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UNIVERSIDAD PRIVADA ALAS PERUANAS - FILIAL AYACUCHO

FACULTAD DE INGENIERÍAS Y ARQUITECTURA

ESCUELA ACADÉMICA PROFESIONAL DE “INGENIERÍA CIVIL”

“EFECTOS DE LA EDAD DE LA TUBERÍA”

ASIGNATURA : MECÁNICA DE FLUIDOS II

DOCENTE : Ing. CASTAÑEDA ESQUEN, Carlos Augusto

PRESENTADO POR:

- FERNÁNDEZ LLACCTAHUAMAN, Williams

- NUÑEZ HINOSTROZA, Antony

- HUAYHUALLA HUAMANI,Fredy

- TELLO BAUTISTA, Fany

AYACUCHO – PERÚ

2017
INTRODUCCIÓN
El envejecimiento de una tubería de agua es el conjunto de procesos naturales físicos,

químicos y biológicos que ocurren con el paso del tiempo


La regeneración de las tuberías comprende todas las medidas posibles de prevención,

mantenimiento y corrección en busca de mantener o volver a sus condiciones iniciales en

miras de optimizar el aprovechamiento del recurso.


EFECTOS DE LA EDAD DE UNA TUBERÍA 1

1. EFECTOS DE LA EDAD DE UNA TUBERÍA


 Pasividad.
La pasividad es un estado del metal en que no se produce corrosión, aunque su forma

metálica no sea termodinámicamente estable, por lo que el metal tiende a transformarse en

otra sustancia. Si estos productos se forman en contacto directo con el metal, pasivan al

metal, impidiendo la corrosión dependiendo de que sea poroso o no, o permita el paso o no

según sus características de adherencia y taponamiento.

 Series galvánicas.
La acción galvánica se produce cuando un metal es conectado a otro en presencia de

un electrólito y, por lo tanto, se produce corrosión electroquímica denominada corrosión

galvánica, o también denominada corrosión bimetálica

 Corrosión biológica.

La corrosión bacteriana o biológica es todo fenómeno de destrucción, en el cual estos

microorganismos, ya sea que actúen directamente o por medio de las instancias provenientes

de su metabolismo, desempeñan un papel importante al acelerar un proceso ya establecido, o

al crear las condiciones favorables para que se produzca dicho fenómeno.

Los principales factores son:

 Características físicas del material.

En la práctica toda tubería tiene imperfecciones, ya sean visibles y fácilmente

detectables, o simplemente imperceptibles. Estas irregularidades inciden en el inicio del

proceso de corrosión y son condicionantes para que se desarrolle la corrosión biológica.

También influyen condiciones como la estructura, las alteraciones de la superficie o cualquier

deterioro por mínimo que sea.

 Temperatura, PH.
Cada microorganismo tiene una temperatura óptima para su desarrollo. Una

temperatura general oscila entre 25° a 30° C. Hay esporas que resisten diversas variaciones

de temperaturas.

El pH favorece o impide el desarrollo de las bacterias. El pH óptimo para las bacterias

se encuentra alrededor de la neutralidad, aunque hay excepciones como el Thiobacilus, que

puede adaptarse hasta pH muy bajos de 1 o 2.

El pH es una medida de la acidez o la alcalinidad de una solución en una escala que va

de 0 a 14. El valor del pH depende de la concentración relativa de los iones hidrógeno y

oxidrilos que posee la solución.

La presencia de mayor cantidad relativa de iones hidrógeno dará por resultado una

solución con reacción ácida, y si la concentración de oxidrilos es mayor, dará por resultado

una reacción alcalina.

Así es que una solución con un valor de pH menor a 7 es ácida, si el valor es 7, es

neutra; y si es mayor que 7, es alcalina.

1.1. EFECTOS DEL TIEMPO EN LA RUGOSIDAD DE LAS TUBERÍA.


La industria de los materiales y la técnica de fabricación de los tubos han

evolucionado notoriamente; la superficie interna de los tubos se presenta más homogénea y

más favorable al flujo. Han evolucionado los procesos de revestimiento y aún con la

producción de tubos más largos se redujeron el número de uniones. Por otro lado, se definen

mejor las características de las aguas que van a circular, el fenómeno de la corrosión vino a

conocerse mejor y ya se controla la agresividad de las aguas, ya que estudios han demostrado

que la rugosidad aumenta con el tiempo en tuberías expuesta a corrosión, en el caso de tubos

de acero galvanizado.
Cuando la superficie de la pared de un conducto se amplifica, observamos que está

formada por irregularidades o asperezas de diferentes alturas y con distribución irregular o

aleatoria. Dicha característica es difícil de definir científicamente, pues depende de factores


como la altura media de las irregularidades de la superficie, la variación de la altura efectiva

respecto de la altura media, la forma y distribución geométrica, la distancia entre dos

irregularidades vecinas, etc.


La irregularidad puede expresarse por la altura media  de las asperezas (rugosidad

absoluta ), como un promedio obtenido del resultado de un cálculo con las características del

flujo, mas no propiamente por el obtenido como la media de las alturas determinadas

físicamente de la pared, en cada conducción. Es más importante la relación que la rugosidad

absoluta guarda con el diámetro del tubo, esto es la relación /D que se conoce como

(rugosidad relativa).
Existen tubos, como los de asbesto-cemento, cuya rugosidad es de forma ondulada y

que se comportan hidráulicamente como si fueran tubos lisos (vidrio o plástico).


La determinación de la rugosidad absoluta de las tuberías que conducen a líquidos es de suma

importancia por cuanto esta característica de la tubería se encuentra involucrada en las

ecuaciones que comúnmente se utilizan para el diseño de tuberías como la de Nikuradse,

Colebrook, Darcy.
1.2. NATURALEZA DE LAS PAREDES DE LOS TUBOS: RUGOSIDAD
Analizándose la naturaleza o rugosidad de las paredes deben considerarse:

a. Material empleado en la fabricación de los tubos.

b. Proceso de fabricación de los tubos.

c. Extensión de los tubos y número de juntas.

d. Técnica de asentamiento.

e. Estado de conservación de las paredes de los tubos.

f. Existencia de revestimientos especiales.

g. Empleo de medidas protectoras durante el funcionamiento.


Así por ejemplo, un tubo de vidrio evidentemente es más liso y ofrece condiciones

más favorables al flujo que un tubo de fierro fundido.

Una tubería de acero remachado opone mayor resistencia al flujo que una tubería de

acero soldado. Por otro lado, los tubos de fierro fundido por ejemplo, cuando nuevos ofrecen

menor resistencia al escurrimiento que cuando han sido usados.

Con el uso, esos tubos se obstruyen, se oxidan y en la superficie pueden

surgir “tubérculos” (fenómeno de corrosión). Estas condiciones se agravan con el tiempo

(Fig1a). Modernamente han sido empleados revestimientos internos especiales con el objeto

de eliminar o aminorar los inconvenientes de la corrosión. Otro fenómeno que puede ocurrir

en las tuberías es la disposición progresiva de sustancias contenidas en las aguas y la

formación de capas adherentes – incrustaciones – que reducen el diámetro útil de los tubos y

aceleran la rugosidad (Fig1b)

Fig. 1a Fig. 1b

1.3. INFLUENCIA DEL ENVEJECIMIENTO DE LOS TUBOS

Con el correr del tiempo, la capacidad de transporte de agua de las tuberías de fierro

fundido y acero (sin revestimientos especiales) va disminuyendo. Por otra parte estudios han

demostrado que la rugosidad aumenta con el tiempo en tuberías expuesta a corrosión, en el

caso de tubos de acero galvanizado. Tal fue el reporte hecho por Ippen, quien por

observaciones hechas en tuberías de acero galvanizado, encontró que el valor de  era el

doble después de 3 años como resultado de un uso moderado. Por su parte Freeman
determinó que para tuberías muy viejas se tenía valores de rugosidad de 20 a 60 veces que los

obtenidos por Nikuradse en una tubería nueva.

Para aguas muy agresivas, o para aguas tratadas y no bien controladas, el

envejecimiento de los tubos podrá ser más rápido. Para aguas muy bien controlada, el

decrecimiento de C es lento.

Tabla Rugosidad de los tubos

Tipo de tubo en metros

Nuevo de hierro dulce, de 2 pulgadas 0.000042

De hierro dulce y viejo, de 2 pulgadas 0.0009

Nuevo de hierro dulce, de 3 pulgadas 0.000046

De hierro dulce, ligeramente mohoso, de 3 0.00013

pulgadas

Viejo, de hierro dulce, muy mohoso, de 3 0.00094

pulgadas

Nuevo de hierro dulce de 4 pulgadas 0.000049

Viejo, de hierro dulce, mohoso, de 4 pulgadas 0.0029

Ensayos y verificaciones hechas en líneas de fierro fundido, muy bien ejecutadas y en

las cuales fueron empleados tubos de buena calidad, mostraron que para el inicio del

funcionamiento, el coeficiente C para la ecuación de Hazen Williams, adquiere valores

alrededor de 140. Poco después este valor cae a 130 y con el correr del tiempo pasa a valores

cada vez más bajos. La tendencia del fierro para entrar en solución y la presencia de oxígeno

disuelto en el agua- factores primordiales de la corrosión – son responsables por la formación


de tubérculos en la superficie interna de los tubos; de la reducción de sección y del aumento

de rugosidad resulta la disminución de la capacidad de transporte y el decrecimiento de C.

Tabla valor del coeficiente

Material Valor del coeficiente C

Acero corrugado 60

Acero con uniones 130

Acero galvanizado ( nuevos y en uso ) 125

Acero remachado ( nuevos ) 110

Acero remachado, en uso 85

Acero soldado con revestimiento especial 130

Plomo 130

Asbesto-cemento 140

Cobre 130

Concreto, buena terminación 130

Concreto terminación común 120

Fierro fundidos, nuevos 130

Fierro fundido, en uso 90

Vidrio 140

Plástico 140

1.4. CAUSAS DE LA CORROSIÓN EN LAS TUBERÍAS DEL SISTEMA DE AGUA


Tuberías para distribuir el agua potable son de plástico, hormigón o metal (por

ejemplo, acero, acero galvanizado, hierro dúctil, cobre o aluminio). Tubos de plástico y

hormigón tienden a ser resistentes a la corrosión. Tubos de metal a la corrosión es un proceso

continuo y variable de la liberación de iones de la tubería en el agua. Bajo ciertas condiciones

ambientales, las cañerías de metal pueden corroerse basado en las propiedades de la tubería,

el suelo que rodea el tubo, las propiedades del agua y las corrientes de fuga de

electricidad. Cuando se produce la corrosión de tubos de metal, que es el resultado del

intercambio de electrones electroquímicas como resultado de las propiedades diferenciales

galvánica entre los metales, las influencias iónica de soluciones tampón acuáticos, o el pH de

la solución.

De corrosión de las tuberías de agua de metal que se produzca, una celda

electroquímica debe estar presente. Una celda electroquímica se puede considerar como una

batería, con una corriente eléctrica entre un potencial positivo (ánodo) y un potencial

negativo (cátodo). El potencial eléctrico corrosivo se crea normalmente por las diferencias en

los tipos de productos químicos en el suelo o la superficie de la tubería de metal.

1.5. PÉRDIDAS POR FRICCIÓN

La pérdida por fricción se define como la pérdida de energía producto de la resistencia

que la cañería opone al paso del agua. La fórmula general tiene la siguiente expresión:
Hf =J∗L
Donde:Hf = Pérdida de energía o carga producto de la fricción (m)
J = Pérdidas de carga por cada metro de tubería (m/m)
L = Longitud de la cañería de conducción (m)
Las pérdidas de carga se identifican con la perdida de energía de un flujo hidráulico a

lo largo de una conducción, por efecto del rozamiento.


No confundir la perdida de carga por fricción con la caída de presión.
p₁ p ₂
∆p = −
γ γ
2. TIPO DE MATERIAL DE LAS TUBERÍAS

2.1. TUBERÍAS DE HIERRO FUNDIDO (HF)

Es un material de gran durabilidad. Generalmente, en el diseño con esta clase de

tubería se usa un valor de C=100 para obtener el coeficiente rugosidad de la expresión de

HAZEN WILLIAMS.

2.2. ENVEJECIMIENTO DE TUBERÍAS DE HIERRO Y ACERO

Envejecimiento en tuberías (Fox R. W. y McDonald A. T., 1992).

Con el transcurrir del tiempo y a consecuencia de diferentes causas, la capacidad de

transporte del agua de las tuberías va disminuyendo. El criterio de Genijew, expuesto por G.

Sotelo A. (1982), parece ser el más efectivo para modificar la rugosidad absoluta del tubo

nuevo, usando la siguiente ecuación:

Grupo I
Agua con poco contenido mineral que no origina corrosión. Agua con un pequeño contenido

de materia orgánica y de solución de hierro:

a varia de 0.005 a 0.055; valor medio; 0.025

Grupo II

Agua con poco contenido mineral que origina corrosión. Agua que contiene menos de 3 mg/l

de materia orgánica y hierro en solución:

a varia de 0.055 a 0.18; valor medio; 0.07

Grupo III

Agua que origina fuerte corrosión y con escaso contenido de cloruros y sulfatos (menos de

100 a 150 mg/l). Agua con un contenido de hierro de más de 3 mg/l:

a varia de 0.18 a 0.40; valor medio; 0.20

Grupo IV

Agua que origina corrosión, con un gran contenido de cloruros (más de 500 a 700 mg/l ).

Agua impura con una gran cantidad de materia orgánica.

a varia de 0.40 a 0.60; valor medio; 0.51

Grupo V

Agua con cantidades importantes de carbonatos, pero de dureza pequeña permanente, con

residuo denso de 2000 mg/l :

a varia de 0.6 a más de 1

2.3. TUBERÍAS DE HIERRO FUNDIDO DUCTIL

Es un material menos frágil que le H.F., que tiene mayor versatilidad en su uso, al

poder ser utilizado tanto enterrado como superficialmente, lo que permite utilizar una sola

clase de tubería en el caso de diseño de líneas de aducción en terrenos rocosos y terrenos

blandos.
2.4. TUBERIAS DE HIERRO GALVANIZADO (HG)

También llamado Acero Galvanizado. En razón de su contenido de carbón es menor

que el de H.F. su resistencia a la oxidación y a la corrosión es menor. Mediante el proceso de

galvanizado se da un recubrimiento de zinc tanto interior como exteriormente, para darle

protección contra la corrosión.

2.5. TUBERIAS DE ASBESTO – CEMENTO A PRESIÓN (ACP)

La tubería de asbesto-cemento es unja tubería más frágil que la de H.F.; es un material

inerte a la corrosión, lo cual resulta ventajoso respecto a las otras clases de tuberías

mencionadas.

Por su fragilidad, las perdidas por rotura durante la carga, descarga, colocación y transporte

son mayores (7 a 10 por 100).

2.6. TUBERIAS DE MATERIAL PLÁSTICO (PVC)

Es un material inerte a la corrosión, por lo cual su utilización no se ve afectada por la

calidad del agua. Ofrece ventajas en cuanto a capacidad de transporte en base a coeficientes

de rugosidad menores (C= 140).

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