías productivas, En consecuencia, no es objeto de análi-
mediante la creación en 2005 de un sis en este artículo.
Fondo de Convergencia Estructural
(FOCEM). 1.3 El eje anti-sistémico
El proceso de revisión del modelo de
integración económico del Mercosur se Al menos según los documentos y
ha acompañado de la construcción de discursos de los líderes de sus países
un nuevo regionalismo sudamericano, miembros el ALBA representa un mo-
en el cual Brasil ha tenido un lideraz- delo de integración anti-capitalista y
go. En sus inicios, el proceso tenía en anti-imperialista. El nuevo esquema de
esencia un contenido comercial en la integración fue anunciado por Hugo
estricta lógica de la apertura y el regio- Chávez en diciembre de 2001 durante la
nalismo abierto, cuya expresión era la III Cumbre de la Asociación de Estados
constitución de una Área Sudamericana del Caribe (AEC), bajo el nombre de
de Libre Comercio (ALCSA), resultado Alternativa Bolivariana para las Amé-
de la convergencia entre la Comunidad ricas (ALBA), como una iniciativa que
Andina (CAN) y el Mercosur. Sin em- planteaba promover un modelo nuevo
bargo, luego surgieron propuestas más de integración basado en la solidaridad,
allá de lo comercial. En 2000 el objetivo la complementariedad y la cooperación.
de crear un ALCSA se sustituyó por la En sus inicios, la propuesta ALBA
más ambiciosa meta de establecer una careció de mayor contenido, pero a
Comunidad Sudamericana de Naciones partir del año 2002 se presentó como
(CASA), que además de la convergencia una alternativa al ALCA que impulsaba
comercial entre la CAN y el Mercosur, Estados Unidos y, en este sentido, se
se proponía el desarrollo de la infraes- dieron a conocer varios documentos
tructura regional sudamericana, la oficiales en los cuales se contrastaban
cooperación contra el crimen organi- las propuestas de negociación que se
zado, en particular el tráfico de drogas, estaban realizando en el marco de la
y la consolidación de América del Sur negociación hemisférica con lo plantea-
como zona de paz. En 2007, CASA do por el ALBA. En abril de 2004, en
un encuentro realizado en La Habana,

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Hugo Chávez, Fidel Castro y Evo Mo- desarrolle no a partir de una estrategia
rales, relanzan la propuesta, que deja tradicional basada en el libre comercio,
de ser simplemente una alternativa al sino que, como se analiza en la próxima
ALCA. Incluso se ha cambiado el signi- sección, propone un nuevo modelo de
ficado de la sigla ALBA, que ha pasado integración económica no capitalista.
a significar la Alternativa Bolivariana
para la América, a veces, la Alternativa
Bolivariana para nuestra América y 2. Los modelos de
más recientemente Alianza Bolivariana integración económica en
de los Pueblos de América (cf. Briceño América Latina
Ruiz, 2011). En su fase más reciente, el
ALBA comienza a consolidarse como En esta sección se analizan los
iniciativa regional, presentándose modelos de integración que pueden
como una modalidad de integración observarse en los distintos ejes de la
no capitalista y distinta del modelo de integración económica latinoamerica-
integración abierta. Incluso, se le ha na. Acudiendo a la noción weberiana
presentado como un elemento de la de tipo ideal, se argumenta que existen
lucha mundial contra el imperialismo tres tipos ideales o modelos económicos
(Martínez, 2006: 66-87). que han sido adoptados en los diversos
Algunos autores argumentan que ejes de integración regional: el modelo
el ALBA no puede considerarse una de regionalismo estratégico, el modelo
iniciativa de integración económica de regionalismo social y el modelo de
sino un espacio de cooperación econó- regionalismo productivo. La extensión
mica y política (Buck, 2010: 397). Es de este trabajo no nos permite un aná-
posible que esta afirmación sea válida lisis exhaustivo de estos tres modelos
para explicar los primeros años del de integración, pero, presentan sus
ALBA, pero desconoce la evolución de rasgos fundamentales, de manera de
esta iniciativa. El ALBA ha incluido en poder aplicarlos posteriormente a los
su agenda temas como la formación diversos ejes de integración existentes
de empresas Gran-nacionales, algunas actualmente en América Latina.
de la cuales se proponen desarrollar El uso de las expresiones «estratégi-
proyectos industriales en conjunto. co» y estrategia no ha sido de uso amplio
Esto constituye claramente una for- en los estudios de integración regional,
ma de integración económica. Más es mucho más frecuente en los estudios
recientemente, en el seno del bloque sobre la guerra y el conflicto. Así, Ber-
se ha planteado la creación de la zona nard Brodie (2008: 13) argumenta que
económica del ALBA (conocida como la estrategia «está dedicada a descubrir
Eco ALBA). Ahora bien, el ALBA no es cómo los recursos humanos y materiales
una forma tradicional de integración de una nación pueden ser desarrollados
económica, sino que plantea que esta se y utilizados con el fin maximizar la efec-

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tividad total de la nación en la guerra». El modelo del regionalismo estra-


En un sentido militar más limitado, «la tégico se concibe como una «regiona-
estrategia se relaciona con los recursos lización» de la denominada «política
movilizados y se concentra en el logro de comercial estratégica» que comienza a
una victoria sobre un enemigo especifico desarrollarse en la década de los años
bajo un conjunto de circunstancias polí- ochenta del siglo XX. Esta última se
ticas y geográficas» (Brodie, 2008: 13). basó en las premisas de la nueva teoría
Este uso casi exclusivamente militar del comercio internacional sobre la
dado a la «estrategia» y lo «estratégico», existencia de ciertos sectores en los
hace que la expresión genere reservas cuales predominan formas de compe-
en el campo de los estudios sobre re- tencia monopólica y sobre la existencia
gionalismo internacional, porque se de determinados sectores que, por ser
puede dar la impresión de que lo está considerados estratégicos, merecen
concibiendo como instrumento de una especial atención de los Estados (véase
«guerra económica». Esta es una noción Brander, 2005; Richardson 1990,
ya presente en los trabajos de Federico 1992).
List, Carlos Marx y Alberto Hirschman, El modelo de regionalismo estraté-
aunque ellos no utilizasen la expresión gico se distingue por su marcado sesgo
en sí, que apenas comienza a aparecer comercial. Este modelo ha proliferado
en textos más recientes, aunque sin una en la nueva oleada de integración que
definición clara. En general, la expre- se inició a fines de <la década de 1980
sión «guerra económica» describe «una e inicios de la década de 1990 y se
competencia económica internacional considera como expresión del deno-
exacerbada, mediante el uso de medidas minado nuevo regionalismo. Uno de
injustas por los gobiernos, en particular sus pilares es la apertura de la región
estrategias de tipo «begar-thy-neighour» integrada a la economía internacional,
(Coulomb, 2004: 252). El problema de pues se muestra en principio como una
esta definición es que no distingue entre forma de «regionalismo abierto». Así,
guerra económica y competencia econó- el libre comercio es un importante com-
mica. En realidad, en esta ultima los ponente de este modelo. Sin embargo,
Estados buscan es mejorar su posición como en el caso de la política comercial
relativa en la economía mundial y no estratégica, los sectores que se consi-
destruir a sus rivales (Coulomb, 2004: deran importantes para el desarrollo
252). El regionalismo estratégico, como económico de los países del bloque son
cualquier forma de regionalismo, es un excluidos de este régimen global de libre
tipo de relación asociativa en el sistema comercio.
internacional, por lo que su interpreta- El regionalismo estratégico se desa-
ción mediante instrumentos que explican rrolla com<o respuesta de los Estados,
la «guerra económica» no es correcta. en alianza con las empresas transna-
cionales (ETN) al escenario global de

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la postguerra fría, uno de cuyos com- integración profunda y exigen que los
ponentes es la proliferación de bloques países del adopten normas sobre inver-
económicos. Se trataría entonces de un siones, servicios o propiedad intelectual
elemento de la estrategia de algunos como pay off por el mayor ingreso a sus
países para «administrar» de manera mercados. En los «acuerdo sur-sur»,
más coherente el proceso de globaliza- es decir, los que solo incluyen a países
ción y la creciente regionalización del en vías de desarrollo, aunque algunos
comercio que la acompaña. Una de las de ellos sean considerados emergentes,
formas de «administrar» estos procesos existe menor tendencia a una agenda
es mediante la promulgación de una de «integración profunda».
agenda de «integración profunda». Este Como señala, Andrew Axline, uno
es un concepto elaborado por Robert de los primeros en utilizar el concepto
Lawrence, para quien los tradicionales de regionalismo estratégico, este se
acuerdos de integración se proponían compone de un conjunto de respues-
apenas facilitar el acceso a los mercados tas estratégicas de los Estados a las
mediante la desgravación arancelaria y fuerzas de la globalización, que sería
la eliminación de las barreras no aran- utilizado para desarrollar una estrategia
celarias que impidan la libre circula- mercantilista para beneficiarse de los
ción de bienes y servicios. Esta era una cambios en las ventajas comparativas,
«integración superficial». No obstante, al otorgar a sus empresas una posición
en un contexto de apertura comercial privilegiada en la economía mundial (cf.
y globalización financiera, Lawrence Axline, 1999). También el canadiense
consideraba necesario profundizar David Mercier define el regionalismo
la agenda de integración para incluir estratégico en la medida en que este
elementos que «están relacionados con se propone controlar la globalización,
el comercio», como las inversiones, la es decir, intenta consolidar la seguri-
propiedad intelectual, las compras gu- dad económica entre los países que
bernamentales y las normas laborales participan en estos acuerdos para que
y ambientales. En consecuencia, estos puedan enfrentar la competencia global
temas deben ser parte de las nuevas (Mercier, 2000: 115-116).
iniciativas de integración regional (Cf. Nuestro enfoque es que aunque
Lawrence, 1996). el Estado es un actor crucial en la
Ahora bien, la profundidad y am- formulación del regionalismo estraté-
plitud de esta «integración profunda» gico, las ETN, incluso aquellas de los
depende de si se trata de un «acuerdo países emergentes, también cumplen
norte-sur» o de un «acuerdo sur-sur». una función decisiva en su diseño. El
En los primeros, es decir en iniciativas regionalismo estratégico es un proceso
de integración que incluyen a países que resulta de una alianza entre Estados
desarrollados y en vías de desarrollo, nación y empresas multinacionales o
les interesa promover una agenda de empresas nacionales que han comenza-

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José Briceño Ruiz • Ejes y modelos de la etapa actual de la integración económica...

do el proceso de internacionalización de Frente al predominio del enfoque


sus actividades económicas. Como ya del regionalismo estratégico, desde hace
se indicó, el antecedente del regionalis- algunos años se ha venido planteando la
mo estratégico es la política comercial necesidad de fomentar un regionalismo
estratégica, una modalidad de política social, en particular, en los trabajos de
comercial desarrollada por la nueva Nicola Yeates (2005) y Bob Deacon et
teoría del comercio internacional para al. (2007) y Pia Riggirozzi (2012). Estos
describir el funcionamiento de determi- autores proponen que la integración
nados mercados oligopólicos. Se enten- regional no sea solamente un mecanis-
día que existían ciertos sectores, como la mo para construir un espacio comercial
industria de la aviación, que necesitaban o de promoción de las inversiones,
de algún tipo de intervención del Estado, sino como un espacio para construir
que apoyaría a los sectores privados, en y aplicar una política social regional.
principio, responsables de su desarrollo. La integración se concibe como un
La política comercial estratégica comenzó mecanismo para establecer estándares
a promoverse en Estados Unidos y otros sociales a escala regional, fomentar
países desarrollados en la década de políticas redistributivas e incluso crear
1980, cuando se estableció una alianza instituciones que permitan a los ciuda-
entre los Estados y las ETN, cuya sede danos hacer valer sus derechos sociales.
principal estaba en estos países. Mediante la aplicación de esta política
Al final de la década de 1980 y social regional se establecerían medidas
durante los años 1990, la creciente para reducir los efectos negativos que
competencia intraempresa, condujo a genera la apertura comercial en un
las ETN a aumentar el lobby ante los proceso de integración y se aprobarían
gobiernos en pro de la adopción de mecanismos para reducir las asimetrías
medidas que eviten el deterioro de su existentes entre los países y al interior
influencia en ciertas regiones o países. de estos. Mariana Vázquez (2011: 184)
Para un Estado apoyar a sus empresas ha acuñado la expresión «regionalismo
también era un mecanismo para evitar inclusivo» para describir la nueva etapa
la disminución de sus capacidades o que del Mercosur, en la cual destaca la cons-
el aumento de las ganancias obtenidas trucción de una sólida dimensión social
por otras ETN cuya sede central se de la integración, concebida no solo
encuentra en otro Estado a expensas como una respuesta a los desequilibrios
suyas. Entonces, la política comercial nacionales y regionales causados por la
estratégica se transformó en regionalis- apertura comercial sino más bien enten-
mo estratégico y la integración regional dida como un estrategia regional para
comenzó a utilizarse como mecanismo resolver la histórica deuda social de
para promover los intereses de la alian- muchas sociedades latinoamericanas.
za Estado nación- ETN. Esta idea de «regionalismo inclusivo»

21
Estudios Internacionales 175 (2013) • Universidad de Chile

es muy cercana al modelo de regiona- el modelo del regionalismo productivo


lismo social. no propone solamente la promoción
El tercer modelo de integración, des- de grandes proyectos industriales que
crito como «regionalismo productivo», impliquen una fuerte participación del
retoma alguna de las premisas vigente Estado, sino también políticas como la
durante el periodo del regionalismo creación de cadenas productivas en la
autonómico latinoamericano de la dé- cuales participen empresas locales, na-
cada del sesenta (véase Briceño Ruiz, cionales, regionales y transnacionales.
2001, 2007). Este modelo se remonta Estos tres modelos de integración
a las ideas de la escuela estructuralista responden a motivaciones económicas
de la Comisión Económica para Amé- y políticas muy diversas. El tipo de ac-
rica Latina (CEPAL) (Prebisch 1959; tor que los promueve también es muy
CEPAL, 1959) y el estructuralismo diverso, así como la lógica de acción
francés (Perroux 1966; Marchal, 1965, política que utilizan. Igualmente, es
1970), de utilizar la integración como diferente la agenda de integración.
parte de la estrategia de transformación Estas diferencias se pueden observar
productiva regional. En años recientes en la cuadro 1.
se ha visto un renacer de estas propues- Finalmente, estos tres modelos de
tas por parte de instituciones como la integración pueden presentarse de for-
Conferencia de las Naciones Unidas so- ma pura o combinada. Así, un proceso
bre Comercio y Desarrollo (UNCTAD, de integración regional puede optar
2007). En el modelo de integración por un modelo de regionalismo estra-
productiva el objetivo es el fomento tégico puro. Tal es el caso del TLCAN,
de un desarrollo industrial conjunto y que es un ejemplo paradigmático de
la unificación de las economías sobre regionalismo estratégico norte-sur. En
la base del principio de la solidaridad. otros casos, en cambio, se observa que
Ahora bien, este modelo no propone se ha optado por un modelo hibrido,
exactamente un regreso a una estrategia en el que subsisten elementos de los
de «crecimiento hacia adentro», sino tres modelos arriba explicados. En la
que se acerca más a lo que el especialista siguiente sección se analiza cómo se
Osvaldo Sunkel (1991) describe como presentan estos modelos de integración
«crecimiento desde dentro». Eso supo- en los ejes actualmente existentes en
ne utilizar las capacidades endógenas y América Latina.
los recursos nacionales para promover
la diversificación productiva, en parti-
cular, la industrialización, pero partien-
do de la premisa que este proceso no
está en contradicción con la conquista
de mercados mundiales y la atracción
de las inversiones extranjeras. Por esto,

22
José Briceño Ruiz • Ejes y modelos de la etapa actual de la integración económica...

Cuadro 1: Los modelos de integración

  Moti-
Motiva-
vación Lógica de
ción polí- Agenda Actores
económi- Acción
tica
ca
Regionalis- Poder Au- Bienestar Liberalización Nacional + Estados con orienta-
mo estraté- tonomía Ganancia comercial + regu- internacio- ción globalista
gico lación de los temas nal ETN
relacionados con el (doble nivel) Empresas nacionales
comercio en fase de internacio-
Exclusión de sec- nalización
tores estratégicos
Regionalis- Autonomía Desarrollo Industrialización Nacional Estados con orienta-
mo produc- económico ción nacionalista
tivo Actores económicos
nacionales no inter-
nacionalizados
Regionalis- Protesta Equidad Política social Transnacio- Ciertas organiza-
mo social nal ciones internacio-
nales
Estados con orienta-
ción socialista
Sociedad civil

Fuente: elaboración propia.

3. Ejes y modelos de el eje de regionalismo abierto opta por


integración en la un modelo de regionalismo estratégico,
etapa postliberal – aunque inspirado en el modelo norte-
sur del TLCAN. El eje revisionista sufre
posthegemónica
la transformación de un modelo de
En el complejo escenario actual de la regionalismo estratégico a un hibrido
integración regional en América Latina que incluye elementos de los modelos
existe una estrecha relación entre los de regionalismo social y productivo.
ejes de integración realmente existentes. El eje antisistémico, aunque propone
A riesgo de simplificar el escenario ac- políticas propias del modelo de regio-
tual por razones explicativas, el panora- nalismo social y, en cierto grado, del
ma actual nos muestra tres escenarios: regionalismo productivo, al mismo

23
Estudios Internacionales 175 (2013) • Universidad de Chile

tiempo se concibe como un modelo no Mercosur se enmarcaba en el modelo


capitalista. Esto excluiría al ALBA de del regionalismo estratégico.
los modelos de integración conocidos, A partir del Consenso de Buenos
salvo que se le asimile al fenecido pro- Aires, el liderazgo regional optó por
yecto de integración no capitalista del revisar el modelo de regionalismo es-
Consejo de Ayuda Mutua Económica tratégico que predominó en los años
(COMECON). 1990. La inclusión de objetivos sociales
y productivos expresa la opción por una
reforma del modelo de regionalismo
3.1 La revisión del modelo de estratégico y su énfasis en lo exclu-
integración del Mercosur sivamente comercial. Este abandono
El Mercosur adoptó originalmente de un modelo puramente comercial se
el modelo de regionalismo estratégico. confirma por la negativa del bloque
El Tratado de Asunción se propuso regional a iniciar negociaciones para
esencialmente establecer una zona de firmar un acuerdo de libre comercio con
libre comercio y una unión aduanera, Estados Unidos. Aunque el gobierno de
a lo que se sumaba la exclusión de dos Tabaré Vázquez (2005-2010) en Uru-
sectores considerados estratégicos: los guay intentó iniciar negociaciones con
automóviles y el azúcar. Esto se com- Washington, el amplio debate que se
pletaba con la inclusión en listas de produjo en los socios del Mercosur dejó
excepción de una serie de productos claro que, si no se hacía en marco del
sensibles, como los bienes de capital, Mercosur, la firma de un TLC, suponía
cuya desgravación comercial sería más abandonar el bloque regional.
lenta. Sin embargo, la ruptura con un
Como se explicó en la sección 2 de modelo de regionalismo estratégico no
este artículo, durante la década de 1990 ha significado que se haya adoptado la
se produjo una reacción de sectores estrategia de ruptura que propone el
sociales e incluso de instancias guber- eje antisistémico del ALBA. En el Mer-
namentales para dotar al Mercosur de cosur se ha preservado la dimensión
aspectos sociolaborales y educativos, comercial establecida en el Tratado de
áreas en las cuales se realizaron pro- Asunción. Ciertamente, existen aún
gresos importantes. No obstante, en tareas pendientes en esta dimensión,
general la evolución de ambas esferas por ejemplo, el mantenimiento de la
se baso en un enfoque que se proponía irregular figura de una «unión adua-
compensar las pérdidas causadas por la nera imperfecta» y algunas acciones
apertura comercial, por ejemplo, en el bilaterales que constituyen violaciones
ámbito laboral. Por ello, se puede afir- a la zona de libre comercio. Además,
mar que a pesar de estos avances en la el intercambio comercial, fuertemente
dimensión social, el proyecto inicial del reducido desde la crisis del real y el de-
fault argentino, se ha ido recuperando

24
José Briceño Ruiz • Ejes y modelos de la etapa actual de la integración económica...

de forma significativa. A pesar de que del Código Aduanero del Mercosur, en


la importancia del mercado regional la Cumbre del Consejo del Mercado
varía para cada país y algunos de ellos Común, realizado en San Juan en julio
se han beneficiado más ampliamente de de 2010 (cf. Bizzozero, 2011: 33). La
la zona de libre comercio, lo cierto es aprobación del Código se acompañó
que «las exportaciones entre los cua- de la eliminación del cobro doble del
tro países aumentaron casi seis veces arancel y la distribución de forma
en valor entre inicios de la década de conjunta de la renta aduanera. La
1990 y fines de la década siguiente. aprobación de estos instrumentos de
Esto supera el aumento de poco más integración comercial demuestra que a
de cuatro veces de las exportaciones pesar de la diversificación de la agenda
mundiales totales durante el mismo del Mercosur, las cuestiones relaciona-
periodo» (Baumann, 2011: 169). Esto das con la zona de libre comercio y la
no implica que el Mercosur sea total- unión aduanera continúan siendo ejes
mente una historia exitosa en términos centrales del proceso de integración.
comerciales, pues la intensidad de la De lo anterior se colige que la cues-
interdependencia continúa siendo muy tión comercial continúa siendo un tema
baja, representando en 2008 apenas el fundamental en el Mercosur y la dimen-
15.3 % del comercio total del bloque sión en que, con susaltibajas, el bloque
en 1998 (Schelhase, 2011: 179). La ha producido, resultados concretos. En
intensidad de la interdependencia es un otras palabras, aunque el Mercosur ha
incentivo clave para promover la coo- realizado una revisión de un modelo
peración y reasignar discrecionalidad basado exclusivamente en el comercio,
en el manejo de instrumentos de política esto no ha significado abandonar su di-
(cf. Bouzas, Motta Veiga, Rios, 2010). mensión comercial. Esto separa al Mer-
En consecuencia, si bien es cierto que el cosur del eje anti-sistémico del ALBA y
comercio intrarregional ha crecido en su prédica de un modelo de integración
los 21 años de existencia del Mercosur, que excluye el libre comercio.
la intensidad de la interdependencia es No obstante, el Mercosur está ha-
aún baja y esto último evidencia una ciendo esfuerzos por consolidar una
debilidad estructural de la dimensión dimensión social y una dimensión
comercial del proceso de integración. productiva, explicadas brevemente en
El riesgo sería que incluir temas la sección 2. La mayor crítica a este
sociales y productivos en la agenda conjunto de iniciativas es simplemente
de trabajo pueda generar desinterés definirlas como «retórica» (Malamud,
en la dimensión comercial y provocar 2005) o sostener que sirven como fuga
un mayor deterioro de la intensidad hacia adelante para escapar de las
de la interdependencia. Sin embargo, dificultades que plantea la dimensión
se han producido avances en materia comercial del Mercosur (cf. Abreu,
comercial, por ejemplo, la aprobación 2005; Almeida, 2007). Se trataría de

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Estudios Internacionales 175 (2013) • Universidad de Chile

una «pérdida de foco», característica tránsito de camiones mexicanos en


reiterada de los procesos de integración Estados Unidos, que debía estar en vi-
en América Latina, que conduce a su gor en 1995, pero que solo se aplica a
irrelevancia (Bouzas, Motta Veiga, Rios, partir de 2011. Esto nos conduce a una
2010: 339). tercera reflexión, que es la necesidad de
Estas críticas deben ser objeto evaluar un proceso complejo como el
de sería reflexión por quienes están Mercosur en todas sus dimensiones y
revisando el modelo de integración no solo a partir de una variable como
del Mercosur. No obstante, existen la intensidad de la interdependencia,
acciones concretas, muchas veces in- pues de lo contrario tendríamos una
visibilizadas. Por ejemplo, el Acuerdo «fotografía distorsionada» del proceso
Multilateral de Seguridad Social se de integración, que simplemente expre-
está aplicando desde hace varios años. saría una preferencia metodológica o
Se han desarrollado experiencias con- incluso una opción política.
cretas de integración productiva, como Sin embargo, es preciso considerar
en el ámbito de muebles y madera; algunas de las críticas al proceso de
se están llevando a cabo proyectos revisión del modelo del Mercosur. Por
financiados con recursos del Fondo de ejemplo, deben establecerse criterios
Convergencia Estructural (FOCEM). realistas al introducir elementos del
Puede ser que se critique la viabilidad, modelo de regionalismo social. Así,
sustentabilidad o incluso el impacto existe un amplio debate sobre la forma
real de estas iniciativas en el desarrollo en que la integración regional puede
del bloque, pero en ese caso la argu- ayudar a resolver los problemas de la
mentación no debería ser acusarlas de pobreza y la exclusión social (véase Te
«retórica» pues existen en la realidad Velde, 2006). El modelo de regionalis-
y se están implementando. En segundo mo social reconoce que la integración
lugar, la experiencia del Mercosur en puede cumplir un papel importante en
los años recientes, no parece justificar tal proceso. No obstante, no puede pre-
el argumento de la pérdida de foco pues sumirse que la integración regional va
como se dijo, el tema comercial no ha a resolver los problemas sociales de los
dejado de ser parte de la agenda, y así países de la región, pues esto continua
lo evidencia la aprobación del Código siendo esencialmente un esfuerzo nacio-
Aduanero. La existencia de conflictos nal. Esto es parte de lo que Aldo Ferrer
comerciales no se puede negar y cier- describe como densidad nacional, uno
tamente expresa que existen problemas de cuyos elementos es la cohesión so-
en el proceso de integración, pero tam- cial. En palabras de Ferrer (2007: 149),
poco significa su fracaso. Si aceptamos «el avance de la integración depende
ese argumento, en algún momento se en gran medida de materias propias de
hubiese podido el fracaso del TLCAN la situación interna de los países y que
porque no se había autorizado el libre solo tienen solución dentro de cada

26
José Briceño Ruiz • Ejes y modelos de la etapa actual de la integración económica...

espacio nacional. Tales, por ejemplo, las de estas medidas estructurales implica
políticas sociales para elevar el nivel de superar el modelo de regionalismo es-
vida y ampliar el mercado interno…». tratégico. Por ello, lo definimos como
Teniendo en cuenta esto, y consideran- un «eje revisionista», que no plantea
do que ni siquiera la Unión Europea ha ni un retorno al proteccionismo ni una
logrado establecer una política social ruptura con el sistema mundial de co-
regional de carácter supranacional, mercio, sino que se propone superar las
la inclusión de elementos del modelo limitaciones que ha tenido la integra-
de regionalismo debe ser un proceso ción en aspectos como el tratamiento
realista, con objetivos realmente rea- de las asimetrías, la transformación
lizables, de lo contrario se terminará productiva y la equidad en la distribu-
dando razón a quienes argumenta que ción de las ganancias y pérdidas de la
se trata solo de retórica. integración, elementos no previsto en la
Es claro entonces que el Mercosur pura lógica competitiva del modelo de
ha transformado su agenda de inte- regionalismo estratégico. En términos
gración para incluir además de los de modelo, esto ha significado que el
temas comerciales, objetivos sociales Mercosur constituya actualmente un
y preocupaciones neo-desarrollistas, complejo proceso de integración, una
lo que refleja que «existe una crecien- suerte de «hibrido» en el cual existen
te aceptación que el bloque necesita objetivos, instrumentos e instituciones
medidas estructurales más profundas de los modelos de regionalismo estraté-
para sobrevivir y superar el riesgo de gico, regionalismo social y regionalismo
descomposición» (Celli, Marcus, Tus- productivo (véase la figura 2)
sie y Peixoto, 2011: 52). La adopción

27
Estudios Internacionales 175 (2013) • Universidad de Chile

3.2 El modelo del eje de común. Además, para los esquemas de


integración abierta integración que pretenden convertirse
en mercados comunes, los TLC crean
El eje de la integración abierta
un marco normativo en sectores como
adopta buena parte de las premisas del
la propiedad intelectual, servicios e
modelo de regionalismo estratégico.
inversiones adaptados al «modelo
Sin embargo, a diferencia del modelo
TLCAN», sin respetar la normativa
del Mercosur previsto en el Tratado de
subregional existente o, en el caso de
Asunción, en este eje se ha adoptado
que no existan avances en estas áreas,
por formas de integración norte-sur y
imponiéndola de antemano. Esto habría
una agenda de integración profunda.
generado una irrelevancia de los proce-
La razón de esta situación es que este
sos de integración regional o profundas
eje se construyó en torno a la firma de
crisis internas en estos estos, como en el
TLC bilaterales, cuyo fundamento es
caso de la Comunidad Andina (CAN),
el TLCAN.
en la cual se produjo una división entre
La firma de los TLC ha sido parte
sus miembros sobre la conveniencia de
de un intenso debate en la región. En
suscribir un TLC con Estados Unidos.
América Latina se ha argumentado
Esta fue la razón alegada por el gobier-
que los TLC profundizan la natura-
no de Hugo Chávez en Venezuela para
leza asimétrica de las negociaciones
retirarse de la CAN en 2006 y explica
comerciales hemisféricas y reducen la
la actual división de este bloque en un
posibilidad de acuerdos comerciales
eje Bogotá-Lima y otro Quito-La Paz.
recíprocos (Bouzas, 2005: 17). También
En términos de modelos de integra-
se argumenta que en los TLC se ha
ción, los cuatro TLC hasta ahora sus-
cedido en disciplinas y estrategias de
critos entre los países latinoamericanos
desarrollo «comprometiendo no sólo el
son nítida expresión del «modelo TL-
manejo de recursos estratégicos sino el
CAN». Del análisis del contenido de los
propio control de los mismos, dadas las
acuerdos suscritos por Estados Unidos
concesiones en inversiones y solución
con Chile, América Central y República
de controversias» (Fairlie, 2006: 193).
Dominicana, Perú y Colombia, puede
También se alega que los TLC pueden
observarse que buena parte de las nor-
afectar los procesos subregionales de
mas y disciplinas del TLCAN y de las
integración, la mayoría de los cuales
propuestas del ALCA sirvieron de base
están en la etapa de unión aduanera.
a los TLC. Por ejemplo, el TLCAN,
Como los tratados han sido finalmente
como el proyecto del ALCA, se basa en
suscritos por cada país en forma indivi-
los principios de trato nacional, que se
dual y no por los esquemas regionales
transformó en trato local (en el sentido
actuando como grupos, esto implicaría
de limitar la capacidad de los gobiernos
perforar la unión aduanera y diluir las
locales o regionales de establecer algún
posibilidades de una política comercial
tipo de medida de apoyo regional o

28
José Briceño Ruiz • Ejes y modelos de la etapa actual de la integración económica...

sectorial) y transparencia (Estay y Daza, disciplinas más exigentes que las que
2005: 51). En términos de acceso a los están vigentes en el plano multilateral.
mercados, en el TLCAN se propone la Contrasta en cambio la escasa regula-
creación de una amplia zona de libre ción a las cuestiones no arancelarias
comercio para la totalidad del universo relativas al acceso a los mercados. En
arancelario mediante un proceso de concreto, no existe normativa para
liberalización arancelaria lineal a través regular las normas anti-dumping y los
del mecanismo de las listas negativas, derechos compensatorios, mecanismos
con un universo arancelario significa- de protección para-arancelaria bastante
tivo desgravado en la fase inicial del utilizados por Estados Unidos. Como
proceso de integración. Estos principios en el caso del ALCA, el tema de los
y esta metodología de liberalización subsidios y apoyos a la agricultura tam-
comercial se propuso para el fallido poco es regulado en los TLC (Briceño
ALCA y fueron luego incorporados en Ruiz, 2009).
los TLC suscritos por Estados Unidos La Alianza del Pacífico también
con los países de América Latina (Cf. adoptó el «modelo TLCAN». Dos
Briceño Ruiz, 2009). elementos distintivos de ese modelo
La agenda no arancelaria de los TLC de integración están presentes en el
es la típica de un acuerdo de «integra- nuevo bloque regional: su carácter
ción profunda» como la promovida exclusivamente comercial y abierto, y
por el modelo TLCAN. Es evidente la su agenda de «integración profunda».
similitud de temas con relación a los La Alianza del Pacífico asume estas
negociados en el ALCA. Este es un as- dos premisas. En la Declaración Presi-
pecto central de la estrategia de Estados dencial del encuentro de Lima en abril
Unidos, que ofrece una apertura de su de 2010, se señala de forma expresa el
mercado a cambio de la adopción de compromiso con el libre comercio. Al
normas «OMC plus» en temas rele- respecto se asevera que los acuerdos de
vantes, algunos de los cuales ni siquiera libre comercio «ofrecen una excelente
han sido negociados en el ámbito de plataforma que facilita y propicia la
la OMC. En este sentido, los temas no integración de nuestras economías; y
arancelarios de los TLC bilaterales son (…) reafirmando que los acuerdos que
exactamente los mismos promovidos alcancemos en el marco de esta iniciati-
en la «Agenda Singapur», ya regulados va deberán contribuir y profundizar los
en el TLCAN y que pretendieron ser acuerdos económicos, comerciales y de
normados en el ALCA. En concreto, integración que nuestros países hayan
estos temas son las inversiones, los suscrito a nivel bilateral, regional y
servicios, las compras gubernamen- multilateral» (Declaración presidencial
tales y la propiedad intelectual. Los sobre la Alianza del Pacífico, 28 de abril
países latinoamericanos han aceptado de 2011). Este objetivo fue ratificado
compromisos OMC plus que suponen en el Acuerdo Marco firmado en Pa-

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Estudios Internacionales 175 (2013) • Universidad de Chile

ranal, Antofagasta, en junio de 2012, en la cual se promueve la libre circula-


en el cual se expresa la convicción de ción de factores productivos (capitales,
fortalecer los acuerdos de integración servicios, personas).
como «espacios de concertación y Luego de casi dos años de haberse
convergencia, orientados a fomentar el creado la Alianza, no se ha logrado
regionalismo abierto, que inserte a las aún homologar los acuerdos previos ni
partes eficientemente en el mundo glo- crear una zona de libre comercio. No
balizado y las vincule a otras iniciativas obstante, en la XXII Cumbre Iberoame-
de regionalización» (Acuerdo Marco ricana realizada en Cádiz, España,
del Alianza del Pacifico, Preámbulo). en noviembre de 2012, se produjo
La Alianza del Pacífico plantea la un encuentro de los Presidentes de la
meta de lograr la convergencia de los Alianza del Pacífico. En su Declaración
acuerdos comerciales existentes en un Final «refrendaron su compromiso de
bloque regional que se propone una concluir la negociación en materia de
acción conjunta para influenciar en Acceso a Mercados durante el primer
la dinámica político-económica de la cuatrimestre de 2013» (Declaración
región. La idea es reemplazar por un Conjunta de los Presidentes de la Alian-
solo acuerdo comercial la diversidad za del Pacífico, Cádiz, España, 17 de
de acuerdos existente entre los países noviembre de 2012).
de la Alianza: «Colombia con México La Alianza del Pacífico se mantiene
en el G-2 (que sustituyó el G-3 ante apegada a la «agenda de integración
el retiro de Venezuela); Colombia con profunda», algo que se reconoce en
Chile en dos acuerdos comerciales la Declaración de Lima, cuando los
de 1994 para bienes y de 2007 para presidentes acuerdan crear un «área
servicios y otras reglas de comercio de Integración Profunda mediante un
exterior; Chile con México, Chile con proceso de articulación política, econó-
Perú, y el libre comercio entre Colom- mica y de cooperación e integración en
bia y Perú, reglamentado en el proceso América Latina» (Declaración de Lima,
de la Comunidad Andina de Naciones abril 2011). Aunque en la Declaración
(CAN)» (Viera Posada, 2011). Por otro de Lima no se establece el compro-
lado, también se propone avanzar más miso de suscribir normas OMC plus
allá de la zona de libre comercio, pues sobre los temas de integración, esto es
se plantea «avanzar progresivamente comprensible porque los cuatro países
hacia el objetivo de alcanzar la libre cir- miembros (Colombia, Chile, Perú y
culación de bienes, servicios, capitales México) ya han adoptado este tipo de
y personas» (Declaración presidencial normas, la mayoría de ellas en los tra-
sobre la Alianza del Pacífico, 28 de abril tados bilaterales de libre comercio que
de 2011). En la teoría de la integración han suscrito con Estados Unidos. En
esto último supone avanzar hacia la consecuencia, lo que puede acontecer
creación de un mercado común, fase es una convergencia de esta normativa

30
José Briceño Ruiz • Ejes y modelos de la etapa actual de la integración económica...

OMC plus en el Acuerdo Marco que se presenta como un modelo más difí-
se propone homologar los acuerdos ya cil de catalogar, pues aunque incluye
existentes, como se prevé en la Decla- un amplia liberalización comercial y
ración de Lima. Destaca, no obstante, una agenda de integración profunda
que se adopte la expresión «integración con compromisos OMC plus, se trata
profunda» para describir al bloque re- sin embargo, de un acuerdo sur-sur
gional. En la Declaración de Lima esta (véase figura 4). Además, un elemento
se amplía para referirse al movimiento central del modelo de regionalismo
de personas y de negocios, facilitación estratégico es la exclusión de sectores
del tránsito migratorio, cooperación considerados «importantes» (la energía
judicial, facilitación del comercio y coo- en el TLCAN, los automóviles en el
peración aduanera, servicios, capitales, Mercosur). No existe aún un acuerdo
incluyendo la posibilidad de integrar las de libre comercio de la Alianza y por
bolsas de valores (Declaración de Lima, ello no es posible delimitar si algunos
abril de 2011). sectores estratégicos serán excluidos
Como se ha demostrado en esta del proceso. No obstante, si el acuerdo
sección, el «modelo TLCAN» es el fun- se llega a basar en el modelo TLCAN
damento orientador tanto de los TLC es posible que se adopte un modelo de
bilaterales como de la recién creada regionalismo estratégico. Si esto sucede,
Alianza del Pacífico. Existe en conse- puede emerger una nueva categoría en
cuencia una relación directa entre el eje la tipología de acuerdos basados en el
del regionalismo abierto y la estrategia regionalismo estratégico. Esta no se
regionalista promovida por Estados asimilaría ni al TLCAN (ejemplo de
Unidos, pues existe una relación directa regionalismo estratégico norte-sur) o
en términos de agenda, instrumentos al Mercosur del Tratado de Asunción
y disciplinas entre lo acordado en el (ejemplo de regionalismo estratégico
TLCAN y la Alianza del Pacífico (véase sur-sur). Esta nueva modalidad repre-
figura 3). sentanda por la Alianza del Pacífico
(regionalismo estratégico sur-sur con
agenda de integración profunda OMC
plus) constituye un anomalía en uno
de los tres tipos ideales propuesto en
la sección 2 de este trabajo.

Ahora bien, mientras los TLC son


un claro ejemplo de regionalismo estra-
tégico norte-sur, la Alianza del Pacífico

31
Estudios Internacionales 175 (2013) • Universidad de Chile

Pacífico ya han suscrito TLC con países


del Norte donde se han aprobado nor-
mas OMC plus. En consecuencia, para
estos países simplemente se trata de
lograr convergencia de una normativa
ya vigente desde hace varios años. Salvo
esta anomalía, la Alianza se ajusta a los
parámetros del modelo de regionalismo
estratégico.

3.3 El modelo del eje antisistémico


del ALBA
Sin embargo, como señaló Max We- Existe un debate sobre si el eje an-
ber, los tipos ideales son construcciones tisistémico representado por el ALBA
mentales o, en sus palabras, «utopías puede ser catalogado como un proceso
racionales», que es imposible encon- de integración económica. Desde el
trar empíricamente en toda su pureza punto de vista de la teoría liberal, el
(cf. Weber, 2003). En consecuencia, es ALBA no es un proceso de eliminación
posible encontrarnos con aspectos de la de barreras ni que se realiza de forma
realidad que no coinciden exactamente gradual a partir de una zona de libre
con un tipo ideal. En sociología, el con- comercio hasta la unión económica. La
cepto de desviación sirve para explicar cuestión es que el ALBA pretende ser
algún tipo de comportamiento que se un nuevo modelo que rompe con esta
aleja de un tipo ideal. Sin embargo, la lógica de integración. En este sentido,
existencia de desviaciones del tipo ideal la experiencia europea no es un modelo
no destruye la función heurística de para el ALBA. El modelo de integración
este, evitando además una ampliación del TLCAN tampoco se relaciona con
ex post facto de la tipología original. el ALBA pues este incluso nace como
Si tomamos en cuenta estas con- alternativa al ALCA, propuesta de
sideraciones, la Alianza del Pacífico integración inspirada a su vez en el
representa una desviación que deriva acuerdo suscrito en América del Norte.
esencialmente del hecho de que a pesar Esto nos lleva a un tema crucial para
de ser un acuerdo sur-sur se promueva entender al ALBA: esta se presenta
una agenda de integración profunda como un modelo alternativo de inte-
con acuerdos OMC plus. Esto sería gración (Regueiro Bello, 2008) o como
más propio de la variante norte-sur del una «forma de integración que no parte
modelo de regionalismo estratégico. de lo mercantil» (Bossi, 2005). En este
Esta desviación se explica por el hecho sentido, el actualmente se define como
de que los miembros de la Alianza del un modelo de integración no capitalista.

32
José Briceño Ruiz • Ejes y modelos de la etapa actual de la integración económica...

No obstante, aunque el ALBA se colocar el desarrollo humano como su


describe como «un modelo no capita- objetivo supremo» (Pérez García, 2010:
lista», tampoco se dan muchos detalles 49; cursivas en el original).
de este modelo. El único modelo no La división tradicional formulada
capitalista de integración conocido por Bela Balassa de las etapas de la
en el mundo ha sido el Consejo de integración regional, que van gradual-
Ayuda Mutua Económica (CAME o mente de una zona de libre comercio
Comecon), que agrupaba a los países a una unión económica, no existen en
del antiguo bloque soviético. Aunque el ALBA. En vez de ello, el ALBA se
en el ALBA existen mecanismos como basa en la idea de que la integración
el comercio compensado y ciertas for- no puede reducirse al comercio, «ni
mas de bilateralismo que la asemejan medir sus avances por el crecimiento del
al Comecon, este tenía características intercambio comercial», ni «encerrarse
como la planificación económica que entre las rejas» del libre comercio. Por
están ausentes en el ALBA. ello, no se propone abolir el comercio
El ALBA tampoco se basa en las sino reafirmar que la integración «es
premisas cepalistas de una integración mucho más que hacer comercio y que
al servicio de la industrialización regio- incluso no puede contentarse la inte-
nal. En la óptica de los promotores del gración verdadera con cualquier clase
ALBA este esquema regional no podía de comercio» (Martínez, 2006b: 78).
basarse en las propuestas estructuralis- Se admite entonces el comercio
tas-cepalistas porque estas concedían como componente del proceso, pero
un papel importarte a las «burguesías este debe estar sometido a los objetivos
industrializantes» (Martínez, 2006a: de desarrollo del proceso de integra-
13). Estas últimas habrían sido arrasa- ción. Esto implica formas de comercio
das por el neoliberalismo y se habrían compensado y mecanismos para favo-
estructurado en torno a la liberali- recer a los países más débiles mediante
zación y especulación financiera y al precios preferenciales o comercio de
servicio de las ETN (Martínez, 2006a: trueque (Martínez, 2006: 79). Este
13). El ALBA sería entonces un nuevo nuevo modelo de integración promo-
modelo de integración. Esta iniciativa vería un comercio más bien basado en
de integración sería «una respuesta las «ventajas cooperativas», en vez de
contestataria, propositiva y alternativa apoyarse en la lógica tradicional de las
real frente al capital, en tanto construye ventajas comparativas. Igualmente, el
un tipo de integración no articulado ALBA se basaría en instrumentos de
por las empresas transnacionales, el compensación entre los países, que en
mercado, el comercio, como lo hizo vez de ganar y vender bajo una lógica
la integración que precedió el ALBA de ganancia comenzarían a comerciar
-integración cepalina e integración en función de lo que un país produce y
neoliberal- sino que está trabajando por necesita (véase Sader, 2006).

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Estudios Internacionales 175 (2013) • Universidad de Chile

Inicialmente, la mayor parte de la tablecer las bases para los instrumentos


agenda y los instrumentos desarrol- de carácter bilateral y multilateral que
lados por el bloque regional se concen- las Partes suscriban en esta materia,
traron en la cooperación energética con miras a la satisfacción de las ne-
(Petrocaribe, Petrosur) y los intentos cesidades materiales y espirituales de
de internacionalizar los programas so- nuestros pueblos» (Acuerdo para la
ciales que en Venezuela se denominaron Constitución del Espacio Económico
Misiones. No obstante a partir de 2007 del ALBA-TCP (ECOALBA-TCP),
comenzaron a aprobarse instrumentos 2012).
de tipo económico como un mecanismo En consecuencia, se puede describir
de pago para las transacciones comer- al ALBA como esquema de integración
ciales (el denominado Sistema Unitario que adopta las premisas de los modelos
de Compensación Regional –SUCRE-), social y productivo. Es notorio que
mecanismos financieros como el Banco el ALBA, como expresión de un eje
del ALBA y la cooperación en materia antisistémico que es crítico del orden
productiva (la creación de empresas mundial existente, difícilmente puede
grannacionales). Como se puede obser- plantearse como meta insertarse en los
var, comienza a desarrollarse una agen- mercados globales a partir de una pla-
da de integración económica, pese a que taforma de integración regional. En vez
el comercio no era parte del proyecto de de ello, intenta fomentar instrumentos
integración. Esto se pretende consolidar para el desarrollo productivo conjunto,
en febrero de 2012, cuando se decidió como serían las denominadas Empresas
crear el denominado espacio económico Grannacionales. Estas se orientarán
del ALBA-TCP (ECOALBA-TCP) que «a privilegiar la producción de bienes
se propone incrementar el grado de in- y servicios para la satisfacción de las
terdependencia económica y comercial necesidades humanas garantizando su
entre los países del ALBA. No obstante, continuidad y rompiendo con la lógica
esto no se pretende lograr promoviendo de la reproducción y acumulación del
la creación de una zona de libre comer- capital» (Secretaría Ejecutiva del ALBA
cio o adoptando formas tradicionales – TCP, 2010a: 1). Se trata de «empresas
de integración comercial. Según el de los países del ALBA integradas pro-
Acuerdo creador del ECOALBA-TCP, ductivamente, cuya producción se des-
este se concibe como «como una zona tinará fundamentalmente al mercado
económica de desarrollo compartido intra-ALBA, para configurar una zona
interdependiente, soberana y solidaria, de comercio justo y cuya operación se
destinada a consolidar y ampliar un realice de manera eficiente (Secretaría
nuevo modelo alternativo de relacio- Ejecutiva del ALBA – TCP, 2010a: 1). A
namiento económico para fortalecer esta política de integración productiva
y diversificar el aparato productivo y se sumaba un conjunto de propuestas
el intercambio comercial, así como es- en el área social. En un documento

34
José Briceño Ruiz • Ejes y modelos de la etapa actual de la integración económica...

reciente de la Secretaría Ejecutiva del económica e integración regional,


ALBA – TCP se la describe como una todas ellas parte de un cada vez más
alianza para combatir la exclusión so- diverso regionalismo latinoamericano;
cial. En este sentido, propone un mode- por el otro, se percibe el surgimiento
lo social de desarrollo que «concentra y consolidación de ejes de integración
los esfuerzos en áreas prioritarias como económica regional que han adoptado
son la educación, salud, alimentación, distintos modelos económicos para
medio ambiente, cultura, energía y organizar los espacios subregionales en
tecnología» (Secretaría Ejecutiva del construcción.
ALBA – TCP, 2010b: 2). Es evidente la fragmentación su-
bregional de la integración latinoame-
ricana al menos en tres ejes: un eje de
integración abierta, representado por
la Alianza del Pacífico y los TLC; un
eje revisionista, cuya manifestación es
el denominado «nuevo Mercosur»; y
un eje antisistémico personificado por
el ALBA. Estos tres ejes de integración
han adoptado modelos de integración
económica muy diversos. Mientras el
Mercosur revisa su modelo de regio-
Conclusiones nalismo estratégico plasmado en el
Tratado de Asunción y lo amplia con
La integración económica regional políticas de regionalismo social y regio-
en América Latina atraviesa por un nalismo productivo, el ALBA pretende
nuevo periodo que se caracteriza por ser un nuevo modelo de integración
el fin de la hegemonía del enfoque de no basado en el comercio y la ganan-
integración abierta y vinculada a la re- cia mercantil sino en la solidaridad la
forma económica neoliberal imperante complementación y la cooperación.
en la década de 1990. A esto se suma La Alianza del Pacifico, por su parte,
la creciente heterogeneidad regional reivindica las políticas de regionalismo
en términos de la comprensión que los abierto, incluso apoyando una estra-
diversos actores estatales y no estatales tegia de integración que favorece una
tienen sobre cuál modelo de integración agenda más propia de iniciativas de
debe ser adoptado en esta nueva fase del tipo norte-sur.
regionalismo latinoamericano. Como Este escenario fragmentado de la
consecuencia, se observa por un lado integración económica regional expresa
una proliferación de iniciativas que la cartografía de los cambios políticos
incluyen esquemas de cooperación y ocurridos en América Latina. Mientras
concertación política, cooperación que los gobiernos de orientación más

35
Estudios Internacionales 175 (2013) • Universidad de Chile

conservadora defienden el modelo de demuestra la persistencia del regiona-


la década de 1990, los gobiernos de los lismo latinoamericano en general y de
ejes revisionista y antisistémico expre- las iniciativas de integración económica
san la orientación hacia la izquierda de en particular. A pesar de la heterogenei-
los gobiernos de sus países miembros. dad política regional y las limitaciones
Ahora bien, mientras que países como que desde fines de la década de 1990
Argentina, Brasil y Uruguay han im- mostraron las iniciativas en marcha,
pulsado una revisión de elementos de la integración persiste. Incluso países
la estrategia de integración de 1990, los como Chile, que los años 1990 se negó
miembros del ALBA se proponen una a ser parte de algún esquema económico
ruptura con las formas tradicionales de regional en América Latina, ahora es
integración económica basadas en el fundador de la Alianza del Pacífico.
libre comercio. En este contexto, la vieja
idea de construir un mercado regional
latinoamericano (el mercado común Bibliografía
que Prebisch propuso en los años 1950)
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es cada vez más lejana. Diario el País, 24 de octubre. Disponible
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Venezuela al Mercosur; la presencia Acuerdo para la Constitución del Espacio
de Nicaragua en ese bloque a pesar Económico del ALBA-TCP (ECOAL-
BA-TCP) (2012). Consejo de Comple-
de ser parte del CAFTA-DR o la aún mentación Económica del ALBA (03 de
presencia de Colombia y Ecuador en febrero de 2012). XI Cumbre - Caracas,
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que junto con el Sistema de Integración http://www.alba-tcp.org/contenido/conse-
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