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TEXTO: SANTIGO 4.

13-17 TITULO: HACIENDO PLANES CON DIOS

INTRODUCCION

Quiero empezar dando gracias a Dios por la segunda vez que predico en este lugar, y también quiero
felicitar por los chicos que organizaron el día del seminarista, que fue de mucha bendición para todos, que
unos meses atrás se estuvo planeando, de hecho se llevó en oración por este proyecto, pero reconozcamos su
trabajo de ellos.

Hablando de planes, para empezar mi sermón, quiero que tengamos en la mente esto: que planes
tenemos en un futuro, pero que no hemos incluido a Dios.

Casi en toda nuestra vida la vivimos planeando para lo que vamos hacer mañana o en un futuro

Por más simples y buenas que sean los planes, a veces no incluimos a Dios allí, o que quiere Dios para
ese plan…

Mencionemos algunas, han escuchado una vez o siempre escuchan esto, acaba uno de terminar de
comer, alguien dice por ahí, ¿y que vamos a cenar?, ¿o que vamos a comer mañana?, o ¿adónde vamos
mañana?, vivimos tan preocupados que no disfrutamos de la comida.

Una de las cosas que hacemos es que en ocasiones nos sentamos planear con nuestros amigos donde
vamos, pero la pregunta es, ¿nos sentamos hacer planes con Dios?,

El titulo de mi sermón es HACIENDO PLANES CON DIOS, precisamente porque en todos los planes
Dios debemos de depender de Él, saber que lo que Dios quiere de nosotros con cada plan que hagamos.

Por eso…

Proposición: en esta tarde aprenderemos dos características que debe de tener en nuestros planes que
queramos realizar.

Oración de transición: veamos esas dos características.

DIVISIONES

1.- RECONOCER LA FRAGILIDAD DE TU VIDA. V.13-14

13 Ahora escuchen esto, ustedes que dicen: «Hoy o mañana iremos a tal o cual ciudad, pasaremos
allí un año, haremos negocios y ganaremos dinero». 14 ¡Y eso que ni siquiera saben qué sucederá
mañana! ¿Qué es su vida? Ustedes son como la niebla, que aparece por un momento y luego se
desvanece.

Esta ilustración que escogió Santiago es increíble, porque los judíos eran buenos comerciantes del
mundo antiguo, ese mundo les dio todas las oportunidades necesarias para poner en práctica sus habilidades
comerciales y en aquel tiempo se fundaron muchas ciudades, y los judíos eran comerciantes de éxito, que por
lo regular siempre buscaban los centros donde se vendía más para hacer sus negocios, este versículo 13 me
recuerda acá en Oaxaca, por ejemplo: en el centro de la ciudad hay vendedores ambulantes, ustedes los ven
cuando van por el zócalo, en este versículo 13, es algo muy similar, el plan de los comerciantes que hacían (o
es lo que hacen los comerciantes ahora) pero bueno el plan que menciona Santiago de lo que hacen estos
hombres era así…

En primer lugar, escogen su propio tiempo, (hoy y mañana).

En Segundo lugar, escogen su propio lugar para hacer sus negocios, (tal ciudad).

En tercer lugar, escogieron su propia duración, (pasar un año allí).

En cuarto lugar, definieron lo que iban hacer (haremos negocio)

Por último, en quinto lugar; algo muy codicioso, escogieron su propia meta u objetivo, (y ganaremos dinero)

Creo todos hemos hecho este tipo de planes en relación con nuestras vidas, en nuestros planes podemos decir
que cuando salgamos del seminario iremos a tal país, etnia, o iglesia. La vida exitosa se comienza con hacer
planes realistas, el problema que plantea Santiago es que no son los planes en sí, el problema es hacer planes
que no se toman en cuenta la contingencia de esta vida, estos comerciantes se jactaban del día de mañana y
tan eran jactanciosos y soberbios como si la vida les perteneciera, como si ellos pudieran determinar la vida.

Jesús dijo en Mat 6:34 Así que, no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá
su afán. Basta a cada día su propio mal.
Muchas veces, de tanto afanarnos de lo que vamos hacer mañana nos podemos volver jactanciosos o
soberbios.
Muchas veces el afán nos hacen perder la mejor parte que Dios tiene para nosotros, si Uds. recuerdan la
historia de Marta y María, donde maría estaba escuchando a Jesús y Él le respondió, Marta, Marta, afanada y
turbada estás con muchas cosas
Tu vida es como niebla, cuantas veces escoges la mejor parte para estar con Dios.
Jesús enseñó a sus discípulos a no preocuparse desmedidamente por el día de mañana, sino a depender de Dios
para el futuro, cuando nosotros reconozcamos la fragilidad de nuestra vida entenderemos que en nuestros
planes debe incluir a Dios, porque no sabemos cuándo Dios va decir: ¡Hasta aquí!

Cuantas veces nosotros podemos hacer planes tras planes sin Dios, y este es un error que podemos caer en
nuestro ministerio.

Podemos hacer este tipo de plan: un año estaré en una iglesia, al siguiente voy a sembrar 4 iglesias, y después
de 4 años me iré a áfrica.
La pregunta ¿es lo que Dios quiere?
Santiago dice en el versículo 14 que nosotros somos como la neblina: es un claro ejemplo de la caducidad de
la vida. La niebla, ha sido utilizada muchas veces en la Biblia como símbolo de la brevedad de la vida
Hay dos pasajes que voy a mencionar que se relacionan con este tema
En Sal 102:3 dice el salmista Porque mis días se han consumido como humo,
Y mis huesos cual tizón están quemados.
Oseas 13:3 dice: Por tanto, serán como la niebla de la mañana, y como el rocío de la madrugada que se
pasa; como el tamo que la tempestad arroja de la era, y como el humo que sale de la chimenea.

Cuando el sol sale, la niebla se desvanece, Santiago 1:10, 11 hace una comparación de la vida del ser humano
como la flor de la hierba, que también “se desvanece”.
Me pongo a pensar que tan frágil es nuestra vida, podemos planear mucho y ya hasta saber que hacer el día
mañana, pero cuando salgas en la calle, ¡pum! Te tira un carro. Debemos de reconocer la fragilidad que tiene
nuestra vida y que tan importante es Dios en esos planes que tenemos para mañana o en un futuro, porque
nuestra vida es como un hilo en el fuego, el hacer planes con Dios es dejarnos llevar por su voluntad.

Si cuando hemos hecho nuestros planes hemos sido así, la siguiente enseñanza Santiago nos da la solución.

La segunda característica es HACIENDO PLANES CON DIOS

2.- RECONOCER LA DEPENDENCIA EN DIOS V.15 - 17

15 Más bien, debieran decir: «Si el Señor quiere, viviremos y haremos esto o aquello».16 Pero
ahora se jactan en sus fanfarronerías. Toda esta jactancia es mala. 17 Así que comete pecado todo el que
sabe hacer el bien y no lo hace.

Creo que mucho he escuchado esto, SI EL SEÑOR QUIERE, DIOS MEDIANTE. Pero
Infortunadamente, muchas personas hoy en día, así han sido también históricamente, utilizan esta expresión
como un simple formulismo. Entre los árabes se oye frecuentemente: «Si Ala quiere», y creo que sabemos
dónde viene la palabra ojalá. Muchos dicen esto, si el señor quiere o Dios mediante después de haber hecho
unos planes sin Dios.

El versículo 15 dice: Más bien, debieran decir: «Si el Señor quiere, viviremos y haremos esto o
aquello».

Finalmente si tú dices Si el Señor quiere, viviré y haré esto o aquello». Significa que tú te vas a
dejarte guiar por él, una cosa es decir, voy hacer esto, y otra cosa es decir yo siento que el Señor me quiere
llevar en este lugar, puedes preguntar ¿pero cómo sabré?, finalmente es tu comunión con Dios y que te dejes
que él tome el control. ¿quieres HACER TUS PLANES CON DIOS? debes dejarte guiar por Él y vivir bajo
su voluntad tal como Jesús lo hizo, en Mateo 26:39 dice Padre mío, si es posible, pase de mí esta copa; pero
no sea como yo quiero, sino como tú, , tus planes si los dejas en las manos de Dios el tomara el control, aunque
a veces por muchas que estén pasando (por enfermedades, situaciones en las que a veces creemos que no hay
salidas), pero pasa esto para enseñarte algo, la situación es que tanto dejas en las manos de Dios, Jesús dejo
todo en las manos del Padre, y ese plan resulto glorioso. Y esta es una actitud correcta de lo que debes de
asumir antes de realizar tus planes, Señor… que sea como tú quieras no como yo quiero, porque si tu sientas
a planear alguna actividad con tu amigo, ¿no crees que deberías primero sentarte con Dios y platicarle tus
planes? Cuando tu tengas en cuenta que tu vida es como la niebla, es cuando reconocerás que cuanto debes de
dependerte de Dios.

Cuando tú digas si el Señor quiere, viviré y haré esto o aquello, es donde tu estas demostrando la
necesidad de depender de Dios, no lo que vas a ganar ni de tus planes. “Si el Señor quiere, viviremos…” esta
dependencia a Dios no era parte de la vida de estos comerciantes a los que Santiago les escribe.

16 Pero ahora se jactan en sus fanfarronerías. Toda esta jactancia es mala, Santiago señala que la
jactancia es pecado. La jactancia humana es vana, porque le da la gloria al hombre y no a Dios. Los planes
fuera de Dios son vacíos y vanos. Este versículo nos recuerda la gran advertencia de Santiago cuando citó (Pr.
3:34) en el versículo 6: “Dios se opone a los soberbios, pero da gracia a los humildes”, cuando caes en la
autosuficiencia tu pierdes la humildad, porque piensas que tus logros los has ganado tú.

Santiago concluye con esto en el versículo V17 Así que comete pecado todo el que sabe hacer el
bien y no lo hace. Me gustó mucho como lo dice TLA Si ustedes saben hacer lo bueno y no lo hacen,
ya están pecando. Por eso mismo si el cristiano sabe que tiene que someter sus planes a Dios, para depender
de él, y no lo hace, entonces está pecando. La idea no está en hacer algo malo, sino en fallar en hacer lo bueno.

CONCLUSION

Recapitulación:

HACIENDO PLANES CON DIOS


1.- RECONOCER LA FRAGILIDAD DE TU VIDA. V.13-14

2.- RECONOCER LA DEPENDENCIA EN DIOS V.15 - 17

Aplicación: Siempre cuando planeamos sin consultar a Dios es como decir, para que le cuento a Dios
lo que voy a hacer, si puedo hacerlo hacer solo, muchas veces no disfrutamos de lo mejor que Dios tiene para
nosotros, porque siempre vivimos pensando en que hacer mañana, no tenemos en mente que el Señor es el
Señor de la vida, no nosotros, somos vasijas frágiles, como una flor; que puede marchitarse a cualquier hora,
por eso es que como hijos de Dios necesitamos dependernos de Él antes que a nosotros mismos, ya dejemos
de hacer planes sin Dios…

Invitación:
Mi invitación en esta tarde es que tu hagas ese compromiso con Dios, que tú te dejes guiar por él, si
él vive nosotros viviremos, porque tenemos que preocuparnos y temer por el mañana si él tiene el control,
que dependamos de Dios. Oremos…

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