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Los cultivos transgénicos en el mundo

Isabel Bermejo
Ecologistas en Acción

Los datos más difundidos sobre cultivos transgénicos son los


aportados por los informes anuales del Servicio Internacional para la
Adquisición de Aplicaciones Agrobiotecnológicas, (ISAAA), un
organismo privado creado por instituciones y empresas para extender
el uso de la manipulación genética en países de desarrollo y la
aceptación pública de esta tecnología. El ISAAA está apoyado
directamente por las grandes transnacionales biotecnológicas, como
Monsanto, Syngenta Bayer y Dupont, y uno de sus principales
objetivos es la transferencia de aplicaciones biotecnológicas del
sector privado del Norte a las instituciones del Sur. Cuenta con
programas de transferencia tecnológica en varios países africanos
(Sudáfrica, Tanzania y Uganda) y en Asia (Indonesia, Malasia,
Filipinas, Tailanda y Vietnam) y ha iniciado proyectos en América
Latina (Argentina, Brasil, Costa Rica y Méjico). Ofrece becas para
investigadores de instituciones públicas, y cuenta con apoyo del
Banco Mundial. Las cifras del ISAAA han sido cuestionadas por su
sesgo pro-transgénico, tanto por la interpretación de los datos
recogidos, como por lo que omite.

Según el informe del ISAAA correspondiente a 2003, el cultivo


mundial de transgénicos ha aumentado un 15% con respecto a 2002.
Este aumento supone una superficie de 67,7 millones de hectáreas
repartidas en un total de 18 países, y equivale al 25% de la superficie
global de estos cultivos. Esta superficie, sin embargo, equivale a
menos del 2% del total de las tierras dedicadas a la agricultura en el
mundo.

Las variedades transgénicas se cultivan en sólo 18 países en todo el


mundo, y 6 países producen el 99% del total mundial. Los principales
productores son EEUU (63%), Argentina (21%), Canadá (6%), Brasil
(4%), China (4%) y Sudáfrica (1%).

El 97% de la superficie dedicada a cultivos transgénicos en los países


empobrecidos se concentra en 3 países (Argentina, China y Brasil).

En China, donde en 2003 se registró un preocupante descenso de la


producción de cereal debido en gran medida a la ocupación de suelos
agrícolas por la urbanización, los cultivos GM ocupaban 2,8 millones
de hectáreas, un porcentaje mínimo de una superficie agrícola total
de 126 millones de hectáreas según datos del Ministerio de
Agricultura chino. La práctica totalidad del cultivo transgénico en este
país es algodón, una producción poco importante para el país.
Recientemente, sin embargo, China ha autorizado importaciones de
soja y de colza transgénica procedente de EEUU y Canadá.

En el caso de Argentina, el segundo productor mundial de soja


transgénica, la superficie dedicada a este cultivo en el país se ha
disparado con la introducción de la soja resistente al Roundup de
Monsanto a partir de 1997: de 37.700 hectáreas de soja cultivadas
en 1971 a 11,6 millones de hectáreas. La soja, destinada casi en su
totalidad a la exportación para piensos destinados a la ganadería
intensiva de los países del Norte, está desplazando a los cultivos
tradicionales y a la ganadería extensiva del país. Según datos del
Grupo de Reflexión Rural de Argentina, la implantación de este cultivo
ha expulsado del campo a miles de pequeños campesinos (se habla
de más de 150.000 familias desplazadas), agravando la crisis de
pobreza y de inseguridad alimentaria del país. El aumento del uso del
glifosato, cuyas ventas han aumentado disparatadamente en el país
(de 14 millones de litros en 1997, a 150 millones de litros en 2003,
según datos de W.

Pengue), está afectando al equilibrio natural y la vida microbiana del


suelo, originando problemas de descomposición de la materia
orgánica y amenazando el futuro productivo de muchas regiones.
Monsanto suspendió en enero 2003 la venta de semillas MG del país,
dado que los campesinos guardan y venden "ilegalmente" soja
transgénica de su cosecha, sin pagar los derechos de patente que la
compañía cobra en otros países.

En Brasil los cultivos manipulados genéticamente (MG) no estaban


permitidos hasta el año pasado, pero la soja transgénica había
entrado clandestinamente desde Argentina y otros países, ocupando
una superficie importante (3 millones de hectáreas), sobre todo en
regiones del sur del país. La necesidad de legalizar una situación de
hecho ha sido la excusa del gobierno -sometido a fuertes presiones
por la industria biotecnológica- para la decisión de autorizar el cultivo
de soja transgénica en 2003 (si bien de forma provisional, de
momento hasta 2005). El Estado de Paraná, sin embargo, ha
decretado recientemente una prohibición de la soja transgénica.

En Méjico, donde se cultivaron en 2002 unas 62.000 hectáreas de


algodón Bt y 25.000 hectáreas de soja resistente a herbicidas, sigue
vigente la moratoria al cultivo del maíz transgénico. A raíz del tratado
de libre comercio con Estados Unidos y Canadá, a partir de 1994
empezó a entrar en el país maíz barato, hecho que se supone ha
provocado los casos de contaminación genética de variedades locales
denunciados en 2001. Se calcula que todos los años entran en el país
5 millones de toneladas de maíz a bajo precio destinado a piensos,
procedente en su mayor parte (un 70%) de EEUU. Estas
importaciones están llevando a la ruina a las pequeñas explotaciones
campesinas (1,3 millones de agricultores arruinados, según el
Carnegie Endowment Report), y desplazando al 60% de pequeños
productores que producían maíz para consumo familiar. La
continuidad de la moratoria al cultivo de maíz transgénico está siendo
estudiada actualmente por el gobierno, siendo previsible su
aprobación, dado que varios de los informes encargados a expertos
concluían que México no necesita el maíz transgénico, que además
tiene graves riesgos para la biodiversidad y para la salud de una
población cuya alimentación básica depende en gran medida de este
cereal. El propio UNEP ha recomendado una moratoria al cultivo de
maíz transgénico en Centroamérica (Honduras es el único país en el
que actualmente se siembra maíz MG en la región).

En Colombia se ha cultivado algodón Bt por segundo año consecutivo.


Este cultivo se introdujo a nivel comercial ilegalmente en la región del
Caribe en 2002, sin haberse realizado las evaluaciones de
bioseguridad preceptivas y tras toda una serie de irregularidades,
como la participación de Monsanto en el órgano que debía realizar la
evaluación de sus propios productos. Sin embargo, en octubre 2003
un Tribunal Administrativo dio la razón a una Acción Popular
presentanta contra Monsanto, ordenando suspender la autorización
dada por el Ministerio para la importación y siembra del algodón
transgénico.

En abril 2004 Venezuela ha decretado también una prohibición a la


introducción de cultivos transgénicos en el país.

En la India se autorizó el cultivo de algodón Bt en 2002, cultivándose


en el sur del país cerca de 40.000 hectáreas. En 2003-2004 la
superficie de algodón Bt se incrementó a 92.000 hectáreas, una
superficie pequeña si se compara con el total de 9 millones de
hectáreas de algodón cultivado en todo el país. Los resultados del
algodón Bt han sido muy deficientes, sin embargo, incrementándose
los gastos de los agricultores debido al elevado precio de las semillas
y la disminución en los rendimientos, hasta un 35% en algunas
regiones.

En Indonesia se han autorizado también variedades de algodón


insecticida Bt a partir de 1999. Sin embargo, tras dos años de quejas
por parte de los agricultores sobre rendimientos muy bajos y costes
elevados, y tras un escándalo de soborno a un funcionario que ha
salpicado a la compañía, a partir de Diciembre 2002 Monsanto se
retiró de la venta de semillas en el país.

En la Unión Europea, España ha sido el país pionero en la siembra de


variedades transgénicas, incorporando a la lista de variedades
vegetales 2 variedades de maíz Bt en 1998, 5 variedades en 2003 y
otras 7 en 2004. Los datos del ISAAA para el 2003 recogen un
aumento considerable de la superficie sembrada en España, que ha
pasado de 25.000 hectáreas en 2002 a 32.000 hectáreas durante el
2003, lo que supone un incremento del 33%. Esta superficie apenas
representa el 7% del total nacional, y se distribuye de la siguiente
forma: Cataluña 13%, Aragón 11%, Castilla la Mancha 9%, Madrid
9%, Navarra 4%, Andalucía 3% y Extremadura 2%. Según los datos
facilitados por el Ministerio el aumento de la superficie de maíz Bt
sembrada en España corresponde fundamentalmente a las variedades
portadores del evento Bt 176, retirado del mercado en EEUU por sus
riesgos de aparición de resistencia y por el riesgo de que su elevada
toxicidad afecte a especies de insectos protegidas o beneficiosas.

En Alemania se autorizó la siembra de una pequeña superficie de


maíz Bt el año pasado, que se ha ampliado para el 2004. En el resto
de los países de la UE los cultivos se limitan a parcelas o fincas
experimentales, o a zonas muy restringidas. La retirada de su
solicitud de autorización de un maíz transgénico para cultivo
comercial en el Reino Unido por parte de la empresa Bayer, supone
que en este país no se sembrarán este tipo de cultivos hasta al
menos 2008.

En algunos países del Este se están introduciendo también los


cultivos transgénicos, en algunos casos de forma ilegal o sin
autorización y evaluación previa, y con enormes presiones para su
legalización. Rumania cultivaba en 2003 soja transgénica (170.000
acres) y Bulgaria tiene también algunos cultivos transgénicos. En
Croacia se ha detectado contaminación de los alimentos por OMG a
gran escala, sin el obligado etiquetado. Algunas regiones del Este, por
el contrario, quieren declararse territorio libre de transgénicos. (Ver
noticias en Genet: Red Europea de Regiones Libres de Transgénicos).

En cuanto al tipo de cultivo, aunque las empresas biotecnológicas


están presionando para la introducción de variedades de trigo y de
arroz tanto en los países ricos (en Canadá y en Sudáfrica variedades
de trigo transgénico, en Europa y en algunos países del mundo
empobrecido arroz resistente a herbicidas, por ejemplo), la práctica
totalidad de la superficie sembrada con transgénicos en el mundo
está ocupada por cuatro cultivos, en su mayor parte destinados a la
producción de piensos compuestos para la ganadería intensiva y a
otros usos industriales. Soja (61% del total de cultivos MG), maíz
(23%) algodón (11%) y colza (5%).

A nivel mundial los cultivos estrella siguen siendo aquellos que tienen
incorporada la resistencia a un herbicida, que ocupan el 73% de
todos los transgénicos cultivados, seguidos de las variedades Bt
(18%) y de las variedades con ambas características (8%).
Los datos de aumento de empleo de los herbicidas en estos cultivos
son de un 5% en la soja transgénica, comparado a la soja
convencional, y con un incremento mayor, seguramente, en
Argentina. Un estudio del Norwest Science and Environmental Policy
Center demuestra que el uso de herbicidas asociado a los cultivos
transgénicos en EEUU desde 1996 ha supuesto un aumento de 22
millones de Kg. en el uso de estos productos, afectando a los propios
campos, y a los cursos de agua y acuíferos subterráneos, así como a
linderos y zonas no cultivadas que son un refugio vital para la
conservación de la vida silvestre.

Por último, según datos de Corporate Watch, sólo 5 empresas


monopolizan la venta de semillas transgénicas. Se trata de las 5
mayores agroquímicas del mundo: Syngenta, Bayer CropScience,
Monsanto, Dupont (al que pertenece Pioneer Hi-Breed) y Dow.

Monsanto controla la mayor parte de este nuevo mercado (en su


informe anual asegura que "sus variedeades cubren más del 90% de
la superficie total sembrada con cultivos transgénicos"), ingresando la
nada despreciable cifra de 1.900 millones de dólares por la venta de
semillas MG y 1.800 millones de dólares por la venta del herbicida
Roundup.

Syngenta declara que el 2% de sus ventas corresponde a las semillas


transgénicas, lo que representó unos 125 millones de dólares para el
año 2002.

Bayer adquirió Aventis CropScience en junio de 2002 lo que le colocó


entre los líderes en biotecnología (en 1999, Aventis vendía el 7% del
total de las semillas transgénicas).

La introducción de DuPont en el mundo de la agricultura


biotecnológica se ha realizado a través de la compra de Pioneer Hi-
Bred en 1999, cuyas ventas en semillas transgénicas alcanzaban el
40% del total de sus ventas en semillas en 1998.

Igualmente Dow Agrosciences adquirió varias empresas semilleras,


entre ellas Mycogen con negocios en la biotecnología.
VENTAS DE PRODUCTOS QUÍMICOS Y DE SEMILLAS MG DE LAS
6 MAYORES EMPRESAS AGROQUÍMICAS EN 2001

Compañía Ingresos Ingresos ventas Total Ingresos (en


Agroquímica (en semillas millones $$)
millones $$) biotech. (en
millones $$)
Syngenta $5.385 $938 $6.323
Bayer CropScience $6.086 $192 $6.278
Monsanto $3.505 $1.707 $5.212
DuPont $1.922 $1.920 $3.842
BASF $3.114 $0 $3.114
Dow $2.627 $215 $2.842
¿CUÁLES SON LOS PRINCIPALES CULTIVOS
TRANSGÉNICOS?

Poquito a poco nos vamos metiendo en el meollo de la


transgénica cuestión. En esta entrada veremos cuáles son
los principales cultivos transgénicos en el mundo. pero
primero vamos con una visión general para irnos
centrando.

Evolución: Desde los primeros cultivos transgénicos,


plantados en seis países en 1996, se ha pasado a
cultivarlos en 28 países, alcanzando más de 181 millones
de hectáreas. Aunque Estados Unidos sigue siendo líder en
este campo, hoy en día se siembran algo más en países en
desarrollo que en desarrollados.

Actualmente se cultivan comercialmente 27 cultivos


transgénicos: alimentarios (soja, maíz, arroz, trigo, patata,
tomate, remolacha, judías, endivia, berenjena, calabaza,
papaya, melón, ciruelo, remolacha y caña azucareras),
forrajeros (alfalfa y Agrostis), textiles (algodón y lino),
oleaginosos (distintas variedades de colza), flores (clavel,
petunia, rosa) y otros como la pimienta dulce, el chopo o
el tabaco.
La ingeniería genética permite incorporar en la
planta más de un rasgo genético; en inglés los llaman
"stacked traits" (literalmente " caracteres apilados"),
aunque entre nosotros podríamos
llarmarlos "supertransgénicos". Deesta manera las
variedades pueden utilizarse durante más tiempo, ya
que "vienen preparadas de serie" para afrontar más
problemas. Actualmente están disponibles
comercialmente el maíz y el algodón resistentes a
insectos y tolerantes a herbicidas.
La Soja

Es con diferencia el cultivo transgénico más


implantado. Actualmente se cultiva en nueve países
y cubre más de 85 millones de hectáreas.

Los principales países productores son Estados Unidos (29


%), Brasil (27%) y Argentina (21%). En EEUU y
Argentina prácticamente toda la soja que se produce es
genéticamente modificada. En Europa no está permitido su
cultivo, por lo que tiene que importarse.

La soja es uno de los se componentes principales del


pienso de vacas, cerdos y pollos. Tiene muchísimas
aplicaciones industriales: en alimentación (aditivos como
la lecitina de soja), pinturas y fabricación de biodiesel
entre otros.
El maíz

El maíz GM se comenzó a cultivar comercialmente en


1997, también en Estados Unidos. Desde entonces su
cultivo se ha expandido por todo el mundo hasta alcanzar
más de 55 millones de hectáreas. Los principales países
productores son: EEUU (cerca del 80% de su producción
es GM), Chile, Brasil, Argentina, Sudáfrica y Canadá.

En la Unión Europea somos el país líder en su cultivo de


maíz transgénico, con más de 130.000 ha cultivadas. Otros
países europeos que también lo cultivan son Portugal,
Eslovaquia, República Checa y Rumanía, pero a muy
pequeña escala. Las razones del rechazo de Europa a los
cultivos transgénicos y del liderato de España en su
cultivo las veremos en otra ocasión.

EL MAÍZ BT
El maíz transgénico cultivado en Europa produce una
sustancia que le permite defenderse por si solo frente a una
plaga muy persistente, el taladro del maíz europeo.
Es una pequeña polilla que se hace fuerte en el interior del
tallo, taladrándolo hasta llegar a la mazorca. Esto no solo
debilita o directamente mata a la planta, sino que crea una
vía de entrada a determinados hongos productores de
micotoxinas, que son sustancias muy tóxicas para el ser
humano. Así, este bichito produce mermas en la
producción del 35-40% (que es bastante) y al favorecer la
presencia de micotoxinas, disminuye considerablemente la
calidad del grano.

El algodón

El algodón se cultiva principalmente en zonas tropicales y


subtropicales, también en zonas áridas y cálidas de
latitudes medias. La India, China, EEUU, y Brasil son los
líderes en la producción de algodón transgénico. En
Europa se cultiva en Grecia, Bulgaria y España, pero no
variedades transgénicas.
La fibra natural que todos conocemos se obtiene de los
"pelos" que rodean a la semilla. Las pelusas también
tienen su utilidad en la industria del papel, para elaborar
papeles de gran calidad y muy resistentes. Además de las
fibras, la propia semilla también contiene un aceite de gran
calidad (que se utiliza para freír y como componente de la
margarina) y elementos nutricionales muy utilizados en
alimentación animal.

La colza

Es un cultivo oleaginoso (productor de aceite) que


todavía arrastra mala fama en España. En la
antigüedad se utilizaba su aceite para las lámparas,
y desde la revolución industrial hasta hoy se viene
utilizando como lubricante. La Segunda Guerra
Mundial impulsó su cultivo debido a sus propiedades
como lubricante y a las dificultades de suministro de
petróleo. Hoy en día se cultiva como materia prima
industrial (para obtención de biodiesel, aceites
industriales y lubricantes) y alimentaria (aceite de
cocina y en la producción de margarina).
El uso alimentario se desarrolló hace mas de 40
años, gracias al trabajo de los mejoradores
vegetales que consigueron cultivares que no
producían dos sustancias que inutilizaban el aceite
para la alimentación humana o animal (sustancias
que no tienen nada que ver con lo que oficialmente
provocó el síndrome tóxico en España). En los años
setenta se desarrolló la colza "cero", libre de ácido
erúcico (que da sabor amargo) y en los ochenta la
colza "doble cero" que, además, estaba libre de
glucosinolatos (que daban problemas digestivos en
alimentación animal). Esta colza doble cero se
rebautizó "Canola" (Canadian oil), para diferenciarla
de la colza no comestible y porque su nombre en
inglés (rapeseed) no era muy comercial ("to rape"
también significa violar).

La patata

La patata ha sido y sigue siendo un cultivo importantísimo


para la seguridad alimentaria mundial, pero también para
la industria, ya que es una buena fuente de almidón. Aun
no siendo un cultivo transgénico importante la incluyo en
la lista por lo que representa.

La patata "Amflora" hasta hace poco era, junto con el


maíz, el único cultivo transgénico permitido en Europa y
nos sirve para ilustrar los problemas a los que se enfrentan
las empresas obtentoras a la hora de introducir en Europa
cultivos transgénicos.
Esta patata fue creada por la empresa alemana BASF para
uso industrial y para alimentación animal. Se empleó la
"tecnología antisentido" que, abreviando mucho, consigue
bloquear la expresión de un gen, el responsable de la
producción de amilosa, uno de los tipos de almidón
existentes en la patata. Las patatas obtenidas solo
producían el otro tipo, la amilopectina, lo cual es
tremendamemte ventajoso desde el punto de vista
industrial.

Después de estar 12 años para conseguir la autorización


para su cultivo, el Tribunal de Justicia de la UE dictaminó
que se habían vulnerado las normas del proceso de
autorización y retiró la autorización. Los señores de BASF
imagino que hartos de la burocracia, decidieron irse con su
tecnología y sus patentes a cultivar patatas a otra parte
(aquí podéis saber más).

Otra curiosa historia sobre patatas GM la tenemos con la


patata "Innate", recientemente aprobada en EEUU (el
artículo de la historia lo podeis leer aquí, en inglés).
Es una patata modificada genéticamente, que no
transgénica, con varios objetivos: que tenga menos
magulladuras que restan valor al producto (lo cual ayuda a
reducir el despilfarro de comida), que no pardee al
exponerla al oxígeno y, la que era a priori su mejor baza,
que al freírla produzca menos acrilamida (compuesto
sospechoso de ser carcinogénico). La gracia del
asunto es que la empresa que desarrolló esta
patata, JR. Simplot es un importante proveedor de
patata congelada de Mcdonalds (que consume unas
cuantas). A lo mejor pensó que a McDonalds, por
eso de limpiar la fama, le encantaría tener entre su
oferta culinaria una patata frita menos cancerígena.
El caso es que a los del payaso no les convenció
que se les asociara con transgénicos - lo que viene
siendo ir de Guatemala a Guatepeor en términos de
marketing - y dejaron a Simplot con la patata caliente
en las manos. Ni cortos ni perezosos, han decidido
que la venderán precortada en paquetitos,
aprovechando eso de que no se pone marrón. En
vista de que vender salud no les dio mucho
resultado, la siguiente versión "Innate 2" incorpora
otra cualidad muy interesante desde el punto de
vista agronómico, la resistencia al tizón, una de las
bestias negras del cultivo de la patata, haciéndola
atractiva a agricultores que al fin y al cabo son los
que compran la semilla.
La berenjena

Al igual que la patata, no está en el "top five" de los


cultivos transgénicos, pero la incluyo como ejemplo
de cultivo GM transgénico obtenido en un país en
vías de desarrollo.
La berenjena es una hortaliza muy consumida en la
India, y popular entre los pequeños agricultores y los
consumidores de pocos recursos. Su problema es
que es muy vulnerable a un bichito que se zampa
frutos y brotes, al estilo del taladro del maíz, por lo
que su cultivo requiere de un uso intensivo de
insecticida. Los daños en frutos pueden alcanzar el
95% y se han registrado pérdidas del 70% en
plantaciones comerciales.
Para luchar contra el dichoso bicho, además de los
insecticidas y los métodos de control biológico, se
intentaron desarrollar cultivares resistentes mediante
mejora tradicional, pero con poco éxito, ya que no
tenían a mano variedades o parientes resistentes
que le prestaran sus genes. Así, fue una bacteria y
la biotecnología las que permitieron obtener una
Berenjena "Bt Brinjal" resistente al ataque del
taladro.

Esta variedad fue desarrollada por una empresa


privada de semillas que donó la tecnología a
instituciones públicas de investigación. De esta
manera se pudieron desarrollar variedades Bt
híbridas que llegaran a todos los agricultores gracias
a la cooperación entre instituciones de investigación
públicas y privadas.

Otros cultivos

La tolerancia a herbicidas también está presente en


la alfalfa (cultivada en EEUU), remolacha azucarera
(EEUU y Canada) y chopos (en China).

La resistencia a virus la podemos encontrar en la


papaya (China y Hawaii) y en calabaza (Estados
Unidos).

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