Ser valiente es tener la fuerza para superar lo que tenemos ante nosotros.

Es la manera

de enfrentar situaciones que la vida nos pone, ya sea buena o mala. Es la forma de aprobar

nuestras habilidades para defendernos. Además, para saber cuáles son los límites que cada uno

debe tener para hacer el bien en la vida. Las personas son valientes para recibir la intimidación,

ser ellas mismas y respetar a los demás.

La intimidación es ese hostigamiento hacia una persona continuamente y se lleva a

cabo de diferentes maneras. El que es acosado tiende a tener una actitud de valentía porque se

enfrenta a diferentes situaciones que lo afectan y por eso sabe cómo superar sus temores. El

acosador en su mayoría tiene problemas de aceptación y toma represalias por medio de la

intimidación, esta persona no es valiente si no es débil. Aquí se ve el coraje en la víctima que

lucha contra el rechazo de otras personas y se supera al enfrentar sus temores. Hay diferentes

tipos de acoso y cada persona es superada de manera diferente pero con coraje y astucia.

Cuando las personas son ellas mismas, tienen una identidad que distingue la forma en

que se desarrollan y se expresan. La valentía juega un papel muy importante aquí porque si eres

tú mismo, enfrentas tus miedos y tratas de superar cualquier obstáculo individualmente. Esto

diferencia las capacidades de cada persona y es por eso que no todos somos iguales, sino que hay

algo que nos distingue. Al aceptar la realidad, eres responsable de tus sentimientos y

comportamiento contigo mismo y con los demás. Si usted mismo acepta los problemas y los

enfrenta, refleja el coraje que existe porque supera sus límites.

 El respeto es un valor que se enseña desde pequeño. Cuando te enfrentas a situaciones

riesgosas y difíciles, debes enfrentarlas con respeto y humildad. Debido a esto, el respeto es parte

del coraje que debe tener ese respeto hacia los demás. Tratar a los demás como a usted le gusta

ser tratado es parte del respeto, si trata bien a las personas, ellos lo respetarán y, cuando haya

discusiones o problemas, se enfrentarán adecuadamente. El valor no es solo superar los miedos y

obstáculos, sino también respetarse a uno mismo.

Me siento una persona valiente ya que enfrento mis miedos y obstáculos con el mayor

respeto y humildad hacia los demás y hacia mí mismo. Entiendo que puedo seguir adelante

siendo valiente. Además, a todos los límites que vienen, encontrará una solución. También

aprendió que cuando somos nosotros mismos, tenemos una identidad que nos hace únicos y se

refleja en las acciones que tenemos como seres valientes. Ser una persona valiente es hacer el

cambio y lograr un cambio en otras personas en cumplimiento con lo que se mencionó

anteriormente.