es un relajante muscular que actúa bloqueando los impulsos nerviosos o sensaciones
de dolor que el organismo envía al cerebro, es decir, es medicamento que desacelera la actividad del sistema nervioso para permitir que el cuerpo se relaje. Generalmente, el metocarbamol se usa en combinación con descanso y terapia física para relajar los músculos y aliviar dolor o malestar causados por torceduras, esguinces y lesiones musculares. El metocarbamol se encuentra en presentación de tabletas orales; generalmente, se sugiere a adultos y niños mayores de 12 años. Tomarlo cuatro veces al día al inicio del tratamiento y luego puede usarse entre 3 a 6 veces al día, según el criterio médico. Ingerir con agua u otro líquido no alcohólico.
EFECTOS SECUNDARIOS DEL METOCARBAMOL
El metocarbamol puede causar reacciones desagradables como:
Somnolencia (sueño).
Mareo y náuseas.
Visión borrosa.
Fiebre.
Trastornos gastrointestinales.
Coloración de la orina (verde, azul o negro).
Manifestaciones alérgicas de la piel (sarpullido severo y/o picazón).