Está en la página 1de 46

Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

Asociación para la Promoción y el Desarrollo de la Resiliencia

Gema Puig Esteve

José Luis Rubio Rabal


1
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

ÍNDICE

1. INTRODUCCIÓN

2. ACLARACIONES SOBRE EL ORIGEN DEL TÉRMINO

3. LOS ANTECEDENTES: LA INVULNERABILIDAD

4. DESARROLLO DEL CONCEPTO A LO LARGO DEL TIEMPO

5. CAMBIO DE PARADIGMA

6. MOMENTO ACTUAL: EL PARADIGMA DE LA RESILIENCIA

6.1. Punto de vista focal


6.2. Valores
6.3. Contenidos teóricos

7. UN CAMBIO DE MIRADA

8. PASOS PARA LA IMPLEMENTACIÓN DE PROGRAMAS O ACTUACIONES EN


RESILIENCIA

9. MODELOS CONCEPTUALES PARA LA PRÁCTICA

10. CONCLUSIONES

2
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

1. INTRODUCCIÓN

El material que tienes entre tus manos es un esfuerzo de la asociación Addima por recopilar
y divulgar el conocimiento en torno a la Resiliencia. Esperamos que completen este
acercamiento a la Resiliencia y te inicie en la búsqueda de nuevas aplicaciones.

Introducimos un fragmento de Ernesto Sábato que recoge el sentido de la Resiliencia:

“Los hombres encuentran en las mismas crisis la fuerza para su superación. Así lo han
mostrado tantos hombres y mujeres que, con el único recurso de la tenacidad y el valor,
lucharon y vencieron en las sangrientas tiranías de nuestro continente. El ser humano sabe
hacer de los obstáculos nuevos caminos, porque a la vida le basta el espacio de una grieta
para renacer. En esta tarea lo primordial es negarse. Defender, como lo han hecho
heroicamente los pueblos ocupados, la tradición que nos dice cuánto de sagrado tiene el
hombre. NO permitir que se nos desperdicie la gracia de los pequeños momentos de
libertad que podemos gozar: una mesa compartida con gente que queremos, una caminata
entre los árboles, la gratitud de de un abrazo. El mundo nada puede contra el hombre que
canta en la miseria.”1

1
“La resistencia”. SÁBATO, Ernesto. Ed.Planeta (booket).Buenos Aires 2003. Pp 157-158.
3
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

2. ACLARACIONES SOBRE EL ORIGEN DEL TÉRMINO

Comenzaremos aclarando que este término casi impronunciable es una


castellanización de la palabra inglesa resilience, resiliency, que no es un
2
término exclusivo de la psicología, y cuyo significado es “resalto; elasticidad”. .

Acudiendo a la etimología del término, encontramos que la palabra resiliencia


proviene del latín “resilio”, “saltar hacia atrás, volver a saltar, rebotar. Ser rechazado.
Reducirse y comprimirse. ”3.

En francés y en español, es un término utilizado en la ingeniería mecánica y en


tecnología, que hace referencia a la “propiedad de la materia que se opone a la rotura
por el choque o percusión. Esta propiedad puede ser apreciada por ensayos de choque
ejecutados por medio de aparatos especiales como los martinetes de Fremon o los
péndulos de Charpez”.4

Si bien en los tres casos encontramos referencia a la elasticidad, al choque


contra algo, las connotaciones en el campo social van más allá del hecho de rebotar, y su
aplicación en este campo ha tenido lugar los últimos veinte años.

El afán por comprender los nuevos conceptos nos lleva irremediablemente a la


necesidad de definirlos. Ahora bien, al ahondar en las definiciones sobre resiliencia nos
sorprendemos al comprobar que hay tantas definiciones como autores, y que en algunos
casos, las diferencias conceptuales crean en nosotros una cierta confusión

Kotliarenko (1997) hace un exhaustivo resumen de los contenidos que diferentes


autores dan al concepto de resiliencia que recogemos a continuación :5

1. "Enfrentamiento efectivo ante eventos y circunstancias de la vida severamente


estresantes y acumulativos (Lösel, Blieneser y Köferl en Braming el al., 1989)

2. “El proceso de lidiar con acontecimientos vitales disociadores, estresantes o


amenazadores de un modo que proporciona al individuo destrezas protectoras y

2
“Diccionario Inglés-español” Ed. Salvat. Barcelona, 1979. p. 245
3
“DICCIONARIO Ilustrado Latino-Español, Español-Latino”. Ed. Biblograf. Barcelona. 1983. p.433
4
“DICCIONARIO Enciclopédico abreviado”. Ed. Espasa-Calpe. Madrid. 1957. Volumen VI, p.1059.
5
“Resiliencia. Descubriendo las propias fortalezas”. MELILLO, Aldo (compilador). Ed. Paidos. Buenos Aires.
2001. p.p.83-102

4
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

defensivas adicionales a las previas a la disociación resultante del acontecimiento”


(Richardson y colaboradores, 1990)

3. "Respuesta global en la que se ponen en juego los mecanismos de protección,


entendiendo por éstos no la valencia contraria a los factores de riesgo, sino aquella
dinámica que permite al individuo salir fortalecido de la adversidad, en cada situación
específica y respetando las características personales" (Rutter, 1991)

4. “La capacidad de recuperarse, sobreponerse y adaptarse con éxito frente a la


adversidad, y de desarrollar competencia social, académica y vocacional pese a
estar expuesto a un estrés grave o simplemente a las tensiones inherentes al mundo
de hoy (adaptada por Henderson y Milstein de la definición de Rirkin y Hoopman,
1991).

5. "Historia de adaptaciones exitosas en el individuo que se ha visto expuesto a


factores biológicos de riesgo o eventos de vida estresantes; además implica la
expectativa de continuar con una baja susceptibilidad a futuros estresores (Luthar y
Zingler, 1991; Masten y Gamerzy, 1985, Werner y Smith, 1982 y 1992)

6. "La resiliencia se ha caracterizado por un conjunto de procesos sociales e


intrapsíquicos que posibilitan tener una vida ‘sana’, viviendo en un medio ‘insano’.
Estos procesos tendrían lugar a través del tiempo, dando afortunadas combinaciones
entre atributos del niño y su ambiente familiar, social y cultural. De este modo, la
resiliencia no puede ser pensada como un atributo con que los niños nacen, ni que
los niños adquieren durante su desarrollo, sino que se trataría de un proceso
interactivo entre éstos y su medio”. (Rutter, 1992)

7. “La capacidad de sobreponerse, de soportar las penas y de enmendarse a uno


mismo” (Wolin y Wolin, 1993). Estos autores explican que la acepción “resiliente”
reconoce el dolor, la lucha y el sufrimiento implícitos en el proceso.

8. "Concepto genérico que se refiere a una amplia gama de factores de riesgo y


los resultados de competencia. Puede ser producto de una conjunción entre los
factores ambientales, como el temperamento y un tipo de habilidad cognitiva que
tienen los niños cuando son muy pequeños (Osborn, 1993)

5
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

9. Milgran y Palti (1993) definen a los niños resilientes como “aquellos que se
enfrentan bien (cope well) a pesar de los estresores ambientales a los que se ven
sometidos en los años más formativos de su vida." ( Milgran y Palti, 1993)

10. "Habilidad para surgir de la adversidad, adaptarse, recuperarse y acceder a


una vida significativa y productiva (ICCB, 1994)

11. “El proceso de autoencauzarse y crecer” (HIggins, 1994)

12. "La resiliencia distingue dos componentes: la resistencia frente a la destrucción,


esto es, la capacidad para construir un conductivismo vital positivo pese a
circunstancias difíciles" (Vanistendael, 1994). Según este autor, el concepto incluye
además la capacidad de una persona o sistema social de enfrentar adecuadamente
las dificultades, de una forma socialmente aceptable.

13. "Capacidad humana universal para hacer frente a las adversidades de la vida,
superarlas o incluso ser transformado por ellas. La resiliencia es parte del proceso
evolutivo y debe ser promovido desde la niñez (Grotberg, 1995)

14. "La resiliencia habla de una combinación de factores que permiten a un niño, a
un ser humano, afrontar y superar los problemas y adversidades de la vida (Suárez,
1995)

15. "Proceso dinámico que tiene como resultado la adaptación positiva en


contextos de gran adversidad" (Luthard, 2000)

6
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

3. LOS ANTECEDENTES: LA INVULNERABILIDAD

El interés inicial de los investigadores estuvo básicamente orientado a las


características de los niños y niñas que salían adelante desde condiciones adversas,
refiriéndose la mayoría de ellos a esta “cualidad” describiendo a estos niños y niñas
como “invulnerables o invencibles”, en el sentido de que eran resistentes la estrés
(Lösel, Bliesener, & Koferl,1989 )
Pero el concepto de invulnerabilidad pronto perdió vigencia por varias razones.
Rutter (1993) señaló algunas que cuestionan la utilización de dicho concepto:
a) la invulnerabilidad implica una resistencia absoluta al daño
b) sugiere que la característica se aplica a todas las circunstancias de riesgo
c)implica una característica intrínseca del sujeto
d) sugiere una característica estable en el tiempo.

4. DESARROLLO DEL CONCEPTO A LO LARGO DEL TIEMPO

Sobreponerse a las adversidades no es algo nuevo, puede decirse que es algo tan
antiguo como la misma humanidad.. La Biblia es rica en experiencias de resiliencia. .
Shakespeare ya hablaba de algo similar (“dulces son los caminos de la adversidad”), de
cómo a través del sufrimiento, del odio, se puede llegar al amor.

Buscando antecedentes del concepto, es poner “vino viejo en odre nuevo”. Freud
fue precursor del concepto, y habla de dos pilares fundamentales en Salud mental: la
libertad (que en términos modernos podemos considerar como la independencia, la
autodeterminación) y la memoria (identidad, que permite reconocer nuestras raíces)

El primer artículo publicado en el campo de la psicología que utilizó dicho concepto


fue el de Scoville en 1942. la autora utilizó este termino para referirse al hecho de que
situaciones peligrosas para la vida no afectaban a los niños y niñas, mientras que si lo hacia
el desarraigo de la familia.

Sin embargo no fue sino hasta la década de los 70 cuando el término adquirió un
mayor uso.

7
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

Bowlby fue la persona que se encargó formalmente de tomar de la física el término y


llevarlo a la psicología, al definirlo como un resorte moral, cualidad de una persona que no
se desanima y no se deja abatir.
Pero fue Werner la primera que detectó y relacionó esta definición a una población, en un
estudio longitudinal que se comentará más adelante.
En 19916 se lleva a cabo por primera vez un seminario sobre el tema, en Lesotho,
organizado por la Fundación Bernard van Leer, una ONG que desde hacía algún tiempo se
había dedicado a investigar a este respecto. A partir de ese momento el BICE destina gran
parte de sus esfuerzos y recursos a la investigación en esa línea, dando sus frutos en 1992,
cuando el profesor Lösel presenta los resultados de su investigación ante la Asamblea
General del BICE en Ginebra, incorporando la resiliencia a algunos programas, como el
programa para refugiados con el que ya trabajaban en zonas de conflicto dentro de
Centroamérica, siendo la primera vez que el concepto se aplicó como orientador de un
trabajo fuera del mundo anglosajón (Vanistendael, 1996).
A partir de este momento el concepto pasó del ámbito de la investigación científica al de
la práctica, y obligando, dada la contundencia de los resultados a adoptar un nuevo
enfoque desde la perspectiva de las fortalezas, las posibilidades y las oportunidades, más
que desde las debilidades y amenazas.
Puesto que se trata de un concepto en continua evolución, han sido muchos los
autores que han propuesto una definición sobre Resiliencia.

Para ver más claramente la evolución del concepto, nos apoyaremos en el siguiente
esquema en el que se recoge la línea conceptual de tiempo del concepto de la resiliencia:

Linea de tiempo conceptual

Enfasis en Deduccion de factores Diferencias culturales


riesgo

70’s 80’s 90’s ½ 90’s 02

•Interpretacion Post hoc •Enfasis en promocion y replicabilidad


•Resiliencia como capacidad •Resiliencia como proceso
•Vision individual •Concepcion Comunitaria
Las diferencias generacionales se pueden resumir en las siguientes:

6
“Resiliencia. La estimulación del niño para enfrentar desafíos”. PUERTA DE KLINKERT, Maria Piedad. Ed.
Lumen Hvmanitas. Buenos Aires 2002. pp. 13-14
8
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

CAPACIDAD (80) PROCESO(90)


.Qué distingue a aquellos individuos . Cuál es la dinámica entre factores
que se adaptan a pesar de las que permite una adaptación positiva
predicciones de riesgo
. Énfasis en factores . Énfasis en el proceso
. Interpretación pos-hoc (posterior) . Énfasis en la promoción
. Énfasis en la capacidad humana . Énfasis en el contexto social
. Se está resiliente . Se aprende a ser resiliente

Rescatamos dos definiciones por lo que han supuesto en la evolución del concepto y por su
universalidad.

Edith Grotberg : La capacidad del ser humano para hacer frente a las adversidades
de la vida, aprender de ellas, superarlas e inclusive, ser transformado por estas.
Luthard: Es el proceso dinámico que tiene como resultado la adaptación positiva en
contextos de gran adversidad.

En síntesis, las diferentes definiciones enfatizan las características de la persona


resiliente: habilidad, adaptabilidad, baja susceptibilidad, enfrentamiento efectivo, capacidad,
resistencia a la destrucción, conductas vitales positivas, temperamento especial, habilidades
cognitivas, todas desplegadas frente a las situaciones vitales adversas, estresantes, etc.,
que les permite atravesarlas y superarlas.

HABILIDAD PERSONAL
Se comienza a estudiar las características y factores de aquellas personas que en
contra de toda predicción son “socialmente adaptadas”, considerando que se trata de
una habilidad personal, de una cualidad de ciertas personas.

CAPACIDAD HUMANA
Más adelante, la resiliencia es considerada por algunos autores como una capacidad
humana universal, que es parte del proceso evolutivo, y posible de promocionar
desde pequeños. Protege la propia integridad, y posibilita la construcción de un

9
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

conductivismo vital positivo pese a circunstancias difíciles, y un enfrentamiento


adecuado de las adversidades de una forma socialmente aceptable.

PROCESO DINÁMICO
La resiliencia se sustenta en la interacción permanente existente entre la persona y
el ambiente, la cual determina que ésta sea un proceso continuo y no un estado
estable ni absoluto. Por tanto no se "es resiliente" de una manera permanente, sino
que varía a través del tiempo y las circunstancias, por lo que se habla de "estar
resiliente". Desde esta concepción, es necesario atender a las diferencias culturales
y contextuales, resaltando asimismo el papel de la familia y la comunidad en dicho
proceso.

Consideramos que los tres conceptos no son excluyentes, sino que todos ellos
conforman el concepto de la resiliencia tal como se entiende en la actualidad: por una
parte, requiere de unas condiciones personales, lo que algunos autores han dado en
llamar fuerzas intrapsíquicas y otros pilares de resiliencia, en los que ahondaremos más
adelante. Por otra parte, considerarlo como una capacidad humana nos habla de su
existencia potencial en cualquier ser humano, por lo que su estudio y promoción pasan a
ser de interés para la salud pública.

Por otra parte, tras un estudio minucioso de los distintos autores, podemos observar que
algunas diferencias radican en el sujeto de la definición y de estudio, de forma que
encontramos:

Definiciones centradas en el individuo. Se manejan conceptos como


cualidad, mentalidades, característica universal, escudo protector, entre
otras. En este sentido, la Psicología positiva ha hecho avances
considerables en el estudio de la resiliencia como una característica
personal necesaria para el enfrentamiento positivo ante situaciones
traumáticas.

Definiciones centradas en el resultado. Algunos autores plantean que la


resiliencia es el estado que se alcanza, otros recalcan el aspecto de
rehacerse, de construir o reconstruir.

Definiciones centradas en el proceso. En algunos casos encontramos


que la consideración que se otorga a la resiliencia es de realidad humana,

10
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

de fenómeno connatural a la propia evolución, estudiando el proceso y


teniendo en cuenta por tanto no solo el individuo y el entorno con el que
interacciona, sino la adversidad a la que se enfrenta y lo que sucede
durante y después de dicho enfrentamiento. Esto implica que no se nace
resiliente ni se adquiere ‘naturalmente’ en el desarrollo, sino que
dependerá de ciertas cualidades del proceso interactivo del sujeto con las
otras personas, el cual es responsable de la construcción del sistema
psíquico humano.
Frente a una tensión o una amenaza, el ambiente es crucial pues para la
resiliencia del individuo, y vemos como determinadas condiciones
ambientales promueven los factores protectores internos y además
contribuyen a contrapesar las respuestas de la persona, pasando de la
inadaptación o disfunción a la respuesta resiliente.

Como podemos deducir de la exposición anterior, las explicaciones de los distintos autores
no son excluyentes entre sí, sino que nos dan una idea amplia del significado de este
fenómeno en el momento actual, favoreciendo su comprensión.

Esta concepción tan amplia de la resiliencia hace que se comience hablar de un nuevo
paradigma, el paradigma de la resiliencia.

Con todo, tal como nos propone Vanistendael, no perdamos demasiado tiempo buscando
una definición exacta de resiliencia, que siempre será poco arbitraria, y dediquémonos a
apreciar y sentir como esa realidad humana de la resiliencia se enraíza con la vida.

5. CAMBIO DE PARADIGMA

Un nuevo paradigma aparece cuando se acumula un exceso de cuestiones que se


salen del marco ordinario y el paradigma actual no puede explicar. Todo nuevo
paradigma implica un principio que siempre existió pero que hasta entonces nadie
había reconocido. El cambio de paradigma significa una trasformación en la cultura
profunda, un cambio de creencias, perspectivas y valores.

Desde sus inicios, las ciencias médicas se desarrollaron fundamentalmente en


torno al estudio de los conceptos de patología, enfermedad o problema. Centrarse

11
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

en estos aspectos ha significado el estudio de los trastornos, las consecuencias


negativas de los mismos y los factores de riesgo que contribuyen a su desarrollo.
Sin embargo en los últimos años se ha ampliado la mirada exclusiva sobre la
enfermedad, preocupándose de un concepto más general de salud, lo que ha
permitido trabajar no sólo en intervenciones de tratamiento y prevención, sino
también de PROMOCIÓN. Dicha transición ha estado influida por varios elementos.

Uno de ellos se relaciona a que al estudiar los factores de riesgo se ha constatado


que existe un número de personas que, expuestas a los mismos factores de riesgo
parecen no desarrollar ninguna patología, frente a lo cual surge el interés por saber
por qué estas personas no la desarrollan, qué factores lo impiden y les protegen.,
con la idea de una vez definidos esos factores, poder desarrollar los medios para
mejorar la resistencia de las personas frente al estrés y la adversidad (Rutter 1993).

Es decir, llegó un momento en el que no era posible encontrar respuestas a lo que la


experiencia mostraba, puesto que rompían las predicciones.

NUEVO PARADIGMA

MODELO MODELO DE LA
ENFERMIZADOR RESILIENCIA

RIESGOS RESILIENCIAS

VIDA Y
MORTALIDAD SUPERACION

Vemos como centrarse en el modelo de riesgo que han utilizado las ciencias médicas y
sociales durante siglos ha sido necesario para el avance de la medicina, pero no hemos
dedicado atención a aquellos individuos que contra todo pronóstico salían adelante a pesar
de las adversidades. No obstante es necesario aclarar que el de riesgo y el de resiliencia
son enfoques complementarios.

Coincidiendo con el concepto de Promoción de la Salud, plantea trabajar con las


fortalezas y no con las debilidades. Esto supone pasar del modelo de riesgo al modelo de
desafío.

12
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

En lugar de pensar por qué van a fracasar, es pensar qué tienen aquellos que pudieron
“navegar” satisfactoriamente, siempre dentro del marco ético y moral de la comunidad,
respondiendo a esos valores éticos, no siendo resiliente a cualquier precio. Se trataría pues
de hacer que los pueblos aprovecharan sus fortalezas y las usaran positivamente. Es una
facultad de construcción tanto en individual como en colectividad.

6. MOMENTO ACTUAL: EL PARADIGMA DE LA RESILIENCIA


EL PARADIGMA DE LA RESILIENCIA (I)

Utilizaremos la definición de Khun para definir un paradigma, que lo considera como


“una completa constelación de creencias, valores y técnicas, etc... compartidas
por los miembros de una determinada comunidad. “
Se trata por tanto de una visión común, de un conjunto de perspectivas, ideas valores
que constituyen una perspectiva única compartida, que unifica, dando sentido y guía .

Previos a tener en cuenta para hablar de resiliencia.

Nuestro planeta está dotado de vida. La cualidad que lo caracteriza es su enorme


complejidad, que ha ido desarrollándose a lo largo de unos 4000 millones de años
mediante procesos de selección, que hacían frente a un entorno dinámico y cambiante.
Esta complejidad puede ser expresada en unidades de información. La unidad de
información es lo que llamamos un bit. Un bit es la unidad mínima de información de la
memoria, equivalente a un si o un no. Por ejemplo me basta un bit para codificar -
mediante la pregunta adecuada- el sexo de un interlocutor al que no puedo ver, bastaría
con que le preguntara: ¿eres un hombre?. Si la respuesta es no, ya se que es una mujer.
Un solo ojo es capaz de percibir un millón de bits por segundos.(para los que estén
familiarizados con los sistemas de almacenamiento informáticos, 8 bits dan lugar a un
byte.)
Como de ordinario solemos tener los dos abiertos, esto equivaldría a unos 15 Mb por
minuto, lo que supone aproximadamente la información almacenada en 200 documentos
de word, de mediana extensión.
Tanta información requiere de un poderoso mecanismo que se encargue en primer lugar,
de seleccionar la información relevante y más tarde de almacenar ordenadamente
aquellos datos de interés.

13
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

Imaginemos a un mozo de almacén al que no paran de llegarles cajas:


Las verdes al fondo, las azules a la derecha, las rojas -por supuesto- a la izquierda y
todas las amarillas son errores, así que de vuelta al camión. La suerte del almacenista
es que todas las cajas son almacenadas gracias a una simple clasificación cromática.
En nuestra realidad percibimos infinidad de objetos, no sólo cajas y para colmo vienen
de todos los colores y tamaños.
Es por eso que tratamos de ordenar el mundo creando categorías y representaciones de
manera que simplifiquen su complejidad y nos permitan ordenarlo de manera casi
automática.
Estas simplificaciones funcionan de modo probabilístico, digamos que si somos el mozo
de almacén y alguien nos pregunta donde guardamos la caja verde de tamaño medio
con un lazo rosa, es probable que no sepamos el estante exacto, pero si que nos vamos
a aproximar bastante a su ubicación. Especialmente si esa caja tiene algún sentido para
nosotros a nivel adaptativo, como por ejemplo : la última caja verde que nos llego con un
lazo rosa, contenía el virus del ántrax.
La cosa se complica aun más si lo que tratamos de categorizar son personas, este si es
verdaderamente un estímulo adaptativo – somos animales sociales-
Las categorías en este caso cumplen la función de generar atribuciones. Una atribución
es lo que ocurre cuando se mantienen unas expectativas previas sobre el sujeto al que
categorizamos, bien porque se conoce al sujeto personalmente, bien porque se sabe
que pertenece a un determinado grupo o categoría social.
Somos policías patrullando la ciudad y vemos
a dos sujetos sospechosos con gafas de sol
Creencias y prejuicios
a las 10 de la mañana, con chupas de cuero
y pelos largos, apoyados en el escaparate
de una joyería. Inmediatamente pedimos
refuerzos por si las moscas, aparcamos el
coche en la acera, desabrochamos la funda
de nuestras pistolas -por si acaso- y
cautelosamente nos acercamos a identificarlos. Construcción social
Son el cantante y el guitarrista de los Burning,
un grupo de rock de los 80’s, estaban esperando al manager para llevarlos al lugar
donde esa noche dan un concierto .
( sucedido en Zaragoza, Plaza de España, a comienzos de los 90’)
Seguramente en esto hay una doble atribución, por un lado la de la policía con respecto
a los “delincuentes en potencia”, pero por otro lado la mía, al considerar que la policía no

14
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

podía hacer otra cosa que meter la pata, creencia muy compartida en mi familia, con un
largo historial sindicalista.

Este punto de la creencia compartida, nos lleva a dar un paso más, citando a Hewstone (
1989) las creencia suelen estar compartidas culturalmente, lo cual lleva a la
uniformación de las atribuciones o para decirlo con sus palabras a las atribuciones
sociales.

Quede pues claro que esta tendencia de categorizar resulta de gran utilidad, digamos
que los beneficios son mayores que los costes. Este automatismo nos alivia de tomar de
nuevo decisiones acerca de cada una de las cosas que percibimos o que nos suceden,
aunque a menudo estos sesgos pueden inducirnos a error.
Generamos expectativas acerca del comportamiento esperado de una persona en
función del cajón, de la categoría en el que lo hemos archivado.

Estos cajones son lo que llamamos estereotipos, el conjunto de creencias acerca de los
atributos asignados al grupo. Cuando incorporamos la dimensión afectiva aparece el
prejuicio que sería el afecto o evaluación “negativa” asignada al grupo. Por último la
discriminación que es el ejercicio conductual que se manifiesta como una falta de
igualdad en el tratamiento de las personas pertenecientes al grupo
En general si la conducta observada es acorde a la expectativa, la atribución será
interna; si por el contrario, la conducta viola la expectativa, la atribución será externa.
Messi, un jugador de fútbol al que consideramos extraordinario, se dispone a lanzar un
penalti. Si lo mete, la tendencia será a atribuirle el mérito a su condición de gran jugador.
Si en cambio falla el penalti, trataremos de atribuirlo a la presión ambiental a la que
estaba sometido, al buen hacer del portero, o si te descuidas al árbitro.

Etiquetas y profecías que se autodeterminan

Una forma común de sesgo es lo que llamamos las profecías que se autodeterminan. En
busca de confirmar nuestras atribuciones, nuestras expectativas hacia un usuario o
paciente, forzamos su cumplimiento.
Bien sea buscando únicamente información relevante para la hipótesis que esperamos que
se cumpla, desechando la información que no encaja con nuestra predicción o a través del
“etiquetaje profesional” o diagnóstico, que no deja de ser una poderosísima herramienta,

15
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

que a modo de hierro, marca a fuego y permite reconocer a otros profesionales y al propio
sujeto sus “limitaciones” mas que sus capacidades.

En el libro titulado Pigmalión en clase, el psicólogo Robert Rosenthal (1972) describe los
resultados de sus experimentos en el Oak School. En esta escuela elemental de 650
alumnos y 18 maestros, se indujo una profecía autodeterminante a los profesores. Se
comunicó a los maestros que los alumnos iban a ser sometidos a un test de inteligencia
capaz de determinar el 20% de los escolares que durante el curso harían más rápidos
progresos y alcanzarían unos resultados por encima de la media. Se comunicó, además,
que después del test recibirían la lista con los nombres e los jóvenes mejor dotados. Los
nombres que los investigadores dieron a los maestros fueron del todo arbitrarios . No existía
ninguna diferencia entre éstos y los otros niños, sino únicamente la que se había inducido
experimentalmente en la mente de los profesores. Al final del curso escolar se verificó
realmente un aumento por encima de la media en los resultados de aquellos alumnos que
habían sido señalados y, además, los informes de los maestros los destacaron como niños
que se distinguían positivamente de sus compañeros también por su comportamiento y por
su curiosidad intelectual.

El experimento de Rosenthal, es un claro ejemplo de los potentes efectos de las


expectativas, prejuicios, deseos y todas las construcciones mentales, a menudo privadas de
cualquier conexión con la realidad, en las relaciones interpersonales.

Sin duda en las ciencias sociales somos herederos de los modelos desarrollados por la
medicina, que tan eficaces resultados han conseguido. Detengámonos en su funcionamiento
por un momento, para ver que va en el lote completo de la herencia:

Los modelos epidemiológicos detectan un déficit, un problema y se dedican a estudiarlo


exhaustivamente. De tal manera que diseccionan en multitud de variables a los individuos
que padecen ese déficit. Finalmente extraen aquellas características que parecen estar
presentes en un buen número de estos individuos.
Estas características son designadas como variables de riesgo, y su buen uso resulta muy
útil para la detección y prevención de ese déficit en la población normal. Así que si alguien
suma una cantidad considerable de esas variables, está listo para ser etiquetado o
diagnosticado
En algún momento, perdimos el norte y en el afán de tenerlo todo bajo control, de
estandarizar, nos olvidamos de que estas categorías se construían con herramientas
estadísticas, o sea probabilidades. Dándolas por ciencia exacta olvidamos que se

16
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

tratábamos con personas y no con esquizofrénicos, excluidos o toxicómanos, etc. Es así


como se completo el viaje de enfermos a enfermedades, del cual somos ,como se
comentaba, herederos en las ciencias sociales.7

Si la verdad es una construcción social, a la que se llega por consenso, está claro que
determinados agentes sociales tenemos una importante responsabilidad en esta
arquitectura. Si somos pues constructores y cómplices de verdades, ¿todas nuestras
construcciones tienen que ser pesimistas?

Y por otro lado, ¿qué hay de aquellos que escaparon de las fatales profecías que se les
auguraban, aquellos que pese a ser diagnosticados, pronosticados o etiquetados dieron al
traste con la linealidad causa-efecto que proponen los modelos de riesgo?
Cuando se tiene la impresión de la persona que tenemos padece una depresión, lo que se
espera de él es que se comporte como un depresivo. Sobre la base de tal expectativa
“leemos” los comportamientos de la persona bajo la influencia de dicha etiqueta,
atribuyéndoles significados distorsionados. La etiqueta es tan potente que muchos de los
comportamientos normales son completamente ignorados o mal interpretados para hacerlos
coincidir con la realidad hipotética (Watzlawick, 1976).
Una vez categorizamos a cualquiera, nos sentimos impulsados a buscar aquellas
características y actitudes de la persona que puedan ser englobadas en la categoría creada.
Sobre esta base ponemos en movimiento una serie de mensajes comunicativos que el otro

7
En el año 1969, la psiquiatra norteamericana Elizabeth Kübler-Ross, publico el libro sobre la muerte
y los moribundos. Pronto se convirtió en un éxito de ventas. En el se ofrecía una explicación sobre las
reacciones de las personas cuando tienen que enfrentarse a su propia muerte. Al parecer el enfermo
pasa por 5 etapas sucesivas desde el mismo momento que sabe que va a morir: 1) negación, 2) ira
contra su infortunio, 3) negociación o intentos de cambiar su destino mediante rezos, invocaciones,
promesas a si mismo de cambio de estilo de vida, etc, 4) depresión y 5) aceptación de su destino.
Este modelo tuvo una enorme influencia en las décadas siguientes , no solo en el afrontamiento de la
propia muerte sino, de modo mas general sobre las reacciones ante sucesos traumatizantes de
cualquier naturaleza. Según estimaciones de la propia autora , cada año se enseña su modelo en
125.000 cursos en universidades, seminarios, hospitales, etc. Pero sorprendentemente durante todo
este tiempo su esquema explicativo se ha venido aceptando de un modo acrítico a pesar de que no
había pruebas empíricas sólidas que lo avalasen. Como indica Nuland en su libro “como morimos”, ni
todas las personas reacción de ese modo, ni las emociones mencionadas son etapas necesarias de
un proceso a su vez necesario. Otros especialistas señalan que este proceso de afrontamiento es
más complejo de lo que sugiere el sencillo modelo de Kübler-Ross: la personalidad previa del
paciente, el tipo de enfermedad, el tipo de asistencia medica o el apoyo familiar recibido, son factores
que afectan decisivamente en el proceso de afrontamiento, pudiendo determinar una secuencia muy
distinta a la sugerida por Kübler-Ross.
Lamentablemente durante años se ha asumido incondicionalmente la validez de este modelo de
fases e incluso se ha llegado a crear una expectativa desmedida e infundada, por parte de algunos
profesionales, de que los moribundos se han de comportar del modo que paree obligado según la
teoría de Kübler-Ross. Como indicaba Pattison (1977), a veces se apreciaba en los hospitales que:
... los moribundos que no seguían estas fases eran etiquetados como desviados, neuróticos o
moribundos patológicos. El personal medico llegaba a mostrase iracundo que no pasaba de una fase
a otra... y había una demanda de que el moribundo “ muriese de la forma correcta”.
17
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

registra y que lo llevarán a comportarse como prevé el diagnóstico. A su vez, nosotros


registraremos los ajustes que confirmarás nuestra teoría. Las etiquetas influyen tanto a la
persona etiquetada como a todos los demás, actuando sobre todos como una profecía que,
por el solo hecho de haber sido pronunciada, logra desencadenar el acontecimiento
previsto, esperado o predicho, confirmando así la propia veracidad.
En los problemas de comportamiento de los niños y de los jóvenes, el proceso de
etiquetamiento es una constante que impide la evolución natural y las fases espontáneas de
los cambios. Una vez categorizado alguien, por ejemplo como hiperactivo, provocador o
como violento, el ambiente relacional tiende a sobrestimar los comportamientos que forman
parte de la categoría y a subestimar aquellos que no forman parte. El individuo será siempre
visto como provocador ,aún cuando no lo sea.

La tendencia a la victimización

En los últimos tiempos, numerosos estudios, parecen convertirse en la silenciada voz de los
que nunca acudieron al psicólogo o recurrieron a programas de ayuda sociales.
Las personas tenemos mecanismos propios para la superación del daño y del dolor.
Connotar como patológico lo que en realidad podría ser un proceso natural de aceptación de
una perdida, o como desajustados toda una serie de mecanismos que conducen a la
superación de un problema, conlleva el riesgo y el beneficio interesado de destinar recursos
de forma inapropiada. Esta connotación desenfoca y a menudo desenfoca el problema.
Una vez más caemos en el error de crear categorías y etiquetas demasiado generales.
Por ejemplo: ¿ser emigrante y adolescente es de por si una condición de riesgo?. Esta claro
que ambos temas suscitan una atención mediática que termina generando preocupación
social. Me pregunto si esta preocupación social, orquestada desde los medios, es suficiente
para dotar de recursos programas que intervienen sobre este “problema”. ¿No deberían
encargarse estudios desinteresados que aborden el problema con mayor especificidad y
complejidad de lo que lo hacen los medios de comunicación?

Hemos querido incluir un par de fragmentos del interesantísimo estudio que llevo a cabo
Carmelo Vázquez Valverde porque pensamos que ilustra de manera inmejorable esta
amplificación y desenfoque social acerca de la respuesta ante el dolor:
Reacciones de estrés en la población general tras los ataques terroristas del 11S, 2001 (
E.E.U.U) y del 11M, 2004 ( Madrid, España): Mitos y realidades

“ ...Asumir que las poblaciones humanas son básicamente frágiles ante la adversidad y el
trauma no solo es científicamente incorrecto sino que puede tener serias repercusiones al

18
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

guiar equivocadamente los programas de prevención e intervención. En este sentido,


Summerfield ( 1999 a 2001) ha efectuado criticas muy duras a los programas de ayuda
humanitaria de agencias oficiales y no gubernamentales, que se basan en asunciones
equivocadas ( a veces interesadas) sobre una visión psicopatologizadora de las poblaciones
a quienes esos programas van dirigidos. Una visión de la patología basada en listados de
síntomas y descuidando aspectos mas relacionados con el funcionamiento o la integridad
psicológica, puede erróneamente llevar a la conclusión de que el ser humano requiere
ayuda ante casi cualquier dificultad ( ver también una critica de esta idea en Blanco y Díez,
2004) y, además , esta visión patologizadora puede victimizar aun mas a los afectados al
considerarlos sujetos pasivos y decididamente frágiles.

Los datos sobre el impacto limitado y transitorio de los atentados terroristas del 11S y del
11M pueden comprenderse mejor desde esta perspectiva de la resiliencia ante la
adversidad. Los estudios de la población general indican que si bien los eventos
traumáticos, según se define en el DSM-IV pueden afectar a mas del 50% de la población
general en el transcurso de sus vidas ( Breslau, Davis y Andreski, 1995) solo el 1-3% ( 5 al
15 % si se incluyen las formas menos severas) pueden presentar TPET ( trastorno de estrés
postraumático).
Es evidente que la investigación le presta mucha mas atención a los mecanismos que
impiden a la mayoría de la población expuesta a eventos traumáticos para desarrollar
respuestas al trauma significativas para la clínica.

Los efectos de los atentados del 11S y del 11M, paralelos en muchos sentidos, han tenido
tenido un efecto menor en la población de lo esperado. ¿ Por qué hay una expectativa de
daño extendido en la población?.
Es probable que la idea errónea de que los seres humanos son vulnerables ante la
adversidad ( Seligman 1998, Bonnano, 2004) este en el origen de este prejuicio.
Los seres humanos son básicamente resilientes ante la adversidad, lo que se consigue a
través de una red compleja de procesos motivacionales y cognitivos mediacionales (
Lyubomirsky 2001). Uno de los factores implicados es la experiencia de emociones positivas
durante y después del trauma, las cuales pueden tener un efecto de amortiguación del
impacto del trauma ( Wortman y Silver 1989). ..

...en octubre de 2001, la oficina del Estado de Nueva York del departamento de
Epidemiología de la Mailman School of Public Health de la Universidad de Columbia
desarrollo una rápida evaluación de la naturaleza y magnitud de las necesidades de salud
mental en el estado como resultado de los ataques terroristas del 11S en el World Trade

19
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

Center. Este esfuerzo fue llevado a cabo durante un periodo de gran agitación e
incertidumbre ya que los neoyorquinos respondieron a estos sucesos traumáticos de este
desastre sin precedentes. Usando la cantidad de datos limitada disponible en el

momento, estimamos que mas de 520.000 personas en Nueva York y sus áreas aledañas
podrían sufrir de trastornos de estrés postraumáticos como resultado de la exposición a los
ataques, y que

más de 129.000 buscarían tratamiento para estos trastornos durante el 200. De esta manera
los planificadores de las políticas de salud pronosticaron una crisis grave de salud mental
entre los ciudadanos de NY esperando un incremento sustancial de casos de TPET (
trastorno de estrés postraumático).
Una situación similar se produjo en Madrid por las autoridades gubernamentales. Aun así los
estudios epidemiológicos subsiguientes conducidos en la ciudad de Nueva York ( Galea et
al., 2002, 2003)y en otras ciudades de los EEUU demostró, de hecho, que las tasas de
prevalencia de los trastornos de TPET en la población en general no eran
desproporcionados en relación con los porcentajes anteriores a los ataques del 11 S y
disminuyeron significativamente luego de los primeros meses después de la tragedia .
Con estas predicciones catastróficas se diseño el Project Liberty, destinado a proveer de
counseling gratuito a los ciudadanos de NY ( Kadet, 2000). A pesar de la gran respuesta que
tuvo el programa, esto supuso la cuarta parte de lo esperado por los autores del proyecto y
de los $ 131millones de dólares presupuestados para terapias dirigidas a los neoyorquinos,
quedan aun mas de 90 millones por gastar. Una de las lecciones de lo que sucedió tras los
ataques en suelo americano es que los
recursos han de situarse probablemente en sujetos seleccionados ( fundamentalmente
gente directamente afectada) empleando además procedimientos validos ...”

20
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

ELEMENTOS DEL PARADIGMA DE LA RESILIENCIA:

CONCEPTOS TEÓRICOS

1. La cercanía y vinculación
2. La herencia, genética y
aprendizaje
3. La resiliencia como algo que
se puede
promocionar
4. La resiliencia como un proceso
5. El estudio de Werner
6. Estudios de historias de vida
7. Introducción de la “adaptación
positiva y crecimiento
postraumático “

PUNTO DE VISTA FOCAL VALORES


1. El optimismo 1. Es una realidad humana
2. La creencia en las 2. Actitud optimista y
capacidades humanas pensamiento positivo
3. El no determinismo ,
romper la causalidad 3. Persona como agente
4. Dotar de sentido y dinámico
significado a la 4. La vida como proceso
adversidad
5. Proceso orientado
por la ética

A continuación explicamos de forma resumida qué elementos conforman el paradigma y en


qué consiste cada uno de ellos:

6.1. punto de vista focal : es la mirada de la realidad, el punto de vista que organiza el
conocimiento y brida una manera de pensar sobre los fenómenos a los que se dirige la
teoría y la práctica. Les invitamos, dado que ya se ha trabajado este apartado, a que sean
ellos los que planteen que incluiría este punto, cual sería ese punto de vista focal que
conformaría el paradigma de la resiliencia.

Creencias y Postulados en Resiliencia

Hasta aquí hemos hablado de un mundo complejo, repleto de información que nos exige
una rápida adaptación. Hemos desarrollado estrategias a medio camino entre lo individual y
lo social, que aunque por lo general son eficaces, también producen sesgos. Como hemos
ido viendo estos sesgos pueden ser muy significativos en nuestra practica profesional y
también en nuestra concepción del mundo.

En el siguiente epígrafe trataremos de asomarnos al mundo a través de otras ventanas, con


las mismas estrategias ( esquemas, heurísticos, profecías, etc) pero de un modo más

21
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

flexible e individual. Estas ventanas nos darán una primera panorámica de aquellas
creencias y postulados que nos acercan al paradigma de la Resiliencia:

1. La creencia en el cambio y el rechazo a la determinación

El pensamiento de que el juego no está terminado, a pesar de haber recibido malas cartas y
de que la vida es una partida que dura mientras estas sentado a la mesa, es algo asumido
por quienes trabajamos desde la Resiliencia
“Hacia solo unos meses, a principios de verano, habíamos recibido la visita de un técnico
superior de la institución que financiaba mi trabajo y el de algunos otros compañeros de la
Asociación. Había estado observando nuestro trabajo con niños atentamente durante un par
de jornadas, sin que nosotros fuéramos conscientes de ello.
Lo cierto es que nos dio algunos buenos consejos, pero durante el resto del verano, en mi
cabeza no dejo de resonar una de sus frases:
“ no penséis que vuestro trabajo como educadores va cambiar la vida de estos niños”
reconozco que la confusión acerca de la valía de nuestro trabajo perduro en mí unos
cuantos días.
Recuerdo que llegue a cuestionarme cosas como:
Si sería exactamente lo mismo, la vida de estos niños sin nosotros.
Desde que empecé en la educación había tenido muy clara la importancia del afecto, la
trascendencia de hacer un depósito emocional en los niños y permitir que ellos lo hicieran en
mí.
¿Sería exactamente la misma vida, la de esos niños y la mía propia sin ese afecto?
A menudo escucho como muchos cuestionan la resiliencia por la resistencia que ofrece a
ser medida. En ese momento, lo mismo pensaba del afecto que me trasmitían esos niños.
No supe como medirlo. Seguramente fue por eso, por lo que no supe explicarle al técnico,
que algunos de esos abrazos, incluso algunos gestos mucho más sutiles, significaban un
gigantesco cambio en si mismo.
Quizás el efecto de ese vinculo y esa confianza no les alcanzara en su vida adulta, pero en
el mismo momento, en el que Babia, un niño gambiano de 10 años recién llegado a España,
de mirada huidiza, se sentó a mi lado y puso su mano sobre mi rodilla -por primera vez-, yo
sabia que algo había cambiado, aunque no pudiera medirlo.
Percibir el cambio no significa necesariamente cuantificarlo, significa ser consciente del otro.
Registrar los pequeños cambios, requiere un ejercicio de cercanía y empatia que no todo el
mundo está dispuesto a hacer. Esta proximidad es una potente lente microscópica que nos
permite atisbar el leve movimiento de las cosas más diminutas. Nos permite conocer el

22
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

microcosmos de quien tenemos frente a nosotros, sus capacidades, sus necesidades, de


que se ríe y porque llora.
Es en ese universo diminuto donde se esconde la voluntad y los agentes para el cambio,
aunque sea para un cambio tan sutil como la mano de Babia en mi rodilla.
Dice un antiguo proverbio chino que “el aleteo de las alas de una mariposa se puede sentir
al otro lado del mundo”. ¿Acaso este proverbio del cual recibe el nombre el conocido Efecto
Mariposa, no es trasladable a la vida de una persona?.
Mientras escribía estas palabras rebeldes contra el destino, resonaban en mi cabeza las de
Tim Guenard, cuyo testimonio en “ Más fuerte que el odio”, nos revela la historia de un
muchacho abandonado y maltratado que hoy transformado, explica: “ el hombre es libre de
alterar por completo su destino para lo mejor o para lo peor. Yo, hijo de alcohólico, niño
abandonado, he hecho errar el golpe a la fatalidad. He hecho mentir a la genética. Ése es mi
orgullo”.

2. La creencia en el ser humano: Todos tenemos cosas que aportar

Se trata de la creencia en las capacidades humanas, incluida la capacidad de amar o el


afecto, la convicción de que todas las personas tienen aspectos positivos sobre los que
pueden construir un proceso de resiliencia para sobreponerse a las dificultades
“Me gusta lo que soy cuando estoy contigo “
La creencia de que cualquiera esta en disposición de aportar, si se le da el tiempo y el
espacio adecuado, era algo plenamente asumido por todos.
Esta realidad aritmética supone en ocasiones adaptar la operaciones a las capacidades y
motivación de quien tenemos frente a nosotros. Nuevamente esto nos conduce a la
importancia de conocer al otro para generar un contexto y un proceso en el que su
aportación resulte significativa.
Creer en las capacidades ajenas, significa ejercitar la confianza en el otro.
Desgraciadamente nuestra instrucción desde niños ha ido más bien encaminada en sentido
inverso.
Seguramente es la falta de experiencias cooperativas las que nos lleva a pensar que el fruto
de nuestro trabajo, difícilmente mejorara con las aportaciones ajenas.
Las sociedades postmodernas promueven valores como la competitividad y el
individualismo, que nos conducen a ver al otro como un rival, cuando no como un enemigo.
Todos estos valores nos aíslan, arrebatándonos parte de nuestra identidad cultural, que es
algo que sólo tiene sentido, cuando se conoce al vecino.

23
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

Conocer al otro, nos da la oportunidad de generar pensamiento crítico frente a nuestros


actos, nos hace mas humildes, nos permite reconocer nuestras imperfecciones. No existe
una sola manera de hacer las cosas, no existe un sola manera de sumar, de participar.
A lo largo de la historia de la humanidad, jamás hubo tantos medios y maneras para
comunicarnos y saber del otro, sin embargo jamás vivimos tan aislados de nuestros vecinos.

3. El optimismo.

Entendiéndolo como un optimismo realista, inteligente8.


Se trataría de una creencia, un filtro a nivel cognitivo que genera estados de ánimo positivos
y conductas proactivas. Hablamos de un mecanismo que nos empuja para seguir adelante
frente a las dificultades, una herramienta que facilita la adaptación y que acompaño a la
humanidad en todas sus grandes empresas.
Un optimista siempre tiene un proyecto, una meta; el pesimista siempre tiene una excusa.
En palabras de Winston Churchill, Un optimista ve una oportunidad en toda calamidad, un
pesimista ve una calamidad en toda oportunidad
Algunos autores comienzan a considerarlo como un rasgo de personalidad ya que se
muestra bastante estable a lo largo de la vida, el optimismo es una característica psicológica
disposicional que remite a expectativas positivas y objetivos de futuro (Peterson y Bossio,
1991; Scheier y Carver, 1993)
Los estudios generalmente centrados en las patologías y por ende en las emociones
negativas que las provocan han comenzado recientemente a centrar su atención en las
emociones positivas. Al parecer el optimismo multiplica estas emociones que favorecen el
bienestar y la salud.

Algunos efectos de las Emociones positivas:


Cuando el estado de animo es bueno somos menos críticos con nosotros y
con los demás.
Cuando estamos contentos, recuperamos buenos recuerdos, que consolidan
y prolonga nuestro bienestar.
Los estados de animo positivo nos hacen flexibles y menos rígidos
En presencia de emociones positivas somos más creativos e imaginativos
Nuestra velocidad de respuesta aumenta y tomamos decisiones más
acertadas.

8
Optimismo inteligente, M. Avia y C. Vázquez, Alianza Editorial, 1998
24
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

En relación a la salud baste como muestra un botón: estudios recientes han demostrado
que un pensamiento optimista reduce el riesgo de padecer procesos cancerigenos e
infartos de miocardio y aumenta la eficacia del sistema inmunológico. (M.
Seligman,1991).

4. La adversidad como parte natural del proceso vital

El proceso de resiliencia toma como momento de referencia la aparición de la adversidad.


Entendiendo que la adversidad forma parte de la vida. La adversidad no es algo
gratificante, nadie la desea, simplemente ocurre.
Tanto es así que la propia evolución nos ha dotado de sofisticados mecanismos para
adaptarnos frente a toda suerte de acontecimientos novedosos y en ocasiones
amenazadores.
El mecanismo básico que se activa de manera autónoma al percibir una amenaza, es lo que
llamamos respuesta de estrés.
Introduciremos una sencilla clasificación de acontecimientos vitales estresantes que a
menudo son considerados como adversidades, teniendo en cuenta que uno de los
elementos principales al hablar de adversidad es la subjetividad con la que esta es
percibida:
1.los normativos de edad
Determinantes biológicos y ambientales que muestran una alta correlación con la edad
cronológica.
Ejemplos: todos aquellos relacionados con la maduración biológica y la socialización cuando
es considerada como la adquisición de una serie de roles o competencias normativas
relacionadas con la edad.( el paso de primaria al I.E.S, la primera relación sexual, etc)
4. los normativos históricos
Acontecimientos o normas completamente generales experimentados por una unidad
cultural dada en conexión con el cambio biosocial. las influencias de tipo histórico pueden
implicar tanto características ambientales como biológicas. Dichos efectos de cambio
biosocial varían con el tiempo histórico y pueden producir constelaciones únicas de
influencias relacionadas con una generación ( el antiguo servicio militar obligatorio, el timo
de la vivienda)
3. los no normativos
Determinantes ambientales y biológicos que, aunque significativos en su efecto sobre
historias vitales individuales, no son generales. No ocurre a todo el mundo ni ocurren
siguiendo un patrón o secuencia invariable. Ejemplos de esto son los acontecimientos y

25
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

patrones de acontecimiento relacionados con actividades profesionales (desempleo), vida


familiar (divorcio, muerte de otra persona significativa) o salud (enfermedades serias).

Cualquiera de estos acontecimientos puede convertirse en una adversidad siempre y


cuando sea percibido como una amenaza. Un matiz importante es que estos agentes
estresantes no tienen porque ser una amenaza real, basta con que en nuestro sistema de
creencias o fruto de nuestra experiencia los percibamos como tales, es lo que tiene tener
una corteza cerebral muy desarrollada capaz de representar, imaginar o simplemente
recordar.
Sin embargo en el transcurso del estudio de nuestras formas de afrontar estas adversidades
hemos descubierto que existen algunos factores psicológicos que pueden modular y por
tanto favorecer una adaptación exitosa9:

El control o la sensación de control sobre la situación


La familiaridad de la situación, el haber estado expuesto anteriormente a esa
situación y por tanto la capacidad de hacer predicciones sobre la misma.
Generar salidas para la frustración, distraerse, practicar algún hobbie o
incluso imaginar una salida.
Tener redes de apoyo y comunicar las emociones
Percibir los pequeños cambios hacia mejor, por pequeños que sean, generar
sesgos optimistas.

Como plantean algunos autores10, en circunstancias muy dramáticas, se comprueba que


muchas personas, no pudiendo descubrir el sentido de ese hecho a pesar de preguntarse
una y otra vez el “por qué” (ya que el mismo es literalmente in-sensato) pasan a hacerlo en
la pregunta “para qué”, que abre puertas hacia el futuro.
El testimonio y el altruismo son dos modos frecuentes de responder a esta pregunta, de tal
forma que los beneficios quien ayuda puede lograr de su actividad, sea cual fuere su historia
personal, constituyen a menudo una fuente de motivación que permite proseguir con
perseverancia una acción frecuentemente ingrata o difícil. En palabras de Jacques Salomé,
renombrada psicoterapeuta, abandonada al nacer por sus padres y que padeció tuberculosis
ósea a la esdad de 9 años, teniendo que permanecer enyesada desde el tobillo hasta el
cuello durante más de cuatro años, “Si yo intento, mediante mis libros o mis actos de
formadora, enseñar las bases de una ecología relacional que permite a cada uno poder
decir y ser entendido, ser reconocido tal como es, y no tal como se querría que fuera, que le

9
¿Por qué las cebras no tienen ulcera?: la guía del estrés. de Sapolsky, Robert m. alianza editorial
10
“Resiliencia y subjetividad. Los ciclos de la vida”. MELILLO, Aldo , SUÁREZ OJEDA, Elbio Nestor y
RODRIGUEZ, Daniel. (compiladores). Pp 97-99.
26
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

permita ser valorado, es decir, tener un valor ligado al sentimiento de ser útil al mundo, es
por cierto en relación directa con mis propias carencias y faltas. (…) Cada vez que intento
restaurar al prójimo, yo reparo una parte de mi misma.” El altruismo es así no sólo una
consecuencia, sino también una fuente de resiliencia.

6.2. Valores

Son las ideas para lo que sirve. Da énfasis a lo que es importante desde su punto de
vista. Por ejemplo en la medicina un valor importante es la preservación de la vida, y
eso da sentido a su trabajo, que prolonga la vida.

Como valores fundamentales del paradigma hemos seleccionado aquellos que guían
la resiliencia, los cuales pasamos a explicar brevemente a continuación:

1. Es una realidad humana constatada por la Historia de la Humanidad. El punto


de partida de la resiliencia es un hecho, una realidad humana, que se puede
observar, son caminos de vida que nos sorprenden.

2. Valor de la actitud optimista y el pensamiento positivo como claves que


ayudan a centrarse en el logro de las metas propuestas. Hay que tener en
cuenta que hablamos del realismo de la esperanza.

3. Valor de la persona como agente dinámico, responsable y protagonista de sus


actos y de su realidad. Es la persona la que tiene la potencialidad. Incluso en
el caso de los tutores de resiliencia, aquellas personas que provocan un renacer
del desarrollo psicológico tras el trauma, normalmente a través de un encuentro
significativo, no son ellos los que buscan, sino que son las personas las que
encuentran a sus tutores de resiliencia.

4. Comprensión de la vida como proceso, la incorporación de la adversidad como


parte del ciclo vital. La resiliencia se presenta bajo la forma de un proceso de vida
que se construye con otras personas del entorno y que siempre permanece
variable.

27
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

5. Es verdaderamente un proceso de crecimiento, una evolución positiva a través


de grandes dificultades, un crecimiento hacia una nueva etapa de la vida, y no
únicamente un simple rebote como el del muelle que vuelve a su forma original.

6. La importancia de que sea un proceso orientado por una ética profunda. No se


trata de sobrevivir a toda costa, como sucede en la ley de la selva. Se trata de
lograr una supervivencia socialmente aceptable, dentro de parámetros aceptados
cultural, social, ética y comunitariamente (Vanistendael, 1996, pp 9-10)

6.3. Contenidos teóricos centrales


Son las ideas teóricas centrales, lo que le da identidad, la matriz disciplinar

1. La cercanía y vinculación, apego. Cyrulnick11 emplea la imagen de un tejido que se


está haciendo para destacar el hecho de que la resiliencia se teje, se entrelaza con varios
elementos. Se trata, pues de una capacidad que resulta de un proceso dinámico. En la
mayoría de los casos, es el contacto con “el otro” el que abre la posibilidad de tejer una
resiliencia: es la mirada amistosa, la escucha atenta y respetuosa, el apoyo de una persona
lo que permite iniciar un proceso de resiliencia. En el trascurso de su vida, el niño encuentra
personas (educadores, miembros de su familia, maestros, amigos,…) que devienen “tutores
de resiliencia”, puntos de apoyo en quienes el niño (y más ampliamente una persona de
cualquier edad) que se encuentra en una situación difícil puede aferrarse para iniciar su
reconstrucción.

En palabras de Bowlby (1958) sería constituir un “apego seguro” entre el niño y sus
progenitores (como figuras más representativas de su desarrollo psicológico). Un vínculo
sano con los progenitores además de tener una función de protección favorece el desarrollo
emocional del niño y permite que éste reconozca sus limitaciones pero también todas sus
12
posibilidades.

La herencia, la parte neurológica . genética y aprendizaje

11
“La resiliencia invisible”, MARTINEZ TORRALBA, Isabel, VASQUEZ-BRONFMAN, Ana. Ed. Gedisa.
Barcelona, 2006. pp.30-31
12
“Crecer en la crisis. Como recuperar el equilibrio perdido”: ROCAMORA, Alejandro. Ed. Desclée de Brouwer,
colección Serendipity. Bibao. 2006
28
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

Al respecto de la conexión entre lo físico y lo espiritual, entre lo neurológico y lo psíquico,


extraemos una síntesis de los aportes que Boris Cyrulnik13 hace en su último libro, teniendo
en cuenta que es una vía de investigación abierta y en la que queda mucho por aportar.
Todo parte de una cuestión química: de la abundancia o escasez en nuestros cerebros de
unos neurotransmisores determinados, cuya producción es estimulada por el cuidado y el
cariño de los que nos rodean en nuestra infancia, depende que estemos más o menos
capacitados para tomar la vida, con todas sus adversidades, sorpresas y variaciones con
más o menos alegría.

Pero esto no nos determina como a ratones de laboratorio. Nuestro desarrollo como
individuos y en sociedad, las decisiones valientes que tomemos cada día, el gusto por el
intercambio con otras personas, el afecto compartido, la pasión que pongamos en lo que
hagamos, el ansia de aprender cosas nuevas, la actitud positiva que tengamos ante la
existencia, en definitiva va a hacer que la cinta trasportadora cambie el sentido de la
marcha: gracias a los logros de nuestra voluntad, en nuestro cerebro se producirán
reacciones químicas que aumentarán nuestra sensación de placer y bienestar y amplificarán
nuestra sensación de felicidad.

Al hilo de este asunto, surgen una serie de reflexiones:


Algunas personas parecen invulnerables. Soportan con una sonrisa las
pérdidas y heridas inevitables de la existencia. Acaba de descubrirse que
esas personas poseen un gen que facilita el trasporte de serotonina, un
neuromediador, una sustancia que lucha contra las emociones depresivas.
¿existirá un gen de la resiliencia?. Los pequeños portadores de serotonina
¿serian capaces de organizar un estilo de existencia apacible que no sólo
evitaria la depresión sino que además permitiría que la persona se regocijara
a pesar de todo?
Un pensamiento fácil nos hace suponer que cuando uno es desdichado,
basta con refugiarse en los brazos de la felicidad. La organización cerebral
arroja una sombra sobre esta idea demasiado simple. Los circuitos
neurológicos del dolor desembocan en zonas del cerebro lindantes con las
zonas de las emociones felices. La orientación de las informaciones se
desvía por el motivo más nimio. Un encuentro afectivo, una palabra o un
circuito neuronal trazado en la infancia puede hacernos pasar de la felicidad a
la pesadumbre.

13
“De cuerpo y alma. Neuronas y afectos: la conquista del bienestar”. CYRULNIK, Boris. Ed. Gedisa .
Barcelona 2007. pp, 21-23
29
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

Curiosa imposición de la condición humana: sin la presencia de otro no


podemos llegar a ser nosotros mismos, como lo revelan en el escáner las
atrofias cerebrales de los niños privados de afecto. Para poder desarrollar
nuestras aptitudes biológicas estamos obligados a apartar la atención de
nuestro centro a fin de experimentar el placer y la angustia de visitar el
mundo mental de los demás. Para llegar a ser inteligentes, debemos ser
amados. El cerebro, que era la causa del impulso hacia el mundo exterior, se
transforma en la consecuencia de nuestras relaciones. Sin apego no hay
empatía. El “yo” no puede vivir solo. Sin empatía nos volvemos sádicos,
pero demasiada empatía nos conduce al masoquismo.

Hasta el momento hemos fabricado una representación de la persona cortada en dos partes
separadas. Sin embargo es tan inconcebible una persona sin alma como un alma sin
persona.

3. La resiliencia como un proceso en el que interactúan tanto pilares de resiliencia


(fortalezas intrapsÍquicas) y los factores de resiliencia (factores contextuales).

De acuerdo a Löesel, entre los recursos más importantes con los que cuentan los niños que
han vivido procesos de resiliencia, se encuentran14:

Una relación emocional estable con al menos uno de sus padres, o bien
alguna otra persona significativa.

Apoyo social desde fuera del grupo familiar.

Un clima educacional abierto, contenedor y con límites claros .

Contar con modelos sociales que motiven el enfrentamiento constructivo.

Tener responsabilidades sociales dosificadas, a la vez, que exigencias de


logro.

Competencias cognitivas y, al menos, un nivel intelectual promedio.

14
Extraído del documento “Estado del arte en Resiliencia”, publicado por el CEANIM en 1996
30
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

Características temperamentales que favorezcan un enfrentamiento efectivo


(por ejemplo: flexibilidad).

Haber vivido experiencias de autoeficacia, autoconfianza y contar con una


autoimagen positiva.

Tener un enfrentamiento activo como respuesta a las situaciones o factores


estresantes.

Asignar significación subjetiva y positiva al estrés y al enfrentamiento, a la vez


que, contextualizarlo de acuerdo a las características propias del desarrollo.

El autor señala que pueden existir además otros factores protectores. Destaca que éstos no
son igualmente efectivos, y que en el plano individual algunos logran efectos solamente
moderados. Sin embargo, agrega que cuando varios de estos factores actúan
combinadamente, son capaces de promover un desarrollo mental relativamente sano y
positivo; esto, independientemente de las dificultades presentes en las condiciones de vida.

Los análisis de los estudios de Werner sobre niños en Kauai clasifican en tres clases los
factores relacionados que caracterizan a estos niños o niñas con procesos resilientes15:
1. atributos de disposición del individuo, tales como el nivel de actividades sociales,
inteligencia promedio, competencia en la capacidad comunicativa y locus de control interno.
2. lazos afectivos dentro de la familia que brindan apoyo emocional en tiempos de estrés
3. sistemas de apoyo externos, como el colegio, el trabajo o la iglesia que fortalecen las
competencias individuales y la determinación, y brindan un sistema de creencias que da la
razón a la vida.

Basándonos en los distintos estudios, proponemos este esquema como intento de organizar
los distintos elementos o factores que están presentes en los procesos de resiliencia :

FACTORES que favorecen el proceso de RESILIENCIA


FACTORES PERSONALES APOYOS EXTERNOS (Yo tengo)

15
“La resiliencia en el mundo de hoy. Cómo superar las adversidades”. GROTBERG, Edith
Henderson. Ed. Gedisa. Barcelona 2006.
31
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

Fortaleza interior Capacidades Factores afectivos Factores


(yo soy) interpersonales (el andamiaje del comunitarios(el
(yo puedo) vínculo) discurso social)
Sentido de vida Vínculo Emponderamiento

Pilares de resiliencia, ladrillos, Tutores de Dosis de


resiliencia exposición a la
adversidad

4. Introducción de la “adaptación positiva “ y “crecimiento postraumático “ como un


añadido.

En una revisión de unos cuarenta estudios científicos16 recientes sobre los cambios positivos
que experimentan algunas personas después de vivir una situación traumática, los
psicólogos de la Universidad de Warwick (Reino Unido), Alex Linley y Stephen Joseph,
llegaron a la conclusión de que existe un “crecimiento postraumático”. Igualmente, las
investigaciones de Susan NOlen-Hoeksema, profesora de Psicología de la universidad
estadounidense de Michigan y otros colegas, sobre los efectos de la muerte de seres
queridos, demuestran consistentemente que alrededor del 75 por ciento de los familiares del
difunto saca algo positivo de su dolorosa pérdida. Todos conocemos personas, (como
hemos visto en el taller) para quienes el proceso de duelo da lugar a algún cambio saludable
en su personalidad. Entre los beneficios más frecuentes se encuentran el fortalecimiento de
las relaciones con los demás y la capacidad de ponerse en las circunstancias de otros.
Algunos descubren en ellos mismos facetas creativas o altruistas que desconocían. Otros
afirman que disfrutan más que antes de las pequeñas cosas que ofrece el día a día.

En este sentido consideramos que, avanzando en el concepto que se barajaba inicialmente


de la “invulnerabilidad”, lo que podemos afirmar es que haber superado un obstáculo en la
forma y manera que hemos expuesto no implica quedar libre de estrés, presión o conflictos,
puesto que hoy por hoy no es posible predecir acontecimientos a los que uno va a tener
que enfrentarse en su devenir aunque si lo es definir algunos momentos de crisis
completamente relacionados con el proceso vital en cada cultura.

16
“La fuerza del optimismo”. ROJAS MARCOS, Luis . Ed. Aguilar 2005. pp 207

32
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

Definir este “después” como adaptación positiva en un intento por resaltar que las
condiciones que el individuo alcanza tras superar esa adversidad hacen que no se
encuentre en el mismo punto, sino que considere en él mismo una evolución personal.

Es aquí cuando comienzan a surgir las dudas respecto al sentido de esta afirmación:
¿cómo se sabe si realmente hubo adaptación positiva?
¿cómo se constata ese crecimiento? Incluso alguno se arriesgan a preguntar ¿cómo puede
medirse?
Realmente es una percepción subjetiva o es posible constatarlo mediante la observación de
un agente externo
¿Uno solo es consciente de que realmente ha llegado a ese punto cuando analiza al cabo
del tiempo lo que le sucedió?
¿dónde está el añadido?

Siempre17 hay un antes y un después de un suceso traumático. Pero no es menos cierto


que sólo una minoría de las personas que se exponen diariamente a las pruebas más
penosas de la vida claudican o enferman. Después de todo, la esperanza y el espíritu de
superación forman parte del instinto de conservación y de supervivencia del ser humano.

Si se trata de una nueva etapa de vida, y observando algunos ejemplos que se repiten en la
historia de la Humanidad, podríamos hacer referencia a asuntos como:
a. Mejora en la posición social, entendida esta no como el estatus económico, sino
como el aumento del reconocimiento social. En este punto incluiríamos tener
relaciones positivas con los demás, considerando por supuesto las diferencias
culturales.

Un ejemplo que ilustra esta mejora sería la historia de Rigoberta Menchú18, nacida en
una pequeña aldea guatemalteca, que como cualquier niña maya conoció de
pequeña el trabajo duro en los grandes latifundios. A los 19 años entró a militar en el
Comité de Unidad Campesina, mientras el Ejército Nacional llevaba a cabo su
campaña de tierra arrasada. El 9 de septiembre de 1979 su hermano menor fue
secuestrado y asesinado por el Ejército: en 1980 su padre fue quemado vivo junto
con otros veintinueve ocupantes de la Embajada de España, y pocos meses después
también su madre moría torturada. Rigoberto salío del país y se refugió en Mexico a
los 21 años, donde fue acogida por el obispo de Chiapas. Allí continuó aprendiendo

17
“Superar un trauma. El tratamiento de las víctimas de sucesos violentos”. ECHEBURÚA, Enrique. Ed.
Pirámide. Madrid 2005. pp.187.
18
“Rigoberto: la nieta de los mayas”, MENCHÚ, Rigoberto. Ed. Aguilar1998 . Madrid

33
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

el español, así como a leer y escribir. Desde allí inició una serie de viajes, cuyo
epicentro era Ginebra, donde participaba dentro del Grupo de Trabajo de la ONU
sobre Poblaciones Indígenas. Desde que en 1992 recibiera el premio Nobel de la
paz, sigue trabajando, ya en Guatemala, por la defensa de los derechos humanos,
particularmente en las áreas de desarrollo y educación a través de la fundación que
lleva su nombre.

b. Una satisfacción personal, en el trabajo y en otros papeles que desempeñe, ligado


a un sentimiento de optimismo. Como ejemplo el relato de Kim Phuc19, la niña que
sale en la fotografía de la guerra de Vietnam, que realió Nick Ut y que ganó el premio
Pulitzer. Reproducimos su testimonio al respecto de la foto: “Soy una persona
tímida. Durante mucho tiempo queria olvidar esa fotografía. Pero no conseguí
librarme de ella. Después pasó algo maravilloso. Me hice amiga de Nancy Pocock,
activista por la paz. Tuvo un fuerte impacto en mi vida y la echo mucho de menos.
Me enseño que si no podía huir de esa fotografía podía trabajar con ella por la paz.
Finalmente la acepté como un regalo poderoso. Parte del plan de Dios para mi vida.
Gracias a la fotografía me han pedido que intervenga en el movimiento por la paz.
En 1997 me nombraron embajadora de buena voluntad de la UNESCO y estoy
trabajando por una cultura de la paz. (…)”.

c. Un sentimiento de utilidad, de trascender al otro. Sentirse capaz de enfrentarse de


nuevo. Utilizamos el ejemplo de Frida Kahlo20, mujer de arrolladora personalidad y
de gran belleza, pintora y esposa del mayor pintor mexicano de la época, Diego
Rivera, cuya vida estuvo marcada por el sufrimiento. Inválida, postrada en una cama
de por vida, utilizó su pintura para expresar su dolor, sus angustias y su pena. Un
terrible accidente, a los 16 años, le destrozó la columna vertebral, obligándola a
llevar durante toda su vida unos dolorosos corsés de yeso que la torturaban. Frida
utilizaba la pintura para exorcizar su dolor y el talento trasformaba el exorcismo en
obras de arte. Este es un fragmento de su historia: “(…) El doctor Farill me salvó.
Me volvió a dar alegría de vivir. Todavía estoy en la silla de ruedas y no sé si pronto
volveré a andar. Tengo el corsé de yeso que a pesar de ser una lata pavorosa me
ayuda a sentirme mejor de la espina. No tengo dolores. Solamente un cansancio…y
como es natural muchas veces desesperación. Una desesperación que ninguna
palabra puede describir. Sin embargo tengo ganas de vivir. Ya comencé a pintar el

19

20
“Frida Kahlo”, JAMIS, Rauda. Ed. Circe, Barcelona 2003

34
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

cuadrito que voy a regalarle al doctor Farill y que esto haciendo con todo el cariño
para él.”

d. Darle significado al sufrimiento. Darle un sentido a una experiencia a priori


negativa puede trasformarse en un elemento clave de la resiliencia. Es aceptar que
la tragedia es parte inevitable de la vida

Muchos de los supervivientes de un trauma21 siguen amando y trabajando, como


decía Freíd que debía hacerse para lograr la felicidad. Lo que hacen es trasformar
su tragedia en energia creadora y enriquecer su vida con actividades sociales útiles y
gratificantes. No siempre es malo curtirse en la adversidad. Aceptar el sufrimiento y
sobreponerse a él es algo muy positivo. De hecho, un trauma puede enseñar a una
persona lo que es sufrir, pero también lo que es vivir.

Continuando con Echeburúa, se pregunta este autor¿cuál es el significado profundo de


la superación del trauma?. Recuperarse significa ser capaz de haber integrado la
experiencia traumática en la vida cotidiana y de haber trasformado las vivencias pasadas
en recuerdos, sin que éstos sobrepasen la capacidad de control de la víctima ni
interfieran negativamente en su vida futura. Y recuperarse significa sobre todo volver a
tener conciencia de que se ocupa un nuevo asiento del conductor de la vida (Herbert y
Wetmore, 1999). Convendría por tanto invertir el dicho popular de “mientras hay vida
hay esperanza” por lo contrario, “mientras hay esperanza, hay vida”.

Lo que es cierto es que hay víctimas de situaciones traumáticas que, por mostrar un
aprecio más profundo del valor de la vida o por quedarse con una sensibilidad más
acentuada, han recuperado e incluso aumentado su fortaleza moral y han encontrado
beneficios inesperados a su sufrimiento, no por masoquismo, sino por la aceptación de
que la tragedia es parte inevitable de la vida.

En cualquier caso, la respuesta comunitaria es fundamental para lograr la cicatrización


de las heridas psicológicas de la victima, la recuperación de su identidad moral y su
plena reintegración social. El dolor puede ser aliviado por el potente bálsamo de la
solidaridad y del dolor compartido.

21
“Superar un trauma. El tratamiento de las víctimas de sucesos violentos”. ECHEBURÚA, Enrique. Ed.
Pirámide. Madrid 2005. pp.188-189.

35
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

7. UN CAMBIO DE MIRADA22

Lo que nos plantea la resiliencia no es algo revolucionario. De alguna manera


reencontramos el buen sentido psicológico e incluso el buen sentido a secas. Pero si
queremos verdaderamente tenerlo en cuenta en nuestra vida, nuestro trabajo, seremos
impulsados a dirigir otra mirada sobre la realidad. Buscaremos con paciencia, inteligencia y
pasión los elementos positivos que nos permitirán construir una vida, más allá de la
reparación de los daños. Seremos inducidos a buscar estos elementos fuera de nuestros
marcos profesionales estrictos.

En suma, cambiemos de mirada. Intentemos aplicar dos frases aparentemente simples:


Podemos construir sólo con lo positivo
Positivo no significa necesariamente perfecto.
Planeémonos siempre esta doble cuestión: ¿con qué elementos podemos construir en una
situación dada? ¿y qué estrategias de construcción podemos utilizar?.

Nada parece más sencillo que cambiar la mirada. ¿la botella está medio llena o medio
vacía?. La historia y nuestra experiencia nos dicen que no es tan sencillo. Este cambio de
mirada sobre la realidad requiere de pequeños pasos, que consoliden la incorporación de la
misma en nuestro dia a dia.

Organizamos a continuación una serie de pistas para ir probando, sin ánimo de que
constituyan una receta.

1. Nuestra experiencia de resiliencia


Para empezar puede resultar útil que rindamos cuentas de nuestras propias experiencias
profesionales o particulares de resiliencia en nuestro entorno. Puede ser tan sencillo como
responder a la pregunta ¿quiénes son las personas, cuáles los acontecimientos que me han
ayudado a construir mi vida?.

2. Diagnóstico y análisis de la realidad


Complementar nuestros análisis, del DAFO (debilidades, amenazas, fortalezas y
oportunidades) a otro que cruce las variables, matizando nuestro análisis y haciéndolo más

22
Basado en el artículo “La resiliencia : desde una inspiración hacia cambios prácticos” de Stefan Vanistendael,
publicado en el material del II Congreso internacional sobre trastornos del comportamiento en niños y
adolescentes, Mafre Medicina y fundación O´Belen, 2005.
36
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

sútil y cercano a la resiliencia, dado que algunas amenazas (riesgos) pueden ser una
oportunidad.

D A D F

A
F O O

La vulnerabilidad, por ejemplo, puede aparecer a priori como una debilidad. Pero
¿constituye siempre un riesgo?. O puede constituir una oportunidad, que a su vez,
administrada con prudencia, se convierta en un factor positivo en la intimidad de una
relación de profunda aceptación mutua. Y que decir de la persona muy fuerte, muy
resistente, pero que resulta muy dura, para ella misma y para otros…

Aplicar la regla del 50/50 en la elaboración de diagnósticos, informes, etc. o al menos una
página de los recursos y el potencial de la persona, y no solo sus problemas. Un verdadero
diagnóstico no quiere conocer sólo los problemas, sino también los recursos y cómo
movilizarlos. Sino, nos quedaremos en la reparación, no reconstruiremos. Este diagnóstico
positivo puede ayudarse por cuestiones sencillas del tipo ¿qué persona es importante para
tal persona a la que atiendo? ¿en qué se interesa? ¿qué hace bien? ¿en qué se muestra
hábil o inteligente? ¿qué le satisface? ¿qué le hace reir?. El reto es desprenderse de los
elementos que construyen la vida, incluso si estos se esconden detrás de comportamientos
negativos.

3. Relación, afectividad, vínculo


Una dosis de empatía: por ejemplo, pensar como nos sentiríamos ante la descripción o
intervención que planteamos con la gente : ¿aceptaría yo que se me describiera o tratase
así?, ¿cómo me gustaría mejorarlo?

A veces es necesario desconectar del discurso, empatizar implica moverse en el plano de


las emociones. Hablar su mismo idioma, en un sentido amplio, desde todos los planos. No
pensar en lo que tengo que decirle, sino crear primero ese canal.

4. Revisar nuestras creencias

37
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

Ya hemos hablado largo y tendido sobre la construcción de nuestras creencias.


Dediquémonos algunos momentos a revisar nuestros prejuicios, a detectar nuestras
creencias más arraigadas.

Otra clave : Hay que aprender a RASTREAR las experiencias exitosas. Estamos
demasiado entrenamos a marcar con el “bolígrafo rojo”. Puede resultar útil focalizar la
mirada en las experiencias exitosas, construyendo relatos de esperanza

5. conocimiento del otro


Como ya hemos planteado, se trataría de dar el salto de detectar problemas y aportar
soluciones a detectar los recursos de la persona y cómo movilizarlos. El que sea evidente,
no quiere decir que sea fácil. Pero una vez que se descubre, no hay ninguna dificultad para
incorporarlo.

Si tienes conciencia de lo que es valioso y útil de ti, puedes rescatar también las fortalezas
del otro.
Rebuscar detrás de los comportamientos negativos, inadecuados, etc, los elementos que
construyen su vida.(que le interesa, que hace bien, qué persona es importante para él, en
qué se muestra hábil, qué le hace reir...)

8. PASOS PARA LA IMPLEMENTACIÓN DE PROGRAMAS O ACTUACIONES EN


RESILIENCIA

A partir de la propia experiencia, de la observación y del intercambio con otros profesionales


que han implementado actuaciones o programas desde este enfoque, hemos definido una
serie de pasos que consideramos necesarios para que la resiliencia se incorpore de una
manera consistente a la tarea profesional. Creemos que esto puede dar pistas para las
aplicaciones y reubicarlos en sus demandas.

Habrá que tener en cuenda, dado que hablamos de “proceso” de implementación, que no
hay un orden cerrado, sino que va a depender en buena parte del momento, de la
disposición de los implicados, del tiempo disponible o de los recursos a los que se pueda
acceder, entre otras cosas.

PASOS DEL PROCESO DE IMPLEMENTACIÓN DE PROGRAMAS Y ACTUACIONES EN


RESILIENCIA

38
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

A. Inquietud personal. Es el primer componente necesario para poder incorporar


cambios, una tendencia al movimiento y a la innovación.

B. Crisis del paradigma actual. A uno le llega cuando ve que hay realidades que
vemos y a las que no encontramos explicación con los paradigmas convencionales,
realidades que rompen lo esperado.

C. Disposición de búsqueda. En ese momento uno empieza a ampliar sus miras, y a


fijarse en otras formas de hacer, de interpretar la realidad, con una disposición de
búsqueda que le permite encontrar.

D. Primer contacto con el término Resiliencia


La primera reacción es de extrañeza por el término, la segunda de curiosidad
por la connotación de esperanza que lleva implícita.

E. Descubrimiento de que es algo más que un concepto. Empezamos a darnos


cuenta, una vez que hemos conseguido pronunciar adecuadamente el término, de
que la resiliencia organiza, estructura y pone nombre a nuestras intuiciones y
experiencias.

F. Documentación y búsqueda de información y recursos especializados . uno


consulta páginas web (nos llegan cada día demandas de información) o sugiere a su
coordinador que pidan algún curso de introducción, etc, o se va a otro país a
formarse…..

G. Toma de conciencia del propio proceso de Resiliencia. Mientras uno ahonda en


el tema de la resiliencia no se queda impasible. Inevitablemente comienza a revisar
las cuestiones desde un plano personal, puesto que es la mejor forma de
comprender esta realidad humana y conecta con experiencias vividas en la totalidad
de los casos..

H. Interiorización del cambio de mirada. Este es un paso que requiere tiempo y


entrenamiento, porque son muchos los “vicios” que hay que romper, y uno se
sorprende dia a dia repitiendo miradas sobre el otro que buscan el “ver para creer”,
alejándose de esta nueva mirada que cree para ver.

39
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

I. Incorporación de esa nueva mirada a la práctica profesional. Es el comienzo de


la aplicación, porque significa intervenir de otra manera, establecer objetivos de
forma distinta, relacionarse con las personas que se acercan a nuestros recursos
desde otro punto. Digamos que es la aplicación “de puertas para dentro”, nuestra
“baldosa”, aquello que es exclusivamente nuestro, independientemente de cómo sea
nuestro trabajo o institución.

J. Contagio a otros compañeros o personas del entorno. Si bien no es un paso que


se planifique, no falta en una buena implementación. Es ciertamente contagioso…
K. Revisión de lo que ya se hace en coherencia con este nuevo paradigma. Este
punto es necesario, dado que rescatar lo que funciona es clave, y posiblemente
existan muchos elementos que están en coherencia. A partir de ellos, es posible
seguir construyendo. No se trata de invalidar lo que ya se hace, que en sí sería una
contradicción con lo que plantea este enfoque.

L. Búsqueda o creación de metodologías y modelos conceptuales para la


práctica. La búsqueda de modelos no es sencilla por tratarse de algo relativamente
nuevo, con investigaciones incipientes y mucho camino por recorrer. A esto se suma
la complicación de trasladar algunos modelos de unas culturas a otras. Asi que este
paso es todo un reto.

M. Capacitación del equipo en los modelos . para profundizar en el modelo,


aprender a manejar las herramientas, aunar metodologías, y adaptarlo a los
destinatarios concretos.

N. Aplicación – investigación – documentación. Es la manera de que se pueda


avanzar y consolidar la propuesta.

O. Intercambio de experiencias con otros centros o programas. Acudiendo a


jornadas o eventos, contactando, buscando en la red, asociándose, etc.

P. Evaluación y retorno al punto (L). es un proceso dinámico, y se enriquece


continuamente, también con la incorporación de nuevos profesionales o proyectos
que planteen su intervención bajo el paraguas de la resiliencia.

40
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

Concluir esta parte puntualizando que en este asunto vemos que algunos pasos no se
pueden saltar, y que uno puede tener las herramientas, los modelos, pero si no ha hecho el
proceso de interiorizarlo y de replantear su mirada, la resiliencia corre el peligro de
convertirse en un conjunto de técnicas que no dan ningún resultado.

9. MODELOS CONCEPTUALES PARA LA PRÁCTICA


Cada modelo conceptual de práctica representa un proceso dinámico en el cual se
desarrolla el conocimiento y se utiliza a través de la formulación de teorías, la aplicación, el
examen empírico y la revisión. Se consideran modelos para la práctica si:
a) tienen articulada una tecnología para la aplicación
b) si tienen una base de investigación

Proporcionan fundamentos para la práctica y están basados en aquello que se hace en la


práctica diaria.

Teniendo en cuenta que en este caso los modelos que nos encontramos son muy recientes
y con poco tiempo de aplicación, vamos a mencionar a grandes rasgos cuales son las
tendencias en esos modelos.
Aclaramos en este punto la necesidad de implementar los modelos siguiendo unos pasos, y
lo ilustramos con el ejemplo de México y el del programa Rueda.

1. modelos que se centran en la promoción de pilares de resiliencia


programa Rueda ( España)
verbalizaciones de Edith Grotberg ( EE.UU.)
2. modelos que trabajan desde el ambiente cercano
los buenos tratos a la infancia, de Jorge Barudy
la resiliencia familiar de Froma Walsh ( EE.UU.)
3. modelos de resiliencia comunitaria
Las mariposas en la cocina, de Ceremap ( Argentina)
promoción de resiliencia en escuela de Nan Henderson y Milstein ( EE.UU.)

4. modelos de exposición al riesgo


el circo del mundo ( Chile)

10. UNAS CUANTAS CONCLUSIONES

41
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

La lucha por la supervivencia es algo que reside en la propia esencia del ser humano, y de
la que hemos tenido constancia a lo largo de toda la Historia de la Humanidad.

Pensemos pues en la Resiliencia como un proceso que surge en el momento en el que cada
persona se enfrenta a una adversidad, frente a la cual, poniendo en marcha sus habilidades
personales y apoyándose en los recursos y personas que le rodean, puede superar la
situación, alcanzando un desarrollo y crecimiento constatables.

En cuanto a lo que nos aporta este nuevo paradigma, bajo nuestro punto de vista señalamos
que la Resiliencia:

Ordena las intuiciones más ocultas, aquello que sabemos que en el fondo
puede ser que suceda.
constata la evidencia de lo que observamos quienes trabajamos dia a dia con
personas que se enfrentan a situaciones adversas, algunas de las cuales
rompen la famosa “profecía” que planea sobre ellos.
Explicita un lugar para la esperanza
Organiza y desglosa los factores implicados en ese proceso
Amplía la visión de la respuesta humana ante la adversidad, incluyendo no
solo el enfrentamiento, sino también el crecimiento posterior.

Se trata por tanto de un marco, un nuevo enfoque que nos permite mirar más allá de lo
supuestamente esperable, de las predicciones que inconscientemente elaboramos y
elevamos a la categoría de irrevocables

Asimismo, los avances en definir lo que ponen en marcha aquellas personas que se
enfrentan de forma exitosa y salen fortalecidos, hace palpable el interés actual por la
Resiliencia, como una posible respuesta a la necesidad de entender los sucesos desde el
realismo de la esperanza.

11. BIBLIOGRAFÍA

LIBROS:

42
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

AVIA, Maria Dolores y Optimismo inteligente,


VAZQUEZ, Carmelo Alianza Editorial, Madrid 1998

BARUDY, Jorge y Maryorie Los buenos tratos a la infancia. Parentalidad, apego y


DANTAGNAN resiliencia
Ed. Gedisa. Barcelona 2005
BROOKS, Robert y Sam El poder de la resiliencia. Como lograr el equilibrio, la
GOLDSTEIN seguridad y la fuerza interior necesarios para vivir en
paz
Ed. Paidós. Barcelona 2004
CYRULNIK, Boris Del gesto a la palabra. La etología de la comunicación
en los seres vivos.
Ed. Gedisa. Barcelona 2004
CYRULNIK, Boris De cuerpo y alma. Neuronas y afectos: la conquista del
bienestar
Ed. Gedisa. Barcelona 2007
CYRULNIK, Boris BAJO EL SIGNO DEL VÍNCULO
Ed. Gedisa Barcelona 2002
CYRULNIK, Boris El amor que nos cura.
Ed. Gedisa. Barcelona 2005
ECHEBURÚA, Enrique Superar un trauma. El tratamiento de las víctimas de
sucesos violentos
Ed. Pirámide. Madrid 2005

FRANKL, Víctor E El hombre en busca de sentido.


Ed.Herder Barcelona. 1999

GROTBERG, Edith Henderson La resiliencia en el mundo de hoy. Cómo superar las


adversidades
Ed. Gedisa . Barcelona 2006
HENDERSON, Nan y Mike M. Resiliencia en la escuela.
Milstein Ed. Paidos. Argentina 2003

JAMIS, Rauda Frida Kahlo


Ed. Circe. Barcelona 2003
KOTLIARENCO, M. Angélica, Estado de Arte en Resiliencia.
Irma Cáceres y Marcelo Ceanim. Santiago de Chile 1997
Fontecilla

43
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

KOTLIARENCO, M. Angélica, , Actualizaciones en Resiliencia.


Francisco MARDONER, Aldo Ed. De la Universidad Nacional de Lanús. Buenos Aires.
MELILLO, Néstor SUAREZ 2000
OJEDA
MANCIAUX, Michael La resiliencia: resistir y rehacerse.
(compilador) Ed. Gedisa. Barcelona. 2003
MARTÍNEZ TORRALBA, La resiliencia invisible. Infancia, inclusión social y
Isabel y Ana Vázquez- tutores de vida.
Bronfman Ed. Gedisa. Barcelona 2006
MELILLO, Aldo, E. Néstor Resiliencia y subjetividad. Los ciclos de la vida.
SUÁREZ OJEDA y Daniel Ed. Paidos. Buenos Aires 2004.
RODRIGUEZ (compiladores)
MENCHU, Rigoberto Rigoberto: la nieta de los mayas.
Ed. Aguilar. Madrid 1998
MORALES, J.F., MOYA, M., PSICOLOGÍA SOCIAL
REBALLOSO, E., FERNÁNDEZ McGraw-Hill. Madrid 1994
DOLS, J.M., HUICI,C.,
MARQUES, J., PÁEZ. D.,
PEREZ, J.A
MUNIST, Mabel y Manual de identificación y promoción de la resiliencia en
colaboradores nños y adolescentes.
Ceanim, Organización Panamericana de Salud. E.U.A. 1998
PUERTA DE KLINKERT, Resiliencia, la estimulación del niño para enfrentar
Maria Piedad desafios. Ed. Lumen. Buenos Aires 2002

ROCAMORA, Alejandro Crecer en la crisis. Cómo recuperar el equilibrio perdido


Ed. Desclée de Brouwer. Bilbao 2006
ROJAS MARCOS, Luis La fuerza del optimismo
Ed. Aguilar. Madrid 2005
SÁBATO, Ernesto La resistencia
Ed. Planeta. Booket. Buenos Aires 2003
SAPOLSKY, Robert m. ¿Por qué las cebras no tienen ulcera?: la guía del estrés.
alianza editorial 1992
SUÁREZ OJEDA, Néstor, Resiliencia: tendencias y perspectivas.
Mabel Munist y M.Angelica Universidad Nacional de Lanús. Argentina 2004
Klotiarenco

44
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

VANISTENDAEL, Stefan La felicidad es posible: despertar en niños maltratados


la confianza en sí mismos. Ed Gedisa. Barcelona 2002.
WALSH, Froma Resiliencia familiar. Estrategias para su fortalecimiento
Ed. Amorrortu . Madrid 2004

Watzlawick,Paul, Nardone Terapia breve estratégica, Pasos hacia un cambio de


Giorgio percepción de la realidad
Compiladores Ed. Paidos, 2000 Barcelona

ARTÍCULOS

ACUTÓN, Hilda y Avances en el estado del Arte en Resiliencia. Educación.


colaboradores Ceanim. Chile. 2004
KOTLIARENCO, M. Angélica Resiliencia e intervención educativa y psicosocial. M.A.K.
Consultora S.A. 1997
INFANTE, Francisca La resiliencia como proceso: una revisión de la literatura
reciente Ed. M. Mayo, 2001
GROTBERG, Edith Promoviendo la resiliencia en los niños: reflexiones y
estrategias 1996
GROTBERG, Edith Nuevas tendencias en resiliencia Perú 2000

MELILLO Aldo, Alicia Algunos fundamentos psicológicos del concepto de


CUESTAS, Mirta ESTAMATTI resiliencia Ceanim

PUIG ESTEVE, Gema PROGRAMA RUEDA: fortaleciendo la Resiliencia:


Una Estrategia para Desarrollar la Autoestima

RUBIO RABAL, José Luis 10 Razones para trabajar resiliencia,


Jornadas de infancia y adolescencia, Zaragoza 2007
VAZQUEZ VALVERDE, Reacciones de estrés en la población general tras los
Carmelo ataques terroristas del 11S, 2001 ( E.E.U.U) y del 11M,
2004 ( Madrid, España): Mitos y realidades

DICCIONARIOS CONSULTADOS

Diccionario Inglés-Español. Ed. Salvat. Barcelona 1979

DICCIONARIO Ilustrado Lanino-Españo, Español-Latin. Ed. Biblograf. Barcelona. 1983.

45
Taller “CONSTRUYENDO RESILIENCIA

DICCIONARIO Enciclopédico abreviado. Ed. Espasa-Calpe. Madrid. 1957.

Diccionario Inglés-español. Ed. Salvat. Barcelona, 1979.

Biblioteca de Consulta Microsoft® Encarta® 2005. © 1993-2004 Microsoft Corporation.

PÁGINAS WEB CONSULTADAS:

www.resiliencia.cl/
www.iacd.oas.org
www.paho.org/
www.gestiopolis.com

46

También podría gustarte