Dos Arboles Cual Escoges V 2017 PDF

Derechos Reservados © 2010 Alimenta Mis Ovejas, Inc.
1
Serie: Dos Árboles,
¿Cuál Escoges?
Escrito por: Luis y Susan Bautista
Derechos Reservados © 2010 Alimenta Mis Ovejas, Inc. 2

Guía Útil Para el Aprovechamiento de Este Material
¡Gracias por usar las herramientas de este ministerio! Estamos seguros que su vida y la
de otros serán transformadas y bendecidas al aplicar estas enseñanzas. Siempre es
importante buscar la dirección y ayuda del Espíritu Santo y usar la Palabra de Dios
como base principal.
Esta serie está compuesta de:
 Lecciones para que el alumno pueda profundizarse en el estudio bíblico. Al final

de cada sesión hay un repaso con ¨Puntos Importantes¨ de la lección.
La mejor manera para usar este material, ya sea en grupos pequeños, la iglesia o en su
hogar es que el alumno:
 Estudie la lección.
 Haga la tarea para la próxima clase - llenando los espacios en blanco en la
sección de los Puntos Importantes y contestando las dos preguntas al final.
 Repase las dos preguntas al final, en la próxima clase, antes de estudiar la
siguiente lección.
Si usted tiene preguntas, sugerencias o cualquier otro comentario acerca de este

material puede contactarnos en: www.alimentamisovejas.org
Correo electrónico: alimenta@alimentamisovejas.org
O escribanos a:
PO Box 122524
Arlington, TX 76012
U.S.A.
Que Dios bendiga su esfuerzo por crecer y engrandecer el Reino de Dios.
Luís y Susan Bautista

Alimenta Mis Ovejas, Inc.

Serie: Dos Árboles ¿Cuál Escoges?
Tabla de Contenido
SECCIÓN DEL ALUMNO
Sesión 1: La Voluntad…………....................................................................7
Sesión 2: El Conocimiento del Bien y Mal..................................................15
Sesión 3: El Árbol del Conocimiento del Bien y el Mal................................25
Sesión 4: La Autoridad y Sumisión.............................................................35
GUÍA DEL LÍDER

Respuestas a los Puntos Importantes de cada sesión................................................45
Sesión 1: La Voluntad…………..................................................................47
Sesión 2: El Conocimiento del Bien y el Mal..............................................48
Sesión 3: El Árbol del Conocimiento del Bien y el Mal...............................49
Sesión 4: La Autoridad y Sumisión.............................................................51

¿Cuál Escoges?
Sesión 1: La Voluntad

Serie: Dos Árboles, ¿Cuál Escoges?
Al momento en que una persona recibe a Cristo, el Espíritu Santo entra en la persona y
da vida a su espíritu que estaba muerto, ahora nuestro espíritu está justificado y
conectado nuevamente con Dios. En ese momento la obra del Espíritu Santo es sellar al
espíritu de la persona para que nunca más pueda ser contaminado por el pecado.
Nuestro espíritu está sellado y sentado en el Cielo con Cristo Jesús.
13
Habiendo creído en él, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la promesa.
Efesios 1:13, RV 1960
4 5
Pero Dios, que es rico en misericordia, por su gran amor con que nos amó, aun estando
6
nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo (por gracia sois salvos), y
juntamente con él nos resucitó, y asimismo nos hizo sentar en los lugares celestiales con
Cristo Jesús. Efesios 2:4-6, RV 1960
Nuestro espíritu ha sido purificado con la sangre de Cristo para siempre, sellado y
sentado con Dios en el momento de la salvación. Es entonces cuando comienza el
proceso de la transformación del alma, como también el proceso de crucificar la vieja
manera de vivir y depender de sí mismo (ego).
El cuerpo y el espíritu se conectan por medio del alma (mente, voluntad y emociones).
Por ejemplo: El alma se comunica con el mundo exterior por medio de nuestro cuerpo,
compartiendo pensamientos y emociones con otros, pero también nuestra alma se
relaciona con Dios a través de oraciones, cantos, adoración y más.
Somos un espíritu, que tiene un alma y que vive en un cuerpo. La Biblia nos promete
que si confesamos con nuestra boca que Jesús es el Señor y creemos en nuestro
corazón que Dios lo levantó de los muertos, seremos salvos. Usted es un espíritu y fue
diseñado para que viviera en dependencia al Espíritu de Dios y nuestra ALMA (mente,
voluntad y emociones) fue diseñada para que viviera en sumisión AL ESPÍRITU y
nuestro CUERPO sometido a nuestra ALMA.
ESPÍRITU DE DIOS Esta es la manera que Dios nos diseñó y en la que deberíamos
funcionar -- completamente dependiendo de Él.
Cuando Adán decidió vivir independientemente usando su mente
para razonar y su voluntad para decidir desobedecer a Dios y vivir
ESPÍRITU DEL HOMBRE la vida de la manera que él pensaba que era lo mejor; los
resultados de esta decisión fue la separación de Dios.
Toda persona nacida después de Adán nace en una condición de
ALMA pecado heredada por Adán y separada de Dios. Así que ahora ya
no podemos funcionar de la manera en que fuimos diseñados y
nos hemos quedado dependiendo solamente de nuestro
CUERPO conocimiento del bien y del mal.
EL SER HUMANO
ESPÍRITU DE DIOS ESPÍRITU DEL HOMBRE
ALMA
(mente, voluntad y emociones)
CUERPO

Después de la caída de Adán, todo ser humano fue dejado a depender en su propio
conocimiento del bien y del mal y no era posible funcionar en la manera en que fue
diseñado (dependiendo de Dios) porque ha nacido separado de Dios por culpa del
pecado. Cuando nacemos en este mundo, nácenos separados de Dios y vivimos la vida
dirigidos y dependiendo de nuestros propios pensamientos, emociones y decisiones.
La única manera de restaurar la conexión con el Espíritu de Dios es por medio de lo que
Cristo hizo en la cruz. Una vez que hemos recibido a Cristo, somos restaurados
nuevamente en una relación justa e íntima con Dios, pero para lograr el propósito para
el que fuimos creados y una vida abundante, es necesario que vivamos con toda
nuestra mente, voluntad, emociones y cuerpo sometidos al Espíritu de Dios.
Esto no es algo fácil porque desde el nacimiento, la carne y alma son programadas por
muchos años con creencias y vanas maneras de vivir; como también el relacionarnos
con otros y el mundo. Ahora el Espíritu de Dios está tratando de convencernos de que
hay una nueva criatura adentro y que estas viejas creencias son mentiras, no son
verdad. El Espíritu le quiere revelar la verdad a la carne y enseñarle cómo vivir guiado
por el Espíritu, pero si permite que su carne y alma continúen en control, usted actuará
como siempre lo ha hecho porque seguirá operando de la misma manera que antes,
basándose en su propio conocimiento del bien y mal. Para ser transformados tenemos
que permitir que el Espíritu de Dios que está en nosotros, nos reprograme de adentro
hacia fuera.
El alma está hecha de 3 partes (mente, voluntad y emociones). El espíritu de Dios no

actúa directamente en el cuerpo, sino que necesita un intermediario que es el alma.
Dios puso en el alma una voluntad libre para escoger.
Nuestra voluntad es un arma muy poderosa que Dios nos dio por razones específicas.
La voluntad humana es una de las fuerzas más poderosas. El diablo está al tanto de
esto y por eso tiene miedo que aprendamos la verdad, de cuán poderosa es nuestra
voluntad cuando la usamos de la manera para lo que Dios la creó. Así que el enemigo
toma aquello que Dios hizo para bien y trata de alejarnos y engañarnos para que no
entendamos la verdad, porque el diablo sabe que cuando comencemos a vivir la vida
sometida a la voluntad de Dios, entonces comenzaremos a vivir con poder y autoridad
como embajadores del Reino de Dios aquí en la Tierra y el diablo no tendría control en
nuestras vidas.
El propósito de esta sesión es ayudarlos a entender qué es la voluntad, el propósito por

el cual fue creada y la forma incorrecta en que la usamos. Hay muchas razones
importantes por las que debemos usar la voluntad correctamente. Fuimos creados para
tener autoridad y tener dominio sobre la Tierra y toda la creación (Génesis 1:28), pero si
no sabemos usar la voluntad de una manera correcta, entonces personas y cosas
tomarán dominio sobre nosotros. Fuimos creados para RE-presentar a Dios en la Tierra
y para poder hacer eso, debemos aprender a usar nuestra voluntad correctamente.
Nuestra voluntad es el mecanismo que hace decisiones o escoge. En primer lugar,

usted tiene una voluntad y esta voluntad tiene la capacidad de hacer decisiones y en
segundo lugar, usted tiene la voluntad acerca de cosas o situaciones en la vida, tales
como: Sus finanzas, amistades, trabajo, con quién se va a casar, etc.

Estas son dos cosas diferentes:
1. Su voluntad es el mecanismo por el cual usted hace decisiones.
2. Su voluntad acerca de lo que usted prefiere o desea, en alguna área o situación

específica.
Si usted rinde su voluntad en el área de finanzas a Jesús, ¿Le ha rendido toda su

voluntad a Él? No, sólo ha rendido su voluntad en un área específica, pero no ha
rendido toda su voluntad (o el mecanismo que hace decisiones).
Muchas veces cuando venimos a Jesús estamos dispuestos a entregar el control en

unas áreas específicas de nuestra vida, pero tal vez no le damos la libertad de hacer
Su voluntad en todo. Un buen ejemplo para ilustrar la diferencia entre rendir nuestra
voluntad acerca de algo, pero no rendir completamente la voluntad o derecho de hacer
todas las decisiones de la vida es si usted dice; “Jesús, he estado manejando todos
estos años, y lo que voy a hacer es sentarte en el asiento del pasajero, y a dondequiera
que Tú me digas que vaya, yo iré”.
Pero, eso no es rendir su voluntad al Señor, más bien es, navegación, ¿Por qué quién
es él que tiene las manos sobre el volante, quién es el que últimamente decide a dónde
va? Señorío es cuando usted dice: “Aquí está el asiento y el timón, yo me voy en el
asiento de atrás y prometo mantener mi boca cerrada, no solamente te daré mi voluntad
acerca de a dónde voy, de lo que tengo, o hago, te doy mi voluntad de tomar todas las
decisiones en mi vida”.
Usualmente rendimos nuestra voluntad o decisiones acerca de:

 Relaciones
 Posesiones
 Carrera
 Otras cosas
Nuestra voluntad es el mecanismo que hace decisiones o escoge. Debemos

preguntarnos, ¿Estamos rindiendo el MECANISMO a Dios o estamos rindiendo
solamente algunas decisiones a Él? ¿Estamos rindiendo toda nuestra voluntad o sólo
las decisiones que hacemos con nuestra voluntad en algunas áreas en particular?
Si es usted quien está decidiendo qué áreas, decisiones u opciones rinde al Señor,
entonces usted sigue usando su propia voluntad y de igual manera desarrollando o
reesforzando su propia voluntad. ¿Es Cristo quien tiene el timón (volante) de su vida?
Señorío es cuando yo entrego el poder de escoger cada decisión en cada área de mi
vida a Cristo, no sólo las decisiones en ciertas áreas.
Cuando usted le rinde el derecho de manejar a Dios, entonces es cuando Él se ha

convertido en su Señor, y así es cómo Él nos salva. No es posible que sea su Salvador
y no su Señor. Si usted le ha entregado su voluntad en ciertas áreas pero nunca le ha
entregado la voluntad (el mecanismo o derecho de escoger y hacer decisiones), tal vez
usted debe considerar que realmente usted nunca le ha entregado su vida a Él. Si no lo
ha hecho deténgase un minuto para rendir su vida y voluntad a Él y hacerlo no solo su
Salvador sino también el Señor de su vida.

El hecho que le hemos rendido nuestra voluntad a Él, no quiere decir que Él quiere que
seamos como robots. En vez de eso, Él quiere que seamos compañeros para realizar
Su propósito en la Tierra. Por eso nos dio la gran Co-misión para trabajar juntos
nosotros haciendo Su voluntad en la Tierra.
Dos maneras incorrectas en las que usamos nuestra voluntad son:
1. La rebelión
Desobedeciendo las instrucciones de Su autoridad. La rebelión es como
una inflamación en su alma o sea una actitud que puede causar daño a
sí mismo y a otros cuando hacemos decisiones dirigidas por ella. Si
usted responde a cualquier autoridad con rebeldía, no importa si la
autoridad es buena y lo que pide es para su bien, es posible que esa
autoridad se mueva, cambie o se vaya, pero si su corazón continúa en
un estado de rebelión usted no podrá obedecer a ninguna autoridad
aunque al hacerlo es para el bien de su vida.
2. El complacer por obligación

Esto sucede cuando respondemos y cumplimos ya sea con obediencia
externa aunque estamos en desacuerdo en el corazón.
Cuando complacemos con el comportamiento cumpliendo lo que otros piden aunque no

estemos de acuerdo, eso causa que otros (ellos) decidan nuestra voluntad, cediendo
así el control de nuestras vidas.
Las dos respuestas permiten que alguien más nos controle y cause separación en
nuestro corazón entre lo que hacemos y lo que verdaderamente creemos y somos.
La voluntad es como un músculo, entre más se usa, más fuerte se pone. Si usted usa
su voluntad de una manera rebelde y/o de complacer por obligación repetidas veces,
entonces será algo natural para usted ser rebelde contra la autoridad u obligación.
Si usted reconoce que ha usado su voluntad para ser rebelde y le gustaría arrepentirse,
lo puede hacer orando la siguiente oración o algo similar.
ORACIÓN:
Padre, confieso que he sido rebelde en acción y en actitud concerniente a
_____________________________ [nombre el área específica en la que usted ha
sido rebelde]. Yo confieso el pecado de rebelión contra esa autoridad que Tú has
puesto sobre mí. Hoy escojo someterme a Ti y a las autoridades que Tú has puesto
sobre mí en la Tierra.
El diablo hace que usemos nuestra voluntad en contra de nosotros mismos. El hace
esto al provocar la rebelión y el complacer obligadamente. Otra manera en que el
diablo usa nuestra voluntad contra nosotros mismos es cuando nos ponemos de
acuerdo con sus mentiras, como lo hizo con Eva.
Las fuerzas espirituales obtienen poder en la Tierra por medio de acuerdos. ¿De qué
manera o cómo somos salvos?

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Que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le
levantó de los muertos, serás salvo. Romanos 10:9, RV 1960
Al creer (en nuestro corazón) y confesar (acuerdo verbal) nos ponemos de acuerdo con
poderes espirituales. Aún antes que usted creyera en Jesús, Él ya era Señor, pero
cuando usted se puso de acuerdo (cree) y confiesa con su boca que Él es Señor, la
salvación se hace realidad en usted.
Jesús dijo: “El diablo no tiene lugar en mí”, ¡Eso es verdad! Jesús sabía quién era Él y
rehusó ponerse de acuerdo con el diablo. Así también cuando nosotros rehusamos
ponernos de acuerdo con el diablo, él no tiene lugar en nuestra vida y alma (mente,
voluntad y emociones) con sus mentiras. Es por eso que cuando los seres humanos
rompen sus acuerdos con el reino de la oscuridad, los demonios pierden su poder. De la
misma manera el poder de Dios se manifiesta cuando nos ponemos de acuerdo con Él
POR ACTO DE NUESTRA VOLUNTAD. Un acuerdo no está basado en lo que
pensamos o sentimos, sino que está basado en una decisión de someternos, confesar y
estar de acuerdo con lo que Dios dice sin importar nuestras circunstancias o
sentimientos.
La voluntad es poderosa porque es el mecanismo por el cual nos ponemos de acuerdo

o desacuerdo, damos o quitamos poder a cosas aquí en la Tierra. Podemos usar la
voluntad para ponernos de acuerdo y dar poder a cualquier reino, el Reino de Dios o el
reino del diablo. Una vez que usted usa su voluntad para entrar en acuerdo con algo o
alguien, ese algo o alguien obtienen poder en su vida.
Cuando entramos en acuerdo con algo, eso nos lleva a hacer más acuerdos del mismo
tipo, y estos se edifican el uno al otro ya sea para bien o para mal. Cuando nos
ponemos de acuerdo con las mentiras del diablo estamos usando nuestra voluntad de
una manera incorrecta, y cuando escogemos creer y confesar la verdad de Dios,
entonces estamos usando la voluntad de una manera correcta.
Complacer por obligación es ser obediente en acción o comportamiento externo,

aunque en nuestro corazón estemos en desacuerdo. Obediencia es un asunto de
conducta mientras que sumisión es un asunto o actitud del corazón.
La otra manera en que podemos usar nuestra voluntad de una manera correcta es
sometiéndola al Espíritu de Dios.
Someterse no es decir, “Haré cualquier cosa que usted quiera” la sumisión no es

forzada, es escoger voluntariamente dar el control o autoridad a alguien. Sumisión es
permitir entrar el poder en nuestras vidas. Es estar receptivo para que fluya el poder de
Dios en nosotros desde su posición de autoridad por medio de la sumisión a Su Santo
Espíritu. De la misma manera cuando nos sometemos a aquellas autoridades que Dios
ha puesto sobre nuestras vidas, entonces estamos permitiendo a Su Poder que ha sido
delegado a sus representantes (Líderes civiles, patrones, padres, pastores, líderes
espirituales, etc.) fluir por medio de nuestras vidas. Dios ha puesto a personas con
autoridad en nuestras vidas para que Su poder y gracia fluya en nosotros dándonos así
poder y bendición. Además nos da posición de autoridad en la vida de otros y al
someternos a Su Espíritu, Su poder fluirá por medio de nosotros en las vidas sobre los
cuales tenemos autoridad tales como hijos, esposa, empleados, hermanos, personas,
menores, etc.

Sumisión a la autoridad es el canal por el cual el poder de Dios fluye en nuestras vidas.
¿Qué pasaría si el cable de electricidad decide rehusarse a que la corriente eléctrica
pase a través de él? Se volvería inefectivo e inútil. Poder es autoridad delegada.
Cuando someto mi voluntad al Espíritu y autoridad que Dios ha puesto en mi vida,
entonces recibo poder para realizar Su propósito aquí en la Tierra. Al enfrentarme con
circunstancias difíciles tales como deudas, enfermedades, etc. y creer y confesar las
promesas y poder de Dios para esa situación confesando lo que Él dice acerca de esa
situación, Su poder se transmite por medio de mí para cambiar cada circunstancia.
Dios no desea controlar su actividad, Él quiere DAR PODER A SU IDENTIDAD como lo

que usted es, un hijo y embajador de Su Reino en la Tierra. La sumisión verdadera es
recibir el poder para ser y hacer aquello para lo que Dios nos creó; para RE-presentar a
Dios en la Tierra y manifestar Su poder, gloria y Reino por medio de nuestras vidas.
Nuestra voluntad fue diseñada para funcionar en sumisión y dependencia al Espíritu de

Dios. Jesús no sólo es nuestro Salvador, es también nuestro Señor. Ser un cristiano
significa crucificar diariamente nuestra carne (deseos) y someter nuestra voluntad al
que nos creó con un propósito increíble. Al dejar que Dios sea representado en la Tierra
por medio de nuestras vidas Él, nos llevará por aventuras increíbles llenas de amor,
gozo, paz y una vida súper abundante.
PUNTOS IMPORTANTES
1. Usted es un _________ y fue diseñado para que viviera en _______________ del
Espíritu de Dios y nuestra ALMA (mente, voluntad y emociones) fue diseñada para vivir
en sumisión AL ____________ y nuestro CUERPO sometido a nuestra ALMA.
2. Nuestra voluntad es el ____________ que hace decisiones o escoge. En primer lugar,

usted tiene una voluntad y esta voluntad tiene la capacidad de hacer ___________ y en
segundo lugar, usted tiene la voluntad___________ de cosas o situaciones en la vida,
tales como: Sus finanzas, amistades, trabajo, con quien se va a casar, etc.
3. Si es usted quien está decidiendo que áreas, decisiones u opciones rinde al Señor,
entonces usted sigue usando su ___________voluntad y de igual manera desarrollando o
Señorío es cuando yo_________ el poder de __________ cada decisión en cada área de
mi vida a Cristo, no solo las decisiones en ciertas áreas. Cuando usted le rinde el
derecho de manejar a Dios, entonces es cuando Él se ha convertido en su ________.
4. El diablo hace que usemos nuestra voluntad en contra de nosotros mismos. El hace
esto al provocar la __________ y el ___________obligadamente. Otra manera en que el
acuerdo con sus ___________, como lo hizo con Eva. Las fuerzas espirituales obtienen
poder en la Tierra por medio de ____________.
5. Complacer por obligación es ser obediente en acción o comportamiento externo,

aunque en nuestro corazón estemos en______________. Obediencia es un asunto de
_____________ mientras que sumisión es un asunto o actitud del __________.
6. La ___________ es el canal por el cual el poder de Dios fluye en nuestras vidas. Poder
es autoridad delegada. Cuando someto mi __________ al Espíritu y autoridad que Dios

ha puesto en mi vida, entonces recibo __________ para realizar Su propósito aquí en la
Tierra.
VERSÍCULO PARA MEMORIZAR:

Confía en el SEÑOR de todo corazón, y no en tu propia inteligencia. Proverbios 3:5, NVI
¿Qué me está diciendo el Espíritu Santo a través de esta clase?
¿En esta semana, cómo puedo aplicar en mi vida lo que he aprendido?

Series: Dos Árboles,
¿Cuál Escoges?
Sesión 2: El Conocimiento del
Bien y el Mal

Sesión 2: El Conocimiento del Bien y el Mal
En la primera sesión aprendimos acerca de nuestra voluntad y de las formas correctas e

incorrectas en que se puede usar. Cuando nos sometemos al Espíritu de Dios y
alineamos nuestras vidas con Su Voluntad, nos hacemos más como Él y cumplimos el
propósito para el cual fuimos creados. Además, aprendimos que la sumisión NO ES
decidir qué cosas vamos a hacer y qué cosas no vamos a hacer, es más bien rendir el
derecho de decidir. Al rendir nuestra voluntad (el mecanismo de tomar decisiones)
completamente a Cristo, estamos dependiendo en la guía y dirección del Espíritu de
Dios.
Sumisión a la autoridad es el canal por el cual fluye el poder de Dios en nuestras vidas.
¿Qué pasa si conectamos una computadora a un toma corriente? ¿Qué pasaría si la
computadora decide rechazar el poder que quiere fluir a través de ella? Sería inútil e
inefectiva. Si usted y yo nos conectamos a nosotros mismos u otra fuente en busca de
vida, poder y sabiduría, y rechazamos la fuente del poder de Dios, entonces NO
funcionaremos de una manera apropiada, pero cuando nos sometemos al Espíritu y
autoridad que Él ha puesto en nuestra vida, es entonces cuando recibimos el poder
para realizar Su propósito en la Tierra. Los seres humanos están limitados, pero Dios no
tiene límites y puede hacer posible en nuestras vidas lo que parece imposible, cuando
nos sometemos, confesamos Sus promesas y nos ponemos de acuerdo con Él.
Muchas veces creemos que usamos nuestra voluntad para decidir entre lo bueno y lo
malo. Así que estamos escogiendo acerca de cosas buenas (la carne buena) o cosas
malas (carne mala). Entonces decimos, “ahora soy cristiano y voy a hacer más cosas
buenas y menos cosas malas” y usamos nuestra voluntad para tratar de ser un buen
cristiano y pensamos que si estamos usando nuestra voluntad para escoger lo bueno y
rechazar lo malo, entonces creemos que estamos siendo y haciendo el bien. Pero
entonces eso quiere decir que estoy viviendo mi vida basada en el conocimiento del
bien y del mal, ¿Acaso no fue eso lo que hizo que Adán y Eva se metieran en
problemas y fueran sacados del Jardín?
Lo que los separó de Dios fue usar el conocimiento del bien y del mal para tomar
decisiones en su propia voluntad independientemente de Dios y Su voluntad.
Así que en vez de intentar escoger entre el bien y el mal o hacer decisiones basadas en
nuestra propia voluntad, debemos escoger obedecer y depender de la Voz y Espíritu de
Dios, en vez de obrar independientemente de Él y en nuestra propia manera de pensar,
habilidad y fuerza.
MANERAS DE USAR LA VOLUNTAD PARA ESCOGER
VOLUNTAD VOLUNTAD
BIEN MAL Espíritu de Dios Mi Conocimiento

Mi Conocimiento
Bueno Malo

Fuimos entrenados en este mundo para usar nuestro conocimiento del bien y del mal,
convirtiéndonos en seres hábiles y a menudo exitosos usando nuestro conocimiento,
PERO ESTO NO FUNCIONA EN EL REINO DE DIOS.
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Si con Cristo ustedes ya han muerto a los principios de este mundo, ¿por qué, como si todavía
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pertenecieran al mundo, se someten a preceptos tales como: No tomes en tus manos, no
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pruebes, no toques? Estos preceptos, basados en reglas y enseñanzas humanas, se refieren
23
a cosas que van a desaparecer con el uso. Tienen sin duda apariencia de sabiduría, con su
afectada piedad, falsa humildad y severo trato del cuerpo, pero de nada sirven frente a los
1
apetitos de la naturaleza pecaminosa… Ya que han resucitado con Cristo, busquen las cosas
2
de arriba, donde está Cristo sentado a la derecha de Dios. Concentren su atención en las
cosas de arriba, no en las de la tierra. Colosenses 2:20-23, 3:1-2, NVI
Antes de que Adán pecara estaba unido en una relación íntima con Dios. Su voluntad
estaba sometida a la Voluntad del Padre, así que siempre y cuando Adán se mantuviera
sometido a Dios, tenía vida abundante, pero como Adán escogió usar su voluntad y
actuar independientemente de la voluntad de Dios, ese acto lo llevó a desconectarse de
Dios. Adán se desconectó de la fuente de vida (Dios) y por eso murió instantáneamente
espiritualmente.
Dios el SEÑOR tomó al hombre y lo puso en el jardín del Edén para que lo cultivara y lo cuidara,
16 17
y le dio este mandato: Puedes comer de todos los árboles del jardín, pero del árbol del
conocimiento del bien y del mal no deberás comer. El día que de él comas, ciertamente morirás.
Génesis 2:15-17, NVI
Adán era sólo un recipiente por el cual fluía la vida, él no era la vida, ni tenía vida en sí
mismo. Su fuente de vida era algo fuera de sí, Dios. Una computadora mantiene su
poder y función sólo si está conectada a un toma corriente, así también Adán mantenía
su vida y poder cuando estaba sometido a Dios, pero Adán decidió desconectarse de
Dios y trató de usar su propio conocimiento del bien y del mal, pero ahora estaba
muerto, sin vida y sin poder. Ninguna cantidad de conocimiento substituirá nuestra
necesidad de poder y ninguna cantidad de conocimiento del bien y del mal puede
darnos vida. Si el tanque de gas de su carro está vacío, usted no puede llenar su propio
tanque con el mismo tanque vacío, de igual manera el hombre no puede encontrar vida
en sí mismo.
13
Porque dos males ha hecho mi pueblo: me dejaron a mí, fuente de agua viva, y cavaron para
sí cisternas, cisternas rotas que no retienen agua. Jeremías 2:13, RV1960
Cuando el hombre pecó, cambió la fuente del árbol de la vida por el árbol del
conocimiento del bien y del mal. Se desconectó de lo que le daba vida (Dios) y se
conectó a algo sin vida (su propio conocimiento). El árbol de la vida no nos deja sin
conocimiento, pero el árbol del conocimiento nos deja sin vida.
5 6
Confía en el SEÑOR de todo corazón, y no en tu propia inteligencia. Reconócelo en todos tus
7
caminos, y él allanará tus sendas. No seas sabio en tu propia opinión; más bien…
Proverbios 3:5, 6, 7ª, NVI
Jesús no dejó el Cielo para venir a la Tierra y liberarnos de nuestro mal

comportamiento. Génesis 3 nos da una descripción detallada de las circunstancias del
hombre caído y la razón por la cual Cristo tuvo que venir a la Tierra y la razón por los
eventos que se mencionan a través de toda la Biblia. Jesús murió para arreglar lo que

Adán desarregló en Génesis 3, cuando Adán desobedeció a Dios y comió del árbol del
conocimiento del bien y del mal trajo así la separación entre Dios y todo ser humano
que nació después de él.
1
Pero la serpiente era astuta, más que todos los animales del campo que Jehová Dios había
2
hecho; la cual dijo a la mujer: ¿Con que Dios os ha dicho: No comáis de todo árbol del huerto?
3
Y la mujer respondió a la serpiente: Del fruto de los árboles del huerto podemos comer; pero
del fruto del árbol que está en medio del huerto dijo Dios: No comeréis de él, ni le tocaréis, para
4 5
que no muráis. Entonces la serpiente dijo a la mujer: No moriréis; sino que sabe Dios que el
día que comáis de él, serán abiertos vuestros ojos, y seréis como Dios, sabiendo el bien y el mal.
6
Y vio la mujer que el árbol era bueno para comer, y que era agradable a los ojos, y árbol
codiciable para alcanzar la sabiduría; y tomó de su fruto, y comió; y dio también a su marido, el
7
cual comió así como ella. Entonces fueron abiertos los ojos de ambos, y conocieron que
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estaban desnudos; entonces cosieron hojas de higuera, y se hicieron delantales. Y oyeron la
voz de Jehová Dios que se paseaba en el huerto, al aire del día; y el hombre y su mujer se
9
escondieron de la presencia de Jehová Dios entre los árboles del huerto. Mas Jehová Dios
10
llamó al hombre, y le dijo: ¿Dónde estás tú? Y él respondió: Oí tu voz en el huerto, y tuve
11
miedo, porque estaba desnudo; y me escondí. Y Dios le dijo: ¿Quién te enseñó que estabas
desnudo? ¿Has comido del árbol de que yo te mandé no comieses? Génesis 3:1-11, RV 1960
En hebreo la palabra PECADO tiene 9 significados diferentes, y ninguna de esas

palabras se usa refiriéndose a la acción de Adán y Eva en el Jardín. Cuando Adán y
Eva trataron de cubrirse con las hojas, pensaban que era lo más correcto para arreglar
su acción, pero su espíritu estaba muerto (muerte quiere decir separación de), y al estar
separados de Dios, inmediatamente sus cuerpos comenzaron a deteriorarse y sus
almas a marchitarse. El pecado es un problema, pero la mayoría de las veces nuestra
definición de pecado nos lleva a comportarnos mejor y aplicar una solución que no es la
adecuada. Esta solución es como si alguien se tomara una aspirina para curar un mal
de cáncer. El pecado no está solamente en las malas acciones que cometemos, esto
es sólo el fruto de una condición de estar separados del Espíritu de Dios. La razón
principal por la que Cristo vino, no fue por nuestro mal comportamiento, sino a
reconectarnos con la fuente de vida.
9
Dios el SEÑOR hizo que creciera toda clase de árboles hermosos, los cuales daban frutos
buenos y apetecibles. En medio del jardín hizo crecer el árbol de la vida y también el árbol del
conocimiento del bien y del mal. Génesis 2:9, NVI
¿Sabe usted a qué se parece el árbol de la vida?

¿Sabe usted a qué se parece la vida?
¿Sabe usted a qué se parece el conocimiento?
Estos dos árboles del Edén eran dos árboles con frutos que tenían un parecido a algo
que NOSOTROS NUNCA HEMOS VISTO. Tenemos una idea a qué se parecen las
señales de vida, por ejemplo: El respirar o cuando un corazón está latiendo, pero
realmente NO sabemos qué figura tiene la vida.
Así cómo sabemos lo que es arrancar una manzana de un árbol de manzanas y

comerla, Adán y Eva podían ver los árboles de vida y conocimiento, arrancar de sus
frutos y comer del fruto del árbol de la vida o del árbol del conocimiento del bien y del
mal, así como de otros árboles. El ver, arrancar y conocer cosas como vida y
conocimiento era natural para ellos, pero no para nosotros hoy. Esto quiere decir que
antes de LA CAÍDA, Adán y Eva tenían una forma de saber y ver (percibir la realidad y
relacionarse con Dios) que nosotros no tenemos. Había una manera clara de ver, oír y

experimentar las cosas espirituales, pero el fin de estas cosas llegó cuando Adán y Eva
fueron sacados del Jardín.
Después que el hombre pecó, ya no podía ver, percibir o experimentar la esfera o

ambiente del Reino de Dios, como lo hacía antes. Pero ahora sabemos que Jesús en
Su muerte y resurrección ha restaurado las cosas como eran en el principio antes que el
hombre pecara. Lo que necesitamos corregir no es lo QUE vemos sino CÓMO lo
vemos. Los fariseos vieron la verdad de las escritura con claridad, pero la interpretaban
en su propia inteligencia y no podían ver que Jesús era la Palabra hecha carne y la
Verdad de la cual ellos predicaban y en su propio conocimiento crucificaron la Verdad
que adoraban.
Nuestros ojos espirituales están atrofiados (cegados) por la falta de uso, necesitamos
comenzar a ejercitarlos más. Aquellos que viven en sumisión con Dios no viven o
razonan con la vista natural. Debemos cerrar nuestros ojos, razonamiento y
entendimiento natural y así poder seguir a Dios completamente. No debemos vivir
nuestras vidas basándonos en información o razonamiento natural.
17
Mas el justo por la fe vivirá. Romanos 1:17b, RV 1960
El primer acto a la rebelión fue razonar (cavilar) y esto llevó a que Adán y Eva comieran
del árbol.
Cuando Adán y Eva comieron del árbol del conocimiento del bien y del mal, dos cosas
sucedieron:
1. Lo que era su fuente de vida cambió de dependencia en Dios a independencia
o dependencia en sí mismos.
2. Su fundación de la realidad ahora estaba LIMITADA a lo que se podía ver en lo

natural.
Desde aquel momento, la vida fue vista por medio de los lentes o perspectiva del
conocimiento del bien y del mal. Aún lo que parece bueno en nuestras vidas puede
causar desastres, porque ya no percibimos o entendemos con los ojos de Dios (así
como los fariseos). Cuando usted y yo vemos con los lentes equivocados, nuestra
perspectiva puede estar distorsionada. Hay ocasiones en que la manera que vemos la
realidad no es verdad.
Más tarde en Génesis, después que ellos habían comido del árbol del conocimiento del
bien y del mal, vemos como Dios protege el árbol de la vida para que ellos no coman de
él.
23 24
Y lo sacó Jehová del huerto del Edén, para que labrase la tierra de que fue tomado. Echó,
pues, fuera al hombre, y puso al oriente del huerto de Edén querubines, y una espada encendida
que se revolvía por todos lados, para guardar el camino del árbol de la vida.
Génesis 3:23, 24, RV 1960
En este versículo la palabra “ángel” en el lenguaje original no está hablando literalmente

de un ángel con una espada, sino de algo que se protege de no ser visto. Esto impedía
que ellos vieran y tomaran del árbol de la vida. La palabra que se usa en Génesis es la

misma que se usa en Lucas 24 cuando Jesús se aparece a las personas después de Su
resurrección y no podían discernir quién era Él.
15
Sucedió que mientras hablaban y discutían entre sí, Jesús mismo se acercó, y caminaba con
16
ellos. Mas los ojos de ellos estaban velados, para que no le conociesen.
Lucas 24:15, 16, RV 1960
Desde la caída de Adán todo el universo es un desorden y todos piensan que pueden
discernir entre el bien y el mal o juzgar entre lo correcto e incorrecto. Parece que el
hombre sabe más que Dios lo que es bueno y malo. Todos necesitamos ser liberados
de este engaño, porque es rebeldía contra Dios y eso es lo que hizo Adán y Eva.
Nuestro conocimiento es limitado e inadecuado comparado con el conocimiento de
Dios.
9
Mis caminos y mis pensamientos son más altos que los de ustedes; ¡más altos que los cielos
sobre la tierra! Isaías 55:9, NVI
Obtenemos vida a través de Jesús por fe, pero por medio de la obediencia y
dependencia en Dios, vivimos la vida que Él nos da. Pareciera que es fácil cambiar de
vivir la vida basada en nuestro razonamiento y conocimiento, pero no lo es, porque
hemos vivido independientemente de Dios desde nuestro nacimiento. ¿Cómo podemos
cambiar esto? La respuesta es que debemos vivir dependiendo de Dios sin cuestionar,
cavilar.
19
Ciertamente les aseguro que el hijo no puede hacer nada por su propia cuenta, sino solamente
lo que ve que su padre hace, porque cualquier cosa que hace el padre, la hace también el hijo.
20
Pues el padre ama al hijo y le muestra todo lo que hace. Juan 5:19,20ª, NVI
La vida que Jesús vivió en la Tierra, fue una vida en dependencia y sumisión
completamente del Padre y no en el conocimiento del bien y del mal. ¿Fue correcto o
incorrecto que Jesús fuera golpeado, olvidado y crucificado? Él se sometió a la
autoridad de Dios sin cuestionar, simplemente obedeció.
32
Como oveja a la muerte fue llevado; Y como cordero mudo delante del que lo trasquila, Así no
abrió su boca. Hechos 8:32, RV 1960
Siendo que no podemos comprender los pensamientos y caminos de Dios, entonces

debemos depender y confiar sólo en Él sin cuestionar. ¿Necesita el alfarero preguntar o
pedir consentimiento al barro para trabajar en él? Tan pronto como comenzamos a
razonar, estamos cuestionando a Dios en vez de obedecerlo.
El fruto del árbol del conocimiento del bien y del mal que Adán y Eva consumieron los
puso en una posición de tener que decidir, pero no fueron diseñados para usar su
voluntad para decidir, sino para obedecer.
Fuimos diseñados para dejar que la conexión entre nosotros y el Espíritu de Dios sea la
fuerza que nos guíe a seguir Su voluntad. Ellos no fueron diseñados para escoger entre
lo bueno y lo malo, fueron diseñados para escoger someterse a la voluntad de Dios,
pero cuando ellos comieron del árbol del conocimiento del bien y del mal, empezaron a
escoger lo bueno y lo malo sin depender de Dios. Se hicieron independientes que es lo
que quiere decir vivir en la carne.

Antes de comer del árbol del conocimiento del bien y del mal y de vivir una vida
independiente de Dios, Adán y Eva vivían en completa dependencia en Dios y no
sabían lo que era estar deprimidos, enfermos, en necesidad, enojados, muertos, etc.
Dios tenía dominio no por medio de leyes y reglas o a la fuerza, sino que por medio de
la sumisión a la autoridad dada por el Padre.
Cuando el hombre comió de ese árbol obtuvo algo que no necesitaba, el conocimiento
del bien y del mal. Antes de que comieran del árbol, el hombre no podía determinar si
algo estaba bien o mal, ni siquiera se preguntaban o consideraban en sus mentes; no
tenían opinión en nada, nada les preocupaba. Simplemente oían y hacían lo que el
Padre hacia y decía.
No es que Dios quiera arreglar nuestra voluntad para que nosotros escojamos o
decidamos lo que es correcto. Nuestra voluntad fue diseñada para escoger someterse a
la voluntad del Padre. Nada de lo que escogemos es correcto ya sea que parezca
bueno o malo, si está basado en nuestro propio conocimiento. Es como si tomáramos
un número de un directorio telefónico en donde todos los números están equivocados.
Escogemos lo que creemos es correcto, pero siempre está incorrecto porque está
basado en nuestro propio conocimiento inadecuado; aunque en verdad es un número,
pero es inválido. De la misma manera no debemos de tratar de ser embajadores del
Reino de Dios basándonos en nuestro propio conocimiento del bien y del mal. Un
embajador sólo habla y actúa en nombre del Rey. Los embajadores no hacen o dicen lo
que piensan o sienten, sino sólo lo que su mayor autoridad les ha dirigido a hacer y
decir.
1
Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan
2
conforme a la carne, sino conforme al Espíritu. Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo
3
Jesús me ha librado de la ley del pecado y de la muerte. Porque lo que era imposible para la
ley, por cuanto era débil por la carne, Dios, enviando a su Hijo en semejanza de carne de pecado
4
y a causa del pecado, condenó al pecado en la carne; para que la justicia de la ley se
5
cumpliese en nosotros, que no andamos conforme a la carne, sino conforme al Espíritu. Porque
los que son de la carne piensan en las cosas de la carne; pero los que son del Espíritu, en las
6
cosas del Espíritu. Porque el ocuparse de la carne es muerte, pero el ocuparse del Espíritu es
vida y paz. Romanos 8:1-6, RV 1960
No hay condenación para los que están en Cristo Jesús, porque Jesús los ha librado de
la ley del pecado y de la muerte, pero al usar mi voluntad para tomar decisiones
basadas en el conocimiento del bien y del mal, entonces me convierto en un esclavo del
pecado (separado de Dios), pero vivir la vida sometido al Espíritu de Dios nos trae vida
y paz.
Hay varias Iglesias, familias, consejeros y personas espiritualmente muertas haciendo y

diciendo lo que se ve “bueno y correcto” basado en su propio conocimiento del bien y
del mal (carne). Si usted entrena a un nuevo creyente a hacer buenas cosas (obras) o
vivir la vida en su propia fuerza y conocimiento, entonces usted ha logrado que se
conecte a sí mismo haciendo de él su propia fuente, una fuente sin vida. Pero si le
enseña a rendir sus derechos y a escoger someterse a la voluntad del Espíritu de Dios,
ese nuevo creyente disfrutará la paz y la vida abundante del Reino de Dios. Dios quiere
traernos a una íntima relación y dependencia con Él y no por saber y hacer el bien y
rechazar lo malo, o por un buen comportamiento, porque todo eso es exactamente lo
que Adán y Eva trataron de hacer al cubrirse con hojas. El conocimiento del bien y del
mal nos mata, distrayéndonos de la verdadera fuente de vida, JESUS.

No es posible conocer a alguien íntimamente por medio de conocimiento e información
solamente. Piense en una pareja en el día de su boda, al cruzar por cada una de las
actividades de ese día; la ceremonia, la recepción, el irse al hotel de luna de miel; estas
cosas los hacen exclamar ¡Todo esto es súper bello! Pero EN LA NOCHE será súper
mejor, porque finalmente se conocerán el uno al otro, sin embargo, al llegar al cuarto del
hotel el hombre saca lápiz y papel y le dice a su esposa: “Te quiero conocer, déjame ver
¿Cuánto mides de alto? ¿Cuál es tu color favorito?”, mientras que la esposa está
esperando para que él venga y VERDADERAMENTE LA CONOZCA.
No llegamos a conocer a Dios por medio de información y buen comportamiento, sino

de la misma manera cuando recibimos vida de Él por medio de una relación íntima de
espíritu a Espíritu, pasando tiempo en Su Presencia compartiendo abiertamente y
honestamente, recibiendo y dando amor. No somos salvos por nuestra obediencia, sino
que la obediencia es el vehículo que nos acerca a una íntima comunión con Dios. La
intimidad con Dios vendrá por medio de nuestra obediencia. Pastores, maestros, libros,
clases, etc. pueden traer información a su vida, pero Dios da la revelación por medio de
una relación íntima con Él, y esa revelación transforma nuestras vidas y circunstancias.
Cuando Adán y Eva escogieron desconectarse de la fuente de vida (Dios), la

reemplazaron por la fuente del conocimiento del bien y del mal. Ellos comenzaron a
figurarse cómo suplir sus necesidades por medio del conocimiento del bien y del mal y
hoy el hombre continúa ese mismo proceso. Ninguna cantidad de buena información o
conocimiento le dará a usted los frutos que produce el árbol de la vida (Jesús).
Cuando Jesús estuvo en la Tierra, a donde quiera que fuera, manifestaba el poder del
Reino de Dios y Su presencia en cualquier circunstancia o lugar. Echaba fuera
demonios, sanaba a los enfermos y resucitaba a los muertos, y además añadió que
mayores cosas haríamos nosotros.
12
Jesús dijo: Ciertamente les aseguro que el que cree en mí las obras que yo hago también él
las hará, y aun las hará mayores, porque yo vuelvo al Padre. Juan 14:12, NVI
Jesús no vino a resolver el problema de nuestro mal comportamiento o acciones

pecaminosas, Él vino a reconectarnos al Padre y Su Reino. Es imposible
conectarnos a Dios viviendo independientemente, dirigido por nuestro conocimiento
del bien y del mal. La vida abundante es posible cuando estamos conectados con el
autor de la vida por medio de la sumisión y dependencia en Él. Al estar conectados al
árbol de la vida (JESUS) por medio de la sumisión grandes cosas sucederán en y a
través de nosotros y el reino de la oscuridad huirá.
PUNTOS IMPORTANTES
1. Lo que los separó de Dios fue usar el conocimiento del bien y del mal para tomar
decisiones en su _________ voluntad independientemente de Dios y Su voluntad.
Así que en vez de intentar escoger entre el bien y el mal o hacer decisiones basadas
en nuestra propia voluntad, debemos escoger ___________y depender en la Voz y
Espíritu de Dios, en vez de obrar independientemente de Él y en nuestra propia
manera de pensar, habilidad y fuerza.
2. Siempre y cuando Adán se mantuviera _________ a Dios, tenía vida abundante, pero
como Adán escogió usar su voluntad y actuar independientemente de la voluntad de

Dios, ese acto lo llevó a desconectarse de Dios. Adán se desconectó de la fuente de
vida (Dios) y por eso murió instantáneamente _________________.´
3. Adán era sólo un _________ por el cual fluía la vida, él no era la vida, ni tenía vida en
sí mismo. Su fuente de vida era algo fuera de sí, Dios. Adán mantenía su vida y
poder cuando estaba _________ a Dios, pero Adán decidió desconectarse de Dios y
trató de usar su propio conocimiento del bien y del mal pero ahora estaba muerto, sin
vida y sin poder. Ninguna cantidad de conocimiento substituirá nuestra necesidad de
poder y ninguna cantidad de___________ del bien y del mal puede darnos _____.
4. El pecado no es solamente las malas ________ que cometemos, esto es sólo el fruto
de una condición de estar _________ del Espíritu de Dios. La razón principal por la
que Cristo vino, no fue por nuestro mal ____________, sino a ______________
con la fuente de vida.
5. Cuando Adán y Eva comieron del árbol del conocimiento del bien y del mal, dos
cosas sucedieron:
1. Lo que era su fuente de vida cambió de ___________ en Dios a independencia
o dependencia en sí mismos.
2. Su fundación de la realidad ahora estaba __________ a lo que se podía ver en

lo natural.
6. Antes de comer del árbol del conocimiento del bien y del mal y de vivir una vida
independiente de Dios, Adán y Eva vivían en completa ____________ en Dios y no
sabían lo que era estar deprimidos, enfermos, en necesidad, enojados, etc. Dios
tenía dominio no por medio de leyes y reglas o a la fuerza, sino que por medio de la
______________ bajo la operación en la autoridad dada por el Padre.
7. Jesús no vino a resolver el problema de nuestro mal _______________ o

acciones pecaminosas, Él vino a______________ al Padre y Su Reino. Es
imposible conectarnos a Dios viviendo independientemente dirigido por nuestro
______________ del bien y del mal. Vida abundante es posible cuando estamos
conectados con el autor de la vida por medio de la__________ y dependencia en Él.

12
Ciertamente les aseguro que el que cree en mí las obras que yo hago también él las hará, y
aun las hará mayores, porque yo vuelvo al Padre. Juan 14:12, NVI

¿Cuál Escoges?
Sesión 3: El Árbol del
Conocimiento del Bien y el Mal

Sesión 3: El Árbol del Conocimiento del Bien y el Mal
Todos nosotros hemos invertido bastante tiempo, energía, materiales y estrategias

tratando de parar el mal comportamiento o los actos de pecados que cometemos. ¿Qué
tal si no es ese el blanco o el centro del problema? El mal comportamiento fue el
resultado (fruto pero no la raíz) del problema original que entró en la raza humana
cuando Adán y Eva decidieron usar su voluntad para escoger vivir independientemente
de Dios.
15
Dios el SEÑOR tomó al hombre y lo puso en el jardín del Edén para que lo cultivara y lo cuidara,
16 17
y le dio este mandato: Puedes comer de todos los árboles del jardín, pero del árbol del
conocimiento del bien y del mal no deberás comer. El día que de él comas, ciertamente morirás.
Génesis 2:15-17, NVI
17
Y al hombre dijo: Por cuanto obedeciste a la voz de tu mujer, y comiste del árbol de que te
mandé diciendo: No comerás de él; maldita será la tierra por tu causa; con dolor comerás de ella
22
todos los días de tu vida. ... Y dijo Jehová Dios: He aquí el hombre es como uno de nosotros,
sabiendo el bien y el mal; ahora, pues, que no alargue su mano, y tome también del árbol de la
vida, y coma, y viva para siempre. Génesis 3:17, 22, RV 1960
El problema que destruyó a toda la raza humana fue el cambiarse de un sistema

(fuente) a otro sistema. De un fundamento a otro fundamento; de una fuente a otra
fuente. El problema fue que nuestro ancestro Adán comió del fruto del árbol del
conocimiento del bien y del mal. Antes de la caída, Adán y Eva, estaban conectados de
una fuente de la cual fluye la VIDA. Pero de repente todo cambió, ellos y todos los
descendientes (la humanidad) fueron conectados a otra fuente llamada
CONOCIMIENTO. Inicialmente, esto no suena como si fuera una cosa tan mala, pero
hoy podemos ver la raíz de traición y engaño que hay detrás de este nuevo árbol o
fuente.
Fundamentalmente Adán se desconectó de la fuente y fundación de donde fluyen ríos

de agua viva (Dios) y se conectó a sí mismo. Piense en una fuente de agua que estaba
conectada por un tubo al agua del mar y se desconecta para conectarse a sí misma,
limitándose a unos cuantos galones de agua, últimamente esos escasos galones de
agua; con el uso y el tiempo se irán secando hasta que la fuente quede sin agua.
Podemos ver en el árbol del conocimiento del bien y del mal dos tipos de ramas. Una de
la rama es del bien y la otra rama es la del mal. Recuerde que las raíces de estas ramas
no están conectadas a algo que produzca vida, las dos ramas salen de la misma raíz
(fuente).
Aunque a veces nos enfocamos en el fruto, el problema con el árbol del conocimiento
del bien y del mal, NO son sus ramas o el fruto, sino que el problema está en la raíz.
Aunque el fruto se puede ver muy bueno, si la raíz no tiene vida, entonces lo único que
puede producir es muerte. El tronco de este árbol es conocimiento, lo cual no es malo
pero sus raíces son del alma y carne egoísta.
Veamos más detalladamente cómo funciona el árbol del conocimiento del bien y del
mal. Dividiremos las ramas del árbol en dos partes; una parte de las ramas son las
ramas del conocimiento del mal y la otra mitad son las ramas del conocimiento del bien.

Para nosotros es muy fácil reconocer la rama del mal y sus efectos. En esta rama
podemos ver el conocimiento de nuestro propio mal, para Adán y para nosotros el fruto
de esta rama es la vergüenza que nos lleva a escondernos de Dios y a querer cubrir
nuestras faltas. Pegado a esa rama está el conocimiento del mal de otros, y el fruto de
esta rama es el juzgar. O sea, cuando vemos los fracasos y faltas de otros
instintivamente nos comparamos con ellos y hasta decimos; “Yo no estoy tan mal como
aquel”. La otra rama en el mismo lado del mal es la rama del PECADO. Esto quiere
decir la CONDICIÓN de pecado de nuestros corazones sin Dios que trae fruto del
conocimiento del mal y los actos del mal que hacemos. Comenzamos a descubrir un
vacío en nuestro corazón sin Dios y nos sentimos con vergüenza, separados,
despreciados y lo que es peor, comenzamos a buscar medios tales como drogas, sexo,
dinero, trabajos, religión, etc. para así no sentirnos vacíos. El fruto de esta rama es
actos de pecado y condenación. Esta es la rama traidora del conocimiento del mal.
Cuando vemos que el conocimiento del mal está destruyendo nuestras vidas
comenzamos a corregir nuestras acciones y a comportarnos de acuerdo a lo que
creemos que está bien. Con seguridad nos decimos: Ya sabemos cómo comportarnos
BIEN así que saltamos a las ramas del lado bueno del árbol. Pero, ¿No es el
conocimiento del bien tan destructivo como el conocimiento del mal?
De la rama del conocimiento del bien brotan otras ramas pequeñas. Cuando nos damos
cuenta del bien, hacemos el bien, pensamos el bien y nos sentimos bien, pero al final de
esta rama se encuentra el fruto del ORGULLO. ¡YO SOY MUY BUENO!

Ahora, cuando crecemos en el conocimiento del bien de otros, el fruto de esto es
comparación o envidia.
¿Y qué tal si crecemos en el conocimiento del bien de Dios? ¡No es posible que conocer
a Dios traiga mal fruto! pero recuerde que las raíces siguen enterradas en un alma
vacía. No puede salir buen fruto de un árbol cuyas raíces están muertas. Cuando
despertamos al conocimiento del bien de Dios, el resultado es esfuerzo propio. El
problema no es lo que hacemos, sino que lo hacemos en nuestras propias fuerzas y
separados de Dios, nuestro dador de la vida. Por eso Jesús dijo:
5
Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho
fruto; porque separados de mí nada podéis hacer. Juan 15:5, RV 1960
Esto que sigue puede ser la rama más destructiva de todas. Del conocimiento del bien
sale la rama conocida como la religión. Muy a menudo desarrollamos (de un sistema
de raíces muertas) estrategias y hábitos para poder llegar a Dios o agradarlo a Él. Lo
que tenía la intención de dar vida se convirtió en raíces muertas tales como las reglas y
tradiciones religiosas.
Cuando escogemos voluntariamente hacer el bien y no el mal, podemos pensar que

somos mejores que otros porque seguimos las reglas mejor que otros. Usamos nuestra
mente para estudiar la Biblia e inventar doctrinas que traen como resultado fruto de
divisiones entre los hermanos, y hasta pensamos que Dios está muy orgulloso de
nosotros porque tenemos la doctrina correcta. Con nuestras emociones buscamos
experiencias emocionales y mediamos que tan bueno es Dios basándonos en esas
experiencias y creemos que todos deberían experimentar a Dios de la misma manera y
con la misma pasión nuestra. Al agarrarnos de esta rama del conocimiento de Dios o
religión, es posible que no nos demos cuenta que las cosas que estamos haciendo
están basadas en obras o los deseos del alma (mente, voluntad y emociones) y no de
un verdadero honor y amor a Dios. El fruto se ve bueno pero la raíz es muerte.
Cuando hemos vivido en el conocimiento del mal, buscamos cambiar. Muchas veces
recibimos a Jesús y lo primero que hacemos naturalmente es saltar de la rama del mal
a la rama del bien. Es algo natural pero mortal. Por eso en el principio nos advirtió,
acerca de ese árbol. Si comes de ese árbol te va a matar. Dios no nos pide que seamos
mejores, lo que Él quiere es que vengamos al árbol de la vida y recibamos de Él vida,
gracia y poder.
Al momento de la salvación, en vez de movernos de un lado del árbol hacia el otro lado
(del lado malo al lado bueno) necesitamos cambiar de árbol y recibir vida del árbol de
vida (dependencia en Jesús y el Espíritu Santo) y NO de nuestro propio conocimiento o
fuerzas.
Dios no nos pide que hagamos algo POR Él o vivir PARA Él, en vez de eso, Él quiere
que vivamos DE Él. Que todo lo que somos y hagamos venga de Él como fuente de
poder y vida. La obra que Él comenzó, Él la terminará al rendir nuestra voluntad a Él.
6
Estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará
hasta el día de Jesucristo. Filipenses 1:6, RV 1960

Muy a menudo al incrementar nuestra obediencia nuestras obras y acciones espirituales
menguarán. Cuando comenzamos a andar con el Señor, es posible que estemos llenos
de actividades religiosas pero con muy poca obediencia. Pero al ir creciendo
espiritualmente, aprendiendo a depender en Él y a dejar que Él obre en nosotros en
vez de obrar para Él, entonces nuestras obras y acciones menguarán hasta que
seamos llenos de obediencia. Lo que se debe hacer es simplemente escuchar y
obedecer la voluntad de Dios en vez de hacer lo que pensamos que a Él le
complace.
Hay muchos que están haciendo cosas PARA Dios sin considerar si están sometidos y
obedeciéndole a Él. No hay nada que podamos hacer para Dios porque nosotros no
tenemos el conocimiento, poder o habilidad para hacerlo. De hecho, la Biblia dice que
todo lo que hagamos independientemente fuera de la voluntad de Dios, será quemado
como se quema la madera, paja y estopa.
11
Porque nadie puede poner un fundamento diferente del que ya está puesto, que es
12
Jesucristo. Si alguien construye sobre este fundamento, ya sea con oro, plata y piedras
13
preciosas, o con madera, heno y paja, su obra se mostrará tal cual es, pues el día del juicio la
dejará al descubierto. El fuego la dará a conocer, y pondrá a prueba la calidad del trabajo de
cada uno. 1 Corintios 3:11-13, NVI
Mientras Jesús y Adán se mantuvieran conectados al Padre, no tenían que pensar en

que deberían hacer o no hacer o si tendrían los recursos necesarios o la provisión
necesaria para hacerlo. Ellos no tenían que pensar acerca de reglas o lo que era bueno
o malo porque la fuerza del que dio las reglas respiraba y operaba a través de ellos.
1 4
Yo soy la vid verdadera, y mi Padre es el labrador…. Permaneced en mí, y yo en vosotros.
Como el pámpano no puede llevar fruto por sí mismo, si no permanece en la vid, así tampoco
5
vosotros, si no permanecéis en mí. Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en
mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer.
Juan 15:1, 4-5, RV 1960
Las acciones del hombre no deben ser gobernadas por su conocimiento del bien y del
mal, sino que deberían ser motivadas por obediencia y dependencia en Dios. El
principio del bien y del mal es vivir de acuerdo a lo que es bueno y malo. Antes que
Adán y Eva comieran del fruto, su bien y mal eran decididos únicamente por Dios, al
comer ellos del árbol del conocimiento del bien y del mal, encontraron un tipo de
conocimiento que no era de Dios. Así que es por eso que el hombre siente que no
necesita a Dios para decidir entre el bien y el mal porque tiene el conocimiento del bien
y del mal en sí mismo. La obra de redención que Jesús hizo en la cruz, fue para que
ahora pudiéramos encontrar el bien y el mal de acuerdo a Dios y no de acuerdo a
nuestro conocimiento del bien y del mal.
1
Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan
conforme a la carne, sino conforme al Espíritu. Romanos 8:1, RV 1960
Hay dos clases de Cristianos, aquellos que viven basados en el conocimiento del bien y
del mal, y aquellos que viven sometidos y dependiendo en Dios. Hágase esta pregunta
¿Dónde estoy viviendo, cuál es mi fuente? ¿Cuando la dirección de Dios viene a mi
vida, me detengo y considero para ver si es bueno o malo y si vale la pena hacerlo? Si
es así, esta es una manifestación de vivir del árbol del conocimiento del bien y del mal.

El fruto de ese árbol no sólo gobierna nuestras vidas personales, sino que también las
cosas que hacemos para Dios pasan a través del conocimiento del bien y del mal.
Muchas veces pensamos para Dios y decidimos para Él. Si alguien quiere aprender a
ser obediente a Dios, entonces debe hacer a un lado el razonamiento y el conocimiento
del bien y del mal. ¿Estamos viviendo bajo la autoridad de Dios o bajo el razonamiento
humano? Es absolutamente imposible vivir sometido a los dos.
A dondequiera que Jesús fuera manifestaba el Reino de Dios, Su Poder y Presencia en

ese lugar o circunstancia. Usted no puede hacer esto viviendo independientemente de
Dios, eso sólo es posible cuando usted se conecta a la Fuente de la Vida. Fuimos
diseñados para tener dominio sobre la Tierra ya sea positiva o negativamente, ya sea
que estemos enojados o celebrando; podemos cambiar el ambiente que nos rodea.
¿Alguna vez ha entrado usted en un lugar en donde estaba alguien enojado y ver cómo
ese alguien controla ese ambiente o viceversa; entrar en un lugar en donde alguien está
celebrando, y ese alguien controla ese ambiente de celebración? Al permanecer en
Dios, y dejar de vivir la vida en nuestra propia fuerza, podremos transmitir Su naturaleza
a través de nosotros y el Reino de Dios tomará control de cualquier ambiente en el que
estemos.
Lo que está adentro saldrá afuera y es lo que va a manifestar en nuestro ambiente.

Cuando el espíritu, alma y cuerpo están sometidos al Espíritu de Dios, entonces usted
va a manifestar el poder y la gloria del Reino de Dios a dondequiera que vaya.
5
Destruimos argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y
llevamos cautivo todo pensamiento para que se someta a Cristo. 2 Corintios 10:5, NVI
El Apóstol Pablo nos dice que debemos destruir TODO pensamiento ya sea bueno o
malo que se opone a Dios. Al hombre le encanta edificar fortalezas de argumentos o
razonamiento para dar valor a sus propios conocimientos y pensamientos, pero Dios
dice que debemos derribar argumentos y que los atemos A LA OBEDIENCIA DE
CRISTO.
Las palabras toda altivez es como un edificio alto. Dios ve nuestro conocimiento del bien
y del mal como un edificio de paredes altas que están bloqueando el conocimiento de
Dios. Este hábito de argumentar comenzó en el jardín del Edén cuando Adán comió del
árbol del conocimiento del bien y del mal. El diablo argumentó con Eva diciéndole que el
árbol era bueno para comer, y ella razonó basándose en su propio conocimiento y no
escuchó lo que Dios le había dicho. El pensamiento y el razonamiento van juntos.
Cuando el razonamiento toma cautivo un pensamiento o información, ese
razonamiento hace que el hombre no pueda escoger obedecer a Dios.
Nuestro hábito de razonar es algo que heredamos del árbol del bien y del mal. El diablo
hizo que Eva razonara en sí, y ella no escuchó a Dios. Cuando nuestro razonamiento
aumenta nuestros pensamientos caen en una trampa. Nuestro razonamiento lleva
nuestros pensamientos cautivos y por eso no podemos obedecer a Cristo.
Para poder obedecer a Dios, es importante entender como la autoridad de Dios tiene
poder para destruir fortalezas de razonamiento. Muchas personas son prisioneras por
fortalezas del razonamiento y no pueden conseguir liberarse. Sólo la autoridad de Dios
puede tomar todo pensamiento cautivo con razonamiento y llevarlo a la obediencia de

Cristo. Para conocer la autoridad de Dios y recibir la plenitud de una vida abundante, el
hombre debe ser destronado y someterse a la obediencia o sumisión de Cristo.
El hombre tiene muchos pensamientos, todos fortalecidos con su propio razonamiento

basado en el conocimiento del bien y del mal. Vendrá un día en el que la autoridad de
Dios romperá todas las fortalezas del razonamiento que el diablo ha edificado en
nuestras mentes y restaurará la mente del hombre para que pueda someterse
voluntariamente a la obediencia de Dios y así el hombre ya no pensará
independientemente de Dios, sino que en obediencia total a Él. Cuando esto suceda,
vamos a escuchar y obedecer en vez de pensar y decidir.
Hay mucha confusión en el mundo y en la Iglesia acerca de lo que quiere decir nacer de
nuevo. Aún como creyentes creemos que debemos enfocarnos en hacer bien y no mal,
pero eso sólo es cambiarse de una rama a la otra del mismo árbol muerto. Muchas
veces como cristianos tratamos de comportarnos bien hasta que nos cansamos y
decepcionamos, y nos sentimos vacíos e intentamos más duro de comportarnos bien
saltando a una rama más alta del árbol del conocimiento del bien o nos comparamos
con alguien más y pensamos que somos mejor que ellos. Nos hacemos el objetivo de
hacer el bien y ser buenos y aunque le demos en el blanco al objetivo, en realidad
hemos fallado porque lo que debemos hacer es cambiarnos de árbol y parar de vivir la
vida basada en el conocimiento del bien y del mal, o lo que parece malo o bueno.
Nosotros vemos los frutos, pero Dios ve la raíz.
El pecado no es un asunto de comportamiento, se trata de nuestra fuente de vida.

¿Cuál es su fuente? El remover los obstáculos del pecado en nuestras vidas no es lo
mismo que vivir bajo el propósito de Dios y Su Reino. La nueva vida en Cristo no se
trata de dejar de hacer las cosas malas o de saltar a las ramas del conocimiento del
bien y practicar el bien.
Jesús no vino a resolver el problema de nuestro comportamiento o acciones

pecaminosas. La palabra “pecado” en el lenguaje original era un término usado para
medir la distancia entre el blanco y la flecha. La “separación” o espacio entre el blanco y
la flecha. La Biblia dice que Jesús vino a quitar el pecado (el espacio entre Dios y el
mundo), o sea Él vino a quitar la separación entre nosotros y Dios. Jesús vino a
reconectarnos con Dios y con Su Reino. LO QUE DEBEMOS HACER ES
DESCONECTARNOS DEL CONOCIMIENTO DEL BIEN Y DEL MAL Y
MANTENERNOS CONECTADOS A CRISTO.
Cuando Jesús bajó del Cielo a la Tierra, LA VIDA REGRESÓ A LA TIERRA. Jesús vino
a darnos la oportunidad para recibir vida. Él no dijo: “Paren su mal comportamiento para
que no vayan al infierno”, El inyectó vida en cada circunstancia y lugar. Él era y es la
fuente de vida. Necesitamos ver y entender correctamente quién es Él y quiénes somos
nosotros cuando nos conectamos a Su vida.
Jesús le dijo a la mujer Samaritana en el pozo, “...Si tú conocieras el don de Dios, y quién
es el que te dice: "Dame de beber", tú le habrías pedido a Él, y Él te hubiera dado agua viva.
1
Después me mostró un río limpio de agua de vida, resplandeciente como cristal, que salía del
2
trono de Dios y del Cordero. En medio de la calle de la ciudad, y a uno y otro lado del río,

estaba el árbol de la vida, que produce doce frutos, dando cada mes su fruto; y las hojas del
árbol eran para la sanidad de las naciones. Apocalipsis 22:1-2, RV 1960
Usted no tiene que buscar o hacer nada en su propia fuerza para tener vida abundante.
Lo que usted necesita hacer es rendir su dependencia en su propio conocimiento del
bien y del mal y depender en Dios como su única fuente y manera de percibir y vivir la
vida.
La evidencia de que hemos cambiado la fuente del conocimiento del bien y del mal por
la fuente del árbol de la vida, es que nuestras opiniones desaparezcan y comencemos a
obedecer a Dios en vez de pensar para luego decidir. Debemos refrenarnos de hacer
decisiones basadas en el conocimiento del bien y del mal, y someternos y obedecer la
voluntad de Dios y de Su autoridad. Dios no se fija en nuestro buen comportamiento,
que tan ferviente predicamos el evangelio, la asistencia del domingo o cuánto estamos
dispuestos a sufrir por Él; lo que Él ve es nuestra obediencia.
El Reino de Dios comienza donde hay una obediencia absoluta en Dios sin murmurar o
preguntar y no dar opiniones, argumentos o cuestionar. En dondequiera que se
encuentre un cristiano o una Iglesia que verdaderamente obedece la autoridad de Dios
sin cuestionar, sometida a la voluntad de Su Espíritu, el Reino de Dios se manifestará
en la Tierra y el diablo será derrotado. ¡AMÉN!
¿Le gustaría ser ese cristiano o la Iglesia en donde el Reino de Dios se manifiesta?
Desconéctese del conocimiento del bien y del mal y conéctese al árbol de la vida
(Jesús), escuche y obedezca la Palabra escrita y hablada de Dios, y milagros
sucederán en su vida, su Iglesia y el mundo todos los días.
PUNTOS IMPORTANTES
1. El problema que destruyó a toda la raza humana fue el cambiarse de un sistema

(fuente) a otro sistema. De un fundamento a otro fundamento; de una fuente a otra
fuente. Antes de la caída, Adán y Eva, estaban conectados de una fuente de la cual
fluye la _________. Pero de repente todo cambió, ellos y todos los descendientes (la
humanidad) fueron conectados a otra fuente llamada _________________.
2. Aunque a veces nos enfocamos en el fruto, el problema con el árbol del conocimiento
del bien y del mal, NO son sus ramas o el fruto, sino que el problema está en la ____.
Aunque el ______ se puede ver muy bueno, si la raíz no tiene vida, entonces lo único
que puede producir es _________.
3. Cuando nos damos cuenta del bien, hacemos el bien, pensamos el bien y nos
sentimos bien, pero al final de esta rama se encuentra el ______del _________. ¡YO
SOY MUY BUENO! Ahora, cuando crecemos en el conocimiento del bien de otros, el
fruto de esto es comparación o _____________.
4. Esto que sigue puede ser la rama más destructiva de todas. Del conocimiento del
bien sale la rama conocida como la _________. Muy a menudo desarrollamos (de un
sistema de raíces muertas) estrategias y hábitos para poder llegar a Dios o agradarlo
a Él. Lo que tenía la intención de dar vida se convirtió en raíces muertas tales como
las reglas y ____________ religiosas.

5. Dios no nos pide que hagamos algo ____ Él o vivir _____ Él, en vez de eso, Él quiere
que vivamos ___ Él. Que todo lo que somos y hagamos venga de Él como fuente de
poder y vida. La obra que Él comenzó, Él la terminará al rendir nuestra _______ a Él.
6. Fuimos diseñados para tener _________ sobre la Tierra ya sea positiva o

negativamente, ya sea que estemos enojados o celebrando; podemos cambiar el
ambiente que nos rodea. Al permanecer en Dios, y dejar de vivir la vida en nuestra
propia fuerza, podremos transmitir Su naturaleza a través de nosotros y el ______ de
Dios tomará control de cualquier ambiente en el que estemos. Cuando el espíritu,
alma y cuerpo están sometidos al Espíritu de Dios, entonces usted va a manifestar el
poder y la gloria del Reino de Dios a dondequiera que vaya.
7. Dios ve nuestro conocimiento del bien y del mal como un edificio de paredes altas
que están bloqueando el conocimiento de ____. Este hábito de argumentar comenzó
en el jardín del Edén cuando Adán comió del árbol del conocimiento del bien y del
mal. El diablo argumentó con Eva diciéndole que el árbol era bueno para comer, y
ella razonó basándose en su propio conocimiento y no escuchó lo que Dios le había
dicho. El pensamiento y el razonamiento van juntos. Cuando el ___________ toma
cautivo un pensamiento o información, ese razonamiento hace que el hombre no
pueda escoger ______________a Dios.
8. Para conocer la autoridad de Dios y recibir la plenitud de una vida ___________, el

hombre debe ser _____________ y someterse a la obediencia o sumisión de Cristo.
Vendrá un día en el que la autoridad de Dios romperá todas las fortalezas del
razonamiento que el diablo ha edificado en nuestras mentes y restaurará la mente del
hombre para que pueda someterse voluntariamente a la obediencia de Dios y así el
hombre ya no pensará independientemente de Dios, sino que en obediencia total a
Él. Cuando esto suceda, vamos a escuchar y _________en vez de pensar y
________.
9. Jesús no vino a resolver el problema de nuestro __________ acciones pecaminosas.

Jesús vino a ________________con Dios y con Su Reino.

6
Estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará
hasta el día de Jesucristo. Filipenses 1:6, RV 1960

¿Cuál Escoges?
Sesión 4: La Autoridad y Sumisión

En la primera sesión aprendimos que la sumisión es rendirse y no complacer por

obligación. Complacer por obligación es obedecer en acción o comportamiento en lo
exterior aún estando en desacuerdo en nuestro corazón. La obediencia es un asunto
de conducta, mientras que la sumisión es un asunto que tiene que ver con el
corazón. La sumisión no es forzada, sino escoger voluntariamente dar el control o
autoridad a alguien. Sumisión es dejar que el poder fluya en nuestras vidas; es ser
receptivo al fluir del poder de Dios a través de la sumisión a nuestra autoridad. De la
misma forma esto sucede cuando nos sometemos a aquellos que Dios ha puesto como
autoridad sobre nosotros tales como líderes civiles, jefes, padres, pastores, líderes
espirituales, etc. Al hacer esto, dejamos que el poder de Dios fluya en nuestra vida.
Dios ha puesto personas con autoridad en nuestras vidas para que su poder y gracia
fluya a través de ellos, para bendecirnos y darnos poder. Además nos ha dado
posiciones y autoridad sobre otros, y al someternos a su Espíritu, Su poder fluirá por
medio de nosotros para que podamos bendecir a aquellos bajo nuestra autoridad, los
cuales pueden ser hijos, esposa, hermanos menores, empleados, etc.
27
Hoy les doy a elegir entre la bendición y la maldición: bendición, si obedecen los
28
mandamientos que yo, el SEÑOR su Dios, hoy les mando obedecer; maldición, si desobedecen
los mandamientos del SEÑOR su Dios y se apartan del camino que hoy les mando seguir…
Deuteronomio 11:26-28ª, NVI
Sumisión a la autoridad es el canal por donde fluye el poder de Dios en nuestras

vidas. Cuando me someto a la autoridad que Él ha puesto en mi vida, entonces yo
recibo el poder para hacer el propósito de Dios en la Tierra. Cuando me encuentro en
circunstancias difíciles tales como: Deudas, enfermedades, etc. y recibo las promesas
de Dios para esa situación, confesando y poniéndome de acuerdo en lo que Él dice
acerca de esa situación, Su poder se transmitirá por medio de mi para cambiar
cualquier circunstancia.
NO es que Dios quiera controlar sus actividades, más bien Él quiere dar poder a su
identidad como un hijo y embajador del Reino de Dios en la Tierra. La sumisión real es
recibir el poder para ser quien usted es y para hacer aquello para lo que usted fue
creado lo cual es; RE- presentar a Dios en la Tierra y glorificar y manifestar Su Reino
con poder y gloria a través de su vida.
Nada de lo que existe en el universo es más grande que la autoridad, y por esta razón
es importante para nosotros entender la autoridad porque toda autoridad viene de
Dios y de la manera en que respondemos a la autoridad es como si estuviéramos
respondiendo a Dios. La autoridad de Dios representa a Dios mismo; al pecar contra la
autoridad de Dios es pecar en contra de Dios.
Cuando lucifer el ángel más bello y poderoso se rebeló contra la autoridad de Dios cayó
de su gracia y se convirtió en satanás, el adversario de Dios. Isaías 14:12-15 y Ezequiel
28:13-17 nos cuenta del orgullo y de la caída de lucifer. Al servir a Dios no debemos
violar Su autoridad porque al hacerlo, estamos haciendo lo mismo que hizo lucifer. El
diablo se preocupa cuando nos sometemos a la autoridad de Dios, porque él sabe que
el poder de Dios fluye por medio de una persona cuando se somete a Dios.

22
Y Samuel dijo: ¿Se complace Jehová tanto en los holocaustos y víctimas, como en que se
obedezca a las palabras de Jehová? Ciertamente el obedecer es mejor que los sacrificios, y el
23
prestar atención que la grosura de los carneros. Porque como pecado de adivinación es la
rebelión, y como ídolos e idolatría la obstinación. Por cuanto tú desechaste la palabra de Jehová,
él también te ha desechado para que no seas rey. 1 Samuel 15:22,23, RV 1960
La gran demanda que Dios hace al hombre no es sacrificio o servicio. El gran deseo de
Dios para el hombre es la obediencia. La obediencia es honrar a Dios porque es
sumisión a la voluntad de Dios. Para que la autoridad sea expresada, debe haber
sumisión. La voluntad expresa autoridad, así que para conocer y obedecer la voluntad
de Dios tenemos que someter nuestra voluntad a la autoridad. Es por eso que es muy
importante aprender cómo hablar con Dios y también aprender a oír lo que Dios está
diciendo y obedecerlo. Por todo el Antiguo Testamento vemos lo importante que es
escuchar y obedecer así como las consecuencias de escuchar y no obedecer.
21
No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la
22
voluntad de mi Padre que está en los cielos. Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor,
¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre
23
hicimos muchos milagros? Y entonces les declararé: Nunca os conocí; apartaos de mí,
24
hacedores de maldad. Cualquiera, pues, que me oye estas palabras, y las hace, le
25
compararé a un hombre prudente, que edificó su casa sobre la roca. Descendió lluvia, y
vinieron ríos, y soplaron vientos, y golpearon contra aquella casa; y no cayó, porque estaba
26
fundada sobre la roca. Pero cualquiera que me oye estas palabras y no las hace, le
27
compararé a un hombre insensato, que edificó su casa sobre la arena; y descendió
lluvia, y vinieron ríos, y soplaron vientos, y dieron con ímpetu contra aquella casa; y cayó,
y fue grande su ruina. Mateo 7:21-27, RV 1960
Hay dos cosas muy importantes en la vida:

1. Confiar en Dios para la salvación de Dios.
2. Obedecer la autoridad de Dios.
Confíe y obedezca. El pecado es desobediencia a la autoridad de Dios. Podemos

obedecer o desobedecer la autoridad de Dios, y si no lo estamos obedeciendo,
entonces estamos haciendo lo mismo que hizo el diablo y Adán quienes se rebelaron
contra la autoridad de Dios.
1
Sométase toda persona a las autoridades superiores; porque no hay autoridad sino de parte de
2
Dios, y las que hay, por Dios han sido establecidas. De modo que quien se opone a la
autoridad, a lo establecido por Dios resiste; y los que resisten, acarrean condenación para sí
3
mismos. Porque los magistrados no están para infundir temor al que hace el bien, sino al malo.
4
¿Quieres, pues, no temer la autoridad? Haz lo bueno, y tendrás alabanza de ella; porque es
servidor de Dios para tu bien. Pero si haces lo malo, teme; porque no en vano lleva la espada,
5
pues es servidor de Dios, vengador para castigar al que hace lo malo. Por lo cual es necesario
6
estarle sujetos, no solamente por razón del castigo, sino también por causa de la conciencia.
Pues por esto pagáis también los tributos, porque son servidores de Dios que atienden
7
continuamente a esto mismo. Pagad a todos lo que debéis: al que tributo, tributo; al que
impuesto, impuesto; al que respeto, respeto; al que honra, honra. Romanos 13:1-6, RV 1960
El versículo 1 dice: TODA PERSONA debe someterse a las autoridades que gobiernan.
No es la autoridad del hombre la que obedecemos, sino que la autoridad de Dios
en el hombre. Hay varios niveles de autoridad y gobierno. El nivel más cercano y más
íntimo es el gobierno del hogar o la autoridad de la casa. Nosotros todos hemos pasado
bajo la autoridad de la casa y tal vez ahora somos la autoridad de la casa. Eso nos lleva

al orden de la familia. Cada hombre es responsable de ejercitar una autoridad en su
casa y las mujeres son responsables de ejercitar la autoridad que les corresponde para
honrar y reconocer el orden de Dios en la casa. Cada hijo es responsable de reconocer
y respetar la autoridad de sus padres. Dios nos manda a honrar a tu padre y madre para
que te vaya bien y tengas larga vida.
Romanos 12:3 dice que el propósito y la voluntad de Dios es buena, agradable y

perfecta. Lo que Dios quiere para nosotros es bueno, agradable y perfecto. Muchas
veces nos encontramos en un proceso en donde las circunstancias no parecen buenas,
agradables o perfectas, pero recuerde que la promesa de Dios se va a cumplir en
aquellos que se someten a la autoridad de Su Palabra. No se trata tanto de someterse a
la autoridad del hombre o mujer, sino que a la autoridad de Su Palabra la que tenemos
que honrar y al hacer así entonces vamos a estar bien, en el orden correcto de la
autoridad. Cuando un hijo se somete a la autoridad de su papá y le obedece y honra a
su papá, el hijo va a recibir bendición, aunque el papá no sea un buen padre.
La autoridad familiar es uno de los niveles de la autoridad. Otro nivel de la autoridad a la

cual todos tenemos que estar sujetos es a las autoridades espirituales (de la iglesia)
Cada persona debe tener un líder sobre sí mismo. ¿Bajo qué concepto debemos seguir
a estos líderes?
7
Acuérdense de sus dirigentes, que les comunicaron la palabra de Dios. Consideren cuál fue el
resultado de su estilo de vida, e imiten su fe. Hebreos 13:7, NVI
La obediencia es fundamentada en que la persona reconoce y honra su autoridad y no

en que el líder impone su autoridad sobre la persona. La autoridad de un líder no se
impone, se reconoce. Las personas deben reconocer las autoridades que Dios ha
puesto en sus vidas y obedecerlas voluntariamente. Cada persona debe creer o tener
la convicción que su líder o pastor es la autoridad dada por Dios para su vida y por eso
obedecer cuando esa autoridad le da direcciones en cuanto al Reino de Dios y/o su
vida personal.
También está el nivel de la autoridad del Señor sobre nuestras vidas. No hay nada que
podamos nosotros dejar fuera de la autoridad y del señorío del Señor Jesús. Estamos
obligados a someternos al 100% en todas las áreas de nuestra vida, sin discutir,
rezongar, cuestionar u opinar. Tenemos que hacer a Dios soberano y plena autoridad.
¡NO SE DISCUTE!
Además de esto, está la autoridad del gobierno civil. Es la autoridad que Dios le da a
hombres que son constituidos para establecer e implementar leyes.
En una manera general en el verso 1 de Romanos 13, se nos habla de los diferentes
niveles de autoridad y si lo ponemos en orden está primero la autoridad de Dios y
después la autoridad en la iglesia, en la familia y estar bajo la autoridad de las leyes
terrenales. El verso 2 dice:
2
Por lo tanto, todo el que se opone a la autoridad se rebela contra lo que Dios ha instituido. Los
que así proceden recibirán castigo. Romanos 13:2, NVI
Cuando un maestro en la escuela dice algo y usted cuestiona; usted se está oponiendo
a la autoridad de Dios. Cuando un líder en la iglesia le da una instrucción conforme a la

Palabra y usted dice “No”, ya sea con su boca o con sus acciones, usted se está
oponiendo a la autoridad de Dios. Cuando un policía le hace el alto y usted no se
somete al policía, se está oponiendo a lo establecido por Dios, y la Biblia promete que
va a recibir consecuencias. Además dice el verso 3 y 4:
3
Porque los magistrados (gobernantes) no están para infundir temor al que hace el bien, sino al
4
malo. ¿Quieres, pues, no temer la autoridad? Haz lo bueno, y tendrás alabanza de ella; porque
es servidor de Dios para tu bien.
Así que pague sus impuestos, arregle los focos de su carro, maneje con seguro y siga
las leyes. Tenga todo lo que pueda en orden para evitar problemas y conflictos, camine
con libertad. También este versículo dice que “Es para ti un ministro o servidor
comisionado de Dios”. Un policía o cualquier autoridad delante de usted es un ministro
de Dios con autoridad establecida por Dios sobre usted. Los hijos de Dios obedecemos
la ley y nos sometemos no sólo por razón de castigo sino también por causa de la
consciencia. El creyente respeta la autoridad y no se rebela contra la autoridad, aunque
le parezca que su autoridad no tiene razón o está equivocada. Cuando hay un orden
Bíblico tiene que haber sumisión absoluta. La única razón para no someterse a su
autoridad es cuando piden algo que está en contra de la autoridad de Dios.
David respetó al 100% la autoridad civil puesta por Dios, porque dos veces le perdonó
la vida al rey Saúl diciendo que él era el ungido de Jehová. David no osó en poner las
manos en el rey desechado por Jehová porque dijo “Es el ungido del Señor”. Aunque
Dios lo desechó, David lo respetó porque David entendía el principio de la autoridad y
que en el tiempo de Dios si él respetaba la autoridad sobre él, Dios lo iba poner en
autoridad. Cuando nosotros aprendemos a vivir bajo la autoridad, nos ganamos el
derecho de ser autoridad. Así es el proceso en el cual Dios nos va a levantar. Por eso
las personas en el mundo secular que se pasan murmurando de su profesor, de su jefe
u otros, no prosperan y si llegan a salir adelante, nunca disfrutan lo que logran. Las
personas que aprenden a respetar las autoridades en las diferentes áreas que
hemos mencionado son las que Dios prospera.
La autoridad funciona en 3 niveles:
1. La autoridad que Dios ha puesto sobre mí.
2. La autoridad horizontal (respetar la autoridad de co-siervos).

Los que están al mismo nivel en función. Tenemos que respetar la autoridad
horizontal y su instrucción y no ponernos en contra de lo que Dios está
hablando o haciendo en los que están al mismo nivel de autoridad que
nosotros.
3. Ser la autoridad sobre alguien más.

No puedo llegar a ser autoridad sobre alguien más si no soy sumiso a la
autoridad superior o no respeto a la autoridad horizontal, ¿Si no me someto
a la autoridad sobre mí, como voy a poder aprender a utilizar la autoridad
vertical, debajo de mí?
El reconocimiento de la autoridad no se manifiesta cuando alguien dice ¡amén! a la

autoridad, sino que se ve cuando reconozco y me someto a la autoridad en momentos

determinados cuando se requiere una intervención ministerial en los asuntos personales
de mi vida.
Su autoridad es aquella a la que usted obedece cuando le da direcciones. Muchas

personas cuando vienen a pedir consejo ya saben lo que van a hacer o están
dispuestos a realizar, entonces cuando no escuchan un consejo de su autoridad, lo que
están haciendo es declarando su voluntad y no están tomando en cuenta el consejo
porque no reconocen la importancia de honrar y obedecer la autoridad. Cuando usted
reconoce la autoridad de alguien usted se dará cuenta que esta persona tiene la
sabiduría para aconsejarle y aunque no lo entienda sabe que al obedecer su consejo
tarde o temprano le va a llevar a la victoria que Dios tiene para usted.
Personas que no se sometan a su autoridad para hacer lo que está establecido en la

palabra son personas que no pueden ser usados por Dios porque no reconocen la
autoridad. Al no recibir consejo, no reconocen la autoridad. La Iglesia sufre no sólo por
los que no obedecen, sino que además por culpa de aquellos que no han aprendido a
cómo usar la autoridad. Debemos aprender a cómo responder a la autoridad en
nuestras vidas y también cómo ser autoridades que imitan a Dios.
Como ciudadanos del Reino de Dios se nos ha dado autoridad y la fuente de esa
autoridad viene de Dios. AUTORIDAD ES PODER DELEGADO y no podemos recibir
poder en nuestra vida si estamos rechazando la autoridad.
Hay una diferencia entre autoridad y poder. Poder es fuerza o habilidad de afectar algo.
Por ejemplo: Un policía no tiene el poder humano de parar (detener) un vehículo, pero
sí tiene la autoridad de pararlo porque la ciudad le ha delegado autoridad para parar el
tráfico. Así que cuando vemos el uniforme, reconocemos que se le ha dado a esa
persona la autoridad de tener poder para detener el tráfico.
Poder es la habilidad o fuerza necesaria para hacer que suceda algo, autoridad es ese
poder delegado. Cuando usted está bajo autoridad, usted puede tener autoridad porque
la autoridad es poder delegado y cuando usted no está bajo autoridad, usted no
tiene poder porque no hay ninguna autoridad delegándosela a usted.
En 2 Samuel 2; vemos que David ya siendo rey reconocía la autoridad de Natán como
profeta y le permitió redargüirlo por sus fallas morales. Natán era la autoridad de Dios
pero David era rey con la autoridad de decir sí o no. Pero como David entendía los
principios de la autoridad sabía que la voz de Natán era la voz de Dios que estaba
trayendo mensaje a David y se sometía a él.
Cuando entendemos y seguimos el orden de Dios, somos bendecidos. Los hombres

que llegan a tener la máxima autoridad primero fueron quebrantados hasta el máximo.
Vemos un buen ejemplo en Cristo Jesús, siendo el más grande se hizo el más pequeño
pero después fue exaltado sobre todos por causa de Su humildad.
En el Cielo Jesús era igual al Padre, pero mientras estaba en la Tierra Jesús estaba
bajo la autoridad del Padre y mantuvo una obediencia perfecta hacia el Padre. Se
convirtió en Señor sólo después que vivió como hombre en la Tierra sometido
completamente a la autoridad del Padre. El Padre lo exaltó y le recompensó haciéndolo
Señor de todo.

8 9
Aunque era Hijo, por lo que padeció aprendió la obediencia; y habiendo sido perfeccionado,
10
vino a ser autor de eterna salvación para todos los que le obedecen; y fue declarado por Dios
sumo sacerdote Hebreos 5:8, 9,1 0ª, RV 1960
Dios puso a Adán en autoridad sobre toda cosa creada, pero también Adán estaba bajo
la autoridad de Dios. Como mencionamos anteriormente que sólo una persona que se
somete a la autoridad puede tener autoridad sobre otros. Cuando Adán se rebeló,
desobedeciendo la autoridad de Dios; también perdió su autoridad sobre toda la
creación. Para poder recobrar la autoridad la obediencia debe ser restaurada. En
cualquier parte donde se hace la voluntad de Dios sin interferencia, el Reino de Dios
domina. Dios establece su Reino en la Tierra por medio de creyentes que se
someten en obediencia a Su autoridad. El Reino de Dios no se manifestará, sino
hasta que nuestra voluntad se someta a Su Voluntad. Así como hizo Jesús, yo también
debo rendir el trono de mi corazón y mi derecho de decidir y hacer mi voluntad para que
así se manifieste la voluntad de Dios en poder y gloria en la Tierra por medio de nuestra
obediencia a Su autoridad.
Aquellos que nacen antes en la familia por orden natural tienen una autoridad dada por
Dios sobre los menores. Es importante aprender ambas cosas; cómo estar bajo
autoridad y cómo tener autoridad sobre otros. Debemos estar al tanto de aquellos que
Dios ha puesto como autoridad sobre nosotros respetándolos y honrándolos porque al
hacerlo estamos honrando a Dios, y esto trae bendición a nuestra vida. Los hermanos
de Moisés, Aarón y Miriam, eran mayores que él, y como miembros mayores de la
familia Aarón y Miriam tenían mayor autoridad sobre asuntos familiares que Moisés.
Pero a Moisés le fue asignado el liderazgo espiritual sobre el pueblo de Israel y así
también la autoridad espiritual sobre sus hermanos, aunque fueran mayores que él. Es
por eso que cuando Miriam habló en contra de la autoridad espiritual de Moisés le salió
lepra y no fue sanada hasta que su autoridad y hermano menor (Moisés) oró por ella.
(Números 12)
Cuando nos rebelamos en contra de la autoridad que Dios ha puesto en nuestras

vidas, entonces nos estamos rebelando en contra de Dios.
Nuestras acciones no deberían ser dirigidas por el conocimiento del bien y del mal, lo
que creemos que es o no es lo correcto. Nuestras acciones deben ser motivadas por
nuestra obediencia y sumisión a la voluntad de Dios. Antes que Adán y Eva comieran
del árbol del conocimiento del bien y del mal, TODO CONOCIMIENTO se encontraba
en Dios. Vivían en una sumisión constante a Su voluntad y nunca tenían que pensar o
decidir lo que estaba bien o mal. Lo único que era correcto era someterse a la voluntad
de Dios. Después de la caída, el hombre encontró el sentido de lo correcto e incorrecto
en su propio conocimiento y en sí mismo. Lo que Cristo hizo es que nos puso de
regreso en un lugar en donde toda nuestra necesidad de conocimiento se encuentra
sólo en Dios (Jesús) y no en nuestro conocimiento del bien o el mal. Al vivir en sumisión
a Su voluntad momento tras momento, no tendremos que pensar o preocuparnos
acerca de nada, excepto vivir conectados a Jesús (el Árbol de la Vida) quien es la
fuente de todas nuestras necesidades tales como: Comida, protección, salud, poder y
gracia. No tenemos que batallar para nuestras necesidades simplemente poner nuestra
confianza en Él, obedecer Su dirección y descansar en Él para todo.
15
Porque así dijo Jehová el Señor, el Santo de Israel: En descanso y en reposo seréis salvos; en
quietud y en confianza será vuestra fortaleza. Isaías 30:15ª, RV 1960

Cuando nacemos de nuevo, Dios nos da el Espíritu Santo para que nos guíe y nos dirija
continuamente, nos avise cuando estemos a punto de salirnos de Sus límites
(perímetro) y regresarnos de nuevo al camino, mientras nos apacienta y nos guía a
caminar la vida cristiana. Dios sólo espera que seamos sensibles a la Voz del Espíritu
Santo y obedecerlo para que nos guíe a Su propósito. No se trata de seguir los diez
mandamientos y hacer todas las cosas buenas que un buen cristiano hace, se trata de
permitir que el Espíritu Santo nos corrija y dirija. El Padre que está en los Cielos lo ama
y si usted está dispuesto a someterse a Su Voz y obedecerle, Él lo va a ayudar a
acercarse a su destino cuando permita ser guiado por el Espíritu, en vez de su propia
voluntad o conocimiento del bien y el mal.
Si obedecemos completamente a Dios, crucificando nuestras ideas y opiniones,

entonces Dios podrá manifestar Su autoridad en la Tierra. Donde quiera que haya una
persona o Iglesia en la Tierra que verdaderamente se someta a la autoridad de Dios, allí
habrá testimonios del Reino de Dios y el enemigo será destruido.
PUNTOS IMPORTANTES
1. Sumisión es dejar que el________ fluya en nuestras vidas; es ser receptivo al fluir del
poder de Dios a través de la sumisión a nuestra __________. Sumisión a la autoridad
es el ________ por donde fluye el poder de Dios en nuestras vidas.
2. NO es que Dios quiera _________ sus actividades, más bien Él quiere dar poder a su
_________ como un hijo y embajador del Reino de Dios en la Tierra. La sumisión real
es recibir el poder para ser quien usted es, y para hacer aquello para lo que usted fue
creado lo cual es; _____________ a Dios en la Tierra y glorificar y manifestar Su
Reino con poder y gloria a través de su vida.
3. La gran demanda que Dios hace al hombre no es sacrificio o servicio. El gran deseo
de Dios para el hombre es la __________. La obediencia es honrar a Dios porque es
sumisión a la ______________de Dios.
4. La autoridad de un líder no se impone, se ________. Las personas deben reconocer

las autoridades que Dios ha puesto en sus vidas y obedecerlas _______________.
Cada persona debe creer o tener la convicción que su líder o pastor es la
autoridad dada por Dios para su vida y por eso ________cuando esa autoridad le da
direcciones en cuanto al Reino de Dios y/o su vida personal.
5. El creyente respeta la autoridad y no se rebela contra la autoridad aunque le parezca

que su autoridad no tiene razón o está equivocada. Cuando hay un orden Bíblico
tiene que haber sumisión __________. La única razón para no someterse a su
autoridad es cuando piden algo que está en _________de la autoridad de _______.
6. Cuando nosotros aprendemos a vivir _____ la autoridad, nos ganamos el derecho de

_____ autoridad. Así es el proceso en el cual Dios nos va levantar. Las personas que
aprenden a respetar las autoridades en las diferentes áreas que hemos mencionado
son los que Dios ___________.

7. Como ciudadanos del Reino de Dios se nos ha dado __________ y la fuente de esa
autoridad viene de Dios. AUTORIDAD ES PODER __________ y no podemos recibir
poder en nuestra vida si estamos ____________ la autoridad.
8. Cuando usted está bajo autoridad, usted puede tener autoridad porque la autoridad
es poder delegado y cuando usted no está bajo autoridad usted no tiene poder
porque no hay ninguna autoridad __________________ a usted.
9. En cualquier parte donde se hace la ________ de Dios sin interferencia, el Reino de

Dios domina. Dios establece su Reino en la Tierra por medio de creyentes que
se someten en _____________ a Su autoridad. El Reino de Dios no se manifestará,
sino hasta que nuestra voluntad se someta a ______Voluntad.

2
De modo que quien se opone a la autoridad, a lo establecido por Dios resiste; y los que
resisten, acarrean condenación para sí mismos. Romanos 13:2, RV 1960

Oración sugerida para atar y desatar- Rompiendo el poder del alma
Bendice alma mía al Señor con toda tu fuerza, bendiga mi ser Su santo nombre. Alma mía, yo te
ato a tu destino, completamente y divinamente integrado y creado con el propósito de Dios
para mi vida. Yo desato los comportamientos, actitudes y creencias equivocadas, patrones de
malos pensamientos, control, egoísmo y cualquier cosa que has creado para proteger y
controlar mi vida.
Desato el rechazo, engaño y desanimo que viene de ti, mi alma. Desato el poder de palabras de
maldición que has recibido en tu interior aceptándolos como verdad. Desato el poder de malos
acuerdos y ataduras a las que te hayas unido.
Desato los efectos de los patrones de pensamientos generacionales que han sido aceptados
como un hecho, ya sea que hayan venido de espíritus, asociaciones con otras personas o
herencias de mis antepasados. Cristo me ha liberado de toda maldición generacional, y hoy
hablo y practico esa verdad en mi vida. Me ato a la libertad total que Cristo me ha extendido por
medio del nuevo pacto, nuevo linaje de familia y nuevo linaje de sangre al que pertenezco por
medio de Cristo.
Tú, alma mía, fuiste creada por Dios para transferir las revelaciones y manifestar la obra del
Espíritu Santo al mundo, y NO para manejar mi vida. No tienes ni la menor idea de las cosas que
Dios tiene preparadas para ti al alinearte completamente con la voluntad y propósito de tu
existencia. Tú, alma mía, te estás convirtiendo en un vehículo de la expresión divina. Por medio
de pensamientos y palabras expresadas de mi mente renovada, por medio de paz sobrenatural,
el gozo que brota de mis emociones renovadas, por medio de un ánimo justo y la valentía que
viene de mi voluntad renovada. Tú, alma mía, vas a traer entendimiento a muchos que no
conocen y que nunca han entendido a Dios. Alma mía, yo ato cada parte de ti a la voluntad y
propósito de Dios.
Mente, antes te daba vueltas en círculos como una rata atrapada en una trampa, vagando
constantemente una y otra vez sobre temores y decisiones negativas de las cuales no
encuentras respuesta. ¿Recuerdas las pesadillas que te aterrorizaban, pesadillas que venían de
confusión y desesperación, las cuales no permitían un sueño tranquilo? ¿Recuerdas los asuntos
sin resolver y que trataste de enterrar, pero que volvían a resucitar una y otra vez?
Mente, te ato a la verdad y claridad con la que Dios te ha dado a una realización de intervención
divina, ocurriendo en todo tiempo en los problemas que antes no podía resolver y te ato a la paz
de Dios que sobrepasa todo entendimiento.
Mente, te ato a una conciencia agradecida por la sabiduría y revelación que está siendo
derramada por medio de ti. Serás traída a una fiel y verdadera sincronización (coordinación) con
Dios, para que yo (el espíritu) sea uno de los que al final del tiempo sea lleno con entendimiento
y con poder para enseñar a otros, como profetizó el profeta Daniel. Mente, serás usada para
traer la sabiduría y la revelación de Dios para entendimiento en los últimos días. Serás llena de
entendimiento divino por el Espíritu Santo lo cual me preparará para enseñar a muchos que no
entienden lo que ya ha comenzado a ocurrir, aunque busquen con diligencia en la Palabra de
Dios. Bendice alma mía al Señor y no olvides ninguno de Sus beneficios.

Emociones, no se olviden cómo alguna vez daban vueltas entre risas y llanto, valentía y miedo,
esperanza y desesperanza, afección y enojo. Tú alejaste mucha gente lejos de mí
atemorizándolos, en un momento rodeando de lágrimas su necesidad y en otro momento con
impulsos de enojo, y luego llenaste mis sentimientos de rechazo y soledad. Pero ahora,
emociones, están aprendiendo a recibir paz divina, a expresar gozo y esperanza, a responder al
poder del Espíritu Santo cuando viejos sentimientos trataban de dominar. Emociones, yo les ato
a su rol divino en mi vida a su habilidad única de proyectar la paz de Dios, gozo y esperanza a
aquellos que no entienden las promesas de Su Espíritu. Bendice alma mía al Señor, y no olvides
ninguno de Sus beneficios.
Voluntad, no olvides las causas y las batallas en que te metías, siempre rígida, implacable e
inflexible. Dura, inconmovible, invencible, siempre negándote a cooperar con las ideas de otros,
alejando a muchos. Voluntad, tú causaste muchas penas con tu terquedad, resistencia y
rebelión a los caminos de Dios. Pero ahora, voluntad mía, estás atada a la voluntad de mi Padre.
Estás aprendiendo a ser fuerte, pero al mismo tiempo flexible; a ser justa y suplicante, con
valentía, pero gentil; llena de coraje, pero preocupada por otros. Sólo el Espíritu Santo puede
dar balance perfecto a cada lado de estos atributos en mí. Voluntad mía, te ato al propósito
total de Dios. Te ato a la voluntad del Padre Celestial.
Voluntad, deberías mostrar Su fuerza, Su valentía e intrepidez al darme determinación y

seguridad para enfrentar el peligro y ataques del enemigo, siempre reconociendo que Dios es
Todopoderoso y quien además me ama. Voluntad, alinéate con Su orden divino para mi destino.
Bendice alma mía al Señor, y no olvides ninguno de Sus beneficios.
Yo desato todo mal acuerdo de mi alma. Yo corto toda atadura y fuente que mi alma ha buscado
y aceptado, de las cuales mi alma ha esperado recibir poder. Desato los malos deseos, motivos
y comportamientos que mi alma ha usado para traer a otros a acuerdos de engaño. Alma, ya no
más recibirás poder de satisfacciones que no vienen de Dios; de objetos, ataduras con otro ser
humano o espíritu del mal.
Alma mía, de hoy en adelante, te alinearás con la voluntad y el poder de Dios. Rendirás y
desatarás cada velo con el que has cubierto la más profunda oscuridad de tu interior. Desato
todas las capas de egoísmo, negatividad, protección que se haya formado sobre las áreas más
vulnerables que están necesitadas de la gracia de Dios. Desato los engaños y mentiras pegadas a
ti, toda culpa que has permitido que me atormente acerca de cosas que no eran mi culpa ni mi
responsabilidad. Desato los engaños que tú has traído y que me sujetaron a tu control.
Señor, yo remuevo toda capa, velo y fortaleza que mi alma ha edificado para no permitir que
entraras en las áreas más oscuras de mi interior. Te pido Espíritu Santo que llenes estas áreas de
necesidad, dolor y cosas no resueltas, con Tu luz, gracia, misericordia, sanidad y paz. Yo se que
solo Tú puedes arreglarlas. Yo ato mi alma a Tu verdad, Padre, para que Tu verdad siempre sea
la plomada que alinea mi mente, voluntad y emociones. Quiero que Tu verdad sea la guía, luz y
la fuerza de mi alma.
Bendice alma mía al Señor, con toda tu fuerza. No olvides ninguno de Sus beneficios. Recuerda
todo lo que Él ha hecho por ti, en el nombre de Jesús, ¡Amén!

Guía del Líder
RESPUESTAS
A los Puntos Importantes
De cada sesión

PUNTOS IMPORTANTES
1. Ud. es un espíritu y fue diseñado para que viviera en dependencia del Espíritu de
Dios y nuestra ALMA (mente, voluntad y emociones) fue diseñada para vivir en
sumisión AL ESPIRITU y nuestro CUERPO sometido a nuestra ALMA.
2. Nuestra voluntad es el mecanismo que hace decisiones o escoge. En primer lugar,

Ud. tiene una voluntad y esta voluntad tiene la capacidad de hacer decisiones y en
segundo lugar, Ud. tiene la voluntad acerca de cosas o situaciones en la vida, tales
como: sus finanzas, amistades, trabajo, con quien se va a casar, etc.
3. Si es Ud. quien esta decidiendo que áreas, decisiones u opciones rinde al Señor,
entonces Ud. sigue usando su propia voluntad y de igual manera desarrollando o
Señorío es cuando yo entrego el poder de escoger cada decisión en cada área de
mi vida a Cristo, no solo las decisiones en ciertas áreas. Cuando Ud. le rinde el
derecho de manejar a Dios, entonces es cuando Él se ha convertido en su Señor.
4. El diablo hace que usemos nuestra voluntad en contra de nosotros mismos. El hace
esto al provocar la rebelión y el complacer obligadamente. Otra manera en que el
acuerdo con sus mentiras, como lo hizo con Eva. Las fuerzas espirituales obtienen
poder en la Tierra por medio de acuerdos.
5. Complacer por obligación es ser obediente en acción o comportamiento externo,

aunque en nuestro corazón estamos en desacuerdo. Obediencia es un asunto de
conducta mientras que sumisión es un asunto o actitud del corazón.
6. La autoridad es el canal por el cual el poder de Dios fluye en nuestras vidas Poder
es autoridad delegado. Cuando someto mi voluntad al Espíritu y autoridad que Dios
ha puesto en mi vida, entonces recibo poder para realizar Su propósito aquí en la
tierra

Series: Dos Árboles ¿Cuál Escoges?
Sesión 2: El Conocimiento del Bien y Mal
1. Lo que los separó de Dios es usar el conocimiento del bien y del mal para tomar
decisiones en su propia voluntad independientemente de Dios y Su voluntad.
Así que en vez de intentar escoger entre el bien y el mal o hacer decisiones basadas
en nuestra propia voluntad, debemos escoger obedecer y depender en la Voz y
Espíritu de Dios, en vez de obrar independientemente de Él y en nuestra propia
manera de pensar, habilidad y fuerza.
2. Siempre y cuando Adán se mantuviera sometido a Dios, tenía vida abundante, pero
como Adán escogió usar su voluntad y actuar independientemente de la voluntad de
Dios, ese acto lo llevó a desconectarse de Dios. Adán se desconectó de la fuente de
vida (Dios) y por eso murió instantáneamente espiritualmente.
3. Adán era solo un recipiente por el cual fluía la vida, él no era la vida, ni tenía vida en
sí mismo. Su fuente de vida era algo fuera de sí, Dios. Adán mantenía su vida y
poder cuando estaba sometido a Dios, pero Adán decidió desconectarse de Dios y
trató de usar su propio conocimiento del bien y del mal pero ahora estaba muerto, sin
vida y sin poder. Ninguna cantidad de conocimiento substituirá nuestra necesidad de
poder y ninguna cantidad de conocimiento del bien y del mal puede darnos vida.
4. El pecado no es solamente las malas acciones que cometemos, esto es solo el fruto
de una condición de estar separados del Espíritu de Dios. La razón principal por la
que Cristo vino, no fue por nuestro mal comportamiento, sino a reconectarnos
con la fuente de vida.
5. Cuando Adán y Eva comieron del árbol del conocimiento del bien y del mal, dos
cosas sucedieron:
1. Lo que era su fuente de vida cambió de dependencia en Dios a independencia o

dependencia en sí mismos.
2. Su fundación de la realidad ahora estaba LIMITADA a lo que se podía ver en lo

natural.
6. Antes de comer del árbol del conocimiento del bien y del mal y de vivir una vida
independiente de Dios, Adán y Eva vivían en completa dependencia en Dios y no
sabían lo que era estar deprimidos, enfermos, en necesidad, enojados, etc. Dios
tenía dominio no por medio de leyes y reglas o a la fuerza, sino que por medio de la
sumisión bajo la operación en la autoridad dada por el Padre.
7. Jesús no vino a resolver el problema de nuestro mal comportamiento o

acciones pecaminosas, Él vino a reconectarnos al Padre y Su Reino. Es
imposible conectarnos a Dios viviendo independientemente dirigido por nuestro
conocimiento del bien y del mal. Vida abundante es posible cuando estamos
conectados con el autor de la vida por medio de la sumisión y dependencia en Él.

Sesión 3: El Árbol del Conocimiento del Bien y del Mal
1. El problema que destruyó a toda la raza humana fue el cambiarse de un sistema

(fuente) a otro sistema. De una fundación a otra fundación; de una fuente a otra
fuente. Antes de la caída, Adán y Eva, estaban conectados de una fuente de la cual
fluye la VIDA. Pero de repente todo cambió, ellos y todos los descendientes (la
humanidad) fue conectada a otra fuente llamada CONOCIMIENTO.
2. Aunque a veces nos enfocamos en el fruto, el problema con el árbol del conocimiento
del bien y del mal, NO son sus ramas o el fruto, sino que el problema está en la raíz.
Aunque el fruto se puede ver muy bueno, si la raíz no tiene vida, entonces lo único
que puede producir es muerte.
3. Cuando nos damos cuenta del bien, hacemos el bien, pensamos el bien y nos
sentimos bien, pero al final de esta rama se encuentra el fruto del ORGULLO. ¡YO
SOY MUY BUENO! Ahora, cuando crecemos en el conocimiento del bien de otros. El
fruto de esto es comparación o envidia.
4. Esto que sigue puede ser la rama más destructiva de todas. Del conocimiento del
bien sale la rama conocida como la religión. Muy a menudo desarrollamos (de un
sistema de raíces muertas) estrategias y hábitos para poder llegar a Dios o agradarlo
a Él. Lo que tenia la intención de dar vida se convirtió en raíces muertas tales como
las reglas y tradiciones.
5. Dios no nos pide que hagamos algo POR Él o vivir PARA Él, en vez de eso, Él quiere
que vivamos DE Él. Que todo lo que somos y hagamos venga de Él como fuente de
poder y vida. La obra que Él comenzó, Él la terminará al rendir nuestra voluntad a Él.
6. Fuimos diseñados para tener dominio sobre la tierra ya sea positiva o

negativamente, ya sea que estemos enojados o celebrando; podemos cambiar el
ambiente que nos rodea. Al permanecer en Dios, y dejar de vivir la vida en nuestra
propia fuerza, podremos transmitir Su naturaleza a través de nosotros y el Reino de
Dios tomará control de cualquier ambiente en el que estemos. Cuando el espíritu,
alma y cuerpo están sometidos al Espíritu de Dios, entonces usted va a manifestar el
poder y la gloria del Reino de Dios a dondequiera que vaya.
7. Dios ve nuestro conocimiento del bien y del mal como un edificio de paredes altas
que están bloqueando el conocimiento de Dios. Este hábito de argumentar comenzó
en el jardín del Edén cuando Adán comió del árbol del conocimiento del bien y del
mal. El diablo argumentó con Eva diciéndole que el árbol era bueno para comer, y
ella razonó basándose en su propio conocimiento y no escucho lo que Dios le había
dicho. El pensamiento y el razonamiento van juntos. Cuando el razonamiento toma
cautivo un pensamiento o información, ese razonamiento hace que el hombre no
pueda escoger obedecer a Dios.
8. Para conocer la autoridad de Dios y recibir la plenitud de una vida abundante, el

hombre debe ser destronado y someterse a la obediencia o sumisión de Cristo.
Vendrá un día en el que la autoridad de Dios romperá todas las fortalezas del
razonamiento que el diablo ha edificado en nuestras mentes y restaurará la mente del

hombre para que pueda someterse voluntariamente a la obediencia de Dios y así el
hombre ya no pensará independiente de Dios, sino que en obediencia total a Él.
Cuando esto suceda, vamos a escuchar y obedecer en vez de pensar y decidir.
9. Jesús no vino a resolver el problema de nuestro pecado o acciones pecaminosas.

Jesús vino a reconectarnos con Dios y con Su Reino.

1. Sumisión es dejar que el poder fluya en nuestras vidas; es ser receptivo al fluir del
poder de Dios a través de la sumisión a nuestra autoridad. Sumisión a la autoridad
es el canal por donde fluye el poder de Dios en nuestras vidas.
2. NO es que Dios quiera controlar sus actividades, mas bien Él quiere dar poder a su
identidad como un hijo y embajador del Reino de Dios en la tierra. La sumisión real
es
recibir el poder para ser quien Ud. es, y para hacer aquello para lo que Ud. fue
creado lo cual es; RE- presentar a Dios en la tierra y glorificar y manifestar Su Reino
con poder y gloria a través de su vida.
3. La gran demanda que Dios hace al hombre no es sacrificio o servicio. El gran deseo
de Dios para el hombre es la obediencia. La obediencia es honrar a Dios porque es
sumisión a la voluntad de Dios.
4. La autoridad de un líder no se impone, se reconoce. Las personas deben reconocer

las autoridades que Dios ha puesto en sus vidas y obedecerlas voluntariamente.
Cada persona debe de creer o tener la convicción que su líder o pastor es la
autoridad dada por Dios para su vida y por eso obedecer cuando esa autoridad le da
direcciones en cuanto al Reino de Dios y/o su vida personal.
5. El creyente respeta la autoridad y no se rebela contra la autoridad aunque le parezca

que su autoridad no tiene razón o esta equivocada. Cuando hay un orden Bíblico
tiene que haber sumisión absoluta. La única razón para no someterse a su
autoridad es cuando piden algo que esta en contra de la autoridad de Dios.
6. Cuando nosotros aprendemos a vivir bajo la autoridad, nos ganamos el derecho de

ser autoridad. Así es el proceso en el cual Dios nos va levantar. Las personas que
aprenden a respetar las autoridades en las diferentes áreas que hemos mencionado
son los que Dios prospera.
7. Como ciudadanos del Reino de Dios se nos ha dado autoridad y la fuente de esa
autoridad viene de Dios. AUTORIDAD ES PODER DELEGADO y no podemos recibir
poder en nuestra vida si estamos rechazando la autoridad.
8. Cuando Ud. esta bajo autoridad, Ud. puede tener autoridad porque la autoridad es
poder delegado y cuando Ud. no esta bajo autoridad Ud. no tiene poder porque
no hay ninguna autoridad delegándosela a Ud.
9. En cualquier parte donde se hace la voluntad de Dios sin interferencia, el Reino de

Dios domina. Dios establece su Reino en la tierra por medio de creyentes que
se someten en obediencia a Su autoridad. El Reino de Dios no se manifestará,
sino hasta que nuestra voluntad se someta a Su Voluntad.

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Esta serie está compuesta de:

 Lecciones para que el alumno pueda profundizarse en el estudio bíblico. Al final

Si usted tiene preguntas, sugerencias o cualquier otro comentario acerca de este

Que Dios bendiga su esfuerzo por crecer y engrandecer el Reino de Dios.

Luís y Susan Bautista

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Sesión 2: El Conocimiento del Bien y Mal..................................................15

Sesión 3: El Árbol del Conocimiento del Bien y el Mal................................25

Sesión 4: La Autoridad y Sumisión.............................................................35

GUÍA DEL LÍDER

Sesión 2: El Conocimiento del Bien y el Mal..............................................48

Sesión 3: El Árbol del Conocimiento del Bien y el Mal...............................49

Sesión 4: La Autoridad y Sumisión.............................................................51

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ESPÍRITU DE DIOS ESPÍRITU DEL HOMBRE

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El alma está hecha de 3 partes (mente, voluntad y emociones). El espíritu de Dios no

El propósito de esta sesión es ayudarlos a entender qué es la voluntad, el propósito por

Nuestra voluntad es el mecanismo que hace decisiones o escoge. En primer lugar,

Derechos Reservados © 2010 Alimenta Mis Ovejas, Inc. 11

2. Su voluntad acerca de lo que usted prefiere o desea, en alguna área o situación

Si usted rinde su voluntad en el área de finanzas a Jesús, ¿Le ha rendido toda su

Muchas veces cuando venimos a Jesús estamos dispuestos a entregar el control en

Usualmente rendimos nuestra voluntad o decisiones acerca de:

Nuestra voluntad es el mecanismo que hace decisiones o escoge. Debemos

Cuando usted le rinde el derecho de manejar a Dios, entonces es cuando Él se ha

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Dos maneras incorrectas en las que usamos nuestra voluntad son:

2. El complacer por obligación

Cuando complacemos con el comportamiento cumpliendo lo que otros piden aunque no

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La voluntad es poderosa porque es el mecanismo por el cual nos ponemos de acuerdo

Complacer por obligación es ser obediente en acción o comportamiento externo,

Someterse no es decir, “Haré cualquier cosa que usted quiera” la sumisión no es

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Dios no desea controlar su actividad, Él quiere DAR PODER A SU IDENTIDAD como lo

Nuestra voluntad fue diseñada para funcionar en sumisión y dependencia al Espíritu de

2. Nuestra voluntad es el ____________ que hace decisiones o escoge. En primer lugar,

5. Complacer por obligación es ser obediente en acción o comportamiento externo,

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VERSÍCULO PARA MEMORIZAR:

¿Qué me está diciendo el Espíritu Santo a través de esta clase?

¿En esta semana, cómo puedo aplicar en mi vida lo que he aprendido?

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En la primera sesión aprendimos acerca de nuestra voluntad y de las formas correctas e

MANERAS DE USAR LA VOLUNTAD PARA ESCOGER

BIEN MAL Espíritu de Dios Mi Conocimiento

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Jesús no dejó el Cielo para venir a la Tierra y liberarnos de nuestro mal

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En hebreo la palabra PECADO tiene 9 significados diferentes, y ninguna de esas

¿Sabe usted a qué se parece el árbol de la vida?

Así cómo sabemos lo que es arrancar una manzana de un árbol de manzanas y

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Después que el hombre pecó, ya no podía ver, percibir o experimentar la esfera o

2. Su fundación de la realidad ahora estaba LIMITADA a lo que se podía ver en lo

En este versículo la palabra “ángel” en el lenguaje original no está hablando literalmente

Derechos Reservados © 2010 Alimenta Mis Ovejas, Inc. 23

Siendo que no podemos comprender los pensamientos y caminos de Dios, entonces