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Autoevaluación de Unidad 1

Nombre: Andrea Guillem Macías

Matar al monstruo desde sus entrañas.


En esta unidad se analizó bajo distintos autores el método comparativo en la sociología, la
política y la historia, partiendo de la noción que comparar es siempre ver el otro a través de
nuestra mirada y como esa construcción del otro es también una construcción de quien se es
y de donde se habla. En términos generales la discusión de los desafíos que el nacionalismo
metodológico y el eurocentrismo presentan es la discusión aparente entre universalismo y
particularismo, entendiendo ambas como contradictorias pero que al revelarse la actitud
universalista que presenta el eurocentrismo significa el entendimiento de la sociedad bajo los
marcos epistemológicos y conceptuales de Europa.

El desafío entonces está en buscar nuevas formas de pensar y pensarnos teniendo siempre en
cuenta la discusión sobre la comparación, porque siempre cuando definimos y delimitamos
algo lo hacemos pensando en lo que no es. Quiero usar las recomendaciones de Santos (2010)
para enriquecer el entendimiento del presente y las posibilidades del futuro con la sociología
de las ausencias y la sociología de las emergencias, para poder volver a visibilizar lo que la
razón moderna occidental produce activamente como imposibilidad y potenciar el horizonte
de posibilidades del futuro.

De la misma forma Luis Tapia (2008) hace una crítica de como la razón neoliberal se ha
hecho mundo y construye activamente una forma de entender la política no como una
expresión orgánica de la sociedad y sus contradicciones, sino como una esfera independiente
de la vida social con su propia lógica de funcionamiento neutral y arbitral de las relaciones
de mercado. Esta forma de establecer la política en la que individuos formalmente iguales
pero profundamente desiguales compiten por el poder de un Estado diseñado para proteger
la propiedad privada y contener la expansión de lo social, hace que sea complicado salirse de
los marcos universalistas que impone la democracia liberal. Aquí una vez más encuentra un
desafío la imaginación política de pensar formas de organización que no se piensen solamente
bajo el signo estatal, puesto que el Estado capitalista es una estructura funcional a la
protección y reproducción del capital.

Me sirvo de la construcción de Ludovico Silva (1982/2006) para pensar la ideología no como


una entidad fantasmagórica que encubre las cosas de la realidad de forma malévola sino como
parte del sistema de producción de objetos espirituales que naturalmente como parte de un
sistema sirve a su perpetuación y legitimación. El autor invita incluso a dilucidar como en
las prácticas políticas de los movimientos sociales de trabajadores, estudiantes, mujeres,
indígenas, y demás grupos subalternos yacen elementos ideológicos que es necesario superar
en orden de construir formas de autogobierno y decisión que puedan servir de alternativa a
la democracia liberal burguesa y hegemónica.
Estas recomendaciones metodológicas y teóricas que propone Santos y Tapia y Silva lo
vinculo por una lado con mi proyecto personal de investigación que se trata sobre otras
formas de entender la democracia no sólo como un concepto político sino de una forma más
sustantiva e integral, también con mi clase de movimientos sociales y mi posición política
como mujer, estudiante, feminista y de izquierda que intenta con otros compañeros y
compañeras articular un movimiento que pueda politizar los diversos espacios de la
universidad y cuestionar permanentemente las lógicas neoliberales que nos atraviesan a todos
y todas. Es la necesidad de entender a cabalidad las estructuras materiales y espirituales que
sostienen un tipo de organización del poder, de la riqueza y la cultura, en orden de querer
transformarlos, es, si se quiere, matar al monstruo desde sus entrañas.
En este sentido, aunque todas las líneas de investigación son una invitación a desarrollar mis
intereses, me quedo con la traducción intercultural, de forma que quisiera poner en práctica
la complejidad de pensar al otro desde mis propios marcos de entendimiento y viceversa,
evidenciar las contradicciones dialécticas que encierran las comparaciones. Y más cuando la
tesis es sobre procesos constituyentes en los países de Ecuador, Venezuela y Bolivia que de
alguna manera se presentaron como originales y nuevas formas de constituir Estados mucho
más abiertos y democráticos.

Bibliografía:

De Souza Santos, B. (2010). “Des-pensar para poder pensar” en Descolonizar el saber,


reinventar el poder. Montevideo: Ed. Trilce.
Tapia, L. (2008). Política salvaje. La Paz, Bolivia: CLACSO, Muela del Diablo

Silva, L. (1982/2006). Contracultura y Modernidad. Caracas: Fondo Editorial Ipasme, Pp. 3-


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