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UN MUNDO FELIZ

Un mundo feliz describe un mundo utópico, irónico y ambiguo donde la humanidad es

permanentemente feliz, donde no existen guerras ni pobreza y las personas son desinhibidas,

tienen buen humor, son saludables y tecnológicamente avanzadas. La ironía de esta perfección

creada por el ‘Estado mundial’, la entidad que gobierna en este mundo feliz, es la aplicación de

medidas que eliminan a la familia, la diversidad cultural, el arte, la ciencia, la literatura, la

religión y la filosofía.

El mundo feliz está organizado en diferentes clases sociales, con características físicas y

psíquicas, formas de comportamiento, color de vestuario y funciones muy diferenciadas. Existen

cinco clases sociales: Todos están felices con su trabajo y con su forma de vida, pero es una

felicidad muy ficticia.

 Ciudadano Alfa: son las personas de clase pudiente, ostentosa y sin limitaciones

económicas. Representan la élite de las clases sociales.

 Ciudadano Beta: son aquellos humanos que representan la clase media alta. No tienen los

mismos privilegios de vida de los Alfa, pero viven de manera decorosa y con pocas

limitaciones.

 Ciudadano Gamma y Delta: pertenecen a la clase media baja. Generalmente son los obreros

que desempeñan cargos de obrería en Utopía.

 Ciudadano Epislón: es la sociedad de clase más baja, totalmente dependientes del trabajo y

las regalías del director. La máxima autoridad alega que estos ciudadanos no necesitan de

inteligencia, para que no se rebelen en su contra en un futuro.


Otro rasgo importante de cada ciudadano utópico, es que no pueden experimentar otro

sentimiento que no sea el de felicidad. Para asegurar que esto sea así, a cada bebé que nace, se le

da una pastilla conocida como soma para mantener estática la alegría y la diversión de los

mismos. Enamorarse no está permitido para ellos, pues el amor también puede conducir al dolor

cuando no es correspondido; sin embargo, las relaciones sexuales si están contempladas en la ley

utópica. El único fin de su vida es el desarrollo de un trabajo que haga próspera a la sociedad,

como individuos su valor es nulo.

El lema de ésta sociedad es “Comunidad, Identidad y Estabilidad”.

Aldous Huxley describe en Un mundo feliz de 600 años en el futuro donde el desarrollo

compulsivo de la eficiencia y la estabilidad junto con los avances tecnológicos crean una

“benéfica tiranía de la Utopía”.

Los mecanismos que el 'Estado mundial' usa para mantener la utopía: uniformizando al

producto humano e induciendo amor a la servidumbre; se reducen a los siguientes 4:

1. Condicionamiento de los infantes: donde se usan técnicas avanzadas de sugestión desde el

nacimiento del individuo como la técnica de hipnopedia o educación mediante el sueño.

2. Sistema científico de castas: se desarrolla una ciencia de las diferencias humanas, altamente

avanzada, que permite a los dirigentes del gobierno destinar a cada individuo el lugar adecuado

en una jerarquía social y económica dividida en 5 clases:


3. Sustituto del alcohol y los narcóticos: el soma es la droga sustituta menos dañina y más

placentera que el alcohol y los narcóticos. Es tranquilizante, alucinógena y obligatoria para los

ciudadanos del ‘Estado mundial’.

4. Sistema de eugenesia: creación de humanos a partir de tubos de ensayos para evitar errores,

eliminando los genes indeseados para perfeccionar la especie humana, o sea, la uniformización

del producto humano.

A medida que la libertad política y económica disminuye, la libertad sexual tiende, en

compensación, a aumentar. Y el hará bien en favorecer esta libertad. En colaboración con la

libertad de soñar despiertos bajo la influencia de los narcóticos, del cine y de la radio, la libertad

sexual ayudará a reconciliar a sus súbditos con la servidumbre que es su destino.

Intenta reflejar la perfección del mundo y cuestionarla bajo una nueva perspectiva. En ese

mundo feliz, se muestra la manipulación que sufren todas las personas mediante el lavado de

cerebro. Cada persona en el mundo feliz posee un mismo objetivo: ser adoctrinados para vivir lo

más felices que se pueda.

En ese mundo feliz que relata el autor, no existe el amor, tampoco la religión y mucho

menos la política. Lo único que pueden hacer los ciudadanos de este mundo es tener relaciones

sexuales alejados del afecto y hacer divertido cada vivencia o cada momento determinado. Un

mundo feliz adquiere una tendencia futurista, a causa de la manipulación y del estilo de vida que

desempeñan cada uno de los protagonistas.


El primer capítulo de Un mundo feliz relata a un grupo de estudiantes sobre las

normativas de cómo vivir en Utopia (nombre designado a la localidad donde se se llevan a cabo

los hechos). El director de la zona deja muy en claro que es la máxima autoridad del lugar,

además que el planeta está gobernado bajo su mando. El director menciona que una nueva vida

nace a través de huevos que se protegen en botellas.

El director arremete contra las ciencias humanísticas, cuando refuta la existencia de los

filósofos y los literatos, porque según su punto de vista, ellos rompen con la armonía de su

sociedad. El gobernante otorga un paseo gratuito para dichos estudiantes, para mostrarles todas

sus invenciones tecnológicas.

La historia de este relato no se cuenta en forma lineal, pues despliega un cúmulo de

acciones con diferentes tramas. Desde luego, Huxley describe con mucho detenimiento cada

proceso para acercar a su sociedad a la mayor perfección posible.

Neyra Sucet Contreras Gónzález.

BIBLIOGRAFÍA

 Huxley , Aldous (2010). Un Mundo Feliz. México. Leyenda S.A. de C.V.

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