GASTO ENERGÉTICO

Jorge Antonio Muñoz Guillén

jorge@tiquicia.com
Quincena 1, Mayo del 2001

Toda actividad de movimiento, lleva implícita un gasto de

energía. Algunos elementos, de la vida cotidiana con los
cuales el ser humano interactúa tienen su propia energía. Esta
la gastan para producir efectos, que evidencian su propia vida.
Brillo, calor, desplazamientos, pero que al fin y al cabo
evidencian la presencia de esos elementos. Algunos tienen la
capacidad de transferirla, otros de que sea utilizada por
sujetos o actividades que se dan a su alrededor o por ellos
mismos.

El ser humano no escapa a esta actividad generada, por los elementos que se
encuentran en el entorno donde el se desenvuelve. Es más esos elementos que
están a su alrededor le permiten nutrirse de esa energía para producir en el su
capacidad de movimiento y trabajo para su propia subsistencia y de las cosas que
este quiere hacer. Lamentablemente, para el, no trae acumulada su propia energía
sino que requiere tomarla de otros para producir.

En el caso de marras, el requiere un numero mínimo de energía para poder

subsistir. Los expertos en ese campo le llaman calorías y así la pueden medir.
Para su actividad cotidiana requiere un gasto promedio, que los conocedores la
estiman en 1800 calorías. Este ser humano las obtiene de los alimentos y los que
se encargan del estudio de esta área, la empiezan a determinar como nutrición.
Esta estudia el proceso por medio del cual, el organismo obtiene los nutrientes -
alimentos- adecuadamente.

También se dice que la alimentación que debe tener una persona debe estar
enmarcada al menos por cuatro aspectos: a) Que sea completa en la calidad y
cantidad de los alimentos. b) Equilibrada, en cuanto a la distribución del porcentaje
de nutrientes, ya sean grasas, proteínas, carbohidratos, entre otros. c) Suficiente
en el aporte de las calorías necesarias. d) Adecuada, cuidando que se ajuste, al
peso talla, sexo, o actividad entre otras.

De todo lo anterior se infiere que las personas ya sean hombres, mujeres,

niños, niñas, jóvenes, deben de cuidar lo que ingieren. La escasez de los
alimentos, lleva a la enfermedad; el exceso de ellos también.. El equilibrio es
necesario para favorecer el buen desenvolvimiento general de las personas.
 Entonces una persona que hace ejercicio requiere una ayuda extra para su
gasto extra de energía la cual obtiene de los alimentos. La persona que hace
actividad física es quizá la que debe cuidar con mayor reparo su cuerpo. un gasto
excesivo de calorías lo puede llevar a gastar sus reservas, y como un automóvil
con la gasolina se le agotará. Pero con el agravante para esta persona, que solo
se detendrá como el automotor, sino que se enfermará.

Sí, hacer deporte, actividad física, ponerse en un régimen de ejercicios puede

enfermar, cuando no controlemos el gasto energético. Por ello es necesario que
quien realice estas actividades como deporte competitivo, y más como salud debe
controlarse. No dejándose llevar por lo que sus propios impulsos, le indiquen, sino
por lo racional que sea el ejercicio y este se ajuste a los extremos que la persona
puede llegar. Es mejor quizá buscar al entrenador, al educador físico, que lo
pueda guiar adecuadamente según corresponda, a los intereses de la persona y al
tipo de actividad en la cual se verá involucrada.