mundo' y el Triángulo de las Bermudas 28-11-2015 20 minutos Científicos del Instituto Trofimuk de Geología y Geofísica han determinado en los últimos meses que los enormes agujeros del fin del mundo que aparecen en la zona de Siberia son consecuencia del derretimiento de los hidratos de gas y la emisión de metano. Es decir, son consecuencia del cambio climático. En una nueva expedición a uno de estos misteriosos agujeros gigantes, que comenzaron a aparecer en los últimos años, los expertos han llegado a la conclusión de que es "una señal de advertencia" de la existencia de "una amenaza mortal para las regiones del norte cuando su clima se calienta". Los responsables del trabajo explicaron a The Siberian Times que el proceso que siguen estos sucesos comienza con el derretimiento de los hidratos de gas y la emisión de metano. Esto se acumula en un pingo (un montículo de tierra cubierto de hielo) que luego entra en erupción provocando la formación de los extraños agujeros. Para llegar a este hallazgo, los científicos observan (monitoreándolos) aquellos pingos que creen que están a punto de estallar "en cualquier momento". La señal es seguida constantemente por un satélite espacial ruso en un intento de captar el momento en que se produce la erupción. El caso del Triángulo de las Bermudas Los científicos creen que el proceso es similar al fenómeno del Triángulo de las Bermudas, protagonista de la desaparición de los buques y aeronaves. Según apuntan, se producen vastas erupciones de metano debajo del Océano Atlántico. El director adjunto del centro del Trofimuk Institute of Petroleum Geology and Geophysics, Igor Yeltsov, ha visitado los cráteres y ha señalado que, en las últimas décadas, las temperaturas han subido y ha causado la liberación de los hidratos de gas. "Esto se asemeja a una reacción nuclear", ha añadido. A su juicio, hay que "seguir de cerca" los procesos químicos en esta zona. "No podemos subestimar el peligro de que el metano afecte a los seres humanos", ha apuntado. "La mayoría de los hidratos de gas se ocultan de forma segura, pero hay territorios", como Yamal, en donde se encuentran los agujeros, "donde comienzan a descomponerse". "Creo que ahora es prematuro hablar de una catástrofe mundial, como si se trata de una teoría de la 'amenaza de metano', pero si el calentamiento continúa al mismo ritmo, nuestras ciudades del norte, están en peligro real", ha concluido. Descubren el origen del cráter del Fin del Mundo, en Siberia Vanguardia 14-09-2018 El descubrimiento de un gran cráter en el permafrost de la península de Yamal, en Siberia, en 2014 provocó una inusual atención científica y popular a escala internacional. Se difundieron diversas hipótesis sobre las causas del hundimiento circular que alcanzaba casi 200 metros de profundidad. Se propusieron respuestas muy variadas, desde un meteorito hasta experimentación militar, pasando por el más probable resultado de un deshielo del permafrost como consecuencia del cambio climático. La curiosidad popular se hizo más grande cuando la población local otorgó a este fenómeno el sobrenombre del cráter del Fin del Mundo. Oficialmente, la denominación asignada pro las autoridades regionales es de cráter de Bovanénkovo. Entre finales de 2014 y el 2015, los expertos que estudiaron este fenómeno localizaron otros hundimientos similares pero hasta ahora no había sido presentada una explicación científica más o menos concluyente. En el caso de Yamal, el cráter quedó cubierto de agua en 2016 y actualmente sigue formando un singular pantano. La propuesta más plausible sobre el origen de este cráter ha sido publicada ahora por un grupo de investigadores de la Universidad Lomonov, en Moscú, a través de un articulo en la revista Scientific Reports (edic. del 10 de septiembre).
Foso localizado por un grupo de pastores de la aldea de Nosok, en la Península de
Taymyr, al este de Yamal (Rusia) (The Siberian Times) Los investigadores rusos afirman que la formación geológica de Yamal es resultado de la actividad de criovulcanismo en la Tierra, un fenómeno muy poco habitual en nuestro planeta. El criovulcanismo ha sido observado en otros planetas y satélites como consecuencia de la erupción de hielo formado diversos compuestos; y exteriormente se parece a la erupción volcánica con lava y rocas en la Tierra. Por lo que se ha observado en el espacio exterior con ayuda de satélites y telescopios especializados, en condiciones de temperaturas extremadamente bajas, los criovolcanes producen erupciones similares a los volcanes terrestres pero no arrojan rocas fundidas, sino compuestos químicos, como amoníaco y metano, en estado líquido y gaseoso.
El cráter de Yamal parece ser el resultado de un proceso singular de
criovulcanismo. Los expertos indican que este fenómeno se produjo en una superficie cubierta por permafrost. Sobre este terreno helado de forma permanente apareció un lago y, en las capas inferiores del lago, se formó una masa helada que contenía gases. Cuando el lago perdió el agua, la masa helada inferior quedó sometida a grandes presiones y finalmente explosionó (salió a la superficie), dejando sobre el terreno una hendidura en forma de cráter (descubierta en 2014). JEC Científicos descubren el origen del cráter del 'fin del mundo' 20 minutos 16.09.2018 Científicos rusos concluyen que el misterioso cráter formado en 2014 en la remota Península de Yamal, al norte de Siberia, fue resultado de una insólita actividad de criovulcanismo en la Tierra. El criovulcanismo, por regla general, se observa en otros planetas y satélites. Un criovolcán es un volcán de hielo y agua, pero su estructura básica es prácticamente idéntica a las rocas volcánicas de la Tierra. En condiciones de temperaturas extremadamente bajas, el criovolcán no arroja rocas fundidas, sino agua y otros compuestos químicos, como amoníaco y metano, en estado líquido y gaseoso. Según la investigación publicada ahora en Scientific Reports, el cráter de Yamal parece ser el resultado del colapso de un gran pingo (una pequeña colina típica de las regiones polares) que se formó dentro de un lago que posteriormente se secó. Esto permitió que un talik grande (es decir, una capa o cuerpo de suelo sin congelar en un área de permafrost) debajo de él se congelase. El pingo colapsó bajo la presión hidrostática criogénica acumulada en el sistema cerrado del talik congelado. Esto sucedió antes de que se completara la congelación, cuando un núcleo de suelo húmedo permaneció sin congelar y almacenó una gran cantidad de dióxido de carbono disuelto en agua intersticial. Esto eventualmente alcanzó la saturación de la fase gaseosa, y la sobrepresión resultante llegó a exceder el estrés de confinamiento de la litosfera y la fuerza del hielo superpuesto. Cuando explotó el pingo, la demarcación del cráter siguió la forma cilíndrica del núcleo de talik remanente, concluyen los científicos, liderados por Sergey N. Buldovicz, de la Universidad Lomonosov de Moscú. El cráter 'del fin del mundo' (como se le denominó) se descubrió en 2014 en la península de Yamal; sin embargo, se desconocía su origen. Varias teorías al respecto incluían la caída de un meteorito o el derretimiento del permafrost (capa de suelo permanentemente congelado, pero no permanentemente cubierto de hielo o nieve) causado por el calentamiento global. Rápidamente se llenó de agua y para el otoño de 2016 se convirtió en un lago, con una profundidad máxima de solo 52 metros y aproximadamente 25 metros de diámetro.