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Universidad Interamericana para el Desarrollo

Universidad Interamericana para el Desarrollo

Licenciatura en Psicología Organizacional

Corrientes Conceptuales de Psicología

“ANTECEDENTES HISTÓRICOS Y FILOSÓFICOS DE LA


PSICOLOGÍA DURANTE EL RENACENTISMO”

Profesor: Oscar Guillermo Orozco Sandoval

Alumna: Rebeca del Carmen Esparza Candelas

Primer Cuatrimestre

Aguascalientes, Ags. 20 de septiembre de 2018


ANTECEDENTES FILOSÓFICOS Y CIENTÍFICOS DE LA PSICOLOGÍA DURANTE EL
RENACENTISMO

El máximo logro técnico del renacimiento fue la invención de la imprenta y principal impacto de
éste en la ciencia fue que permitió transmitir información a través de la elaboración de libros, lo
que en consecuencia generó un mayor acceso al conocimiento y la publicación de obras que
dieron paso a un consenso de nuevas ideas en muchos ámbitos del conocimiento. Sin embargo,
fue justo este consenso público que frenó el progreso de la psicología como el estudio formal
de los seres humanos, ya que las reacciones de la comunidad teológica del Renacimiento ante
el desarrollo de nuevas concepciones no fueron muy favorables. Justo las concepciones sobre
el cosmos y el lugar que en él ocupan los seres humanos en él, sufrieron un cambio drástico
durante el renacimiento, y a su vez dichos cambios detonaron en un debate entre la iglesia
católica y la comunidad científica de la época.

Fue el caso de Nicolás Copérnico (1473-1543) quien concibió la teoría heliocéntrica del
universo, la cual generó mucha controversia pues refutó a la teoría geocéntrica ya aceptada,
respaldada y defendida por la tradición y autoridad de la iglesia. Con esta nueva concepción del
universo. Copérnico sugirió que es el sol, y no la tierra, el que se encuentra en el centro del
universo y en torno al cual giran los planetas. Lo que planteaba, era considerado Herejía, pues
se oponía directamente a la idea de que el ser humano era la principal creación de Dios, quien
había colocado al ser humano en una posición privilegiada y central. Con esta nueva visión, se
colocó a los seres humanos en una posición periférica del universo y éste degrado, como era
de esperarse, no le pareció a la iglesia católica, quien prohibió sus obras. Posteriormente
Giordano Bruno (1548-1600) planteó un pensamiento aún más peligroso que le costó la vida,
propuso la existencia no solo de un sol, sino de innumerables soles, no solo una tierra sino
innumerables tierras, cada una de las cuales giraban alrededor de su propio sol.

Otro caso de represión lo sufrió Galileo Galilei (1564-1642) quien confirmó la teoría de
Copérnico con la ayuda de invención del telescopio. Con este nuevo artefacto, Galileo “apuntó
hacia las estrellas” (cita) y llegó a la conclusión de que Copérnico estaba en lo cierto, que el sol
en realidad era el centro del universo. Galileo pretendía publicar sus descubrimientos, pero no
era momento para cuestionar la autoridad de la iglesia, (en realidad nunca es un buen
momento). La inquisición condenó las enseñanzas de las ideas de Copérnico y exigió a Galileo
dejar de hacerlo. Fue hasta que, apoyado por una comunidad poderosa de la iglesia, se sintió
seguro de publicar sus hallazgos bajo la distinción de una simple hipótesis, así generó un debate
entre los sistemas geocéntricos y heliocéntricos con la publicación de un diálogo sobre los
sistemas más importantes del mundo, el de Tolomeo y el de Copérnico, los debatientes fueron
tomando sus posturas, y llegaron a la conclusión de que Copérnico tenía razón. Obviamente la
iglesia no quedó satisfecha y prohibió “el diálogo”, y no conforme, condenó a Galileo por herejía
y por ir en contra de las sagradas escrituras, como castigo fue la tortura a manos de la
inquisición y el exilio. En la actualidad la iglesia ha rectificado y aceptado el gran error al
condenarlo. Aunque de nada sirve el arrepentimiento ahora, después de haber frenado por
siglos el progreso científico.

En el mismo año en que murió Galileo Galilei, el día de navidad nació Isaac Newton (1642-
1727) quien aportó grandes descubrimientos a la ciencia, y postuló las leyes que rigen el
universo, tal como la ley de gravitación universal. Uno de sus aportes a la posterior psicología,
fue la demostración de que la luz blanca refracta en los colores que la constituyen y que luego
los rayos individuales volvían a combinarse para producir la blancura. Esto, sentó las bases de
un modelo de la mente, propuesta por empiristas, que pretendía refractar la conciencia en los
elementos que la constituyen, algunos psicólogos posteriormente adoptaron esta idea.

William Harvey (1578-1657) también aportó descubrimientos al desarrollo de la ciencia trabajó


en un programa de investigación sobre el movimiento del corazón y la circulación de la sangre,
concluyó que el corazón no elabora la sangre, sino que más bien la bombea alrededor del
cuerpo. Con todo esto demostró que un sistema biológico podía estudiarse con el mismo rigor
experimental con que los físicos estudiaban los sistemas físicos, señalando el rumbo de la
biología experimental que posteriormente la psicología tomaría como base para la creación de
una ciencia del comportamiento.

Además de todos los progresos científicos, el Renacentismo también tuvo exponentes


filosóficos que generaron un desarrollo que constituyó un fundamento importante para la
psicología, entre los que se encontraba René Descartes (1596-1650) quien es considerado
fundador de la filosofía occidental moderna, pues creó un sistema filosófico nuevo, científico y
lógico de pensamiento expuesto en “El Discurso del Método” donde adoptó una rigurosidad
científica y presentó las reglas lógicas para alcanzar la verdad que consisten en “no aceptar
nunca como verdadero algo que no supiera evidentemente que lo fuera” o sea evitar caer en
prejuicios y precipitaciones y sólo considerar algo como verdadero si no hay posibilidad de
ponerlo en duda. La búsqueda de la verdad colocó a Descartes en diferentes dilemas
existenciales, que fueron desde la duda de la existencia de dios hasta dudar y cuestionar la
existencia misma del mundo e incluso de nosotros mismos. Por lo que concluyó que lo único de
lo que podía estar seguro era que pensaba en algo por lo que para él la prueba final de su
existencia en el acto de pensar, por lo tanto, si pensar es la prueba definitiva de nuestra
existencia era importante saber cómo Y dónde pensamos, por lo que Descartes expuso que
pensábamos con la mente, y que ésta es diferente al cuerpo. Así manifestó un dualismo en
dónde la mente y el cuerpo no sólo tienen características diferentes, sino que sus funciones
siguen distintas leyes. En el caso del cuerpo humano, Descartes manifiesta una concepción
mecanicista (se rige por leyes mecánicas y automáticas) e hidráulica (funciona a través de la
transmisión de fluidos) y diferencia al cuerpo humano entre los cuerpos de los animales en que
tiene una mente que lo controla, este control, es la funcionalidad del alma, que el filósofo ubica
en la glándula pineal que es una estructura unitaria, que no se duplica a diferencia de otras
estructuras del cerebro. La mente, según Descartes, está conformada por ideas innatas e ideas
derivadas, las primeras son con las que se nace y no dependen de la experiencia, y las
segundas son las que surgen de la experiencia. Descartes añade una última característica de
los seres humanos, y es que tenemos pasiones que surgen del cuerpo y que la mente
experimenta en forma pasiva y generan sin mayor volición acciones corporales.

La filosofía de Descartes claramente muestra una postura dualista como ya se mencionó, la


cual, llega a parecer un tanto incoherente, sobre todo porque es algo que difícilmente puede
ser explicado sin llegar a cuestiones espirituales, tal como el mismo Descartes hizo al dejar
como responsable a Dios sobre todo aquello en donde no pudo confirmar una verdad. El objetivo
no es encontrar una verdad absoluta, y no hay necesidad de responsabilizar a un ser supremo
por cuestiones que no podemos manejar. Además, dichas cuestiones parecen ser creadas justo
para tranquilizar la incertidumbre que despierta la incapacidad del ser humano para conocerlo
todo, y sobre todo es muestra de la constante necesidad de jerarquizar a los seres del universo,
y dar al ser humano un lugar privilegiado entre todos ellos inventando un ser superior que les
proporciona argumentos para defender ese lugar. Es por eso, que la mayoría de las posturas
dualistas, incluida ésta de Descartes, consideran que los animales no tienen alma, y que sus
capacidades no se comparan con las del ser humano, y aunque es verdad, dudo mucho que
las diferencias sean tan radicales como las presentan.

CONCLUSIONES

Antes, durante y después de Renacentismo se presentaron muchísimas aportaciones que


fueron concibiendo la psicología actual. Hoy en día, es considerada una ciencia, y se sigue
trabajando para que sea de esa forma pues en ocasiones suele ser inconsistente debido a la
diversidad teórica. Para que la psicología fuera ciencia, antes tuvo que luchar por que así fuera,
es por eso por lo que los antecedentes son importantes puesto que conocer cómo se desarrolló,
cuáles fueron sus fundamentos, en que otras ciencias basaron sus métodos o sus principios,
etc dará el sustento teórico y científico que tanta falta le hace para ser respetada. Y no sólo es
por el respeto, es también por la ética, considero que una de las mejores formas de aplicar la
psicología en cualquier ámbito profesional es la coherencia. Debe existir una firme coherencia
entre tus propias ideas, y los principios del marco teórico que rige las intervenciones.

Por ejemplo, las teorías respecto al lugar del ser humano en el mundo son importantes, sobre
todo porque de cierta forma determinan el enfoque y la visión con la que se trabajará en el
ámbito de aplicación e intervención. Una coherencia entre la forma en que el psicólogo concibe
el universo y las teorías que fundamentan sus intervenciones, más que nada facilitará la práctica
y dará sustento a su trabajo. Es por eso por lo que las aportaciones de Nicolás Copérnico y
Galileo Galilei fueron de gran importancia para la conformación de una psicología científica.
Obviamente, las teorías respecto a la conformación del ser humano y la participación de un
alma y un cuerpo son igual de importantes que las primeras, los filósofos que han centrado sus
teorías a esta cuestión han alternado sus posturas entre el dualismo y el monismo, como
psicólogo o como estudiante de psicología, conocer dichas posturas facilitará en gran medida
la elección de un marco teórico afín a principios propios.

BIBLIOGRAFÍA

Hothersall, D. (2005). Capítulo 2: Antecedentes filosóficos y científicos de la Psicología. En


David Hothersall. Historia de la Psicología (pp. 18-39). México: Mc Graw Hill.

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