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MORFOMETRÍA DEL SISTEMA BIOACÚSTICO DE PECES RONCOS (HAEMULIDAE) EN AGUAS CLARAS Y


TURBIAS.

Juan Pablo Erazo Londoño


Universidad del Valle, Apartado Aéreo 25360, Cali, Colombia.
correo electrónico: juan.erazo@correounivalle.edu.co

Fernando Alberto Zapata Rivera


Universidad del Valle, Apartado Aéreo 25360, Cali, Colombia.
correo electrónico: fernando.zapata@correounivalle.edu.co

José Julián Tavera Vargas


Universidad del Valle, Apartado Aéreo 25360, Cali, Colombia.
correo electrónico: jose.tavera@correounivalle.edu.co

RESUMEN

Los animales envı́an y reciben señales que, si modifican el comportamiento del emisor y del receptor, constituyen algo
conocido como comunicación. El ambiente limita la comunicación con barreras naturales, y para los peces, la turbidez
del agua representa una barrera para la comunicación visual. Enviar y recibir señales acústicas podrı́a ser una alternativa
a la visión cuando el agua es turbia, por lo que peces que habitan estas aguas tendrı́an adaptaciones morfológicas
dirigidas hacia la detección y producción de sonido. Los cambios morfológicos en estructuras que detectan y producen
sonido, es decir el sistema bioacústico, darı́an pistas funcionales sobre adaptaciones dirigidas a la acústica en peces
de agua turbia y deberı́an poder diferenciarse de peces que viven en aguas claras. Se colectaron seis especies, dos en
Buenaventura (agua turbia) y cuatro en Isla Gorgona (agua clara), para realizar análisis morfométricos a sus sistemas
bioacústicos y observar si al compararlos con métodos comparativos filogenéticos se detectaban diferencias entre los
peces de agua turbia y clara. No se observó separación en el sistema bioacústico de peces de agua turbia y clara, pero sı́
se encontraron modificaciones estructurales novedosas que aportan a la bioacústica en los haemúlidos, además, se resaltó
la importancia del tamaño muestral para este estudio. Esta investigación encontró un nuevo biomodelo para estudios bio-
acústicos en el Pacı́fico colombiano y la aparición de una posible nueva forma de producción de sonido en los haemúlidos.

Palabras clave: ANOVA, Dentición farı́ngea, Haemulidae, Otolitos, PCA, Sonido, Vejiga natatoria.

ABSTRACT

Animals can send and receive signals, yet communication only occurs if they can modify their own and other animal
behavior. Environmental barriers could limit communication. In fishes, water turbidity could negatively affect visual
cues, therefore acoustic signals offer an alternative. Hence, acoustic morphology of fishes that inhabit turbid water will
be more developed to enhance sound production and detection. The morphological variation in sound production and
detection structures (bioacoustics system), could give functional clues on adaptations directed to acoustic signaling in
environments with contrasting turbidity. To test this idea we collected six species, two at Buenaventura (turbid water)
and four at Gorgona Island (clear water). We looked for patterns of morphological variation in some bioacoustics traits
with habitat type (turbid water vs clear water) by means of comparative methods. We did not find the expected pattern of
differentiation; we did find morphological changes in this system. We believed sample size may have a great impact in
this result. On the other hand, we found a possible yet undescribed novel mechanism of sound production in Haemu-
lids. This investigation also found a new biological model to test bioacoustics hypothesis at the Colombian western region.

Key words: ANOVA, Haemulidae, Otoliths, PCA, Pharyngeal teeth, Sound, Swim bladder.

INTRODUCCIÓN nicación entre ellos. La comunicación se puede definir


como la habilidad para enviar, recibir e interpretar
Muchas de las interacciones entre individuos de una señales, y por esto es parte vital del comportamien-
misma o de diferentes especies requieren de la comu-
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to de cualquier organismo (Rogers & Kaplan 1998). turas involucradas en la acústica de los peces (i. e. el
Aunque los organismos acuáticos reciben información sistema bioacústico), tiene una diversidad morfológica
acústica de distintos orı́genes (i. e. biótico y abiótico), y funcional sumamente alta e involucra diversos órga-
son las señales bióticas las relevantes para la comu- nos y estructuras de otros sistemas (Kasumyan 2008,
nicación (Ladich & Schulz-Mirbach 2016). Éstas son Fine & Parmentier 2015, Parmentier et al. 2017). Por
recibidas e interpretadas por diferentes órganos y senti- ejemplo, los peces de la familia Haemulidae producen
dos, y modifican el comportamiento tanto del emisor sonido al frotar sus mandı́bulas farı́ngeas y el sonido
como del receptor (Rogers & Kaplan 1998). Ciertas es amplificado por la vejiga natatoria que actúa co-
condiciones ambientales pueden crear barreras que mo un resonador (Burkenroad 1930, Moulton 1958,
interfieren con la comunicación entre los animales. Por Bertucci et al. 2014). La alta diversidad morfológica
ejemplo, cuando la comunicación depende de señales y funcional en las estructuras para la producción y
visuales, una baja iluminación representa una barrera. detección de sonido, ha hecho difı́cil esclarecer con
En el caso de los organismos acuáticos la turbidez del certeza la relación forma-función que estas guardan.
agua impone un barrera para la comunicación visual, Es por esto que, aunque se ha progresado en este tema,
ya que interfiere con la visibilidad (Engström-Öst & el efecto de un factor sobre el cambio morfológico de
Candolin 2007). En la medida en que la comunicación una estructura y su relación con la función sigue siendo
entre individuos genere un beneficio en términos de difı́cil de demostrar experimentalmente (Popper & Lu
supervivencia o éxito reproductivo, se esperarı́a que 2000, Popper et al. 2005, Ladich & Schulz-Mirbach
organismos que habiten en ambientes turbios utilicen 2016, Parmentier et al. 2017).
mecanismos alternativos de comunicación diferentes a
la visión. Una de las formas de comunicación mejor
estudiadas y que serı́a un buen candidato para reem-
plazar la visión en ambientes de agua turbia, es la
transmisión del sonido. En los peces, la producción
y recepción del sonido ha sido un tema ampliamente
estudiado, aunque en materia de comunicación, se hace
necesaria investigación adicional (Rogers & Kaplan
1998, Fay & Popper 1999, Fay et al. 2008, Ladich &
Schulz-Mirbach 2016).
Estudios etológicos, acústicos y fisiológicos han de-
mostrado que los peces utilizan el sonido para una
amplia variedad de funciones (Tyack 1998, Ladich
2015). En muchos teleósteos, la acústica juega un
papel importante en la supervivencia y en diferentes
contextos comportamentales tales como actividades Figura 1. Disección en el plano sagital de un espéci-
agonistas, evasión de la depredación, forrajeo y activi- men de H. leuciscus. A. Distribución de órganos inter-
dades reproductivas (i. e. selección de pareja y cortejo; nos en el espécimen haciendo principal énfasis en la
Parmentier & Diogo 2006, Amorim et al. 2015, De ubicación del oı́do interno, las mandı́bulas farı́ngeas en
Jong et al. 2017). La recepción acústica directa en los posición inferior al oı́do interno y la vejiga natatoria.
peces ocurre en forma de movimiento de partı́culas y B. Detalles de las estructuras básicas del oı́do interno.
está ligada a los órganos otolı́ticos en el oı́do interno
(la sácula, la lagena y la utrı́cula), cada uno de los cua- Para indagar sobre la influencia de un factor ambiental
les aloja en su interior una piedra calcárea (u otolito) en el sistema bioacústico de los peces, se planteó la
llamados sagita, asteriscus y lapillus, respectivamente pregunta de la existencia de diferencias morfológicas
(figura 1). Ya que los otolitos son más densos que el en las estructuras emisoras y receptoras de sonido con
cuerpo del pez y el agua, tienen un movimiento relativo niveles opuestos de visibilidad en el agua. Los elemen-
con amplitud y fase diferente al tejido que los rodea, tos acústicos han demostrado ser muy diversos en su
constituyéndose en un acelerómetro natural (Popper & morfologı́a (Ladich & Schulz-Mirbach 2016), pero es
Lu 2000, Kasumyan 2005, Ladich & Schulz-Mirbach limitado el conocimiento sobre si esta variabilidad está
2016). Adicional a la recepción directa de los estı́mulos asociada a condiciones ambientales como la visibili-
acústicos, también ocurre la recepción indirecta. Esta dad. Si es cierto que el sistema bioacústico se modifica
última involucra una vejiga gaseosa como traductor en respuesta a las condiciones de visibilidad, entonces
que recibe la información como presión de sonido y la los peces de aguas turbias tendrán caracterı́sticas mor-
transporta para ser interpretada en los otolitos como fológicas acústicas diferentes a las de sus contra-partes
movimiento de partı́culas (Ramcharitar et al. 2006a). de aguas claras.
La producción de sonido, al igual que todas las estruc- Los roncos (Familia Haemulidae) son un grupo diverso
de peces teleósteos marinos y ampliamente distribui-
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do, tanto geográfica como ecológicamente. Una de sus MÉTODOS


caracterı́sticas particulares es su capacidad para pro-
ducir sonido (Moulton 1958, Bertucci et al. 2014), sin Generalidades
embargo, se desconoce la función y significado adapta- Se colectaron ejemplares en dos localidades del
tivo especı́fico que tiene la acústica en los roncos. La Pacı́fico colombiano: Parque Nacional Natural (PNN)
existencia de especies de roncos que habitan en aguas Isla Gorgona, Cauca (2◦ 58’10”N y 78◦ 11’05”W)
claras y en aguas turbias provee una excelente oportu- y Buenaventura, Valle del Cauca (3◦ 52’59.33”N y
nidad para examinar si las especies de roncos de aguas 77◦ 3’16.10”W). La primera localidad presenta aguas
turbias tienen estructuras acústicas más dirigidas hacia claras y la segunda aguas turbias (Tabla 1). La captura
la producción y recepción del sonido que las especies de especı́menes en Isla Gorgona se realizó entre el 22
de roncos de aguas claras. Si éste fuese el caso, se y el 27 de julio de 2017. Los especı́menes de Buena-
esperarı́a que hubiese diferencias significativas en el ventura se compraron en el mercado local. En la tabla
sistema bioacústico entre peces de ambos ambientes, 1 se encuentra la información en relación a los 42 es-
especialmente, se esperarı́a que el sistema bioacústico pecı́menes. Las seis especies colectadas se encuentran
fuese más desarrollado en peces de aguas turbias que en la categorı́a de PREOCUPACIÓN MENOR, según
en los de aguas claras. Esto deberı́a reflejarse en dife- la IUCN.
rencias en la morfologı́a de las estructuras involucradas Disecciones
en el sistema bioacústico. Adicional a lo anterior, se Se realizó un corte sagital en cada espécimen para de-
conoce que los roncos están distribuidos en diferentes jar expuestos los órganos internos, la cesta branquial y
ambientes, entre los que se incluyen aguas claras y el cráneo (figura 1A). Este corte permitió determinar el
aguas turbias (Tavera et al. 2012, Robertson & Allen sexo y tomar las fotografı́as para medir las distancias
2015), y a que existe una filogenia bien estructurada entre la vejiga natatoria y las mandı́bulas farı́ngeas y
para la familia (Sanciangco et al. 2011,Tavera et al. entre la cápsula ótica y las mandı́bulas farı́ngeas. Adi-
2012, 2018). cionalmente, se disectaron las mandı́bulas farı́ngeas y
El estudio de la morfologı́a funcional en el sistema la cápsula ótica, de la cual se extrajeron los otolitos.
bioacústico permite entender cómo ciertos factores (e. Medidas
g. la temperatura del hábitat, la alimentación, la pro- Las medidas tomadas y su relevancia para este estudio
fundidad donde habite el pez, el acervo genético y el se presentan en la tabla 2. Todas las medidas fueron
espacio del nicho) influyen en el cambio morfológi- tomadas por medio de fotografı́as calibradas en el soft-
co y por éste en la función de cada estructura. Estas ware libre ImageJ (Rasband 1997). Las medidas fueron
consecuencias funcionales pueden afectar el compor- divididas en dos subconjuntos (aquellas relacionadas
tamiento, la comunicación, el rango de distribución, con la producción de sonido y aquellas relacionadas
la evolución e incluso la diversificación de algunos con la recepción de sonido), con el fin de examinar
grupos de peces, y es la morfologı́a funcional la que si en cada subconjunto se observaba el mismo patrón
ha permitido observar estos cambios (Collin & Mars- en relación con el tipo de hábitat en el que viven las
hall 2003, Tuset et al. 2003, Cruz & Lombarte 2004, especies (agua clara vs agua turbia).
Popper et al. 2005, Ramcharitar et al. 2006a, Popper Análisis estadı́sticos
& Fay 2011, Tavera et al. 2012). La morfometrı́a ha Todas las medidas fueron previamente transformadas
sido utilizada para evaluar los cambios morfológicos por medio del logaritmo base 10 para disminuir la dis-
en el sistema bioacústico a varios niveles taxonómi- persión entre los datos y reducir el efecto de la escala
cos (Volpedo & Echeverrı́a 2003, Tuset et al. 2003, de medición. Se usaron las medias aritméticas de ca-
Vignon & Morat 2010, Gallardo-Cabello et al. 2014). da variable para realizar los análisis. Posteriormente
El uso de la morfometrı́a provee información acerca los valores medios fueron corregidos con la talla de
del crecimiento, adaptaciones funcionales, mecánicas, los especı́menes con una regresión filogenética usan-
y relaciones evolutivas por medio de la transforma- do el árbol filogenético propuesto por Tavera et al.
ción de rasgos cualitativos en datos cuantitativos. Esto (2018) para los haemúlidos. Los residuales obtenidos
permite hacer comparaciones inter-especı́ficas y usar de la regresión fueron utilizados para realizar los sub-
herramientas estadı́sticas que en combinación con los siguientes análisis. En primera instancia, se ejecutaron
métodos comparativos filogenéticos permitirı́an hacer ANOVAs de una vı́a con un nivel de significancia de
interpretaciones con una menor probabilidad de co- α=0,05 para cada variable en cada set de datos con el
meter errores tipo I y II (Oxnard & O’Higgins 2009, factor “hábitat” (factor de dos niveles: “agua turbia”
Diaz 2002). Este estudio aplicó este enfoque meto- y “agua clara”). Luego, las variables fueron reducidas
dológico, para aportar al conocimiento básico de la por medio un análisis de componentes principales fi-
relación forma-función en el sistema bioacústico de logenético (ACPF) para cada subconjunto de datos y
los Haemúlidos. se usaron los criterios de Kaiser-Guttman y Broken
Stick para seleccionar los componentes principales que
explican la mayor cantidad de la varianza. Una vez
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seleccionados los componentes principales filogenéti- sonido, y como en el ACPF anterior, el par de espe-
cos (CPF), se estudiaron las cargas de cada variable en cies hermanas (H. maculicauda y H. flaviguttatum)
cada CPF (tabla 4) y se hicieron gráficos tipo biplot. quedaron muy cerca una de otra. Finalmente, en este
Estos permitieron analizar los puntajes de las especies subconjunto de datos se observa que las variables me-
en cada componente, los vectores y correlaciones de didas sobre los otolitos tienen una fuerte correlación
las variables y la influencia de las variables en las es- y tuvieron una fuerte influencia en la separación de R.
pecies. Además de lo anterior, con los puntajes de las panamensis .
especies en los CPF1 y CPF2 se realizó una ANOVA
para cada subconjunto de datos con α=0,05 teniendo
como factor el “hábitat”. Todos los análisis se realiza-
ron con el software estadı́stico libre R (R core team
2018) usando los paquetes Phytools (Revell 2009) y
APE (Paradis et al. 2004).

RESULTADOS

Los ANOVAs para cada una de las variables de los


subconjuntos de medidas correspondientes a la produc-
ción y recepción de sonido, no indicaron que hubiese
diferencias en la morfometrı́a del sistema bioacústico
entre las especies que habitan en aguas claras y en
aguas turbias (tabla 3).
El ACPF para el subconjunto de datos de producción
de sonido no mostró una separación clara entre gru-
pos por tipo de hábitat (figura 2). Por el contrario,
excepto por H. maculicauda y H. flaviguttatum que
aparecen muy cerca entre sı́, las especies se distribu-
yeron de manera dispersa en el espacio del CPF1 vs
CPF2. Particularmente H. leuciscus, R. panamensis y
A. interruptus aparecen muy separadas unas de otras, Figura 2. Gráfico Biplot resultado del análisis de com-
cada una con influencia alta de variables diferentes. H. ponentes principales filogenético realizado al conjunto
sexfasciatum tuvo valores por medición muy próximos de datos de producción de sonido. Los vectores son las
al punto medio, lo que evitó que formara un conjunto variables y su intensidad y el nombre de las especies
con cualquiera de las otras especies de valores en corresponde a su nueva posición en cada eje producido
las mediciones más hacia los extremos. Aunque esta por el análisis.
última está algo más cerca al par H. flaviguttatum-H.
maculicauda, la influencia de la longitud postdental Aunque en el subconjunto de datos de producción de
del quinto ceratobranquial evitó que se consolidara un sonido no fue tan notoria la diferencia de R. pana-
grupo para el género Haemulon. Las únicas especies mensis con las demás especies, en el subconjunto de
que se agruparon, fueron las que conformaron el par detección de sonido sı́ lo fue (figura 3.) y, además, en
previamente mencionado y fue debido a que presenta- ninguno de los subconjuntos de datos R. panamensis
ron los valores más bajos por medición. Por otro lado, se junta con H. leuciscus que es la otra especie de agua
en el ACPF para el subconjunto de datos de detección turbia. R. panamensis es una especie interesante debi-
de sonido (figura 3), solo una especie (R. panamen- do a que su morfologı́a fue diferente a la de las demás
sis) se distanció de las otras, y esto ocurrió, porque especies estudiadas. En primer lugar, la vejiga natato-
fue la especie que tuvo los valores más altos en las ria tenı́a una forma menos alargada y más ancha y alta
mediciones sobre los otolitos. En este subconjunto de que las demás especies (figura 4). En segundo lugar,
datos se observa que A. interruptus vuelve a tener una aunque en otras especies habı́a pequeñas protrusiones
influencia alta de una distancia, pero en esta ocasión anteriores de la vejiga natatoria, fue en R. panamen-
es en la distancia vejiga natatoria-cápsula ótica donde sis que se observaron cuernos (figura 4D). En tercer
obtuvo mediciones mayores que las demás especies. H. lugar, se pudo apreciar un músculo conectado a la veji-
leuciscus tiene valores en todas las variables cercanos ga natatoria que estaba ausente en las demás especies.
al punto medio, por lo que también se separó de las Este músculo se insertaba en la región anterior-ventral
demás. De forma interesante, las especies del género de la vejiga gaseosa y ascendı́a hasta las mandı́bulas
Haemulon en este subconjunto de datos quedaron más farı́ngeas superiores (figura 5). Y, en cuarto lugar, las
próximas que en el subconjunto de producción de sagitae de esta especie fueron proporcionalmente mu-
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cho más grandes que las de las otras especies (e. g.


10,03 mm de longitud de la sagita en R. panamensis
vs 10,99 mm en A. interruptus, en relación con 172,1
mm y 356,8 mm de longitud estandar (LS), respecti-
vamente) y esto se hizo visible en el gráfico del ACPF
del subconjunto de detección de sonido (figura 3).

Figura 5. Disección de R. panamensis donde se obser-


va la unión del músculo exclusivo a esta especie en la
vejiga natatoria. VN: vejiga natatoria, MF: mandı́bulas
farı́ngeas. La flecha indica el lugar de inserción en la
vejiga natatoria.

DISCUSIÓN

En los ANOVAs y el ACPF se observó que no hubo


una clara separación en el sistema bioacústico entre
peces roncos que habitan agua turbia y agua clara. Este
resultado no coincide con algunos estudios similares
(Schulz-Mirbach et al. 2008, Deng et al. 2013), ni con
la hipótesis aquı́ planteada, pero sı́ se asemeja a otros
trabajos en donde no hubo diferencias en la capacidad
Figura 3. Gráfico Biplot resultado del análisis de com- auditiva entre peces de ambientes contrastantes ( i.e
ponentes principales filogenético realizado al conjunto cueva y superficie) (Popper 1970, Schulz-Mirbach et
de datos de detección de sonido. Los vectores son las al. 2010). No obtener una separación en grupos por
variables y su intensidad y el nombre de las especies hábitat pudo ocurrir porque las presiones selectivas
corresponde a su nueva posición en cada eje producido bioacústicas para estos peces han sido similares y sus
por el análisis. estructuras bioacústicas cumplen las mismas funciones
básicas en los dos tipos ambientes (Popper 1970). En
otras palabras, la claridad del agua puede no ejercer una
presión de selección lo suficientemente fuerte como pa-
ra modificar las caracterı́sticas del sistema bioacústico
al punto que se observe una separación entre especies
de aguas claras y turbias. También, es probable que los
roncos estén usando cualquier otro sentido para la co-
municación en aguas turbias, y la audición, o más bien
la función del oı́do interno, estarı́a cubriendo otro tipo
de necesidades (e. g. el equilibrio) que no dependen de
la claridad del agua. Este argumento podrı́a sugerir que
no es el sistema bioacústico el que responde a la falta
de luminosidad, sino quizá otro sistema sensorial. En
soporte a esto, hay un caso donde peces relacionados
filogenéticamente (i. e. Astyanax mexicanus y Astya-
nax jordani) y que habitan ambientes contrastantes en
visibilidad, tienen las mismas capacidades auditivas
Figura 4. Vejigas natatorias de A. H. maculicauda, (Popper 1970). La lı́nea lateral es un órgano sensorial
B. A. interruptus, C. H. leuciscus. D. R. panamensis. que podrı́a reemplazar o apoyar la visión según el am-
Nótese en R. panamensis las protrusiones (cuernos) biente (Coombs et al., 2014, Soares & Niemiller 2013).
anteriores y la inserción del músculo exclusivo a esta Yoshizawa et al. (2014), plantearon un experimento
especie en posición ventral-posterior a las protrusiones. y un modelo con las mismas especies que investigó
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Popper (1970) y encontraron que los tetras ciegos me- las mandı́bulas farı́ngeas (Burkenroad 1930, Moulton
xicanos tienen al menos dos veces la sensibilidad en 1958), y la asociación entre la porción anterior de la
la lı́nea lateral que su contraparte de superficie y que vejiga natatoria y las mandı́bulas superiores es más
no son ciegos. Lo dicho anteriormente, lo adicionado importante para la resonancia del sonido que la aso-
por Hopkins (1974) en electrocomunicación, y lo que ciación con las mandı́bulas inferiores (Moulton 1958).
se conoce del sistema visual (Rowland 1999), apuntan Esto se pudo corroborar en R. panamensis (Figura 5).
a que la comunicación en los peces ocurre de mane- Lo que se desconoce en la producción de sonido y
ra multisistémica. Ası́ pues, resulta necesario realizar debe estudiarse a futuro, son los detalles sobre cuán
estudios más amplios sobre diferentes órganos senso- cerca debe de estar la vejiga natatoria a las mandı́bu-
riales para analizar las señales que envı́an y reciben las farı́ngeas, la variación del volumen de gas en la
estos animales para comunicarse. vejiga natatoria a causa de cambios en las dimensio-
El tamaño efectivo muestreal (pequeño) pudo haber nes o forma y cómo estas caracterı́sticas afectarı́an la
influido en el hecho de no encontrar un patrón de sepa- frecuencia de onda dominante del sonido producido.
ración en grupos entre agua turbia y agua clara. Cuando Tampoco se conoce, si la modificación en la resonan-
se manejan datos con métodos comparativos filogenéti- cia afecta la comunicación. En cuanto a la distancia
cos, el tamaño muestreal no corresponde a especı́me- vejiga natatoria - cápsula ótica, se conoce que cuando
nes, sino a especies (Bartoszek 2016). En este estudio están muy próximas se mejora la capacidad auditiva
se tuvieron seis especies y la representatividad de hábi- (Ramcharitar et al., 2006a, Ladich & Schulz-Mirbach
tats no fue balanceada, por lo que para el agua turbia el 2016) y en R. panamensis la forma de la vejiga nata-
tamaño de la muestra fue de dos y para el agua clara fue toria permite más cercanı́a con la cápsula ótica que en
de cuatro especies. Este tamaño muestreal puede tener las otras especies, incluida H. leuciscus. Las ventajas
un efecto en el análisis de varianza y en el ACPF, debi- funcionales de las distancias vejiga natatoria – cápsula
do a que cada especie contribuye sólo con una fracción ótica y vejiga natatoria – mandı́bulas farı́ngeas más
de la varianza total (Bartoszek 2016). En consecuencia, pequeñas serı́an una mejor amplificación del sonido,
la variabilidad representada en agua turbia puede es- ampliación del rango detectable de frecuencia, mejor
tar subrepresentada evitando que se observe un patrón. selectividad de frecuencias y a una mayor sensibilidad
Se piensa entonces, que no encontrar relación entre acústica (Burkenroad 1930, Moulton 1958, Coombs &
los cambios morfológicos y el ambiente, pudiera estar Popper 1979, Ramcharitar & Popper 2004, Ramchari-
condicionado al hecho que no se capturó suficiente tar et al., 2006a). 2) El músculo observado en la vejiga
variabilidad dentro de cada grupo, y no a que no exista natatoria. Este músculo podrı́a tener implicaciones fun-
el patrón esperado. Es probable que esto haya sucedido cionales para la detección y la producción de sonido.
en este estudio, ya que existen otros estudios que sı́ pu- Los músculos que están asociados a la vejiga natatoria,
dieron observar un patrón, incluso usando las mismas les permiten a los peces producir sonidos mediante la
estructuras que se evaluaron en este estudio (Torres et contracción voluntaria y repetida (Parmentier & Dio-
al., 2000, Schulz-Mirbach et al., 2008 y Deng et al., go 2006). No se habı́a reportado la presencia de un
2013). Además, la hipótesis de cambios morfológicos músculo como éste en los haemúlidos, por lo tanto, se
en el sistema bioacústico ligados a poca visibilidad es desconoce su función, pero se plantean dos opciones:
sostenida por diversos investigadores (Popper 1970, producir sonido al contraerlo voluntariamente o halar
Gauldie 1988, Torres et al., 2000, Soares & Niemiller la vejiga natatoria en dirección dorsal acercándola a las
2013). mandı́bulas farı́ngeas y a la cápsula ótica. Con respec-
Las caracterı́sticas encontradas en R. panamensis ex- to a lo anterior, ya se ha discutido sobre la relevancia
plicarı́an porqué fue la única especie que se separó de funcional de las relaciones vejiga natatoria – cápsula
las demás en el ACPF de detección del sonido. De las ótica y vejiga natatoria – mandı́bulas farı́ngeas y se
especies evaluadas, R. panamensis es la que más pro- hace hincapié en la necesidad de investigar más este
fundo habita (hasta 105 m; Robertson & Allen 2015), músculo, ya que si es un músculo sónico, serı́a algo
y además, tiene modificaciones propias vinculadas a completamente nuevo para la familia. 3) Las sagitas
mejoras auditivas (i. e. longitudes de los otolitos, cuer- más grandes. Las longitudes de éstas junto con las otras
nos en la vejiga natatoria) y producción de sonido (i. e. mediciones sobre los otolitos, fueron las que separaron
cuernos de la vejiga natatoria tocando las mandı́bulas a R. panamensis en el ACPF de detección de sonido.
farı́ngeas). Los cambios más importantes que se ob- Lo anterior, podrı́a tener una relación morfo-funcional
servaron fueron: 1) La forma y longitud de la vejiga debido a que es la especie que se ha colectado más
natatoria. Los cuernos en la vejiga natatoria permiten profundo y se ha visto que el tamaño y la forma de
una mayor cercanı́a tanto con las mandı́bulas farı́ngeas los otolitos en conjunto con la profundidad, área y ta-
como con la cápsula ótica. El cambio anatómico no- maño del sulco acústico, es lo que más se modifica en
tado, podrı́a afectar la resonancia del sonido. En los peces que habitan aguas profundas o con poca visibili-
Haemúlidos, la vejiga natatoria amplifica el sonido de dad (Torres et al. 2000, Tuset et al. 2003, Deng et al.
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2013). Lo descrito anteriormente, hace ver a R. pana- otros sistemas sensoriales.


mensis como una especie con más adaptaciones para
la producción y detección de sonido y hace que surja AGRADECIMIENTOS
la pregunta ¿cuáles presiones selectivas actúan sobre
ella?. Sumado a lo anterior, al interpretar los valores en Agradezco profundamente a mis padres, Mary y Wil-
las mediciones de esta especie, se podrı́a comprender son, por apoyarme siempre y recordarme que la educa-
mejor porque no se encontró un patrón entre sistema ción es lo más valioso que uno puede adquirir. Agra-
bioacústico – hábitat. R. panamensis es muy diferente dezco a Lizeth por sus palabras, por el ánimo otorgado,
a H. leuciscus, y si se tuvieran más especies de agua por su compañı́a y por escuchar siempre lo que tenı́a
turbia, quizás los caracteres morfológicos en este hábi- por decir sobre este trabajo. A sus padres, por el apoyo
tat tenderı́an hacia una dirección y los valores de esta que, sin saberlo, dieron a mi proceso académico. Doy
especie no serı́an tan atı́picos. gracias a Fernando Zapata y a José Tavera por sus con-
No se encontró relación entre la morfologı́a del sis- sejos, entrega y gran paciencia en la elaboración de
tema bioacústico y el ambiente (agua turbia vs agua esta investigación. Agradezco al laboratorio de ictio-
clara), pero sı́ se encontraron modificaciones en las logı́a, al grupo de investigación de arrecifes coralinos
estructuras acústicas y algunas novedades que contri- y al laboratorio de Biologı́a de la Universidad del Va-
buyen al conocimiento en la producción y detección lle por todo lo brindado en lo técnico y en lo humano
de sonido en los haemúlidos. Además, estudios compa- para desarrollar este trabajo. Agradezco a Parques Na-
rativos como éste, deben de tener un tamaño muestral cionales de Colombia y al Ministerio de Ambiente y
mayor, que permita que las pruebas estadı́sticas ten- Desarrollo sostenible por permitir esta investigación
gan la potencia suficiente para detectar los patrones. mediante la resolución número 031 del 16 de Marzo de
Finalmente, R. panamensis puede representar un futu- 2017. También, al personal del PNN Isla Gorgona por
ro biomodelo para la investigación acústica en peces. su disposición y colaboración en la salida de campo.
Se tiene claro que, aunque no se pudo concluir con Finalmente, incluyo a todos con quien mantuve charlas
este estudio sobre diferencias en el sistema bioacústico acerca de este trabajo y con sus aportes me ayudaron a
entre ambientes, se deben incluir en la comparación la realización del mismo.

Tabla 1. Información relacionada a los especı́menes colectados durante el trabajo de campo.

Especie N◦ Especı́menes Sitio de colecta Método de colecta

Anisotremus interruptus 3 PNN Isla Gorgona Pesca con arpón hawaiano

Haemulon sexfasciatum 4 PNN Isla Gorgona Pesca con arpón hawaiano

Haemulon maculicauda 12 PNN Isla Gorgona Pesca con arpón hawaiano

Haemulon flaviguttatum 6 PNN Isla Gorgona Pesca con arpón hawaiano

Haemulopsis leuciscus 10 Buenaventura Compra en mercados

Rhencus panamensis 7 Buenaventura Compra en mercados


8

Tabla 2. Medidas empleadas para el análisis morfométrico, su relevancia funcional y como fueron realizadas. Vejiga
natatoria (VN), mandı́bulas farı́ngeas (MF), quinto ceratobranquial (CB5), faringobranquial (FB), cápsula ótica (CO),
área del sulco acústico (AS), área de la sagita (AO
Importancia- Referencia Predicción Predicción
Medida Calculado como
función bibliográfica Agua turbia Agua clara

Mandı́bulas Mandı́bulas
Desde extremo más posterior En Haemulidos, vejiga
Distancia Burkenroad 1930, más cerca de menos cerca de
del CB5 hasta el punto más natatoria actúa como
VN-MF Moulton 1958 vejiga vejiga
próximo dela VN resonador.
natatoria natatoria

Longitud Longitud
Longitud Mayor distancia en el eje antero- Desplazamiento mandı́bula Burkenroad 1930,
del área del área
Mandı́bula posterior de la zona central del inferior y superior para Moulton 1958,
dentada dentada
inferior área dentada del CB5 producir el sonido Bertucci et al. 2014
mayor menor

Distancia desde el último diente


Longitud Sitio inserción músculo Mayor Menor
de la zona posterior izquierda
postdental obliquus posterior. Roce Wainwright 1989 longitud para longitud para
hasta el borde distal posterior
CB5 mandı́bula superior e inferior inserción inserción
del CB5

Longitud Longitud
Longitud Comprendida como la longitud Desplazamiento mandı́bula Burkenroad 1930,
del área del área
mandı́bula antero-posterior de los FB inferior y superior para Moulton 1958,
dentada dentada
superior. 2 - 4. producir el sonido Bertucci et al. 2014
mayor menor

Redondez Reemplaza el volumen. Mayor Menor


cuatro veces el área sobre pi
VN Relación entre el área Russ 1990 amplificación amplificación
por la longitud al cuadrado
disectada y la longitud. del sonido del sonido

Ramcharitar et al.
Punto más cercano entre la VN Mejora sensibilidad auditiva Vejiga más Vejiga menos
Distancia 2006b, Coombs &
y la porción post-rostral y el ancho de banda de cercana a la cercana a la
VN-CO Popper, 1979,
de la sagitta. frecuencia detectable cápsula ótica. cápsula ótica.
Popper & Lu 2000.

Ramcharitar
Porción de la sagitta ocupada Relación Relación
et al. 2001,Cruz
Relación por el sulco acústico. AS/AO AS/AO
Área sulco acústico de la sagitta/ & Lombarte
AS/AO de Movimiento relativo del tiende a ser tiende a ser
Área sagitta 2004, Deng et al.
la sagitta otolito. Aparente mejora más cercano más lejano
2013, Ladich &
auditiva. a 1. de 1.
Mirbach 2016

Bajas frecuencias, dirección


Lu & Xu 2002,
auditiva y sensibilidad
Popper et al. Valores Valores
acústica. Forma sagita
Redondez cuatro veces el área sobre pi 2005, Vignon & tienden a tienden a
responde a movimiento
de la sagitta por la longitud al cuadrado Moran 2010, alejarse acercarse
de partı́culas
Popper & de 1 a1
diferencialmente.
Fay 2011
Relación genética y ambiente

Lu & Xu 2002,
Longitud Bajas frecuencias, dirección
Distancia máxima de la sagitta Popper et al. Tan larga Más larga
de la auditiva y sensibilidad
en su porción antero-posterior 2005, Popper como ancha que ancha
sagitta acústica.
& Fay 2011

Lapillus más Lapillus más


Longitud grande con pequeño con
Distancia máxima del lapillus Ancho de banda
del Popper & Fay 2011 respecto al respecto al
en su porción antero-posterior detectable.
lapillus tamaño del tamaño del
pez pez

asteriscus asteriscus
Relación a mejoras auditivas
Longitud Popper & Fay más grande más pequeño
Distancia máxima del asteriscus cuando vejigas gaseosas y
del 2011, Collin con respecto con respecto
en su posición dorsal-ventral oı́do interno están en
asteriscus & Marshall 2003. al tamańo al tamańo
conexión.
del pez del pez
9

Tabla 3. Valores para la suma de cuadrados, grados de libertad, cuadrados medios, estadı́stico F y valor de P de las
ANOVAS realizadas para cada set de datos con los residuales y con los puntajes de las especies de cada CPF.

Fuente de variación SC GL CM F P

Producción de sonido

D. VN-MF 0.092455 1 0.09246 1.189639 0.506


Error D. VN-MF 0.310869 4 0.07772
Longitud mandı́bula inferior 0.00049 1 0.00049 0.264698 0.752
Error Longitud mandı́bula inferior 0.00747 4 0.00187
Longitud postdental CB5 0.00118 1 0.00118 0.349581 0.704
Error Longitud postdental CB5 0.01353 4 0.00338
Longitud mandı́bula superior 0.00086 1 0.00086 0.361296 0.711
Error Longitud mandı́bula superior 0.00956 4 0.00239
Redondez V.N. 0.03299 1 0.03299 1.335994 0.458
Error Redondez V.N. 0.09876 4 0.02469

Detección de sonido

D.VN-CO 0.00273 1 0.00273 0.034594 0.932


Error D.VN-CO 0.31553 4 0.07888
AS/AO 0.00535 1 0.00535 1.253905 0.5
Error AS/AO 0.01705 4 0.00426
Redondez sagita 0.00252 1 0.00252 1.47498 0.462
Error Redondez sagita 0.00684 4 0.00171
Longitud sagita 0.00662 1 0.00662 6.248986 0.172
Error Longitud Sagita 0.00424 4 0.00106
Longitud lapilus 0.00032 1 0.00032 0.382315 0.72
Error Longitud Lapilus 0.0033 4 0.00083
Longitud asteriscus 0.00107 1 0.00107 0.672672 0.593
Error Longitud Asteriscus 0.00638 4 0.00159

CPF1 y CPF2 producción de sonido

CPF1 16.9807 16.9807 0.216838 0.774


Error CPF1 313.242 78.3105
CPF2 0.04444 0.04444 0.000746 0.987
Error CPF2 238.304 59.5759

CPF1 y CPF2 detección de sonido

CPF1 16.9807 16.9807 0.216838 0.757


Error CPF1 313.242 78.3105
CPF2 0.04444 0.04444 0.000746 0.983
Error CPF2 238.304 59.5759
10

Tabla 4. Cargas obtenidas en el análisis de componentes principales filogenético para cada variable de los dos subcon-
juntos de datos.

Cargas subconjunto detección de sonido

CPF1 CPF2

DistanciaVN-CO 0.90504982 -0.40763736

AS/AO -0.916331432 -0.301240576

Redondez sagita disectada 0.508803239 -0.856324688

Longitud sagita -0.877714613 -0.215162326

Longitud lapillus -0.971910681 -0.039106565

Longitud asteriscus -0.908487142 -0.332131812

Cargas subconjunto producción de sonido

CPF1 CPF2

Distancia VN-MF -0.811905054 0.312399634

Longitud mandı́bula inferior -0.015613618 0.962636932

Longitud postdental CB5 -0.668010877 -0.696167671

Longitud mandı́bula superior -0.925120625 0.365955675

Redondez VN -0.923134758 -0.154012891

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