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Archivos gráficos y afectos políticos de las luchas por el aborto legal en el Cono

Sur
7, 8 y 9 de noviembre - Centro Cultural Paco Urondo

En el marco de las V Jornadas Historia, Género y Política en los ’70

Curaduría: Nayla Luz Vacarezza

Las imágenes y los símbolos que acompañan a las luchas por la legalización del aborto en el Cono Sur
nos identifican, nos hacen pensar y nos mueven a la acción. Son artefactos políticos que surgen en los
bordes porosos entre el arte y el activismo. A menudo su vida útil es efímera: son pañuelos hechos de
tela barata, piezas gráficas de cartulina, afiches impresos en papel económico o serigrafías estampadas
en indumentaria usada. En estos materiales endebles, sin embargo, se expresa una enorme fuerza
creativa saturada de afectos. Sus distintas tonalidades emotivas intervienen a contrapelo de los
discursos que apuntalan el estigma y la ilegalidad del aborto a través del terror, la culpa y el asco.
El archivo que reúne estos materiales es, necesariamente, tan frágil como sus componentes. También
es un archivo atravesado por la ausencia de los objetos perdidos y en permanente transformación
porque las estrategias creativas del movimiento se renuevan sin cesar. En cada uno de los elementos
de este archivo vibran múltiples y palpitantes deseos de transformación social que, aun frente a las
más amargas frustraciones, se niegan a darse por vencidos.
La mano que vota a favor del aborto legal surge en Uruguay durante 2004, pero se alza también en
Argentina y en Chile, con distintos colores y leyendas. Desde 2005, el pañuelo verde de la Campaña
Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito es recreado, vestido y levantado como
gesto de protesta en las calles de Argentina y de Chile. Ambos símbolos transnacionales recogen,
amplían y renuevan el enorme valor afectivo acumulado desde décadas anteriores en torno al voto, a
la democracia y a los emblemas del movimiento por los derechos humanos en la posdictadura.
El grupo de activismo artístico Mujeres Públicas interviene en 2003 con el afiche “Todo con la misma
aguja”. Allí, la violencia y el sufrimiento asociados con el aborto clandestino se ponen en movimiento
para realizar una denuncia y provocar indignación. El dolor se activa políticamente en sus distintos
afiches que, hasta la actualidad, insisten en atribuir la responsabilidad de los daños al Estado y a las
fratrías patriarcales que sostienen la ilegalidad del aborto.
Desde 2007, Serigrafistas Queer ocupa el espacio público estampando sus creaciones en textiles de
todo tipo. La serigrafía que dice “Aborto legal es vida” tiene una tipografía alegre donde conviven un
corazón y una flor. Con un lenguaje gráfico que podría parecer ingenuo, se desmarca de los discursos
que asocian al aborto con la muerte y coloca al movimiento por la legalización del lado de la afirmación
vital.
El corazón reaparece en Chile cuando, en 2013, el grupo Maraca Pobladora Feminista, lleva a la
primera marcha por el Aborto Libre un afiche con la leyenda “Yo © aborto”. También el colectivo
chileno Brigada de Propaganda Feminista utiliza el corazón como elemento central de su afiche
“Abortar es un acto de amor” (2017). Asociar al aborto con corazones, de manera casi humorística, o
instalarlo como un gesto de amor hacia una misma es un trabajo político de primer orden para contestar
la dominante asociación del aborto con el miedo, la pena y el remordimiento.
También en Chile, el Colectivo Universitario de Disidencia Sexual, impulsó una serie de acciones
irreverentes que tomaron como objeto de burla al feto público, ícono central de la propaganda contraria
a la legalización del aborto. Tanto la Campaña “Dona por un aborto ilegal” (2012) como el afiche
“Esto no es un ser humano” (2014) desbaratan, con corrosivo humor e ironía, el repertorio
sentimentalista de amor y ternura asociado al feto público.
Nosotras Proponemos plasmó en sus afiches la extraordinaria experiencia política vivida en las calles
de Argentina durante 2018. El pañuelo verde cobra vida animado por un ráfaga de aire. Cuando
estamos juntxs en la calle, nuestra potencia colectiva desborda lo humano: somos viento, fuego y
marea. El movimiento nos excede, nos solivianta y nos transforma.
Dolor, sufrimiento, amor, alegría, solidaridad, humor, ironía, fortaleza, desilusión, indignación, rabia.
Estos y muchos otros son los afectos mezclados y contradictorios que nos movilizan a la acción política
por el aborto legal. Sentimos en el cuerpo el desgaste de las promesas incumplidas de la democracia,
pero también contruimos una visión esperanzada de futuro que pueda abrigar nuestros deseos de
libertad sexual y corporal.

Los agradecimientos son para las artistas y activistas que generosamente cedieron sus trabajos y
materiales para esta muestra. También agradezco a las redes de solidaridad feminista que sostienen
estos archivos, su circulación y exhibición. Brigada de Propaganda Feminista / Colectivo Universitario
de Disidencia Sexual / Maraca Pobladora Feminista / Mujeres Públicas / Nosotras Proponemos /
Serigrafistas Queer / Claudia Dides (Miles por los Derechos Sexuales y Reproductivos) / Claudia
Laudano / Elizabeth Borland / Fernanda Carvajal / Guillermina Mongan / Javiera Manzi / Jimena
Pautasso / Jorge Díaz / Julia Rojas Vásquez / Karina Granieri / Lilian Abracinskas (Mujer y Salud en
Uruguay) / Lilian Celiberti y Lucy Garrido (Cotidiano Mujer) / Magdalena Pagano / María Laura Rosa.

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