Está en la página 1de 12

DEDICATORIA

A Dios porque ha estado conmigo a


cada paso que doy, cuidándome y
dándome fortaleza para continuar, a mis
padres, quienes a lo largo de mi vida
han velado por mi bienestar y educación
siendo mi apoyo en todo momento.
PRESENTACIÓN

En el presente trabajo abordaremos sobre la vida y enseñanza de uno de los


cuatro grandes Padres del Oriente y de los tres grandes doctores ecuménicos
de la Iglesia griega San Juan Crisóstomo, personaje con muchas virtudes
cristianas que nos deja en legado muy valioso para nuestra fe. Sin duda alguna
es uno de los Padres de la Iglesia con mucha actividad en la que más que
defender la doctrina cristiana, la enseña.
SAN JUAN CRISÓSTOMO

(Chrisostomos “boca dorada” llamado así debido a su elocuencia). Doctor de la


Iglesia, nació en Antioquía, cerca del año 347; murió en Comana en Ponto el 14
de septiembre de 407.

Juan, cuyo sobrenombre “Crisóstomo” aparece por primera vez en la


“Constitución” del Papa Vigilio (cf. P.L., LX, 217) en el año 553, es generalmente
considerado el más prominente doctor de la Iglesia Griega y el más grande
predicador jamás escuchado en un púlpito cristiano. Sus dotes naturales, así
como circunstancias externas, lo ayudaron a convertirse en lo que fue.

Vida

San Juan Crisóstomo, afamado rétor y fino exegeta, primero asceta y monje;
luego, diácono y presbítero en Antioquía; después obispo de Constantinopla.
Aquí su seriedad de reformador y también su falta de tacto le llevaron a serios
conflictos con obispos y con la corte imperial. Depuesto y desterrado, sus
tribulaciones y muerte en el exilio fueron una dolorosa prueba martirial para él y
el sector de la comunidad que se le mantuvo fiel1.

Nació en Antioquía (Siria), en el año 3472. En aquel entonces, dicha ciudad era
la segunda más importante del Imperio Romano de Oriente. El padre de Juan,
Secundo, era un oficial del ejército sirio y murió poco tiempo después del
nacimiento de Juan por lo que su hermana mayor y él quedaron totalmente a
cargo de Antusa, la madre cristiana de ambos. Juan fue bautizado en 370, a la
edad de 23 años y fue ordenado lector (una de las órdenes menores de la
Iglesia). Comenzó estudios con el filósofo Andragatio y continuó con Libanio, que
entonces era un famoso orador y el más ferviente partidario del feneciente
paganismo romano. Libanio quedó maravillado con la elocuencia de su discípulo
y previó para el mismo una brillante carrera como estadista o legislador. Sin
embargo, un encuentro con el obispo Meletio resultó decisivo en la vida de Juan,
quien comenzó a estudiar teología con Diodoro de Tarso (uno de los líderes de
la antigua escuela de Antioquía) mientras mantenía un ascetismo extremo. No
obstante, las ansias de una vida más perfecta lo llevaron a convertirse en un
eremita (alrededor de 375) condición en la que permaneció hasta que su
quebrantada salud por excesivas vigilias y ayunos durante el invierno lo obligaron
a volver a Antioquía donde retomó su actividad como lector. Crisóstomo fue
siempre un admirador de un monasticismo activo y utilitario y se pronunció contra
los peligros de una contemplación ociosa. En 381 fue ordenado diácono por
Meletio de Antioquía y en 386 fue ordenado sacerdote por el obispo Flaviano I
de Antioquía. Al parecer fue éste el momento más feliz de su vida. Su principal
tarea durante doce años consistió en predicar. Adquirió gran popularidad por su
elocuencia. Dignos de mencionar son los comentarios que hizo a pasajes
bíblicos y la exposición de enseñanzas morales muchas de ellas recopiladas en
sus Homilías. Con el transcurso del tiempo Crisóstomo llegó a ser el sucesor de
Flaviano I. Durante su misión como obispo mostró gran preocupación por las
necesidades espirituales y materiales de los pobres. También se pronunció en
contra de los abusos de los poderosos y de la propiedad personal. Su
interpretación directa de las Escrituras (en contraste con la tendencia de
Alejandría donde se recurría a una interpretación alegórica) lo condujo a
seleccionar para sus charlas temas eminentemente sociales que explicaban el
concepto de la vida cristiana. A la muerte de Nectario el 27 de septiembre de 397
fue instituido de cierta forma en contra de su voluntad como metropolitano de
Constantinopla (por su calidad de villa imperial, el metropolitano de
Constantinopla recibió posteriormente el título de Patriarca). Para poder
abandonar la ciudad de Antioquía, en donde era tan querido, una escolta militar
tuvo que acompañarlo para así evitar la conmoción del pueblo. Quedó instituido
como metropolitano el 26 de febrero de 398 por Teófilo, patriarca de Alejandría,
quien con gran desgano llevó a cabo el pedido del emperador Arcadio.

Como Obispo de Constantinopla

El primer acto del nuevo obispo fue provocar la reconciliación entre Flaviano y
Roma. La misma Constantinopla comenzó pronto a sentir el impulso de una
nueva vida eclesiástica La necesidad de reforma era innegable. Crisóstomo
comenzó “barriendo las escaleras desde arriba” (Palladius, op- cit., v). El llamó
a su oeconomus, y le ordenó reducir los gastos del mantenimiento de la sede
episcopal; puso fin a los frecuentes banquetes, y vivió poco menos estrictamente
de lo que antes había vivido como sacerdote y monje. Sin embargo, el partido de
los descontentos no era realmente peligroso, a menos que pudieran encontrar
algún líder prominente e inescrupuloso. Tal persona se presentó más pronto de
lo que podrían haberlo esperado. Fue el bien conocido Teófilo, Patriarca de
Alejandría. Apareció bajo circunstancias bastante curiosas, lo que de ningún
modo anunciaba el resultado final. Teófilo, hacia el fin del año 402, fue
convocado por el emperador a Constantinopla para disculparse ante el sínodo,
que debería presidir Crisóstomo, por varios cargos, que habían sido presentados
en su contra por ciertos monjes Egipcios, especialmente por los llamados cuatro
“hermanos altos”. El patriarca, su antiguo amigo, se había puesto
repentinamente en su contra, y los había perseguido como Origenistas
(Palladius, "Dialogus", xvi; Socrates, op. cit., VI, 7; Sozomenus, op. cit., VIII, 12).
Un doble atentado contra la vida de Crisóstomo fracasó. En Vísperas de Pascua
de 404, cuando todos los catecúmenos estaban por recibir el bautismo, los
adversarios del obispo, con soldados imperiales, invadieron el baptisterio y
dispersaron a toda la congregación. Al final Arcadio firmó el decreto, y el 24 de
Junio de 404, los soldados condujeron a Crisóstomo una segunda vez al exilio.

Exilio y Muerte

Los seguidores del obispo exiliado fueron acusado del crimen y perseguidos.
Apresuradamente Arsacio, un hombre viejo, fue designado sucesor de
Crisóstomo, pero fue pronto sucedido por el astuto Atico. Crisóstomo, fue
conducido Cucusus, un aislado y escabroso lugar en la frontera este de Armenia,
continuamente expuesto a las invasiones de los Isáuricos. Cuando las
circunstancias de esta deposición fueron conocidas en el Occidente, el papa y
los obispos italianos se declararon en su favor. El emperador Honorio y el Papa
Inocencio I intentaron convocar un nuevo sínodo, pero sus delegados fueron
apresados y enviados a casa. El papa rompió toda comunión con los Patriarcas
de Alejandría, Antioquia (donde un enemigo de Crisóstomo había sucedido a
Flaviano), y Constantinopla, hasta que (después de la muerte de Crisóstomo)
consintieron admitir su nombre en los dípticos de la Iglesia. Murió cerca de
Comana, en el Ponto, el 14 de septiembre del año 407.

Obra

Entre los Padres griegos no hay nadie que haya dejado una herencia literaria tan
copiosa como Crisóstomo. Además, él es el único, entre los antiguos
antioquenos, cuyos escritos se han conservado casi íntegramente. Ningún
escritor oriental ha conseguido la admiración y el amor de la posteridad en el
campo que lo consiguió él . Su don extraordinario de elocuencia le valió el
glorioso título de “Crisóstomo,” “Boca de Oro,” que casi ha suplantado a su
verdadero nombre desde que le fue otorgado por primera vez en el siglo VI 3.

1) Tratados (Son anteriores a su ordenación sacerdotal):


 Sobre el sacerdocio (373): es la obra más leída y traducida (es una
obra práctica).
 Exhortación a Teodoro de Mopsuestia;
 Contra los enemigos de la vida monástica;
 Sobre la virginidad;
 Sobre la compunción;
 Sobre la vanagloria y la educación de los hijos.

2) Homilías (Es considerado el mejor orador cristiano. Duraban un par de


horas. La gente tomaba nota de ellas; él las preparaba mucho; había
muchos aplausos...):
 Homilías exegéticas (exégesis literal de carácter moral; son varios
centenares)
 Antiguo Testamento: dos serie sobre el Génesis (son 9 y 67); 60
sobre los Salmos;
 Nuevo Testamento: 90 sobre San Mateo; 88 sobre San Juan (390-
91); sobre los Hechos; 250 sobre las Epístolas de San Pablo.
 Homilías dogmáticas
 12 contra Eunomio sobre la naturaleza incomprensible de Dios;
 Homilías bautismales.

 Homilías morales
 Contra los juegos circenses;
 Sobre la limosna.

 Homilías de circunstancias
 A propósito de las fiestas;
 21 homilías por las estatuas, motivadas por un motín del pueblo de
Antioquía contra el Emperador.

3) Cartas: Escribió 236 cartas con celo apostólico, en las que se reflejan su
gran humanidad y santidad de vida, entereza y ánimo frente a lo adverso.
Dos de esas cartas están dirigidas al Papa Inocencio y son una buena
fuente para defender el Primado romano.

Doctrina - Teología

Entre los numerosos escritos de Crisóstomo no hay uno sólo que se pueda
llamar propiamente una investigación o estudio de un problema teológico
como tal. No estuvo envuelto en ninguna de las grandes controversias
dogmáticas de su época. Si refuta herejías, lo hace para proporcionar a sus
lectores la información e instrucción necesarias.

1) Cristología

No cabe duda de que Crisóstomo era partidario de la doctrina


antioquena tanto en exégesis como en cristología. Distingue
claramente entre ousia o physis para significar naturaleza, e
hypostasis o prosopon para significar persona. Enseña que el hijo es
de la misma esencia que el Padre y emplea por lo menos cinco veces
la fórmula nicena homoousios para caracterizar la relación del Hijo
con el Padre.
2) Mariología

Creía en la virginidad de María antes y durante el parto5. No hay duda


de que el haberse educado en aquella escuela (de Antioquía) influyó
en su mariología. Nunca aplica en sus escritos a la Santísima Virgen
el título de Theotokos, al que se oponían los antioquenos; pero
tampoco emplea la expresión Christotokos, que utilizaban ellos, ni la
de Diodoro de Tarso, Anthropotokos; una prueba ésta de que
deliberadamente usaba de reserva y se negaba a tomar partido en la
discusión que había empezado ya para el año 380.

3) Pecado original

En el sermón Ad neophytos, Crisóstomo enumera detalladamente los


efectos del bautismo: “Por eso bautizamos también a los niños
pequeños, aun cuando no tengan pecados” (αμαρτήματα). De este
pasaje, el pelagiano Juliαn de Eclana concluyó que Crisóstomo
negaba el pecado original. San Agustín le replica con razón (Contra
Iulianum 1,22) que el plural “pecados” y el contexto prueban que
Crisóstomo se refería a los pecados personales (propria peccata), y
en apoyo de su argumento cita ocho pasajes de otras obras de
Crisóstomo para probar que enseñó abiertamente la existencia del
pecado original. Pero, con todo, la concepción de Crisóstomo en estos
pasajes no coincide exactamente con las ideas y con la terminología
mejorada de San Agustín. Aunque Crisóstomo asegura repetidamente
que las consecuencias o penalidades del pecado de Adán no afectan
solamente a nuestros primeros padres, sino también a sus
descendientes, nunca dice explícitamente que el pecado mismo haya
sido heredado por su descendencia y que sea inherente a su
naturaleza.
4) Penitencia

Crisóstomo habla con frecuencia de la confesión de los pecados, pero


se refiere o a la confesión pública en presencia de otros o a la efusión
del corazón en presencia de sólo Dios. Sobre esto segundo insiste él
una y otra vez, señalando su necesidad y sus ventajas. Nunca da a
entender que en la confesión hecha delante de Dios incluya también
la confesión hecha a un sacerdote que actúa como representante de
Dios.

5) Eucaristía

En los tiempos modernos se le ha llamado a San Juan Crisóstomo


Doctor Eucharistiae. Aunque este título no ha recibido una aprobación
oficial de la Iglesia, no hay duda de que es un testigo eminente de la
presencia real de Cristo en la Eucaristía y del carácter sacrificial de la
misma. Sus afirmaciones en este sentido son numerosas, claras,
positivas y detalladas. Querría que se acercaran a este sacramento
con respeto y devoción.

6) Sobre el sacerdocio

Respecto del sacerdocio San Juan Crisóstomo en su tratado De


sacerdotio, nos dice textualmente: “El sacerdocio, sí es cierto que se
ejerce sobre la tierra, pero pertenece al orden de las instituciones
celestes, y con mucha razón. Porque no fue un hombre, no un ángel
o arcángel, no otra potestad alguna creada, sino el Paráclito mismo
quien ordenó este ministerio e hizo que hombres vestidos aún de
carne pudieran ejercer oficio de ángeles.

En efecto, a moradores de la tierra, a quienes en la tierra tienen aún


su conversación, se les ha encomendado administrar los tesoros del
cielo, y han recibido un poder que ni a ángeles ni a arcángeles
concedió Dios jamás.
CONCLUSIÓN

Después de haber estudiado a este Padre de la Iglesia, muy importante en la


vida de la misma, vemos que es posible defender nuestra fe y aportar para su
correcta divulgación, haciendo un recorrido con mucha preparación, dándole
valor a las Sagradas Escrituras, a la Tradición y a las enseñanzas del Magisterio.
Convencernos de quien anunciamos es a Jesucristo no a nosotros mismos. Ese
es el motivo que nos debe mover en todo lo que hacemos.
BIBLIOGRAFÍA

QUASTEN Johannes, Patrología II. La edad de oro de la literatura patrística


griega, BAC, Madrid, 19914.

TREVIJANO ETCHEVERRIA Ramón, Patrología, Biblioteca de Autores


Cristianos, Madrid, 1994.

VIDAL MANZANARES César, Diccionario de Patrística. (s. I-VI), Libro digital.

 http://ec.aciprensa.com/j/juancrisostomo.htm 5-jun-2012; 16h35

 http://es.wikipedia.org/wiki/Juan_Cris%C3%B3stomo 5-jun-2012; 16h40


ANEXO

Figura 1. San Juan Crisóstomo

Figura 1. Obras de San Juan Crisóstomo

También podría gustarte