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Lugo, M.

Elena

Problemas y tendencias culturales contemporáneas : el rechazo de la


maternidad y la familia

Vida y Ética. Año11, Nº 1, Junio 2010

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Cómo citar el documento:

LUGO, M. Elena, “Problemas y tendencias culturales contemporáneas: el rechazo de la


maternidad y la familia”, Vida y Ética, año 11, nº 1, Buenos Aires, (junio, 2010).
http://bibliotecadigital.uca.edu.ar/repositorio/revistas/problemas-tendencias-contemporaneas-
familia.pdf

Se recomienda ingresar la fecha de consulta entre corchetes, al final de la cita Ej: [Fecha de acceso
octubre 9, 2001].
ARTÍCULOS

PROBLEMAS Hna. Dra. M. Elena Lugo


. Miembro de la Junta Directiva de la Comisión de

Y TENDENCIAS Bioética Padre José Kentenich, Instituto Secular


de Schoënstatt-Hermanas de María
. B. A. en Psicología-Sociología (Barry University,
CULTURALES Estados Unidos)
. M. A. en Filosofía (Georgetown University,
CONTEMPORÁNEAS: Estados Unidos)
. Ph. D. en Filosofía Moderna y Contemporánea

EL RECHAZO (Georgetown University, Estados Unidos)


. Miembro del Instituto Secular de Schoënstatt-

DE LA Hermanas de María
. Ex Catedrática, Docente e Investigadora de
Ética Biomédica y Filosofía de la Medicina
MATERNIDAD (Universidad de Puerto Rico, Mayagüez
Campus)
Y LA FAMILIA . Publica libros, artículos y presenta conferencias
a nivel nacional e internacional sobre temas de
estas áreas, particularmente, sobre la ética en la
investigación científica
. Profesora Invitada de la Pontificia Universidad
Católica Argentina
. Fundadora del Centro para la Filosofía en su
Función Interdisciplinaria (Universidad de
Puerto Rico)
. Miembro cofundador de la Federación
Puertorriqueña de Bioética
. Eticista Clínica, Hospital La Concepción (San
Germán, Puerto Rico)
. Presidente de la Comisión de Bioética Padre
José Kentenich (Argentina y Puerto Rico) afilia-
da a la Federación de Institutos de Bioética de
Inspiración Personalista (FIBIP) (Vaticano)
. Miembro de la Pontificia Academia para la Vida
(Vaticano)
. Miembro de la Academia del Plata (Argentina)

Palabras clave Key words


· Maternidad · Motherhood
· Familia · Family
· Crisis · Crisis
· Persona · Person

INSTITUTO DE BIOÉTICA / UCA - VIDA Y ÉTICA AÑO 11 Nº 1 JUNIO 2010 153


VIDA Y ÉTICA

RESUMEN [1] ABSTRACT

La institución familiar tradicional y la For some time, the traditional


maternidad en su sentido natural institution of family and maternity in
atraviesan, desde hace un tiempo, their natural sense have been
una crisis provocada por el individua- undergoing a crisis caused by the
lismo, el relativismo y el utilitarismo individualism, relativism and
predominantes en la sociedad pos- utilitarianism reigning in postmodern
moderna. Aquí la autora expone esta society. The author deals with this
problemática y sugiere consideracio- issue and suggests considerations to
nes a tener en cuenta en el intento de be taken into account when trying to
renovar a la familia desde su raíz renew the family from its natural
natural, en apertura al plan divino y a roots, open to the divine plan, so it
fin de desempeñar su función esen- can develop its essential function as
cial que es ser patrimonio común de humanity’s common legacy.
la Humanidad.

INTRODUCCIÓN lectura, bien puede sugerir que la frase es


una expresión de reclamo con tinte pos-
La mujer contemporánea insiste en modernista centrada en la autonomía
que quiere ser madre pero con libertad; individualista cónsona con el feminismo
quiere tener hijos pero con dignidad; de género. Supuesta esta lectura, la
quiere construir un futuro pero con misma puede servir para rechazar total o
amor; quiere tener un compañero pero parcialmente, si no bien la maternidad, sí
con igualdad; quiere vivir como esposa y el embarazo como fase natural y objeti-
ama de casa y a la vez ejercer un trabajo va de la maternidad, al igual que condu-
profesional, pero siempre como persona. cir a una interpretación de la familia
ajena a la comunión intersubjetiva y
Esta insistencia admite varias lectu- esponsal abierta a la vida, como a un
ras. Tan sólo se ensayarán dos que se menosprecio de la magnanimidad de la
estiman son las alternativas principales y mujer como madre. Es decir, bien podría
además polarizadas entre sí. La primera la frase inicial revelar una fragmentación

[1] El presente artículo fue expuesto en un panel en el Congreso Internacional: “Mujer y Hombre, la Humanidad por
entero”, organizado por el Consejo Pontificio para los Laicos en Roma del 7 al 9 de febrero de 2008.

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mecanicista de la totalidad orgánica y psicosocial en su continuidad y coheren-


natural de lo que significa la maternidad cia interna. Se trata de una perspectiva
y familia. Sugiere a su vez una exaltación orgánica que enfoca la totalidad de los
de la maternidad, sólo si estricta e indivi- sucesos -como diría el P. José Kentenich-
dualmente planificada, con posible a la luz de la explicación natural y la jus-
menoscabo de los bienes intrínsicos al tificación sobrenatural.
matrimonio, su intimidad y fecundidad, y
de su centralidad en la vida de familia. La Este trabajo seguirá el siguiente
primera lectura propuesta da lugar a orden:
interpretar la experiencia del embarazo
inherente a la maternidad, ya sea como I. Exposición del contexto cultural-
castigo discriminatorio, accidente posmodernista que apoya el rechazo de
lamentable, opción técnicamente susti- la maternidad y la familia en su sentido
tuible -inclusive de ectogénesis- o ya sea natural y objetivo.
como instrumental de consumo. II. Menosprecio del embarazo como
fase de la maternidad y de cómo ello
En todas las modalidades de materni- afecta negativamente a la integridad de
dad recién identificadas se margina el la familia.
orden natural y objetivo de la materni- III. Propuesta antropológica y ética
dad y la familia, el cual debemos intentar correspondiente al orden natural, desta-
recuperar. cando la integración maternidad y
familia.
Para ello se propondrá una segunda IV. Visión orgánica del embarazo-
lectura de la frase introductoria a este maternidad en su sentido natural.
trabajo. Ésta permitirá colocar la citada V. Conclusión y recomendaciones en
insistencia femenina en el contexto de torno a la familia como lugar de encuen-
una antropología personalista, ontológi- tro interpersonal y custodia de la vida.
ca y en su correspondiente ética. La ética
personalista, o bien la corriente bioética
que de ésta emana, demostrará la unidad I. PRESENTACIÓN DEL CONTEXTO
orgánica entre persona, amor y vida para CULTURAL-POSMODERNISTA
explicar y justificar el auténtico valor de QUE APOYA EL RECHAZO
la libertad, la dignidad, el amor y la equi- DE LA MATERNIDAD Y LA FAMILIA
dad entre varón y mujer. La antropología EN SU SENTIDO NATURAL Y OBJETIVO
personalista y su bioética integral revela
la sabiduría de la naturaleza al mantener Se comienza con el concepto de
la maternidad genética, gestacional y familia, el cual, en su crisis, incluye tam-

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bién un interrogante muy grave sobre De modo que si lo que está en crisis es
sus elementos constitutivos en general y un determinado modelo de familia, lo
sobre la maternidad en particular. que corresponde es analizar la estructura
y los rasgos de ese modelo de familia a la
Desde una perspectiva histórica, reco- luz de un criterio que sea fundamental,
nocemos que la institución familiar pasó para ver si ese modelo puede justificarse
ya por una gran crisis: la crisis de la fami- hoy. Si lo que está en crisis es el modelo
lia tradicional que originó el cambio de la de familia denominado familia patriar-
familia extensa a la familia nuclear cal o familia conyugal nuclear en cuan-
moderna. Esta crisis redujo las funciones to versión caduca o estereotipada de su
de la institución familiar. Consistió bási- proyecto original en la modernidad,
camente en la reducción del número de entonces habría que buscar en el funda-
miembros o tamaño de la familia, y sus mento natural de la familia la esencia
roles centrales en el mundo laboral, edu- que anime y justifique otro modelo de
cativo y social en el contexto de la cultu- familia, sin descartar la familia en sí
ra premoderna. Pero ahora se cierne otra misma como institución. Así pues, la cri-
crisis en la cual la familia moderna pasa sis actual no sería un momento de pérdi-
de un modelo de familia nuclear a otro da y catástrofe de valores imperecederos
designado ambiguamente posmoderno. que se han de conservar dogmáticamen-
Se trata de una desfamiliarización de la te, ni tampoco indicio fatal de que la
sociedad. Con este concepto se sugiere la familia como institución está destinada a
disminución en la percepción de la fami- desaparecer a causa de su deficiencia
lia como socialmente necesaria, y el surgi- estructural.
miento de diversas formas de convivencia
humana con predominio de un criterio La tarea que nos asignamos es, por
individual sobre el comunitario, y la consiguiente, más radical y difícil de lo
correspondiente desestimación del funda- que indicaría una primera apreciación.
mento natural de la familia en un orden Hemos planteado la necesidad de retor-
objetivo y esencial, exponiéndola al subje- nar a la raíz esencial o natural de la fami-
tivismo y relativismo cultural que trastor- lia para examinarla críticamente y tomar
na el sentido del sexo, del amor conyugal posición personal ante la misma. Pero la
y de la apertura a la vida. Se advierte una tarea es particularmente desafiante por-
crisis de la identidad misma de la familia que dicha raíz no está exenta de ambi-
como institución en su expresión actual, a güedad en la época posmoderna. La
su vez motivada por otra crisis del orden posmodernidad es proclive a desestimar
objetivo de la verdad y el bien formulado el significado filosófico de la naturaleza,
en la ley moral natural. a poner en duda la objetividad de la ver-

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dad y el bien inherente al orden natural, inmediato que no conduce a una felici-
y a cuestionar la posibilidad de derivar de dad sustancial.
ella una interpretación normativa para
las categorías con las cuales pensamos el A su vez, la relatividad y utilitarismo
ser persona, el amor, la convivencia cultural ante la familia se enuncia con
sexual, la maternidad/paternidad, en fin, palabras nuevas en cuanto a sus conno-
los aspectos esenciales de la familia. taciones, a saber: salud reproductiva
entendida como modo muy específico
Según esta apreciación, la verdadera de la no reproducción; políticas divor-
crisis reside en los conceptos o concep- cistas y abortivas, tomadas como estra-
ción teórica y en la vivencia práctica del tegias -según se dice- para eliminar el
amor, de la sexualidad, de la libertad, de divorcio y el aborto; familias en plural,
la entrega incondicional entre las perso- bajo una enorme gama de posibilidades,
nas, y -en esta secuencia- en la crisis del llegando hasta la denominada uniperso-
concepto de la maternidad y de la fami- nal, en sustitución de la familia, en su
lia. Esto incluye una revaloración del sentido natural y permanente (sentido
concepto mismo del ser persona; se común); género, para sustituir la pala-
reduce su ser a sus funciones empírica- bra y la realidad del sexo, bajo numero-
mente estimables y se reduce su dignidad sísimas modalidades, incluidas todas
inherente a una visión positivista de sus ellas bajo la denominada perspectiva de
derechos y deberes. género.

Estos conceptos revisten actualmente Si nos preguntamos sobre la causa de


una seria ambigüedad en el marco de la la crisis radical de los conceptos y viven-
cultura privada de la objetividad ante la cias que sostienen el amor, el matrimo-
verdad y el bien. Se los contempla desde nio, la maternidad y, por consiguiente, la
un relativismo ético conducente a familia, la respuesta es conocida pero no
modalidades de vida, amor, maternidad ampliamente aceptada en sus implica-
y familia, sujetos a criterios egocéntri- ciones. La causa principal de la crisis
cos. Se relativiza la familia y sus compo- radica en el alejamiento de Dios, con lo
nentes esenciales según un criterio cual el hombre se encierra en su yo indi-
subjetivista y utilitario. Se descuida el vidual y pierde sensibilidad para con el
sentido de la libertad en cuanto libertad otro, al cual, tarde o temprano, acabará
relacional, ministerial y orientada a res- viendo como un extraño desprovisto
ponder a la necesidad del prójimo. Lo incluso de humanidad. Se advierte que la
esencial de la sexualidad personalizada cuestión fundamental de la crisis surge
se rebaja a utilidad, egoísmo, a goce del eclipse del Dios personal y vital que, a

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su vez, opaca la presencia del misterio en meterse sino a seguir los gustos subjeti-
la persona misma y sus interacciones con vos. Así la persona light se vuelve nihilista
los demás. Como diría el P. J. Kentenich, ya que no tiene referentes, hallándose, a
el alejamiento de Dios deshumaniza a la la vez, dominada por un falso sentimiento
persona y la reduce al nivel inferior a los de libertad, donde la verdad es la opinión
animales, quienes al menos observan propia y el bien la preferencia útil.
fielmente sus instintos.
Ya no hay denuncias ni inquietudes
Poco a poco, se genera un materialis- culturales ni grandes aspiraciones socia-
mo práctico: el ser queda reemplazado les. Juega o vive sin objetivos nobles o
por el tener; la sustancialidad de la vida humanistas, sin aspiraciones, vacío y en
es reinterpretada según un funcionalis- rebelión contra todos los estilos de vida
mo en términos de calidad, belleza, pla- que no sean el suyo. De su mediocridad
cer y logros exteriores de la persona. Las nace un nuevo analfabetismo, puesto que
dimensiones más profundas de orden es capaz de acumular muchas redes com-
espiritual religioso pasan a ser tan sólo plejas de información pero carece de for-
idiosincrasias subjetivas y privadas, sin mación; acumula muchas vivencias, pero
impacto en la vida comunitaria, en la carece de experiencia; reconoce valores
visión social de la familia y menos en la sólo en la medida que definan su propia
jurisprudencia en torno de ella como ins- forma de ser y de sentir; es incapaz de un
titución básica. genuino encuentro y apertura con lo ver-
daderamente ajeno. De ahí que siempre
Surge así la familia denominada light, sea un espectador, un hombre pasivo que
sustentada en el egoísmo y permisivismo. participa voluntariamente de un plan que
De la búsqueda ávida de placer y refina- él no ha trazado. Esta realidad se ha
miento sin freno ni cuestionamiento, se enmascarado detrás de una incesante
sigue el hedonismo de alta permisividad. actividad, de una pasión por la nada.
Es decir, no hay prohibiciones ni territo- Permitiéndose todo, no garantiza nada.
rios vedados ni diversiones restringidas; Vive experiencias apáticas, manipulado
no hay imposiciones, salvo algunas leyes por estímulos que no lo llenan ni hacen
mínimas de convivencia cívica. De ello se feliz. Su interior es impasible, pleno de
deriva el escepticismo y el relativismo. En tedio, aburrimiento y desolación, con
virtud de una actitud escéptica, las opi- curiosidad y tolerancia ilimitadas.
niones cambian rápido y se destierran los
valores trascendentes, entonces se cae en En resumen, la familia en su modelo
la indiferencia e indefensión. Se pasa así al actual, nuclear y patriarcal -según algu-
relativismo, a la invitación a no compro- nos sociólogos lo plantean- está amena-

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zada en su raíz. Se trata de una crisis de la considerándose a la mujer simple apén-


razón, de los conceptos, de los valores: el dice del mismo o una forma empobreci-
hombre se dispersa, pierde su unidad, su da y dependiente de él.
verdad, su rostro se ensombrece, su mira- • Que la sexualidad sea algo extraño
da se vuelve miope. Y precisamente los a la totalidad del ser humano y que, a lo
lugares principales de esta miopía en el sumo, se inscriba dentro del ámbito pre-
mundo de hoy son el amor matrimonial, la ciso de lo biológico.
maternidad/paternidad, la familia y la • Que la sexualidad se articule en dos
vida. Sin dogmatismo ni fatalismo, pues tipos humanos totalmente opuestos y
ambas actitudes dan muestra de desespe- simétricamente diferentes sin identidad
ración, se debe intentar vitalizar el senti- ni relación mutua.
do natural de las dimensiones esenciales • Que la sexualidad, en cuanto nece-
de la familia, en especial de la maternidad, sidad central del individuo, sea la que
a partir del orden interior objetivo, del mayor interés y felicidad despierte y exija
plano en el cual se comparte la condición satisfacción para lograr bienestar, alegría
humana en su universalidad. y energía.
• Que la disciplina y el autodominio
Interrogantes y amenazas sean el equivalente a represión de esa
a los elementos constitutivos necesidad y frustración de la satisfacción
de la familia sexual, lo cual sería algo peligroso y per-
judicial por ser supuestamente exterior,
Reinterpretación de la sexualidad ajeno al individuo, antinatural y fomenta-
humana do por ideologías e intereses autoritarios.
• Que la satisfacción del impulso
Seguidamente se señala lo que en el sexual sea un derecho de todo individuo,
orden de la sexualidad parece objetable, también del adolescente, que ha de satis-
o al menos éticamente problemático, facerse por medio de la masturbación, la
desde el punto de vista de una bioética relación heterosexual o inclusive homo-
personalista y orgánica: sexual, tan pronto como se sienta capa-
citado para ello. [2]
• Que la sexualidad se reduzca a un
mero dato genital y biológico. En resumidas cuentas, la posmoderni-
• Que la sexualidad humana tenga su dad desafía al proponer que la sexualidad
arquetipo propio y exclusivo en el varón, no necesita justificación axiológica ni

[2] FLECHA, Andrés y ROMÁN, José, Moral de la Persona, Madrid, Biblioteca de Autores Cristianos, 2002, cap. II.

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integración al contexto personal, es decir can las personas menores de edad, sin
al matrimonio, al amor, a la procreación, garantizar la intervención de la familia.
a la intimidad y la plena pertenencia • Inclusión del “cupo de género” en
interpersonal. Surge una separación los distintos niveles de organización
mecánica entre amor matrimonial-sexua- social y política.
lidad y la apertura maternal a la vida. • Legalización de la unión de perso-
nas del mismo sexo con pretensión de
Sustitución de la perspectiva que sea equiparada al matrimonio y con
de género por la identidad sexual posibilidad de adopción.
natural • En materia educativa, estrategias de
intervención en los textos escolares para
La dimensión de mayor impacto eliminar todas las visiones estereotipadas
actual en cuanto al tema de la identidad sobre hombre y mujer.
y diferenciación sexual es la llamada • Transversalidad: se promueve la
“ideología de género”, la cual será de- integración de las cuestiones de género
sarrollada en unos breves apuntes rela- en la totalidad de los programas sociales,
cionados a sus implicaciones respecto al de tal modo que sea esta perspectiva el
tema en cuestión. criterio de análisis y de diseño de las
políticas públicas.
La perspectiva de género abarca
diversas acciones entre las que se pueden En resumen, la ideología de género
mencionar: sustenta una difusión de comportamien-
tos contrarios a la maternidad, la vida y
• Distribución de métodos anticon- a la familia. En el marco de las políticas
ceptivos en el marco de las políticas de públicas con perspectiva de género se
salud reproductiva. promueve la distribución de anticoncep-
• Campañas para garantizar a las tivos, incluso abortivos, la despenaliza-
mujeres el acceso a un “aborto legal y ción y legalización del aborto y la
seguro, sin restricciones”. esterilización. Se trata de conductas con-
• Legalización de la “esterilización” trarias a la vida y la familia que conlle-
como método anticonceptivo. van también violaciones a los derechos
• Actividades de capacitación y difu- humanos fundamentales, como es el
sión de la perspectiva de género, inclu- caso del derecho a la vida.
yendo campañas en los medios masivos
de comunicación social. Introduce a su vez dinamismos de
• Acciones enfocadas a grupos consi- conflicto en la sociedad: en lugar de ver
derados de riesgo entre los que se desta- a la mujer en el marco amplio de la fami-

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lia y la sociedad, se acentúan las diferen- muchas y heterogéneas realidades


cias y se confrontan sus derechos con los humanas cuyo elemento común son for-
del hombre, en una contraposición des- mas de cohabitación de tipo sexual no
confiada y a la defensiva. [3] matrimoniales. Estas se presentan como
opciones acordes a la mentalidad indivi-
Fragmentación del vínculo de amor dualista y subjetivista de la época.
matrimonial como núcleo de la familia
• Convivencias prematrimoniales: de
Identificamos varias modalidades de corta duración, banalizan el voto de fide-
convivencia familiar de cierto predomi- lidad matrimonial, inclusive su exclusivi-
nio en la posmodernidad que considera- dad, provocando inestabilidad en la
mos desafiantes y debilitantes de la raíz relación, el dolor y el profundo sufri-
misma del matrimonio en cuanto núcleo miento a la persona abandonada, y la
de la familia y que desubican la presen- desmoralización en los hijos, en el caso
cia esencial de la maternidad en el de que los tengan, pues la maternidad
núcleo conyugal. Las mencionamos regularmente es excluida con el uso de
según sus designaciones sociológicas contraceptivos.
contemporáneas:
• Relaciones extramaritales: la relación
• Las llamadas familias alternativas: extramarital abre la puerta a dos graves
las monoparentales; las compuestas por peligros adicionales: el HIV/SIDA, el emba-
padres que traen hijos de otros matrimo- razo en las adolescentes, madres solteras,
nios; las extendidas, en las cuales parien- al igual que las enfermedades venéreas.
tes asumen las obligaciones propias de Afortunadamente, recientes investigacio-
los padres. Los intereses políticos y eco- nes del año 2006 han comprobado que los
nómicos, apoyados por los medios masi- valores de la fidelidad y de la abstinencia
vos de comunicación, han utilizado su sexual hasta el matrimonio son posibles
influencia para normalizar estadística- de practicar en la actualidad, y que ade-
mente estas familias, tratando de des- más son el camino menos agresivo para la
prestigiar la familia nuclear de tradición salud y el más efectivo para prevenir la
cristiana al considerarla algo inalcanza- tragedia del HIV/SIDA y las enfermedades
ble en esta época. de transmisión sexual.

• Las uniones de hecho: definidas • Parejas divorciadas, casadas de


como las que incluyen una serie de nuevo o no: el divorcio motivado por

[3] DI PIETRO, Maria Luisa, Sexualidad y procreación humana, Buenos Aires, EDUCA, 2005, cap. 2.

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diversas razones, tales como uniones dis- convertir en atentados contra la fideli-
funcionales, falta de seriedad para asu- dad matrimonial. Cuando la pareja no
mir un vínculo permanente, inmadurez comparte y no nutre su amor conyugal,
emocional, insaciable sed de placer y el son frecuentes los problemas de comuni-
énfasis en la autorrealización con cierto cación, debilitamiento de la autoridad
menoscabo de la capacidad de servicio parental, intervención de terceras perso-
abnegado y magnánimo, representan un nas, violencia intramarital y desarmonía
fracaso de la intención inicial del sexual, entre otros problemas.
matrimonio.
• Por último, pero de importancia
La vida matrimonial en la posmoder- cardinal para el tema central de la
nidad puede complicarse por considera- maternidad, la mentalidad anticoncepti-
ciones de actualidad: va con afinidad al aborto por un lado, y
por el otro lado la tecnologización de la
• Por ejemplo, la prolongación de procreación, desafían al embarazo-
vida de la pareja. Hoy la pareja necesita maternidad tal como será expuesto a
mantener su armonía conyugal por más continuación.
tiempo y en medio de los inexorables
procesos de envejecimiento con las alte-
raciones biopsicosociales que estos pro- II. MENOSPRECIO DEL EMBARAZO
cesos provocan. COMO FASE DE LA MATERNIDAD Y DE
CÓMO ELLO AFECTA NEGATIVAMENTE
• También ha de notarse la ausencia o A LA INTEGRIDAD DE LA FAMILIA
limitada convivencia del matrimonio y
participación de los padres en el hogar, Embarazo y maternidad como castigo
por ejemplo a causa del trabajo de ambos
fuera del hogar, lo que restringe la inter- Un castigo es esencialmente una res-
acción de los cónyuges entre sí y la aten- puesta o efecto secundario y consecuen-
ción de los hijos. cia de actos o faltas objetables. El castigo
justo debe corresponder en calidad y
• La vida conyugal se hace mecánica cantidad (tipo e intensidad) a la natura-
con muchas obligaciones y poca gratifi- leza y magnitud de la falta. Es decir, un
cación. Se buscan gratificaciones fuera castigo injusto podría verse como una
del hogar con un tercero, lo cual condu- contradicción conceptual. El castigo, de
ce a la separación emocional entre los ser injusto, puede ser un mal y por eso
esposos y vinculaciones potencialmente injustificable. Por otro lado, de ser justo,
peligrosas con amistades que se pueden podría ser un bien instrumental para

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renovarse en la buena conducta y resta- Embarazo y maternidad como accidente


blecer el orden objetivo del bien común
quebrado por la falta. Esta interpretación del embarazo-
maternidad está asociada a la
En relación con el embarazo como mentalidad del contraceptivo. La con-
aspecto integral de la maternidad: traconcepción no es simplemente un
¿podría ser la experiencia del embarazo acto que de algún modo impida la
un castigo, tal vez injusto? Esta inter- generación de una vida humana, sino
pretación se sugiere ante algunas situa- que es un acto que impide que los pro-
ciones comúnmente reconocidas como pios actos sexuales libremente elegidos
embarazos indeseables. Probablemente lleguen a ser causa de la generación de
se ilustraría en un embarazo imprevisto una nueva vida. Es parte constitutiva
por la falta involuntaria de información del propio comportamiento sexual. Es
y formación sobre la sexualidad, como un acto que, dada una necesidad o
falta de preparación para el matrimonio voluntad de impedir una concepción,
y para el ejercicio de una paternidad persigue objetivamente la meta de con-
responsable. Una mujer puede ser vícti- sumar la relación sexual asumiendo un
ma del egoísmo múltiple de su cónyuge aspecto de su esencia (la unión) y des-
o de una persona ajena a su vinculación cartando el otro (la creatividad). Ante la
afectiva, que la violenta, seduce, explo- disyuntiva de pensar que no puede
ta o atemoriza conduciéndola a ver el mantener la intimidad conyugal en
embarazo resultante como un castigo apertura a la vida y de considerar que la
perpetrado por el abusador que vive de maternidad no sería oportuna, se incli-
modo hedonista, que descontrola su na el matrimonio a sacrificar la integri-
sexualidad buscando el placer sin res- dad natural del acto conyugal en sí, es
ponsabilidad moral alguna. La mujer, decir, se distorsiona la expresión autén-
aun si rechaza el embarazo y lo ve como tica del mensaje del cuerpo sexuado en
castigo, éste podría ser una experiencia su verdad integral en torno al amor
de maternidad sujeta a una deliberación matrimonial como unidad de lo sensual
y acción justa. Es decir, si bien el emba- y la ternura afectiva.
razo pueda experimentarse subjetiva-
mente como castigo, la mujer Como críticamente se comentará en
maltratada podría, con la asistencia un segmento posterior, el contraceptivo
necesaria, reconocer que la persona pre- arriesga a violar la norma personalista
natal o embrionaria nunca puede califi- que indica que la respuesta apropiada al
carse como castigo pues contradice la ser persona es el amar pero no el usar. La
dignidad inherente a su ser. otra persona no ha de ser reducida a

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objeto o a un “algo” cosificado, pues es técnica. Intentan determinar la estructu-


un “sujeto” o un “quien”. [4] ra y dinámica de la vida según modelos
funcionales y estadísticamente determi-
Embarazo-maternidad como nables. Si bien se concibe al embrión
contrariedad que hay que superar humano como vida humana o pertene-
ciente a la especie humana, se le niega la
La mentalidad contraceptiva contri- condición de persona y su correspon-
buye a la aceptación del aborto. Aunque diente dignidad, y por ello se estima que
la Declaración sobre Bioética y Derechos se puede sacrificar su integridad, por
Humanos de la UNESCO no incluyó entre ejemplo mediante la reducción selectiva
los derechos la salud sexual y reproducti- del gemelo defectuoso que es una opera-
va de la mujer, la terminación voluntaria ción eugenésica y con la extracción de
o la interrupción del embarazo, el tema células estaminales a partir de la etapa
continúa instalado en el ideario contem- del blastómero, a fin de beneficiar
poráneo. En todo caso, aparece en el -supuestamente en modo terapéutico- a
artículo 14 del Protocolo de la pacientes de Parkinson y Alzheimer. Se lo
Declaración. [5] puede manipular por medio de la fecun-
dación in vitro, como también clonar, en
No se suele hablar de aborto, sino de caso de ser técnicamente posible y rela-
“interrupción del embarazo”. Pero en ello tivamente seguro. Sustentada en una
subyace la idea de que un embarazo dese- mentalidad mecanicista, la mentalidad
ado es una maravilla y un embarazo no abortista asume una perspectiva técnico-
deseado es una enfermedad para lo cual el científica del inicio de la vida humana; es
aborto es la terapia. Se hace así toda una decir, la interpreta como algo fragmen-
verdadera ingeniería semántica, divulgada tado y reducido a sus unidades biológi-
por los medios de comunicación, condu- co-genéticas, y se adhiere a la
cente a favorecer el aborto desde la pers- sustitución de la procreación natural con
pectiva de los derechos, la salud, etc. formas artificiales reproductivas como se
comentará más adelante.
Tanto el aborto como la mentalidad
anticonceptiva se hacen acompañar de Pensamos que si el aborto se entiende
una perspectiva utilitaria y científico- tan sólo como el hecho de retirar el

[4] deLADURANTAYE, Paul, “Contraception and the Person”, The National Catholic Bioethics Quarterly (NCBQ), vol. 3, n.
1, Filadelfia (2003), pp. 35-37.
[5] Ídem. HAAS, John, “Person and Human Being in the UNESCO-Declaration on Bioethics and Human Rights”, NCBQ,
vol. 7, n. 1, Filadelfia (2007), p. 47.

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Problemas y tendencias culturales contemporáneas: el rechazo de la maternidad y la familia / ARTÍCULOS

apoyo vital ante la ausencia de otro la vez que se inclina por evaluar todo
recurso de supervivencia, una mujer según un criterio pragmático, es decir, las
podría argumentar a favor de la extrac- cosas valen por su función y utilidad para
ción del feto en casos en que su embara- el ser humano individual o colectivo.
zo fuese especialmente complicado o el
feto adoleciese de una condición mortal La razón técnica se inclina a interve-
o anormalidad incompatible con la vida. nir con el orden natural para reconfigu-
Más adelante se comentará que el abor- rarlo o hacer su síntesis. Esa intervención
to consiste en el hecho de retirar un puede incluir el reemplazar y sustituir, y
recurso esencial que no se puede reem- no el mero asistir a la naturaleza para
plazar. Sería violentar una unión única que logre sus objetivos. Cuando se trata
de íntima dependencia constituida por la de la naturaleza humana o el ser persona
madre y el hijo. [6] como espíritu-encarnado-sexuado es
preciso tomar muy en serio la consigna,
Embarazo-maternidad tecnificados de que lo que técnicamente puede
y otras modalidades de sustituir hacerse no equivale a lo que deba hacer-
la procreación con la reproducción se. Esta consigna se hace urgente cuando
se trata de las funciones procreativas en
Se entiende por técnica una actividad vista de la experiencia de amor como
productiva, y en cuanto se dice que está unidad y apertura a la vida. [7]
o debe estar bajo la dirección de la razón
humana práctica, se la denomina tecno- a. Embarazo según la Fecundación In
logía (técnica + logos). La razón técnica Vitro (FIV)
es instrumental y así se rige por conside-
raciones de utilidad y eficiencia, con lo En la FIV la concepción se realiza en
cual se distingue por su esfuerzo de un laboratorio y la mujer dice quedar
manipular y controlar su objeto de apli- embarazada en el momento de la trans-
cación para maximizar la productividad. ferencia a su vientre del embrión exter-
De este modo no es tan neutral como se namente fecundado. El embarazo, en su
cree, pues induce a ver la realidad como sentido natural, queda fragmentado en
lo neutral a ser dominado, el conocer dos eventos: la fecundación técnicamen-
como un recurso de poder y de hacer, a te mediada y luego la implantación.

[6] Ídem.
[7] LUGO, Elena, “Filosofía de la Tecnología” en Ética Profesional en la Ingeniería, Mayagüez, Puerto Rico, Editorial
Riqueña, 1987.

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VIDA Y ÉTICA

Fecundación y embarazo -integrales a la siones de su ser espiritual, afectivo, cog-


maternidad- se separan al no seguir su noscitivo y fisiológico desde la intimidad
continuidad natural, y se presentan nupcial, y que se extiende desde la con-
como dos eventos bajo el control y domi- cepción hasta el alumbramiento como en
nio individual y asistido por un técnico. toda la vida de su ser madre para el hijo.

Así, en el contexto de la FIV, el emba- Dicha continuidad es aun menos evi-


razo y la concepción no son equivalentes, dente en la experiencia de maternidad
con lo cual el pleno sentido de la mater- subrogada separada de la vinculación
nidad se torna ambiguo. La vida, en su nupcial, y en el embarazo heterológico
sentido natural y ontológicamente obje- por concepto de aceptación de un
tivo, iniciada en la concepción, no es embrión fecundado y ajeno a la consti-
tomada en cuenta, sino que más bien se tución genética de la gestante. [8]
privilegia la implantación. Es importante
reconocer que la designación de la b. Maternidad huésped
implantación como embarazo y la identi- (Surrogate motherhood)
ficación del ser por nacer como pre-
embrión desprovisto del carácter de El concepto “madre-huésped” cuenta
persona, se promociona por los investi- con varios sentidos, a saber:
gadores interesados en extraer células
estaminales de embriones pre-implanta- • Remunerada: consiste en un con-
dos con fines terapéuticos aunque la trato de intercambio entre el servicio de
medicina regenerativa esté en etapa gestación de una mujer a cambio de
experimental. dinero de parte de la pareja interesada en
recibir al bebé al momento del alumbra-
Sin duda, la señora que recibe el miento.
implante se transforma en madre al ele- • Contractual en sentido estricto:
gir voluntariamente unirse en modo ínti- supone un acuerdo previo a la gestación
mo y único a la nueva vida. Pero, como se de entregar el bebé gestado a la pareja
indicará en la próxima parte dedicada a contratante.
los comentarios críticos estimados perti- • Como variante de la anterior, adop-
nentes, la FIV margina la vinculación ción excluida: la madre gestante excluye
natural que transfigura ontológicamente al inicio la posibilidad de adoptar y criar
a la mujer, que afecta todas las dimen- al bebé gestado.

[8] MAY, William, “Catholic Bioethics and the Gift of Human Life”, en: Our Sunday Visitor, Huntington, Indiana (EE.UU.)
(2000), p. 811 y DI PIETRO, Maria Luisa, op. cit., cap. 8.

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Problemas y tendencias culturales contemporáneas: el rechazo de la maternidad y la familia / ARTÍCULOS

• Vinculación genética excluida: la el inicio de su existencia hasta el equiva-


madre gestante no aporta material gené- lente a cuarenta semanas de gestación.
tico sino que tan sólo accede a gestar un La ectogénesis parcial supone el desarro-
embrión implantado, concebido inde- llo de una etapa gestacional fuera del
pendientemente de su aporte genético. seno materno.
Esto nos conduce a la próxima modali-
dad. [9] Así, un útero artificial puede propo-
nerse para la gestación completa o par-
c. Transferencia heteróloga cial, es decir para generar y sostener el
(Heterologous transfer) desarrollo de un embrión o feto durante
su desarrollo embrionario-fetal completo
En esta situación la implantación de o durante una parte del mismo. A su vez,
un embrión en el seno femenino confie- se prevé algún día poder generar el
re la oportunidad de ser madre e iniciar embrión in vitro y luego colocarlo en un
una vinculación íntima con el niño por útero artificial.
nacer, no sólo fuera de la unión matri-
monial, sino que desvinculada genética- Si la remoción del embrión o feto se
mente. Se trata de la implantación de un sugiere como medida preventiva o tera-
embrión abandonado o sobrante de la péutica en claro beneficio de la vida
FIV, posiblemente descongelado, con la misma o salud del pre-nacido o de la
intención de facilitar su nacimiento o madre, entonces su traslado a un útero
supervivencia. Es difícil de clasificar esta artificial puede ser menos problemáti-
implantación, bien sea como adopción co. [11]
prenatal o como rescate de una vida. [10]
e. Tecnologización del alumbramiento
d. Útero artificial (Ectogénesis)
El modelo predominante en la prácti-
Se entiende por ectogénesis completa ca de la obstetricia en los EE. UU. se
la generación y desarrollo de un ser orienta por el uso de toda la tecnología
humano fuera del útero materno desde con el propósito de controlar y dominar

[9] BERKMAN, John, “Gestating the Embryo of Others”, NCBQ, vol. 3, n. 2, Filadelfia (2003), p. 317.
[10] TONTI-FILIPPINI, Nicholas, “The Embryo Rescue Debate”, NCBQ, vol. 3, n. 1, pp. 119-20 y KELLMEYER, Steve, “Embryo
Adoption”, NCBQ, vol. 7, n. 2, Filadelfia (2007), p. 267.
[11] KACZOR, Christopher, “Could Artificial Wombs End the Abortion Debate?”, NCBQ, vol. 5, n. 2, Filadelfia (2005), p.
289.

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VIDA Y ÉTICA

el alumbramiento. Dicha obstetricia se auténtica autonomía del ser persona, su


inspira en la creencia de que la técnica es libertad para elegir la excelencia o los
superior a la naturaleza y que la instru- bienes inherentes a la vida, y la relación
mentación es más confiable que las des- interpersonal a tono con la finalidad del
trezas de las personas, de modo tal que ser persona. Para sustentar mejor el men-
manifiesta una filosofía de la medicina saje positivo que puede anidarse en la
favoreciendo la técnica como sustituta frase introductoria de este artículo, es
de la naturaleza. El alumbramiento natu- preciso ensayar una segunda lectura ins-
ral y normativo, en cuanto esencialmen- pirada en una Antropología y Bioética
te logrado en el proceso fisiológico personalistas, enraizada en el orden
saludable, queda opacado por un evento natural objetivo e inteligible.
quirúrgico y visto como una patología
sujeta a la terapia. Es decir, la modalidad
obstétrica tecnológico-científica no afir- III. BREVE INTERPRETACIÓN
ma el embarazo-maternidad como una ANTROPOLÓGICA Y ÉTICA
experiencia personal de dimensiones CORRESPONDIENTE AL ORDEN
existenciales profundas y perdurables NATURAL, DESTACANDO UNA VISIÓN
para el matrimonio y la familia en gene- ORGÁNICA DE LA MATERNIDAD
ral, y para la madre en especial. [12] Y LA FAMILIA

Resumen Respuestas a las versiones de embarazo


desafiantes de la maternidad y la familia
El contraceptivo, el aborto, la fertili-
zación in vitro y las modalidades repro- Se recuerda la frase introductoria de
ductivas que esta última facilita, no este artículo: “La mujer contemporánea
promueven la salud ni sanan el cuerpo de quiere ser madre, pero con libertad;
la madre, sino que impiden, interrumpen quiere tener hijos, pero con dignidad;
o reemplazan, con patrones de diseño, el quiere construir un futuro, pero con
proceso natural de la fertilidad y la ges- amor; quiere tener un compañero, pero
tación para satisfacer deseos individua- con igualdad; quiere vivir como esposa
listas ajenos a la maternidad, vinculada y ama de casa y a la vez ejercer un tra-
al compromiso nupcial exclusivo. Estas bajo profesional, pero siempre como
intervenciones colocan en peligro la persona”.

[12] SMITH-BARTEL, Sarah, “Welcoming the Child at Birth”, NCBQ, vol. 6, n. 2, Filadelfia (2006), p. 205 y KELLMEYER,
Steve, “Embryo Adoption”, NCBQ, vol. 7, n. 2, Filadelfia (2007), p. 267.

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Problemas y tendencias culturales contemporáneas: el rechazo de la maternidad y la familia / ARTÍCULOS

Persona en sentido ontológico la modalidad femenina y la masculina se


presenta como entrega mutua, total y
Sustentada en una Antropología per- exclusiva de singular intimidad en cuan-
sonalista, la visión orgánica se regula por to que cada uno es sujeto y objeto de
el respeto a la dignidad, integridad y deseo y en generosa apertura a la vida
trascendencia inherentes al ser persona. nueva. La intensidad de los impulsos físi-
En ese mismo contexto, la corporeidad es cos y la energía psíquica queda integrada
la modalidad visible de lo espiritual o de en el amor de benevolencia hacia la per-
las realidades de orden trascendental en sona del amado, y no se acentúan ni se
la persona, en cuanto fuente de unidad y idolatran, porque si no, tarde o tempra-
significado para lo psíquico, lo físico y lo no, se degenerarían y banalizarían en la
espiritual, en clara superación del dualis- vida conyugal. Es decir, la condición pre-
mo alma/cuerpo; del mismo modo tienen via para integrar la sexualidad en el con-
lugar reducciones de lo espiritual a lo junto de la propia personalidad es el
material, así como de lo material a lo amoroso interés por el bien integral de la
espiritual. En virtud del sentido ontológi- otra persona. Amor es poder decir tú, y
co de persona, la prioridad atribuida al seguidamente un sí al ser de la persona
anhelo de vivir “siempre como persona” amada.
cuenta con una justificación universal y
objetivamente válida. La visión orgánica muestra que el
impulso sexual cuenta con un origen y
Amor matrimonial e igualdad una finalidad trascendental en el orden
espiritual del amor, como comunión
Según el personalismo orgánico, la entre la totalidad de ser de la persona
corporeidad sexuada es un don nupcial y como relación, diálogo y complementa-
sacramental, de persona a persona, para riedad del tú y yo en comunión, o como
manifestar la más íntima vinculación un “nosotros”, y no ha de ser reducido a
entre el amor y la vida. la mera atracción condicionada por atri-
butos físicos y psíquicos, de acuerdo a la
La sexualidad femenina como la mas- visión freudiana. Así, la sexualidad no
culina se presentan como modos de ser oblativa sino posesiva y egoísta traiciona
persona en reciprocidad y condición a la su expresividad de amor personal y deja
comunión interpersonal. Se trata de una de ser humana, se hace dañina, desfigu-
sexualidad centrada en el valor de la per- ra a quien dice amar al amado pues dis-
sona abierta del cónyuge, y nunca una torsiona la vinculación que debe
experiencia de gratificación individual constituir un nosotros. En este mismo
posesiva del otro. El acto conyugal entre contexto, la castidad, lejos de ser un

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VIDA Y ÉTICA

impedimento a la libertad en el amar, se do junto al otro y en cierto sentido son


manifiesta como la condición para un medio uno para el otro”. [13]
amor inspirado en la afirmación del bien
del ser amado, garantizando a la ternura Acentúa una voluntad como instru-
su prioridad sobre la satisfacción del mento de la inteligencia instrumental,
deseo egocéntrico del dominio y la pose- sin reconocer verdad o bien objetivo
sión. Para el varón, la castidad supone un como norma dominio sobre el cuerpo,
logro de su virilidad, mientras que para la interpretado como mero proceso biológi-
mujer significa sentirse afirmada como co. Expresivo de un dualismo de mente
persona. Se trata, en todo caso, de una versus naturaleza, una voluntad arrogan-
igualdad en dignidad y una diversidad te ejerce su libertad creativa y prioritaria
complementaria en la mutua responsabi- sobre una corporeidad sexuada bajo su
lidad en la entrega amorosa y fecunda. control y manipulación.

Dignidad y libertad en la maternidad Se sugiere que la fecundidad o la


responsable y generosa. Respuestas capacidad procreativa son eventos bioló-
a los desafíos: embarazo-maternidad- gicos simplemente subpersonales caren-
familia tes de significado, propios y receptivos
de una asignación voluntaria que les
Ante la mentalidad contraceptiva: confiere bondad instrumental. En este
Se propone desenmascarar la mentalidad caso se trata de un bien para la persona
contraceptiva y tecnológico-científica y no un bien de la persona, inherente a
que, sustentadas en el posmodernismo, su totalidad ontológica. Es un aspecto
han socavado el sentido y la continuidad procreativo de la sexualidad, se interpre-
ontológica del amor nupcial-embarazo- ta como un bien para la persona en el
maternidad-familia. sentido y hasta el grado que la persona le
otorga valor, finalidad, ya que en sí la
En su obra Amor y Responsabilidad procreación es sólo una posibilidad bio-
Karol Wojtyla nos dice: “El acto conyugal lógica que el ser humano comparte con
significa no sólo amor, sino fecundidad los animales. Se reconoce tan sólo la
potencial. No puede entonces ser despro- dimensión unitiva de la sexualidad como
visto de su pleno y adecuado sentido por exclusiva del ser persona y como expre-
medios artificiales. Un aspecto es activa- sión de la intimidad interpersonal.

[13] WOJTYLA, Karol, Amor y Responsabilidad, Madrid, Ed. Palabra, 1978.

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Problemas y tendencias culturales contemporáneas: el rechazo de la maternidad y la familia / ARTÍCULOS

Evidenciamos una dualidad entre lo uni- lenguaje nupcial del cuerpo sexuado.
tivo-personal y lo procreativo-biológico, Además, es ampliamente admitido que
reflejo del dualismo clásico de alma y los recursos contraceptivos facilitan
cuerpo. tanto la sexualidad prematrimonial como
la extramatrimonial, siendo en ambos
En este contexto, la maternidad se casos una mentira del acto sexual como
somete a un criterio subjetivo dominan- supuesta afirmación íntima de la plena
te del embarazo como proceso biológico, dignidad de la persona, como don y
es decir, la mujer no reconoce el valor receptividad incondicional del amor; es
inherente a su corporeidad femenina, decir se expresa verbalmente el amor sin
que tan sólo cuenta como valor instru- medida, pero el cuerpo lo contradice en
mental dependiente de su voluntad. Así su sometimiento al contraceptivo.
las cosas, si surge un embarazo no pro-
gramado, éste es un accidente en su pro- En cambio, la regulación responsable
yecto vital, un riesgo de su intimidad y generosa de la fecundidad natural en y
conyugal o una contradicción a su mani- para la familia, se presenta como el antí-
pulación personal de la capacidad pro- doto a la mentalidad contraceptiva.
creativa. Según la dimensión trascendental inhe-
rente a la visión orgánica que acompaña
El contraceptivo hiere la imagen y la regulación natural, el ser humano des-
semejanza de Dios, que es la persona, cubre quién es por medio del auténtico
pues no sólo contradice la verdad objeti- regalo de sí en la totalidad de su ser a
va del valor existencial del impulso otra persona, quien lo recibe en comple-
sexual, sino que coloca el matrimonio en mento y reciprocidad. Este don y recepti-
una posición de rechazo ante la inter- vidad mutua establece una comunión
vención divina creadora; margina a los interpersonal orientada a un bien
esposos de su rol de responsabilidad ante común: el bien de participar en la obra
una vida nueva y los objetiva o cosifica creadora al contribuir a la vida personal
en su intimidad, menoscabando la comu- nueva. Se reafirma lo dicho: el cuerpo no
nión esponsal como núcleo de la familia. es un mero instrumento de la persona o
un proceso biológico bajo su manipula-
La mentalidad tecnológico-científica ción según deseo subjetivo, sino la
y utilitarista del uso del contraceptivo expresión de la verdad y el bien del ser en
sugiere una objetivación de la mujer, sí de persona en cuanto amor y vida.
facilita una actividad sexual, en carencia Representa un estilo de vida respetuosa
del amor benevolente y la apertura afir- de la persona como espíritu encarnado y
mativa de la vida, con lo que traiciona el sexuado, reverente ante los ciclos feme-

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VIDA Y ÉTICA

ninos de la fertilidad, como inspiradora La vida iniciada -no generada- en el


de la castidad matrimonial. laboratorio, está gobernada por la lógica
de la manufactura, a saber: eficiencia,
Ante el aborto: uno no debe extraer control de calidad -tal como lo expresa el
el niño por nacer del seno de la madre, lenguaje que designa la maternidad
aun si el embarazo es resultado de un como “producir un bebé perfecto” (en
rapto o violación en contra de la volun- inglés deliver por alumbramiento, labor
tad de la mujer. Esto es así porque la por embarazo). [14]
mujer no es sólo el soporte vital o un
recurso de supervivencia. En la mujer, Pensamos, a la luz de una lectura per-
como madre, se ha obrado un cambio sonalista, que la fecundidad no se mide por
ontológico en cuanto que es ahora la eficacia, sino por la persona. La actividad
madre de una vida nueva. Su vida está sexual debe afirmarse, ante la reproduc-
entrelazada con la del hijo para formar ción técnica, como donación y apertura a
una unidad nueva y única. Este punto la vida, que se expansiona según su diná-
será desarrollado al final de este trabajo. mica propia. La vida se expande y su fruto
no se advierte como un simple producto o
Ante la sustitución del procrear por consecuencia biológica, sino como verda-
el reproducir: la integridad del acto con- dero fruto directo del amor.
yugal de intimidad y fecundidad contras-
ta con la reproducción técnicamente Separar los componentes que integran
sustituida. Evidentemente las interven- la maternidad natural -acto marital, ges-
ciones técnicas como recursos para salvar tación y alumbramiento- incurre en vio-
la vida o asistir en la salud del bebé por lentar los bienes del matrimonio como
nacer por lo general se justifican. En vinculación interpersonal profunda, abar-
cambio, la tecnología usada de modo cadora y permanente. Cabe recordar
arbitrario para satisfacer preferencias cómo Donum vitae dice que la vida es un
individuales, ajenas a las normas de la don que debe ser facilitado de manera tal
naturaleza humana y de la integridad de que respete la dignidad del sujeto que la
la persona como espíritu encarnado y recibe (bebé) como los sujetos que la
sexuado sería problemática. generan o transmiten (los padres). [15]

[14] MAY, William, “Catholic Bioethics…”, op. cit.


[15] Cfr. CONGREGACIÓN PARA LA DOCTRINA DE LA FE, Instrucción “Donum vitae”, Ciudad del Vaticano, 1987, I, 6.

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Problemas y tendencias culturales contemporáneas: el rechazo de la maternidad y la familia / ARTÍCULOS

De nuevo partimos de nuestra afir- único, como expresión de su amor obla-


mación antropológica en términos del tivo y exclusivo.
ser persona como espíritu-encarnado-
sexuado en apertura y receptividad de En cambio, hacer vida sugiere un acto
otro ser persona. Se derivan de este fun- externo de acuerdo a la calidad de pro-
damento algunas normas directrices: ducción técnicamente programada
según la lógica de manufactura, para
• Conservar la unidad intrínseca al producir un bebé de diseño calculado
acto marital en su carácter de afecto como evento biológico. Ésta no logra
amoroso y fecundidad, es decir, mante- disipar la sospecha de que la persona del
ner el acto conyugal o marital en su hijo pueda ser considerada como objeto,
carácter propio como expresión de uni- como cosa; de que el encuentro amoroso
dad amorosa y trascendencia del amor personal entre los cónyuges sea sometido
hacia la vida nueva. El acto marital a la mediación técnica éticamente cues-
muestra, en sentido de donación y tionable de la “fecundidad asistida”. En
comunión, que la corporeidad-sexuada le este caso, la donación y el encuentro de
facilita al espíritu su donación plena. Se cuerpos y espíritus se sustituyen por
trata de conservar la integridad del pro- novedades técnicas deshumanizantes en
crear como generar vida a tono con la el drama de quienes desean un hijo,
dignidad de las personas afectadas como si fuera un derecho de ejercer a
(padre/madre/hijo(a)). El generar vida toda costa. La reproducción artificial, a
humana o el engendrar una persona diferencia de la procreación natural, des-
debe guardar continuidad con el acto humaniza la vida y no representa un ver-
marital en su plena integridad, o como dadero progreso en la configuración de
expresión fiel del lenguaje de la corpo- las relaciones conyugales de filiación y
reidad en cuanto don de amor y don de fraternidad.
vida simultáneos. Contrastemos el
“generar” vida con el “hacer” vida de los • Respetar el “lenguaje”, carácter pro-
medios técnicos (inseminación artificial, pio de la corporeidad en cuanto don
fecundación in vitro, madre huésped). nupcial. La corporeidad, en su sentido
personalista, se experimenta no como
Engendrar supone un acto nupcial mero instrumento de un espíritu, o como
íntimo, una vinculación plenamente contexto de operación espiritual o aún
personal con el hecho de vivir de acuer- menos como cosa de propiedad a ser
do con el lenguaje propio de la corpo- manipulada en su neutralidad moral. La
reidad correspondiente, para colaborar corporeidad es integral al ser en sí de la
con Dios en la vida de un ser nuevo y persona, es una dimensión de cada posi-

Instituto de Bioética / UCA 173


VIDA Y ÉTICA

bilidad humana, reviste dignidad y refle- mera productividad de ovocitos, sino que
ja el carácter de las decisiones y actitu- es entrega nupcial, la cual tan sólo es
des interiores. propia en la comunión esponsal y de la
que no puede disponerse independiente-
Ante la madre-huésped: el problema mente del vínculo con su esposo. La
con la madre-huésped o sustitutiva se transferencia heteróloga del embrión
centra en la orientación de la figura abandonado y expuesto a los estragos de
maternal y su decisión de entregarse en la congelación, puede, a lo sumo, ser un
servicio a la pareja que solicita la FIV. acto de intención caritativa, pero en sí
Para ella, el bebé por nacer es como un desubicado o errado al poner en peligro
instrumento por medio del cual la mujer la dignidad de la unidad matrimonial y
se regala a la pareja emulando la entrega de la maternidad inherente al vínculo
amorosa esponsal que corresponde -por esponsal. El acto conyugal, por defini-
orden natural objetivo- al matrimonio. ción, y como fuente de una vida nueva o
La maternidad-huésped vulnera la inte- raíz de la maternidad, cuenta con un sig-
gridad de la familia y el vínculo matri- nificado esencial, ausente en la persona
monial al separar los elementos físicos, individual, pero presente en una mujer-
psíquicos y morales que constituyen la madre sólo en comunión con el esposo.
maternidad. Recordemos que la concep- La maternidad no es decisión indepen-
ción no sólo genera una vida nueva, sino diente de la expresión de amor íntimo
la modalidad ontológica de ser padres. entre los esposos.

Según nos recuerda Donum vitae: “La El útero no es en sí mismo un mero


maternidad sustitutiva representa una órgano reproductivo, sino más bien el
falta objetiva contra las obligaciones del órgano que le permite a la mujer, como
amor materno, de la fidelidad conyugal y madre, abrazar por primera vez a su hijo
de la maternidad responsable; ofende la como bebé embrionario, que existe pre-
dignidad y el derecho del hijo a ser con- via a la implantación en el endometrio.
cebido, gestado, traído al mundo (...) por
los propios padres”. [16] El bebé embrionario tiene el derecho
a regalarse a su madre desde el inicio de
Ante la transferencia heteróloga: la su existencia. Tiene también el derecho a
capacidad generativa de una mujer no es recibir acogimiento oblativo de parte de

[16] Ibíd., II, A, 3.

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Problemas y tendencias culturales contemporáneas: el rechazo de la maternidad y la familia / ARTÍCULOS

su madre. A su vez, la madre cuenta con El embarazo es en sí la unión entre la


el derecho de hacerse plenamente regalo madre y el hijo por nacer o bebé embrio-
a su hijo y el deber de reconocer la dig- nario. El bebé es esencialmente suyo, no
nidad inherente de su bebé, precisamen- simplemente colocado en ella, sino vin-
te en la donación de sí misma a éste, pero culado vitalmente a la mujer en cuanto
en-por-para su esposo. madre. Ella es, literalmente, el hogar para
el hijo, pero no en el sentido de mero
Ante la medicalización del alumbra- alojamiento sino hogar como dependen-
miento: en la Carta Encíclica Evangelium cia dinámica e interacción, en cuanto
vitae, Juan Pablo II advierte de la ten- que comparten intimidad biológica y
dencia contemporánea ante la vida: “Se compenetración espiritual. De hecho, el
preocupa sólo del ‘hacer’ y, recurriendo a embrión asume un cierto grado de con-
cualquier forma de tecnología, se afana trol del sistema endocrinológico de la
por programar, controlar y dominar el madre. El embarazo natural comprende
nacimiento y la muerte. Éstas, de expe- vinculación genética, gestacional y la
riencias originarias que requieren ser expectativa de continuidad psicosocial y
‘vividas’, pasan a ser cosas que simple- moral de por vida, tanto de la madre
mente se pretenden ‘poseer’ o ‘rechazar’. como del hijo.
[17] La medicalización del alumbramien-
to pierde de vista la realidad de las per- La madre, en especial, experimenta en
sonas en el núcleo mismo del el embarazo un cambio ontológico, pues
alumbramiento: el bebé, la madre, el afecta su ser en sí; no experimenta un
padre y la comunidad familiar a la cual el proceso accidental o fácilmente despren-
bebé llega. dido de su intimidad personal. En vista de
su unidad psicosomática personal y su
vínculo con el hijo, la mujer se transfigu-
IV. EMBARAZO-MATERNIDAD-FAMILIA: ra en mujer con niño lo cual es muy
UNIDAD ORGÁNICA DE MATERNIDAD diferente a tener un bebé en los brazos,
GENÉTICA, GESTANTE Y PSICOSOCIAL ya que todos sus sistemas corpóreos se
orientan y ajustan a la presencia del bebé
Se reiteran los puntos recién plantea- embrionario o hijo por nacer. Objetiva y
dos, centrando la atención en la mater- subjetivamente, la mujer es, como madre,
nidad en el contexto de la familia como una transfiguración de su ser a nivel de
“escuela del más rico humanismo”: la modalidad existencial, cónsona con la

[17] JUAN PABLO II, Carta Encíclica Evangelium vitae, Ciudad del Vaticano, 1995, n. 22.

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VIDA Y ÉTICA

dignidad inherente a su ser persona santidad de la familia dependen de la


femenina. Semejante vinculación no formación de la conciencia y de los valo-
tiene parangón y es una unión única. res asimilados durante todo el proceso
formativo de los mismos padres. Los
En el contexto matrimonial, la unión valores morales vividos en familia se
materno-filial no es un evento separado, transmiten más fácilmente a los hijos.
sino una extensión y encarnación del Entre estos valores morales hay que des-
amor esponsal, es decir, la mujer se tacar el respeto a la vida desde el seno
transforma en madre en cuanto don de sí materno y, en general, el respeto a la
misma a nivel físico, emocional, cogniti- persona de cualquier edad y condición.
vo y espiritual, en su vínculo esponsal Se debe ayudar a los jóvenes a conocer,
extendido al hijo. El hijo surge por obra y apreciar y respetar estos valores funda-
gracia de Dios, suscitada ésta por la cola- mentales de la existencia”. [18]
boración amorosa de los esposos, quienes
quedan enriquecidos y jamás desplaza-
dos por la intervención divina. El hijo es V. CONCLUSIÓN
así el símbolo viviente de la unión espon-
sal de los progenitores quienes, en su A modo de conclusión, se sugieren
amor, transmiten la vida según una com- algunos puntos a considerar, en el inten-
posición genética de mutua complemen- to de renovar a la familia desde su raíz
tariedad y a la vez única en su natural y en apertura al plan divino de
configuración. El hijo pertenece y expre- especial pertinencia en el momento
sa a sus padres. actual. [19]

En relación a la familia, la maternidad 1. La familia está sometida a un cam-


es por excelencia la custodia de la vida y bio constante, desde la sociedad y desde
el punto de balance para el encuentro la evolución de sus mismos miembros.
interpersonal. La formación en las virtu- Esta evolución requiere de todos una
des es una tarea primordial de la familia. renovación acerca de muchas ideas y
comportamientos, y una esmerada acti-
“La plena realización de la vida con- tud para la comprensión y el diálogo
yugal y, en consecuencia, la estabilidad y (piénsese en la familia piramidal y

[18] SAGRADA CONGREGACIÓN PARA LA EDUCACIÓN CATÓLICA, Orientaciones educativas sobre el amor humano,
Pautas de educación sexual, n. 52.
[19] Cfr. LUGO, Elena, Conferencia “Visión orgánica de la familia”, en: Séptima Jornada de Bioética, Nuevo Schoënstatt,
Argentina, 2005.

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Problemas y tendencias culturales contemporáneas: el rechazo de la maternidad y la familia / ARTÍCULOS

patriarcal / conyugal nuclear, y su reno- cia, autoconciencia, reflexión, libertad,


vación desde lo interior). anhelos de amor y de trascendencia
hacia lo noble y bello). La labor de los
2. La familia debe prepararse para padres apunta a la realización de estas
contrarrestar ciertos valores impuestos potencialidades en el hijo. El niño puede
por una sociedad materialista y de con- hablar, preguntar y tiene derecho, a
sumo. Su ley no puede ser la eficacia, el medida que va creciendo, a discutir,
utilitarismo ni el lograr un puesto respe- exponer razones y exigir que los padres
table en esta sociedad. Ha de demostrar admitan como válido lo que propone. Es
dentro de la sociedad una preferencia en la familia donde el niño tiene que
por los más débiles y desgraciados, y sentirse reconocido, estimado y apoyado.
estar al lado de los más marginados. En la familia aprende a convivir en el
diálogo y en el respeto; es donde debe
3. La familia es la primera responsable tener iniciativa, creatividad, responsabili-
de que la desigualdad desaparezca de la dad; donde no debe abrigar complejos de
sociedad. Pero la desigualdad no la com- timidez o temor ante el mundo y ante el
bate quien no ama. En la actualidad se sexo contrario, ni sentimientos de servi-
evidencian familias que no aman porque lismo, resentimiento o afán de dominar
en ellas hay muchas señales de opresión sobre otros o acentuar las posesiones
y dominio. La igualdad es fruto del amor; materiales en lugar de aspirar a la inte-
y fruto de la igualdad es la confianza y el gridad de una vida virtuosa y a un carác-
diálogo respetuoso de las diferencias ter íntegro.
naturales.
6. Esta nueva educación ha de susten-
4. La familia tiene como meta hacer tarse en el respeto a la persona, en espe-
de sus miembros personas libres: poten- cial al niño, y también en la aceptación
ciar a la persona, es decir personalizar y de las tensiones intergeneracionales e
liberar. Para lograrlo es preciso ser plena- interpersonales como fuente de creci-
mente personas y cultivar la libertad miento en libertad y responsabilidad. La
interior como condición para la exterior. autoridad paterna es un medio, lícito
Sólo el amor vivido en plenitud en el únicamente en cuanto fomenta la vida y
seno de la familia capacita a sus inte- el desarrollo personal del niño. La autori-
grantes a ser instrumentos de personali- dad de los padres se debe anclar en la
zación y liberación social. confianza mutua y en el sostenimiento
de ideales que ambos, tanto el padre
5. El niño lleva dentro de sí todo lo como la madre, reconocen como metas
que puede tener una persona (concien- educativas. Y esto, en atención a la origi-

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VIDA Y ÉTICA

nalidad de cada niño como persona ninguna sociedad. Pero el desafío actual
única digna de respeto y amor desintere- es cómo vincular a las funciones esencia-
sado. les de la familia, las diversas formas y
comportamientos de convivencia fami-
Más allá de que constituyan verdade- liar, dispares y alejados de la definición
ros desafíos, la pérdida de consistencia de la familia conyugal y nuclear.
del carácter y las dimensiones institucio- Pensamos que la familia es duradera y
nales de la familia tradicional (extensa), frágil al mismo tiempo. La institución
el crecimiento del individualismo y la familiar tiene asegurada su perennidad,
democratización de la relación varón y si bien cambiante en el tiempo y en el
mujer, la ampliación del espacio funcio- espacio, porque tiene encomendadas
nal de la mujer en la sociedad y en espe- funciones imprescindibles para la realiza-
cial en el campo profesional / laboral, ción humana.
presentan elementos positivos para dis-
cernir y desarrollar. La familia aparece no ¿Por qué es preciso creer en la familia
sólo necesaria para la estabilidad emo- y en la maternidad como su corazón?
cional de los individuos sino que se Porque Dios cree firmemente en la fami-
redescubre su importancia para el arrai- lia, pues creó al ser humano a su imagen
go de sentimientos de pertenencia, afi- y semejanza, varón y mujer. Dios quiso
liación y solidaridad, necesarios para la poner en el centro de su proyecto la rea-
cohesión social. Incluso entre las genera- lidad del amor entre hombre y mujer, y se
ciones más jóvenes parece manifestarse presenta como Trinidad para alentar la
un mayor aprecio del matrimonio y de la comunión entre personas. El hecho de
familia, así como una defensa de los que Dios haya puesto a la familia como
valores asociados a la convivencia fami- fundamento de la convivencia humana y
liar estable, la fidelidad y la estabilidad paradigma de la vida eclesial, exige de
familiar. parte de todos una respuesta decidida y
convencida tal como nos sugiere la
La constatación de su vitalidad e Familiaris consortio: “¡Familia, sé lo que
importancia actual sólo manifiesta que eres!”, [20] y como Juan Pablo II luego
la familia en su sentido más amplio añadió: “¡Familia, cree en lo que eres!”.
-como forma original de organizar la Creemos en ella por ser esencial para la
afectividad, la procreación y los lazos de formación y realización de la persona en
parentesco- no podría estar ausente de su dignidad como valor jamás negocia-

[20] JUAN PABLO II, Exhortación apostólica “Familiaris consortio”, Ciudad del Vaticano, 1981, n. 17.

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ble, para su integridad de espíritu encar- Cada uno de nosotros construye el


nado y para su trascendencia anhelante futuro sin dogmatismos ni fatalismos
de verdad, bien y belleza sin límites. [21] ante los desafíos que plantea la crisis de
la familia, pues dogmatismo y fatalismo
Creemos en la familia que se abre al son señales de desesperación y contrarios
Evangelio del Amor y la Vida. El a la esperanza que nos anima, cuando la
Magisterio de la Iglesia Católica insiste Gracia sustenta nuestra naturaleza.
en la unidad esencial entre sexualidad y Creemos en la familia cuando aceptamos
procreación, aun cuando la tecnociencia el auténtico sentido de la autoridad
separe el amor, el acto conyugal y la parental, tanto en la familia en sí como
prole. Su insistencia se funda en la inter- en las instituciones formadoras de la per-
pretación de lo natural en apertura al sona; cuando educamos a los ciudadanos
deseo de un Dios Persona, Creador y del futuro les comunicamos los valores
Providente. La doctrina de la Iglesia es la humanos que son fundamentales para la
custodia del sentido último del ser perso- sociedad y la Nación; cuando introduci-
na; de ahí que ella se presente con carác- mos a los jóvenes y a los hijos en la socie-
ter de obligatoriedad en un ámbito tan dad; cuando reconocemos que la familia
delicadamente privado y sujeto a la desempeña una función esencial: ser
libertad personal como es la relación patrimonio común de la Humanidad.
esponsal. Sería arriesgado pensar que se
pueda dejar de lado la riqueza de la fe, Como decía el Concilio Vaticano II, la
de la oración, de los medios de una eco- familia constituye “la célula primera y
nomía sacramental en cuanto respuestas vital de la sociedad”. [22] Así pues, la
a los desafíos examinados en el presente familia representa la primera comunidad
congreso, para buscar en su lugar solu- humana y humaniza la sociedad.
ciones de tipo más bien técnico que,
desde luego, no se desprecian pero nece- La vida familiar, en cuanto verdadera
sitan solidez antropológica y ética. Es experiencia de comunión y participación,
menester resistir la tentación de sustituir representa un aporte esencial a la socie-
al director espiritual o al confesor por el dad. Así las cosas, la familia tiene, más
psicólogo, y de prestar poca importancia que otras asociaciones, un vínculo espe-
a un diálogo de reconciliación sostenido cialísimo con la sociedad, la Nación y el
por la oración y nutrido por la fe. Estado, porque es una institución “natu-

[21] Cfr. LUGO, Elena, Conferencia “Visión orgánica…”, op. cit.


[22] Decreto Apostolicam actuositatem, sobre el apostolado de los laicos, Ciudad del Vaticano, 1965, n. 11.

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VIDA Y ÉTICA

ral” de personas, célula básica de la La familia, como comunidad de amor


sociedad, custodia de la vida y de la y vida, es una sociedad soberana, lo cual
Humanidad. nos lleva a sostener los “derechos” de la
familia. La institución matrimonial es
Juan Pablo II nos dice en su obra La fundada por la pareja y se justifica por el
familia como Communio personarum: perfeccionamiento mutuo. Perfeccio-
“La familia es el lugar en el que todo namiento que no es posible vivir sin la
hombre se revela en su unicidad e irrepe- afirmación de los derechos de la pareja:
tibilidad. La familia es, y debe ser, el derechos a vivir en común, en diálogo, en
peculiar ordenamiento de fuerzas en el compromiso con la vida, en la lucha y
que todo hombre es importante y nece- entrega a los demás y a la sociedad. No
sario por el simple hecho de que es y en es, pues, una entidad al servicio de la
virtud de quien es, el ordenamiento más especie, de la raza, de un grupo étnico en
íntimamente humano, edificado sobre el particular, ni inclusive de la Nación en
valor de la persona y orientado en todos cuanto contribuyente anónimo, ni tam-
sus aspectos hacia ese valor”. [23] poco en virtud de intereses económicos.

[23] Cfr. JUAN PABLO II, Carta a las familias Gratissimam sane, n. 6.

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