El Peruano
Lunes 3 de setiembre de 2018 CASACIÓN
sobre las cuales se sustentan las denuncias están destinadas a
que en sede casatoria se efectúe una revaloración probatoria, lo
cual no es atendible por contravenir los fines del recurso. Asimismo,
la parte impugnante no toma en cuenta que sobre dicho aspecto la
Sala Superior después de revisar lo actuado concluyó que no
puede declararse la propiedad exclusiva del muro, ya que se halla
tanto en la propiedad de la demandante y la demandada; por tanto,
debe acreditarse, la construcción de la misma. Siendo esto así y al
no evidenciarse transgresión alguna al principio de valoración de la
prueba como erróneamente sostiene la recurrente, el recurso
deviene en infundado. DÉCIMO CUARTO.- Finalmente, es de
observarse que se alega la vulneración de los artículos 2012° y
2013° del Código Civil; sin embargo, debe señalarse que siendo el
recurso de casación un medio impugnatorio excepcional, este
exige a los justiciables, el saber adecuar los fundamentos de sus
agravios a fin de que el órgano supremo pueda verificar la correcta
interpretación, debida aplicación o la inaplicación de una norma, no
pudiéndose sustituir en el lugar del impugnante a fin de subsanar
las omisiones anotadas, porque ello significaría transgredir el
debido proceso. Siendo esto así y no observándose sustento
alguno sobre las denuncias efectuadas, el recuso debe declararse
infundado. Fundamentos por los cuales; y, en aplicación del artículo
397° del Código Procesal Civil; Declararon: INFUNDADO el
recurso de casación interpuesto por Adriana Sequeiros Frías NO
CASARON la Sentencia de Vista, expedida por la Sala Civil de la
Corte Superior de Justicia de Cusco, el dieciocho de julio de dos mil
dieciséis, que confirma la decisión impugnada que declaró
infundada la demanda; DISPUSIERON la publicación de la
presente resolución en el Diario Oficial “El Peruano”, bajo
responsabilidad; en los seguidos por Adriana Sequeiros Frías con
Margot Giovana Cusihuallpa Arróspide y otros, sobre Mejor
Derecho Propiedad; y los devolvieron. Ponente Señora Cabello
Matamala, Jueza Suprema. S.S. ROMERO DÍAZ, CABELLO
MATAMALA, MIRANDA MOLINA, DE LA BARRA BARRERA,
CÉSPEDES CABALA.
1
Rioja, Bermúdez Alexander La Congruencia Procesal X Congreso Nacional De
Derecho Procesal Garantista
C-1683162-193
CAS. Nº 3399-2016 MOQUEGUA
OTORGAMIENTO DE ESCRITURA PÚBLICA Sumilla: En el
proceso sobre Otorgamiento de Escritura Pública, no corresponde
emitir pronunciamiento sobre las alegaciones de ineficacia del acto
jurídico. Lima, veintisiete de octubre de dos mil diecisiete.- LA
SALA CIVIL TRANSITORIA DE LA CORTE SUPREMA DE
JUSTICIA DE LA REPÚBLICA: Vista la causa número tres mil
trescientos noventa y nueve - dos mil dieciséis; producida la
votación de acuerdo a ley, se emite la siguiente sentencia: I.
ASUNTO: Se trata del recurso de casación interpuesto por la
demandada Asociación de Pequeñas Microempresas
Industriales del Perú Filial El Algarrobal - APEMIPE El
Algarrobal a fojas doscientos setenta, contra la Sentencia de Vista
de fecha veinticinco de julio de dos mil dieciséis, de fojas doscientos
cincuenta y nueve, emitida por la Sala Mixta Descentralizada de Ilo
de la Corte Superior de Justicia de Moquegua, que confirmó la
sentencia de fecha veintiuno de abril de dos mil dieciséis, de fojas
ciento noventa y cinco, que declaró fundada la demanda
interpuesta por Javier Altemar Acosta Paredes contra la Asociación
de Pequeñas Microempresas Industriales del Perú Filial el
Algarrobal (en adelante APEMIPE el Algarrobal) sobre Otorgamiento
de Escritura Pública. III.- CAUSALES POR LAS QUE SE
DECLARÓ PROCEDENTE EL RECURSO DE CASACIÓN.-
Mediante resolución de fecha veinte de octubre de dos mil dieciséis,
obrante a fojas treinta del cuadernillo de casación, esta Sala
Suprema ha declarado procedente el recurso de casación por las
causales de: Infracción normativa de los artículos I del Título
Preliminar y 197 del Código Procesal Civil y 139 incisos 3 y 5
de la Constitución Política del Perú.- Sostiene que se afecta su
derecho al no tenerse en cuenta lo establecido en los Estatutos, el
cual es marco normativo que rige a la Asociación y que en ella
figura las obligaciones y funciones del presidente y al no contar el
Presidente de la Asociación en la fecha de dicha transferencia con
tal representación el Contrato de Compra Venta de fecha catorce
de abril de dos mil catorce es nulo o ineficaz, por lo que no puede
elevarse a Escritura Pública. III.- MATERIA JURÍDICA EN
DEBATE: El tema en debate radica en determinar si la Sala de
Vista ha afectado el Debido Proceso, específicamente la Debida
Motivación de las Resoluciones y Valoración de la Prueba. IV.-
ANÁLISIS: PRIMERO.- Que, previamente a la absolución del
recurso de casación sub examine, es necesario hacer un breve
recuento de lo acontecido en el proceso. En tal sentido, se advierte
que el demandante Javier Altemar Acosta Paredes solicita que la
demandada Asociación de Pequeñas Microempresas Industriales
del Perú Filial el Algarrobal - APEMIPE El Algarrobal, cumpla con
otorgarle Escritura Pública del Contrato de Compra Venta de fecha
catorce de abril de dos mil catorce, respecto al terreno ubicado en
la Sección B, Lote 24, Distrito de El Algarrobal, Provincia de Ilo,
Departamento de Moquegua, de trescientos sesenta metros
cuadrados (360.00 m²); señalando que, con fecha catorce de abril
114083
de dos mil catorce, se celebró una minuta de compra venta con el
Presidente de la Asociación APEMIPE El Algarrobal, por la cual le
transfieren en venta el terreno ubicado en la Sección B, Lote 24 de
la Asociación; la nueva Junta Directiva de la Asociación encabezada
por su Presidente el Señor Ever Eduardo Gamarra Miovich, quien
asumió funciones desde mayo del dos mil catorce, viene
desconociendo sus derechos de propiedad adquiridos como
consecuencia de la compra venta efectuada; pese a que ha venido
pagando las cuotas ordinarias y extraordinarias y que desde enero
del dos mil quince por indicaciones verbales del señor tesorero ya
no le permiten el pago de las cuotas, habiéndosele indicado que ha
sido excluido o expulsado de la asociación, motivo por el cual le ha
remitido una carta notarial solicitando los documentos que
corresponden a la expulsión o exclusión pero que a la fecha no ha
respondido. SEGUNDO.- La demandada absolvió traslado de la
demanda, a fojas sesenta y siete, alegando que como Presidente
no tiene facultades de disposición de propiedad de su representada
en mérito a que el demandante no tiene la calidad de socio; que el
documento que solicita se eleve a Escritura Pública es nulo de
pleno derecho e ineficaz porque ha sido otorgado por un ex
presidente que carece de facultades para poder disponer de un
bien inmueble de su asociación en forma unilateral, además agrega
que no existe identificación sobre el bien inmueble que peticiona el
demandante con bien inmueble que contiene el documento de
fecha catorce de abril de dos mil catorce, no existe en la fecha una
independización del terreno de su asociación en terrenos
independientes porque se encuentran en pleno proceso de
saneamiento de la propiedad inmueble. TERCERO.- Que, por
Resolución de fojas doscientos cincuenta y nueve, de fecha
veinticinco de julio de dos mil dieciséis, el Ad Quem confirma la
apelada que declara fundada la demanda, señalando que: La
demandada cuestiona la validez y eficacia del Contrato de Compra
Venta de fecha catorce de abril de dos mil catorce, porque: (i) El
presidente de entonces carecía de facultades de disposición,
conforme al artículo 38 del Estatuto, 156 y 167 del Código Civil
(punto a, d, e) y (ii) Que el documento no identifica la ubicación del
terreno (punto b). La asociación demandada admite que el señor
Felipe Raúl Jiménez Quiroz era su Presidente y representante
legal, pero niega que entre las facultades que le reconocía el
estatuto [artículo 38] haya estado la de disponer de sus bienes.
Pues no se trata de un supuesto de nulidad manifiesta que habilite
al órgano jurisdiccional declararla de oficio, sino de un acto que
podría ser ineficaz lo que no se discute en este proceso sino en
otro, como lo viene haciendo la demandada. Como se desprende
de las razones jurídicas, en sede de otorgamiento de Escritura
Pública no se discute la nulidad no manifiesta, ni la ineficacia del
acto jurídico y la demandada lo sabe, por eso mismo inició otro
proceso en el que planteó dicha pretensión y debate ampliamente
el asunto, por lo que se desestima los cuestionamientos, incluido el
formulado en el punto f). El cuestionamiento sobre la falta de
identificación del objeto de la compraventa al no haberse indicado
su ubicación, área, colindancias y partida registral. Dichos aspectos
no configuran supuestos de nulidad manifiesta porque el Código
Civil señala que pueden venderse bienes susceptibles de
determinación [artículo 1532]. No obstante, en el caso de autos las
partes conocen la existencia del bien objeto de compraventa que lo
identifican como lote de terreno ubicado en Sección “B”, Lote 24,
dentro del Lote A - 1D, éste último inscrito en la partida número
110001774 de la Zona Registral número XIII - Sede Tacna Oficina
Registral Ilo. En consecuencia, se desestima el cuestionamiento.
CUARTO.- Que, estando al sustento del recurso de casación, es
necesario destacar que, el Debido Proceso es un derecho
complejo; pues está conformado por un conjunto de derechos
esenciales que impiden que la libertad y los derechos de los
individuos sucumban ante la ausencia o insuficiencia de un proceso
o procedimiento, o se vean afectados por cualquier sujeto de
derecho -incluyendo el Estado- que pretenda hacer uso abusivo de
éstos. Como señala la doctrina procesal y constitucional, “por su
naturaleza misma, se trata de un derecho muy complejamente
estructurado, que a la vez está conformado por un numeroso grupo
de pequeños derechos que constituyen sus componentes o
elementos integradores, y que se refieren a las estructuras,
características del tribunal o instancias de decisión, al procedimiento
que debe seguirse y a sus principios orientadores, y a las garantías
con que debe contar la defensa (Faúndez Ledesma, Héctor. “El
Derecho a un Juicio Justo”. En: Las garantías del Debido Proceso
(Materiales de Enseñanza). Lima: Instituto de Estudios
Internacionales de la Pontificia Universidad Católica del Perú y
Embajada Real de los Países Bajos, p, 17). Dicho de otro modo, el
Derecho al Debido Proceso constituye un conjunto de garantías de
las cuales goza el justiciable, que incluyen, la Tutela Procesal
Efectiva, la Observancia de los Principios o reglas básicas y de la
competencia predeterminada por Ley, así como la Pluralidad de
Instancias, La Motivación y La Logicidad y Razonabilidad de las
Resoluciones, el Respeto a los Derechos Procesales de las partes
(Derecho de Acción, de Contradicción) entre otros. QUINTO.- Que,
bajo ese contexto dogmático, la causal denunciada se configura,
entre otros supuestos, en los casos en los que en el desarrollo del
proceso, no se han respetado los derechos procesales de las
partes, se han obviado o alterado actos de procedimiento o si la

114084 CASACIÓN
tutela jurisdiccional no ha sido efectiva y/o el órgano jurisdiccional
deja de motivar sus decisiones o lo hace en forma incoherente, en
clara trasgresión de la normatividad vigente y de los estadios
superlativos del procedimiento. SEXTO.- Que, el principio
denominado motivación de los fallos judiciales, constituye un valor
jurídico que rebasa el interés de los justiciables por cuanto se
fundamenta en principios de orden jurídico, pues la declaración del
derecho en un caso concreto, es una facultad del Juzgador que por
imperio del artículo 138 de la Constitución Política del Perú, impone
una exigencia social de que la comunidad sienta como un valor
jurídico, denominado fundamentación o motivación de la sentencia;
el mismo que se encuentra consagrado en el artículo 139 inciso 5
de la Constitución Política del Perú concordante con el artículo 12
del Texto Único Ordenado de la Ley Orgánica del Poder Judicial e
incisos 3 y 4 del artículo 122 y 50 inciso 6 del Código Procesal
Civil.— SÉTIMO.- Que, el Principio de la Motivación de los Fallos
Judiciales constituye una exigencia que está regulada como
garantía constitucional, consagrada en el artículo 139 inciso 5 de la
Constitución Política del Perú, el cual asegura la publicidad de las
razones que tuvieron en cuenta los jueces para pronunciar sus
sentencias, ella resguarda a los particulares y a la colectividad de
las decisiones arbitrarias de los jueces, quienes de este modo no
pueden ampararse en imprecisiones subjetivas, ni decidir las
causas a capricho, sino que están obligados a enunciar las pruebas
en que sostienen sus juicios y a valorarlas racionalmente; en tal
sentido, la falta de motivación no puede consistir, simplemente, en
que el juzgador no exponga la línea de razonamiento que lo
determina a decidir la controversia, sino también en no ponderar
los elementos introducidos en el proceso de acuerdo con el sistema
legal, es decir, no justificar suficientemente la parte resolutiva de la
sentencia a fin de legitimarla. Sobre el particular, el Tribunal
Constitucional señala que “el Derecho a la Debida Motivación de
las Resoluciones Judiciales es una garantía del justiciable frente a
la arbitrariedad judicial y garantiza que las resoluciones judiciales
no se encuentren justificados en el mero capricho de los
magistrados, sino en datos objetivos que proporciona el
ordenamiento jurídico o los que se deriven del caso” 1 OCTAVO.-
Que, en materia probatoria el derecho a la utilización de los medios
de prueba, se encuentra íntimamente conectado con el Derecho a
la Tutela Jurisdiccional Efectiva, que entre sus vertientes engloba
el derecho a obtener una resolución razonable, motivada y fundada
en derecho, además de congruente con las pretensiones deducidas
por las partes en el interior del proceso; como también con el
Derecho de Defensa del que es realmente inseparable. Así, el
contenido esencial de este derecho se respeta siempre que, una
vez admitidas las pruebas declaradas pertinentes, sean valoradas
por los órganos judiciales conforme a las reglas de la lógica y de la
sana crítica, según lo alegado y probado. NOVENO.- Que,
precisamente regulando éste derecho fundamental, el legislador ha
optado por imponer al Juez, en los términos que señala el artículo
188 y 197 del Código Procesal Civil, la obligación de, en atención a
la finalidad de la prueba, valorar en forma conjunta y razonada
todos los medios de prueba, dado que, las pruebas en el proceso,
sea cual fuera su naturaleza, están mezcladas formando una
secuencia integral; por lo que, es responsabilidad del Juzgador
reconstruir, en base a los medios probatorios, los hechos que den
origen al conflicto, por lo tanto, ninguna prueba deberá ser tomada
en forma aislada, tampoco en forma exclusiva, sino en su conjunto,
toda vez, que sólo teniendo una visión integral de los medios
probatorios se puede sacar conclusiones en busca de la verdad
que es el fin del proceso. - DÉCIMO.- Entre las reglas que regulan
la actividad probatoria, tenemos las que establecen que el juez
tiene la obligación procesal de valorar todos los medios probatorios
en forma conjunta, utilizando su apreciación razonada conforme lo
prevé el articulo 181 del Código Procesal Civil. DÉCIMO
PRIMERO.- Tratándose de un proceso de otorgamiento de
Escritura Pública, resulta necesario referir que el otorgamiento de
escritura pública es un deber que tienen las partes de perfeccionar
el contrato celebrado. Ante el incumplimiento de este deber, el
propietario podrá iniciar este proceso, atendiendo a los artículos
1412 y 1549 del Código Civil, a fin que la parte renuente firme la
escritura de formalización, y si a pesar del mandato judicial se
mantiene en su negativa, es el juez quien se sustituye por el
obligado. DECIMO SEGUNDO.- Ahora bien, la tesis principal de la
parte demandada y el sustento del recurso de casación, radica en
que el presidente de la asociación que suscribió el Contrato de
Compra Venta a favor de la demandante, no tenía facultades para
ello, y que por tanto el contrato es nulo o ineficaz; sobre ello la
instancia de mérito ha determinado que dicha circunstancia no se
trata de un supuesto de nulidad manifiesta que la habilite a declarar
de oficio su nulidad y, por tanto desestimar la demanda, sino que es
una causal de ineficacia materia de otro proceso que no puede ser
sustento para desestimar la demanda, teniendo en cuenta que no
se niega la suscripción del contrato sino únicamente las facultades
que suscribió en nombre de la demandada. DECIMO TERCERO.-
De lo antes precisado, se advierte que la decisión adoptada se
encuentra adecuadamente fundamentada, pues establece la
relación de hecho en base a su apreciación probatoria, interpreta y
aplica las normas que considera pertinentes, por lo que no se
advierte trasgresión alguna al Principio de la Debida Motivación de
El Peruano
Lunes 3 de setiembre de 2018
las Sentencias, no se afecta la Logicidad, ni se vulnera el derecho
a probar en cualquiera de su vertientes. Es decir, su pronunciamiento
se ha ceñido estrictamente a lo aportado, mostrado y debatido en
el proceso, por lo que dicho fallo no puede ser cuestionado por
ausencia o defecto en la motivación, pues se ha cumplido con
precisar el por qué y debido a qué se ha llegado a la conclusión
final; habiendo resuelto los autos acorde a la naturaleza del
proceso que nos ocupa, en el que, tal como precisa la instancia de
mérito las alegaciones de ineficacia del acto jurídico no pueden ser
el sustento para desestimar la pretensión de otorgamiento de
escritura pública, debiéndose precisar que no corresponde a este
Supremo Tribunal reexaminar las pruebas, al advertirse que la
reglas de valoración no han sido infringidas por la instancia de
mérito. Más aun teniendo en cuenta que, los autos han sido
resueltos acorde a lo establecido en el IX Pleno Casatorio Civil,
según el cual corresponde analizar la validez del acto, únicamente
ante una nulidad evidente y manifiesta, lo que no es alegado en el
proceso de autos. V. DECISIÓN: Por lo tanto, atendiendo a lo
expuesto, no corresponde amparar el recurso de casación
conforme a lo señalado por el artículo 397 del Código Procesal
Civil; por lo que declararon: INFUNDADO el recurso de casación
interpuesto por la demandada Asociación de Pequeñas
Microempresas Industriales del Perú Filial El Algarrobal -
APEMIPE El Algarrobal a fojas doscientos setenta; por
consiguiente, NO CASARON la Sentencia de Vista, de fecha
veinticinco de julio de dos mil dieciséis, de fojas doscientos
cincuenta y nueve, emitida por la Sala Mixta Descentralizada de Ilo
de la Corte Superior de Justicia de Moquegua; DISPUSIERON la
publicación de la presente resolución en el Diario Oficial “El
Peruano”, bajo responsabilidad; en los seguidos por Javier Altemar
Acosta Paredes contra la Asociación de Pequeñas Microempresas
Industriales del Perú Filial el Algarrobal - APEMIPE El Algarrobal
sobre Otorgamiento de Escritura Pública; y los devolvieron.
Ponente Señor De la Barra Barrera, Juez Supremo. S.S.
ROMERO DÍAZ, CABELLO MATAMALA, DE LA BARRA
BARRERA, CÉSPEDES CABALA, TORRES VENTOCILLA.
1
Fundamento jurídico cuatro de la Sentencia del Tribunal Constitucional N° 04295-
2007-PHC/TC.
C-1683162-194
CAS. Nº 3465-2016 MADRE DE DIOS
PRESCRIPCIÓN ADQUISITIVA DE DOMINIO SUMILLA: Las
sentencias expedidas carecen de fundamentación y no responden
a un análisis adecuado de la figura jurídica contenida en el artículo
950 del Código Civil, a fin de determinar si la parte recurrente reúne
los requisitos de la prescripción que alega antes de la vigencia de
la Ley número 29618. Lima, seis de abril de dos mil dieciocho. LA
SALA CIVIL TRANSITORIA DE LA CORTE SUPREMA DE
JUSTICIA DE LA REPÚBLICA: Vista la causa número tres mil
cuatrocientos sesenta y cinco - dos mil dieciséis, en Audiencia
Pública llevada a cabo en la fecha y con lo expuesto en el Dictamen
Fiscal; y producida la votación con arreglo a ley, emite la siguiente
sentencia: 1. MATERIA DEL RECURSO DE CASACIÓN: Se trata
del recurso de casación interpuesto por Juana Elena Díaz de
Gutiérrez y Hurtado Gutiérrez Baldeón a fojas cuatrocientos
ochenta y dos, contra la resolución de vista de fojas cuatrocientos
cuarenta y nueve, de fecha catorce de enero de dos mil dieciséis,
emitida por la Sala Mixta de la Corte Superior de Justicia de Madre
de Dios, que confirma la resolución impugnada de fojas trescientos
cuarenta y siete, de fecha cinco de diciembre de dos mil catorce,
que declara improcedente la demanda interpuesta sobre
Prescripción Adquisitiva de Dominio, contra Jesús Hugo Álvarez y
otros. 2. FUNDAMENTOS DEL RECURSO DE CASACIÓN: Por
resolución de fecha veintinueve de mayo de dos mil diecisiete,
corriente a fojas cuarenta y siete del cuaderno de casación, se ha
declarado procedente el recurso de su propósito por las siguientes
causales denunciadas: a) Infracción normativa de los artículos
70 y 73 de la Constitución Política del Perú, 950, 952, 2002 del
Código Civil, y de la Ley número 29618, sostiene que no se ha
considerado que en autos se acreditaron los supuestos para ser
declarados como propietarios por prescripción adquisitiva de
dominio, por cuanto de la cláusula primera del contrato de
compraventa se acredita tal hecho; y, b) Infracción normativa de
los artículos 139 incisos 3 y 5 de la Constitución Política del
Perú y I del Título Preliminar del Código Procesal Civil, alega
que se transgrede el debido proceso: con la decisión adoptada se
impide obtener un título de propiedad adquirido desde el año dos
mil cuatro aplicando indebidamente los alcances regulados por la
Ley número 29618. 3. ANTECEDENTES: Previo a la absolución de
las denuncias formuladas por la parte recurrente, conviene hacer
las siguientes precisiones respecto de lo acontecido en el proceso:
3.1 Con fecha catorce de mayo de dos mil trece, Juana Elena Díaz
de Gutiérrez y Hurtado Gutiérrez Baldeón interponen una demanda
contra Jesús Hugo Álvarez, Peregrina Caja de Hugo y la
Municipalidad Provincial de Tambopata a fin de solicitar la
declaración de propietario de inmueble vía Prescripción Adquisitiva
de Dominio del lote sin número, manzana sin número, con Código
Catastral número 02 8000 67 001, ubicado en la Calle Centenario
del Centro Poblado Menor de La Joya, distrito y provincia de