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Corrado Malanga – Triade Sound Test o aproximación auditiva del TCTDF

Extracto de intervención

C: Por lo tanto, ¿cuál es el motivo por el que no logras hacer el triade color test?
E: Porque... a pesar de probar... siempre lo hago solo, quiero hacerlo porque quiero saber... no sé, me auto-
hipnotizo, ahora no sé qué termino usar, de todas maneras, llego a ese estado de concentración y no logro
ni siquiera ver la esfera, entonces...
C: Para, detente. ¿No logras verla o la ves mal?
E: No, no la veo...
C: Muy bien, ¿se ve la habitación oscura?
E: Estoy a ciegas.
C: Bien, y con respecto a una hipotética imagen, por ejemplo, qué se yo, un lápiz, cierra los ojos, ¿puedes
verla?
E: Puedo imaginarla, sé cómo está hecha pero no la veo.
C: Muy bien, el problema se resuelve fácilmente. Entonces, ¿logras sentir el olor del lápiz de madera? ¿En
ese estado?
E: Ahora sí, si me acerco a un lápiz es normal que sienta su olor.
C: Sí, imaginárselo, no sentirlo. ¿Cuándo estabas en el colegio se compraban libros nuevos?
E: Sí, el olor de la tapa.
C: ¿Lo recuerdas?
E: Sí.
C: ¿Se siente fuerte?
E: Me gusta el olor de la tapa, siempre me ha gustado.
C: Has la diferencia entre el olor de la tapa, el olor de la goma y el olor de la madera. Muy bien. Si te
dijera que imagines tener un lápiz en la mano ¿te lo imaginas?
E: Sí, lo imagino.
C: ¿Es hexagonal?
E: Sí, porque es polifacético.
C: Se siente, ¿no?
E: Sí, se siente el borde. Debo ir a un recuerdo para decir que tengo el lápiz en la mano.
C: Es cierto, ir a un recuerdo, ¿ves ese recuerdo?
E: No el del lápiz, pero me refiero en el sentido de que para poder hacer algo mi mente se lo debe imaginar,
es la imaginación.
C: ¿Es una imagen o no?
E: Sí, es una imagen porque al final es algo que ha ocurrido.
C: Entonces no eres visivo, eres, qué se yo, kinestésico... ¿qué problema hay? que tu cerebro aplica el
canal que más prefieres, porque lo has utilizado más. Muy bien, problema de adn, de neuronas, de lo que
sea, pero los otros canales, no es que no los tengas, es que no los has usado casi nunca porque tenías un
canal preferencial, entonces el cerebro se acostumbra a usar ese canal. Pero los otros canales están y son
perfectos. Para activarlos antes debes activar el canal preferencial. Después que has activado el canal
preferencial puedes encender la lampara. Ejemplo: imagínate que estás en la habitación oscura, no ves
nada, está oscuro, entonces si está oscuro no hay mucho que hacer, ¡magnifico! Sabes que en esta habita-
ción están las tres famosas esferas que son tuyas.
E: Sí.
C: No las ves. Perfecto. Sin embargo, sabes que están ahí. Tú las has puesto ahí, entonces las esferas están,
de seguro. Por lo tanto, existen posibilidades. Puedes intentarlo ahora, por unos segundos. Cada esfera
tiene distintas características, no sé, será grande, será pequeña, estará arriba, abajo, no lo sé. Piensa que
cada esfera emite un sonido. Cuando quieras... una por una... porque si no te confundes... entonces estás
ahí, cuando quieras inicias el ruido, el sonido, una nota en la esfera de la mente, porque sabes exactamente
de donde proviene el sonido, entonces la puedes localizar. Inténtalo, cerrando los ojos, o no importa, hazlo
como quieras. Habrá un ruido. Después que lo hayas sentido, te quedará en la mente y te dará una idea de
qué tipo de ruido es.
E: Lo definiría como una nota fija pero ligera, muy ligera, es como una nota de una escala...
C: Sí, he entendido perfectamente. ¿Desde dónde viene según tú?
E: Desde la oreja izquierda, viene de allí.
C: Muy bien. Ahora vuelves a entrar en la habitación y esta vez haces sonar la esfera del espíritu. ¿Qué
sonido tiene?
E: Viene de la parte derecha.
C: ¿Qué tipo de sonido tiene?
E: Tiene un sonido fijo.
C: ¿Igual al otro? ¿Más bajo o más alto?
E: Me parece igual.
C: Ahora hagámoslo de nuevo pero esta vez escuchemos el sonido de la parte anímica.
E: Osaría decir que viene desde la izquierda.
C: ¿Dime qué sonido tiene?
E: Siempre fijo, lo definiría como un poco más evidente.
C: Ahora volvamos con el primer sonido, para mente. Enciende el sonido de la mente. Ahora que lo has
hecho aumenta el volumen, hasta que sea agradable para escuchar, no fastidioso, sino que se pueda oír.
Luego pídele a este sonido que se convierta en el sonido que ese quiera, el que le guste más y que lo elija.
Mientras escuchas este sonido me dices qué tipo de sonido oyes.
E: Es más amplio que el primero, sin embargo, ya no lo siento allá, sino que lo siento aquí.
C: Muy bien.
E: Diría que se ha movido.
C: Entonces lo sientes a la derecha.
E: Sí.
C: Bien. Sigue escuchándolo y mientras lo haces mueve tu cabeza hacia donde se origina el sonido, de
modo que así lo escuches mejor. Es como si pusieras tu atención en la oscuridad, donde esta ese sonido y
ahora que has puesto tu atención allí y escuchas bien el sonido, pídele a ese sonido que se encienda y se
vuelva de color, sonido y color al mismo tiempo. ¿Ves de qué color es?
E: No logro encenderla, pero le puedo decir la posición.
C: Muy bien. Visto que esa es la posición, acércate al sonido, de modo que el sonido se vuelva más fuerte.
Acércate al sonido de modo que puedas tocarlo con la nariz.
E: No puedo tocarlo con la nariz, pero he notado algo distinto. Cuando me muevo distingo que en un punto
el sonido es más fuerte, luego me muevo un poco y se debilita porque siento otro sonido en esta otra parte.
Es como si se cruzaran los sonidos.
C: De acuerdo. Vuelve a entrar en la habitación y enciende los tres sonidos, uno después del otro. Cuando
estén encendidos los tres, has que los tres sonidos o, mejor dicho, las tres esferas que suenan, entren una
dentro de la otra y en ese punto siente que el sonido que resulta de ellas será la suma de los tres sonidos,
porque las tres esferas se vuelven una sola, por lo tanto, se sentirá un solo sonido.
E: Lo siento muy debilitado.
C: Muy bien, muy debilitado. Ahora pídele a tu esfera total que sumen bien los tres sonidos, de modo que
la suma de los tres dé el resultado correcto. El resultado es que las tres esferas ya no existen, sino que
existe una sola esfera que suena como las tres, como alguna vez lo hizo, un único sonido. Ahora pídele a
la esfera total, que en realidad representa el ningún sonido, que lo recuerde, que dentro del ningún sonido
están todos los sonidos. Mientras menos se escuche, más integrado se está. El todo y el nada son la misma
cosa, el ningún sonido contiene todos los sonidos, cada sonido representa lo que eres, ya que eres todo,
no debes sentir nada, a medida que la consciencia comprende, el sonido se debilita cada vez más, hasta
volverse el sonido del silencio. Allí ya no hay tres esferas sino una sola, nueva y vieja al mismo tiempo.
La esfera que había antes ya no está dividida, sino completamente unida y transparente. Por eso no ves
nada, por eso no escuchas nada, todo ya está dentro de ti, pero no se ve, no se escucha, no se toca. ¡Eres
lo que está allí! A medida que el sonido disminuye, entra en tu interior y verás que no se escucha nada,
porque eres todo. Es como estar en una esfera donde no hay nada, ningún sonido, porque están todos los
ruidos y los anti-ruidos, entonces no se escucha nada. Una vez que obtienes esto puedes activar los demás
canales de input fácilmente.
Cuando estés integrado puedes acceder, en ese punto, a tu consciencia y pedirle cosas. La identificación
en el espacio, en el tiempo, de la energía, evaluando, primero que todo, las respuestas. Después de eso,
cuando estés integrado de esta manera, le pedirás a tu consciencia que verifique si puede abrir el canal
visivo. No es importante, pero si lo abre será mucho mejor. La respuesta será viendo o viendo, escuchando,
tocando, expandiendo todos los sentidos de tu cuerpo.

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