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PÚBLICA
Por José Monterrosa.
Y si es cierto que ella hace eso por nosotros, entonces… ¿por qué es que a veces
se hacen prejuicios de ella?, ¿cuál es su culpa?
Una definición de AP requiere de mucho cuidado, porque en ella hay implícita una
variedad de disciplinas, y cuando la AP se apoya en una de ellas, la relación que
surge entre las dos, hace creer que el concepto de AP pertenece a esa asignatura
únicamente.
Por ejemplo, el derecho resulta muy importante en la AP, porque cada directriz que
se toma debe estar sujeta a parámetros legales como podría ser el caso de los actos
administrativos, y sin embargo el derecho no lo es todo. La AP siempre está
sometida a otras áreas discrecionales que ciertamente actúan bajo consideraciones
propias de discernimiento, dado a los acontecimientos o imprevistos que suceden
en la realidad; de ahí, que otras asignaturas también tomen fuerza.
Hay que recordar que el derecho permanece siempre en el campo del "deber ser",
y la AP posee una cualidad muy flexible.
A continuación tenemos a la sociología. Una ciencia que sin duda alguna es utilizada
por la AP para conocer a la sociedad que pretende gobernar, y que se vuelve
imprescindible para estudiar y definir las características de aquellos grupos sociales
que la componen. En cierto modo, esto es una ciencia de la cual la AP se siente en
deuda. Sin ella, no sería posible explicar la realidad social.
A pesar de que hemos mencionado estas asignaturas, existen muchas otras como
la historia, la arquitectura, las ingenierías, la contaduría, las que pertenecen al área
de las bellas artes, las matemáticas, las ciencias naturales, las ciencias de la salud,
la educación, las ciencias militares, etc., también juegan un papel muy importante
para la AP y sin ellas no sería fácil organizar un Estado. A decir verdad, todas son
muy necesarias.
No hace mucho tiempo, recuerdo a un profesor que se preocupó mucho por lograr
que entendiéramos su definición y la aplicáramos, y que además de eso,
transmitiéramos a las personas de “a pie”, como muy bien se dice en el argot popular
para apuntar a las personas en general, un concepto de simple magnitud que cobija
la administración pública.
De aquél momento, me acuerdo que una parte de la definición que él citaba del
Diccionario de la Administración Pública Colombiana, del autor Carlos Pachón
Lucas decía así: