Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
3. Aceptación de uno mismo y de la propia realidad. Aceptar y amar todo lo que somos,
lo que nos gusta y lo que no nos gusta de nosotros mismos. Aun con áreas de mejora,
estar satisfechos de los que somos y lo que tenemos. Autoaceptación.
6. Conciencia de la propia vida. ¿En qué consiste? En ser conscientes de lo que somos
y hacemos en orden al logro de los objetivos propuestos y, con ello, de la consiguiente
autoestima. Las personas nos comportamos según lo que pensamos; somos, como ya
afirmaban antiguos filósofos, lo que pensamos.
“El pensamiento, explica Bernabé Tierno Jiménez, es una capacidad única y exclusiva de
los seres humanos, y la autoestima está condicionada positivamente por la manera
consciente, reflexiva y razonable de obrar, lo mismo que puede quedar afectada y
maltrecha por actitudes inconscientes y contradictorias, regidas por pensamientos
distorsionados y perturbadores: estructuras dicotómicas (todo/nada), generalizaciones
excesivas, conclusiones apresuradas, razonamientos emocionales, etiquetas,
personalizaciones, etc.”
7. Retos personales, sin comparación con los demás. Dos cosas, pues. La primera es, de
modo gradual y tranquilo, proponernos sucesivos retos personales. Si los logramos, bien,
gracias a Dios y a quienes nos ayudan. Y, si no…, esperar nuevas oportunidades, pero de
ningún modo sentirnos mal, incapaces y derrotados y, menos autoculpables y
autocondenados. En todo caso, no echar en olvido aquello de que “el esfuerzo depende
de mí, el resultado no, sino de muchos imponderables”.
Y nada de compararse con los demás y competir con ellos. No hay más competidor que
uno y consigo mismo. Haciéndolo es como creceremos en autoestima e incluso en
grandeza y merecimiento. Así entiendo la afirmación de Tony de Mello que afirma que
no hay que “imitar” a Jesucristo… Algo semejante advierte Bernabé Tierno Jiménez: “El
hecho de compararnos constantemente con los demás para ver si les hemos superado o
vencido en esto o aquello, si tenemos más fama, más éxito o más reconocimiento, nos
conducirá antes o después a desarrollar una baja autoestima. ¿Por qué? Porque siempre
habrá alguien más inteligente, o con más tesón, o con más medios, o con mejores
influencias…” Y concluye: “En mi opinión, lo que incrementa la autoestima es ser cada
día más uno mismo y perfeccionarse en la medida de sus posibilidades”.
9. Autenticidad, coherencia y honradez. Mal está el mentir a los demás, pero aún es
peor mentirse a sí mismo, por las consecuencias que ello acarrea al ser un inauténtico, o
sea no ser lo que se debe. Otro tanto ocurre con la incoherencia: una cosa es lo que
realmente se es y otra lo que falsamente se muestra. Eso se llama “esquizofrenia” que
sume al que la padece en los niveles más bajos de la autoestima.
Por el contrario, advierte Bernabé Tierno Jiménez que “sentirnos en perfecta armonía y
coherencia con nosotros mismos, manifestarnos tal como somos, sin ocultaciones ni
dobleces, nos ayuda a aceptar y amar nuestra propia y singular realidad personal; una
condición que resulta fundamental para la autoestima”.
“Pero, y como lo advierte el tan citado Bernabé Tierno Jiménez, con ser esto importante,
el premiarnos a nosotros mismos por estar llevando a buen puerto los objetivos que nos
hemos marcado, el felicitarnos y darnos ánimos tanto en los malos momentos -para no
dejarnos llevar por el desaliento- como en los buenos -para motivarnos y hacer acopio de
ilusión y entusiasmo, para acumular “gasolina de reserva”-, aún lo es más”.
Con él concluimos que “la autoestima resulta fundamental para que, una vez en nuestro
interior, podamos echar mano de ella en cualquier momento de la vida, cuando estemos
sin otro apoyo y compañía que el que pueda darnos el autoamor”.
AUTO-RESPETO
Cuando tengo auto-respeto puedo permanecer estable internamente, sin una sensación
errónea de inferioridad o superioridad. Es sólo cuando me falta el auto-respeto que
dependo de los demás para que me den su apoyo o confianza. La experiencia liberadora
de estar libre de expectativas viene cuando me acepto y me respeto a mí mismo/a. Soy
capaz de desprenderme y de no presionar a los demás para satisfacer mis deseos. Los
demás no tienen que hacer lo que les pido o satisfacer mis expectativas. Soy libre y
puedo ayudar a los demás a liberarse.
Cuanto tengo auto-respeto es fácil tener respeto hacia los demás. Muchos valores
faltan en el mundo de hoy en día, pero uno de los principales es el respeto. Cuando
los niños y niñas crecen y se desarrollan en un entorno familiar de respeto hacia los
demás y hacia sí mismos/as, tendrán una base fuerte para establecer en sus vidas
relaciones llenas de respeto.
Cuando te respetas a ti mismo, tomas mejores decisiones, y te diriges con firmeza hacia
una vida más feliz. Muchas personas, lastimosamente no le dan la importancia que se
merece a la autoestima y el auto respeto. Este es un grave error que lleva a la gente a
momentos difíciles en donde a diario viven en los problemas, las dificultades y la
frustración.
Sin saberlo, muchas personas sencillamente atentan contra sí mismos.
Quizás sepas que tienes algunas cosas mejorar en tu vida, quizás tengas claro que hay
obstáculos que se te presentan constantemente.
En cualquier caso, el mejor punto de partida es el autorrespeto, ya que es la base de una
vida feliz.
Para respetarnos a nosotros mismos, debemos conocernos muy bien a nivel interior.
El autorrespeto nos ayuda a lograr nuestro propósito de vida, y lo refuerza con base en la
identidad.
Generalmente, basamos nuestro autorrespeto en identificarnos con los aspectos
superficiales de nuestra existencia; nuestro aspecto físico, el género, el éxito profesional,
nuestra inteligencia, nuestro status social, nuestra nacionalidad, raza, etc.
Con tal identificación superficial, nunca conseguiremos un sentimiento estable
de autorrespeto, porque las opiniones de las personas cambian.
Hoy puede que nos amen, mañana nos rechazarán. ¿Cuál es la consecuencia de
depender de sus opiniones?
Pues sencillamente que acabaremos fluctuando todo el tiempo, sintiéndonos positivos
cuando nos dicen cosas buenas, y sintiéndonos abatidos cuando nos dicen cosas negativas.
Para permanecer estables en nuestro autorrespeto, necesitamos nutrir un entendimiento
más profundo de nuestra identidad interior.
Se trata de conocer, nuestro yo mental, ese yo, que no es ni gordo ni flaco, ni blanco ni
negro, ni pequeño ni grande.
El autorrespeto, es el entendimiento de ese ser que actúa por nosotros inconscientemente
y que somos nosotros mismos.
Suena un poco complejo, pero en realidad es muy sencillo.
Adquirir un gran autorrespeto, es cuestión de primero conocerse a sí mismo, y luego
aceptarse con los errores que se tienen, comprometerse a mejorarlos y amarse cada día
más.
Esto sin duda alguna supone una mejora sustancial a la autoestima.
LOS BENEFICIOS DE RESPETARTE A TI MISMO
Muchos valores faltan en el mundo de hoy en día, pero uno de los principales es
el respeto.
Cuando los niños y niñas crecen y se desarrollan en un entorno familiar de respeto hacia
los demás y hacia sí mismos/as, tendrán una base fuerte para establecer en sus vidas
relaciones llenas de respeto y otras virtudes.
El autorrespeto me fortalece e independiza.
Al no basar mi bienestar interno ni mi satisfacción en el reconocimiento o aprobación por
parte de los demás, aprendo a ser más genuino y a expresarme con dulzura pero con
honestidad y coraje.
El autorrespeto me permite dejar que mi ser se exprese con naturalidad y espontaneidad.
Esto me proporciona una sensación de integridad y coherencia que genera una gran
alegría interior.
Al mismo tiempo, debido a que respeto y valoro a quienes me rodean.
Procuro que mis palabras, actitudes y acciones estén llenos de consideración,
discerniendo siempre qué es lo más preciso para decir o hacer, de modo que nadie se
sienta herido/a ni molesto/a.
Piensa hoy, si te falta autorrespeto, y empieza de una vez a fortalecerlo.
Empieza a valorar quien siempre has sido, detecta tus errores y cámbialos.
No te preocupes porque ahora no eres la persona que tanto desearías, respétate a ti
mismo, y comprométete con el cambio.
He aquí algunas sencillas pautas que puedes seguir para empezar a tener un mayor auto
respeto.
1. Trátate Bien: ¿Respetarías a alguien que te trata mal? Por supuesto que no. Entonces, no
te trates mal a ti mismo. NO digas cosas como “soy un idiota” o “no sirvo para nada”.
Esas cosas sólo pueden traerte malas experiencias e ir en contra de tus sueños.