Vamos a conocer cómo la célula se comunica con su entorno (comunicación
celular) y cuál es el rol de los receptores, en específico los receptores intracelulares. Todas las células reciben señales que están llegando constantemente desde el ambiente y generan respuestas, las cuales van a ser bastante específicas y relacionadas al tipo de señal que van a recibir. En la imagen se muestran las levaduras, que en presencia de un factor de apareamiento se induce la proliferación de este organismo unicelular. Los factores de proliferación son factores proteicos solubles que llegan a la superficie de la membrana de la célula y desarrollan una respuesta dentro de la célula. Los neutrófilos (patrulladores del sistema inmune) son glóbulos blancos que migran rápidamente hacia las heridas para ayudar a combatir la infección, donde generan fagocitosis para cazar bacterias. Son atraídos hasta la herida a través de señales químicas liberadas por otras células del sistema inmune, o bien por microorganismos invasores. Respuesta a estímulo artificial: en el experimento se liberan cantidades diminutas de un quimio-atrayente con una micropipeta. Cuando los neutrófilos captan estos estímulos se polarizan y se desplazan hacia la fuente de origen. Cuando la fuente del quimio-atrayente cambia de lugar, inmediatamente el neutrófilo forma una protuberancia que le reorienta hacia la nueva ubicación. Este es el comportamiento in-vitro, pero está basado en lo que podemos ver in-vivo. Respuesta a estímulo real: se realiza una preparación donde se añade la bacteria staphylococcus aureus. El pequeño grupo de bacterias libera un quimio-atrayente que es detectado por el neutrófilo, inmediatamente el neutrófilo se polariza y empieza la persecución de la bacteria. La bacteria movida por energía térmica se desplaza aleatoriamente de manera que parece que evite a su predador. Finalmente, el neutrófilo la atrapa y la elimina mediante fagocitosis. Para visualizar un linfocito patrullando una zona dañada, se ha anestesiado una larva de pez cebra y con una aguja se le ha hecho una pequeña herida en una aleta. En la parte inferior de la imagen se puede observar una vena. Podemos ver directamente a los linfocitos saliendo del vaso sanguíneo y migrando hacia la herida. Los linfocitos son atraídos por los compuestos químicos liberados por las células dañadas por bacterias invasoras y por otros linfocitos. A menos aumento, podemos apreciar que la invasión de linfocitos está restringida al área de la herida. Más o menos similar a como funciona los sistemas actuales de recepción de señales tecnológicos, donde el receptor sería como una antena de una estación de radio, el cual está asociado a un equipo que interpreta una señal. Si la señal es auditiva, entonces va a emitir sonido, si la señal es visual va a emitir una imagen. En la célula es lo mismo, tenemos el receptor que va a estar atento a las señales que llegan y la forma en que esa célula responde tiene que ver con su contexto general: su función, las moléculas que está expresando y las moléculas que participen en la captura de esa señal. Transducción de señales: proceso que lleva desde la unión de la señal a su receptor hasta la respuesta de la célula. La señal original, que es la del mensajero primario (un ligando del receptor) va a ir siendo transformada en otros tipos de señales al interior de la célula, a través de proteínas que van a interpretar la señal que llegó al receptor para ayudar a la conducción de la señal, mientras que el ligando se mantiene fuera de la célula. ¿Cómo funciona la señalización celular? La imagen hace referencia a un esquema básico que podríamos decir que es homologable a casi todos los receptores de superficie. Una molécula señal extracelular se pone en contacto con su proteína receptora (receptores de superficie celular), y aquí en esta célula, que es una célula blanco que recibe la señal, vamos a tener asociadas al receptor una serie de proteínas señalizadores intracelulares. Al final de esta cascada de estas proteínas señalizadores intracelulares, la última va a generar modificaciones sobre proteínas receptoras o ejecutoras de una respuesta. Por ejemplo, a enzimas que alteran el metabolismo, proteínas que regulan la expresión génica, proteínas encargadas de formar citoesqueleto (forma o movimiento de la célula). Cada una de esas enzimas va a generar una distinta parte de la respuesta total de la célula a la presencia de esa señal. Vamos a tener 4 tipos de proteínas o moléculas participando: - la señal - el receptor - las proteínas señalizadores internas (transducen la señal) - las proteínas efectoras de tareas específicas que tienen relación estrecha con la respuesta de la célula. En cuanto a esta señal, de acuerdo a su tipo y a su naturaleza, puede tener un receptor en la superficie, como también un receptor dentro de la célula. Unión de moléculas extracelulares a receptores específicos Los receptores de superficie son, en general, proteínas de transmembrana que tienen en su dominio citosólico un lugar para la unión de una molécula ligando. Los receptores de superficie están diseñados para captar moléculas hidrofílicas, que no pueden atravesar de otra manera la membrana. Por otro lado, vamos a tener receptores intracelulares que están diseñados para captar señales hidrofóbicas, como son, por ejemplo, algunas hormonas. En este sentido, esta hormona va a tener una proteína transportadora (porque el medio es acuoso, por ejemplo, la sangre para las hormonas y, por lo tanto, requiere de una proteína) que la va a llevar hasta la célula, una vez que ingresa va a tener dentro un receptor que puede estar en el núcleo o en el citoplasma, une su ligando y genera una respuesta. Formas de señalización mediadas por moléculas Dependiendo de cómo se comunica la célula es el de tipo de comunicación que va a ejercer, lo está estrechamente relacionado con la distancia que recorre la señal. Podemos encontrar: - Larga distancia: neuronal/sináptico y endocrina - Distancia intermedia - Dependiente de contacto en donde la señal se entrega de manera estrecha. En la letra A tenemos aquella señalización dependiente de contacto mínimo entre superficies de membrana, lo que significa que las dos células, la que emite la señal y la receptora, tienen que unirse de alguna manera. Esto es equivalente la presentación de antígeno, en donde una célula tiene en su superficie una molécula para ser reconocida y la otra tiene el receptor. Existe otro tipo señalización dependiente de otro tipo de contacto, pero ahí las células tienen incluso comunicación de sus citosoles. En la letra B se muestra señalización a corta distancia, es decir, la paracrina. Aquí la célula señalizadora envía señales a las células vecinas “del mismo barrio”, o sea, células vecinas del mismo tejido que presenten el receptor, no tiene que viajar ni por la sangre ni por la linfa. En algunos casos, esta señalización también puede ser autocrina, en donde la misma célula que emite la señal puede recibirla. A diferencia de la primera, aquí no hay un contacto directo entre ambas células que participan en la transmisión de la señal. En la letra C y D están las señalizaciones sináptica y endocrina que representan el movimiento de la señal a largas distancias. En la señalización endocrina las células que producen la señal (o molécula de la señal) la liberan al torrente sanguíneo, donde viajan por la circulación hasta llegar a un tejido blanco distante que tiene los receptores para esas señales. Por lo tanto, depende del sistema circulatorio. En la señalización sináptica la señal viaja largas distancias, pero dentro de la célula, es el axón de la neurona el medio por el cual tiene que moverse ese NT de una manera figurativa, porque en general la molécula señal está acumulada en el botón sináptico, pero el axón de las neuronas viaja largas distancias, de hecho, por ejemplo, las neuronas motoras que hacen mover nuestro pie vienen por lo menos desde la médula espinal, tenemos por lo menos 1 metro de distancia que tiene que recorrer. La señal se entrega estrechamente cercana entre las dos células, es casi como si fuera a este nivel paracrino, porque se está entregando al lado, de hecho, es casi por contacto, pero la diferencia es que tiene que recorrer una larga distancia para encontrar su blanco. Velocidad del actuar de las señales extracelulares La célula va cambiar su comportamiento en base a la señal que está llegando, pero lo puede hacer de manera rápida o lenta. En la figura una molécula señal extracelular se une a su receptor y, por ejemplo, una vía rápida podría tener que ver con una transducción local que llegue hasta la alteración de la función de una proteína pre-existente, este tipo de señales puede provocar la fosforilación de una enzima que active su actividad enzimática, es rápido de segundos a minutos. Pero, muchas de las señales mediadas son respuesta a largo plazo, esas respuestas largas o lentas tienen que ver con cambios de expresión génica, siendo más lenta porque la señal debe llegar al núcleo, por lo tanto, implica también que el factor de transcripción que está a nivel citosólico se tiene que activar y después viajar al núcleo, activar la transcripción, el mensajero procesarse, viajar de vuelta al citoplasma, traducirse y recién generar una proteína que puede ejecutar una respuesta, entonces, claramente ese tipo de respuesta involucra de varios minutos a horas. En ambos casos, tanto las respuestas cortas como las respuestas lentas, tienen finalmente una alteración de la maquinaria citoplasmática celular, ya sea a nivel de modificaciones enzimáticas, cambios en el citoesqueleto, cambio en la secreción de alguna molécula, y esto finalmente genera una modificación del comportamiento celular. Uniones de hendidura Este es un tipo de señalización por contacto, donde ambas células están unidas a través de una unión en hendidura, que es una especie de canal entre los citoplasmas de las células, el cual deja pasar moléculas bien chicas, por ejemplo, calcio y otros iones que permiten que la célula de al lado que no ha recibido la señal externa pueda generar la misma respuesta. La célula responde a combinaciones de señales La célula está recibiendo más de una señal a la vez y tiene que interpretar e integrarlas para poder generar una respuesta coherente, pueden llevar a respuestas opuestas, pero que integradas generan una respuesta única en la célula. Algunas de estas señales van a indicar sobrevida, pero con otras señales adicionales, crecimiento y división celular. En vez de estas dos señales en rosado, llegan dos en verde y le induce diferenciación a la célula o si no recibe ninguna señal o solo señales negativas esta célula puede morir. La respuesta depende de la combinatoria de señales y su integración a nivel celular. Cada tipo de célula responde a su manera una misma señal La respuesta de los diferentes tipos de células ante una misma señal va a depender del tipo de molécula receptora que presenta y el tipo de molécula o proteínas que expresa la señal. Acá tenemos 3 tipos de células que responden al ligando acetilcolina, las células son la fibra muscular cardiaca y esquelética y las células de la glándula salival. La fibra muscular cardiaca responde disminuyendo la frecuencia de la contracción del corazón, se relaja (tiene proteínas señalizadoras internas asociadas a la relajación) y la célula esquelética responde aumentando la contracción (tiene proteínas señalizadoras internas asociadas a la contracción). En la célula de la glándula salival en presencia ACh saliva, la diferencia con las otras células es su especialización, por lo tanto, el set de proteínas internas que están expresando. Al mismo receptor se le pueden unir distintos tipos de proteínas señalizadores, obviamente que no dentro del mismo tipo celular. Destino celular: Morfógenos Durante el desarrollo embrionario hay señales que se conocen como morfógeno, las cuales van alterando el patrón de diferenciación del embrión en etapas tempranas, es una señal que se libera en gradiente, es decir, la célula que libera el morfógeno, a medida que te alejas de la fuente tienes menor probabilidad de percibir el morfógeno, por lo tanto, dependiendo de la distancia que se encuentra la célula de esa fuente va a tener un destino distinto dentro de ese embrión, por lo tanto, una diferenciación distinta entre ellas y distintos efectos en lo que hará dentro del embrión. Esta respuesta va a depender de cuál es el morfógeno que se está generando en esa célula fuente. Entonces, no estamos hablando de un ligando distinto ni de una célula receptora distinta, sino que de cantidades diferentes de un ligando (por la distancia). El que recibe más se transforma en la célula A, el que recibe menos en la C y el que recibe una cantidad intermedia se transforma en la célula B. Interruptores moleculares para la transducción de señales Hay dos tipos de modificaciones en las proteínas que van a actuar como especie de switch o interruptor para el traspaso de esta señal internamente en la célula. La primera es la fosforilación de una proteína: hay una proteína inactiva, cuando la señal entra va a haber una quinasa que la fosforila y la transforma en una proteína activa. Pueden ser proteínas receptoras, señalizadoras, efectoras, enzimas o simplemente proteínas con otra función, la actividad va a depender de la presencia de una fosforilación. Cuando esta proteína activa se desfosforila por acción de una fosfotasa pierde su utilidad y vuelve al estado inicial. Mientras la señal esté presente este ciclo continúa, hay un aumento en la cantidad de la proteína fosforilada v/s la proteína inactiva, cuando no hay señal este balance se invierte. Una manera de generar respuestas rápidas (segundos o pocos minutos) a partir de una señal tiene que ver con este tipo de modificaciones. Dentro de las proteínas quinasas hay dos tipos más abundantes: serina/treonina quinasa y la tirosina quinasa, el nombre de estas depende de cuál es el aa que se fosforila. El segundo interruptor es la señalización mediante unión a GTP. Aquí la GTPasa unida a GDP está inactiva, mientras que cuando se une a GTP se activa, para esto, como vimos con Ran y con Rab, hay dos reguladores: - GEF: actúa en la proteína inactiva cambiando el nucleótido de GDP a GTP activándola cuando entra la señal. Si se mantiene la señal activa se encuentra la proteína unida a GTP. - GAP: activa la hidrólisis de GTP cuando la señal se va para inactivar la proteína, de GTP pasa a GDP. Vamos a ver algunas GTPasas monoméricas y triméricas que son muy importantes para algunos receptores celulares. Las monoméricas son aquellas que un solo polipéptido tiene la actividad GTPasa y GTPasas triméricas que corresponden a las conocidas proteínas G, son un complejo de 3 polipéptidos que van a acoplarse a un cierto tipo de receptores que tienen una respuesta celular particular. Retroalimentación de las vías de señalización Las vías de señalización tienen retroalimentación, la que puede ser positiva o negativa. Una retroalimentación positiva implica que, por ejemplo, la misma enzima que se activa producto de la presencia de una señal, estimula su misma activación, de esa manera mientras haya esta proteína activa va a seguirse activando. En el gráfico se puede ver que, si no hay una retroalimentación, hay un peak que es donde llega una señal y mientras esta se mantenga dura la actividad y después se va. Cuando hay retroalimentación, aunque la señal se vaya, la activación de la enzima va a permanecer y esto va a sostener la respuesta celular. La retroalimentación negativa es el proceso inverso. Si hay mucha quinasa señal, hay una especie de bloqueo de su propia actividad. Si tiene un retraso de retroalimentación negativa al corto plazo vamos a tener una baja en la actividad de la enzima, pero si tiene un retraso largo vamos a tener interrupciones de la señal y ciertas pausas, pero básicamente tenemos una forma en que se auto- regula la señalización evitando que perdure demasiado. La célula tiene estrategia para ambas, pero para evitar de que esta señal se mantenga de manera patológica, existe un balance entre retroalimentaciones positivas y negativas de manera de que funcione de manera correcta en la transducción de señales. Regulación de sensibilidad a una señal
Dentro de estas regulaciones que ejerce la célula sobre la transducción de señales
está la de regular la sensibilidad que la célula presenta a una señal. Una de las formas es el secuestro del receptor, el cual se va a endocitar junto con el ligando y parte de ese secuestro puede ser, finalmente, llevarlo a degradación al lisosoma, podemos llevarlo al endosoma o directamente al lisosoma. Otra forma es generar inhibidores contra el receptor, de manera que se bloquee la transmisión de la señal por parte del receptor o, también, generar inhibidores contra las proteínas señalizadoras (inactivación directa). Y, finalmente, la célula puede generar una proteína inhibidora que evite que se activen las proteínas señalizadores. O sea, el proceso puede ser inhibido generando una actividad enzimática inversa a la que hace el receptor sobre la proteína señalizadora o generando su actividad sobre otra proteína que bloquee. RECEPTORES INTRACELULARES Son aquellos receptores diseñados para captar señales que son liposolubles, como en el caso de las hormonas. Está dentro de la célula y no en la membrana plasmática, y la señal, por lo tanto, debe ingresar al citosol o al núcleo. Algunos ejemplos de ligandos que tienen receptores intracelulares son moléculas esteroidales: el cortisol, el estradiol, la testosterona, vitamina D, ácido retinoico y la tiroxina. Los receptores intracelulares se conocen también como señales nucleares, no porque reciban señales del núcleo, sino porque su función está dentro del núcleo. Los receptores nucleares de las hormonas esteroidales y de las vitaminas son factores de transcripción y tienen, por lo tanto, una región de la proteína que es el dominio de unión al DNA. La figura representa la estructura de un receptor intracelular, el cual está unido a una proteína inhibitoria (en el extremo carboxilo) cuando no está presente el ligando, bloqueando la parte que involucra que se una al DNA. Cuando el ligando se une cambia la forma del receptor y libera a la proteína que lo mantiene inhibido. En el extremo amino se muestra el dominio de activación de la transcripción para transcribir el gen y eso tiene que ver con la unión de los factores básicos de la DNA polimerasa, este no es lo mismo que el dominio de unión al DNA. La figura muestra un receptor que ya unió ligando. Cambió la forma del dominio azul que estaba bloqueado por la proteína inhibitoria (disociación de la PI). Tenemos el dominio de unión a DNA sentado sobre una región del gen, y acá tenemos el dominio de activación transcripcional que está interactuando con proteínas coactivadoras de la transcripción. Algunos receptores unen el ligando en el citoplasma y otros en el núcleo. La unión del ligando, aparte de poder activarlo, también puede cambiar la localización (de citoplasma a núcleo) o favorecer la unión a represores de la transcripción (regulación positiva o negativa de la transcripción) Cuando hablamos de un promotor de un gen eucarionte, hablamos de una región cercana al sitio de inicio de transcripción donde se pegaba la RNApol, pero podría haber sitios distantes activadores o inhibidores de la transcripción, y estos son secuencias llamadas elementos de respuesta o elementos de unión al factor de transcripción, donde se unen proteínas como estas generando una respuesta a nivel de la transcripción. La respuesta en general responde a producir genes necesarios para mediar la acción de la hormona. Por ejemplo, en el caso de las hormonas que tiene que ver con el desarrollo del ciclo menstrual, cuando se une el estrógeno va a generar la expresión de genes necesarios para cumplir con la parte del ciclo celular en donde el estrógeno participa. La unión del ligando al receptor nuclear cambia su estructura y su disposición tridimensional, escondiendo segmentos que eran regulados por los inhibidores. Como todos los receptores intracelulares son factores transcripcionales, la respuesta es a través de cambios de la expresión génica. Por un lado, tenemos respuesta primaria o temprana la cual tiene que ver con el cambio de expresión que hace el receptor a los primeros genes: se une la hormona al receptor, este complejo activa la expresión de genes que son de respuesta primaria, dentro de esos genes vamos a tener proteínas que también son en sí mismas factores de transcripción y estos van a generar una respuesta secundaria o tardía, como que indirectamente la hormona y su receptor gatillan la expresión de los genes que están en azul, o sea, proteínas de respuesta secundaria. La primera es por unión directa de la hormona y de su receptor al promotor de estos genes tempranos, y la segunda son las proteínas tempranas las que inducen la expresión de una segunda oleada de proteínas o respuesta secundaria, además una de las proteínas de respuesta primaria inactiva los genes de la respuesta primaria para que los otros generen la secundaria. Cuando el receptor hormonal regula directamente la expresión génica, una vez presente la señal puede haber una transcripción regulada masiva, ya que se pueden activar todos los genes requeridos para la respuesta que debe gatillar la hormona. RECEPTORES DE MEMBRANA Además de los receptores nucleares, vamos a tener receptores a nivel de la membrana: - Acoplados a canales iónicos Son canales iónicos activados por ligando específico (unión de una molécula), al unirse abre un canal y pasan los iones. También llamados receptores ionotrópicos porque son receptores que generar flujo de iones. - Acoplados a proteínas G Son receptores de superficie que se asocian a GTPasas que se llaman proteínas G triméricas, las cuales cambian su forma cuando se une la señal al receptor. El receptor se activa y también una de las 3 proteínas de la proteína G (la que contiene la actividad GTPasa) y puede mediar la activación de enzimas que se encuentran a nivel de la membrana. El ligando que se une a la superficie celular como primer mensajero y llega a todas las células que tienen su receptor, mientras que, un segundo mensajero amplifica la señal dentro de la célula a distintos blancos estimulando la respuesta celular. Son receptores que pasan varias veces a través de la membrana. - Acoplados a enzimas Se caracterizan por tener un solo segmento transmembrana, tienen su lado externo que es el sitio de unión al ligando y el lado interno o citosólico que tiene una actividad enzimática. Hay receptores que son enzimas en sí mismos (quinasa) y otros que se asocian a enzimas. Ante la presencia del ligando el receptor dimeriza, y es dimerización va a generar una señal.
Cuando tengamos un receptor en la
superficie, el viaje hasta el núcleo es largo y vamos a necesitar esta serie de proteínas señalizadoras que median la transmisión de la señal y un grupo de segundos mensajeros que van a amplificar la señal actuando sobre otras proteínas generando integración de las señales. Vamos a ver cómo mediante dos vías diferentes, dos ligandos o mediante dos receptores distintos podemos integrar hacia las mismas proteínas receptoras y generar la misma respuesta celular. Entonces, hay una serie de regulaciones que dependen de la señal que se está recibiendo, como se transdujo y cuáles son las proteínas blanco de la modulación de esa señal para que llegue al núcleo y genere un cambio de la expresión génica para que provoque la respuesta duradera.