Está en la página 1de 7

Revista Chilena de Radiología. Vol. 12 Nº 1, año 2006; 9-11.

GENITOURINARIO

URACO: ANOMALIAS DEL DESARROLLO,


CARACTERISTICAS ANATOMICAS Y PRESENTACION DE
DOS CASOS
Drs. G. Elizabeth Zamora E, Andrés O´Brien S.

Servicio de Radiología, Hospital Clínico Pontificia Universidad Católica de Chile.

Correspondencia a:

Abstract: Urachal anomalies are infrequent, especially in adult patients, nevertheless


their presentation must be well known. We present two cases with complicated urachal
anomalies: a vesicourachal diverticulum and a urachal cyst. We will discuss their
embriologic and anatomic characteristics, as well as their complications.

Key words: Diverticulum urachal, Urachal cyst.

Resumen: Las anomalías uracales son poco frecuentes especialmente en adultos, sin
embargo, su forma de manifestarse debe conocerse. Presentamos dos casos de
anomalías uracales complicadas: un divertículo y un quiste uracal. Se discuten las
características embriológicas, ana-tómicas y complicaciones.

Palabras Clave: Divertículo uracal, Quiste del uraco.

Introducción

El uraco o ligamento umbilical medio es una estructura de la línea media que se


extiende desde el domo anterior de la vejiga hacia el ombligo. Es un remanente del
desarrollo embrionario.

Entre la cuarta y séptima semanas la cloaca es dividida por el septo uro-rectal en dos
estructuras embriológicas: el conducto ano-rectal posteriormente y el seno urogenital
anteriormente. La extensión cefálica del seno urogenital, precursor de la vejiga fetal se
comunica con el alantoides (derivado del saco vitelino) a nivel del ombligo. La
obliteración de esta extensión, antes del nacimiento, y su persistencia como un cordón
fibroso constituye el uraco, que en el adulto recibe también el nombre de ligamento
umbilical medio (Figura 1)(1).

Figura 1. Embriología. Se muestra la


continuidad del seno urogenital o parte
anterior de la cloaca y el alantoides en un
feto de 8 semanas. 1: Membrana cloacal.
2: Septo urorectal. C: Cloaca. U-G: Seno
urogenital. A-R: Conducto anorectal
(modificado de referencia 2).

Normalmente, al momento del nacimiento en la región infraumbilical, se visualizan tres


estructuras en el aspecto posterior de la pared abdominal anterior que van desde la
pelvis al ombligo: dos arterias umbilicales (una a cada lado), las que se obliteran al
poco tiempo del nacimiento y que son conocidas con el nombre de ligamentos
umbilicales laterales y el uraco o ligamento umbilical medio, ubicado en la línea media
entre las arterias umbilicales.

El remanente uracal puede originar varios problemas clínicos no sólo en niños también
en adultos. Las enfermedades que lo afectan son poco comunes y su manifestación
abdominal, síntomas o signos urinarios son inespecíficos por lo cual su diagnóstico no
siempre resulta fácil.

Se presentan dos casos clínicos en que la tomografía computada resultó de gran


utilidad para realizar un correcto diagnóstico.

Casos clínicos

Dos pacientes de sexo masculino, de 49 y 27 años de edad, se presentan en el servicio


de urgencia por dolor en hemiabdomen inferior de corta evolución, asociado a disuria y
fiebre. En ambos casos se realiza tomografía computada helicoidal de abdomen y
pelvis, demostrando la presencia en el primer caso de un divertículo uracal y en el
segundo de un quiste uracal, ambos asociados a cambios inflamatorios (Figuras
2 y 3).

Figura 2 a-c. Divertículo vesical


infectado. Cortes axiales en tomografía
computada con medio de contraste que
muestran cambios inflamatorios de la
grasa alrededor del divertículo y
engrosamiento de las paredes del mismo.

Discusión

El uraco se encuentra entre la fascia transversalis y el peritoneo en el espacio de


Retzius. Consta de tres capas: mucosa interna, rodeada por tejido fibroso y una
muscular externa contigua con el detrusor. Mide entre 3 y 10 cm de largo y de 8 a 10
mm de diámetro(3). Se observa en la parte superior de la vejiga en un tercio de la
población adulta y esta presentación puede ser de tres tipos: túbulos anfractuosos con
paredes paralelas, túbulos anfractuosos con áreas estrechas y dilatadas; el tercero,
similar al anterior, pero además con ramificaciones laterales. Histológicamente
estos túbulos tienen epitelio transicional en un 70% y epitelio columnar en un 30%.

En niños el uraco se encuentra como un cordón fibroso que llega a la vejiga con una
frecuencia de aproximadamente 60%(2). Se han reconocido 4 tipos de anomalías
congénitas derivadas del uraco, las que son más comunes en hombres que en mujeres
con un a relación de 2:1 (Tabla 1, Figura 4). Estas anomalías generalmente se asocian
con anomalías congénitas del tracto urinario inferior como valvas uretrales posteriores
o atresia ureteral completa(6).

Pueden complicarse con infecciones y en casos muy raros con neoplasia que en un
90% son adenocarcinoma. Generalmente estas neoplasias están compuestas en un
60% de mucina y calcifican en un 70%. El pronóstico es malo ya que al momento del
diagnóstico generalmente presentan invasión local. Otros tipos tumorales descritos
son: de células transicionales (15% de los casos), sarcomas y escamosos.

El divertículo uracal se desarrolla cuando la porción supra-vesical del uraco no se cierra


y es generalmente asintomático (Figura 4 c). En la tomografía computada aparece
como una saliente de perfil de aspecto quístico, en la línea media, justo por encima del
aspecto antero superior de la vejiga. Se complica con infecciones del tracto urinario,
formación de cálculos intrauracales y tiene relación con un aumento de la prevalencia
de carcinoma.

Figura 4 a-d. Esquema demostrando los 4


tipos de anomalías uracales. a: Uraco
persistente. b: Seno Uracal. c: Divertículo
Uracal. d: Quiste Uracal. V: Vejiga. R:
Recto. Asterisco: Ombligo (Modificado de
referencia 2).

El quiste uracal se desarrolla cuando el uraco se oblitera en los extremos vesical y


umbilical per-maneciendo entre estos puntos una porción permeable que acumula
secreciones tomando un aspecto quístico (Figura 4 d). Generalmente esto ocurre en el
tercio inferior. Su tamaño es variable pero generalmente son pequeños. Cuando se
hacen sintomáticos aumentan su tamaño con refuerzo de su pared, su diagnóstico
puede ser mediante ultrasonido o tomografía computada, en la cual se manifiesta
como una cavidad llena de líquido en la línea media de la pared abdominal baja. Así
como en otras anomalías uracales, la infección es la complicación más común y en su
mayoría tienen engrosamiento parietal y cambios inflamatorios de la grasa vecina.

Las infecciones uracales pueden ser transmitidas por ruta linfática, hematógena o
vesical. Generalmente están causadas por microorganismos gram positivos
y gram negativos. En la mayoría de los casos se debe extirpar la pared del quiste para
evitar reinfecciones y el desarrollo de cáncer(1).

Conclusión

Aunque poco frecuentes en adultos las anomalías uracales complicadas deben


considerarse en el diagnóstico diferencial de dolor abdominal. La tomografía
computada es una herramienta útil para su diagnóstico, donde además de la anomalía
de base se pueden demostrar sus complicaciones.

Los hallazgos no son específicos para diferenciar entre entidades infecciosas o


carcinoma por lo que el estudio histopatológico, como debe ser habitual, es
mandatario.

El conocimiento del origen embriológico de los diferentes tipos de remanentes uracales


y su representación anatómica son necesarios para orientar un diagnóstico correcto.

Bibliografía

1. Friedland G, De Vries P, y col. Congenital Anomalies of the urachus and Bladder.


Clinical Urography. 2002; 1: 826-829. [ Links ]

2. Yu JS, Kim KW, Lee HJ, y col. Urachal remnant diseases: Spectrum of CT and US
findings. Radiographics, 2001; 21:451-461. [ Links ]

3. Reed N. Inc. y col. Textbook of Uroradiology, 3rd Edition, Lippincott Williams, 2001;
páginas 375-376. [ Links ]

4. Rumack y col, Diagnostic US, 3rd Edition, Elsevier Mosby, Vol 1: 332-333.
[ Links ]

5. Zagoria R, y col. The Requisites Genitourinary radiology, 2nd Edition, Mosby, 2004;
341-342. [ Links ]
6. Berrocal T, López-Pereira P, Arjonilla A, y col. Anomalies of the Distal Ureter,
Bladder, and Urethra in Children: Embryologic, radiologic and pathologic features.
Radiographics, 2002; 22:1139-1164. [ Links ]

7. Bartley G Cilento, Jr, MD, Bladder


Anomalies. http://www.emedicine.com/ped/topic1402.htm [ Links ]

Correspondencia: Dra. Eizabeth Zamora Marcoleta 367, 2º piso, Radiología. Tel:


354 3486., glizzamora@hotmail.com

También podría gustarte