Está en la página 1de 14

La educación social

y popular en Colombia.
Relaciones y búsquedas:
treinta años de legitimidad*
Social and Popular Education in Colombia. Relationships and Searches:
Thirty Years of Legitimacy

Claudia Vélez de la Calle

Resumen both, and its materialisation in the history of Latin


America and Colombia. Find points of agreement
Este artículo establece posibles relaciones from the historical and political contextualization
entre los educadores populares y los educadores policies that allowed its development and changes
sociales, a partir de su génesis y de su materializa- resulting from the rise of neoliberalism, the fall of
ción en la historia latinoamericana y colombiana. the Berlin Wall and the Soviet model of economy
Además, busca puntos de encuentro basandose and politics.
en contextualizaciones históricas y políticas que
permitieron su desarrollo y los cambios producto Keywords: Latin America, Colombia, educa-
del ascenso del neoliberalismo, de la caída del tion, popular educators, social workers.
Muro de Berlín, y del modelo soviético de eco-
nomía y de política.
Palabras clave: América Latina, Colombia, Introducción
educación, educadores sociales, educadores
Se cumplen treinta años de la presencia de
populares.
educadores populares en Colombia. No se sabe
si el aniversario en este sentido es real, pero en
general se entiende lo simbólico como cierto,
Abstract
porque las experiencias de educación política
The article provides possible links between popu- con fines transformadores han estado presentes
lar educators and social workers, from the genesis of en nuestro país por más de tres décadas.

• Fecha de recepción del artículo: 28-09-2010 • Fecha de aceptación: 12-04-2011.

Claudia Vélez De La Calle. Licenciada en Educación. Magíster en Educación y Desarrollo Social. Doctora en Teoría de la Educación
y Pedagogía Social de la Universidad Nacional de Educación a Distancia, UNED, España. Profesora titular de la Maestría en Educa-
ción: Desarrollo Humano de la Universidad de San Buenaventura, seccional Cali. Responsable del proyecto Doctorado en Educación.

* El presente es un artículo de reflexión derivado del trabajo del grupo de investigación Educación: Desarrollo Humano, adscrito
a la Facultad de Educación de la Universidad de San Buenaventura, seccional Cali.

Revista Científica Guillermo de Ockham. Vol. 9, No. 1. Enero - junio de 2011 - ISSN: 1794-192X - pp. 133-146 Ø 133
Claudia Vélez de la Calle

En las reuniones preparatorias de lo que se cadores sociales y los educadores populares; y las
considera una fiesta de la supervivencia del pen- rutas de convergencia y narrativa intercultural.
samiento de Paulo Freire, hay rostros de alegría,
de escepticismo, de sabiduría y de juventud que Pero advirtiendo que de todas formas ya
demuestran el talante de sus seguidores y su están dadas las condiciones para el cambio de
compromiso con la democracia y la búsqueda posicionamiento de los educadores populares en
de la equidad en un país tan complejo como esta época y contexto, sólo se trata de saber escu-
el nuestro. charlos y observar las prácticas con ojos y con-
ceptos nuevos que den cuenta de la afiliación, las
El primer objetivo de dicho encuentro fue adjetivaciones, los saberes y las relaciones con las
celebrar la supervivencia de Paulo Freire y su organizaciones, porque están lideradas por una
propuesta pedagógica y política. El segundo juventud informada (además de consciente) de
objetivo buscaba rememorar las premisas de su las nuevas formas de exclusión y de desigualdad.
emblemática figura, que evidencian su sabiduría
y calidez. A estas propuestas se sumaron poco a Se trata de interpretar lo que se pretende con
poco los actores y los líderes sociales con discur- la inclusión social desde perspectivas democrá-
sos teóricos y prácticos. ticas en la sociedad del control y la eliminación
masiva de individuos, culturas y territorios, al
¿Por qué estamos aquí? ¿Seguimos siendo reconocer que la biopolítica sabe cómo se cons-
legítimos? ¿Qué ha cambiado? ¿Cómo siguen truyen formas de exterminio real y simbólico
siendo nuestras acciones y presupuestos políticos en el mundo.
ante mujeres, niños, indígenas, afrocolombianos,
en fin, la población vulnerable? Preguntas sucesi-
vas que se han ido respondiendo con diferentes
voces/proclamas/susurros no muy seguros de Educación popular:
sus respuestas, pues la realidad violenta del país Historia, un punto de partida
desbordó las intenciones y posturas de los educa- Durante la década de 1970 en América
dores populares y sociales; empero, el entusiasmo
Latina, y particularmente en Colombia, se ges-
que la convocatoria de las reuniones despertó en
taron movimientos espontáneos que buscaban
diversos actores que querían encontrarse con el
alfabetizar, letrada y políticamente, a grandes
pretexto de compartir experiencias y apuestas
sectores de la población con carencias materiales
dio cuenta por sí sola de lo que se buscaba
y educativas. Era una propuesta que apuntaba a
constatar: el deseo de los educadores populares
incentivar la participación y liberación en con-
y sociales por incidir en los procesos sociales y
sonancia con las corrientes políticas defensoras
democráticos del país.
de los derechos humanos, a consolidar de los
¿Cómo es esta nueva educación popular? estados democráticos, y al desarrollo económico
¿Cuáles son sus discursos, sus saberes? ¿Cómo se capitalista que proveyera la satisfacción de las
relacionan la tradición y el cambio en los relevos necesidades socioeconómicas de la mayoría de la
generacionales? ¿Qué se logró sistematizar en es- población. Frente a esta perspectiva, los partidos
tos treinta años? ¿Qué imaginarios se comparten? socialistas y comunistas reaccionaban ante las
¿La academia y la práctica logran estrechar sus medidas de colonización cultural y económica
vínculos? Múltiples interrogantes que con las representada por los planes de desarrollo gestados
voces de los actores tradicionales y de los inno- en los Estados Unidos para el Tercer Mundo y
vadores se espera dar cuenta de la heterogeneidad que fueron conocidos con el nombre de Alianza
y multivocalidad con que se lee el mundo de lo para el Progreso.
social-educativo colombiano-latinoamericano y
de la forma diversa y plural como se busca que la Simultáneamente en toda América Latina,
democracia exista contundentemente en nuestras después del triunfo de la Revolución Cubana
sociabilidades colombianas. (1960), surgieron propuestas políticas similares:
movimientos independentistas de liberación
Este escrito intentará abordar los vínculos nacional, que fueron acompañados por la socie-
entre la educación popular y su historia; los edu- dad civil y clerical disidente y por movimientos
134 × Universidad de San Buenaventura, Cali - Colombia
La educación social y popular en Colombia. Relaciones y búsquedas: treinta años de legitimidad - pp. 133-146

sociales como la Teología de la liberación o la 1950, consolida la relación educación-trabajo-


educación popular iniciada por el pedagogo empleo como parte de una fórmula necesaria
brasilero Paulo Freire. para prevenir el analfabetismo ocupacional y
el desempleo masivo que se presentaba en las
El nacimiento de la pedagogía social como capas poblacionales que quedaban por fuera del
práctica en Latinoamérica está asociado al curso sistema escolar.
de la educación popular, que en la mencionada
década era de corte contestatario y alternativo Ocupar para el empleo era una labor que,
tanto social como políticamente. Asimismo, aunque al inicio estuvo inspirada en la tecno-
no eran claros los vínculos entre la educación logía educativa y en la enseñanza instrumental,
escolar tradicional y la educación popular, pues la requería múltiples acciones, desde las remediales,
segunda quería cumplir las tareas que la primera que nivelaban en los repertorios básicos –que la
no ejecutaba con las poblaciones más pobres, educación primaria debía haber suministrado–,
–principalmente con los adultos analfabetos–; hasta las relaciones obvias entre economía y
esto con el objeto de que aprendieran a leer a la educación, creación de empleo y postura política.
vez que se concienciaran de sus potencialidades Ricardo Carciofi lo resume así:
como actores y protagonistas del cambio social.
El cientista social Marco Raúl Jiménez lo sinte- “(...) la implicación en términos de política es si
el gasto educacional fuese reducido a su mínima
tiza de la siguiente manera:
expresión esto contribuiría a recrear mayores
“La educación popular (…) desarrolló una práctica desigualdades en términos de oportunidad ocu-
pedagógica fundada en los contextos, las prácticas pacional, al alimentar el crecimiento del sector
sociales de los participantes, la participación para informal. En caso contrario, si el manejo presu-
la acción liberadora y transformadora, colocando puestario en el área educacional fuese sumamente
nuevas bases a la acción político-pedagógica y mos- amplio y en condiciones de acceso masivo a los
trando cómo era posible hacer pedagogía con unas distintos sectores de la fuerza de trabajo, el resul-
bases educativas diferentes a lo planteado en los tado de largo plazo –dada la rigidez del aparato
paradigmas clásicos de la modernidad educativa, productivo– sería un aumento considerable de las
(alemán, francés, sajón), dando un paso a un cuar- tasas de desempleo.
to paradigma pedagógico, el Latinoamericano, o el
Estas dos últimas alternativas revelan que la opción
que otros designan como crítico-latinoamericano
es un incremento del desempleo de los educados,
en cuanto se une a los desarrollos de las teorías
o bien, si se siguiese una política educacional
críticas de los otros paradigmas. Para otros, los
de acceso restringido, el resultado más probable
desarrollos pedagógicos de la educación popular
sería el de un aumento considerable del sector de
son parte del comienzo de las pedagogías de la
subsistencia y un mayor fraccionamiento de la
complejidad y la manera como se plantea, y sus
fundamentos se hermanan con el tipo de búsqueda fuerza de trabajo.
de quienes afirman el fin de los paradigmas en la Es obvio que estas opciones no pueden ser
educación y la pedagogía” (Jiménez, 2004: 81). planteadas tan solo en los términos en que han
sido aquí discutidas, porque es evidente que el
Al igual que este movimiento proveía de
problema envuelve aspectos de cálculo econó-
formación académica, social y política a la pobla-
mico pero también una consideración política y
ción extraescolar, grupos gubernamentales capa- social. Y pareciera ser que estos últimos elementos
citaban, con el apoyo del Ministerio del Trabajo, resultan de una importancia decisiva para discutir
a otros sectores con el fin de desarrollar oficios y las tendencias de largo plazo de economías que
artes. El Ministerio de Educación asumió el reto funcionan con oferta de trabajo excedente y con
de la educación de adultos como una vía para un patrón de crecimiento que excluye a la mayoría
alfabetizar a buena parte de la población rural de las clases sociales (…)” (Carciofi, 1981: 142).
y urbana, y a jóvenes en situación que se vieron
enfrentados a desempañar roles laborales para Vale la pena mencionar la importación que se
el sostenimiento de sí mismos y de sus familias. ha hecho tanto de los ámbitos de intervención
de la educación popular como de los de la ani-
De otra parte, el Servicio Nacional de Apren- mación sociocultural y juvenil principalmente en
dizaje (Sena), fundado a finales de la década de España, que en nuestros países se ha retomado
Revista Científica Guillermo de Ockham. Vol. 9, No. 1 Enero - junio de 2011 - ISSN: 1794-192X Ø 135
Claudia Vélez de la Calle

más como educación comunitaria y trabajo social rica Latina una corriente educativa comprometida
que como animación. con los sueños, proyectos y movimientos de libe-
ración social y cultural: la educación popular. En
A su vez, Ezequiel Ander-Egg (l993) hace un efecto, la década que comenzaba se caracterizó por
relato, que completa el anterior, sobre el surgi- el auge de movimientos sindicales, campesinos, de
miento y especificidad de la educación popular pobladores urbanos, de artistas y educadores com-
en América Latina, en el que incluye también prometidos, así como de partidos y movimientos
a Colombia. Para este autor, desde los años de izquierda política. En ese contexto, la educación
setenta fueron apareciendo prácticas de educa- popular se fue configurando como una corriente
educativa y pedagógica que acompañaba el ascenso
ción, trabajo social y promoción cultural que se
de dichas luchas y movimientos de resistencia y
clasificaban en categorías como la educación de
liberación” (Torres, 2002: 5).
adultos, la educación popular, la animación so-
ciocultural y el propio trabajo social, que incluye Así, pues, la política fue una dimensión que
el desarrollo comunitario. se agregó al discurso y a las prácticas, ya que
la mayoría de los problemas que se intentaba
La educación popular es, en general, más un
solucionar, mediante la ampliación de dicho
discurso de orden político que académico, que
enfoque, tenían que ver con la manera como
ha empezado a sistematizarse con la convergencia
se gobernaban los países de América Latina y,
entre educación, sociedad y política en las con-
particularmente, con el concepto y la práctica
diciones específicas de América Latina y que se
de poder basados en el trabajo industrial remu-
distancia significativamente de la educación ma-
nerado.
siva diseñada para extender el modelo capitalista.
En consecuencia, aparece la redefinición
Los rasgos comunes de este discurso son re-
política de la educación popular, la concepción
tomados por Alfonso Torres (1993), profesor de
clasista de la sociedad, la política, la cultura y la
la Universidad Pedagógica Nacional, alrededor
reducción pedagógica del método dialéctico y
de los siguientes elementos:
participativo, como único método que posibili-
1. Una justificación proveniente de la lectura taba la creación de una conciencia de liberación
crítica del orden social vigente. integrando teoría con práctica. Estos fueron los
rasgos distintivos de esta primera fase llamada
2. Una intencionalidad política emancipadora. fundacional.
3. Un propósito de contribuir a la construcción Dos acontecimientos marcaron los cambios
de sectores populares como actores. y la evolución de la educación popular: el surgi-
miento de los modelos de investigación partici-
Al usar el término “popular”, este enfoque
pativa, que le daban un norte de sistematización
social del cambio de las estructuras, influenciado
a este discurso; y la construcción de un campo
altamente por el discurso y la acción marxista de
intelectual de educadores populares, resultado de
los años sesenta, se refiere a los grupos victimiza-
los grupos de izquierda y de la vinculación a las
dos por el poder capitalista. Al decir de Alfonso
prácticas educativas y políticas de estudiantes y
Torres (1993), esta modalidad de educación ha
profesionales universitarios.
vivido tres fases: el movimiento de educación
de base y la educación liberadora de Freire “La radicalización del espectro político latinoame-
(1961); el encuentro de la educación popular ricano, vivida desde fines de la década del sesenta,
con la pedagogía; y la actual redefinición de la también se expresó entre los científicos sociales
misma al tenor de los cambios propuestos por la y el mundo universitario. Luego de la adopción
globalización o internacionalización del capital. entusiasta de los enfoques funcionalistas de análisis
y positivistas en lo investigativo, el ascenso del
“La educación popular hereda la pedagogía de conflicto social generado por la modernización
Freire. En torno a la discusión y puesta en acción capitalista y la politización creciente del mundo
de los planteamientos de Freire y en un contexto académico trajeron consigo la insatisfacción de
signado por la radicalización de las luchas sociales muchos investigadores sociales con los marcos de
con el imaginario de la revolución surgió en Amé- referencia hegemónicos y con el supuesto de neu-

136 × Universidad de San Buenaventura, Cali - Colombia


La educación social y popular en Colombia. Relaciones y búsquedas: treinta años de legitimidad - pp. 133-146

tralidad de la ciencia. La influencia del marxismo muchas veces estuvieron más presentes que las
y el progresivo compromiso de algunos científicos del modelo de la Ilustración, y precisamente en
sociales con las luchas sociales llevaron a que se este uso afectivo radicaron su contundencia y
planteara la necesidad de generar metodologías popularidad.
de investigación que articularan producción de
conocimiento, compromiso político y transfor- De otro lado, también se abusó de propuestas
mación social. En esa perspectiva, durante la moralistas que a favor de visiones polarizadas del
primera mitad de la década del setenta, el colom- mundo olvidaban al sujeto individual, sus histo-
biano Orlando Fals Borda junto con un equipo rias y pensamientos, en beneficio de una causa
de investigadores, elaboró y puso en práctica la colectiva que relegaba las dimensiones humanas
Investigación Acción Participativa (IAP), la cual de cada sujeto enfrentaba posturas intelectuales
acompañó organizaciones y luchas campesinas
con posiciones políticas plenas del “deber ser”.
en la Costa Atlántica colombiana. A partir de ese
momento, la IAP, se presentaba como la opción La politización fue gradualmente adquiriendo
metodológica más consecuente y coherente con connotaciones culturales, precisamente porque
otras prácticas liberadoras emergentes como la los trabajos barriales, juveniles y de educación de
Teología de la Liberación, la Comunicación Al-
adultos fueron dando cuenta de la influencia que
ternativa y la propia E. P. Desde el movimiento
tenía la cultura en las representaciones colectivas
de Educación Popular, la preocupación por la
producción de conocimiento tuvo como referente y personales y de la importancia de aprovecharlas
común a la IAP” (Torres, 2010: 12). en beneficio de la identidad que debía conservar-
se como elemento de ratificación del territorio y
Los avances en las técnicas de intervención del vínculo grupal.
psicosocial derivadas de las reflexiones de psicólo-
gos y psicoanalistas de izquierda, particularmente A finales de los años setenta y principios de los
los argentinos, con las teorías de Enrique Pichón ochenta se fortaleció en Colombia la represión
Riviére, nutrieron y tributaron los métodos de de movimientos populares con el ascenso del
educación popular, especialmente en las temáti- Frente Nacional y se produjo un agotamiento
cas relacionadas con la integración del individuo de los trabajadores respecto de las promesas de
a los grupos y a su realidad para desarrollar la desarrollo social que jamás se cumplieron. Du-
capacidad de auto/organización comunitaria y, rante los gobiernos de Alfonso López Michelsen
con ello, la problematización de su vida como (1974-1978) y Julio César Turbay Ayala (1978-
colectivo y como sujetos sociales. 1982) se recrudecieron las formas de represión
y silenciamiento de la izquierda, incluidos,
La educación popular, como cualquier otra también los educadores populares. Después del
corriente, no evolucionó linealmente. En su inte- golpe militar al gobierno de Salvador Allende en
rior se plantearon críticas que tenían que ver, en Chile, en septiembre de 1973, en toda América
un primer momento, con su redefinición política Latina se implementó la política de seguridad
por parte de los sectores más comprometidos o tendiente a impedir que se repitiera en otros
por su falta de cientificidad, que no generaba sa- países lo sucedido en Chile, esto es, el ascenso
ber en tanto que omitía la consulta a las prácticas al poder de la izquierda; de allí que el triunfo de
sociales. En su defecto, otros criticaban el exceso los sandinistas en Nicaragua, en 1979, aumentó
de politización de algunos de sus actores, lo cual la tensión política en el continente.
en ocasiones, tendió a dogmatizar la intervención
Según Torres, en esta época la educación
educativa al punto que todo conocimiento fue
popular en Colombia estuvo protagonizada por
caracterizado como burgués o popular.
el grupo de Bogotá Dimensión Educativa y así
Igualmente el carácter mesiánico que se respi- lo registra:
raba en la mayoría de los discursos invisibilizaba “A fines de 1982, Dimensión Educativa recibió
a los actores de la educación popular como apoyo para realizar la campaña nacional de alfa-
sujetos sociales de cambio, pues todo se hacía a betización liberadora y de primaria para adultos,
nombre de Dios o de la causa política, sin darle lo que permitiría potenciar el trabajo, construir
posibilidad a otro tipo de racionalidades o discer- una propuesta más amplia de educación básica
nimientos. Las imágenes de carácter romántico y consolidarse como equipo y como institución.

Revista Científica Guillermo de Ockham. Vol. 9, No. 1 Enero - junio de 2011 - ISSN: 1794-192X Ø 137
Claudia Vélez de la Calle

Se definieron nuevas áreas de trabajo: la ecología, vivía el movimiento en relación con la globali-
la recuperación histórica y el afianzamiento de la zación y los cambios impuestos por el modelo
lecto-escritura, la salud y la creatividad” (Torres, neoliberal en toda América Latina, que modifi-
1993: 41). caban las orientaciones de las intencionalidades
En estos años se instituyeron las agencias con las que se ha venido planteando la educación
de promoción popular que actualmente se popular en todo este escenario.
configuran como organizaciones no guberna- El segundo elemento tratado fue la denuncia
mentales (ubicadas en el tercer sector1), que del abandono de la reflexión sobre lo pedagógico,
lideran desde la década de 1990 y los primeros que hizo que muchas prácticas fueran de baja
años de este siglo las acciones de carácter social. calidad, repetitivas y doctrinarias, a la vez que
Estas organizaciones se convirtieron en actores constituían lo local en un escenario privilegiado
fundamentales del desarrollo social, que ejecutan de trabajo, particularmente el que permite la
como contratistas del Estado y del sector privado. conservación de las identidades culturales.
Una respuesta a la precaria atención estatal y
de la empresa privada en el campo de lo social. Por último, se planteó la necesidad de acudir
con rigor a las prácticas de sistematización y de
“Las organizaciones que nacen a partir de los años investigación social que concentraron esfuerzos
sesenta conforman el cuadro de instituciones y
por capitalizar la teoría generada en los últimos
actividades extragubernamentales de la sociedad
civil. Comprende una variedad de instituciones,
treinta años. Esto con el objeto de impulsar
como las asociaciones de productores, cooperati- procesos de cambio en la mentalidad y en la
vas, juntas de acción comunal, sindicatos, funda- práctica de los educadores (Osorio, l997). Se
ciones, asociaciones de padres de familia, grupos agregaba además:
vecinales, gremios, etc. Dichas organizaciones
“En los años setenta el poder se asociaba funda-
actúan en dos vías: como canal de comunicación
mentalmente con la capacidad de los partidos
e interlocución entre el Estado y el ciudadano co-
revolucionarios para enfrentar y derribar las
mún, y como tribuna privilegiada desde la cual los
estructuras globales, y concretamente al Estado,
ciudadanos se unen en una sola voz para expresar
por todos los medios. Hoy día el poder se define
sus preocupaciones e intereses.
como un conjunto de capacidades materiales,
En Colombia, según los estudios de la Fundación institucionales y simbólicas, que van construyendo
Interamericana, los ciudadanos organizados en los sujetos sociales, a partir de su acción en la so-
estos grupos comenzaron a llenar el espacio que ciedad civil y en los pliegues de la institucionalidad
dejaron vacíos los partidos políticos tradicionales, estatal” (Osorio, 1997: 14).
al perder su eficacia y credibilidad de mediadores
entre el pueblo y el gobierno” (Londoño, 2002: 3). De acuerdo con las prioridades de la agenda
de este evento para la reflexión de los últimos
La década de los noventa obligó también a cinco años sobre educación popular, es posible
que los educadores populares de América Latina prever una intelectualización del movimiento
y Colombia se reunieran para bosquejar nuevas pero, a la vez, una readecuación administrativa
definiciones o sentidos de su trabajo y de la teoría que le permita a aquella posicionarse a modo de
generada hasta el momento. El Consejo para la oferente de educación y desarrollo social, como
Educación de Adultos de América Latina (Cea- ya viene sucediendo alrededor del problema del
al) se reunió en julio de 1996 alrededor de una conocimiento y la epistemología, la formación
temática muy sugestiva: Seminario internacional de actores y sujetos sociales para el desarrollo de
sobre la refundamentación política pedagógica de la democracia, la formación de educadores y la
la educación popular en la transición del Siglo XX- reflexión pedagógica, la crítica de la sociedad del
XXI, y justificó el evento por la crisis ética que conocimiento y las reformas educativas derivadas

1. El tercer sector se comprende a las entidades no lucrativas (ENL); a las organizaciones no gubernamentales (ONG); a las
asociaciones de voluntariado; a las organizaciones de solidaridad; a las organizaciones humanitarias. Desde el punto de vista
institucional podemos hablar de la coexistencia de tres sectores: sector privado (organizaciones empresariales que tienen como
finalidad la búsqueda de beneficio, o lucro), sector público (hace referencia a la administración pública); y tercer sector (aquí
se incluirían aquellas actividades que no son ni del mercado ni del Estado, por tanto, entidades sin ánimo de lucro y no
gubernamentales). Tomado de http://tercersector.netii.net/index.html.

138 × Universidad de San Buenaventura, Cali - Colombia


La educación social y popular en Colombia. Relaciones y búsquedas: treinta años de legitimidad - pp. 133-146

de la internacionalización y la mundialización “El estudio de las prácticas formativas –en la


de la cultura. escuela o por fuera de ella– no es, por tanto, un
asunto exclusivo para especialistas; se trata de un
Las relaciones entre educación y derechos y campo develador de la cultura. De manera espe-
educación y política, heredadas de la presencia cialmente intensa, la pedagogía se ha constituido
de la educación popular desde los años sesenta históricamente en un campo de disputa: un lugar
y setenta obligó en mucho países de América de tensiones y luchas, y ello porque se trata de un
Latina a hacer ajustes a las plataformas educa- saber complejo y liminal; eso es, un saber que se
tivas escolares (que se llamaron “renovaciones sitúa en las fronteras– , o mejor, en los pliegues
curriculares”) para intentar remediar lo que se problemáticos del pensamiento, los saberes y las
prácticas modernas, en los cuales se hace especial-
hacía cada vez más evidente: la ineficiencia del
mente difícil ignorar aquellos problemas com-
sistema en cuanto a las necesidades educativas
plejos de las prácticas sociales” (Sáenz, 2005: 5).
sociales de la población.
Desde el punto de vista contemporáneo y
con la necesidad de caracterizar los escenarios Los educadores sociales
y actores de la educación popular para la defi- y los educadores populares:
nición de su intervención y lugar social, se han
cercanías y posibilidades
articulado miradas sobre los procedimientos y
las racionalidades usadas en las prácticas sociales Si bien ambos actores, los educadores popu-
y académicas de la investigación-acción, de la lares y los educadores sociales tienen prácticas
animación socio cultural, del desarrollo comuni- y terrenos que los identifican y vinculan, según
tario y de la proyección pedagógica participativa. la intervención y enfoque, también los pueden
Sin embargo, no se puede olvidar que es posible separar. Reconociendo las subjetividades que se
que aun persistan en estas prácticas enfoques formaron alrededor de la historia anteriormen-
asistencialistas, compensatorios o directivos te narrada es importante visibilizar aquí a los
institucionales, como los que en ocasiones orien- educadores sociales, quienes se caracterizan por
tan los países desarrollados sobre los países con orientar sus prácticas en la reflexión pedagógica
desarrollos diversos, como han sido calificados alrededor de los sujetos víctimas de las proble-
los países del tercer mundo. máticas sociales, pero particularmente los que
hacen parte del amplio grupo de los excluidos
En este sentido, proyectos de ciudad educa-
por efecto de los contextos modernos hegemó-
dora, de prevención e intervención de víctimas
de la violencia, de problemas asociados al uso de nicos y pauperizantes.
drogas son cooptados muchas veces con el fin Ellos, a la vez que se definen por sus actua-
de generar acciones supuestamente reparadoras ciones en escenarios sociales y se constituyen en
por parte del Estado. Este hecho de cooptación actores políticos al definir una intencionalidad de
requiere ser interpretado porque resulta polémico intervención, a veces de reparación, sustitución,
pero cierto, ya que en educación social popular compensación o transformación, vinculan a sus
se han ido asumiendo los temas de educación acciones los análisis de las condiciones sociocul-
para la democracia y educación para la paz con turales y políticas que las condiciones objetivas
apariencias de enfoques de pedagogías críticas; de la institucionalidad del poder genera para
no obstante, este escrito quiere ser un poco más mantener formas de exclusión y eliminación
audaz y relacionar su sospecha con los conflictos de grandes grupos poblacionales vulnerables,
económicos y los intereses corporativos transna- problemáticos para el ejercicio de un poder que
cionales como parte de las causas estructurales sostiene los prestigios patrimoniales.
que crean y condicionan las dificultades de
convivencia civil, nacional e internacional. Este En los últimos ejercicios de deliberación de
problema, Javier Sáenz Obregón (2005) lo ca- los pedagogos sociales2 frente a las prácticas de
racteriza de la siguiente forma: los educadores sociales con habitantes de la calle,

2. I encuentro de educadores y educadoras populares. Bogotá, septiembre 25 y 26 de 2010. Reuniones preparatorias del En-
cuentro de Educadores Populares, realizadas en Bogotá, Medellín, Cali, Barranquilla, entre enero y septiembre de 2010.

Revista Científica Guillermo de Ockham. Vol. 9, No. 1 Enero - junio de 2011 - ISSN: 1794-192X Ø 139
Claudia Vélez de la Calle

sujetos asociados a problemas de uso de drogas, y autonómica del Estado. Si se observa con
poblaciones afectadas por migraciones políticas detenimiento, ninguna de estas funciones le es
y económicas (los mojados y desplazados), entre ajena a un educador popular siempre y cuando
otros, ha quedado claro que la intervención no la premisa ético política de la orientación para
es solo subjetiva o sistémica, sino que incluye el cambio social, económico y cultural sea con-
una apuesta por la intervención política en los secuente con políticas y prácticas incluyentes.
escenarios de la inclusión social, económica y
política, en la perspectiva de una defensa perma- La apuesta de la pedagogía y la educación
nente de los derechos para todos los ciudadanos social en sus intervenciones colectivas y subje-
del mundo, en contextos diversos e inequitativos tivas es la fundamentación de sustantividades
de globalización. que puedan aprehender y apropiar su lugar en
el mundo de forma diferencial y crítica. Algunos
Este posicionamiento los acerca más a la autores como Violeta Núñez (2007) lo proble-
comunidad de educadores populares quienes matizan en el sentido de las plataformas múlti-
parten en su intencionalidad de buscar la trans- ples que se pueden generar para que los sujetos
formación de las condiciones estructurantes de sean. En este sentido, retoma los postulados de
la exclusión. Entonces, en la búsqueda de afini- Alain Toraine:
dades, los educadores sociales, al igual que los
“Capacidad y derecho de cada individuo de armar
educadores populares, pretenden la formación
una síntesis, análoga y a la vez diferente de lo que
del sujeto humano en términos de un aprendizaje
otro individuo está tratando de realizar en otra
social potencializador de la constitución ciudada- parte de la ciudad o en otra parte del mundo”
na, en busca de armonizar los comportamientos (Núñez, 2007: 14-15).
democráticos con las perspectivas de los derechos
singulares, para lo cual objetan las políticas que Contrastándolo con la teoría de construcción
no respetan este principio de justicia, equidad y de sujetos sociales de los educadores populares
reconocimiento por la condición de la dignidad se encuentra el tema descrito de forma muy cer-
de la vida humana y del ambiente que la rodea. cana a las tareas y reflexiones que los educadores
sociales hoy se proponen.
Algunos autores de la pedagogía social han
descrito como funciones de los educadores El sujeto marginal es el sujeto social excluido
sociales, preventivos y especializados (es decir, y/o eliminado por las diferentes manifestacio-
que previenen o intervienen en las problemá- nes del poder que intenta en las periferias de la
ticas sociales y en las poblaciones marginales) sociedad y de la cultura darse un lugar, así este
las siguientes: lugar esté estigmatizado por los expulsores como
residual. La diferencia cultivada como disciplina
- La investigación, planificación, coordinación, de intervención sobre lo patológico es caldo
gestión, intervención y evaluación de progra- de cultivo de muchas profesiones, epílogos del
mas y proyectos comunitarios integrados. control social, que intentan normalizar la dife-
- La dirección, coordinación, gestión, in- rencia, o lo que es peor, curarla (como si fuera
tervención y evaluación de programas e una enfermedad social no estar dentro del marco
instituciones de protección, observación y de la inclusión), pero cuando la reflexión y la
reforma de menores. intervención sobrepasan lo subjetivo y se encuen-
tran con la macroestructura de lo objetivo, en
- La prevención e integración social en las este desplazamiento necesario para la educación
instituciones dedicadas a las poblaciones con social está su intersección y complemento con la
dificultades de socialización. educación popular.
También se precisa formación académica en Igual les sucede a los educadores populares
estos campos para ubicarse como colaboradores que pensaron la exclusión y el enajenamiento en
en los equipos interdisciplinarios y como gesto- las condiciones objetivas y pusieron en práctica
res y coordinadores de organismos de servicios fórmulas generales de transferencia de alfabetiza-
sociales que trabajen en la administración local ción por liberación, olvidando las subjetividades
140 × Universidad de San Buenaventura, Cali - Colombia
La educación social y popular en Colombia. Relaciones y búsquedas: treinta años de legitimidad - pp. 133-146

configuradas de forma diferencial en los contex- renovar el vínculo con lo negado, expulsado, eli-
tos micro de lo social y lo cultural. minado, vilipendiado, el sujeto de las márgenes.

Aquí lo social es el terreno de lo común y lo El reconocimiento de este sujeto con sus


ordinario. Es el espacio compartido al que ambos derechos y sus potencias empieza por asignarle
actores hacen referencia, pero cuyas propiedades y retornarle (él lo asume y provoca) su condición
disciplinares por parte de la sociología generan de sujeto, desde su palabra y por supuesto desde
defensores y detractores. Los profesionales del la escucha que se hace de su discurso. En los
trabajo social se piensan como sus amos y seño- diferentes encuentros que se hicieron en Cali
res y representan a los pedagogos como simples (2010)3 los educadores populares se ubicaban
obreros de la reproducción del saber/poder nuevamente como educadores que lograban
circunscritos a los escenarios escolares, de forma posicionarse en el lugar de interlocutores y
exclusiva y excluyente. especialmente de escuchas atentas de lo que las
comunidades saben y necesitan para su evolución
Con base en lo anterior ese campo de acción y como actores sociales y políticos:
pensamiento donde ocurren diversos fenómenos
de la exclusión/inclusión/control/disciplina- “Los educadores populares en la práctica educa-
miento es fruto de discordias y expropiaciones tiva que hacemos con las comunidades debemos
aprender a escuchar y aprender a aprender. Hay
de lo jurídico, lo antropológico y lo económico,
que enseñar a pensar y darle la oportunidad a la
y de las instituciones que al estar inmersas en su gente de hacer rupturas con la cultura que domina,
suprasistema embargan al sujeto en discursos que hay que educar para la crítica (…)” (Memorias,
aparentan una individualidad autonóma que no 2010: 12).
es más que el espejismo del discurso demagógico
del libre albedrío en el quiebre de las sociedades En la actualidad la educación popular toma
democráticas contemporáneas. otros rumbos. En primera instancia busca vincu-
larse a la educación formal para pensar la escuela
El fantasma de este control disciplinar pende pero también para aprender de los procesos de
sobre el sujeto actual, atrapado entre el discipli- enseñabilidad, interdisciplinas y saberes que pro-
namiento y el control mediático, con un discurso mueve como competencias sociales que apoyan
que le parece propio pero que en ocasiones no la inclusión y el diálogo intercultural. De otro
es más que el eco padeciente de su no lugar en lado, intenta reestructurar sus funciones político-
lo social. Preguntas que emergen primero por partidistas interactuando con el Estado, con las
la visibilidad de la existencia y segundo por la ONG, con la población civil y con los actores
posibilidad del vínculo con aquello general: los religiosos, en pos de la formación de ciudadanos
otros, donde se encuentra el reconocimiento de conscientes y responsables de su acción social, la
su derecho a una vida diferencial. cual se dirige a la crítica social y a la disminución
de desigualdades impuestas por el capitalismo
La educación social puede aportar estas ex- transnacional:
periencias de acción y reflexión sobre el sujeto
marginal y marginado de los centros de poder. “La globalización si bien nos ha creado problemas
Es cierto que en ocasiones la educación social de exclusión, marginación y pobreza, también ha
ha sido temida frente a la crítica sobre los agen- creado la posibilidad de globalizar la resistencia.
En los procesos educativos que adelantemos hay
ciamientos de los órdenes externos, al privilegiar
que mostrarle a las comunidades que lo local hace
la intervención asistencialista, compensatoria,
parte de lo universal” (Memorias, 2010: 14).
remedial. La educación popular ha sido más
explícita en el reclamo y la denuncia, en la inten- Comoquiera que lo biopolítico ha sufrido
cionalidad y la conciencia de la deliberación de variaciones en los últimos treinta años del siglo
la acción educativa transformadora. Pero ambas XX, los nuevos escenarios, saberes, narrativas
se encuentran pensando la forma de sostener y y sujetos requieren la creación de conceptos

3. Memorias del primer y segundo encuentro de discusión tres décadas de educación popular, Cali “EP en Bogotá: Hacia el
primer encuentro de educadores populares. Cali, 2011.

Revista Científica Guillermo de Ockham. Vol. 9, No. 1 Enero - junio de 2011 - ISSN: 1794-192X Ø 141
Claudia Vélez de la Calle

apropiados a estos cambios, de manera tal que Los avances de estas experiencias muestran en
se puedan integrar la educación popular y la la actualidad que han ganado visibilidad política
educación social; la educación formal con la no y espacios legítimos de interlocución con el
formal e informal –categorías que, por demás, Estado, algunas veces desde las contrataciones
deben desaparecer o integrarse en la ley–; y la para la prestación de servicios realizadas y otras
formación disciplinaria e investigativa con la por los rasgos de solidaridad generacional en
apropiación del aprendizaje social para interven- relación con los derechos de niños, jóvenes y
ciones adecuadas en los espacios cotidianos de adultos mayores. Esta es una de las tensiones
convivencia y aprendizaje cultural. Lo cultural, del discurso actual.
lo social, lo simbólico, lo organizacional y lo co-
municacional podrían ser los ámbitos para hacer
operativas las competencias e intervenciones de Consideraciones para continuar
la educación popular desde una perspectiva de el encuentro (la convivencia):
educación social. En este sentido, en el mencio- Rutas de convergencia
nado evento se concluyó que narrativa intercultural
“La educación formal está buscando espacio para Hoy, los cambios del contexto socioeconó-
la independencia del sistema, y los educadores
mico evidencian unos antecedentes importantes
populares debemos canalizar ese espacio hacien-
que deben ser considerados para comprender y
do procesos con las metodologías propias de la
respaldar lo escrito en esta última parte.
educación en los sectores populares. La reflexión
se viene dando en la educación formal, el pro- Un punto de partida es reconocer que en
blema es con los docentes que no entendieron esta primera década del siglo XXI en la América
que son utilizados por el sistema educativo, el Latina se produjeron cambios políticos, sociales
problema no es con los niños, jóvenes y padres. y una insurgencia importante por parte de las
Ninguna otra profesión tiene más oportunida-
poblaciones indígenas, campesinas, ciudadanas
des que las que tiene el educador” (Memorias,
urbanas que votaron por gobiernos democráti-
2010: 16).
cos de corte alternativo, renunciando a la lucha
La concepción que subyace es pensar lo armada y posicionándose dentro del marco de
educativo con una mirada más amplia de lo la lucha política.
escolar que atañe a consideraciones más pro-
Países como Brasil, Ecuador y Bolivia votaron
fundas del sujeto social en formación entre la por propuestas democráticas que protegieran su
tensión resistencia-reproducción. Al respecto identidad y sus territorios en un marco de respeto
es importante promover la mirada en los in- por su nacionalidad y desarrollo sostenible au-
tersticios de la resistencia escolar que se forma tónomo. Lamentablemente, Colombia se situó
en la reacción al poder, y que se reproduce en fuera de estos desarrollos y repitió la adhesión de
el acto educativo, que puede generar cambios Puerto Rico (a nivel simbólico aún) a la política
fundamentales en la constitución del sujeto. de los Estados Unidos, replicada en Centro
América y Panamá, como satélite del imperio.
Cuando se hace un análisis sobre la mirada
de la educación popular y la educación social y El pensador Boaventura de Sousa Santos,
sus articulaciones se encuentra que hay varios entrevistado por Daniel Libreros en el perió-
proyectos comunes con el objetivo de crear dico Desde Abajo, explica este fenómeno de la
estrategias de formación en el marco de los siguiente forma:
proyectos políticos para que los sujetos sociales
“Por otro lado, Colombia de alguna manera se
involucrados, desde sus diferentes temáticas,
aisló del continente porque se transformó, sobre
puedan participar teniendo en cuenta su parti- todo a partir de los noventa (después de un acto
cularidad en los movimientos sociales, superan- muy luminoso que fue la Constitución del 91), en
do las propuestas de escolarización y abordando satélite de los Estados Unidos, y con Uribe llegó
lo político social de manera crítica y responsable al punto de convertirse en el Israel de América
tanto dentro como fuera de la escuela. Latina, que ahora se confirma cuando Uribe es una

142 × Universidad de San Buenaventura, Cali - Colombia


La educación social y popular en Colombia. Relaciones y búsquedas: treinta años de legitimidad - pp. 133-146

de las personas de confianza del Primer Ministro “Estos cambios en la concepción política y peda-
de Israel para conformar la comisión que investiga gógica de la EP se expresaron en la redefinición
el ataque a la flotilla de paz que viajaba a Palestina. de prioridades y énfasis de la práctica de muchos
Entonces, eso aisló bastante a Colombia, la misma centros y redes de Educación Popular en América
que quiso aislarse, precisamente por darle priori- Latina a fines de los noventa y los primeros años de
dad a sus relaciones con los Estados Unidos. Y lo la actual década. De una estrecha relación con los
que quieren estos son lacayos o amigos serviles. movimientos y organizaciones populares, se pasó
Y los amigos serviles no tienen más posibilidades a la colaboración con nuevos gobiernos nacionales
que hacer lo que dice el Imperio”4. o municipales que remplazaron los regímenes au-
toritarios; algunos educadores populares pasaron
Geopolíticamente el mundo cambió y la pre- a asumir responsabilidades gubernamentales en
tensión de Estados Unidos de integrar a América materia social o educativa en sus países” (Torres,
Central y del Sur como bloque denominado 2007: 10).
Las Américas ha ido dibujando un panorama
político de intromisión moderada pero firme en Dicho de otra forma, estos cambios leen las
países como Honduras y Colombia al apoyar los nuevas formas de acción colectiva en la región
grupos disidentes de los gobiernos nacionales de y el surgimiento desde las márgenes de la di-
Ecuador, Venezuela y Bolivia, al mejor estilo de sidencia social y política que actualmente no
las décadas de 1960 y 1970. tiene tonos contestatarios sino que insiste en la
defensa de distintos modos y formas de vivir con
Ante este panorama, los educadores sociales calidad de vida en el marco de la democracia que
críticos reaccionan luchando por la recuperación permiten la inclusión en la desigualdad. Estas or-
y conservación de la identidad nacional, de los ganizaciones surgieron en estas últimas décadas y
patrimonios culturales y ambientales, presionan- se han hecho fuertes debido al empobrecimiento
do a los Estados para que en sus constituciones vertiginoso de sus condiciones básicas.
nacionales incluyan el respeto por la diversidad
y la riqueza ambiental del sus países, como es el Esta lucha por la identidad como valor su-
caso de Ecuador. premo no es insular. También se lucha contra
la hegemonía de los Estados y los monopolios,
Los quiebres del neoliberalismo, evidente en por conservar los derechos sobre la educación, la
la última crisis del capital financiero en el primer salud, el agua, el empleo agenciando otras formas
mundo, dan cuenta de que no es tan hegemónico de economía donde la autonomía sea posible.
ideológicamente y que el proteccionismo estatal Las experiencias educativas de los movimientos
es ya un hecho en las economías de estos países. sociales abrieron sus abanicos a la independencia
Por eso el Mercosur integra sus mercados para y a la articulación con el Estado.
consolidar fortalezas que tratados como el TLC
no puedan penetrar como suelen hacerlo con Los investigadores Nora Gluz (Docente in-
el respaldo del FMI (Fondo Monetario Inter- vestigadora IDH/UNGS, investigadora IICE/
nacional) y el BID (Banco Interamericano de UBA), Alejandro Burgos (becario IDH/UNG)
Desarrollo). y Mariel Karolinski (becaria IICE/UBA) tipi-
ficaron en su estudio sobre Argentina (2010)
En este período, ambientalistas, economistas cuatro tipos de movimientos sociales nacionales:
solidarios, defensores de las comunidades, miem-
“(…) movimientos radicalmente autónomos; mo-
bros de grupos de diversidad sexual se hacen visi-
vimientos que reciben recursos del Estado y los au-
bles para encarnar el sentido y la enunciación de togestionan; movimientos que se incorporan a las
que la democracia es un hecho, donde se respeta estructuras del Estado; y por último, movimientos
la diferencia y se busca la inclusión social. La que se posicionan como autónomos del Estado y
educación social popular ha tomado atenta nota despliegan estrategias de articulación con otros
de los cambios de la época y se coloca al orden actores para llevar adelante sus emprendimientos,
del día redefiniendo sus perspectivas y discursos: entre los cuales se incluyen sectores del capital y

4. http://www.desdeabajo.info/index.php/ediciones/209-edicion-162/7975.

Revista Científica Guillermo de Ockham. Vol. 9, No. 1 Enero - junio de 2011 - ISSN: 1794-192X Ø 143
Claudia Vélez de la Calle

los movimientos radicalmente autónomos” (Gluz, e instituyente a la vez, en la cual no es claro (ni se
2010: 2). intenta ello) describir cuál será el devenir de los
educadores sociales populares en Colombia, con
Las tipificaciones pueden ser replicables o
los rasgos políticos anacrónicos que la caracteri-
no, según el estado de latencia o vitalidad que
zan, fruto de la represión y la penalización de la
tenga el movimiento de los educadores sociales
disidencia, pero la visibilidad de su palabra y su
populares en el país en este momento, pero su
vinculación posibilita la esperanza de una apro-
apreciación ayuda a completar las visiones que los
educadores del encuentro sobre los treinta años piación contemporánea y un relevo generacional
de la educación popular en Colombia tienen y que se manifiesta en gérmenes de organización
que son el motivo del presente escrito. ciudadana múltiple y diversa:
“Acercarnos a otras experiencias nos relaciona con
Los educadores populares reconocen que hay
lo metodológico, con lo negociable, con lo propio.
cambios sustanciales en la época y que ello ayuda
La experiencia del CRIC (Consejo Regional In-
a configurar nuevas tareas en el quehacer, el dis- dígena del Cauca) es una muestra del terreno que
curso y la imagen de los educadores populares. El hemos ganado en la relación con el Estado. Ellos
contexto narrado no les es desconocido y apro- han estado en la lógica del Estado manteniendo
vechan en él la riqueza de temáticas, actores y la claridad de que es lo estratégico y qué es lo
motivos para la resignificación de esta identidad. político para no dejarse cooptar. La práctica de los
indígenas no se ha dejado cooptar. Es necesario
pensar la construcción de redes, por ejemplo:
creamos un fondo de ahorro y crédito para las
El encuentro y la voz de los actores mujeres para ir más allá y nos quedamos en el fin
“En el marco de la preparación del I encuentro de porque no pensamos en un medio como la red.
Educadores Populares Tres Décadas de la Educación Importante mirar otras experiencias que vienen
Popular en Colombia propuesto por educadores y haciendo EP. Además del Foro Social Mundial
educadoras populares de Bogotá el 11 de abril del y Unasur está el Movimiento de los Sin Tierra,
2010 y con el propósito de ir animando y com- el Ejército Zapatista de Liberación Nacional, los
partiendo desde la ciudad de Cali (departamento indígenas en el Cauca, experiencias que no sólo
del Valle del Cauca, Colombia, Suramérica) el se pueden mencionar porque allí se hace EP, hay
camino a este importante evento, realizamos que retomarlas desde sus prácticas porque son
conversaciones, discusiones y reflexiones sobre experiencias que aportan para los desarrollos de
algunas problemáticas, inquietudes y preguntas la EP” (Memorias, 2010: 19).
(viejas y nuevas) comunes tales como: a) el sentido
mismo de nuestros trabajos; b) el territorio y los El reconocimiento a experiencias de denuncia
procesos organizativos que acompañamos o pro- y continuidad en estas voces de educadores po-
tagonizamos; c) las relaciones entre organizaciones pulares de diversa índole es la evidencia de cuáles
sociales y las instituciones estatales; d) nuestras formas de resistencia política (con negociación)
prácticas cotidianas en lo pedagógico, lo organiza- hacen viable la legitimidad y vigencia de la edu-
tivo y lo administrativo; e) las diferentes tensiones cación popular en el sentido de los vínculos con
que deben abordarse al hacer una reflexión sobre lo colectivo, lo comunitario, lo afín en forma de
educación popular en el país; f) la producción
redes de apoyo y cooperación entre lo vulnerado
de conocimiento sobre nuestras prácticas y desde
y lo negado.
ellas; y g) las diversa relaciones que comprometen
una caracterización de la educación popular en El intercambio por la hegemonía ideológica,
Colombia, como es el caso de la educación de
el diálogo intercultural, la escucha de lenguajes
adultos y la educación comunitaria entre otros
diversos que representan identidades milenarias
(…)” (Memorias, 2010: 14).
como las de los indígenas, o afrocolombianos
Por ello investigar o reflexionar sobre estos o los campesinos despojados ilustran un lugar
hechos actuados en emergencia por el grupo de nuevo del educador popular como sujeto social
educadores sociales populares de Cali, en este activo que integra la historia con las emergencias
caso particular, obliga a dirigir una mirada am- socioculturales de los grupos excluidos y visibiliza
plia, renovada, sin prejuicios, histórica, instituida su existencia, su cultura, sus movilidades.
144 × Universidad de San Buenaventura, Cali - Colombia
La educación social y popular en Colombia. Relaciones y búsquedas: treinta años de legitimidad - pp. 133-146

La categoría del ciudadano se desdibuja, al aparentemente invisibles de las sociedades del


igual que el individuo, la persona, el ser, por control.
la acción del mercado y el consumo. Algunos
autores como Baudrillard opinan que lo que el ¿Cómo escapar al control de la nostalgia?
mercado produce es dividuación multiplicada ¿Cómo instalar la educación social popular en
por los imaginarios de la publicidad y los medios posibilidades de pensamiento cultural identitario
de comunicación; pero si los educadores popula- de los nuevos condenados de la tierra, que cre-
res en contextos como el colombiano reconocen cen día a día en el desamparo de la exclusión y
que no es totalmente cierto que el tejido social pierden su hábitat y su nombre? ¿Cómo resolver
del vínculo con el vecino y el otro se haya roto, la las tensiones entre lo que animó una disidencia
tarea por la alteridad en todas sus connotaciones y ahora se enajena en el mercado de lo social, si
socioeducativas construiría un lugar particular se interviene en la coyuntura y se olvida la estra-
de referencia para los educadores sociales popu- tegia de largo aliento? El colectivo del CEAAL
lares en los actuales escenarios de la formación en Colombia presentaba unos nuevos retos para
ciudadana y política. la época al resumir lo aquí dicho de la siguiente
forma:  1) Economía sin justicia: pobreza y
Comprender lo ciudadano desde imperativos exclusión; 2)  Elementos de resistencia civil y
ético sociales donde nos conviene seguir viviendo refundación de lo político; 3) Cambios en los
juntos en pos de la dignidad de la vida y de los sujetos; 4) Cultura y multiculturalidad.
otros seres que están presentes en el ambiente;
la resistencia por no ser cooptados ni hegemó- La vigencia, entonces, está confirmada por
nicamente fabricados o eliminados como sucede la existencia de sujetos y acciones en la defensa
con gran magnitud de los pueblos del Tercer de la dignidad y la equidad humana. Cambiar
Mundo es de por sí una razón de largo aliento la mirada, formarse críticamente, sistematizar
para poder continuar transformando la mirada las experiencias, recrear las nuevas metodolo-
para el cambio de la socialización humana. gías, son rutas posibles para emprender, con el
apoyo de los relevos generacionales, la búsqueda
Conservar los aprendizajes de estos treinta
de nuevos lenguajes y discursos. Así lo reiteraron
años y más sobre prácticas de respeto, de inter-
las voces de los educadores populares en Cali:
cambio solidario, de mercado justo, de responsa-
bilidad consecuente, de cambio social en vez de “Hay que generar desde las tareas políticas de
control social puede cooperar en la construcción formar, organizar y movilizar que tiene la EP
de esas nuevas narrativas ciudadanas tan difundi- espacios de encuentro, análisis y comprensión de
das en las formas como los jóvenes de hoy en día la realidad, generar procesos organizativos auto-
se relacionan por medio de la música, la imagen, gestionados, de resistencia, gestionar y administrar
el grafitti, el grupo de género, entre otras. sus propios recursos, relacionarse e integrarse con
otras organizaciones” (Memorias, 2010).
Se trata también de comprender que los
actores, las problemáticas y los escenarios, pre-
sentan un paisaje distinto al de los años setenta,
en el cual tiene cabida seguir formando sujetos Bibliografía
conscientes y actores sociales y políticos que –– CARCIOFI, R. (1981). Acerca del debate sobre
sepan estar en este mundo de forma dinámica educación y empleo en América Latina. En: Revista
y crítica, que sospechen del pensamiento que Colombiana de Educación. No. 7. Bogotá, 1981.
enajena el pensamiento y se pregunten sobre los pp. 1-42.
referentes de control que se encuentran detrás
de la información, el discurso, el mercado, la –– FREIRE, Paulo, ANDER-EGG, Ezequiel; MAR-
CHIONI, Marco (1989). Una educación para
organización geopolítica del mundo y sus domi-
el desarrollo. La animación sociocultural. Buenos
nios territoriales, más allá de los mapas físicos .
Aires: Humanitas.
Los educadores sociales populares se asumen así
para estas nuevas décadas en analistas simbólicos –– GLUZ, Nora; BURGOS, Alejandro; KARO-
activos y resistentes que develan los ejercicios LONSKI, Mariel (1989). Movimientos sociales,

Revista Científica Guillermo de Ockham. Vol. 9, No. 1 Enero - junio de 2011 - ISSN: 1794-192X Ø 145
Claudia Vélez de la Calle

educación popular y escolarización “oficial”. La –– SÁENZ OBREGÓN, Javier (2005). Las estrategias
autonomía “en cuestión”. pedagógicas de los tres últimos gobiernos de Bogotá
para formar ciudadanos por fuera de la escuela.
–– LONDOÑO BOTERO, R. (1994). Una visión de Cuadernos del CES. No 10. Bogotá: Universidad
las Organizaciones Populares en Colombia. Bogotá:
Nacional de Colombia. CES.
Fundación social. Viva la Ciudadanía. Universidad
Pedagógica Nacional. –– TORRES CARRILLO, Alfonso (1993). La
Educación Popular. Evolución reciente y desafíos.
–– LONDOÑO TORO Beatriz (2005). Organi-
En: Pedagogía y Saberes. Bogotá: Universidad
zaciones no gubernamentales y derechos humanos.
Retos para construir una sociedad civil en Colombia. Pedagógica Nacional.
Biblioteca Virtual del Banco de la República. –– TORRES CARRILLO, Alfonso (2007). Paulo
Edición en la biblioteca virtual: 2005-05-16. Freire y la educación popular. En: Instituto de
Tomado de http://www.banrepcultural.org/ Cooperación Internacional de la Asociación
blaavirtual/revistas/credencial/diciembre2002/
Alemana para la Educación de Adultos (DVV).
organizaciones.htm
No 69. http://www.iiz-dvv.de/index.php?article_
–– Memorias del primer y segundo encuentro de id=258&clang=3 consultado en abril de 2011.
discusión tres décadas de educación popular, Cali
–– TORRES CARRILLO, Alfonso (2009). Paulo
(2010). EP en Bogotá: Hacia el Primer Encuentro
de Educadores Populares. Documentos en PDF Freire y las Pedagogías Críticas. La palabra verdadera
editados por Centro Cultural Yira Castro y Casa es la que transforma el mundo. Tomado de http://
Cultural El Chontaduro Cali 2011. 35 páginas. www.dialogos-en-educacion.org/actualidades/
paulo-freire-y-las-pedagogias-criticas publicado.
–– MEJIA JIMÉNEZ, Marco Raul (2004). Pro- Consultado septiembre 2010.
fundizar la Educación Popular para construir
una globalización desde el sur y desde abajo”. En –– TORRES CARRILLO, Alfonso (2010). “Educa-
Debate latinoamericano sobre Educación popular II. ción popular y producción de conocimiento, en
Vigencia de la EP: Reflexiones de educadores y edu- Reflexiones del estado de la educación popular”.
cadoras de América Latina. Consejo de Educación La Piragua: revista latinoamericana de educación
de Adultos de América Latina. Mayo 2004. http:// y política. Santiago de Chile: Consejo de Educa-
www.setem.cat/CD- ROM/idioma/setem_cat/ ción de Adultos de América Latina. pp. 12 a 144.
mo/mo070105e.pdf http://ceaal.org/images/stories/LaPiragua/la%20
piragua%2032%20v.pdf. Consultado abril 2010.
–– NUÑEZ, V. (2007). La educación en tiempos de
incertidumbre: Infancias, adolescencias y educación.
Aproximación posible desde la Pedagogía Social. Bar- Webgrafía
celona.http:/www.porlainclusion.educ.ar/docu-
ments/violeta_N_educacion_incertidumbre.pdf –– http://tercersector.netii.net/
–– OSORIO VARGAS, J. (1997). “Hacia un Balance –– http://www.desdeabajo.info/index.php/
de la Re fundamentación de la Educación Popular”. ediciones/209-edicion-162/7975
En: Educación de Adultos y Desarrollo (48). Revista
del Instituto de la cooperación Internacional de la –– http://www.foro-latino.org/flape/boletines/bole-
Asociación Alemana para Educación de Adultos. tin_24/documentos/MovSociales/pdf

146 × Universidad de San Buenaventura, Cali - Colombia

También podría gustarte