Una comunidad incluyente se puede construir en cualquier
momento. La necesidad de tener una comunidad incluyente, sin embargo, es más evidente cuando se ha tomado una decisión o ha habido un incidente que causara daño a un grupo de personas específico. Es importante tener en cuenta la motivación detrás de los deseos de un individuo, grupo o comunidad de construir una comunidad incluyente ya que esa motivación afecta lo siguiente: Los tipos y la secuencia de estrategias seleccionadas: si hubiera una crisis se debiera comenzar con una estrategia que termine con el conflicto. Si en vez de crisis lo que existe es la visión de un líder comunitario que suscitó la iniciativa, se debiera considerar comenzar con una campaña de educación pública. Los recursos disponibles: se pueden movilizar más recursos si la motivación proviene de una institución más grande o fundación local. El grado de apoyo y oposición: si el grupo dominante en la comunidad está tan motivado como cualquier otro grupo, es probable que haya más apoyo. Si en cambio, el grupo dominante no tiene interés en cambiar la situación, seguramente habrá más barreras. El índice de progreso: si los líderes y grupos principales apoyan el esfuerzo, habrá un progreso más rápido. Los resultados esperados: si el objetivo es lograr la concientización, es probable que todos los involucrados estén satisfechos si aprendieron cosas nuevas acerca de otros grupos. Si el objetivo es promover un trato justo para cada grupo, es probable que todos los involucrados estén satisfechos con un cambio en la política. Se debe averiguar cuáles son los principales grupos que viven en la comuni dad e informarse sobre su historia (es decir, cuánto hace que residen en la comunidad, los patrones de migración, los cambios en la clase social y situación económica y política). Existen varias maneras de hacerlo: Se puede comenzar contactando a los organismos de gobierno locales y grupos de planificación. Además, se puede revisar el sitio web de la Oficina de Censos [información en inglés, pertinente a EE.UU.] y/o el sitio web de la ciudad o pueblo, consultar el Proyecto Nacional de Indicadores de Vecindarios. Leer los periódicos locales, conducir y caminar por la comunidad y prestar atención a las actividades sociales, las urbanizaciones y estados de las viviendas, la actividad en las calles, etc., asistir a eventos en la comunidad y conversar con sus integrantes, y reunirse con sus líderes. A tener en cuenta: La comunidad puede ver a los trabajadores sociales como un delegado de la organización que lo contrató para recopilar la información o como alguien a favor del grupo al que está asociado. Una forma de superar esta percepción es trabajar junto a los ciudadanos de la comunidad que representan a diferentes grupos. Se debería asistir con ellos a reuniones y eventos. Se puede también observar y preguntar acerca de las características que distinguen a un grupo de otro. Estas características pueden incluir la tradición cultural y el origen étnico, la clase socioeconómica, las categorías de empleos y/o la religión. Igualmente se debe averiguar acerca de la organización social de los diferentes grupos, incluso sus puntos de encuentro sociales, redes de apoyo e instituciones principales. Es necesario identificar cuáles son los eventos más importantes (por ejemplo, políticos, sociales y económicos) que afectan a la comunidad. Entre ellos, la elección de un nuevo alcalde que no valora la diversidad en la comunidad, el cierre de una fábrica importante que resulta en la pérdida de empleo de muchos residentes, el establecimiento de un casino o la ampliación de un centro de salud mental. Se debe tomar en cuenta la relación que existe entre esos hechos y otros cambios en la comunidad. Además se debe prestar especial atención a cómo esos hechos han afectado a los grupos principales de la comunidad. Consejo: ¿Cómo saber si se ha escuchado acerca de todos los grupos principales de igual forma? Se puede realizar el mismo número de entrevistas o debates con cada grupo principal. Se puede hacer una encuesta y pedir a los miembros del grupo que nombren a los líderes más influyentes (o a los líderes en los que más confían) y luego conversar con dichos líderes. También se debe identificar y asistir a los eventos que impliquen las tradiciones de la comunidad. Estos eventos pueden proporcionar un pan orama de si la comunidad valora o no su diversidad, qué es importante para la comunidad y qué grupo es más visible y valorado. Además, pueden resultar ser un foro ideal para distribuir la información y demostrar el cambio. OMPROMETER DESDE UN PRINCIPIO A LOS LÍDERES MÁS INFLUYENTES QUE REPRESENTAN A LOS GRUPOS PRINCIPALES PARA QUE BRIDEN ORIENTACIÓN. Se podría reunir una comisión comunitaria conformada por los líderes influyentes de diferentes grupos para que lo asistan en revisar, analizar y resumir la información que ha recopilado anteriormente. Es necesario asegurarse de identificar tanto los recursos y los valores culturales como las necesidades. El proceso de reunir a esta comisión comunitaria es de vital importancia cuando se trabaja con dos o más grupos culturales, étnicos y raciales para construir una comunidad incluyente. Se debe considerar cuidadosamente el historial de exclusión y las diferencias de poder. Consulte la Herramienta Nº 1 como guía para establecer una comisión o junta asesora tomando en cuenta la diversidad comunitaria.