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J. S. Scott - Serie Vampire Coalition - 1 La Compañera de Ethan
J. S. Scott - Serie Vampire Coalition - 1 La Compañera de Ethan
2
J. S. Scott
3
Grupo de Traducción:
Blanca20011983 Saiyu^mbopizita^ Noebearomero
Vecina Lizels
Moderadora de Corrección:
Leluli
4 Grupo de Corrección:
vickyra Liraz
francatemartu lsgab38
Revisión Final:
Blanca20011893
Diseño:
francatemartu
Una introducción a la Capítulo 02
Coalición Vampiro
Capítulo 03
# 0.5 - El Duro
Capítulo 04
Apareamiento de un
Vampiro Capítulo 05
Sinopsis Capítulo 06
Empezamos… Capítulo 07
5
#1 - La Compañera de Capítulo 08
Ethan
Epílogo
Sinopsis
Próximo Libro
Prólogo
Sobre la Autora
Capítulo 01
# 0.5
6
El Duro Apareamiento
de un Vampiro
A
dare Connor es un vampiro, el más antiguo de su clase, que encuentra
su pareja.
Adare sabe que el apareamiento sacara todos sus instintos carnales, posesivos
y dominantes que tiene. Es la naturaleza de los vampiros durante el apareamiento.
Se había bañado y su piel ya se sentía como una seda, pero las mujeres
continuaron su preparación masajeándole la piel con los aceites. Esta era la
ceremonia. Una parte de un ritual que siempre había existido para los vampiros.
Kristin suspiró. Esta noche... Adare Connor sería suyo por toda la eternidad.
Ella negó con la cabeza ligeramente, todavía no podía creer que era su compañera,
la guardiana de su alma.
8 Ella era un ser humano, una de las compañeras elegidas para un vampiro.
Todos los vampiros nacían varones, pero al contrario de la tradición popular, no eran
“muertos vivientes”.
Sí... Los vampiros necesitan sangre para sobrevivir, pero no eran las criaturas
de leyenda, unos seres traídos de vuelta de entre los muertos. Ellos estaban vivos, en
todos los sentidos, excepto que no tenían alma, y sólo la recuperaban cuando
encontraban a su compañera. Kristin transferiría su alma a Adare esta noche.
La mitad de ella, la mitad de él. Ambos tendrían la mitad del alma, con la
mitad de la suya propia, para completarla. Estarían unidos como uno.
Adare había esperado 300 años por eso, y ya había perdido la esperanza de
encontrar algún día a su pareja. Y sucedió. A veces, por diversas razones, un vampiro
nunca encontraba a su compañera y por lo general acababan cayendo, abrazando su
lado más oscuro.
Kristin sonrió ligeramente, todavía resulta difícil de creer que se sentía atraída
por su personalidad dominante. Ella era una mujer de negocios exitosa y le gusta
tener el control de todos los aspectos de su vida. O eso pensaba...
Sabía que estaba muy atraída por él. Por Adare. Sí, él era posesivo... Pero
9 también era cariñoso, sensible y protector. La necesidad de controlar en la cama era
parte de su naturaleza, sobre todo durante el cortejo y el apareamiento. Nunca supo,
que como su compañera, someterse, ceder a sus placeres oscuros, era parte de ella,
parte de su composición genética. Con su alma entrelazada, sus necesidades eran
también las suyas, y esa parte de ella había permanecido enterrada hasta que Adare
despertó su deseo de cederle el control a él, encontrar su propio poder de una manera
totalmente nueva y satisfactoria. Kristin adoraba cada parte de Adare. Incluso la
oscuridad. Tal vez... Especialmente la oscuridad.
Tenía que admitir que estaba un poco ansiosa. Sabía que el apareamiento sería
duro en un nivel que ella y Adare nunca habían experimentado. Una vez que su
marca lo tocara... él sería gobernado por los instintos carnales y la necesidad de
tenerla y poseerla seria bestial. Adare le había explicado todo, pero aún así tenía un
poco de miedo.
10 Kristin sabía que Adare la amaba, la adoraba. La colmaba con todo el cariño
que pudiera necesitar y no tenía miedo de él. Él era una parte de ella y ella lo amaba
incondicionalmente. Le gustaba su lado dominante. Le gustaba mucho. Había algo
dentro de Kristin que se alegraba con el hecho de que su necesidad por ella desatara
su pasión desenfrenada. Sin embargo, esperaba esta noche, sabiendo que una vez que
la ceremonia hubiera terminado, por fin iba a estar feliz y contenta.
Kristin cerró los ojos y pensó en Adare, echando de menos su gran cuerpo y
su toque. Su vampiro de oro. Sus ojos eran oscuros, pero su pelo era una mezcla de
varios tonos de rubio. Casi podía sentir la textura sedosa atravesando sus dedos. Le
necesitaba y echaba de menos su toque.
Abrió los ojos cuando las mujeres pusieron un largo vestido por su cabeza.
Levantó los brazos y lo dejó caer sobre su cuerpo, escondiendo muy poco de su
curvilínea figura. Podía ver la ardiente mancha de fuego de pelo entre sus muslos,
que había sido cortado y cuidado para su preparación.
Su necesidad por Adare ocultaba su miedo y quería que el tiempo pasara con
rapidez, para poder unirse con su pareja y finalmente encontrar la paz en su
matrimonio.
*****
¡Cristo! Cómo le gustaba su cabello de fuego, sus seductores ojos verdes. Tuvo
suerte... Mucha suerte. Su compañera era perfecta, por dentro y por fuera, valía la
pena los cientos de años que tuvo que esperar, pensando que había perdido su
oportunidad.
11 Acababa de separarse de ella antes de la salida del sol esta mañana, pero
parecía una eternidad. Necesitaba su olor, su sabor, todo lo que era exclusivamente
de Kristin.
Su polla había estado dura por horas. Todo lo que tenía que hacer era pensar
en ella y se quedaba con las bolas azules y desesperado por estar en su interior.
*****
Kristin hizo una pausa, mientras las tres mujeres se detenían y alejaban,
señalando a Kristin la puerta frente a ellas.
Él estaba allí, apoyado en la pared, su postura casual, pero sus ojos feroces.
Llevaba sólo un tanga de cuero que hacía poco para cubrir increíbles activos. Su pene
estaba tratando de reventar el pequeño confinamiento.
Kristin tragó, deseando liberarlo. Era tan hermoso, como casi todos los
vampiros hombres, pero creía a Adare superior y casi se rió de su opinión sesgada.
Su piel había sido aceitada y sus músculos brillaban a la luz de las velas. La
habitación estaba llena de velas que adornaban un borde que corría por completo
13 alrededor de las paredes circulares.
Por encima estaban las ventanas. Sintió sus ojos en ella y Adare, pero las
ventanas fueron ensombrecidas. Ella no podía ver a nadie, pero podía sentir a los
observadores.
¿Adare? Kristin lo llamo con su mente, a pesar que sabía que no debía hacerlo.
La comunicación íntima haría las cosas más difíciles para él.
Nada. Sólo necesitaba sentirte. Tonto, pero ella sólo tenía que tocar su mente,
y sentir su conexión íntima.
—Desvístanla. —La orden de Adare fue verbal y dirigida a las mujeres que la
habían escoltado a la sala.
Una de las mujeres se adelantó y llevó las manos al cuello del vestido que fluía
sobre Kristin. Mientras desataba los lazos que lo mantenían en su sitio, le pregunto a
Kristin con solemnidad:
—Sí. —Kristin respondió en voz baja, con los ojos fijos en Adare. Sus ojos
eran casi negros, en lugar de color marrón oscuro de costumbre y lleno de una
oscuridad que ella nunca había visto en los ojos de su compañero.
No es que alguna vez quisiera irse. Ella estaba muy excitada con sólo mirar a
Adare. Tan fuerte. Tan grande. Increíblemente masculino.
¡Oh Cristo! quemaba. Kristin arqueó la espalda, como si lava caliente entrase
en sus venas. Se enfrió... pero muy poco. Se sentía como si todo su cuerpo estuviera
en llamas. Sabía que era las inquebrantables almas, el alma de Adare que se liberaba,
ambas almas despertándose. Estaban separándose a la mitad y fundiéndose.
Observo a Adare mientras sus ojos brillaban de color rojo. Su alma recién
adquirida estaba perdida, no determinada dónde establecerse vagando sin rumbo a
través de su cuerpo. Estaba inquieta y agitada... y así estaba Adare.
—Libera mi pene.
Kristin cayó de rodillas, con ganas de complacerlo. Cogió las tiras de cuero en
las caderas.
Ella tomó las tiras con los dientes y las soltó. Su pene estaba lleno, forzando
el cuero. Era enorme de todos modos, pero ahora más que estaba completamente
lleno de sangre, latiendo con la compulsión de ser libre. Ella liberó otra tira con la
boca y los dientes, tirando del material cuando se soltaron las ataduras. Se resistió
porque un lazo de cuero se enganchaba a través de sus nalgas duras como rocas y
luego libero su polla mientras quitaba el paño y lo dejaba caer al suelo.
16 queriendo probarlo.
Estaba tan grande, tan hinchado. Ella lo quería dentro, pero también quería
que se corriera. Quería sentir su liberación, tragárselo.
Sus labios se sellaron más duro para ofrecerle más succión. Bombeando en su
boca más fuerte, más rápido, con la cabeza firmemente follando duro su boca.
Kristin quería ronronear cuando oyó sus gruñidos torturados. Se dio cuenta
de que iba a acabar. Anticipo su chorro humeante y le dio en la parte posterior de la
garganta, inundando su lengua con su esencia. Mantuvo la cabeza dura cuando vació
su polla palpitante. Tragó el líquido caliente y lamió su polla limpiándola. Sabía a
Adare y ella quería más, necesitaba más.
Adare la levantó y subió las escaleras hasta la cama. Podía ver sus ojos ahora
y todavía brillaban con un color rojo profundo turbulento. Sus necesidades carnales
la llamaban y ella sintió el salvajismo en su alma anhelando que él la tomara. Duro,
caliente y salvaje como él quería.
Adare la lanzó sobre la cama y Kristin saltó un poco cuando su trasero golpeó
la sabana de seda. Él cogió un par de esposas que colgaba en la cabecera de la cama
enorme y apretó con fuerza sus brazos.
—Vas a disfrutar para mí ahora. —La voz baja y profunda de Adare no estaba
pidiendo. Estaba exigiendo.
Kristin no tenía ninguna duda de que iba a disfrutar. Estaba tan emocionada
que se sentía que iba a explotar con un simple toque.
—Sí, Adare. Lo haré. —Su respuesta salió como un gemido. No estaba segura
de cuánto más podría aguantar. Su cuerpo estaba en llamas. Su coño estaba
inundado. Ella necesita al orgasmo tan mal que se retorcía, necesitando su toque tiro
de sus ataduras.
Kristin se quedó sin aliento cuando él golpeó duro su culo, castigándola por
intentar acelerar su orgasmo. Ella nunca lo había visto actuar con tanta dominación,
pero sabía que su instinto de apareamiento era fuerte y salvaje. Necesitaba dominarla.
Y Dios... quería ser dominada.
—Sí, Adare. —Ella trató de calmarlo mientras su culo quemaba por su castigo.
Había estado conteniéndose mientras era azotada, la estimulación casi la llevándola
a su punto culminante.
—¿Quieres que lama tu coño? ¿Que haga que te corras? —Hablaba en voz
baja y seductora.
—Sí, Adare, por favor. Te necesito. —Se retorció, necesitando sentir su boca
sobre ella. Temblaba con la necesidad de alcanzar el clímax, su excitación necesitaba
ser saciada.
Adare enterró su cabeza entre sus piernas, lamiendo sus jugos, acariciando
sus pliegues con la lengua.
Oh Dios. Su boca se sentía tan bien. Kristin gimió cuando la devasto, su boca
y su lengua deslizándose a través de sus jugos, tragándolos. Él la estaba marcando
con su caliente y sexy boca. Su lengua se apoderó de su clítoris, estimulándola.
Kristin no sabía cuántas veces llegó. Su coño estaba casi adormecido para el
momento en que Adare se deslizó por su cuerpo y su pecho subía y bajaba, jadeando
en busca de oxígeno para sus pulmones hambrientos.
—Adare.
Ella susurró su nombre, incapaz de hablar. Estaba sin aliento y agotada, pero
su cuerpo aún suspiraba por él.
—Necesito follarte. —Su voz era áspera y ronca—. Necesito follarte duro y
20 rápido. Eres mía, Kristin. Para siempre. Los testigos van a mirar mientras te hago
mía. Ellos sabrán que eres mía.
—Implórame que te folle. Dime que me perteneces. Permite que todos los
testigos lo escuchen. —Él golpeó su trasero cuando la empujo hacia arriba y abrió
sus piernas.
—Yo soy tuya, Adare. Sólo tuya. Te pertenezco. —Su voz se elevó más
fuerte—. Por favor, Follame. Por favor. Lo necesito.
21 No comenzó lento y fácil. La golpeo con fuerza, enterrado hasta sus bolas.
Agarró sus caderas, tirando de ella para satisfacer sus brutales embestidas. Las
embestidas duras eran agresivas y salvajes. Él se empujó, bombeando duro y
profundo. Lo oyó gruñir y gemir mientras la penetraba.
Todo su ser estaba consumido por él cuando empujó hacia atrás para
empalarse a sí misma, mientras se retorcía y gemía su nombre.
Él la agarró del pelo y tiró su cabeza hacia atrás. Sus dientes se hundieron en
su cuello, sin preludio o advertencia, moviendo su cuerpo en un trance de felicidad.
Kristin apenas notó el dolor penetrante antes de estar inundada con el placer
sensual. Ella experimento el mismo placer con su mordida, del que él sentía cuando
bebía.
Adare saco los dientes de su cuello y puso la muñeca a distancia. Le pasó los
dedos por el cuello deteniendo el sangrado y luego detuvo el suyo.
Más duro... más duro... hasta que ella pensó que sería dividida.
Ella sintió sus almas moverse y supo que habían encontrado su lugar. Adare
soltó sus brazos y Kristin cayó a la cama, jadeando, retorciéndose. Tomó un sorbo de
oxígeno, tratando de hacer que su cuerpo se moviera, pero estaba completamente
agotada.
—Eres mía, Kristin. Mía. —Su voz era baja y gruesa, llena de emoción—. Y
nunca podrías amarme tanto como te amo yo.
Ella levantó la vista para mirarlo a los ojos. Sus ojos se encontraron y ella vio
a su amado Adare, mirándola con admiración y adoración. Sus ojos eran normales
otra vez, de color marrón oscuro y hermoso.
Adare la empujo para ponerla a su lado, cubriéndose con una manta ligera
que él fabricó sin pestañear. Su magia había vuelto.
23 de la verdad de sus palabras. Era como si ella lo hubiera estado esperando, parte de
ella estaba vacía antes de que él hubiera aparecido en su vida, para llenar cada rincón
vacío de su corazón.
Fue lo último que murmuró antes de cerrar los ojos, dando la bienvenida a la
oscuridad que la empujo hacia su seductor abrazo.
******
—Van a estar fuera por un tiempo. —Ethan Hale los observaba desde la
galería de los testigos. Vio como su colega de la Coalición descansaba satisfecho con
su compañera.
Ethan estaba feliz por Adare... Pero sintió una punzada de soledad. La
mayoría de los miembros de la Coalición se había unido a la fuerza de combate
porque no había encontrado a su pareja. Pensaban que si no tenían una pareja, al
menos podían ayudar a derrotar a los caídos.
Ethan sabía que Nathan se escondía detrás de su sarcasmo y cinismo, así que
no hizo ningún comentario. Ver un apareamiento era un doloroso recordatorio para
todos que probablemente habían perdido de alguna manera su oportunidad.
Ethan intentó empujar la soledad profunda dentro de él, donde por lo general
descansaba, tranquila y no reconocida.
—Odio cuando hace eso. —Liam dijo con un suspiro cuando desapareció,
trazando el camino de Nathan.
—Te veo luego, Ethan. —La voz de Rory sonaba distante, cuando
desapareció.
27
Traducido por Blanca20011983
Corregido por Leluli
E than Hale es un vampiro con una misión. Junto con sus tres hermanos y
otros miembros sin pareja, él lucha con la Coalición Vampiro para
proteger a los humanos de los vampiros caídos. Su vida es bastante
simple. Si él tiene un problema... lo resuelve. Si su problema es algo sombrío... lo
mata. Pero su vida sencilla está a punto de terminar cuando inesperadamente su
compañera lo llama hacia ella.
Brianna Cole esta débil, su fuerza de vida se está desvaneciendo. Ella piensa
que sufre de una rara forma de leucemia. Poco sabe que la enfermedad es mucho más
complicada. Se está muriendo, por qué no se unió a su compañero vampiro de quien
28 guarda su alma desde su nacimiento.
Ethan encuentra a Brianna y sabe que tiene que convencerla o la verá morir.
La ha estado esperando durante 500 años y no tiene intención de dejar que se vaya,
pero ella no está preparada para la dominante ceremonia de emparejamiento con un
vampiro. Él tendrá que ganar la carrera contra el tiempo, darle fuerzas a Brianna y
pelear una batalla contra los caídos que la persiguen para reclamar a su compañera.
Él también está en guerra con sus instintos de apareamiento que le queman por
dominarla y conquistarla. Pero Ethan es obstinado y un vampiro obstinado hará lo
que sea para ser dueño de su alma gemela... para siempre.
Traducido por Blanca20011983
Corregido por Vickyra
Había otros de su especie, pero los vampiros eran criaturas solitarias, sin
confiar en nadie, caminando solos. Aunque pueden socializar en ocasiones, y su
especie podía recurrir a otro de sus hermanos en busca de ayuda, nunca estaban
29 mucho tiempo en compañía de otros. Tenía tres hermanos por los que daría su propia
vida, sin embargo, al final, todos vivían solos.
Ethan y sus tres hermanos habían peleado una buena batalla, y los mitos
populares de vampiros eran a menudo objeto de bromas entre sus hermanos. Los
vampiros no se 'hacían', sino que nacían. Vivian, respiraban, eran carne y hueso con
poderes extraordinarios y, sí, necesitan sangre para sobrevivir. La única cosa que les
faltaba era un alma. Su compañera tenía su alma gemela estrechamente ligada dentro
de su propia alma, manteniéndola segura y protegiéndola hasta el día que iba a ser
transferida a su vampiro en un ritual de apareamiento tan antiguo como la especie
vampira.
Los vampiros no eran los monstruos del folclore, sin embargo, había
momentos en que el autocontrol era necesario, lo que significaba que Ethan, sus tres
hermanos y varios más tuvieron que unirse para derrotar a un caído que había cedido
a la sed de sangre. Matar sin rumbo estaba en contra del código de vampiros. Si uno
de su clase se volvía muy frenético durante la alimentación y mataba, el deseo de
sangre se volvería permanente más allá de la redención. Se convertirían en un caído,
y el exterminio inmediato de los vampiros caídos era la única esperanza para la
supervivencia de su especie. La detección humana significaría la destrucción de toda
su especie. Aunque los vampiros podían reírse de los mitos incorrectos y los
malentendidos sobre el verdadero vampiro, los seres humanos los verían como
abominaciones que debían ser perseguidos y extinguidos.
Ethan era uno de los más antiguos de su tipo que aún no habían encontrado
a su compañera. ¿Y si ella había muerto, sin haberlo llamado? ¿Y si no hubiera oído
su llamada? Hacía mucho tiempo que había dejado de esperar. Un vampiro perdía la
capacidad y el deseo de tener relaciones sexuales después de los cien años y habían
pasado más de 400 años para Ethan. Él había dejado de creer que ella lo esperaba, o
que estaba aún por nacer. Lo aceptó, pero eso no impidió el deseo y la soledad que
ahora formaban parte de su existencia.
31
Traducido por Blanca10011983
Corregido por Vickyra
V en a mí. Te necesito.
32 La voz era débil y suave en su mente, un débil susurro con una suavidad
femenina que envió un escalofrío por su columna vertebral. Reconoció la voz de su
compañera por puro instinto, una certeza de que no tenía nada que ver con la lógica.
Otro me busca, pero no eres tú. Por favor, ven a mí... antes de que sea
demasiado tarde.
No sé que busca pero me persigue, y no eres tú. ¡Me siento mal! Estoy débil.
Debes venir a mí.
—Dime, ¿cómo?, por favor. —Su voz era desesperada ahora, apretó las
sábanas mojadas, tratando de sentir su esencia. Era tan difícil, el mal estaba allí, pero
tenía que alcanzarla.
*****
Brianna Cole se despertó con un grito de sorpresa. Sus ojos se abrieron y tuvo
una conciencia inmediata de su entorno. Estaba en casa. En su propia cama. Su
corazón latiendo y su respiración superficial, se sentó y miró alrededor de la
habitación.
Ella siempre estaba fría en estos días. Desde que había caído en picado con
una forma rara y misteriosa de leucemia hacia seis meses, estaba constantemente fría
hasta los huesos.
—Simplemente no estoy lista para morir todavía, Wiggs —dijo en voz baja,
mientras seguía frotando su mejilla contra su pelo—. No siento que tengo que morir.
Lleno el cuenco y lo puso en el suelo. Wiggs, que era gordo, para empezar,
devoró la comida como si no hubiera comido en semanas.
35 Tenía que llamar a su madre y hacerle saber que todavía estaba entre los vivos.
Quizás era un mal término para usar con su madre. Brianna decidió que haría la
comprobación y dejaría de lado el humor negro que no solía ir bien con su
preocupado padre. Le dejo saber a su madre que estaba bien. Si no lo hacía, su madre
vendría corriendo a ver como estaba.
Pero las noches la asombraban. Sentía el deseo de... algo. Y luego estaba el
terror nocturno, un momento en que sentía que algo malo estaba al acecho en las
sombras. Podría ser el temor de su muerte inminente, pero no lo creía. Todavía estaba
en la negación después de todo y parecía más como una presencia amenazante en la
condenada oscuridad. Cada noche, la entidad desconocida se acercaba más,
sofocándola. Cada noche, se mantenía despierta durante más tiempo, haciéndola
temblar bajo varias mantas.
Brianna cerró el cajón, enojada consigo misma por ceder al miedo. Ella quería
luchar contra la oscuridad. Si era capaz de luchar contra la leucemia, bien podría
sacudir este sentimiento que amenazaba con consumirla después de que la oscuridad
hubiese caído.
*****
¡Mía!
Mierda... ¿cómo iba a trabajar cuando su mundo se volvió del revés por una
vocecita débil en la cabeza?
Tomó el teléfono y llamó a sus tres hermanos, dándoles una breve explicación.
Rory llegó sin el flash, pero de repente se hizo presente con nada más que un
estallido de luz que no podía ser escuchado por el oído humano. Era evidente, sólo
para los vampiros por su audición altamente desarrollada.
—Nada.
—Necesito saber que no está en peligro por un caído. Habló de ser abordada
38 por alguien. Algo malo. Investiguen si está pasando algo a nuestros hermanos u otros
que puedan llevarnos a encontrarlo. —Se esforzó por pensar racionalmente cuando
añadió—: Cualquier cosa fuera de lo común.
—Si lo hace… no va a sobrevivir. —Rory dijo lo que los otros dos hermanos
no podían o no querían decir.
—Pues vamos a asegurarnos que no falle —dijo Nathan, y brilló lejos, los
otros lo siguieron segundos después.
39
Traducido por Blanca20011983
Corregido por Liraz
—Ven a mí.
—No sé cómo.
Ethan sabía que estaba aproximándose y su espíritu era más fuerte. Continuó
viajando más rápido de lo que el ojo humano puede detectar, tratando de
concentrarse en su ubicación.
—Hay algo mal aquí. Sé que suena... gótico... pero no lo puedo explicar de
otra manera. Incluso mi gato, el Sr. Wiggins, se metió bajo las sábanas conmigo. Su
piel esta erizada.
41
—No te rías de mi gato. Lleva el nombre de un hombre muy distinguido.
Wiggs es un compañero muy fiel.
—No me estoy riendo. —En realidad, lo estaba, pero no quería decirle eso. Su
respuesta indignada divertida y encantada.
Se veía tan... delicada. Ethan vislumbró las manchas oscuras alrededor de sus
ojos, estaba muy delgada, y había líneas de preocupación alrededor de la boca,
incluso mientras dormía.
42 Él extendió la mano para tocarle ligeramente la sien. Era grosero invadir sus
pensamientos, pero quería saber lo que hizo que su apariencia angelical estuviera
marcada por la preocupación.
Vio cómo sus otros recuerdos le llenaron, la mayoría de ellos felices. Al menos
había llevado una vida tranquila, hasta su misteriosa enfermedad. Él retiró la mano,
todavía reacio a invadir sus pensamientos sin su permiso.
Maldición... necesitaba tiempo, y tiempo era algo que esa mujer no tenía a
juzgar por su aspecto frágil. La unión entre compañeros era instintiva, pero todavía
43 quería conocerla. Ella tendría miedo de descubrir la verdad de su existencia, y tenía
que ir al enlace de buena gana.
Nathan era el único con información. Había oído un rumor acerca de algunos
caídos que perseguían compañeras. Ellos elegían compañeras que no estaban
protegidas y que no se habían unido.
A pesar que beber de un vampiro nacido era veneno para un caído, beber la
sangre de una compañera que no había llamado a su vampiro, era poderoso. La
sangre de pareja de un vampiro era más poderosa que la de un humano normal, y
su poder se absorbería en el sistema de un caído, haciéndolos más fuertes. Si un caído
se acercaba lo suficiente a la compañera de un vampiro, podían sentirla y olerla.
Ethan se estremeció con la proximidad del hijo de puta que había estado con su
esposa.
El caído dio el primer golpe, marcando las afiladas garras en la cara de Ethan.
Pero Ethan golpeo duro y rápido, sacando un cuchillo de una funda en su cintura,
alcanzando a la grotesca figura en el pecho, enviándolo volando por la habitación.
La figura se recuperó, golpeando el pecho de Ethan con sus garras, pero Ethan
se dio la vuelta con sólo un rasguño.
—Que tengas una buena vida en el más allá, idiota. —Él sabía que no había
otra vida real para los caídos. Andaban sin rumbo, absolutamente inofensivos y
constantemente torturados por toda la eternidad, en otro reino. Esperaba que el
bastardo lo disfrutara, no tenia compasión para cualquier persona que quisiera
romper en pedazos su esposa.
Bueno... Tal vez ella tenía una ligera razón para tener miedo. Sus ojos todavía
estaban salvajes de la batalla, la ropa cubierta de sangre... y la sala de estar parecía
una zona de guerra.
Se encogió de hombros. Era casi una situación normal para él, pero era
evidente que estaba haciendo hiperventilar a su compañera.
Mierda. ¡No funcionó! Ethan pensó que se sentiría mejor si se limpiara, pero
sólo parecía asustarla más. Oh, demonios... no sabía cómo actuar con una mujer. ¡O
46 un ser humano que no conocía su naturaleza! ¡Tenía 400 años por amor de Cristo!
Supuso que tal vez debería ocultar algunas de sus habilidades, hasta que se calmase.
—¿Estás bien?
Su boca se movió, pero las palabras no salieron. Sus ojos se clavaron en los
suyos y la sostuvieron estables.
Brianna se sacudió, pero sus ojos estaban pegados a los suyos. Él la mantuvo
cautiva con su mirada, y ella no podía desviarla.
Ethan asintió.
—Sí.
47 Ethan la miró con un suspiro. Ella recordó. ¡Todo! Y, era evidente que no lo
estaba llevando muy bien.
Traducido por lizels
Corregido por Liraz
Por favor, que sea un mal sueño. Déjame despertar y descubrir que esto era
solo una pesadilla. Voy a abrir los ojos y estaré en la cama. El hombre cubierto de
sangre habrá desaparecido.
48
Ella se descubrió el rostro. No. Sin cambios. Él todavía está aquí. Ella suspiró
decidiendo que, obviamente, él no iría a ningún lugar, y necesitaba entenderlo,
quisiera o no.
—¿Quién eres tú?, ¿Qué eres tú? —Ella se sorprendió, pero después de la
sorpresa inicial, se dio cuenta que realmente no tenía miedo de aquel hombre. Se
habían hablado durante sus sueños. Este era su salvador. Se acordaba ahora y sabía
que él la había protegido del mal que había estado escondido alrededor de ella.
—Me gustaría haber tenido más tiempo para prepararte, pero debes darte
cuenta que hay algo sucediendo que no puede ser explicado por la lógica, y tienes
muy poco tiempo. —Él hizo una pausa y encontró sus ojos—. Yo soy un vampiro. El
demonio que te estaba persiguiendo era un caído, un vampiro que se perdió ante el
mal.
Oh, Dios. Brianna gimió y cubrió su rostro, apartándose lejos de sus ojos. De
algún modo extraño… tenía sentido… y la aterrorizaba. Pero ella no podía negar que
había hablado en sus sueños sin mencionar la escena horrible que había acabado de
presenciar delante de sus ojos. Oh, infierno. Estoy muriendo. ¿Qué importa si esto es
lógico o no?
Él se encogió de hombros.
—Mejor que él. —Ethan señaló hacia la alfombra donde el caído se había
disuelto.
—¿Nombre?
—No tengo miedo de ti, Ethan. Y después de lo que pasó, con seguridad,
debería tenerlo. ¿Por qué es eso?
Ella se ahogó.
—No estás muriendo con una forma rara de leucemia, Brianna. Estas
lastimada porque todavía no estás unida a tu compañero. Tú fuerza de vida está
desapareciendo. —Explicó pacientemente. Se acercó y se sentó junto a ella en el
suelo, al frente para que pudiera ver sus ojos—. En algún lugar de tu cuerpo usas mi
marca. Mi marca de familia. Es un dragón. —Él extendió su brazo izquierdo. En su
antebrazo tenía un perfecto tatuaje de un pequeño dragón. Era feroz, multicolor y
muy detallado, considerando que era solo del tamaño de la mitad de un dólar.
—Sí. —Ella casi no podía hablar. Todo esto era muy extraño. Todo muy
increíble.
—No tengas miedo, Brianna. Fuimos hechos uno para el otro. Esto no es la
forma en que se hace normalmente. Me hubiera gustado encontrarte. Conocerte.
Dejarte por lo menos a acostumbrarte a mí, antes de soltar esta bomba sobre ti. Pero
tienes poco tiempo. Creo que sientes eso. —Su voz era urgente y preocupada.
Era el hombre más hermoso, atractivo que había conocido y algo dentro de
ella lo ansiaba, estaba acercándose a él.
Su pene estaba duro y pesado. Había pasado mucho tiempo desde que había
sentido esa sensación particular, pero nunca ardió así. Había estado con mujeres
52 antes de haber sucumbido a su involuntaria impotencia a los cien años, pero había
sido el deseo normal de sexo. Esto era más que una obsesión maníaca.
Ella sentiría eso también, incluso en su frágil estado. Era normal entre
compañeros. No estaría lidiando con el mismo deseo frenético que el suyo, pero su
deseo de casarse estaría allí. Su deseo de ser saciada sería implacable… y lo dejaría
completamente loco.
No dijo nada, pero sus ojos decían todo. Podía ver su deseo por él y no
conseguía respirar, no podía hablar, su propia necesidad furiosa fuera de control.
—Tenemos que intercambiar sangre, pero puede ser más fácil para ti.
53 —¿Cómo?
*****
Levanto sus brazos alrededor de su cuello y pasó sus manos por la rica textura
de su cabello sedoso.
—¡Ethan! —gritó, cuando se hundió en las sábanas—. ¡No puedes hacer eso!
—No pienses, Brianna. Solo siente —le susurro con una voz áspera cuando
su boca dejó la de ella para lamer su oído y el lado de su cuello.
¿Cómo podía hacer algo más? Su boca continúo besando y pellizcó el rostro
y cuello, mientras sus manos jugaban con sus senos sin piedad. Sus dedos hicieron
movimientos circulares en su piel mientras se deslizaba lentamente sobre el
estómago. Cambiaron a un movimiento perezoso que la estaba dejando loca. Parecía
que estuviera en llamas. ¿Era esta la magia vampiro o solamente la magia de su
toque?
Sintió los dedos tortuosos ir más abajo y comenzar a acariciar entre sus
muslos, sobre sus rizos ligeros, y ella se quedó sin aliento.
Ella gimió, moviendo sus caderas hacia arriba y encontrando sus dedos.
Necesitaba más.
Brianna se sintió perdida. Había cedido el control y todo lo que podía hacer
era sentir las demandas de su cuerpo. Tendría un orgasmo. Todo su ser estaba
centrado en su carne ardiente, implorando por el clímax.
Sintió que él soltó su cuello y pasó un dedo por los agujeros levemente.
Cuando descendió de la altura erótico, Ethan la apartó lejos de su herida en el
hombro y palmeó sus dedos sobre el corte. Paró de sangrar, pero el corte todavía
56 estaba allí.
Estaba en sus brazos, saciada y sin aliento, dándose cuenta que, en algún
punto, Ethan debió haber disuelto su camisa y cortado el hombro.
¿Su cuerpo se había llenado un poco? Brianna sintió una fuerza vertiéndose a
través de ella que no había sentido desde su enfermedad.
—Me siento más fuerte, Ethan. —Cuando se alejó para mirar su rostro, su
euforia por su mejora física huyó cuando percibió la sudoración, el enrojecimiento
en sus cara y los salvajes ojos oscuros. Alarmada y preocupada, susurro—: Ethan,
¿estás bien?
Él estaba temblando y sus ojos acariciaban su cuerpo desnudo con un hambre
que no era nada normal.
Brianna empujó las sabanas sobre su desnudez y agarró su rostro con las dos
manos, forzándole a mirarle a los ojos.
—Ethan, dime. Dime que estas bien —exigió, su voz llena de ansiedad.
—Para que sea más fácil para ti, amor —le lanzó una sonrisa diabólica—. Fue
fácil, ¿verdad?
58
Traducido por Saiyu^mbopizita^
Corregido por Lsgab38
—¡H ola! —Una voz alegre, profunda que emanaba del final de
su cama hizo saltar a Brianna. Si Ethan no le estuviese
sosteniendo en sus brazos, habría saltado cinco metros de
altura.
Sus ojos fueron al final de la cama. Tres hombres muy grandes estaban allí,
todos con expresiones diferentes.
—O eso está bien. ¡Pero realmente esperaba que fueras… oof! —Rory se
inclinó cuando Liam le golpeo con su codo en el intestino. Liam disparo una mirada
aguda a Rory, mientras Nathan se limitó a sonreír, una expresión malvada en su
rostro.
60 pequeña espantando a tres hombres, dos veces el tamaño de ella, hacia la puerta era
una visión divertida. Sorprendentemente… los hombres se fueron—. Sírvanse
cualquier cosa de la cocina —dijo cuando cerró la puerta del cuarto detrás de ellos.
Brianna coloco sus manos en su cadera y levanto una ceja hacia Ethan.
—Creo que tenemos que hablar con tus hermanos sobre sus costumbres.
—¡Voy a matarlos a todos! —Se levanto y vistió un par de jeans y una camisa
con su magia. Vistió a Brianna en ropas similares.
—Tratamos de matarnos unos a otros todo el tiempo. Pero esta vez realmente
voy a hacer eso. Ellos saben bien qué hacer cuando un vampiro acaba de encontrar a
su compañera.
Suspiró.
—Lo harás. —Le dijo con una voz siniestra cuando tomo su mano y la llevo
a través de la puerta para conocer a sus hermanos.
*****
Infelizmente, a ella realmente le gustaba sus hermanos, por otra parte, ellos
parecían adorarla. Ethan lo odiaba. Podría apreciarlo más tarde, pero ahora no quería
a ninguno cerca de su compañera. Sus hermanos lo sabían… y se burlaban de él
constantemente. Venían a menudo y se demoraban, comiendo con Brianna fuera de
casa y en casa. Ella estaba encantada y él estaba trastornado. Ella sólo se rió y se fue
al supermercado después de sus visitas. ¡Los bastardos! Estaban disfrutando de su
agonía. Sinceramente, esperaba que todos encontrasen sus compañeras. La venganza
seria un infierno.
¿Sería posible que él realmente quisiera huir? ¡Claro que no! Esperó cientos de
años por Brianna y ella era un milagro. No obstante odiaba los aspectos desconocidos
de su situación. Si él tenía un problema… él lo resolvía. Si iba mal… lo eliminaba.
Su vida había sido bastante simple… hasta que había encontrado a su compañera.
Así que cuando había decidido rodar fuera de la cama, Brianna entro en el
cuarto.
Su corazón se acelero y sus músculos se apretaron. Para Ethan, ella traía luz
donde había oscuridad y necesitaba desesperadamente estar dentro de ella.
Necesitaba consumirla. La quería tan malditamente que envío un rugido bajo por la
garganta aunque trató de tragarlo.
Tragó un gemido cuando sus ojos recorrieron su cuerpo. Ella estaba vistiendo
una camisa rosa que moldeaba sus curvas y terminaba en el muslo. No era para
seducir… pero lo hacía. Ethan podía ver sus pezones a través del material fino y la
camisa acariciaba sus senos bonitos, perfectamente formados.
Su polla ya dura salto en cuanto olió su excitación. Sus ojos intentaban
trabarse con los de ella. Podía ver el calor, el deseo en sus ojos cuando ella miró su
torso desnudo. Le deseaba. Y necesitaba saciarla.
¡Mía!
64
Traducido por Saiyu^mbopizita^
Corregido por francatemartu
Brianna cogió debajo de la cama las suaves esposas que había comprado días
atrás para esta ocasión. Las balanceo en sus dedos en frente de Ethan.
Ethan gimió.
Brianna jadeó cuando su boca fue tomada, devorándola. Era un beso nacido
de la desesperación, una necesidad primaria y ardiente. Su boca se cerró sobre la de
ella, su lengua barriendo, en busca de la de ella.
Sus manos se movieron por las curvas de su cuerpo hasta que llegaron a su
cadera. Él extendió la mano y rasgó su braga al frente, tirándola al suelo. Sus dedos
invadieron su calor húmedo de forma agresiva, y ella gimió por la invasión, amando
la sensación de sus dedos fuertes que recorrían su clítoris.
—Estas tan mojada. Para mí. Mía. Dime que es para mí —él exigió con voz
áspera.
—Por favor, Ethan., Por favor —ella declaró cuando sus caderas rodaron
violentamente, buscando el calor de su lengua.
—Te amo. —Se quedó sin aliento entre respiraciones entrecortadas—. Te amo
tanto que no lo puedo soportar.
Él arrastró sus labios desde el cuello hasta su boca, besándola con una
ferocidad que sería aterradora si tuviese alguna razón para temerle. Pero no estaba
asustada. Brianna encontró su abrazo, sus movimientos apasionados chocando unos
contra otros, fusionándose, intensificando su deseo.
Ethan tomó su boca otra vez mientras deslizaba su mano para agarrar su polla
hinchada. Él trajo su cabeza entre sus piernas, deslizando su cuerpo hinchado contra
su calor líquido.
—Soy tuya, Ethan. Toda tuya —susurró las palabras, sabiendo que lo
aliviarían.
—Sí, Ethan, ¡Sí! —Sabía que estaba gritando... pero no le importaba. Bombeo
cada vez más fuerte y rápido volviéndola loca y llevándola al clímax, y Ethan con
ella. Necesitaban encontrar la liberación antes de incendiarse juntos.
La liberación era una fuerza impulsora que los tenso juntos, sus caderas
69 moviéndose para encontrarse con el aporreo de su polla. Su fuerza era increíble, pero
él era un vampiro y Brianna había bebido su sangre. Eso la hizo lo suficientemente
fuerte como para tomar su áspera pasión. Lo suficientemente fuerte como para
revolcarse con alegría en ella.
Ethan echó la cabeza hacia atrás, dejando escapar un sonido entre un gruñido
y un gemido. Su pierna estaba en su hombro y él volvió la cabeza y hundió sus
colmillos en su muslo. Aspiró con fuerza contra su piel, mientras golpeaba su polla
en su dolorido canal.
Llevó su boca hacia su pecho, en el que había abierto una vena para que
bebiera. Se nutrió, junto con la esencia de Ethan, haciendo caso omiso de la prisa
sexual. No podía soportarlo más. Ella se alimento, simplemente disfrutando de la
intimidad. Cuando terminó, él levantó la mano y detuvo la hemorragia con un toque
de su dedo.
Ella levantó la cabeza del hombro de Ethan para mirarlo. Dios... él era un
hombre asombroso. Su apariencia robaba el aire. Era físicamente perfecto, pero ella
70 sabía que lo único que alcanzaba directamente su corazón era el hombre mismo. La
forma en que la miraba hacia que su corazón cantara. Su sonrisa hacia que su
corazón cantara y bailara como en un musical de Broadway. No dijo una palabra,
pero él estaba sonriendo.
Sus ojos se cerraron. Se dejó caer en el sueño, sabiendo que siempre estaría a
salvo en los brazos de Ethan.
71
Traducido por Vecina
Corregido por francatemartu
Actualmente, él estaba pasando el tiempo con sus tres hermanos y Adare, cuya
esposa, Kristin, que había pasado por esa experiencia hace algunos meses atrás, había
optado por ser una de las tres mujeres que asesoraban a Brianna.
—¡Mierda! ¿Será que esa agonía nunca termina? —Ethan murmuró para sí
mismo cuando la necesidad de ver a Brianna lo traspasó. La necesidad de poseerla
se estaba volviendo demasiado dolorosa y todavía le faltaban algunas horas.
Adare rió.
Ethan puso los ojos en blanco y cruzó una mirada cómplice con Adare.
Adare suspiró.
—No te va a importar, una vez que el tiempo pase. Estarás desesperado por
poseerla. Realmente te gustará tener personas presenciando cuando la haces tuya. Es
difícil de explicar, pero es como una demarcación de territorio. Avisa a todos que no
se acerquen.
—Hey… a ella le caímos bien. Dijo que ama los hombres con apetito
saludable —Nathan protestó—. Ella quedó encantada. ¿Cómo podría no estarlo? —
El ego nunca fue un problema con Nathan. El suyo era tan grande como el sistema
solar. Pero era verdad que sus hermanos habían sido encantadores y la madre de
Brianna no tenía nada que decir ellos, solo cosas agradables.
—Ya le he dicho a Brianna que sería más que feliz que fueran mis padrinos de
casamiento. —Ethna informó a su hermano perversamente—. Ella tiene una
madrina y dos damas de honor, por eso funciona perfectamente.
Ethan sonrió, dándoles una mirada divertida, cuando los rostros de sus
hermanos registraron horror y consternación.
—Oh, no. Si no pueden hacer eso… deberán explicarle a Brianna por qué no
pueden asistir a uno de los días más importantes de su vida. Yo no lo voy a hacer. —
Ethan sonrió cuando todos fruncieron su frente. Sus hermanos realmente adoraban
a Brianna y de alguna manera, ella podría convencerlos de hacer lo que deseaba. Eso
calmó un poco su infierno. Les gustara o no, sabía que todos estarían allí.
76
Podría haber algunas trabas a lo largo del camino para la integración de sus
familias, pero eso no sería difícil.
Adare también se estaba yenfo. Ahora que estaba apareado, no podía asistir a
las ceremonias. Kristin y él salieron tan pronto como ella terminó sus deberes como
asistente.
Adare abrió la puerta y le hizo una señal para que entrase, se detuvo y dejó
que Ethan continuara solo.
77
Cuando entró en la cámara, sintió una poderosa ola de magia, pero no estaba
viniendo de él. Esta era magia antigua, fuerte y poderosa.
Cuando Brianna entró en la habitación, percibió que era cómo Kristin la había
descrito.
Una pequeña sala circular con ventanas oscuras alrededor de las paredes. Eran
para los observadores. Testigos. Todo estaba iluminado con velas que se colocaron
en una cornisa que rodeaba las ventanas. Ella estaba adivinando que los testigos
tendrían un infierno de una buena vista.
Es magia antigua, Brianna. Nunca he oído hablar de que eso ocurriera antes.
Es probablemente debido a mi edad. Pero no es malo. No tengas miedo.
Ella asintió a Ethan, sin apartar los ojos de él, para que supiese que lo
entendía.
Kristin se acercó, frunciendo el ceño cuando vio que todo se estaba moviendo.
El vestido se arremolinaba y el pelo de Brianna fluía, cómo si el viento lo llevara.
—Ven a mí. —Ethan instruyó, dejando de mirar los ojos de Brianna para
escanear su cuerpo en su totalidad con hambre y deseo.
Brianna respondió con entusiasmo, subiendo los pocos escalones para ponerse
delante de Ethan en la elevada cama.
80
Ethan no la tocó, pero sus ojos ardían sobre su cuerpo desnudo cuando él
comenzó a recitar las palabras rituales de la unión en su lengua materna. Ella no
entendía pero le encantó el flujo lírico de la lengua antigua, sílabas que subían y
bajaban.
Ella descansó de esa manera, hasta que el alma de Ethan se libero de la de ella
y se separaron, su propia alma entonces se desgarró y se fundió con la mitad de
Ethan. Sus marcas unidas seguían ardiendo, el alma completa de Ethan, entro en él
a través de las marcas siamesas, un alma que era la mitad de ella, la mitad de él, pero
más completa.
El alma de Ethan no podía fijarse tan fácilmente. Nunca había tenido un alma
antes y vagó por su cuerpo inquieto, en busca de un lugar de descanso.
Ella vio que sus ojos se volvían rojos, brillando con un resplandor demoníaco.
La magia girando alrededor de ambos, ardiendo cómo una llama azul.
La necesidad y el deseo de Ethan se apoderaron de Brianna, agarrándole el estómago,
como si estuviese experimentando los sentimientos por sí misma.
Sus necesidades eran salvajes y ella se agachó y comenzó a desatar las correas
de cuero, tirando el miembro libre de su encierro. Lo tenía en sus manos, rígido e
hinchado. Lo envolvió con sus manos, acariciando su larga y sedosa dureza.
—Mía. Mía. Mía. —Él gemía, como si le fuera muy difícil hablar, pero ella le
entendió.
Él parecía encontrar cierta satisfacción sólo mirándola sabiendo que era suya,
para satisfacer lo que quisiese.
—Tuya, Ethan. Toda tuya. —Ella susurró en voz baja, sin aliento, por sus
propios deseos. Tiró de las tiras que la sujetaban, amando la sensación de estar
contenida para su placer.
Su vagina estaba empapada y podía sentir las gotas que corrían por sus muslos.
Ella se retorció en sus ataduras, desesperada por que él la poseyese.
82 Él se movió entre sus piernas, poniéndole una almohada debajo de las caderas.
—Oh, Dios, sí. Hazlo, Ethan. Necesito eso. —Ella se retorcía contra sus
ataduras.
Él atacó entre sus piernas, lamiendo los jugos de sus muslos y pasando la
lengua en su vagina vulnerable. Podía oír el sonido de su lengua lamiendo en la
abertura húmeda. Ella gritó cuando su lengua lamió su rígido clítoris, con un
movimiento rápido y duro en la yema hinchada.
—Oh, Ethan. Sí. Sí. Sí. —Ella estaba fuera de control, consumida por la
necesidad de llegar al orgasmo.
Ella tiraba sus ataduras mientras cabalgaba las olas que la golpeaban sin
descanso. Ethan no paraba, continuaba su ataque mientras ella se retorcía y se
quemaba. Él era un hombre poseído y no estaba satisfecho con su largo, explosivo
orgasmo.
—Tómalo en tu boca.
Oh, sí. Ella abrió su boca cuando él bajó su enorme miembro, húmedo y
ansioso. Sus labios se cerraron cómo mejor pudieron en torno al pene gigantesco e
hinchado. Podía sentirlo gemir en su pubis mientras sus caderas comenzaron a
bombear, follando su boca.
Lo sintió deslizar su dedo mojado en su culo virgen. Era estrecho y dolía, pero
el placer erótico se sobrepuso al dolor. Él la estaba follándola desde todos los ángulos.
Cada movimiento estaba en sincronía. Las lamidas de su lengua, sus tres dedos
agresivos en su canal y un rápido y furioso bombeo en su culo.
Justo cuando estaba segura de que iba a perder la cabeza, Ethan se volvió y la
cubrió.
—Mía. —Él jadeó cuando llevó su boca a la de ella. Sus manos se deslizaron
sobre sus senos mientras su lengua capturaba la de ella. Sus esencias fluían juntas
cuando su lengua encontró la suya. Los fluidos de sus orgasmos combinados hacían
un sabor único que era un afrodisíaco para ambos.
Sus manos trabajaban sus pechos con la cantidad justa de dolor y placer,
acariciando los pezones con pasión erótica.
—Todo el mundo nos va a ver juntos. Tengo que tomarte con fuerza, para
hacerles saber que eres mía.
—Sí, Ethan. Hazme tuya. —Su respiración era difícil y estaba ciega de deseo.
86 sus caderas hacia arriba para golpearla contra sus movimientos vigorosos.
Estaba indefensa, completamente perdida en su posesión. Su cabeza se agitaba, con
las manos encrespadas en un apretón fuerte contra sus palmas y tiras.
—Eres mía, Brianna. Mía. Siempre mía. —Ethan jadeaba contra su cuello.
Ella podía sentir su locura, su deseo de conducirlos a fusionarse completamente.
Su cuerpo latía en ella, su polla enterrada por completo con cada golpe duro.
Más rápido... más fuerte... más rápido. Sus caderas estaban empujando duro,
atrayéndola a su encuentro. Se encontraron con tal fuerza que toda la unión era un
golpe apretado de piel contra piel.
Aunque ya sabía que iba a suceder, la erupción de sus colmillos en las encías,
la asustó. Esto le provocó un hambre feroz por Ethan y enterró sus colmillos recién
surgidos en su hombro, con un golpe casi violento.
Ethan se sacudió, pero ella sabía que no era de dolor. Estaba abrumado con
los mismos sentimientos que ella estaba experimentando, el dibujo de la
embriagadora esencia de ambos. Era carnal, salvaje y continuaron alimentándose
vorazmente mientras luchaban para llegar al clímax.
Cuando retrajeron sus dientes, se habían perdido por completo. Ethan detuvo
su sangrado con un golpe de su dedo. Le llevó un momento recordar parar el suyo.
Ella lamió las gotas que habían escapado.
Brianna estaba tonta, sin sentido. Sabía que su clímax se acercaba, construido
con intensidad, la sensación le apretaba en su intestino y le decía que iba a golpearla
violentamente.
La golpeó con tales espasmos profundos que ella trató de arquear la espalda.
Echó la cabeza hacia atrás y gritó mientras la sacudía.
Sintió que su cuerpo se relajaba cuando Ethan la soltó de sus amarras. Tomó
a Brianna en sus brazos, acunándola.
—La magia se ha ido. —La magia que había sentido en toda la habitación
88 había desaparecido, dejando apenas una apacible paz.
Ella sabía exactamente lo que él quería decir y sin más sonrió. Nunca podría
resistirse a esa sonrisa traviesa.
—Creo que tienes razón. —Ella bajó la cabeza y le dio un beso cariñoso.
Los hermanos Hale estaban allí, para su asombro, resplandecían en sus trajes
negros que combinaban con el novio. Nadie se dio cuenta, lo mucho que los atraían
los cuellos del equipo adyacente, de vez en cuando o que no parecían totalmente
cómodos.
También pidió una torta extra. Una para sus hermanos… otra para el resto de
los invitados.
Para alegría de Brianna, su dama de honor y mejor amiga Callie tomó el ramo.
Rory capturo la liga roja, a pesar que ni siquiera lo estaba intentando. Parecía gravitar
hacia él y de alguna forma, quedo atrapada en un botón de su chaqueta. Él se la
tendió cómo si fuera una cobra venenosa.
—Ethan… eres terrible. Realmente quiero que todos tus hermanos encuentren
sus compañeras.
Aunque los hermanos Hale en su mayoría eran buenos… cada uno de ellos
tenían un poco de diablo.
Brianna suspiró. Su esposo era probablemente más que solo un poco perverso.
Ethan la atrapó en un abrazo caluroso y cuando bajo sus labios a los de ella le
dijo en voz baja:
—A veces te gustan mis malos hábitos, esposa.
Cuando sus labios encontraron los de ella Brianna admitió para sí misma que
probablemente lo hacía.
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Serie Vampire Coalition
2 - La compañera de Rory
Callie Marks nunca imagino que cuando
atrapó el ramo en la boda de su mejor
amiga... también se encontraría con su
destino en el mismo lugar. Rory Hale era
el hombre más lindo y dulce que había
conocido nunca. Él era tambien el más
inalcanzable. Espléndido, rico e
inteligente, Rory nunca se interesaría en
ella. Nunca elegiría a una mujer
regordeta, aburrida y chef que sufrió
92 rechazos en su pasado. ¿Quién querría a
una niña abandonada que nunca supo
quienes eran sus padres? Poco sabía ella...
él estaba muy interesado. Por desgracia,
él también era un vampiro gobernado por
el destino en el departamento de
apareamiento. Su compañera no sería de
su elección.
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