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Ni en silla de escarnecedores se ha sentado;

1:2 Sino que en la ley de Jehová está su delicia,

Y en su ley medita de día y de noche.

1:3 Será como árbol plantado junto a corrientes de aguas,

Que da su fruto en su tiempo,

Y su hoja no cae;

Y todo lo que hace, prosperará.

La comparación del hombre con un árbol tiene el significado de refugio, fortaleza y vida
perdurable, La Comparación de un hombre perfecto, es la relación de un árbol plantado junto
a la corriente de las aguas, es una riqueza perene, refiere que el crecimiento, desarrollo y
estabilidad del árbol depende del agua que recibe, por lo tanto pudiéramos referir que el
factor que hace que el hombre se desarrolle como un árbol, que de frutos y que sus hojas
permanezcan es el agua de vida, y como el agua viva, o que corre siempre se relaciona con el
fluir del Espíritu de Dios, a lo que se refiere como un hombre con una vida espiritual
permanente.

Juan 6:63 El espíritu es el que da vida; la carne para nada aprovecha

Se entiende entonces que un flujo constante de Espíritu da la perfección de un hombre. El


hombre perfecto dentro del estándar de Dios es aquel que esta recibiendo constantemente la
afluencia del rio de Dios.

El espíritu del hombre es semejante a un árbol.

Porque se dice que el hombre espiritual es como un árbol, porque el espíritu del
hombre es precisamente un árbol desarraigado que camina.

Marcos 8:22 Vino luego a Betsaida; y le trajeron un ciego, y le rogaron que le tocase.

8:23 Entonces, tomando la mano del ciego, le sacó fuera de la aldea; y escupiendo en sus ojos,
le puso las manos encima, y le preguntó si veía algo.

8:24 El, mirando, dijo: Veo los hombres como árboles, pero los veo que andan.
8:25 Luego le puso otra vez las manos sobre los ojos, y le hizo que mirase; y fue restablecido, y
vio de lejos y claramente a todos.

Cuando Jesús dio a un ciego la vista este al principio vio a los hombres como arboles que
caminaban.

Esto significa que nuestro Señor como todos sabemos, cuando restauraba la salud en los
enfermos lo primero que sanaba era el espíritu, por eso siempre les recomendaba que ya no
pecaran, no tanto porque fueran mas pecadores que los sanos, sino porque su salud futura
dependía de su salud espiritual, siempre decía vete y no peques mas para que no te venga una
cosa peor, para que tu mal no retorne y ya no exista remedio para el mismo, por lo tanto al
restaurar al ciego primero lo restaura espiritualmente.

Por lo tanto lo primero que sano fue su vista espiritual, el ciego antes de ser completamente
sanado de los natural primero recobro su vista espiritual, su discernimiento espiritual, el vio a
los hombres con su vista espiritual, y al ver a los hombres como arboles que caminaban lo que
estaba viendo era el espíritu de los hombres, como una radiografía del interior del hombre, y si
el espíritu es como un árbol, pudiera ser que la vista del ciego era como una especie de
capacidad de rayos X que podía ver el interior, y si los vio como arboles, es posible que el
espíritu del hombre si se pudiera ver es como un sistema de sostén de vida que llega a todo el
cuerpo, y muy similar como pudiera ser el sistema nervioso central, que la columna es el
tronco y que los nervios son las ramas, o como el sistema circulatorio cuyo corazón y grandes
vasos son el tronco y los vasos periféricos las ramas, ya que lo natural es una imagen de lo
espiritual, el espíritu del hombre, es muy parecido a los sistemas orgánicos que nos da la vida.
De hecho el espíritu es la fuente de la misma vida.

Arboles de Justicia.

Isaías 61 fue la primera predicación de Jesús en la Sinagoga de Nazaret, cuando el refiere esta
profecía él dice que ella se cumple en El, es una profecía de restauración por medio del
Mesías, se revela la función redentora de Jesús, en la cual Dios establece a los hombres
restaurados como arboles del plantío de Dios.

Isaías 61: 1 El Espíritu de Jehová el Señor está sobre mí, porque me ungió Jehová; me ha
enviado a predicar buenas nuevas a los abatidos, a vendar a los quebrantados de corazón, a
publicar libertad a los cautivos, y a los presos apertura de la cárcel;
61:2 a proclamar el año de la buena voluntad de Jehová, y el día de venganza del Dios nuestro;
a consolar a todos los enlutados;

61:3 a ordenar que a los afligidos de Sion se les dé gloria en lugar de ceniza, óleo de gozo en
lugar de luto, manto de alegría en lugar del espíritu angustiado; y serán llamados árboles de
justicia, plantío de Jehová, para gloria suya.

Que el hombre se convertirá por medio del Mesías, en Árbol de Justicia, esto quiere
decir que nuestra vida espiritual se establece por la Justicia del Mesías.

Romanos 3:21 Pero ahora, aparte de la ley, se ha manifestado la justicia de Dios, testificada
por la ley y por los profetas;

3:22 la justicia de Dios por medio de la fe en Jesucristo, para todos los que creen en él. Porque
no hay diferencia,

En Primer Lugar el Árbol se tiene que Injertar en Cristo.

Para la que den frutos adecuados o frutos espirituales se debe injertar a Cristo, pueden
existir dos clases de arboles uno es el árbol natural, y otro es el árbol injertado de Cristo, que
son los plantos de Jehová que se refiere a Isaías 61, el árbol natural contiene el espíritu del
hombre o la vida natural. Y el árbol de Dios es el árbol injertado en Cristo.

En el Salmo primero habla del varón perfecto que es como un árbol plantado junto a las aguas,
y como sabemos solo hay un varón perfecto Jesucristo.

Juan 15:1 Yo soy la vid verdadera, y mi Padre es el labrador.

15:2 Todo pámpano que en mí no lleva fruto, lo quitará; y todo aquel que lleva fruto, lo
limpiará, para que lleve más fruto.

15:3 Ya vosotros estáis limpios por la palabra que os he hablado.

15:4 Permaneced en mí, y yo en vosotros. Como el pámpano no puede llevar fruto por sí
mismo, si no permanece en la vid, así tampoco vosotros, si no permanecéis en mí.
15:5 Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva
mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer.

El proceso de dar fruto es importante dos cosas la primera es ser injertados en Cristo. Y
la segunda es permanecer en el, el ser injertados y permanecer es la condición para dar frutos.
Se sabe que los frutos del Espíritu son.

Gálatas 5:22 Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad,
fe, 5:23 mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley.

La primer condición es la de Permanecer para dar fruto, ya que la virtud de dar frutos es una
virtud del Espíritu, es la permanencia lo que permite que el espíritu fluya para que de fruto a
su tiempo, la permanencia es la virtud del hombre y el permanecer significa obedecer y
conocer la palabra de Dios, como lo indica el Salmo primero, acerca de meditar y amar la
palabra de Dios.

Hay una cosa importante, los primero frutos no son tomados en cuenta, ya que cuando el
hombre inicia su crecimiento se limpia como se menciona en el versículo 15:2 de Juan, cuando
menciona la palabra los limpiara para que lleve mas fruto el significado es lo Podara, parece
duro que los primeros frutos se pierdan, pero lo que pasa es que el desarrollo del árbol
amerita que los primeros frutos sean quitados y que las ramas sean cortadas, para que el árbol
crezca y se desarrolle, siendo un proceso doloroso, pero que traerá un fortalecimiento
posterior, para permanecer en Cristo es necesario permanecer, deleitarse, hacer y obedecer a
su palabra.

2.- En segundo Lugar tiene que haber Agua de vida.

Isaías 41:17 Los afligidos y menesterosos buscan las aguas, y no las hay; seca está de sed
su lengua; yo Jehová los oiré, yo el Dios de Israel no los desampararé.

41:18 En las alturas abriré ríos, y fuentes en medio de los valles; abriré en el desierto
estanques de aguas, y manantiales de aguas en la tierra seca.

41:19 Daré en el desierto cedros, acacias, arrayanes y olivos; pondré en la soledad cipreses,
pinos y bojes juntamente,

41:20 para que vean y conozcan, y adviertan y entiendan todos, que la mano de Jehová hace
esto, y que el Santo de Israel lo creó.
Una de las promesas en la palabra de Dios es que la única fuente de agua que existe para que
se formen los arboles es el Espíritu Santo, que incluso se conoce como la promesa del Padre, el
Ruash Hakodesh que menciona la Biblia como fuente de vida, y esta agua es el Espíritu de Dios,
que siempre hace abundar cuando mas se necesita, es la gracia de Dios, que aparece en las
sequedades, cuando abunda el pecado sobreabunda la gracia y como menciona el libro de
Corintios de un mismo Espíritu hay muchos dones, es en estos versículos que vemos que hay
muchos arboles con muchas virtudes, pero el Espíritu es el mismo.

Ezequiel 47:1 Me hizo volver luego a la entrada de la casa; y he aquí aguas que salían de
debajo del umbral de la casahacia el oriente; porque la fachada de la casa estaba al oriente, y
las aguas descendían de debajo, hacia el lado derecho de la casa, al sur del altar.

47:7 Y volviendo yo, vi que en la ribera del río había muchísimos árboles a uno y otro lado.

47:9 Y toda alma viviente que nadare por dondequiera que entraren estos dos ríos, vivirá; y
habrá muchísimos peces por haber entrado allá estas aguas, y recibirán sanidad; y vivirá todo
lo que entrare en este río. 47:12 Y junto al río, en la ribera, a uno y otro lado, crecerá toda
clase de árboles frutales; sus hojas nunca caerán, ni faltará su fruto. A su tiempo madurará,
porque sus aguas salen del santuario; y su fruto será para comer, y su hoja para medicina.

Dios siembra arboles de acuerdo a la necesidad de la tierra, todos los arboles tienen las
características de dar sombra en el desierto, de que den fruto para alimento y que sus hojas
sean para medicinas.

Para que Dios nos vea como el varón perfecto de Salmo Primero, debe de tener un espíritu
injertado en Cristo, que recibe del rio de Dios por el Espíritu Santo, siempre tendrá su hoja
frondosa y su fruto a su tiempo, su fruto será para alimento y su hoja para medicina, bajo su
sombra el desierto se convertirá en refugio y el paramo en oasis.

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