Nunca estarás solo by Black Angell

Es necesario que dé cuenta de esta historia, es menester de que una persona, por lo menos una,
pueda relatar la verdad tras todo este asunto… es una cosa que no tiene ni pies ni cabeza y en mi
desesperación es probable que el relato final resulte algo disparatado… pero deben creerme
cuando les digo que es totalmente cierto.

De acuerdo, primero con el comienzo mi nombre es Dante Ferreira, tengo 26 años…. Vivo en… oh
diablos, no debo decir eso, porque sé que si lo hago entonces ustedes también estarán
involucrados en esto, querrán saber, averiguar más de lo que yo puedo decirles o querer
comprobarlo con sus propios ojos.

Y no deben, no… ni siquiera debería contarles esto, pero sé que si no lo hago me volveré
completamente loco, si no es que ya lo estoy ahora… Sé que van a juzgarme, sé que me acusaran,
muchos de ustedes incluso lo tomen como una broma, pero créanme, les aseguro que aunque me
gustaría que fuera así, no lo es.

No sé si haya un comienzo para esto, probablemente así sea pero intentar darle uno solo sería
especular y es un tema en el que no quiero ahondar realmente y prefiero que ustedes mismos
propongan una teoría de por qué fue así, quizás hubo un pacto diabólico o una maldición, o quizás
sea algo hereditario, yo que sé, jamás lo supe realmente… solo puedo contar del origen que yo
puedo darle a esto y eso fue cuando le conocí a él.

Sé que ha tenido muchos nombres, muchos apellidos y muchos hogares, pero yo solo puedo
llamarle por el nombre con que él lo conocí la primera vez y ese era ángel… no, no me
malentiendan, no era un prófugo o un ladrón, quizás olvidé mencionarlo pero por ese entonces
era huérfano y vivíamos en el mismo orfanato, y con decir esto quizás crean que también soy
huérfano pero en realidad viví allí porque mi madre trabajaba allí.

Como sea, esta no es mi historia y no debería dar detalles de ella pero creo que es importante que
diga que mis padres acababan de divorciarse y nos separaron a mi hermano y a mí, yo me quedé
con mi madre y mi hermano se fue con mi padre, ella quería salir adelante y encontró un trabajo
administrativo en aquel lugar, fue así como llegué allí, fue así como le conocí y así es como
comenzó todo esto.

Antes señalé que tengo un hermano ¿no? Bueno, él era mi gemelo y no sé si lo sepan, pero
cuando tienes un gemelo te acostumbras a no estar solo y al mismo tiempo a no tener que tratar
con nadie más, así que de un momento a otro cuando nuestros padres se divorciaron, yo me
encontré solo sin saber cómo tratar a otros niños, con ángel fue diferente, él también estaba solo,
tampoco sabía tratar con nadie así que de cierto modo nos entendimos, fuimos los mejores
amigos, ya saben, hacíamos campamentos, cazábamos bichos, hablábamos de todo, yo sentía un
amor profundo por él, de nuevo, no piensen mal, no sé qué pasa a veces con la gente cuando digo
eso, es decir, éramos niños, los niños pueden amar con ganas a sus amigos, sobre todo al mejor.
Como sea, una parte de mí, sabe que él también me quería, que éramos como hermanos, más que
hermanos, no sé si alguna vez han logrado conectar tan profundamente con alguien que no
necesitas hablar con esa persona si no solo darle una mirada y es suficiente. Así nos pasaba a
nosotros, pero bueno claro, todo tenía que acabar en algún momento… de niño, recuerdo que mi
madre decía que él era un niño muy lindo, de carácter y de físico, sé que le gustaba pellizcarle las
mejillas y regalarle caramelos que él nunca comía y me daba a mí.

Estoy divagando, lo cierto es que no fue sorpresa para muchos excepto para mí, cuando se lo
llevaron sus padres adoptivos, recuerdo que lloré, pero también recuerdo que a mi madre le
consiguieron un mejor trabajo y nos mudamos; sitio nuevo, aires nuevos, incluso amigos nuevos,
no recuerdo mucho de esa época y ni siquiera había pensado en ángel hasta hace unos meses en
que de casualidad, mientras leía en una biblioteca lo vi. Estaba en el rincón más lejano de la
habitación, distraído y distante, tal como siempre, como si nunca le hubiese olvidado.

Todos mis recuerdos estaban allí, latentes y me pareció increíble la absoluta certeza que tuve de
que era él y no algún otro parecido. Me acerqué hasta él y lo saludé con un sencillo hola y de
alguna manera extraordinaria el me reconoció. Tenía ganas de charlar con él, de ponerme al día,
pero él tenía clases y no podía quedarse. Quedamos en un café y algo dentro de mí se removió,
porque ahora que lo pienso algo dentro de mí pareció advertir que era imposible reconocerlo y
que él viera en mí, en la persona que soy ahora, al niño que fui antes.

En ese entonces no me importó, tal como acordamos quedamos en un café y charlamos hasta
entrada la tarde, el ya no usaba el mismo nombre y en sus palabras había cambiado de nombre,
apellido y dirección tantas veces que en ocasiones solía despistarse. Incluso se había teñido el
cabello varias veces y cambiado el color de sus lentillas por lo que en ocasiones le costaba
reconocer su reflejo. Me sentí algo frustrado al escuchar que sus padres adoptivos lo habían
devuelto al orfanato solo un mes después de haberme marchado y así había pasado de hogar
adoptivo en hogar adoptivo durante los años, hasta ahora en que tenía un tutor encargado de
cuidarle. Ahora que por fin sentía que tenía algo de estabilidad.

Recuerdo que le pregunté cómo debía llamarle y él dijo que así como yo era para él solo Dante el
siempre sería para mí, Ángel… fue un lindo gesto.

No sé si alguno entenderá la sensación de la que hablo, pero es, creo que reconfortante encontrar
a un amigo sincero y desinteresado tras tanto tiempo nadando entre un nido de víboras. Quedé
varias veces con él, incluso le presenté a mi novia, pero ella me decía “tu amigo es raro”, todos me
lo dijeron y yo, yo debí darme cuenta de las señales.

No pensé mucho en eso, no tuve tiempo de hacerlo mejor dicho, mi padre murió de forma
repentina y mi madre quiso ir a su funeral; no saben lo extraño que se siente ir al funeral de
alguien a quien apenas recuerdas o re-encontrarse con un hermano del que ahora no sabes nada.
Esa fue la peor parte, porque había olvidado que ver a mi hermano era como verme en un espejo.
Hubo altos y bajos, mi madre murió un tiempo después en un accidente de tráfico y solo tuve a mi
hermano para apoyarme. Yo le presenté a mi novia y el me habló de su ex-esposa. Fue agradable
encontrar a un vínculo familiar después de tanto. No pensé mucho en ángel hasta que un día de
casualidad lo vi saliendo del aparcamiento, iba en un coche lujoso, pero incluso yo, noté que
estaba deprimido, me dijo que su tutor había muerto en un accidente y lo había dejado a él como
su heredero. Sé que le pregunté si estaba bien y él dijo que no, que sentía que había tenido una
familia y que ahora la había perdido.

Comprendía a lo que se refería así que lo acompañé hasta la casa de su tutor que ahora le
pertenecía, una mansión lujosísima debo decir, hablamos hasta tarde, comimos pizza y cuando
quise irme recuerdo que me prestó su auto para volver a casa porque él no estaba tan bien como
para llevarme.

Quedamos juntos un par de veces, al fin le presenté a mi hermano y recuerdo que por ese
entonces le pregunté a mi gemelo si estaba bien con él y solo dijo “es excéntrico y reservado, nada
más”. Coincidía con mi opinión así que dejé de darle vueltas. El seguía siendo un buen amigo con
mi hermano y conmigo, en serio, las cosas iban bien. Pero no iba para nada bien con mi círculo de
amigos y con mi novia quien me dejó luego de un tiempo por no saber “escuchar sus advertencias”

No entendía de que hablaba, ahora lo se…

Pasaron unos días confusos, algo borrosos en mi cabeza porque estaba preocupado por mi tesis y
mis exámenes finales, lo que si recuerdo es un día mientras bajaba por las escaleras escuché al
hermano de mi novia discutir con alguien y llamarle asesino, parte de la conversación no se
entendía, pero cuando terminé de bajar vi a ángel con un cuchillo y a desmont tirado en el piso.

Lo admito, me asusté, no quise escuchar nada de lo que hablara y salí pitando de allí como alma
que lleva el diablo. Recuerdo que le conté todo a mi hermano y él dijo que no me preocupara, que
todo estaría bien y lo estuvo. Yo dejé de ver a ángel, aunque me lo crucé un par de veces, luego
dejé de verlo. Fue simplemente como si desapareciera.

Esta vez sin embargo, no lo olvidé tan fácilmente como cuando éramos niños, en mi mente seguía
la idea de que algo iba mal; mi único apoyo por ese entonces era mi hermano, intentábamos
refugiarnos el uno en el otro, estar unidos. Comíamos juntos todas las tardes, así que fue raro
cuando él no llegó esa tarde ni tampoco al día siguiente.

Iba a comenzar a buscarlo cuando volvió mi novia, mi Beatriz o mejor dicho mi ex… ella dijo, “eh
tranquilo, te ayudaré a buscarlo”, sé que subimos al auto y eso es todo lo que recuerdo. Cuando
desperté, estaba colgando del techo como una res, mi hermano estaba atado en una silla cercana
a mí. Tuve una experiencia desagradable en un vagón de tren con unos asaltantes hace algunos
años así que hice cursos de defensa personal y supervivencia por lo que aunque me quebré los
pulgares pude soltarme y luego desatarle a él.

Tenía pensado escapar pero mi hermano me detuvo y dijo que teníamos que buscar al otro
prisionero el cual estaba encerrado en un cuarto diminuto al otro extremo. Tan silenciosos como
pudimos, llegamos hasta allí y para mi sorpresa el otro sujeto era ángel, lo cual explicaba el por
qué había desaparecido, ya que él estaba en peor condición que nosotros dos. Como pudimos le
ayudamos a caminar y nos escondimos en un depósito. Allí como pudo me explicó que su tutor no
había muerto en un accidente si no que alguien había entrado a la casa a robar y lo habían
asesinado, dijo que muchos habían sospechado de él, pero que lo exoneraron debido a que pasó
toda la noche internado en el hospital con vómito, migraña y hemorragia nasal.

Dijo que desmont lo había llamado asesino por eso, pero cuando él le cuestionó el cómo conocía
los detalles, mi ex-cuñado furioso, se le fue encima con un cuchillo dispuesto a atacarle y que de
milagro pudo desarmarlo y noquearle, que fue entonces cuando yo le vi.

Nos vendamos las heridas como pudimos he intentamos escapar pero de pronto nos vimos
rodeados por mis antiguos amigos y Beatriz, de pronto todo pareció tener sentido.

Yo se los había presentado, ellos habían averiguado que su tutor era rico y ellos se metieron en la
casa para robar, la cosa se torció y terminaron matando al dueño, ahora, que las cosas se habían
torcido, no importaba torcerlas un poco más, secuestraron a ángel para sacarle información de
unas supuestas gemas ocultas en su casa, cuando no pudieron hacerle hablar nos buscaron a
nosotros para presionarlo.

No voy a entrar en detalles pero consiguieron lo que querían, él les contó todo solo para que no
nos hicieran daño y pudiéramos irnos pero, entonces Beatriz dijo “ahora ya no me sirven de nada”.
Lanzaron a ángel como un muñeco de trapo por la baranda, no estábamos a gran altura pero el
cayó de cabeza y pude escuchar el crack de su cuello al romperse.

Mi hermano intentó escapar y en el forcejeo alguien le golpeó en la cabeza, con fuerza, dejándolo
inconsciente así que ahí estaba yo, arrodillado, sosteniendo a mi hermano intentando inútilmente
de mantenerme pegado a la pared para que no nos rodearan, fue entonces que pasó.

Y no estoy hablando de la mágica aparición de un héroe, de un policía, de un bombero o de que

alguno de los chicos recordó que era mi amigo y nos prestó socorro. Nada de eso.

Una barra metálica atravesó a desmont y quien la llevaba tras sacarla con un fluido movimiento
comenzó a golpear a los otros con ella acabando con todos uno a uno. Y no me vengan con lo de
¿y no le dispararon? Por supuesto que lo hicieron pero no sirvió de nada. Fue como si las balas lo
ignoraran y entonces lo vi bien, y dios que espanto, era él, era ángel… pero no él mismo, era…
dios… era su sombra.

Como un reflejo macabro y maligno de mi amigo.

Le rompió las piernas a Beatriz y luego tras una horrible sonrisa la atravesó con la barra clavándola
a la pared… sé que grité, o que al menos lo intenté, sé que abrí la boca pero no puedo asegurar
que algún sonido saliera de ella. Sé que esa cosa me vio fijamente con sus ojos negros y vacíos,
sentí su odio. Pero entonces aunque se inclinó hacia mí con la intención de matarme, se volvió
bruscamente y saltó hacia el piso donde se metió en el cuerpo de mi amigo y volvió a ser su
sombra.

No se lo he dicho a nadie más, la policía llegó al poco rato después de un anónimo, nadie sabe
quién pudo haber matado a mis antiguos amigos, simplemente nos llevaron a un hospital para
curarnos, aún si fuéramos nosotros nadie nos culparía, pero no saben quién fue, no hay huellas, ni
cámaras, ni evidencia, mi estado de shock no ayuda porque pude haber alucinado todo.

No se lo he contado ni siquiera a mi hermano, el pobre duerme tranquilo y está bien así.

¿Por qué entonces? Te estarás cuestionando, ¿por qué cuento esta historia si al final del asunto
salió todo lo bien que podía salir?

La respuesta es fácil… en serio es muy fácil… hoy me enteré de que todos los padres adoptivos de
ángel murieron y el sobrevivía de forma increíble, a veces ni siquiera estaba en casa, la mayoría de
ellas estaba lejos, muy lejos, las otras incluso con la policía de menores o en un hospital, pero si
sus padres morían ¿quién lo llevaba de vuelta al orfanato?

¿Quién?

En este punto creo que esa es la pregunta correcta pero no creo que pueda responderla y si tú me
preguntas el ¿por qué? Te diré que es por la misma razón por la que aún no he despertado a mi
hermano, he escuchado hablar a la policía, dicen que hay tres supervivientes…

Hay una sombra parada en mi puerta…

CONTINUARÁ…