Barrios Cisneros Martínez Joshua 7AM5

Reseña del libro “El poder del pensamiento positivo en las empresas: 10
rasgos para lograr resultados óptimos”

En el libro, el autor comienza con una cita de Ruth Stafford Peale, mencionando que al nacer todos
pensamos positivamente y que el estrés es el culpable de que ciertos rasgos de ese pensamiento
positivo se vayan borrando. Lo cual para comenzar es un mensaje bastante motivador, por lo que
es un mensaje que invita al ávido lector a devorar cada una de las subsecuentes páginas. Sin
embargo, conforme el lector se adentra en cada una de sus páginas el lector puede fácilmente notar
que el libro se va tornando bastante repetitivo, quizás sea esta una forma de programación mental
para que al lector se le quede plasmada la idea: “Tiene que pensar positivo”.

El primer capítulo aborda diferentes estrategias para realizar una buena actuación frente a
situaciones diversas que pueden presentarse de forma negativa en el ámbito empresarial. En el libro
completo se trata de abordar el tema de los problemas desde un punto de vista del optimismo y del
entusiasmo, definiendo así diferentes formas de tratar a un compañero de trabajo conflictivo y
ayudando a resolver las diferencias entre las personas.

Como en una empresa todos los empleados son distintos es difícil lograr una aceptación de parte
de todos, sin embargo, no es imposible, esto se logra a través de pequeñas acciones que tienen un
gran valor para los empleados; el hecho de saludar a un empleado por las mañanas y las tardes ya
genera un nivel distinto de confianza que el hecho de solamente pasar por ese lugar diariamente de
forma indistinta o incluso apática, por lo que el entusiasmo es un punto clave en la resolución de
problemas, ya que, según Dale Carniage, la mejor forma de ganar una discusión es evitándola, por
lo que la mejor manera de resolver un problema es de igual forma evitarlo.

Según el autor la confianza, valor y determinación son clave a la hora de resolver conflictos
laborales, por lo que es necesario volverse una persona tolerante a la frustración para poder
resolver distintos tipos de problemas.

Conforme la lectura del libro avanza cada vez más podemos darnos cuenta de que el autor hace un
esfuerzo solemne por grabar en nuestra mente un pensamiento positivo que, según su explicación,
es nuestro estado natural. Por lo tanto, el autor se esfuerza en que el lector se dé cuenta de que
tiene capacidad de sobra para mantener este estado y que puede practicar una especie de
inmutabilidad ante la creciente tensión y el nacimiento de pensamientos negativos que pueden
afectar toda nuestra manera de desarrollarnos.

En conclusión, a mi parecer el libro es demasiad repetitivo en cuanto a la actitud positiva, con justa
razón, ese es el nombre del libro, a lo que me refiero es que considero que en ocasiones puede no
ser tan sencillo llevar a la práctica los postulados del libro debido a que ese pensamiento positivo se
va perdiendo y podría incluir algunas otras técnicas para mantener ese pensamiento positivo, como
por ejemplo la práctica de exámenes de conciencia diarios como los propuestos por el estoico
Seneca hace no más de dos mil años.