Está en la página 1de 5

Luis Pardo:

de bandolero social a héroe popular


Filomeno Zubieta Núñez
Universidad Nacional José Faustino Sánchez Carrión, Huacho
<filomenozubieta@yahoo.es>

E
n los últimos 50 años, gracias a los aportes de populares; cuando el pueblo hace desempeñar al ban-
Eric J. Hobsbawm («El bandolero social» en dolero el rol por encima, incluso, de la actuación real
Rebeldes primitivos, 1959: 27-47), como de del bandolero, como ha ocurrido en el caso de Luis
sus seguidores y detractores tenemos las herra- Pardo. Es decir, el pueblo le agrega otras cualidades le-
mientas elementales como para una tipificación más gendarias y heroicas, a las que evidencia. La figura de
adecuada de nuestro personaje. Robin Hood o El Zorro, tan familiar a nosotros, se
«El bandolerismo —nos dice Hobsbawm— es reproduce en otras épocas y latitudes con similar sinto-
una forma primitiva de protesta social organizada. Y matología (es decir, la dicotomía protección-protesta).
no porque quien se dedica a ella sea consciente de esta Ante la disyuntiva del pueblo de entregar o no a

investigaciones sociales Vol.16 N°29, pp.249-253 [2012]UNMSM-IIHS. LIMA, PERÚ


situación, sino porque ésa es la percepción que tienen un bandolero a las autoridades, la población casi nun-
los pobres, por la sencilla razón de que son protegidos ca ayuda a las autoridades a capturar al bandido, sino
por el bandolero o bandoleros o se sienten protegidos y que le protege contra ellas; pero si se vuelve incómo-
por lo mismo lo consideran su defensor, lo idealizan y do puede ser traicionado, como ocurrió con Luis Par-
lo convierten en mito». do. Sin embargo, la justicia, la gendarmería —en este
Aun cuando el bandolero no es consciente de su caso— reclama para sí o se encumbra el mérito de ha-
rol, trata de vivir como un rebelde social: robar a los berlo capturado o asesinado; y, por lo general, le llena
ricos para dárselos a los pobres. En casos extremos se ve de tiros cuando ya está muerto «El muerto después de
forzado a medidas extremas, como matar, por defensa muerto, como un bandolero por la policía», como nos
propia o por venganza. dice Hobsbawm, citando a P. Bourde (p. 29).
Ante la pobreza y la sumisión, el bandolero respon-
de librándose de ella uniéndose y sirviendo al opresor Luis Pardo el bandolero
o alzándose contra él; y tomando partido por los des-
validos, los oprimidos, los campesinos, a imagen de lo ¿Por qué un hombre de posición acomodada, con una
que ocurrieron entre los siglos xv y xviii con los piratas educación formal y hogareña adecuada, como era el
y corsarios. caso de Luis Pardo Novoa, se vuelve bandolero?
A lo largo del tiempo de su existencia y desarrollo, La respuesta es indudablemente un tanto compleja
la característica más notable o chocante del bandoleris- y hay que analizar varios factores, como las característi-
mo social es su notable uniformidad y la reiteración de cas de su personalidad y trayectoria.
sus formas y manifestaciones. En primer lugar, las desigualdades sociales impe-
De ahí que los bandoleros sociales se convierten en rantes en el medio, con campesinos de las comunida-
mitos, hasta ser encumbrados a la condición de héroes des y otros pobres en sus condiciones materiales de
249
Filomeno Zubieta Núñez

vida víctimas de abuso del poderoso que no solo deten- manteniendo y afirmando el grado de vinculación con
ta bienes como un buen fundo con abundante ganado Chiquián y los pueblos vecinos de «su territorio».
vacuno, ovino o caballar y que —por lo mismo— se Como ocurre con otros bandoleros, Luis Pardo,
siente superior a los demás y goza de poder político es joven y casi soltero, sin mayores cargas ni responsa-
dentro de los lindes de los pueblos y capital provincial, bilidades familiares (muerto su padre, separado de su
donde son medianos propietarios de negocios o de tie- esposa, muerta su segunda compañera, con su madre y
rras, con demostrables influencias en otras ciudades. hermanos con cierto estatus asegurado), por lo mismo
Ante esta situación el bandolero encarna al justiciero, lleva la vida de un lobo solitario. Ocasionalmente or-
que realiza actos que le gustaría hacer al desvalido. ganiza cuadrillas con sus seguidores, dado su carisma y
El medio geográfico bolognesino formado de valles cualidades de líder.
estrechos, con relieve accidentado, con extensas zonas Por su extracción de clase, de una familia acomo-
despobladas, con largos caminos de herradura sin ma- dada, tiene una fuerte personalidad, es culto, refina-
yor seguridad para los caminantes que brinda seguri- do, tiene versación (sabe leer y escribir) y escribe bien,
dad para las correrías de un bandolero como Luis Par- practica la lectura esporádica y siendo romántico y
do. Este medio se convierte en su espacio de actuación, enamorador (gentil y galanteador con las damas, es-
donde se siente protegido por la propia naturaleza; él pecialmente campesinas) no era raro que Luis Pardo
quiere el campo, quiere ver el amanecer en su tierra, la escriba no solo en prosa (cartas), sino también en verso
conoce, la ama. (poesías); en su época la forma de relación entre las
El desgobierno reinante producto de la postguerra personas distantes y un tanto cercanas (en lo familiar
del Pacífico donde el Estado no funciona y donde las e íntimo) era la correspondencia oral o escrita. De allí
autoridades están más afanadas en ver por sus mejoras que no sea descabellado atribuirle la autoría de «Anda-
personales, dando lugar a las montoneras (como las de rita». Además es un hábil practicante de las expresiones
Augusto Durand) y el bandidaje; esta coyuntura en el populares; el baile y la danza, el canto y el dominio de
medio bolognesino permite el abuso y el control de la instrumentos musicales como la guitarra. A todo eso se
justicia por los poderosos locales dejando en la orfan- suma su predilección y habilidad en el uso de armas:
dad a los humildes. Ante esta situación el accionar de puñal, revólver, carabina, fusil.
Luis Pardo se convierte en una forma de lucha de los Su solidaridad e identificación con los de abajo se
desheredados frente a los poderosos. evidencia no solo en la protección y justicia que pro-
El medio hogareño donde se formó y creció, con cura brindarle, sino también en otras actitudes muy
todas las comodidades y gollerías que le ofrecía la si- suyas: enamorar a las chicas del campo y no a las damas
tuación acomodada de la familia y desde donde pudo de su condición social y entorno hogareño; o el optar
notar las diferencias con los de abajo. La disciplina que por hacer de «inca» en la Fiesta Patronal de Santa Rosa
sus padres trataron de imprimirle se ven desvanecidas de Lima (invirtiendo lo roles), función desempeñado
con la muerte del padre por las balas asesinas de un por lo general por los de abajo, cuando debía hacer de
oponente y el trato complaciente de sus abuelos, que «Capitán» como correspondía a los de su clase.
van modelando un espíritu rebelde, independiente y No es tan cierto que careciera de formación ideo-
contestatario. Ya adulto se convierte en propietario y lógica y política, aunque embrionariamente la tenía; el
conductor de su fundo de Pancal y el negocio de va- haber participado como lugarteniente en las montone-
cunos y caballos. Es decir, sigue disfrutando de cierta ras de Augusto Durand le otorgaba cierta versación y
holgura económica. conocimiento de los vaivenes de la política nacional y
investigaciones sociales 292012

La imagen que proyecta ante los demás, los veci- la necesidad de realizar lecturas básicas de formación.
nos de la zona o región, como «honrado», «educado», Además, el testimonio recogido de un viejo luchador
«honorable», «mishti» y, por lo mismo, no culpable de anarquista chileno dice de su identificación con los
los delitos que se le imputa, se convierte en requisito oprimidos y de la necesidad de la organización para
para gozar de la protección popular. Su actitud contra responder colectivamente.
los poderosos, los opresores y el Estado, hace que sea Luis Pardo realiza acciones que ante la opinión pú-
visto como una víctima y hasta como un héroe. Por blica no son ilegales ni atentan contra los demás, pero
eso Luis Pardo se sentía seguro entre los suyos, en el que es criminal a los ojos del Estado o de los grupos de
entorno chiquiano. Prefiere vivir en su fundo Pancal, poder de la localidad.
250
Luis Pardo: de bandolero social a héroe popular

La exagerada severidad con que el Estado y las au- quián, de una urbanización popular en Lima, de algu-
toridades actúan ante alguna pequeña infracción de la nos negocios, en fin de un centro cultural como el que
ley que Pardo pudo cometer y que, ante la disyuntiva funciona en Huacho.
de lo que harán con él en caso de ser apresado, prefiere Al analizar el tema Luis Pardo hay que tener en
tirar para el monte adoptando la condición de bando- cuenta que la memoria colectiva es una construcción
lero. Ya había tenido la experiencia de ser preso político del pasado que vincula ciertos acontecimientos recor-
al conformar la montonera de Augusto Durand y luego dados con deseos, inclinaciones y temores del presente.
fue preso común. La memoria no es una facultad que tenga por meta lo
El Estado, las autoridades y los poderosos citadinos cierto, la memoria es una función desigual y engañosa
no le permiten su reinserción a la sociedad a pesar de que lleva a cabo operaciones poco fiables, incluso con-
gozar de la plena aceptación de la población, muy por trarias a la verdad; la memoria es relato, una narración
el contrario agudizan las relaciones y lo empujan hacia en la que encajan y en la que se hacen congruentes
la ilegalidad. No hay futuro político para los bando- hechos, circunstancias, episodios; es el significado que
leros porque no tienen organización política, por lo otorgamos a lo que recordamos.
mismo, solo perduran los ideales por los que lucharon. En el imaginario popular la conducta de Luis Par-
do sirve de ejemplo y resultaría agradable ser imitada
Luis Pardo, de bandolero a justiciero social y héroe en tiempos de impotencia por no conseguir ciertas rei-
popular vindicaciones. En épocas de descontento, falta de con-
fianza, agitación social, corrupción es cuando su figura
El bandolero Luis Pardo progresivamente, para la me- se hace extrañar y se convierte en modelo a ser imitado
moria colectiva, se va convirtiendo en justiciero social. (Por ejemplo: «Asfaltado Mojón-Chiquián-Aquia. Luis
Justiciero porque considera injustos a los poderosos y sus Pardo te necesitamos»).
aliados, las autoridades y el propio Estado. Esto signifi- Luis Pardo es ya un héroe popular, encumbrado a
ca imprimirle un sello de clase a la justicia. Para los de tal condición por el pueblo, mantiene su vigencia, no
abajo las obligaciones, para los de arriba los privilegios y ha muerto, su vestigio permanece en el tiempo refleja-
los derechos. Ante la impotencia de los desvalidos, ante do en las conductas deseadas cuando de alcanzar ciertos
las tropelías que se cometen en su contra, verán en Luis logros se desean. Por eso en el 2003, durante la fiesta
Pardo al justiciero que castiga y combate el abuso. del centenario de la provincia de Bolognesi, se le otorgó
Quien cataloga sus actividades como forma de pro- la Medalla Gran Sol del Centenario y; el 2009 es un
testa social, como actos de justicia para con los desvali- año dedicado no solo a rememorar el centenario de su
dos y pobres, es el pueblo, no el Estado o sus enemigos. fallecimiento sino a resaltar sus valores de héroe popular.
Por lo mismo su paso a justiciero social y a héroe popu- En enero del 2009 se realizó en Chiquián el XVII En-
lar es una construcción de la memoria popular. cuentro de Escritores de Ancash bajo la denominación
El pueblo le otorga el carácter de héroe popular «Centenario de la muerte de Luis Pardo Novoa», con la
porque identifica en Luis Pardo determinadas cualida- adopción de acuerdos como la designación de su nom-
des: su liberalidad, la generosidad, nobleza, la práctica bre a la principal calle de su ciudad natal (Chiquián) o
de la cortesía y las buenas maneras, su bondad, opti- la gestión ante el Instituto Nacional de Cultura para que
mismo, su gallardía, el sentido del humor, la astucia y su casa-hacienda de Pancal sea inscrito como parte del
el valor, su alto sentido de la justicia y una ubicuidad Patrimonio Cultural de la Nación. En lo que va del año,
que equivalía a una verdadera invisibilidad. también, se presentaron varios libros conmemorativos,
investigaciones sociales 292012

Todo el mito de bandolero social, justiciero social videos documentales y musicales, conferencias y exposi-
y héroe popular es una construcción de la memoria ciones, así como la puesta en escena de obras de teatro.
histórica y el imaginario colectivo a lo largo de los úl- Luis Pardo sintetiza lo bueno y lo noble para la cul-
timos 100 años, desde antes de su muerte inclusive. tura popular. Alcanza suficiente prestigio, aun a costa
Su nombre figura en la denominación de un puente, de la exageración de sus acciones, atribuyéndosele valo-
de una calle limeña, de una ex cooperativa agraria de res superiores al resto de los mortales. Como héroe po-
producción, de muchas promociones de estudiantes de pular, Luis Pardo, tiene una biografía cultivada, com-
los niveles primarios y secundarios, de una institución puesta de tradiciones y hechos por encima de la verdad
educativa, de la plazuela de ingreso a la ciudad de Chi- histórica, cuya figura se acrecienta con el tiempo.
251
Filomeno Zubieta Núñez

Referencias bibliográficas ANEXO

Burga Díaz, Manuel (1988). Nacimiento de una utopía:


Muerte y resurrección de los incas. Lima: Instituto de CANTO DE LUIS PARDO O ANDARITA
Apoyo Agrario. Luis Pardo Novoa
Carrillo Ramírez, Alberto (1973). Luis Pardo, el Gran Ban-
dido. Segunda edición. Lima: Editorial Asencios. Ven acá mi compañera;
Colchado Lucio, Óscar (1996). ¡Viva Luis Pardo! Lima: ven tú, mi dulce andarita,
Editorial San Marcos. tú sola, sola, solita,
Flores Galindo, Alberto (1988). Buscando un Inca. Lima: que me traes la quimera
Editorial Horizonte. de aquella mi edad primera,
Hobsbawm, Eric J. (1968). Rebeldes primitivos. Barcelona: que en el campo deslizada,
Ediciones Ariel. junto a mi madre amada
Reyes Barba, Mario (2002). Chiquián, la incontrastable villa. y de mi padre querido,
Compendio histórico de un pueblo en transformación. era semejante al nido
Lima: Graficentro Sales &Servis S.A. que hace el ave en la enramada.
Robles Mendoza, Román (1996). Chiquián: Tradición y  
modernidad. Lima: UNMSM. Ven, consuela al solitario
Ruiz Huidobro, José (1996). «Luis Pardo el Gran Bandido» que por jalcas y oconales,
Eco regional. Revista de opinión, debate, turismo y de- sin hallar fin a sus males,
sarrollo. II época. N°s. 9: 28-30. Lima. va arrastrando su calvario.
Ventosilla Quispe, Wálter (2005). Luis bandolero Luis. Fue el destino temerario
Lima: Paloma ediciones. al empujarme inclemente,
Zubieta Nuñez, Filomeno (2003). Por la ruta del Huay- como por rauda pendiente,
huash. Los recursos turísticos de la Provincia de Bolog- desde lo alto del peñón
nesi. Huacho, Lima: Gráfica Imagen. se desgaja algún pedrón
Zubieta Nuñez, Filomeno (2009). Tras las huellas de Luis que rueda y cae inconsciente.
Pardo. Huacho, Lima: Gráfica Imagen.  
A mi padre lo mataron,
mi madre murió de pena;
ella, tan buena, ¡tan buena!
¡Ellos que tanto me amaron!
Con ambos me arrebataron
lo más que en el mundo quise.
Pero aún la suerte me dice:
«Ama, adora a una mujer»,
que hube también de perder...
pues nací para infelice.
 
De entonces, ¿qué hube de hacer?
investigaciones sociales 292012

Odiar a los que me odiaron;


matar a los que mataron
lo que era el ser de mi ser;
en torno mío no ver
sino la maldad humana;
esa maldad cruel, insana,
que con el débil se estrella,
que al desvalido atropella
y de su crimen se ufana.
252
Luis Pardo: de bandolero social a héroe popular

Por eso yo quiero al niño; Llega la noche. En el cielo


por eso yo amo al anciano; salta la luna serena;
y al pobre indio, que es mi hermano, dentro del pecho mi pena
le doy todo mi cariño. parece hallar un consuelo;
No tengo el alma de armiño sobre el campo, blanco velo
cuando sé que se le explota; se extiende, y como visión,
toda mi cólera brota detrás de cada peñón
para su opresor, me indigna parece ver a mi amada,
como la araña maligna que viene como escapada
que sé aplastar con mi bota. a buscar mi corazón.
   
Yo aborrezco la injusticia; Cae la noche, en el cielo
yo quiero al que es desgraciado, surge la argentada luna,
al que vive abandonado triste como mi fortuna,
sólo por torpe malicia; sola cual mi desconsuelo.
yo maldigo la estulticia A su luz beso el pañuelo
de tanta gente menguada, que me dio a la despedida,
porque al fin de la jornada, que en su llanto humedecida
puesto que la vida es corta, besó ella con pasión loca
la vida a mí qué me importa y que guarda de su boca
porque ¿qué es la vida? ¡Nada! la huella siempre querida.
   
De mi provincia las peñas Y me persiguen, ¡traidores!
y el viento de mis quebradas, siempre fueron sin entrañas,
me delatan las pisadas les espantan mis hazañas
del que me busca en las breñas; que no son sino rencores.
hasta las ramas son señas ¿Dónde están mis defensores?
que de la suerte merezco; Para mí, nadie es clemente;
ni me asusta ni padezco nadie piensa, nadie siente,
si alguien me mira altanero; ¿Quieren matarme?, ¡en buena hora!
yo soy como el aguacero, Que me maten si es la hora,
que al soplo del viento crezco. ¡pero mátenme de frente!
 
Brama, brama, tempestad;
ruge, trueno, en el espacio,
¡Bendito sea el palacio
de la augusta Libertad!
Cielo, con tu inmensidad
vas mis pasos amparando.
El rayo me va alumbrando
investigaciones sociales 292012

si viene la noche oscura,


en medio de su negrura
para seguir caminando...
 

253

También podría gustarte