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CONSTITUCIÓN Y CONSTITUCIONALISMO

Si hemos dicho que el Estado es una sociedad política organizada por medio de una
ordenación normativa, parece indispensable –al menos- presentar la noción de constitu-
ción.

En este contexto, cabe señalar que uno de los sentidos más antiguos que se asigna a la
voz “constitución” es el que Aristóteles daba al término POLITEIA, en su obra “La política”,
como organización u orden establecido entre los habitantes de la ciudad. Cada ciudad tiene
su régimen; su tipo político, como modo de vida propio que la diferencia de otras ciudades
y le confiere su ser específico. En esta primera acepción constitución significa “status,
orden, conformación, estructura de un ente u organismo en general”. Fue empleada por
Cicerón, en su Res Pública, para hacer referencia a la “Forma de la ciudad”, pero luego, en
la Edad Media, desaparece todo rastro de esta acepción.

Con el advenimiento de la Edad Moderna, el término “Constitución” resurge, pero con


un sentido diferente, en el que predomina la idea de constitución como regla, norma, ley,
sancionada por la comunidad e impuesta como regla de conducta a los hombres.3

Es en este sentido que el término en análisis comienza a ser utilizado por el Constitu-
cionalismo, movimiento que tuvo por finalidad limitar el poder y resguardar los derechos
y libertades individuales frente al poder absoluto, con el objeto de allegar dignidad a la
persona humana .

Como hemos analizado al estudiar el Estado, cuando termina la Edad Media se inicia
un proceso de centralización del poder, que concluye en la formación de una nueva forma
de organización política, el Estado (o Estado Moderno), bajo la autoridad de un monarca,
que unifica territorios, pero que también ejerce el poder, sin compartirlo con otras fuerzas
sociales y políticas. El Estado, en esta primera manifestación, nace sin límites al poder, por
lo que recibe el nombre de “Estado absoluto”. 4

En los siglos XVII y XVIII, comienza a predominar una nueva concepción, que hunde sus
raíces en el antropocentrismo que caracterizó el Renacimiento (hombre – centro; la razón
fuente de todo saber), pero que surge fundamentalmente por la combinación de las teorías
iusnaturalistas y contractualistas, que llevan a concebir al hombre como anterior y superior
al Estado, y en cuanto tal, titular de derechos inherentes a su naturaleza, que es necesario
preservar.

Para lograr el fin propuesto, el Constitucionalismo adoptó como medio, la Constitución,


que entendía como un sistema de normas codificas, reunidas en un cuerpo único, que se
caracteriza por su supremacía respecto del resto del ordenamiento jurídico, producto del
poder constituyente, y que no puede ser modificar por los poderes por ella creados, cuyo
principal objetivo es limitar el ejercicio del poder, con el fin de resguardar los derechos y
libertades individuales. Es en este sentido en el que se utiliza la voz constitución por el
Artículo 16 de la Declaración Francesa de Derechos del Hombre y del Ciudadano de 1789,
3.
Martínez Paz, Enrique. Ob. Cit. pág 290.
4.
Romero, Cesar E. Introducción al Derecho Constitucional. Pág. 60
cuando establece “Una sociedad en la que la garantía de los derechos no está asegurada
y la separación de los poderes no está definido, no tiene Constitución”.

Pero el análisis que efectuamos no quedaría completo si no señalamos que la noción


de constitución con la que operó el constitucionalismo en sus orígenes, no era una noción
neutra, sino por el contrario, comprometida con la situación social y económica de la épo-
ca en la que surgió, en la que uno de los antiguos estamentos, la burguesía, luchaba por
convertirse en el estrato dirigente. Para ello, no sólo se valió del concepto normativo de
constitución que hemos definido supra, sino también de su contenido, nutrido en la ideo-
logía individualista –liberal y en las ideas aportadas por las teorías fisiocrática francesas,
que postulaban la existencia de un orden natural en la economía, gobernado por la ley de
la oferta y la demando, en donde no debía intervenir el Estado.

En este contexto, si bien en cierto que los derechos son reconocidos a todos los ciuda-
danos por el texto constitucional, no lo es menos que lo son sólo desde una perspectiva
“formal”, que implica que ante la ley, todos tuvieran iguales derechos, aunque ello no se
correspondiera con la realidad. En igual sentido, libertad, propiedad y seguridad, eran los
grandes objetivos a proteger.

Como señala Cesar Enrique Romero5, la primera versión del constitucionalismo dio lu-
gar al denominado “Estado liberal de Derecho”, es decir un Estado en el que se sustituye
el manejo personal del poder del monarca, por una mecánica institucional prescripta por
normas jurídicas, que reconoce la primacía de los derechos del individuo, pero que supone
un constreñimiento extraordinario del poder del Estado, limitado a un papel pasivo, gen-
darme, cuyo intervención se limita a cuidar que no se interfiera en el libre ejercicio de los
derechos.6

Esta primera versión del constitucionalismo, sin embargo, entró en crisis en el siglo XIX,
cuando surge la denominada “cuestión social”, que se ve acentuada por acontecimientos
tecnológicos, como la revolución industrial, pero también por la capacidad de acumular
riquezas en forma ilimitada, como consecuencia del libre juego de la oferta y la demanda,
que derivó en la marginación de grandes masas de trabajadores y en la explotación de
los más débiles, tal como advirtió el Papa León XIII, en la Carta Encíclica Rerum Novarum
(1891) que trata sobre la “condición” de los obreros.7

Frente a esta realidad, el constitucionalismo comienza a reaccionar cuando finaliza la pri-


mera guerra mundial, momento en que se sancionan los primero textos que abordan esta
problemática (México, 1917; Weimar (1919), Austria (1920), Polonia (1921).

Pero es recién después de la segunda guerra mundial cuando se toma conciencia del

5.
Romero, Cesar Enrique. Ob. Cit. pág. 93
6.
Romero, Cesar Enrique. Ob. Cit. pág. 54
7.
Describiendo la “Cuestión Obrera” la Carta Encíclica Rerum Novarum (1891) sostiene “2. Como quiera que
sea, vemos claramente, y en esto convienen todos, que es preciso auxiliar, pronta y oportunamente, a los
hombres de la ínfima clase, pues la mayoría de ellos se resuelve indignamente en una miserable y calamitosa
situación. Pues, destruidos en el pasado siglo los antiguos gremios de obreros, sin ser sustituidos por nada, y
al haberse apartado las naciones y las leyes civiles de la religión de nuestros padres, poco a poco ha sucedido
que los obreros se han encontrado entregados, solos e indefensos, a la inhumanidad de sus patronos y a la
desenfrenada codicia de los competidores. -A aumentar el mal, vino voraz la usura, la cual, más de una vez
condenada por sentencia de la Iglesia, sigue siempre, bajo diversas formas, la misma en su ser, ejercida por
hombres avaros y codiciosos. Juntase a esto que los contratos de las obras y el comercio de todas las cosas
están, casi por completo, en manos de unos pocos, de tal suerte que unos cuantos hombres opulentos y riquí-
simos han puesto sobre los hombros de la innumerable multitud de proletarios un yugo casi de esclavos”
papel que había jugado la crisis socioeconómica en la pérdida de la libertad, signada por la
lucha de clases sociales y la miseria colectiva8 . Los nuevos textos constitucionales comien-
zan entonces a concebir el principio de igualdad en una nueva dimensión, al reclamar una
relativa igualdad de hecho (igualdad real de oportunidades), que se suma a la igualdad
formal proclamada por el constitucionalismo clásico, y que exige la intervención del Estado
en la vida social y económica para alcanzarla. Paralelamente, se dignifica el trabajo y se
valoriza a los trabajadores; el derecho de propiedad pierde su carácter absoluto, y se ad-
mite su limitación, en aras a la satisfacción de necesidades sociales; y la protección de la
dignidad de la persona humana, se transforma en una meta gubernamental.9

Producto de esta nueva concepción, surge lo que se ha dado en llamar el “Estado Social
de Derecho”, que lejos de renegar de los aportes fundamentales efectuados por el consti-
tucionalismo, los actualiza mirando ya no al individuo, sino al hombre integrado en una rea-
lidad social 10. Ejemplos de esta nueva concepción son las Constituciones de Italia (1947),
Alemania Occidental (1949), Francia (1947 y 1959), entre muchos otros.

Pero el grado de concreción de los postulados del constitucionalismo social no es uni-


forme en los diferentes Estados, toda vez que la incorporación de sus principios en textos
constitucionales, no siempre se ve acompañada de su instrumentación en la realidad tal
como ocurre en los Estados menos desarrollados. Como ejemplo de esta situación, basta
con mirar a nuestro alrededor, signado por la desigualdad, la pobreza y la desocupación,
no obstante haberse “actualizado” la Constitución Argentina en 1949, en 1957 y 1994, re-
ceptando los principios del constitucionalismo social.

Asimismo debe tenerse presente que, como señala Ricardo Haro11, la mutación del
contexto socio- cultural es un proceso continuo, que –en los últimos tiempos- se ha visto
dinamizado y profundizado por un acelerado progreso científico-tecnológico; progreso que
repercute en la mayor movilidad de los flujos financieros, de masas poblacionales, de capi-
tales, etc, y que parece borrar las fronteras de los Estados, afectando su soberanía y su
capacidad para definir e instrumentar la acción estatal en estos aspectos.

Es evidente que el contexto socio-cultural contemporáneo no se corresponde con aquel


que tuvo en miras el constitucionalismo en sus dos vertientes, liberal y social y ello ha
tenido influencia en el constitucionalismo de finales del Siglo XX que comienza a exhibir
características particulares que nos permiten hablar de un constitucionalismo “de tercera
generación”, que pretende dar respuestas a los requerimientos de protección de la digni-
dad del hombre en la nueva sociedad globalizada.

LA CONSTITUCIÓN COMO LEY SUPREMA


Uno de los postulados básicos del constitucionalismo clásico (siglo XVIII) cimiente de
toda la teoría Constitucional, se asienta sobre la entelequia que sostiene a la Constitución

8.
Romero, Cesar Enrique. Ob. Cit. pág. 110.
9.
Sagües, Nestor P. Elementos de Derecho Constitucional. Tomo I, págs 12 a 15. Ed. Astrea. Buenso Aires.
1995.
10.
Haro, Ricardo. Ob. Cit. pág 30
11.
Haro, Ricardo. “Tendencias contemporáneas del Derecho Constitucional”. CEDECU, Colección Conferen-
cias, Nro. 3, Montevideo 2001. Pág. 4.
12.
Hans Kelsen -Teoría Pura del Derecho- Universidad Autónoma de Méjico-1979 – “El fundamento de la vali-
dez de una norma solo puede encontrarse en la validez de otra norma. La norma que representa el fundamento
de validez de otra es caracterizada, metafóricamente, como una norma superior en relación con una inferior”.-
pag 201 y sgtes.
como ley suprema o super ley, ubicada en el vértice de la pirámide del orden jurídico positi-
vo, que en la concepción Kelseniana12 cumple con la misión de norma fundante básica del
sistema, fuente de validez, y como tal espejo en el que debe reflejarse todo el ordenamiento
jurídico estatal, válido en tanto y en cuanto emana de un órgano competente y cuyo conte-
nido se adecua a los principios jurídicos instaurados por esa norma – Artículo 31.

Esta ley suprema o super ley de la que deviene validez todo el ordenamiento jurídico del
Estado, capaz de informar toda norma emanada de los poderes constituidos, todo acto pú-
blico o de particulares, se instaura como la mayor garantía, al decir del Dr. Alfredo Money13
es en sí misma una garantía amplísima, y en tal carácter debe gozar de permanencia, pre-
servada de los cambios y avatares de las apetencias políticas cambiantes, está destinada
a regir por los tiempos, según el preámbulo para nosotros para nuestra posteridad, y para
todos los hombres del mundo que quieran habitar el suelo argentino.

Estos caracteres que dan identidad a la Constitución del Estado devienen del momen-
to de su nacimiento, alumbrada por el Constitucionalismo Clásico, destinada a cumplir la
función esencial de garantir la libertad del hombre, por tanto debe ser también escrita y
rígida.

La rigidez de la Constitución Nacional explica el ejercicio del Poder Constituyente deri-


vado o de Reforma, y esta rigidez, que se traduce en requisitos especiales a la hora de su
modificación o reforma, tal como lo explica Germán Bidart Campos14 , puede ser orgánica
o procedimental. Será orgánica cuando se requiera un cuerpo especial dotado de poder
constituyente competente en la reforma, y será procedimental si también se requiere un
proceso especial y diferente del dictad de la ley. Ambos exigidos por el Artículo 30 de nues-
tra carta magna.

PODER CONSTITUYENTE
Hemos sostenido que toda la teoría constitucional asienta sobre la concepción de la
Constitución Nacional como norma suprema. Esta construcción está también basada en el
acto de nacimiento de esta norma.

Para abordar con éxito la cuestión es menester distinguir entre las normas que integran el
orden jurídico, que emanan de los órganos competentes creados por la constitución como
el Parlamento o Poder Legislativo de la norma fundante cuya etiología es conceptualmente
diferente al de cualquier otra norma jurídica.

La Constitución es fruto del ejercicio del Poder Constituyente, que ha sido definido por el
maestro Linares Quintana como “El poder soberano del pueblo de dictarse por primera vez
su ordenamiento político, jurídico institucional por primera vez o para proceder a su reforma
si fuera necesario.

El Poder Constituyente es ejercicio de soberanía popular de la más alta raigambre, surge

13.
Alfredo Eduardo Money –Derecho Constitucional Tomo II Ed. Triunfar -2000¬- “Conforme a Linares existen
1) Garantías en sentido amplísimo: comprensivas de todas las instituciones liberales, incluso la Constitución y
la declaración de derechos consignados en ella” .-Pag 83
14.
Germán Bidart Campos - Manual de la Constitución Reformada -Tomo I Ediar 2000 “La rigidez de la constitu-
ción argentina se acentúa, porque exige un procedimiento especial …y además está dirigido al establecimiento
de una convención especial para realizarla. Se trata pues de una rigidez “orgánica” – pag 378.
de la teoría esgrimida por el –Abate Sieyès- mentor de la Revolución Francesa, quien pone
en poder del tercer estado (burguesía) la atribución de dictar el pacto fundacional.

Este Poder Constituyente es susceptible de ser considerado como originario o derivado.


El originario dicta la primer constitución del Estado, el derivado tiene la potestad de refor-
mar el texto constitucional.

A su vez el Poder Constituyente Originario puede ser ejercido de manera abierta o ce-
rrada, en esta última categoría la Constitución primera se dicta en un solo acto, mientras
que la modalidad abierta deriva en un proceso Constitucional integrado por más de un acto
constitutivo. Sería el caso argentino que inicia en 1853 y concluye en 1860.

Una vez alumbrado el texto las constituciones se clasifican en rígidas o flexibles, según
sea su proceso de reforma, será flexible si puede modificarse por el mismo órgano y bajo
el mismo procedimiento del dictado de la ley, por el contrario será rígida si requiere para su
dictado un proceso especial.

Nuestra Constitución es rígida por el proceso de reforma, que está contenido en el texto,
precisamente en el Artículo 30 de la propia Constitución. La rigidez para reformar el texto
deviene de considerar una garantía la permanencia de sus normas.

Según nuestro texto es necesario un procedimiento especial, y un órgano especial para


proceder a la reforma de la Constitución Nacional.

Existen, sin embargo algunas cuestiones doctrinarias previas, la redacción del Artículo 30
ha dado lugar a diversas cuestiones:

¿Puede la constitución reformarse en todas o cualquiera de sus partes? ¿Podría mu-


tarse la Constitución?. La mayoría de la doctrina sostiene que la reforma siempre es par-
cial, Germán Bidart Campos habla de contenidos pétreos, como aquellos que no pueden
alterarse sin correr el riesgo de ingresar a una revolución y no a una reforma. Es más se
interpreta que reformar es dar nueva forma, reformular lo que ha existe.

Para un mejor estudio consideramos dos etapas: 1) preconstituyente y 2) De reforma


constitucional propiamente dicha.

1) Etapa preconstituyente: según el Artículo 30, la necesidad de la reforma debe ser de-
clarada por el Congreso de la Nación, con el voto al menos del voto de las dos terceras
partes de sus miembros.

Se suscitan varias cuestiones la declaración debe tener forma de ley, y esa ley requiere
una mayoría calificada de dos tercios. También se ha discutido la forma de computar estas
cifras.

La ley declarativa debe contener el límite material (los artículos a reformar) el límite tem-
poral, es decir en cuanto tiempo de debe cumplir con la tarea. La cantidad y forma de
elección de los convencionales constituyentes. Lugar de deliberación, presupuesto entre
otras.

2) La etapa de reforma propiamente dicha está a cargo de la Convención Nacional Cons-


tituyente, cuerpo colegiado especialmente electo por el pueblo que tiene a su cargo la
reforma del texto constitucional, según el límite material y temporal impuesto por la ley
declarativa

SUPREMACÍA CONSTITUCIONAL
Según el avance de nuestra lectura, estamos en condiciones de abordar uno de los pi-
lares que sostienen a la Constitución Nacional como Ley Suprema o Super Ley, de modo
de dota al sistema de un cierre sistemático que permita supeditar al arbitro de la norma
suprema toda otra norma o acto de autoridad o de particulares que pudiera afectar esta
garantía de garantías.

Es necesario entonces no solo definir a la constitución de la nación como Super Ley,


sino que también es menester cimentar una estructura capaz de sostener en los hechos
su superioridad. De alli que nos adentramos a estudiar lo referido a la supremacía Consti-
tucional.

A. ANTECEDENTES Y DOCTRINA

Este Instituto supone la existencia de una Ley suprema o Superley, a la que debe ade-
cuarse todo el sistema jurídico del Estado.

Este principio tiene su fundamento en la distinción entre Poder Constituyente y Poder


Constituído (Abate Sieyés). En efecto la Norma Suprema emana del Poder Constituyente
como manifestación soberana del pueblo de dictarse su ordenamiento jurídico, político,
institucional. Esta instancia fundacional requiere un proceso y un órgano especial para su
dictado primero y para ser reformado. Qué sucedería si una sola ley o un acto de autoridad
o de particulares pudiera ser contrario a la constitución en su forma o en su contenido y aún
así tuviera vigencia y aplicación efectiva?, no estaríamos desvirtuando con esa permisión
toda la construcción jurídico-política desde el siglo XVII a la actualidad, destinada a prote-
ger la dignidad del hombre?

Este principio de supremacía en un Estado Federal se vincula a la concordancia y cohe-


rencia de una graduación de normas, incluso las del orden provincial (artículo 5).
La legislación no solo debe conformarse a la Constitución Nacional , sino también a los
tratados internacionales.
Este instituto encuentra antecedente en el Artículo VI de la Constitución de Estados
Unidos.

RECEPCION EN LA CONSTITUCION ARGENTINA

Artículo 31: Esta constitución, las leyes de la Nación que en su consecuencia se dicten
por el congreso y los tratados con las potencias extranjeras son la ley suprema de la Na-
ción; y las autoridades de cada provincia están obligadas a conformarse a ellas, no obstante
cualquier disposición en contrario que obtengan las leyes o constituciones provinciales.

La disposición contenida en este artículo ha sufrido una modificación en cuanto a la gra-


dación jerárquica de normas, según el trato que la reforma constitucional de 1994 ha dado
a los tratados internacionales. Podemos en consecuencia establecer un orden jerárquico
antes o después de la reforma constitucional

Antes de la vigencia de la reforma constitucional de 1994:

1) Esta Constitución
2) Las leyes Nacionales, que en su consecuencia se dicten y los Tratados con las potencias
extranjeras – Negociados y firmados por el P.E., aprobados por el Congreso, ratificados en
sede internacional. Artículo 27
3) Orden jurídico provincial

Nuevo esquema de supremacía constitucional después de la reforma de 1994:

1) Constitución Nacional y Tratados de Derechos Humanos enumerados en el Artículo


75 inciso 22. Y otros que se incorporen en las condiciones de su vigencia tienen jerarquía
Constitucional pero no derogan artículo alguno de la primera parte de la Constitución y
deben entenderse complementarios de los derechos y garantías por ella reconocidos. Sólo
pueden denunciarse por el Poder Ejecutivo previo el voto de las 2/3 partes de los miembros
totales de cada Cámara los futuros tratados de Derechos Humanos requieren para gozar
de esta categoría la aprobación de las 2/3 partes de los votos totales de cada Cámara.

2) Todo otro tratado internacional y concordatos con la Santa Sede.

a) Tratados de Integración: Leer inciso 24. Tratamiento distinto para aquellos con Latino-
américa mayoría absoluta de la totalidad los miembros de cada Cámara.

Para otros Estados: El congreso declara la conveniencia de su aprobación con mayoría


absoluta de los presentes de cada Cámara y dentro de los 120 días posteriores debe ser
aprobado por los 2/3 de la totalidad de miembros de cada Cámara.

b) Tratados y Concordatos comunes: Se aprueban por el procedimiento normal para el


dictado y sanción de las leyes, y tienen jerarquía superior a las leyes.

3) Las leyes de la Nación .

4) Orden jurídico Provincial

LA CONSTITUCION COMO PACTO O TRANSACCION

En cuanto abordamos este tema es inevitable vincularlo con las teorías contractualistas
(Siglos XVII y XVIII) que en autores tan disímiles como Tomas Hobbes (1681), John Locke
(1690), J.J.Rouseau (1762), Montesquieu (1748), por medio de una ficción explican el paso
del estado natural del hombre al estado social. A fin de superar el principio de la fuerza
como eje de organización, logran por medio de un contrato suscripto por los hombres, un
acuerdo para investir de autoridad a uno o algunos, a fin que estos dicten las normas de
convivencia social y provean a la seguridad.

Para los contractualistas es el pacto social el que permite crear las reglas de conviven-
cia en que se asienta el Estado de Derecho, todos ceden y todos tienen como garantía el
cumplimiento del acuerdo. Base también del principio de soberanía popular, la creación
de la autoridad y el resguardo del espacio de libertad del hombre, todos principios básicos
incluidos dentro de este marco de deber ser.

Vinculada a estas ideas, la teoría Constitucional concibe a la Constitución de la Nación


como norma suprema destinada a regir la organización del Estado y de la sociedad, que
debe ser fruto del consenso, del acuerdo o pacto transaccional, reflejo de la ideología e
idiosincrasia del pueblo que la dicta, de allí que sea producto del Poder Constituyente como
manifestación directa de la voluntad popular.

En la Constitución deben amalgamarse todos los valores, fines, aspiraciones, garantías,


que son características de un pueblo, lo que sólo puede lograrse por medio del acuerdo,
construyendo el país anhelado para el presente y el futuro en el devenir del tiempo. En
estas ideas coincidimos con César Enrique Romero15 cuando pronuncia que no cree en
el fin de las ideologías, la Constitución está imbuida de ideología y valor en todas y cada
una de sus cláusulas.

De allí el necesario debate, el acercamiento de posturas encontradas y afines de todos


los sectores políticos y sociales, a fin que cada uno se vea reflejado en los postulados cons-
titucionales, se identifique con su sentido y espíritu, a sabiendas que el producto final nunca
será el total de las aspiraciones de un sector, sino el suficiente que surge de la cesión de
parte de lo ambicionado para lograr el proyecto compartido, común.

En definitiva hablamos de una construcción social histórica, de un proceso de amalga-


miento, hay coincidencias en estudiosos de los ámbitos jurídicos, políticos e históricos, que
nuestro proceso institucional ha sido harto complejo y conflictivo.

Por el contrario, si la constitución no es producto del acuerdo, del consenso, del pacto
está predestinada a fracasar, no encuentra el punto de su vigor, validez y vigencia.

Para probar esta teoría no es necesario recurrir a ejemplos de laboratorio, basta con
repasar nuestra historia institucional, teniendo en cuenta los avatares políticos y organiza-
cionales por los que pasamos para llegar al dictado de la primera Constitución, a su plena
vigencia y las situaciones particulares de cada proceso de reforma constitucional.

CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD

César Enrique Romero – Derecho Constitucional – Tomo I – Zavalía 1976- “Pensamos en la lógica com-
15.

patibilidad de norma y creencia o ideología, entendida ésta como conjunto de factores conformantes de una
concepción del mundo y de la vida enderezada a esclarecer o explicar la organización el ejercicio y los objetivos
del poder político en la sociedad”- Pag 51

[Escriba texto]
Concordante con la teoría de Supremacía Constitucional se concatena el instituto de
Control de Constitucionalidad

Esta práctica surge por la acción de la Corte Suprema de Justicia de los Estados Unidos
de Norte América, cuando el Presidente de la Corte de EE.UU. Marshall, en el fallo “Mar-
bury vs. Madison” fundamentó esta teoría.

Se basa en el fundamento que todo acto legislativo que es contrario a la constitución no


puede aplicarse al caso concreto debiendo prevalecer la Constitución. Caso contrario una
ley modificaría su contenido.

En el Derecho Constitucional comparado se registran dos sistemas de control:

1) Control por un Órgano Político


Se inviste de competencia para efectuar el control al mismo órgano que dicta la Ley o
un apéndice de este.

Constitución de Francia de 1958 disponía el control por un Consejo de Constitucionali-


dad.

2) Control por un Órgano Jurisdiccional


Sistema Argentino. A cargo de los jueces en el caso concreto, por cualquier juez por
medio del Artículo 14 de la ley 48. (control difuso) O a través de tribunales especiales de
constitucionalidad España Alta Corte Constitucional. (control concentrado)

SISTEMA JUDICIAL ARGENTINO


Es jurisdiccional y a está a cargo de los jueces del país.
Regulación procesal es el recurso extraordinario Arts. 14 y 16 de la ley 48.

Artículo 43 de la Constitución Nacional que dispone al regular la acción de amparo que


es el juez quien podrá declarar la inconstitucionalidad de la norma en que se funde el acto
u omisión lesivo, de lo que se colige:
1) El Poder Judicial es el custodio de la Constitución.
2) El Poder Judicial no decide en causas políticas. Facultades privativas de cada poder.
3) Presunción de constitucionalidad de los actos públicos, solo son inaplicables para el
caso concreto y previa declaración judicial
4) Las cuestiones federales son siempre de derecho (salvo sentencia arbitraria)

REQUISITOS Y EXCEPCIONES

1) Debe existir un caso concreto Art. 116 Constitución Nacional causas y juicio.
2) Existencia de un interés legítimo .
3) Planteamiento Oportuno, en la primera oportunidad procesal . Reserva del Caso Federal
fundada.
4) No procede la declaración de oficio.
5) El recurso debe ser fundado

FORMAS

Puede plantearse en el orden federal u ordinario como acción o excepción o sea al de-
mandar o contestar la demanda.

En el Derecho público provincial se ha legislado sobre acción autónoma de inconstitucio-


nalidad, de un modo directo y no como anexo a un juicio.

EFECTOS

En nuestro sistema es Inter. Partes es decir solo para el caso concreto planteado.

ANTECEDENTES HISTORICOS
Antes de 1853 regía en nuestro país una precaria organización, graficada en una co-
hesión de carácter histórico y sociológico, caracterizada por una fuerte disputa de poder
y preeminencia entre las provincias cuyos planteos tampoco eran uniformes entre sí y el
puerto de Buenos Aires.

Desde la Revolución de Mayo en 1810, se produce permanentemente la búsqueda de un


instrumento jurídico que dotara a la Nación de la tan ansiada “Constitución Jurídica”, enten-
dida como un conjunto de normas fundamentales, codificadas, que regulara el total de la
actividad del Estado. Sin embargo décadas de lucha por el control del poder condujeron a
guerras civiles que impedían el acuerdo necesario para llegar a la definitiva organización.

Son rescatables diversos avances como la Asamblea de 1813, que si bien logra consagrar
importantes principios de organización, no logra la declaración de la independencia, con-
sagrada luego en 1816; o los intentos constitucionales de 1819 o 1826, que no logran ser
aplicados a la práctica porque sectores mayoritarios de la sociedad y los actores políticos
resistieron los programas de organización que respondían a una estructura centralizada de
poder, mientras que la mayoría de las provincia reclamaban una organización federal.

El advenimiento del gobierno de Juan Manuel de Rosas paralizó el intento del dictado de
una norma de organización, hecho que tiene fuerte influencia en el derrocamiento de Juan
Manuel de Rosas por parte de las tropas del General Justo José de Urquiza, en la batalla
de Caseros del 03 de febrero de 1852, episodio que finaliza con el acuerdo de San Nicolás,
suscripto el 31 de mayo de 1852, y el posterior dictado de la Constitución de 1853 bajo los
preceptos del Pacto Federal de 1831 celebrado el 04 de enero de 1831.

Aunque fuera respetuosa de los acuerdos a los que arribaran los gobernadores-caudillos
de las provincias, inspirada en el pensamiento de la generación de 1837 especialmente
Juan Bautista Alberdi, y guiada por el modelo de la constitución Norteamericana, fue resis-
tida por la provincia de Buenos Aires que se separa de la confederación formando gobierno
propio.
Se reinician los enfrentamientos y recién después de la victoria del General Urquiza en la
Batalla de Cepeda del 23 de octubre de 1859, se suscribe el pacto de San José de Flores,
por el que se permite la primera revisión del texto originario de la Constitución y la reincor-
poración de la provincia de Buenos Aires.

Luego de esta primera reforma Constitucional en 1860 prácticamente redactada por Do-
mingo Faustino Sarmiento y Dalmacio Velez Sarsfield, deviene una etapa de relativa esta-
bilidad política e institucional en el país.

Progresivamente el programa contenido en la Constitución Nacional va plasmándose en


la legislación y en la organización de los poderes del Estado pero la existencia de normas
que regularan de manera tendenciosa la materia electoral, el carácter del voto y la organi-
zación de los partidos políticos, permitió que una clase política dominante se consagrara
como única rectora de la conducción política del país, sucediéndose gobiernos con un mero
viso formal de legalidad.

Como respuesta a la permanente resistencia y lucha de amplios sectores marginados,


se dicta una ley de raigambre Constitucional en 1912, la ley Nº 8.871 llamada ley Saenz
Peña en honor al Presidente que la promulgó, cuyo objetivo fue garantizar el voto univer-
sal, secreto y obligatorio.

Este orden jurídico logrado produce el advenimiento al poder de un partido de raigambre


popular, la Unión Cívica Radical, con la asunción como presidente de Hipólito Irigoyen,
(1916-1922) sucedido por el Presidente Marcelo Torcuato de Alvear (1922-1928). En 1928
comienza la segunda presidencia del líder radical la que el 6 de setiembre de 1930 se ve
truncada sufriendo el sistema su primer quiebre con el derrocamiento del Presidente Hi-
pólito Irigoyen, inciandose una etapa en que se suceden gobierno electos y desarrollados
en el marco de la Constitución, alternados con golpes de Estado de origen castrense que
incumplían la constitución dictando estatutos de organización que la suplían, recordamos
los producidos en 1943, 1955, 1962, 1966 y 1976.

Al respecto, Alberto García Lema16 sostiene que desde 1930 se opera un proceso de
desconstitucionalización que se profundiza por una serie de elementos, y que puede me-
surarse por la precariedad medida en el tiempo del régimen democrático, en el que el sis-
tema institucional funcionó solo durante un total de treinta y cuatro años (alternados) desde
los ciento cuarenta años que corren desde 1853 hasta 1993.

En la permanente búsqueda de reafirmaciones institucionales, en conjunto con aspira-


ciones a mayores porciones de poder, existieron desde 1860 diversas reformas al texto
constitucional, las dos primeras, de 1866 y 1898 fueron de carácter técnico y de menor
importancia, pero las dos grandes reformas de nuestro siglo, que precedieron a la última,
merecen un análisis más detenido, ya que a pesar de haber sido intentos de reformas sus-
tanciales, ambas fracasaron.

En efecto, prácticamente a mediados de este siglo se produjeron dos reformas consti-

Alberto García Lema – La Reforma Por Dentro – Planeta 1994- Entre los factores citamos “ 1) La extensión
16.

de las facultades sumidas por los gobiernos de facto, que aumentaron progresivamente desde 1930. 2) El
crecimiento del tiempo de duración de los gobiernos militares. 3) El funcionamiento habitual del sistema de
emergencia del Estado de sitio. 4) el progresivo desconocimiento de los derechos y garantías individuales. 5)
El crecimiento de la actividad de factores de poder y grupos de presión, poniendo a país en los bordes de una

anarquía social y caos generalizado”


tucionales que tuvieron en común la falta de acuerdo o consenso necesario: la de 1949
impulsada por el gobierno de Juan Domingo Perón bajo la ley declarativa Nº 13.233 dictada
sin alcanzar las mayorías calificadas exigidas por el artículo 30 de la Constitución Nacional,
en esta oportunidad se produce una reforma global del texto, con importantes cambios
institucionales, nuevas declaraciones de derechos individuales, la incorporación del consti-
tucionalismo social, reformas institucionales en la organización del poder y la posibilidad de
la reelección presidencial dentro de un marcado fortalecimiento del presidencialismo. Este
intento propiciado por el “peronismo” no contó con la adhesión del “antiperonismo” por lo
que fracasó y fue derogada por un bando militar del gobierno que asume luego del golpe
de estado de 1955.

En el año 1957 no existía Congreso y en virtud de un decreto ley del Poder ejecutivo de
facto se convocó a una convención reformadora llevada a cabo por el “antiperonismo” con
proscripción del peronismo. A pesar de que se encontraban habilitadas diversas modifi-
caciones, por la ilegitimidad y la falta de consenso, solo se logró sancionar como texto el
artículo 14 bis, por el que se incorporan los principios del constitucionalismo social.

Otra instancia institucional fue la enmienda de 1972 que se alumbró en el gobierno de


facto a cargo del General Alejandro Agustín Lanusse que se aplicó solo para la elección
de 1973, período democrático que se trunca con otro golpe de estado el 24 de marzo de
1976.

Como vemos existe una razón más que teórica al afirmar que la norma Constitucional
solo puede afirmarse en la voluntad común, compartida por el pueblo cuyos destinos está
destinada a regir. Siempre que se impuso un sector sobre otro, solo se logró un texto for-
mal de acotada vigencia espacial y temporal.

Teniendo en cuenta el traumático proceso histórico, político e institucional que sufrió


nuestro país y ante la gravedad de los hechos, que se producen en el último gobierno
castrense, desde 1976 hasta 1983, la ciudadanía y la dirigencia de los partidos políticos
en forma mayoritaria, advierten la necesidad de afirmar un sistema que permita garantizar
el Estado de Derecho como condición indispensable de desarrollo del país en todos los
ámbitos, tanto nacionales como internacionales y que garantizara internamente un marco
de convivencia social.

Los partidos Políticos mayoritarios, el Radicalismo y el Justicialismo, comienzan a tomar


el camino del diálogo a fin de buscar el consenso necesario para la reforma institucional,
en ese sentido encontramos el primer antecedente histórico en la reunión que se produce
el 14 de diciembre de 1973, en Gaspar Campos, entre el líder justicialista Juan Domingo
Perón y el líder radical Ricardo Balbín. Como consecuencia de la misma, el Presidente
Perón en abril de 1974 creó una comisión especial encargada del estudio del tema. Los
hechos históricos posteriores impidieron su concreción.

A fines de 1985 el Presidente Raúl Ricardo Alfonsín17 retoma el desafío, era imprescin-
dible poner fin con la permanente sucesión de gobiernos democráticos y golpes de estado

21
Raúl Ricardo Alfonsín – Democracia y Concenso – Corregidor 1996 “Se debe iniciar una convergencia de
17.

fuerzas que se planteara como meta modernizar a la Argentina en términos de eficiencia pero también en tér-
minos de una democratización fundamental en la sociedad y en el Estado, en la economía y en la cultura. Una
modernización capaz de introducir en todos esos ámbitos experiencias de gestión compartida que considera-
ran al hombre como el principal protagonista de la sociedad y ampliaran a democracia hasta el nivel de la vida
cotidiana”. Pag 141
instaurándose prolongados gobiernos de facto, esto sólo se podía lograr por medio de un
acuerdo político institucional, capaz de modificar la historia de desencuentros y pérdida de
calidad institucional.

Persiguiendo estos objetivos crea el Consejo para la Consolidación de la Democracia,-


Decreto 2446/85 - conformado por juristas de los partidos políticos, por miembros relevan-
tes de la sociedad, del mundo de la ciencia y del arte, quienes bajo la presidencia del Dr.
Carlos Santiago Nino, toman el desafío de aconsejar a la Presidencia de la Nación sobre
la forma de sostener y fortalecer el sistema democrático. En ese sentido produce dos dictá-
menes en los que se aconseja reformas institucionales sustanciales, resaltando el Segundo
Dictámen en que directamente recomienda la reforma de la Constitución Nacional.

Sobre esta reforma no se pudo avanzar ya que en la elección de 1987 para la renova-
ción parcial del Congreso de la Nación, la Unión Cívica Radical pierde escaños, haciéndo-
se imposible propiciar una ley declarativa de necesidad.

En 1989 asume a presidencia el Dr. Carlos Saúl Menem, quien desde el año 1991 retoma
el tema de la reforma constitucional, pero con diferencias respecto al régimen propiciado
por el Radicalismo. En efecto mientras que el Justicialismo pretendía mantener un sistema
presidencialista, el Radicalismo pugnaba por avanzar hacia un parlamentarismo atenua-
do.

Se desarrollaron desde el gobierno iniciativas tanto políticas como jurídicas con el fin


de apurar la reforma, la reelección presidencial solo podía lograrse de este modo. En ese
sentido se dicta los decretos Nº 2181/93 – 2258/93 por los que el Presidente convoca a
consulta popular voluntaria y no vinculante sobre el tema y tiene ingreso un proyecto de
ley reglamentario del Artículo 30 de la Constitución Nacional, por el cual se exigiría para
probar la ley Declarativa el voto afirmativo de los dos tercios de miembros presentes de
cada Cámara.

No obstante el diálogo entre las fuerzas políticas no se había interrumpido y el 4 de no-


viembre de 1993 se concreta una reunión entre el presidente en ejercicio y el líder de la
Unión Cívica Radical, que concluye con al firma del llamado “Pacto de Olivos” suscripto por
ambos el 14 de noviembre del mismo año.

En el acuerdo ambos se comprometen a propiciar una reforma Constitucional que dejara


incólume la primera parte de la Constitución Nacional en su texto originario, pero que con-
solidara el sistema democrático y perfeccionara el equilibrio entre los poderes del Estado,
que afianzara la independencia de la justicia y fortaleciera los órganos de control, que
garantizara la plena vigencia de los derechos humanos, que rediseñara el régimen federal
para favorecer el progreso y desarrollo económico de provincias y regiones y que favore-
ciera la integración latinoamericana y continental.

Con miras a la ley declarativa de la necesidad de la reforma, se mantienen diversas re-


uniones entre juristas y políticos delegados por ambas fuerzas y se logra la redacción del
22
Acuerdo Para la Reforma de la Constitución Nacional, suscripto en Buenos aires el 13 de
diciembre de 1993, en el se proyectan dos partes bien diferenciadas: una llamada Núcleo
de Coincidencias Básicas sobre el pesaba el compromiso de incorporarlo al texto consti-
tucional sin posibilidad de modificaciones, que debía ser votado en su conjunto como un
sistema en todo por sí o por no, no pudiendo desglosarse ninguna de sus cláusulas y otra
parte que contenía una serie de temas habilitados sobre los que los Partidos Políticos parti-
cipantes de la Convención Nacional Reformadora podían efectuar propuestas libremente.

Este acuerdo recibió críticas de los partidos no participantes del mismo, que calificaron
al acuerdo, sobre todo al Núcleo de Coincidencias Básicas como un pacto espurio una,
componenda entre socios, logrado a espaldas del pueblo. Por otra parte como la redacción
del acuerdo, que debía incorporarse a la ley declarativa, avanzaba no solo en los artículos
habilitados para la reforma sino sobre su contenido, algunos estudiosos consideraban que
el Congreso avanzaba sobre el límite material impuesto a la Convención Reformadora,
extralimitándose en su misión.

Dentro de este marco se dictó la Ley Declarativa de la Reforma Constitucional Nº 24.309,


que incorpora en su texto el acuerdo previo. Obtuvo en el Congreso de la Nación una can-
tidad mayor al voto de las dos terceras partes de los miembros totales de cada una de las
Cámaras; según sus disposiciones se eligieron 305 Convencionales Constituyente repre-
sentativos de todos los partidos políticos reconocidos, tanto nacionales como provinciales.
En virtud de la aplicación de la ley de cupo o cuotas se integraron a este cuero colegiado 80
mujeres. Por razones históricas la sede de la Convención se fijó en las ciudades de Santa
Fé y Paraná. Las deliberaciones comenzaron el 25 de mayo de 1994 y concluyeron con la
jura de la Constitución el 24 de agosto de 1994 en e Palacio San José de Concepción del
Uruguay.

REFORMA CONSTITUCIONAL DE 1994


Como aporte se agrega un trabajo especialmente redactado para los alumnos de esta
universidad que trata las modificaciones producidas por la última reforma constitucional.

LAS REFORMAS AL TEXTO CONSTITUCIONAL

Para un mejor análisis es conveniente distinguir entre aquellas modificaciones e incorpo-


raciones contenidas en el llamado Núcleo de Coincidencias Básicas, sobre el que pesaba
acuerdo previo por parte de los dos partidos políticos mayoritarios, sobre el que pesaba el
compromiso de votarlos en conjunto, de aquellos temas que habían sido habilitados para el
libre debate y tratamiento individual.

REFORMAS CONTENIDAS DENTRO DEL NÚCLEO DE COINCIDENCIAS BÁSICAS

Esta parte contenía doce puntos centrales destinados a rediseñar la estructura del poder
del Estado recreando el régimen republicano, con el objeto de atenuar el sistema presi-
dencialista, y lograr un nuevo equilibrio de poder y control, de pesos y contrapesos al decir
23
de Montesquieu. Por ello se trato:

A) Atenuación del Sistema Presidencialista

Se crea la figura del Jefe de Gabinete de Ministros, designado y removido por el Presi-
dente de la Nación, con responsabilidad política ante el congreso de a Nación quien tam-
bién puede removerlo mediante interpelación y voto de censura, actuales artículos 100,
101.

Sus atribuciones se detallan en el artículo 100, con 13 incisos que lo transforman en una
figura con atribuciones Constitucionales semejantes a la de un jefe de la administración,
con funciones políticas que recibe de las que se reducen del Presidente, ejerciendo ade-
más atribuciones propias que fueran del Presidente, ya que tiene a su cargo la administra-
ción general de país, y detenta otras que le son delegadas. Tiene el debe de concurrir por
le menos una vez al mes al Congreso para informar de la marcha del gobierno, puede ser
interpelado y removido por el voto de la mayoría absoluta de los miembros de cada una de
las Cámaras, con lo que constituye en el fusible de cambio en épocas de crisis.

Consecuentemente se modificaron también atribuciones del Presidente, contenidas ac-


tualmente en el artículo 99, se prohíbe emitir disposiciones de carácter legislativo, decretos
de necesidad y urgencia, salvo situaciones extraordinarias.

B) Reducción del mandato del Presidente y Vicepresidente de la Nación

Se reduce el mandato del Presidente de seis a cuatro años con la posibilidad de reelec-
ción por un solo período consecutivo, y luego con el intervalo de un período Artículo 94.
Cabe destacar que el mandato presidencial en curso al tiempo de la reforma fue conside-
rado como primero a los fines de la reelección, quedando así consagrado en la novena
cláusula transitoria.

C) Se elimina el requisito confesional para ser Presidente.

A fin de consagrar la libertad de cultos se eliminó el requisito confesional para ser presi-


dente de la nación y consecuentemente se modificó el juramento del mismo – Artículos 89
y 93.

D) Elección directa de tres Senadores, por cada Provincia y la Ciudad de Buenos Aires

Se modifica la estructura del senado, incorporándose tres senadores por cada provincia y
la ciudad de Buenos Aires, con un sistema de elección directa, asignándose dos bancas al
partido político más votado y la tercera al que le sigue, Artículo 54. Se reduce el mandato
de senador de nueve a seis años renovándose el cuerpo a razón de una tercera parte de
los distritos electorales cada dos años (Artículo 56) y cláusula transitoria cuarta.

E) Elección directa del Presidente y vicepresidente de la Nación

24
Se modificó también el sistema electoral de presidente y vicepresidente, tal como lo dis-
pone el Artículo 94 se elegirán en forma directa por el pueblo y en doble vuelta electoral.

F) Elección directa del Intendente y reforma de la ciudad de Buenos Aires

Se dispone dotar de un status especial a la Ciudad de Buenos Aires, que se conserva


como Capital Federal y asiento de las autoridades de la Nación, en ese sentido se dispone
en el Artículo 129 un régimen de gobierno autónomo con facultades propias de legislación y
jurisdicción y la elección de su Jefe de gobierno en forma directa por el pueblo. Cabe acotar
que la ciudad de Buenos Aires ya dictó el Estatuto de Organización de sus Instituciones,
que tiene el rango de una Constitución Provincial, incorporándose la más moderna tenden-
cia del derecho público provincial.

G) Regulación de la facultad presidencial de dictar decretos de necesidad y urgencia


y procedimientos para agilización del trámite de discusión y sanción de las leyes

Bajo este marco se prohibió el dictado de decretos de necesidad y urgencia, excepto que
excepcionales circunstancias hicieran imposible seguir los trámites ordinarios para la san-
ción de las leyes y no se trate de normas que regulen materia penal, tributaria, electoral o
el régimen de los partidos políticos (Artículo 99 inciso 3), también se prohibió la delegación
legislativa a favor del Presidente, (Artículo 76). Se modificó el procedimiento de formación
y sanción de las leyes para agilizarlo, limitando a tres las intervenciones posibles de las
cámaras, a tal fin se modificó todo el capítulo quinto desde el Artículo 77 en adelante. Se
extendió el período ordinario de sesiones iniciándose el 1º de marzo y concluyendo el 30
de noviembre.

H) Consejo de la Magistratura

Dentro de las reformas al Poder Judicial se dispuso la creación del consejo de la Ma-
gistratura (Artículo 114) cuya atribución principal será a de seleccionar los magistrados
judiciales y la administración del Poder Judicial, se detallan también otras facultades de
este cuero, que tiene también a su cargo la administración de los recursos y la ejecución del
presupuesto, facultades disciplinarias, apertura del proceso de remoción de magistrados
inferiores y el dictado de reglamentos relacionados con la organización judicial. También se
crea por el artículo 115 el Jurado de enjuiciamiento a los fines de la remoción de magis-
trados inferiores.

I) Designación del los Magistrados Federales

Se dispone el sistema de designación de los ministros de la Corte Suprema de la Nación


por medio de pliego enviado por el Presidente de la Nación al Senado quien aprueba la
propuesta con el voto de las dos terceras partes de los miembros presentes del cuerpo y la
designación de los demás jueces por medio de ternas vinculantes previamente selecciona-
das por el consejo de la Magistratura, con acuerdo del Senado en sesión pública

25
J) Remoción de Magistrados Federales

Se sostiene el Juicio político como mecanismo de remoción de los miembros de la Corte


y se dispone la creación del Jurado de Enjuiciamiento para remoción de jueces inferiores
cuyo proceso se inicia a instancia del consejo de la Magistratura (Artículo 115).

K) Control de la Administración Pública

En lo relativo la control de la administración publica, se dispone el control externo de


sector público nacional en su faz patrimonial, económica, financiera y operativa, creándose
la Auditoría General de la Nación, como órgano con autonomía funcional y de asistencia
técnica del Congreso, encabezado por un miembro de la oposición, cuya regulación se
encuentra en el Artículo 85 y siguientes.

L) Establecimiento de mayorías Especiales Para la Sanción de Leyes que Modifiquen


el Régimen Electoral y de Partidos Políticos.

Esta propuesta se redactó y trató en el seno de la Comisión de Núcleo de Coincidencias


Básicas y en la comisión de Redacción, votado por el plenario, pero por un error formal no
se incluyó en el texto final de la Constitución. Esta omisión se corrigió por medio del Con-
greso quien por ley mandó imprimir una versión oficial del texto constitucional rescatando
esta norma que quedó incluida como segunda parte del artículo 77, por ella se dispone la
exigencia de mayoría absoluta del total de los miembros de las Cámaras para modificar los
temas atinentes al Régimen electoral y de Partidos Políticos.

LL) Intervención Federal

Como último punto del Núcleo de Coincidencias Básicas se dispone regular la inter-
vención federal a las provincias, quedando como atribución exclusiva del Congreso, salvo
receso y urgencia.

Hasta aquí los temas incluidos en el Núcleo de Coincidencias Básicas, que se planificó
como un sistema completo e integrado de partes inescindibles.

TEMAS HABILITADOS PARA SU DEBATE POR LA CONVENCION CONSTITUYENTE

A) Fortalecimiento del Régimen Federal

Dentro de los temas habilitados para su debate y tratamiento individual encontramos: los
relativos al fortalecimiento del federalismo, para lo que se introducen sustanciales reformas
al Título Segundo sobre Gobierno de Provincias, así en el Artículo 124 se posibilita la crea-
ción de regiones, por la sola voluntad de las Provincias, así en este el artículo se posibilita
la creación de regiones, por la sola voluntad de las Provincias y con el deber de comunica-
ción al Congreso de la Nación. Esta norma ya se ha aplicado como en el caso de la creción
en 1996 la Región de la Patagonia y en 1998 La Región Cetro del País.

26
Se dispuso el dominio de las provincias sobre los recursos naturales que se encuentran
en su territorio- artículo 124- y la jurisdicción provincial sobre establecimientos de utilidad
ública.

Según el artículo 125 las provincias pueden celebrar entre sí tratados parciales con co-
nocimiento del Congreso, salvo que sean de carácter político.

Dentro del fortalecimiento del Régimen Federal se modifican incisos del actual artículo
75, que legisla sobre atribuciones del Congreso, determinándose un nuevo régimen de
coparticipación impositiva entre la Nación y Provincias – inciso 2_.

B) Autonomía Municipal

Se reglamenta la Autonomía Municipal, dotándola de alcance y contenido en el orden


institucional, político, administrativo, económico y financiero, tal como lo establece el actual
artículo 123.

C) Posibilidad de Incorporación de la Iniciativa y de la Consulta Popular

Ambos institutos se incorporaron en el Capítulo nuevo de Derechos y Garantías en los


Artículos 39 y 40 respectivamente

D) Posibilidad de Establecer el Acuerdo del Senado para la Designación de Funcio-


narios de Organismos de Control y del Banco Central

En este sentido el Artículo 85 exige que su presidente sea designado a propuesta del par-
tido político de la oposición. También se crea la figura del Defensor del Pueblo, incorporado
en el Artículo 86, quien es designado y removido por el Congreso.

Si bien, en la Constitución Nacional no se incorpora el necesario acuerdo del Senado


para designación del Presidente del Banco Central, esta disposición se incluyó en la ley
orgánica de la entidad.

E) Actualizar las Facultades del Congreso previstas en los artículos 67 y del Presi-
dente de la Nación artículo 86.

Sobre este tema, a cargo de la Comisión de Redacción se planteó un debate interesante,


ya que una parte de la misma sostenía la tesis que actualizar debía se interpretado con un
sentido restringido, es decir limitar la reforma al lenguaje utilizado, eliminado o suplantan-
do los términos en desuso y no al contenido de las atribuciones, felizmente prevaleció el
criterio amplio y se produjo una actualización importante, como ejemplo citamos el actual
inciso 12, ,16, 18, 19, 23 entre otros del Artículo 75, redactándose nuevamente la llamada
cláusula del progreso, el régimen de la educación, se incluyó expresamente la autonomía
de las universidades, se dispuso el dictado de medidas de acción positiva para garantizar la
igualdad efectiva de oportunidades, entre otras. También se produce la modificación com-
pleta del actual artículo 99 que trata sobre las atribuciones del Presidente de la Nación, las
27
que debieron adecuarse a la inclusión de la figura del Jefe de Gabinete de Ministros.

F) Establecer el Defensor del Pueblo

Que queda incorporado en el Artículo 86, creándose como un órgano independiente ins-
tituido en el ámbito del congreso de la Nación, con autonomía funcional, destacándose que
para cumplir con la misión de defender y proteger los derechos humanos y demás dere-
chos, garantías e intereses tutelados, tiene legitimación procesal.

G) Ministerio Público como Organo Extrapoder

Que queda incorporado en el artículo 120, se le otorga autonomía funcional y autarquía


financiera, cuya función radica en promover la actuación de la justicia en defensa de la
legalidad de los intereses generales de la sociedad. Integrado por un Procurador General
de la Nación y un Defensor General de la Nación. Sus miembros gozan de inmunidades
funcionales e intangibilidad de remuneraciones.

H) Facultar al Congreso respecto de pedidos de Informes, Interpelaciones y Comisio-


nes de Investigación

Actual Artículo 71, 101.

I) Instituciones para la Integración y Jerarquía de los Tratados Internacionales

Este tema merece un tratamiento especial, incluido en el Artículo 75 inciso 22, dispo-
niéndose como atribución del Congreso aprobar o desechar tratados internacionales con la
Santa Sede, hasta aquí el texto original, pero a continuación se sienta el principio general
que todo tratado internacional o concordato con la Santa Sede aprobado por el Congreso
adquiere jerarquía superior a las leyes. Es destacable que con esta disposición se respeta
la Convención de Viena en cuanto impide que un Estado firmante de un tratado lo inclumpla
aduciendo normativa interna.

En el segundo párrafo del inciso se incluye una excepción a este principio en cuanto
incorporaron con rango constitucional diez tratados y convenciones internacionales de pro-
tección a derechos humanos, transformando a nuestra Constitución en una de las más am-
plias en la materia No solo se amplían los derechos consagrados en el texto originario sino
que también se engloban las garantías para hacerlos efectivos, posibilitándose el recurrir
ante cortes internacionales en caso de desconocimiento o falta de cumplimiento por parte
de los órganos jurisdiccionales del Estado Nacional.

En el inciso 24 del Artículo 75 se faculta al Congreso para aprobar tratados internaciona-


les de integración, con naciones latinoamericanas o con otras naciones.

J) Garantías de la Democracia en cuanto a la Regulación Constitucional de los Parti-


dos Políticos, Sistema Electoral y Defensa del Orden Constitucional

28
Estos temas se incorporaron en un Segundo Capítulo dentro de la Primera Parte, titula-
do Nuevos Derechos y Garantías, iniciándose este capítulo con el Artículo 36, que incluye
la llamada garantía del sistema democrático, luego en el Articulo 37 se legisla sobre los
derechos políticos, determinando el carácter del sufragio como universal, igual, secreto y
obligatorio. El Artículo 38 reconoce y regula los partidos políticos.

K) Preservación del Medio Ambiente

Por esta cláusula se consagra en el nuevo Artículo 41, que incluye el derecho de todo
habitante a gozar de un ambiente sano, apto para el desarrollo humano, preservando los
recursos naturales no solo para generaciones presentes, sino también futuras. Se preser-
va también el patrimonio natural y cultural, la diversidad biológica y el derecho a la informa-
ción y educación ambiental. Se prohíbe el ingreso al territorio nacional de residuos actual
o potencialmente peligrosos, y de los radioactivos.

Completa este artículo consagratorio de derechos de tercera generación, la acción de


amparo (Artículo 43) que en estos casos puede ser ejercida por el afectado, el Defensor
del Pueblo y las asociaciones que propendan esos fines, debidamente registradas.

L) Creación de Un Consejo Económico y Social con Carácter Consultivo

Fue el único tema que no logró tratarse, por lo acotado del límite temporal que fijó en
noventa días la actividad de la Convención

LL) Garantía de la Identidad Etnica y cultural de los Pueblos Indígenas

En virtud de esta disposición se deroga la segunda parte del antiguo inciso 15 de Artículo
67 que consagraba como atribución del congreso el “propender la conversión de los indios
al catolicismo”. En virtud del actual inciso 17 del Artículo 75 se reconoce la preexistencia
étnica y cultural de los pueblos indígenas argentinos, garantizando el derecho a una educa-
ción bilingüe, el acceso a la propiedad comunitaria de la tierra, la entrega de sus antiguos
territorios o de tierras aptas para sus actividades, entre otros.

Sobre este tema debemos destacar que el despacho de comisión fue suscripto por unani-
midad, y se acordó tratarlo en el recinto por su sola lectura, sin discursos, y por aclamación.
El registro de las opiniones vertidas por los Convencionales Constituyentes, quedó en el
diario de sesiones por incorporación de agregados escritos para su publicación.

M) Defensa de la Competencia, del Usuario y Del Consumidor

Tema que se incorpora en el actual artículo 42, por el que se protege a consumidores y
usuarios de bienes y servicios en la relación de consumo, a la protección de su salud, segu-
ridad e intereses económicos; a una información adecuada y veraz, entre otras previsiones.
Es de resaltar que las acciones en protección de estos derechos pueden ser incoadas por
el afectado, e defensor del pueblo y las asociaciones que propendan a esos fines (Artículo
43)
29
Esta previsión constitucional cobra mayor relevancia al tener en cuenta que existen pres-
tadores de servicios públicos que se encuentran en el ámbito de la organización estatal,
no estatal y hasta personas jurídicas privadas.

N) consagración expresa del Habeas Corpus y el Amparo

Regulación que se incluye en el Artículo 43, respetándose en general los lineamientos


existentes en la legislación previa y en los sucesivos fallos de la Corte, pero adquiriendo
rango Constitucional expreso a partir de la reforma. En este artículo también se incluye
una acción especial, el Habeas Data, que permite a toda persona conocer si sus datos
están inscriptos en registros públicos o privados, en que sentido y en caso de error lograr
su rectificación.

Ñ) Implementar la Posibilidad de Unificar la Iniciación de Todos los mandatos electi-


vos en una Misma Fecha.

Esta disposición no pudo concretarse respecto de todos los mandatos, debido a circuns-
tancias políticas más que jurídicas, aunque logró unificarse el momento de asunción de
nuevos Senadores y Diputados de la Nación – cláusula transitoria cuarta - en la fecha del
10 de diciembre , en lo que respecta al Presidente de la Nación se dispuso considerar el
mandato en curso, al momento de la reforma como primer mandato –cláusula transitoria
Novena- y por la cláusula transitoria Décima se dispuso que el Presidente de la Nación
que asumiera el 8 de julio de 1995, extinguiría su mandato el 10 de diciembre de 1999, con
lo que se respetó el principio de intangibilidad de los mandatos constitucionales, ya que no
pueden extenderse bajo circunstancia alguna.

Sin embargo, circunstancias políticas posteriores, determinaron que el Presidente inicie


su mandato el 25 de mayo.

FORMAS DE ESTADO Y DE GOBIERNO


La preocupación del hombre por distinguir y comparar la forma en que se estructura y
organiza el poder es anterior al surgimiento del Estado moderno, habiéndose efectuado, en
las distintas épocas, múltiples clasificaciones y tipologías.
Recién en el siglo XX la doctrina construye, como nueva herramienta para abordar el
estudio de la evolución estatal, la distinción entre “formas de estado” y “formas de gobier-
no”.
En este marco, las formas de estado comprenden “las diversas configuraciones que el
33.
Martinez Paz, Enrique. Ob. Cit. Pág. 242.

30
Estado adopta en relación a sus propios elementos integrativos, esto es, a su estructura”.34
En cambio las formas de gobierno se refieren específicamente a la organización y funcio-
namiento de uno de los elementos del Estado, el poder, que es ejercido por una serie de
órganos que tienen a su cargo la conducción del Estado35. Finalmente, cabe señalar que
las formas de gobierno no se dan en abstracto sino que siempre suponen una forma de
estado que la condiciona.

Las formas de estado:

Según cómo se relacionen entre sí el poder y el territorio en un estado, tradicionalmente


se distingue entre:

• Estado unitario: El Estado es uno en su estructura, en su elemento humano y en sus


límites territoriales. Esta es la forma de estado más simple y la primera con la que aparece
históricamente el Estado Moderno. Es la adoptada por Gran Bretaña, Uruguay, Paraguay,
etc.

• Estado Federal: Está basado en la descentralización territorial del poder, de forma tal que
coexisten en él un Gobierno Federal, que detenta y ejerce el poder sobre todo su territorio y
todas las personas que habitan en él, por una parte y por la otra, una pluralidad de estados
miembros (en el caso argentino se denominan provincias), cada uno de los cuales ejerce
poder dentro del respectivo límite territorial sobre los habitantes de cada uno de ellos. En
esta estructura compleja, sólo el Estado Federal es soberano y sujeto del orden internacio-
nal. El poder es ejercido entonces por las autoridades centrales o las autoridades del es-
tado miembro, según un sistema de reparto de competencias preestablecido. Los Estados
miembros del Estado Federal carecen de derecho de secesión (no pueden separarse) y
nulificación (no pueden negarse a aplicar las decisiones adoptadas por las autoridades fe-
derales) Esta forma de estado ha sido adoptada por Estados Unidos, Alemania, Argentina,
Brasil, Méjico, entre otros países.

• Confederación: Es una asociación entre Estados soberanos, cada uno de los cuales es
sujeto del orden internacional, que se unen por un pacto o tratado, por el que se crea un
órgano permanente (dieta) a cargo de las competencias establecidas en el pacto de alian-
za. Una característica peculiar que diferencia la Confederación del Estado federal, radica
en que aquella carece de poder directo sobre los habitantes de los Estados confederados,
quienes conservan los derechos de secesión (separarse de la confederación) y nulificación
(negarse a aplicar las decisiones emanadas del órgano de la confederación).

Generalmente la confederación representa la primera etapa en la Constitución de un


nuevo Estado. Así ocurrió por ejemplo con los Estados norteamericanos desde 1777 a
1787 y la confederación suiza de 1815 a 1848.36

En el siglo XX aparece una nueva forma de Estado, a la que podemos denominar Estado
Regional: Supone la descentralización del poder en regiones, esto es, “conjuntos humanos
que ofrezcan caracteres comunes en su historia idiosincrasia, necesidades y proyeccio-

4
34.
Romero, Cesar E. Derecho Constitucional. Tomo I. Ed. Victor P. De Zavalía. Pág 89. Buenos Aires. 1975.
35.
Biscaretti di Ruffia señala que la forma de estado se relaciona con la posición recíproca en la cual vienen a
encontrarse los tres elementos constitutivos del Estado; y la forma de gobierno a la recíproca posición en que se
encuentran los diversos órganos constitucionales (Derecho Constitucional, pag.223 Ed. Técnos. Madrid, 1965)
citado por Romero, Cesar. Derecho Constitucional. Tomo I. Ed. Victor P de Zavalía, pág 90.
36.
Giuseppe de Vergontini. Derecho Constitucional Comparado. Pág. 273 Ed. Espasa Calpe. Madrid. 1983

31
nes futuras”37. El Estado región suele ser considerado como una figura intermedia entre el
Estado Federal y el Estado Unitario. El Estado regional, históricamente, surge en Europa
partir de la Segunda Guerra mundial, cuando países que habían adoptado originariamente
la forma unitaria, como Italia, Francia y España, comienzan a organizarse internamente en
regiones.

FEDERALISMO ARGENTINO
EVOLUCION

Desde 1810 se advierte en nuestra organización política dos grandes visiones, una la del
puerto de Buenos Aires influenciado por los pensadores más actualizados en los debates
políticos de la época, (Montesquieu, Rousseau, Locque , la escolástica representada por
el Padre Francisco Suares, Mariana, entre otros) con una concepción europeizante, de
modernidad obnubilados por los sucesos de Francia y Estados Unidos de Norte América
y que perciben al interior como retrasado. El interior compuesto por las catorce provincias
históricas, con una cosmovisión conservadora, tradicional y religiosa, pretendiendo que se
respetara en la nueva organización patria sus valores y tradiciones familiares inmemoria-
les.

Estas ideas se advierten en los debates que dan cuenta las Actas del Cabildo del 22 y 25
de mayo de 1810 en las que hombres como Castelli pugnan por la retroversión del poder al
pueblo y la independencia del Rio de la Plata y la postura de Juan José Paso respecto a la
potestad del Cabildo de la Ciudad de Buenos Aires, a quien trata como hermana mayor y
pugna por formar un gobierno hasta que lleguen los representantes del interior. A posterio-
ridad se registran dos hitos históricos trascendentes: las Constituciones unitarias de 1819
y 1826 que son rechazadas por las provincias

Sin embargo y pese a permanentes enfrentamientos fraticidas entre Buenos Aires. La


liga del Litoral y la unión de las provincias del norte, siempre se mantiene la idea de nego-
ciación que se plasma en los pactos provinciales:
• Tratado del Pilar 23 de febrero de 1820
• Tratado del Cuadrilátero 25 de enero de 1822
• Pacto Multilateral Federativo de Córdoba 17 de mayo de 1827
• Pacto Federal 4 de enero de 1831
• Acuerdo de San Nicolás de los Arroyos 31 de mayo de 1852
• Pacto de San José de Flores 11 de noviembre de 1859.

El dictado de la Constitución Nacional de 1853 alumbrada por el federalismo no es acep-


tada por Buenos Aires que se escinde del resto de la confederación, hasta que al fin mer-
ced a la reforma de 1860 se reunifica la nación con un texto constitucional único.

CRISIS DEL FEDERALISMO

El desigual desarrollo económico y tecnológico, la permanente emigración desde pro-

37.
Romero, Cesar Enrique. Derecho Constitucional. Tomo I, pág 93. Ed. Victor P. De Zavalía. Buenos Aires.
1975.

32
vincias hacia la capital, el abuso en las intervenciones federales, los golpes de estado con
derrocamiento de gobernadores provinciales son algunos de los factores más graves que
influyen para producir el permanente deterioro de nuestro federalismo.

Al decir de Félix Luna todos imaginamos a la república como una mujer de forma esbelta,
sin embargo, merced al deterioro de nuestro federalismo, podemos graficar nuestra repúbli-
ca como un “enano macro cefálico con extremidades raquíticas”, es decir todo el desarrollo
poblacional y económico del puerto se refleja en la pobreza y atraso del interior del país

DERECHO FEDERAL

Para abordar este tema seguimos a Germán Bidart Campos que ha elaborado un cuadro
de probada utilidad para analizar las relaciones entre Nación y Provincias.

Encuentra regulación y límite en la Constitución Nacional, nos referimos a la conexión


Estado-Provincias.

Sostiene que hay tres tipos de Relacióones entre Nación y Provincias:

Relaciones de Subordinación

Se traducen en una subordinación exclusivamente jurídica y se deriva directamente del


Artículo 31 de la Constitución Nacional.

Artículo 31- Esta Constitución, las leyes de la Nación que en su consecuencia se dicten
por el Congreso y los tratados con las potencias extranjeras son la ley suprema de la Na-
ción; y las autoridades de cada provincia están obligadas a conformarse a ella, no obstante
cualquiera disposición en contrario que contengan las leyes o Constituciones provinciales,
salvo para la Provincia de Buenos Aires, los tratados ratificados después del pacto del 11
de noviembre de 1859.

El esquema normativo constitucional se escalona entonces desde la Constitución de la


Nación y el llamado bloque de legalidad federal, luego el Artículo 5 de la Constitución obli-
ga a las provincias a dictar su propio ordenamiento jurídico, imponiéndole condiciones de
cumplimiento obligatorio.

Artículo 5°- Cada provincia dictará para sí una Constitución bajo el sistema representati-
vo republicano, de acuerdo con los principios, declaraciones y garantías de la Constitución
Nacional; y que asegure su administración de justicia, su régimen municipal, y la educación
primaria. Bajo de estas condiciones, el Gobierno federal, garante a cada provincia el goce
y ejercicio de sus instituciones.

La reforma constitucional de 1994 que avanza profundizando el federalismo agrega en


el Artículo 123:

Artículo 123- Cada provincia dicta su propia constitución, conforme a lo dispuesto por el
art. 5° asegurando la autonomía municipal y reglando su alcance y contenido en el orden
institucional, político, administrativo, económico y financiero.

Volveremos sobre este artículo al tratar lo referente a autonomía municipal.

Relaciones de Participación

En este grupo de relaciones nos referimos a la conformación de los órganos del gobierno
federal, no debemos olvidar que las provincias son previas a la Nación y son quienes deci-
den formar la unión nacional creando el gobierno nacional, para lo que delegan atribucio-
nes que les son propias. Conforman así el Poder Ejecutivo el Poder Legislativo y el Poder
Judicial Nacional

Por eso en el Congreso Nacional la Cámara de Senadores, se compone de tres senado-


res por cada provincia

Artículo 54- El Senado se compondrá de tres senadores por cada provincia y tres por la
Ciudad de Buenos Aires, elegidos en forma directa y conjunta, correspondiendo dos ban-
cas al partido político que obtenga el mayor número de votos, y la restante al partido político
que le siga en número de votos. Cada senador tendrá un voto.

La Cámara de Diputados

Artículo 45- La Cámara de Diputados se compondrá de representantes elegidos directa-


mente por el pueblo de las provincias, de la Ciudad de Buenos Aires, y de la Capital en caso
de traslado, que se consideran a este fin como distritos electorales de un solo Estado y a
simple pluralidad de sufragios. El número de representantes será de uno por cada treinta y
tres mil habitantes o fracción que no baje de dieciséis mil quinientos. Después de la reali-
zación de cada censo, el Congreso fijará la representación con arreglo al mismo, pudiendo
aumentar pero no disminuir la base expresada para cada diputado.

De esta formación se colige que los representantes del pueblo y de los Estados provin-
ciales deciden sobre: Sanción leyes, acefalía, juicio político, estado de sitio, acuerdos para
designación de funcionarios. Arts. 59, 60, 61, 99 inc. 7 y 13, etc.

Relaciones de Coordinación

En este tema abordamos el reparto de competencias en el orden territorial, siguiendo el


presente esquema:
1) Poderes Exclusivos del orden Nacional
2) Poderes reservados por las provincias
3) Poderes concurrentes
4) Prohibiciones a Nación, a provincias y a ambas

El preindicio general de distribución de competencias es que las Provincias conservan


todo el poder no delegado, ante la duda la atribución es provincial.
Artículo 121- Las provincias conservan todo el poder no delegado por esta
Constitución al Gobierno Federal, y el que expresamente se hayan reservado por pactos
especiales al tiempo de su incorporación.

Al mismo tiempo las provincias no ejercen el poder delegado.

Artículo 126- Las provincias no ejercen el poder delegado a la Nación. No pueden


cele- brar tratados parciales de carácter político; ni expedir leyes sobre comercio, o
navegación interior o exterior; ni establecer aduanas provinciales; ni acuñar moneda; ni
establecer ban- cos con facultad de emitir billetes, sin autorización del Congreso Federal;
ni dictar los códi- gos Civil, Comercial, Penal y de Minería, después de que el Congreso los
haya sancionado; ni dictar especialmente leyes sobre ciudadanía y naturalización,
bancarrotas, falsificación de moneda o documentos del Estado; ni establecer derechos
de tonelaje; ni armar buques de guerra o levantar ejércitos, salvo en el caso de invasión
exterior o de un peligro tan inmi- nente que no admita dilación dando luego cuenta al
Gobierno Federal; ni nombrar o recibir agentes extranjeros.

Quizá pudiéramos utilizar la imagen del espejo. Las atribuciones delegadas han sido
las necesarias para conformar la Nación y encuentra fundamento en no poder ejercer esas
atri- buciones. En los órdenes más importantes, son aquellas que hacen a la unidad del
Estado, como representación y relaciones internacionales, la seguridad y defensa, la
resolución de conflicto entre provincias, entre otras. Son las especialmente contenidas en
los artículos 75; 99; 100; 116 que dotan de competencias a los órganos nacionales Poder
Ejecutivo, Legislativo y Judicial.

3) Poderes concurrentes

El esquema de distribución de competencias contempla las llamadas concurrentes,


que pueden ser desarrolladas por nación y provincias. Están especialmente dedicadas al
de- sarrollo de la sociedad en su conjunto, referidas a la educación, salud, condiciones
sociales de vida de los habitantes, desarrollo comercial, de producción, de promoción y
crecimiento, entre ellas citamos las contenidas en los artículos 124, 125, 75 incisos 18,
19, entre otros.

4) La Constitución contempla también normas con prohibiciones específicas por ejemplo


con contenidos en los artículos. 9 a 13 126 y 127.

Al mismo tiempo que las proveniencias tienen prohibido ejercer el poder delegado y la
Nación no puede ejercer poder no delegado, existen prohibiciones para ambas, tal la
con- tenía en el bloque de derechos humanos consagrados y las garantías sobre las que
no puede avanzar el poder sea nacional o provincial y la especial prohibición contenida
en el artículo 29:
DERECHOS, GARANTÍAS CONSTITUCIONALES, CONSAGRA-
CIÓN Y LÍMITES
Antes de ingresar al estudio de esta parte del Derecho Constitucional, debemos esclare-
cer conceptos previos, como Declaraciones Derechos y Garantías incluidas en la Primera
parte del texto que así se titula. De manera aproximada y como primer concepto orientativo
decimos que:
• Declaración: son forma generales, es una afirmación, una elección entre posibles, una
toma de postura de la Nación, considerada en sí misma y en su relación con otros Estados,
las provincias, la iglesia, etc., como ejemplo citamos el Artículo 1, 2, 3, entre otros.
• Derechos: son atribuciones, facultades, potestades expresamente reservadas por los
hombres para sí al momento de suscribir el pacto constitucional, destinados a ser ejercido
erga omnes. Como ejemplo citamos el Artículo 14, 14 bis, 15, 16,17, entre otros.
• Garantía: es un remedio, un camino o vía procesal en manos de los ciudadanos para ase-
gurar el pleno ejercicio de los derechos y lograr la reparación de un Derecho Constitucional
violado, menoscabado, etc. Como ejemplo citamos el Artículo 18, 19 43, entre otros.

También es necesario referirnos a conceptos tomados del lenguaje natural ya que tienen
significado jurídico distinto.

Persona, hombre, habitante, extranjero, ciudadano; veremos que son ejes de imputación
diferente de derechos, por ejemplo el habitante y el extranjero pueden no gozar de dere-
chos ciudadanos. La persona humana al igual que hombre engloba a todos sin importar
sexo, raza, nacionalidad, ideología, etc., y nuestra Constitución ha tenido en general preci-
sión terminológica al respecto.

LOS DERECHOS EN GENERAL


Hemos adelantado que entendemos a los derechos como facultades, atribuciones, pre-
rrogativas a favor de la persona humana. Al respecto no podemos dejar de mencionar
dos posturas iusfilosóficas que otorgan a este cúmulo de derechos etiología diferente, en
efecto:

La Escuela de Derecho Natural o iusnaturalismo sostiene que estos derechos son inhe-
rentes al hombre por ser tal, los denomina derechos naturales del hombre. Su origen es
previo al nacimiento del Estado y han sido tomado por todas las teorías contractualistas,
Hobbes, Locke, Rouseau, entre otros. En general sostienen que previo al Estado, el hom-
bre vivía en un estado de naturaleza, previa a toda organización social. Allí imperaban la
libertad, la igualdad y cada uno manejaba su conducta conforme su inclinación y concien-
cia.

La necesidad de orden hace que este hombre en estado de naturaleza decida investir a
algunos de autoridad para lograr la ordenación y seguridad general, lo hace por medio del
pacta o contrato social (Constitución Nacional) en que crea la autoridad, pero de ninguna
manera pierde los derechos previos con los que integra en esta nueva sociedad. En sínte-
sis los derechos del Hombre son relativos a su propia naturaleza y el Estado está obligado
a reconocerlos, de no ser así, no estamos frente a un Estado o somos testigos de la tiranía
fuera de la concepción del Estado de Derecho.

Para las teorías iuspositivistas, los hombres gozan de los derechos que le otorga y reco-
noce el estado en su conformación y orden jurídico, de modo tal que solo podrá ser titular
y ejercer aquellos que el orden jurídico positivo les concede.

En general nuestra doctrina se inclina hacia la primera postura, incluso autores como
Carlos Santiago Nino (prominente jurista y filósofo del Derecho Constitucional) avanza des-
de el positivismo hacia el naturalismo.

Nuestra Constitución participa del constitucionalismo clásico tributario del pacto social,
por cuanto reconocemos derechos humanos amplísimos.

A los fines de su mejor sistematización y estudio seguiremos una doble clasificación: De-
rechos enumerado y no enumerados y derechos incorporados en el texto originario y en
sus sucesivas reformas constitucionales:
• Derechos Enumerados son aquellos expresamente incluidos en el texto en su redacción
original y las posteriores incorporaciones.
• Derechos no enumerados incluidos en el Artículo 33, texto incorporado por Domingo
Faustino Sarmiento en la reforma constitucional de 1860, cuya magistral composición per-
mite cubrir cualquier omisión voluntaria o involuntaria en la enumeración previa y también
adelantarse a los tiempos, dando cobertura a las personas por futuras situaciones amena-
zantes de la dignidad del hombre que no hubieran podido tenerse en cuenta en la enume-
ración al momento de sancionarse la reforma.

Este artículo, tal como lo hemos sostenido es una puerta abierta a los actores constitu-
cionales, especialmente a los jueces, como soporte constitucional para reconocer nuevos
derechos protectores de la persona humana.

Artículo 33- Las declaraciones, derechos y garantías que enumera la Constitución, no


serán entendidos como negación de otros derechos y garantías no enumerados; pero que
nacen del principio de la soberanía del pueblo y de la forma republicana de gobierno.

Alfredo Mooney al tratar el tema elabora una enumeración que ha quedado desactuali-
zada merced a la reforma constitucional de 1994, y por leyes que han ido reglamentando
la Constitución Nacional, sin embargo la acompañamos porque cada caso incluido por el
autor, encontró fundamento constitucional en este artículo 33 siendo expresamente citado
por lo jueces para hacer lugar a reclamos ante violaciones a los derechos humanos. A fines
pedagógicos resaltaremos los que aun no están expresamente consagrados:

Vida
Reunión
Revolución
Resistencia a la opresión
Réplica
Divorcio
Identidad
Integridad
Libertad de soledad
Ocio
Salud (de manera deficiente)
Aborto
Homosexualidad o elección sexual
Elección de la propia muerte o muerte digna
Honor
A la Paz
Del Paciente

Por su parte Germán Bidart Campos enumera entre los derechos de libertad:
a) Hacer y omitir actividades
b) Desarrollar la personalidad
c) Elegir la forma de vida
d) Acceder a situaciones aptas para elegir
e) Liberarse de toda coacción
f) Liberarse de inferencias en al moral persona
g) Preservar la dignidad personal
h) Recibir un trato razonable y respetuoso

Derechos enumerados por el texto original:

Artículo 14: Todos los habitantes de la Nación gozan de los siguientes derechos confor-
me a las leyes que reglamenten su ejercicio; a saber: De trabajar y ejercer toda industria
lícita; de navegar y comerciar; de peticionar a las autoridades; de entrar, permanecer, tran-
sitar y salir del territorio argentino; de publicar sus ideas por la prensa sin censura previa;
de usar y disponer de su propiedad; de asociarse con fines útiles; de profesar libremente
su culto; de enseñar y aprender.
DERECHO INCORPORADO POR LA REFORMA DE 1957

Artículo 14 bis- El trabajo en sus diversas formas gozará de la protección de las leyes,
las que asegurarán al trabajador: condiciones dignas y equitativas de labor; jornada limi-
tada; descanso y vacaciones pagados; retribución justa; salario mínimo vital móvil; igual
remuneración por igual tarea; participación en las ganancias de las empresas, con control
de la producción y colaboración en la dirección; protección contra el despido arbitrario; es-
tabilidad del empleado público; organización sindical libre y democrática reconocida por la
simple inscripción en un registro especial.

Queda garantizado a los gremios: Concertar convenios colectivos de trabajo; recurrir a la


conciliación y al arbitraje; el derecho de huelga. Los representantes gremiales gozarán de
las garantías necesarias para el cumplimiento de su gestión sindical y las relacionadas con
la estabilidad de su empleo.

El Estado otorgará los beneficios de la seguridad social, que tendrá carácter de integral e
irrenunciable. En especial, la ley establecerá: el seguro social obligatorio, que estará a car-
go de entidades nacionales o provinciales con autonomía financiera y económica, adminis-
tradas por los interesados con participación del Estado, sin que pueda existir superposición
de aportes; jubilaciones y pensiones móviles; la protección integral de la familia; la defensa
del bien de familia; la compensación económica familiar y el acceso a una vivienda digna.

DERECHOS DEL TEXTO ORIGINAL

Artículo 15: En la Nación Argentina no hay esclavos: los pocos que hoy existen quedan
libres desde la jura de esta Constitución; y una ley especial reglará las indemnizaciones a
que dé lugar esta declaración. Todo contrato de compra y venta de personas es un crimen
de que serán responsables los que lo celebrasen, y el escribano o funcionario que lo auto-
rice. Y los esclavos que de cualquier modo se introduzcan quedan libres por el solo hecho
de pisar el territorio de la República.

Artículo 16: La Nación Argentina no admite prerrogativas de sangre, ni de nacimiento:


No hay en ella fueros personales ni títulos de nobleza. Todos sus habitantes son iguales
ante la ley, y admisibles en los empleos sin otra condición que la idoneidad. La igualdad es
la base del impuesto y de las cargas públicas.

Artículo 17: La propiedad es inviolable, y ningún habitante de la Nación puede ser priva-
do de ella, sino en virtud de sentencia fundada en ley. La expropiación por causa de utilidad
pública, debe ser calificada por ley y previamente indemnizada. Sólo el Congreso impone
las contribuciones que se expresan en el Art. 4°. Ningún servicio personal es exigible, sino
en virtud de ley o de sentencia fundada en ley. Todo autor o inventor es propietario exclu-
sivo de su obra, invento o descubrimiento, por el término que le acuerde la ley. La confis-
cación de bienes queda borrada para siempre del Código Penal Argentino. Ningún cuerpo
armado puede hacer requisiciones, ni exigir auxilios de ninguna especie.
Artículo 18: Ningún habitante de la Nación puede ser penado sin juicio previo fundado
en ley anterior al hecho del proceso, ni juzgado por comisiones especiales, o sacado de
los jueces designados por la ley antes del hecho de la causa. Nadie puede ser obligado
a declarar contra sí mismo; ni arrestado sino en virtud de orden escrita de autoridad com-
petente. Es inviolable la defensa en juicio de la persona y de los derechos. El domicilio es
inviolable, como también la correspondencia epistolar y los papeles privados; y una ley
determinará en qué casos y con qué justificativos podrá procederse a su allanamiento y
ocupación. Quedan abolidos para siempre la pena de muerte por causas políticas, toda
especie de tormento y los azotes. Las cárceles de la Nación serán sanas y limpias, para
seguridad y no para castigo de los reos detenidos en ellas, y toda medida que a pretexto
de precaución conduzca a mortificarlos más allá de lo que aquella exija, hará responsable
al juez que la autorice.

Artículo 19: Las acciones privadas de los hombres que de ningún modo ofendan al
orden y a la moral pública, ni perjudiquen a un tercero, están sólo reservadas a Dios, y
exentas de la autoridad de los magistrados. Ningún habitante de la Nación será obligado a
hacer lo que no manda la ley, ni privado de lo que ella no prohíbe.

Artículo 20: Los extranjeros gozan en el territorio de la Nación de todos los derechos
civiles del ciudadano; pueden ejercer su industria, comercio y profesión; poseer bienes raí-
ces, comprarlos y enajenarlos; navegar los ríos y costas; ejercer libremente su culto; testar
y casarse conforme a las leyes. No están obligados a admitir la ciudadanía, ni pagar con-
tribuciones forzosas extraordinarias. Obtienen nacionalización residiendo dos años conti-
nuos en la Nación; pero la autoridad puede acortar este término a favor del que lo solicite,
alegando y probando servicios a la República.

Artículo 21: Todo ciudadano argentino está obligado a armarse en defensa de la Patria y
de esta Constitución, conforme a las leyes que al efecto dicte el Congreso y a los decretos
del Ejecutivo Nacional. Los ciudadanos por naturalización, son libres de prestar o no este
servicio por el término de diez años contados desde el día en que obtengan su carta de
ciudadanía.

Artículo 28: Los principios, garantías y derechos reconocidos en los anteriores artículos,
no podrán ser alterados por las leyes que reglamenten su ejercicio.

DERECHO INCORPORADO POR LA REFORMA DE 1860

Artículo 32: El Congreso Federal no dictará leyes que restrinjan la libertad de imprenta
o establezcan sobre ella la jurisdicción federal.

DERECHOS INCORPORADOS POR LA REFORMA DE 1994


NUEVOS DERECHOS Y GARANTÍAS

Artículo 36: Esta Constitución mantendrá su imperio aun cuando se interrumpiere su ob-
servancia por actos de fuerza contra el orden institucional y el sistema democrático. Estos
actos serán insanablemente nulos.
Sus autores serán pasibles de la sanción prevista en el Artículo 29, inhabilitados a per-
petuidad para ocupar cargos públicos y excluidos de los beneficios del indulto y la conmu-
tación de penas.
Tendrán las mismas sanciones quienes, como consecuencia de estos actos, usurparen
funciones previstas para las autoridades de esta Constitución o las de las provincias, los
que responderán civil y penalmente de sus actos. Las acciones respectivas serán impres-
criptibles.
Todos los ciudadanos tienen el derecho de resistencia contra quienes ejecutaren los ac-
tos de fuerza enunciados en este Artículo.
Atentará asimismo contra el sistema democrático quien incurriere en grave delito doloso
contra el estado que conlleve enriquecimiento, quedando inhabilitado por el tiempo que las
leyes determinen para ocupar cargos o empleos públicos.
El Congreso sancionará una ley sobre ética pública para el ejercicio de la función.

Artículo 37: Esta Constitución garantiza el pleno ejercicio de los derechos políticos, con
arreglo al principio de la soberanía popular y de las leyes que se dicten en consecuencia,
el sufragio es universal, igual, secreto y obligatorio.
La igualdad real de oportunidades entre varones y mujeres para el acceso a cargos
electivos y partidarios se garantizará por acciones positivas en la regulación de los partidos
políticos y en el régimen electoral.

Artículo 38: Los partidos políticos son instituciones fundamentales del sistema demo-
crático. Su creación y el ejercicio de sus actividades son libres dentro del respeto a esta
Constitución, la que garantiza su organización y funcionamiento democráticos, la represen-
tación de las minorías, la competencia para la postulación de candidatos a cargos públicos
electivos, el acceso a la información publica y la difusión de sus ideas.
El Estado contribuye al sostenimiento económico de sus actividades y de la capacitación
de sus dirigentes.
Los partidos políticos deberán dar publicidad del origen y destino de sus fondos y patri-
monio.

Artículo 39: Los ciudadanos tienen el derecho de iniciativa para presentar proyectos de
ley en la Cámara de Diputados. El Congreso deberá darles expreso tratamiento dentro del
término de doce meses.
El Congreso, con el voto de la mayoría absoluta de la totalidad de los miembros de cada
Cámara, sancionará una ley reglamentaria que no podrá exigir más del tres por ciento del
padrón electoral nacional, dentro del cual deberá contemplar una adecuada distribución
territorial para suscribir la iniciativa.
No serán objeto de iniciativa popular los proyectos referidos a reforma constitucional,
tratados internacionales, tributos, presupuesto y materia penal.

Artículo 40: El Congreso, a iniciativa de la Cámara de Diputados, podrá someter a con-


sulta popular un proyecto de ley. La ley de convocatoria no podrá ser vetada. El voto afir-
mativo del proyecto por el pueblo de la Nación lo convertirá en ley y su promulgación será
automática.
El Congreso o el Presidente de la Nación, dentro de sus respectivas competencias, po-
drán convocar a consulta popular no vinculante. En este caso el voto no será obligatorio.
El Congreso, con el voto de la mayoría absoluta de la totalidad de los miembros de cada
Cámara, reglamentará las materias, procedimientos y oportunidad de la consulta popular.

Artículo 43: Toda persona puede interponer acción expedita y rápida de amparo, siem-
pre que no exista otro medio judicial más idóneo, contra todo acto u omisión de autoridades
públicas o de particulares, que en forma actual o inminente lesione, restrinja, altere o ame-
nace, con arbitrariedad o ilegalidad manifiesta, derechos y garantías reconocidos por esta
Constitución, un tratado o una ley. En el caso, el juez podrá declarar la inconstitucionalidad
de la norma en que se funde el acto u omisión lesiva.
Podrán interponer esta acción contra cualquier forma de discriminación y en lo relativo a
los derechos que protegen al ambiente, a la competencia, al usuario y al consumidor, así
como a los derechos de incidencia colectiva en general, el afectado, el defensor del pueblo
y las asociaciones que propendan a esos fines, registradas conforme a la ley, la que deter-
minará los requisitos y formas de su organización.
Toda persona podrá interponer esta acción para tomar conocimiento de los datos a ella
referidos y de su finalidad, que consten en registros o bancos de datos públicos, o los pri-
vados destinados a proveer informes, y en caso de falsedad o discriminación, para exigir la
supresión, rectificación, confidencialidad o actualización de aquellos. No podrá afectarse el
secreto de las fuentes de información periodística.
Cuando el derecho lesionado, restringido, alterado o amenazado fuera la libertad física,
o en caso de agravamiento ilegítimo en la forma o condiciones de detención, o en el de
desaparición forzada de personas, la acción de habeas corpus podrá ser interpuesta por
el afectado o por cualquiera en su favor y el juez resolverá de inmediato aun durante la
vigencia del estado de sitio.

Artículo 75: Son atribuciones del Congreso Nacional

Inciso 17. Reconocer la preexistencia étnica y cultural de los pueblos indígenas argen-
tinos.
Garantizar el respeto a su identidad y el derecho a una educación bilingüe e intercultural;
reconocer la personería jurídica de sus comunidades, y la posesión y propiedad comu-
nitarias de las tierras que tradicionalmente ocupan; y regular la entrega de otras aptas y
suficientes para el desarrollo humano; ninguna de ellas será enajenable, transmisible, ni
susceptible de gravámenes o embargos. Asegurar su participación en la gestión referida
a sus recursos naturales y a los demás intereses que los afectan. Las provincias pueden
ejercer concurrentemente estas atribuciones.

Inciso 18. Proveer lo conducente a la prosperidad del país, al adelanto y bienestar de


todas las provincias, y al progreso de la ilustración, dictando planes de instrucción general
y universitaria, y promoviendo la industria, la inmigración, la construcción de ferrocarriles y
canales navegables, la colonización de tierras de propiedad nacional, la introducción y es-
tablecimiento de nuevas industrias, la importación de capitales extranjeros y la exploración
de los ríos interiores, por leyes protectoras de estos fines y por concesiones temporales de
privilegios y recompensas de estímulo.

Inciso19. Proveer lo conducente al desarrollo humano, al progreso económico con jus-


ticia social, a la productividad de la economía nacional, a la generación de empleo, a la
formación profesional de los trabajadores, a la defensa del valor de la moneda, a la investi-
gación y desarrollo científico y tecnológico, su difusión y aprovechamiento.
Proveer al crecimiento armónico de la Nación y al poblamiento de su territorio; promover
políticas diferenciadas que tiendan a equilibrar el desigual desarrollo relativo de provincias
y regiones. Para estas iniciativas, el Senado será Cámara de origen.
Sancionar leyes de organización y de base de la educación que consoliden la unidad
nacional respetando las particularidades provinciales y locales; que aseguren la responsa-
bilidad indelegable del estado, la participación de la familia y la sociedad, la promoción de
los valores democráticos y la igualdad de oportunidades y posibilidades sin discriminación
alguna; y que garanticen los principios de gratuidad y equidad de la educación pública es-
tatal y la autonomía y autarquía de las universidades nacionales.
Dictar leyes que protejan la identidad y pluralidad cultural, la libre creación y circulación
de las obras del autor; el patrimonio artístico y los espacios culturales y audiovisuales.

Inciso 22. Aprobar o desechar tratados concluidos con las demás naciones y con las
organizaciones internacionales y los concordatos con la Santa Sede. Los tratados y con-
cordatos tienen jerarquía superior a las leyes.
La Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre; la Declaración Univer-
sal de Derechos Humanos; la Convención Americana sobre Derechos Humanos; el Pacto
Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales; el Pacto Internacional de
Derechos Civiles y Políticos y su Protocolo Facultativo; la Convención Sobre la Prevención
y la Sanción del Delito de Genocidio; la Convención Internacional sobre la Eliminación de
Todas las Formas de Discriminación Racial; la Convención Sobre la Eliminación de Todas
las Formas de Discriminación Contra la Mujer; la Convención Contra la Tortura y Otros
Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes; la Convención Sobre los Derechos del
Niño; en las condiciones de su vigencia, tienen jerarquía constitucional, no derogan artículo
alguno de la primera parte de esta Constitución y deben entenderse complementarios de
los derechos y garantías por ella reconocidos. Sólo podrán ser denunciados, en su caso,
por el Poder Ejecutivo Nacional, previa aprobación de las dos terceras partes de la totalidad
de los miembros de cada Cámara.
Los demás tratados y convenciones sobre derechos humanos, luego de ser aprobados
por el Congreso, requerirán el voto de las dos terceras partes de la totalidad de los miem-
bros de cada Cámara para gozar de la jerarquía constitucional.

LA LIBERTAD
Quizá sea el concepto jurídico más difícil de definir, tanto es así que se han intentando
esbozar conceptos negativos tales como: “la ausencia de prohibición”, sin embargo para
la ciencia jurídica quien esgrime este concepto no dice prácticamente nada. No es que
estos autores tomen este concepto de la nada, sino que se basan en el Artículo 19 de la
Constitución Nacional “Las acciones privadas de los hombres que de ningún modo ofendan
al orden y a la moral pública, ni perjudiquen a un tercero, están sólo reservadas a Dios, y
exentas de la autoridad de los magistrados. Ningún habitante de la Nación será obligado
a hacer lo que no manda la ley, ni privado de lo que ella no prohíbe.” Contiene en la última
parte de su redacción el llamado Principio de clausura a cuyo fin todos los habitantes de la
nación estamos obligados a conocer el contenido del orden jurídico no pudiendo excusar-
nos en el desconocimiento del mismo. Código Civil Artículos 1, 2 y especialmente 20: Las
ignorancia de las leyes no sirve de excusa, si la excepción no está expresamente autoriza-
da por la ley leyes.

¿Es, acaso suficiente abordar el concepto constitucional de La Libertad del Hombre des-
de esta pobreza conceptual, echando mano de una trampa jurídica harto estudiada por los
filósofos jurídicos? Creemos que no, y desde esta dificultad conceptual trataremos de dar
un concepto cercano del tema que estudiamos.

Alfredo Money citando al autor Renato Alessi define la libertad individual asumiendo que
puede ser conceptuada como la posición de cada individuo mediante la cual tiene la posi-
bilidad de desarrollar su actividad natural, determinándose según su propia voluntad, para
lograr los fines y la satisfacción de los intereses que puede tener como hombre, vale decir
siempre que no incurra en los prohibidos por el derecho.

Para Linares Quintana: La historia del hombre es la historia de su lucha por la libertad.

Como vemos no es tarea fácil arribar a una definición por características definitorias, pero
si estamos obligados a determinar de que manera lo toma la Constitución de la Nación.

En la introducción adelantamos que los conceptos de la libertad son incorporados por el


constitucionalismo desde su nacimiento según fuera la necesidad del hombre de alcanzar
su dignidad, por eso hablamos de una primera generación de derechos como civiles y po-
líticos, destinados a incluir el concepto de soberanía popular a fin de organizar la sociedad
estatal limitando el poder, al tiempo de acceder a la participación política con el fin de ga-
rantizar el resguardo de los derechos fundamentales del hombre, entre ellos la libertad, la
igualdad y la propiedad.

Sobre la Libertad la Constitución se define desde el inicio en el Preámbulo cuando entre


sus objetivos expresa: Asegurar los beneficios de la libertad, para nosotros, para nuestra
posteridad y para todos los hombres del mundo que quieran habitar el suelo argentino.

Creemos que para conceptualizarla de la mejor manera es abordarla tal como lo hace
nuestra Constitución Nacional.
La libertad puede considerarse en diversos aspectos:
1) La libertad civil: incluye querer, ejecutar, exteriorizar todo acto de voluntad dentro de los
límites del orden jurídico, sin reconoce voluntad superior o coacción de ninguna naturale-
za.
2) Libertad de conciencia: es interna destinada a elevar el pensamiento.
3) Libertad de culto: protección de la práctica religiosa, implica exteriorización.

LA IGUALDAD
Aristóteles la definía como ausencia de privilegios políticos.

El Profesor Ricardo Haro tomaba una definición de la Corte al sostener “El principio de
la igualdad de todas las personas ente la ley, según ciencia y espíritu de la constitución,
no es otra cosa que el derecho a que no se establezcan excepciones o privilegios que se
excluyan a unos de lo que se concede a otros en iguales circunstancias. De donde se sigue
forzosamente que la verdadera igualdad consiste en aplicar en los casos ocurrente, la ley
según las diferencias constitutivas de ellos, y que cualquier otra inteligencia o aceptación
de este derecho, es contrario a su propias naturaleza e interés social”.

De estas afirmaciones se desprenden los siguientes postulados.


• Podemos afirmar que la ley debe ser igual para los iguales en igualdad de circunstan-
cias.
• Que no se establezcan excepciones o privilegios en merced de algunos.
• La ley debe reconocer y armonizar las desigualdades.
• Se deben establecer las lógicas distinciones.
• Las clasificaciones o agrupamientos deben sustentarse en criterios razonables y no arbi-
trarios.
• La desigualdad es objeto de agravio para quien la sufre.
• La discriminación debe surgir del texto mismo de la ley.

Está consagrada constitucionalmente en el Artículo 16 .

Artículo 16: La Nación Argentina no admite prerrogativas de sangre, ni de nacimiento:


No hay en ella fueros personales ni títulos de nobleza. Todos sus habitantes son iguales
ante la ley, y admisibles en los empleos sin otra condición que la idoneidad. La igualdad es
la base del impuesto y de las cargas públicas.

El requisito de idoneidad se vincula a ser apto, estar capacitado tener suficiencia para el
ejercicio de un cargo público, lo que se pretende es desvincular el empleo público de las
luchas políticas partidarias, de modo tal de construir en el Estado una burocracia apta y
permanente que no dependa de gobiernos de turno por afinidad política.

Personalmente advertimos una evolución en el concepto mismo de la igualdad, esta defi-


nición de Artistóteles, se corresponde a la primer concepción de la igualdad, como carencia
de privilegios, por eso se habla de igualdad frente a la ley. El Estado de Derecho tiene como
uno de sus presupuestos la existencia de leyes como normas generales, dirigidas a todos
los habitantes por igual, orientadoras de la conducta social y de aplicación coactiva.

Esto incluye la existencia de órganos con competencias para ser ejercidas ante toda la
población por igual. Basta de privilegios, de diferentes obligaciones y de cargas diferencia-
das según sea la persona sobre la que recaiga.

Esta gran conquista del constitucionalismo clásico se muestra insuficiente frente a los
hechos que se desatan desde la Revolución Industrial, en que la igualdad frente a la ley
queda vacía de contenido. Ante las diferencias sociales, se produce una grave desigual-
dad, solo algunos acceden a los bienes sociales, mientras que miles quedan excluidos. Por
fuerza de los hechos, esta igualdad frente a la ley se torna totalmente insuficiente. Adviene
una segunda concepción de la igualdad que nace de la mano del Constitucionalismo Social
como igualdad de oportunidades y de acceso a los bienes sociales. Esta concepción re-
quiere de un nuevo actor: el Estado, capaz de interponer su poder de imperio para que, por
medio de la ley se propenda a un nuevo equilibrio en la sociedad, de allí su responsabilidad
como distribuidor de la riqueza, como garante del acceso a la educación, salud, vivienda
etc. Sin embargo ante sociedades cada vez mas seccionadas se han ido gestando grupos
con grandes diferencias entre si, mostrando la imagen de sociedades estratificadas, donde
solo algunos acceden a los paradigmas sociales y los que no, van quedando sumidos en
la marginalidad y excluidos, por razones económicas, laborales, de sexo, credo, ideología,
aspecto físico, edad, entre otras. Se crea así la necesidad de hablar de la igualdad como la
no discriminación, donde el Estado debe recurrir a las llamadas medidas de acción positiva
para intentar subsanar el estado social.

Recientemente se ha dictado la llamada ley antidiscriminatoria que transcribimos a con-


tinuación:

MODIFICACIONES A LA LEY ANTIDISCRIMINATORIA 23.592

Artículo 1: Modificase el artículo 1 de la Ley 23.592 por el siguiente texto:

Artículo 1: “Será reprimido con prisión de tres meses a tres años quien arbitrariamente
impida, obstruya, restrinja o de algún modo menoscabe el pleno ejercicio sobre bases igua-
litarias de los derechos y garantías fundamentales reconocidos en la Constitución Nacional,
Instrumentos Internacionales sobre Derechos Humanos o la ley. A los efectos del presente
artículo se considerarán particularmente los actos u omisiones determinados por motivos
tales como raza, grupo étnico, linaje, religión, nacionalidad, idioma, nacimiento, sexo, co-
lor, ideología, opinión política o gremial, posición económica, condición social, caracteres
físicos o discapacidad.
Quien incurra en la conducta descripta será obligado además, a pedido del damnificado,
s dejar sin efecto el acto discriminatorio, a cesar en su realización y a reparar el daño moral
y material ocasionados”.

Artículo 2: Modifícase el artículo 2 de la Ley 23.592 por el siguiente texto:


Artículo 2: “Elévase en un tercio el mínimo y en un medio el máximo de la escala penal
de todo delito reprimido por el Código Penal o leyes complementarias cuando sea cometido
por persecución u odio a una raza, etnia, linaje, religión, nacionalidad, idioma, nacimien-
to, sexo, color, ideología, opinión política o gremial, posición económica, condición social,
caracteres físicos o discapacidad; o con el objeto de destruir en todo o en parte un grupo
nacional, étnico, racial, religioso, sexo, color o con determinada ideología, opinión, posición
económica, condición social, caracteres físicos o discapacidad. En ningún caso se podrá
exceder el máximo legal de la especie penal de que se trate”.

Artículo 3: Modificase el artículo 3 de la Ley 23.592 por el siguiente texto:

Artículo 3: “Será reprimido con prisión de seis meses a cinco años quien cometiere actos
de violencia contra otra persona o grupo de personas en razón de su raza, etnia, linaje,
religión, nacionalidad, idioma, nacimiento, sexo, color, ideología, opinión política o gremial,
posición económica, condición social, caracteres físicos o discapacidad.
Igual pena se aplicará a los que participaren en una organización 0 realizaren propa-
ganda basados en ideas o teorías de superioridad de una raza o de un grupo de personas
de determinada religión, nacionalidad, linaje, origen étnico o color, que tengan por objeto
la justificación o promoción de la discriminación racial o religiosa en cualquier forma, y a
quienes, directa o indirectamente, en forma pública u oculta, financiaren tal organización 0
propaganda.
En igual pena incurrirán quienes por cualquier medio alentaren, iniciaren, o incitaren a la
persecución o el odio contra una persona o grupos de persona a causa de su raza, etnia,
linaje, religión, nacionalidad, idioma, nacimiento, sexo, color, ideología, opinión política o
gremial, posición económica, condición social, caracteres físicos o discapacidad”.

Artículo 4: [Comuníquese al Poder Ejecutivo]

FUEROS PERSONALES

En lo relativo a este tipo de fueros, tuvieron significancia durante la Monarquía absoluta


en que los nobles eran sometidos a jueces y procesos especiales, conformado por pares,
lo que se traduce en una flagrante violación a la igualdad frente a la ley.

El texto de nuestro Artículo 16 los abroga por completo, es decir todos los habitantes so-
mos judiciables frente a la organización del un poder especial del Estado, cual es el Poder
Judicial, quien en ejercicio de la jurisdicción aplica la ley al caso concreto, lo que se grafica
con la imagen de una “justicia ciega”.

Se plantean casos especiales que de ninguna manera son excepciones a esta regla, tal
el caso del fuero militar que caen en la regulación de una legislación especial y que gozan
del fuero pertinente.

Esta situación se aplica solo para las faltas militares a que están sujetos quienes están
comprendidos bajo las normas contenidas en el Código de Justicia Militar Ley Nº 14.029,
que crean faltas específicas sometidas a juzgamiento por jueces militares, tales como in-
disciplina, desobediencia al superior, etc. La existencia de esta justicia militar de ninguna
manera excluye a los miembros de las fuerzas armadas al sometimiento a procesos ordi-
narios para casos regidos por la ley común tanto civil, comercial o penal.

Podría asimilarse el caso a la falta de ética profesional de médicos, abogados, etc, por
cuyas faltas a las normas que regulan el ejercicio de la profesión son sometidos a los tribu-
nales de disciplina, que no los detraen de la justicia ordinaria.

ACCIONES POSITIVAS

Hemos sostenido que los derechos no pueden quedar como fórmulas vacías en los tex-
tos constitucionales, por el contrario ha sostenido la Corte que son de por sí operativos,
sin embargo en la realidad advertimos que en algunos casos estamos lejos de lograr su
efectiva vigencia.

El tema esta tratado por un autor americano Ronald Dworking, en “Los Derechos en Se-
rio” tributario del comon low, analiza casos judiciales llegados a la Corte en que se plantean
situaciones de discriminación en los hechos, destaca dos casos: un ciudadano negro y otro
judío a los que se les impide el ingreso a dos universidades aduciendo banales argumentos
reglamentarios, en ambos casos la Corte impone al Estado la realización de acciones con-
cretas “acciones positivas” para garantizar el real acceso al goce de los derechos.

En nuestro país rescatamos como ejemplo las llamadas leyes de cupo femenino que ga-
rantizan la incorporación de mujeres en las listas a cargos electivos y dentro de los órganos
de conducción partidarios.

La reforma de 1994 las instituye en el artículo.

Artículo 37: Esta Constitución garantiza el pleno ejercicio de los derechos políticos, con
arreglo al principio de la soberanía popular y de las leyes que se dicten en consecuencia,
el sufragio es universal, igual, secreto y obligatorio.

La igualdad real de oportunidades entre varones y mujeres para el acceso a cargos


electivos y partidarios se garantizará por acciones positivas en la regulación de los partidos
políticos y en el régimen electoral.

LIBERTAD DE EXPRESIÓN

Consiste en el derecho de hacer público, difundir, exteriorizar un conjunto de ideas, creen-


cias, opiniones, críticas, etc, a través de cualquier medio, oral, visual, mediante signos, sím-
bolos y gestos en forma escrita, cinematográfico, televisivo, teatro o cualquier otro.

En cuanto a los medios quedan inmersos en la protección todos los creados o a crear-
se.
De este derecho básico se desprenden otros, derecho a escuchar, a informarse, a guar-
dar silencio, a la protección de la fuente de información, a la libertad de la creación artística,
entre otros.

La recepción constitucional inicia en el Artículo 1 de la Constitución Nacional “La Nación


argentina adopta para su gobierno la forma representativa, republicana y federal...”

En este sentido hemos sostenido que la libertad de expresión es algo así como el termó-
metro de la República, donde no se permite, no hay sistema republicano de gobierno.

También se consagra en el Artículo 14 “... la publicación de las ideas por la prensa sin
censura previa…”

Esta prohibición de censura debe ser previa, es decir que la autoridad o un particular
impida la publicación, que el objeto de la publicación pueda exteriorizarse. Sin embargo
la Corte ha considerado censura previa, la persecución de periodistas, cierre de medios,
cambio de modalidades u horarios de emisión, monopolio de medios, impuestos sobre
papel, discriminación sobre el otorgamiento de partidas presupuestarias a favor de medios
amigos al poder de turno.

Sujeto activo de este derecho es quien transmite, sujeto pasivo es el Estado que debe
abstenerse de prohibir u obstaculizar.

También el Artículo 32 de la Constitución Nacional, incorporado por la reforma de 1860


ha dispuesto:

Artículo 32: El Congreso federal no dictará leyes que restrinjan la libertad de imprenta o
establezcan sobre ella la jurisdicción federal.

Se ha interpretado que esta prohibición abarca solo al Congreso, quedando en manos de


las provincias una posible reglamentación del derecho. Por cierto aún no se ha legislado al
respecto.

El Pacto de San José de Costa Rica en su Artículo 13 dispone que toda persona tiene
derecho a la libertad de pensamiento de expresión. Este derecho comprende la libertad
de buscar, recibir, y difundir informaciones o ideas de toda índole, sin consideración de
fronteras, ya sea oralmente, por escrito, o en forma impresa o artística o por cualquier otro
procedimiento de su elección.

En su 2º inciso prohíbe la censura previa salvo para espectáculos públicos, por razones
de edad.

En nuestra legislación solo se ha permitido legislar sobre delitos que podrían cometerse
por medio de la prensa o difusión e general, nos referimos a las figuras de Injurias y Calum-
nias, que serán objeto de proceso a posterioridad y nunca de manera previa.
En cuanto a la jurisprudencia de la Corte Suprema podemos distinguir las siguientes
etapas:
1) Primera etapa: Los tribunales nacionales no son competentes para conocer en delitos
de imprenta, salvo el caso Calvete Benjamín de 1864 por injurias y calumnias publicadas
contra un senador el Dr. Martín Piñero. Se sostiene que la Corte tiene competencias para
casos regidos por esta Constitución, referido a la inmunidad parlamentaria.
2) Caso Ministerio Fiscal de Santa Fe contra diario de la Provincia: donde se acusa al
editor de incitar a la rebelión. La Corte sostuvo que existía competencia para entender en
un caso federal si se afecta un bien de naturaleza federal.
3) Caso Ramos Raúl C/ Batalla Eduardo: calumnias e injurias. La Corte dice que el artí-
culo 342 debe interpretarse con la potestad del gobierno federal de dictar los Códigos de
Fondo.

En síntesis, cuando el delito es común su represión legislativa corresponde al Congreso


y se juzgará por la justicia ordinaria o federal según que las personas o las cosas cayeran
bajo su jurisdicción (Artículo75 inciso 12).

DERECHO A RÉPLICA

Se incorpora con la Convención Americana de los Derechos y Deberes del Hombre- Pac-
to San José de Costa Rica.

Permite otorgar a quien hubiera sido agraviado por un medio de información el mismo
espacio para poder responder o replicar haciendo uso de este medio para su defensa.

Nuestro derecho lo incorpora en 1992 en la Corte en el fallo Ekmekdjian C/ Sofovich, por


el que se obliga al conductor del programa La Noche del Sábado, dar lectura a una carta
documento, reconociendo la aplicabilidad en el derecho interno de un tratado internacional
en virtud de la Convención de Viena respecto al derecho de los tratados internacionales.

LIBERTAD FÍSICA Y LOCOMOCIÓN

Siguiendo a Germán Bidart Campos: “es el derecho a no se arrestado sin causa justa y
sin forma legal”. Apareja así mismo, la libertad de locomoción y la libertad de circulación.
Nuestra Constitución los consagra en el Artículo 14, al consagrar el derecho de entrar, per-
manecer, transitar y salir del territorio; y los protege en el 18. También encuentra expresa
consagración en el Pacto de San José de Costa Rica, entre otros.

LIBERTAD DE INTIMIDAD

Presupone la tutela jurídica de la vida privada, según lo dispone el Artículo 19. En el caso
Ponzatti de Balbín fallado el 11 de diciembre de 1984, referido a la acción incoada por la
familia del Dr. Ricardo Balbín en contra de la publicación de la revista Gente que en su
portada publica la fotografía del líder agonizante.

En ese de la Corte sostuvo “en relación directa con la libertad individual protege un
ámbito de autonomía individual constituida por sentimientos, hábitos y costumbres, las rela-
ciones familiares, la situación económica, las creencias religiosas, la salud mental y físicas
y, en suma, las acciones, hechos o datos que teniendo en cuenta las formas de vida acep-
tadas por la comunidad está reservadas al propio individuo y cuyo conocimiento y divulga-
ción por los extraños significa un peligro real o potencial para la intimidad. El derecho a la
privacidad comprende no sólo a la esfera doméstica, el círculo familiar y de amistad sino
otros aspectos de la personalidad espiritual o física de las personas, tales como la integri-
dad corporal o la imagen, y nadie puede inmiscuirse en la vida privada de una persona, ni
violar áreas de sus actividades destinadas a ser difundidas sin su consentimiento o el de
sus familiares autorizados para ello”.

LIBERTAD DE CONCIENCIA Y DE CULTO

Gonzalez Calderón no distingue entre ambas, y las identifica como formando parte con
el derecho a la intimidad, sin embargo mientras que la libertad de conciencia no trasciende
la orbita de la persona, la libertad de culto necesariamente es exteriorizada y trasciende a
la sociedad, se exteriorizan rituales, y prácticas familiares y comunitarias.

En nuestro sistema están constitucionalizadas en el artículo 14 y 19.

Alberdi, en las Bases, logra un equilibrio entre el respeto a las mayorías poblacionales
practicantes de la religión católica, con la libertad de culto condición sine qua non para lo-
grar su política inmigratria.

De la libertad de cultos se deriva el principio de laicicidad vigente en la educación pública,


también tiene estrecha conexión con el matrimonio civil, desde la vigencia de la ley 2393.

Por ley Nº 21.745 se ha dispuesto que es el Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto


de la Nación quien autoriza el ingreso de nuevos cultos para su práctica en nuestro país,
se crea un Registro Nacional de Cultos (con más de 200 reconocidos). En todos los casos
pueden no ser aceptados o rechazados si se demuelan lesivos al orden público, la seguri-
dad nacional, la moral y las buenas costumbres.

Compatible con este derecho también la Corte ha hecho lugar a planteos para no decla-
rar la religión o el derecho a no practicar un culto.

LIBERTAD DE TRABAJO Y EJERCER TODA INDUSTRIA LÍCITA

Este concepto del trabajo en relación de dependencia modifica su estructura por la inclu-
sión de los derechos sociales.

En este caso la Constitución protege el trabajo por iniciativa propia y el ejercicio de la


producción de bienes y servicios: su comercialización. Materia que ha sido harto relegada
por las leyes en el ámbito nacional, provincial y municipal.
LIBERTAD DE PETICIÓN Y DE ASOCIACIÓN

También consagradas en el Artículo 14 como el simple derecho de peticionar; las auto-


ridades no tienen en contrapartida la obligación de dar respuesta, salvo en el ámbito del
derecho administrativo en que la administración nacional, provincial o municipal están obli-
gadas a responder. En cuanto al ejercicio de petición como derecho político, lo trataremos
oportunamente.

En lo atinente a la libertad de asociación como derecho civil, siempre debe perseguir un


fin lícito, el mismo está regado en el código civil al referirse en su Artículo 33 a las personas
jurídicas privadas, pudiendo estas perseguir o no fines de lucro.

Es importante destacar el relevante rol protagónico que está adquiriendo la participación


del llamado tercer sector u ONGs en la defensa y concientización de los derechos del hom-
bre.

LA PROPIEDAD
Constitucionalmente, están consagrados en el artículo 14 y 17.

Artículo 14: Todos los habitantes de la nación gozan de los siguientes derechos confor-
me a las leyes que reglamentan su ejercicio a saber: …de usar y disponer de su propie-
dad…

Artículo 17: La propiedad es inviolable, y ningún habitante de la Nación puede ser priva-
do de ella, sino en virtud de sentencia fundada en ley. La expropiación por causa de utilidad
pública, debe ser calificada por ley y previamente indemnizada. Sólo el Congreso impone
las contribuciones que se expresan en el Art. 4°. Ningún servicio personal es exigible, sino
en virtud de ley o de sentencia fundada en ley. Todo autor o inventor es propietario exclu-
sivo de su obra, invento o descubrimiento, por el término que le acuerde la ley. La confis-
cación de bienes queda borrada para siempre del Código Penal Argentino. Ningún cuerpo
armado puede hacer requisiciones, ni exigir auxilios de ninguna especie.

Sostiene Linares Quintana, que la propiedad privada que está garantizada en todos los
estados aún en los colectivistas, es una cuestión de grado. En estos estados la discusión
recae sobre los bienes de producción.

El derecho romano lo incorporó como una postetad absoluta del propietario sobre la
cosa: ius fruendi, utendi y abutendi.

A posterioridad, se desdibuja el concepto en el feudalismo; el campesino explotaba la


tierra pero el fruto era del Sr. Feudal.

Con la proliferación del comercio y el crecimiento de la burguesía se coronó este derecho


como fundamental.
Para Joaquín V. Gonzalez, es un atributo de la personalidad y anterior a la Constitución.
Otros autores sostienen que no es un derecho natural, sino reconocido por el Estado de
Derecho .

Sánchez Viamonte distingue en forma abstracta como derecho de todos a ser titular del
derecho de propiedad, sinónimo del derecho a la propiedad; distinto del derecho de propie-
dad sobre una cosa determinada.

En ese sentido nuestro Código Civil analiza como uno de los atributos de la persona al
Patrimonio, como un derecho abstracto que se pone en acto con el derecho de la propie-
dad.

La Declaración de Derecho Humanos de la ONU de 1948, en su Artículo 17 dispone que


toda persona tiene derecho a la propiedad y nadie puede ser privado de su ella.

BIENES SUCEPTIBLES DE PROPIEDAD PRIVADA

De esta distinción depende la extensión del derecho abstracto, importa distinguir qué
bienes integran el dominio público y cuales el dominio privado. En nuestro orden jurídico es
el Código Civil en sus artículos 2339, 2340 quien enumera los bienes públicos; el artículo
2341 dispone el uso de las personas de los bienes públicos, el artículo 2342 conceptualiza
los bienes privados del Estado, mientras que el 2343 establece cuales son los bienes sus-
ceptibles de apropiación privada.

Dentro de esta distinción es interesante analizar como la reforma constitucional de 1994


introduce un nuevo concepto el de La Propiedad Comunitaria a fin de garantizar los dere-
chos de los pueblos aborígenes.

Artículo 75: Corresponde al Congreso:

Inciso 17: Reconocer la preexistencia étnica y cultural de los pueblos indígenas argen-
tinos….Reconocer la personería jurídica de sus comunidades , y la posesión y propiedad
comunitaria de la tierras que tradicionalmente ocupan; y regular la entrega de otras aptas
y suficientes para el desarrollo humano; ninguna de ellas será enajenable, transmisible ni
susceptible de gravámenes o embargos…..

Esta disposición es innovadora sobre todo el régimen instaurado por la ley civil argentina.

LA FUNCIÓN SOCIAL

Si bien el Derecho a la propiedad es un derecho individual, se le asigna una función so-


cial, atañe al interés colectivo .

La doctrina social de la Iglesia recepta esta concepción a partir de la Encíclica Rerum


Novarum de 1891 y todo el constitucionalismo social argentino receptándolo no solo en la
legislación sino también en fallos judiciales. En el fallo de 1922 autos “Ercolano C/ Lanteri
se sostiene que todo derecho, aún el de propiedad debe ser reglamentado razonablemen-
te, de modo de permitir la convivencia social.

LA PROPIEDAD INTELECTUAL

Todos los bienes materiales o inmateriales son susceptibles de ser objeto del derecho
de propiedad. En ese sentido la última parte del Artículo 17 en su última parte dispone...
Todo autor o inventor es propietario exclusivo de su obra, invento o descubrimiento, por el
término que le acuerde la ley.

Ley 11723 garantiza de por vida el derecho exclusivo de autor de obras científicas, Lite-
rarias y artísticas, y en favor de sus herederos hasta 50 años después de la muerte.

También regula el tema la ley 111 de patentes e invenciones con amparo por 5, 10 o 15
años; la ley 3975 de marcas de fábrica, de comercio y agricultura; Ley 17011 protección
de la propiedad industrial.

RESTRICCIONES Y LÍMITES

El carácter relativo en cuanto a la consagración del derecho de propiedad marca un doble


límite en su contenido en su extensión material y temporal.

Sobre el ejercicio del derecho de propiedad recaen restricciones del derecho civil y del
derecho administrativo, como el dispuesto por el Artículo 2611 del Código Civil. También
está sujeto al poder de policía en cuanto a la posibilidad legislativa de delimitar su ejercicio,
tales como códigos de edificación urbana, moralidad, salubridad, que imponen limitaciones
que no son indemnizables.

También encontramos restricciones que pueden establecerse en beneficio de otros parti-


culares como servidumbres, que son desmembraciones del derecho y son indemnizables,
puede ser administrativa o del derecho privado.

Excepciones a la inviolabilidad: sentencia fundada en ley y Expropiación, por ley y previa


indemnización.

LA EXPROPIACIÓN

Distinto es el caso de expropiación por razones de utilidad pública. Linares Quintana:


lo define sosteniendo que es el acto por el cual el Estado priva a una persona de un bien
determinado, con fines de utilidad pública o interés general calificados por ley, y mediante
una justa y previa indemnización.

El Estado tiene un poder soberano sobre todos los bienes, puede desapoderar para ga-
rantizar el bien general.

Nuestros autores sostienen que es de naturaleza mixta es de derecho público pero debe
mediar la indemnización.
Requisitos:
1) Utilidad pública,
2) Declaración por ley
3) previa indemnización

Ley de expropiaciones 21499 ha dispuesto que en todos los casos se debe justificar por
la satisfacción del bien común.

La Corte ha sostenido que la declaración de utilidad pública por ley ingresa en el campo
de Causa política no judiciable.

La ley debe determinar el bien, la indemnización debe abonarse antes del desapodera-
miento. El propietario no debe sufrir menoscabo patrimonial ni enriquecimiento sin causa.
es un valor objetivo.

LA CONFISCACIÓN

El Artículo 17 en su último párrafo ha dispuesto: La confiscación de bienes queda borra-


da para siempre del Código Penal Argentino. Ningún cuerpo armado puede hacer requisi-
ciones, ni exigir auxilios de ninguna especie.
Las Requisiciones eran actos de castigo y represalia que tenían lugar en la etapa históri-
ca de la lucha entre unitarios y federales.
Bielsa lo justifica para casos de guerra y temporariamente.

CONFISCATORIEDAD

Este tema está directamente vinculado con el cuantum de los tributos, en este tema la
Corte Suprema ha dispuesto que por todo concepto tributario no puede excederse el 33%
como alícuota sumado todos los impuestos nacionales, provinciales o municipales.

OTRAS GARANTÍAS DEL ARTÍCULO 17

Este tema Ver art. 4 principio de legalidad del impuesto ver atribuciones de iniciación de
Cámara de diputados 52.
Ningún servicio personal es exigible, sino en virtud de ley o sentencia:
1) Leyes que pueden exigir servicios servicio militar de defensa civil.
2) Privación de libertad por sentencia con carga de trabajo.

LOS DERECHOS SOCIALES

La incorporación constitucional se produce en la reforma de 1957 luego de la derogación


de la reforma de 1945.

El Artículo 14 bis.

Artículo 14 bis: El trabajo en sus diversas formas gozará de la protección de las leyes,
las que asegurarán al trabajador: condiciones dignas y equitativas de labor; jornada limi-
tada; descanso y vacaciones pagados; retribución justa; salario mínimo vital móvil; igual
remuneración por igual tarea; participación en las ganancias de las empresas, con control
de la producción y colaboración en la dirección; protección contra el despido arbitrario; es-
tabilidad del empleado público; organización sindical libre y democrática reconocida por la
simple inscripción en un registro especial.
Queda garantizado a los gremios: Concertar convenios colectivos de trabajo; recurrir a
la conciliación y al arbitraje; el derecho de huelga. Los representantes gremiales gozarán
de las garantías necesarias para el cumplimiento de su gestión sindical y las relacionadas
con la estabilidad de su empleo.
El Estado otorgará los beneficios de la seguridad social, que tendrá carácter de integral e
irrenunciable. En especial, la ley establecerá: el seguro social obligatorio, que estará a car-
go de entidades nacionales o provinciales con autonomía financiera y económica, adminis-
tradas por los interesados con participación del Estado, sin que pueda existir superposición
de aportes; jubilaciones y pensiones móviles; la protección integral de la familia; la defensa
del bien de familia; la compensación económica familiar y el acceso a una vivienda digna.
Aseguran los derechos del trabajador, los de las organizaciones gremiales y los de la
seguridad social y familia

También han sido consagrado en los tratados internacionales que gozan de jerarquía
constitucional como El Pacto de San José de Costa Rica , El Pacto Internacional de Dere-
chos Económicos, Sociales y culturales. Declaración Universal de Derechos Humanos.

En la legislación se han incorporado en la ley de contrato de trabajo 20744, sobre conve-


nios colectivos ley 14250, La conciliación y arbitraje ley 14786, de conciliación obligatoria.
y arbitraje obligatorio ley 20 638.

No obstante que después del caso Siri todos los derechos se consideran operativos, al-
gunos de los consagrados en esta materia son programáticos y dependen de una posterior
regulación, tal el caso de al participación del trabajador en las ganancias de las empresas,
o la regulación de la protección de la familia con acceso a una vivienda digna.

Se han consagrado expresamente entre otros derechos:

Igual remuneración por igual tarea como media anti discriminación Declaración Universal
de Derechos Humanos artículo 23 inc.2.

También se regula lo atinente a la organización gremial, protegida especialmente por la


Organización Internacional del Trabajo.

Se ha incorporado la seguridad social como protección a la familia, la maternidad, en-


fermedad, riesgos imprevistos, accidentes, enfermedades laborales, nacimiento, muerte,
jubilación.

Protección a la familia, contemplando el bien de familia, asignaciones familiares, acceso


a una vivienda digna.
Seguro social obligatorio jubilaciones y pensiones móviles, etc.

También la reforma constitucional de 1994 ha incluido estos temas no sólo con la incor-
poración de tratados internacionales relativos a la temática, sino que también los consagra
en el Artículo 75 el inciso 19 primer párrafo:

Inciso 19. Proveer lo conducente al desarrollo humano, al progreso económico con jus-
ticia social, a la productividad de la economía nacional, a la generación de empleo, a la
formación profesional de los trabajadores, a la defensa del valor de la moneda, a la investi-
gación y desarrollo científico y tecnológico, su difusión y aprovechamiento.

DERECHOS DEL AMBIENTE. DERECHO DE USUSARIOS Y CONSUMIDORES

Estos derechos ha sido agrupados bajo la denominación de derechos difusos porque no


necesariamente tienen un sujeto activo determinado, y su incumplimiento afectan al con-
junto de los hombres en sociedad, de manera indiscriminada. También son considerados
de Tercera generación y han sido objeto de especial protección por el Derecho Internacio-
nal de los Derechos Humanos.

La protección constitucional de estos derechos se incorpora en el nuevo capítulo sobre


derechos y garantías en la reforma de 1994.

Artículo 41: Todos los habitantes gozan del derecho a un ambiente sano, equilibrado,
apto para el desarrollo humano y para que las actividades productivas satisfagan las ne-
cesidades presentes sin comprometer las de las generaciones futuras; y tienen el deber
de preservarlo. El daño ambiental generará prioritariamente la obligación de recomponer,
según lo establezca la ley.
Las autoridades proveerán a la protección de este derecho, a la utilización racional de
los recursos naturales, a la preservación del patrimonio natural y cultural y de la diversidad
biológica, y a la información y educación ambientales.
Corresponde a la Nación dictar las normas que contengan los presupuestos mínimos
de protección, y a las provincias, las necesarias para complementarlas, sin que aquellas
alteren las jurisdicciones locales.

Se prohíbe el ingreso al territorio nacional de residuos actual o potencialmente peligro-


sos, y de los radiactivos.

Cabe destacar que existen también leyes reglamentarias sobre la materia tal la Ley Na-
cional de Política Ambiental Nº 25675.

Artículo 42: Los consumidores y usuarios de bienes y servicios tienen derecho, en la


relación de consumo, a la protección de su salud, seguridad e intereses económicos; a una
información adecuada y veraz; a la libertad de elección, y a condiciones de trato equitativo
y digno.
Las autoridades proveerán a la protección de esos derechos, a la educación para el con-
sumo, a la defensa de la competencia contra toda forma de distorsión de los mercados, al
control de los monopolios naturales y legales, al de la calidad y eficiencia de los servicios
públicos, y a la constitución de asociaciones de consumidores y de usuarios.
La legislación establecerá procedimientos eficaces para la prevención y solución de con-
flictos, y los marcos regulatorios de los servicios públicos de competencia nacional, pre-
viendo la necesaria participación de las asociaciones de consumidores y usuarios y de las
provincias interesadas, en los organismos de control.

La ley reglamentaria de la Defensa de Derechos de Usuarios y Consumidores es la Nº


24240.

GARANTÍAS

Hemos conceptualizado a las garantías como remedios constitucionales, vías, caminos,


procesos, destinados a volver a su estado anterior o a reponer los derechos constituciona-
les que han sido menoscabados, violados; o lisa y llanamente desconocidos por las auto-
ridades o por particulares.

Encontramos diversas manifestaciones en su regulación insertas en el texto de la Cons-


titución Nacional, en las leyes reglamentarias y en los tratados internacionales sobre pro-
tección de derechos del hombre.

Pasaremos a considerarlas individualmente:

GARANTIAS A LA LIBERTAD CORPORAL

El Artículo 14 ha consagrado el derecho de todo habitante a entrar, transitar, permanecer


o salir del territorio nacional.

Este derecho es conocido en doctrina como Libertad ambulatoria o de locomoción, en


caso que se produzca una lesión al mismo, se ha instrumentado una de las garantías más
antiguas en el tiempo, y que de alguna manera de nacimiento al resto de las garantías con-
sagradas, hablamos del HABEAS CORPUS.

Garantiza la efectiva libertad corporal, contra actos de autoridad o de particulares en-


cuentra base de regulación constitucional en el Artículo 18.

Artículo 18: Ningún habitante de la Nación puede ser penado sin juicio previo fundado
en ley anterior al hecho del proceso, ni juzgado por comisiones especiales, o sacado de
los jueces designados por la ley antes del hecho de la causa. Nadie puede ser obligado
a declarar contra sí mismo; ni arrestado sino en virtud de orden escrita de autoridad com-
petente. Es inviolable la defensa en juicio de la persona y de los derechos. El domicilio es
inviolable, como también la correspondencia epistolar y los papeles privados; y una ley
determinará en qué casos y con qué justificativos podrá procederse a su allanamiento y
ocupación. Quedan abolidos para siempre la pena de muerte por causas políticas, toda
especie de tormento y los azotes. Las cárceles de la Nación serán sanas y limpias, para
seguridad y no para castigo de los reos detenidos en ellas, y toda medida que a pretexto
de precaución conduzca a mortificarlos más allá de lo que aquella exija, hará responsable
al juez que la autorice.

Su naturaleza está en discusión. Algunos dicen que es un recurso y otros una acción,
que da inicio a un verdadero proceso, su objetivo primordial es que un órgano jurisdiccional
puede revisar la legitimidad y legalidad de la detención de una persona, para que en caso
negativo ordene inmediatamente la libertad.

En la reforma constitucional, el Artículo 43 lo incorpora como una especie del género del
amparo, transcribimos el párrafo pertinente.

Artículo 43

Cuando el derecho lesionado, restringido, alterado o amenazado fuera la libertad física,


o en caso de agravamiento ilegítimo en la forma o condiciones de detención, o en el de
desaparición forzada de personas, la acción de habeas corpus podrá ser interpuesta por
el afectado o por cualquiera en su favor y el juez resolverá de inmediato aun durante la
vigencia del estado de sitio.

La ley reglamentaria Nº 23098 ha dispuesto su procedencia:


1) Habeas corpus reparador, ante la privación de la libertad personal sin orden escrita de
autoridad competente o en forma ilegal.
2) Habeas corpus preventivo, ante la amenaza de consumarse la privación de la liber-
tad.
3) Habeas Corpus Restringido, ante las restricciones o molestias secundarias de la liber-
tad individual, seguimientos, vigilancia impedimento de ingresar a ciertos lugares.
4) Habeas Corpus Correctivo ante el agravamiento ilegítimo de las condiciones de de-
tención.
5) Ante la negativa a la solicitud de optar por salir del País.
6) Existen Habeas Corpus de pronto despacho y por mora en el traslado de un detenido.

El Habeas Corpus se mantiene frente al Estado de sitio: pueden los jueces analizar y
expedirse sobre la constitucionalidad de la declaración del Estado de sitio y su correlación
con el acto de privación de la libertad y la materialización de la opción a salir del país.

En estos casos deben interpretarse las disposiciones del artículo 4 de la ley de Habeas
Corpus a la luz del Artículo 23 de la Constitución Nacional, en virtud de ello la decisión de
declarar el Estado de Sitio sigue exenta del contralor judicial, lo que no implica que el Ha-
beas Corpus no se pueda presentar aún durante su vigencia lo que se reafirma luego con
la redacción del Artículo 43.

Pasos del proceso de Habeas Corpus:


1) Petición, con todo aporte de datos
2) Pedido de informes
3) La comparecencia del detenido frente al tribunal
4) Análisis de la constitucionalidad de la medida, deben ser ilegales los actos atacados
5) Resolución judicial

Dentro de este tema cobra relevancia la garantía de Asilo basado en los Artículos 18 y
19. Tratados de Montevideo 1888 y Declaración Universal de Derechos Humanos 1948.

En general el Asilo procede por persecuciones políticas, raciales o religiosas etc. nunca
comisión de delitos comunes y es el Estado Asilante quien debe determinar la posible ex-
tradición.

GARANTÍAS EN EL PROCESO

Consideramos al Proceso como un conjunto sucesivo de actos rituales cumplidos ante


el órgano jurisdiccional que culmina con la sentencia, lo que se traduce en la decisión final
sobre el asunto a resolver.

En todo Proceso se deben respetar el conjunto de reglas legales y de equidad que de-
fienden los derechos humanos: Defensa, Juez natural, Prueba y Sentencia fundada, pero
cobran mayor relevancia en el proceso penal, toda vez que está en riesgo la libertad de la
persona.

De esta garantía en general se desprenden en particular aquellos tópicos especialmente


contenidos en el Artículo 18.

Ningún habitante de la Nación puede ser penado sin juicio previo fundado en ley anterior
al hecho del Proceso, la necesidad de juicio previo reafirma la obligatoriedad del Estado
de actuar por sus órganos constitucionales la jurisdicción, regidos además por las leyes de
fondo y de forma que deben ser previas al hecho del Proceso.

Se fija también la aplicación irretroactiva de la ley en general, cuyo principio cede frente
a la máxima de la aplicación de la ley más benigna.

Derecho a la jurisdicción que se articula con el principio del juez natural, ya que el Es-
tado debe organizar la administración de justicia según competencia de grado, materia,
territorio, no pudiendo instaurarse bajo ninguna condición un juez especial o comisiones
especiales de juzgamiento. Debe interpretarse el término juez como juzgado o tribunal y no
con la persona que ejerce el cargo; ni juzgado por comisiones especiales, o sacado de los
jueces designados por la ley antes del hecho de la causa.

GARANTÍAS PARA LA CONDENA

Principio de inocencia que se mantiene hasta la condena definitiva, lo que también impli-
ca que nadie puede ser obligado a declarar contra sí mismo.

Prohibición analógica de la ley penal, su interpretación extensiva, en virtud del principio


de legalidad y de reserva penal.
Mantenimiento de la libertad, salvo que se perjudique los fines del proceso o se tema que
el imputado eludirá el accionar de la justicia.

Institutos: excarcelación bajo caución juratoria o fianza real, pena de ejecución condicio-
nal y libertad condicional.

La sentencia arbitraria se origina en el incumplimiento del debido proceso y de garantías


procesales.

Prohibición de la pena de muerte por razones políticas de los tormentos y azotes. Que-
dan abolidos para siempre la pena de muerte por causas políticas, toda especie de tormen-
to y los azotes.

La pena es instrumento de seguridad y defensa social no de castigo. Las cárceles de la


Nación serán sanas y limpias, para seguridad y no para castigo de los reos detenidos en
ellas, y toda medida que a pretexto de precaución conduzca a mortificarlos más allá de lo
que aquella exija, hará responsable al juez que la autorice.

Recordemos que el habeas corpus correctivo se origina en el agravamiento ilegítimo de


forma y condiciones en que se cumple la sentencia art. 43 y ley 23098.

INVIOLABILIDAD DEL DOMICILIO, CORRESPONDENCIA Y PAPELES PRIVADOS

Es inviolable la defensa en juicio de la persona y de los derechos. El domicilio es inviola-


ble, como también la correspondencia epistolar y los papeles privados; y una ley determina-
rá en qué casos y con qué justificativos podrá procederse a su allanamiento y ocupación.

Intimidad de la persona encuentra fundamento constitucional en el Artículo 19:

Artículo 19: Las acciones privadas de los hombres que de ningún modo ofendan al orden
y a la moral pública, ni perjudiquen a un tercero, están sólo reservadas a Dios, y exentas
de la autoridad de los magistrados. Ningún habitante de la Nación será obligado a hacer lo
que no manda la ley, ni privado de lo que ella no prohíbe.

Se ha dispuesto que la orden de allanamiento debe ser clara, precisa consignarse el


funcionario evitarse que lo llevará a cabo, que no sea de noche, etc.

LA ACCION DE AMPARO

Protege especialmente el resto de los derechos constitucionales a excepción de la liber-


tad física o de locomoción. Nace como una creación jurisprudencial, luego se avanza al
dictarse ley de amparo 16.986/ 66 y los Arts. 321 y 498 del Código Procesal civil y comercial
de la Nación, en Córdoba ley 4915/67 y 5770/74 agrega la acción contra particulares.

Actualmente en la reforma Artículo 43 se incluyen el amparo a los derechos individuales,


a los derechos colectivos y el Habeas Data.
Artículo 43

Toda persona puede interponer acción expedita y rápida de amparo, siempre que no
exista otro medio judicial más idóneo, contra todo acto u omisión de autoridades públicas
o de particulares, que en forma actual o inminente lesione, restrinja, altere o amenace, con
arbitrariedad o ilegalidad manifiesta, derechos y garantías reconocidos por esta Constitu-
ción, un tratado o una ley. En el caso, el juez podrá declarar la inconstitucionalidad de la
norma en que se funde el acto u omisión lesiva.
Podrán interponer esta acción contra cualquier forma de discriminación y en lo relativo
a los derechos que protegen al ambiente, a la competencia, al usuario y al consumidor, así
como a los derechos de incidencia colectiva en general, el afectado, el defensor del pueblo
y las asociaciones que propendan a esos fines, registradas conforme a la ley, la que deter-
minará los requisitos y formas de su organización.

Esta acción debe interponerse frente a una alteración o restricción arbitraria del derecho
constitucional por parte de la autoridad o particulares, por acción u omisión, se reclama que
cesen dichas violaciones por esta via sumarísima, la violación debe ser clara y manifiesta.

El perjuicio debe ser real, tangible, manifiesto, concreto e ineludible o amenaza concreta.

Los hechos u omisiones deben ser notoriamente ilícitos o notablemente arbitrarios.

Entre sus requisitos destacamos:


1) Solo se declarará inadmisible cuando no exista un remedio judicial más idóneo (antes se
exigía el agotar la vía administrativa).
2) Se puede accionar contra actos de autoridad lo que incluiría al Poder Judicial.
3) Los derechos son también los de los tratados y leyes.
4) Es independiente de la garantía de prestación de un servicio público.
5) Ahora también puede tratarse por esta vía los decretos, leyes y ordenanzas.

Debe ser presentada por el damnificado o su apoderado, se deben especificar claramen-


te los hechos, autores de la violación. Y la petición clara al juez.

El juez puede rechazarla sin trámite.

La ley nacional de amparo es la Nº 16.986

EL AMPARO COLECTIVO

Para derechos de incidencia colectiva, amparo y defensa de usuarios y consumidores.

Legitimación activa al afectado, defensor del pueblo y asociaciones civiles especialmente


inscriptas.

EL HABEAS DATA

Protege los derechos de la intimidad y el honor, se vincula también con la libertad infor-
mática.

Artículo 43

Toda persona podrá interponer esta acción para tomar conocimiento de los datos a ella
referidos y de su finalidad, que consten en registros o bancos de datos públicos, o los pri-
vados destinados a proveer informes, y en caso de falsedad o discriminación, para exigir la
supresión, rectificación, confidencialidad o actualización de aquellos. No podrá afectarse el
secreto de las fuentes de información periodística.

Encuentra regulación normativa en la ley 25.326.

LIMITACIONES A DERECHOS Y GARANTÍAS

Hasta aquí hemos estudiado lo relativo a derechos y garantías, pero debemos saber que
su consagración no es ni puede ser absoluta, sino relativa, imitada a la necesidad de la
ordenada convivencia social.

El derecho constitucional instaura limitaciones a derechos subjetivos de manera per-


manente con el fin de asegurar el bien común, la posible convivencia social, el orden la
realización del bien justicia y la equidad y para circunstancias extremas inusuales impone
límites de naturaleza excepcional.

LIMITACIONES PERMANENTES

Surgen de la convivencia social diaria y su ejercicio es relativos a su reglamentación, la


que dispondrá en que medida podremos ejercerlos, sin afectar al orden público, la moral,
las buenas costumbres y los derechos de terceros. Al tratarse de limitar derechos constitu-
cionales esa reglamentación legal debe ser razonable La Reglamentación se rige por los
principios de Legalidad y Razonabilidad.

PRINCIPIO DE LEGALIDAD

Contemplado en los Artículos 14 en especial cuando en su primer enunciado determina


que los habitantes de la nación gozan de los siguientes derechos conforme a las leyes que
reglamentan su ejercicio.

Artículo 19- Las acciones privadas de los hombres que de ningún modo ofendan al
orden y a la moral pública, ni perjudiquen a un tercero, están sólo reservadas a Dios, y
exentas de la autoridad de los magistrados. Ningún habitante de la Nación será obligado a
hacer lo que no manda la ley, ni privado de lo que ella no prohíbe.

En todos los casos es el Congreso el órgano competente para reglamentar por ley el
ejercicio de los derechos. Debemos tener en cuenta que el término ley no es formal, sino
en sentido lato, puede haber otras normas jurídicas en sentido general; ej.: Ordenanzas
municipales, universitarias, etc. Incluye leyes nacionales o provinciales, ordenanzas, esta-
tutos, decretos, etc.

DERIVACION DEL PRINCIPIO DE LEGALIDAD

Para la TÉCNICA se habla de medios razonables para la obtención de ciertos fines.

En AXIOLOGÍA JURÍDICA se refiere al fundamento de valores específicos del plexo


axiológico: solidaridad, cooperación, poder, paz, etc. y en el valor justicia.

EL PRINCIPIO DE RAZONABILIDAD

Surge de lo dispuesto por el artículo 28 de la Constitución Nacional.

Artículo 28- Los principios, garantías y derechos reconocidos en los anteriores artículos,
no podrán ser alterados por las leyes que reglamenten su ejercicio.

El Dr. Ricardo Haro habla del marco de lo jurídico distinguiendo como notas:

1) La razonabilidad Cuantitativa
Protege la identidad de los derechos considerados en sí mismos, se pondera entre el
derecho y la restricción.

2) La Razonabilidad Cualitativa
Protege la igualdad ante la ley.
Toda vez que el legislador cree una limitación en diferentes categorías, la distinción debe
ser razonable.
A antecedentes iguales se deben aplicar iguales consecuencias sin excepciones arbitra-
rias.
Principio de ponderación la distinción no debe basarse en privilegio y hostilidad infunda-
da.

3) La Razonabilidad Instrumental
Se deriva de la proporcionalidad entre la finalidad de la ley y las restricciones impuestas
a los derechos. Tiene en cuenta la adecuación del medio y el fin buscado por la norma.
En todos los casos compete al Poder Judicial decidir si las limitaciones encuadran o no
en el marco constitucional.

PODER DE POLICÍA

Es la potestad jurídica en virtud de la cual los poderes del Estado tienen la posibilidad de
limitar los derechos individuales por medio de la ley.

CARACTERIZACIÓN CONSTITUCIONAL

Preámbulo objeto: promover el bienestar general.


Parte Dogmática Arts. 14, 19, 28
Parte Orgánica 75 inc. 18 y 32
El Artículo 75 inc. 30 incluido por la reforma 1994 habla de poder de policía en los esta-
blecimientos de utilidad nacional.

En cuanto al alcance del poder de policía y las materias sujetas a reglamentación, se han
esbozados dos teorías una la europea que le otorga un carácter restringido.

1) Restringido: medidas sobre salubridad, seguridad y moralidad países como Francia e


Italia. Mientras la tesis norteamericana amplía las materias sujetas a regulación.

2) Amplio: bienestar general tesis americana incluyendo las cláusulas económico sociales.
En un país federal como el nuestro es competencia concurrente entre Nación y Provincias
incluyendo a municipios.

EVOLUCIÓN

1) Salubridad, seguridad y moralidad


2) Asegurar el bienestar general
3) Promover los intereses económicos de la comunidad

LIMITACIONES EXCEPCIONALES

Se refiere a la restricción que sufren los derechos individuales, en razón de la existencia


de una situación de verdadera anormalidad y excepción.
Esta norma es de carácter transitorio.
Importa el acrecentamiento del poder del Estado.

LA EMERGENCIA EN EL DERECHO PÚBLICO

Emergencia: se presenta ante estados o situaciones históricamente ciertas o posibles,


excepcionales de necesidad ante lo imprevisto o insólito.

La vigencia del derecho en general está condicionada a la normalidad, cuando esta nor-
malidad se quiebra es necesario dotar de mayores poderes al Estado. Se menguan dere-
chos individuales por la excepcionalidad. Se pretende resguardar la comunidad, la paz,
justicia o bienestar.

Son situaciones anormales, que resultan extraordinarios y excepcionales.

Origen: circunstancias físicas ej. inundaciones, terremotos


políticas, ej. : caos , revolución, golpe de estado
económicas, hiperinflación

Debe ser declarada por el Poder Legislativo (poder de Policía).

Dota de mayores atribuciones al Poder Ejecutivo (policía).

Las restricciones fueron económicas: alquileres, plazos fijas diferimientos de pagos, pa-
gos con bonos, reducción de tasas de interés, precios máximos, lo que se restringió fueron
los derechos de la propiedad y del libre comercio, de contratación.

Estas restricciones se aceptan de manera transitoria y razonablemente.

César Enrique Romero estudioso de la materia ha brindado sus características o rasgos


más sobresalientes:
1) Existencia de una situación extraordinaria.
2) Estados temporales o transitorios.
3) Implica concentración de poderes o facultades.
4) No es creadora de poderes.
5) Comporta restricción y/o suspensión de derechos y garantías personales y colectivas.
6) Significa el uso distinto o diferente del poder ya otorgado por la ley o la constitución.
7) Debe ser declarada o determinada por órganos diferentes a los que deben ejercer los
poderes concentrados.
8) Constituye su finalidad la defensa del orden constitucional o el resguardo vital del grupo,
no su destrucción o aniquilamiento.
9) Su plena vigencia y cabal aplicación requiere un pueblo celoso de libertad.

Las pautas de limitación o control tienden a:


a) La eficacia de la medida en procura de superar la emergencia.
b) La protección de los individuos cuyos derechos y garantías se restringen.

Dentro de estas medidas de excepción citamos:

DECRETOS DE NECESIDAD Y URGENCIA

Son medidas dictadas por el Poder ejecutivo que suplen funciones legislativas.

La Corte en el Caso Peralta 1990, convalidó el dictado los decretos de emergencia 23696
y 23697 ya que fueron dictados por una situación de emergencia.

Reforma constitucional de 1994 los incorpora en el artículo 99 inciso 3.

Artículo 99. El Presidente de la Nación tiene las siguientes atribuciones:

3. Participa de la formación de las leyes con arreglo a la Constitución, las promulga y


hace publicar. El Poder Ejecutivo no podrá en ningún caso bajo pena de nulidad absoluta
e insanable, emitir disposiciones de carácter legislativo. Solamente cuando circunstancias
excepcionales hicieran imposible seguir los trámites ordinarios previstos por esta Cons-
titución para la sanción de las leyes, y no se trate de normas que regulen materia penal,
tributaria, electoral o el régimen de los partidos políticos, podrá dictar decretos por razones
de necesidad y urgencia, los que serán decididos en acuerdo general de ministros que de-
berán refrendarlos, conjuntamente con el jefe de gabinete de ministros.
El jefe de gabinete de ministros personalmente y dentro de los diez días someterá la
medida a consideración de la Comisión Bicameral Permanente, cuya composición deberá
respetar la proporción de las representaciones políticas de cada Cámara. Esta comisión
elevará su despacho en un plazo de diez días al plenario de cada Cámara para su expreso
tratamiento, el que de inmediato consideraran las Cámaras. Una ley especial sancionada
con la mayoría absoluta de la totalidad de los miembros de cada Cámara regulará el trámite
y los alcances de la intervención del Congreso.

EL ESTADO DE SITIO

Noción:
Es un estado de emergencia que constituye un remedio defensivo extraordinario que la
constitución otorga a los poderes políticos del Estado, para que en situaciones de excep-
ción puedan hacer uso de mayores facultades.

El primer antecedente patrio fue el decreto o estatuto de seguridad dictado el 23 de no-


viembre de 1811.

El estado de sitio no suspende la constitución, se dicta para garantizar su vigencia y las


autoridades constituidas, frente a los hechos de gravedad que las ponen en peligro.

Una de sus características es su temporalidad.

Causas

Artículo 23- En caso de conmoción interior o de ataque exterior que pongan en peligro
el ejercicio de esta Constitución y de las autoridades creada por ella, se declarará en es-
tado de sitio la provincia o territorio en donde exista la perturbación del orden, quedando
suspensas allí las garantías constitucionales. Pero durante esta suspensión no podrá el
presidente de la República condenar por sí ni aplicar penas. Su poder se limitará en tal caso
respecto de las personas, a arrestar o trasladarlas de un punto a otro de la Nación, si ellas
no prefiriesen salir fuera del territorio argentino.

La doctrina está conteste en que la conmoción interior es un tumulto, alteración del orden,
que ponen en peligro la continuidad de la vigencia de la constitución y las autoridades que
derivan de ella. Debe existir una alteración del orden público. Tiene carácter represivo.

Ataque Exterior
Es la guerra internacional o civil incluye el dictado de la ley marcial, también contemplado
en el artículo 27 del Pacto de San José de Costa Rica.

ÓRGANOS QUE LA DECLARAN

Para el caso de conmoción interior la declara el Congreso artículo 75 inciso, 29. En caso
de receso puede hacerlo el el Presidente convocando al Congreso para convalidar o no la
medida.

En caso de ataque exterior corresponde la declaración al Ejecutivo con autorización del


Senado artículo 61 y 99 inciso 16. Según quien la dicte será una ley o un decreto. Para el
caso de ataque exterior se fija un plazo; no para conmoción interior.

EFECTOS

No suspende la Constitución, ni las autonomías provinciales, ni afecta el principio de se-


paración de poderes. Sus efectos son defender la Constitución y las autoridades creadas
por ella.
1) Quedando allí suspendidas las garantías constitucionales.
2) Durante esa suspensión no podrá el Ejecutivo condenar por sí ni aplicar penas, su poder
se limita respecto a las personas, a arrestarlas o trasladarlas de un punto a otro de la Na-
ción, si ellas no prefiriesen salir del País.

El control de constitucionalidad del Poder Judicial no puede recaer sobre los motivos
ellos son de resorte político, pero sí sobre la aplicación de la medida al caso concreto plan-
teado.

Recientemente el congreso ha dictado la ley 26.122 el 27 de julio de 2006 creando el Ré-


gimen legal de los decretos de necesidad y urgencia, de delegación legislativa y de promul-
gación parcial de leyes. Regulase el trámite y los alcances de la intervención del Congreso
respecto de decretos que dicta el Poder Ejecutivo.

DIVISION DE PODERES EN LA CONSTITUCION

Ha adoptado el principio divisorio dando a cada órgano una función Artículos 44, 87 y
108, designando composición, forma de elección o designación, duración de mandatos,
funcionamiento y atribuciones Artículos.75, 99, y 116 y 117

Incompatibilidades Artículo 72 prohibición de recibir empleos.

Artículo 109 prohibición del Ejecutivo sobre causas judiciales.

Fallo de la Corte suprema de Justicia de la Nación 1853 fallo “Ramón Ríos y otros”.

Poderes divididos pero coordinados y que ejerzan control unos sobre otros.

Asignación a un poder funciones específicas de otro: Todos ejercen funciones adminis-


trativas.

PODER EJECUTIVO

Funciones de naturaleza legislativa:

1) Artículos. 99 inciso. 2 reglamenta la ley, Jefe de gabinete Artículos 100 inciso. 2


2) Participa en la formación de las leyes Artículos 99 inciso. 3, iniciativa 77, promulgación
78, y veto 83, desde la reforma dicta decretos de necesidad y urgencia 99 inciso. 3 y regla-
mentos delegados 76.

Funciones de índole jurisdiccional Artículos 99 inciso 1 jefe supremo de la administración,


potestad disciplinaria pudiendo aplicar sanciones, resuelve recursos administrativos, indul-
tar o conmutar penas Artículos 99 inciso 5.

Poderes Legislativo y Judicial ejercen funciones administrativas:


(Consejo de la Magistratura) administración de recursos, organización, contratación,
régimen de empleados y funcionarios Artículos.. 66 1ª parte, 75 incisos. 32, 113 y 114.

Poder Judicial:

Funciones de naturaleza legislativa: Consejo de la Magistratura Dictar normas de super-


intendencia, dictando reglamentos Artículo 114.

PODER LEGISLATIVO

Función judicial en el juicio político Artículos 53 y 59, juzga si corresponde excluir de su


seno... 66, poder disciplinario sobre terceros por desorden de conducta.

Potestad disciplinaria sobre sus miembros y al juzgar las elecciones, derechos y títulos
de sus miembros Artículo 64.

Control recíproco

Poder legislativo:
Controla al Ejecutivo patrimonial y financiero Auditoría General de la Nación Artículo 85.
Aprueba el presupuesto, y cuenta de inversión Artículo 75 inciso 8.
Requerir informes Artículos 71 y 100 inciso 11, pedir informes por escrito.
Formar comisiones de investigación.
Considera los motivos de dimisión del presidente y vicepresidente Artículo 75 inciso 21.
Autoriza a declarar la guerra Artículo 99 inciso 15.
Ausentarse del territorio Artículo 99 inciso 18.
Recibir informe del Jefe de Gabinete Artículo 101.
Memoria detallada de ministros Artículo 104.
Destituir a funcionarios presidente vicepresidente Jefe de gabinete y demás ministros.

Al Judicial:
Establecer tribunales inferiores Artículo 75 inciso 20 y 108.
Crear y suprimir empleos.
Dicta legislación procesal tribunales federales Artículo 75 inciso 30 y 32.
Senado interviene en acuerdos para designación Artículo 99 inciso 4.
Destitución mediante juicio político Artículo 60.

Poder Ejecutivo control


Respecto al Poder Legislativo.
Convoca a sesiones extraordinarias Artículos 63 y 99 inciso 9.
Iniciativa Artículo 77.
Veto Artículos 80 y 83.
Reglamentar las leyes Artículo 99 inciso 2.
Decretos de necesidad y urgencia Artículo 99 inciso 3.
Delegación Artículo 76.
Respecto al Poder Judicial.
Designa con acuerdo del senado.

Poder Judicial

Revisar cuando sea solicitada la legalidad de los actos del poder ejecutivo y la constitu-
cionalidad de las leyes.

PROHIBICION DEFACULTADES EXTRAORDINARIAS

Artículo 29º. El Congreso no puede conceder al Ejecutivo nacional, ni las Legislaturas


provinciales a los gobernadores de provincias, facultades extraordinarias, ni la suma del
poder público, ni otorgarles sumisiones o supremacías por las que la vida, el honor o las
fortunas de los argentinos queden a merced de gobiernos o persona alguna. Actos de esta
naturaleza llevan consigo una nulidad insanable y sujetarán a los que los formulen, con-
sientan o firmen, a la responsabilidad y pena de los infames traidores a la Patria.

GOBIERNOS DE FACTO
Linares Quintana: lo conceptualiza como opuesto al de Lure, Es el que ejerce pacífica-
mente la función pública, no por derecho sino como consecuencia de un hecho al margen
del cauce señalado por la Constitución, y con el asentimiento, al menos tácito del pueblo.

La doctrina de facto reconoce vertientes más administrativas que políticas.

Constantineu sostiene que existe un principio de derecho que justifica el reconocimiento


de la autoridad de gobiernos establecidos o mantenidos por personas que han usurpado
la autoridad soberana del Estado y se afirman por la fuerza y las armas contra el gobierno
legítimo, ejerciendo bajo la apariencia de legitimidad los poderes y funciones de entes re-
gularmente creados, confiriéndole validez a sus actos.
a) El cargo que ocupe debe tener una existencia reconocida por el derecho o la ley.
b) La persona debe estar en posesión del cargo.
c) Debe ejercerlo bajo la apariencia de legitimidad.

La doctrina fundada en el estado de necesidad, continuidad en la marcha del Estado ha


dotado de validez al gobierno de facto y a lo realizado por sus funcionarios.
Suelen ser reconocidos también internacionalmente, en virtud de la doctrina de la no
intervención.
6 de setiembre de 1930.
Acordada de la Corte del 10 de setiembre. Idem el 4 de junio de 1943.

Facultades legislativas

Asumen el Poder Ejecutivo y cierran el congreso, asumiendo de hecho también el poder


legisferante.
En 1966 se adoptó el Estatuto de la Revolución Argentina por encima de la Constitución
y el Poder Constituyente con la enmienda de 1972.

Hasta 1966 eran decretos leyes luego solo leyes.

La Corte sostuvo que el poder de facto alcanzaba solo al ejecutivo y solo bajo extrema
necesidad el dictado de decretos leyes 1933 solo para mantener el Estado y cumplir con los
fines de la revolución, limitada su validez al tiempo del gobierno de facto.

Se sostiene la amplitud de facultades legislativas del gobierno de facto y la vigencia de


los decretos leyes hasta que una ley del Congreso los derogue.

La revolución de 1955

La corte reconoce que todo gobierno institucional o de facto puede dictar la legislación
que requiere, tanto en situaciones normales como de emergencia, siempre que sea razo-
nable y no afecte derechos constitucionales.

En la reforma de 1994 se incorpora como primer artículo del nuevo capitulo de derechos
y garantías el Artículo 36.

Artículo 36º. Esta Constitución mantendrá su imperio aun cuando se interrumpiere su


observancia por actos de fuerza contra el orden institucional y el sistema democrático. Es-
tos actos serán insanablemente nulos.
Sus autores serán pasibles de la sanción prevista en el Artículo 29, inhabilitados a per-
petuidad para ocupar cargos públicos y excluidos de los beneficios del indulto y la conmu-
tación de penas.
Tendrán las mismas sanciones quienes, como consecuencia de estos actos, usurparen
funciones previstas para las autoridades de esta Constitución o las de las provincias, los
que responderán civil y penalmente de sus actos. Las acciones respectivas serán impres-
criptibles. Todos los ciudadanos tienen el derecho de resistencia contra quienes ejecutaren
los actos de fuerza enunciados en este Artículo.
Atentará asimismo contra el sistema democrático quien incurriere en grave delito doloso
contra el estado que conlleve enriquecimiento, quedando inhabilitado por el tiempo que las
leyes determinen para ocupar cargos o empleos públicos.
El Congreso sancionará una ley sobre ética pública para el ejercicio de la función.

EL PODER LEGISLATIVO
El marco constitucional inicia con el Título I de la Segunda Parte Autoridades de la Nación
Sección Primera “Del Poder Legislativo”.

En general se ha asignado al parlamento los siguientes roles:


1) Legislar: dictando Normas reguladoras de la vida social con alcance general y coacti-
vas
2) Controlar al Poder Ejecutivo y también Poder Judicial, con atribuciones propias y por
medio de órganos de control como la Auditoría General de la Nación, Defensor del Pueblo,
Consejo de la Magistratura, Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados, Ministerio público.

Ejerce control Parlamentario cuando otorga venias, autorizaciones, pedidos de infor-


mes, interpelaciones, moción de censura Artículos 101, 100 incisos 9, 11.
3) Aprobar tratados internacionales o actos de gobierno
4) Intervenir en las designaciones, renuncia o remoción de funcionarios
5) Investigar, inspeccionar. Por medio de Comisiones investigadoras
6) Escenario de la oposición
7) Caja de resonancia de la opinión pública
8) Representar y participar
9) Procurar
10) Mediar y concretar
11) Debatir
12) Residencia de la clase política
13) Imágen de la democracia

ESTRUCTURA

Artículo 44º. Un Congreso compuesto de dos Cámaras, una de Diputados de la Nación


y otra de Senadores de las provincias y de la Ciudad de Buenos Aires, será investido del
Poder Legislativo de la Nación.

Es un cuerpo colegiado, dividido en dos salas, existen sobradas razones para sostener
la bicameralidad, no solo por que otorga un tiempo para una mayor reflexión, por la diversa
edad de sus componentes, denominándose Cámara joven a la de Diputados, y de madurez
a la de Senadores, sino por la estructura federal de nuestro país ya que en el Senado radi-
ca la representación de los estados federales, mientras que en Diputados la del pueblo.

La Constitución Nacional ha contemplado la Integración de cada Cámara, número de


miembros, requisitos, elección, duración y renovación de mandatos. En el Capítulo I Sec-
ción I del Titulo I de la Segunda Parte desde los artículos 45 y siguientes lo hace respecto
de Diputados de la Nación. En el Capítulo II desde el artículo 54 en adelante lo hace res-
pecto al Senado.

A continuación en el Capítulo III la Constitución se refiere a DISPOSICIONES COMUNES


A AMBAS CÁMARAS. Lo hace desde el Artículo 63 en adelante.

FACULTADES PRIVATIVAS

En el funcionamiento de este órgano colegiado la carta magna, respetando la represen-


tación de cada Cámara ha dispuesto facultades privativas de cada una, a continuación
detallamos algunas:

Artículo 52º. Diputados acusa en juicio político.


Artículo 59 y 60º. Senadores es Cámara de juzgamiento en juicio político. Artículo 99
inciso 4, 7 ,13 y 19 brindar acuerdo a la designación de magistrados y funcionarios.

Artículo 61º. Declarar en estado de sitio.

PRIVILEGIOS PARLAMENTARIOS

En protección del funcionamiento del poder la Constitución ha dispuesto .

PRIVILEGIOS COLECTIVOS

Artículo 64º. Cada Cámara es juez de elecciones derechos y títulos.

Artículo 66º. Cada Cámara dicta su reglamento interno.

Artículo 66º. Poder disciplinario.

Artículo 71º. Informes de los ministros .

Artículo 101º. Control sobre el Jefe de Gabinete de ministros. Por medio de una moción
de censura con mayoría absoluta de la totalidad de los miembros de cualquiera de las Cá-
maras y puede ser removido por el voto de la mayoría absoluta de los miembros de cada
Cámara.

Artículo 106º. Pueden los Ministros concurrir a las Cámaras

INDIVIDUALES

Artículo 68º. Exención de pena, ningún miembro del Congreso puede ser acusado, inte-
rrogado judicialmente, ni molestado por las opiniones.

Artículo 69º. Exención de arresto.

Artículo 70º. Exención de proceso

También se han dispuesto una serie de Incompatibilidades con el fin de garantizar la


independencia y funcionamiento del poder, como los contenidos en los Artículos 72, 73,
105.

DERECHO PARLAMENTARIO

Conjunto de normas que regulan el funcionamiento y organización del Poder Legislativo


de la Nación.

SESIONES Artículo 63 sesiones ordinarias 1 marzo hasta 30 noviembre, prórroga y ex-


traordinarias.

Quórum Artícul. 65 mayoría absoluta, más de la mitad, y las decisiones se toman por
mayoría absoluta Artículo 65 simultaneidad de sesiones. Forma parte del derecho parla-
mentario la tarea parlamentaria en general, la gestión en comisiones y e n los bloques
legislativos.

ASAMBLEAS PARLAMENTARIA

Artículo 99 inc.8 apertura de las sesiones por parte del Presidente.

Artículo 75 inc.21 admitir o desechar los motivos de dimisión del presidente y vice.

Artículo 93 Juramento presidencial.

Ley 20.972 de acefalía quórum de 2/3 de los miembros de cada cámara.

Artículo 97 y 98 Proclamación del presidente y vice electos.

ATRIBUCIONES DEL PODER LEGISLATIVO

Sin lugar a dudas es la tarea legislativa la más importante en manos del Congreso, allí
radica su rol en la función gubernativa y de organización de la convivencia social. La Cons-
titución Nacional ha dispuesto en el Capitulo V de la Formación y sanción de las leyes,
un procedimiento con intervención del Poder Ejecutivo y de ambas Cámaras, que ha sido
simplificado sustancialmente en la Reforma de 1994, remitimos entonces a los artículos 77
y siguientes.

La doctrina a los fines de un mejor estudio ha elaborado diversas clasificaciones sobre


las atribuciones del Congreso, al respecto rescatamos la que distingue entre las expresa-
mente consagradas en el artículo 75 de la Constitución Nacional, y las que surgen de los
poderes implícitos en virtud de las cuales toda atribución no expresamente consagrada en
uno de los poderes del gobierno federal debe ser comprendido como atribución del Senado
Artículo 75 inciso 32.

32. Hacer todas las leyes y reglamentos que sean convenientes para poner en ejercicio
los poderes antecedentes, y todos los otros concedidos por la presente Constitución al Go-
bierno de la Nación Argentina.

Sobre las demás atribuciones están contenidas en los restantes incisos del Artículo 75,
algunas de las cuales han sido objeto de especial desarrollo en los temas precedentes, por
lo que remitimos a la lectura de cada inciso en particular

ORGANOS AUXILIARES Y DE CONTROL VINCULADOS AL PODER LEGISLATIVO

Incluidos por la reforma constitucional de 1994.

Capítulo Sexto
De la Auditoria General de la Nación
Artículo 85º. El control externo del sector público nacional en sus aspectos patrimoniales,
económicos, financieros y operativos, será una atribución propia del Poder Legislativo.
El examen y la opinión del Poder Legislativo sobre el desempeño y situación general de
la Administración Pública estarán sustentados en los dictámenes de la Auditoria General
de la Nación.
Este organismo de asistencia técnica del Congreso, con autonomía funcional, se integra-
rá del modo que establezca la ley que reglamenta su creación y funcionamiento, que debe-
rá ser aprobada por mayoría absoluta de los miembros de cada Cámara. El presidente de
organismo será designado a propuesta del partido político de oposición con mayor número
de legisladores en el Congreso.
Tendrá a su cargo el control de legalidad, gestión y auditoría de toda la actividad de la
Administración Pública centralizada y descentralizada, cualquiera fuera su modalidad de
organización, y las demás funciones que la ley le otorgue. Intervendrá necesariamente en
el trámite de aprobación o rechazo de las cuentas de percepción e inversión de los fondos
públicos.

La ley reglamentaria se dictó bajo el número 24156 dentro de la Administración Financie-


ra y de los Sistemas de Control del Sector Público Nacional.

Capítulo Séptimo
Del Defensor del Pueblo

Artículo 86º. El Defensor del Pueblo es un órgano independiente instituido en el ám-


bito del Congreso de la Nación, que actuará con plena autonomía funcional, sin recibir
instrucciones de ninguna autoridad. Su misión es la defensa y protección de los derechos
humanos y demás derechos, garantías e intereses tutelados en esta Constitución y las
leyes, ante hechos, actos u omisiones de la Administración; y el control del ejercicio de las
funciones administrativas públicas.
El Defensor del Pueblo tiene legitimación procesal. Es designado y removido por el Con-
greso con el voto de las dos terceras partes de miembros presentes de cada una de las
Cámaras. Goza de las inmunidades y privilegios de los legisladores. Durará en su cargo
cinco años, pudiendo ser nuevamente designado por una sola vez. La organización y fun-
cionamiento de esta institución serán regulados por una ley especial.

Reglado por ley Nº 24.284

PODER EJECUTIVO

Se adopta en nuestro sistema como poder unipersonal, solo lo ejerce el Presidente de la


Nación.

Artículo 87º. El Poder Ejecutivo de la Nación será desempeñado por un ciudadano con
el título de “Presidente de la Nación”
El vicepresidente que lo acompaña en la fórmula electoral forma parte del poder Legisla-
tivo como presidente de la Cámara de Senadores.

Algunos miembros de la doctrina han sostenido al Poder Ejecutivo como colegiado toda
vez que sus actos exigen el refrendo ministerial, pero el hecho que los ministros sean de-
signados y removidos por el Presidente de la Nación sin necesidad de fundamento alguno,
terminan por destruir estas teorías.

La constitución de la Nación en sus Artículos 88, 89, 90, 91, 92 y 93 ha regulado lo ati-
nente a acefalía, requisitos, mandato, sueldo, y juramento sucesivamente, a cuya lectura
remitimos. Solo cabe señalar que toda regulación del Poder Ejecutivo ha sufrido sustancia-
les modificaciones en la reforma de 1994, tendientes a atenuar el hiper-presidencialismo,
sobre lo que nos explayamos al tratar la temática oportunamente.

Es interesante advertir como a los fines de la elección de presidente y vice de manera


indirecta, se pasó a un sistema de elección directa por voto popular y a doble vuelta electo-
ral. El Artículo 94 enuncia el principio general mientras que el artículo 97 y 98 se explayan
sobre las dos únicas excepciones a la realización de la segunda vuelta.

Artículo 94º. El presidente y el vicepresidente de la Nación serán elegidos directamente


por el pueblo, en doble vuelta, según lo establece esta Constitución. A este fin el territorio
nacional conformará un distrito único.

Artículo 97º. Cuando la fórmula que resultare más votada en la primera vuelta, hubiere
obtenido más del cuarenta y cinco por ciento de los votos afirmativos válidamente emitidos,
sus integrantes serán proclamados como presidente y vicepresidente de la Nación.

Artículo 98º. Cuando la fórmula que resultare más votada en la primera vuelta hubiere
obtenido el cuarenta por ciento por lo menos de los votos afirmativos válidamente emitidos
y, además, existiere una diferencia mayor de diez puntos porcentuales respecto del total
de los votos afirmativos válidamente emitidos sobre la fórmula que le sigue en número de
votos, sus integrantes serán proclamados como presidente y vicepresidente de la Nación.

FUNCIONES

El Presidente, a pesar de haber delegado por la Constitución reformada, atribuciones en


la figura del Jefe de Gabinete, aún conserva las tradicionales cuatro jefaturas, a saber, Jefe
de Estado, responsable político de la administración general del país, jefe del gobierno y
de las Fuerzas Armadas.

Podemos ver sus atribuciones y funciones en el Artículo 99 con sus 20 incisos.

El Jefe de Gabinete de Ministros, figura nueva, se incorpora en el Artículo 100 en que


se dispone su designación, remoción, y funciones con su imagen se pretendió crear una
suerte de fusible del sistema político para momentos de crisis, sin embargo su figura se ve
opacada hasta la fecha por el excesivo protagonismo del Presidente de la Nación.
A ese capítulo debemos agregar la figura de los Ministros que forman el Gabinete nacio-
nal a quienes la Constitución se refiere desde el artículo102 en adelante.

PODER JUDICIAL

Al iniciar el estudio de este tema no debemos olvidar la estructura federal de nuestro país
y el mandato que el artículo impone a las provincias para organizar su administración de
justicia, por lo que conviven dos ámbitos uno el de la justicia federal y otro el de la justicia
provincial u ordinaria.

La cabeza del Poder Judicial esta en la Corte Suprema de Justicia de la Nación.

Artículo 108º. El Poder Judicial de la Nación será ejercido por una Corte Suprema de
Justicia, y por los demás tribunales inferiores que el Congreso estableciere en el territorio
de la Nación.

En la tríada de poderes se ha pretendido dotar de toda independencia al Poder Judicial,


tanto como garantía republicana como por imperio de la defensa de los derechos del hom-
bre. Es imprescindible garantizar entonces la permanencia en el cargo.

Artículo 110º. Los jueces de la Corte Suprema y de los tribunales inferiores de la Nación
conservarán sus empleos mientras dure su buena conducta, y recibirán por sus servicios
una compensación que determinará la ley, y que no podrá ser disminuida en manera algu-
na, mientras permaneciesen en sus funciones.

Artículo 115º. Los jueces de los tribunales inferiores de la Nación serán removidos por
las causales expresadas en el Artículo 53, por un jurado de enjuiciamiento integrado por
legisladores, magistrados y abogados de la matrícula federal.
Su fallo, que será irrecurrible, no tendrá más efecto que destituir al acusado. Pero la parte
condenada quedará no obstante sujeta a acusación, juicio y castigo conforme a las leyes
ante los tribunales ordinarios.
Corresponderá archivar las actuaciones y, en su caso, reponer al juez suspendido, si
transcurrieren ciento ochenta días contados desde la decisión de abrir el procedimiento de
remoción, sin que haya sido dictado el fallo.
En la ley especial a que se refiere el Artículo 114, se determinará la integración y proce-
dimiento de este jurado.

Como así también se garantiza la intangibilidad de sus remuneraciones.

Los requisitos para integrar la Corte o prestar funciones como jueces inferiores del Poder
Judicial fueron dispuestos en el Artículo 111. A su vez el Artículo 112 ha previsto el juramen-
to de sus miembros.

A los fines de la integración de la Corte es aplicable el artículo 99 inciso 4 es decir se de-


signa a sus miembros por parte del Presidente con acuerdo del Senado en sesión pública.
Es dable destacar que por decreto Nª 222 del año 2003, por el que el presidente limita sus
atribuciones a la hora de proponer un nuevo miembro para completar vacante en la Corte
suprema de Justicia de la Nación. Instaura un procedimiento público con participación ciu-
dadana, previo publicación y conocimiento del candidato propuesto, procedimiento que se
lleva frente al Ministerio de Justicia y Derechos Humanos y luego es remitido al Senado de
la Nación órgano que presta acuerdo previo permitir también la participación ciudadana.

Al mismo tiempo por ley Nº 26183 del 29 de Noviembre de 2006 se modifica el número
de miembros de la Corte, determinándose en cinco y reglándose su funcionamiento hasta
que este número definitivamente se alcance.

A los fines de dotar de mayor independencia al Poder Judicial la reforma de 1994 creo un
nuevo órgano el Consejo de la Magistratura incorporado en el Artículo 114:

Artículo 114º. El Consejo de la Magistratura, regulado por una ley especial sancionada
por la mayoría absoluta de la totalidad de los miembros de cada Cámara, tendrá a su cargo
la selección de los magistrados y la administración del Poder Judicial.
El Consejo será integrado periódicamente de modo que se procure el equilibrio entre la
representación de los órganos políticos resultante de la elección popular, de los jueces de
todas las instancias y de los abogados de la matrícula federal. Será integrado, asimismo,
por otras personas del ámbito académico y científico, en el número y la forma que indique
la ley.

Serán sus atribuciones:


1. Seleccionar mediante concursos públicos los postulantes a las magistraturas inferiores.
2. Emitir propuestas en ternas vinculantes, para el nombramiento de los magistrados de los
tribunales inferiores.
3. Administrar los recursos y ejecutar el presupuesto que la ley asigne a la administración
de justicia.
4. Ejercer facultades disciplinarias sobre magistrados.
5. Decidir la apertura del procedimiento de remoción de magistrados, en su caso ordenar la
suspensión, y formular la acusación correspondiente.
6. Dictar los reglamentos relacionados con la organización judicial y todos aquellos que
sean necesarios para asegurar la independencia de los jueces y la eficaz prestación de los
servicios de justicia.

Este órgano se reglamento por ley Nº 24937 y su composición se modificó luego por ley
26.080 dando mayoría al oficialismo político con lo que se desvirtuó de alguna manera el
objetivo de su nacimiento.

ATRIBUCIONES

Lo Referente a atribuciones de la Corte y Demás tribunales inferiores se regula con el


Artículo 116 y siguientes de la Constitución de la Nación.
MINISTERIO PÚBLICO
La reforma constitucional también incorporó como órgano extra poder al Ministerio Pú-
blico Fiscal:

Artículo 120º. El ministerio Público es un órgano independiente con autonomía funcional


y autarquía financiera, que tiene por función promover la actuación de la justicia en defensa
de la legalidad de los intereses generales de la sociedad, en coordinación con las demás
autoridades de la República.
Está integrado por un procurador general de la Nación y un defensor general de la Nación
y los demás miembros que la ley establezca.
Sus miembros gozan de inmunidades funcionales e intangibilidad de remuneraciones.

Reglamentado a posterioridad por ley Nº 24946 Ley Orgánica del Ministerio Público Fis-
cal.

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